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UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR
FACULTAD DE COMUNICACIÓN SOCIAL
CARRERA DE COMUNICACIÓN SOCIAL
El papel que juegan las ligas barriales, como organizaciones,
en las interacciones para la construcción del tejido social.
Caso Liga Barrial Municipal ubicada en la Mena Dos.
Proyecto de investigación previo a la obtención del título de
Comunicador Social con énfasis en Comunicación Organizacional
Autor: Edison Damian Cárdenas Gavilanes
Tutor: Dr. Jaime Patricio Torres Medrano
Quito, marzo 2018
ii
DERECHOS DE AUTOR
Yo, Edison Damian Cárdenas Gavilanes, en calidad de autor y titular de los derechos
morales y patrimoniales del trabajo de titulación: “El papel que juegan las ligas
barriales, como organizaciones, en las interacciones para la construcción del tejido
social. Caso Liga Barrial Municipal ubicada en la Mena Dos”, modalidad Proyecto de
investigación, de conformidad con el Art. 114 del CÓDIGO ORGÁNICO DE LA
ECONOMÍA SOCIAL DE LOS CONOCIMIENTOS, CREATIVIDAD E
INNOVACIÓN, concedo a favor de la Universidad Central del Ecuador una licencia
gratuita, intransferible y no exclusiva para el uso no comercial de la obra, con fines
estrictamente académicos. Conservo a mi favor todos los derechos de autor sobre la
obra, establecidos en la normativa citada.
Así mismo, autorizo a la Universidad Central del Ecuador para que realice la
digitalización y publicación de este trabajo de titulación en el repositorio virtual, de
conformidad a lo dispuesto en el Art. 144 de la Ley Orgánica de Educación Superior.
El autor declara que la obra objeto de la presente investigación es original en su forma
de expresión y no infringe el derecho de autor de terceros, asumiendo la responsabilidad
por cualquier reclamación que pudiera presentarse por esta causa y liberando a la
Universidad de toda responsabilidad.
Edison Damian Cárdenas Gavilanes
CI: 1719592667
Telf: 0987957342
E-mail: ecardenasg92@gmail.com
iii
APROBACIÓN DEL TUTOR DEL TRABAJO DE TITULACIÓN
En mi calidad de Tutor del Trabajo de Titulación, presentado por EDISON DAMIAN
CÁRDENAS GAVILANES, para optar por el Grado de Licenciado en Comunicación
Social; cuyo título es: EL PAPEL QUE JUEGAN LAS LIGAS BARRIALES,
COMO ORGANIZACIONES, EN LAS INTERACCIONES PARA LA
CONSTRUCCIÓN DEL TEJIDO SOCIAL. CASO LIGA BARRIAL
MUNICIPAL UBICADA EN LA MENA DOS, considero que dicho trabajo reúne los
requisitos y méritos suficientes para ser sometido a la presentación pública y evaluación
por parte del tribunal examinador que se designe.
En la ciudad de Quito, a los 23 días del mes de febrero de 2018
C.C.1709295149
TUTOR
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DEDICATORIA
A mis padres y abuelitos por los valores y la educación que me han inculcado a lo largo
de mi vida, por demostrarme su apoyo incondicional sin importar las circunstancias que
se presenten. Les amo y gracias a ustedes he logrado cumplir esta meta.
A mis hermanos, que han sido mi inspiración para seguir adelante con mis proyectos.
A mi sobrino Martín que me ha dado tantas alegrías en tan poco tiempo.
A mi amiga y compañera de vida, de quién he recibido su apoyo y motivación durante
toda la carrera. Gracias por estar en los momentos buenos y malos.
A mi familia y amigos por acompañarme durante este proceso, este logro es gracias a
ustedes.
v
AGRADECIMIENTOS
A María Eugenia Garcés por su ayuda y motivación, sin su aporte no hubiese sido
posible realizar este proyecto.
A Jaime Torres por acceder a ser mi tutor de tesis, aportando con sus conocimientos y
experiencia para la elaboración de este trabajo.
Al señor Guillermo Mantilla y Walter Suarez, por acceder a compartir sus experiencias
dentro de la liga barrial, y a todas las personas que componen la Liga Municipal que de
una forma u otra aportaron para enriquecer esta investigación.
vi
ÍNDICE DE CONTENIDO
DERECHOS DE AUTOR ii
APROBACIÓN DEL TUTOR DEL TRABAJO DE TITULACIÓN iii
DEDICATORIA iv
AGRADECIMIENTOS v
ÍNDICE DE CONTENIDO vi
RESUMEN x
ABSTRACT xi
INTRODUCCIÓN 1
CAPÍTULO 1 3
INTERACCIÓN Y COMUNICACIÓN 3
1.1. INTERACCIÓN 3
1.2. COMUNICACIÓN 8
1.3. INTERACCIONISMO SIMBÓLICO 13
CAPÍTULO 2 18
BARRIO Y FÚTBOL BARRIAL 18
2.1. BARRIO 18
2.2 LIGAS DE FÚTBOL BARRIAL 22
CAPÍTULO 3 25
METODOLOGÍA 25
3.1 INVESTIGACIÓN CUALITATIVA 25
3.2 TÉCNICAS DE INVESTIGACIÓN 26
3.3 PROCESAMIENTO DE LA INFORMACIÓN 30
3.4. MUESTREO DE LOS ACTORES 31
CAPÍTULO 4 33
EXPOSICIÓN DE RESULTADOS 33
vii
4.1. HISTORIA DE LA LIGA MUNICIPAL 33
4.1.1. EL ORIGEN 34
4.1.2. ESPACIO Y CONFLICTOS 35
4.1.3 COMUNICACIÓN 40
4.1.4 EQUIPOS 43
4.2 LA LIGA BARRIAL MUNICIPAL COMO ESPACIO DE INTERACCIÓN
SOCIAL 47
4.2.1 ACTORES 47
4.2.2. SÍMBOLOS 55
4.2.3. RITUALES 57
4.2.4. ESPACIO 61
CAPITULO V 63
CONCLUSIONES 63
RECOMENDACIONES 66
BIBLIOGRAFÍA 67
ÍNDICE DE ANEXOS
Anexo 1. Ficha de Observación 72
Anexo 2. Plano del terreno entregado a la Liga Municipal en la Mena Dos 75
Anexo 3. Fiesta de gala de la Liga Municipal, 1971 76
Anexo 4. Reinas del campeonato de la Liga Barrial Municipal, inaugurado en 1984 76
Anexo 5. Fiesta de gala realizada en 1981 77
Anexo 6. Directiva de la Liga Barrial Municipal, 1981 77
Anexo 7. Elección de la reina del campeonato de la Liga Barrial Municipal 78
Anexo 8 Línea del tiempo 79
viii
ÍNDICE DE TABLAS
Tabla 1. Organigrama de la Federación de Ligas del Cantón Quito 24
ÍNDICE DE GRÁFICOS
Gráfico 1. Primer Presidente de Liga Municipal, 1961 35
Gráfico 2. Publicidad del Club "Cenit" 36
Gráfico 3. Nota de prensa publicada en el diario Extra, 2016 38
Gráfico 4. Memorándum emitido por el Municipio de Quito, 1983 40
Gráfico 5. Patrocinadores de la revista "Deporte, Trabajo y Cultura" 41
Gráfico 6. Sumario de la revista “Deporte, Trabajo y Cultura”, 1965 42
Gráfico 7. Logros que alcanzó el Club Pichincha a lo largo de su historia 43
Gráfico 8. Equipos que participaron en el campeonato de 1965 44
Gráfico 9. Club Cúcuta Jr. Fundado en 1960 44
