Anuario Balazo

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Historietas clasicas

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2El vaquero más valiente del salvaje oeste:

por Dobrinin y Cantonnet

Balazos de Historietas...Se han reunido en este Anuario, todas aquellas histo-

rietas que resultaron más representativas de lopublicado por Balazo en sus nueve primeros números.Así se podrá tener un panorama del comic uruguayo

de fines del siglo veinte en el tema deaventuras, ficción y humor que realizaran Barreto,Federici, González, Gezzio, Dobrinin y Cantonnet,

entre otros.

GRUPO FUNDADOR “LOS MUTANTES”:Ernesto Cantonnet, Alejandro Colucci, Pablo Dobrinin, Carlos M. Federici, Williams Gezzio,Rolando Salvatore y Daniel González.Artista invitado: Eduardo Barreto.BALAZO es una revista de historietas uruguaya, editada por EDICIONES COMICS del ALTILLO. Los Derechospertenecen a cada autor. Se prohíbe la reproducción parcial o total de cualquier historieta o artículo publicado en estenúmero, sin el consentimiento de la Editorial y del autor respectivo.Director y Redactor Responsable : Williams Gezzio - José E. Rodó 2282 bis - CP 11200- Montevideo, URUGUAY.Cel. 094 024548 - Email: egezzio@gmail.com

CARÁTULA:

WILLIAMS GEZZIOAnuario de BALAZO Nº 1

EDITORIAL

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Desde el estudioDesde el estudioDesde el estudioDesde el estudioDesde el estudiodel artista...del artista...del artista...del artista...del artista...

El primer paso que realiza Alejandro cuando sele encarga una ilustración -en este caso: la tapapara Balazo N° 3 - es bocetar rápidamente hastadar con la composición que se ajuste a loimaginado por él.(Fig.1)Luego, y en base a fotos, dibuja más detallada-mente a lápiz toda la escena y da los primerostoques a pincel con tinta aguada.(Fig.2)

Ale jandroAle jandroAle jandroAle jandroAle jandroCOLUCCICOLUCCICOLUCCICOLUCCICOLUCCI

Así va elaborando minuciosamente losdetalles que hacen tan característica su

obra, hasta que da por terminado eltrabajo. Luego lo escaneará y se le

agregará el logo y la tipografíanecesaria.(Fig.3)

(Fig.1)

(Fig.2)

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(Fig.3)

LA ESCENA REFIERE A LA HISTORIETA DEL ‘‘CAPITÁN KANE’’ Y LA FIGURA FEMENINA, ADEMÁSDE SER DECORATIVA, REPRESENTA UN ÁNGEL DE LA VENGANZA.

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Esta película haEsta película haEsta película haEsta película haEsta película hasido posiblesido posiblesido posiblesido posiblesido posible

gracias a la CIAgracias a la CIAgracias a la CIAgracias a la CIAgracias a la CIApor Eduardo Febbro

(Extractado de Página 12)

a imagen limpia del héroe norteame-ricano, del policía justo, del agentesecreto capaz de sacrificarlo todo porel bien de su país, de los serviciossecretos funcionando como una má-quina perfecta no son sólo productodel celo de los guionistas deHollywood sino el resultado de unaestrecha colaboración entreHollywood y la misma CIA. La impli-cación entre los guionistas deHollywood y los servicios secretosexcede en mucho el mero intercam-bio de informaciones sobre los mé-todos operativos de los hombres dela sombra. Varios responsables del

cine europeo evocan abiertamente un«trabajo estrecho» que apunta no yaa enriquecer los guiones sino, sobretodo luego de los atentados del 11de septiembre, a dar una imagen po-sitiva de la CIA y, a menudo, a cam-biar radicalmente la historia transfor-mándola «en historia oficial». El ac-tor norteamericano Tom Cruise esdescripto por algunos responsablesdel cine francés como el «embajadorde la CIA» en la pantalla grande. Se-gún sintetiza un productor francésbajo el estricto anonimato, «para losnorteamericanos, se trata de realizarpelículas donde se contemplan laspeores catástrofes posibles y en lasque, gracias a la oportuna interven-ción de la CIA, esas catástrofes nose producen».Las instituciones francesas encarga-das de hacer el recuento de las pro-ducciones cinematográficas queocupan la cartelera así como los es-pecialistas que estudian el conteni-do y el género de las narraciones lle-

