Post on 07-Jan-2020
HUERTO URBANO ECOLÓGICO (PEQUEÑ@S AGRICULTORES/AS)
Máximo Píriz Vidígal.
INTRODUCCIÓN:
“¿Pasado mañana voy al cole?” “¿Hoy ya es pasado mañana?” aaaaaa el lunes.
Seguramente estas sean las frases más repetidas, de la mayoría de las niñas y niños que
están a punto de comenzar de nuevo las clases, o “el cole” como ellos/as lo llaman. El
reencuentro con antiguos/as compañeros y compañeras de juegos, risas, aprendizaje, y sobre
todo de amigos y amigas, produce un estado de nervios en los pequeños/as, bastante
saludable, ¡sienten! Objetivo conseguido.
HUERTO URBANO ECOLÓGICO.
Es más práctico sembrar poco y cuidar mucho, que sembrar mucho, y por consiguiente, tirar
mucho, o que se lleguen a estropear las distintas variedades de siembra que tengamos. Unos
40 metros cuadrados de superficie, nos serian los suficientes para alimentar de verduras y
hortalizas, a unas 15 o 16 personas, durante todo un año. Tenemos que tener en cuenta, que
nuestro huerto es una casa sin techo, por lo cual está expuesto a las distintas inclemencias del
tiempo, aguas en abundancia, temperaturas extremas tanto las muy elevadas como las bajo
cero, pedrisco, etc. Incluso la propia naturaleza, puede llegar a ser nuestro enemigo debido a
las diferentes plagas que se pueden llegar a dar, insectos, hongos, bacterias, e incluso
pequeños mamíferos y aves nos pueden echar a perder nuestro huerto, de ahí que cuidemos
más y sembremos menos. Solo así, conseguiremos ser más eficientes y respetuosos con la
naturaleza y el medio ambiente, lo que se transformara en una vida más sana para todos/as.
El mes de Septiembre es el apropiado para la siembra de muchos productos. Los cuales se
recogerían sus frutos, bien en invierno, bien en la primavera. Cebolla temprana, Coles de
Primavera, Escarola de invierno, Lechuga, etc., son algunos de los productos que ya podríamos
empezar a sembrar. Pero no comencemos la casa por el tejado.
1ª FASE (PREPARAR LA TIERRA)
Preparar la tierra de nuestro Huerto Urbano Ecológico, no tiene porque ser aburrido.
Aprenderemos a utilizar las distintas herramientas de labranza, para poder realizar las labores
adecuadas a la tierra, de donde más tarde crecerán nuestras ricas verduras y hortalizas. Incluso
será un buen ejercicio, para fomentar el compañerismo y el trabajo en grupo que nos
acompañara durante toda esta nueva experiencia.
• Eliminar la maleza y todo tipo de elementos extraños que encontremos en la superficie a
utilizar.
Las malas hierbas impedirán, el normal crecimiento de nuestras verduras y hortalizas. Como
pretendemos cultivar un huerto lo más ecológico posible, tendremos en cuenta hacer una
buena limpieza manual de estas hierbas, de esta manera evitaremos que sus semillas se
vuelvan a reproducir de mayor forma, aunque es inevitable que salgan algunas. Para
conseguirlo con el menor esfuerzo posible, será imprescindible un riego un día u dos antes (por
aspersión o encharcamiento) de comenzar la tarea, así las conseguiremos arrancar de raíz,
con mayor facilidad. Siempre podríamos utilizar una azada, para aquellas malas hierbas que se
nos resistan.
• Aprovechando que la tierra mantiene humedad del riego que le hemos dado, comenzaremos
a airear y mullir la tierra.
Con una azada, pala de cavar, o motocultor, llevaremos a cabo la tarea de airear la tierra.
Conviene removerla entre 20 y 25 cm. de profundidad. El motocultor, debido a sus reducidas
dimensiones, es un útil que no consume combustible en demasía, con lo que contamina poco,
pero nos serviría de una ayuda rápida y eficaz en esta tarea. Repetimos la tarea con la o las
herramientas que antes hemos utilizado, y volteamos de nuevo a la tierra. Si hay demasiados
terrones, será señal que la tierra está bastante seca o humedad, lo solucionamos de la mejor
manera posible, bien regando de nuevo, o si está demasiado humedad por exceso de riego o
por las recientes lluvias, dejaremos la tierra unos días de oreo, dependiendo de los factores
climatológicos.
