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El Bienestar Territorial en los procesos de reasentamiento de población por obra de utilidad
pública:
Valoración económica de los atributos del territorio
Pablo Andrés Barrera Bolaños
Universidad Nacional de Colombia Facultad de Arquitectura
Escuela Planeación Urbano-Regional Medellín, Colombia
2018
El Bienestar Territorial en los procesos de reasentamiento de población por obra de utilidad
pública:
Valoración económica de los atributos del territorio
Pablo Andrés Barrera Bolaños
Tesis presentada como requisito parcial para optar al título de: Magister en Estudios Urbanos y Regionales
Directora: Phd., Análida Rincón Patiño
Universidad Nacional de Colombia Facultad de Arquitectura
Escuela Planeación Urbano-Regional Medellín, Colombia
2018
Dedicatoria
A Dios las gracias por permitirme alcanzar esta meta. A mis padres y a mi novia, mil gracias por estar allí para mi. Sin su cariño y su incondicional apoyo, esto no hubiese sido posible. Este trabajo es dedicado a ustedes. A los profesores y a mis compañeros de clase, gracias por enseñarme tanto.
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Resumen El siglo XXI trajo consigo una serie de cambios notables para Medellín. En la ciudad se han desarrollado importantes obras públicas, los cuales han generado innegables beneficios a la ciudad, pero también han generado impactos negativos, como es el caso del denominado “desplazamiento involuntario” de población, impacto que a la fecha no ha tenido un adecuado manejo, lo que ha suscitado un deterioro de las condiciones de vida de la población desplazada por dichas obras. En la investigación se plantea como hipótesis que el reasentamiento de población no se fundamenta en la realidad del territorio, en este sentido, este no tiene una base territorial. Relacionado con lo anterior, y tomando como referente la experiencia Puente Madre Laura en Medellín, en la presente investigación se propone la noción de Bienestar Territorial, y con base en ella, se diseña una metodología para evaluar los impactos socioeconómicos que genera una obra de utilidad pública, en términos del cambio en el nivel de bienestar de los grupos familiares desplazados involuntariamente por dicha intervención. Al final, se plantean conclusiones y proposiciones devenidas del ejercicio investigativo. Palabras clave: Desplazamiento involuntario, reasentamiento, territorio, valoración económica, bienestar territorial. Abstract The 21st century brought with it a series of significant changes for Medellin. In the city there has been the development of important public works, which have generated undisputed benefits for the city, while at the same time causing negative impact as is the case with the “involuntary displacement” of people, an aspect that to this date has not been dealt with adequately and has contributed to the deterioration of living conditions for the population that has been displaced because of these public works. In the investigation the hypothesis is that the resettlement of the population is not based on the territorial reality, in this sense, it does not have a territorial base. Related to this, and taking as a reference point the experience with the Madre Laura Bridge in Medellin, in this research is postulated the notion of “Territorial wellbeing”, and based on this a methodology is designed to evaluate the socioeconomic impact that the public work generates in terms of the changes to the level of well-being of the family groups involuntarily displaced because of that work. To finish, conclusions and propositions derived from this investigation will be proposed. Keywords: Involuntary displacement, resettlement, territory, economic valuation, territorial wellbeing.
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Contenido Introducción ....................................................................................................................... 7 1. Contexto y fundamentos teórico-conceptuales ......................................................... 21
1.1 Contexto jurídico institucional ........................................................................... 21 1.1.1 Reasentamiento poblacional para Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco Mundial (BM) ................................................................................. 22
1.1.1.1 Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Política Operativa OP-710. .... ............................................................................................................. 22 1.1.1.2 Banco Mundial (BM). Políticas Operacionales OP 4.12. ....................... 27
1.1.2 Normatividad sobre el reasentamiento poblacional en Colombia .............. 31 1.1.3 Normatividad sobre el Reasentamiento poblacional en Medellín .............. 42 1.1.4 Actores involucrados en los procesos de reasentamiento en Medellín ..... 49
1.1.4.1 Actores Institucionales .......................................................................... 50 1.1.4.2 Actores Territoriales .............................................................................. 55
1.2 Fundamentos teóricos y conceptuales para el análisis del reasentamiento por obra de utilidad pública, bajo una perspectiva territorial ............................................... 57
1.2.1 Reasentamiento de población: concepto, contradicciones y consideraciones ....................................................................................................... 58
1.2.1.1 Aproximación al concepto ..................................................................... 59 1.2.1.2 Contradicciones en los procesos de reasentamiento ............................ 69 1.2.1.3 Algunas consideraciones frente al reasentamiento ............................... 77
1.2.2 El Territorio: una aproximación desde el análisis económico .................... 81 1.2.2.1 El Territorio ........................................................................................... 81 1.2.2.2 El Territorio como recurso para sus pobladores .................................... 90 1.2.2.3 Valoración económica del territorio: referentes teóricos ........................ 94
2 El bienestar territorial y los atributos territoriales .....................................................102 2.1 La experiencia referente de estudio: Puente Madre Laura ..............................102
2.1.1 El Territorio impactado por la obra ...........................................................108 2.2 El Territorio como fuente de bienestar para sus moradores ............................132
3 Propuesta metodológica para el análisis del reasentamiento desde el bienestar territorial .........................................................................................................................136
3.1 Estimación del cambio en el nivel de bienestar territorial de los moradores sujetos de reasentamiento ..........................................................................................137
3.1.1 Diseño del estudio ...................................................................................141 3.1.2 Aspectos a tener en consideración ..........................................................147
4 Conclusiones ..........................................................................................................152 5 Referencias bibliográficas .......................................................................................160 6 Anexos ....................................................................................................................169
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Lista de ilustraciones Ilustración 1. Actores institucionales ................................................................................ 55 Ilustración 2. Actores territoriales ..................................................................................... 56 Ilustración 2. Taxonomía del valor económico de un recurso ........................................... 94 Ilustración 3. Utilidad de la valoración económica ...........................................................101 Ilustración 4. Alternativas de movilidad vehicular ............................................................103 Ilustración 5. Sector Puerto Nuevo y Sector el Hueco 2012 ............................................106 Ilustración 6. Sector Puerto Nuevo y Sector el Hueco 2016 ............................................107 Ilustración 8. Actividades económicas en el sector de Puerto Nuevo en 2013 ................115 Ilustración 9. Cancha del sector de Puerto Nuevo en 2013 .............................................120 Ilustración 10. Ruta caminando sector Puerto Nuevo - Parque Berrío ............................121 Ilustración 11. Viviendas del sector de Puerto Nuevo en 2013-2014...............................130 Ilustración 12. Senda de bienestar de los grupos familiares sujetos a reasentamiento ...138 Lista de tablas Tabla 1. Obras públicas desarrolladas en Medellín ............................................................ 9 Tabla 2. Perfiles actores entrevistados ............................................................................ 16 Tabla 3. Fases de la investigación ................................................................................... 18 Tabla 4. Descripción Política Operativa OP-710 .............................................................. 22 Tabla 5. Esquema indicativo de un estudio de base ........................................................ 24 Tabla 6. Descripción Política Operativa OP 4.12. ............................................................ 27 Tabla 7. Instrumento de planificación, según tipo de proyecto financiado por el BM ........ 28 Tabla 8. Contenido Estudio Socioeconómico OP 4.12. BM .............................................. 30 Tabla 9. Compendio de lineamientos y normas relacionadas con el reasentamiento ....... 31 Tabla 10. Marco de Política de Reasentamiento para la realización del Proyecto Nacional
de Transporte Urbano .............................................................................................. 36 Tabla 11. Planificación del reasentamiento según Marco de Política de Reasentamiento
para la realización del Proyecto Nacional de Transporte Urbano ............................. 38 Tabla 12. Lineamientos y normas sobre el reasentamiento poblacional en Medellín. ...... 43 Tabla 13. Impactos del reasentamiento según Guía de manejo socioambiental .............. 46 Tabla 14. Subprogramas plan de reasentamiento de la Guía de Manejo Socioambiental 47 Tabla 15. Riesgo de empobrecimiento ............................................................................. 61 Tabla 16. Etapas del reasentamiento............................................................................... 63 Tabla 17. Estrés multidimensional experimentado en el reasentamiento ......................... 65 Tabla 18. Condiciones objetivas y subjetivas de la población frente al reasentamiento ... 66 Tabla 19. Impactos por tipo de población ........................................................................ 68 Tabla 20. Dimensiones de la vida social .......................................................................... 75 Tabla 21. Subsidios y compensaciones en Medellín ........................................................ 79 Tabla 22. Cualidades del territorio en la ciudad ............................................................... 83 Tabla 23. Elementos físicos del barrio ............................................................................. 88 Tabla 24. Categorías, subcategoría y variable ................................................................. 91 Tabla 25. Fases en un ejercicio de valoración contingente .............................................142 Tabla 26. Atributos territoriales .......................................................................................142 Tabla 27. Estudios referentes .........................................................................................148
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Introducción
El proceso de globalización ha suscitado, en las últimas décadas, un proceso de
transformación espacial de tal magnitud y alcance, que algunos autores estiman que ésta
debería considerarse como la expresión de una nueva “revolución urbana” (Ascher, 2001,
citado por De Mattos, 2006, p.41). La extensión generalizada de la globalización genera
un cambio en la forma de pensar, gestionar y construir la ciudad. Si bien muchas de estas
transformaciones ya habían comenzado a esbozarse en etapas anteriores a esta nueva
fase del capitalismo, su manifestación actual implica importantes diferencias, tanto
cuantitativas como, sobre todo, cualitativas (De Mattos, 2006). Tal como lo expone Brand:
Si bien es comparable la escala de las transformaciones urbanas entre hace cuatro
décadas y ahora, la naturaleza y las características de estas trasformaciones son
radicalmente distintas: Ahora las ciudades crecen en contextos globalizados y no
nacionales, no es el Estado si no el mercado quien fija el rumbo urbano y no su materialidad (2009, p.10).
Bajo esta lógica, se propende por un modelo de ciudad innovadora y competitiva, capaz
de responder a los requerimientos de la economía global (ciudad marketing). En este
modelo de ciudad el desempeño económico es un factor determinante a la hora de
evaluar el desarrollo de una sociedad, por lo que las ciudades encaminan distintas
estrategias con el fin de promover su competitividad y ser locación atractiva para la
inversión. En este sentido la gobernanza local y la política urbana adquieren un rol en la
gestión urbana que se enfoca en atraer capitales (De Mattos, citado por Janoschka &
Hidalgo, 2014). Lo antes mencionado derivó que en Colombia, en la década de 1990, los
municipios asumieran unas nuevas lógicas de intervención frente a los territorios. Este
proceso de modernización ha llevado a las administraciones municipales, bajo un proceso
de descentralización, a asumir responsabilidades que anteriormente eran del Estado
central, pero también estableció el cambio de modelo de ciudad, con base en las
exigencias del proceso de globalización.
A partir de este cambio, las municipalidades han emprendido procesos de planeación
urbana y de ordenamiento territorial que propenden por un desarrollo urbano estratégico.
Una muestra de esto es la ciudad de Medellín (capital del Departamento de Antioquia),
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que desde principios del siglo XXI ha experimentado una serie de cambios urbanos
significativos, producto de la puesta en marcha de proyectos estratégicos de ciudad. Esto
ha significado evidentes transformaciones físicas de la ciudad, en un proceso que la ha
hecho merecedora de múltiples menciones y premios1, los cuales reconocen los notables
esfuerzos por superar las problemáticas que en la ciudad tienen lugar. A partir de diversas
políticas y programas emprendidos por el gobierno municipal, la ciudad intenta dejar atrás
un periodo oscuro de violencia, para posicionarse hoy como una ciudad abierta al mundo,
atractiva, competitiva, con un amplia oferta cultural, empresarial, educativa, de
entretenimiento, entre otros servicios.
Bajo esta lógica, la obra de utilidad pública ha tenido una importante participación en la
materialización dicho cambio. A saber, estas obras se conciben como intervenciones en
marcadas en la declaratoria de utilidad pública e interés social (artículo 58 de la Ley 388
de 1997), que propenden por la mejora de las condiciones de vida de la población,
mediante la adecuación y cualificación del espacio. Ejemplos de estas obras públicas
podrían ser: la infraestructura social2, la infraestructura vial y de sistemas de transporte
masivo, la construcción y/o adecuación de redes de servicios públicos, entre otras.
En la siguiente tabla, elaborada por el Observatorio de Reasentamientos y Movimientos
de Población (2016a), se evidencia la significativa importancia de la intervención a través
de la obra de utilidad pública. Se relacionan algunas obras que desde 2001 se han
ejecutado en la ciudad, las cuales oscilan entre infraestructura vial (vías, puentes),
movilidad, equipamientos y generación de espacios públicos:
1 Entre las diferentes distinciones cabe mencionar las siguientes: el Premio Internacional de Hábitat Dubai 2008 por el proyecto de viviendas en la quebrada Juan Bobo; Premio a la Mejor Obra de Arquitectura para el Orquideorama en la Bienal Iberoamericana 2008 de Arquitectura y Urbanismo en Portugal; Premio a la Mejor Obra Iberoamericana de Arquitectura y Diseño para el Parque Biblioteca España en la misma Bienal 2008 en Portugal; Primer lugar en la categoría Diseño Urbano en la XVI Bienal Panamericana de Quito para el Proyecto Urbano Integral -PUI - en la zona nororiental; Premio The Arab Gulf Program for Development (AGFUND), entregado a los CEDEZOS en 2012; Galardón Premio Conciencia de Biosfera José Celestino Mutis, distinción en Infraestructura Sustentable en 2012; Mención especial en el premio Mundial “Lee Kuan Yew”, transformación urbana en 2013; premio Global Holcim Award, Categoría oro, Plan maestro UVA Orfelinato, en 2015; premio MobiPrice 2015 a la movilidad; El premio Lee Kuan Yew World City Prize en 2016, por su apuesta urbanística sostenible e innovadora; entre otros premios. 2 En los sectores de la salud, educación, recreación, centrales de abasto y seguridad ciudadana.
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Tabla 1. Obras públicas desarrolladas en Medellín
Nombre del proyecto Institución Año Lugar La Paralela Secretaría de
Infraestructura Física 2008-2011 Calzada entre Soya y
Tricentenario. Puente Madre Laura Secretaría de
Infraestructura Física, Empresa de desarrollo urbano.
2012-2015 Comuna 4- Comuna 5
Ampliación de la avenida 80 Secretaría de Infraestructura Física
2008 Comuna 7
Conexión Aburrá – Rio Cauca
Secretaría de Infraestructura Física
2008-2013 Cuenca media de la quebrada La Iguaná
Ampliación de la avenida 34 Palmas – Palos Verdes (Bicentenario).
Secretaría de Infraestructura Física
2008
Carrera 70 Secretaría de Infraestructura Física
2009 Entre Colombia y la Circular 1era
Intervención en la 33 Secretaría de Infraestructura Física
2008-2011
Puente de la 4 Sur Secretaría de Infraestructura Física, Empresa de desarrollo urbano
2008-2011 Comuna 14- comuna 15
Metro Cable línea J Metro de Medellín 2006-2008 San Javier - La Aurora
Metro Cable línea K Metro de Medellín 2001-2004 Acevedo-Santo Domingo
Extensión Línea A. Metro de Medellín 2008-2012 Estaciones La Estrella - Sabaneta
Tranvía de Ayacucho, Línea H (Oriente – Villa Sierra) y Línea M (Miraflores – Trece de Noviembre)
Metro de Medellín 2010- Comunas 8, 9 y 10
Línea 1 Metroplús Metroplús 2006-2011 Estación Universidad de Medellín -Parque
de Aranjuez. Troncal Belén Aranjuez Metroplús Biblioteca España Empresa de desarrollo
urbano 2007-2008 Santo Domingo
Juan Bobo 1 y 2 Empresa de desarrollo urbano
2004-2007 Quebrada Juan Bobo
Recuperación de la quebrada la Herrera
Empresa de desarrollo urbano
2005- Comuna 1- comuna 2
Jardines Infantiles Empresa de desarrollo urbano
2009- Comuna 8
Circuito Vial las Mirlas Empresa de desarrollo urbano
2010 Comuna 8
Jardín Circunvalar Empresa de desarrollo urbano
2014
Centro Cultural y Comunitario Las Estancias
Empresa de desarrollo urbano
2009 Comuna 8
Parque Bicentenario Empresa de desarrollo urbano
2009-2010 Comuna 10, Barrio Boston
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Nombre del proyecto Institución Año Lugar Escaleras eléctricas y Parque Juan XXIII
Empresa de desarrollo urbano
2011 Comuna 13
Santa Elena Tramo 3 Empresa de desarrollo urbano
2010
Colegios de Calidad Empresa de desarrollo urbano
2009
Viaducto media ladera Tramo 1 y 2
Empresa de desarrollo urbano
2010-2017 Comuna 13, barrios Independencias I y II
Fuente: Observatorio de Reasentamientos y Movimientos de Población, 2016a, p.23 Con el actual Plan de Ordenamiento Territorial (POT) (acuerdo 48 de 2014), Medellín
establece un marco estratégico que orienta las intervenciones que se generan desde el
campo del urbanismo y la planificación, en función de la concreción del modelo de
ocupación definido en el POT. Así, la implementación del Acuerdo 48 de 2014, le exige a
la administración municipal la formulación y ejecución de un conjunto de medidas para
para alcanzar las condiciones físicas y funcionales acordes al modelo de ocupación
definido en dicho POT. Bajo esta lógica es de esperar en el corto y mediano plazo, el
desarrollo de un número considerable obras públicas encaminadas a potenciar el
desarrollo de la ciudad, tales como: la generación de nuevo espacio público, construcción
de equipamientos colectivos, mejoras a la infraestructura vial, movilidad, entre otras
intervenciones.
Ahora, si bien dichas obras de utilidad pública propenden por generar beneficios a la
colectividad, estos también suscitan impactos negativos en los lugares donde se
construyen. Con el desarrollo urbanístico, la institucionalidad ha tenido que adquirir
viviendas y predios donde se emplazan estos proyectos, produciendo hechos como el
desplazamiento involuntario de los pobladores. Es preciso mencionar que un
desplazamiento se considera involuntario cuando a partir de una decisión impuesta por un
agente externo, las personas no tienen opción de quedarse en el lugar donde residen. Por
lo general este concepto (desplazamiento involuntario) se asocia a los fenómenos del
desplazamiento generados por la ejecución de proyectos de desarrollo (proyectos
hidroeléctricos, infraestructura vial, etc.). Dicho desplazamiento es considerado como uno
de los impactos que genera la intervención, y por consiguiente tiene asociado unas
medidas de manejo, para mitigar y compensar las afectaciones que se generan.
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Los desplazamientos de población implican múltiples pérdidas y rupturas en varios niveles
(familiares, vecinales, culturales y económico); sin las consideraciones y precauciones
necesarias, el desplazamiento puede generar procesos de empobrecimiento (deterioro de
las condiciones sociales y económicas), especialmente para la población más vulnerable
(Cernea, 2001). Teniendo en consideración que la implementación del actual POT de
Medellín implica la ejecución de nuevas obras públicas, por lo que se espera que a futuro
en la ciudad se presenten nuevos procesos de desplazamiento involuntario de población,
la reflexión sobre el reasentamiento de población se constituye en uno de los asuntos
centrales en la agenda pública.
En este sentido, el concepto de territorio como la materialización de las relaciones
sociales en el espacio, y como un elemento históricamente construido, tiene una
significativa importancia. Este concepto permite entender que la ejecución de obras de
utilidad pública, además de una transformación física, desestructuran (desarticula) las
lógicas y dinámicas socioeconómicas que en el territorio se habían gestado con el tiempo.
De esta forma, a partir de la revisión de varias fuentes (referentes conceptuales y
normativos sobre reasentamiento, y la revisión de experiencias de reasentamiento en
Medellín: Moravia, Ciudadela Nuevo Occidente, Mirador de Calasanz, proyecto conexión
vial Aburrá – río Cauca y el proyecto Metroplús, en Manrique la 45 sectores de Berlín y
Palos Verdes3), y la experiencia profesional del investigador en el Observatorio de
Reasentamiento y Movimientos de Población del Municipio de Medellín4 y en el proceso
de formulación de la Política Publica de Protección a Moradores y Actividades
Económicas y Productiva5; se logra evidenciar que en el marco de la formulación y
ejecución de obras de utilidad pública, mayormente, ha primado una visión técnica desde
3 Estos casos se abordan mediante revisión de tesis de Maestría, a saber: Peláez, 2013; Arriagada, 2011; Mena, 2011; Montoya, 2012). 4 Participación como estudiante investigador encargado de la dimensión socioeconómica en la investigación “Aprendizajes institucionales en el componente de Ciudadela Nuevo Occidente” del Observatorio de Reasentamiento y Movimientos de Población del Municipio de Medellín, 2016. Participación como estudiante investigador en la investigación “Puente Madre Laura: ¿Permanencia o desplazamiento de población? Un análisis territorial-temporal de las acciones jurídicas-institucionales y sociales para concreción del principio de protección a moradores” del Observatorio de Reasentamiento y Movimientos de Población del Municipio de Medellín, 2017. 5 Economista en el proceso de la formulación de la Política Pública de Protección a Moradores y Actividades Económicas y Productivas (Medellín, 2016-2017), proceso que desarrolla la Escuela de Planeación Urbano-Regional de la Faculta de Arquitectura de la Universidad Nacional, sede Medellín.
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lo físico-espacial. Así, para el caso de Medellín, la planificación del reasentamiento se ha
reducido a los procedimientos legales para adquirir el inmueble, la reposición de la
vivienda (postulación al subsidio municipal de vivienda, decreto 2339 de 2013) y el
reconocimiento de las compensaciones definidas en los decretos municipales (ver
capítulo 1).
En este sentido, los procesos de reasentamiento de población, por lo general, no se han
fundamentado en la realidad socioeconómica del territorio intervenido. Esto ha significado
que el reasentamiento no se oriente a proteger y restituir los aspectos del territorio, o los
atributos territoriales que aportan bienestar a los grupos familiares. En otras palabras, el
reasentamiento de población no logra proteger y restituir todas aquellas condiciones y
situaciones propias del territorio, que benefician al morador, y que contribuyen en la
realización de su proyecto de vida. Dado lo anterior, las soluciones que se brindan, en el
marco del reasentamiento, no se ajustan a las necesidades e intereses de los grupos
familiares a reasentar, razón por la cual, dichas medidas no logran manejar (evitar, mitigar
y compensar) las pérdidas percibidas por la población que debe abandonar su territorio, lo
que se traduce en una desmejora en sus condiciones de vida, principalmente para
aquellos grupos familiares con baja capacidad económica o en condición de
vulnerabilidad.
Teniendo en cuenta lo anterior, en esta investigación se propone la nación de Bienestar
Territorial, la cual parte de admitir que los territorios son una construcción social
(Lefebvre, 1976), por lo tanto, tienen sentido y valor para quien lo habita. Así, aun cuando
bajo la lógica (técnica) de la planeación, el territorio tenga una calificación negativa
(deteriorado, desorganizado, con desarrollo incompleto, etc.), el territorio otorga a su
morador un conjunto de condiciones y situaciones que son aprovechadas por este para la
realización de su proyecto de vida. Así pues, en razón de lo antes mencionado, se puede
decir que el morador accede a un conjunto de beneficios por habitar su territorio, de ahí
que en la presente investigación se hable de bienestar territorial.
La noción de bienestar territorial parte de la idea de que así como el medioambiente
proporciona bienestar para la sociedad, a través de las diversas funciones que son
necesarias para el funcionamiento de la economía y para el sustento del planeta
(Labandeira, León, y Vázquez, 2007), asimismo el territorio, por sí mismo o por su
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localización relativa, aporta (posibilita), en algún nivel, en la satisfacción de las
necesidades del morador, y, por tanto, el territorio proporciona bienestar para la población
que lo habita. Como se expondrá más adelante en el capítulo 2, el morador, en el trasegar
de su historia en su respectivo territorio, define estrategias que le posibilitan la realización
de su proyecto de vida, sean estos de subsistencia o de consecución progresiva de
mejores condiciones de vida.
Proponer la noción de bienestar territorial es una apuesta conceptual y metodológica por
reconocer (entender y legitimar) la importancia (valor) que tiene el territorio para sus
moradores. De esta forma, se podría estimar que tanto la comunidad valora el conjunto de
atributos que constituyen su territorio, independientemente de la existencia de precios de
mercado para los mismos. En este sentido, se trata de valorar lo que supone para el
bienestar de la persona habitar su territorio. En la práctica existe un número significativo
de atributos (asociadas al sentimiento, la localización relativa, al medio ambiente, las
redes sociales y económicas, entre otras) para los cuales no es posible encontrar un
mercado donde se generen los “precios” que racionen su uso dentro del sistema; de allí
que a la hora de un análisis (costo/beneficios, por ejemplo) para determinar la viabilidad
de un proyecto no haya información suficiente para valorar en términos monetarios la
alteración (o pérdida) de uno o varios de estos atributos.
Teniendo en cuenta que un proceso de desplazamiento involuntario pone en crisis la
relación morador-territorio, en cuanto a la posibilidad de acceder a sus atributos, se
considera importante avanzar en la definición de pautas y criterios para un adecuado
reconocimiento de las condiciones de vida de la población en su territorio. En tal sentido
emergen las siguientes preguntas:
– ¿Cuáles son los atributos del territorio más relevantes para los actores sociales? y
¿por qué?
– ¿Cómo ha sido la caracterización de los territorios que serán objeto de una obra
de utilidad púnlica en Medellín?
– ¿Qué elementos o características del territorio se deben considerar para mejorar
los procesos de reasentamiento?
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Con base a lo anterior, el objetivo principal de esta investigación es aportar en la
construcción del concepto de bienestar territorial a partir del desarrollo de una
metodología de valoración económica de los atributos del territorio, en el marco de
procesos de reasentamientos de población por obra de utilidad pública. En lo que
corresponde a los objetivos específicos, que permiten alcanzar este objetivo general, se
desarrollaron las siguientes labores:
I. Identificar los elementos teóricos y empíricos que permitan construir el concepto
de Bienestar Territorial.
II. Definir la metodología de valoración económica de los atributos del territorio.
III. Identificar y caracterizar los actores involucrados en el proceso de reasentamiento
en la ciudad de Medellín, en el marco de la propuesta metodológica.
IV. Formular recomendaciones en torno a la restitución y mejora de condiciones de
vida de la población sujeto de reasentamiento por una obra de utilidad pública.
De acuerdo con los objetivos planteados, esta investigación se enmarcó dentro de la
investigación cualitativa, en la que se buscó indagar sobre los atributos del territorio más
valorados por sus pobladores, desde la interpretación y el sentir del habitante del
territorio, así como de las perspectivas de actores institucionales, expertos y académicos.
Fue de interés para esta investigación la voz de los diferentes actores antes referidos,
toda vez que se buscaba contrastar las apreciaciones y puntos de vista que cada uno de
estos tiene de cara a lo que significa un proceso de resentimiento, en términos de los
cambios y pérdidas que sufre la comunidad desplazada involuntariamente por la obra.
Ahora, si bien el enfoque de esta investigación es cualitativo, fue necesario interpretar
algunos indicadores (estadísticas) para complementar el análisis realizado.
Los datos utilizados de pobladores de territorios impactados por una obra de utilidad
pública, se toman de la experiencia de reasentamiento de población generada por el
desarrollo del Puente de la Madre Laura Montoya (también conocido como puente calle
93-94 Aranjuez – Castilla). Es importante precisar que se opta por esta experiencia por lo
representativa que ésta es para la ciudad, en términos del impacto poblacional y territorial
que generó, dado el significativo número de población desplazada involuntariamente; y
por su exposición mediática, en razón a la magnitud de la obra (a 2017 esta obra es el
puente intraurbano más largo del país), lo que supondría, de parte de la administración
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municipal, la puesta en práctica del conjunto de mecanismos y procedimientos necesarios
para la protección de los moradores, producto de la experiencia institucional acumulada.
Otro hecho que motivó la selección de esta experiencia fue que previamente6 se había
logrado establecer una relación de confianza con líderes comunitarios, lo que facilitaba el
acercamiento a la población de interés.
El proceso investigativo se realizó en tres fases. En la primera fase se realizó un análisis
riguroso de un significativo número de fuentes secundarias. De otro lado, se realizaron
acercamientos a instituciones, expertos y líderes comunitarios con conocimiento o
experiencia en el tema de reasentamiento poblacional. En adición a lo anterior, en esta
fase se realizó el estudio de los actores interesados (involucrados) en el reasentamiento
en la ciudad de Medellín, en el marco de la propuesta metodológica. Como referente
metodológico para abordar esta fase, se tuvo en cuenta los postulados de la teoría
fundamentada (Strauss y Corbin, 2002).
En la segunda fase, a partir de los resultados de la fase anterior, se estructuró la
propuesta metodológica de estimación del cambio en el nivel de bienestar de los
individuos ante la limitación parcial o total a los atributos territoriales. Como referente
metodológico para formular esta propuesta, se retomó el conjunto de métodos
desarrollados por la economía ambiental, en lo relacionado con la valoración económica
de los servicios ambientales (Azqueta, 1995). Se considera relevante este marco puesto
que estos métodos han permitido estimar el valor de los bienes y servicios que no pasan
por el mercado (no tienen precio).
En la tercera, y última fase, se plantean las conclusiones de la investigación y se formulan
recomendaciones en torno a la restitución y mejora de las condiciones de vida de la
población sujeto de reasentamiento por obra de utilidad pública.
En orden de realizar las fases antes mencionadas, y con base en el enfoque cualitativo de
la investigación, las técnicas utilizadas fueron las siguientes: la revisión documental, la
observación no participante, la entrevista semiestructurada, y la triangulación de datos.
6 En el marco de una investigación desarrollada por el Observatorio de Reasentamiento y Movimientos de Población del Municipio de Medellín denominada “Puente Madre Laura: ¿Permanencia o desplazamiento de población? Un análisis territorial-temporal de las acciones jurídicas-institucionales y sociales para concreción del principio de protección a moradores” (2017).
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Mediante la técnica de la revisión documental, se realizó un análisis sistémico y riguroso
sobre los siguientes temas: las políticas operativas del Banco Mundial y del Banco
Interamericano de Desarrollo, con relación a los planes de reasentamiento involuntario de
población por ejecución de proyectos de infraestructura; el marco jurídico colombiano,
respecto al reasentamiento de población por obras públicas; respecto a desarrollos
teórico-conceptuales sobre el territorio, la economía del bienestar, el desarrollo, el riesgo
de empobrecimiento, las redes vecinales, la economía popular, entre otros temas; y
estudios (tesis de maestría) sobre experiencias de reasentamientos en Medellín.
Con relación a la entrevista semiestructurada, es necesario mencionar que consistió en el
desarrollo de conversaciones direccionadas, con actores con conocimiento y/o
experiencia en procesos de reasentamientos (académicos, expertos, funcionarios públicos
que participaron en el diseño o ejecución de reasentamientos de población), los cuales
fueron de utilidad para explorar, ahondar y aclarar aspectos relacionados con el tema en
cuestión. Asimismo, se entrevistaron actores territoriales: población del sector de Puerto
Nuevo, del barrio Palermo. Como primer paso para la realización de las entrevistas se
establecieron los criterios de selección de los entrevistados, los cuales se describen en la
Tabla 2. Dado el perfil de los actores entrevistados, se diseñó un instrumento de
recopilación de información (formulario de preguntas orientadoras), los cuales se exponen
en los anexos (2, 3, 4 y 5) de esta investigación.
Respecto a la observación no participante, esta técnica, además de posibilitar el registro
de hechos y situaciones, fue útil para corroborar información recada de fuentes
secundarias. Finalmente tenemos la técnica de la triangulación de datos, que fue utilizada
para la verificación y comparación de la información recabada en las diferentes fuentes
consultadas. Tabla 2. Perfiles actores entrevistados
Actor Perfil Académicos Profesionales universitarios con conocimiento y experiencia
en proceso de reasentamiento poblacional. Expertos Profesionales de instituciones que participen en procesos
de reasentamiento, desde la planificación o ejecución. Profesionales o líderes comunitarios de instituciones que trabajen con comunidad, en procesos relacionados con la defensa del territorio, o haciendo acompañamiento a
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Actor Perfil comunidades impactadas por intervenciones urbanas.
Funcionarios de institución pública
Profesional universitario con conocimiento y experiencia en proceso de reasentamiento poblacional, que hagan parte de instituciones públicas en la ciudad de Medellín.
Actores territoriales Habitante del sector de Puerto Nuevo, o del área intervenida en el barrio Palermo, que haya sido impactado por la construcción del Puente Madre Laura. El entrevistado debió haber residido en el territorio por un periodo no inferior a 67 años antes de iniciar la construcción de la obra (2012). Integrante de organización social/comunitaria del sector de Puerto Nuevo, o del barrio Palermo (JAC, JAL, veeduría ciudadana, junta de padres, etc.).
En el anexo 1, se presenta la relación de los 23 actores entrevistados. En dicha relación
se exponen el tipo de actor entrevistado y su perfil; es decir, una breve descripción del
actor, en donde se resalta la institución u organización social al que está afiliado (para los
actores académico, experto, e institucional). En cuanto a los actores territoriales, se
abordan temas como el arraigo, el sector de donde fue desplazado involuntariamente, y el
lugar/barrio donde se encuentra viviendo actualmente. De otro lado se relaciona la fecha
en que se realizó la entrevista, y el nombre del actor.
Los datos obtenidos a través de la aplicación de las técnicas e instrumentos enunciados,
fueron procesados, codificados y triangulados (triangulación de datos), de tal forma que
se convirtieron en el hilo conductor de la definición de los atributos territoriales que les
representa bienestar a los pobladores del sector de Puerto Nuevo, del barrio Palermo
(comuna 4, Aranjuez). La interpretación de los datos empíricos se manejó siempre respecto a los conceptos
centrales de la tesis, lo que permitió la formulación de recomendaciones frente a las
pérdidas que sufre la población en los procesos de desplazamiento involuntario debido a
la construcción de obras de utilidad pública, las cuales están contenidos en las reflexiones
finales de la presente tesis. 7 Se toma como referencia el literal c, del artículo 15 del Decreto municipal 2339 de 2013, en lo que refiere al período de residencia mínima, en el municipio de Medellín, para la postulación al subsidio municipal de vivienda.
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Tabla 3. Fases de la investigación
Fase Objetivos Técnicas Resultado Exploración I. Identificar los
elementos teóricos y empíricos que permitan construir el concepto de Bienestar Territorial III. Identificar y caracterizar los actores involucrados en el proceso de reasentamiento en la ciudad de Medellín, en el marco de la propuesta metodológica.
Revisión documental La observación no participante. Entrevista semi-estructurada Triangulación de datos
Referente Contextual Marco teórico-conceptual. Correlato sobre la valoración de los atributos del territorio Caracterización de actores
Diseño II. Definir la metodología de valoración económica de los atributos del territorio.
Revisión documental. Propuesta Metodológica de valoración económica de los atributos territoriales
Conclusiones IV. Formular recomendaciones en torno a la restitución y mejora de condiciones de vida de la población objeto de reasentamiento por una obra de utilidad pública.
- Conclusiones y proposiciones
Como se había afirmado antes, la propuesta conceptual y metodóloga que se presenta en
esta investigación, pretende que los procesos de planificación territorial integren el
concepto de territorio, entendido como la producción social del espacio, en donde lo
físico-espacial es uno de los elementos constitutivos del territorio. Bajo la perspectiva del
análisis económico, adoptar este concepto permite inferir que el territorio ofrece a su
morador un conjunto de recursos que son utilizados por este para la realización de sus
necesidades. De esta forma, en tanto que el territorio es utilizado por el morador, este
tiene valor para él, aun cuando desde la lógica de la planificación a dicho territorio se le
asocien calificativos negativos (desarrollo incompleto, desorganizado, con déficit, entre
otros). Dado lo anterior, esta investigación pone de manifiesto que el reasentamiento de
población, como medida de manejo al desplazamiento generado por la ejecución de obras
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públicas8, no es una cuestión meramente procedimental (en el marco de la gestión
predial), sino que hace parte del proceso mismo de planificación de la ciudad.
Con la presente investigación, se intenta dar cuenta de las características del territorio
más valoradas por la comunidad, lo que permitiría develar cuales atributos del territorio se
deben considerar (proteger) al momento de planificar una obra de utilidad pública. Con
esto se tendría un medio para evaluar los impactos socioeconómicos que generaría la
ejecución de dicha obra, en términos del cambio en el nivel de bienestar de los moradores
del territorio desplazados involuntariamente por la intervención. De igual forma, el marco
metodológico producto de la investigación podría ser utilizado para desarrollar
evaluaciones ex-post de los procesos de reasentamientos, toda vez que este permitiría
estimar cuánto cambió el nivel de bienestar del grupo familiar tiempo después de que este
se presentase, con lo cual se podría saber si las condiciones de vida de dicho grupo
familiar mejora, permanece igual o disminuye. Con esto se intenta complementar el
proceso de planificación de los programas encaminados a restituir las condiciones de vida
en el marco de un proceso de reasentamiento poblacional, mediante la inclusión de
información sobre los intereses y preferencias de los pobladores del territorio a intervenir.
Finalmente se plantea que la presente investigación está estructurada de la siguiente
forma: una primera parte donde se plantea la introducción y se expone el diseño
metodológico, dando cuenta del enfoque investigativo, la experiencia de reasentamiento
abordada, las técnicas e instrumentos de recolección de información utilizados, y las
entrevistas realizadas. En el primer capítulo, se presentan los principales lineamientos y
referentes normativos en materia de reasentamiento, ahondando, al final, en lo que refiere
a la ciudad de Medellín. Además, se caracterizan los actores involucrados en el
reasentamiento en la ciudad, de cara a la propuesta metodológica. Relacionado con lo
anterior, en el mismo capítulo, se exponen los referentes teóricos y conceptuales, los
cuales permiten definir las categorías y variables de la investigación. Aquí se retoman
conceptos y planteamientos sobre el reasentamiento, la economía del bienestar, el riesgo
de empobrecimiento, el territorio, la economía popular, las redes vecinales entre otros
temas.
8 Como bien pudiese suceder con la materialización de otras decisiones de la planificación del territorio: Planes parciales de renovación, definición de áreas protegidas, entre otras disposiciones.
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En el segundo capítulo, se presentan los hallazgos en materia de la identificación de los
atributos territoriales del sector de Puerto Nuevo, del barrio Palermo (comuna 4 de
Medellín); los cuales fueron complementados con la información provista por otros actores
entrevistados. En el tercer capítulo se presenta la metodología de valoración económica
de los atributos territoriales. Finalmente se expone las conclusiones de este trabajo
investigativo, que se espera puedan ser tenidas en cuenta por parte de aquellas personas
y actores institucionales que se encargan de diseñar e implementar programas de
reasentamiento por la ejecución de obras públicas.
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1. Contexto y fundamentos teórico-conceptuales
Guiado por el propósito de develar ¿cuál es el enfoque de los procesos de
reasentamiento por obra de utilidad pública en Medellín?, y de identificar los elementos
teórico-conceptuales que posibiliten comprender ¿cuáles son los atributos del territorio
más valorados por la comunidad que lo habita?, a continuación, se realiza un recorrido
contextual sobre el proceso de reasentamiento de población. Posteriormente se presenta
el marco teórico-conceptual de esta investigación, en dónde se abordan, tanto el concepto
de reasentamiento de población, como el concepto de territorio.
1.1 Contexto jurídico institucional
A continuación, se presenta la revisión de lineamientos, normativas y recomendaciones
que a nivel internacional, nacional y local se han gestado entorno al reasentamiento de
población9. Dicha revisión hizo hincapié en la etapa previa del proceso reasentamiento, es
decir, esta se centra en las recomendaciones, estudios y análisis a realizar, de las
condiciones y dinámicas del territorio antes de la intervención. En este acápite se aborda
los planteamientos de instituciones multilaterales como el Banco Mundial y el Banco
Interamericano de Desarrollo con relación a las políticas operativas sobre reasentamiento
de población, en proyectos financiados por estas instituciones10. En el ámbito nacional, se
revisaron los acuerdos y convenios suscritos por el país, y la normatividad relacionada
con el desarrollo obras públicas y el reasentamiento. En el ámbito local se abordan los
decretos y acuerdos que se han suscrito en Medellín sobre el reasentamiento de
población. Finalmente, se presenta el análisis de actores involucrados en los procesos de
reasentamiento en la ciudad de Medellín.
9 No todos los lineamientos, convenios y normas tienen un carácter vinculante. Los lineamientos, convenios y normas, que se presentan a continuación se toman como referentes, que ayudan a delimitar y precisar los aspectos que se deben considerar en la noción de Bienestar Territorial. 10 Se considera importante señalar que no solamente el Banco Mundial y el Banco Interamericano cuentan con políticas de reasentamiento, otros organismos multilaterales poseen sus propios lineamientos. Se presentan estos dos casos como referentes internacionales sobre este aspecto.
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1.1.1 Reasentamiento poblacional para Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco Mundial (BM)
Si bien las políticas operativas sobre reasentamiento de población del BID y el Banco
Mundial abordan una amplia variedad de temas sobre el reasentamiento, el presente
ejercicio además de exponer la definición, los principios y objetivos de cada política
operativa, se subrayan los lineamientos que estas instituciones plantean en lo que refiere
a la lectura (estudio) del territorio objeto de intervención, es decir, el diagnóstico de la
situación previa a la intervención, también denominado línea base.
1.1.1.1 Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Política Operativa OP-710.
Con relación a los planteamientos del BID se extraen lo siguientes elementos:
Tabla 4. Descripción Política Operativa OP-710
Concepto Descripción Definición y alcance Esta política abarca todo desplazamiento físico involuntario de
personas causado por un proyecto del Banco. Se aplica a todas las operaciones financiadas por el Banco, tanto del sector público como del privado, en las cuales el financiamiento del Banco esté encauzado directamente (como en el caso de los préstamos de inversión) o sea administrado por intermediarios (programas de obras múltiples, por etapas o de crédito multisectorial). Excluye los planes de colonización, así como el asentamiento de refugiados o víctimas de desastres naturales.