gan a resultados similares. Desde elpasado 11 de septiembre, una terce-ra parte de las películas norteameri-canas que rompen records de au-diencia son películas cuyo tema esla guerra y cuyo guión está basadoen un mismo resorte: terroristas deMedio Oriente o Europa del Este,nazis y grupos de toda índole robanun dispositivo atómico con el queplanean destruir Estados Unidos,pero la abnegada, corajuda e «inteli-gente» intervención de los agentesde la CIA impide que los hombresmalos lleguen a sus fines. El guio-nista, actor y productor Kit Carson(La matanza de Texas 2) explicaba enParís que los servicios de inteligen-cia de Estados Unidos solicitaron alos guionistas que «imaginen lospeores escenarios que puedan exis-tir, con atentados terroristas queinvolucren a la sociedad norteameri-cana». Carson contó además que unavez por mes, representantes de la CIAy guionistas de Hollywood se reúnen

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Como los serviciosmanipulan al cine

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«a fin de tomarle el pulso al imagina-rio poblado con los futuros más ne-gros posibles». Sin embargo, ese«trabajo» mancomunado tiene rami-ficaciones mucho más profundas quela exploración del imaginario evoca-da por Carson. En una entrevista con-cedida al vespertino francés Le Mon-de, Chase Brandon, el agente miem-bro del servicio de relaciones públi-cas de la CIA encargado de los con-tactos con Hollywood, reconocía queél mismo «ayuda a los directores detelevisión, de cine y de documenta-les que quieren dar una imagen justae imparcial de la CIA». La lista depelículas recientes en las que la CIAintervino es por demás elocuente.Brandon cita a la recién estrenada BadCompany, de Joel Schumacher, a Lasuma de todos los miedos, TheRecruit (Robert De Niro y AnthonyHopkins), La caída del Halcón Ne-gro y Enemigo de estado.La crítica europea nota con aciertoque luego de las películas sobre la

guerra de Vietnam distribuidas a me-diados de los años 80 (Pelotón,Hamburger Hill, Apocalipsis Now) yaquellas realizadas igualmente duran-

te las presidencias de Ronald Reagan(Rambo,Top Gun, Exterminator) nun-ca como ahora el cine norteamerica-no pareció estar tan cerca del punto

14de vista oficial de Washington. Laimbricación entre el cine y la admi-nistración es tanto más evidentecuanto que responsables norteame-ricanos del peso del vicepresidenteDick Cheney, del secretario de De-fensa Donald Rumsfeld o del mismopresidente George Bush asisten a lasprimeras proyecciones de las pelícu-las cuyo tema es la guerra o la super-vivencia del país. Tal es el caso deLa caída del Halcón Negro, la pelícu-la de Ridley Scott que muestra la es-tampida de los soldados enviadospor Washington a Somalía y estre-nada, al igual que muchas otras delmismo género, en la capital norte-americana. Detalle aún más inquie-tante que corre el telón sobre los efec-tos que tienen las superproduccio-nes de Hollywood en la sociedad, elfiscal general de Estados Unidos,John Ashcroft, esperó algo más deuna semana para que la película Lasuma de todos los miedos estuvieraprimera en las taquillas antes de anun-ciar el arresto deAbduljah al-Mujahir,alias José Padilla, el presunto miem-

bro de la red Al-Qaida que, según laversión oficial, se aprestaba a come-ter un atentado similar al que se na-rraba en la película, es decir, con unabomba de neutrones. Otro detalleprueba hasta qué punto la realidad yla ficción pueden servir intereses co-munes: cuando Ashcroft anunció elarresto de Padilla, el res-ponsable norteamerica-no se encontrabaen ese mo-

men-to en Mos-cú... Y uno de losargumentos centralesde La suma de todos losmiedos consiste en mostrarcómo la cooperación ruso-norteamericana evita que elplaneta sea devorado por los terro-ristas.Para los guionistas y productoreseuropeos, hoy hemos pasado a unaetapa en la que la mayoría de las pe-lículas provenientes de Estados Uni-dos corresponden al «arte oficial».