Algunas imágenes orientativas de las distintas herramientas que podríamos utilizar.
Azada. Rastrillo.
Motocultor (Mula mecánica) Pala de cavar.
• Allanar la tierra de nuestro huerto, será nuestro próximo paso.
Consiste en dejar la tierra llana para la siembra. Uno de los aspectos más relevantes sería
eliminar los terrones de tierra compactada que se forman con la tarea anterior. Para
deshacerlos hay que mojarlos abundantemente y dejarlos con humedad hasta el día siguiente.
Si hay que golpear, mejor hacerlo con la parte trasera de la azada. La superficie que vayamos
a utilizar debe de quedar llana y la tierra con una textura suave.
Las tareas de allanado y labrado, pueden llegar a ser fatigosas si la tierra no estuviese en su
punto de humedad conveniente.
2ª FASE (ABONADO)
• La fertilización de la tierra es esencial y consiste en incorporar materia orgánica suficiente
para la nutrición de las plantas.
Al ser un huerto ecológico, utilizaremos fertilizantes orgánicos. Los más comunes y
económico son: El estiércol, y el compost. Tenemos que tener en cuenta que estos
fertilizantes son de acción más lenta, ya que el nitrógeno se libera más despacio, pero son
beneficiosos para esponjar la tierra, sobre todo el compost. Con una par carretillas de
estiércol o compost, será más que suficiente para abonar nuestro huerto. Con la ayuda de un
rastrillo o azada, haremos labor de nuevo para enterrar el abono. En el mercado también
encontraremos otros tipos de fertilizantes, más o menos ecológicos, con estos siempre
seguiremos las indicaciones del fabricante a la hora de aplicarlos.
3ª FASE (DELIMITAR POR ZONAS DE CULTIVO)
• Tener claro en qué lugar irá cada cultivo, es muy importante para conseguir buenos
resultados. El hecho de ir alternando los distintos productos, nos favorecerá a lo largo del
tiempo. Ya que unos se alimentaran de los nutrientes de los otros. Las plantas aromáticas,
culinarias, medicinales y ornamentales, nos protegerán nuestros productos de plagas invasoras
y contraproducentes a los mismos. Asimismo darán un toque de hermosura e incluso podrán
servir como vallas naturales.
A
r
Verduras (Lechuga, escarola)
C
e
b
o
l
l
a
A
J
O
S
Patatas.
Tubérculos.
Patatas.
Aromáticas.
Ornamentales. o
m
Verduras (Coles, repollos, brócoli) Aromáticas.
Culinarias.
a
t
Verduras (Habas, guisantes)
i
c
Hortalizas (Zanahorias, rabanos)
Puerta.
Pasillo.
Pasillo.
A
R
o
m
Tomates (Multiples variedades)
A
r
o
m
Melones.
Sandias.
Medicinales.
a
t
Pimientos (Rojo, verde, amarillo)
a
t
Calabacín.
Calabaza.
Aromáticas.
Ornamentales. i Berenjenas. i
•La planificación de nuestro huerto es esencial para un buen desarrollo del mismo, estos
productos y su colocación son solamente orientativos, siempre tendremos en cuenta las
dimensiones del terreno que vayamos a utilizar, posibles bocas de riego, etc.
•Situaremos las plantas aromáticas, culinarias, ornamentales y medicinales, algo aisladas del
resto de cultivos, ya que muchas de ellas se reproducen con bastante facilidad a través de sus
raíces (tallos subterráneos) y podrían llegar a convertirse en plantas invasoras de los demás
productos. Por otra parte, estas plantas no necesitan de un suelo tan rico en nutrientes. Un
consejo para que no se reproduzcan más de lo que realmente queramos, será plantarlas
directamente con su maceta, así siempre las tendremos ubicadas en el trozo de parcela que le
corresponde.
4ª FASE (TIPOS DE SIEMBRA)
• Los tipos de siembra, Llano, Surco o Caballón.
Llano: Se suele realizar donde no hay problemas de suministro de agua, encharcando la zona.
