Post on 14-Feb-2017
NAVIDAD EN CABANA
N A C I M I E N T O S B A R R I O S S A C H U P A L L A R E Y E S M A G O S V A V W R U I P A S G R T B D M L J V I M C I G E N T R H D I M E R L A F R D I A L E V A N T A D A S S I P G E O A R A R E J O T E Y A M A C H A R E M D A P O N T I C R A U R R H I J U F A E M A S C O T T A P R O B A T I L L I N I N Q U I S P O E T E R M A L E O M C R B U Ñ U E L O S A L U P E L I R S A E U I M A G I A T D U R A A A T D U B D E T E R M P A W E E R S O S U E S A R R A Z O E M B A T U N I Ñ E R P E N O A S A D I M A G R O T A M A N I J A L E Y E N T S Y O R A C A V A L E A A F I L I A D O R R E U N I T I R D V A N I Ñ O M A N U E L I T O P E D R I C A B A N I S T A S O P L A C O C A V B I Z C O C H U E L O S A L U K O N D
NAVIDAD EN CABANA. EWVS-2015
1. Nacimientos barrios 11. Navidad en Cabana
2. Flor de piedra 12. Reyes Magos
3. Shayapes 13. Viva Jesús mi amor
4. Wagores 14. La vaca
5. Champas 15. El asno
6. Niño Manuelito 16. La Levantada
7. Viejitos de Navidad 17. Rosquitas
8. Baile de pastorcillo 18. Achupalla
9. Buñuelos 19. Flor de rima rima
10. Bizcochuelos 20. Pajillas
21. “Cabanista sopla coca”
NACIMIENTOS, PASTORCILLOS Y “LEVANTADAS”-CABANA
Por: Enrique Vásquez Sifuentes
En nuestra ancashina tierra, Cabana, por esta época
suele celebrarse La Navidad con caracteres singulares.
En los días previos se arreglan en cada casa y en el
templo hermosos “NACIMINETOS” adornados con
flores y ramas del campo: verdes y espigados
“shayapes”, brillantes flores de piedra, espinosos
“wagores”, pajilla de la puna, frescas “champas”
traídas especialmente del Manantial Amarillo; así
como con gran cantidad de juguetes.
Ya en la Noche Buena, se presenta por las calles una comparsa de pastorcillos, entonando alegres
villancicos.
Se realiza después la misa pascual. Al siguiente día, 25, se congregan en la glorieta del pueblo una
multitud de niños para recibir ansiosos sus juguetes. Se preparan para esta ocasión ricos buñuelos
y dulces exquisitos que se saborean en cada casa familiar.
Siguen posteriormente las clásicas “Levantadas del Niño”, es decir, una fiesta que se realiza en la
casa donde se ha confeccionado un “Nacimiento”. Los organizadores son los “Padrinos” del Niño
Manuelito quienes se encargan de atender a los invitados lo mejor posible. Se Ofrece abundante
comida, licores variados. No falta la música vernacular.
Estas celebraciones se prolongan casi hasta fines de enero, y no queda hogar alguno, donde se haya
efectuado una “Levantada”.
Pero lo más peculiar de las navidades en Cabana, es la
presencia de los Pastorcillos, danza que pone en
movimiento a toda la población:
“Cortemos retamas
llevémosle miel
al Niño Jesús
nacido en Belén”.
Por las calles del pueblo, sonando cascabeles, van hacia la iglesia los pastores que bailan en
Navidad. Los muchachos llevan en una
alforjita al hombro los dones que ofrecerán
al Niño: quesos lechosos, requesón y miel;
manzanas y membrillos en las manos. Las
muchachas, por su parte, han cortado junto
al río las ramas más bonitas de retama.
A su paso, los doce pastorcillos van dejando
un aroma fresco de frutas y flores, mientras las
voces cantan:
“Venid pastorcillos
venid a Belén
un niño ha nacido
para nuestro bien”
En los sombreritos de lana de oveja y sobre
los hombros se han puesto algodones para
simular la nevada. Los niños llevan
bastoncitos muy llenos de cascabeles y las
niñas, altas varas adornadas en las puntas con cintas, flores y cascabeles. Las varas se llaman
horquillas.
Entran en la iglesia, por parejas, zapateando y golpeando las varas y mientras se encaminan hacia
el portal para adorar al Niño Manuelito cantan:
“Los ángeles lavan
los blancos pañales
la Virgen le canta
al Niño Jesús”.
LA ADORACIÓN DE LOS SANTOS REYES MAGOS EN CABANA
POR: MANUEL ENCARNACIÓN SIFUENTES REYES
Esta significativa fecha de la Adoración de los
Santos Reyes Magos, desde hace muchos años, en
nuestra querida tierra de Cabana, era recordada y
aún se recuerda, con gran alegría.
Antes de referir la manera cómo se celebraba o celebra
tal fecha, conviene recordar los principales
“Nacimientos” de aquellas lejanas épocas.