Si la «colaboración» entre la indus-tria cinematográfica norteamericanay los servicios secretos o el ejércitono es nueva –todos han visto unaextensa serie de películas donde elsoldado norteamericano, el aviadoro el agente secreto salvan al mun-

do– la de ahora alcanza dimensionesinéditas y se parece a una auténticaestrategia de comunicación oficial.Las ficciones heroicas que exhibenel éxito de los servicios de inteligen-cia tienden a borrar la realidad: lasTorres Gemelas de Nueva York des-

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¡Escuchá que¡Escuchá que¡Escuchá que¡Escuchá que¡Escuchá que

notición!notición!notición!notición!notición!

Estas revistas nos dan la posibilidad depublicar cuentos, chistes, dibujos, historie-

tas del tipo clásico; cualquier cosa quesepamos hacer y tendremos la posibilidad

de que nos vean por todo el mundo...

¡ Exprimite esa neurona y date el gusto depublicar en ‘‘estado de humor’’ y en ‘‘BALAZO’’!

Pero eso sí: quesean ideas origina-les, tanto los cuen-tos como los dibu-jos, porque si nosdamos cuenta de

que son copiados nolos publicamos.

Pueden enviarlos enresolución 200 dpi y

en jpg a :egezzio@gmail.com

o a la dirección delas revistas en uncd.

16aparecieron mediante un atentadoterrorista y ni la CIA, ni la NSA(Agencia Nacional de Seguridad) niel FBI pudieron hacer nada para evi-tarlo.En la pantalla grande es otra cosa.Chase Brandon, el hombre de la CIAen los estudios de Hollywood, admi-te con orgullo la existencia de esaestrategia. «Nosotros –afirma–, pro-tegemos la libertad y la seguridad delos norteamericanos. Luchamos con-tra la proliferación de las armas y elterrorismo. En el cine se nos muestracomo villanos y no como héroes. Esinsoportable. Pero como la CIA esuna organización confidencial, losguionistas imaginan lo que no es yello explica la imagen catastrófica queel cine dio de la CIA en los años ’70y ’80. George Tenet, el director de laCIA, decidió comunicar a través delcine. Y hoy, las películas dan unaimagen más realista de nosotros.» Lacentral norteamericana es tan celosade su imagen que hasta es capaz de«suspender» la colaboración conHollywood si el guión no le convie-

ne.Según cuenta Brandon, eso fue loque ocurrió con la película Spy Game.La Universal remitió el guión a laCIA, y la Agencia trabajó en él hastaque «renunció porque el guión mos-traba a uno de los jefes de la CIAindiferente ante la suerte de uno desus agentes, lo que es impensable».En cambio, La suma de todos los mie-dos dio lugar a una «fusión» realentre la Paramount y la CIA pero lapelícula de Phil Alden Robinson estan oficial, responde tanto al heroís-mo perfecto de la CIA que terminadando una visión aniñada, primaria,de las relaciones geopolíticas.Lo que parecía impensable antes del11 de septiembre se tornó un hábitode las producciones holly-woodenses: películas catastróficas,con terroristas que pululan por to-das partes, armados con bombasnucleares, con bombas a neutrones,dispuestos a hacer volar un estadiorepleto, una ciudad como San Diegoo a atacar la Casa Blanca.El nuevo estilo contrasta con los

años rebeldes durante los cuales loshombres de la CIA y del FBI eran loque Jonathan Kuntz, profesor de crí-tica cinematográfica en la universi-dad de California, califica como «per-sonajes negativos». Kuntz acota quea fin «de seducir a los jóvenes losguionistas se inscribían en el moldede la contestación, de lacontracultura».Esa época ha pasado a ser un recuer-do.El llamado «esfuerzo» patriótico

moviliza desde hace casi un año alos más insospechados protagonis-tas del arte de masas, los guionistasde Hollywood, al servicio de agen-cias de informaciones cuya morali-dad dista de ser transparente. ChaseBrandon, ex agente secreto que tra-bajó en América del Sur, fue espe-cialmente nombrado «hombre deprensa» y «consultor técnico» delos estudios de Hollywood.La magia del cine responde a los im-perativos de un Estado antes que a