Gráfico 10. Atlético Recoleta, fundado en 1966 45
Gráfico 11. Fundadores e integrantes más destacados del Club Minerva, 1967-1983 45
Gráfico 12. Club Arrayanes, fundado en 1981 46
Gráfico 13. Publicación del diario La Hora en 1984 titulado "Liga Municipal inauguró
torneo" 46
Gráfico 14. Club Pichincha, conformado por la familia Vivanco 48
Gráfico 15. Logros alcanzados por el Club Santa Fe 49
Gráfico 16. Alineación del Club Hermano Miguel 50
ix
Gráfico 17. Gestualidad utilizada por los árbitros para determinar un “offside” 55
Gráfico 18. Club Necaxa 56
Gráfico 19. Escudos de los equipos de la Liga Municipal 57
Gráfico 20. Madrina Seleccionada en la inauguración de Liga Municipal en 1971 58
Gráfico 21. Fiesta de gala para premiar a los mejores jugadores y equipos, 1981 59
Gráfico 22. Ritual del Club Ex Combatientes del 41 Jr. antes de iniciar un partido 60
Gráfico 23. Ritual antes de iniciar el partido de fútbol entre Ex Combatientes del 41 Jr.
VS. Cúcuta Jr., 2016 61
Gráfico 24. Cartelera de programación de la Liga Municipal 62
x
Tema: “El papel que juegan las ligas barriales, como organizaciones, en las
interacciones para la construcción del tejido social. Caso Liga Barrial Municipal
ubicada en la Mena Dos”
RESUMEN
El presente proyecto analiza cómo las ligas de fútbol barrial, son parte de la
construcción del tejido social, dentro de las comunidades en las que se desenvuelven,
teniendo en cuenta que estas funcionan como un espacio donde se fortalecen los
vínculos sociales. La investigación toma como caso específico de estudio a la “Liga
Deportiva Barrial Municipal” ubicada en el sector de la Mena 2, donde se investigó el
proceso de conformación que tuvo la organización desde sus inicios hasta la actualidad,
para después analizar los procesos comunicativos de las personas y agrupaciones que la
conforman, así como también la forma en que interactuan y se desenvuelven dentro de
estos espacios.
PALABRAS CLAVE: Ligas de fútbol barrial, vínculos sociales, procesos
comunicativos, interacción.
xi
Title: "The role of neighborhood sports leagues, as organizations, in the interactions
that build up the social fabric. Case study of the Municipal Neighborhood League of
Mena 2"
ABSTRACT
Tliis study analyzes how neighborhood football (soccer) leagues are a part of the social
fabric of the communities in which they are established, taking into consideration that
these legaues function as a space in which social bonds can be strengthened. This study
focuses on the specific case of the Municipal Neighborhood Sports League located in
the sector of Mena 2, where it researched the establishment process that the organization
underwent since its beginnings up to the present, in order to then analyze the
conimunicational processes that take place among the people and groups that particípate
in it, as well as the way in which said actors interact and develop within those spaces.
KEYWORDS: Neighborhood Football Leagues/ social bonds/ communicational
processes/ interaction.
1
INTRODUCCIÓN
El fútbol es el deporte más popular alrededor del mundo, y lo mismo ocurre en el
ámbito local, debido al número de personas que siguen y practican este deporte. Sin
embargo, los estudios que se han hecho sobre este tema se han enfocado en mayor parte
al fútbol profesional, y los estudios orientados al futbol barrial, han tenido muy poca
difusión, incluso dentro de las ligas barriales, pese a que en Quito existen alrededor de
220.000 personas registradas en las 350 ligas barriales que existen en la ciudad (El
Telégrafo, 2014).
Por ello la presente investigación tiene como fin establecer el papel de las ligas barriales
dentro de la comunidad en la que opera, y analizar cómo a través de la práctica del
fútbol se van dinamizando las relaciones sociales de sus integrantes y de la comunidad
en general.
En este propósito, la investigación se sostuvo en un marco conceptual, por lo que en el
primer capítulo “Interacción y Comunicación”, se hace una aproximación al concepto
de interacción, describiendo los elementos que intervienen en este proceso, y sus
características. Después se abordó las diferentes teorías de la comunicación que han
sido propuestas a lo largo del tiempo, para tener como referencia a la Escuela de Palo
Alto, mencionando sus principales postulados y aportes a la comunicación. Como
último punto se desarrolla el interaccionismo simbólico y sus premisas fundamentales.
Posteriormente en el segundo capítulo “Barrio”, se lo alude como un espacio en el que
se producen relaciones complejas, y cómo a través de estos procesos van generando un
sentido de pertenencia hacia estos lugares. A continuación se describe la llegada del
fútbol al Ecuador, su masificación y el contexto para la constitución de las primeras
ligas barriales hasta la actualidad.
Luego en el capítulo tres, desarrollamos la metodología, donde se tomó como referencia
la investigación cualitativa desde una perspectiva comunicacional, y como técnica de
investigación a la etnografía, con el fin de analizar y describir las actividades que se
realizan dentro de la institución, para conseguir esto, se utilizó la observación
participante, la entrevista a profundidad y testimonios de vida.
Seguidamente, en el capítulo cuatro, se exponen los resultados obtenidos durante la
investigación, partiendo por narrar la historia de la “Liga Municipal”, sus primeras
2
formas de organización y la conformación de los equipos. Seguidamente se describen
los procesos comunicativos, desarrollados a través de la interacción, el lenguaje que
utilizan, sus símbolos y rituales, así como también la influencia del espacio en las
conductas de las personas que componen la organización.
Finalmente se exponen las conclusiones obtenidas a lo largo de la investigación, con la
finalidad de poner en consideración los aspectos más destacados, además de las
recomendaciones, para aportar sobre la importancia de hacer estudios similares o
ahondar en este tipo de investigaciones.
