Unas Manos para educar

El maestro no es engreído, solo demuestra a sus alumnos que el saber no es cuestión de presumir sino de conocer que no por lucir somos sabios.

Excelente maestro es aquel que, enseñando poco, hace nacer en el alumno un deseo grande

de aprender.

La primera tarea de la educación es agitar la vida, pero dejarla libre para que se desarrolle.

Lo que realmente aprendemos es lo que experimentamos.

Siempre que enseñes, enseña a la vez a dudar de lo que enseñes.

Lo maravilloso de aprender algo, es que nadie puede arrebatárnoslo.

Enseñar es aprender dos veces.

Educar a un niño no es hacerle aprender algo que no sabía, sino hacer de él alguien que no existía.

Los objetivos básicos de la educación deber ser aprender a aprender, aprender a resolver,

aprender a ser.

No podemos parar de trabajar. Tendremos toda la eternidad para descansar.