Objetivo El objetivo de la política es minimizar alteraciones perjudiciales en el modo de vida de las personas que viven en la zona de influencia del proyecto, evitando o disminuyendo la necesidad de desplazamiento físico, y asegurando que, en caso de ser necesario el desplazamiento, las personas sean tratadas de manera equitativa y, cuando sea factible, participen de los beneficios que ofrece el proyecto que requiere su reasentamiento.
Consideraciones: Análisis del riesgo de empobrecimiento
– Pérdida de vivienda, tierras, acceso a propiedad común u otros derechos a bienes raíces, debido a la falta de titulación transparente, presiones económicas u otros factores.
– Pérdida de empleo� – Pérdida de acceso a los medios de producción.� – Inseguridad alimentaria y el aumento de la morbilidad y
mortalidad.
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– Desarticulación de las redes sociales. – Pérdida del acceso a la educación.
Principios por los que debe orientarse un programa de reasentamiento
1. Evitar o minimizar los desplazamientos de población 2. Asegurar la participación de la comunidad 3. Considerar el reasentamiento como una oportunidad de
desarrollo sostenible 4. Definir los criterios para la compensación 5. Compensar según el costo de reposición 6. Compensar la pérdida de derechos consuetudinarios
(establecidos por costumbre o tradición) 7. Crear oportunidades económicas para la población
desplazada 8. Proporcionar un nivel aceptable de vivienda y servicios 9. Tener en cuenta las cuestiones de seguridad 10. Los planes de reasentamiento deben tener en cuenta a la
población de acogida 11. Obtener información precisa (“estudios base”) 12. Incluir el costo del reasentamiento en el costo general del
proyecto 13. Tener en cuenta el marco institucional apropiado 14. Establecer procedimientos independientes de supervisión y
arbitraje Fuente: BID 1998 y BID 1999.
Según esta institución, el reasentamiento tiene que planificarse rigurosamente y estar
basados en información precisa y en un estudio detenido de los posibles efectos del
desplazamiento involuntario. Para cumplir esos objetivos es indispensable contar con
estudios detallados de base, los cuales deben (BID, 1999):
– Indicar los posibles riesgos para la población afectada. �
– Cuantificar con la mayor precisión posible el número de personas afectadas por el
proyecto.�
– Indicar los distintos grupos, sectores y poblaciones de que se trata y analizar las
formas concretas en que han de ser afectados (análisis de los directamente
interesados). �
Aunque el análisis de los posibles riesgos (ver Tabla 4) normalmente se centra en la
población que será involuntariamente desplazada, el BID (1999) reconoce que puede
haber otros grupos afectados, por ejemplo, la población que permanece en el lugar
original, como campesinos sin tierra o pequeños empresarios que pierden su empleo o su
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fuente de sustento; y las población receptora o “de acogida” que viven en el lugar a donde
se trasladará a la población a reasentar. Según el BID estas pueden ser consideradas
también como “personas afectadas por el proyecto” si el programa de reasentamiento
tiene efectos de importancia para sus bienes o medios de vida (BID,1999).
El BID recomienda que el diseño detallado del plan de reasentamiento requiere de un
estudio minucioso. En este sentido, esta institución plantea las principales categorías de
datos necesarias para un estudio de base. La lista expuesta a continuación, según se
expresa en la fuente, es indicativa y no se necesitará toda la información para todos y
cada uno de los proyectos.
Tabla 5. Esquema indicativo de un estudio de base
Zona geográfica afectada (zona de partida)
Ubicación geográfica de la zona del proyecto propuesto y viviendas que habrá que trasladar con mapas. De ser posible, habría que registrar la información en un programa informático SIG. Este sistema facilita el almacenamiento de datos, el trazado de mapas y la simulación de posibles lugares para el reasentamiento. Distancia de la vivienda afectada a los lugares de empleo y servicios básicos, tales como escuelas, centros de salud, mercados y centros comunitarios. Estos datos son útiles para analizar la red espacial que comprende a la población afectada. Uso de la tierra. Tierras agrícolas, tierras de pastoreo, tierras usadas para la minería y otros fines comerciales. Tierras comunes, ríos y lagos, cuando proceda, con un inventario de la flora y fauna que tenga importancia económica y para la alimentación. Utilización para fines de vivienda, comerciales e industriales. Solares desocupados para jardinería o actividades comerciales informales. Derechos oficiales y consuetudinarios sobre la tierra. Identificación y demarcación de la zona y registro de los títulos. Documentación de las modalidades de tenencia de la tierra y los derechos consuetudinarios sobre ella y utilización de recursos fuera del sistema jurídico oficial. Pautas históricas de ocupación, duración de la ocupación o de la residencia.
Características demográficas Número de unidades familiares/familias y personas afectadas. Es importante definir la unidad familiar y establecer los criterios para determinar los derechos a la compensación, a tierras o a solares para vivienda y cerciorarse de que se informe plenamente a los hogares afectados. La composición del hogar es variable, según la forma de organización social. Cada vez que sea posible, se deben preparar las definiciones de común acuerdo con la población afectada.
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Perfil demográfico por sexo y grupo de edad. Tasas de crecimiento de la población y proyecciones para los 5, 10 y 15 próximos años. Se debería tener en cuenta el crecimiento de la población, especialmente en los casos en que la solución que se proponga consista en canjear tierras por otras. Modalidades de migración. Unidades familiares o personas temporalmente ausentes. Incidencia y prevalencia de enfermedades.
Información socioeconómica Se trata de información detallada acerca de la magnitud de las pérdidas, necesaria para preparar medidas de mitigación adecuadas, y da además una idea de la organización y estructura de las comunidades o los grupos que habrá que reasentar. Diversidad étnica, lingüística y socioeconómica. Hay que determinar la base de la organización social, especialmente los factores que influyen en la forma en que se clasifica a las personas, con inclusión de la jerarquía socioeconómica, los grupos familiares o de parentesco, los grupos organizados sobre la base de su origen geográfico, su religión o sus aspiraciones socioeconómicas. Propiedad de la tierra, arrendamiento u otros sistemas de tenencia. Propiedad de la vivienda, el espacio para fines industriales y comerciales, arrendamiento y otros regímenes. Actividades de subsistencia, perfiles de empleo e ingreso de los principales grupos sociales, étnicos y económicos (por ejemplo, agricultores, obreros, artesanos, comerciantes, pequeños empresarios, microempresarios, trabajadores de servicios, trabajadores domésticos), ingreso disponible de los miembros de los hogares. Nivel de educación, alfabetización y escolaridad alcanzado. Acceso a los servicios básicos (agua, drenaje, alcantarillado, caminos de acceso, electricidad, transporte). Hay que incluir todos los medios informales por los cuales la gente obtiene servicios, como las conexiones ilícitas para el suministro de electricidad.
Organizaciones regionales y locales Organizaciones comunitarias y mecanismos de participación comunitaria, formales e informales. Organizaciones del comercio local, de productores, de comerciantes o sindicales; organizaciones religiosas, etc. Tipos y formas de conflictos dentro de la población afectada y facciones en que se dividen. Presencia y alcance de los organismos jerárquicos de gobierno y otros programas oficiales. Presencia, actividades y alcance de los organismos no gubernamentales.
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Actitud y expectativas de la población afectada
Expectativas con respecto a los lugares de reasentamiento, las soluciones de vivienda y las nuevas oportunidades económicas. Obstáculos sociales y culturales para llevar a buen término el reasentamiento (lugares de importancia cultural, apego al lugar). Noción del tiempo y de los requisitos temporales para trasladarse en la práctica como, por ejemplo, las exigencias del ciclo agrícola.
Inventario de tierras y vivienda Inventario de la tierra y los bienes personales afectados por el proyecto: características físicas de la tierra, infraestructura, casas y otras propiedades, tamaño estimado, antigüedad y tipo de construcción, características estructurales, estado de mantenimiento, estimaciones del valor de reposición. Inventario de espacios públicos o comunes, infraestructura u otros recursos productivos o sociales que se perderán: escuelas, centros de salud, templos, tierras comunes de pastoreo, acceso a bosques, zonas de pesca.
Fuente: BID 1999, pp. 16-19.
El BID (1999) destaca la importancia de un trato diferencial a población en condición
vulnerabilidad. Se menciona que si bien el reasentamiento es difícil para todos, para
quienes carecen relativamente de poder o están más profundamente apegados al lugar
en que viven o a su región de origen, este es especialmente traumático. Adicionalmente
plantean que:
Uno de los principales objetivos del análisis económico y social consiste en identificar
a los distintos grupos sociales, económicos y étnicos de la población afectada, especialmente los más vulnerables. En las zonas rurales, esos grupos pueden incluir
los pueblos indígenas, los pequeños agricultores, los trabajadores sin tierra y los hogares encabezados por una mujer. En las zonas urbanas habría que prestar
especial atención a las mujeres, los jóvenes y las personas de edad. (BID, 1999, p. 21)
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1.1.1.2 Banco Mundial (BM). Políticas Operacionales OP 4.12.
Con relación a los planteamientos del BM se extraen lo siguientes elementos:
Tabla 6. Descripción Política Operativa OP 4.12.
Concepto Definición
Definición y alcance
Esta política abarca los efectos económicos y sociales directos, resultantes de los proyectos de inversión financiados por el Banco y causados por a) la privación involuntaria de tierras, que da por resultado�
i) el desplazamiento o la pérdida de la vivienda; ii) la pérdida de los activos o del acceso a los activos, o iii) la pérdida de las fuentes de ingresos o de los medios de subsistencia, ya sea que los afectados deban trasladarse a otro lugar o no.
b) la restricción involuntaria del acceso a zonas calificadas por la ley como parques o zonas protegidas, con los consiguientes efectos adversos para la subsistencia de las personas desplazadas.
Objetivos
a) En la medida de lo posible, los reasentamientos involuntarios deben evitarse o reducirse al mínimo, para lo cual deben estudiarse todas las opciones viables de diseño del proyecto. b) Cuando el reasentamiento resulte inevitable, las actividades de reasentamiento se deben concebir y ejecutar como programas de desarrollo sostenible, que proporcionen recursos de inversión suficientes para que las personas desplazadas por el proyecto puedan participar en los beneficios del mismo. Es preciso celebrar consultas satisfactorias con las personas desplazadas y darles la
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Concepto Definición oportunidad de participar en la planificación y ejecución de los programas de reasentamiento. c) Se debe ayudar a las personas desplazadas en sus esfuerzos por mejorar sus medios de subsistencia y sus niveles de vida, o al menos devolverles, en términos reales, los niveles que tenían antes de ser desplazados o antes del comienzo de la ejecución del proyecto, cuando sea que presentaban los niveles más altos.
Fuente: Banco Mundial, 2001. Para la consecución de los objetivos de la OP 4.12, se utilizarán diferentes instrumentos
de planificación, según el tipo de proyecto:
Tabla 7. Instrumento de planificación, según tipo de proyecto financiado por el BM
Plan de reasentamiento El plan se basará en información actualizada y fiable sobre a) el reasentamiento propuesto y sus efectos sobre las personas desplazadas y otros grupos afectados negativamente, y b) las cuestiones jurídicas que plantea el reasentamiento. Este comprenderá, según el caso, los elementos que se citan continuación:
a) Descripción del proyecto b) Posibles efectos c) Objetivos d) Estudios socioeconómicos e) Marco jurídico� f) Marco institucional.� g) Elegibilidad h) Medidas de reasentamiento i) Elección y preparación del emplazamiento, y reubicación j) Servicios de vivienda, infraestructura y servicios sociales. k) Protección y gestión ambientales. l) Participación de la comunidad. m) Integración con las poblaciones de acogida n) Procedimientos de reclamación. o) Responsabilidades institucionales p) Calendario de ejecución. q) Costos y presupuestos r) Seguimiento y evaluación
Plan de reasentamiento abreviado
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Este se presenta cuando los efectos en la totalidad de la población desplazada sean mínimos11, o si el número de personas desplazadas es inferior a 200. Un plan abreviado comprenderá, como mínimo, los elementos siguientes:
a) Un censo de las personas desplazadas y la valoración de los activos. b) Una descripción de la compensación y otro tipo de asistencia para el reasentamiento
que se ha de proporcionar. c) La celebración de consultas con las personas desplazadas sobre alternativas
aceptables. d) Responsabilidad institucional por la ejecución y los procedimientos para la
compensación de las reclamaciones. e) Disposiciones sobre seguimiento y evaluación. f) Calendario y presupuesto.
Marco de políticas de reasentamiento
El propósito del marco de políticas es aclarar los principios del reasentamiento, las disposiciones institucionales y los criterios de diseño que se han de aplicar a los subproyectos que se prepararán durante la ejecución del proyecto (véanse los párrafos 26 a 28 del documento OP 4.12). Los planes de reasentamiento relativos a los subproyectos compatibles con el marco normativo se presentarán posteriormente al Banco para su aprobación una vez que se disponga de información concreta sobre la planificación (véase el párrafo 29 del documento OP 4.12).
Normas de procedimiento Se preparará un conjunto de normas de procedimiento cuando los proyectos financiados por el Banco provoquen restricciones de acceso a los recursos naturales en las zonas designadas parques por la ley y las zonas protegidas. El objetivo de las normas de procedimiento es establecer un proceso mediante el cual los miembros de las comunidades posiblemente afectadas participen en la formulación de los componentes del proyecto, la determinación de las medidas necesarias para lograr los objetivos de la política de reasentamiento, y la ejecución y el seguimiento de las actividades pertinentes del proyecto (véanse los párrafos 7 y 31 de la Política Operacional OP 4.12).
Fuente: Anexo A, OP 4.12 (BM, 2001)
Frente al Estudios Socioeconómico, el Anexo A de la OP 4.12 expone que estos deben
incluir lo expuesto en la siguiente tabla:
11 “Se considerará que los efectos son “mínimos” si las personas afectadas no resultan desplazadas físicamente y si se pierde menos del 10% de sus activos productivos” nota al pie número 25 de la OP 4.12.�
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Tabla 8. Contenido Estudio Socioeconómico OP 4.12. BM
Los resultados de un censo sobre:
i) los ocupantes actuales de la zona afectada con el fin de establecer una base para la formulación del programa de reasentamiento y de evitar que las personas que lleguen a establecerse en la zona posteriormente puedan acogerse al pago de indemnización y recibir asistencia para el reasentamiento; ii) las características típicas de las unidades familiares desplazadas, en particular una descripción de los sistemas de producción, la mano de obra y la organización familiar; e información sobre los medios de subsistencia (en particular, los niveles de producción y los ingresos derivados de actividades económicas tanto formales como informales) y los niveles de vida (inclusive el estado de salud) de la población desplazada; iii) la magnitud de la pérdida prevista –total o parcial– de activos, y el alcance del desplazamiento, físico o económico; iv) información sobre grupos o personas vulnerables según lo dispuesto en el párrafo 8 del documento OP 4.12, respecto de los cuales tal vez sea necesario establecer disposiciones especiales, y v) disposiciones para la actualización a intervalos regulares de la información sobre los medios de subsistencia y los niveles de vida de la población desplazada a fin de que en el momento de su desplazamiento se disponga de la información más reciente.
Otros estudios en los que se describa lo siguiente: i) los sistemas de tenencia y transferencia tierras, en particular un inventario de los recursos naturales de propiedad común de los cuales las personas obtienen sus medios de subsistencia y su sustento, los sistemas de usufructo sin título de propiedad (inclusive los derechos de pesca, pastoreo o utilización de zonas forestales) que se rigen por mecanismos de asignación de tierras reconocidos localmente, y los problemas que puedan plantear los sistemas de tenencia diferentes en la zona del proyecto; ii) las modalidades de interacción social en las comunidades afectadas, en particular las redes sociales y los sistemas de apoyo social, y la forma en que las afectará el proyecto; iii) los servicios públicos de infraestructura y los servicios sociales que resultarán afectados, y iv) las características sociales y culturales de las comunidades desplazadas, en particular una descripción de las instituciones formales e informales (por ejemplo, organizaciones comunitarias, grupos rituales, organizaciones no gubernamentales [ONG]) que puedan tener importancia para la estrategia de consultas y para la elaboración y ejecución de las actividades de reasentamiento.
Fuente: Anexo A, OP 4.12 (BM, 2001) Se destaca por parte del Banco Mundial, la especial atención sobre a grupos vulnerables,
así la OP 4.12 incluye a aquella población que se encuentra por debajo de la línea de
pobreza, a los que carecen de tierras, los ancianos, las mujeres y los niños, las
poblaciones indígenas, las minorías étnicas, u otras personas desplazadas que tal vez no
estén protegidas por la legislación nacional sobre indemnización de tierras (2001, p.4).
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1.1.2 Normatividad sobre el reasentamiento poblacional en Colombia
En Colombia, se encuentran vigentes al momento del desarrollo de esta investigación, las
siguientes normas de carácter internacional y nacional, que se relacionan de manera
directa con el reasentamiento de población y el proceso de adquisición de los predios
requeridos para la construcción de las obras de infraestructura:
Tabla 9. Compendio de lineamientos y normas relacionadas con el reasentamiento
Concepto Descripción
Principios Rectores de los Desplazamientos forzados internos. Organización de las Naciones Unidas –ONU– (11 de febrero de 1998)12
Todo ser humano tendrá derecho a la protección contra reasentamientos arbitrarios que le alejen de su hogar o de su lugar de residencia habitual (Principio 6). � Se encuentran prohibidos internacionalmente los reasentamientos arbitrarios en caso de proyectos de desarrollo en gran escala, que no estén justificados sobre un interés público superior o primordial (Principio 6). � Antes de decidir el desplazamiento de personas las autoridades competentes se asegurarán que se han explorado todas las alternativas viables para evitarlo. Cuando no quede ninguna alternativa, se tomarán todas las medidas necesarias para minimizar el desplazamiento y sus efectos adversos (Principio 7). � Las autoridades responsables del desplazamiento se aseguran en la mayor medida posible de que se facilita alojamiento adecuado a las personas desplazadas en condiciones satisfactorias de seguridad, alimentación, salud e higiene y que no se separan a los miembros de la misma familia (Principio 7). � Se buscará contar siempre con el consentimiento
12 La importancia de este documento ha sido destacada por la Corte constitucional de Colombia en sentencias como la SU.1150/00, la sentencia T-327/01, la sentencia T-025/04, entre otras. Por lo anterior estos principios se consideran un importante referente sobre el tema.
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Concepto Descripción libre e informado de los desplazados (Principio 7). � Las autoridades competentes tratarán de involucrar a las personas afectadas en particular las mujeres en la planificación y gestión de su reasentamiento (Principio 7). Se deberán adoptar medidas adecuadas para facilitar a los futuros reasentados información completa sobre las razones y procedimientos de su desplazamiento y, en su caso, sobre la indemnización y reasentamiento (Principio 7). El desplazamiento no se llevará a cabo de tal manera que viole los derechos a la vida, dignidad, libertad y seguridad de los afectados (Principio 8).
La Convención de San José de Costa Rica de la Organización de los Estados Americanos (Pacto de San José, 22 de noviembre de 1969)
Ratificado por la Ley 16 de 1972 en su artículo 21º consagra: Toda persona tiene derecho al uso y goce de sus bienes. La ley puede subordinar el uso y goce al interés social. Ninguna persona puede ser privada de sus bienes, excepto mediante el pago de indemnización justa, por razones de utilidad pública o de interés social y en los casos y según las formas establecidas en la ley.
Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (16 de diciembre de 1966) Aprobado en la Ley 74 de 1968.
El Comité de los DESC por medio de la Observación general Nº 4 de 1977 del derecho a una vivienda adecuada, donde se concretan las condiciones que configuran el carácter “adecuado” de la vivienda: […] 1. De conformidad con el párrafo 1 del artículo 11 del Pacto, los Estados Partes "reconocen el derecho de toda persona a un nivel de vida adecuado para sí y su familia, incluso alimentación, vestido y vivienda adecuados, y a una mejora continua de las condiciones de existencia". Reconocido de este modo, el derecho humano a una vivienda adecuada tiene una importancia fundamental para el disfrute de todos los derechos económicos, sociales y culturales. De otro lado en la Observación general Nº 7 se da una especial atención a la seguridad jurídica de la tenencia y al fenómeno de los “desalojos forzados”, en relación al tema en cuestión expresa:
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Concepto Descripción [...] 7. Hay otros casos de desalojos forzosos que tienen lugar en nombre del desarrollo. Pueden efectuarse en relación con conflictos sobre derechos de tierras, proyectos de desarrollo e infraestructura como, por ejemplo, la construcción de presas u otros proyectos energéticos en gran escala, la adquisición de tierras para programas de renovación urbana, rehabilitación de viviendas o embellecimiento de ciudades, el desbroce de tierras para fines agrícolas, la especulación desenfrenada de terrenos o la celebración de grandes acontecimientos deportivos tales como los juegos olímpicos.
Ley 56 de 1981 “Por la cual se dictan normas sobre obras públicas de generación eléctrica y acueductos, sistemas de regadío y otras y se regulan las expropiaciones y servidumbres de los bienes afectados por tales obras”
De esta Ley se destaca los Artículos 9º y 10º, en donde se enuncia la declaratoria de utilidad pública del proyecto, la condiciones para realizar los avalúos y el reconocimiento de las primas especiales de reubicación familiar y de negocio. De igual forma es importante resaltar el TÍTULO II, donde se aborda los temas de las expropiaciones y servidumbres.
Constitución Política de Colombia 1991
La Constitución Política de Colombia (Congreso de la República, 1991), si bien no de manera explícita, hace alusión a diferentes aristas relacionadas con los procesos de reasentamiento. A continuación, se enuncias los artículos identificados: Artículo 2º. “[...] Las autoridades de la Republica están constituidas para proteger a todas las personas residentes en Colombia, en su vida, honra, bienes, creencias, y demás derechos y libertades y para asegurar en cumplimiento de los deberes sociales del estado y de los particulares.” Artículo 5º. “El Estado reconoce, sin discriminación alguna, la primacía de los derechos inalienables de la persona y ampara a la familia como institución básica de la sociedad”. Artículo 51º. “Todos los colombianos tienen derecho a vivienda digna. El Estado fijará las condiciones necesarias para hacer efectivo este derecho y promoverá planes de vivienda de interés
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Concepto Descripción social, sistemas adecuados de financiación a largo plazo y formas asociativas de ejecución de estos programas de vivienda.” Artículo 58º. “Se garantizan la propiedad privada y los demás derechos adquiridos con arreglo a las leyes civiles, los cuales no pueden ser desconocidos ni vulnerados por leyes posteriores. Cuando de la aplicación de una ley expedida por motivos de utilidad pública o interés social, resultare en conflicto los derechos de los particulares con la necesidad por ella reconocida, el interés privado deberá ceder al interés público o social.” Artículo 90º. “El Estado responderá patrimonialmente por los daños antijurídicos que le sea imputables, causados por la acción u omisión de las autoridades públicas...” Artículo 311º. “Al municipio como entidad fundamental de la división político-administrativa del Estado le corresponde prestar los servicios públicos que determine la ley, construir las obras que demande el progreso local, ordenar el desarrollo de su territorio, promover la participación comunitaria, el mejoramiento social y cultural de sus habitantes y cumplir las demás funciones que le asignen la Constitución y las leyes.”
Ley 99 de 1993 “Por la cual se crea el Ministerio del Medio Ambiente, se reordena el Sector Público encargado de la gestión y conservación del medio ambiente y los recursos naturales renovables, se organiza el Sistema Nacional Ambiental –SINA y se dictan otras disposiciones”.
De esta Ley se destaca lo relacionado con el Artículo 57. “Del Estudio de Impacto Ambiental. Se entiende por Estudio de Impacto Ambiental el conjunto de la información que deberá presentar ante la autoridad ambiental competente el peticionario de una Licencia Ambiental. El Estudio de Impacto Ambiental contendrá información sobre la localización del proyecto, y los elementos abióticos, bióticos y socioeconómicos del medio que puedan sufrir deterioro por la respectiva obra o actividad [...]”
Ley 388 de 1997 “Por la cual se modifica la Ley 9 de 1989, y la Ley 2 de 1991 y se dictan otras disposiciones”
De esta Ley se destaca el numeral 3 del Artículo 3º (Función pública del urbanismo) el cual menciona que uno de los fines de la función pública es “Propender por el mejoramiento de la calidad de vida de los habitantes, la distribución equitativa de
35
Concepto Descripción las oportunidades y los beneficios del desarrollo y
la preservación del patrimonio cultural y natural.” De igual forma es importante resaltar los siguientes artículos: el Artículo 58, el cual relaciona los motivos de utilidad pública, entre otras situaciones. El Artículo 61 que expone lo relacionado a la Enajenación Voluntaria; y el Artículo 62 referido al procedimiento para la expropiación. Esta Ley en su Artículo 138º deroga los artículos 39º, 40º, 41º, 42º y 43º de la Ley 9 de 1989, los cuales referían a la protección de los moradores en los proyectos de renovación urbana.
Ley 1682 de 2013 “Por la cual se adoptan medidas y disposiciones para los proyectos de infraestructura de transporte y se conceden facultades extraordinarias.”
En relación al reasentamiento poblacional esta Ley, en el Capítulo I, del Título IV, Gestión y adquisición predial, gestión ambiental, activos y redes de servicios públicos, de tic y de la industria del petróleo, entre otros y permisos mineros y servidumbres, expone las consideraciones sobre la “Gestión y Adquisición Predial”. En este Capítulo se denotan los aspectos jurídicos, y lo relacionado a los avalúos, en el marco de la consecución de los predios y mejoras requeridas para el desarrollo de los proyectos.
Ley 1742 de 2014 “Por la cual se adoptan medidas y disposiciones para los proyectos de infraestructura de transporte, agua potable y saneamiento básico, y los demás sectores que requieran expropiación en proyectos de inversión que adelante el Estado y se dictan otras disposiciones.”
En esta Ley se exponen algunas precisiones a las directrices presentadas en la Ley 1682 de 2013, respecto a procedimientos y trámites en la “Gestión y Adquisición Predial”, para los proyectos a los que refiere esta Ley.
Fuente: Elaboración propia con base en los convenios, principios y normas mencionados. Otro referente a considerar es el Marco de Política de Reasentamiento para la realización
del Proyecto Nacional de Transporte Urbano13 (Ministerio de Transporte–Proyecto
Nacional de Transporte Urbano, 2015). A partir de la influencia de la banca multilateral
13 Si bien se reconoce que este Marco de Política de Reasentamiento no aplica para todo el sector transporte del país, sino solamente para los proyectos que se ejecutan bajo dicho Proyecto, se considera valioso relacionarlo para tenerlo en consideración, como referente, en el marco de la ejecución de proyectos de infraestructura con similares características.
36
(Banco Interamericano de Desarrollo - BID y el Banco Mundial), para el caso del sector
transporte, a nivel nacional se definen esta normativa que toma en cuenta el
reasentamiento de población dentro de sus impactos:
Tabla 10. Marco de Política de Reasentamiento para la realización del Proyecto Nacional de Transporte Urbano
Concepto Descripción
Objetivos
– Mitigar y compensar los impactos causados por el desplazamiento involuntario cuando éste sea inevitable.
– Apoyar el Restablecimiento de las condiciones socioeconómicas de la población desplazada. �
– Generar un marco de actuación integral y planificado orientado a la atención y acompañamiento de la población objeto del reasentamiento, en especial aquellas que deben �desplazarse físicamente, mediante planes de reasentamiento. �
– Convertir el reasentamiento en una oportunidad para contribuir al mejoramiento del �ordenamiento territorial y urbanístico de las ciudades.
Principios
– Minimizar el desplazamiento de población. – Restablecimiento de condiciones
socioeconómicas. – Inclusión – Equidad – Igualdad – Comunicación� – Consulta – Transparencia – Celeridad – Mejoramiento Urbano
Lineamientos
– El Estado debe procurar que sus acciones de desarrollo y ordenamiento estén orientadas al beneficio colectivo, intentando reducir al máximo el desplazamiento de población. �
– Los entes gestores deberán revisar y analizar los
resultados de los diferentes estudios técnicos, sociales y ambientales con el fin de minimizar los impactos y la adquisición predial.
�
37
Concepto Descripción – La formulación y ejecución del plan de
reasentamiento requiere de la planeación, coordinación y articulación con las etapas técnicas del proyecto. �
– El proceso de reasentamiento deberá realizarse
de manera objetiva, técnica y soportada, con el fin de garantizar la transparencia del mismo. �
– Los estudios preliminares, el censo y el
diagnóstico demográfico, social, económico y cultural, como la relación de las unidades sociales con el predio y los impactos previstos, se constituyen en la línea base cuantitativa y cualitativita para la formulación, ejecución, seguimiento y evaluación del plan de reasentamiento y, en el insumo para el análisis de la factibilidad social de la obra. �
– El reasentamiento deberá apoyar el mejoramiento del nivel de vida de la población que se encuentra impactada por el proyecto, en especial aquellas personas o unidades sociales en condiciones de extrema pobreza, vulnerabilidad social, informalidad, y precarias formas de habitabilidad. �
– Cada ente gestor deberá realizar procesos de planeación a corto, mediano y largo plazo con el fin de garantizar la conformación de los equipos profesionales y los recursos necesarios para llevar a cabo los procesos de reasentamiento de manera eficiente y eficaz, en cumplimiento de los objetivos de la política. �
– El reasentamiento deberá ser una oportunidad
de desarrollo social y por ello, es requisito el acompañamiento y asesoría integral a la población en todas las etapas y programas del plan.
– En la planeación del reasentamiento se deberá identificar y coordinar acciones con los diferentes actores institucionales, que representen los sectores para dar atención integral a la población
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Concepto Descripción afectada. �
– Durante el proceso de reasentamiento, se deberá mantener una comunicación, seguimiento y retroalimentación constante con la población sujeto, con el fin de tomar los correctivos para minimizar los impactos. �
– El reasentamiento como parte del proceso de
ordenamiento territorial y la construcción de ciudad deberá contribuir a la formación de una cultura ciudadana que promueva la operación y el cuidado del sistema de transporte. �
Fuente: Ministerio de Transporte–Proyecto Nacional de Transporte Urbano, 2015. En lo que refiere a la planificación del reasentamiento, dicho marco enuncia lo siguiente:
Tabla 11. Planificación del reasentamiento según Marco de Política de Reasentamiento para la realización del Proyecto Nacional de Transporte Urbano
Concepto Descripción Estudios preliminares En esta primera fase, se encuentra el
levantamiento y análisis de la información primaria y secundaria en relación, tanto con el reconocimiento e identificación territorial y predial donde se localizan las obras, así como el poblacional, lo que permite preliminarmente:
– El análisis territorial en relación con las dinámicas urbanas, sociales, culturales y económicas del sector a intervenir con las obras del sistema de transporte. �
– La delimitación del área a intervenir y la identificación predial inicial, insumo para la realización del registro poblacional. �
– Elaboración del registro de población, sujeto al posible reasentamiento para determinar la magnitud de afectaciones, de su condición legal, social, económica y cultural. �
39
Concepto Descripción – Previsión de impactos en relación de
los predios afectar y su ocupación, destino o utilización. �
– Perfil de los programas necesarios para abordar la mitigación. �
– Identificación de información y de documentación que se requerirá, sobre la relación, y�condición, que las unidades sociales tienen con el predio o inmueble. �
– Identificación de coordinaciones interinstitucionales e intersectoriales que demandaran las etapas �técnicas en especial para la elaboración de avalúos y reposición de niveles de vida. �
– Reconocimiento de acciones para el acceso a los servicios sociales públicos y privados para la vinculación de las unidades sociales.
– Inventario local de posibles alternativas habitacionales y productivas acorde con la información �territorial prevista. �
Diagnóstico:
El censo Tiene como propósito identificar, enumerar y georreferenciar todas las unidades sociales y económicas presentes en los predios determinados, las principales características de la población, así como brindar el insumo para la identificación y determinación de la elegibilidad, de los impactos, vulnerabilidades y condiciones frente al proceso de reasentamiento. El diagnóstico socioeconómico Consiste en el procesamiento y análisis de toda la información recopilada tanto en el censo como en el estudio preliminar, con el objeto de identificar y caracterizar las unidades sociales, desde el punto de vista social, cultural, económico y técnico habitacional; posibilita un conocimiento real y
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Concepto Descripción concreto de una situación sobre la que se va a intervenir, permitiendo dar cuenta de los distintos elementos que son necesarios para implementar acciones orientadas identificar los impacto positivos y negativos y el grado de vulnerabilidad de la población, para formular el Plan de reasentamiento y sus programas. Variables a tener en cuenta para la elaboración del Diagnóstico
– Dimensión espacial Se refiere al proceso de desarrollo histórico del asentamiento, su proceso de consolidación, la dinámica de las relaciones existentes y los actuales usos que se hacen de él, con el fin de determinar la dinámica de la ocupación del espacio y de la población.
– Dimensión física Contempla las características de la infraestructura y el equipamiento básico existente en el área de estudio y en cada uno de los predios afectados (uso y relación habitacional, condición de tenencia, servicios públicos, medios de transporte, servicios institucionales o comunitarios y tipos de construcciones existentes).
– Dimensión de demográfica Incluye la estructura por edad, sexo y género, estado civil, el porcentaje y característica de la población económicamente activa, tipo de familias y relaciones de parentesco, niveles de escolaridad, ocupación y lugares de desarrollo de las ocupaciones.
– Dimensión económica Contempla los ingresos económicos de cada unidad social, el porcentaje de estos ingresos
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Concepto Descripción que son derivados del inmueble afectado y del entorno, el tipo de ocupación, el lugar de trabajo y su distancia del lugar de residencia, y en general, las estrategias de subsistencia familiar. En el caso de industrias, comercios o servicios, se analizará el tipo de actividad, su área de cobertura, el tipo de clientela, número y domicilio de los trabajadores, el nivel de ventas y la posibilidad para su reubicación. Cuando se trate de vendedores informales que ocupan el espacio público, deberán contabilizarse. La recolección de información relacionada con los ocupantes permanentes del espacio público podrá hacerse mediante encuesta cuyo formato debe ser pre-elaborado.
– Dimensión social Se refiere al nivel de vida y cohesión social de las unidades sociales (acceso a servicios sociales, de educación y nivel educativo, de salud, y seguridad social, de participación y organizaciones sociales); de la población vulnerable (mujeres, adultos mayores, menores de 5 años, en condición de discapacidad), del acceso y vinculación a programas de bienestar social públicos o privados, de comportamientos de movilidad de la población y de las relaciones de vecindad, entre otros.
– Dimensión psicosocial Datos como los niveles de satisfacción con el entorno, los vecinos, la vivienda y las expectativas ante el reasentamiento, permitirán evaluar la disposición o resistencia al desplazamiento y el grado de stress que este generará en las personas.
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Concepto Descripción – Dimensión cultural
Relacionada con normas, costumbres y redes sociales y económicas que puedan ser relevantes en el proceso de desplazamiento y reasentamiento.
Identificación de impactos En esta etapa se identifican, evalúan y analizan los impactos que enfrentarán los propietarios y residentes, poseedores, tenedores y ocupantes de los inmuebles requeridos por el proyecto, para poder definir las medidas de mitigación y compensación correspondientes. Para el Plan de Reasentamiento la tenencia y el uso del inmueble, son factores determinantes en la identificación de los impactos en consideración al tipo de desplazamiento. Impactos
– Pérdida parcial del inmueble. – Pérdida total del inmueble. – Pérdida de la vivienda – Pérdida parcial o total de los
ingresos. – Pérdida de acceso a la educación o
incremento en costos de transporte para la asistencia.
– Pérdida de acceso a la salud o incremento en costos de transporte para la asistencia.
– Pérdida de redes sociales e incremento en costos para cubrir falta de apoyo.
– Pérdida de organizaciones sociales Fuente: Ministerio de Transporte–Proyecto Nacional de Transporte Urbano, 2015.
1.1.3 Normatividad sobre el Reasentamiento poblacional en Medellín
Con relación a la normatividad local, es posible encontrar directrices y decretos
municipales que han empezado a delimitar y manejar aspectos relacionados con los
procesos de reasentamiento en la ciudad de Medellín, tales como:
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Tabla 12. Lineamientos y normas sobre el reasentamiento poblacional en Medellín.
Concepto Descripción Decreto Nº 2320 de 2005 “Por el cual se adopta la metodología para el pago de compensaciones” Así como los decretos que lo modifican y adicionan, tales como: decreto Nº 500 de 2006 y el Decreto Nº 1885 de 2006
Se constituye como una de las primeras normas en la ciudad de Medellín que contemplan directrices con relación a desplazamiento involuntario de población y la afectación a actividades económicas por obras públicas.
Decreto Nº 2339 de 2013 “Por el cual se reglamenta la administración, postulación y asignación del subsidio municipal de vivienda del municipio de Medellín.”
Sección III población reasentada en razón de obras de interés general. En los Artículos del 27 al 29 se exponen las modalidades, los requisitos y el valor del subsidio para esta población.
Decreto Nº 1571 de 2014 “Por el cual se modifica el parágrafo tercero del Artículo 29 del Decreto Nº 2339 de 2013.”
Se estipula que le corresponderá a la entidad responsable o ejecutora de las obras de interés general, la transferencia al Administrador del subsidio de los recursos necesarios para la aplicación del subsidio de vivienda en sus diferentes modalidades, toda vez que se cumplan los requisitos establecidos para acceder a este subsidio, según Decreto Nº 2339 de 2013.
Decreto Nº 543 de 2013 “Por el cual se regula el pago de compensaciones por enajenación voluntaria”
Con este Decreto se introducen mejoras en el Decreto 2320 de 2005 y se amplía el rango de las compensaciones, incluyendo la compensación por expensas en curaduría, por gastos de escolarización, por compras parciales, por traslado especial.
Decreto Nº 965 de 2014 “Por el cual se modifica el decreto municipal Nº 543 de 2013”
Se adiciona el pago de la compensación de desconexión de servicios públicos, por arrendamiento temporal. En artículo 4º se menciona que las compensaciones establecidas en el Decreto 543 de 2013, “son indicativas y por lo tanto no excluye otros conceptos que sean necesarios para facilitar el traslado y/o mitigar los impactos socioeconómicos negativos a la población que se encuentre asentada en las zonas de intervención. El comité de compensaciones será el encargado de estudiar y decidir sobre estos reconocimientos especiales de conformidad con
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Concepto Descripción lo establecido en el artículo noveno del decreto 543 de 2013”
Decreto Nº 478 de 2014 “Por el cual se establece el reconocimiento de compensaciones por el desplazamiento de actividades económicas informales”
Se pronuncia frente a las actividades económicas informales que deben ser desplazadas involuntariamente, y que no hagan parte de un proceso de enajenación voluntaria, pero cuya actividad se desarrolla en cercanía a los inmuebles ubicados en el área de influencia de los proyectos de utilidad pública e interés social.
Acuerdo Nº 048 de 2014. “Por medio del cual se adopta la revisión y ajuste de largo plazo del Plan de Ordenamiento Territorial del Municipio de Medellín y se dictan otras disposiciones complementarias”
Se destaca el principio el principio rector Nº 8, La Protección a Moradores. Como fundamento de la intervención en el territorio para la protección de los habitantes de sectores en procesos de transformación y a los demás actores económicos, […] el cual promueve un ordenamiento territorial democrático e incluyente, que le apueste a la población como el centro de sus decisiones, y a su bienestar, como el objetivo principal. Adicionalmente se define en el Subsistema Habitacional, el programa Reasentamiento integral de población (Anexo 6, Acuerdo Nº 048 de 2014). El programa procesa la variable estratégica del sistema habitacional “valoración del patrimonio familiar y colectivo”, en reconocimiento de la producción y construcción social del hábitat como activo esencial de las personas, los hogares, las comunidades y la sociedad, el cual puede verse afectado por la adquisición de inmuebles por motivos de utilidad pública o interés social, o por la localización en zonas de alto riesgo no mitigable.
Diagnóstico del Sistema Municipal Habitacional que hace parte del Plan Estratégico Habitacional de Medellín – PEHMED – 2020.
Define en el análisis estructural del sistema habitacional, componente 2. Cobertura y calidad, la variable valoración del patrimonio familiar y colectivo (variable estratégica Nº7), la cual se entiende como el reconocimiento de la producción social del hábitat como activo esencial de las personas, los hogares y las comunidades.
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Concepto Descripción Decreto 1091 de 2017 “Por medio del cual se regula el reconocimiento de indemnizaciones económicas dentro del proceso de adquisición de bienes inmuebles para proyectos de utilidad pública”
Este Decreto municipal deroga los decretos 543 de 2013, 965 de 2015 y 478 de 2014. En este se determinan los métodos, criterios, parámetros y procedimiento para el reconocimiento de las indemnizaciones económicas dentro del proceso de adquisición de bienes inmuebles y mejoras para proyectos de utilidad pública, en el marco de las Leyes 9 de 1989 y 388 de 1997, y demás normas que regulan la materia.
Fuente: Elaboración propia con base en la normativa y diagnóstico relacionados. En adición a la anterior normatividad, la ciudad de Medellín tiene un instrumento
denominado “Guía de manejo socioambiental para la construcción de obras de
infraestructura pública”. Esta guía es el instrumento técnico de manejo ambiental y social,
para los proyectos que no requieren licencia ambiental para su ejecución. En la guía se
establecen lineamientos como el Plan de Acción Socioambiental en Obra (PASAO), sobre
el manejo de aspectos ambientales inherentes a la actividad constructiva, y la inserción y
adopción de los proyectos de infraestructura en el medio social (Alcaldía de Medellín,
2014).
