Post on 19-Aug-2018
€L P R © G . R £ S © t^€L A L M A
A ñ o II B a r c e l o n a , A b r i l d e 1 9 3 5 N ú m . 2 2
B U S C A N D O L A )P " i : A UN JESUITAÍ
P O R M Á X I M A
H e r m a i í o L .
H e s e g u i d o con a l e n c i ó n j r a l e r m d el curso d e t u s d e s a h o g o s o r a t o r i o s , e s p e r a n d o a p r e n d e r a l g o
en e l l o s h a b i d a c u e n t a d e l r e c l a m o q u e l o s t u y o s h i c i e r o n a su i n s t r u m e n t o d e t u r n o . A l l e e r el r e c l a m o
q u e p ú b l i c a m e n t e d e t i se h a c i a , d e t a l l a n d o t o d a s l a s c a r r e r a s q u e h a s e s t u d i a d o y t i t i d o s d e l a t i e r r a
q u e p o s e e s , a m é n d e t u c a r á c t e r r e l i g i o s o s a b i o , p u e s s a b i d o es q u e l a C o m p a ñ í a . . . n o q u i e r e a n i n g ú n
t o n t o , e s p e r é , r e p i t o , a p r e n d e r a l g o en t i , a u n q u e s ó l o f u e r a en. l a f o r m a ¡ l á b i l e v o l u t i v a q u e s o b r i a s
a d a p t a r t e a l a s c i r c u n s t a n c i a s q u e p r i v a n h o y en el m i m d o .
M a s , a f u e r d e s i n c e r a h e d e c o n f e s a r t e q u e m e l l e v é el g r a n d e s e n g a ñ o . D e s d e l u e g o r e c o n o z c o
q u e el " e n c a r g ü i t o " e r a u l t r a d i f i c i l d e r e a l i z a r , pues a l a h u m a n i d a d h a c e y a m u c h o s a ñ o s q u e l e _
c a y ó l a v e n d a q u e en los ojos le p u s i s t e i s , p e r o a u n q u e se t e h u b i e s e e n c a r g a d o d e u n r o l d i f i c i l e r a d e
e s p e r a r , d a d o t u c a r á c t e r j e s u i t a , q u e d e s e m p e ñ a r l a s l a d i f i c i l p a p e l e t a a i r o s a m e n t e , d e j a n d o a s í s a t i s
f e c h o s a l o s t u y o s y p r e o c u p a d o s a m u c h o s d e l a a c e r a d e e n f r e n t e .
L o c i e r t o h a s i d o q u e n o h a s s a b i d o n i c o r r e s p o n d e r a q u i e n e s e n c a r g a d o s d e v e l a r p a r a q u e l a
l e y y p o r t a n t o l a C o n s t i t u c i ó n se c u m p l a , p e r m i t i e r o n q u e a c t u a s e s p ú b l i c a m e n t e c o m o a j e s u í t a , e s t á n -
- ( I ) -
do prohibida su Coinpañia... ¿Se habrá derogado el articulo 26 de la Constitución?, me pregunte, ante
el atrevimiento que represctitaba actuar tú en público y radiar las bobadas que dijistes. Mas... pasaré
a referirme a algunos de los puntos por ti tan luminosamente tratados: Uno de los que me hizo reir más
fué cuando tratastes en serio del pretendido infierno... que fundasteis los clérigos, achacando el in
vento nada menos que a Dios.
Cuando me enteré al detalle de tus argumentos sobre el tema, no pude por menos que recordar
a cierto párroco ochentón de una aldeuela, explicando a los niños, el juego, las llamas, el quemar
eterno del infierno, monsergas que los peques escuchaban boquiabiertos y aterrorizados.
Frescura se necesita a. estas alturas, para en un Barcelona y ante un auditorio adulto, colocar
todas las gansadas ya. caducas, plenamente demodées , que colocastes. Naturalmente que te hago la jus
ticia de que tú no crees en él pretendido infierno que pin tas tes, ni eii dogma alguno, como les ocurre
a todos los curas modernos, pero por esto precisamente me adnnra más tu frescura.
Otro de los puntos que me fazo también alguna gracia fué cuando tratastes de la muerte f/)
y a todas tus elucubraciones te diré, por ahora, únicamente lo siguiente: ¿ya estás tú bien p reparado
para mor i r? (O
No quiero terminar estos pobres renglones que te dedico, estimado herimnio en Dios, sin aludir
a aquellos famosos consejos a todos para que se despiojen de una parte de sus bienes a favor de los que
de todo lo más necesario carecen por completo. Por si acaso, y aunque antes que tú fiabian ya. explo
tado el tema muchos otros, no de justes de apoyarte en las enciclicas papales " Rerum N ovarum" y
" Quadragcsimo .inno". Y bien, generoso acoiisejador, eu eso digno acólito de los autores de las ma
noseadas encíclicas, ¿no te fnirece que resulta muy fácil de representar el papel de ca-pitán Araña?
¿Por qué, en vez de aconsejar generosidad a los dentáis, no imitáis al "poverello" de .\.sís? ¿No crees
tú, como Máxima, que si el famoso tesoro de San Pedro, iunto con todos los qiue atesoran ciertas
Compañías... se empleaba totalmente en querer resolver el problema angustioso de los obreros parados,
sobraría incluso muellísimo dinero, una. -vez resuelto el problema? ¿Por qué así no lo hacéis, inocentes
y sabios aconsejadores? ¿Es que tenéis miedo quizá, que al -,:erificario incurrieseis en pecado mortal?
"No guardes en tu bolsa un dinero, mientras -veas a tu prójimo padecer de hambre o sed", dijo el
Maestro que crucificasteis, y yo te pregunto, para terminar 'por hoy, los autores de las encíclicas, tu
Compañía y tú como a hijo de Dios y por lo tanto hermaiio de los que carecen de todo, ¿^a lo hacéis
así? .Segura queda Má.vfma, que estas preguntas quedarán incontestadas, pero si así no fuese, herma
no L tendré mucho gusto en contender contigo,, oralmente o por escrito, y siempre ante Dios.
. Tienes la palabra, p a d r e
~ ( 3 ) -
m
¡QUÉ BELLO ES MORIR! E l Sol, entre celajes de tul , se d e s p e d í a ;
una brisa ag radab le mi frente refrescó
y una voz suave 3' dulce le di jo al a lma m í a :
Piensa, resuelve, escribe, que cont igo esto3^ yo .
Y esa voz cariñosa, que en mi interior sonaba ,
cual sonriente arro3 'o de dulce murnuirar
era mi Ángel Cus todio que a escribir me invi taba
estas humildes coplas que os voy a recitar.
E r a mi Ángel Cus todio ; esa nmsa quer ida
que al componer mis versos, me d a la inspiración
V guía cariñoso, en esta carnal v ida ,
por senderos floridos, mi humi lde corazón.
L a s flores soñolientas cerraban sus corolas,
incl inando sus tal los, dispuestos a do rnnr ;
el Sol y a es taba oculto allá, t ras de las olas,
y yo reflexionaba : ¡ Oh , qué bello es morir !
N o temáis a la nmerte , mis quer idos hermanos ,
pues la muerte no e.xiste. Morir, es renacer
y nuestra alnia caut iva del cuerpo, y sus gusanos
al quedar libre y limpia se llena de placer.
Desechando la carne verá una nueva aurora
do bri l lantes colores y nubes de arrebol
cantores pajari l los y una f ragan te flora
con flores que despier tan al besarlas el .Sol.
Correrá los espacios ; vis i tará los m u n d o s
pues, s iendo un alma buena , se lo merecerá •
penetrará del Cosmos los arcanos p ro fundos
y , siempre p rogresando , la gloria a lcanzará .
Al de jar mi a h n a alegre del cuerpo los despojos
echando hacia la e spa lda de la carne el capuz ;.
mi Ángel Guard ián quer ido, besándome en los ojos,
que van y a cieguecitos les volverá la luz.
Y s iendo y a videntes , verán en ese d ía
mil hermanos quer idos venirme a recibir ;
de l ibertad y amores gozará el a lma mía
y olvidará su cárcel. ¡ Oh , qué bello es morir I
A D E O D A T O P A Z
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- ( 3 ) -
P A S O AML P I R O G I R E S O H e ten ido un sueño tan raro, que no sé si lo sa
bré describir . Soñé que a n d a b a por un amplio ca
mino, a l ado y l ado lo bo rdeaba una hermosís ima
vegetación y altos o lmos ; p la teados á lamos y flo
r i da s acacias ; de trecho en t recho sus r amas se en
t re lazaban fo rmando un bello dosel, por el cual,
al f i l trarse los r ayos del rub io Febo , recor taba ca
prichosos dibujos en el suelo ; muchos pájaros de
vistoso y bello plumaje , s a l t aban d e r ama en ra
ma, y hend í an el aire, e n t o n a n d o sus tr inos dul
ces y melodiosos los unos , y sonoros y alegres
los ot ros . L a atmósfera era cá l ida y p e r f u m a d a .
A n d a n d o , a n d a n d o , me hal lé ante una inmensa
p r ade ra e sma l t ada por f ragantes y aterciopeladas
flores, de mil diversos matices ; en medio d e la
p radera erguíase majes tuosamente , recor tando el
perfil d e sus cúpulas , torreones y f i l igranas en el
azul p ro fundo del cielo, una soberbia y magní f i
ca mansión . U n a suntuosa escal inata de mármol
de una b lancura impecable, d a b a acceso al interior
de la regia mansión, que, cosa ex t raña , no tenía
puer tas que la cerrasen, e s t ando contemplando a d -
n n r a d a t o d o cuan to veía, oí una voz tenue y deli
cada que me d e c í a :
— E n t r a , penetra si te place en esta inansión que
t an to admi ra s .
Me volví a todos l ados pa ra ver quién me ha
bía hab l ado , mas nad ie vi. LTn fresco soplo de rara
delicia acarició mi frente, y volví a oír la miste
riosa voz que dijo :
— N o temas ; en t ra , en t ra .
.Siguiendo la indicación de la voz, ascendí por la
escal inata y penetré en el edificio. E l asombro y
la admirac ión me dejó pe t r i f icada en el umbra l ;
la es tancia es taba i l uminada por un foco de luz,
mejor dicho, por un sol de i r i sadas opalecencias ;
en el fondo del salón maravi l losamente decorado , '
o cupando un t rono r iquísimo, ar t ís t icamente labra- •
do , en el que se veían e n g a r z a d a s gemas que bri
l laban como temblorosas gotas de rocío, había
un ser con d i g n o y sereno por te ; vestía una tú
nica de albo ropaje y en la diestra sostenía un
cetro. Cerca d e él, s e n t a d a s en regios t ronos, ha
bían seis d a m a s hermosís imas . Yo no salía de mi
asombro , cuando oí la voz del ser que me d i j o :
por HADA-LUZ
— ¡ P o b r e a l m a ! , que no te atreves a entrar y
nos contemplas tan a d n h r a d a . ¿ N o sabes quiénes
somos ? Bien veo que lo ignoras y voy a decírte
lo : Yo S O } ' el Progreso , y esas son mis compa
ñeras , mis h e r m a n a s ; una es la Paz , o t ra el
Amor , las dos inseparables, pues d o n d e no hay
amor no puede haber paz ; esas otras son la Ver
d a d y la Ciencia, inseparables también, pues sin
verdad no es posible que haj 'a ciencia ve rdade ra ;
y por úl t imo, estas otras son la Jus t ic ia y la Li
be r tad .
Hizo una ¡jausa y prosiguió h a b l a n d o :
— ¡ Pobre h u m a n i d a d ! Qué ciega eres, cuan lo
camente luchas y te debates . | Pobre h u m a n i d a d !
¡ ¡ Despier ta de ese le targo en que es tás sumida ! !
¡ D e s g a r r a la venda que ciega tus o j o s ! , que
te imp ide ver la luz. Y o soy tu guía , la Luz , la
an torcha que ha de guiar tus pasos por el sendero
de la perfección.
¡ Ábreme camino, j un to con nns he rmanas ! ¡ Dé j ame paso !
— ¡ Paso al Progreso ! — oí que decía un coro
de armoniosas voces. A todo esto, el sol que ilu
minaba la estancia fué a u m e n t a n d o intensamente
su luz a tal g r a d o que cerré los ojos des lumbra
d a ; cuando los abrí t odo hab ía desaparec ido ;
n)c volví a ha l la r en el camino que anter iormente
había p a s a d o ; el viento suspiraba entre los ár
boles, y su eco repitió :
— ¡ Paso al Progreso , h u m a n i d a d ! ¡ Paso al Progreso !
A este pun to desperté . Q u e d a n d o t e rminado así ese ex t raño sueño.
Hay revistas que se titulan naturistas, y se han creado con el único fin de propaganda de las casas llamadas de específicos naturistas. Por esto al hojearlas se les ve seguidamente el latón pues son un continuo anuncio de los antinaturistas productos que dichas casas expenden, haciendo buena a la farmacopea alópata en general.
Las firmas de los llamados médicos naturistas que en dichas revistas aparecen al pie de artículos más o menos naturistas, que de todo hay, pretenden ser el pabellón de garantía que encubra, ante los neófitos incautos, la averiada mercancía que se quiere expender. "Macrocosmo".
( 4 ) -
Caria Ciiriílú'>a m J e n a b e . ÉÍÉ^ fflSfcfc v r. - •- V'MU'' Rumano i -pubUcoia por ^ÉHg/BBBB^^•'•TrJyic'ílií^^^^^^
. .r_.. .J..> i , - . - BU-UMAy ..ni I.V. n•V •••V>. y . , V - . •
Comunicaciones medianímicas parlantes, obtenidas en el Cenáculo el
día 25 de Diciembre de 1934, por el médium B... en la sesión dedicada a hermano Jesús
(Continuación)
Recibid de este número 11 un fraternal sa ludo
y una chispa de amor. ; Qué bien me iría en el
cuerpo que llevo todav ía por la t ierra, qué bien
lue iría un uniforme, un birrete y un número
puesto a q u í : el 11, o el que queráis ! ¡ Qué bien
me iría todav ía ! .Sí ; estar en este espacio as
tral de retención ; es tud ia r horribles crímenes pa
sados , formarse un p rograma para ba jar a la tie
rra a cumplir con el deber, pedirie a Dios el nue
vo cuerpo, ofreciendo cumplir aquel p rog rama y
luego, y a en la t ierra, encontrarse envuelto en el
p rog rama , ¡ qué doloroso es, pero a d e m á s d e d o
loroso, qué peligroso es también ! Ese triste cru
zar por la t ierra, desapercibido, sin que nad ie se
pa quién eres, t o m á n d o t e por lo que aparen tas de
pigmea forma de carne, de insignif icante , de vul
ga r varón , y uno en aquella carne ser consciente
de lo que fué y de lo que es, ver a su a l rededor ,
e s t ando en la carne o sin estar en ella, es igual ,
ver a su a l rededor de d ía y de noche lo que vi
bra y pulula , y tener que hacer a la propia for
ma enmudecer- Ver que uno sirve de pan ta l l a pa
ra muchas cosas que en nombre del Esp i r i t i smo ,
a l rededor de mi p i l t r a fa de carne se estén ha
ciendo y dic iendo y prac t icando en contra d e . . .
en contra d e . . . H e d e enmudecer .
Que bajo mi^jgropio techo tenga que servir de
covachuela consp i radora cont ra la obra del nú
mero 12, es a lgo . . . es a lgo doloroso. Sobre t o d o
que y o t enga que enmudecer . L a ley div ina es
jus ta y h a y un eco de un ayer que parece que me
viene a dec i r : Y tú, acuérda te , no lo hiciste aún
peor? Pasa r los siglos y en ese pasar los siglos,
pasar más cuerpos a t ravés de más cuerpos, más
de un m u n d o , var ios m u n d o s con esos cuerpos,
he inorado , he t r a b a j a d o y en var ios he exp i ado
y ahora , en las post r imer ías , quizás , qu izás . . . só
lo quizás, en las postr imerías de carne de este
m u n d o , también he de pasa r por este dolor. .Si
yo fui muchas miles de veces peor que él, ¿cómo
he de permit i r que en mi covachuela se fragüe el
rayo que lo quiere dest ruir , desviar , que a mi pro-
13Ío a l rededor se conciliabulen f ing iendo Esp i r i
t ismo elevado, el arrancar le ovejas a aquel sol
naciente, aquel sol valiente que es el 12, aquel
sol que va subiendo hacia el cénit, no a r rogan te ,
pero en su incesante subir va subiendo , lentamen
te, como h a y que subir en ese subir ? ¡ Cuán to su
pone en este subir , cuántos dolores y congojas
que absorber en este subir, subir, pa ra , cuanto más
suba, más rudo dolor encontrar , y que sea yo , sin
ser yo , que sea a mi a l rededor , que sea u s a n d o
d e mi nombre de carne, una a r t i m a ñ a más , un
medio más que des t ru i r su obra por la t ie r ra !
