Post on 19-Jun-2015
Raúl Bonilla Sánchez
Raúl García Blázquez
Alberto Dionisio Merino
Alberto Cedena Peña.
1. Introducción:
Los derechos del niño son un conjunto de normas de derecho internacional que
protegen a las personas menores de 18 años. Todos y cada uno de los derechos de
la infancia son inalienables e irrenunciables, por lo que ninguna persona puede
vulnerarlos o desconocerlos bajo ninguna circunstancia. Varios documentos
consagran los derechos de la infancia en el ámbito internacional, entre ellos la
Declaración de los Derechos del Niño y la Convención sobre los Derechos del Niño.
La Convención sobre los Derechos del Niño es un acuerdo legalmente vinculante
que fue firmado en 1989 por la mayoría de los países del mundo.
De acuerdo con el derecho internacional, según lo acordado por los países
signatarios de la Convención de Ginebra, todos los refugiados tienen ciertos
derechos, a pesar de su sexo o de su edad. Esto significa que toda vez que un
refugiado ha establecido que cumple con la definición de refugiado que figura en la
Convención, estos derechos legales caen en su lugar. Como los niños refugiados no
están excluidos, también gozan de los mismos derechos que sus equivalentes
adultos. Por ejemplo, tienen derecho a permanecer en su país de refugio, sin temor
a la repatriación al país del cual huyeron
2. Justificación
Nuestra elección es el Derecho del niño Número 22, este trata de “Niños
refugiados” los niños, niñas y jóvenes refugiados (que han sido obligados a
abandonar su país por una guerra u otras circunstancias) serán objeto de
protección especial. Las autoridades deberán colaborar con las organizaciones que
los ayudan y protegen.
Los niños refugiados comparten los mismos derechos que todos los niños origen.
Estos derechos humanos básicos están establecidos en los 54 artículos de la
Convención de los Derechos del Niño. Por ejemplo, cada niño tiene el derecho a
desarrollarse plenamente, el derecho a la supervivencia, el derecho a la protección
contra influencias nocivas, el derecho a ser libre de la explotación y el abuso y el
derecho de participar en la vida social, cultural y familiar. Los 54 artículos también
garantizan a cada niño ciertos derechos a la dignidad humana básica, a la
educación, a los servicios jurídicos y sociales y al cuidado de su salud.
Los niños refugiados en determinados países usualmente tienen la mayoría, si no
todas, las mismas protecciones de las que gozan los niños que son ciudadanos de
esos países. Los niños refugiados tendrán en general, los mismos derechos bajo las
leyes del bienestar del niño, como los niños que nacieron en el país en donde se
encuentra el niño refugiado. Tendrán, también tengan derecho a la misma
asistencia jurídica, educación y atención de la salud que los ciudadanos del país.
En relación con el artículo 3 del decreto 68/2007 del 29 de Junio todo niño
refugiado tendrá garantizado el derecho a la Educación primaria que permita
afianzar su desarrollo personal y su propio bienestar, adquirir habilidades
culturales relativas a la expresión y comprensión oral, a la lectura, a la escritura y
al cálculo, así como desarrollar habilidades sociales, hábitos de trabajo y estudio, el
sentido artístico, la creatividad y la afectividad.
El niño que vive en situación de riesgo social, que crece en un ambiente
desfavorable, el que es maltratado, rechazado, sin atención a las necesidades
mínimas para la adecuada formación y desarrollo de su personalidad puede llegar
a convertirse en un individuo resentido, que crea una carga social, generando a su
vez mayor delincuencia, promiscuidad, pobreza; y todo cuanto de estas bajezas
sociales se derivan.
3. Actividad relacionada con el derecho Número 22 “Niños
refugiados”
Para el taller vamos a realizar una prueba deportiva basada en un juego popular
“del pillado y las cadenas”, no sin antes, explicar y poner en contexto a nuestro
alumno, ofreciéndole la información acerca del derecho 22, para que nuestra
actividad adquiera sentido y así sacar un mayor rendimiento.
La actividad consiste en dividir en dos zonas el pabellón, una zona simboliza el país
que ofrece asilo y el otro el país de origen del refugiado. Unos alumnos serán los
refugiados, otros serán soldados que impiden a los refugiados entrar en el país de
asilo. Los que consigan llegar a la zona del país que ofrece el asilo sin que “los
pillen” tendrán en general, los mismos derechos bajo las leyes del bienestar del
niño, como los niños que nacieron en el país en donde se encuentra el niño
refugiado. Los niños que sean capturados serán llevados a “la cárcel”. Este juego
simboliza e intenta que nuestros niños se den cuenta que no todo es como ellos lo
viven, que existen zonas y lugares donde similares no disfrutan, ni tienen
garantizado los mismos derechos y libertades, y además debemos promover los
valores de respeto, igualdad, solidaridad y empatía.
4. Destinatarios:
Para los alumnos de 5º de Primaria.
5. Evaluación
Al finalizar la actividad haremos unas preguntas para cerciorarnos, sí han
entendido conceptos, sí salen con una idea clara sobre el concepto que abarca los
niños refugiados, el motivo de por qué se consideran como tales, las características
que reúnen y los derechos qué tienen.