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Guión y Dibujos: Daniel González

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racional. ¡Pero ahí estaba!... He sido fanáticode los cómics durante décadas, de maneraque no había forma de que me confundiese.Yo conocía bien aquella rauda forma tricolorque surcara el cielo de la ciudad. Porfantástico, inconcebible, grotesco quepareciese… ¡Superman volaba sobrenuestras cabezas!

curiosos con sus alardes acrobáticos.¡Se había materializado lo imposible:

los héroes del cómic convivían, quién sabepor qué portento, con los seres humanosordinarios! ¡Hasta podría estrechárseles lamano! O conversar con ellos...

Confieso que me sentí invadir por laeuforia. Era “el sueño del pibe” hechorealidad... Soy todo un Premio Nobel, y hedictado conferencias en Harvard, Oxford yLa Sorbona; pero el deleite de la hora arrasócon todos mis escrúpulos de adulto...

...Pero el encanto habría de disiparse.De repente, se ensombreció la tarde. Unamonstruosa armazón metálica se tendió porsobre las azoteas de los rascacielos,aprisionándonos sin piedad... Dos niños,que hasta hacía poco gozaban de lo lindo,se apretaron contra mí, aterrorizados.

-¿Qué es eso, señor? —lloriquearon—.¿Qué está pasando! ¡Tenemos mucho miedo!

No les contesté. Pero se me hizo ungran nudo en la garganta. ¡Porque sabía bienla causa de aquel desastre! No me sorprendió

T IENES QUE DESHACERLO, tecleé enla computadora. DEBES VOLVER LASCOSAS A SU ESTADO NATURAL. YA

¿E L COMIENZO de la pesadilla?¡Apenas dieciséis horas atrás!

Al doblar una esquina me vi envueltoen el pandemonio. Era una avenida céntrica:el tránsito estaba embotellado sin remedio.Las bocinas ensordecían con su clamorcolectivo, y los cuellos de la gente seestiraban hacia lo alto.

-¿Es un pájaro?-¿Es un avión?Palidecí hasta los tobillos. Era absurdo,

ilógico..., no podía aceptarlo la mente

SABES LO QUE TE ESPERA SI TE NIEGAS.Aún tenía arrestos para desafiarme,

desde la pantalla:NO QUIERO. AHORA QUE LOGRÉ

DARLES LA VIDA, SE QUEDARÁN PARASIEMPRE. USTED NO SE ATREVERÍA ATORTURARME. SU MALDITO JURAMENTOHIPOCRÁTICO SE LO IMPIDE, DOC.

Yo estaba empapado de sudor. Poséunos dedos temblorosos sobre el teclado.¡Se había terminado el tiempo de advertir!Él no lo ignoraba, por supuesto: estaba enmis manos someterlo a los tormentosinfernales, sólo con alterar en forma ínfimala programación... Rechiné los dientes. Haríalo preciso. Por fortuna, me dije, eldesdichado no podría siquiera quejarse.

NEUROCOMICSNEUROCOMICSNEUROCOMICSNEUROCOMICSNEUROCOMICS

S EGÚN transcurrieron las horas, tuvealgunos encuentros más por el estilo.