En el Barrio de Huayumaca, de los “orates”, sobresalían
los de don Demetrio Utrilla, Natividad Guzmán y Efigenia G. Vda. De Vásquez; en el de Trujillo,
“Barrio Viejo”, los de doña Jerónima Purificación, Juana Cauracurí y del siempre recordado maestro,
Cirilo Vásquez. En el Barrio de San Jerónimo, “Shushunas”, sobresalían los de doña Claudicia
Sifuentes y Berta Novoa; y en el de Pacchamaca, “Barrio de los Catarapes”, los de doña Adelina
Matienzo y posteriormente de doña Margarita Brun, que alcanzó gran renombre.
Cada uno de los “Nacimientos” eran confeccionados con gran prolijidad, tratando de representar el
Portal de Belén, con pequeñas colinas, cubiertas de musgos, líquenes, achupallas, shayapes, flores,
por donde se veía el desfile de diminutos pastorcillos, con sus blancos y graciosos ganados con
dirección al centro del mismo donde se encontraba el Divino Redentor, desnudo, tiritando y
luciendo sus diminutos piececitos, en actitud de pataleo. A su lado, la bondadosa Madre, la Virgen
María y San José, su padre putativo, brindándole el calor de su corazón; y no muy lejano, la Vaca y
el Asno, que también brindaban su aliento al Niño Divino.
Por una estrecha senda se observa a los Santos Reyes Magos: Gaspar, Melchor y Baltasar, montados
en hermosos camellos. Completa el “Nacimiento” una radiante estrella que guió el derrotero de los
Reyes Magos.
La festividad de esta fecha corre a cargo de los “Padrinos”,
hombres y mujeres que, con la respectiva antelación,
formulan invitaciones, contratan la orquesta; preparan
suculentas viandas, bocaditos diversos; licores, recolectan
flores, velas y el consabido café o chocolate, que a la hora
de servirse han de ir acompañados de sendas tajadas de
bizcochos o sándwiches.
Cuando llega el 6 de enero, se concentran los padrinos,
familiares, invitados y demás relacionados en la casa donde
se va a celebrar la Adoración o Bajada de Reyes.
Se inicia la fiesta con el Santo Rosario a cargo de personas
entendidas en estos menesteres, alternando las oraciones
con cánticos alusivos al acto, hoy muy en boga los villancicos.
A poco hacen su aparición los Pastores, con indumentaria
especial. Las jóvenes lucen vistosos anacos, adornados de
lentejuelas, al mismo tiempo que hermosos collares adornan el cuello y portan en la cabeza una
corona con copos de lana blanca o algodón, simulando copos de nieve.
“Los Viejos”, con su vestimenta negra y sus pronunciadas jorobas, danzan apoyados en báculos y
exclamando las conocidas frases: cosha buena...cosha buena... Conforman el festejo, también, el
Ángel Gabriel de la Anunciación, completado por el espíritu del mal: el diablo, que siempre mete la
cola en nuestra vida.
Todos danzan al son de los cánticos acompañados de flautas y tambores. Los Reyes Magos en forma
solemne, presidiendo el festejo, se postran ante el Divino Niño Dios,; Gaspar ofrece incienso, en
señal de reconocimiento como verdadero Rey; y Baltasar, un poco de mirra, simbolizando los
sufrimientos que habría de padecer el Redentor.
Enseguida adoran cada uno de los pastores, ofreciendo sus presentes consistentes en tiernos
corderitos, guanacos y palomas de pan, bizcochuelos y otros objetos. Luego lo hacen los “Padrinos”
depositando su ofrenda consistente en dinero; en igual forma los invitados y demás relacionados.
Se escucha el incesante canto del coro:
¡Viva! ¡Viva! Oh, precioso hermanito,
Jesús mi amor. ejemplar de candor;
¡Viva! ¡Viva! eres más tierno y hermoso
mi Salvador. que el más bello arrebol.
Canción completa: https://www.youtube.com/watch?v=Xd-VpUhenZ0
A continuación viene la elección de los Nuevos
Padrinos que, unas veces en forma voluntaria y en otros,
presionados por la circunstancias. No faltan algunos
asistentes que durante el acto de la adoración y elección de
los Nuevos Padrinos, optan por el ausentismo, como ocurre
en algunas instituciones. Pero, a la hora de servirse el café o
chocolate e iniciarse el baile, asoman en forma furtiva, cual
zorrito asecha a las gallinas y se reincorporan a la fiesta.
Se coloca al Divino Niño en su lecho de pajas, se sirve el café y se
inicia el baile general que, por lo general, culmina en horas de la
madrugada.
Así se celebraba y celebra la tradicional Fiesta de la Adoración de
los Santos Reyes Magos, en Cabana y la mayoría de pueblos de
nuestra serranía.
Todos retornan a sus hogares con la satisfacción de haber
renovado su fe ante el Divino Infante; acrecentado los lazos de amistad con sus familiares y amigos;
y haber dado un tono de alegría a su espíritu en este peregrinaje de la vida, salpicado mayormente
de preocupaciones e incomodidades, mientras que unos pocos disfrutan de permanente
comodidad, quien sabe a expensas del sufrido pueblo.
Canción completa: https://www.youtube.com/watch?v=-KW7sPbjBdE