3
CAPÍTULO 1
INTERACCIÓN Y COMUNICACIÓN
1.1. INTERACCIÓN
Para desarrollar el tema se tomará como referencia la perspectiva de diferentes autores,
entre los que destacan Mead, Goffman y Simmel, que trabajan desde una perspectiva
del individuo, y Bourdieu que lo hace desde lo colectivo. De esta manera se podrá
observar que no existe dicotomía entre individuo y sociedad.
En una aproximación inicial, el término interacción es definido por la Real Academia de
la Lengua (2017) como la “acción que se ejerce recíprocamente entro dos o más objetos,
personas, agentes, fuerzas, funciones, etc”. No obstante, esta acción no es suficiente,
sino que es necesario que los sujetos se influencien mutuamente para que exista
reciprocidad y se lleve a cabo este proceso, por lo que es necesario ampliar la definición
de interacción por la complejidad del término, al respecto Goffman (1959) menciona
que es:
La influencia recíproca de un individuo sobre las acciones del otro cuando se encuentran ambos
en presencia física inmediata (…) que tiene lugar en cualquier ocasión en que un conjunto dado
de individuos se encuentra en presencia mutua continua (p. 27).
Esta presencia mutua se produce al interior de la cultura, que define como los sujetos se
relacionan, Parsons (1951) menciona que “La cultura media en la interacción entre los
actores e integra la personalidad y los sistemas sociales” (citado en Ritzer, 2008).
Constituyéndose por el intercambio de conocimientos, símbolos, significado e ideas que
comparten las personas.
De igual manera Edmond Marc y Dominique Picard (1992) manifiestan que la
interacción “Es (…) un fenómeno social anclado en un marco espaciotemporal de
4
naturaleza cultural marcado por códigos y rituales sociales” (p.17). Por lo que es en la
cultura donde se construyen diversas formas de interacción y se definen las maneras en
que los sujetos se relacionan.
Es así que se producen diversas formas de asociarse entre las personas, Simmel sostiene
que tienden a interactuar y llevar a cabo procesos de asociación de manera interesada
con el fin de conseguir un beneficio:
Sin duda es a causa de necesidades e intereses especiales que los hombres se unen en
asociaciones económicas o en fraternidades de sangre, en sociedades de culto o en bandas de
asaltantes. Pero mucho más allá de su contenido especial, todas estas asociaciones están
acompañadas de un sentimiento y una satisfacción en el puro hecho de que uno se asocia con
otros y de que la soledad del individuo se resuelve dentro de la unidad: la unión con otros (2002,
p. 195-196).
A partir del punto de vista de Simmel, se puede mencionar que las personas tienden
siempre a relacionarse entre sí para alcanzar un fin común o por que comparten los
mismos intereses, los cuales pueden ser alcanzados solo a través de la asociación con
otras personas. Goffman (1959) define a estas asociaciones como establecimientos
sociales, donde realizan de manera regular una actividad determinada, una asociación
cerrada donde los miembros de ésta no comparten ni sus rasgos ni sus características.
Entonces, una característica de la interacción hace referencia a los beneficios que se
obtienen de dicha relación. Otra rasgo importante es la actitud, al respecto Mead (1972)
menciona que dentro de la comunidad el individuo influencia permanentemente a ésta
por medio de la actitud, en el sentido que se internaliza a través del pensamiento,
tomando el comportamiento de los demás y reaccionando a su vez hacia el grupo, lo que
provoca cambios en el mismo; para el autor esto solo es posible:
En la medida que logramos provocar en nosotros la reacción de la comunidad; solo tenemos
ideas en la medida en que tenemos capacidad para adoptar la actitud de la comunidad y luego
reaccionar ante ella (p. 207).
Estas actitudes, que son producto de la cultura y expresadas a través de la interacción, se
dan en un lugar determinado que se lo denomina espacio social definido por Bourdieu
(1990) como:
Un espacio construido bajo la base de principios de diferenciación o de distribución constituidas
por el conjunto de las propiedades activas dentro del universo social considerado, es decir,
capaces de conferir a su detentador la fuerza, el poder en ese universo (p. 28).
5
Dentro de este espacio las personas cumplirán un rol determinado, y la manera en que se
relacionen entre los miembros de una comunidad dependerá del papel que tengan en
esta, por su parte Lefebvre menciona que el espacio social es:
Producido socialmente en tres fases interrelacionadas y derivadas; la primera es el espacio físico,
del cual surgen las representaciones de ese espacio, que al ser referidas como iconos forman o
transforman los espacios y éstos se convierten en espacios de representación” (Lefebvre (1991)
citado en Castillo y Ramos, 2012, p. 50).
Estos espacios de representación tienen un significado importante para las personas por
lo que simbolizan dentro de la comunidad, por ejemplo, pueden existir lugares
determinados donde la gente se reúne para interactuar sin importar los intereses que
cada uno tenga.
Es aquí donde se producen y organizan pequeños sistemas sociales creados por grupos
de personas que comparten las mismas creencias, estas no se dan espontáneamente sino
que, como menciona Mead (1972), son producidas a través de la experiencia social
donde internalizan sus prácticas y direcciona el comportamiento ante los demás.
Por otra parte Parsons sostiene que:
Un sistema social consiste en una pluralidad de actores individuales que interactúan entre sí en
una situación que tiene, al menos, un aspecto físico o de medio ambiente, actores motivados,
(…) y cuyas relaciones con sus situaciones –incluyendo a los demás actores- están mediadas y
compartidas por un sistema de símbolos culturalmente estructurados y compartidos (Parsons
(1951) citado en Ritzer, 2008, p.118)
Debido a esto, dentro de las organizaciones los individuos internalizan las
características del grupo, pensando y actuando en torno a las pautas que tienen dentro de
este, comportándose siempre pensando en el grupo y no individualmente. De igual
forma, el comportamiento que adopten ambas partes dependerá del contexto en que se
origine y de un análisis previo, donde se examinan las expresiones voluntarias e
involuntarias que realizan los individuos.
Eso significa que en estas relaciones hay una forma de lenguaje, y dentro de estos
lenguajes está el gesto, al respecto Herbert Mead (1972) menciona que “el gesto es esa
parte del acto individual frente al que se produce la adaptación por parte de otros
individuos en el proceso social de la conducta” (p. 88). Estos son considerados como
componentes básicos de la interacción, debido a que están presentes tanto explicita
como implícitamente en el comportamiento de las personas.