- ( 5 )
Ya sé que su a lma en nues t ras d ia r ias relaciones,
y a sé que me dice lo que me dice, y se lo ag ra
dezco, sí, pero h a y u n a voz que también me d i
c e : ¿ D e qué te acongojas que a tu a l rededor hoy
se t ra ic ione aquel que en el número de o rden de
desfile va a ser el 12, de qué te asombras de que
a tu a l rededor se a n u d e la t raición, la ins id ia , el
vender por cuat ro dineros a un Maes t ro? ¿ D e
qué ? i O h ! . . . ( E l méd ium solloza y se cubre el
rostro con las manos . )
P e r d o n a d un desahogo . Si , dice bien esa voz,
si, quien fué capaz de vender a un Maestro inme
recido que se tuvo , bien h a d e ser capaz d e ser
impotente en que aho ra se in tente hacer lo mismo
o peor con otro Maest ro , que si bien respe tando
la diferencia de proporción, pero buscando en la
. vo lun tad y en el desear son exactos den t ro de una
proporción, pero a la vez den t ro de es ta exac t i tud
d iv ina es más pequeño, si dice bien, ¡ oh !, no co
metáis crímenes, a lmas con carne y sin ella, que
me escucháis, porque en la E t e r n i d a d os a g u a r d a ,
lo que he encon t rado yo en las postr imerías m á s
o menos cercanas de mi carne te r ráquea . T o d a v í a ,
y a lo veis por lo que ha d e pasar mi carne vieja,
una carne que va a la d isgregac ión , que y a no
me sirve de mucho de lo que me sirvió. ¿ Sirvo
y o p a r a imponer ideas insanas a un centro que
fundó . Dios mío, que fundó lo que en la prác
t ica luego dícese es tá en el frente a su izquierda
y derecha después d e t an tos años de por la tie
r ra suf r i r? ¡ A l m a tan q u e r i d a ! , que yo, sin ser
yo , sin quererlo, pero sin poder lo evitar , y o sea
una semi-causa t a n t a s veces de su dolor, que y o
vea que se apela a la a r t i m a ñ a d e para acercarlos
a mi l ado qui ta r le sus ovejas. ¡ O h !, P a d r e , ¡ oh !,
y que luego esas ovejas, al contagiarse con las
o t ras ovejas que están a mi a l rededor , sean, sean
lobos solamente con la piel de oveja de un pas
tor que, claro está, fué el lobo peor de aquel re
b a ñ o pequeño, pero g rand ioso , como no ha habí - í
d o n ingún otro igual , de aquel Cenáculo del que
fui yo el peor. N o , no quiero entristeceros. T a m
poco podr ía deciros lo que quiero, es toy conde
n a d o esta vez a enmudecer . Pues bien, d e j a d m e
absorber de un h e r m a n o d e pacto un ins tante na
d a más .
Grac ias . Pues bien, an imaos mucho, e s tud iad
en t o d o , en N a v i d a d , en t o d o lo que os rodea ,
aquí y fuera de aquí , pero e s t u d i a d también m u y
- ( 6
sobre todo , como hago yo , en vosotros mismos,
en vosotros mismos está el quid de la cuestión.
Que c a d a uno haga lo que pueda , el que no
pueda aceptar que no se burle, ni niegue, que
crea que no ha l legado aún a poder comprender
y que quiera más es tudiar ; asi os dice una pobre
a lma que y a por la t ierra rescata y calla, enmu
dece, viéndolo t o d o por ser vidente , respetándolo
t odo y teniendo que enmudecer ante t odo por do
lor que coseche en este verlo todo ; haceos fuer
tes y valientes en el dolor, absorbed de él y an
tes de hablar pensad primero un momento y en
muchas ocasiones enmudeceréis y en ot ras habla
réis, pero hablaré is mejor. T a m b i é n y o es toy pac
t a d o ; escuchad al 12. Brevemente ; pero yo des
haré el t rance para que p u e d a el cuerpo modif icar
el físico facial que y o , pobre d e mí, per turbé un
a lgo. Será un ins tante la cuestión. E s t o más le
habré de agradecer y él a mí pe rdonar .
* * a
Y bien, también el 12 está aqui , ocupando su
lugar ; ocupo el que Dios me ha d a d o esta vez
pa ra mi progreso . Ocupo mi comba t ida herra
mienta de carne, si bien para tener más l ibertad
la he puesto en trance también . Así el hombre no
será consciente, y aunque n a d a he de decir de
que el hombre pueda avergonzarse , pero seré más
libre, más libre, en un sent ido , sí, en otro sent ida
el a lma, d e j a d m e que os d i g a que no es libre
has ta que no h a vencido las cadenas que en su
propia ignorancia se forjó. Y o me las creé m u y
g r a n d e s , yo he s ido m u y perverso, si bien el al
ma no tiene pervers idad . E s t u d i a d en el proceso
d e mis encarnaciones que se cuentan por cen te - '
liares ; en la t ierra fui ul t ra [perverso. P a p a va
rias veces, y c a d a vez criminal en el decir del
hombre . Den t ro la cas t a lo corrí t o d o , d e s d e el
t raje blanco al negro , p a s a n d o por el gr is , por la
combinación de blanco y negro y t o d a la g a m a
de los pa rdos , y si hiciese fal ta un epílogo d o
loroso, os d i r ía que fui también el t r i s te y pobre
inquis idor general . H e s ido rey, caudi l lo y Gran
Cap i t án miles de veces, las unas en s imbol ismo y
las o t ras en lo mater ia l y en t odas ellas causé víc
t imas , destruí cuerpos, deshice hogares , destruí
la paz con los celos. ¡ Cuán to d a ñ o causé ! Ju s to
es que mi cuerpo de hoy sea su m a y o r to r tu ra
los celos d e los d e m á s . Con la lujuria, ¡ cuán to da
ño realicé ! J u s t o es que por la lujuria se a t aque
a mi cuerpo, justo y muy jus to también, y así su
cesivamente os iría diciendo todas las causas ló
gicas d<- 1(1 qne hoy le toca a mi cuerpo por no
deciros a nn' el padecer. N o me quejo, no ; afor
t u n a d a m e n t e el cuerpo me es algo dócil, casi siem
pre, en lo menester, y aún cuando n a d a más pu-
fliese has ta el final conservármelo, como ahora , me
esperanzo, si bien aspiro a mejor. Quiero que sea
más fuerte, más ap to , más dócil , y a la vez,
y a la vez. aunque lo comprendáis menos, d igo
aquí , quiero que sea más progresivo para mí ,
quiero que esa ley de complacer la depure mejor,
quiero que esa ley que es algo, que es algo bien
práctico que él pronuncia del j a r ro de a g u a fría,
quiero que la esgrima más , más ; quiero que nó
tema, y a casi no la teme, jDero quiero que llegue
a no temerla en absoluto las sa lpicaduras de esta
ley horrible del qué d i r án . Quiero que espere siem
pre la agresión de carne y de no carne, quiero
que se h a g a en suma innuitable, pa r a ser así el
ins t rumento de mi emancipación. ¿ L o conseguiré?
Dios sobre todo , le h a g o pronunciar con g ran fre
cuencia a é!. Pues entonces, pues entonces, sí, en
tonces, el 1 2 , ¿qué más podrá a ñ a d i r ? Que os es
"n ínf imo pastor por la t ierra, que practica un
mísero apos to lado , quer iendo esta vez, y a que no
supo hacerlo aquélla, imitar al Redentor . Del que
r ido hermano número i i , la congoja habéis pre
senciado que le as f ix iaba en mi cueri>o, al recor
da r cierta efeméride ; y bien, d i jo bien, cU-ando
a f i rmó que el que comete un crimen repercute des
pués con gríin dolor . ¿ Queréis crimen mayor que
no creer lo que se ve ni casi lo que se toca ? ¿ Que
réis to r tura mayor ? A m a r a un ser y negarle por
incredul idad ; amar a un ser y que el ser t enga
que descender envolviéndose en la u l t r ahumi ldad
y que os t enga que dec i r : ((Tócame. ¿ Me crees
ahora?)) L a vergüenza, el dolor , el querer no ser
en aquel momento , el pobre ser que así vive la
V i d a , y luego d u r a siglos como di jo el i i , y esa
ve rdad así cuántas víctimas con ella no se ha de
hacer, víctimas que luego, como es na tu ra l , ha
brá que recoger y de aquí los siglos que en la
t ierra solemos pronunciar . Yo no me atrevo a ha
blar d e post r imer ías de la carne, no me a t revo.
L a ley de la incredul idad colea demas i ado , cier
tas o t ras , ciertas o t ras deb i l idades por amor t igua
d a s que es tén . . . no me a t revo, no d igo que sea im
posible, n a d a exis te en lo imposible por D ios
creado, lo sé, pero tampoco me atemoriza la ne
cesaria persecución que me rodea de d ía y de
noche en el hogar , aquí y en t o d a s par tes d o n d e
quiero actuar . No , no me atemoriza ; sé que t o d o
cuanto pro^-ecto al quererlo realizar ha de
encontrar l(js g r andes obstáculos, las g randes
vallas de la gran incomprensión, ha s t a la
espera, la espera anhelosa, como le h a g o
decir a mi cuerpo,, a veces esperando en este
negar , en ese insultar, en el lenguaje de la
carne, en ese burlar , en ese .semi-incompren-
der buscando , d igo , el control de que mi
forma y y o es tamos un algo en el sendero de
llegar a hacerlo bien, porque si lo hiciésemos sin
la incomprensión de los demás , si lo hiciésemos
en medio del aplau.so de nues t ra he rmana H u m a
n i d a d mater ia l izada , si encontrasen bien hecho
t odo lo que mi forma hoy de carne y yo vamos
haciendo en plena lucha por el m u n d o , ¡ ay !,
si lo encontrasen bien los demás y lo aplaudie
ran , ¡ cómo lloraría y o ! Creo que no t endr í a y a
esta carne. N o , a fo r tunadamen te , pues, no me
quejo y esto}' bien s i t u a d o . N o me fal ta n a d a
para vencer, lo sé, y a la vez si queréis me falta
t odo , porque es una incógni ta perenne en el a lma
el ( ( ¿Podré? ¿ N o p o d r é ? » .Si el a lma es es tudio
sa, si es tá ins t ru ida en el m u n d o que hab i t a en
el sumnuim que lo pueda estar como lo estuve
d ic iendo, verá tpié cosas podrá realizar, que es
tá d o t a d a de t odo lo menester, pero, ¿quer rá po
d e r ? H e aquí la esfinge- E l a lma, serena cual
ave fénix sal iendo d e las cenizas, es inmor ta l ,
¿qué vas a ignorar , a lma? E t e r n a viajera que
va de m o r a d a en m o r a d a del dolor , sí, pero, ¿po
dré esta vez? H e aquí . Sé que pa ra poder cum
plir es ta vez mi principal misión es ded ica rme por
completo a la emancipación, eso, eso, a a j 'udar
a la emancipación de las a lmas que Dios me ha
ido y va acercándome de cont inuo pa ra que se
cumpla la ley. T o d a s ellas, como me pueden com
prender , me aceptan , me rechazan, me insul tan ,
me calumian, me pers iguen, sé que si cumplo an
te Dios con mi deber , la paz y la se ren idad es
ta rá en mi y en mi forma. Sé que, a de más , me
iré l levando de e.se m u n d o mi emancipación. Sé,,
t ambién , ¿qué voy a ignorar en lo teórico? Re->
pi to , .sé t ambién t odo lo que me rodea , con carné
o sm ella, y a n a d a y a nad ie temo, sólo me te
mo a mí. Soy , pues, un pequeño operar io , muy_
- ( 7 ) -
MIEIDIIAM^IIMIICAV ESCIRIIIBIIIE'NTIE Calma, que no quiere decir e s t ac ionamien to ;
modes t ia , que no s ignif ica enmomiamien to , sean
las dos nmletas que te acompañen en tu ruta pe
regr ina por este p lane ta .
Ca lma en el sentir , energía en el actuar , mo
dest ia en el vivir, pero despreocupación en el
obrar ; la energía es imprescindible si se quiere
un a lgo de progreso conquis tar , pues proponte
siempre que sea menester y lo será, cuando más
te esfuerzes, en t o d o ins tan te así p o d r á s alcan
zar po r ese camino que es t a n pedregoso , pero
que es tan eficaz.
¡ Q u é dulce es el vivir ! ¡ Quién de vosotras
supiera comprender lo ! ¡ Q u é cambio en su apre
ciar se opera r ía ! Comprender lo g r a n d e , lo subli
me, lo inmenso, es el deber d e los seres todos ,
es el do te l egado por el Creador .
Vosotras aspi rá is , pero j qué pocas sois las que
bien es tudiá is ! E n cambio, con qué constancia
pract icáis lo que es tan grosero por vu lgar .
L a constancia es la necesaria he r ramien ta pa- •.
ra conquis tar lo que se quiera, pero esa no se de- ^
be l imitar en un sen t ido sólo sino que debe abar - '
car t o d a s sus ramas , constancia en el aprender ,
luego en el es tudiar , después en el intento de
práct ica , y al fin en la p rác t ica cont inua e ininte
r rumpida . Así paso t ras paso , pe ldaño t ras pel
d a ñ o , se va uno acercando al punto card ina l , al
cumpl imiento exacto del i nd iv idua l deber, ese
deber que beneficia a uno porque primero bene
ficia a los demás , porque al pract icarse no se cir
cunscribe en el y o personal , sino que i r rad ia sin
dis t inción po r todos l ados .
E l d í a que t o d a s sepáis cumplir con el deber,
ese d ía estaréis en el sendero y si persist ís cum-
pequeño en el m u n d o t ierra d e la d i v i n i d a d , que
sabe lo que quiere, que sabe lo que d ispone pa ra
poder cristal izar en su querer, q u e sabe el camino
a seguir , sin t i tubeos . N o me fal ta n a d a , es ver
d a d , p a r a vencer ; me sé as i s t ido , más , iba a de
cir, de lo que me merezco, pero esta sería una
frase l i terar ia de la t ie r ra . Dios no d a más , sir
viéndose de su obra , que lo que uno se merece.
( C o n t i n u a r á . )
por el médium S. B.
pliendo, seréis invencibles y os ganaré is un plano mejor.
T o d a s las a lmas , t o d a s , hemos ten ido que pa
sar por esa e terna faceta ; cuando se la l lega a
pract icar y a no .se de ja j a m á s de avivar la , pues
a m e d i d a que se g a n a de g raduac ión , m á s , nm
cho más se intensif ica.
T o d o cuanto existe tiene t r azado en el infini
to ser su dest ino, t odo cumple con su deber cuan
do es mate r ia gaseosa, l íqu ida o sól ida, si bien
en la par te intelectiva d e esa esencia vital que
c a d a ser de por sí lleva, está d ispues ta por su
Creador por haber y a evolucionado lo suficiente,
de t o d a facul tad aunque la tente y con la l iber tad
necesaria, y en este caso y a n o s igue los precep
tos que sigue la mater ia en sus múltiples mani fes
taciones 's ino que ac túa bajo el dominio de sus
facul tades , que al no hacer el deb ido uso de ellas
se va ceñiendo en c a d a caso el gri l lete que en los
siglos, que no existen en la e t e rn idad , t e n d r á que
e n m e n d a r has ta convertirse en manso , en humil
de , en sereno y consciente ser, despierto y a a lo
g r a n d e , a lo sublime y s iendo en ta l sent ido un
a d o r a d o r e terno del A m o r P a d r e que lo creó,
a d o r a d o r por ser obrero, por ser operar io infati
gable , y por ser el sediento de más saber pa ra
siempre más y mejor ampara r y amar .
A h n a s he rmanas , ¡ vivís muchas aún muy po
co despier tas a la rea l idad de la v ida ! Mi amor
os viene a ofrecer su pequeño perfume ; de jad los
envolventes a tavismos , de jad cuerpos de mujer
de d is f razaros , de jad y a de una vez esas tr istes
y r e t a rda t a r i a s coqueterías . Dios no os quiere
enmasca radas , sino l impias de cuerpo y a lma d is -
]3uestas p a r a c u a n d o sea hora , a ser fuentes per-
] je tuadoras de la especie, c a d a paso que daré is
en el camino de la n a t u r a l i d a d tendré is la ínt i
ma satisfacción que produce el saber un a lgo
cumplir con el jiropio deber .
Ni una sola está exenta de n a d a que deba ne
cesitar, t odas tenéis lo mismo en esencia, .pero
no t o d a s hacéis el mismo uso d e los conocimien
tos, ni os esforzáis lo mismo en las prác t icas , por
esto es causa que muchas os encontrá is en un
p lano de casi paral ización, querer ser t o d a s co-
mo debéis ser, y veréis que pronto cambia vues
tra marcha, y no tan sólo esto, sino que rec ib i
réis lo que hoy queréis, pero que para alcanzar
lo no os esforzáis. Esfuerzo no debe fal tar en
mngún intento , constancia tampoco, espíritu de
sacrificio menos ; sin esto no se consigue n a d a .
L a lucha contra la mater ia l idad conduce al ex
terminio de la misma, y con la lucha pa ra la
conquista del amor se llega a vivir en tesi tura
espiritual superior, pues querer todas así vivir,
por saber todas con vuestro deber cumphr .
Ad iós .
L A G U L A {Traducción portuguesa)
L a gula, en el decir de Tols toi , es el fin prin
cipal de la v ida pa ra la mayor ía de los hom
bres, y a ñ a d e que el propio pueblo t r aba jador
sólo hace excepción a esta regla en la m e d i d a
que la falta de medios le impide poder ent regar
se a semejante pasión, y a que, siempre que las
circunstancias se lo permiten, a ejemplo de los
g randes , busca los aperit ivos más agradab les y
come y bebe t an to cuanto le es posible.