Tiene el inconveniente que el terrero se aprieta y no sería beneficioso para las hortalizas de
raíz como la zanahoria, lechugas, coles…
Surco y Caballones: Se realiza amontonando tierra en líneas para su cultivo. Este tipo de
siembra, nos será beneficiosa para el enraizamiento de las plantas y para que la humedad en
la tierra nos aguante más tiempo, ahorrando agua con ello. Las distintas plantas que
sembremos en surcos o caballones, tendrán un mejor desarrollo, ya que aprovecharan más y
mejor los distintos nutrientes de la tierra. Sera muy beneficioso a la hora de sembrar
productos, el cual su fruto se cría bajo tierra, zanahorias, patatas, rábanos, etc. Al estar mullida
la tierra, su desarrollo será mejor y de mayor tamaño.
Algunas imágenes orientativas de la siembra en surco o caballón.
• Para realizar estas tareas, utilizaremos los distintos útiles de labranza que nos sean
necesarios. Siempre que trabajemos tanto con herramientas manuales como mecánicas,
tendremos muy en cuenta el posible riesgo de accidente, por lo cual tomaremos las medidas
de seguridad adecuadas para tales efectos, utilizando siempre los equipos de protección
individual y extremando las precauciones colectivas. Ni que decir tiene, que en el caso de
utilizar algún tipo de pesticida, estos serán aplicados por personal altamente cualificado.
5ª FASE (SIEMBRA)
CALENDARIO DE SIEMBRA Y RECOLECCIÓN.
Cultivo Época de siembra Marco Recolección Profundidad
de siembra
Observaciones
Perejil Todo el año 10-5
cm
50 días 0’5 cm Aromática y culinaria
Tomate Febrero-Mayo 50-30
cm
150 días 5-8 cm * Hortaliza (*fruta)
Pimiento Febrero-Abril 50-40
cm
150 días 5-8 cm * Hortaliza (*fruto)
Lechuga Todo el año 70-20
cm
90-120 días 5-8 cm * Verdura
Coles Septiembre-
Noviembre
60-40
cm
150 días 5-8 cm * Verdura
Habas Septiembre-
Noviembre
50-30
cm
120 días 3-4 cm Verdura (legumbre)
Ajo Octubre-Enero 20-20
cm
Junio-Julio 2-4 cm Verdura (Bulbo)
Zanahoria Marzo-Octubre 20-5
cm
120 días 1-2 cm Verdura (raíz)
Calabaza Marzo-Abril 120-60
cm
120 días 2-3 cm Verdura (*fruto)
Calabacín Marzo-Abril 120-60
cm
120 días 2-3 cm Verdura (*fruto)
Melón Abril-Mayo 100-50
cm
120 días 1-2 cm Fruta de verano
Sandia Abril-Mayo 100-50
cm
120 días 2-3 cm Fruta de verano
• Estos productos son solamente orientativos, el calendario de siembra es mucho más extenso.
6ª FASE (PLANIFICACIÓN DE RIEGO)
• La planificación del riego para nuestro huerto es sumamente importante. Tenemos a nuestro
alcance muchos tipos de riego, mediante aspersión, goteo, a pie… La mejor forma de ahorrar
agua, algo muy importante, sería mediante goteo. Tan solo necesitaríamos de una serie de
gomas preparadas para tal efecto. Aunque el riego a pie, tampoco nos vendría mal en esta
actividad que queremos desarrollar.
Para el riego mediante goteo, necesitaríamos una serie de gomas preparadas para ello. Estas
gomas van perforadas, dejando una distancia de unos 2-3 centímetros entre agujero y agujero,
consiguiendo así un riego eficaz y responsable.
El riego a pie, se trata de inundar el espacio que queda libre entre surco y surco. Prestándole
la suficiente atención, será una buena forma de mantener nuestros cultivos en forma.
Goteo. A pie.
• El riego se efectuara siempre, en las primeras horas del día o en las últimas de la tarde. Un
exceso de riego, será más contraproducente que la falta de agua. Un buen síntoma para saber
con certeza que nuestro huerto está en condiciones óptimas de humedad, es poner la palma
de la mano en la tierra, al levantarla traeremos con nosotros tierra pegada a ella si está en
buenas condiciones de humedad. Un síntoma ineludible de falta de riego, es cuando nuestras
verduras y hortalizas se ven caídas y flácidas, la solución es únicamente darle un riego
generoso y volverán a coger su forma original. Un exceso de riego, puede llegar a ser el
causante de enfermedades tales como el Oídio o Mildiú e incluso ser afectadas de Roya.