La guía consta de tres fases, de acuerdo con las actividades que se deben realizar
durante todo el proceso constructivo, desde la etapa contractual, así: La fase de
planificación, la fase de ejecución y la fase de verificación. La guía está dirigida a todos
los actores involucrados, de una u otra forma, en el ciclo del proyecto; tanto entes
centralizados y descentralizados del municipio de Medellín, como contratistas o ejecutores
de la obra, interventorías o supervisión (ibíd.).
Si bien en la fase de planificación la guía expone una Gestión social preliminar, en donde
se definen propósitos, objetivos, alcance, principios, momentos y acciones14 de la gestión
14 Al respecto se destaca el Diagnóstico social (Alcaldía de Medellín, 2014, p.45). Este tiene como finalidad establecer la caracterización de la comunidad con la identificación de los posibles actores. Tiene en cuenta los siguientes aspectos: 1) Localización de los barrios que se verán impactados por la obra. 2) Definición de características socioeconómicas de la población (Estrato, actividad económica, posibles cambios económicos, sociales, institucionales y culturales que la obra producirá; niveles de empleo y desempleo en el sector, empleo formal e informal, entre otros). 3) Situación de orden público en el entorno inmediato al proyecto y de la comuna en la cual se desarrollará la obra. 4) identificación del número de predios ubicados en el área de intervención,
46
social, es en la fase de ejecución (Gestión social) en donde explícitamente se abordan los
procesos de reasentamiento.
El programa de reasentamiento individual o colectivo, presentado en esta guía, relaciona
los impactos que el traslado le implica a una población o a un grupo familiar; este
programa incluye el conjunto de acciones organizadas, planeadas e informadas a la
población que se debe trasladar, y están orientadas al desarrollo económico y social de
ésta y al ordenamiento urbano de la ciudad. En la guía se destaca la necesidad de
identificar y reconocer todas las características de la población antes de la ejecución del
proyecto, desde los aspectos sociales, demográficos, económicos y culturales; aspectos
que influyen en la posición relativa de ventaja y desventaja social de una población, sobre
un territorio y hábitat que ocupa (Alcaldía de Medellín, 2014).
La guía destaca que los impactos más representativos producto del reasentamiento son
los siguientes:
Tabla 13. Impactos del reasentamiento según Guía de manejo socioambiental
Variables que determinan el impacto Impactos ocasionados Categorías
Afectación parcial del inmueble
Pérdida parcial del inmueble Propietarios o poseedores con afectación parcial
Afectación total del inmueble Pérdida total del inmueble Propietarios, poseedores Residencia en el inmueble Pérdida de la vivienda Propietarios, poseedores,
arrendatarios, usufructuarios, tenedores residentes
Actividad económica en el inmueble afectado, o en el área afectada, o renta derivada del inmueble
Pérdida parcial o total de los ingresos
Rentistas, propietarios de comercios, industrias o servicios
Traslado o cierre de industria, comercio o servicio que requiere liquidación de empleados
Pérdida del empleo Empleados y trabajadores de industrias, comercios o establecimientos de servicio que serán liquidados
tipo de tenencia y si es necesaria su adquisición. 5) Población aproximada que se verá influenciada y beneficiada por la construcción y operación de la obra. 6) Reconocimiento de los medios de comunicación existentes en la zona. 7) Establecimiento de relaciones interinstitucionales para coordinar y planear las acciones sociales. 8) Identificación de las organizaciones sociales de base y establecimiento de sus respectivos contactos.
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Lugar de asistencia para la educación
Pérdida de acceso a la educación o incremento en costos de transporte para la asistencia
Población en edad escolar que estudia cerca de su vivienda y no utiliza transporte para llegar al establecimiento educativo
Lugar de asistencia para los servicios de salud
Pérdida de acceso a la salud o incremento en costos de transporte para la asistencia
Población que asiste a centros de Salud u Hospitales cercanos y que no utiliza transporte
Apoyo y solidaridad por parte de familiares que viven cerca, o de vecinos
Pérdida de redes sociales de apoyo e Incremento en costos
Población que recibe apoyo de familiares o vecinos
Participación comunitaria Pérdida de organizaciones comunitarias
Población que participa en las organizaciones sociales locales
Fuente: Guía de manejo socioambiental para la construcción de obras de infraestructura pública (Alcaldía de Medellín, 2014, p. 137)
La guía menciona que el programa de reasentamiento debe estar orientado y
acompañado por la entidad municipal que lidera el tema de vivienda; adicionalmente, se
mencionan otros aspectos importantes a tener en cuenta, para favorecer la visión integral
de la intervención (Ibíd.). Algunos subprogramas sugeridos son:
Tabla 14. Subprogramas plan de reasentamiento de la Guía de Manejo Socioambiental
– Subprograma de información y consulta. – Subprograma de adquisición de predios. – Subprograma de inmuebles de reposición. – Subprograma de entrega y demolición de predios. – Subprograma de atención a arrendatarios. – Subprograma de restablecimiento de condiciones económicas. – Reconocimiento por los impactos económicos, trámites, traslados, etc. – Reconocimiento para restablecimiento de ingresos, pérdida de actividad productiva,
por liquidación de trabajadores, por renta del inmueble (total o parcial) a ocupantes del espacio público.
– Subprograma de restablecimiento de condiciones sociales, servicios de educación y salud, organización y participación comunitaria.
– Sistema de seguimiento y monitoreo. Fuente: Guía de Manejo Socioambiental para la construcción de obras de infraestructura pública
(Alcaldía de Medellín, 2014, pp. 137-138) En vista de lo antes descrito, es preciso mencionar que los planteamientos de las políticas
operativas del Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo, proponen un
enfoque del reasentamiento que parte de la planificación (a la par de la formulación del
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proyecto), la minimización de los reasentamientos cuando sea posible, la articulación y
armonización de las intervenciones con los territorios en donde se emplaza. Consecuente
con esto, desde estas instituciones se promulga que los reasentamientos se planifiquen y
ejecuten como un proyecto de desarrollo sostenible prestando particular atención a la
participación de los individuos y actores sociales interesados (Banco Mundial, 2001; BID,
1999).
De otro lado, se identifica que salvo las directrices y lineamientos promovidos por Banco
Mundial y del Banco Interamericano de Desarrollo (se incluye aquí el Marco de Política de
Reasentamiento para la realización del Proyecto Nacional de Transporte Urbano), no se
identifica una orientación normativa de carácter nacional clara y específica para el
reasentamiento; así, las acciones públicas y privadas se desarrollan en el marco de leyes
y decretos relacionados con la adquisición de predios, su valoración financiera (avalúos) y
el reconocimiento de compensaciones y subsidios, lo que determina que el
reasentamiento se ejecute más como una acción complementaria en el marco del
desarrollo de las intervenciones u obras. Lo antes señalado permite entender porque cada
institución aborda de forma discrecional los reasentamientos, aplicando, según
lineamientos propios, los procedimientos y procesos para tal fin. En el caso específico de
Medellín15, se identifica que la institución que se encarga de los procesos de
reasentamiento en la ciudad es el Instituto Social de Vivienda y Hábitat de Medellín
(ISVIMED).
Como se pudo observar en esta revisión normativa, el foco está en la reposición de la
vivienda, mediante el subsidio municipal de vivienda16, en el resarcimiento económico por
los gastos en que incurra el sujeto impactado por el proyecto de utilidad pública como
consecuencia de la adquisición de un bien inmueble o mejora, y el reconocimiento
económico por los ingresos o utilidad neta que una persona natural o jurídica dejará de
percibir por contratos u otras actividades económicas, como consecuencia de la
adquisición de un bien inmueble o mejora por este mismo hecho.
15 Con excepción de Metroplús, cuyas intervenciones están enmarcadas en el Marco de Política de Reasentamiento para la realización del Proyecto Nacional de Transporte Urbano. Dado lo anterior, Metroplús, por cuenta propia, desarrolla los reasentamientos, cuando por la ejecución de sus proyectos genera desplazamiento involuntario de población o actividades económicas. 16 De acuerdo a lo dispuesto en el Decreto municipal 2339 de 2013.
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Ahora, si bien estas compensaciones benefician a las unidades sociales, toda vez que
estos buscan garantizar el derecho a la vida, a la igualdad, a la propiedad privada, entre
otros; estas dejan por fuera aspectos valiosos de la realidad territorial que se afectan con
la ejecución de la obra pública, por ejemplo, las redes sociales (las redes de apoyo
familiares, vecinales y económicas); el acceso a activos de propiedad colectiva
(infraestructura y el equipamiento básico existente), la proximidad de la vivienda a lugares
de empleo, servicios básicos, sitios de esparcimiento (recreación), centros de salud,
mercados o centros comunitarios; entre otros aspectos, que son destacados por
entidades como el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo. En esta línea,
es necesario que la administración pública, y las entidades encargadas de la ejecución de
las obras, en la fase de planificación del proyecto, tengan en consideración a los
pobladores y sus historias de vida, sus construcciones familiares y vecinales, y la
apropiación que estos ha realizado en su entorno (barrio y vivienda).
1.1.4 Actores involucrados en los procesos de reasentamiento en Medellín
La intención en este apartado es caracterizar a los actores que tengan interés o un
eventual rol en procesos de reasentamientos de población en la ciudad de Medellín, en el
marco de la propuesta metodológica que se plantea en el capítulo 3. Para este propósito
se organizó a los involucrados en dos grupos, por un lado, se tiene a los actores
institucionales, en donde se encuentran los que implementan/ejecutan los
reasentamientos, las instituciones de apoyo y las instituciones de control. De otro lado
tenemos a los actores territoriales, este grupo está compuesto por la población
desplazada involuntariamente por la obra, y las organizaciones sociales que trabajan en
favor de la comunidad afectada y la defensa del territorio. No se incluye en este ejercicio
los actores que en el marco de la declaratoria de utilidad pública e interés social, generan
el desplazamiento involuntario de la población, tales como: Empresa de Desarrollo
Urbano (EDU), Secretaría de infraestructura Física, Metro de Medellín, Secretaría de
Gestión y Control Territorial, y en general aquellas entidades gestoras o responsables de
la formulación o ejecución de la obra de utilidad pública, puesto que estas entidades
transfieren toda la responsabilidad del reasentamiento al Instituto Social de Vivienda y
Hábitat de Medellín.
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1.1.4.1 Actores Institucionales En los actores Institucionales que implementan/ejecutan los procesos de reasentamiento
en la ciudad de Medellín, se encuentran el Instituto Social de Vivienda y Hábitat de
Medellín (ISVIMED) y Metroplús S.A.. ISVIMED es el organismo encargado de gerenciar
las políticas y programas de vivienda y hábitat en el municipio de Medellín. En
cumplimiento de su misión institucional, ISVIMED es la entidad encargada de la
administración y asignación del subsidio municipal de vivienda, así como de la ejecución
de proyectos de reasentamiento en la ciudad17. A saber, este subsidio es el aporte que
hace el Estado a las familias para que accedan a vivienda nueva o usada, construyan en
sus propios lotes, mejoren sus viviendas u obtengan los títulos que los acreditan como
propietarios (Decreto municipal 2339 de 2013). En el marco de la ejecución de una obra
de utilidad pública en la ciudad de Medellín, el proceso de reasentamiento de población
gestionado por ISVIMED consiste en la reposición de la unidad habitacional, mediante la
postulación al subsidio municipal de vivienda, según la normatividad vigente (Decreto
municipal 2339 de 2013).
Por su parte, Metroplús S.A. es un ente gestor de transporte masivo que tiene su origen
en la ley 105 de 1993, por medio de la cual el Gobierno Nacional creó la Política Nacional
de Transporte Urbano. Metroplús S.A. es una sociedad por acciones de orden municipal
constituida entre entidades públicas, de la especie de las anónimas, circunscrita a los
municipios del Valle de Aburrá y adscrita al municipio de Medellín (Metroplús, sf). Dado
que los proyectos de infraestructura que ejecuta esta institución son financiados por el
Banco Mundial, dichas intervenciones deben cumplir la Política Operacional OP 4.12., de
este organismo multilateral. Así, Metroplús S.A. se encarga de desarrollar todos los
aspectos que implica el proceso de reasentamiento, es decir, no se apoya en ISVIMED
para realizar los reasentamientos de la población desplazada involuntariamente por la
ejecución de la obra (Entrevista actor institucional Metroplús, 2017). De esta forma,
Metroplús S.A. además de generar el desplazamiento involuntario de población y
actividades económicas, es el encargado de su reasentamiento.
Por otro lado, las instituciones de apoyo son entidades que, dado su objetivo misional,
desarrollan acciones (programas y proyectos) que pudiesen contribuir a que la condición
17 Ver artículo 237 del Decreto municipal 1364 de 2012.
51
de vida de la población sujeta a reasentamiento no desmejore. Este grupo incluye a la
Secretaría de Inclusión Social, Familia y Derechos Humanos; la Secretaría de
Participación Ciudadana, la Secretaría de Educación y la Secretaria de Desarrollo
Económico.
La Secretaría de Inclusión Social, Familia y Derechos Humanos es la instancia municipal
que lidera la formulación, articulación, coordinación e implementación, estrategias y
políticas sociales, tendientes a la promoción, protección, restitución y garantía de los
derechos de los diferentes grupos poblacionales, para el mejoramiento de la calidad de
vida18. Esta secretaría, mediante la generación de oportunidades, y la protección y
restablecimiento de los derechos de los grupos familiares desplazados involuntariamente
por obras de utilidad pública, podría contribuir a que después del reasentamiento, la
calidad de vida de estas familias no desmejore. De esta forma, se considera que esta
secretaría tiene un rol importante en los procesos de reasentamiento en la ciudad, toda
vez que puede brindar acompañamiento integral a estos grupos familiares en el proceso
de restablecimiento de sus condiciones de vida. No obstante lo anterior, en el marco de
esta investigación no se logró encontrar evidencia de la participación de esta secretaría
en los procesos de reasentamiento por obra de utilidad pública.
Con respecto a la Secretaría de Participación Ciudadana, esta entidad propende, entre
otros temas, por el fortalecimiento de la ciudadanía, mediante estrategias de movilización,
formación, organización y participación democrática, con el fin de fortalecer el capital
social como dinamizador del mejoramiento de las condiciones de vida de la población
urbana y rural, con énfasis en los sectores y territorios más vulnerables del municipio de
Medellín19. Esta secretaría tiene un rol importante puesto además de direccionar
esfuerzos en el fortalecimiento de las organizaciones y redes de la sociedad civil, esta
entidad puede propiciar la generación de escenarios de concertación entre quien gerencia
la obra de utilidad pública y la comunidad directamente intervenida. No obstante lo
anterior, en el marco de esta investigación no se logró encontrar evidencia sobre la
participación de esta secretaría en los procesos de reasentamiento por obra de utilidad
pública.
18 Misión de la secretaría de Inclusión Social, Familia y Derechos Humanos de la Alcaldía de Medellín. Revisado en la página web de la secretaría. 19 Misión de la Secretaría de Participación Ciudadana de la Alcaldía de Medellín. Revisado en la página web de la secretaría.
52
La Secretaría de Educación de Medellín, tiene como misión direccionar el modelo
educativo de la ciudad; posibilitar la formación de ciudadanos solidarios frente a la
construcción de una sociedad democrática y de plena convivencia; y velar por la
prestación de un servicio educativo de alta calidad y pertinencia social20. Esta secretaría
es la encargada de gestionar el traslado de los cupos escolares para las familias que son
desplazadas involuntariamente por la ejecución de la obra.
Con respecto a la Secretaria de Desarrollo Económico, esta secretaría tiene el objetivo
misional el fortalecer la productividad, la competitividad, la sostenibilidad, la asociatividad
y la solidaridad, para mejorar los ingresos y las condiciones de empleo de la población de
la ciudad, en aras de la equidad y el desarrollo humano integral21. En principio esta
secretaría podría apoyar, en el marco del proceso de restablecimiento de sus condiciones
iniciales, a grupos familiares y unidades económicas desplazadas involuntariamente por la
ejecución de obras de utilidad pública. Lo anterior, se podría presentar vía promoción al
acceso de empleos dignos, o mediante el fomento y fortalecimiento de emprendimientos
productivos. No obstante lo anterior, en el marco de esta investigación no se logró
encontrar evidencia de que esta entidad participe de alguna forma en el proceso de
reasentamiento por obra de utilidad pública.
En esta agrupación de entidades cabría también mencionar a las instituciones con las que
se tiene que estar a paz y salvo para concretar la venta y descargue del inmueble (o
mejoras) del morador sujeto de reasentamiento: Empresas Públicas de Medellín E.P.S
(EPM) en cuanto a la desconexión de servicios públicos domiciliarios y traslado de
servicios de energía prepago al lugar de acogida; Empresas Varias de Medellín E.S.P, en
cuanto al paz y salvo, y descargo del servicio; Secretaría de Hacienda de Medellín, en lo
referido al estado de cuenta predial. Es preciso destacar estas instituciones porque ellas
juegan un papel importante en el proceso de adquisición de predios de la Alcaldía de
Medellín, así, inconvenientes o deudas con estas instituciones, implica que los predios a
adquirir no están saneados, lo que dificulta la negociación y el trámite para el eventual
acceso al subsidio de vivienda y compensaciones.
20 Misión de la Secretaría de Educación de la Alcaldía de Medellín. Revisado en la página web de la secretaría. 21 Misión de la Secretaría de Desarrollo Económico de la Alcaldía de Medellín. Revisado en la página web de la secretaría.
53
Con relación a las instituciones de control, estas son entidades que, dado su objetivo
misional, desarrollan acciones tendientes a la guarda, promoción y defensa de los
derechos humanos; pero también vigilan la conducta oficial y protegen el interés público.
Este grupo incluye a la Personería de Medellín, la Contraloría General de Medellín, el
Concejo de Medellín y la Corporación Autónoma Regional.
Respecto a la Personería Municipal, y con el propósito de garantizar a la ciudadanía la
defensa de sus derechos e intereses, esta entidad tiene la capacidad de brindar
acompañamiento, mediante la asesoría jurídica, a los grupos familiares que consideren
que su situación no ha sido atendida de manera justa e integral por parte del responsable
de la intervención. En el marco de esta investigación se identifica que esta institución
participa analizando casos concretos y emitiendo lineamientos u orientaciones que
aportan en la resolución de conflictos e inconformidades del grupo familiar afectado por la
obra.
Por otra parte, la Contraloría General de Medellín, en el marco del cumplimiento de su
objetivo misional, tiene la tarea de evaluar la ejecución de las obras públicas que se
adelanten en el municipio de Medellín. Así, esta entidad debe velar, no solamente por la
eficacia y eficiencia en la ejecución de la obra, sino por el cumplimiento a cabalidad de las
medidas de manejo de los impactos negativos que genera la obra. En este sentido la
Contraloría General de Antioquia debería hacer seguimiento y control a toda la gestión
que implica el reasentamiento de población, toda vez que este proceso es la medida de
manejo de uno de los impactos más severo que genera la ejecución de obras públicas: el
desplazamiento involuntario de población. No obstante lo anterior, en el marco de esta
investigación no se logró encontrar evidencia de que esta entidad participe de alguna
forma en el proceso de reasentamiento por obra de utilidad pública.
El Concejo de Medellín es una corporación administrativa de elección popular, compuesta
por 21 cabildantes elegidos para un período de cuatro años. Esta corporación hace
seguimiento y control a las intervenciones u obras públicas desarrollas en la ciudad. De
esta forma, en sesión ordinaria (u extraordinaria), o en el marco de comisiones
accidentales, los Concejales pueden citar a los funcionarios de las entidades que generan
los desplazamientos involuntarios de población y a los encargados de su proceso de
54
reasentamiento, para analizar y discutir estos asuntos. Así, esta corporación hace
seguimiento a la obra, e intercede por la comunidad afectada por la ejecución de la
misma. En el marco de esta investigación se identifica que algunos corporados22; han
emprendido acciones y procesos con actores comunitarios, en diferentes experiencias en
la ciudad (Puente Madre Laura, Tranvía de Ayacucho, Metrocable Picacho), en el marco
del proceso de adquisición predial y la consecución de viviendas de reposición para
población intervenidas por la ejecución de obras de utilidad pública.
Finalmente, la Corporación Autónoma Regional (CAR). Al respecto la ciudad de Medellín
está localizada en la jurisdicción de dos CAR: Corantioquia para el área rural del
municipio, y el Área Metropolitana del Valle de Aburrá (AMVA) en lo que refiere al área
urbana del municipio. Como autoridades ambientales estas entidades deben evaluar,
controlar y hacer seguimiento a los aprovechamientos que se hagan de los recursos
naturales en el área de su jurisdicción (artículo 35º, Ley 99 1993). Lo antes citado significa
que la CAR debe hacer seguimiento y control a las obras de utilidad pública que
demandan recursos naturales (agua, suelo, aire), así como de los impactos ambientales
que se genera con la ejecución de la obra. Entendiendo que lo social es uno de los
componentes del ambiente (físico, biótico y social), y recordando que el desplazamiento
involuntario de población es uno de los impactos más severos que generan este tipo de
obras, es de capital importancia que estas entidades, en el marco del cumplimiento de sus
objetivos misionales según su jurisdicción, velen porque la entidad propietaria (o
responsable) de la obra, proyecte y ejecute una adecuada medida de manejo a este
impacto, es decir, la CAR debe velar porque la comunidad impactada por una obra de
utilidad pública, quede en unas condiciones mejores o iguales a las que tenía antes de la
ejecución de la obra. No obstante lo anterior, en el marco de esta investigación no se
logró encontrar evidencia sobre la articulación de estas entidades en los proceso de
reasentamiento por obra de utilidad pública.
En la siguiente ilustración agrupa, a modo de síntesis, lo antes plantado
22 Como la concejala Luz María Múnera, el concejal Jesús Aníbal Echeverry, entre otros
55
Ilustración 1. Actores institucionales
1.1.4.2 Actores Territoriales
Respecto a los actores territoriales se destaca, en primera instancia, a los grupos
familiares desplazados involuntariamente, es decir, la población que debe abandonar su
vivienda, y posiblemente su territorio, en razón a la ejecución de la obra. En segundo
lugar, se identifican a las organizaciones sociales de base comunitaria, que direccionan
acciones en favor de la comunidad afectada y la defensa del territorio.
Sobre la población desplazada involuntariamente, estos son los grupos familiares que
habitan los predios requeridos para la ejecución de la obra. Esta población en términos
generales es heterogénea, puesto que sus características varían según el lugar en donde
se desarrolla la obra (contexto), y las particularidades socio-económicas de cada grupo
familiar. En caso de acceder al subsidio municipal de vivienda (Decreto 2339 de 2013), el
reasentamiento depende de la gestión de ISVIMED y la disponibilidad de la oferta
habitacional en la ciudad (vivienda nueva o usada). En este sentido, este actor tiene una
relativamente baja incidencia en su proceso de reasentamiento, toda vez que estos
podrán optar por la solución habitacional que ISVIMED, dadas ciertas condiciones y
56
restricciones, defina como viable. En los casos en que el grupo familiar desplazado por la
obra no pueda acceder al subsidio municipal de vivienda, el mismo grupo familiar debe
asumir individualmente su reubicación a otro sitio. Así, el éxito o fracaso de este
restablecimiento dependerá de las capacidades económicas y de gestión del propio grupo
familiar.
De otro lado, el actor denominado organizaciones sociales de base comunitaria, agrupa a
toda aquella organización de base territorial que trabajan por el desarrollo social y
comunitario. Este grupo hace alusión a entidades como: Juntas Administradoras Locales
(JAL), Asambleas Barriales y Veredales, Juntas de Acción Comunal (JAC), mesas
temáticas (ambientales, entre otras), Veedurías ciudadanas, ONGs, entre otras. En el
marco de una obra de utilidad pública que genera desplazamientos de población, estos
actores, desde su conocimiento del territorio y según sus intereses (sociales, económicos,
culturales, ambientales o políticos), hacen seguimiento y control a la ejecución de la obra
y a las medidas de manejo de los impactos que esta genera. En ocasiones estos actores
suelen convocar a la Personería y Concejales del municipio para aunar esfuerzos
tendientes a la protección de los derechos de la comunidad impactada por la obra y en
general en la defensa del territorio intervenido.
En la siguiente ilustración agrupa, a modo de síntesis, lo antes plantado
Ilustración 2. Actores territoriales
57
Para concluir, este ejercicio además de posibilitar la caracterización de los actores
involucrados en el proceso de reasentamiento en la ciudad de Medellín, en términos de
sus intereses, y su participación en el proceso; este permite plantear la importancia de
una mayor participación en el proceso de reasentamiento, de actores como la CAR, la
Secretaría de Desarrollo Económico y la Contraloría de Antioquia.
De igual forma, el ejercicio permite exponer la importancia de la articulación entre los
actores involucrados, en orden de evitar que los grupos familiares desplazados por la
obra, vean deterioradas sus condiciones de vida. Cuando se ejecuten procesos de
reasentamiento en la ciudad, es de suma importancia que la institución responsable del
reasentamiento, articule esfuerzos con entidades como la Secretaría de Inclusión Social
Familia y Derechos Humanos, la Secretaría de Educación, la Secretaría de Desarrollo
Económico; en términos de la formulación e implementación de medidas tendientes a
proteger y restituir las condiciones de vida de la población a reasentar. Dicha articulación
se debe presentar en el marco de un proceso de acompañamiento integral (jurídico,
social, económico, sicológico) al grupo familiar, durante todo el proceso del
reasentamiento. También, se considera importante el seguimiento y control que ejercen
actores como la CAR, la Contraloría de Antioquia, el Concejo de Medellín, la Personería,
las JAL, JAC, las veedurías ciudadanas y otras organizaciones comunitarias. Esta
vigilancia sobre la gestión pública, y la protección y restitución de los derechos de los
moradores, en el marco de la ejecución de la obra pública, debe realizarse de forma
trasversal, es decir, durante todo el proceso de reasentamiento.
1.2 Fundamentos teóricos y conceptuales para el análisis del reasentamiento por obra de utilidad pública, bajo una perspectiva territorial
Con frecuencia las obras de utilidad pública se traducen en beneficio para la sociedad,
aunque también generan impactos negativos en el territorio donde se emplazan. Al
ejecutar esas intervenciones, además de la transformación física del territorio, se
desarticula el entramado social que históricamente allí se habían concebido, porque se
suscitan múltiples efectos en los habitantes de esos territorios, especialmente en aquellos
que deben ser reasentados; más aún para los que deben trasladarse fuera del territorio.
58
Dado los severos y prolongados efectos del desplazamiento involuntario, se hace
necesario, por parte del propietario o responsable de la intervención que genera este
hecho, definir estrategias y acciones para proteger la vida, los sistemas productivos, la
cultura y los derechos humanos de los grupos poblacionales afectados por la ejecución de
estas obras. Para lograr este objetivo, se considera importante que las medidas definidas
partan del reconocimiento del territorio en que se va a realizar el proyecto, de manera que
con base en ese reconocimiento se formule y ejecute el proceso. De no hacer esto,
difícilmente el responsable de la intervención podrá realizar procesos de reasentamiento
que aseguren que las condiciones de vida de los grupos afectados no desmejoren.
De esta forma, en el presente capítulo se realizó una revisión teórico-conceptual sobre el
reasentamiento de población, el cual permite plantear una aproximación a su definición,
así como algunas reflexiones sobre la práctica del reasentamiento. Seguidamente se
estudia el concepto de territorio, se definen los componentes que lo constituyen y se
presentan las oportunidades que el territorio ofrece a los pobladores que lo habitan.
1.2.1 Reasentamiento de población: concepto, contradicciones y consideraciones
El desplazamiento de población es un fenómeno recurrente en la historia de la
humanidad; no obstante, se ha visto acentuado a partir del posicionamiento del enfoque
de desarrollo basado en el crecimiento económico. Dada la relevancia de los efectos
negativos para la población y unidades económicas obligadas a salir del territorio que
habitan, es necesario continuar ahondando en su definición, toda vez que esto aporta en
la concreción de medidas y acciones que mitiguen las afectaciones generadas por el
desplazamiento.
A partir de la revisión documental se identifica que el reasentamiento es un proceso
complejo, que implica múltiples dimensiones de la vida humana y que requiere de
considerar diferentes poblaciones, no solo la que es movilizada. Es tal su complejidad que
entidades multilaterales, como el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo,
recomiendan evitar que se presenten desplazamientos involuntarios de población en la
ejecución de obras financiadas por ellos, de no ser esto posible, lo que se recomienda es
que el desplazamiento involuntario se reduzca a su mínima expresión. No obstante, la
59
literatura recabada da cuenta de que en la práctica el reasentamiento no se corresponde
con los desarrollos conceptuales y metodológicos que sobre él se han producido.
1.2.1.1 Aproximación al concepto
La historia de la humanidad registra permanentes desplazamientos involuntarios de
poblaciones, fenómeno que ha sido inherente a la configuración de los pueblos, las
naciones o los Estados, dejando huellas en la historia y el devenir del mundo actual
(Serje, 2011). No obstante, no todos los desplazamientos son abordados mediante
procesos de reasentamiento, por lo tanto, es importante precisar qué se entiende por
reasentamiento en esta investigación.
Si bien existe una estrecha relación entre desplazamiento y reasentamiento, estos
términos remiten a conceptos distintos. Desplazamiento se presenta cuando un individuo,
grupo social o actividad económica es expulsado del lugar que habita sin posibilidad de
negarse. Ahora, si bien se considera que todos los desplazamientos son forzosos, puesto
que la población o actividad económica debe trasladarse obligatoriamente a otro lugar por
una decisión impuesta por un agente externo (Estado, factor natural, actor ilegal), sin
posibilidad de permanecer, en algunos casos el desplazamiento puede considerarse
involuntario.
El desplazamiento es involuntario cuando es resultado indirecto de una acción, es decir,
es un efecto colateral. Es el caso del desplazamiento por la ejecución de intervenciones o
proyectos considerados benéficos o convenientes para la colectividad. En estos casos,
por lo general, se deben adquirir predios para ejecutar la intervención, lo que implica que
tanto las personas que residen en esos predios cuanto las actividades económicas que
allí se desarrollan, deben trasladarse a otro sitio.
Con base en la revisión de las diferentes fuentes referidas en el primer capítulo, para esta
investigación el reasentamiento de población se entiende como un proceso planificado,
que tiene como objetivo principal, mejorar o por lo menos restablecer, de manera
sostenible, las condiciones de vida de la población desplazada por una obra de utilidad
pública. Es preciso recordar que el reasentamiento no es causa sino medida de manejo
de los efectos que genera el desplazamiento de población. Ahora, en la práctica, el
60
desplazamiento de población no necesariamente es acompañado de un proceso de
reasentamiento, es decir, no todo desplazamiento conlleva un reasentamiento. Lo anterior
se presenta cuando, generado el desplazamiento, no se aplican las acciones necesarias
para asegurar que se mitiguen y compensen las afectaciones ocasionadas por el
desplazamiento de las personas.
Al indagar sobre desplazamiento de población, son múltiples las acepciones que se
desarrollan alrededor de este concepto, las cuales se pueden agrupar según el hecho que
ocasiona el desplazamiento. A saber, se pueden identificar tres hechos. En primer lugar,
se encuentra el desplazamiento por conflicto armado; tales conflictos están relacionados
con las luchas de poder político y económico, y disputas territoriales que se presentan a
través de diversas expresiones de violencia en el contexto en que se desarrollan. En
segundo lugar, está el desplazamiento por alto riesgo o desastre natural, generado por
catástrofes naturales de distinta índole (inundaciones, deslizamientos y demás eventos
biogeográficos), factuales o virtuales; este se presenta por la localización de comunidades
(asentamiento) en sitios de alto riesgo físico-ambiental. Y, por último, está el
desplazamiento por intervención u obra de desarrollo, también denominado en la literatura
como desarrollo planificado o desarrollo inducido.
Aunque de manera involuntaria, por intervención u obra de desarrollo se han dado
desplazamientos y reasentamientos tanto por megaproyectos para la explotación de
recurso naturales, cuanto por la ejecución de proyectos urbanísticos y, en general,
construcción de infraestructura (Serje, 2011). Si bien, existe una larga trayectoria en este
último tipo de desplazamiento, los desarrollos conceptuales y metodológicos sobre el
mismo son relativamente recientes, las décadas de los años 80 y 90 del siglo XX. Su
origen está dado por los grandes proyectos de desarrollo, donde es indispensable la
adquisición de tierras (Molina, 2015, p. 23). A saber, este último es el tipo de
reasentamiento en que se centra el análisis de esta investigación. Es preciso mencionar
que se opta por estudiar el reasentamiento por obra pública, puesto que, a diferencia de
los reasentamientos relacionados con desastres naturales o conflicto armado, los
primeros tienen la posibilidad de ser planificados. Esta consideración permite reconocer y
analizar la planeación como parte integral del asunto, toda vez que los otros casos no
pueden ser manejados de la misma manera, pues dependen de eventos externos sobre
los que no se tiene control preventivo.
61
Al respecto, uno de los primeros estudios sobre los impactos en las comunidades
afectadas por la venta obligada de sus terrenos y construcciones, es el realizado por
Cernea (1985, citado por Molina, 2015, p. 24). Según Molina:
Este estudio hecho para el Banco Mundial, se basó en el análisis comparativo de 57
proyectos de desarrollo, en sus conclusiones se advierte sobre los elevados costos
sociales y económicos al no efectuar un análisis social y no incorporar conocimientos
sociales en las intervenciones de los proyectos de desarrollo. Al referirse sobre lo
«adecuad» y lo «inadecuado» en estos proyectos señalan «problemas de incompatibilidad
sociocultural» que para el momento de la auditoria originaron rentabilidades dos veces
menores que aquellos en donde el diseño del proyecto presentaba una perspectiva
sociocultural. La falta de un adecuado enfoque sociocultural dejó, como consecuencia, familias desarraigadas, sin tierra, sin acceso a medios de producción, ruptura o
desaparición de las redes sociales y económicas comunitarias generando en muchos
casos diásporas, éxodos o sin rumbo muy claro, fruto de procesos en donde la compra
física de bienes despojaba a las personas de sus más valiosos e irremplazables activos
(Molina, 2015. p. 24).
Cernea, basado en investigaciones sobre desplazamientos y en sus experiencias de
campo, propone un modelo de riesgos y reconstrucción para el reasentamiento de
poblaciones por desplazamiento involuntario. Este modelo destaca que el principal riesgo
es el empobrecimiento de las personas desplazadas; ahora, existirían ocho amenazas de
empobrecimiento en un proceso de reasentamiento, que, aunque no son las únicas, son
las más importantes:
Tabla 15. Riesgo de empobrecimiento
Riesgos Descripción
Pérdida de la tierra
La expropiación de la tierra elimina los cimientos sobre los cuales se construyen los sistemas productivos, las actividades comerciales y los medios de vida de la gente. Esta es la principal forma de descapitalización y empobrecimiento de las personas desplazadas, ya que pierden tanto su capital natural, como el capital construido por el hombre. Este riesgo se agrava si la tierra es la base de los sistemas productivos, actividades económicas y medios de subsistencia.
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Riesgos Descripción
Pérdida del empleo
La pérdida de empleo remunerado ocurre tanto en los desplazamientos urbanos como rurales. Aquellos que pierden su empleo son trabajadores sin tierra, los empleados de empresas y de servicios, los artesanos y los pequeños empresarios. Crear nuevos empleos es difícil y requiere inversiones sustanciales. El desempleo o el sub-empleo entre los reasentados perdura mucho tiempo después de la reubicación física. La dependencia económica del predio agudiza el reasentamiento, en tanto que es complejo ubicarse en otro lugar con condiciones similares en cuanto a clientes, servicios, proveedores, accesibilidad a mercados etc.
Pérdida del Hogar
Si bien la pérdida del hogar y el albergue puede ser temporal para muchos desplazados, para otros la falta de hogar se mantiene como una condición crónica. En un sentido cultural amplio, la pérdida del hogar familiar está ligada con pérdida de espacio e identidad cultural de un grupo, resultando en una alienación y segregación tal como lo exponen los estudios del place attachment (Low & Altman, 1992). Las familias sujetas a esquemas obligatorios de urbanización, tal como argumenta Wet (1995), también experimentan un sentido prolongado de “desubicación”.
Marginación
Ocurre cuando las familias pierden poder adquisitivo, y se deslizan por una “senda decreciente”: las familias agrarias de ingresos medios no pasan a ser agricultores sin tierra, sino que pasan a ser pequeños propietarios; los dueños de pequeños negocios y artesanos reducen el nivel de su actividad económica y traspasan el umbral de la línea de pobreza. Muchos individuos no pueden utilizar las habilidades previamente adquiridas en su nueva localidad y el capital humano se pierde o se vuelve improductivo e inactivo. La marginación relativa a menudo comienza mucho antes del desplazamiento real, como resultado de la falta de inversión o retiro de las inversiones, en infraestructura y servicios, en las áreas destinadas a ser adquiridas. El sistema coercitivo de desplazamiento también deteriora la autoestima, la marginalización también se materializa en una caída de status social y en la pérdida sicológica de confianza de los afectados en la sociedad y en sí mismos.
Aumento de las enfermedades y
la mortalidad
Los desplazamientos ocasionan estrés social, inseguridad, depresión y la angustia del futuro. Se incrementa la vulnerabilidad a enfermarse, en razón al nuevo entorno, a suministros deficientes de agua potable y sistemas inadecuados de drenaje, lo que propicia infecciones, diarrea crónica, enfermedades parasitarias etc.
Inseguridad alimentaria
El desplazamiento aumenta el riesgo de que las personas sufran desnutrición crónica, definida como una ingesta de calorías por debajo de los niveles necesarios para el crecimiento y el trabajo normal, así como inseguridad alimenticia. Lo anterior en razón a la pérdida de redes sociales y fuentes de ingreso.
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Riesgos Descripción
Pérdida de acceso a la propiedad colectiva
Para los pobres, particularmente para los que no tienen tierra, ni activos, la pérdida de los activos de propiedad colectiva (bosques, acuíferos, lagos, tierras para el ganado, cementerios etc.) resulta en un deterioro significativo de sus ingresos y de sus medios de vida. Por lo general, la pérdida de activos de propiedad colectiva, no son compensadas por los esquemas de reubicación de los gobiernos, es decir, las representaciones culturales no son valoradas ni pagadas en el reasentamiento.
Desarticulación social
Los desplazamientos forzosos deshacen estructuras de las organizaciones sociales de las comunidades. Se dispersan y fragmentan las comunidades, desmantelan los patrones de organización social y los vínculos interpersonales. Se desmantelan las redes informales de ayuda mutua, asociaciones locales voluntarias, y arreglos organizados de ayuda mutua que sostienen la vida de las familias. La desestabilización de la vida de la comunidad es posible que genere un estado típico de desánimo, inseguridad y pérdida del sentido de identidad cultural, lo cual tiende a transformar las zonas de desplazamiento en lo que se ha conocido como: “regiones de inestabilidad social ocasionada por la pérdida de valores y estándares” (Atteslander, 1995a). La destrucción de patrones de organización local basados en el entorno de la vecindad, la integración y la reciprocidad, son pérdidas de un valioso “capital social”. Este “capital social” perdido no es recompensada por parte de los planificadores, lo cual genera consecuencias negativas que se prolongan durante el tiempo.
Fuente: Cernea, 1995a, pp. 251-252; Cernea, 2001, pp. 41-45.
Scudder (1986, citado por Correa, 1997) plantea que el fenómeno de la relocalización
involuntaria es un fenómeno dinámico que puede ser analizado en cinco etapas, las tres
primeras referidas a la fase de desplazamiento y relocalización, y las dos últimas a la fase
del desarrollo.
Tabla 16. Etapas del reasentamiento
Etapas Descripción
Período que precede a la
relocalización
Esta etapa surge cuando las empresas propietarias de los grandes proyectos inician los estudios técnicos de las obras. Este período puede durar diez años o más y comienza cuando los primeros rumores acerca de la posibilidad de relocalizarse empiezan a circular (Scudder, 1986). Estos rumores generan los primeros impactos ya que producen incertidumbre en la población quien se cuestiona si puede continuar con
64
Etapas Descripción su vida normal: periodos de siembra, inversiones, adquisiciones, ingreso a escuelas, etc. Scudder (1986) también plantea que las decisiones que en esta etapa tomen las entidades responsables, influyen en la longitud y severidad de la tensión de la etapa de transición y pueden permitir que se continúe con la etapa de desarrollo.
El traslado físico de la población
Esta etapa consiste en el desplazamiento de la población a un nuevo lugar, el cual puede estar predeterminado por el programa de relocalización o debe ser buscado por las personas si este programa no existe. En los diferentes estudios a nivel mundial, se ha observado que el último caso es el que genera mayores impactos negativos.
Período de transición
Es la etapa que sigue el traslado físico de la población. Según Scudder (1986), raramente dura menos de tres años y generalmente tarda de cinco a diez años. Es una etapa en la cual se presenta gran tensión física, social y psicológica y los relocalizados sienten que el apoyo y ayuda del gobierno es un derecho merecido por la pérdida de sus hogares y no un favor o un privilegio. Inevitablemente exigirán en esta etapa más ayuda y se quejarán de la falta de éste. También esta etapa se caracteriza por un gran número de respuestas conservadoras (poca o nula aceptación a las innovaciones) de la población, comportándose como si su sistema socio-cultural se hubiese cerrado. La etapa termina cuando los relocalizados han podido volver a sus niveles anteriores de ingreso y seguridad (Scudder, 1986).
Desarrollo económico
Se caracteriza por un incremento en la iniciativa y en asumir riesgos, aparece un sistema social más dinámico y abierto. En muchos casos esta etapa no se alcanza y la población desplazada se dispersa o queda en un grupo marginado con poca voluntad para tomar decisiones. Es en esta etapa cuando las oficinas gubernamentales y las instituciones privadas pueden ofrecer sus servicios tales como: crédito normal, asistencia técnica, asistencia educacional y ayuda para el mejoramiento de la vivienda (Scudder y Colson, 1982).