A y de nosotros, que no tendr íamos que lamen
tar las tr istes rea l idades que infelizmente tene
mos, si no fuera la mi t ad o más de los procedi
mientos a que el pueblo se entrega, a ejemplo de
los g r andes .
Sabemos de pequeños ar t i s tas , de t r aba j ado
res modes tos , de empleados públicos de parcos
rendimientos y numerosa familia, que evi tan,
por loable espíritu de economía, meterse en un
coche, lo que da r í a a lgún descanso a sus pier
nas y d isminui r ía su fa t iga , y que, sin embar
go, gas tan a lgunas monedas al día en mejunjes
y bebidas inútiles, si no perjudiciales, s implemen
te porque asf vieron hacerlo a o t ros hombres de
su clase, más favorecidos o menos escrupulosos
y por el placer que esos l íquidos artif iciales y
sospechosos les causan al pa l ada r .
¿ E s esto sensato o tan siquiera d isculpable?
Ele la gula escribió en una ocasión el Sr . J . D . L .
en nuestro colega ((O I d e a l » .
« E n t r e los pecados capi tales , uno h a y , la gu
la, que sobrepasa a todos en d a ñ o y extensión.
Y cuando escribo gu la no t ra to tan sólo de la
gula del es tómago, que tiene como an t ído to la
v i r tud l l amada templanza , pero sí de la gula pa
sional, de la gula afect iva (? ) que o t r a cosa no
es el gus to exage rado de vestir caro, ni el deseo
irreprimible de poseer mujeres.»
(Nosotros d i r iamos, en vez de gula afect iva,
ansia lujuriosa, aba r cando en esa des ignación
ambas manifes taciones pecaminosas del perver
t ido gusto de quien las posee.)
D e cualquier m o d o y como sea, lo cierto es
que el ar t icul is ta no ye r ra a g r u p a n d o todos esos
defectos con la misma clasificación de gula .
Si la a fec t iv idad existiese entre los hombres ,
bas ta r ía por si sola pa ra impedi r la práct ica d e
t an t a i n d i g n i d a d , de t an tos desa t inos como esos
que por ahí nos sorprenden a cada paso y se di
ría serán c a d a d ía más frecuentes.
L a a fec t iv idad es el sol de la existencia y ésta
encapricha mucha gente en llevarla lo más oscu
ramente posible.
L . L . ( D e O Vegetariano, de Opor to . )
an-Suscripción P r o - M A C R O C O S M O . — S u m a
t e r io r : 2 . 3 4 3 ' 3 5 pesetas. F . E . , 2 ; J . S . , 5 ;
C. B . , 5 ; F . L . , o ' 4 o ; A . C , 0*40; G., 2 ; F .
L L , I ; F . M. , 5 ; Mesa, 0*40 ; F lo re ta , i ; Me
sa, o '3o ; E . C , i ; C. B . , 5 ; M .G. , 1 ; F . E . ,
2 ; J . S . , 5 ; U n a vo lun tad , i ; Mesa, o ' 5 0 ; A u
rora, 5 ; J . 1., I ; E . C , o ' 4 0 ; C. B . , 5 ; G a n d h i ,
5. T o t a l : 2 . 3 9 7 pesetas .
NUEVO SEGURO DE VIDA
—¿Por qué se pasea usted arriba y abajo, por delante del hospital?
—Es que estoy aprendiendo a conducir, ¿sabe usted?, y estando cerca del hospital me encuentro más tranquilo.
- ( 9 ) -
Curaciones obtenidas en la Clínica de Cura Moral del Cenáculo " • ' ' ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ s
C. -M. Cuerpu de mujer, 36 años , ca sada . Con
vive con su esposo y con su m a d r e . A l presen
tarse a la clínica, la acompaña su madre , la que
e-vplica que su hija hace ya más de dos años que
ha j jerdido el habla por completo, lo que deter
mina un gran dolor de todos los que forman el
hogar , con derivaciones en el terreno económico
que de ta l la . Exp l i ca todos los médicos que han
t r a t a d o a la paciente, así como todos los fárma
cos empleados por aquéllos sin conseguir devol
verle el uso de la pa labra . D e s e n g a ñ a d o s la pa
ciente y sus familiares de que los médicos aló
pa tas puedan curar su mudez," acuden a la clíni
ca con la esperanza de ver si en su triste caso
puede conseguirse el milagro de la curación, co-
i iKj otros obtenidos que les contaron.
Nues t ro hermano facul tat ivo la es tudia en el
dol)l(^ sent ido físico-espiritual, y d á n d o s e cuen
ta de que existen causas en ambos terrenos que
de te rminaron 3- sostienen la mudez, marca un
sencillo régimen alimenticio y curat ivo a d a p t a d o
a, naturaleza , cuanto al pr imero, y en lo demás
hubo n i ' ces idad de consumir siete sesiones, en las
(] i ie nuestro hermano facul tat ivo director hizo
intervenir a varias de las vo luntades auxil iares
de cura, con el fin de crear un hermoso y colec
tivo lazo de amor entre var ias a lmas , pa ra el
m a ñ a n a de no carne y un aceleramiento en hacer
desaparecer la causa astral .
Desde la primera sesión af i rmó nuestro herma
no facul tat ivo a la paciente y a su m a d r e , que
se t r a t aba de un caso de posible cura, si la pa
ciente se atenía en absoluto a las recomendaciones
que se le har ían , con el fin de obtener an te Dios
el indispensable merecimiento pa ra corregir tan
tota l disfunción, 3' pese al pesimismo de la pa
ciente que por .signos 3' escribiendo lo que no po
día pronunciar , desconf iaba conseguirlo, como a
pesar de su temor de no curar, realizó exacta
mente t odo cuanto se le recomendó, se obtuvo la
cura por completo, sin que a pesar de los años
t ranscurr idos se ha3'a repet ido la mudez .
Hacemos gracia a nuestros benévolos lectores
del júbi lo de la paciente 3' familiares, los cuales,
aunque a3mnos de conocimientos de las dos ra
mas que fueron empleadas para obtener la cura-,
ción, no podían negar la rea l idad que los hacía
felices.
Br indamos a todos nuestros lectores, lo mismo
a los iniciados en Esp i r i t i smo 3' Na tu r i smo que
a los profanos en ambas ciencias de curar, este
caso clínico que, como tan tos otros, puede ser
vir para mucho cavilar los unos, 3' a nosotros
3' a los que como nosotros sienten, pien.-.an 3'
pueden 3.'a un a lgo pract icar , para da r gracias a
Dios .
A N T O N I O •
- C loO
BOCETOS BIOGRÁFICOS DE NATURISTAS
L U I S K U H N E por A. B. M., aprendiz naturópata
{ C o n t i n u a c i ó n ) •
Pronietinios a nuestros lectores ocuparnos de
lo costoso que le resultó al genial autor del popu
lar hbro «La Nueva Ciencia de Curar» el l legar
a concebirla, y en cuniplinhento de lo prometi
do, pasamos a escr ibir :
T r a s numerosís imas observaciones en s a n o s y
enfermos, luego de las real izadas en su propio
cuerpo y en los de sus quer idos familiares, e in
contables y p rofundas reflexiones, pudo por fin
Luis Kuhne , pau la t inamente descubrir los princi
pios en que basó su nuevo sistema curat ivo.
Fué tan intensa, tan t o t u n d a la convicción
adqu i r i da sobre la ve rdad y eficacia del siste
ma descubierto, que no d u d ó y a de ded icar por
completo lo que le restase de vivir físicamente a
la divulgación del mismo, no reparando en es
fuerzo ni sacrificio a lguno para conseguirlo.
Pese a la desconf ianza e incomprensión de la
ma3 'oría que y z descontaba encontrar , se lanzó
con plena generos idad , a la práct ica sublime de
teorizar 3- pract icar cont inuamente el nuevo sis-
tenia curat ivo a favor de su hermana human i
d a d . Es t a , al principio un algo largo, no le per
donó su carácter no facultat ivo, para admit i r le
que hubiera p o d i d o descubrir el origen de t odas
las en fe rmedades , cosa que no hab ían p o d i d o
conseguir los más repu tados galenos de la épo
ca, los cuales acababan siempre por declarar in
curable t o d a afección crónica. S a t u r a d o s t odos
ellos d e conocimientos atávicos erróneos sobre el
tema 3 de af irmaciones contemporáneas hi jas de
estudios de laborator io y casi siempre ayunos de
la base principal que pa ra t odo espíritu media
namente observador deberá ser s iempre el estu
d iar el • metabol ismo en el propio hombre o mu-
-ler, l legaban van idosamente a la afirmación del
origen microbiano. Convencidas las masas de que
los rñicrobios eran la causa d e t o d a s las enferme
d a d e s y que solamente des t ruyéndolos se pod ía
sanar , y no p u d i e n d o entonces comprender que
no eran los microbios el ve rdade ro origen mór
bico, como as imismo que i^ara^ poderlos des t ru i r
se destruía al mismo t iempo el cuerpo que se pre
t end ía sanar , se en t r egaban convencidas a los
médicos de la medic ina química conf iados en
que no exist ía terapia mejor.
Es to da rá a comprender a nuestros benévolos
lectores lo difícil que le hab ía de ser a nuestro
b iog ra f i ado el abrirse paso entre un ambiente
tan densamente enrarecido 3 fanát ico, al procla
mar con su sistema t o d o lo contrar io de lo afir
m a d o por la medic ina oficial .
Si de la medic ina t rad ic iona l pasamos a la
na tura l exis tente entonces, veremos fácilmente que
Kuhne no- pod ía ignorar que exis t ían d is t in tos
sistemas curat ivos natura les , 3'a que todos aque
llos así se denominaban .
Así habremos de ace)itar que es tudió deb ida
mente las práct icas de cada sistema, 3' que no
podían ser pa ra él n ingún secreto las aplicacio
nes de a g u a fría que apl icaba a los enfermos el
genial Priessnitz, Kne ipp con var iad í s imas apli
caciones de a g u a también 3' además su recetario
f i topát ico ; .Schroth con su conocida dieta seca
3' enf r iamientos , y Rikli con su s is tema a base de ,
aire 3- sol, para no ci tar más que los autores más
populares . ¿ Qué resu l tado obtuvo de sus estu
d ios? L a convicción de que todos los sistemas de
los c i tados autores 3' muchos otros eran incomple
tos, ya que carecían del conocimiento de las cau
sas de las en fe rmedades y de la ve rdadera ciencia
de sanar las .
E n c o n t r á n d o s e pues a i s lado , como vemos fá
cilmente |ior lo descri to, d e t odos los s is temas
conocidos de c u r a r en f e rmedades , 3 a3'uno de
t odo t í tulo académico, p o d í a encont ra r única
mente como encontró, la indiferencia en el me
jor de los casos en el público, 3' la persecución
más d e s p i a d a d a en el campo facul ta t ivo, 3'a que
tenían que ver en él al curandero d e tu rno , cuan
do no cosa mu3' peor. Pero n a d a le a r redró , y
a b a n d o n a n d o su fábrica en que cosechaba t a n
sanos balances , se en t regó por completo a l a
labor que era y a su ideal , d e a y u d a r Í\ SU
- ( II ) ^
hermana h u m a n i d a d a pesar de ella misma.
L o primero que decidió implantar fué un sa
nator io ve rdade ramen te na tur i s ta , pa ra el trata
miento de las enfermedades, por la nueva cien
cia de curar, sin medicinas ni operaciones, como
rezó luego la p r o p a g a n d a del mismo. Al consul
tar su proyecto con a lgunos d e sus más ínt imos
amigos y también con su que r ida compañera , en
vez de encontrar alientos hal ló t odo lo contrar io
de quienes temían un fracaso por la fal ta de
ambiente , etc.
Mas n a d a p u d o retenerle ya , y el lo de octu
bre de 1883, se inauguró el Sana tor io Kuhne , en
Leipzig , luego de universal renombre .
¿ Qué resu l tado le dió en t o d o s los terrenos el
tal Sana to r io?
E s t o es lo que t ra ta remos en nuestra próxima
cont inuación, para la que emplazamos a nuestros
muy es t imados lectores.
{Continuará.')
S I N C O M E N T A R I O S
{Fragmento de un notable articulo publicado
en «Pro-Naturismo», de México):
«Y decimos que se necesitan esas dos cosas esen
ciales, porque, de lo contrar io , las personas que
no se encuentran en este p lano menta l construc
tivo, nunca podrán acep ta r y menos pract icar
d ia r iamente por el resto de su v ida esta discipli
na al imenticia, que permi ta después de un a ñ o
cuando menos, descubrir las ven ta jas fisiológicas,
y la placentera sensación que d a la sensibilidad
glandular bucal y estomacal, al l legar a percibir
los nuevos y desconocidos sabores ha s t a enton
ces, de las sales y otros elementos na tura les que
poseen en sí los al imentos vegetales, c rudos , y
c ient í f icamente p repa rados o cocidos, que no que
d a n desvi ta l izados , ni es tán adu l t e r ados con pre
paraciones an t ina tu ra les de especies exci tantes ,
que nulif ican y m a t a n t o d a s las v i r tua l idades y
beneficios de los a l imentos na tura les .
Por eso, en la cocina naturista moderna, se eli
mina el uso de la sal y la g ra sa an imal en el co
cimiento de los manja res , se perfecciona la forma
de cocerlos y se modi f i ca la mane ra d e combi
nar los . L o pr imero se hace porque la sal de coci
na y la grasa hacen más indigestos los alimen
tos,, pues al saturar.se las substancias de esos ele
mentos , .se dificulta más su desintegración y ac
ción disolvente sobre ellos del j ugo gástr ico o es
tomacal ; por eso todo y verdadero y competente
profesor o cultor de na tur i smo, recomienda no to
mar cosas sa ladas o en salazón, ni cosas fri tas ;
i nd icando a los principiantes en este entrenamien
to de nueva forma dé al imentarse, que si se les
hace muy duro no tomar sal y g ra sa con los ali
mentos, la forma menos perjudicial es poner sal
al manja r al comerlo, lo mismo que usar un poco
de aceite de oliva puro, no q u e m a d o o ca len tado ,
con sus al imentos, pues aún el aceite que es ve
getal después de quemado o cocido es ind iges to ,
y sufre al cocerse una transformación que lo hace
d a ñ o s o ; ad emás , la sal de cocina o de mesa per
jud ica g randemen te a las g lándu las bucales, pues
a t rof ia su sensibi l idad gus ta t iva na tura l , i rr i ta
la mucosa estomacal p red isponiendo a mucha
sed, resu l tando que, al saciar ésta, la d e m a s i a d a
c a n t i d a d de a g u a inger ida con la comida , deb ih -
ta la potencia l idad o fuerza del j ugo gástr ico,
p red isponiendo a las dispepsias u otros t ras tor
nos estomacales e intest inales. Y si no fuere esto
bas tan te , se ha comprobado que el uso frecuente
y constante de la sal, t a l como se acos tumbra por
la mayor í a de la gente , es la causa del endureci
miento de las venas y ar ter ias , a t ro f ia y rugosi
d a d de la piel, y por su a f i n i d a d con el a g u a
retiene ésta en los te j idos y produce la temible
hidropesía, no s iendo tampoco ajena la sal a la
manifes tac ión del cáncer .»
- (
Todo médico o instructor naturista que lo sea en ver
dad, jamás se prestará a recetar ni aconsejar el consumo
de los llamados "especificos naturistas", se limitará siem
pre, en dietética, a aconsejar el comer alimentos sencillos
y de origren y estado absolutamente natural. También se
sabrá abstener de colaborar en las mal llamadas revistas
naturistas que publican anuncios de venta de tales per
judiciales "especificos", y no habrá "razón" ni "argumen
to" que esgriman los editores de tales libelos que les pue
dan convencer, para seguir colaborando en las columnas
de tales publicaciones.
Por el fruto los conocéis, dijo Jesús, pues los que pro
sigan su colaboración, más claro ni el agua.
MAOROOOSMO
1 3 ) -
Dictámenes medianímicos escribientes obtenidos al empezar sus trabajos el "Grupi to de la P a z "
B i e n está la ofer ta por sana, sincera y frater
nal. Quis iéramos salir al encuentro de vuestro
sano interés, y comunicaros las causas de cierto
efecto, el por qué de ciertas situaciones de dolor
y de ot ras luctuosas e inharmónicas , pero l a ; L e y
jus ta y sabia no lo permite todav ía , y por a lgo
será.
Sin embargo , vuestra l l amada llegó y fué aten
d ida , no desmayéis sea el que sea el resul tado
que os parezca que vais obteniendo en vuestro
pedir y practicar- Ac tuar siempre como si tuvie
seis la segur idad de obtener la paz ped ida . Que
nunca se p ierda por vosotros, que j amás os pueda
ocurrir que luego, al dejar la carne, sufrá is al ver
que pudis te is hacer algo que no realizasteis por
ereer que estabais perdiendo el t iempo.
J a m á s perderá el t iempo el alma que a n i m a n d o
carne sobre todo , sienta la sed de pedir ser útil
en las tor turas ajenas, pues aunque h a y a casos
que no quepa en Ley el conceder, siempre encon
t ra rá luego el a lma, en su haber , el premio de
bien haber v ibrado y prac t icado por el infor tu
nio de sus hermanos en general .
