Post on 15-Apr-2017
Adolfo en quito
Luz maría calzada de sus zapatos nuevos, ensillaba mi caballo, mote y partí de baños con
Aurelio. Seguimos viajando por Pelileo, Ambato, Lasso y Latacunga y en jornadas lentas
por la vía de Machachi, de regreso a Quito.
Quito es una especie de colonia penal para los diplomáticos. En algunos casos son
confinados a esta altísima capital por pequeñas indiscreciones, alcoholismo, tonterías
cometidas en la conducción de los negocios de estado o del corazón o, como expresaba
una mecanografía de la legación de los estados unidos refiriéndose a su superior “porque
no tiene todos los guijarros que el supremo Hacedor quiere q todo hombre tenga”
Tomado del libro “Ecuador en los ojos de afuera” ©, compilación de Pedro Saad Heredia.
Para izquierda un carácter a la vez
Para la derecha un carácter a la vez