Incorporación dentro de la estructura
administrativa y económica de la
región
Esta etapa casi nunca se alcanza y si ocurre es después de diez años cuando ha finalizado la etapa anterior. En esta etapa las actividades productivas de los relocalizados entran a competir con el mercado local. Además, su sistema de producción debe resultar atractivo para la segunda generación, quienes serán encargados de mantenerla. Se completa el proceso de incorporación cuando los nuevos asentamientos dejan de ser enclaves y se “incorporan” como parte integral de la región en que están localizados (Scudder y Colson, 1982).
Fuente: Correa, 1997, pp. 46-47.
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Las tres primeras etapas que conforman la fase de reasentamiento son para la población
desplazada un drama, pues produce efectos traumáticos o estrés multidimensional, que
se genera por la involuntariedad del desplazamiento y porque oponerse resulta ser
infructuoso (Scudder, 1986, citado por Correa, 1997). Ahora, ese estrés puede dividirse
en tres componentes, los cuales, sin embargo, están sinérgicamente interrelacionados:
Tabla 17. Estrés multidimensional experimentado en el reasentamiento
Componente Descripción
Fisiológico
Este componente se caracteriza por un incremento en las tasas de morbilidad, y aun de mortalidad durante los períodos anterior y posterior a la relocalización. Hay una mayor susceptibilidad frente a las enfermedades infecciosas. Es indudable que la intensidad que adquiere el componente fisiológico, dependerá en gran parte de variables tales como: el estado sanitario de base, la calidad de atención médica preexistente, el nivel nutricional previo, etc.
Sicológico
1. Síndrome de pérdida del hogar, el cual parece afectar especialmente a mujeres y a los ancianos. Esta pérdida se asimila generalmente a las pérdidas por fallecimientos, divorcio, etc. y que ocasionan “pena” y son elaboradas en “duelos”. Lo importante de este paralelismo entre la pérdida por fallecimiento y la pérdida del hogar, es que permite establecer medidas similares destinadas a aliviar al doliente por este tipo de pérdidas con aquellas que podrían ayudar a aliviar la situación de los afectados por una relocalización obligatoria.
2. Síndrome de ansiedad, el cual es generado por la situación general de impotencia e incertidumbre a la que se ve enfrentado el relocalizado
Socio-cultural
1. En la estructura de liderazgo local La impotencia de los líderes tradicionales ante la obligatoriedad del desplazamiento, le quita toda la base de liderazgo presentándose de esta manera un vacío en la estructura del grupo social afectado.
2. En la red de relaciones sociales La relocalización “desarma” la red de relaciones en que se inserta cada individuo y cada unidad familiar, las cuales están basadas en el parentesco, vecindad, etc.
3. En las pautas de conducta En las pautas más directamente relacionadas con la adaptación al medio físico social, muchos de los patrones de comportamiento que eran funcionales en el contexto del antiguo lugar físico- geográfico, pierden ese valor en el nuevo medio e incluso pueden tornarse contra-adaptativas.
Fuente: Correa, 1997, pp. 49-51.
66
Correa (1997) analiza cómo la magnitud de los impactos del desplazamiento puede variar
según las condiciones objetivas y subjetivas de la población:
Tabla 18. Condiciones objetivas y subjetivas de la población frente al reasentamiento
Objetivas Subjetivas La forma de tenencia del inmueble: propietario, arrendatario, poseedor, ocupante, entre otras.
Evaluación de resultados percibidos, niveles de comparación y niveles de comparación de alternativas: son importantes no sólo los resultados que obtiene el individuo por la tenencia y uso de su vivienda, sino los que percibe. Así mismo, juega un papel muy importante el nivel de comparación de este individuo, o sea, el resultado que cree merecer: por ejemplo, “yo debería vivir en otro lugar”, “me debería ir mejor”, “tengo lo que merezco”; y su nivel de comparación de alternativas, es decir, el resultado que cree encontrar en otro lugar: por ejemplo “Si me fuera a otro lugar me iría mejor”, “en ninguna parte encontraré lo que tengo aquí”. La relación de estos tres elementos determina la evaluación que el individuo realice del cambio y por consiguiente, sus reacciones ante éste.
El tiempo vivido en el lugar: a mayor tiempo, mayores impactos.
Locus de control23: En caso del desplazamiento obligatorio, aquellos individuos con mayor grado de control interno enfrentan mayor grado de desesperanza, y los que poseen mayor grado de control externo serán los que más rápido se resignen.
El uso de la propiedad: residencial, para el desarrollo de una actividad económica (industria, comercio, servicios, agricultura, ganadería, alquiler, entre otras) o para múltiples usos.
Características de personalidad e historia previa: existen individuos que por sus características de personalidad o su historia previa pueden ser mucho más vulnerables al stress, la depresión y a síndromes psicopatológicos asociados a éste.
Los ingresos económicos por las actividades desarrolladas en la propiedad o en el entorno. Los ingresos derivados de las actividades productivas pueden ser la única fuente de ingresos, o pueden representar solamente un
23 Rother (1966, citado por Correa, 1997, p.58) muestra dos tipos de locus de control en los individuos: Control interno: aquellos individuos que atribuyen la causa de sus acciones a ellos mismos; y Control externo: los que atribuyen la causa de sus acciones, eventos y consecuencias a agentes externos (Dios, el destino, etc.).
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Objetivas Subjetivas porcentaje del ingreso de la unidad familiar. A mayor dependencia económica, mayor es el impacto. El grado en el cuál la vivienda y el entorno permite satisfacer necesidades básicas: a mayor satisfacción, mayor impacto.
El tipo de familia (extensa, nuclear, monoparental), que determina el tipo de apoyo y redes familiares.
La posición de la persona en la familia (jefe de hogar, cónyuge, hijo). Dada la responsabilidad del jefe de hogar, sus niveles de estrés son mayores independientemente del género.
El grado de cohesión entre los vecinos (a mayor cohesión mayor impacto si el reasentamiento es individual, y menor impacto si el reasentamiento es colectivo).
La alternativa prevista de reasentamiento: cuando las personas conocen las alternativas y estas responden a sus necesidades, los impactos son menores.
Fuente: Correa, 1997, pp. 55-59
Por tanto, el reasentamiento es un acontecimiento traumático para los individuos y grupos
poblacionales que lo padecen. Es un proceso complejo que exige para su ejecución
incorporar aspectos culturales, emocionales, políticos, económicos de la población a
intervenir. De no formularse e implementarse rigurosamente el proceso de
reasentamiento, se pueden generar graves afectaciones a la población. En lo relacionado
con los proyectos de desarrollo, la Política Operacional 4.12 del Banco Mundial señala:
La experiencia del Banco indica que si no se frena el reasentamiento involuntario que se
produce en relación con los proyectos de desarrollo, éste suele dar origen a graves
problemas económicos, sociales y ambientales: los sistemas de producción se desbaratan;
los afectados se empobrecen al perder sus fuentes de ingresos y sus activos productivos;
las personas se trasladan a entornos en los que tal vez sus especialidades de producción
resulten menos útiles y la competencia por los recursos sea mayor; las redes sociales y las instituciones de la comunidad se debilitan; los grupos de parientes se dispersan y la
identidad cultural, la autoridad tradicional y las posibilidades de ayuda mutua se reducen o
se pierden (Banco Mundial, 2001, p. 1).
68
Los desplazamientos y reasentamientos de población generan impactos en la población
movilizada, pero también en la que continúa residiendo en el lugar, en la receptora y en el
territorio en general (Correa, Ramírez y Sanahuja, 2011). En el siguiente cuadro se
diferencian los impactos según la situación de la población:
Tabla 19. Impactos por tipo de población
Población desplazada
Población que permanece
Población receptora
Territorio
El traslado de poblaciones de un lugar a otro implica la pérdida de tierra, vivienda, medios de subsistencia y el rompimiento de las redes sociales y económicas que las personas han desarrollado para su supervivencia.
La población que permanece ven truncadas sus relaciones y redes socioeconómicas.
La población reasentada genera demandas adicionales sobre servicios públicos (agua, energía, alcantarillado, transporte), sobre los servicios sociales de educación y salud, y sobre los recursos existentes en general. La nueva población también representa un aumento en la oferta laboral que puede competir con la mano de obra local. Algunas veces existen diferencias ya sea de tipo étnico, religioso, cultural o socioeconómico, que pueden generar conflictos entre los dos grupos.
El reasentamiento también conlleva cambios en la distribución de población en un territorio, lo cual puede tener implicaciones en el ordenamiento del mismo, en la presión sobre recursos naturales y en la demanda de prestación de servicios públicos y sociales, lo cual a su vez puede afectar a otros grupos humanos, como son las comunidades de donde se traslada la población y las que reciben a la población reasentada.
Fuente: Correa, Ramírez y Sanahuja, 2011.
Según lo expuesto, el reasentamiento poblacional debe entenderse como un proceso
planificado que tiene como objetivo principal mejorar, o por lo menos restablecer, de
manera sostenible, las condiciones de vida de la población desplazada por la ejecución de
proyectos de utilidad pública: Renovación urbana, provisión de espacios públicos urbanos,
obras de infraestructura vial, construcción de infraestructura social (salud, educación,
recreación, centrales de abasto y seguridad ciudadana); sin impactar negativamente a la
69
población que continuará viviendo en la zona intervenida, ni a la población receptora. Así,
el reasentamiento no es causa sino una medida de manejo asociada al desplazamiento
involuntario de población. El reasentamiento es un proceso complejo y multidimensional
desarrollado por el Estado, o la institución (público, privada o mixta) responsable de la
ejecución del proyecto, el cual debe ser planificado y ejecutado concertadamente con la
comunidad involucrada.
Dado lo anterior, y reconociendo la significativa complejidad de definir estrategias eficaces
que mitiguen afectaciones del desplazamiento involuntario, es posible entender porque
entidades multilaterales como el Banco Mundial, y el Banco Interamericano de Desarrollo,
plantean como principio orientador de los procesos de reasentamiento, tratar de evitar o
minimizar los desplazamientos de población. No obstante, y de forma paradójica, bajo el
enfoque de desarrollo actual, los proyectos de generación de energía, explotación de
recurso naturales, desarrollos urbanísticos, de infraestructura, en suma, intervenciones
que implican la adquisición de tierras y procesos de reasentamiento, son considerados
como estratégicos, y por tanto promovidos globalmente, dados los beneficios que ellas
generan para la sociedad (Peemans, 1996).
1.2.1.2 Contradicciones en los procesos de reasentamiento
A partir de la revisión documental, se identifican importantes desarrollos teóricos y
metodológicos sobre el reasentamiento de población, no obstante, se identifica que en la
práctica el reasentamiento pareciese desconocer y contradecir importantes aspectos de
estos marcos y lineamientos de referencia. Por ejemplo, a pesar de la reconocida
complejidad de diseñar y ejecutar eficaces procesos de reasentamiento, así como los
severos y prolongados efectos negativos del desplazamiento involuntario, en la práctica el
desplazamiento involuntario de población es considerado un sacrificio que es necesario
asumir, para responder a las necesidades y valores que exige la globalización. Por otra
parte, se identifica que si bien el reasentamiento es un proceso eminentemente social, en
la práctica, los criterios técnicos (urbanístico, jurídico y financiero) han sido los principios
rectores en la planificación y ejecución de los reasentamientos. En línea con lo antes
comentado, a continuación, se procede a ampliar estas dos contradicciones.
70
– El enfoque de desarrollo
Como se enunció antes, el reasentamiento no es un problema nuevo, la historia de la
humanidad registra múltiples experiencias, dejando huellas en la historia y el devenir del
mundo actual. En la historia moderna y particularmente después de la Segunda Guerra
Mundial, triunfa a nivel global la doctrina de la modernización, este hecho posiciona la
idea de que todas las sociedades han de emprender procesos que las conviertan en
sociedades modernas, en términos del ideal de las sociedades más industrializadas y
desarrolladas (Serje, 2011), aceptando con esto los sacrificios que se deban hacer:
el progreso económico acelerado es imposible sin ajustes dolorosos. Las filosofías
ancestrales deben ser erradicadas; las viejas instituciones sociales tienen que
desintegrarse; los lazos de casta, credo y raza tienen que romperse; y las grandes masas de personas incapaces de seguir el ritmo del progreso tendrán que ver frustradas sus
expectativas de tener una vida cómoda. Muy pocas comunidades podrán pagar el precio
del progreso económico. (Organización de Naciones Unidas 1951, citado por Escobar,
1995, p.20)
Esta modernización se entiende como el proceso que lleva a las sociedades tradicionales
hacia el progreso y que se refleja en una serie de cambios generales: urbanización,
industrialización, aumento del alfabetismo, extensión de los medios de comunicación,
mayor control del entorno natural y social, una más compleja división del trabajo,
organización racional del Estado, entre otros aspectos (Bula, 1994, pp. 70-71). Este
enfoque de desarrollo aparece a mitad del siglo XX, en lo fundamental, como un problema
de crecimiento de la economía de mercado, de ampliación de la riqueza material
expresada en un único indicador macroeconómico: el Producto Interno Bruto (Valcárcel,
2006). La industrialización, la tecnificación de la agricultura y el incremento de la
productividad permitirían, justamente, generar dicho crecimiento económico. Los
beneficios alcanzados así, luego serían distribuidos a la población por el mercado.
Bajo este marco, algunos organismos internacionales como la Organización de las
Naciones Unidas (ONU) y el Banco Mundial, así como La Alianza para el Progreso, hacen
suyo este enfoque y contribuyen a su rápida legitimación, divulgación y aplicación práctica
en el Tercer Mundo (Valcárcel, 2006). Estas instituciones:
71
recomendaron a los países y gobiernos del Tercer Mundo modernizar la tecnología usada,
impulsar la agricultura comercial, propiciar una rápida industrialización y urbanización, vale
decir, crear o ampliar el sector moderno reduciendo progresivamente, por etapas, el sector
tradicional que descansa en una agricultura de subsistencia, de baja productividad y muy
pobremente articulada al mercado (Valcárcel, 2006, p.7).
En la década de los 80, en el marco de los problemas generados por la crisis del Estado
de Bienestar en los países del norte y el agotamiento del modelo de sustitución de
importaciones en los países del sur, corrientes principalmente neoclásicas en economía
participan con nuevos juicios sobre el desarrollo, al compás del avance de la llamada
neomodernización liberal transnacional (Valcárcel, 2006). Según Tehranian y Tehranian
(1997, citadas por Ferrer, 2002, p.2) este enfoque es una continuación histórica de la
modernización, en cuanto es un proceso de cambio que coloca como valores primarios
las innovaciones científicas, tecnológicas, sociales, económicas, políticas y culturales,
para alcanzar progresivamente mayores niveles de productividad, salud, ingresos,
consumo, participación política y pluralismo cultural. Así, el crecimiento económico es
considerado como el motor del desarrollo y del progreso social y presentado como el
instrumento y la finalidad del desarrollo al cual hay que sacrificar, si fuese necesario, las
exigencias sociales de la población (Valcárcel, 2006).
La visión oficial de los organismos financieros internacionales, El Fondo Monetario
Internacional y el Banco Mundial, sobre el desarrollo más que nunca lo identifica como el
crecimiento económico, asociado estrechamente al proceso de globalización (Valcárcel,
2006). De esta forma, la adaptación continua de los espacios nacionales conforme a las
exigencias y valores de la globalización, es considerada la única vía que conduce al
desarrollo (Peemans, 1996; Escobar, 1995).
En este sentido, la ejecución de intervenciones y obras de desarrollo como los proyectos
de generación de energía, de infraestructura vial, renovaciones urbanas, u otros proyectos
de intereses económicos para el país son, bajo esta mirada, justificados, aun cuando
estos transformen drásticamente paisajes, desplacen montañas, ríos, flora y fauna, así
como a los seres humanos y sus comunidades (Galler y Lynch, 2003, p 15). Dado lo
anterior, los impactos negativos generados por la puesta en marcha de proyectos de
infraestructura física y de servicios, como los antes mencionados, son entendidos como
un sacrificio que es necesario asumir, en pro de un beneficio mayor.
72
En este orden de ideas, el desplazamiento involuntario es concebido como un costo
necesario e inevitable del desarrollo y las personas afectadas por este son consideradas
como víctimas de una causa justa. Existen tres enunciados básicos que justifican los
procesos de desplazamiento involuntario y relocalización de población en nombre de la
modernización y el desarrollo (Serje, 2011, p. 38):
El primer enunciado que se usa para justificar el desplazamiento y el reasentamiento, es
la idea de que ciertos grupos e individuos deben sacrificarse en aras del bien común. Se
hace alusión explicita a principio constitucional de la prevalencia del interés general sobre
el particular. En el ámbito nacional, así como en el local, se escucha, a través de
diferentes medios, el argumento de que el interés privado no puede anteponerse al interés
de la nación24.
El segundo enunciado, es la definición del progreso como una evolución hacia la vida
urbana, de acuerdo con la cual “las formas de vida citadinas aparecen como las más
avanzadas, dinámicas y modernas, mientras que las que no lo son se consideran
primitivas y atrasadas o en, el mejor de los casos, se ven como estáticas y tradicionales”
(Serje, 2011, p. 38.). Situando esto en el contexto urbano, se entiende la definición de
progreso como una evolución a la vida urbana de ciudades competitivas e innovadoras,
insertas en las lógicas del mercado global. Así cada segmento que constituye la ciudad
debe aportar en la consecución de este referente de urbe, aquel fragmento que no aporte
a este objetivo, desde el urbanismo y la planificación, es diagnosticado con alguna
patología, asociándosele adjetivos calificativos como desarticulado, deteriorado,
subutilizado, entre otros. Lo anterior convierte a estos territorios en espacios que deben
ser intervenidos y rehabilitados.
Finalmente, se identifica la noción optimista de que es posible ejercer un control racional
sobre la naturaleza y sobre la vida social, suponiendo que la tecnología puede mitigar
24 La Corte Constitucional, en la Sentencia T-381/09, indica que: “No existe pues una prevalencia absoluta del interés general sobre el particular, pues tal prevalencia no puede obtenerse a costa del sacrificio de los derechos fundamentales del particular. El Estado sólo puede buscar el bien común dentro de la garantía de los derechos fundamentales”. Esto implica que este fundamento no es absoluto (tiene límites), este debe aplicarse a la luz del enfoque de los derechos. Un análisis sobre este aspecto puede ser revisado en Observatorio de Reasentamientos y Movimientos de Población (Sf).
73
cuando no rectificar los peores efectos del desplazamiento, sean sociales o naturales. De
esta forma, toda intervención tiene asociado un conjunto de acciones y medidas de
manejo que mitigan y compensan las posibles afectaciones que se generen.
Este conjunto de planteamientos hace posible que el desplazamiento pueda verse como
algo inevitable, e incluso legítimo, en donde el reasentamiento se puede entender como
una respuesta técnicamente idónea, que permite avanzar en la senda del desarrollo
económico.
Con este enfoque, el crecimiento económico es considerado el motor del desarrollo y del
progreso social, los países invierten cuantiosas cantidades de recursos en adecuar los
territorios, conforme lo exige la globalización. Dicha adecuación, como se expuso en este
apartado, ha requerido la ejecución de proyectos de construcción de infraestructura,
renovaciones urbanas, entre otros; los cuales han transformando y desarticulando las
lógicas, dinámicas y sentidos que en los respectivos territorios históricamente se han
gestado. Con relación a esto Cernea expone que “A menudo, el desarrollo, sea
espontaneo o inducido, no solo se traduce en beneficios, sino también en desorganización
social” (1995b, p. 224).
En Colombia, como en otros países de América Latina, la cuestión del desplazamiento
involuntario y el reasentamiento se presenta con serios factores que la agravan: la
marcada inequidad, los preocupantes índices de pobreza, el desempleo, la violencia, así
como la tradición de clientelismo, corrupción y falta de continuidad en las políticas en el
manejo del Estado. Dichos factores inciden en la exacerbación de los conflictos que
conllevan y acompañan procesos de desplazamiento y reasentamiento (Partridge, 2000).
Sin embargo, la evidencia empírica pareciera apuntar a que el progreso, así como la
decidida intención de participar en el concierto mundial, es nuestra apuesta de país, con
la esperanza de que los beneficios que genera el crecimiento económico en algún punto
se traduzcan en una mejora generalizada de las condiciones de vida de la población
colombiana.
74
– La práctica del reasentamiento: El enfoque técnico y la realidad social
El desplazamiento involuntario de población es uno de los impactos negativos más
severos que produce el desarrollo; empero, en muchos países, particularmente aquellos
en vía de desarrollo, como Colombia, ese impacto sigue siendo considerado como un
sacrificio a asumir para darle paso a la modernidad y el progreso, tanto en el ámbito
urbano como en el rural. Al respecto, Cernea afirma que:
El desplazamiento se refiere a la forma en que se expropian la tierra y otros bienes
importantes y se moviliza a las personas, para permitir que avance un proyecto de interés general. En la vida real, esto no es sólo una "expropiación", una simple transferencia de
propiedad a cambio de una compensación. En términos sociológicos, se trata de un
proceso de deshilvanar los patrones existentes de organización social y el funcionamiento
de los sistemas de producción y de los asentamientos existentes. El desplazamiento
forzado de la población siempre crea una crisis social, y a veces también política (Cernea,
1996, p. 1516) 25.
En este orden de ideas, se hace necesario comprender que los reasentamientos de
población más que procedimientos técnicos (jurídico y financiero), son fundamentalmente
procesos sociales y culturales. Estos son políticos, por estar inmersos en relaciones de
poder, son históricos porque responden a las condiciones cambiantes de los contextos, y
son discursivos porque además de responder a intereses, finalidades, intenciones y
emociones, obedecen a maneras diferentes de entender el mundo (Serje, 2011). Por
consiguiente, los reasentamientos son procesos dinámicos y complejos que deben
contemplar las múltiples pérdidas y rupturas que se presentan en términos del desarraigo
por dejar atrás la vivienda y el barrio, las formas de producir el sustento, el acceso a
bienes y servicios, las formas de intercambio, las redes familiares y vecinales, el acceso a
lugares y memorias.
En este sentido, la literatura da cuenta de que cualquier proceso de reasentamiento
produce efectos que abarcan simultáneamente diversas dimensiones de la vida social,
tales como:
25 Traducción propia
75
Tabla 20. Dimensiones de la vida social
Dimensión Descripción
Territorial
Relacionado con los predios y las tierras en disputa, y que involucra tanto los lugares que deben ser desalojados como los que deben ser apropiados para recibir en su nuevo hogar a la población en tránsito.
Ambiental del hábitat humano
Relacionado con la forma en que se configuran los paisajes (tanto el que se deja atrás como el del lugar al que se llega) la forma en que se usan los recursos y en general la huella ecológica que cada asentamiento humano deja en el entorno.
Física
Implica intervenciones tanto a escala urbanística como a nivel de la vivienda y la infraestructura (de servicios públicos y sociales) que se requiere para sustentarla. El diseño urbano y arquitectónico de las viviendas, barrios o poblaciones debe ser perentoriamente consultado con la gente que va a habitarlo
Jurídica
El proceso de reasentamiento se presenta, a la par con el problema de la tenencia, el de la seguridad económica de las personas y grupos involucrados, para quienes las tierras, los bienes y los derechos que deben dejar atrás representa su patrimonio, su garantía de futuro.
Económica
Relacionada con el hecho de que las personas se ven obligadas en muchos casos a reconstruir sus actividades para producir el sustento, o en otros a adoptar formas completamente nuevas y ajenas de hacerlo.
Organizativa de la vida social
Asociada a las relaciones internas de la comunidad y en las que ésta tiene con otros grupos; en la configuración de redes sociales y familiares y, sobre todo, en las relaciones de poder y de autoridad entre los grupos. Este tipo de proyectos tiende a dar mayores recursos de poder a ciertos líderes y a ciertos grupos que por manejar mejor el lenguaje y los rituales de la administración pública, pueden terminar por desplazar la autoridad de otros grupos y personas.
Discursiva o cultural
En la medida en que las prácticas del desarrollo y de la modernización con mucha frecuencia devalúan y desplazan los saberes propios e inciden en la forma en que los grupos se conciben a sí mismos y configuran sus identidades. De manera general, con las prácticas de la administración y el desarrollo, se producen nuevas formas de interpretar y de dar sentido a la vida, al pasado y al futuro.
Sicológica
Relacionada con los efectos que genera el reasentamiento en la vida afectiva y emocional, en la autoestima de las personas y en su capacidad de responder a los retos de vida de las personas y de los grupos implicados.
Político-administrativa
La decisión de relocalizar a personas debe ser objeto del debate y la acción pública. Los proyectos de reasentamiento no pueden ser entendidos únicamente como medida de compensación o de mitigación, sino como una posibilidad de consolidar una cultura y una práctica política incluyentes, así como una oportunidad para aportar
76
Dimensión Descripción recursos de poder a los grupos más vulnerables.
Dialógica
Los proyectos de reasentamiento deben lograr que las personas y grupos implicados conozcan y puedan discutir oportunamente las actividades e iniciativas que se piensa adelantar. Deben ser, asimismo, informados de sus opciones y derechos y deben conocer y ser consultados sobre las alternativas factibles de reasentamiento. Se requiere así, adoptar formas de comunicación dialógica (y no meramente de inducción o de información) que sean adecuadas a las particularidades sociales y culturales de cada grupo.
Fuente: Serje, 2011, pp. 33-35. De esta forma, un reasentamiento de población orientado a garantizar que los grupos
afectados sean tratados con justicia y equidad, logrando que sus condiciones de vida y
sus opciones de futuro mejoren, o por lo menos no se deterioren, debe partir del
reconocimiento y comprensión del territorio en que se va a realizar el proyecto, de manera
que sea a partir de este reconocimiento que se formule y ejecute dicho proceso. De no ser
así, los mecanismos y acciones definidos para mitigar los efectos del desplazamiento
involuntario, no se ajustarán a las necesidades, aspiraciones e intereses, de los grupos
poblacionales a los que son dirigidos, en consecuencia, dicha población experimentará un
deterioro en sus condiciones de vida y su bienestar.
Sin embargo, con frecuencia en las obras de utilidad pública, el reasentamiento se ha
contemplado como una operación jurídico-administrativa en la gestión predial necesarias
para la ejecución de dichos proyectos (Cernea, 2001). Así, y dada la normatividad en
términos de reasentamiento a nivel nacional y local, la planificación del reasentamiento se
ha reducido a los procedimientos legales para adquirir el inmueble y el reconocimiento de
las compensaciones, sin mayor atención sobre las realidades socioeconómicas y
culturales de las comunidades intervenidas (Mejía, 2000).
En este sentido, los procesos de reasentamiento han “privilegiado una visión centrada en
los aspectos estadísticos y técnico-administrativos, haciendo abstracción de los factores
humanos y culturales, así como de las dinámicas sociales y políticas propias de las
poblaciones involucradas” (Serje, 2011, p. 30). De ahí que los estudios y diagnósticos
institucionales resultan muchas veces insuficientes para comprender el fenómeno, debido
a que estos están diseñados en términos de conseguir la información que por norma es
requerida para poder ejecutar los proyectos. Se trata de una forma de diagnóstico y de
77
análisis de los problemas sociales que se caracteriza por someter la realidad social a un
proceso de focalización, por ende, la realidad a estudiar se ve fijada por medio de una
aproximación que enfoca de manera muy nítida ciertos aspectos, dejando por fuera de la
mira una multiplicidad de aspectos de la vida social (ibíd.). Como consecuencia, el
fenómeno que se sitúa en el centro de atención se delimita claramente y se hace
inteligible (medido y evaluado), sin embargo, esta forma de estudiar la realidad social
tiende a dejar por fuera de su campo de atención y análisis aspectos como:
En general se ignoran los fenómenos que no se prestan fácilmente a un proceso de
objetivación (p.e. procesos discursivos como las significaciones, intenciones y emociones que orientan la reacción de un grupo a determinada acción), o que no pueden ser
aprehendidos fácilmente por pertenecer a un contexto diferente al del observador (p.e.
realidades o nociones propias a una cultura local que resultan invisibles para el “técnico” o
administrador que viene de fuera), o que responden a intereses en los cuales está inmerso
el mismo observador (todo evento social está inmerso en relaciones de poder). De esta
manera se está dejando por fuera la esencia misma de la realidad social, es decir su
carácter histórico y político. (Serje, 2011, p. 31)
Como se evidencia en la revisión de la normativa nacional y local sobre reasentamiento,
los diagnósticos se centran en: la vivienda, las características físicas del territorio (lotes y
predios requeridos, equipamientos e infraestructura existente, condiciones de riesgo
natural, etc.); en lo social el foco está en aspectos demográficos, el estrato
socioeconómico, la situación de orden público, las actividades económicas, el nivel de
desempleo y la identificación de actores sociales (organizaciones comunitarias etc.), con
lo que se realiza una abstracción de las dinámicas sociales, culturales y política de la
población impactada por la obra.
1.2.1.3 Algunas consideraciones frente al reasentamiento
Puesto que, en principio, los proyectos de desarrollo son deseables para la mayoría de la
población, en tanto generan beneficios para sociedad en general, se hace necesario
trabajar en la mitigación de los impactos negativos que estos ocasionan, de tal forma que
este desarrollo también ofrezca beneficios a las poblaciones localizadas en su área de
influencia, por esta razón, se hace necesario adoptar “medidas enérgicas para proteger la
78
vida, sistemas productivos, cultura y derechos humanos de quienes padecen el desalojo”
(Cernea, 1995b, p. 228).
La literatura recabada da cuenta de importantes avances y profundizaciones en la
conceptualización sobre el reasentamiento y los impactos que genera el desplazamiento
involuntario, sin embargo, poco de ello se ha materializado en la práctica para Colombia.
Con relación a lo anterior, es importante precisar que aun cuando instituciones como el
Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo plantean una serie de
lineamientos y medidas de tipo económico, social y físico-espacial, para la elaboración y
ejecución de programas de reasentamiento (OP 4.12 , OP-710 respectivamente26), estas
políticas y lineamientos no son de obligatorio cumplimiento, y solo son acogidas y
aplicadas por aquellos proyectos e intervenciones que son financiados por estas
instituciones. Desde el ámbito académico se identifican una serie de investigaciones y
seminarios27 desde los que se han hecho reflexiones sobre las experiencias de
reasentamiento en la perspectiva de la evaluación y propuestas de mejoramientos. Para
el caso de Medellín, se destaca la experiencia y trayectoria que frente a este tema a
tenido la Corporación Antioquia Presente, la Escuela del Hábitat (CEHAP) de la
Universidad Nacional de Colombia sede Medellín, con relación a la experiencia del barrio
de Moravia (comuna 4 de Medellín); y el Observatorio de Reasentamientos y Movimientos
de Población.
En la ciudad de Medellín, los procesos de reasentamiento tienden a denominarse de
diferente forma, así, se habla de reubicación, de relocalización, de traslado, de acceso a
la vivienda, conceptos todos vinculados a la adquisición y restablecimiento del bien físico
sin mayor atención sobre las realidades socioeconómicas y culturales de las comunidades
intervenidas. Incluso aquellas instituciones que hacen alusión explícitamente al concepto
de reasentamiento, tienden a dar mayor atención al restablecimiento físico28 (la vivienda).
Es el caso del Instituto Social de Vivienda y Hábitat de Medellín - ISVIMED, que en su
26 Ver acápite 1.1.1 27 Se destaca aquí los debates, eventos y estudios de la Mesa Nacional de Diálogos sobre Reasentamientos Involuntarios de Población, de la Universidad de los Andes. 28 Al respecto se identifican las investigaciones: Guevara y Acevedo, (2013) y Mejía (2012) para el caso de Ciudadela Nuevo Occidente; Peláez (2013) para el caso de Moravia y de Ciudadela Nuevo Occidente; Mena (2011) con relación al proyecto habitacional Mirador de Calasanz.
79
página web29 definen el Reasentamiento Integral de la población como: “el
restablecimiento de las condiciones habitacionales de los hogares intervenidos por obras
públicas, eventos naturales, riesgo, desastres y aquellos que se encuentran
históricamente activos en el proyecto de arrendamiento temporal”. De otro lado, se
identifica que este énfasis en lo físico, por lo general, es acompañado por directrices y
lineamientos jurídicos que dan prioridad a la prevalencia del interés general e invisiviliza
(subvalora) las relaciones sociales y las actividades económicas existentes en los
territorios intervenidos (Molina, 2015, p.25).
No obstante, la ciudad ha hecho esfuerzos significativos por tratar de mitigar los impactos
que suscitan los desplazamientos involuntarios en ocasión a la ejecución de una obra de
desarrollo. Estos impactos han sido atendidos por medio de las compensaciones o
reconocimientos económicos estipulados en la normatividad nacional y local. A
continuación, se relacionan las normas en cuanto a compensación en el ámbito local:
Tabla 21. Subsidios y compensaciones en Medellín
Decreto Descripción Decreto Nº 2320 de 2005 “Por el cual se adopta la metodología para el pago de compensaciones”
– Componente económico – Prima de traslado – Prima de trámites legales – Prima por afectación económica – Componente Social
Decreto Nº 2339 de 2013 “Por el cual se reglamenta la administración, postulación y asignación del subsidio municipal de vivienda del municipio de Medellín”
– Subsidio de vivienda en sus diferentes modalidades
Decreto Nº 0543 de 2013 “Por el cual se regula el pago de compensaciones por enajenación voluntaria”
– Compensación por traslado – Compensación por trámites legales – Compensación por trámites legales por
vivienda de reposición – Compensación por gastos de
escolarización – Compensación por expensas en curaduría – Compensación por compras parciales – Compensación por traslado especial – Compensación por impacto económico
Decreto Nº 0965 de 2014 “Por el cual se modifica el decreto municipal Nº
– Compensación por pago de desconexión de servicios públicos
– Compensación por concepto de
29 Recuperado el 3 de mayo de 2017 de: http://isvimed.gov.co/programa/reasentamiento-integral-de-poblacion/
80
Decreto Descripción 543 de 2013” arrendamiento temporal
Decreto Nº 0478 de 2014 “Por el cual se establece el reconocimiento de compensaciones por el desplazamiento de actividades económicas informales”
– Compensación por el desplazamiento de actividades económicas informales
Decreto 1091 de 2017 “Por medio del cual se regula el reconocimiento de indemnizaciones económicas dentro del proceso de adquisición de bienes inmuebles para proyectos de utilidad pública”
Indemnizaciones económicas por concepto de daño emergente – Trámites legales – Traslado – Traslado especial – Desconexión de servicios públicos – Gastos de publicidad – Arrendamiento temporal – Impacto de escolarización
Indemnizaciones económicas por concepto de lucro cesante – Lucro cesante – Economía formal Creación del comité de indemnizaciones
Fuente: Elaboración propia con base en la normativa relacionada Al respecto, Cernea plantea que la compensación por definición, nunca será suficiente
para restablecer la base socioeconómica sostenible para la población reasentada, puesto
que esta tradicionalmente se ha centrado en la propiedad-material (Cernea, 2001, p. 50).
Según Cernea la clave de un reasentamiento orientado a generar oportunidades de
mejorar las condiciones de vida de la población está en adoptar un enfoque centrado en la
gente, el cual propenda por lograr el restablecimiento y mejora de las capacidades de
generar ingresos y de los medios de vida de las personas desplazadas (Cernea, 2001).
Sobre este respecto, se destaca el esfuerzo realizado en el proceso de formulación de la
Política Publica de Protección a Moradores en la ciudad de Medellín (Alcaldía de Medellín,
2017b), en donde se reconoce la relación existente entre el poblador y su territorio. Bajo
enfoques como el poblacional, territorial, de derechos, entre otros, este estudio reconoce
unos modos y medios de vida que los pobladores en el trasegar de su historia han
concebido para llevar a cabo sus proyectos de vida.
81
1.2.2 El Territorio: una aproximación desde el análisis económico
Tal como se ha señalado en párrafos anteriores, si bien las obras de utilidad pública,
propenden por generar beneficio a la colectividad, por lo general esta mejora suscita
transformaciones significativas en el territorio en donde se emplazan. La ejecución de
estos proyectos, además de transacciones jurídicas y financieras en la compra de predios,
genera una serie de cambios sociales y económicos en el territorio intervenido. Con
frecuencia, estos proyectos se materializan en territorios (rurales y urbanos), cuyo
ordenamiento territorial, o la ausencia de este, ha definido características particulares de
usos, condiciones sanitarias, seguridad, entre otras. Dichas intervenciones, suscitan una
alternación a las lógicas y dinámicas que históricamente allí se habían concebido, porque
se generan múltiples efectos (positivos y negativos) en los pobladores de esos territorios,
especialmente para aquellos que deben ser reasentados, aún más para aquellos que se
ven obligados a salir del territorio.
En el siguiente apartado se presenta el concepto de territorio adoptado en esta
investigación, así como la definición de los componentes que lo constituye. Seguidamente
se expone la cualidad que tiene el territorio para satisfacer las necesidades de los
pobladores que lo habitan. Para finalizar, se plantean los referentes teóricos sobre la
valoración económica de los atributos territoriales.
1.2.2.1 El Territorio
Según Echeverría y Rincón (2000), el territorio es un concepto que cobra relevancia en la
sociedad contemporánea, que no ha dejado de ser polémico, desde el sesgo especialista
de las décadas de los 50, 60 y 70, hasta su contenido socio-político, perfilado en las
décadas de los 80 y 90.
Al estudiar el concepto de territorio es necesario entenderlo e interpretarlo en su doble
papel: “como soporte material y básico del desarrollo social y como producción social
derivada de la actividad humana que transforma ese territorio que le sirve de base”
(Echeverría y Rincón, 2000, p. 14). Así, el territorio no un es mero espacio físico, como se
planteaba por la Escuela de Chicago en las décadas 20 y 30, sino que se define desde los
procesos y grupos sociales que lo han transformado e intervenido haciéndolo parte de su
82
devenir (Echeverría y Rincón, 2000). Es importante destacar que esta relación que se
gesta entre el sujeto transformador y el objeto transformado no es unidireccional, ya que a
la vez que el primero crea o modifica el territorio, éste último a su vez marca y deja
huellas sobre el sujeto, transformándolo, tal como lo se expone a continuación:
Mientras los hombres marcan habitan, transforman y se apropian del territorio, lo van
configurando y reorganizando, de acuerdo con la forma como ellos se relacionan entre sí
dentro del mismo y a su vez, dicho territorio afecta y transforma a los seres que lo habitan y
se constituye en parte vital del hombre. De esa manera trasciende sus características
físicas, hasta convertirse en ese lugar donde se gestan las identidades y pertenencias y se
realiza la personalidad (Echeverría y Rincón, 2000, p. 15).
Las autoras afirman que: “cuando el concepto del territorio se construye a partir de las
territorialidades que lo definen, este se comprende como proceso y construcción”
(Echeverría y Rincón, 2000, p. 12). De esta forma, la territorialidad es el elemento
constituyente del territorio, por lo que el territorio se debe entender como producción
constante, como asunto en permanente configuración, dinámico y cambiante, donde la
actividad y dinámicas sociales (culturales, políticas, económicas) tienen un gran aporte a
su conformación, y donde lo físico es apenas una de las tantas dimensiones en las que la
territorialidad se expresa (Echeverría y Rincón, 2000). Esto, en parte, permite entender
porque las intervenciones urbanas donde prima los criterios físico-espaciales, terminan
por desconocer las lógicas y dinámicas sociales y económicas propias del territorio,
generando con ello resistencia y conflictos, además de no logran los resultados esperados
con su ejecución.
Con relación a lo anterior se anota que:
En el territorio confluyen diversos ejercicios de territorialidad, no sólo secuencial sino simultáneamente, y en la resolución de sus intercambios se gesta su sentido propio. Éste
está sometido a los cambios que producen las interacciones y negociaciones entre las
diversas expresiones que acontecen simultáneamente en el espacio y el tiempo, derivadas
tanto de sujetos y actores sociales como de los procesos externos o internos en los que se
inscribe o participa un determinado lugar. De allí que el territorio se configure y re-configure
permanentemente, asumiendo variaciones imprevisibles en el tiempo (cuyos períodos y
duraciones bien pueden ser largos o cortos y cuyos ritmos de variación pueden ser
83
acelerados o lentos), y mutaciones o innovaciones en sus códigos originales. (Echeverría y
Rincón, 2000. pp. 18-19).
Esto permite mencionar que en este proceso, configuración y re-configuración, el territorio
sufre variaciones tanto físicas como de sentido en el tiempo, lo cual puede tomar
décadas, o años, o por el contrario, puede ser repentina, como en las transformaciones
derivados de obras de utilidad pública. En relación con esta última, Cernea (2001, p.14)
afirma que las relaciones sociales que se gestan en el territorio pueden romperse
abruptamente por el desplazamiento involuntario de población, razón por la cual, se
genera un desgarramiento del tejido social lo que pone en riesgo de empobrecimiento
social, cultural y económico a los hogares afectados, tanto los que permanecen como lo
que son movilizados.
Con base en lo expuesto por Echeverría y Rincón (2000), a continuación, se plantean
algunas cualidades del territorio:
Tabla 22. Cualidades del territorio en la ciudad
Cualidades Descripción
Heterogeneidad
El territorio se reconoce como una construcción desde diversos sujetos, actores30 y procesos, la base del territorio radica en esos intercambios en el espacio y el tiempo, entre diversas fuentes, en torno a un ámbito de relaciones comunes (armónicas o conflictivas).
Reconocimiento interno y externo
El cual depende no solo de los pobladores del territorio sino también del Estado y de otras instituciones u organizaciones sociales. En esta se basa la existencia o la posibilidad de ser reconocido un territorio en tanto proceso y construcción y no solo como espacio.