A len t ad , pues, perseverad en vuestra hermosa
aspiración, ' y si queréis ser i luminados y prote
g idos por quienes puedan hacerlo, merecerlo pri
mero haciendo lo propio vosotros con aquellos que
ocupan, g r a d o inferior al vuestro y los veáis su
f r i r .
* *
Incansables pract icantes , por ahora , en busca
de Paz . Vues t ra labor nos sat isface por demás ,
a lmas quer idas . Seguid constantes como has ta
aquí , no os de tenga vuestra pequenez, que s iendo
amor la esencia que os impulsa, g ra t a ha de ser
a Dios vuestra labor.
Ped i r por los demás , ¡ qué hermoso es ! E n ese
pedir , solicitar además ser u t ibzado para conse
guir lo que se p ide , demues t ra la g raduac ión al
canzada en el a m a r y proteger . Cier tamente sois
pequeñi tas t odav ía , por lo que llegaréis a ser, pe
ro que esto no os de tenga , os repetimos, porque
bien laboráis en vuestro minúsculo tal ler .
Perseverancia en bien pedir y en ac tuar por
-i 13
amor, y, ¡ a d e l a n t e ! , siempre ¡ a d e l a n t e ! , os d i
ce nuestra experiencia y pobre amor .
Muy lejos iréis si no os detenéis , pero pensad
que el pehgro de detenerse o desviarse está en
vosotros, y a que la carne es a la vez que útil he
r ramienta pa ra amar y proteger, el peligro ma
yor para el a lma, según el uso que h a g a de su
cárnica her ramienta .
N o desmayéis en n inguno dé los casos ped idos ,
seguid ahora y en t odo momento que a ello os
sintáis impulsados , p id iendo por amor p a r a ellos
y . Dios sobre todo , solamente por ahora os po
demos decir.
Esperanza y constancia sea siempre vuestro le
ma si queréis t r iunfa r en vuestra labor.
IDIE IPAIRIIS E n la popular revista ((La Griffe» (La Gar ra )
que se publica en la capi tal de F ranc ia , y en su
número del 24 de marzo , nuest ro e s t imado amigo
y he rmano en creencias, el conocido publicis ta
G. G. reproduce un art ículo que sobre G a n d h i
publicó MACROCOSMO t i e m p o - a t r á s .
Encabeza d icho art ículo, M a h a t m a G a n d h i .
Empieza dec l a r ando el o r igen de d o n d e t o m a
ín tegramente las noticias sobre el hermano indú ,
y te rmina con el s iguiente p á r r a f o : ¡(Así se ex
presa la revista na tur i s ta de nues t ro amigo A n
tonio B a d í a M a t a m a l a , que persigue en E s p a ñ a
la misma bienhechora labor que realiza en I ta l ia
nuest ro amigo L a m b e r o Paole t t i en su (ddea N a
tur i s ta D y en su notable obra ((Naturismo)».
Mucho agadecemos a nues t ro que r ido herma
no en N a t u r i s m o y Esp i r i t i smo su labor de pro
p a g a r la v ida de G a n d h i , en el que t an tos t an to
podemos aprender . A d e m á s , y sin proponérselo
seguramente , le debemos t ambién agradecer la
noticia que i gno rábamos d e que en I t a h a hubie
se un he rmano con el que por lo visto coincidi
mos en obrar . ¿ Sería mucha molest ia p a r a nues
t ro buen amigo G. G. remit i rnos la dirección d e
L a m b e r t o Paole t t i , p a r a en t ra r con el mifemo en
relación ?
T e r m i n a m o s estos breves renglones d á n d o n o s el gus to , esta vez públ icamente , de queda r a d is posición pa ra t o d o cuanto p o d a m o s serle út i l , así como las modes t a s co lumnas d e nues t ra amada. M A C R O C O S M O .
y O Z OELIPUIEIBILO A los hombres de corazón
Publ icamos la siguiente car ta aparec ida en « E l
Libera l» y que debe reproducir en su priniera pla
na t o d a la prensa e s p a ñ o l a :
« S e i l o r c e n s o r , no t e n i e n d o este e s c r i t o o t r o o b
j e t o q u e l l a m a r q l o s s e n t i m i e n t o s d e l -pueblo, l e
r o g a m o s d e j e q u e se p u b l i q j i e , q u e d á n d o l e m u y
a g r a d e c i d o s . — « L o s o b r e r o s sÍ7i t r a b a j o » .
Somos los andra josos que por d o n d e pasamos
r epugnamos a las gentes ; los desgrac iados de la
for tuna ; los que, cansados de l lamar a t odas las
puer tas , con m i r a d a despreciat iva se nos e c h a ;
somos los obreros en pa ro forzoso por el progre
so de la mecánica ; ese ejército de miles de v idas
t r u n c a d a s en plena ac t iv idad , conver t idas en pil
t r a f a h u m a n a y condenados , a muer te . S iendo re
s ignados , no subiremos al pa t íbulo ni seremos fu
s i lados ; nues t ra condena y la de nuestros fami
liares es más cruel, más r e f inada , más f r í a ; es
por ago tamien to físico, por el hambre y la mise
ria, que poco a poco nos aniqui la ; el cr imen de
mayor pervers idad y refinamiento no se puede
igualar al que se comete con el obrero en paro
forzoso.
Rec lamamos el derecho al t r aba jo que como
obreros nos corresponde, y como éste se nos nie
ga meses y años y no tenemos pensión vitalicia,
con tando con t o d a la Prensa , sin dist inción de
ideas polí t icas, ha d e recoger nuestro g r i to en de
m a n d a de so l ida r idad h u m a n a ; a todos nos d i
r igimos p a r a que lo recoja quien p u d i e n d o quie
ra en jugar miles de l ág r imas .
i H o m b r e s de ciencia y de saber h u m a n o : sa
lid de vuestros es tudios y escuchad la voz de los
t r a b a j a d o r e s ! j Gobernantes y políticos, que en
vuestra boca está el nombre del sacrificio ! ¡ Pren
sa y per iod is tas , que decís tener vuestras p lumas •
al servicio de las causas j u s t a s ! - ¡Banque ros y
poderosos ! ¡ Ateos y cris t ianos ! A todos los que
tenéis as iento en el banque te de la v i d a y cubier
tos los cuerpos con ricas telas , los obreros en pa
ro forzoso os hacemos estas p r e g u n t a s : ¿ Habé i s
pensado a lguna vez que h a y miles de cr ia turas
h u m a n a s que, sin más del i to que el de haber na
c ido, no tienen as iento en dicho banque te de la
v ida , ni ha rapos con que cubrir su esquelético
cuerpo? ¿ Q u é son muchos los enfermos tubercu-
. losos por el hambre y la msieria, esj^erando una
cama en un sanator io , s iendo demas i ado t a rde en
cuanto les toca su t u r n o ? Mientras esto ocurre,
¡oh , sarcasmo de la v i d a ! , ga tos y perros son
cr iados a regalo . .Si a esto no se pone remedio
inmedia to por medio del t r aba jo m a n u a l o inte
lectual y asi.stencia a los enfermos, la pa labra
h u m a n i d a d en muchos labios será b lasfemia .—
.. « U n grupo de obreros en paro forzoso»-
lElL T A \ l B A \ C O Es te veneno es el más perjudicial para la sa
lud .
Deber ía .ser uno de los deberes de cualquier E s
t a d o civil izado, hacer que todos los menores, en
la escuela, fueran conociendo los efectos morta
les de este terrible veneno, que const i tuye la ma
yor amenaza pa ra la soc iedad, de las d rogas pro
h ib idas , como, por ejemplo, el opio, lo es más el
tabaco por ser generalmente más u sado .
Por cada víct ima de opio h a y probablemente
más de i .ooo víct imas del t abaco . E s t e causa hi
pertrofia del corazón, degeneración gras icn ta en
el mismo ó rgano , palpi taciones y ca tar ro de los
bronquios .
Cont r ibuye a la parálisis de las piernas , debi
l idad de la vista, de t e rminando a lgunas veces la
ceguera- E m b o t a los .sentidos del o ído , gusto y
o l fa to . Produce el cáncer de los labios y una de
las causas que más cont r ibuye a la impotencia en
los hombres . E n vista de esto, cuando las mu
jeres encorajan a los mar idos pa ra fumar , no sa
ben lo que hacen.
E l Dr . R. d i c e : E l t abaco , aunque sea usa
do con moderac ión , produce disi^epsia, dolores
de cabeza, temblores y vért igos.
L a nicot ina es uno de los mejores amigos de
los médicos . Como que éstos viven de las enfer
m e d a d e s , no pueden tener mucho interés én im-
• pedir que los vicios las p roduzcan .
Los esclavos de la nicot ina, se p reparan el te
rreno para la mesa de operaciones y una muerte
p rema tu ra .
D R . A. D .
( 1 4 ) -
Carlos de S e n a García
C A N C I O N E R O N A T U R I S T A
A C E R T I J O
E n el campo bala o m i i j e
y tiene d u r a la testa ;
pa ra comerla la ma tan
y donde se vende apes ta .
Gra to olor, jugosa y dulce
y en los árboles nac ida ,
la legó Dios a los hombres
pa ra conservar su v ida .
C A N T A R E . S
El limón es antiséptico
de la sangre en general
y ocupa un al to pe ldaño
de nuestra escala frutal .
L a naran ja , dulce y rica,
muchas v i taminas tiene ;
comiendo muchas na ran jas
la v ida el hombre sostiene.
Si. respiramos m u y h o n d o ,
comemos fruta m a d u r a ,
con baños de agua , sol y aire
tenemos salud segura.
L a fruta tiene la v ida ,
la carne tiene la muerte ;
comed sólo de una u otra
y veréis cual es más fuerte.
Creedme, señores míos :
es una tr is te ilusión
creer que nos d a n la v ida
el chorizo y el j a m ó n .
Cantares dedicados a los niños de las escuelas
españolas y de las Repúbl icas suramer icanas .
iConfinuaclón)
prefiero a comer de carne
quedarme sin tí, mujer .
L o s niños que comen fruta
son buenos y cariñosos ;
los que de carne se nutren
son fieros y revoltosos-
P o n e d a un n iño pequeño
fruta y carnes a la mesa
y veréis, con sabio inst into,
por cuáles más se interesa.
¡ Pobre h u m a n i d a d doliente !
i Cuán to tiene que sufrir
por sus muchas perversiones
en el m o d o de vivir !
U n i d a de T ie r r a y Sol
la magnét ica corriente,
al hombre que va desnudo
le hace fuerte v resistente. 1
• I L a f ruta dulce y sabrosa
t iene el al iño mejor,
y la carne h a y que al iñarla
pa ra embozar su sabor .
Mucho te quiero, morena ,
pero te debo indicar ,
que en lo que comas de carne
no nos podemos casar .
Si comieras muchas frutas
y no la carne que excita,
como ahora eres algo bella
serás luego más boni ta .
Porque soy vegetar iano
me has n e g a d o tu querer ;
1 US d ientes , comiendo fruta,
p roducen g ra ta impresión,
pero r epugnan c lavados
en un trozo de j amón . { C o m í m i n r á
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- ( 1,5 ) -
COL A\ IBOIR AViN O O ¡JESUÍTAS...!
Escribe si te place y estudia mi razón, mi buen hermano. Toda tu demanda es noble y muy digna de ti, pero tiene el punto flaco que marca tu humildad en esta ocasión, al creerte no bien del todo preparado para contender a fondo si se tercia (como dices) con el fariseo de turno. Cuanto a lo de exponer los argumentos y razones, habré de decirte de una vez para siempre, que la forma es lo de menos para convencer a una mente sana, lo demás es y será siempre la esencia de Verdad contenida en el concepto o afirmación que se escriba o pronuncie. Pues bien, me apresuro a dictarte que está en ti por oral y por escrito, no lo suficiente, sí lo sobrado, para contender no solamente con eJ mfeliz a que mentalmente has aludido, sino con otras fuerzas mentales muchísimo más poderosas de que .dispone la tristemente célebre Compañía...
No te diré pues, i valor! porque a diario demuestras por la tierra si eres o no valiente, pero sí te diré, por lo mucho que te amo: Ni un átomo de segundo ;Vaciles nunca en cumplir con tu deber, y para conseguirlo, vigila incluso a tu modestia, para que no pueda ser nunca la causa de detenerte en tu terráquea labor. En esta ocasión, no cuentes conmigo en el sentido de qué, llegado el caso, te venga a iluminar, (como pedistes) pues debes servirte de lo tuyo y nada más. Al asi actuar, me encontrarás a mí, no a mi dictado ni a mi inspiración, sí a mi amor hacia ti, y a la influencia lógica de nuestra pobre ley de afinidad.
Luego con calma estudia esta mi razón, y ahora déjame que te dicte unos pocos renglones dedicados a la Compañía...
«Mi muy amada y popular Compañía... ayuna de todo contenido de Jesús.
Llevas y llevarás hasta quedar extinta, el extigma
Emilio Zola <el grandioso poeia de las multitudes»
Los grandes
felice fíofjulum, o Áuiso^ niüm itt gloriosiinif si nun^ c^uam infirmaforC onsintitínus tui imfjen'i nutus luitiSft!'^
D A N T E . -De Monnrrluía*
.EL PADRE DE LA LITERATURA ITÁLICA, ANTICLERICAL
anticlericales
«t'/.i/ .s \'¡ai-¡¡!iiv-ll¡ in¿e-niiiiri, ircif, suhliln, ignruní •
'JiLstc-Lili.-i. I^ort. civil. Praefat.)
á
Galileo Galilei
Dante Aligliieri, «El de I Q Cristiandad»
'Vlu.eo Nacional. - Florencia)
N a c i ó en Florencia, (Reproducción de un íreico atri
Nicolás Maquiovelo Retrato de Broncíno. Palacio Doria. Roma
amoral de tu fundador. Un guerrero te fundó y jamás la guerra se alejó de ti. De ahí tu necesidad de combatir siempre contra todo y contra todos. Pretendes mandar desde la penumbra en que tu fingimiento religioso te arrincona, y para conseguirlo, no reparas en medios como bien dijiste y practicastes siempre.
I u origen guerrero te arrastra a Juchar siempre, contra toda forma estatal que dócil no te obedezca. Con el pobrecito prisionero romano a quien siempre agredistes para mandar miicho más que él. Contra tus propios acólitos que no pongan ciegamente su inteligencia y voluntad a tu servicio y nada más, bajo pena, entre muchas variadas que creastes para poder escoger, de incluso como a personalidad humana desaparecer... Siempre tu-vistes y tienes para tu especial servicio, aquella santa inquisición que vas modificando su apariencia de acuerdo con las posibilidades cesáreas contemporáneas. Combates a Jesíis, al proclamarle rey, entre otras fariseaicas liturgias, de la que eres maestra en fundar, para en su nombre reinar tú imponiendo en la realidad de la vida física todo lo contrario de lo que VtTESTRA VICTIMA predicó y practicó, y finalmente añadiré para no cansarte mucho, que también pretendes agredir a Dios, al presentarle cual un ser protervo, fundador de las penas eternas del infierno que sólo existe en la no paz.
Aqui conclusiono, diciéndole Únicamente que puedes ir esgrimiendo por tierra española el instrumento que quieras a tus inconfesables fines, pero toma buena nota te dice mi amor, que si un dia uno de los tuyos envuelco en su soberbia hija del poder colectivo que todos tus instrumentos se figuran poseer, encontró a una casi cieguecita, de la que Dios le plugo servirse para a tu instrumento un algo iluminar, hoy también por la tierra todo instrumento que utilices encontrará en momento de necesidad y en bien de todos como entonces, quien e n . nombre del Dios no protervo y por lo tanto todo Amor,J le venga a iluminar. i
Quedas avisada pobrisima Compañía... (a pesar de lus incontables millones) pues si rica eres, de muchas cosas de la tierra, todavía no has conseguido atesorar ni un átomo de Paz.»
Gorki el apóstol literario de la Revolución rusa
el a lutor de la mós .gí^eS'^WiJ^^'urQ del catolicismo, <anticleri<:o" V Pagano»
Tolstoi «... fué religioso y anticlerical >
Víctor Hugo el más célebre y fecundo escritor francét
del siglo XIX
(tLa lilesia Catolice ante la crítica en el Pemamiento y en el Artet)
a
t i
:.i
H >.« B
N o fíes en apariencias ,
•porque el aspecto no dice
lo que pasa en las conciencias.
¿ N o has h a l l a d o en tu camino
al cruzar el torbell ino
loco que h a y en las c iudades ,
seres de t o d a s naciones,
y d e t o d a s profesiones,
y de todas las e d a d e s ?
¿ T e has f i jado en su semblante ,
aunque sea un sólo ins tan te?
A l mirar lo, ¿ha s m e d i t a d o ?
U n o aparen ta contento,
o t ro , al revés, el to rmento
en su rostro está g r a b a d o .
¿ Ves , aquel la viejecita,
que lentamente t rans i ta
y la mano va t end iendo ?
Mirar su aspecto, estremece ;
¿ su f r e? , a ti ¿qué te parece? ,
dicen que v ive ' su f r i endo .
Dices t ú : es pobre, es vieja,
va p id i endo ante la reja
de un palacio de r iqueza . . .
N o puede .ser nmy dichosa ;
en su cari ta rugosa
se d ibu ja su tr is teza.
N o es cierto : allá en su a lma
lleva tesoros de calma :
¿ su aspecto no es a g r a d a b l e ?