6
Es así que su función es estimular la actitud de las personas que van a interactuar para
que puedan adaptarse rápidamente a las situaciones que se darán durante este proceso,
cabe mencionar que esto se da previo al uso del lenguaje por lo que para Mead (1972) el
individuo “tiene que adaptarse –instintivamente- a la actitud de otro individuo” (p.87),
incluso por la rapidez de este primer contacto, dependiendo de la percepción que tengan
cada uno de los involucrados en el acto comunicativo.
De igual forma, al momento que una persona mediante sus gestos expresa algo y
representa lo mismo para el otro individuo, provoca una idea común para ambas partes,
el gesto se convierte en lenguaje a esto Mead (1972) le da el nombre de “símbolo
significante” y menciona que:
El gesto vocal se convierte en símbolo significante {…} cuando produce el mismo efecto sobre
el individuo que lo hace que sobre el individuo a quién está dirigido o que explícitamente
reacciona ante él y de tal modo involucra una referencia a la persona del individuo que lo hace
(p. 88).
La función del gesto vocal es proporcionar una forma más beneficiosa y eficaz de
adaptación y readaptación de los individuos, puesto que provoca una misma actitud en
ambas partes, lo que genera un cambio de conducta, a la vez promueve que tengan
comportamientos similares y más conscientes de sus actos, que solo por medio del
primer contacto, por lo que los gestos vocales, es decir, el lenguaje se estructura en la
base de lo simbólico y puede manifestar creencias de los sujetos.
De esta manera se generan formas de interacción y organización más complejas porque
los individuos compartirán las mismas creencias y símbolos produciéndose un proceso
de influencia mutua configurando ciertas pautas, patrones y conductas con los que se
debe actuar en la sociedad.
Sin embargo, hay otros elementos aparte de los gestos que dinamizan la interacción,
como son los capitales con los que cuentan las personas, que son las que mediarán las
conductas de los sujetos, para Martínez (1998) los capitales son diversos tipos de
recursos que las personas usan para tener poder frente a otro.
Martínez (1998) sintetiza el trabajo de Bourdieu con respecto a los capitales, en los que
se encuentran los capitales económicos, que tienen que ver con los medios y recursos
que se utilizan para ejercer poder.
7
En segundo lugar, constan los capitales culturales, divididos en tres estados: El estado
incorporado que se adquiere mediante la educación familiar (forma de hablar, caminar o
comportarse), el estado objetivado que son los bienes culturales adquiridos (pinturas,
cuadros o monumentos) y por último el estado institucionalizado que se materializa por
medio de títulos académicos.
Luego están los capitales sociales, definidos por las redes de conexiones que se posea y
los beneficios que puedan obtener a través de estos. Por último el capital simbólico,
expresado por medio de la reputación o el prestigio.
Es por ello que de acuerdo al capital que las personas posean serán tratados dentro de la
comunidad pudiendo llegar a tener todos los capitales nombrados anteriormente o sólo
uno, de esto dependerá el rol que jueguen en la comunidad. Como resultado de esto y
según al grupo que se pertenezca, las personas tienen intereses y propósitos en común,
donde el funcionamiento dependerá del rol que cada uno juegue internamente. Por su
parte, Bourdieu (1990) sostiene que:
La posición de un agente determinado en el espacio social puede ser definida por la posición que
él ocupa en los diferentes campos, es decir, en la distribución de poderes actuantes en cada uno
de ellos, sea principalmente el capital económico (…), el capital cultural y el capital social, así
como el capital simbólico (…) (p.29).
Finalmente, dentro de una comunidad pueden existir diferentes formas en que un mismo
individuo se exprese con su entorno, debido a que puede mantener una buena relación
con las personas que la conforman, sin embargo, con cada una de estas se comportará de
una manera determinada.
En conclusión, se puede decir que la interacción es el encuentro físico entre dos o más
personas, en el que cada uno de los participantes realiza un proceso de análisis y
adaptación a los nuevos movimientos y gestos que pueden ser voluntarios e
involuntarios, influenciándose mutuamente, lo que a su vez provoca estímulos para la
adaptación a este tipo de actitudes durante el proceso.
Además existen otros elementos que permiten su realización a través del lenguaje, como
son: el contexto en el que se encuentren; la preconcepción que cada uno tenga, porque
de esto dependerá la manera en que se lleve a cabo la interacción, pues si los dos
comparten las mismas ideas y significados se hará de forma positiva.
8
De igual manera el espacio en que se produzca, ya que dentro de una comunidad las
personas son las encargadas de dotarlo de significados, por lo que el lugar también
influenciará a las partes involucradas, además del capital que cada uno posea que
pueden ser de tipo económico, cultural, social o simbólico. De esto dependerá la forma
en que las personas que conforman la comunidad se relacionen entre sí.
Como consecuencia de la interacción se forman y organizan diversos grupos que
interactuaran en un espacio determinado, con sus propias reglas y pautas, donde cada
persona se relaciona dentro de una comunidad de acuerdo a sus necesidades, la relación
que mantengan y la posición que tenga cada uno de sus integrantes dentro de dicha
comunidad.
1.2. COMUNICACIÓN
El término comunicación proviene de la raíz latina communis, que es poner en común
algo con otro, raíz que comparte con la de comunidad y comunión, entendiéndola así
como algo que se comparte, que se tiene o se vive en común (Kaplún, 2002, p.54). Otra
definición que permitirá dialogar sobre el concepto de comunicación es el presentado
por Lamb, Hair y McDaniel (2006) como “el proceso por el cual intercambiamos o
compartimos significados mediante un conjunto común de símbolos” (p. 484).
Estas definiciones nos permiten entender que la comunicación hace posible la
transmisión de ideas para ponerlas en común con las personas, sin embargo para que se
haga efectiva deberán compartir los mismos símbolos.
Además, según Fernández y Gordon (1992), deben existir por lo menos tres elementos
para que haya comunicación que son: la fuente, es decir que habrá alguien que desee
hacer conocer algo, el mensaje que es la idea que se va a dar a conocer y el destino que
es a quién está dirigido el mensaje.
Si bien hablar de la comunicación resulta extremadamente complejo, su interés por ser
objeto de la ciencia surge particularmente en el siglo XX, sin embargo no es hasta
finales del siglo XVIII y el siglo XIX que se empieza a considerar a la comunicación
como un elemento fundamental dentro de la sociedad, a partir de la revolución industrial
9
y la invención de los medios de comunicación tanto terrestres como marítimos, por lo
que empieza a ser estudiada por diversas ciencias como la biología y las ciencias
políticas.