Simultaneidad
La ciudad en tanto trama compleja se concibe como una unidad construida desde sus propias contradicciones, en la cual una parte es constitutiva de las otras y viceversa. Si se asume lo anterior, también es posible reconocer que, sobre la misma ciudad, como territorio, sus habitantes trazan recorridos y trayectos diversos -imaginarios y concretos-, desde los que hay una posibilidad abierta para la construcción de múltiples mapas armados de fragmentos. En adición a lo anterior, se menciona que se presenta una simultaneidad en cuanto a las escalas, es decir, los territorios
30 Sujetos y actores (habitantes, Estado, organizaciones sociales, instituciones públicas, civiles, privadas, del mercado, actores armados, iglesias, etc.)
84
no son cerrados, en la medida en que están en estrecha interrelación con otros territorios, locales y regionales y con el contexto nacional y mundial.
Movilidad y cambio
La ciudad es vista desde la producción resultante de la tensión permanente, en donde desde la cotidianidad de los pobladores y de sus interesas y necesidades se genera un flujo constante de acciones y repeticiones que le dan vida al territorio.
Fuente: Echeverría y Rincón, 2000, pp. 20–28. Ahora, dado que el concepto de territorio hace alusión a diferentes escalas, que van
desde lo macro hasta lo micro, es decir, desde los global hasta lo barrial/vecinal. Dichas
escalas se contienen mutuamente, así lo urbano porta simultáneamente diversas escalas,
coexistiendo sobre un mismo espacio (Echeverría y Rincón, 2000). Dado lo anterior se
precisa mencionar que para esta investigación la escala barrio/vecindario, tiene un papel
preponderante, toda vez que aquí se intenta ahondar en el sentido que surge en la vida
cotidiana, el cual deriva de las actividades, usos y prácticas sociales (culturales y
económicas), tanto individuales como colectivas, que acontecen en un espacio
determinado. Dado lo anterior, el concepto del lugar tendrá particular interés para esta
investigación puesto que este se entiende como:
el espacio que, circunscrito y demarcado, “contiene” determinada singularidad
emosignificativa31 y expresiva, es el espacio donde específicas prácticas humanas
constituyen el lazo social, (re)elaboran la memoria a través de la imaginación
demarcándolos por el afecto y la significación: en su imbricada función de continente, es
tanto un posibilitador situado, como también como punto de referencia memorablemente
proyectivo, depositario y crucero de códigos y posibilitadas, de permanencia y cambio. Esta
demarcado por límites físicos o simbólicos, tiene un lenguaje específico, una fragmentación interior ocupada por la diferencia que complementa, actores estructurantes y estructurados
con jerarquías variables, y propicia y produce unas formas rutinarias y ritualizadas de
experiencia que (re)construye la identidad, entre otros componentes. Con-forma a los
lugareños, aunque no elimina el surgimiento de contradicciones y conflictos (Vergara,
2013, p. 35)
De lo antes expuesto, podemos inferir que si bien la ciudad se construye de manera
planificada, también lo hace de forma espontánea, a partir de unas concepciones de 31 Refiere a la fusión de significación y emoción, a nivel individual (exaltación, indignación, sumisión, etc.) o colectivo (rencor social) (Vergara, 2013; nota al píe 38).
85
orden muy diversas, que están determinadas por las formas de apropiación del espacio
de diferentes actores (públicos, no gubernamentales, comunitarios, religiosos,
empresariales, académicos e ilegales) que según sus aspiraciones, intereses y
necesidades. Así, la ciudad es una matriz compuesta de una significativa cantidad de
territorios, nominados y demarcados continuamente, por la confluencia de las formas de
apropiación de los diferentes actores que en él tienen algún interés. En este sentido, el
territorio se construye desde la acción que lo territorializa, ejerciendo y expresándose,
codificando y dotando de sentido propio a esos lugares (Echeverría y Rincón, 2000).
En suma, el territorio refiere tanto el espacio, la forma, lo material, los objetos, como a la
acción social y los sentidos simbólicos que se allí se gestan. Así, el territorio no un es
mero espacio físico, este se define desde los procesos y grupos sociales que lo han
transformado e intervenido haciéndolo parte de su devenir. De lo antes mencionado, se
puede plantear que el territorio tiene dos elementos que lo constituyen: un componente
social y un componente físico. Estos aspectos se ampliarán a continuación.
a. Componente Social
Refiere a los procesos y dinámicas sociales (culturales y económicas) que se suscitan en
un territorio determinado. Este componente hace alusión, en primera instancia, a las redes
vecinales y familiares que se producen en el territorio, las cuales cumplen funciones de
solidaridad, cooperación y reciprocidad. Estas redes sociales, se configuran con base a
lazos de consanguinidad, amistad, compadrazgo, de apoyo profesional y ayuda mutua.
Estas se gestan desde el espacio local como bien lo señala, Maffesoli (2004, p. 217)
quien plantea que la dimensión espacio temporal de la socialidad es la vida cotidiana,
donde la proxémica (proximidad) posibilita la interacción con el otro, la interacción desde
el espacio cercano, pero al mismo tiempo la relación con el territorio en tanto construcción
del lugar.
Es precisamente en ese escenario espacio temporal de la vida cotidiana que se expresa a
escala barrial/vecinal donde se establece una estrecha relación entre la cercanía y la
solidaridad. En este sentido Maffesoli afirma:
86
En cierto modo, la ayuda mutua tiene forzosamente que existir, no se origina por mero
desinterés: el apoyo prestado puede serme recíproco el día en que lo necesite, de esta
manera, todos se hallan incluidos en un proceso de correspondencia, de participación que
le concede preferencia al cuerpo colectivo. (2004, p. 77)
Suzanne Keller plantea dos consideraciones que definen las relaciones de vecindad:
1) Las relaciones de vecindad constituyen un tipo de relación socialmente definida que va
desde reglas y obligaciones muy formalizadas, hasta intercambios voluntarios sumamente
variados. 2) En esencia, las relaciones vecinales llevan consigo el intercambio de servicios, información y aprobación personal entre aquellos que viven cerca unos de otros, sea cual
sea la definición de cercanía. (Keller, 1975, p. 59)
Esta misma autora (Keller, 1975, p 60) plantea que los intercambios a nivel de las
relaciones de vecindad se producen por diferentes necesidades: a) la falta de un alimento,
b) una emergencia o calamidad, c) un evento colectivo significativo (boda, día de fiesta
etc.); por una situación generalizada de crisis económica; dándose así intercambios de
tipo material y espiritual. En este sentido el vecino “en esencia es el que ayuda en tiempos
de necesidad, del que se espera debe entrar en juego cuando los demás medios se han
agotado” (Keller, 1975, p 35). En este mismo sentido Lomnitz (1989) plantea que las
redes de intercambio representan las estructuras sociales que permiten sobrevivir a
población marginada: inestabilidad ocupacional, bajos ingresos y falta de prestaciones
sociales. Para este tipo de población, el intercambio y la reciprocidad puede cubrir las
pequeñas o grandes emergencias de la vida cotidiana: alimentos, cesantía, enfermedad
(Lomnitz, 1989); en este sentido estas relaciones que se gestan en el territorio comportan
una respuesta a múltiples carencias o necesidades, tanto materiales como no materiales.
De igual forma, se tiene en consideración la identidad y el sentido de pertenencia de los
sujetos con el territorio que habitan. Estas se construyen desde las relaciones que se
establecen en el espacio, en tanto éste es construido socialmente a partir de una historia
compartida, un universo simbólico y un espacio físico común. Se hace alusión a las
adscripciones, sentimientos, las solidaridades locales y las diferenciaciones que se
establecen en relación con lo otro, ligadas con una comunidad mayor, aun más abstracta
(Echeverría y Rincón, 2000). Lo antes mencionado indica la constitución de un centro de
87
pertenencia propio (material o virtual), a partir del cual se crean lazos y formas de
identidad territorial.
Esta pertenencia y diferenciación frente al otro y la simultánea pertenencia al todo, son
pertinentes en el estudio del territorio y la territorialidad urbana. En la construcción y
apropiación territorial, el yo se identifica con aquello que le es (o siente como) propio y se
diferencia en relación con lo ajeno, estableciendo una mirada desde el adentro hacia el
afuera. Allí aparece la dupla identidad y otredad desde lo cual se construyen centros,
márgenes y periferias, no sólo físico espaciales sino también culturales, sociales, políticos,
etc. (Echeverría y Rincón, 2000, pp. 27-28)
Finalmente, se resalta las prácticas sociales encaminadas a la sobrevivencia y
sostenimiento. Lo anterior alude a los mecanismos y tácticas para obtener fuentes de
ingreso y la configuración de redes económicas (relacionado con formas de intercambio).
Sobre este respecto, la evidencia empírica da cuenta de una significativa variedad de
prácticas económicas que son desarrolladas por individuos, familias, y colectivos en
busca de un sustento económico. Muchas de estas prácticas se enmarcan en lo que la
literatura denomina como economía popular (Corragio, 1999), la cual se caracterizan por
estar orientadas hacia la producción para la satisfacción de las necesidades humanas, a
través del trabajo con recursos no convencionales, fundamentado en vínculos familiares,
vecinales y comunitarios de carácter solidario y cooperativo. Este marco reconoce que la
producción de bienes y servicios, no responde necesariamente a procesos tecnificados e
intensivos en capital, si no que se pueden desarrollar en razón a las vocaciones y
prácticas económicas de tradición familiar, y en la creatividad y recursividad de las
personas para producir con los medios a los que se tiene acceso.
Otro aporte que propone la economía popular, es la relevancia de la vivienda, no solo
como residencia donde habita la familia que conforma la unidad doméstica (refugio), si no
como recursos o medios de producción (Coraggio, 1999, p. 5). Bajo esta lógica, la
vivienda ofrece muchas potencialidades en cuanto a las diversas actividades económicas
que se pueden dar a su interior: comercio, servicio, producción de alimentos entre otros.
De igual forma, se considera la posibilidad de emplear los recursos que dispone el
territorio, tales como el espacio público contiguo a la vivienda, los recursos naturales, los
equipamientos etc., los cuales son utilizados para el desarrollo de las actividades
88
económicas, en sus diferentes fases del proceso productivo: consecución de insumos,
producción y comercialización.
b. Componente físico
El territorio se reconoce como producción y proceso que existe en virtud de las
sociedades en las que éste se configura. Así pues, el componente físico alude a
características materiales del espacio que favorecen el desenvolviendo de la vida social
que ese espacio soporta. De esta forma, se precisa que en esta investigación no se
pretende realizar un análisis técnico de las variables y cualidades físicas del espacio,
propia de disciplinas como el urbanismo o la arquitectura, en su lugar, se plantea ahondar
en la relación que se gesta entre los objetos/elementos físicos (espacio público,
equipamientos, red vial, vivienda etc.) y las prácticas sociales que sus habitantes realizan.
Así, el interés se centra en ahondar en los usos que los habitantes le dan la estructura
física del territorio, en razón a que este les posibilita satisfacer necesidades individuales y
colectivas.
En este sentido, vale la pena traer a colación lo planteado por Buraglia (1998), sobre la
capacidad que tiene un barrio, en tanto ambiente residencial32, para satisfacer
necesidades individuales y colectivas de sus pobladores. Sobre este respecto, se retoma
lo planteado por este autor en lo que refiere a los elementos físicos que, en la mayoría de
los casos, todo barrio tiene a pesar de su condición de precariedad material o simbólica.
Tabla 23. Elementos físicos del barrio
Cualidad Descripción Territorio: Espacio delimitado
Todo barrio posee unos límites identificables y precisos, que pueden ser encontrados en cambios morfológicos o espaciales o a través de la percepción de sus habitantes; a veces coincidiendo con accidentes físicos, bordes naturales o barreras creadas, definen un territorio específico. Por su origen y formación también resultan áreas identificables como barrio, así como por ciertos eventos o circunstancias comunes que involucran a la comunidad que lo habita como las
32 Si bien el autor plantea estos atributos en el marco de su elaboración conceptual sobre el barrio, ámbito urbano, se considera que dichas cualidades, guardadas ciertas consideraciones, pueden ser pertinentes en el ámbito rural.
89
Cualidad Descripción divisiones administrativas o religiosas, el territorio de las organizaciones comunales o los límites prediales del lote desarrollado en determinada fase por una misma agencia o promotor. La toponimia es otra forma de establecer sus límites y extensión
La malla de circulación Dependiendo de su forma y organización espacial, la malla de circulación determina los elementos de la agrupación en manzanas y regula la intensidad y tipo de relaciones físicas que se pueden dar en un determinado espacio urbano ya que puede favorecer o inhibir la articulación, el intercambio o el desarrollo de ciertas actividades de servicios comerciales o institucionales, o favorecer o evitar las posibilidades de encuentro y socialización Contribuye además a vitalizar o debilitar la actividad urbana, a estimular procesos de cambio en el patrón de uso, a integrar áreas vecinas o a establecer límites como barreras en el caso de grandes ejes de circulación. La malla de calles residenciales adopta un carácter señaladamente distinto al de los grandes ejes de actividad urbanos y se constituye en un componente más de los elementos característicos del barrio
La centralidad Aun en forma rudimentaria o embrionaria, todo barrio posee al menos un centro de actividad social y comunitaria identificable como tal. Su importancia y necesidad como parte componente de la estructura del barrio se hace evidente por el uso y transformaciones que la comunidad le asigna a una parte del espacio urbano, generalmente un área libre, un cruce vial o un sitio que concentra varias tiendas, etc., donde comienzan a darse reuniones públicas, se asienta el mercado semanal, tienen lugar manifestaciones religiosas o políticas, y se convierte en lugar de encuentro para diversos grupos sociales. La centralidad es uno de los elementos que más impacto ejercen sobre los cambios en el barrio y respecto al crecimiento de la ciudad. Por su parte ésta se transforma drásticamente y en función de dichos cambios.
Los equipamientos sociales
El barrio se caracteriza igualmente por la presencia de estructuras de apoyo a la actividad residencial, ya sea alojadas en viviendas, ya como edificaciones singulares, sueltas o formando parte de las manzanas. A menudo son la materialización de diversas reivindicaciones laicas como la escuela, la recreación o el centro de gobierno local. Durante los años 70 fue común la producción de estándares y normas para racionalizar la localización de equipamientos en función del número de habitantes y del radio de acción.
Los referentes Estos son elementos edificados o lugares donde han ocurrido
90
Cualidad Descripción eventos o situaciones históricos de valor o interés local que han quedado registrados en las efemérides de sus habitantes y que le asignan un significado particular al sitio, monumento o edificación los cuales se distinguen por su nombre, localización o forma. El referente sirve de memoria y de articulación entre el presente y el pasado, pero también como punto de localización y orientación al usuario
La vivienda La vivienda es un atributo irremplazable en la existencia de los barrios. Su área. espacios, acceso a servicios públicos, su flexibilidad (posibilidad de mejoramiento y adecuación progresiva), privacidad.
Fuente: Buraglia, 1998. En este punto es importante destacar que según el concepto de territorio considerado en
esta investigación, y lo expuesto en el acápite sobre el proceso de reasentamiento de
población (1.2.1.1), es posible inferir que el reasentamiento, tal como se concibe en la
normatividad nacional y local, no tiene una base territorial, toda vez que éste en la
práctica se concibe como un procedimiento de la gestión predial, en donde ha primado
una visión técnica (desde lo físico, financiero y jurídico), desconociendo o subvalorando el
componente social del territorio, es decir, lo referido a los tejidos y dinámicas
socioeconómicas presentes en el territorio.
1.2.2.2 El Territorio como recurso para sus pobladores
Tal como se ha expuesto en el apartado anterior, el territorio esta constituido tanto por
componentes sociales, como físicos. El territorio se configura dada la interacción dinámica
de los múltiples actores que allí tienen algún interés. En consecuencias, cada territorio,
tiene características particulares, es decir, cada territorio posee cualidades físicas, así
como, procesos y dinámicas sociales que le son propios. En este sentido, el territorio
ofrece un conjunto de recursos tangibles e intangibles, mercadeables y no mercadeables,
los cuales son utilizados de diferentes formas por sus pobladores, para la satisfacción de
sus necesidades.
En efecto, dadas las características del territorio, sus moradores han gestado tácticas y
acciones, en torno al uso de su territorio, que le han posibilitado llevar a cabo sus
proyectos de vida, sean estos de subsistencia o de consecución progresiva de mejores
condiciones de vida. Es decir, los moradores han concebido formas de utilizar el territorio
91
conforme a sus intereses y necesidades. Dichas tácticas y acciones parten del uso de los
atributos del territorio, es decir, se realizan con base en sus cualidades socioeconómicas
y físicas: las redes de relaciones, los elementos identitarios, los patrones y pautas de
consumo, los mecanismos de intercambio, el manejo de los conflictos, la vivienda, la
seguridad, el paisaje entre otros. Teniendo en consideración los conceptos y variables
enunciadas en los lineamientos y normas descritos en los apartados 1.1.1, 1.1.2 y 1.1.3, y
los desarrollos conceptuales sobre reasentamiento de población y Territorio, expuestos
antes, se elabora la siguiente tabla:
Tabla 24. Categorías, subcategoría y variable
Categoría Subcategoría Variable
Socio-económico
Relaciones sociales Redes familiares
Redes vecinales
Activos culturales Costumbres
Referentes identitarios
Autogestión Organizaciones de base comunitaria
Economía
Actividades económicas
Redes económicas
Costo de sostenimiento
Físico (socio-espacial)
Ventajas de localización
Localización relativa en la ciudad
Accesibilidad a sistemas de transporte público
Infraestructura pública y equipamiento sociales33
33 Según el Acuerdo 048 de 2014 (POT de Medellín) son las construcciones de uso y propiedad pública o privada, destinadas a satisfacer las necesidades básicas, tanto las que permiten la prestación de servicios colectivos a los habitantes, como las que soportan el funcionamiento y operación del municipio en su conjunto y sostienen el desarrollo de actividades multisectoriales (Alcaldía de Medellín, 2014, p. 125). Pueden ser clasificados en: Equipamientos Básicos Sociales (salud, educación recreación etc.), Equipamientos Básicos Comunitarios (culto, asistencia social, comunitario), Equipamientos de Seguridad y Convivencia (fuerza pública, administración de justicia, prevención y atención de desastres, etc.), equipamientos de infraestructuras (prestación de servicios, transporte, etc.) y equipamientos institucionales (desde internacionales hasta los locales).
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Categoría Subcategoría Variable
Espacio público
Entorno
Contaminación Riesgo34 Paisaje (elementos contemplativos)
La vivienda
Tenencia
Área-espacios
Flexibilidad (usos) Privacidad Servicios públicos
El territorio cumple toda una serie de funciones que repercuten en el bienestar de los
pobladores que lo habitan, en otras palabras, el territorio en la medida que posibilita la
satisfacción de necesidades, es una fuente de bienestar para sus moradores. Por
consiguiente, cambios o transformaciones abruptas del territorio, tienen un efecto en el
bienestar de la población que lo habita, en especial aquellos que deben ser trasladados
fuera de sitio, en razón a la materialización de una intervención u obra de desarrollo.
Como se mencionó antes, el territorio dispone de un conjunto de condiciones, bienes y
servicios que posibilitan la satisfacción de necesidades de sus habitantes, es decir, el
territorio cumple toda una serie de funciones que repercuten en el bienestar de los
pobladores que lo habitan, por lo tanto, este tiene valor. Ahora bien, el territorio es
valorado de forma distinta por diferentes personas y colectivos. Lo anterior se presenta
porque el valor económico del territorio, similar a lo que ocurre con el medio ambiente,
tiene tanto valor de uso como valor de no-uso35 (Labandeira, León, y Vázquez, 2007; Field
& Azqueta, 1996).
34 Este hace alusión tanto al riesgo por un posible evento físico (natural)como inundación, o avenida torrencial, como el riesgo asociado a la ocurrencia de eventos violentos o de delincuencia común (robos, presencia de pandillas, expendio de drogas) 35 Otro tipo de valor económico son el valor de opción y el valor de cuasi-opción. Estos en principio se atribuían a un tipo de valor de no uso, pues no implica un uso directo; sin embargo, también puede considerarse como un valor de uso con incertidumbre. Si el lector está interesado en profundizar en este tema se recomienda Labandeira, et al. (2007, pp. 114-124)
93
El valor de uso está dado por el uso que hacen los moradores de su territorio, por
ejemplo, el uso de los espacios públicos (de encuentro y esparcimiento) tienen un valor
por la experiencia recreativa del día de la visita, es decir, el valor de uso se deriva del uso
que realizan los individuos de los atributos del territorio. De otro lado, el valor de no uso se
corresponde con el deseo que tienen los habitantes de un territorio de preservar estos
atributos, aunque no realicen un uso directo de sus servicios o funciones. Puede ser que
una persona conceda valor a una placa polideportiva o una zona verde, sin utilizarlo, o sin
realizar ninguna visita.
La discusión sobre los motivos subyacentes al valor de no uso ha estado basada en los
argumentos de existencia, herencia y altruismo (Labandeira, et al., 2007, pp. 122-123). El
motivo de existencia indica que el valor del bien se puede explicar porque los individuos
piensan que el bien o recurso tiene derecho a la existencia, independientemente de su
consumo presente o futuro. El motivo de herencia implica que los individuos pueden
valorar un bien porque quieran dejarlo en sucesión para el disfrute de las generaciones
futuras. Se trata de un tipo de consumo indirecto del bien, pero que en cualquier caso no
es un consumo atribuible de forma exclusiva al sujeto en el momento presente. El motivo
de altruismo constituye una preocupación por el bienestar de otras personas de la
sociedad, tanto en el presente como en el futuro, las cuales se pueden beneficiar del uso
de los servicios o funciones del atributo.
94
Ilustración 3. Taxonomía del valor económico de un recurso
Fuente: Labandeira, et al., 2007, p. 123. La importancia del Valor Económico Total como concepto de valor se centra en el hecho
de que cualquier tipo de recurso se caracteriza por tener otros valores diferentes al valor
de uso directo. Dado lo anterior, no se puede descartar el hecho de que los atributos del
territorio tengan algo más que un valor de uso para los pobladores que habitan un
territorio, es de decir, que estos no sólo tengan valor por su uso directo, sino que tengan
valor por su existencia, o porque se desea que las siguientes generaciones puedan
disfrutarlos, o por el hecho de que haya una preocupación porque otras personas se
beneficien de ellos. Así, si solo se estiman valores de uso, se sub-estiman el verdadero
valor del recurso (Pearce, 1999), lo que generaría un sesgo en los estudios de análisis
costo-beneficio en la formulación de los proyectos.
1.2.2.3 Valoración económica del territorio: referentes teóricos
Vivimos en una sociedad en la que el problema de decidir ¿qué se produce?, ¿cómo se
produce?, ¿dónde se produce?, ¿cuándo se produce? y ¿cómo se distribuye lo
producido?, ha sido dejado en manos de los que denominamos el mercado. Se puede
definir un mercado como el espacio, la situación o el contexto en el cual se lleva a cabo la
venta y la compra de bienes, servicios por parte de unos compradores que demandan
95
esas mercancías y tienen la posibilidad de comprarlas, y unos vendedores que ofrecen
estos bienes y servicios. Pueden existir mercados de distintas escalas. Por ejemplo, un
mercado puede ser una tienda de barrio, un centro comercial o la Bolsa de valores en
Nueva York.
En teoría el funcionamiento del mercado es relativamente sencillo36: en un mercado
idealmente competitivo, confluye toda una serie de agentes económicos (consumidores,
productores) quienes actuando de forma racional (es decir, dadas un conjunto de
alternativas y restricciones, el agente elegirá la opción que maximice su utilidad), generan,
a través de su interacción, unos precios. Estos precios son los que determinan finalmente
la solución al problema de la asignación de unos recursos escasos. En efecto, los
consumidores muestran así sus preferencias por una serie de bienes y servicios, es decir
su disposición a pagar ellos. Las empresas toman esta información y organizan el proceso
productivo en consecuencia. La competencia entre las empresas, así como entre los
propios consumidores, y entre los oferentes de los insumos requeridos para la producción,
garantizan en principio que el resultado sea el óptimo (Field & Azqueta, 1996).
Ahora bien, el mercado arroja un resultado óptimo si la sociedad funcionara como el
modelo antes descrito. Pero en la realidad las cosas no se dan así, de hecho, en la
práctica el mercado se parece poco al ideal antes planteado, este tiene imperfecciones:
fallas del mercado (Labandeira, et al., 2007; Nicholson, 2004). Esto se presenta, porque lo
que caracteriza el funcionamiento del sistema no es la competencia perfecta, sino un
amplio abanico de formas de competencia imperfecta tanto en los mercados de bienes y
servicios como en el de los factores productivos. Siguiendo a Field & Azqueta (1996), esto
se debe a:
1. La presencia de monopolios, oligopolios y monopsonios; rigideces en los
mercados de trabajo y capital; la existencia de diferentes formas de racionamiento
en este último; la intervención del gobierno a través de impuestos, subsidios,
control de precios etc.
2. La incompletidud de muchos mercados, las asimetrías en la información etc.
36 Para obtener más información sobre estos temas, refiérase a textos sobre microeconomía como Varian (1999) o Nicholson (2004).
96
3. Porque existe todo un conjunto de bienes y servicios que carecen de un mercado
en el que se intercambien, por lo que en consecuencia no tienen precio: es el caso
de los denominados bienes públicos, los recursos comunes o las externalidades.
Este último aspecto (numeral 3) es de significativa importancia para la presente
investigación puesto que el territorio, como se describió en el apartado anterior, posee
atributos asociadas al sentimiento, al ambiente, las redes sociales y económicas, etc.;
para los cuales no es posible encontrar un mercado donde se generen los precios que
racionen su uso dentro del sistema. Dado lo antes mencionado, a continuación, se
exponen brevemente algunas de las características más importantes:
a. Externalidades
En términos generales las externalidades son efectos externos que sufren una o varias
personas por acciones u omisiones de otras. Las externalidades (economía externa) se
presentan “cuando la actividad de una persona (o empresa) repercute el bienestar de otra
(o sobre su función de producción), sin que se pueda cobrar un precio por ello, en uno u
otro sentido” (Field & Azqueta, 1996, p. 5). Las externalidades pueden ser positivas o
negativas. Una externalidad negativa puede ser el ruido, cuando un vecino pone el equipo
de sonido a todo volumen. Una externalidad positiva puede ser un jardín bien cuidado, si
el vecino lo mantiene en estas condiciones, el jardín aporta a hacer más agradable el
entorno. Se destaca que en cualquier caso, quien genera una externalidad negativa
(positiva) no paga (se ve recompensado) por ello, a pesar del efecto negativo (positivo)
que causa.
b. Bienes públicos
Este tipo de bienes son caracterizados por dos propiedades fundamentales. La primera es
la no exclusión: cuando no es posible, o es muy costoso, excluir a los agentes del
consumo del bien, aunque no paguen por ello, esto indica que el coste de ofrecer una
unidad adicional (coste marginal) a una persona adicional es cero. En consecuencia, los
bienes públicos no pueden ser racionados a través del mercado (Labandeira, et al., 2007).
La segunda es la no rivalidad: el consumo de un bien por un individuo no disminuye la
cantidad disponible para los demás, siendo posible el consumo simultáneo de un mismo
97
bien por agentes distintos (Labandeira, et al., 2007). Lo anterior implica que, “al no ser
bienes susceptibles de apropiación privada y exclusiva, o bien el mercado no los
producirá, simple y llanamente, al no poder cobrar un precio por ellos; o bien, si lo hace,
los producirá en cantidades subóptimas” (Field & Azqueta, 1996, p. 6). Ejemplos de
bienes públicos son: el aire, el servicio de seguridad ciudadana, el paisaje, lugares
identitarios, etc.
c. Recursos o bienes comunes
Los recursos comunes están caracterizados por la libertad de acceso (Field & Azqueta,
1996). Ello implica que su uso y disfrute no tienen ningún costo, pero a diferencia de lo
que ocurre con los bienes públicos, en muchos casos existe la rivalidad en el consumo.
Ejemplos de estos recursos comunales son los lagos, las aguas subterráneas, espacios
públicos de encuentro y esparcimiento, los equipamientos colectivos, las vías públicas etc.
Como se mencionó antes, una parte de los atributos del territorio, como las redes socio-
económicas, la seguridad, la identidad etc.; se pueden considerar como bienes y servicios
que no pasan por el mercado, porque no existe ningún mercado donde la gente compra y
venda la insatisfacción o gozo que genera, por ejemplo, la solidaridad de los vecinos, la
seguridad, o la calidad del aire, y por consiguiente, no tienen un precio. En consecuencia,
contamos con un mecanismo de asignación (el mercado) que opera con información
incorrecta sobre el valor del territorio, puesto que funciona como si varios de los atributos
del territorio careciesen de valor (precio cero), de ahí que a la hora de un análisis
(costo/beneficios, por ejemplo) para determinar la viabilidad de una intervenciones u obra
de utilidad pública, no haya información para valorar la alteración (o pérdida) de uno o
varios de estos atributos.
En este sentido, no parece desacertado el intento de encontrar precisamente ese valor,
desde una perspectiva económica, para integrar esa información en los procesos de toma
de decisiones, de forma que cuando se proyecte una intervención obra de utilidad pública
en un territorio, se pueda estimar la modificación que se producen en el bienestar de una
población ante las transformaciones que suscita una intervención u obra de utilidad
pública. Concretamente, se trata de valorar lo que supone para el bienestar de los
98
hogares la limitación (parcial o total) del acceso a los atributos del territorio, en razón al
desplazamiento involuntario que genera la intervención u obra de utilidad pública.
– Métodos de valoración económica
A continuación, se presenta, sucintamente, los conceptos teóricos que sustentan el valor
económico de los bienes no mercadeables, para posteriormente traer a colación las
metodologías empleadas, sin entrar a discutir sus virtudes y críticas, puesto que esto
excede el alcance de esta investigación. Estos conceptos y metodologías permiten medir
no solo el valor de los bienes y servicios que no pasan por el mercado, si no también
valorar los cambios de la calidad de los mismos en función de la intervención humana
(evaluación económica de los impactos ambientales).
Como se comentó previamente, la información sobre el valor real de algunos bienes y
servicios no están disponibles debido a que estos no son comúnmente intercambiados en
los mercados, en otras palabras, no existen mercados que expresen convenientemente el
grado de deseabilidad, de coste o de escasez de los bienes y servicios que el morador
puede acceder en su territorio y, por lo tanto, para algunos de los atributos territoriales, no
existen medidas en términos monetarios, de cuán valioso son estos para la comunidad
que los usa. No obstante, los economistas han desarrollado una variedad de técnicas
para valorar bienes y servicios de no mercado, las cuales son consistentes con la
valoración de bienes mercadeables.
Dichas técnicas de valoración económica, tiene como base los postulados de la economía
del bienestar, pero es en la economía ambiental, en el marco de la medición de los
beneficios y los costos asociados a los cambios en la calidad del medio ambiente,
especialmente cuando se trata de beneficios o costos intangibles; en donde se realizan
los más destacados desarrollos teóricos y prácticos en este tema.
Los estudios de valoración económica ambiental son fundamentalmente desarrollados
con técnicas empleadas para medir el verdadero valor de un recurso, teniendo en
consideración las preferencias de los individuos, hogares y la sociedad como un todo.
Para tal fin, dichas técnicas parten del supuesto proporcionado por el enfoque
antropocéntrico de asignar valores a los recursos que son útiles para las personas y
99
asignar un costo o valor del daño a cosas que pueden afectar negativamente al hombre
(Labandeira, et al., 2007). A partir de esto, los economistas proporcionan la teoría de valor
económico total que sirve de base para el entendimiento de los tipos de valores a estimar
y de la forma en que se deben interpretar para contribuir en los procesos de toma de
decisiones (Londoño y Correa, 2011).
La teoría de valor económico total se clasifica en valores de uso más valores de no uso
(VET = VU + VNU), teniendo en cuenta si el individuo, o los individuos utilizan en alguna
forma directa o indirecta, en el presente o futuro el recurso; o si estos asignan el valor
motivado por otra causa diferentes del beneficio propio. Este último caso refiere al valor
de no uso, el cual, como se mencionó antes, se corresponde con el deseo que tienen las
personas de preservar algún bien o servicio aunque no realice un uso directo de sus
servicios o funciones, motivados por razones altruistas, existenciales o el interés de
legado a generaciones futuras (Labandeira, et al., 2007).
Desde la teoría económica se derivan dos enfoques principales para la estimación del
valor económico de aquellos bienes y servicios que no tienen mercado: El enfoque
indirecto o de preferencias reveladas y, el enfoque directo o de preferencias declaradas.
El primer enfoque supone cierta complementariedad o sustitución entre un recurso (que
no tiene mercado) y un bien para el que existe mercado, entonces, la información sobre el
bien de mercado puede servir para estimar de manera indirecta el valor económico del
recurso (Field, 2003).
Las principales metodologías bajo el enfoque indirecto son el método del costo de viaje, el
enfoque hedónico, los modelos de salud (modelos de costos de tratamiento, estimación
de funciones de morbilidad y demandas por actividades preventivas y curativas bajo el
enfoque de producción de hogares) y la estimación de funciones de daño (Field, 2003).
Estas metodologías son ampliamente usadas en los planes de manejo ambiental de
diferentes tipos de proyectos de inversión (obras viales, proyectos de generación de
energía entre otros). Todas las metodologías que se vinculan con el enfoque indirecto, al
usar información de mercado y estar destinadas a la estimación de valores de uso, son
valores que se interpretan como límite inferior del valor económico total de un bien o
servicio (Londoño y Correa, 2011).
100
De otro lado, el enfoque directo o de preferencias declaradas implica preguntarles
directamente a las personas de qué manera valoran el recurso en cuestión. La filosofía de
este método consiste en valorar los beneficios (perjuicios) que genera una mejora
(desmejora) del recurso dada la cantidad monetaria que los beneficiarios (afectados)
potenciales de dicha intervención estaría dispuestos a pagar (recibir) por la misma; los
valores económicos estimados con alguna de las metodologías de este enfoque, se
obtienen de información directamente proporcionada por las personas, declaradas a
través de preguntas de máxima disposición a pagar o mínima disposición a aceptar (Field,
2003; Labandeira et al., 2007). Este enfoque se utiliza mayormente en situaciones en que
no existe ningún tipo de información de mercado que pueda servir para desarrollar la
estimación de los valores económicos. Un ejemplo de esto podría ser, estimar el valor
recreativo37 obtenido por los visitantes a un equipamiento, a un parque o a un espacio de
interés natural. Lo interesante del enfoque directo es que permite conocer las preferencias
de los usuarios y no usuarios de los recursos.
El principal método en el contexto del enfoque directo es el método de valoración
contingente el cual se ha aplicado bajo los enfoques de formato de pregunta abierta,
referéndum y doble límite. También se tienen los experimentos de elección y los modelos
de ordenamiento contingente y de comparación de parejas; y los modelos de valoración
de atributos de bienes o servicios, conocidos con el nombre de modelos de análisis
conjunto, o Conjoint analysis (Field, 2003; Ministerio de Medio Ambiente, Vivienda y
Desarrollo Territorial, 2003).
Como se comentó previamente, la valoración económica es una herramienta que
mayormente ha sido utilizada para el análisis de los impactos que genera la acción
humana en el medio ambiente, y para estimar cuanto varía el bienestar de un individuo
ante cambios en la calidad de un bien o servicio ambiental (Azqueta,1995). Según la
Autoridad Nacional de Licencias ambientales (ANLA) la valoración económica es una
herramienta que actualmente está incorporada al Análisis Costo Beneficio (ACB) y se usa
para:
37 Por su estética o significado cultural.
101
Ilustración 4. Utilidad de la valoración económica Fuente: Elaboración propia con base en Autoridad Nacional de Licencias Ambientales, Sf.
Dado lo anterior, en esta investigación se considera que la valoración económica es una
herramienta útil para emprender estudios sobre las pérdidas que asume la población
directamente intervenida por una obra de utilidad pública, toda vez que lo que se pretende
estimar es cuanto varía el nivel de bienestar de un individuo a partir del cambio en las
condiciones de acceso a un recurso, o lo que es lo mismo, cuanto varía el nivel de
bienestar del morador ante una limitación parcial (o total) al uso de los atributos
territoriales, producto del desplazamiento involuntario.
Escoger la mejor alternativa para el desarrollo de un proyecto (en el Diagnóstico
Ambiental de Alternativas – DAA).
Conocer el costo de las externalidades que pueda generar un proyecto en
unidades monetarias y despejar la incertidumbre sobre los verdaderos costos
del mismo.
Aportar información para mejorar el diseño del proyecto con miras a la
minimización de los costos derivados de las inversiones ambientales destinadas
a la prevención, corrección, mitigación y compensación de los impactos
ambientales.
Identificar si el monto que el proyecto destina para la prevención, corrección,
mitigación y compensación de impactos es el adecuado para controlar de
manera eficiente los impactos ambientales generados por el megaproyecto
Favorecer la implementación de medidas regulatorias que permite el ajuste de
los Planes de Manejo Ambiental a medida que se vaya ejecutando el proyecto
con la finalidad de evitar subvaloraciones o sobre estimaciones de las
inversiones en el control de los impactos.
Utilidad de la valoración
económica
102
2 El bienestar territorial y los atributos territoriales
En este capítulo se presentan los resultados de las técnicas de recopilación de
información descritas en el apartado metodológico, y se plantean los hallazgos e
interpretaciones sobre lo expuesto por los diferentes actores sociales entrevistados. A
partir del análisis de la experiencia Puente Madre Laura, se intenta indagar por los
atributos del territorio más relevantes para los moradores entrevistados. Con base en este
ejercicio, y retomando lo expuesto por los demás actores sociales entrevistados
(académicos, expertos, e institucionales), se plantea la noción de Bienestar Territorial.
En primer lugar, se hace una descripción de la experiencia referente de estudio, en donde
se describe la ubicación geográfica del proyecto y otras características del mismo;
seguidamente, se expone el análisis de la información recabada con relación a las
subcategorías y variables definidas en la Tabla 24, para, finalmente, emprender la
definición de Bienestar territorial.
2.1 La experiencia referente de estudio: Puente Madre Laura
El Puente Madre Laura está localizado en el norte de Medellín, más específicamente
entre las comunas 4 (Aranjuez) y 5 (Castilla). Esta megaobra es el puente intraurbano
más extenso de Colombia con 786 metros de longitud, aportando 7,25 kilómetros (carril) a
la infraestructura vial de la capital antioqueña (Observatorio de Reasentamientos y
Movimientos de Población, 2016b). El objetivo principal del viaducto es conectar las zonas
nororiental y noroccidental de la ciudad, a la altura de la calle 94, beneficiando de forma
directa los barrios de las comunas 4 y 5, y de forma indirecta a las comunas 1 (Popular), 2
(Santa Cruz), 3 (Manrique) situados en el costado oriental y las comunas 6 (Doce de
Octubre) y 7 (Robledo) en el costado occidental (Alcaldía de Medellín, 2015).
103
Ilustración 5. Alternativas de movilidad vehicular
Fuente: Alcaldía de Medellín, 2015 Según lo expone la Empresa de Desarrollo Urbano (citado por Observatorio de
Reasentamientos y Movimientos de Población, 2016b), el puente agiliza la movilidad del
parque automotor y mejora la movilidad de los peatones y ciclistas, ya que cuenta con 3,5
kilómetros de carril para la ciclorruta y 10.000 metros cuadrados de andenes, diseñados
con las normas establecidas para personas con movilidad reducida. Adicionalmente, la
intervención habilitará 76.000 metros cuadrados de zonas verdes y parques para el
disfrute de los habitantes de la comunidad y de toda la ciudadanía. En este sentido, esta
intervención, además de los beneficios generados en términos de la reducción de tiempos
y costos en desplazamientos entre las zonas de influencia del puente, genera mejores
cualidades físicas al espacio intervenido, toda vez que se realizan adecuaciones en
términos de espacios públicos y zonas verdes.
Liderada por la Secretaría de Infraestructura Física de la Alcaldía de Medellín, la obra
inicia en 2012 y se inaugura a finales de 2015. Para su ejecución, ésta secretaría recibió
apoyo de la Empresa de Desarrollo Urbano (EDU), en lo relacionado en la adquisición
predial, mediante los convenios interadministrativos No. 4600043336 y 4600040593 de
104
2012. En el proceso participa además el Instituto Social de Vivienda y Hábitat de Medellín
(ISVIMED) en lo que se refiere a los arrendamientos temporales, y los subsidios de
vivienda para la población desplazada involuntariamente por la ejecución de la obra. El
contratista que construye la obra fue el consorcio temporal llamado Consorcio Bermejal,
integrado por Estima Estudios y Manejos S.A., en un 50%, HB Estructuras Metálicas S.A.,
en un 25 % y Latinoamericana de Construcciones S.A., en un 25 % (El mundo, 2013).
Si bien el proyecto Puente Madre Laura en su momento fue catalogado como proyecto
tipo I38, según la Guía de Manejo Socio-Ambiental para la Construcción de Obras de
Infraestructura Pública del Municipio de Medellín (Decreto 673 del 16 de marzo de 2006),
este no requirió licencia ambiental. En su lugar, el proyecto Puente Madre Laura se ciñe a
los lineamientos de la Guía de Manejo socioambiental para la construcción de obras de
infraestructura pública, y formula el “Plan de acción socioambiental en obra de la
construcción del puente de la calle 93-94 (Puente Madre Laura Montoya) y obras
complementarias”. Al respecto se menciona que en el marco de la presente investigación
no se encontró información sobre la evaluación de los impactos sociales y económicos
que generaría la construcción de la obra, en la población de la parte baja del barrio
Palermo (comunidad directamente afectada por la obra), ni de un plan de manejo de estos
impactos.
El proyecto necesitó adquirir 430 predios (Contraloría General de Medellín, 2014, p. 11),
los cuales estaban localizados en su gran mayoría en la Comuna 4 de Medellín
(Aranjuez), más específicamente en el barrio Palermo. Según información del
Observatorio de Reasentamientos y Movimientos de Población de Medellín con base en el
análisis del censo definitivo realizado en el área de intervención del proyecto, el total de
población censada fue aproximadamente 1.960 personas (Observatorio de
Reasentamientos y Movimientos de Población, 2017).