Su aspecto te ha t ra ic ionado ;
es un d i a m a n t e preciado,
en cascara despreciable.
¿ Y aquel señor que, en un coche,
va p roc lamando el derroche
que hace de sus millones,
y te contempla engre ído ,
con desprecio y complacido,
h u m i l l a n d o corazones?
.Su aspecto, ¿ qué te sugiere ?
T iene casi cuan to quiere,
a j uzga r por su presencia ;
¿ qué me dices ? ¿ H a s leído ?
¿ Crees tú , que has comprendid í j
lo que siente en su opulencia ?
Ya lo creo ; y o presiento
que h a d e sentir g ran contento ;
quién imitarle pudie ra ;
éste debe ser dichoso.;
con ta l lujo esplendoroso,
¿ quién no le quiere y venera ?
N o lo c r e a s ; y o sé cierto,
que t iene un corazón muer to
para el p ró j imo que implora ;
g r a n d e has t ío de la v ida
y conciencia envi lecida ;
éste, no ríe ; éste, l lora.
N o te engañe , pues, el m u n d o ;
sondea , ha s t a lo profundo ;
no fíes en la apar iencia ;
el aspecto , narla dice ;
muchas veces cont radice
lo que pasa en la conciencia.
i
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ii
M.
- ( iB ) -
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Siempre que lo pemi l - A I fi 11 M A ta el es tado del comen- rt L< U U ll O sttl, comer uatura l crudo
Cuaudo t'l e s tado pa to lóg i co n o lo permita , a ñ a d i r un p l a t o pequeño a l d ía de co-, c iuado , con sus tanc ias r igurosamente naturales .
J a m á s coc inar con especies , n i sal d e coc ina (c loruro de sod io) .
En las ensa ladas , crudas , no añadir sal. ni v inagre , y sí acei te d e o l iva , z u m o d e l i m ó n o a m b a s cosas a la vez , si no es q u e se prpíiere comerlas sin a l iño a lguno , por lués natura l .
N o comer pan de c lase a lguna . ( l í l pan "o es una c o m i d a natura l . )
En todo a l i m e n t o coc inado , dar preferencia s iempre al herv ido sobre el fr i to . (El ace i te a l freirse, se transforma en á c i d o perjudicial . )
E n todo herv ido , hacer que los vegeta les a b i o r v a n el agua, pues en el la quedan la
D E N U E S T R A S R E G L .
mayor parte de las benef ic iosas sales de los m i s m o s . Si queda a lguna , bebería antet. o después del p la to herv ido . Es preferible que el herv ido sea l e n t o y corto, con el f in (le que los a l i m e n t o s conserven , lo rmás po.-. s ible de su es tado uatura l .
Desterrar de la cu l inar ia todo a l i m e n t o der ivado de a n i m a l , c o m o huevos , leche y Lodos sus der ivados s iempre noc ivos .
N o beber n u n c a en l a s c o m i d a s , y a las frutas y ensa ladas son r i q u í s i m a s en agua natura l .
Dar preferencia a los p la tos hervidos sólidos , en v e z de los ca ldosos , como i o p a s a diario , e tc . para ev i tar el aguachar (debil i tar) los jugos gás tr icos .
Mast icar y ensa l ivar bien c u a n t o se co ma, para bien digerir .
N o comer j a m á s bajo la impres ión de
F I J cualquier causa de depresión moral , y KÍ s iempre que se pueda
al aire l ibre, y en p lena tranqui l idad f ís ica y moral ,
Al comer, no l legar nunca a la hartura, es preferible quedarse con un algo de apet i t o . Huir s iempre de sent irse en el estóm a g o la sensac ión de p len i tud , que es dilatac ión .
E m p e z a r s iempre toda comida por fruta o ensa lada , es to es, crudo natura l .
Todas nuestras reglas se concre tan en «Comer para vivirn, c o m i e n d o al efecto poco y natura l , en vez de «Vivir para comer», prac t i cando la g u l a desenfrenada en cant i dad y ca l idad , como hace t o d a v í a cas i toda la h u m a n i d a d .
En suces ivos números de Í M A C K O C O S M O iremos razonando al a lcance de todos , el por qué de nues tras reglas eu cu l inar ia natura l .
1^ U lE § T IR O S M E 1^ U S Somos mucnos ya los que solamente hacemos dos co
midas al dia debidamente separadas, para dar descanso al aparato digestivo, no al estómago solamente como muchos se figuran, sino a todos los numerosos órganos que intervienen en la delicada e importantísima función digestiva. Aquellos de nosotros que por la fuerza mayor de tener que entrar al trabajo en hora temprana se ven obligados a realizar la primera comida temprano también, realizan una tercera por la noche, pero a base únicamente de fruta sola y poca. A continuación detallamos un menú, advirtiendo que nosotros, invariablemente, siempre empezamos las comidas por fruta o ensalada cruda, y las terminamos también siempre con alimento crudo completamente natural.
PRIMERA CXDMIDA
Fruta la que más apetezca al mirarla, manzanas, peras, naranjas, mandarinas, plátanos, en esta época del año, dando la preferencia muchísimos de nosotros a la naranja, mandarina, manzana, plátano y pera, para establecer algún orden de prelación y teniendo en cuenta las condiciones detergentes, oxidantes, energéticas y por lo tanto alimenticias y curativas en general. A seguido, alguna fruta seca oleaginosa, como almendras, nueces, avellanas, piñones, cacahuetes, y coco o coquitos del
' Brasil, también conocidos por muchos por castañas americanas; dando preferencia siempre a los tres primeros frutos, y desde luego comiendo muy poca cantidad (5 ó 6 piezas) y masticándolas hasta que queden en la boca transformadas en algo asi como una papilla, dado lo que cuestan de digerir y por lo tanto para bien asimilar el gran caudal de calorías que producán. Otros aña-
- ( I 9 ) _
den un vaso de cafe malta, siempre sin azúcar, y algunos añadiéndole una muy poca cantidad de miel.
Otrc>, de los que todavía no han dejado por completo el pan, toman un pequeño pan integral, cortado por la mitad, y aunado con aceite de ohva y jugo de tomate, y algunos pedazos del mismo extendidos por sobre el pan, y desde luego no añadiéndole la mortífera sal.
Con todo lo dicho se pueden combinar muchas primeras comidas del dia, quedando satisfechos, pero no hartos se debe procurar.
SEGUNÜA COmDA
Ün plato abundante de ensalada cruda y solamente aliñada con zumo de limón, aceite de oliva, o ambas cosas a la vez (siempre sin sal ni vinagre) en el que se debe procurar que jamás falte la lechuga, escarola, apto, tomate, zanahoria tierna, rábanos, cosas todas que en más o en menos se puede encontrar todo el año; además, siempre que se pueda, berros, pimiento, diente de león, hinojo tierno y hojas de col.
Cuando se vaya ya por el medio plato o cosa asi, puede empezarse a comer, mezclándolo, esto es, alter-ñáiidolo, un plato de hervido, los que no son crudívoros todavía del todo en su yantar.
Brecolera con arroz. — Se tendrá preparada la bre:o-lera, cortada a pequeños trozos, junto con las hojas tiernas de la m.isma. En cazuela de barro, se prepara aceite
• de oliva, mejor sin refinar, ajo, cebolla y tomate previamente trinchados, añadiéndose agua fría en aquella cantidad que sea menester para cubrir el todo. Se pondrá a la: lumbre hasta conseguir hierva el agua, echando entonces la brecolera, la cual se meneará suavemnte para evitar se disgregue. Cuando el conjunto haya llegado en el hervir a la mitad de cocción de la brecolera, se le añadirá el arroz y continuará meneando el conjunto con urecaucióii hasta alcanzar el punto de sazón del arroz hervido. Siempre que se pueda se' tendrá tapada la cazuela, y desde luego tener bien presente, que hay que abstenerse en absoluto de poner sal, ni ninguna otra clase de condimento, como especfes, etc.
Se trata de un plato de fácil digestión, agradable al palador y en absoluto vegetariano.
TERCERA COMIDA
Para los que se ven precisados a verificarla, únicamente ¡XKirán comer un par de frutas de su predilección.
Y dejando a nuestros lectores, muchos de ellos confusos con el estudio de nuestra manera de comer y cocinar, les deseamos obtengan buen resultado en sus estudios, o sea qué sepan decidirse a romper moldes y sentencias naturistas por científicas que se puedan anunciar, para refugiarse sencillamente en io más verdadero, que habrá de ser siempre lo m á s natural.
SEMI-EPICURO
¡Atención! Aspirantes a naturistas, incluso los que yá naturistas se figuren ser. Jamás introducir en vuestro cuerpo, substancias que no sean naturales de verdad. Apartaos de todo pretendido médico o instructor naturista que con ei pretexto de curaros os recete o aconseje el consumo de "productos naturistas", que se expenden en las llamadas "casas de regímenes curativos naturistas" y demás explotadores y criminales embustes, hoy tan en uso.—¡MACROCOSMO.
P a l a b r a s d e K r i s h n a m u r t i « N o s o y u n D i o s , soy tan sólo el predicador
de un evangel io nuevo. Mi doctr ina es amplia y
enseña a vivir plenamente^ noblemente y en be
lleza. N o se debe despreciar la v ida , sino mag
nificarla, esforzándose cada cual por vivir en el
nivel más alto de su pensamiento y de su cora
zón. Así , únicamente , es d a d o hal lar la d icha.
«La fel icidad an t igua es el fin hacia el cual
t ienden las aspiraciones h u m a n a s . Ese fin todos
lo persiguen ; yo lo he a lcanzado . L a fel icidad es
el renunciamiento a nues t ra propia personal idad ,
es la perfecta armonía de los tres elementos que
in tegran el ser h u m a n o : el cuerpo, la emoción y
el espíritu- Euera de es to , t odo es v a n i d a d .
)>Debe serse como la flor que d a su a roma ai
aire de la m a ñ a n a . E l l a no sabe n a d a de quien
pasa jun to a ella, y su perfume es t an to para los
ahi tos , o que no tienen aspiraciones o que igno
ran las delicias del a roma y son indi ferentes . La
religión es una sistematización del pensamiento y
para ello cada hombre debe llevar en sí su propia
luz.
')Si cada uno de vosotros encontráis vuestra
propia luz, seréis dueños de vuestro espíritu y os
habréis despo jado de las t r abas que impone t oda
creencia recibida sin discernimiento. L a v ida es
libre. Yo no t ra to de p ropaga r n i n g u n a rehgión
nueva.
))No soy un conquis tador de conciencias. No
impongo normas ni leyes a mis discípulos, no
quiero tener a mi l ado sino espíri tus y corazones
libres.»
BUEN OJO CLÍNICO
. ^ I El doctor. — ¡Pero, hombre; hace tres meses que le es
toy recetando para la ictericia, y hoy me sale usted con que es japonés!
- ( 2 0 ) -
IPUJlBILIICACIIO'i lES QUE IE§ SAl^O PllYUJILGAlRt
ElL IPOIKI W É O E 1LA\ yilOAX I X
R E S U M E N Y C O N C L U S I Ó N
E n resumen, los principios que resultan del
Nuevo Espl r i tua l i smo, principos enseñados por los
espír i tus desencarnados , que están en mucha me
jor situación que nosotros para discernir la ver
d a d , son los s igu ien tes :
«Exis tenc ia de Dios , inteligencia directora , ley j viva, a lma del universo, u n i d a d suprema a d o n d e
van a parar y armonizarse t odas las relaciones,
foco inmenso de las perfecciones, del cual irra
dian y se de r r aman por el inf ini to t o d a s las po
tencias mora l e s : Jus t ic ia , Sab idur í a , A m o r ! . . .
" I n m o r a l i d a d del a lma, esencia espiri tual que
contiene en germen todas las facul tades y t odas
las potencias, es tando des t i nada a desarrol lar las
por medio de sus t rabajos encarnándose én los
inundes mater ia les , e levándose por medio de las
v idas sucesivas e innumerables , de g r a d o en gra
do , desde las formas inferiores y rud imenta r i a s
ha s t a la perfección en la pleni tud de la existencia.
"Comunión de los vivos y de los muertos, ac
ción recíproca de los unos sobra los o t r o s ; perma
nencia d e relaciones entre los dos m u n d o s . Soli
d a r i d a d d e t odos los seres, idént icos en su or igen
y en sus fines, d i s t in tos únicamente por su si tua
ción t rans i tor ia , los unos en el e s t ado de espír i tus ,
libres en el espacio ; los otros revest idos de una
envoltui^a precederá , pero p a s a n d o al)ternal;iva-
mente de un e s t ado a otro , no s iendo la muer te
mas que un t iempo de descanso entre dos existen
cias terrestres .
))Progreso inf ini to . Jus t ic ia E t e rna , Sanción"
moral . E l a lma, libre en sus actos y responsable,
crea ella misma su porvenir . Según su es t ado mo
ral, los fluidos groseros o sutiles que componen
su periespíri tu y que h a a t r a í d o a sí por sus cos
tumbres y sus tendenc ias , esos f luidos, somet idos
a la ley universal de atracción y de g r a v e d a d , la
a r r a s t r an hacia los globos inferiores, hac ia los
m u n d o s de dolor d o n d e padece , expía , red ime lo
p a s a d o o bien la l levan a las esferas felices, d o n d e
la mate r ia t iene menos imperio y re ina la d icha y
- ( 2 1 , ) -
la a rmonía . E l a lma, en su v ida superior y per
fecta, colabora con Dios , forma los m u n d o s , di
rige sus evoluciones, vela por el progreso de las
h u m a n i d a d e s y el cumplimiento de las leyes eter
nas)). Ta les son las doct r inas que el Espi r i tua l i smo ex
perimental enseña a los pueblos de la t ierra. N o
son ot ras que las del Cr is t ianismo primit ivo, des
po jado de las formas de un culto mater ia l , libre
de d o g m a s , de falsas interpretaciones y de errores
bajo los cuales han encubierto los hombres la fi
l o s o f í a - d e Cristo des f igu rándo la por completo-
L a nueva doct r ina , al revelar la existencia de
un m u n d o oculto e invisible, t a n real y t an vivo
como el nues t ro , abré al iJtnsaniiento h u m a n o ho
rizontes ante jos cuales éste se' det iene aún, sobre
cogido y des lumbrado . Más las relaciones que esta
revelación facilita entre los muertos y nosotros ,
los consuelos, los al ientos que de ella emanan , la
a legría de volver a encont ra r a - todos aquellos que
creímos perd idos para siempre y recibir de ellos
las enseñanzas supremas , t odo esto const i tuye un
conjunto de fuerzas nuevas incalculables, y de re-
cur.sos morales que el hombre no puede desconocer
o desdeñar sin peligro para él.
.Sin embargo , a pesar del g ran valor de esta doc
t r ina , el hombre del siglo, p rofundamente escépti-
co, a l e t a rgado en sus preocupaciones, no hubiera
hecho al to en ella si los hechos no hubiesen venido
a apoyar l a . P a r a impresionar al espíritu humano ,
superficial e indiferente, se necesi taban mani fes ta
ciones materiales , ru idosas . Por esto se pusieron
en niovimiento muebles de t o d a s formas, resona
ron en las paredes golpes sonoros, cuerpos pesados
var iaron de lugar con t ra r i ando las leyes físicas
conocidas : mas después de esta primera fase gro
sera, los fenómenos fueron cada vez más inteli
gentes . L os hechos del o rden psíquico (del gr iego
«psychéx , a lma) , sucedieron a las manifes tac io
nes físicas ; médiums escribientes, o radores , so
námbulos , cu randeros , se revelaron recibiendo me
cánica o in tu i t ivamente inspiraciones cuya causa
es taba fuera de ellos, produjéronse apariciones vi^
sibles y tangib les , y la rea l idad de la existencia
de los espír i tus llegó a ser incontestable pa ra to
dos los observadores a quienes no cegaba un pro
pósito de l iberado .
D e es ta manera se presenta a la h u m a n i d a d la
nueva creencia, a p o y á n d o s e por una par te en las
t radic iones del pasado , en la universa l idad de los
principios que se encuentran en el origen de todas
las regiones y en el mayor número de filosofías ;
y por ot ra , en innumerables test imonios psicoló
gicos y en hechos observados en todos los puntos
del globo por hombres de t odas condiciones.
Y, cosa notable, esta ciencia, es ta filosofía nue
va, sencilla, accesible a todos , sin apa ra to , sin
culto exterior, esta ciencia llega a la hora precisa
en que las an t iguas creencias se debi l i tan y se des
ploman, en que el sensualismo se ext iende como
una inmensa l laga, en que las costumbres se co
rrompen, los lazos sociales se af lo jan, en que el
viejo m u n d o vaga a la ventura , sin ideal , sin
freno, sm ley moral , como un navio desprovisto
de brújula flota a merced de los vientos.
T o d o hombre que observa y reflexiona no pue
de ignorar que la sociedad moderna atraviesa por
una crisis formidable . U n a ¡profunda descom)3osi-
ción la roe sordamente . E l afán del lucro, el de- '
seo de goces son cada d ía s más violentos y más
ard ientes . Se quiere poseer a cualquier precio. T o
dos los medios son buenos para adqui r i r el bienes
tar y la fortuna, único fin que se juzga d i g n o de
la v ida . Semejantes aspiraciones no pueden pro
ducir más que dos consecuencias : el egoísmo des
a p i a d a d o de los dichos, el od io y la desespera
ción de los i n fo r tunados . L a situación de los pe
queños y de los humi ldes es dolorosa, y , con so
b r a d a frecuencia, sumidos éstos en una obscuri
d a d moral d o n d e no ]uce ni un consuelo, buscan
en el suicidio término a sus males- Por una pro
gresión g radua l , el número de suicidios que en
F ranc ia era de 1500 se ha e levado a 7.000 en 1883.
