. •ciÓe, tn Tos ingreos por ici partidos. Una entrada sin aoo. .t) (popular) al estadio, cucsta 5

. )esos. Pero este afo los hiflzha» deI River han susCrÇtG1:OOO abonos. a 250 pecós eadauro. Hy además, los ingresb34ue producen las Jiras por el ex-tranero. Y, en fin, los traspsos. de 1s varios Sivori a lesplutócratas del fátbel internadotal: los italianos. Es un ingmiOanuel que alcanza la cifra de12 a :14 millones de pesos. DeÓtra parte, los sueldos d los jUgadores no pecan de fabulÓsoscI• premedte es de 25.OO pesosanuales. Junto a La l3runa, queflega a cobrar SO.000 pesos, haysueldos de 2 a 3 mli. Los mu-chachos del noveno al temerequipos. son ofleiónadns. Y senpagados. como tctids. con algúnboeadi;o y alguna Ceca-Cola. NiT4n2 peseta.

Pero volvamos a Cesarini. ¿Re

t !Iaxnamóa te!de ftivacampo viere a et.reeharfles 1*mane. Conversaablemente corinosOtros. ?erü sinperder its•la pelota y los 22 diabtos LÑberbes que evolndonan — a ve-locidad de vrtigó — sobre elverde tapiz del campo. RespondeC:)fl 5f5 a . nUestms pregtflttas. Se acalore, coMo si nosotrosfuésemos tambln niUhChOS 5quienes no entran en la molleralos rudimentos del fútl*d. Devezen • vez emtte un róncó gritc:«;La pelota! No tiene Inteligenea. Vadeil! La pelota va adóndetú la mandas. Tú eres el duefuOela peleta. rió la pelotade tY a!. punto, vuelve a InrormarÉ1os . .

—I : rsice de !ugador, Esnuestra mayor pxocupad1ófl. GÓro de prefer-ricia a túó lo de-más. No ha de ser elfísleodeuriluchadot Debe Cr CI dé tiieutiene que departir eoti l eloth90 mlnutós

pulmones. Nucst, sdndapreóeupaein e ‘ desarrollar, sacae a floté lo que es — fl 1muchacha — la concóoió Ita-tural del ttiegó, u estilo pereó±ial. Ningiin entrenador puedeenseñar al jugador el t6que lafinta, el ddribling. StI dotescine se tienen O no s tienen.NosotroS nos estorzamós tan $-

lo en ponerles condiciones isiCas tales que sus músculós eS-tn preparados a miU1r —

el momento óportuno — aqúó110 que la fantasía, la innata predisposicIón les sugiera. Si estapredisppSiCifi — esto es, la cláse — existe, el resto vendrá apasos eoritadps. Lo Importante sconvencer al muchacho de quepuede hacer — tracias a susrndscu!os, a su sangre, a susynones — euar tO se le antojó eónel bI6n. Es él quien domina a rapelota, y no lo contrárlo.

Sé interrumpe, ¡erza etró desu gritos estentóreOs

—Onega! iSobre la punta dóles 1es, Ohegu! Cuando la pelo-ta llegue atus pies debes estarpreparado para el disparo. ¡Así!»

Se pone a danzar con la Ilgere.za de urui plúma, el busto nr-

queadO hacia adelante. vociferando y gitando los brazos.

«—lA5, Onega, asi! pe otroxnio no podrías chutarni es-quivir al cuntrz1o, ni hacer sé-gate$i

VLeIv4 a nuestro lado.—Este Juego — proaigtló d

donde — es ingenio, eerebrócorazón. sangre, pulmenos. Peroes, sobi’ todo, habilidad en elóentPM del balón. Cori el esf&icodebsabtse hacer eualcu4ercosa. Nada es imrs1hle. En elfút)l C’irCO. e! ,CirIhIiTIeI) hapasade de moda. Impera l con-eepción del pase inmediato alCompañero desmarcado. Pero esuha concepción equivocada. Haymomentos en el partido en quel existe ningún compañero alatcarzee dci jugador, en que en.tve éste y la pbrteria no hayris que un sólo y ditinio obstáonlo: el adversarIo al que hayque bdrlar. Si se Ignará lo quee el •drlb!lrig», más se con-vguir llegar a la porter!a.

—tié opInión le merece aCeaarini el fútbol Italiano?

—:tuvç Cinco años en Italia.Conservo de ella los recuerdosmás hermosos de mt vida. Si meofrcisefl el cargo de entrene-dór de enalquler equipo, partiríaesta misma neeh. Pero seré sin-cero. Vi a los .azu1ea cuandoperdieren aquí en Buenos Alsea,contra Argentiha, por 1—O. Neae puede perder peor que enaquella ocasión. Daban lástima.Un eulpo que pisa el campo te-meroso de perder, no debe saliral extranjero, debe quedarse easu casa.