Con relación al proceso de reasentamiento de población, la Empresa de Desarrollo
Urbano (EDU) presenta a la comunidad el programa “Renovando ciudad para la gente”.
38 “Son proyectos que se consideran de alto impacto ambiental por causar deterioro o alteración a los recursos naturales, al ambiente o al paisaje. Algunos de estos proyectos podrán requerir licencia ambiental según las normas vigentes.” (Decreto 673 del 16 de marzo de 2006, p.10)
105
Este es una alternativa de reasentamiento en sitio, toda vez que se proyecta en el entorno
cercano en donde se desarrolla la obra. Dicho programa en su momento se basaba en
dos proyectos habitacionales:
El primero está ubicado en la trasversal 92A con carrera 53, sector Pasaje Villa, en el
barrio Aranjuez. Este cuenta con 63 apartamentos distribuidos en viviendas de interés
prioritario y vivienda de interés social, así mismo con locales comerciales para la
reubicación de las unidades de negocio y 37 celdas de parqueo públicas y privadas. El
Segundo proyecto de vivienda nueva, se encuentra ubicado en la calle 94A con carrera
55A, Aranjuez parte baja; cuenta con un total de 38 unidades de vivienda de interés social
y 33 parqueaderos. (Observatorio de Reasentamientos y Movimientos de Población,
2016b, p. 14)
A la fecha de culminación de esta investigación (mayo de 2018) estos dos proyectos
habitacionales no se han construido: el proyecto habitacional conocido como “Villa Laura
1” (transversal 92A con carrera 53) porque la EDU adquirió el inmueble con una
destinación de uso público, lo que imposibilitaba su posterior transferencia para el
desarrollar del proyecto habitacional (Observatorio de Reasentamientos y Movimientos de
Población, 2017); y el proyecto habitacional conocido como “Villa Laura 2” (calle 94A con
carrera 55) por estar proyectado en un predio que será requerido para la ampliación
(doble calzada) de la vía Regional en el tramo Moravia – Zamora, proyecto de
infraestructura vial que está en fase de diseño (Entrevista actor territorial 1, 2018; El
Colombiano, 2017).
A continuación, mediante dos imágenes satelitales, se pretende ilustrar el cambio físico
generado por el puente Madre Laura. En la Ilustración 6 se observa una vista satelital del
área previa la intervención (2012). En esta ilustración, con apoyo de actores territoriales
entrevistados, se delimita el sector de Puerto Nuevo (en rojo) y el sector el Hueco (en
amarillo). La Ilustración 7, por su parte, es una vista satelital del área en 2016, donde se
puede observar los cambios físicos que ha suscitado la obra.
106
Ilustración 6. Sector Puerto Nuevo y Sector el Hueco 2012
Fuente: Elaboración propia con base en datos de entrevistas con actores territoriales
107
Ilustración 7. Sector Puerto Nuevo y Sector el Hueco 2016
Fuente: Elaboración propia con base en datos de entrevistas con actores territoriales
108
2.1.1 El Territorio impactado39 por la obra Como se comentó antes, la gran mayoría de los predios requeridos por la obra están
localizados en la Comuna 4 (Aranjuez), particularmente en dos sectores de la parte baja
del barrio Palermo conocidos como Puerto Nuevo y el Hueco (ver Ilustración 6 e
Ilustración 7). En este punto es preciso hacer un paréntesis aclaratorio. En razón a la
disponibilidad de información, tanto de fuentes primarias como secundarías, el análisis
que se presenta a continuación se centra en el sector de Puerto Nuevo; no obstante, se
retoman datos reportados por actores territoriales que fueron desplazados del sector del
Hueco. En el marco del procesamiento de la información recabada, se identifican
similitudes y recurrencias en lo expuesto tanto por los actores territoriales entrevistados
de Puerto Nuevo como los del Hueco.
Según lo reporta el Observatorio de Reasentamientos y Movimientos de Población
(2016b) el sector de Puerto Nuevo emerge de forma espontánea, a mediados de 1970 y
1980 producto del asentamiento de población proveniente del campo, en muchos casos
desplazados por el conflicto armado, los cuales llegan a la ciudad de Medellín buscando
un mejor futuro:
[…] la gente viene huyendo de otros municipios del área departamental o a nivel nacional y
llegan pues acá a este municipio de Medellín y se ubican en las laderas del río, cierto, digamos que muchas familias empezaron hacer como esos asentamientos, empezaron
hacer esas primeras construcciones, muchos tuvieron la posibilidad, pudieron ubicar a los
dueños de esos lotes y hacer el negocio y hacer unos títulos a compra venta. Otros mucho
después pudieron hacer el tema de las escrituras, entonces digamos que esos
asentamientos llevan alrededor entre 40, 50 años y sus pobladores pues no se han movido
de ahí, y ahí han hecho toda su vida (Entrevista actor territorial 1, 2018)
39 En la presente investigación se opta por utilizar el concepto de impacto para hacer alusión al cambio que suscita la obra.
109
- Redes sociales: relaciones de confianza y cooperación
En Puerto Nuevo las redes sociales se gestaron alrededor de la construcción de un lugar
para habitar desde donde se fueron tejiendo lazos de confianza y ayuda mutua entre los
vecinos y familiares, dada una historia de vida compartida en un espacio (físico) común.
[…] siempre estuvo marcado mucho por el tema, de que si alguien necesitaba, no sé ...,
construir entonces su vivienda, entonces entre todos se reunían y decían … vamos hoy a ayudar, hoy sábado y domingo, este fin de semana vamos ayudar a construirle la vivienda
a don Pedro, entonces entre todos se conseguían los materiales, entre todos venían, pero
la función era conseguir el resultado y el resultado era que don Pedro disfrutara de su
vivienda […] era un sentido de colaboración, de compañerismo, unos lazos muy estrechos,
un lazo muy conformado, muy consolidado de amigos y de vecinos (Entrevista actor
territorial 1, 2018).
Con relación a las redes familiares, los actores territoriales entrevistados recuerdan con
nostalgia y profundo sentimiento a los parientes que vivían cerca, y con quienes
compartieron y con quienes podían contar durante el tiempo en que vivieron en el sector
de Puerto Nuevo y el Sector del Hueco. Sobre este respecto los actores territoriales
entrevistados aseguraban que en el tiempo que vivieron en el sector, los familiares eran
un significativo apoyo para solucionar todo tipo de necesidades:
La relación con la familia era bien. Entre familia a veces teníamos los roces, pero todas
maneras estábamos todos unidos. Si yo no tenía comida esta me daba, si el niño se me
enfermaba ellas me daban para ir al médico o me acompañaban y así. Que si no había
alimento, ropa, o medicina, todo eso se compartía y nos apoyábamos (Entrevista actor
territorial 4, 2017).
Al respecto, otro actor territorial menciona:
Pero lo mejor del hecho de vivir allá era que estaba cerca de mi familia, mi abuela mis tías, todos estábamos ahí cerca. La relación con los familiares era excelente. Si había alguna
dificultad en casa, sabíamos que podíamos contar con ellas. Si ellas tenían alguna
dificultad, sabían que podían contar con nosotros cierto. Muy unidos todo el tiempo, de una
muy buena comunicación, diaria. (Entrevista actor territorial 3, 2017)
110
Las redes familiares eran un soporte importante para los moradores, tanto en lo
emocional, como en lo económico (material). Con todo, la familia brindaba apoyo en
situaciones de enfermedad, iliquidez, escasez de alimentos, en el cuidado de niños, en el
cuidado de la casa, entre muchos otros servicios. De igual forma, los familiares eran
apoyo moral y consejeros en situaciones de adversidad por las que atravesase algún
familiar.
En el marco de las entrevistas con los actores territoriales, se identifica que uno de los
impactos más severos generados por la obra fue, y sigue siendo, el distanciamiento
(físico) que se generó entre familiares, hecho que suscitó la pérdida de este apoyo. Todos
los actores territoriales que vivían cerca de familiares, expresan sentir hoy, después del
desplazamiento involuntario, soledad y tristeza por este distanciamiento. Asimismo,
algunos moradores expresan sentir angustia y zozobra frente a las posibilidades de
afrontar situaciones adversas que se puedan presentar a futuro, puesto que en el pasado
las dificultades se sobrellevaban gracias a la colaboración de sus parientes:
Algo en que me he visto perjudicada es la distancia con la familia, porque hay veces en
que uno no tiene para comer, y como ellos están tan retirados, es muy difícil que lo ayuden
a uno. O que si uno está enfermo, hay que llamar a ver si están o no están para que
vengan a ver si le pueden ayudar a uno. Ahora los vecinos que tengo ahora no lo ayudan a
uno. (Entrevista actor territorial 4, 2017).
Con relación a las redes vecinales, y similar a lo planteado antes para las redes
familiares, durante todo el tiempo que habitaron en el sector de Puerto Nuevo y el Hueco
los entrevistados remarcan el apoyo y la colaboración que brindaban los vecinos, de cara
a solventar todo tipo de necesidad:
La relación con los vecinos era buena, no era tan estrecha la relación como la relación con
la familia, de uno mantener mucho tiempo con ellos y así, pero en el momento en que
algún vecino tenía dificultad, si había mucha solidaridad. (Entrevista actor territorial 3,
2017).
De manera cotidiana se establecieron intercambios de todo tipo de bienes y servicios
como: alimentos, préstamo de dinero, préstamo de herramientas y utensilios, apoyo en
labores domésticas, apoyo moral en situaciones difíciles, entre otras. Con el tiempo, la
111
convivencia, y este continuo intercambio, fueron gestando relaciones de confianza, dando
lugar, al establecimiento de fuertes redes de apoyo y ayuda mutua, las cuales se
constituyeron en uno de los principales soportes de los habitantes del sector de Puerto
Nuevo:
[…] uno contaba con ellos cuando de pronto uno iba a salir, uno le decía me cuidas el
ranchito que voy y vengo […] yo decía ay vea doña Gloria yo tengo que salir para donde el
doctor o tengo que ir a la terminal, se me queda con el niño y como era tan gordito, así
doña Ruth déjelo con nosotros y lo querían horrible. (Entrevista actor territorial 8, 2018).
A partir de lo antes descrito, se colige que esta continua cooperación es la base para
consolidar mecanismos de protección (seguridad) para aquellos que disponen de
menores recursos (económicos y humano40) o que se encuentran en situación de
vulnerabilidad. De esta forma, las redes familiares y vecinales, posibilitaban la resolución
de diversas problemáticas y necesidades que el grupo familiar, de forma autónoma e
independiente, no podía resolver. Como lo expone la profesora Chardon, ante la baja
capacidad económica, son las relaciones sociales la mayor riqueza que tiene el morador.
A partir de esta riqueza se puede entender porque en contextos de vulnerabilidad y
pobreza material, la gente prefiera permanecer en su territorio:
en los estratos más bajos, la gran riqueza es la riqueza humana, porque la riqueza del bolsillo poco la hay, pero la riqueza humana ahí está el tesoro, entonces cuando uno cree
encontrar el tesoro no va a alejarse mucho de él. Lo anterior hace que la gente este
apegada a su territorio y tenga dificultades salirse de él (Entrevista actor académico, Anne
Catheryn Chardon, 2017).
- Activos culturales Relacionado con el desarrollo de la vida en comunidad, en este apartado se abordan
prácticas cotidianas en el territorio, asociadas a la apropiación del espacio público y la
vivienda. De igual forma, este apartado refiere a sitios referentes del territorio, es decir,
lugares con una importancia simbólica para los moradores. En el caso de estudio, los
40 Asociado al nivel de formación académica, la experiencia y experticia en el desarrollo de un oficio o trabajo.
112
actores territoriales entrevistados mayormente destacan los espacios de encuentro y
esparcimiento.
En cuanto a las costumbres y referentes identitarios en el sector de Puerto Nuevo y el
Hueco, estás se establecieron principalmente a nivel vecinal, donde a través de los
intercambios de solidaridad y apoyo mutuo se generaron relaciones de amistad y afecto,
que se fueron tejiendo alrededor de compartir espacios comunes, rituales, festividades y
celebraciones en el espacio barrial tales como: la celebración de la navidad, los
cumpleaños, el quinceañero, el día de la madre, la semana Santa, entre otras
festividades. […] sí las fiestas tradicionales, más que todo como las fiestas tradicionales, cuando la
chica cumplía los 15 años, entonces como era la niña de la cuadra, entonces se reunían
dos o tres cuadras y hacían pues como ese festejo de esos 15 años, lo mismo las primeras
comuniones, casi siempre eran en combito, en toda una cuadra, que si habían 7 o 8 niños,
los 7 o 8 hacían la primera comunión y en conjunto en esas cuadras hacían la festividad y
en la época decembrina las cuadras se reunían antes se utilizaba mucho como esa unión de la gente, al son de la marranada, pero digamos que la decoración de las cuadras era
pensada en conjunto, colocar las veletas en la parte superior, que la cuadra se viera
iluminada y eso era pensado entre todos se reunían y en convite hacían muchísimas
cosas, era desde el compartir hasta el trabajo por alguien que lo necesitara. (Entrevista
actor territorial 1, 2018).
los fines de año o día de madres o un cumpleaños, nos reuníamos varios del vecindario, yo
les decía… ve! yo cumplo años tal día ¿van a ir?, … a si… allá estamos... o yo cumplo
años en tal fecha… a listo allá vamos a estar y así. (Entrevista actor territorial 8, 2018).
Nosotros mismos en cumpleaños organizábamos reuniones ahí en el patio, poníamos
bombas, y poníamos un equipo de sonido, pasábamos bueno. Ahora en diciembre si que pasábamos buenos. Hacíamos natilla, buñuelos, frijoladas, sancochadas. Entre nosotros
mismos los que estábamos ahí. Si bajaba así gente conocida ahí competíamos todos de lo
más de bueno. Lo que aquí en la calle ya uno no puede hacer (Entrevista actor territorial 4,
2017).
En lo que refiere a los espacios de encuentro, además de los espacios de la calle, los
habitantes de este territorio tenían otros espacios de socialización situados en los
113
sectores aledaños, los cuales eran visitados con regularidad, por familiares, amigos y
vecinos. En estos espacios los habitantes establecieron múltiples relaciones e
intercambios asociados al desarrollo de la vida en comunidad:
antes de la llegada de la obra la gente se reunía en la 54 entre la 90 y la 89 en una parte
que se le dice el plan, la mayoría de las personas jugaban allá, cuando empezó el centro
cívico o sea la acción comunal se reunían en la 90 con la 52 y estaba el manicomio.
(Entrevista actor territorial 2, 2017).
La cancha que quedaba acá en la parte de arriba donde quedaba la cooperativa de
recicladores [Cooperativa de recicladores de Antioquia]. Ahí en la esquina de la cancha
había una panadería. Más que todo era en ese sector donde se reunía la gente. (Entrevista actor territorial 3, 2017).
Los niños se iban a jugar futbol en una cancha que quedaba cerca de la iglesia de San
Isidro, o a una cancha que quedaba en Moravia. Las mamás muchas veces iban con los
niños. […] Allá había un señor con un granero, y los fines de semana se ponía música, y
vendía traguito, ahí en Puerto Nuevo. (Entrevista actor territorial 7, 2018).
- Autogestión
En cuanto a prácticas y acciones sociales desplegadas por la comunidad para resolver
problemáticas individuales y colectivas, se identifica que estas tienen un estrecho vínculo
con las redes familiares y vecinales. Sobre este tema, actores territoriales entrevistados
relatan que además de contar con el apoyo de sus familiares y vecinos, para afrontar
emergencias y momentos de dificultad, las relaciones de cooperación y ayuda mutua
fueron parte importante en el proceso consolidación y sostenimiento del sector. La
comunidad, con el paso del tiempo, fue apropiándose del espacio, fueron definiendo sus
calles, la forma de acceder a los servicios públicos, la forma de acceder a una fuente de
sustento; en otras palabras, la comunidad fue desplegando acciones encaminadas a
acondicionar el espacio que ocupaban hasta convertirlo en un sector habitable para ellos.
ellos mismos en convite fueron los que colocaron el tema de la electricidad y fueron los que
colocaron el acueducto, ellos mismos fueron los que ubicaron las tuberías y conectaron al
tubo madre de Empresas Públicas, […] dado que el estado no los atendía ellos mismos
114
tuvieron que pavimentar sus vías, ellos fueron los que tuvieron en convite construir sus
viviendas (Entrevista actor territorial 1, 2018).
En cuanto a la presencia de organizaciones comunitarias en el sector, es decir, colectivos
que buscan resolver problemas que afectan a la comunidad, y desarrollar iniciativas de
interés para sus miembros. Este tema no fue muy referido en las entrevistas. La mayoría
de actores territoriales mencionaban conocer solamente a la Junta de Acción Comunal de
Palermo. No obstante, en el territorio también existían grupos juveniles:
[…] bueno, pues que yo sepa existían los grupos juveniles, el grupo juvenil trabajo muchos
años tratando de sacar adelante los jóvenes, ayudándoles en el tema de participación, de
hacer diversas actividades en pro del bien de la gente y digamos que con el tiempo fue
como perdiendo fuerza, pero siempre trabajo unos años con la población, se llamaba así
grupo juvenil, digamos que su sede era como vivienda del que dirigía el grupo, creo que la
dirigía el grupo era Alicia Cañaveral y la sede era ahí donde ella vivía, era como por acá en
la 93f, donde hoy hay una pila del puente, donde hay una pata del puente. Y obviamente la Junta de Acción Comunal del barrio Palermo, pues que traía sus actividades y se llamaba a
la gente que se reuniera y compartieran pues como toda la oferta que traía la
administración más lo que la misma junta proyectaba para darle a la comunidad y otros
grupos, empresas privadas que quieran aportarle al territorio (Entrevista actor territorial 1,
2018).
En el marco de la ejecución de la obra, la comunidad se organiza para afrontar la
amenaza común que suscita proyecto. De esta forma, y a partir de la preocupación de
varios habitantes del territorio, se constituye la Veeduría Fundación Vicente Mejía. La
gestión de esta organización comunitaria logra que se conformase una mesa de
concertación para tratar diferentes inconformidades que tenían la comunidad,
mayormente, con relación a los avalúos, la reposición de la vivienda y lo relacionado con
el subsidio de arrendamiento temporal (Observatorio de Reasentamientos y Movimientos
de Población, 2016b).
- Actividades económicas, redes económicas y costo de sostenimiento.
En este punto se indaga sobre dinámicas y prácticas económicas presentes en el territorio
intervenido. De esta forma, se hace énfasis en las actividades económicas que se
115
desarrollaban como medio de subsistencia, las redes económicas que se gestaron y lo
relacionado a los costos de sostenimiento.
Relacionado con las dinámicas y prácticas económicas, antes de la materialización de la
intervención, los actores territoriales entrevistados exponen que en el territorio había
presencia de una significativa diversidad de actividades económicas, por lo general,
situadas en el sector comercio y servicios, las cuales se suscriben tanto a la economía
formal (en menor medida), como a la economía informal41. Estas actividades económicas
se caracterizaban por una baja inversión en capital, y no requerir de mano de obra
calificada. En este sentido en el sector había presencia de actividades económicas de
subsistencia, de escala barrial, como: tiendas, panaderías, peluquerías, ventas de
helados, entre otras. También existían algunos usos comerciales en cercanía a las vías
más transitadas del sector (carrera 54, carrera 55 y carrera 55a) en donde se situaban la
mayoría de establecimientos económicos.
Ilustración 8. Actividades económicas en el sector de Puerto Nuevo en 2013
Fuente: Google Maps Su economía estaba basada en el trabajo informal, la gran mayoría de la población tiene
bajo nivel cultural, sus perfiles laborales incluyen, entre otros, negocios como tiendas de
barrio, empleados domésticos, jornalero o peón, trabajadores por cuenta propia
(incluyendo lo independiente profesionales) y trabajadores familiares sin remuneración.
Estas actividades anteriormente descritas, se caracterizan por ser trabajo informal, el cual
no está cubierto por la seguridad social y no es remunerado bajo las leyes del salario mínimo (Observatorio de Reasentamientos y Movimientos de Población, 2016, p. 12).
41 Según la Empresa de desarrollo Urbano (EDU) la ejecución de la obra impactó 356 actividades económicas, de las cuales dos eran formales y 354 informales (Observatorio de Reasentamientos y Movimientos de Población, 2017).
116
Sobre este mismo respecto un actor territorial comenta:
[…] que dentro de sus actividades económicas están las formales y las informales, muchos
trabajaban digamos que haciendo trabajitos en sus viviendas o con el carrito de los tintos o
con el negocio de las empanadas y así pues salían y digamos que su economía giraba en
torno a esa actividad, otros digamos un poco menos, porque la mayoría eran informales, un
poco menos ya estaban laborando en un empleo formal en una empresa con todas las
prestaciones sociales (Entrevista actor territorial 1, 2018).
En el territorio había presencia de micro y pequeñas empresas dedicadas a la
recuperación de material (reciclaje), como la “Cooperativa Antioqueña de recolectores de
subproductos”, con las cuales las familias del sector comercializaban la producción
recuperada (material reciclado).
[…] el sector gozaba de la Cooperativa Antioqueña de Recolectores de subproductos, una
cooperativa que ya llevaba alrededor de unos 40 años en el sector, había sido creada por, hoy a quién le hacemos honor en nuestra corporación que es el padre Vicente Mejía y la
creo especialmente para las madres cabezas de familia y para empezar pues como a
generar unos procesos de autosostenimiento, luego entonces fue tomando digamos que
ese aire de recolector, de recuperador de reciclaje y a su alrededor existan nosotros los
denominábamos como unos satélites, entonces eran personas que digamos hacían el
trabajo de reciclaje y venían a la cooperativa y entonces hacían el negocio, vendían
entonces el plástico, vendían el cartón, le depositaban a la cooperativa esos materiales
recuperados y la cooperativa entonces así mismo les retribuía en formas de pago y así mantenían pues como, digamos que manteníamos una actividad económica externa para
esas personas que estaban alrededor de la cooperativa, entonces si era digamos un punto
muy importante porque fluía la economía de forma informal pero fluía dentro del sector,
estas personas tenían algo a que dedicarse (Entrevista Actor territorial 1, 2018).
Entorno a la actividad económica del reciclaje, en el sector se configuraron redes
económicas, es decir, relaciones sociales de intercambio con una finalidad económica:
A raíz de que la cooperativa fue teniendo credibilidad y la gente fue viendo el
posicionamiento de la cooperativa como empresa de reciclaje entonces muchas personas
fueron montando sus negocios alrededor de la cooperativa, vieron una estrategia buena,
117
las competencias para ellos ubicarse, cuando a mí me toco que empezaron muchas
personas a montar sus negocios yo también tenía el pensamiento de que entre más
empresas estuviéramos asentados pues era mucho mejor. (Observatorio de
Reasentamientos y Movimientos de población, 2017)
En adición a lo anterior, esta misma fuente plantea:
Muchas personas hacían su reciclaje y como ya sabían cuál era el mejor precio en cada parte entonces ellos hacían la separación y vendían a los que compraban el plástico, se lo
vendían porque le pagaban mejor, a los de la chatarrería les vendían los metales porque
pagaban mejor, y a nosotros nos vendían por lo general eran los papeles y las pastas
porque se las pagábamos mejor, entonces digamos que en la parte de la chatarra no
podíamos competir con el que tenía la chatarrería porque el compraba exclusivo y vendía a
un mejor precio y la otra es que también muchas entidades o muchos negocitos no los
organizaron en forma legal entonces eso conllevaba a que ellos podían pagar a un mejor precio porque no pagaban todo lo que era por ley (Observatorio de Reasentamientos y
Movimientos de población, 2017).
De otro lado, los actores territoriales entrevistados que desempeñaban una actividad
económica en el sector (tienda, venta de ropa y accesorios, preparación de alimentos,
etc.), mencionan que los principales clientes eran sus vecinos, amigos y familiares que
vivían en el mismo sector. De otro lado, mencionan que los materiales e insumos
requeridos para el normal desarrollo de su actividad eran comprados en sitios
relativamente cercanos. Sobre este respecto, un entrevistado comenta que adquiría los
insumos necesarios “en varias partes, unas veces se compraba en la minorista, otras
veces se compraba ahí en Moravia, que montaron una cosa grande para las tiendas
pequeñas, pero la mayoría siempre era en la minorista” (Entrevista actor territorial 8,
2018).
Una fuente de ingresos de significativa importancia en el sector de Puerto Nuevo, era el
arrendamiento de la vivienda. Esta actividad se podía presentar en diferentes
modalidades: mediante el arriendo parcial (cuartos) o total de la vivienda, o de forma
conjunta a otra actividad económica, es decir, se rentaba parte de la vivienda (cuartos) y,
simultáneamente, en la vivienda se desarrollaban otras actividades económicas, por
118
ejemplo, tiendas, o ventas de minutos o cremas (Observatorio de Reasentamientos y
Movimientos de Población, 2017).
De otro lado, se identifica que algunos habitantes del sector tenían cultivos, que
mayormente eran destinados para el autoconsumo:
[…] ellos le denominan a eso su pan coger, entonces habían muchos árboles frutales, cultivaban mango, cultivaban guayaba, cultivaban mandarina, tenían también de hortalizas,
tenían plátano, tenía papa, tenían yuca, cebolla, tomate y ellos mismos si con eso digamos
hacían unas especies de huertas y lo que hacían era que se distribuían entre ellos mismos,
entonces casi que era una red de familia, ahí unida recogiendo esos mismos productos que
cultivaban para comer, entonces el tema de hambre digamos que era aguantable porque la
tierra les producía esos productos (Entrevista actor territorial 1, 2018).
No obstante, de ser necesario, estos cultivos también podían ser destinados para la
venta, y constituían una fuente de ingreso ocasional para ellos: “ahí en el Hueco,
teníamos cultivos de todo, la mayoría para el consumo de la familia, pero también, cuando
había la necesidad, se vendía los frutales a una persona que vivía por ahí cerca, y que
vendía mangos” (Entrevista actor territorial 4, 2017).
Uno de los temas más referidos por los actores territoriales en las entrevistas es lo
relacionado con el costo de vida; es decir, la cantidad de dinero en que incurría el grupo
familiar para sostenerse en el territorio. Este tema siempre emergió en forma comparativa,
de cara a la situación que actualmente está viviendo el entrevistado, y su grupo familiar,
en el lugar de acogida (después del desplazamiento). Es reiterativo que los entrevistados
declararen que los gastos eran menores en Puerto Nuevo, con relación a los servicios
públicos domiciliarios, el transporte y el arriendo:
[…] vivía muy amañado porque la casa era muy buena muy amañadora, pagaba poquito
arriendo, me venía poquito servicios porque eso allá era estrato uno y vivía más o menos a
lo bien con mi familia (Actor territorial 6, 2017).
[…] lo que más me ha perjudicado a mi es la situación económica, porque aquí en más
dura la situación económica más costosa porque yo allá pagaba $170 de arriendo y
pagaba por ahí $120 de servicios eran más o menos $280 mil o $300 mil máximo, lo que
119
aquí en este momento estoy pagando $650 mil de arriendo y $300 de servicio desde ese
cambio pues a mí me ha ido súper mal porque es que no aguanta. Desde que salí de allá
estoy pagando $550 aquí y $250 eran 800 mil pesos cuando allá pagaba $280 mil o $300
mil eran $500 mil entonces el cambio fue muy bruto. (Entrevista actor territorial 6, 2017).
[…] claro, porque era que nosotros allá pagábamos, hombre cuando pagábamos muchos servicios, muchos servicios llegaban … $14.000; y aquí llegan $118.000, $120.000
entonces imagínese, allá de catastro se pagaban 4 mil pesos aquí se pagan $40.000, ya se
están pagando $50.000 […] yo allá no necesitaba pasajes y aquí necesito, si bajará en bus
en este momento necesitaría 4200 pesos para bajar y para subir, hágale la cuenta en el
mes cuanto es (Entrevista actor territorial 8, 2018).
El incremento del costo de vida se puede explicar de varias formas: al tránsito de unas
condiciones de informalidad a la formalidad, el incremento en el estrato socioeconómico,
lo que implica el incremento en el costo de los servicios públicos; el distanciamiento de las
fuentes de sustento económico, el cambio en la normatividad residencial cuando se pasa
a vivir a propiedad horizontal (pago de administración, el pago de servicios públicos de las
zonas comunes).
A partir de lo que exponen los actores territoriales, se puede inferir que, dada una
restricción presupuestal, la comunidad era capaz de sopesar los gastos de sostenimiento
asociados al sector: costos de los servicios públicos, transporte, arrendamientos, entre
otros. Con el cambio de lugar de residencia, los actores territoriales entrevistados afirman
que su situación económica desmejoró considerablemente. Si bien estos reconocen que
las cualidades físicas de la vivienda donde hoy viven son mejores, y hay una mejora en
cuanto a la provisión de servicios públicos (acueducto, alcantarillado, energía, etc.), los
costes asociados a este cambio, hacen que los gastos de sostenimiento en el lugar de
acogida no sean soportables para ellos, lo que pone en riesgo su estadía allí, dados los
recursos económicos disponibles. En consecuencia, es recurrente que los actores
territoriales entrevistados mencionen que este cambio de residencia les desmejoró sus
condiciones de vida.
120
- Ventajas de localización
En este punto se abordan aspectos relacionados con las características físicas y lo
referente a la localización relativa del territorio en la ciudad de Medellín. Para este
ejercicio se recabo y analizó información sobre la disponibilidad y acceso a
infraestructura, equipamientos, zonas verdes, transporte público y sobre lugares de
interés para la comunidad.
La falta de planificación del desarrollo urbano del sector de Puerto Nuevo, producto de su
proceso de poblamiento, se hace visible en el poco espacio público existente. Sin
embargo, el sector presentaba algunas zonas que eran de gran importancia para sus
habitantes, ya que eran espacios de esparcimiento, encuentro y recreación para la
comunidad. El principal espacio público de esparcimiento era una zona verde ubicada
sobre vía Moravia-Zamora. En él existía una pequeña cancha deportiva. Cerca de este
lugar, había presencia de una importante dinámica económica (comercialización de
diferentes bienes y servicios):
[…] el sector contaba con una cancha, que estaba a todo el frente de la cooperativa de
recolectores más o menos 93 por la calle entre la 92 y la 93 estaba la cancha y ahí era
donde las personas entonces acudían, hacían sus ejercicios, los niños también hacían sus
actividades recreativas. (Entrevista actor territorial 1, 2018).
Ilustración 9. Cancha del sector de Puerto Nuevo en 2013
Fuente: Google Maps
121
A pesar del déficit en cuanto a espacio público, el sector de Puerto Nuevo tiene una
ubicación privilegiada, toda vez que se encuentra relativamente cerca al centro de la
ciudad. Sobre este respecto es posible constatar que desde donde estaba la cancha,
donde hoy se encuentra el rompoy debajo del Puente (Cra. 55 #941), hasta el Parque
Berrio (Cl. 50), como punto de referencia del central de la ciudad, hay tan solo 4,4 km
(aproximadamente 1 hora caminando42).
Ilustración 10. Ruta caminando sector Puerto Nuevo - Parque Berrío
Fuente: Elaboración propia con base en Google Maps En adición a lo anterior, el sector se encuentra relativamente cerca de un conjunto de
instituciones y sitios de interés: La sede de Comfama de Aranjuez, Centro de Desarrollo
Cultural de Moravia, Parque de Aranjuez, Museo Cementerio San Pedro, Casa Museo
Pedro Nel Gómez, Jardín Botánico, Planetario de Medellín, el Parque Norte, Parque de
los Deseos, la Universidad de Antioquia, el Parque Explora, la Unidad Intermedia de
Santa Cruz, La Clínica León XIII, la Terminal de Transporte Norte, la Plaza Minorista,
entre otros equipamientos. Además de esto, el sector de Puerto Nuevo se encuentra bien
42 Para este ejercicio se utilizó la herramienta de Google Maps “Cómo llegar”, y se define la ruta a pie.
122
servido en términos de transporte público, puesto que está localizado a pocos minutos, a
pie, de la Estación Tricentenario y Caribe del Metro de Medellín, y, además, lo recorren
varias rutas de transporte:
[…] el barrio es súper central, tenemos todo el equipamiento que puede tener un barrio,
tenemos centros de salud, tenemos escuelas, tenemos coliseos, tenemos iglesias,
tenemos supermercados, tenemos todo y fuera de eso está a 15 min del centro entonces
es imposible irme a vivir a una ladera cuando estoy viviendo bien bueno en una parte
donde he vivido todo el tiempo, como le digo llevo 65 años y a mí no me gustaría irme de
aquí (Entrevista actor territorial 2, 2017).
Aranjuez siempre se ha distinguido por ser un sector con un transporte muy fluido, muy
seguido, el transporte, cada 5 minutos pasa un transporte, está la ruta Aranjuez- Anillo que
cubre tres rutas en este momento, está la ruta Aranjuez- Santa Cruz, pasa el 022, el 023, el
024, por aquí por todo este mismo sector, tenían el Metro, obviamente pues que los llevaba en 5 o 7 minutos, estando en la estación Tricentenario a Parque Berrio se demora 7
minutos, en cuestión de servicio público me parece que el transporte era y es muy cómodo,
siempre ha sido muy cómodo” (Entrevista actor territorial 1, 2018).
En cuanto a la presencia de infraestructura social y equipamientos, en el territorio, las
fuentes consultadas mencionan sobre el tema de instituciones educativas:
[…] a mí me parece que el sector estaba, de centros educativos, estaba muy bien dotado,
estaba y esta, porque aún pues están dentro del sector, aquí subiendo por la 92 tienen el
colegio Álzate Avendaño, a todo el frente tienen otra escuela, que es la que tenemos aquí,
la que se ve acá. A dos cuadras tienen otro colegio, mejor dicho alrededor hay, en este
mero sector, tenemos alrededor de 10 instituciones educativas, digamos que a la gente le
queda demasiado cómodo ese tema (Entrevista actor territorial 1, 2018).
A partir del portal GeoMedellín43 (Portal geográfico del municipio de Medellín), se pueden
identificar otras sedes educativas que se encuentran localizadas relativamente próximas
al sector de Puerto Nuevo. A continuación se anotan algunas de ellas: Colegio Presbítero
Hernando Barrientos Cadavid, Sección Escuela Seguros Bolívar, Institución Educativa
República de Honduras, Institución Educativa Pablo Neruda, Sección Escuela Tomas
43 Este aplicativo se puede consultar en la siguiente dirección: https://www.medellin.gov.co/geomedellin/servicios.hyg?idAgrupacion=3#openModal
123
Carrasquilla, Sección Escuela San Isidro, Institución Educativa José Eusebio Caro,
Colegio Cooperativo El Bosque, Colegio Fé y Alegría Luis Amigo, Sección Escuela Carlos
Villa Martínez, Sección Escuela Simona Duque, Colegio Agustiniano de San Nicolás,
Colegio Gente Unida Moravia, Colegio Emilia Riquelme, Institución Maestro Guillermo
Vélez Vélez, Institución Educativa Francisco Luis Hernández Betancur, Institución
Educativa San Agustín, Sección Escuela Epifanio Mejía entre otros.
Con relación a centros de salud:
[…] bueno hacia el norte tenemos a la Unidad Intermedia de Santa Cruz44, ahí acudían
entonces cuando requerían algún tipo de urgencia, luego eran remitidos a la Clínica León XIII, como a los institutos de seguros sociales, que queda prácticamente aquí en todo el
parque de los deseos, entonces el tránsito para llegar allá esta entre 10 y 15 minutos
prácticamente. Si querían ir o tenían un herido ahí, en carro eran 5 minutos. O si lo iban a
llevar a pie entre 10 y 15 minutos tardaban en llegar, entonces digamos que esa cercanía a
unos centros hospitalarios en caso de alguna urgencia les permitía ser atendido. La tercera
edad, las personas mayores gozaban de eso, de hecho, hacían el ejercicio, caminaban
para ir a donde el médico (Entrevista actor territorial 1, 2018).
Otro centro de salud que se encuentra relativamente cercano al sector de Puerto Nuevo
es el Centro de Salud Aranjuez (Metrosalud). Por otra parte, en lo que refiere a espacios o
equipamientos para culto religioso un actor territorial expresa:
[…] respecto a iglesias tenemos acá la iglesia de San Esteban que está aquí a dos
cuadritas del puente, tenemos la iglesia de San Cayetano que está aquí a 5 cuadras de
acá del barrio Palermo. Tenemos la iglesia de San Isidro que está aquí pegada, diagonal a la cancha de San Isidro, la del parque Aranjuez, la de Moravia también si querían
desplazarse ahí estaba, porque son 10 minutos en llegar” (Entrevista actor territorial 1,
2018).
Referido a espacios para la recreación próximos al sector de Puerto Nuevo se identifica:
[…] está aquí cerca hacia el lado norte la cancha de San Isidro, que hoy pues digamos
producto del proyecto del puente pues goza de una remodelación. Además, tienen dos
44 Unidad Hospitalaria "Víctor Cárdenas Jaramillo" - Santa Cruz - Metrosalud
124
cuadras hacia arriba al centro de Comfama, al centro deportivo, recreativo, lúdico de
Comfama [...] tienen cerca el jardín botánico, que casi que les quedaba a 10 minutos
caminando, llegaban al parque norte, entonces digamos que la comodidad para la
población, para su disfrute era muy cerca, o sea las personas podían movilizarse de una
forma muy tranquila, muy cerca para estos lugares (Entrevista actor territorial 1, 2018).
En cuanto a centro culturales:
Tenemos el centro cultural de Moravia, que está ahí ubicado de este punto de impacto más
o menos a lo mismo, 8 o 10 minutos se demoran en bajar caminando. Arriba tenemos el Telecentro Amigos Unidos en el parque de Aranjuez. En cuanto a centros culturales, es
poco lo que se maneja (Entrevista actor territorial 1, 2018).
De esta forma, los actores territoriales exponen que la comunidad tenía acceso a una
significativa oferta de servicios: educación, salud, seguridad, recreación y lo relacionado al
culto religioso. De otro lado, y si bien algunos entrevistados reportan ser beneficiarios del
programa “Familias en acción” del gobierno Nacional, ningún actor territorial entrevistado
reporta ser beneficiarios de programas o proyectos de apoyo social del municipio de
Medellín, ni conocer si la institución pública ofrece estos programas en el territorio.
- El entorno
Relacionado con la apreciación que tenían los moradores del medio en el que se
desenvolvía su vida comunitaria. Así, en este acápite se aborda lo relacionado al riesgo
percibido por habitar el territorio, y se plantea una breve mención de las variables
contaminación y paisaje, puesto que estos dos temas fueron someramente mencionados
por los actores territoriales entrevistados.
En esta investigación, la variable riesgo se aborda desde dos entradas. Por un lado, el
riesgo entendido como la eventual ocurrencia de un fenómeno físico (natural) que puede
generar daño a la comunidad: inundación, avenida torrencial; y, por otro lado, un riesgo
asociado a la ocurrencia de eventos violentos y la presencia de actores ilegales: robos,
presencia de pandillas, expendio y consumo de drogas ilegales.
125
Con respecto al riesgo físico (natural) se identifica que en el área de estudio, la mayor
preocupación se centra en el desborde del Río Medellín. Al observar el mapa de Zonas
con condiciones de riesgo y de alto riesgo no mitigable del POT vigente (acuerdo 048 de
2014), se encuentra que una franja del sector Puerto Nuevo y del sector el Hueco, aquella
área localizada en proximidad a la margen del río, está catalogada como “Zona de alto
riesgo no mitigable por inundaciones”45. Sobre este tema, los actores territoriales
entrevistados reportan que en su estancia en el sector, este evento no se presentaba con
mucha frecuencia, pero que era una preocupación permanente sobre todo para aquellos
grupos familiares que vivían muy próximos a la margen del río.
[…] lo único que no nos gustaba mucho era el río, porque empezaba a llover y como este
llegaba tan cansado ni dormía, si no que a cada ratico era negra asómate por un huequito
por donde viene subiendo el río, asómate hasta que día, yo me quede dormida cuando un señor nos dijo “se van a dejar ahogar”, cuando me baje de la cama ya el agua estaba
adentro, teníamos un televisor en esta mesita y se voltio con el televisor y todo y cayó al
agua, apenas hacía un mes habíamos pagado la última cuota, se quemó la nevera,
perdieron la ropa, cobija, zapatos […] ese río se creció y nosotros teníamos allá un
negocito y eso nos acabó, eso nos dejó mejor dicho […] eso fue más o menos como en el
2004 […] en ese entonces bajo ese río con esa creciente y eso se metió y acabo con lo
que había, eso no quedo nada (Entrevista actor territorial 8, 2018).
[…] el río se desbordo una vez y se llevó parte de unos asentamientos que estaban, eso
fue por allá como en el 2010, antes del inicio de la obra, 2009, 2010, se llevó unos
asentamientos, pero porque estaban demasiado al borde del río, […] la administración
decía no que es que por ejemplo aquí en el sector del hueco, que las personas debían salir
porque ellos ahí vivían cerca de una quebrada (Entrevista actor territorial 1, 2018).
Otro aspecto negativo en torno al componente natural es que “en época de invierno, y por
estar cerca del río, eran los zancudos, muchos zancudos” (Entrevista actor territorial 3,
2017). Lo antes mencionado se considera un riesgo, puesto que los mosquitos pueden
ser transmisores de enfermedades, los cuales pueden afectar a la comunidad, sobre todo
a niños y a los adultos mayores.
45 Ver mapa 8: Zonas con condiciones de riesgo y de alto riesgo no mitigable; de la cartografía acuerdo 048 de 2014 (POT vigente).