E l espectáculo de las des igua ldades sociales, de
los sufr imientos de los unos comparados a los apa
rentes goces, a las sat isfacciones sociales, a la in
diferencia de los otros, at iza en el corazón de los
deshereda.dos un a rd ien te frjco de od io . La rei
vindicación de los bienes materiales se a f i rma 3'a.
Que se cuenten, se organicen 3' se levanten las pro
fundas niasas, 3' el viejo m u n d o puede verse sa
cud ido por espantosas convulsiones.
L a ciencia es impotente para conjurar el mal ,
para levantar los caracteres, pa ra curar las he r idas
de los combat ientes de la v ida . E n rea l idad , ape
nas h a y en nues t ra época más que ciencias espe
ciales en ciertos puntos de la natura leza , reunien-.
do hechos 3' p re sen tando al espíri tu h u m a n o una
( 22 ) -
suma de conocimientos sobre el asunto que les es
propio. Así es cómo las ciencias físicas se han en
riquecido prodig iosamente de medio siglo a esta
parte, pero esas construcciones dispersas carecen
de conexión, de u n i d a d , de armonía . L a ciencia
uiás excelente, la que de la serie de los hechos se
remonte a la causa que los produce, la que debe
t rabar , unir esas ciencias diversas en una g r a n d e
.V magní f ica síntesis, hacer brotar una compren
sión general de la vida, fijar nuestros dest inos,
presentar una le}' moral , una base de mejoramien
to social, es ta ciencia universal, indispensable, no
existe aún .
Si las religiones agonizan, ,si la fe an t igua se
"Hiere, si la ciencia es impotente para da r al hom
bre el ideal necesario, para regular su marcha y
"lejorar las sociedades , ¿ habrá que desesperar de
todo ?
N o , porque una doctr ina de paz, de fraterni
d a d y de progreso se levanta sobre este m u n d o
revuelto, viene a apaciguar los odios salvajes, a
éahnar las pasiones, a enseñar a todos la soli
d a r i d a d , el perdón y la b o n d a d .
. Ofrece a la ciencia la síntesis esperada sin la
cual permanecería estéril para siempre. T r i u n f a
de la nnierte, y más allá de esta v ida de pruebas :
y de males, abre al espíritu las perspectivas ra
diantes de un progreso sin límites en la inmorta
l i dad .
A todos d i c e : Venid a mí, yo os reanimaré,
os consolaré ; os haré la v ida más gra ta , el valor
y la paciencia os serán más fáciles, más lleva
deras las pruebas . I luminaré con fúlgido rayo de
luz vuestro obscuro y tor tuoso camino. A los que
sufren, d o y la esperanza, a los que buscan, do ) '
c l a r idad , a los que d u d a n y desesperan, la cer
t idumbre y la fe-
A. todos d i ce : Sed hermanos , a y u d a o s , soste
neos en vuestra marcha colectiva. Vues t ro objeto
está más allá de esta v ida mater ia l y t rans i tor ia ;
está en el porvenir espir i tual que os reunirá a to
dos como a miembros de una sola famil ia , al
abr igo de las penas , de las neces idades , de los
males sin cuento. Merecedlo, pues, por vuestros
t raba jos y vuestros e s f u e r z o s ! . . . .
L a h u m a n i d a d se levantará g r a n d e y fuerte el
d ía que esta doctr ina , manan t ia l infini to de con
suelo, sea con iprend ida y acep tada . E n ese d í a
se ex t ingu i rán la env id ia y el od io en el corazón
de los pequeños ; y el poderoso, sabiendo que ha
sido débil , sabiendo que su riqueza no es más que
un préstamo temporal , será más car i ta t ivo , más
afectuoso para con sus hermanos desgrac iados . L a
ciencia comple tada y fecundada por la nueva fi
losofía, ahuj 'entará a su paso las supersticiones y
las t inieblas. Ya no habrá ateos ni escépticos. U n a
fe sencilla, amplia , fraternal se ex tenderá por las
naciones poniendo fin a sus resentimientos y a sus
p ro fundas r iva l idades . Libre la t ierra de las pla
gas que la devoran y pros iguiendo su ascensión
moral , se elevará ' un g r a d o más en la escala de
los mundos .
P R O F E S I Ó N M O R A L D E C H . F A Ü V E T Y
Af i rmo el D E R E C H O .
Confieso el D E B E R .
Quiero la JUSTICIA y la FRATERNIDAD HUMANA.
Creo en la SOLIDARIDAD UNIVERSAL.
Aspiro a la PERFECCIÓN.
D E R E C H O — D o t a d o de conciencia y razón, sien
do , de consiguiente, responsable de tus actos, tie- .
nes el derecho y el deber de gobernar te a tí mis
mo en t o d a s las esferas de tu ac t iv idad . Manten
tu derecho siempre que no per judique el derecho
ajeno. ,—Respétate, a fin de que los demás te res
pe ten .—Cul t iva tus facultades, desarrol la tus fuer
zas, cu ida tu sa lud , evita t o d a mancha , ap rende
a defender tu existencia y a proteger tu l iber tad . .
A m a la v ida que has recibido, ]3orque si no de
pende siempre de tí que sea feliz, depende de
tí que sea útil pa ra los demás y buena pa ra tu
ade lan tamien to . N o temas a la muerte , que no
es más que una renovación de fuerzas y una evo
lución necesaria para el ]3rogreso y el e n g r a n d e
cimiento de los seres.
D E B E R . ; — N o olvides que el que desconoce su
deber compromete su derecho, pues el derecho y
el deber son correlativos y no se a f i rman el uno
sin el o t ro . Sométete a la ley, fuente de i g u a l d a d
social, y rechaza cualquier privi legio aún c u a n d o
te favorezca .—Cumple tus promesas , cultiva la i
v e r d a d , no re tengas j a m á s lo que pertenezca a ;
o t ro .—Devuelve a tus pad re s t odo lo que has rec i - '
b ido de ellos, hónrales con tu buena conduc ta j
cons tante , y esté siempre tu respeto a la a l tu ra d e l
su c a r i ñ o . — T r a n s m i t e tu pa t r imonio a tus h i jos '
si no se han m o s t r a d o ind ignos de ello, ñaas no
. - C 23 ) -
les sacrif iques nunca al interés socia l .—Abstente
de la ocios idad como de un robo .—Si amontonas
r iquezas, piensa en lo que han cos tado , y conside
r ándo t e como simple deposi tar io , haz que sirvan
para efectuar el t r aba jo , aliviar la desgrac ia y pa
ra ext ingui r la miseria.
J U S T I C I A — P r a c t i c a la just ic ia , no tan sólo no
hac iendo j a m á s a los otros lo que no quisieras
pa ra t í , s ino t o m a n d o la iniciat iva del bien y lu
c h a n d o cont ra la i n iqu idad , d o n d e quiera que la
encuent res .—No condenes nunca sin apelación y
sin de jar una puer ta abier ta a la enmienda , al
ar repent imiento y a la rehabi l i tación. E l sentimien
to religioso es incompat ib le con el infierno eterno,
y la conciencia de la h u m a n i d a d regenerada por
el amor al p ró j imo no a d m i t e pena sin remisión.
FRATERNIDAD H U M A N A . — T r a t a a tu prójimo co
mo a ti m i s m o . — P e r d o n a las injurias y devuelve
bien por mal siempre que el cu idado de tu d ign i
d a d personal te lo pe rmi ta .—Sirve fielmente a tu
pa t r ia , y está siempre dispuesto a morir por ella ;
pero no la separes nunca en tu corazón de esa pa
t r ia más g r a n d e que tiene por nombre H u m a n i
d a d . — N o te alejes voluntar iamente de la socie
d a d d e los hombres ; no te aisles de tus hermanos
ni los aisles los unos de los o t r o s : N o h a y pro
greso p a r a el hombre sólo.—^Acuérdate que a las
luchas sos tenidas , a las penas suf r idas por espa
cio d e t an tos siglos por las generaciones que te
han p reced ido , debes t o d o s los beneficios d e que
d i s f ru tas ; piensa que asoc iando tus esfuerzos a
los d e tus contemporáneos prepararás una suerte
mejor a los que vengan después de tí.^—Créate
t emprano por med io del mat r imonio , una esfera
famil iar de la que estén des te r rados el egoísmo
que es el peor de todos los vicios, la envid ia , el
juego , la pereza, la ira, el l ibert inaje, la intem
perancia, el dis imulo y la men t i r a .—Esposos , no
estéis sólo un idos por la carne ; es tadio también
por el espíritu y el corazón como si fuerais una
sola a lma. '—Procurad merecer siempre vuestra
mu tua est imación, y ho t engá i s j a m á s motivo de
sonrojaros delante de vuestros hi jos.
SOLIDARIDAD U N I V E R S . A L . — E n tus esfuerzos ha
cia el progreso aspi ra a t odo lo que está ar r iba
y t iende la m a n o a todo , lo que está a b a j o . — Sé
bueno y compasivo pa ra con los animales , pues
son sensibles como t ú — N o disfrutes de más pla
ceres que de los que no hacen llorar a n a d i e . —
A m a a la natura leza , respeta sus leyes y no la
mandes más que obedec iéndo la .—No olvides que
si la t ierra ha s ido d a d a a los hombres , es para
que todos t engan asiento en el banque te de la v ida ,
y que ha l l ando en ella, grac ias a la instrucción a
que todos tienen igual derecho, y con auxil io del
t raba jo co t id iano a que deben todos igualmente
ent regarse , su par te de luz y d e l iberta, h a g a n rei
nar el orden , la paz, la equ idad , y la a rmonía .
Rea l izando así el reino de Dios en nuestro do
minio terrestre, pod remos l lamarnos colaborado
res de la o b r a d iv ina y nos será concedido elevar
nos progres ivamente hacia el Ser perfecto cuyo in
agotable ideal lleva en sí c a d a uno de nosotros .
F I N
R E S U M E N de historia religiosa para la Enseñanza laica, en forma d e diálogo y de catecismo, por F. H . L .
(Continuación)
E E C C I O N XEi
¿ P e r o n o h u b o n i n g u n a e s c u e l a a n t e s d e l C r i s
t i a n i s m o q u e c o n o c i e r a q u e l a T i e r r a e r a r e d o n
d a ? — Sí, s eñor ; esto y a lo conocieron y ense
ñaron los p i tagór icos , ¡pero con la ven ida del
Cr is t ian ismo se paral izó el e s tud io de la Ciencia,
y poco a poco se fueron o lv idando sus enseñan
zas al considerar las como g r a n d e s herej ías cris
t i anas .
l Q u i é n , d e s p u é s d e l a s e n s e ñ a n z a s p i t a g ó r i c a s ,
p u b l i c ó u n l i b r o d o n d e d e c i a q u e l a T i e r r a e r a
r e d o n d a y g i r a b a a l r e d e d o r d e l S o l ? — E l mon
je polaco Copérnico, pero no se atrevió a publi
carlo has ta cuarenta años después de haberlo es
cri to, cuando y a es taba muy anciano y mori
b u n d o .
¿ P o r q u é t o m ó t a l e s m e d i d a s C o p é r n i c o ? —
P a r a defender su v ida , al tener g r a n d e s temores
de que lo ma ta r í an por orden de la inquisición,
al considerar sus escritos como g randes herejías
catól icas.
- ( 24 ) -
L E C C I Ó N XI Í
D e s p u é s d e C o p é n á c o , ¿ g u i e n a f i r m ó q u e l a
T i e r r a e r a r e d o n d a y g i r a b a a l r e d e d o r d e l S o l ?
— O t r o monje i tal iano, l l amado Giordano Bru
no, que se atrevió a decir que Copérnico tenía
razón, pero fué quemado \dvo por m a n d a t o de
la inquicición como hereje.
¿ 1' no p o d i o h a b e r s a l v a d o su v i d a 6 i o r d a n o
B r u n o ? — Sí, señor, con sólo haberse re t rac tado
de lo que decía, pero prefirió morir quemado
para i luminar con su muerte al Mundo , d a n d o
su generosa vida, como un márt i r , como un sa
bio, y como un santo .
i Q u é s u c e d i ó c i n c o añ-os m á s t a r d e d e l a m u e r -
' e d e G i o r d a n o B r u n o ? — Que después de ha-
her inventado Galileo el pr imer anteojo as t ronó
mico, y comprobar que la T ie r ra era r edonda y
se movía, fué reducido a prisión, y ca rgado de
cadenas le condujeron a Roma, d o n d e le forma
ron un proceso y amenazaron quemarlo vivo co
mo a Gio rdano Bruno. Mas, fa l tándole la juven
tud y el valor de este úl t imo, el anciano ilustre
prefirió para salvarse de la hoguera desdecirse
'le sus teorías , pero no sin dejar de a g r e g a r :
"Pero se mueve».
L E C C I Ó N X I I I
¿ Q u é d i c e el e x t r a c t o d e l p r o c e s o d e G a l i l e o ?
— " H a s ido denunc iado por el San to Of ic io :
"IVjrque sostenía como verdadera una doctr ina
qne muchos p r o p a g a n , a s abe r : «que el Sol per
manece en el centro del m u n d o y que la T ie r ra
tiene un movimiento d iu rno .»
• «'Según la orden del papa y de los cardenales ,
los teólogos encargados d e . e s t a misión han cali
f icado tus teorías absu rdas , fa l tas de filosofía y
lierética por ser cont rar ia a la S a g r a d a Escr i
tu ra .»
" H a s dicho que la T ie r ra no es el centro del
n iundo , resu l tando una doc t r ina falsa, cont ra
ria a las s a g r a d a s y d iv inas escri turas.»
« E n consecuencia, declaramos que has incu
r r ido en t o d a s las ¡jenas y censuras impuestas
por los s a g r a d o s cánones contra aquellos que
desobedecen a los decretos p romulgados .»
« D e cuyas censuras nos place absolverte a con
dición de que, con sincero corazón y ve rdade ra
fe, abjures an te nosotros , m a l d i g a s y detestes
dichos errores y herejías, contrar ias a la iglesia católica, apostólica y romana .»
« Y a fin de que tu grave y pernicioso error y tu desobediencia no quede sin c a s t i g o :
»A fin de que en lo sucesivo seas más reservado y sirvas de ejemplo a los demás para c]ue eviten estos delitos :
«Declaramos que, por edicto público, el libru
dt: los «Diálogos)) , de Galileo, queda p roh ib ido .
))Te condenamos a la cárcel o rd inar ia d e este
San to Oficio yjor un t iempo que será l imi tado a
nuestra vo lun tad .
»A t í tulo de penitencia sa ludable , te o r d e n a - ,
mos que recites du ran te tres años, una vez por
semana, los siete salmos de la Peni tencia .
))Reservándonos la facul tad de moderar , cam
biar o remitir todo o par te de las penas o peni
tencias referidas.))
L E C C I Ó N X I V
¿ Q u i é n f u é e l i n v e n t o r d e l a i n q u i s i c i ó n ? —
San to D o m i n g o .
¿ R n q u é c o n c i l i o f u é a p r o b a d a l a i n q u i s i c i ó n ?
•—En el concilio católico de Verona .
¿ y q u é d i c e l a r e l i g i ó n c a t ó l i c a , d e l P a p a c a
t ó l i c o y d e sus c o n c i l i o s ? — Que el P a p a es in
falible o sea que nunca se puede equivocar, y lo
mismo lo a c o r d a d o en sus concilios.
¿ Q u é se p r o p o n í a l a I n q u i s i c i ó n ? — Cas t iga r
a los que fa l taban en a lguna cosa a la religión
Catól ica con penas y to rmentos más o menos vio
lentos, según las fal tas comet idas , y pa ra los de
mayores del i tos , como suponer o afirmar que la
Tierra era r e d o n d a y se movia , pertenecer a o t ras
religiones, negar la validez d e los concilios ca
tólicos, y la v i rg in idad de Mar ía y sus misterios,
etcétera, etcétera, quemar los vivos pa ra salvarles
el a lma, y te rminar en este p lane ta d e una vez
con todos los herejes.
•.P or q u é se l l a m ó t a m b i é n u S a n t a I n q u i s i
c i ó n » ? — Por haber s ido bendec ida por el P a p a .
¿ C u á n d o s o l í a n q u e m a r a l o s c o n d e n a d o s p o r
l a I n q u i s i c i ó n ? — E n los d ías más seña lados
de- las' fiestas catól icas y San tos de Príncipes y
feyes. 1
¿ Q u é h a c i a l a I n q u i s i c i ó n c u a n d o h a b í a n m u
chos h e r e j e s ? — Con t o d a rap idez celebraban
au to de fe, y se cjuemaba a los Herejes en gran
d e s masas . { C o n t i r m a r á )
™ ( SS ) -
E S T U D I O . S o b r e l a N a t u r a l e z a d e l cuer p o . q u e L r ' i s l o r e v i s t i ó en su p a s o p o r este P l a n e t a en su m i s i ó n t e r r e s
t r e , s e g ú n l a s E s c r i t u r a s , l a s O b r a s d e K a r d e c , l a O b r a l l a m a d a d e R u s t a i n g y " L a V i d a de
J e s ú s d i c t a d a p o r el m i s m o " S E G Ú N E L E S P I R I T I S M O
por J. B.