7ª FASE (CUIDADOS Y MANTENIMIENTO)
• Todos los cuidados que le demos a nuestro huerto serán pocos, y su mantenimiento será
constante, siempre tendremos trabajo en él.
Estaremos pendientes de ir eliminando cualquier mala hierba que nazca entre nuestros
cultivos, y estaremos muy atentos a las posibles plagas. Las plagas variaran según sea el tipo de
cultivo, aunque muchas de ellas coincidirán.
Una de las tareas de mantenimiento que realizaremos muy a menudo, será el escardado y en
algún otro cultivo el entresacado.
Al tratarse de un proyecto lo mas ecológico posible, intentaremos no utilizar productos
fitosanitarios (pesticidas). En el caso que fuese necesario algún tipo de tratamiento plaguicida
siempre se efectuara tomando las precauciones adecuadas, respetando las cantidades y plazos
de seguridad que marque el fabricante, así como su manipulación sea por personal altamente
cualificado a tales efectos.
• Para preservar la calidad del suelo de nuestro huerto, llevaremos a cabo la escarda del
mismo. Esta técnica será beneficiosa ya que el escardado, facilita la absorción del agua y el
aprovisionamiento de las raíces, además de impedir el riesgo de evaporación de agua. Por otro
lado, la escarda también permite la eliminación de maleza que se pueda dar entre nuestro
cultivo. La escarda será menos dificultosa de hacer, con el terreno húmedo, bien
aprovechando el riego, bien después de lluvias.
• De igual manera, el entresacado (desbaste) del producto nos será beneficioso para un mayor
éxito como hortelanos. Esta técnica se le aplicara a todos los cultivos, que por demasía de
semillas en la siembra se nos hayan multiplicado más de lo deseado. Por ejemplo, el cultivo de
la zanahoria es necesario entresacar el sobrante, para que las que queden en la tierra crezcan
con facilidad sin problemas de espacio. Este entresacado se hará cuando el producto sea bien
visible (5-8 cm de altura), dejando unos 5 centímetros entre una pieza y otra.
• Plagas. Serán unos inquilinos habituales y molestos en nuestro huerto. Las plagas se pueden
combatir de diversas formas, nosotros, intentaremos ser lo más respetuosos con el medio
ambiente y sobre todo con nuestra salud, ya que somos lo que comemos.
A continuación veremos posibles remedios ecológicos y otros no tanto, que nos servirán de
ayuda para terminar o prevenir con futuras plagas.
PLAGAS MÁS COMUNES Y POSIBLES TRATAMIENTOS.
La palabra “plaga”, en la agricultura se refiere a todos los animales, plantas y microorganismos
que tienen un efecto negativo sobre la producción agrícola. Las plagas prosperan si existen una
fuente concentrada y fiable de alimento, y las medidas que se utilizan normalmente para
aumentar la productividad de los cultivos (por ejemplo, el monocultivo de las variedades de
alta producción, el cultivo múltiple mediante la reducción o eliminación de los suelos
descansados, el uso de los fertilizantes, etc.) crean un ambiente favorable para las plagas. Por
eso, en cualquier agro sistema efectivo, se requiere el manejo inteligente de los problemas de
las plagas.
• El Pulgón o “piojo” como es denominado vulgarmente, se instalan en el envés de las hojas,
formando colonias siendo ahí su punto de ataque. Son muy perjudiciales para un huerto,
porque pican con su estilete las hojas y los tallos de nuestras plantas, alimentándose de la
sabia de la misma. Esto puedo provocar que la planta crezca mucho menos y aparte esa herida
abierta, puede ser una ventana para que entren otras enfermedades al cultivo. El pulgón a
través de su aparato bucal extrae el jugo de la planta como hemos dicho con anterioridad,
produciendo los siguientes síntomas:
Deformación en hojas, se amarillean, se arrugan y se secan.
Transmisión de enfermedades víricas.
Colonia de pulgones o “piojos”
Para combatirlos hay múltiples remedios, como el purín de ortiga o el azufre, pero también se
puede utilizar otros insectos beneficiosos como las mariquitas, que se encargaran de comerse
a los pulgones.
Mariquita.