Un directivo del Rlver Plate,que ariste al coloquio; intervie.

•—C5rirtnt, ¿v1te aquella fotedel fútbol en el límite del área?Dile que a nosotros nos horro-lizan estas cosns.

—.n la foto — explica Cesanni— sayón a tos defensores fot—mar la barrera vueltOs de espaldas, a nuve metros del ejcutsrdel castigo. Es absurdo. Lea jtigadóres deben seguir iemresjyiejenóias del ‘uego. ! ele-mental. ¿t’n balonazo rçcibide defrente? Para eso tCnémóS a lesmédicos.

En el campo, lea ‘ep!ntId jevenas sigulen haciendo evnlueier.es. NIngtln síntoMa de cansan-rió. Hace cuarenta minutos quejuegan, pero el tren de juego noda rehalas de aminorar. A nuestres Ojos de frecuentadores deestadióS latinos, el espectáculoles produce una leve sensaciónde vértigo. Notamos, empero,que no se prediga el tiro desdelejos. La tendencia es llegar conecóldos regates a modio metrodel portero, eón el balón pegadoal pie. Se lo haCemos ver a Ce-sarini.

—Exacto. Pero rió tiene mu-guna importancia — responde,lmpertutbable —. A nosotros sé-lo nos Importa una cosa: que losnuchaehos respiren a la perfeedón, qiie se hebitúén a utilizarsus pies según su fíSico, la es-trttetura óea y muscular de suspiernas. Unos son ambidextros,otros no. Contemplen aquel mu-ehácho. Se llama Seandoli, y hajtiado ya en el primer equipo.Es una firme promesa. Fijensecómo apoya en el suelo la pien-na derecha: cíe un modo defeetuero, erróneo. Por ero tira aúnmal con la izquierda. Dispone-mas de una cancha especial. cubieita, ideada por- mí, y que ile-

g4r defectos de este tipo. En Tpared del fondo he heeh dibujar la silueta de la portería, di-vidida en numerosos cuadros. Estina pirla de veintttrés metrosde longitud, y en sus páredes la-terales van tnarcadas las distan-cies de los dz a les veintitrésmetros. Tres veces por semana,cada uno de estos muchachos pa-se llj media hora. Cada uno,desde diferentes distancias, seentrena en lansar el belén a undeterminado cuadro de la por-tente dibujada al fondo: al ángu

Te izquierdo, ras del suelo O alángulo superior de la derecha.Sirve ,ara Corregir los defectosde la pierna, esto es, de tiro.SI un titular, en un partido. fallelamentablemente una Oés1ói1propicia por Imprecisi&n cii Ci

tiro’ es enviado Inmediatamenteal gimnasio. Y alli se entrenaen lanzar la pelota a los distintos cuadros desde la misma dratanela desde donde faltó el tirodurante el encuentro. Somos la-flexibles cori todos. Quien come-te ini falió, vuelve al gimnasio.Sivori se forrnó allí.

»Sivóri contaba diciséf5 añoscuando dejó el equipo provincia-no, el San NIcOLe. y eritró enel quinto equipo del River Pía-te. Al cabo de un año, se allnecha ya en el tercer equipo. Unafk más, y formé parte de los«reservase. Aqut le recuerdancon afectuosa indulgencie.

—Es un muchacho a quien leha gustado siempre divertirso.se divierte en el campo y se di-vierte fuera del campo. No hay

ciplina lo desmóraliza —

Foresi, entrenador aléticó delprimer equipo —. Jamás se acústaba antes de? amanecer, y se le-ventaba al mediodia. Era Inútilandat iC con sermones. Si se ecos-tnt,a temprano. el domingo Iba alCampo o tegñadientes. Pero es-cuchen lo qué les digo: en todaSudamérica sólo conozco a unjugador qu supere a Sivori: Valtel. Gómez, uruguayo. ignoro susactuales condiciones de juego,pues Is aóos no iasan en bel-de para todos, pero Gómez ha

campo. Corno (;nmer, eiIsn e.xlí gt1áS dá jugar.

—Hay ótros SIvon! en peTpectiva?

—jQtle rl 2? Eche ullada a aquel de allI, al de la éatellera iubía: 1 años. medlGlzquierda. Es mer que Sivorí. tvon, a los diecisiete años, riojugaba así. Se llama Ermido 4’gel Onega. Este yermo saldrá énjii’a con el River; lo probareilpsen el primer equipo. Tengo muchés que ya podrían jugar’ en ciprimer equipo. Pero el quédarvencedores en el campeonato nosImporta hasta cierto punto. Nosinteresa más que estos mucha-ches maduren su físico, nunuetécnicamente estén al mismo di-vol que los titulares. Como Oía.510 Vadeil, medio izquierda. 1!)años e Ettore Sendoll, deIante.ro centro, 20 años; o Leardi, otroiriedio izquierda, aquel que ahóale da a la pelota, 20 años; fije-se cómo plantea la jugada éntad del campo. Perdónenme ...