{ C o n t i n u a c i ó n )
E l Poder de la Fuerza t end rá que ceder al P O
D E R de la R A Z Ó N . Los sofismas filosóficos de
los que se creen sabios caerán ante lo sa rgumen-
tos de la razón y de la lógica de la gente humi lde ,
que sin pretensiones de sab idur ía , su elevación
• moral , los [.lone sobre el nivel de l o s - g r a n d e s ,
para que se cumplan las pa labras de Cristo : n E l
que se ensalza .sehá humi l l ado , y el que se hu
milla será ensa lzado» .
D a d a s es tas .sencillas y nial coord inadas ex
plicaciones en t raremos ya a la parte del es tudio
del tema ; jjero hacemos constar que j D e d i m o s la
indulgencia , para la parte mater ia l de la obra ,
pero que reclamamos la just icia en la apreciación
del fondo de la cuestión.
.Sabemos y .tenemos anunc iado la polvoreda
cpie se va a levantar entre los diferentes oposi to
res, y las esperamos con gus to , pues t o d a s sus ra
zones y a rgumentos serán recibidos con a g r a d o ,
porque t odo d a r á más luz a la v e r d a d y mient ras
más enérgicos sean los a taques más l lamarán la
atención de los indiferentes, y más pronto se ex
tenderá la luz.
La imparc ia l idad , la lógica, la razón a p o y a d a s
en la Ciencia y en la Religión serán nues t ras ar
mas de combate, y esperamos que esas mismas
nos sean apl icadas , porque cuando se sale de la
circunspección, es porque se carece de a rgumen
tos sól idos y en ese caso el a tacan te sale venci
d o por sí mismo.
N A T U R A L E Z A D E L C U E R P O D E C R I S T O
S E G Ú N E L E S P I R I T I S M O
PRIMERA PARTE
L A A N U N C I A C I Ó N
T e s t i m o n i o s d e l a B i b l i a . — Zff.v P r o f e c í a s
L a Biblia es el origen d e t o d a Revelación en
tre nosotros, pues si bien es cierto que existen
otros l ibros d e m á s an te r io r idad , c a d a cual t ie
ne su a u t o r i d a d , según las épocas, las circuns
tanc ias , necesidades y objetos de la Revelación.
¿Será suficiente la opinión u opiniones perso
nales pa ra destruir el conjunto de una enseñan
za, que viene g radua lmen te desar ro l lándose >'
ampl iándose por medio de las enseñanzas de Es
píri tus misioneros reconocidos por la genera l idad
en cada época, según las necesidades , cuya armo
nía se nota , a i^esar de las d i s tanc ias que las se
para ? N o ; porque bien se comprende que si hay
misioneros que .se encargan de la enseñanza pa
ra el progreso de la h u m a n i d a d , también hay
otros enca rgados por la Providencia pa ra hacer
que esas enseñanzas no pasen como un torbell ino
sobre esas h u m a n i d a d e s , si no que por medio de
esos ins t rumentos re ta rda ta r ios en el movimiento
progresivo, se o p o n g a n con las ideas an t iguas a
la marcha de las nuevas , precisamente para que
por medio de la lucha cada cosa vaya t o m a n d o
su ve rdadero ]3uesto en el concierto d e . la Crea
ción. L a s ve rdades reveladas , no son acep tadas
por la genera l idad , sino después de un proceso
de evolución con t i nuado por siglos, y es un error
m u y g r a n d e el creer que la V e r d a d , por ser ver
d a d , debe aceptarse a ciegas sin el libre exa
men, aun por los seres más ignoran tes . E l ser
ignoran te acepta lo que se le enseña porque no
está en condiciones de discernir , pero a :poco
que se le inicie en otra itlea más a v a n z a d a deja ,
por razón de su propio libre a lbedr ío , lo ant icua
d o pa ra asimilarse la nueva idea que es un paso
hacia el progreso , y es to , tal vez, no porque se
h a y a i m p r e g n a d o bien la idea, sino porque su
Esp í r i tu ha acep tado la esencia de la enseñanza
que él mismo se encarga de desarro l lar la en su
mente , deduc i endo según su lógica lo que cree
más de acuerdo con su razón.
E l proceso que sigue el espíritu del ser huma
no es sencillo, aunque lento, por su misma idio
sincrasia . Pocos son los que -preguntan o investi
gan , pero la gene ra l idad , escucha a veces sin
da r se cuenta él mismo, pero las ideas que le in-
_ ( 26 ) -
teresaii parece que al pasar jJor sus oídos, h a y
alguien que las recibe y se encarga de retener
las en la mente, iinentras ti<'nr tiempo rlc recoger
otras que vienen a confirmar y fortalecer la an
terior y entonces ya se graba la idea firmemen-
if, y comienza el proceso del discernimiento a se
parar lo erróneo de lo verdadero , en sent ido re
lativo, se ent iende, porque el progreso no se de
tiene, ni en el ind iv iduo , ni en la colectividad,;
podrá tener sus épocas de estacionamiento apa
rente mientras que se af ianza una enseñanza, pe
ro está evolucionando en otro sent ido.
Así pues ha sucedido con la revelac,ión, que
poco a poco ha ido pene t rando en .las in.asas,
éstas con su sencillez han evolucionado más que
los que .se dicen intelectuales, porque éstos llevan
sus ideas preconcebidas, sus ideas recogidas en
otros ambientes menos d ep u rad o s y más inde
pendientes según ellos, las de los maestros de la
escuela sofística que son los que quieren poner
diques ál progreso y sólo se lo ponen ellos mis
mos. Así es la v a n i d a d del ser h u m a n o ; pero
no seguiremos en estos detal les porque más a d e
lante t endremos ocasión de t ra ta r los .
M I S E R I A S DEL A L C O H O L I S M O / ContinuaciónJ por el Prof . A . V .
L A I N F A N C I A
E l ejemplo que reciben los niños d e los p a d r e s
y n i a e s i r o s será la niejor educación para el futuro,
l^ero, ésto, desgrac iadamente , ocurre a la inversa.
Muchas veces deben ser los niños de corta e d a d
quienes l lamarán la atención a sus progenitores,
ya imponiéndose jiara que no marchen de noche
al café, a la t abe rna o a lugares que no son pro
pios de h o m b r e s c a s a d o s . O t ras veces, en los ex
tremos del mal , niños con una precocidad única,
buscan a sus padres y has ta los reprenden porque
ellos malgas ta r el d inero , m a l t r a t a n a su v i a n n t a
o porque llega t a rde a su hogar d o n d e los chi-
cuelos le esperan para que el progenitor cuente
cuenti tos o que les h a g a pasar el ra to alegra con
tándoles cositas de la infancia. Los niños , que
aún no han l legado a contar 5 0 6 años han d a d o
lecciones de moral a sus mismos padres .
Y, en cambio, muchos padres , un gran porcen
taje de ellos, han pr ivado y siguen p r ivando has
ta de lo más elemental en la v ida , como lo es la
educación e instrucción pr imar ia por no tener ni
criterio y menos inteligencia para comprender '
cuán g r a n d e es la existencia de esos seres peque- ;
ños que t o d o lo quieren saber y t odo lo imi tan .
Los niños a esas e d a d e s serán buenos, los con
seguiremos mejores y se ' fnantendrán sanos ^'
fuertes si sus padres no adolecen del defecto de
ser ignorantes y de mantenerse a flote con vicios
que le embotan la poca capac idad intelectual que
poseen, como hombres y como di r igentes del ho
gar . Ocur r i endo lo cont rar io , sentiremos más una
sentencia y un pensamiento de un niño que de un
ser que se embr i aga .
b e b e d o r c o n -
I J n p a d r e i n b é c i l , c o m o m u c h o s , q u e g o z a n a l
e n s e ñ a r a sus p e q u e / l o s h i j o s a q u e sus i n o c e n t e s
l a b i o s se i m p r e g n e n con el t e r r i b l e v e n e n o . . .
N i ñ o : d e n m i c i a a t u p a d r e si es
. m e t u d i n a r i o y c a s t i g a a v u e s t r a m a m i t a . N o v a
y a s a i m i t a r l a p é s i m a o b r a d e q u i e n t e echó a l
m u n d o p o r p u r a Í ( c a s u a l i d a d »
( C o n t i n u a r á )
- ( 27 )
Hemos recibido los dos primeros números de
la revista he rmana uVida Esp i r i t a» , ó rgano en
la prensa del Centro Kardec iano de E s t u d i o s Psi
cológicos, de Valencia .
Coincidentes con el sentir man i f e s t ado en su ar
tículo de presentación y demás t raba jos publica
dos en lo más esencial, no solamente exper imenta
mos una muy viva satisfacción por la aparición
de la fraternal publicación, sí que también pro
metemos a y u d a r l a en todo cuanto de nosotros de
penda , con el fin d e que crezca y se engrandezca
para bien de todos en general y de tan tos y t an tos
seres moradores de la región levant ina , en par t i
cular. ¡ Cuán tas veces hemos recibido car tas de
Valencia y región, p id iéndonos a y u d a y guía en
muchísimos casos que, la revista he rmana y ór
gano corporat ivo que representa, podrá de ahora
en ade lan te a tender !
A par t i r del número próx imo, no haciéndolo en
el presente por exceso de or iginal , publicaremos
a lgo de lo mucho y bueno que contienen los dos
números recibidos de «Vida E s p i r i t a » , cumplien
do así M A C R O C O . S M O una vez más aquel la
de sus práct icas f i jamente anunc iadas de ir di
v u l g a n d o lo que escriban los demás y p u e d a be
neficiar a la h u m a n i d a d .
Al de jar es tablecido el cambio gus tosamente
con la f lamante revista, les decimos sencil lamente
a los buenos hermanos que la ed i tan : ¡ Aden l an -
te ! ¡ Cueste lo que cueste ! Venced todos cuantos
obstáculos se irán p resen tando a vuestra labor y
no dejéis de proseguir la y mejorar la . Pensad siem
pre , como y a bien mani fes tá i s , que Valencia y
región está nm}' necesi tada de una jjublicacion
espiri ta que lo sea en v e r d a d .
((Vitalismo» es el t í tulo de la revista na tur i s ta ,
ó rgano en el es tadio de la prensa, de la « F e d e
ración Na tu r i s t a A r g e n t i n a » . Al recibir la visita
de su número i y una vez enterados de su conte
n ido y propósi tos , no podemos por menos de sen
t irnos g ra t amen te impres ionados . Ya era hora que
ser iamente y con amplia visión, hubiere quienes
intentasen la ve rdade ra unión den t ro del verda
dero na tur i smo.
Más que de ta l la r nuestra impresión sobre di
chos uropósi tos, prefer imos d ivu lgar el art ículo
de presentación de la he rmana revista, con el
contenido del cual nos ha l lamos corñpletamente
de acuerdo . Dice a s í :
V I T A L I S M O vume. a m a r c a r u n a n u e v a e t a p a l i e
p r o g r e s o en l a h i s t o r i a d e l n a t u r i s m o d e n u e s t r o
p a i s y a s e ñ a l a r el r u m b o q u e d e b e s e g u i r l a h u
m a n i d a d si a s p i r a a u n i d e a l d e p e r f e c c i o n a m i e n
t o , si d e s e a s a l v a r s e d e l a t o t a l d e g e n e r a c i ó n h a
c i a l a q u e m a r c h a en a l o c a d a c a r r e r a . T a l es su
p r e t e n s i ó n .
A n u n c i a l a u n i ó n d e l a s f u e r z a s , h a s t a a h o r a
d i s p e r s a s , en u n n ú c l e o e n t u s i a s t a y f u e r t e q u e
h a d e a b r i r s e p a s o a l u m b r a n d o c o m o l u m i n o s a
a n t o r c h a s o b r e el caos en q u e se d e b a t e l a fiuma-
n i d a d , r e u n i e n d o en t o r n o a t o d o s l o s c o r a z o n e s
p l e n o s d e a m o r y a t o d o s l o s c e r e b r o s r e b o s a n t e s
d e i d e a l e s .
S u l a b o r s e r á a r d u a p e r o c o n t i n u a y t e n a z . H a
d e l u c h a r s i n d e s f a l l e c i m i e n t o s p o r l a u n i ó n d e
( 3 8 ) -
t o d o s los i d e a l i s t a s y t r a t a r á d e d i f u n d i r d i g n a -
" l e n t e los p o s t u l a d o s n a t u r i s t a s .
E l n a t u r i s m o no es u n a cuestión d e e s t ó m a g o o ,
d e s a l u d , como creen m u c h o s . S i f u e s e s o l a m e n t e |
ésto, no s e r i a un i d e a l s u b l i m e , sino e s e n c i a l m e n -
l e e g o í s t a .
E l n a t u r i s m o e n c i e r r a en si t o d o s los i d e a l e s d e
r e d e n c i ó n h u m a n a .
E s c i e n c i a y f i l o s o f í a , i n t e l i g e n c i a y s e n t i m i e n
t o , a l e g r í a y f e l i c i d a d .
P a r a ser n a t u r i s t a , es p r e c i s o , a n t e t o d o , sen
tirse d e s b o r d a n t e de a m o r , despojarse en a b s o -
i ' i t o de p r e j u i c i o s , d e s t e r r a r t o d o s los v i c i o s y p r e
f e r i r l l , v i d a .s-ana y s e n c i l l a en p l e n a n a t u r a l e z a .
E o s n a t u r i s t a s son ]prácticos, no c h a r l a t a n e s .
H a c e n l a s cosas s i n p e r d e r t i e m p o y e n e r g í a s en
i n ú t i l e s d i s p u t a s y c o n t r o v e r s i a s ; prt^dican y l u
c h a n con el e j e m p l o . N o d e b e c o n f u n d í r s e l e s con
ios " n a t u r i s t a s de s a l ó n " , c u y o i d e a l i s m o se r e
d u c e a c h a r l a r .sin c o n o c i m i e n t o d e causa p o r q u e
j a m á s h a n t o m a d o un b a ñ o d e s o l , n i h a n p a s a
d o un d í a en p l e n a c o m u n i ó n con l a N a t u r a l e z a .
N a t u r i s m o es a m o r d i n á m i c o , c o n s t r u c t i v o , a n
helo de p e r f e c c i ó n . N o b a s t a a s i m i l a r l o o com
p r e n d e r l o i n t e l e c t u a l m e n t e ; es preciso s e n t i r l o .
y i T . A L l S ñ W , l l e s ' a r á s i e m p r e u n a i r a se d e
a l i e n t o y u n a s a n a a s p i r a c i ó n u n i d o s a l a i n q u i e
tud, que a g i t a a t o d o s los e s t u d i o s o s .
V I T A P J S M O , l l e v a r á en sus p á g i n a s l a p a l a
bra a u t o r i z a d a d e l a c i e n c i a s a n a , no d e l a c i e n -
eia m e r c a n t i l i z a d a , esa c i e n c i a d e l a q u e l i a d i c h o
y-'ells " q u e se pasea h o y en m e d i o d e nuestros
crímenes y d e nuestros d e s ó r d e n e s , como l á m p a
r a s u c i a y m a l o l i e n t e d e a c e i t e en u n a obscura ca-
' ' ' e r n a , en l a c u a l los h o m b r e s d i s p u e s t o s a b a t i r
se y d e s t r o z a r s e m u t u a m e n t e se d i s p u t a n su l u z
v a c i l a n t e , l a s m á s d e l a s veces p a r a que a l u m b r e
a c t o s d e -iñolencia y d e p i l l a j e . "
V I T . ' V L I S M O , es p a r a las a l m a s j ó v e n e s y
f u e r t e s , capaces d e d e s p o j a r s e d e t o d o lo que l i -
n i i t a ; es p a r a los que a s p i r a n u n a h u m a n i d a d
n i e j o r .
y I T . \ T..I S M O , a l e n t r a r en l a a r e n a d e l p e r i o
d i s m o s a l u d a a l a p u b l i c i d a d n a t u r i s t a y a. l a
p r e n s a en g e n e r a l . "
Convencidos de que sobran todos cuantos co
mentar ios pud ié ramos añad i r , nos l imi tamos a
un mucho agradecer y corresponder al fraternal
sa ludo de los na tur i s tas a rgent inos , de jar es a-
blecido el canje muy gus tosamente y ofrecernos
de todo corazón, para t odo aquello que M A C R O
C O S M O pueda ser útil al común fin perseguido.
Uni r , en ve rdad an te Dios , a los espir i t is tas y
na tur i s tas de este pobre m u n d o , nos sabemos de
memoria lo ultradifícil que resulta, pero no acep
tamos que sea imposible en absoluto . A luchar
pues pa ra conseguirlo sin reparar en sacrificios
de clase a lguna , marca el cumplimiento del deber
en los que ya un algo empecemos a sentir el
Idea l . ¡ ¡ Ade lan t e ! !