Un remedio casero, ecológico y al alcance de cualquiera, sería una mezcla entre jabón de
potasa (droguerías especializadas) diluido en un difusor con agua, con una proporción de 10 gr
de jabón de potasa por cada litro de agua. Una vez realizada la mezcla, tan solo tendríamos
que agitar el recipiente hasta conseguir espuma y aplicarlo al cultivo. Pasadas unas semanas
desde su aplicación, los resultados serán unas plantas más fuertes, grandes y limpias de
pulgón. La tarea se puede repetir cuantas veces sea necesaria.
•••
• El Gusano gris no es más que la larva de muchas variedades de mariposas nocturnas
(polillas). Son de un color pardo-grisáceo, gordo, que comen raíces, tallos y hojas jóvenes por
la noche. Pudiendo llegar a alcanzar los 4 centímetros de longitud, es un peligroso devorador
sobre todo de plantas jóvenes de lechuga, col, zanahorias, entre otros cultivos, y difícil de
terminar con él, de una forma ecológica. Se pueden llegar a ver durante el día, desenterrados y
enrollados sobre sí mismos. Prefiere las zonas húmedas porque se facilita su tarea de
excavación. El gusano gris al igual que el pulgón, deja unos signos de evidencia fáciles de
detectar:
Pequeños o grandes agujeros irregulares en las hojas.
Ausencia de las mismas.
Presencia de pequeñas mariposas blancas entorno a la planta.
Gusano gris. Col infectada por Gusano gris.
Su control resulta difícil para el productor ecológico. La prevención será un buen remedio a
esta plaga. Limpiemos de maleza la zona a cultivar, para así eliminar los huevos que pueda
haber y por consiguiente el desarrollo de este gusano. Sembremos flores (Caléndula) para
atraer a otros insectos beneficiosos como las avispas para que parasiten en los gusanos.
Durante el cultivo, la forma más eficaz de combatir esta plaga, seria cubrir el producto con una
tela transpirable para evitar que las polillas pongan sus huevos. Por suerte, en el mercado
contamos con algunos insecticidas orgánicos para combatir al Gusano gris, con el gasto
añadido de tener que comprarlos. Estos insecticidas son; Bacillus thuringiensi. Se aplica a las
hojas, cuando el gusano se las come, el Bacillus entra en el sistema digestivo del gusano
provocando primero la falta de apetito en él. Acto seguido, el Bacillus libera una proteína en
forma de pequeños cristales que hacen que el gusano muera. Aceite de Neem. Este aceite
funciona de forma distinta. Tiene un componente que se llama Azadiractina, cuando el insecto
se come la hoja, esta bloquea el sistema hormonal del insecto, impidiendo que coma, se
reproduzca y provocando su posterior muerte. Hay que decir que estos insecticidas orgánicos
son solamente efectivos si el insecto come la hoja tratada, es decir, si el gusano esta en el
interior del repollo, col o lechuga, será inútil. Otros remedios:
Rociar semanalmente con un repelente hecho a base de ajo y chile picante. Ingredientes de
esta fórmula. 6 dientes de ajo, 1-2 chiles picantes o en su defecto cayenas, para un litro de
agua. Se tritura en la batidora y se deja macerar durante 24 horas. Este repelente no matara a
los gusanos, pero si hará que no coman las hojas tratadas. (Este repelente, incluso nos servirá
contra perros o gatos juguetones)
Cuando veamos hojas taladradas, será un indicio evidente de una plaga de gusanos. Podemos
escardar la tierra alrededor de la planta hasta dar con ellos y matarlos. Incluso la suelta de
gallinas en nuestro huerto, para que terminasen con ellos y de paso darse un festín.
Si no nos quedase mas remedio, por riesgo a perder nuestra cosecha, se podrían utilizar
plaguicidas como el Clorpirifos, siguiendo las instrucciones del fabricante y extremando las
precauciones de su uso. Estas fumigaciones siempre serán llevadas a cabo por personal
especializado.
•••
• Oruga de la patata. La oruga de la patata es de color verde, con líneas blancas transversales
que forman anillos. Se alimentan de las hojas de las patatas provocando agujeros y
mordeduras sobre éstas. Además también pueden atacar la raíz por lo que puede destruir la
planta por completo. Sabremos que nuestro cultivo estará siendo atacado cuando:
Pequeños o grandes agujeros en las hojas.
Mal formaciones en las hojas.
