Post on 20-Jul-2015
A los 3 meses de edad, cuando
necesitaba de los cuidados de
mis padres
La primera sonrisas de
tantas en mi vida
A los 6 meses de edad mi cuerpo
empieza a tener
rigidez para poder sentarme
En los 3 años de edad
Muestro mis primeros signos
de independencia
Empezaba a ser una gran líder, siempre siendo muy participativa en todo sin pena a nada, muy decidida
Cuando tenia 6 años mi
vocabulario
empieza a ser mas
extenso y fluido
No sabia lo que iba a ser de grande e incluso en una
clase la maestra preguntaba que seriamos de grande, y
cuando me pregunto yo le respondí muy segura “ una
cabrona huevona”
Empecé a descubrir que la docencia era una
bonita carrera, ya que cuando llegábamos de la
escuela mi mamá siempre nos preguntaba a mi
hermana y a mi que habíamos hecho y luego se
lo preguntábamos a ella, y siempre su respuesta
era “jugué con los niños ” yo le decía que
siempre se la pasaba jugando, ella me respondía
que esa era la manera perfecta para llamar la
atención y sobretodo muy significativa para que
los niños aprendan.
12 años
15 años Me gustaba mucho exponer, y cuando lo hacia
los maestros siempre me felicitaban y hasta mis
compañeros me decían que explicaba muy bien,
me encantaba hacer la clase divertida, dinámica
siempre teniendo en cuenta lo que mi madre nos
decía de cómo aprendían los pequeñines y lo
empecé a poner en practica con mis compañeros
y efectivamente era cierto, desde ahí mi decisión
de ser educadora
16 años Empecé a cuestionarme sobre los pros y los
contra de ser educadora poniéndolos en una
balanza.
POSITIVAS NEGATIVAS
1. Vacaciones 1. Poco ingreso económico
1. Sábado y domingo
despertar tarde
1. Horarios fijos
1. Seguro medico
Donde me di cuenta que era mas lo
positivo y que encajaba muy bien para mis
planes futuros.
18 años
Hasta el día de hoy no me arrepiento de haber
elegido ser educadora, cada ves me doy
cuenta que me gusta mas esta carrera, tan
solo de saber que voy a contribuir en el
desarrollo de los niños los cuales pueden
hacer la diferencia en nuestro país.