Es así que a finales del siglo XVIII se puede encontrar la primera formulación científica
de la comunicación por parte de Adam Smith, al mencionar que “La comunicación
contribuye a organizar el trabajo colectivo en el seno de la fábrica y en la estructuración
de los espacios económicos” (Armand y Michèle Mattelart, 1997, p.14). Se puede
observar de esta manera que se empieza a asociar a la comunicación con los procesos de
producción, como consecuencia de la división de trabajo, a partir del surgimiento de las
industrias que fabrican productos en serie, el uso de los espacios para la circulación de
estos objetos y los procesos migratorios de la fuerza de trabajo destinada a las fábricas.
Posteriormente en el siglo XIX aparece el modelo de biologización de lo social, con el
fin de explicar el desarrollo que tiene la sociedad a través de la industria y la invención
de los sistemas de comunicación. Por lo que Saint-Simon “concibe a la sociedad como
un sistema orgánico, un entramado o tejido de redes, pero también como un sistema
industrial, administrado como una industria” (Armand y Michèle Mattelart, 1997, p.
15).
De esta manera se empieza a configurar una sociedad que piensa y actúa para conseguir
el progreso, a través del fortalecimiento de la industria, la banca y la creación de
infraestructura para la circulación, a las que se las denominó vías de comunicación. Por
tanto los grandes hechos sociales y la producción de tecnología, dieron paso a nuevos
fenómenos que fueron una preocupación para los científicos sociales, dentro del marco
de estas preocupaciones se encuentra la comunicación.
En consecuencia, una vez consolidada la modernidad en el siglo XX, comienzan a
aparecer diferentes escuelas, con miradas teóricas diversas, que intentan explicar la
comunicación, los científicos sociales se empezaron a preocupar por los fenómenos que
ocurrían en la época, producto del desarrollo capitalista, como la migración en masa,
principalmente de Europa y Estados Unidos, pero sobretodo el punto de inflexión
fueron las dos guerras mundiales que marcaron un estudio más exhaustivo de la
comunicación.
La primera fue la escuela de Chicago que prevalece desde 1910 hasta 1940, época de la
Segunda Guerra Mundial, sus estudios están dirigidos a los problemas que ocurren en
10
esta ciudad, como la delincuencia y el crecimiento desmedido de su población producto
de la inmigración, para Azpurua (2005) su fin es interpretar la realidad social a través de
instrumentos científicos, para resolver problemas sociales concretos, mediante el
desarrollo de investigaciones de carácter empírico, donde la comunicación juega un
papel central.
Entre los miembros de la escuela de Chicago se destaca Robert Ezra Park, quién
menciona que dentro de una comunidad hay un nivel social o cultural donde la
comunicación y el consenso cumplen una función que “consiste en regular la
competición y permitir así a los individuos compartir una experiencia, unirse a la
sociedad” (Armand y Michèle Mattelart, 1997, p.25). Se puede ver la importancia que
Park le da a la comunicación en el marco de las interacciones cara a cara, una
importancia que no había tenido antes, a través del estudio del público y su organización
mediante el consenso y el conflicto (Nocera, 2008).
En efecto, la escuela de Chicago se caracteriza por realizar estudios etnográficos,
centrándose en el estudio del individuo y las formas en que estos interactúan, de esta
manera se crean los principios sobre los cuales la escuela de Palo Alto trabajaría en un
futuro.
Para 1923 se crea en Alemania la escuela de Frankfurt, su propósito era proporcionar
ideas que permitieran cambiar las condiciones de opresión en que se encontraba la
sociedad, y de esta manera “liberar a los seres humanos de las circunstancias que los
esclavizan” (Horkheimer, 1982, p. 244). Además analizan el rol que cumplen los
medios de comunicación masiva como instrumentos alienantes y manipuladores, otro
elemento que se menciona es el de la industria cultural, donde “analizan la producción
industrial de los bienes culturales como movimiento global de la producción de la
cultura como mercancía” (Armand y Michèle Mattelart,1997, p. 54), es así que la
industria toma cualquier bien cultural y lo estandariza con el fin de vaciarlo de
contenido, destruyendo la capacidad crítica de los individuos, al transformar estos
bienes en mercancías.
De igual forma, una vez concluida la Primera Guerra Mundial, los medios de
comunicación cobraron una importancia relevante en la sociedad, por lo que en 1927 en
Estados Unidos comenzó la Mass Communication Research con el objetivo de estudiar
11
los efectos que tienen los medios de comunicación masiva sobre la población. Para
Armand y Michèle Mattelart (1997)
Se considera a la audiencia como un blanco amorfo que obedece ciegamente el esquema
estímulo-respuesta. Se supone que el medio de comunicación actúa según el modelo de la aguja
hipodérmica, término forjado por el propio Lasswell para denominar el efecto o el impacto
directo e indiferenciado sobre los individuos atomizados (p.28).
Este impacto directo quiere decir que los receptores aceptan los mensajes transmitidos
sin cuestionarse de dónde vienen, se puede ver así el papel dominante que juegan los
medios de comunicación sobre todo a través de la propaganda, que es utilizada para
controlar a las masas y adherirlas a un proyecto político o ideología.
Posteriormente, en 1940 aparece en Estados Unidos la escuela de Yale, a cargo de Carl
Hovland, que estudia los efectos de los medios de comunicación sobre los soldados
norteamericanos en el contexto de la Segunda Guerra Mundial, principalmente el efecto
que tenía la propaganda y las películas en los comportamientos de las tropas antes y
durante el combate. Estos estudios fueron considerados como “un verdadero catálogo de
recetas (…), capaz de alterar el funcionamiento psicológico del individuo y de inducirlo
a realizar actos deseados por el dador del mensaje” (Mattelart, 1997, p. 39).
Para continuar, en el año de 1964 se crea el Centro de Birmingham, Wolf (1994)
menciona que "su interés se centra sobre todo en analizar una forma específica
de proceso social, correspondiente a la atribución de sentido a la realidad, al desarrollo
de una cultura, de prácticas sociales compartidas, de un área común de significados" (p.
121). El análisis se centra en la cultura, para quienes no sólo constituía una práctica, ni
el conjunto de costumbres y hábitos de una sociedad, sino que está presente en todo el
ámbito social.
Por último está la escuela de Palo Alto, que es una referencia para el presente trabajo,
por lo tanto se analizará qué elementos sirven para esta investigación. En esta se
concibe a la comunicación como algo que "incluye todos los procesos a través de los
cuales la gente se influye mutuamente" (Bateson y Ruesch, 1984), esta influencia mutua
se refiere a la interacción, concepto central para esta escuela, en el sentido que toda
relación social se establece a través de la interacción de los participantes, siendo la
comunicación la base de estas relaciones ya que es el mecanismo que regula y las hace
posibles.
12
Cabe mencionar que en esta época la teoría de comunicación que predominaba era el
modelo lineal propuesto por Shanon y Weaver en 1948, que plantea que la
comunicación es “la transmisión de información de un punto a otro” (Maigret, 2003, p.