Al igual que el Gusano gris, esta oruga tiene mal remedio ecológico. Por lo tanto podríamos
utilizar los ya mencionados con anterioridad.
Plaguicidas: Deltrametrin.
•••
• Mosca blanca. La Mosca blanca la encontraremos en muchos de nuestros cultivos, pero
sobre todo se dará en plantaciones de tomate y pimiento. Formaran colonias en el envés de las
hojas. Puede causar daños directos e indirectos a nuestro cultivo. Proliferación de negrilla
sobre la melaza producida por la alimentación, manchando y despreciando los frutos y
dificultando el normal crecimiento de las plantas. Algunos de sus síntomas serian:
Amarilleamiento de la hoja.
Enrollamientos de las hojas y tallo.
Retraso en el crecimiento de la planta.
Perdida de hojas y muerte de la planta.
Mosca blanca (aumentada) Cientos de Moscas blancas.
Para combatir la Mosca blanca, podemos utilizar de nuevo el preparado de jabón de potasa
que utilizamos contra el Pulgón. También se puede utilizar la lucha biológica, liberando en el
cultivo la avispa parasitaria Encarsia Formosa. Plantar claveles chinos, caléndulas o tabaco
ornamental, serán buenos remedios para ahuyentar a esta plaga de forma natural y ecológica.
Encarsia Formosa.
•••
• Las Hormigas pueden llegar a ser un enemigo en nuestro huerto. Las hormigas son buenas
amigas de los pulgones, ya que se alimentan del jugo que estos sueltan al picar las plantas. Por
lo tanto, si tenemos pulgones es más que seguro que también tengamos un ejército de
hormigas. Eliminando los pulgones, poco a poco se marcharan las hormigas, pero si no lo
hiciesen le podemos poner remedio de las siguientes formas:
Hormiga alimentándose gracias a los pulgones.
Una solución bastante eficaz para terminar con las hormigas, seria localizar los distintos
hormigueros y echar por su boca sal diluida en agua. Otro buen repelente de hormigas son las
plantas aromáticas, como la hierba buena, hierba de San Marcos o poleo, así como la pimienta
roja o el vinagre también serán buenos aliados para ahuyentar a las hormigas.
Como en todos los casos anteriores de plagas, también se puede recurrir a tratamientos
químicos si el problema fuese más grave de lo habitual.
•••
• Pájaros. Las aves muchas veces son beneficiosas para nuestro huerto, ya que podrían comer
ciertas plagas o insectos que no nos son útiles como ya hemos visto. Pero a su vez pueden
llegar a ser un problema en nuestro huerto ya que su principal fuente de alimentación son las
semillas, las frutas, las plantas y el néctar.
Para protegernos nos bastaría con una malla que cubriese todo el huerto (algo costoso) o el
muy sufrido Espantapájaros de toda la vida. Existen otras maneras de ahuyentar a las aves,
como mecanismos sonoros o luminosos.
Espantapájaros, uno más de la clase.
•••
•Oídio o Mildiú. Es una enfermedad criptogámica que ataca a las hojas jóvenes, los brotes o
las flores, cubriéndolos de manchas blancuzcas y polvorientas que consumen y debilitan a la
planta. Se desarrolla sobre todo en ambientes calurosos y húmedos.
Como con otras plagas, es mejor prevenir que curar, esto lo conseguiremos con un riego eficaz
y sostenible y nunca en exceso. Si la planta estuviese ya enferma, eliminaríamos las hojas
afectadas en cuanto aparezcan.
Un buen remedio ecológico sería utilizar un fungicida a base de ajo u ortiga. Ya que el cultivo
del tomate es muy dado a contraer esta enfermedad, se recomienda dentro de lo posible, que
se rote su siembra en tierras donde antes haya habido ajos.
Tomatera afectada por Oídio o Mildiú.
No olvidemos que en casos de suma gravedad y ante la posibilidad de perder nuestra cosecha
o su gran mayoría, podemos hacer uso de tratamientos con plaguicidas. Siempre llevaremos a
cabo las indicaciones del fabricante, y respetaremos escrupulosamente los plazos de
seguridad antes de consumir el fruto.
•••
• Roya. Esta enfermedad ataca con preferencia al reverso de las hojas y los tallos. Las partes
afectadas se cubren de manchas pardas y luego caen. Se da en sitios húmedos y aparece como
secuela del exceso de riego.