Benato ‘Cesarirli, con su moni

sucio, de cinco O seis pasitos 1.cía el centro del campo. Aqu*el pecho y comienza a saltarbre la punta de les pies. iffiguíe:

—Juan Carlo Malazzé, ersun medo o un mojón? Cuandotu medio ala avanza debes es-perene (le puntillas; ¡de pup.tilas

Gestlcula, salta fun1osamen.emite sonidos estentóreos:

—liirame, cabeza de laño! ¡Ctmo ttna bailarina, Juan carfo,como una bailarina debes esercnlo ¡De lo contrarIa, Leardite fastidiará con una finta!

lTdo al í, en medio del eamP°, entre sus adolescentes. SeVoz flóS l1ga ahora debilitada.Feio los gestos son siempre decompuestos. las plomas se nud.ven con frenesí. Así. de léjór,parece una marioneta arcionada por hilos invisibles. Repelo(‘esarini tiene 50 años. Pero sitepiernas son veinte años más jéyenes. Son l)ierflas de hierro.Con esas piernas está enseñandOla danza del balón a los nuevosSivori del River Plate Club.

( ini e’. 4’l CRttPI1fid$IV de tada l. uew4te del River Plate Llegan a inanes cUan*tiejieli tioce años y calda de sa pretaraeiéa y diraeu#a ttieisies, hasta que Uenen dieciocho

flatC no les gura que se la llame srtexis gaje es una de las oeasde este modo. Pero, ¿pité otro instituciones que funcionan a latombrá darle? Sin contar con los prfeciún en Agerllina. El RivertiirZ nililolles de pOSOs cobrados i’late fué fundado en 190 y ha]‘or el tiaspasO de Siveni, su sido ya vencedor en (lace cara-((fl5UUCCiOfl ni si(jUCi’it, 1ia,bníapcopgtos. 41 frente,.çje él. no fi-sdo iniciada. ‘usarf meornias cómo presidentes,

Salimos al aire lihrC y un grito ni déspotas técnicos otICticos.felino hiere nuestros oídos. Cesa- jl nIvex Pinte Club apoya sus

ni, en el centro del campo, cia- sólidos cimientos sobro una pie-aa a PunO i)ulmón contra un lue— tafornm formada por más de se—diO volante nue se ha dcjado arre— renta mil sociOs. Socios que pa-1 ar lindamente el halón un gan POCO y reciben mucho a:r iversanio. . Langostino que cambio. i,s SOCiOS de primeraduerme se lo lleva la corriOntc!’ categoría s,i t staccn 20 pemaY corte al encuentro de! desveg- mensuales y tienen el derecho,

lunado, a pasitos rápidos, brin- no sólo do naistir a los encuenruedo: U os co (ltle toma parte el Fi—

—-IMIS vivo! La pelota es estri- ver, sino a practicar todos lospda. Carece (le inteligenda. deportes orgaalaados por el e1.ib.;FreS tú Ouie!1 ha de tenerla! FNtos deiortes suman veintiuno.

En el rectángulo de 1iierba se ile aquí los nrincipalcs: lútl;o1.( iI;efllafl los tnuclrichos (101 tel— baloncesto, balón base, pelota.( tiO ,‘ (lUiflt0 tO;UiI)OS. Cesaiini boxeo, tcnI, Iioclttty. luelra atié—( el entrenador de todos los ira- Cta. evanlainiento de pesca. na—iciiJcs del ]iivCt. 1.os toma bajo tación, esgrima, ciclismo. giman-U dirección cuando aquéllos sin, judo. I)iea y aeia profesotescurtir en ríe 12 a 11 alb)S, en que CSlafl n disposicitni de los sociosIT) .g i esrt en el I1()ono equipo. A (4110 preeticu!1 los dislintos riopor—la.: Útd000S Cíe (‘osar9rri militan tos: El SociO de ségurtda catego—aId’ equiPos: C1I un ceitar i in paga 12 pos a al irc. y tc—(10 ()VOflO5 (lila i,tcgrau eI itt— tiy decC1id a eno a íratis en e!r!(JtOI)1 ‘. l� O UCI ¡tI O5 llate. eta(IiO tutndo se (clebrarr g:n tLI primEro y segundo CqUij)o5 CtOS de tútboi. Co. CsUis i cao-( titulares y Jesorvas) obeclccen tilas cucritas. ¿(eOlo ( posibleal entrenador ilJnclia l al entre- cirio uaa aíielaote la sociedad.?tdui ui atletismo lOlesi. Cesa- Además de lás cuotas de los su- el centro del campo.