126
Con respecto al riesgo social, se identifica que en el área de estudio hay apreciaciones
variadas, pero con el común denominador del reconocimiento de que el sector no estaba
exento de la ocurrencia de eventos violentos y de la presencia de grupos ilegales
(“combos”) como en cualquier barrio de Medellín:
[…] bueno claro, eso siempre ha estado marcado, eso nunca ha estado desligado, de
hecho púes si hablamos de las épocas de los 90 hacía acá pues ese fue el tema que
manejaron casi todos los barrios de Medellín, casi que toda la ciudad, entonces si había
expendio de drogas obviamente, habían los cacicazgos que siempre quedaron muy
marcados, en el tema de policías también digamos que la gente veía un policía entonces le
generaba más como un riesgo que la propia seguridad, entonces más bien intentaban ser
neutros como a todo eso, pero en términos generales yo creo que la gente estaba cuidada
porque los unos cuidaban a los otros (Entrevista actor territorial 1, 2018).
Sobre este mismo tema otros actores territoriales mencionan:
El sector a pesar de ser de estrato bajo, porque era de estrato uno, pues imagínate ya cerquita del río. Pero era un barrio muy bueno, muy sano, muy tranquilo. Donde todo el
mundo nos conocimos. Allá todos los vecinos eran como familia. Todo el mundo nos
conocíamos. […] La vida allá era muy tranquila, de hecho, cuando salía de trabajar llegaba
casi tipo 11 de la noche, cuando trabajaba en la tarde, y sabias pues que llegaba con toda
la tranquilidad. Allá no había temor de que peligro pues en el sector, no” (Entrevista actor
territorial 3, 2017).
Antes uno vivía con más tranquilidad porque vivía alrededor de la familia. […] Me gustaba todo porque como uno toda la vida vivió ahí nadie se metía con uno, todos éramos
conocidos (Entrevista actor territorial 5, 2017).
Sin embargo, un actor territorial entrevistado expone:
En el sector había unos combos, y estaban amedrantando a la familia. La hija y los nietos
se tuvieron que ir. Dada la situación en ocasiones yo no dormía en la vivienda, me iba para
la casa de conocidos o a veces pagaba una pieza. Había días en que la situación de
seguridad era difícil (Entrevista actor territorial 7, 2018).
127
Dado lo anterior, se identifica que si bien en el territorio se presentaban eventos que
podrían poner en riesgo la integridad de los moradores (inundaciones, actos violentos), es
recurrente que los actores entrevistados mencionen que vivían mejor, y más seguros
antes de salir de su territorio. Una posible explicación a lo antes expuesto podría ser que
los moradores habían aprendido a convivir y adaptarse a estos factores de riesgo,
definiendo acciones y tácticas para manejarlo:
Incluso el tema seguridad física de los habitantes, desde el tema del riesgo ambiental, y también el de orden público, no priman porque las personas han aprendido a adaptarse a
ese riesgo, es decir, por donde debo meterme, que calles o espacio evito porque son
peligrosos. Asimismo, han definido acciones y adecuaciones para mitigar el riesgo
ambiental (Entrevista actor experto Eliana Zuluaga, 2017).
Aun reconociendo que el lugar de acogida, es decir, el sitio en que residen luego del
desplazamiento involuntario, cuenta con unas mejores cualidades física (la vivienda, y no
estar en riesgo), varios actores territoriales entrevistado destacan que el alto costo de vivir
fuera del territorio les hace pensar volver al sector de Puerto Nuevo. Un actor territorial
que actualmente vive en Ciudadela Nuevo Occidente46 menciona: “en cuanto a eso
[disminución del riesgo por inundación] si hemos ganado mucho, pero en lo económico
allá vivíamos mejor que aquí, créalo que allá vivíamos mejor” (Entrevista actor territorial 8,
2018). Otra apreciación sobre el cambio que generó el traslado a otra residencia fuera del
territorio, en razón a la ejecución de la obra:
[…] no pues no me ha cambiado para bien, aunque la casa si es más bonita de la que
vivía, pero en mi tranquilidad y todo así no porque prácticamente quedamos muy
separados de la familia y estoy pasando momentos muy difíciles ahora, mi marido falleció
hace 4 meses, me siento muy sola (Entrevista actor territorial 5, 2017).
Con relación a la variable paisaje, referida esta a los elementos contemplativos, se infiere
que este no es un atributo valorado por los moradores del sector de Puerto Nuevo, porque
ningún actor territorial entrevistado abordo el tema. De otro lado, tangencialmente un actor
46 Es un conjunto de proyectos habitacionales en altura (viviendas multifamiliar tipo VIP y VIS), localizadas al occidente de Medellín, en el área de expansión de la ciudad, desarrollado mediante del plan parcial de Pajarito (adoptado mediante Decreto municipal 602 de 2002, y ajustado por el Decreto Municipal 1775 de 2012).
128
territorial mencionó la contaminación sonara, al relatar la congestión vehicular que se
presentaba en la vía principal (carrera 54/carrera 55) antes del desarrollo de la obra:
Ahí donde esta específicamente la glorieta del Puente Madre Laura se hacía un
embotellamiento, cierto, porque obviamente la avenida, la carrera era demasiado angosta,
entonces se generaban a veces embotellamientos y eso generaba que el flujo vehicular
obviamente fuera más lento. Entonces como iban más lento y el desespero de salir, se
generaba pues una contaminación de ruido, pero no era siempre (Entrevista actor territorial
1, 2018).
- La vivienda y sus condiciones habitacionales
Sobre este respecto se abordan temas relacionados con las cualidades de la vivienda,
desde la mirada de quien la habita, se destaca el proceso de consolidación, y su
pluralidad en cuento a las formas de tenencia y al uso que esta recibe.
Antes de la intervención los estratos socioeconómicos que predominaban en Puerto
Nuevo eran “el estrato 2 (bajo), el cual comprende el 61.4% de las viviendas, seguido por
el estrato 1 (bajo-bajo) que corresponde al 38.6%, estas condiciones socioeconómicas
caracterizan la totalidad del sector” (Observatorio de Reasentamientos y Movimientos de
Población, 2016, p.11).
Respecto a la forma de tenencia de la vivienda, entendida esta como la relación jurídica
que se tiene con el inmueble, donde identificamos al propietario, quien tiene derecho de
propiedad sobre el bien inmueble; al poseedor, quien ejerce animo de señor y dueño
sobre un bien sobre el cual no tiene la propiedad; y al tenedor, quien reconoce la
propiedad de alguien sobre el bien, pero él lo goza, usa y disfruta, bajo conocimiento y
autorización del propietario o poseedor. A partir de la información recabada en el censo
(EDU, 2014, citado por el Observatorio de Reasentamientos y Movimientos de Población,
2017), se encuentra que 211 unidades sociales eran propietarias (50,7%), 202 eran
poseedoras (48,6%), dos unidades sociales tenían posesión del inmueble por tener
porcentajes de derecho sobre el mismo, y una unidad social reporta ser ocupante.
Con relación a la disponibilidad de servicios público domiciliarios, los actores territoriales
afirman que la comunidad en general tenía acceso estos servicios, algunos de manera
129
formal a través de Empresas Públicas de Medellín (EPM) y otros servicios mediante a la
autogestión de los habitantes que de manera informal accedían a estos (captación y
disposición del agua).
en servicios públicos, ellos mismos hicieron, por ejemplo los de acá de Puerto nuevo hicieron
la solicitud a las Empresas Públicas de Medellín para que vinieran y colocaran pues como la
electricidad y todo el tema del acueducto, pero al ver que digamos la entidad no respondió
pues ellos mismos en convite fueron los que colocaron el tema de la electricidad y fueron los
que colocaron el acueducto […] esto para los que estaban al borde del río, para los otros que
estaban en el sector del hueco ellos no pagaban acueducto, ellos utilizaban un yacimiento de
agua […], aguas subterráneas limpias que fueron utilizadas por los pobladores del hueco y con
eso surtían pues a cada vivienda, entonces hicieron un sistema muy arcaico pero maniobrable de acueducto y surtieron a todas las viviendas de esa agua, entonces ellos no pagaban agua.
Con respecto a la energía a todas las viviendas se les coloco energía prepaga, el contador de
energía prepago, entonces pagaban solamente lo que consumían (Entrevista actor territorial 1,
2018).
Las condiciones de la vivienda en el sector, antes de la intervención, eran diversas, sin
embargo y dada la manera informal en que se fue consolidando el sector, la gran mayoría
de las viviendas eran de autoconstrucción progresiva, en la cual, los pobladores en un
primer momento construían con materiales precarios soluciones parciales de vivienda y
con el paso del tiempo, y conforme a la capacidad económica del grupo familiar, las
viviendas iban siendo mejoradas.
[…] muchos lograron organizar su vivienda en material, otros que son más que todo los del
sector del hueco se quedaron en viviendas elaboradas a base de madera, pero la mayoría
del asentamiento del sector de Puerto Nuevo, eran viviendas en material, muchos no
lograron organizar el tema de los planos, entonces ellos mismos hicieron sus viviendas,
construyeron, pero antes se utilizaba mucho el tema de los convites, entonces entre todos
los vecinos iban y hacían las construcciones, pero dentro de esas construcciones y dentro
de esas personas que iban a hacer los convites gozaban de uno dos personas que tenían el conocimiento de construcción, que en ese tiempo se les denominaba oficiales de
construcción y con ellos empezaban hacer el levantamiento de las terrazas, el
levantamiento de las columnas y en si el levantamiento de las viviendas, entonces lo que
vimos con los avalúos, después se determinó que las viviendas estaban bien construidas, a
130
pesar de que no tenían los planos arquitectónicos, las viviendas estuvieron bien
construidas (Entrevista actor territorial 1, 2018).
Estas viviendas usualmente se componían de entre uno y tres pisos, hecho que respondía
a la lógica antes mencionada (construcción progresiva):
[…] entonces los del sector de la ladera del río sus viviendas pues fueron consolidadas en
1, 2 y hasta 3 pisos porque de ahí también se hacían un sustento económico, los del sector
del hueco si eran viviendas más rusticas construidas a base de madera, pero dentro de
todo la generalidad es que entre las del hueco, entre las de material y entre las de madera pues gozaban de unos buenos espacios, tenían entre 3, 4 habitaciones y disponían
obviamente de los espacios de la cocina, de la zona de ropa, de la parte del baño, de la
parte de la salita, entonces siempre gozaban de unas viviendas que cuyas áreas pasaban
de los 50 metros cuadrados y vivían felices ahí. (Entrevista actor territorial 1, 2018).
Ilustración 11. Viviendas del sector de Puerto Nuevo en 2013-2014
Fuente: Google Maps Una de las características principales del área de estudio era su condición predominante
residencial, no obstante, se presentaba una considerable mezcla de usos que respondían
en la mayoría de los casos a la necesidad de los grupos familiares de tener una fuente de
sustento económico. Así, en el sector era frecuente que las viviendas, además de tener
un uso residencial, estas fuesen utilizadas para el desarrollo de actividades económicas.
De esta forma, para los moradores de Puerto Nuevo, la vivienda además de refugio,
permitía a muchos hogares la generación de ingresos para su subsistencia. De esta
forma, la vivienda “además de protección y abrigo, […] esta suple otros aspectos de la
vida, porque es el eje, es el punto de partida en que uno se sitúa para empezar a
desarrollar el proyecto de vida” (Entrevista actor académico, Mónica Mejía, 2017).
131
En este punto es preciso ahondar en la cualidad de la vivienda para responder a las
necesidades del grupo familiar. Este fue un atributo destacado por los actores territoriales,
propietarios o poseedores de vivienda, entrevistados. Este atributo incluye tanto la
adecuación de la vivienda para responder a la necesidad de habitación (cuartos para
dormir), como para el desarrollo de una actividad económica. Sobre la necesidad de
habitación se menciona la posibilidad de construcción o ampliación de la vivienda,
modificando la distribución del espacio interno de la vivienda, o utilizando el espacio
contiguo a la vivienda, por ejemplo, aprovechando la parte superior (el “aire”), y construir
varios pisos. Al respecto la profesora Wolf menciona:
es que la casa es una alcancía para el futuro donde yo puedo construir un segundo piso y
luego el tercero que era lo que se hacía y eso me da mucha tranquilidad porque tengo no
solo el presente sino el futuro asegurado en esas prácticas (Entrevista actor académico Gilda Wolf, 2017).
En lo que refiere al desarrollo de la actividad económica, esto se podía dar mediante la
adecuación de la vivienda para establecer la unidad de negocio (tienda, peluquería,
arriendo, etc.), o que se utilizaran los espacios de la vivienda para almacenar o preparar
la mercancía, en los casos en que la actividad económica se desarrollase por fuera de la
vivienda; también era frecuente el alquiler de espacios de la vivienda (cuartos, garaje
etc.).
Un tema que surgió en el marco de la conversación con los actores territoriales que hoy
en día residen en Ciudadela Nueva Occidente47, es lo referido a la privacidad. Dado que
hoy viven en apartamentos, y que según estos actores los muros son muy delgados “aquí
si usted clavo un clavo de 4 pulgadas, este pasa de lado a lado” (Entrevista actor territorial
8, 2018), la privacidad es una cualidad de la vivienda que se ha perdido. De esta forma
los sonidos y movimientos abruptos que se hacen en los apartamentos vecinos se sienten
y perturban la tranquilidad del grupo familiar. Por ejemplo, uno de los entrevistados
mencionaba una anécdota sobre ocasiones en que se escuchaban a unos vecinos
cuando tenían intimidad por la noche: “si no que era una cama, rechinaba, traqueaba,
entonces yo que día gozando, le dije María apriétele los tornillos a esa cama” (Entrevista
47 Proyecto de vivienda masiva en altura (apartamentos), localizada en el corregimiento de Pajarito, en zona de expansión urbana, al occidente de la ciudad de Medellín.
132
actor territorial 8, 2018). Sobre ese respecto el mismo actor territorial comenta “lo bueno
de nosotros antes, es que el rancho de nosotros no era pegado con ninguno, entonces
era muy calmado” (Entrevista actor territorial 8, 2018)
2.2 El Territorio como fuente de bienestar para sus moradores
De las fuentes consultadas, se deduce que los actores territoriales, a pesar de las
condiciones económicas y sociales poco favorables en Puerto Nuevo, con el tiempo
lograron consolidar, alrededor del lugar en donde vivían, una experiencia que les genera
una habilidad para desenvolverse en el territorio, y para adquirir los bienes y servicios que
requerían. También, resultado de este proceso histórico los habitantes del sector de
Puerto Nuevo habían concebido formas de relacionamiento con sus semejantes, lo que
les había posibilitado afianzar relaciones de cooperación y ayuda mutua que les servían
de soporte en situaciones adversas. Sobre esto la profesora Chardon menciona:
A pesar que de pronto que viva en una casa que casi se cae o en malas condiciones de
salubridad etc., pero no importa. Si bien a la gente este aspecto físico pues tiene cierto
valor, vale mucho y casi diría yo mucho más todo lo que no se puede palpar todo lo virtual
todos esos aspectos intangibles que hace que uno se sienta bien en un lugar, más allá de
las cuatro paredes que lo rodea. Entonces eso es fundamental y eso motiva a quedarse
ahí. Saber que uno tiene apoyo de sus vecinos. Y más allá de los vecinos, la familia, poder contar con ellos, les prestan plata les fían en la tienda etc. Eso es muy importante sobre
todo en población de bajos estratos socioeconómicos, donde las relaciones humanas
hacen parte del diario vivir (Entrevista actor académico, Anne Catheryn Chardon, 2017).
Sobre este mismo aspecto los expertos de EPM entrevistados comentan que:
La gente resuelve su vida, manejando el entorno, manejando el territorio, ellos ya saben
donde encontrar la opción económica, o como acceder a la opción económica, donde la
gente encuentra los lazos de solidaridad, donde la gente encuentra las facilidades para
acceder a servicios públicos y sociales que requiere, como moverse allí… y hace del
territorio su nicho, y ese es el universo de él, y allí este encuentra todo. Cuando lo
desplazan todo eso quedo en el aire, y toca volver a reconstruir. Y esa ruptura es mejor dicho eso es perder arraigo, lo cual es muy fuerte porque es perder la seguridad sicológica.
Cuando la gente tiene arraigo, es porque tiene seguridad sicológica, porque mal que bien
133
sabe como resolverse su vida allí. Cuando lo cambian de hábitat, lo cambian de medio, la
persona queda digámoslo con vacíos, con carencia, con dificultades para resolver cosas,
que antes sabia como resolverla en el territorio en el que estaba, y que en el nuevo
territorio ya no sabe como y le va tocar nuevamente a ingeniárselas y se va a asentir más
inseguro, más temeroso, más ansioso. (Entrevista actor experto, EPM, 2017).
Dado lo anterior, se puede inferir que una cualidad importante del territorio, es la
seguridad que genera a quien lo habita. Esta sensación de confianza se sustenta en el
conocimiento que el morador tiene de su territorio, esto es, el conocimiento de las
amenazas y las oportunidades que este le brinda:
porque yo lo que conozco, difícilmente lo quiero soltar, además el territorio me garantiza
redes sociales y económicas, el territorio me garantiza seguridad a si sea un territorio
inseguro yo puedo por mi conocimiento y la forma de moverme en él generarme las condiciones de seguridad propia que no me la da un territorio desconocido, el territorio por
ejemplo me puede brindar a mi formas de subsistencia, yo soy una persona que no tengo
una profesión, que vivo del rebusque y entonces cerca donde estoy hay un colegio donde
voy y vendo mango biche o donde voy y vendo chucherías y ahí mal o bien me levanto. [...]
el otro tema es que yo sé cuánto pago en el sitio donde estoy o sé cuánto pagan mis
vecinos por prestación de servicios públicos, se cuanto pagar por cuestiones de pasajes,
cuánto me demoro para desplazarme de un lugar a otro (Entrevista actor institucional,
DAP, 2017).
De todo lo antes mencionando, se puede concluir que los habitantes del sector de Puerto
Nuevo desarrollaron unas formas de vida soportadas en el uso del conjunto de atributos
de su territorio. Esto significa que existía una relación de dependencia entre el morador y
su territorio, en la cual, los recursos dispuestos por el territorio entran a subsanar déficits o
carencias del morador en términos de: destrezas y conocimientos para desarrollar alguna
labor, medios de producción (mano de obra, capital, tierra), nivel educativo, salud, entre
otros aspectos relacionados con el conjunto de recursos y capacidades del individuo (o
grupo familiar). Lo anterior guarda relación con lo que en la formulación de la Política
Pública de Protección a Moradores Actividades Económicas y Productiva denominan
Capital Humano (Alcaldía de Medellín, 2017b). De esta forma, el sector de Puerto Nuevo,
por sus particularidades (físicas y sociales) y por su localización relativa en la ciudad,
ofrecía a los habitantes del territorio desplazados por la obra, un conjunto de atributos que
les posibilitaba tener una mayor capacidad de respuesta frente a situaciones de
134
necesidad e incertidumbre. Dado lo anterior, en la presente investigación se afirma que el
territorio es fuente de bienestar para quien lo habita, más aún para aquella población con
baja capacidad adquisitiva o en condición de vulnerabilidad.
Bajo esta lógica, el Bienestar Territorial se concibe, como el conjunto de beneficios y
oportunidades que brinda el territorio a sus moradores para la realización de sus
proyectos de vida, sea este de subsistencia o de mejora progresiva de la situación de
vida. A saber, en el área de estudio, cuando las dificultades y necesidades superaban las
posibilidades de manejo del grupo familiar, estos acudían a la solidaridad y cooperación
de familiares o vecinos para sobrellevar esta crisis. Otros atributos territoriales
identificados fueron: la proximidad al domicilio a eventuales fuentes de ingreso
(emprendimientos o empleos, de carácter formal o informal), la posibilidad de adaptar la
vivienda según las necesidades del grupo familiar, los bajos costes de desplazamiento
(movilidad) para acceder a sitios de interés. Asimismo, lo concerniente al acceso a
transporte colectivo, servicios públicos domiciliarios, y lo relacionado con el acceso a
servicios de salud, educación, recreación, comercio y culto. De esta forma, el sector de
Puerto Nuevo, además de posibilitar el acceso a una significativa variedad de servicios,
poseía un conjunto de atributos territoriales que generaban beneficios a sus moradores,
tanto por la generación de ingresos o porque estos mitigaban e incluso eliminaban, gastos
que de otra forma el grupo familiar tendría que soportar.
Es preciso mencionar que la noción de bienestar territorial que aquí se plantea, está
determinada por la relación entre el morador y su territorio, y refiere a la forma en que
cada uno de los atributos territoriales aporta bienestar a quien lo utiliza. Así el bienestar
territorial existe en la medida en que el territorio reúne condiciones tendientes a garantizar
un cierto grado de satisfacción físico-espacial, social y económica para sus moradores. Es
preciso mencionar que lo anterior no significa que el territorio provea unas condiciones
óptimas o ideales a sus moradores, a lo que debe llevar la noción de bienestar territorial
es a reconocer (entender y legitimar) que aún en contextos de necesidad (déficits), el
territorio ofrece ventajas y beneficios48 para quien lo habita. En este sentido, lo que se
propone es un enfoque social y territorial, para la identificación de las condiciones de vida
de la población directamente impactada por una obra de utilidad pública. 48Dependiendo de las particularidades del territorio. Así, algunos atributos, dependiendo del caso, pueden no ser valorados por los moradores, o incluso ser valorados de forma negativa, lo que implica que estos atributos no aportan a su bienestar.
135
Dado que el morador experimenta un nivel de bienestar por su práctica de habitar su
territorio, la limitación, parcial o total, al uso (acceso) de los atributos territoriales, sin
mediar medidas de manejo en esta pérdida, representa para el morador una desmejora
en sus condiciones de vida y su bienestar. En razón a lo anterior, en el siguiente capítulo
se presenta una aproximación metodológica de cómo valorar económicamente las
modificaciones que se producen en el bienestar de una persona ante cambios en la
disponibilidad y acceso a los bienes y servicios provistos por el territorio.
136
3 Propuesta metodológica para el análisis del reasentamiento desde el bienestar territorial
La acción pública busca mejorar la calidad de vida de la población a quien va dirigida, en
este sentido, con la ejecución de una obra de utilidad pública en un territorio (urbano o
rural), la institucionalidad pública pretende elevar el bienestar de los habitantes de ese
territorio. De esta forma, toda intervención pública, en su etapa de prefactibilidad, debe
evaluar (estimar) el beneficio neto que esta genera a la población involucrada.
Sobre este aspecto, la esencia de un análisis económico es comparar los beneficios
frente a los costos de un proyecto o una acción propuesta, con el objetivo de evaluar su
viabilidad. En el marco del estudio de la viabilidad de un proyecto de utilidad pública este
análisis es deficiente si además de contabilizar los beneficios que genera la intervención,
no se estiman las pérdidas percibidas por la población directamente impactada por la
obra, más aún para aquella población que es obligada a abandonar su territorio en razón
a la ejecución de las obras.
Como se ha mencionado previamente, es de suma importancia reconocer que, en la
ejecución de estas obras, además de una transacción financiera, en la compra de predios,
se presenta una serie de afectaciones sociales y económicas a los moradores de los
territorios intervenidos. Tal como se expuso en el capítulo anterior, los pobladores del
sector de Puerto Nuevo, antes de ser desplazados por la obra, se beneficiaban del
conjunto de bienes y servicios a los cuales tenían acceso en su territorio. De esta forma,
la ejecución de la obra le significó a la población desplazada de Puerto Nuevo, la pérdida
de beneficios por habitar su territorio, y la necesidad de incurrir en nuevos gastos para su
sostenimiento en el lugar de acogida; costos que a la fecha no han sido considerados en
la formulación y evaluación de los proyectos de utilidad pública en la ciudad de Medellín.
Dado lo anterior, en el presente capítulo se expone una propuesta metodológica de
estimación del cambio en el nivel de bienestar de un individuo en razón al desplazamiento
involuntario provocado por la ejecución de una obra de utilidad pública. En este punto es
preciso mencionar que el alcance de este capítulo es describir de forma lógica e intuitiva
137
la metodología49, mas no su implementación, toda vez que esto excede el alcanza
propuesto para la investigación.
3.1 Estimación del cambio en el nivel de bienestar territorial de los moradores sujetos de reasentamiento
Según Castro y Mokate (1998) el impacto de un proyecto se deduce de la comparación de
un escenario con proyecto y otro sin proyecto. Dado lo anterior para una evaluación ex-
ante (antes del reasentamiento) hace falta conocer, por un lado, que tanto mejor hubieran
estado los grupos familiares, si el proyecto no se hubiera llevado a cabo, es decir si no
hubieran sido desplazados. De igual forma, se debe conocer en que condiciones estarían
los grupos familiares en el lugar de acogida, es decir, después del reasentamiento. Ahora,
si la intención es realizar una evaluación ex-post (después del reasentamiento), dado que
las condiciones iniciales (antes de la intervención) y las condiciones en el lugar de
acogida son conocidas, solo haría falta saber qué tanto mejor hubieran estado los
hogares, si el proyecto no se hubiera llevado a cabo.
Esta propuesta parte de la premisa de que, en condiciones normales, es decir, ante la
ausencia de choques externos (alteraciones abruptas) que perturben las lógicas y
dinámicas del territorio, es de esperarse que los moradores no experimenten alguna
variación significativa del nivel de bienestar percibido por habitar su territorio. Lo anterior
permite suponer, por efectos prácticos, que los beneficios de los hogares son constantes
en el tiempo. Este supuesto es importante toda vez que permite plantear una equivalencia
entre las condiciones de vida de la población antes de la obra, con el escenario sin
proyecto50. En términos prácticos esto significa tener información que permite realizar una
comparación objetiva del antes y del después del reasentamiento.
49 Si el lector está interesado en la fundamentación microeconómica de los métodos de valoración económica de bienes y servicios se recomienda revisar: Labandeira et al., 2007; Field & Azqueta, 1996; Field, 2003; Ministerio de Medio Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial, 2003. 50 Una solución alternativa sería mediante la utilización de una población de control, que son una muestra de población que posee características similares a la población objeto de estudio, pero que a diferencia de la población desplazada por la obra, estos no sufrieron ninguna afectación por parte de la obra. Para un mayor detalle ver diseños experimentales y semi-experimentales en evaluación de impacto (Aedo, 2005)
138
Con base en Zuluaga (2004) a continuación se presenta gráficamente lo que supone para
un grupo familiar experimentar un proceso de reasentamiento.
Ilustración 12. Senda de bienestar de los grupos familiares sujetos a reasentamiento
Fuente: Zuluaga, 2004, p. 15. En la Ilustración 12, el eje horizontal describe el tiempo y el eje vertical el nivel de
bienestar percibido por un hogar por habitar el territorio. La línea SP representa una
senda de bienestar constante, la cual seguiría el hogar si el proyecto no se hubiera
realizado. Al ocurrir el proceso de desplazamiento en el momento t la senda de bienestar
es interrumpida y el hogar sufre una disminución en la utilidad y permanece en un nuevo
nivel de bienestar U3 durante el periodo de transición (entre t y t+n) en el cual busca una
nueva vivienda y se reestablece. En el momento t+n, si el proceso de reasentamiento es
exitoso, el hogar vuelve al nivel U0 o, en el caso ideal, mejora su situación (área achurada)
alcanzando, por ejemplo, una senda R1 donde disfruta de un nivel de bienestar mayor
(U1). Si por el contrario el reasentamiento ubica al grupo familiar en el área punteada, por
ejemplo, en la senda R2 donde percibe un nivel de utilidad U2, significa que el
reasentamiento no logró el objetivo de mantener el nivel de bienestar del hogar, en otras
palabras, el proceso de reasentamiento no impidió que se desmejoraran las condiciones
de vida del grupo familiar reasentado.
Ahora, es preciso recordar que, en el marco del proceso de reasentamiento, el análisis
económico del territorio presenta una serie de dificultades que deben ser examinados con
detenimiento, de manera que los resultados que se obtengan proporcionen el verdadero
139
valor de los atributos territoriales. En este escenario, es necesario tener en cuenta que se
analizan recursos de no mercado, es decir, bienes y servicios que no se comercializan en
mercados organizados, donde su intercambio pondría de manifiesto las preferencias de
los consumidores, el grado de escases y se determinaría un precio. Una dificultad
adicional a la hora de valorar correctamente los atributos territoriales, es que se debe
tener presente todos los componentes de valor que estos recursos poseen. El
componente más claro es aquel que se obtiene del disfrute del bien en sí mismo o de su
uso directo, y que nos proporciona lo que se denomina valor de uso. De otro lado, el valor
de no uso51, agrupa los valores relacionados con la propia existencia del recurso, la
posibilidad de mantener un legado a las siguientes generaciones, la opción de usarlo en el
futuro aun cuando no se utilice en el momento presente, etc. Pues bien, estos
componentes de valor tienen dificultades para canalizarse en el mercado en forma de
precios.
Dada la dificultad de valorar muchos de los atributos territoriales, Pearce (1999)
recomienda que una buena aproximación para valorarlos y lograr una compensación
apropiada y completa, en el marco de procesos de reasentamiento, es realizar estudios
de disponibilidad a pagar y disponibilidad a aceptar. Lo antes mencionado refiere a la
máxima disposición a pagar de un individuo por la provisión o mejora de un bien de no
mercado, y, la mínima disposición a ser compensado por la pérdida o disminución del
disfrute del mismo bien, respectivamente (Field & Azqueta, 1996). Este tipo de estudios
son comunes en la economía ambiental; los investigadores los usan, primordialmente,
para estimar la valoración económica de los servicios ambientales no mercadeables, por
ejemplo, los beneficios por la disminución de la contaminación (Azqueta, 1995).
Como no existen datos observables sobre precios y costos asociados a todos los atributos
territoriales, se definió que la estrategia sería obtener información a partir de las
declaraciones de preferencias de los encuestados, en un contexto de un mercado
51 Como se mencionó en el apartado 1.2.2.3. “Valoración económica del territorio: referentes teóricos”, el valor de no uso se corresponde con el deseo que tienen las personas de preservar algún recurso, aunque no realicen un uso directo de este. Un ejemplo para este caso sería una zona verde (o parque). En el caso hipotético de una persona que no utiliza de forma directa la zona verde (o parque), esta misma persona puede considerar valioso ese espacio porque reconocen que este es utilizado por otros miembros de la comunidad, para el disfrute y recreación, o porque espera que en el futuro él, o su descendencia, puedan utilizarlo también.
140
simulado. Dado que la técnica de valoración contingente permite obtener la disposición a
pagar por los recursos que provee el territorio, situación que no necesariamente explicitan
otros métodos, se escoge este método para el desarrollo de la propuesta metodológica de
análisis del reasentamiento por obra de utilidad pública. Es preciso mencionar que tanto el
ordenamiento contingente como el análisis conjunto, jerarquizan los atributos de los
distintos bienes y servicios, determinando la preferencia por algunos de ellos, pero no
permiten determinar el valor monetario que cada uno de estos representa (Field &
Azqueta, 1996; Field, 2003; Ministerio de Medio Ambiente, Vivienda y Desarrollo
Territorial, 2003).
Según Pearce (1999), el método de valoración contingente (MVC) es aplicable al espectro
de recursos mercadeables y no mercadeables en el contexto del reasentamiento, esto es,
los bienes culturales, la cohesión social, los servicios ambientales, entre otros. Una
ventaja adicional de la valoración contingente es que permite medir la pérdida de utilidad
en personas que no van a disfrutar de forma inmediata un bien o servicio, pero que
estarían dispuestas a pagar algo, por los motivos subyacentes a los valores de no uso de
un bien o servicio (Riera, 1994). Sin embargo, la complejidad de este método comporta
algunas dificultades, que devienen de distintos tipos de sesgos (errores) en la respuesta.
A continuación, con base en Field & Azqueta (1996), se exponen cuatro tipos de sesgos a
modo de ilustración52:
– El sesgo de la hipótesis: dado el carácter meramente hipotético del ejercicio, es
decir, cuando la persona no está enfrentando realmente la situación que se le
plantea, este individuo no tiene ningún incentivo para decir una respuesta
verdadera. En el contexto del reasentamiento, esto sucedería si en una evaluación
ex-ante, los hogares no sienten una amenaza de desplazamiento real, es decir,
que no cree que realmente la afectación se presente.
– Sesgo estratégico: refiere a que los individuos respondan estratégicamente a las
preguntas que se les realizan. El sesgo estratégico se produce cuando los
encuestados utilizan sus respuestas para intentar influir en la decisión final que se
52 Si el lector está interesado en profundizar en todos los posibles sesgos en la respuesta ver: Field & Azqueta (1996, pp.167-175); y Riera (1994, pp. 46-54).
141
tome sobre la propuesta sometida a su consideración, de forma que salga
favorecido.
– Sesgo de la información: es el hecho de que las personas no se encuentren
familiarizadas con el bien o recurso objeto de estudio o con la situación que se les
plantea. Al no estar familiarizado con el recurso que se desea valorar, o si se
desconocen las condiciones e implicaciones de la intervención, es muy probable
que los resultados obtenidos varíen significativamente, generando inconsistencias
en los resultados obtenidos.
– Sesgo del entrevistador: Cuando el ejercicio se lleva a cabo entrevistando
directamente a la persona, se ha observado que ésta tiende a exagerar su
disposición a pagar por una causa que considera socialmente aceptable, por temor
a parecer frente al entrevistador, como poco solidaria, o poco consiente del
problema. Relacionado con el sesgo del entrevistador, encuentra el sesgo de
complacencia con el entrevistador o con el promotor dependiendo de a quien
intente complacer con su respuesta, en donde el entrevistado ante la pregunta de
valoración, no da su verdadera disposición a pagar, sino que responde lo que
supone que espera otra persona.
La dificultad que suscitan los sesgos en la respuesta es que, de no prevenirse, al final del
proceso se pueden obtener resultados que distan de la verdadera valoración que el
individuo tiene del bien o servicio objeto de estudio.
3.1.1 Diseño del estudio
Este apartado está dedicado al proceso de aplicación del método de valoración
contingente (MVC). Se pretende plantear un referente o guía básica para los
investigadores que se enfrenten a un estudio donde se vaya a utilizar el MVC en el marco
de procesos de reasentamiento de población por obra pública53. Las orientaciones que se
describen a continuación se plantean con base en el Manual de Valoración Contingente
53 Si el lector está interesado en una guía más detallada se recomienda ver: Riera (1994) y Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial (2003).
142
de Riera (1994). Según esta fuente la aplicación del método de valoración contingente
debe seguir los siguientes pasos:
Tabla 25. Fases en un ejercicio de valoración contingente
Fase Descripción 1 Definir con precisión lo que se desea valorar en unidades
monetarias 2 Definir la población relevante 3 Concretar los elementos de simulación del mercado 4 Decidir la modalidad de entrevista 5 Seleccionar la muestra 6 Redactar el cuestionario 7 Realizar las entrevistas 8 Explotar estadísticamente las respuestas 9 Presentar e interpretar los resultados
Fuente: Riera (1994, p. 24) En primer lugar, se debe definir del objeto de estudio, especificar las características del
escenario donde la valoración va a tener una incidencia directa. Para los efectos de esta
investigación, el objeto de estudio es estimar cuanto cambia el bienestar de las personas,
expresado en unidades monetarias (pesos), al saberse afectadas por una obra de utilidad
pública, que le obliga salir de su territorio, respecto a la alternativa de que no hubiese
sucedido tal evento. Esta información será relevante para el diseño de las preguntas del
cuestionario, dado que esta debe contener información completa y precisa, para que la
disponibilidad a pagar del entrevistado revele información honesta de cuan importante son
los atributos territoriales para sus moradores. A saber, los atributos territoriales son:
Tabla 26. Atributos territoriales
Atributos territoriales Descripción Relaciones sociales Redes familiares y redes vecinales Procesos de autogestión
Vinculación a organizaciones de base comunitaria
Activos culturales Relacionado con el desarrollo de la vida en comunidad: costumbres (festividades) y referentes identitarios.
Economía Proximidad al domicilio a eventuales fuentes de ingreso y lo relacionado con gastos soportables.
Ventajas de localización
Relacionado con las características físicas, la proximidad a equipamientos y el acceso servicios: salud, educación, transporte, ocio y comercio.
Entorno Relacionado con el riesgo (físico y social), el nivel de contaminación y el paisaje (elementos contemplativos).
La vivienda Referida a las cualidades de la vivienda, las formas de tenencia y al uso que esta recibe de acuerdo a las necesidades del morador.
143
De la definición del objeto de estudio, el segundo paso es la definición de la población
relevante. En este caso, población relevante hace alusión a la población que será
desplazada involuntariamente por la ejecución de la obra de utilidad pública54. Antes de
diseñar el cuestionario, es relevante investigar sobre esta población, y los cambios que
suscitará la obra en el territorio a ser intervenido. Para este ejercicio es importante revisar
la información disponible sobre el proyecto: la caracterización socioeconómica del área de
influencia del proyecto, el análisis de actores y los estudios de impacto ambiental (EIA) u
otros estudios que den cuenta de los impactos (alteraciones) que genera la obra en el
territorio.
En caso de que la pretensión sea realizar una evaluación ex-post del reasentamiento
(estudio que se realiza posterior al reasentamiento), además de revisar los estudios e
informes antes relacionados55, se debe analizar la información referente al lugar de
acogida (localización, calidad en la tenencia de la nueva vivienda), el acceso (o no) al
subsidio municipal de vivienda y compensaciones, el tiempo transcurrido entre la salida de
la vivienda y el establecimiento en la vivienda de reposición, e indagar si el grupo familiar
fue beneficiario de algún programa de acompañamiento para la restitución de sus
condiciones de vida en el lugar de acogida. Si este programa tuvo lugar, indagar en que
consistió.
En tercer lugar, el investigador debe asegurarse de definir la forma como se plantea la
simulación del mercado, es decir, los parámetros (condiciones) de la simulación, de tal
forma que dicha simulación se aproxime lo más posible a los escenarios de mercados
reales. Esta es una fase compleja y de capital importancia en el ejercicio de valoración
contingente. En esta fase es en donde el investigador intenta simular mediante el
procedimiento de encuesta un mercado real. El investigador debe decidir si va a medir la
máxima disposición a pagar de la persona entrevistada o su mínima disponibilidad a ser
compensada56. Debe tomar también la decisión de cómo pagar (o cobrar) por el bien. Es
54 No obstante, si se tienen los recursos económicos y el tiempo, se puede ampliar el espectro a la población cercana al área intervenida por la obra, y a partir de los resultados de la encuesta, decidir la población relevante a posteriori. 55 Es importante revisar información objetiva y confiable sobre la línea base, lo que permitan comparar la situación antes – después. En muchos casos, se tiende a idealizar el pasado. 56 En 1993 la comisión de la National Oceanic and Atmospheric Administration (NOAA), del Ministerio de Comercio de los Estados Unidos, recomienda que se debe optar por la opción más conservadora, es decir, la disposición a pagar, aun cuando no sea la teóricamente correcta (Riera, 1994).
144
decir, cuál va a ser el vehículo, forma y momento de pago. Debe tener claro en la
simulación del mercado quien va a pagar por el bien (o servicio) y en que proporciones. Y
quien recibiría dicho dinero. Debe decidir si el coste de los cambios propuestos va a ser
un dato conocido por la persona entrevistada (potencial consumidor del bien). Finalmente,
se debe detallar cual es la alternativa o alternativas relevantes que se desean recoger en
este mercado hipotético.
Antes de continuar con el siguiente paso, es preciso plantear que, si bien es recurrente
que en los estudios de valoración contingente el medio de compensación sea el dinero,
Pearce (1999) argumenta que esta no siempre es la mejor forma de abordar el problema
de valoración. Este autor plantea la alternativa de ofrecer, en lugar de dinero, diferentes
“paquetes de reasentamiento” y definir cual de los paquetes está dispuesto a aceptar el
hogar de manera que las pérdidas sufridas por el desplazamiento sean compensadas. En
este contexto “paquetes de reasentamiento” refiere a escenarios hipotéticos, dados por
combinaciones de características asociados a la eventual solución brindada. Así, por
ejemplo, un paquete de reasentamiento sería un reasentamiento en sitio, el cual se
caracterizaría por suscitar exiguos cambios en las condiciones de vida en términos de:
vivienda, relaciones sociales, acceso a servicios, entre otros atributos del territorio. Otro
paquete de reasentamiento podría ser Ciudadela Nuevo Occidente, proyecto habitacional
en altura que se rige por la normativa de la propiedad horizontal, localizado en área de
expansión urbana de la ciudad de Medellín, en el marco del plan parcial de Pajarito:
unidad de vivienda multifamiliar (apartamento), incremento en el costo de trasporte (dinero
y tiempo) por su localización relativa en la ciudad, cambios en cuanto acceso a mercados,
cambios en las condiciones de acceso a servicios (oferta y precio), entre otros. Los dos
ejemplos antes citados, son netamente ilustrativos, por lo que no agotan la variedad de
paquetes de reasentamientos que se pueden plantear en un ejercicio práctico57. En caso
de que el ejercicio a realizar sea una evaluación ex–post al proceso de reasentamiento, el
paquete de reasentamiento sería la situación en la que están los hogares reasentados en
el lugar de acogida58.
57 Esta sería una forma de evitar que en la población se generen expectativas de pago en dinero, cuando la metodología se utiliza en evaluaciones ex-ante. 58 En este tipo de ejercicios prácticos, los entrevistados serían los grupos familiares desplazados por la obra, a quienes se les preguntaría si prefieren su situación antes o después del reasentamiento, similar a lo que platea Zuluaga (2014) en su investigación.
145
En cuarto lugar, tiene que decidirse la modalidad de entrevista: personal, telefónica o por
correo. De ello va a depender la muestra que se escoja y el contenido de la encuesta.