Un buen remedio ecológico seria fumigar con un preparado a base de cola de caballo.
Recurriremos a los pesticidas en caso de suma gravedad.
Roya (negrilla)
•••
A grandes rasgos, estas serian las plagas más habituales a las que tendríamos que hacer frente
en nuestro huerto. Prestando la atención suficiente a nuestros cultivos y sobre todo haciendo
un buen trabajo de post-siembra, evitaremos muchas de las enfermedades y plagas citadas
anteriormente. Dentro de lo posible, utilizaremos solamente técnicas y productos
completamente ecológicos y para nada dañinos ni para el medio ambiente, ni mucho menos
para el consumidor final. En caso de tener que recurrir a la utilización de productos químicos,
extremaremos las precauciones y solamente serán aplicados por personal altamente
cualificado.
8ª FASE (PREVENCIÓN EN RIESGOS)
Hasta en la tarea más sencilla pondremos especial cuidado de no salir dañados. En la primera
fase de este proyecto, hemos visto algunas de las posibles herramientas que utilizaremos.
Azadas, escardillos, palas, hocino, tijeras de podar, motocultores, son herramientas de sobra
conocidas por la inmensa mayoría, pero no por ello le perderemos el respeto a la hora de su
manipulación. Una cava mal medida, puede terminar con un golpe terrible en algún miembro
inferior, pudiendo llegar a ser grave, de igual manera si manejamos las tijeras de podar o el
hocino, sin la atención suficiente, se podría sufrir un corte o pinchazo de consideración. No
obstante, si son manejadas con sentido común y prestando la atención necesaria a la tarea que
estemos realizando en cada momento, no se debe de producir ningún imprevisto doloroso.
Ante todo, extremaremos las precauciones cuando manipulemos productos químicos
(plaguicidas). En un primer momento al tratarse de una huerta ecológica, no deberíamos ni
nombrarlos, pero debido a que posibles plagas nos pueden echar a perder nuestros cultivos,
deberemos de tener unas nociones básicas sobre estos productos altamente tóxicos para el
ser humano, animales y medio ambiente en general. Si tomamos las medidas adecuadas de
seguridad, durante su aplicación y después de ella, respetando los plazos de seguridad
marcados por el fabricante, no debemos de correr ningún peligro.
Para todas estas tareas utilizaremos el llamado EPI (Equipo de Protección Individual). Estos
equipos constan de tres categorías: Categoría I, para riesgos mínimos. Categoría II, para riesgos
medios (en este prestaremos nuestra atención) Categoría III, para riesgos de consecuencias
mortales e irreversibles. El EPI varía según la tarea que vayamos a efectuar.
Trabajos manuales con herramientas de labranza como pueden ser, azadas,
escardillos, rastrillos, etc. En este caso, con ir equipados con unos guantes de material
y unas gafas protectoras, para evitar posibles daños oculares, estaríamos protegidos.
Ni que decir tiene, que al tratarse de una huerta al aire libre, nos uniformaremos
adecuadamente según las condiciones climatológicas.
Guantes de material. Gafas protectoras.
Trabajos manuales con herramientas de corte como tijeras de podar, hocinos, etc.
Utilizaremos de igual manera que la vez anterior, guantes y gafas protectoras.
Trabajos con herramientas mecánicas como motocultores, sierras mecánicas, etc. En
este caso, incluiremos a nuestro equipo de protección anterior de guantes y gafas
protectoras, unos cascos que amortigüen el sonido generado por estas herramientas,
más una pantalla que nos cubra la mayor parte de la cara.
Cascos. Pantalla protectora.
Trabajos de fumigación con productos químicos (plaguicidas). Estas tareas serán
realizadas por personal altamente cualificado a tales efectos. Los plaguicidas o
pesticidas, pueden entrar en nuestro organismo por varias vías. Por ingestión
accidental, por inhalación o a través de la piel, vía cutánea. Por todo ello nos
equiparemos de las siguientes medidas de protección.
Buzo. Guantes. Mascarilla. Gafas. Botas.
En caso de intoxicación por productos plaguicidas, acudir inmediatamente al centro
de salud más cercano, llevando consigo la etiqueta del producto aplicado.
A grandes rasgos, con estas medidas de seguridad, serian suficientes para trabajar nuestro
huerto sin percance alguno.
Máximo Píriz Vidígal.