Vi al solemne Rip Kirby atravesar la calle,seguido por la rubia Honey Dorian, queapenas podía seguirle el paso. Ya sobre elmediodía, pasó, en veloz carrera, elmismísimo Batman, que casi se lleva pordelante a Mandrake y su hueste de conejosblancos... Sir Valiente deThule blandía laEspada Cantora y clamaba a gritos porMerlín... A las quince y treinta, CaseyRuggles fue detenido, en plena Plaza Mayor,por el porte ilegal de dos monumentalesColt .45; y, media hora más tarde, la familiaMarvel en pleno dejaba boquiabiertos a los

UN RELATO INCREIBLE

por Carlos M. Federici

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cuando la voz malévola resonó a través delmagnetófono:

-¡LA CIUDAD ESTÁ A MIMERCED! ¡TODOS SON MISPRISIONEROS! ¡EXIJO DOSBILLONES DE DOLARES COMORESCATE!

Cundió el pánico; yo me estremecíviolentamente.

-¡Santo Dios! -gemí-. ¡Es Lex Luthor,el genio criminal! ¡Se me olvidaban losvillanos! ¡Si han cobrado vida también,podrían acabar con nuestro mundo!

Comprendí entonces que aquellaanomalía tendría que cesar. Una legión deseres superdotados, desde sobrehumanospaladines y hembras de bellezaenloquecedora, hasta engendros de indecibleaberración, codo a codo con el vulgo... ¡Nosobreviviríamos a eso!

Pero yo estaba seguro de conocer alresponsable... Y bien sabía que nadie, sinoyo mismo, estaba en condiciones deobligarle a volver las cosas a su caucenormal.

vida al heredero, Bobby Vanderhoot,destinatario de la mayor fortuna de lahistoria, pero víctima, a la vez, de unamisteriosa dolencia que lo habría acabado alos doce años y medio, de no haber sido porel andamiaje clínico que yo le diseñé. Graciasa tal dispositivo, Bobby recibiríaalimentación directamente en el torrentesanguíneo, en tanto un pulmón mecánicorespiraba por él, y el resto de las demásfunciones corporales se operabaartificialmente. Su comunicación con elmundo exterior se realizaba por medio deun sofisticado programa informático; laspalabras (que le resultaba imposiblevocalizar), aparecían en la pantalla; nuestrasrespuestas, tecleadas, iban al cerebro mismo.

Una vez se me ocurrió la idea (¡minutofatal!) de hacerle más llevadero su calvariocotidiano: alimenté los circuitos con algunasde mis viejas revistas de cómics... Ahoraadvertía la magnitud del error cometido.Bobby absorbió el material suminstrado confruición de adicto; por fin —de algún modoinconcebible para mí—, su energía cerebral,acumulada durante años y años deinactividad física, consiguió proyectar a ladimensión real aquellas criaturas de laimaginación. ¡Insensato prodigio!

Así que me vi compelido a apelar arecursos extremos. Ya no se borrará jamásde mis recuerdos esa infamia mía,

perpetrada en perjuicio de un inválido total;pero, mordiéndome los labios hasta sangrar,me forcé a forzarlo y conseguí mi propósito.

Su clamor cibernético flameó:¡BASTA! ¡BASTA! ¡LO HARÉ! ¡¡PERO

EIS AÑOS atrás, con el Nobel frescoSen mi currículo, mi creciente fama trascendiófronteras. La fabulosa FundaciónVanderhoot me contrató de por vida, sietecifras “verdes” mediante.

Mi cometido era concreto: mantener con

DEJE DE MARTIRIZARME ASÍIII!...Se arqueó su pobre cuerpo, entre la

maraña de tubos y cables; alguna conexiónsaltó, y la pantalla se pobló de alucinantesarabescos.

Me di cuenta de que me había excedido...Pero ya era tarde para detenerlo.

La reacción de Bobby surgiódesmesurada, torrencial..., incontenible.

ÓMO EXPLICAR lo que sucedióentonces? Creo que es tarea

imposible. No existen palabras, de lenguahumana alguna, que puedan expresar, en sucabal sentido, lo que representa para cadauno de nosotros el haber quedado reducidopara siempre a ser...

¿C

¡TAN SOLO UNPERSONAJE DE

HISTORIETA!

THE END

El vaquero más valiente del salvaje oeste:

por Dobrinin y Cantonnet