12). Sin embargo la escuela de Palo Alto empieza a considerar a los sujetos como
participantes activos dentro del proceso comunicativo, y no como un simple receptor de
mensajes, por lo que se empieza a mencionar un nuevo elemento que es la
retroalimentación o feedback, donde los sujetos ponen ideas en común y las
intercambian a través de la interacción.
Asimismo Watzlawick, Beavin y Jackson (1971) mencionan una serie de postulados
denominados “Axiomas de comunicación”, que siempre están presentes en la
comunicación, estos son:
- Es imposible no comunicar, en el sentido de que si toda conducta es comunicación, por más que
un individuo se mantenga en silencio está transmitiendo un mensaje, que podría ser que no
quiere que le molesten, esto será interpretado por las personas que están a su alrededor y no lo
harán (p.49- 52).
- Toda comunicación tiene un aspecto de contenido y un aspecto relacional. Es decir que en todo
acto comunicativo se transmiten ideas, pero además de esto, información que definirá la forma
en que se llevará a cabo la relación entre los individuos involucrados, a través de la percepción
que tenga la persona que recibe el mensaje y las condiciones en que es transmitido (p. 52- 56).
- Una relación está condicionada de la puntuación de las secuencias de comunicación entre los
involucrados. En una interacción los participantes introducen lo que ha sido llamado por Bateson
y Jackson “puntuación de la secuencia de hechos”, este proceso permite organizar el
comportamiento de las personas, si los involucrados llegan a un acuerdo en esta secuencia
interactuarán si problema, pero de no estarlo tendrán conflictos en sus relaciones (p. 56- 60).
- Todas las personas se comunican tanto de forma analógica como digital. La comunicación
analógica es la no verbal que incluye toda gestualidad y comportamiento de las personas, en
cambio la comunicación digital se refiere a la información compartida sobre los objetos y el
conocimiento (p. 61- 68).
- Toda interacción se basa en intercambios comunicacionales simétricos o complementarios. Las
personas que igualan su comportamiento al de otras personas y posean diferencias mínimas
tendrán una relación simétrica, aquellas en las que existan una gran diferencia como una
posición de superioridad e inferioridad será una relación complementaria (p.68- 70).
Por esta razón se empieza a concebir a la comunicación “como un proceso permanente y
de carácter holístico, como un todo integrado, incomprensible sin el contexto en el que
tiene lugar” (Rizo, 2011, p. 5). Dando una visión más amplia a la comunicación, al
tenerla como elemento fundamental para toda la actividad humana, por lo que Bateson y
Ruesch (1984) mencionan que “la comunicación es la matriz en la que se encajan todas
las actividades humanas (p. 13)”, donde además el contexto en que se da también es
importante, porque se deben analizar las interacciones en su conjunto y no como algo
aislado, puesto que por sí solas carecerían de sentido.
13
Con los planteamientos anteriores se pretende dejar atrás el enfoque lineal y pasar a uno
donde las personas se encuentran en un intercambio constante de ideas, en donde la
interacción es el aspecto central de la comunicación, mediante la acción y el lenguaje
ejercida por los sujetos, permite la socialización y la adaptación a su entorno, además
que por medio de esto se consigue desarrollar y organizar vínculos sociales.
1.3. INTERACCIONISMO SIMBÓLICO
El término interaccionismo simbólico es definido por el Diccionario Sociológico como:
Una corriente de la investigación psicosociológica que ha estudiado con particular atención el
aspecto lingüístico, es decir la transmisión y la influencia de los significados en la interacción
social (Gallino, 1995, p.550).
Es necesario aclarar que para el presente trabajo, se entenderá al interaccionismo
simbólico como un hecho social, más no como una corriente de investigación. En este
marco, la interacción social es concebida como la relación entre dos o más personas,
que influencian su comportamiento mutuamente. Para Ritzer (1988) la interacción “es el
proceso en el que se desarrolla y, al mismo tiempo, se expresa la capacidad de
pensamiento” (p.272).
Es así que, durante el proceso de interacción, las personas van adquiriendo el
conocimiento de las cosas y las situaciones que viven, éstas son las que las dotan de
significados a lo largo de su vida.
Al respecto, Mead (1972) considera que la persona es alguien consciente y pensante,
todo ser humano es producto de la interacción, llevada a cabo a través del intercambio
de actos simbólicos, adquiriendo experiencia durante este proceso.
En este orden de ideas, Herbert Mead desarrolla los primeros estudios sobre el
interaccionismo simbólico, por lo que es considerado el padre de esta teoría, a pesar de
que el término fue creado por Herbert Blumer en 1937.
En este sentido, Blumer tomaría el pensamiento de Mead para crear el término
“Interaccionismo Simbólico” que nace a partir del interés por “la influencia de los
significados y los símbolos sobre la acción y la interacción humana” (Ritzer, 1988,
14
p.275), se ve entonces la importancia que dan a los sujetos, que orientan sus actos y las
situaciones sociales.
Por ello, Blumer (1982) desarrolla tres premisas fundamentales sobre las que se basa la
comprensión del interaccionismo simbólico:
1. El ser humano orienta sus actos hacia las cosas en función de lo que éstas significan para él.
2. El significado de estas cosas se deriva de, o surge como consecuencia de la interacción social
que cada cual mantiene con el prójimo.
3. Los significados se manipulan y modifican mediante un proceso interpretativo desarrollado por
la persona al enfrentarse con las cosas que va hallando a su paso. (p. 2).
1.3.1 Significado
Las tres premisas tienen como eje principal al “significado”, para Blumer (1982) “es un
producto social, una creación que emana de y a través de las actividades definitorias de
los individuos a medida que éstos interactúan” (p. 4), centrándose en el procedimiento
interpretativo que llevan a cabo las personas, estableciéndose como sujetos de acción
capaces de interpretar y reflexionar sobre las cosas que los rodean.
Con respecto a esto, el uso de los significados es consecuencia de un proceso
interpretativo que tiene dos fases, en principio el sujeto se indica hacia qué cosas
orientará sus actos; después, actuará de acuerdo al contexto que se presente.
El interaccionismo simbólico se diferencia de otras posturas tradicionales en torno al
significado, este considera que es consecuencia de la interacción, como resultado de un
proceso interpretativo y formativo, es decir significa desde la vivencia del sujeto.