L a s excursiones d e l C e n á c u l o . — D a r á n comien
zo, este año , con la del lunes d e Pascua , d i a 22
del actual , a la «Fuen te del Pas to r» en « L a F lo
resta» y en 1 d e m a y o (f iesta del t r aba jo) en la
mina de «Can M a g r a » , de Mollet. A m e d i d a
que se vayan celebrando, iremos d a n d o cuenta a
nuestros quer idos lectores, del resul tado y fotos
ob ten idas en sanas y fraternales j i ras a N a t u
raleza.
ft « *
E l d ía 18 de los corrientes, perseverando el Ce
náculo en su práct ica de , t res veces al año , ded i
car su pública sesión al que fué hermano Jesús ,
celebró la a cos tumbrada sesión de jueves san
to ( !) con el fin de que la h u m a n i d a d se vaj-a
d a n d o cuenta de la farsa mercant i l católica.
Dió comienzo la sesión con la lectura de la ora
ción más' a d e c u a d a a la sesión, del libro de ora
ciones d e A l l án -K a rd ec . Segu idamen te nues t ro
he rmano director pronunció una d e sus inspira
das plát icas, que terminó invocando al hermano
director invisible, por si éste creía conveniente ser
él el que invocare en nombre de t odos los presen
tes, a la influencia de Jesús , p a r a por ella una
vez más ser todos i luminados . (E l .salón presenta
ba en este ins tante un lleno de público a rebosar,
a pesar d e no haberse a n u n c i a d o la sesión públi
camente en forma a lguna . )
A continuación se mani fes tó por m e d i u m n i d a d
par lan te el he rmano director invisible, el que des
b o r d a n t e como siempre de V i d a , mani fes tó bre
vemente que no esperasen de él n inguna lección,
pues la Ley hab ía concedido a un gran pecador ,
a l ' h e r m a n o que fuera d e la carne fué h a s t a m u y
poco la inteligencia y vo lun tad m u y desa r ro l l adas
y puestas al servicio del Cenáculo y de su fun
d a d o r , en el sent ido de aniqui lar a los dos sin
- ( 2 9 ) —
reparar en medio a lguno. A ñ a d i ó , que hab iendo
sonado la hora del despertar de tal ve rdugo , que
ría ir p rac t icando su proceso expiatorio, progresi
vo, n ia t i i les tándose a través del propio cuerpo
que l au ta s veces qui.so destruir y ante el audi tor io
(.jue t an to odió y persiguió, para obtener de am
bos si se lo querían conceder, aquel perdón sin el
cuál hoy se as f ix iaba por demás .
.Sin deshacer él t rance medianímico, como anun
ció, pasó a utilizar el cuerpo del médium dicho
111 feliz he rmano .
E n la imposibi l idad de deta l lar t odas sus ma
nifestaciones, ho} ' , por la fal ta de espació, y t am
bién porque habiéndose t o m a d o taquigráf icamen
te (por profesional) t o d a -la par te medianímica de
la sesión, se irá pub l i cando al terminar la ]jubli-
cación en curso actualmente , di remos solamente
que hizo pública confesión de sus jiersecuciones,
de sus od ios , de su arrepent imiento, que pidió
[jerdón a sus ag red idos , que invocó a Dios que
t an to negó y explotó, para pedirle también su
perdón , que invocó a Jesús con el mismo fin, y
c]ue t odo ello lo realizó en plena emot iv idad , con
p ro fundos sollozos y copiosas lágr imas que mu
chísimo impresionaron al aud i to r io .
L ib re de trance el médium y una vez que hubo
r epa rado el cuerpo los es t ragos del dolor físico
que le hizo exteriorizar el ser comunicante , entró
en t rance nuevamente y con gran s u a v i d a d .
Ev iden temen te la influencia de quien Cristo fué
l l amado , utilizó el médium para pronunciar una
de sus magis t ra les a la par que sencillas oracicj-
nes, encaminadas a la exal tación del cumplimien
to del propio d^eber como a principio básico e n i -
defectible para obtener el a lma en la t ierra y
fuera de ella, su progreso. T a m b i é n se dirÍEció
i nnominadamen te a una vo lun tad del Cenáculo
d á n d o l e de su amor y v e r d a d , hac iendo lo propi:)
con el a lma exverdugo , a la que hizo perder su
ac t i tud de absoluta postración de culpable, por
la ac t i tud puramente na tura l por f ra ternal , termi
n a n d o su alocución a ella, denominándo le «ga
leote de mi a m a d í s i m o Cenáculo» que muchís imo
debió conmover al he rmano ser en t rance de arre
pent imiento y quererse y a -^regenerar. T e r m i n ó
d a n d o de su experiencia, amor, luz y verd3 .d a
todos los moradores de la t ierra en general y a
los miembros del Cenáculo en par t icu lar .
E n rea l idad de ve rdad , fué la sesión que así, a
la ligera reseñamos, acontecimiento del que guar
da rán muy vivo recuerdo todos cuantos tuvien-n
la ocasión de asistir. Ev iden temente descontauíos
que cada uno de los numerosos asistentes sacara
de haber as is t ido únicamente aquel fruto que su
g raduac ión a lcanzada le permita sacar, pero co
mo n a d a se pierde en lo creado, todos , absoluta
mente todos , l legará el momento , en carne o fue
ra de ella, que sabrán comprender y agradecer lo
que escucharon.
¡ ; Que .sea Dios Quien premie al hermano Maes
tro, que por serlo crucif icado por la casta fué,
la hermosa y emancipatr iz labor que por una vez
más realizó entre las alas «de su muy a m a d o Ce
náculo aunque para el bien de t o d a la humani
d a d ! !
.Siguen en jjlena ac t iv idad las ve ladas recreati
vas fraternales dominicales (de 9 a 12 noche), ' P ^
festivales de t a rde en el primer d o m i n g o de cada
mes, los sorteos de preciosas y práct icas cestas
co lmadas de frutas (práctica na tur i s ta ) el grupo
coral que va ex tend iendo su repertorio con .sed de
hacerlo cada vez mejor, el g rupo escénico de acto
res y autores del Cenáculo, las de l icadís imas se
siones de viernes, en la Clínica de cura moral del
Cenáculo en bien de muchos, las no menos deli
cad ís imas sesiones del «Grupi to de la P a z » , in
cansable en su especial ac t iv idad , las .sesiones de
miércoles en las que t an to y t an to por varios con
ductos se puede bien es tud ia r a vivir mejor v ida ,
las dominicales doc t r inar ias encaminadas jun to
con las de miércoles y t o d a la obra cenacal, a lle
gar a mejor comprender la V i d a y en su seno, el
cumplimiento del propio deber, la busca y captu
ra del nuevo local social pa ra nuevas implantacio
nes poder realizar, y , f inalmente, el firme prose
guir de A Í A C R O C O S M O que va n a v e g a n d o por
el proceloso mar de la incomprensión que le ro
dea, lo mismo en aparentes calinas, que en tem
pes tad desecha o terrible y devas t ador huracán ,
con t o d a s las velas desp legadas , f lo tando siem
pre en el tope de mesana, sin miedo, aquellos
bander ines que le dicen a la h u m a n i d a d : -
« E l Na tu r i smo es a la salud del cuerpo, lo que
el Esp i r i t i smo al progreso del a lma; . ¡ ¡ ¡Despier
ta,, pues, • cuando quieras, en el seno de tu liber-
tral ! ! !
- ( 30 ) -
de que el pruceso de líi piirificíición no quedara ter iuiuado al 40" d ía , y se necesitaron para elJo dos d í a s rnás : la lengua so despidió al 43" d ía . E s e mismo día apareció un intenso apetito y otra vez un execelente e s t ado físico qut; resultó ser firme.
Y'oT más sorijrendente q u e parezca para los recursos y éxitos c o n u u K s de la- moderna medic ina la curación d e un defecto lan orgánico como lo es la di latación de la aor ta , especialmente tomándose en consideración que el enfermo no dejó su p.esado t raba jo co t id iano cansador jus tamente pa ra el corazón, este caso no permite formular la suposición d e que la d i la tac ión de la ao r t a del paciente fuera sólo imaginar ia , sólo un fenómeno de neurosis, y que los médicos se e n g a ñ a r a n . E l hecbo es que el a y u n o puede , en el t r ans curso de su proceso, corregir t ambién lesiones orgánicas . H e aquí lo que expone en su concienzuda obra (iLes appét i t s et le jeune devan t r b y g i e n e » , p á g . 43, el doctor Roux , sobre los resul tados de su práct ica con el método del doctor Guelpa , el cual consiste en la aplicación del ayuno en pequeños «ijaquetes» de 3 a 5 d í a s en serie, a c o m p a ñ a d o del consumo de agua nnneral p u r g a t i v a ca len tada , a razón d e una botel la por d ía , }' pa ra acelerar los resul tados , del au to-in toxicación adicional por medio d e carne ( ? ! ) -
« L a en fe rmedad de Hodg.son, di la tación de la aor ta . •Aneurisma. . . E l desarrol lo de la en fe rmedad .se detiene inm e d i a t a m e n t e . Se produce una ráp ida 3' firme disminución de la jDresión ar ter ia l . Al pract icarse el examen radiológico, se comprueba que las paredes d e la aor ta se van encogiendo poco a poco has ta su ancho pr imi t ivo . E n correspondencia con eso, aclaran también las in t ransparenc ias patológicas . E l au to r no ha encon t rado casos de cura fraca.sada al practicarse ésta en forma ser ia» .
As í que , el a y u n o cura los te j idos no sólo en su su;)erfi-cie, sino también en su interior . D e las paredes de las a r te r ias ex t rae t odas las células morbosamente fo rmadas y super f inas , y la arteria vuelve a sus dimensiones pr imi t ivas (al t r a t a r se de la di latación de la aor ta) o recupera su elast i c i d a d anter ior (en casos de ar t r i t i s ) .
¡ Con un recurso tan « x t r a o r d i n a r i o entre las manos , cuántos mi lagros puede hacer con sus enfermos un ins t ru ido y ta lentoso médico-práct ico !
40
(le 21 días . E n su opinión es mejor realizar en un ;iño dos o tres ayujios de 21 d ías , que de una vez d(; 30 a 40 d ías . .Sostiene que al cabo de 21 d í a s , la energía vital del o rganismo se debil i ta , y el intercambio de sul)stancias que se observaba antes , cesa bruscamente, y empieza el ago tamiento y el decaimiento de la v i t a l idad . Me quedan has ta el 2 í .° d ía cuatro días más , pero yo seguiré a y u n a n d o has ta cuando pueda . Me parece que seré capaz de prolongar el ayuno durante nmchísimo t iempo. Con tal que no me impida t raba jar .
H e t e rminado mi a y u n o . Resolví obedecerle a usted en todo y continuar un ayuno
has ta el 40." d í a , de ser ello posible. Desde el 20.° has ta el 30." día dé ayuno nh es t ado físico,
en general , siguió s iendo excelente. A veces, cuando me e.s-forzaba nmcho duran te el t rabajo , se apoderaba de nn' una debi l idad ex t raord ina r ia , y yo t omaba varios t ragos de vino blanco. Hac ia el 22." d ía rebajé desde la iniciación del ayuno io '300 Ug. Cont inúo ap l icándome clisteres. Al 25.° d ía , la lengua empezó a despejarse en la parte delantera ; fué po-niémlose rosada , pero en medio , sobre la capa blanca, se no tan chorros de color pardo-amar i l lo . E n t r e el 27." y el 30.° d ías siento un hambre intensa y ¡(vivísima». N o sé por qué, pero tengo ganas de comer cebolla y pescado sa lado . La carne me deja indiferente .
Al 30" d ía noto una disminución del peso a part ir del comienzo del a y u n o de 13,200 kgr . Me examinó el médico búlgaro que antes me hab ía encon t rado la hinchazón del co-razóm ¡ Ahora , p a r a su sorpresa, el corazón es completamente normal ! Espero la purificación de la lengua, pero sufro un í lesengaño, pues pasa el 32" d ía , y el sedimento en la lengua no desaparece. A par t i r del 30".día empezó a segregarse una saliva repugnante , espesa, pegajosa , pa rec ida a espuma. L a escupo a cada ins tan te . Mi esposa está t r i u n f a n d o : en su opinión, me voy convir t iendo i r remediablemente en un ((camello rabioso». Empecé a tomar a g u a de soda y en juagar la boca con [ je rmanganato . Aumen tó el hedor en la boca, y em-(x;zó a empeorar el e s t ado físico general , A la m a ñ a n a me levanté lleno de brío, pero hacia la comida y a n)e siento mal V por la noche expiro completamente , como esos cochinos de goma inflativos que se venden d u r a n t e el carnaval- Li teralmente, no me sostienen las piernas. A part i r del 36" día se
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ponen a doler el jDecho, la g a r g a n t a y las vías respira tor ias . T e n g o el aspecto de un cadáver . Los amigos a f i rman, que en vista de la carestía del entierro, conviene dejar el exper imento. La nmerte es una aventura demas iado costosa pa ra un re fug iado . ¡ P e r o . . . a g u a n t o ! I-a lengua no .se despeja . Las manchas pa rdas jialidecen, se ponen amari l las , pero no desaparecen.
Así llega el 39" d ía . Las fuerzas me han a b a n d o n a d o por completo. Yendo a la mina, me caigo dos veces por el camino. Pero la cabeza está despe jada , no h a y vértigos ; lo único que ocurre es que se doblan las piernas.
Al 40" día sobre la lengua hay todavía el sedimento blanco, en su parte t rasera , y en el mismo chorros amari l los . A par t i r del 36" d ía el hambre ha desaparecido ; todo lo cont r a r i o : la comida me causa repugnancia . Al 40" d ía volví a experimentar un ligero a taque de hambre . .En vista de la extenuación ex t rao rd ina r i a , resolví empezar a comer, A las 7 horas de la noche eché un clister y comí (o bebí) medio plato de j a rabe de una compota de manzanas ; pero éstas no las comí- Al 40" d ía me pesé. Son interesantes los r e su l t ados :
Hac ia principios del a y u n o yo tenía, con una es ta tura del 1,75 cm., un tal le de 102 cin., un pecho de n o cm. y un cuello de 42 cm., un peso de 82*700 kg .
Al cabo de 40 d ías de a y u n o : E l talle, 83 cm. ; el pecho, 101 cm. ; el cuello, 38 cm. ;
el peso, 66 '300 kg . E l total de desminución : Pd talle, I Q cm. ; el pecho, 9 cm. ; el cuello, 4 cm. ; el
l)cso, 16*300 kg . Dé un modo par t icular han ade lgazado las piernas, las
caderas , el pecho, los brazos ; sobre el vientre todav ía qued a b a la grasa subcutánea, de m o d o qué yo habr ía p o d i d o cont inuar el a3'uno, pero du ran te el t rabajo va no me sostenían las piernas , y era necesario te rminar .
Al 2" d í a tomé té con leche y dos veces por d ía sopa de legumbres (vegetar iana) con municiones y una yema d e huevo c ruda . Gal le tas no comí. A la noche evacué el vientre con resul tados escasos : evidentemente , los intestinos se hallan dormidos . D e b i l i d a d .
AI 3.° d ía el e.stado físico excelente. H a m b r e . L a lengua ha q u e d a d o l impia, T o m é dos vasos de café con leche, dos
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gal le tas y un pequeño pedazo de jamón sin tocino, y un plato de caldo de ga l l ina .
' Al 4.° d ía e l e s t ó m a g o digiere excelentemente, pero los intest inos no funcionan. Me veo ob l igado a echar un clister. C o m í : caldo con huevo, ga l le tas , compota y j amón , pero todo en pequeñas c a n t i d a d e s .
Al 5." d ía me puse a comerlo t odo (pero no carne)- A par t i r de entonces empezó a desarrol larse r áp idamen te el apeti to se inició el restablecimiento de las fuerzas. Los intestinos cont inúan funcionando flojamente (anemia) . Me dirigí a . i m médico local ruso que también conocía la hinchazón de mi corazón y de mi aor ta y no s impat izaba con nn ¡proyecto de ayunar . Me sometió a un cu idadoso e;xainen y al final reconoció que mi corazón hab ía a d q u i r i d o sus dimensiones normales y y a no padecía de go rdu ra . «Pero , dice, el éxi to se explica por su fuerte o rgan i smo , cualquier otro correría el riesgo de morir» .
.Sin embargo . . . a mí me parece que no es así. E l hambre no puede traerle a nad ie más que u t i l idad .
E s t a es ahora mi convicción p ro funda . E l médico me dió no .sé qué gotas para los intest inos ; las tomé duran te varios d ías , y ahora todo va bien.
Ya han t ranscurr ido .tres semanas desde que 3 0 terminé el ayuno . Me siento hombre joven, capaz de correr y de saltar . Desapareció mi somnolencia y f lojedad. Estoja lleno de bríos, fresco y ap to para el trabajo- N o como carne. Como legumbres, leche, arroz y f ru tas .
E n los primeros 11 d ías aumenté m u c h o : ocho kilos. .Me asusté y me refrené. Ahora man tengo el peso de 70 kilos.
De manera que le agradezco a tisted de todo corazón, quer ido Alexey Alexéievich.
E n este caso, el o rgan i smo del enfermo se ha l l aba m u y sucio, y por lo t an to , en los primeros d ías de ayuno , se libró de golpe una can t idad excesiva de residuos que no pudieron ser e l iminados por el o rgan i smo y lo estuvieron envenenando temporalmente . H a c i a el sexto d ía , el o rgan i smo logró despacharlos, y se estableció un «excelente e s t ado físico».
L a misma suciedad del o rgan i smo fué la causa evidente
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