crdá(s a lienato CosarIa!, nidbizquierda del Jrive, de lóSO a11135? Jugaba en el mismo puestoen que en la actualidad danza,rovoloea y hacd travesuras ci jóven Siverb

¿liecordIiC sria saltltos que da’be d. puntillas, esperandO iueGisi le pasase el balón? De nmuy elevarla cal tura, ptirCcífrágil Como Ufl pajaltllo. loro es-taha siempre al acecho. Una voz,faltando dos minutos pCra tcrmirae el encuentro. Flungría e Ita.Idi seguían ematados:•2 a 2. Ce-

serial se apoderé del bribia, loactóició con socarronería porunos instantes, dlii unos pas1tode lado o incriastó la esfera decuero al fondo de la red de tos

nsdmbtado magiares. Aquel díanació la loyeqda. Aún hoy, la di-tima fracción do tos noventa ial—Putos do jumo es llamada —. cial a:get deportivo italiano —

«Zona Cctarni».Crsaini sigue siendo. e! tela..

a(). Los -a I(jS’ lien bronceado aur otrO. CfliOflClttOCdO Su voz. pía—Recio sus i ttblos (‘Oí)CllOS. Pero ¡(:15

pasitos sigr(ri 51011(11) ireriosos,las pie (O 5 SO 1fli0VCfl OUO

tC/(, 50 anudad y lantasía per—YflHfl(:CCi1 iivitetada . y 0101 (ja

saltitos sobre la PtIILI:i ile lo l(ieSdesgatiltanclose y gesticulando ca;1]

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i eNatGeanni E 1 e n t n ora _____________________ . . : , II

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c4a eC uJvei 1 ‘ alabúsquedade 1 de 1c IuveNiled• . ..

* u.

1 deS: ASES “ÇT.iuer ‘Ø)t4.tó”

:

I!III1III$iIiiiiIi 1111111 11111

Ecio .. ONEG4ESYAUNA

GRAN

—---“--. —por----.-u--.-

MAIMO MA URI. ua exclúslva de «INTERSTAMPA»

El muno DQpodIuo

1 7:

Lo maehaho del Rivas Plato osa adiestradea á un erpaoIe Peducido a poeiiciar su enaildades Innatas, partitutarmaite» ea. kque respeeta al toque de bajón, a la finta y al «drtbbLLeg». «ia

e1 $fl*adoc — dice Cesarini —, quien ha de dominas la ‘ pelotay sao lo contrario»

ESPERA NZA

a los17:.:c,fiósP ARA 11egar al eam de re- rfrj! ritrta, fórni y próie a

ducidas (1ime1sines donde Mne11a y Foreside cuantos Sivese están entrenazido los rl precan.. Es difícil hallar en

]ilUcllaehos de Renato Cesarini, todo el River Pinte persona más])LalflOS por debajo del audamia- competente que Cearini.je d la «tribuna SiVOri)>. Queda- Quizás meecza la pna decir1.i !ita para el comienzo del pú. unas paabra& referente a este‘imo campeonato. A los del fliver. club mdeio. Digamos entre pa-

.-... . .-‘.

1

Ida aerretos del tdtbol. (‘esarini _,..s de los equipos punteros del Rrer

Eató qen 3ffi «p4es na tafl+ecoatrela aidadosame&C Prø&.o i a

sldb el inés grande jugador dela escuela sudamerkana. Bueno...en les CinCo MinUtOs Cfl que te-fía sanas dé jugar, naturalmente. Levi cuando tenía dieci5isaúos y so alineé en el equiponacional de Uruguay contra Argentina: hizo cosas que jamásvi hacer a ningún futbolista enningún terreno de júego. Nadiele ha Igualado en eoncpcíóii dela jugada3 rapidez en sus rece-Clones y velocidad. Nl el propioSehiffino. En 1na ocasión mar-có un tanto en postura tan lavé-rosímil que se vino abajo la trihuna general: hubo muertos y he-nidOs.

—Y Anelilló? ¿‘l nfarehio?¿Y Grillé?

—No se pueden hacer coniparaeiónes —,- responde ForesiSon hombres que sólo juegan en-cuadrados ca compañeros deidéntico rendimiento y análogaconcepción de juego; No son ases.Sivoni. por el contrario, si quees un as. Su juego será excepcional en cualquier ambiente, encualquier equipo, en cualquierva liii nombre. Sirve para corre. ná.s remedio que dejarle. La dis

J’i. el muro de fondo da usra peineila uae, se ha pifiado el marce de la porterfa, toi el perlero y una sana descl cuadros a lado y lado del rni’rmO El jagadur a rib adquiría Ira seuidad dó dirigir la je1Ota al cuadEo sefialado de antemano. Çesarini ha adoptado eite sistema por 6! ideado, que considera niay útd

, . pata coisegir los defectos de tiro de IOi jugadores