Además de las determinaciones teóricas, al menos dos factores están siempre presentes
en la toma de esta decisión: el tiempo y dinero disponibles para el estudio. En el marco
del proceso de reasentamiento, se sugiere la entrevista personal. Es deseable que ésta
sea diligenciada en la vivienda del grupo familiar, con el (la) jefe de hogar, y que esté
presente el resto del grupo familiar, para apoyar al entrevistado en los casos que fuese
necesario. La entrevista personal además de reducir el riesgo de no respuesta, presentan
la ventaja de permitir resolver dudas que, relacionadas con el ejercicio, se le presenten al
grupo familiar entrevistado. Además, esta modalidad permite utilizar material gráfico que
facilita la comprensión de la simulación del mercado expuesta.
El quinto paso consiste en la definición de la muestra. En el marco de los procesos de
reasentamiento se sugiere que el estudio se realice para el total de la población
desplazada involuntariamente por la obra de utilidad pública. Sin embargo, dado que las
variables tiempo y dinero son restricciones que tienen influencia al tomar la decisión de
cuantas personas se deben entrevistar, es válido que se aplique la encuesta a una parte
más pequeña de la población. El tamaño de la muestra debe ser estadísticamente
representativo, lo cual viene dado por selección aleatoria de los individuos a entrevistar, y
el grado de fiabilidad y ajuste que se desee para los valores que se vayan a obtener.
En sexto lugar, se procede a la redacción del cuestionario: una de las fases que precisa
de mayor tiempo y atención. Como se anotó antes, son numerosos los sesgos en los que
se puede incurrir, por lo que un diseño adecuado del enunciado de las preguntas es de
suma importancia para evitarlos o disminuirlos. La encuesta final habrá tenido que pasar
por varias versiones piloto, las cuales se prueban con un reducido número de personas,
hasta llegar a un instrumento final satisfactorio. Según Field & Azqueta (1996, p. 159) y
Riera (1994, pp. 33-44), un cuestionario estándar suele estructurarse en tres partes:
descripción del bien que se pretende valorar, valoración del bien o servicio, y las
características socioeconómicas del entrevistado.
El séptimo paso consiste es la aplicación de las entrevistas. Para ello se aconseja que
estas sean realizadas por un equipo de entrevistadores con un nivel de formación
profesional. En cualquier caso, siempre es recomendable llevar a cabo una reunión previa
146
del investigador con los encuestadores para comentar el cuestionario y resolver cualquier
duda, y otra posterior, es decir, después de haber realizado las entrevistas, para socializar
y discutir todo lo relevante que haya podido suceder en dichas entrevistas.
Una vez confeccionado el cuestionario definitivo y realizadas las entrevistas
correspondientes, el octavo paso es la sistematización de la información recabada, de tal
forma que el investigador pueda utilizar el programa estadístico de su preferencia para su
procesamiento. La explotación de los resultados es la parte a la que los investigadores
suelen dedicar más esfuerzo. Es también, seguramente, la más agradecida, dado que es
cuando afloran los resultados después de un largo proceso.
En noveno, y último lugar, los resultados obtenidos deben interpretarse de acuerdo con el
contexto de la investigación. En formatos continuos, la agregación de resultados se suele
efectuar por la media (promedio), aunque también podría utilizarse la mediana59. Es
aconsejable, en cualquier caso, realizar un análisis de sensibilidad, de forma que el
interesado pueda interpretar mejor los resultados; es decir, averiguar que aspectos
influyen en una mayor o menor variación de los valores hallados. En este punto es preciso
plantear que, dada la complejidad de ejercicio, el valor obtenido debe considerarse sólo
como una aproximación al verdadero valor del bien o servicio, que de otra forma no sería
posible conocer, si se tratase de un bien o servicio sin mercado. No obstante, de
realizarse con rigurosidad el ejercicio no habría razones para pensar que los resultados
estén significativamente distantes de los verdaderos valores (Riera, 1994, p. 57).
A partir de lo señalado hasta ahora, se menciona que el MVC es una alternativa viable
para evaluar en términos monetarios como la modificación en las condiciones de oferta de
un bien o servicio afecta el bienestar de grupos humanos. Ahora, si bien este método
puede presentar algunas dificultades, estas pueden ser minimizadas mediante un riguroso
diseño del cuestionario. Sobre este respecto Freeman (1990, citado por Field & Azqueta,
1996, pp. 164-165) plantea las siguientes recomendaciones:
- El cuestionario debe contener una descripción clara del bien objeto de estudio, así como de la modificación contempladas, y lo que éstas suponen.
59 En cualquiera de los casos es aconsejable, para una buena interpretación del estudio, especificar en la descripción del ejercicio, la medida estadística utilizada.
147
- La persona encuestada debe estar familiarizada con el bien, y el problema en
cuestión. El cambio propuesto debe encontrarse, en la medida de lo posible, en
un rango que resulte familiar para el interesado.
- El cuestionario debe estar planeado de forma consistente con el marco teórico
utilizado para la definición de los valores de uso y no uso, etc.
3.1.2 Aspectos a tener en consideración
Como se anotó previamente, el MVC intenta averiguar la valoración que otorgan las
personas a los cambios en el bienestar territorial ante la modificación en las condiciones
de oferta de un bien (o servicio) determinado, a través de la pregunta directa (la
encuesta). A partir de este método se puede obtener la disposición a pagar o la
disposición a aceptar una compensación (compensación exigida), medidas que
dependerán tanto de los atributos socioeconómicos del encuestado, como de la calidad y
cantidad del recurso en cuestión60. La disposición a pagar refiere al valor máximo que se
estaría dispuesto a pagar para obtener una mejora, o para evitar un cambio que empeore
su situación inicial (Field & Azqueta, 1996). De otro lado, la compensación exigida se
concibe como el valor mínimo que el individuo demandaría para aceptar un cambio que
empeora su situación, o lo mínimo que exigiría para renunciar a un cambio que le mejore
las condiciones de vida (Field & Azqueta, 1996).
En los casos de desplazamientos involuntarios de población por obra pública, la
institución responsable de la intervención debe velar por la protección y el
restablecimiento de los derechos, individuales y colectivos, de la población impactada por
la obra, por lo que dicha institución debe garantizar que en el marco del reasentamiento
las condiciones de vida de esta población no se desmejoren61. Dado lo anterior, la medida
del cambio en el bienestar que se debería utilizar es la variación compensatoria. Esta es
una medida de valoración del cambio de bienestar, que “mide la cantidad de dinero
necesaria para compensar la pérdida de utilidad que supondría la medida propuesta”
(Field & Azqueta, 1996, p. 44). Con esta medida, lo que se pretende es estimar la
cantidad de dinero necesario para que un grupo familiar sea indiferente entre su situación 60 En caso de que el lector esté interesado en revisar el modelo teórico del método de valoración contingente se sugiere ver Osorio y Correa (2009, pp. 16-21). 61 Esto es un aspecto contemplado, en la Política Pública de Protección a Moradores Actividades Económicas y Productivas, recientemente formulada en Medellín (Alcaldía de Medellín, 2017b).
148
antes y después del reasentamiento, en otras palabras, la cantidad de dinero que el grupo
familiar está dispuesto a aceptar por soportar la pérdida de bienestar neta que sufriría a
causa del desplazamiento involuntario. Esto no significa, en sentido estricto, que con este
dinero el grupo familiar regrese a la situación inicial (como estaba antes de la ejecución de
la obra), más bien, es una medida que propende por mitigar las pérdidas de bienestar
territorial que genera el desplazamiento involuntario.
Otro aspecto a destacar es que la valoración contingente captura el valor que la población
desplazada da a los bienes y servicios provistos por el territorio, por lo que el morador
tendría un rol central en la valoración de sus condiciones y en la evaluación de los efectos
que generaría una intervención u obra en su territorio. En el marco de los procesos de
reasentamientos, asumir que el bienestar es relativo a las necesidades, e intereses de los
moradores, se considera una ventaja, puesto que significa un reconocimiento de las
lógicas y realidades del territorio a intervenir. Así, en la evaluación de la viabilidad de un
proyecto además de la óptica técnica (del ingeniero, el urbanista o el arquitecto), también
tendría lugar la visión de quienes habitan el territorio.
Como referente para la estimación del cambio de bienestar percibido por los moradores,
producto del desplazamiento involuntario que genera la ejecución de una obra pública, el
interesado puede revisar los siguientes casos de estudio, que si bien no abordan el objeto
de estudio antes citado62, son útiles en lo metodológico, toda vez que son ejercicios
prácticos de valoración económicas de bienes y servicios de no mercado:
Tabla 27. Estudios referentes
Estudio Fuente Descripción El valor de los espacios de interés natural en España. Aplicación de los métodos de la valoración contingente y el coste del desplazamiento
Riera, Descalzi, Ruiz, 1995 El objetivo del ejercicio fue obtener una estimación del valor recreativo obtenido por los visitantes a una zona de interés natural del Pirineo catalán, mediante la aplicación de los métodos de coste de viaje y valoración contingente
62 Con excepción del estudio de Ibañez y Vélez (2003); y el de Zuluaga (2004).
149
Estudio Fuente Descripción Forced displacement in Colombia: Causality and welfare losses
Ibañez y Vélez, 2003 En esta investigación se estima las pérdidas de bienestar de la población desplazada por fenómenos de violencia. En este estudio se presenta una aplicación de la medición del cambio en el bienestar en unidades monetarias mediante la variación compensatoria.
Desplazamiento y reasentamiento involuntario de población ¿cómo medir los impactos sobre el bienestar de los Hogares?
Zuluaga, 2004 En esta tesis de maestría mediante el método de valoración contingente, en el marco de una evaluación ex-post de un proceso de reasentamiento, la autora valora en términos económicos algunos atributos asociados a la vivienda.
Aplicación de valoración contingente y ordenación contingente a parques nacionales en Gran Canaria
Gonzales y león, 2003, citado por Labandeira et al., 2007, p.175
El objetivo de la aplicación fue comparar la valoración de diferentes atributos del paisaje por parte de turistas en la isla de Gran Canaria, durante su visita a la isla (recorrido turístico en autobús) y en el aeropuerto después de su visita. Se utilizaron los métodos de valoración contingente y la ordenación contingente.
Valoración económica de impactos ambientales de los proyectos de generación de hidroelectricidad: el caso del Salto del Buey, Colombia
Londoño, Correa, 2011 En este trabajo de valoración económica, el objetivo fue establecer el valor económico del impacto ambiental del proyecto hidroeléctrico sobre la pérdida de paisaje del entorno natural en el cual se establece. Así, se buscó valorar tanto la perdida de belleza escénica, como las
150
Estudio Fuente Descripción oportunidades de recreación actuales y potenciales, que se vinculan con el ecosistema que se va a afectar. La metodología de valoración económica que se utiliza para valorar los impactos que tendría el proyecto de la central hidroeléctrica sobre el Salto del Buey es mediante preferencias declaradas, específicamente una combinación del método de valoración contingente con el método de análisis conjunto.
An economic Approach to Giving “Equal Consideration” to Environmental Values in FERC Hydropower Relicensing
Loomis, J., & Feldman, M. 1995
En esta investigación se ilustra la valoración de bienes no mercadeables y se realiza un análisis sobre el flujo de agua económicamente óptimo, el cual tiene en cuenta el valor escénico de una cascada, para tomar decisiones sobre re-licenciamiento, utilizando los métodos de costo de viaje y valoración contingente.
Fuente: Elaboración propia con base en las fuentes relacionadas en la tabla Ahora, dado que el resultado de la aplicación de esta metodología, en una estudio ex-
ante, es obtener un monto de recursos que compense la pérdida de bienestar que
supondría el desplazamiento involuntario, se recomienda que dicho recurso
preferiblemente sea destinado a la formulación y ejecución de programas o proyectos
tendientes a la restitución o mejora de las condiciones de vida de los grupos familiares
reasentados. En este sentido, estos programas o proyectos, deben ser formulados
concertadamente con cada grupo familiar (diseñados a la medida), y podrán ir desde el
aporte complementario para la adquisición de la vivienda de reposición, hasta el
desarrollo de proyectos productivos. Se sugiere que dichos recursos no sean entregados
en efectivo (dinero liquido), puesto que de esta forma los beneficiarios podrían direccionar
151
dichos recursos a fines distintos al objetivo previsto: la restitución o mejora de sus
condiciones de vida.
En un estudio ex-post, es decir, en el marco de una evaluación del proceso de
reasentamiento de población, la aplicación de esta propuesta metodológica, permitiría
constatar si el reasentamiento cumplió su objetivo, es decir, si el reasentamiento evitó que
las condiciones de vida de la población desplazada por la obra pública, en el lugar de
acogida, no se vieron deterioradas. Similar, a lo planteado para el estudio ex-antes, el
resultado de la aplicación de la propuesta es la estimación de un monto de recursos que
compense la pérdida de bienestar que se generó con el desplazamiento involuntario. Se
recomienda que dicho recurso preferiblemente sea destinado a la formulación y ejecución
de programas o proyectos tendientes a la restitución o mejora de las condiciones de vida
de los grupos familiares reasentados.
A modo de cierre, es preciso destacar que si bien los supuestos de partida de los métodos
que el análisis económico ha propuesto para la valoración económica de bienes y
servicios de no mercado63, no están exentos de críticas y cuestionamientos, la esperanza
radica en que dichos métodos, rigurosamente empleados, proporcionen información allí
donde antes no existía. Para el caso de los procesos de reasentamiento de población por
obra de utilidad pública, se debe tener presente que la alternativa bien puede ser la toma
de decisiones de forma arbitraria, donde se continúe asignando un valor de cero (nulo) a
todo aquello que no tenga precio de mercado, práctica que conlleva a subestimar los
costos, y el impacto socioeconómico, que suscita la ejecución de la obra.
63 Como los bienes y servicios ambientales o el patrimonio cultural.
152
4 Conclusiones
El nuevo siglo trajo consigo una serie de cambios notables para Medellín. La ciudad enfila
esfuerzos para superar el periodo oscuro que atravesó, y se decanta por un modelo de
ciudad competitiva e innovadora, motivada por vincularse al mercado internacional y a
aprovechar todos los beneficios de la globalización. A partir de un importante esfuerzo, la
ciudad ha emprendido diversas políticas y programas para posicionarse hoy como una
ciudad abierta al mundo, atractiva, y con una amplia oferta de servicios. Dicho esfuerzo se
ha materializado en un conjunto de obras públicas (infraestructura vial, espacios públicos
y equipamientos, entre otros proyectos), tendientes a lograr esa ciudad deseada.
Con el actual Plan de Ordenamiento Territorial (acuerdo 48 de 2014) Medellín establece
un marco estratégico, una hoja de ruta, en función de la concreción del modelo de
ocupación definido en ese instrumento de planificación. La implementación del actual
POT, como se expuso antes, exige un conjunto de medidas para alcanzar las condiciones
físicas y funcionales requeridas, es decir, nuevas obras públicas tendientes a mejorar la
infraestructura de movilidad, la generación de nuevo espacio público, entre otros
desarrollos urbanísticos.
Ahora, si bien dichas intervenciones urbanas, propenden por generar beneficios a la
colectividad, estas también suscitan impactos negativos en los lugares donde se
construyen. Como se señalo antes, para la construcción de estas obras se hace necesario
adquirir predios e inmuebles, generando consigo, el desplazamiento involuntario de
población, el cual, es considero uno de los impactos más significativos, dadas sus
prolongadas y severas consecuencias (Cernea, 2001; Banco Mundial, 2001; Banco
Interamericano de Desarrollo, 1998 y 1999).
A partir de esta investigación, se identifica que en la ciudad de Medellín se han realizado
importantes avances sobre el tema de reasentamiento. Por un lado, el actual POT, en el
inciso 8 del artículo 5, tiene como uno de sus principios rectores la protección a
moradores. Este principio promueve un “ordenamiento territorial democrático e incluyente,
que le apueste a la población como centro de sus decisiones, y a su bienestar, como
objetivo principal” (Medellín, 2014c, p. 8). De otro lado, recientemente, en la ciudad se
formuló la Política Publica de Protección a Moradores Actividades Económicas y
153
Productivas (Alcaldía de Medellín, 2017). Dicha política, que actualmente se encuentra en
proceso de adopción, mediante la definición de enfoques, estrategias, procesos e
instrumentos; busca una comprensión y aplicación del ordenamiento territorial desde los
derechos (individuales y colectivos), el desarrollo humano y la participación.
No obstante, lo anterior, en la formulación y ejecución de obras de utilidad pública en la
ciudad, mayormente, ha primado una visión técnica desde lo físico-espacial. Bajo esta
lógica, en la ciudad de Medellín los procesos de reasentamiento poblacional, por lo
general, se han reducido a los procedimientos legales para adquirir el inmueble, la
postulación al subsidio municipal de vivienda y el reconocimiento de las compensaciones
definidas en los decretos municipales; dejando de lado aspectos valiosos de la realidad
territorial, a saber, aquellas condiciones propias del territorio, que benefician al morador,
en tanto contribuyen en la realización de su proyecto de vida.
Sobre este tema, la concepción del territorio como un espacio socialmente construido, a
través de un proceso histórico, permite entender que en la ejecución de obras públicas,
además de transacciones jurídicas y financieras en la compra de predios, se genera una
serie de cambios sociales y económicas en el lugar donde se emplaza la obra, y que para
muchos pobladores, dichos cambios se traduce en significativas pérdidas. Así pues, el
desplazamiento involuntario, es una acción disruptiva, que desestabiliza al individuo y a la
comunidad intervenida, porque se irrumpen las lógicas y dinámicas que con el tiempo se
habían gestado en el territorio.
Con base en el análisis de la experiencia Puente Madre Laura, se pudo constatar que los
habitantes del sector de Puerto Nuevo constituyeron formas estratégicas de usar el
conjunto de atributos del territorio. Con base en lo reportado por los actores territoriales
entrevistados, se identifica que, previo al desplazamiento involuntario, existía una relación
de dependencia entre el morador y su territorio, en la cual, los recursos dispuestos por el
territorio entraban a subsanar déficits o carencias de los grupos familiares. De esta forma,
el sector de Puerto Nuevo, por sus particularidades (físicas y sociales) y por su
localización relativa en la ciudad, ofrecía a los habitantes del territorio desplazados por la
obra, un conjunto de atributos que les posibilitaba tener una mayor capacidad de
respuesta frente a situaciones de necesidad e incertidumbre.
154
Teniendo en cuenta lo anterior, se identifica que el territorio dispone un conjunto de
condiciones que le son favorables al poblador que lo habita, en este sentido, en esta
investigación se plantea que el territorio es fuente de bienestar para quien lo habita. De
esta forma, el bienestar territorial se concibe como el conjunto beneficios que el territorio
ofrece a sus moradores para su subsistencia, o para la mejora progresiva de su situación
de vida. La noción de bienestar territorial, permite proponer un reasentamiento que se
fundamenta en la valoración que hacen los moradores de las particularidades de su
territorio (atributos territoriales). Esto significa proteger y restituir los beneficios (acceso a
bienes y servicios) que el territorio le genera al morador antes de ser desplazado por la
obra.
A partir de esta noción de bienestar territorial, se diseñó una propuesta metodológica para
evaluar los efectos que suscita el desplazamiento involuntario en razón a la ejecución de
una obra de utilidad pública. Esta propuesta metodológica, no sólo propende por un
análisis riguroso en términos de la caracterización socioeconómica del territorio a ser
intervenido, sino que además plantea cuantificar, con base en el método de valoración
contingente, el impacto en el bienestar de los grupos familiares desplazados
involuntariamente. Con esto se pretende mejorar la comprensión de los efectos del
desplazamiento involuntario sobre el bienestar del grupo familiar, lo cual es una
precondición para planificar adecuadamente los procesos de reasentamiento. Con esta
investigación se evidencia la importancia de que las obras públicas64 tengan una
comprensión y una gestión integral del territorio, lo cual debe verse reflejado en los
procesos y procedimientos a emplear en su ejecución, particularmente, en lo que refiere a
los procesos de reasentamiento.
En armonía con lo antes dicho, se insiste en que el reasentamiento de población debe
proteger o restituir en su totalidad las condiciones de vida de la población desplazada, es
decir, los beneficios y oportunidades dispuestos por el territorio. De no ser esto posible, el
reasentamiento debe compensar la disminución de bienestar territorial que percibe el
grupo familiar, por la pérdida de alguno de estos beneficios y oportunidades, como
consecuencia del desplazamiento involuntario. Esta compensación se estimaría con base
en los resultados de la valoración económica de los atributos territoriales.
64 Esto también aplica a otras intervenciones propuestas desde el ordenamiento territorial, como por ejemplo los planes parciales de renovación.
155
Sobre este aspecto, se recomienda que las medidas definidas en el marco del
reasentamiento deben centrarse en el fortalecimiento de las capacidades del grupo
familiar para afrontar el cambio, y en la generación de oportunidades económicas. Así, el
proceso de reasentamiento debe capacitar (formar) a miembros del grupo familiar en
oficios (labores) que les posibilite acceder a fuentes de ingresos. Esta capacitación
orientada al trabajo, debe ser en temas previamente concertados con el grupo familiar. De
igual forma, el reasentamiento debe ofrecer oportunidades económicas al grupo familiar,
bien sea en la consecución de un empleo formal, o en la formulación y puesta en marcha
de un proyecto productivo (emprendimiento).
Se insiste en que el reasentamiento debe proveer ambos aspectos (capacidades y
oportunidades), de faltar uno de estos seguramente el efecto de la medida no será el
esperado. En este sentido, si se brindan las oportunidades, pero el grupo familiar no tiene
las capacidades para aprovecharlas, es posible que no se concrete el beneficio. Similar a
lo antes planteado, si se brindan las capacidades, pero el grupo familiar no tiene los
medios económicos para establecer y sostener una unidad económica, o no pueden
acceder a una fuente de empleo; entonces estos no percibirían los beneficios de dicha
capacitación.
Es importante resaltar que, el ISVIMED es la institución designada para realizar los
reasentamientos de población en Medellín, sería la institución encargada de proteger el
Bienestar Territorial de la población reasentada. No obstante, dada la complejidad del
proceso de reasentamiento, se considera necesario una articulación institucional, es decir,
un trabajo mancomunado del ISVIMED con otras dependencias de la administración
municipal como la Secretaría de Inclusión Social, Familia y Derechos Humanos; la
Secretaría de Participación Ciudadana, la Secretaría de Educación y la Secretaria de
Desarrollo Económico; esto con el objetivo de realizar una intervención integral, es decir,
una intervención que atienda los múltiples aspectos de la vida humana que se afectan con
el desplazamiento involuntario.
Para finalizar, y con base en este ejercicio investigativo, se plantean las siguientes
proposiciones:
156
Siguiendo a lo planteado por el Banco Mundial (2001) y el Banco Interamericano de
Desarrollo (1998 y 1999), los desplazamientos involuntarios deben evitarse o reducirse al
mínimo, para lo cual deben estudiarse todas las opciones viables de diseño del proyecto.
Tal como se expuso en esta investigación, los efectos que genera el deslazamiento
involuntario son severos y prolongados, y si a eso se le adiciona que aún en la ciudad no
se tienen medidas de manejo para estos, más allá de la reposición de la vivienda y el
reconocimiento de compensaciones, es primordial evitar que se generen estos
desplazamientos de población.
También, retomando lo planteado por el Banco Mundial (2001) y el Banco Interamericano
de Desarrollo (1998 y 1999), se hace necesario que el reasentamiento de población en
Medellín se planifique como una oportunidad de desarrollo sostenible, que proporcione
recursos de inversión suficientes para que las personas desplazadas por el proyecto
puedan participar en los beneficios del mismo. El reasentamiento se debe plantear como
una forma de acompañamiento de la institución pública, más aún con las poblaciones
vulnerables (menor capacidad de respuesta ante el cambio), en orden no solo de
reestablecer, sino también de mejorar las condiciones de vida que dichos pobladores
tenían en los territorios de los que fueron desplazados. De esta forma, el reasentamiento
debe ser un proceso planificado, con una participación efectiva de la población
involucrada, en donde previa a la intervención se tengan definidas las medidas de manejo
para atender a la población afectada. Por esto, se considera que soluciones transitorias
como el programa de arrendamiento temporal, para los propietarios y poseedores
(inscritos o no) desplazados involuntariamente por la obra, debe ser una medida a
emplear solo en casos extraordinarios; la regla debe ser que la institución responsable del
reasentamiento, antes de que se genere el desplazamiento, esté en la capacidad de
ofrecer soluciones definitivas.
De otro lado, si bien la ciudad ha generado importantes esfuerzos consolidando procesos,
procedimientos y regulaciones relacionados con adquisición de predios, estrategias de
provisión de viviendas (nueva o usada) y compensaciones; aún en Medellín no existe una
orientación normativa clara y específica para emprender procesos de reasentamiento de
población. Así, las obras de utilidad pública en la ciudad se desarrollan en el marco de
leyes y decretos relacionados con la valoración financiera (avalúos) de los inmuebles a
adquirir, el reconocimiento de subsidio municipal de vivienda y el reconocimiento del daño
157
emergente y lucro cesante. Bajo este enfoque, se hace evidente una preocupación por la
adquisición y restablecimiento del bien físico sin mayor atención sobre las realidades
socioeconómicas y culturales de las comunidades intervenidas. Con base en lo anterior,
se requieren políticas públicas, marcos jurídicos y protocolos a nivel local, soportadas en
la normatividad internacional en derechos humanos. Sobre este respecto, el
reconocimiento del derecho a una vivienda digna en el ámbito internacional se configura a
partir del derecho a un nivel de vida adecuado recogido en el artículo 2565 de la
Declaración Universal de los Derechos Humanos (Naciones Unidas, 2015), y en el artículo
11 del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales- DESC-. De
esta forma, el derecho a una vivienda digna no solamente hace referencia al derecho de
toda persona de disponer de cuatro paredes y un techo donde encontrar refugio, sino
como el derecho a vivir en seguridad, paz y dignidad en un lugar determinado. El Comité
DESC ha desarrollado el contenido de este derecho en dos observaciones generales: la
Observación general numero 4 donde se concretan las condiciones que configuran el
carácter adecuado de la vivienda66; y la Observación general número 7 sobre desalojos
forzosos.
De otro lado, se hace necesario emprender mayores esfuerzos en comprender las
situaciones y condiciones territoriales del área de influencia del proyecto. Si bien cada
territorio es diferente y por consiguiente cada proceso de reasentamiento será diferente,
algo clave en todo proceso es:
una buena caracterización de la población a reasentar, que incluya como toda esa historia
de las familias en el territorio, la procedencia, de donde es la gente, como llego allí, y la red
de relaciones. Si los familiares viven en el mismo barrio o vereda, quienes son los amigos,
pertenecen a la organización comunitaria o no, el tema económico, político, organizativo,
educativo. Todos estos elementos nos permiten estudiar la vulnerabilidad de la familia. Lo
más importante es el ser humano y su contexto (Entrevista actor experto EPM, 2017).
65 “Toda persona tiene derecho a un nivel de vida adecuado que le asegure, así como a su familia, la salud y el bienestar, y en especial la alimentación, el vestido, la vivienda, la asistencia médica y los servicios sociales necesarios; tiene asimismo derecho a los seguros en caso de desempleo, enfermedad, invalidez, viudez, vejez y otros casos de pérdida de sus medios de subsistencia por circunstancias independientes de su voluntad” (Naciones Unidas, 2015, p. 52). 66 Se hace alusión a los criterios de: a) seguridad jurídica de la tenencia; b) gastos soportables, c) disponibilidad de servicios materiales e infraestructura; d) habitabilidad; e) accesibilidad; f) lugar y, g) adecuación cultural.
158
Así, es de suma importancia realizar estudios que permitan identificar los factores que
coadyuvan a construir atributos que les generan bienestar a los moradores, y también
identificar los factores que, por el contrario, constituyen atributos que afectan
negativamente ese bienestar.
En línea con lo planteado previamente, es recomendable que el responsable del
reasentamiento tenga en consideración si el grupo familiar a reasentar, antes de ser
movilizado, era beneficiario de algún programa de bienestar social en el territorio a
intervenir67. Quien emprenda el reasentamiento debe asegurar que el grupo familiar no
perderá el acceso a estos programas sociales, por lo que, deberá gestionar con las
instituciones y dependencias que fuese necesario, los trámites para que el grupo familiar
siga siendo beneficiario del programa o proyecto en el lugar de acogida. De no ser
posible, esta institución debe formular medidas de manejo para atender esta pérdida.
Otro aspecto a remarcar, en lo que refiere a la articulación de la institución pública el
marco del reasentamiento, es la importancia de que la Secretaría de Desarrollo
Económico de Medellín tenga un rol más activo, en términos del acompañamiento a las
unidades productivas durante el proceso de traslado y establecimiento en el lugar de
acogida. Este aspecto es clave, toda vez que las actividades económicas no han tenido
acompañamiento integral, más allá del reconocimiento de las compensaciones
estipuladas en los decretos municipales, cuando se ven desplazadas por una obra de
utilidad pública. Es preciso mencionar que ISVIMED, dado su objetivo misional y sus
competencias, no desarrolla esta labor.
En relación a lo anterior, la autoridad ambiental (Corantioquia o el Área Metropolitana del
Valle de Aburrá, dependiendo de la jurisdicción), cumplimiento de su objetivo misional,
debería tener una mayor incidencia en los procesos de reasentamiento de población, toda
vez que esta debe hacer control y seguimiento a los impactos que genera la obra. Así,
esta institución debería ser garante de que las condiciones de vida de la población sujeto
de reasentamiento no desmejoren. De forma equivalente, es aconsejable que la
Contraloría General de Antioquia, en cumplimiento de su objetivo misional, haga
seguimiento y control a los programas y proyectos definidos para garantizar que no se
67 Buen comienzo, jardín infantil, Ser Capaz en Casa, Subsidio de adulto mayor u otros programas similares provistos por la institución pública u ONG.
159
desmejoren las condiciones de vida de la población afectada por una obra de utilidad
pública.
Finalmente, si bien el Observatorio de Reasentamientos y Movimientos de Población
(2016) realizó una investigación sobre aprendizajes institucionales en torno al
reasentamiento de población, se hace necesario que en la ciudad, especialmente la
institucionalidad pública, se emprendan estudios para la evaluación de la eficacia de los
procesos de reasentamiento, es decir, evaluaciones ex–post de estos procesos. Esto es,
corroborar si se cumplió el objetivo del reasentamiento: dejar en mejores o iguales
condiciones a la población desplazada involuntariamente por la obra pública.
160
5 Referencias bibliográficas Aedo, C. (2005). Evaluación de impacto. Series manuales 47. Recuperado el 27 de abril
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medir el impacto sobre el bienestar de los hogares?. Tesis de Maestría. Bogotá: Universidad de los Andes.
169
6 Anexos Anexo No 1. Actores entrevistados
Actor entrevistado Perfil del entrevistado Fecha de la entrevista Nombre
Académico 1 Profesora de la Escuela de Hábitat, Facultad de Arquitectura, Universidad Nacional de Colombia, sede Medellín.
24/05/17 Mónica Mejía Escalante
Académico 2 Profesora de la Escuela de Hábitat, Facultad de Arquitectura, Universidad Nacional de Colombia, sede Medellín.
17/04/17 Elizabeth Arboleda
Académico 3 Profesora de la Escuela de Construcción, Facultad de Arquitectura, Universidad Nacional de Colombia, sede Medellín.
18/04/2017 Gilda Wolf
Académico 4 Profesora de la Escuela de Arquitectura y Urbanismo, Universidad Nacional de Colombia, sede Manizales.
19/06/17 Anne Catherine Chardon
Académico 5 Profesora de la Escuela de Planeación Urbano Regional, Facultad de Arquitectura, Universidad Nacional de Colombia, sede Medellín.
Varios encuentros Análida Rincón Patiño
Institucional 1 Profesional ISVIMED 2/06/17 Astrid Castañeda
Institucional 2 Profesional Departamento Administrativo de Planeación, Alcaldía de Medellín
18/07/17 Sergio Jaramillo
Institucional 3 Directora de Gestión Social EDU
26/04/17 Margarita María Rivera Motato
Institucional 4 Profesional Metro de Medellín
31/05/17 Edinson Escobar
Institucional 5 Profesional Secretaría de Infraestructura Física, Alcaldía de
22/05/17 Rodrigo Castaño
170
Actor entrevistado Perfil del entrevistado Fecha de la entrevista Nombre
Medellín Institucional 6 Profesional Metroplús 25/04/17 Margarita Marín Experto 1 Profesionales EPM.
Ambos tienen experiencia en procesos de reasentamiento de población.
5/06/17 Iván Darío Pineda Londoño y Ana María
Sandoval Sastre.
Experto 2 Profesional de la Corporación Antioquia Presente
2/05/17 Elsa María Monsalve Sánchez
Experto 3 Fundador Corporación Convivamos
18/05/17 Miguel Tamayo
Experto 4 Profesional social, con experiencia en procesos de reasentamiento. Hizo parte del equipo de trabajo de la Gestión Social, de Metroplús. También hizo parte del equipo profesional que participó en la formulación de la Política Pública de Protección a Moradores y Actividades Económicas y Productivas.
25/04/17 Eliana Zuluaga Bedoya
Territorial 1 Coordinadora de la veeduría del Puente de la Madre Laura y actualmente la directora ejecutiva de la Corporación Vicente Mejía.
15/02/18 Idalmy Marcela Álvarez Pérez
Territorial 2 Presidenta de la Junta de Acción Comunal del Barrio Palermo.
27/12/17 María Edith Madrigal
Territorial 3 Habitante del sector de Puerto Nuevo, impactada por la obra. 8 años vivió allí. 33 años de edad. Arrendatario, hoy en día reside en San Isidro.
28/12/17 Lina María Agudelo
Territorial 4 Habitante del sector del Hueco, impactada por la obra. 49 años vivió allí. 52 años de edad. Poseedor, hoy en día vive en Palermo.
28/12/17 Maribel Giménez Blanco
171
Actor entrevistado Perfil del entrevistado Fecha de la entrevista Nombre
Territorial 5 Habitante del sector del Hueco, impactada por la obra. 40 años vivió allí. 50 años de edad. Poseedor, hoy en día vive en Palermo.
28/12/17 María Edith Giménez Bustamante
Territorial 6 Habitante del sector de Puerto Nuevo, impactado por la obra. 7 años vivió allí. 63 años de edad. Arrendatario, hoy en día reside en San Isidro.
28/12/17 Horacio de Jesús Agudelo Hoyos
Territorial 7 Habitante del sector de Puerto Nuevo, impactado por la obra. 9 años vivió allí. 72 años de edad. Era propietario y hoy en día reside en la Huerta (Ciudadela Nuevo Occidente)
9/02/18 Frank Ernesto Alvares Cardona
Territorial 8 Habitantes del sector de Puerto Nuevo, impactados por la obra. 7 años vivieron allí. 55 y 54 años de edad. Eran propietarios y hoy en día residen en la Huerta (Ciudadela Nuevo Occidente)
10/02/18 Ruth Cano y Héctor Darío Rojas (cónyuges)
172
Anexo No 2. Formato de entrevistas a los actores institucionales
UNIVERSIDAD NACIONAL DE COLOMBIA, SEDE MEDELLÍN
MAESTRÍA EN ESTUDIOS URBANO REGIONALES TRABAJO DE CAMPO: Preguntas orientadoras
Pablo Andrés Barrera Bolaños _______________ de 2017
Instituciones públicas
1. Desde su experiencia ¿qué apreciación tiene sobre los procesos de reasentamiento que se ha desarrollado su institución?¿Cuáles han sido las mayores dificultades? ¿en qué se ha fallado?
2. Desde su conocimiento y experiencia ¿Qué aspectos del territorio son los
más importantes para sus moradores? ¿Qué hace que el morador permanezca en su territorio? ¿Qué lo motiva a permanecer allí?
3. Previo a una obra de desarrollo por lo general se realizan estudios sobre la
comunidad que será impactada por las obras ¿En que consiste este estudio? ¿Qué temas o variables se analizan?
4. ¿Cómo es utilizada esta caracterización para definir los programas y
proyectos de reasentamiento?
5. ¿Cómo evaluaría los estudios (caracterizaciones) socio-económicos previos a la intervención? ¿Son adecuados, tienen fallas?
6. ¿Qué aspectos se deben considerar para mejorar estos estudios? ¿por
qué? GRACIAS …
173
Anexo No 3. Formato de entrevistas a los actores académicos
UNIVERSIDAD NACIONAL DE COLOMBIA, SEDE MEDELLÍN
MAESTRÍA EN ESTUDIOS URBANO REGIONALES TRABAJO DE CAMPO: Preguntas orientadoras
Pablo Andrés Barrera Bolaños _________________ de 2017
Académicos
7. Desde su experiencia ¿qué apreciación tiene sobre los procesos de reasentamiento que se han llevado a cabo en la ciudad?¿Cuáles han sido las mayores dificultades? ¿en qué se ha fallado?
8. Desde su conocimiento y experiencia ¿Qué aspectos del territorio son los
más importantes para sus moradores? ¿Qué hace que el morador permanezca en su territorio? ¿Qué lo motiva a permanecer allí?
9. Previo a una obra de desarrollo por lo general se realizan estudios sobre la
comunidad que será impactada por las obras ¿Cómo evaluaría los estudios (caracterizaciones) socio-económicos previos a la intervención? ¿Son adecuados, tienen fallas?
10. ¿Qué aspectos se deben considerar para mejorar estos estudios? ¿por
qué? GRACIAS…
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Anexo No 4. Formato de entrevistas a los actores expertos
UNIVERSIDAD NACIONAL DE COLOMBIA, SEDE MEDELLÍN
MAESTRÍA EN ESTUDIOS URBANO REGIONALES TRABAJO DE CAMPO: Preguntas orientadoras
Pablo Andrés Barrera Bolaños _________________ de 2017
Expertos
1. Desde su experiencia ¿qué apreciación tiene sobre los procesos de reasentamiento que se han llevado a cabo en la ciudad?¿Cuáles han sido las mayores dificultades? ¿en qué se ha fallado?
2. ¿Qué aspectos del territorio son los más importantes para sus moradores?
¿Qué hace que el morador permanezca en su territorio? ¿Qué lo motiva a permanecer allí?
3. Previo a una obra de desarrollo por lo general se realizan estudios sobre la
comunidad que será impactada por las obras ¿En que consiste este estudio? ¿Qué temas o variables se analizan?
4. ¿Cómo es utilizada esta caracterización para definir los programas y
proyectos de reasentamiento?
5. ¿Cómo evaluaría los estudios (caracterizaciones) socio-económicos previos a la intervención? ¿Son adecuados, tienen fallas?
6. ¿Qué aspectos se deben considerar para mejorar estos estudios? ¿por
qué? GRACIAS
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Anexo No 5. Formato de entrevistas a los actores territoriales
UNIVERSIDAD NACIONAL DE COLOMBIA, SEDE MEDELLÍN MAESTRÍA EN ESTUDIOS URBANO REGIONALES
TRABAJO DE CAMPO: Preguntas orientadoras Pablo Andrés Barrera Bolaños
Actores Territoriales Fecha: __________________________ A. IDENTIFICACIÓN� Nombre entrevistado:� ______________________________ Edad: ________________ Barrio/ sector (comuna) donde vivía antes: __________________________________ Barrio/ sector (comuna) de residencia actual: _______________________________ B. EL ANTES
1. Cuénteme ¿cómo llega a ese barrio?
2. ¿Qué significa para usted ese barrio?�
3. ¿Cuánto tiempo vivió en ese barrio? Con quiénes vivía?
4. ¿Cómo construyó o consiguió su vivienda? ¿Qué modificaciones le realizó?
5. ¿Cómo era su vida en el lugar de residencia anterior?�
6. ¿Qué actividades realizaba en el barrio? (trabajo, estudio, recreación, actividades religiosas, actividades comunitarias, …)
7. ¿Participaba usted, o alguno de su grupo familiar, en alguna organización
comunitaria? (Asociación de padres de familia, Corporaciones, Juntas administradoras locales, Asociaciones de mujeres, Grupos juveniles, Veedurías ciudadanas, Junta de acción comunal, Clubes del adulto mayor, Asambleas barriales, Consejos comunales de presupuesto participativo, Comités de participación comunitaria en salud – COPACOS, Comités barriales de emergencia - CBE, Comités educativos de prevención atención de desastres COPADES, Comité empresariales de gestión de riesgo, Organizaciones de base para comunidades negras-afrodescendientes, Organizaciones indígenas o Grupos religiosos.)
8. ¿Qué era lo que más le gustaba de su vivienda?�
9. ¿Qué no le gustaba de su vivienda?�
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10. ¿Qué era lo que más le gustaba de su barrio u entorno?�
11. ¿Qué no le gustaba de su barrio u entorno?�
12. ¿Vivía usted cerca de familiares? ¿Cómo era la relación con ellos?
13. ¿Cómo era la relación con sus vecinos?
14. ¿Era usuario de algún programa social en ese barrio? (Buen comienzo, jardín infantil, Ser Capaz en Casa, u otro programa similar de la institución pública u ONG)
C. EL AHORA
1. Cuénteme ¿Cómo llega a este barrio (sector) donde vive actualmente?
2. ¿Por qué lo escoge?�
3. ¿Cuánto tiempo lleva viviendo en esta nueva vivienda?�
4. ¿Qué modificaciones le ha realizado a su nueva vivienda? ¿Por qué?�
5. ¿Cómo le parece vivir en este barrio (sector)? ¿Qué es lo que más le gusta y qué le disgusta?�
6. ¿Qué le hace falta del barrio y de la vivienda anterior?
7. ¿Recibió usted acompañamiento para salir de su antigua vivienda y
localizarse en esta nueva vivienda? ¿quién le brindo el acompañamiento? y ¿cómo se dio?
8. Cuénteme ¿cómo ha cambiado su vida con este traslado? ¿En qué le ha
favorecido o perjudicado a usted este cambio de residencia?
9. ¿Cómo ve su futuro y el de su familia? GRACIAS …