1.3.2 Lenguaje e interpretación
Como ya se ha aclarado, Mead desarrolla los primeros estudios sobre la interacción,
dividiéndola en dos fases, “conversación de gestos no significantes” y “conversación de
gestos significantes”. En la primera, los sujetos responderán a los gestos de otros (como
expresiones corporales o tonos de voz) sin interpretarlos, reaccionan de acuerdo al
significado que estos actos encierren para ellos; en el segundo, se interpreta la acción
que el otro individuo quiere llevar a cabo, cuando comparten el mismo significado habrá
comprensión entre las dos partes. Es por esto que Blumer (1982) menciona que:
El significado de los gestos aflora a lo largo de tres líneas (…) esos gestos indican lo que ha de
hacer la persona a quien van dirigidos, lo que la persona que los hace proyecta realizar y,
finalmente, la acción conjunta que debe surgir de la coordinación de los actos de ambas.
Es evidente entonces, que durante la interacción se irá organizando el comportamiento
de las personas, porque antes de actuar, pensarán en las acciones que los demás están
15
llevando a cabo y tratarán de encajar su línea de acción con estas actitudes, formando
así su propia conducta. De igual manera esto implica que, al tener en cuenta los actos
ajenos, las personas asuman el papel de los individuos involucrados en la interacción,
esta será la “condición (…) para que una comunicación y una interacción sean eficaces”
(Blumer, 1982, p. 7).
De esta manera, se puede ver el proceso interpretativo que efectúan las personas, al
percibir las situaciones que se le presentan y planear su comportamiento antes de
ponerlo en práctica. A más de tener en cuenta los actos ajenos, los individuos tomaran
una postura basándose en los deseos, necesidades y objetivos que se quieren alcanzar.
1.3.3 Autointeracción
Con referencia a lo expresado anteriormente, sobre la asunción de papeles de otros
individuos, este proceso permite que las personas observen como los ven los demás, y
esto solo es posible porque poseen un “si mismo”. Para ilustrarlo de mejor manera,
ocurre cuando una persona se ve a sí mismo como un estudiante o trabajador,
procedente de una familia acomodada o humilde; también cuando una persona se
reprocha por alguna actuación.
Es así, que su importancia radica en que las personas pueden interactuar consigo misma,
“a través de un proceso social de autoformulación de indicaciones” (Blumer, 1982, p.
10), que los individuos usarán para orientar sus actos. Es decir que se ve a los sujetos no
solo capaces de responder ante la interacción, sino como organismos que sabrán
reaccionar ante lo que perciben.
1.3.4 Acción y grupo
La acción conjunta, consiste en una organización compuesta por los actos de sus
miembros, donde las características del grupo serán distintivas, pudiendo ser
reconocidas sin necesidad de separar las acciones de los individuos que la componen.
Según Blumer (1982), en una agrupación que se encuentra consolidada, los
comportamientos por lo general ya están preestablecidos, en el sentido que han sido
repetidos constantemente a lo largo del tiempo, de manera que las personas ya saben de
qué forma deben actuar. Para el mismo autor, esto constituye el comienzo de una
conducta social “que lleva implícita el concepto de cultura” (Blumer, 1982, p.53).
16
Además, la acción conjunta, estará compuesta por la conexión de las distintas acciones
de las personas en diferentes niveles, donde cada una cumplirá su rol, y habrá
interdependencia entre sus miembros, que actuarán basándose en el conjunto de
significados que poseen; el funcionamiento de un grupo, estará determinado por la
interpretación y las acciones que lleven a cabo sus miembros, ya que siempre pueden
presentarse situaciones adversas donde deberán elegir la forma de actuar de acuerdo a lo
que crean conveniente.
De igual forma, hay que tener presente que las acciones conjuntas, sea de un grupo
afianzado o de uno que se forma recientemente, emergen de experiencias previas, por lo
que cuando se piense en llevar a cabo nuevas acciones “siempre aportan a la misma el
mundo de objetos, el conjunto de significados y los esquemas de interpretación que
antes poseían” (Blumer, 1982, p.15), es así que un grupo puede llegar a tener un
comportamiento diferente, sin embargo, siempre guardará relación con lo sucedido en el
pasado.
Por otra parte, el interaccionismo simbólico considera que para estas agrupaciones
existen objetos, que son los que forman su mundo, para Blumer (1982), existen tres
tipos de objetos: objetos físicos, como una casa o una mesa; objetos sociales, como un
maestro o un padre; y objetos abstractos, como una idea. Además, el entorno de las
personas estará compuesto solo por los objetos que conocen.
De acuerdo con la idea anterior, Blumer (1982) usa el término “mundos”, para designar
al medio ambiente con el que las personas tienen contacto. Estos “mundos”
determinarán la forma en que actuarán, a través del significado que van confiriéndose a
los objetos, que a la vez son transmitidos por medio de la interacción.
Para conocer y comprender la vida de un grupo es necesario determinar su mundo de objetos, y
esta determinación debe hacerse en función de los significados que aquellos poseen para los
miembros del grupo (Blumer, 1982, p.51).
Para concluir, se puede ver que para los interaccionistas simbólicos el individuo
percibirá al mundo sobre la base de la experiencia, durante la interacción con otras
personas en el seno de la sociedad, donde los objetos que los rodean adquieren un
significado para cada persona, sólo cuando estas las interpretan; a través de esta
interpretación se guiarán los actos de los individuos, teniendo en cuenta que
pertenecerán a distintas agrupaciones, y su comportamiento estará orientado al de los
sujetos que las componen.
17
Además, el espacio social o el “mundo”, como menciona Blumer, determinará el
comportamiento de las personas, de acuerdo a la significación que le atribuyen, por
ejemplo, será diferente la forma en que actúen en el parque de la comunidad, una
institución educativa o en su casa.
Del mismo modo, las personas pertenecen a varios grupos con los que se expresará de
distinta manera, según las reglas que tengan dentro de éstos, la interacción de los sujetos
no se produce solamente porque comparten ideas, sino que pueden ser llevadas a cabo
por necesidad o interés, como medio para conseguir algo, o simplemente para
expresarse. Porque no hay que dejar de lado que el individuo está en constante
interacción, por lo que es una cuestión cotidiana; que puede darse con la familia, dentro
de una institución o mientras las personas se movilizan.
Por último, estas acciones en conjunto, estarán determinadas por las situaciones que se
presenten y su análisis previo, que no siempre va a ir acorde con lo que el escenario
amerita, cuando sucede esto; se ocasionan conflictos, debates o peleas. Es decir que si
una persona irrumpe en un espacio y se expresa de forma incorrecta; ya sea solamente
por medio de gestos, a través del lenguaje con el que se expresa, o la vestimenta; dará
una mala impresión a los miembros del grupo para el cual este lugar simboliza algo, y a
su vez éstos se comportaran con desprecio hacia esta persona.
18
CAPÍTULO 2
BARRIO Y FÚTBOL BARRIAL
En los últimos cinco años, en las distintas universidades de la ciudad de Quito, se han
hecho diversos estudios sobre las ligas barriales, en la Universidad Salesiana, Andrés
Tipán y Byron Zamora (2014) realizaron la recuperación de la memoria histórica de la
Liga La Tola, a través del testimonio oral de las personas que la componen. De igual
forma, Miguel Soto (2015) determina las prácticas comunicativas y las interacciones
producidas por el Club Imprenta Ideal de la Parroquia de Tumbaco, mediante el uso de
estadísticas y entrevistas. Por último Juan Goyes (2015) realiza una investigación sobre
la memoria histórica de la liga barrial de Carapungo, para lo cual utiliza la entrevista a
profundidad.
Asimismo en la Universidad Central del Ecuador, Patricio Yacelga (2016) analiza el uso
de la radio parlante, como herramienta de comunicación alternativa en las ligas
barriales, utilizando la entrevista y las encuestas para obtener los datos. Además
Johanna Acosta (2017) propone implementar nuevas estrategias comunicativas, con el
fin de difundir de manera eficiente las actividades programadas por la Federación de
Ligas Barriales de Quito.
2.1. BARRIO
Para comenzar a hablar de barrio, es necesario entender primero el espacio en el que son
originados, es decir en la ciudad, este término proviene de la raíz latina cívitas que “es
una comunidad política cuyos miembros, los ciudadanos, se autogobiernan (Gadotti,
2002, p. 1). Dentro de este espacio, se producen una serie de relaciones complejas
concretadas en la vida cotidiana, a través de las cuales transforman constantemente su
entorno, por lo que
La ciudad categorizada como urbe, cívitas y polis alude al espacio social donde confluye la
diferencia y donde se han desarrollado diferentes formas de poder y de gobierno, de civilidad, de
convivencia y de conflicto, de cohesión, de confrontación y de disolución social (Sennett, 1997;
Borja, 2003 citado en Ramírez 2007: 86)
19
Siguiendo con este término, para Lefebvre (1976) “la ciudad, no crea nada, únicamente
centraliza las creaciones, pero con este hecho se convierte en una verdadera fuerza que
multiplica y redimensiona los esfuerzos humanos” (p.123), para que esto ocurra, es
necesario la cercanía de las personas, que hace posible la interacción, porque el
alejamiento puede provocar deterioro de las relaciones sociales.
Esto se debe a que la forma en que se distribuyen las personas dentro de las ciudades
posibilita una mayor comunicación, debido a la cercanía en que se encuentran, pero este
espacio:
Además de influir en las conductas y prácticas sociales, es resultado de la acción de habitar, de la
vida cotidiana; son los hombres con sus ideas, sus proyectos de vida y sus propias iniciativas los
que dan lugar al espacio y al orden urbano; por ello la práctica urbana es la verdadera creadora,
tanto de las instituciones sociales, como de la estructura urbana. (Lezama, 2014, p. 235).
Es así que se puede ver a la ciudad como un lugar que está cambiando constantemente,
donde convergen una serie de individuos, procesos y culturas; cada uno con diferentes
intereses y necesidades, por lo que para Ramírez (2007):
Estos lugares representan contextos activos de interacción socio-cultural, de identificación
simbólica y de actividad que revelan formas diferentes y desiguales de acceso a la ciudadanía y
el desarrollo de formas muy diversas de pertenencia y de vida pública.
Todo lo anterior ocurre en un marco en el que cambia la forma de concebir a las
ciudades a partir de los años 90, produciéndose un crecimiento acelerado de estos
espacios, como consecuencia de los desarrollos tecnológicos, sobre todo en lo que se
refiere a los medios de comunicación, conformándose “grandes agregados de millones
de habitantes, que ya no tienen una estructura física ni centralizada, ni concentrada, pero
sí, intensamente interconectada” (Solá Morales, 2003 citado en Naranjo, 2012, p. 36).
Ahora bien, el elemento que articula todas las actividades que ocurren en la vida de la
ciudad se denomina espacio público, esta es “una categoría de significados múltiples
que alude a las formas de organización de la vida en común, lo que hace referencia
directa a la espacialidad de las relaciones humanas, pero trasciende la localización
territorial” (Ramírez, 2007, p. 99), es decir un escenario donde se originan las
interacciones entre los individuos, influidos por sus intereses y objetivos, originados por
un contexto determinado.
De esta forma, Soja (1996) presenta tres elementos, con los que intenta explicar las
diferentes prácticas que se producen en los múltiples espacios que configuran los
individuos, denominándolos: espacio concebido, representado por planos o discursos; el
20
espacio vivido, que es el uso simbólico que dan los individuos a los espacios, a través
de símbolos e imágenes; y por último el espacio percibido, “directamente relacionado
con la percepción que la gente tiene de él con respecto a su uso cotidiano: sus rutas de
paseo, los lugares de encuentro” (Ezquerra, 2013, p. 115). La relación dialéctica de
estos tres elementos hace posible percibir el mundo “real”, a través de un largo y
contradictorio proceso histórico.
En referencia a la clasificación anterior, el concepto planteado por Bourdieu de
“habitus”, que es “una estructura que integra -todas las experiencias pasadas- y -
funciona en cada momento como una matriz de percepciones, de apreciaciones y de
acciones-” (Capdevielle, 2011, p. 35), ayuda a comprender de mejor manera como el
espacio concebido, vivido y percibido es incorporado en las personas, de acuerdo a las
situaciones que se le presentan, de esta forma menciona que:
El habitus produce al individuo, le interioriza inconscientemente los valores y las reglas de la
sociedad y del grupo social de pertenencia. Por ello, el individuo actúa según lo que considera
natural, evidente e instituido cuando en realidad lo hace de acuerdo a un habitus socialmente
construido (Bourdieu, 2007 citado en Ezquerra, 2012, p. 117)
Con los antecedentes planteados, se puede empezar a dar una descripción de barrio, una
primera definición presentada por el Diccionario de la Real Academia de la Lengua
(2017), menciona que es “cada una de las partes en que se dividen los pueblos y
ciudades o sus distritos”, sin embargo esto sirve para identificarlo como un espacio
físico, por lo que es necesario ahondar en este tema, es así que lo considera como un
“agrupamiento social espontáneo que ocupa un sector determinado y diferenciado de la
ciudad y cuyos integrantes- individuos y grupos menores- mantienen entre sí contactos
frecuentes y personales” (Petroni y Kratz, 1966 citado en Sabugo 2001, p. 19).
La frecuencia y proximidad con la que se dan estos contactos, permite crear nexos más
profundos entre los individuos que conforman un barrio, por lo que dentro de éste los
intereses serán colectivos, es por esto que Minango (2010) menciona que es
El contrapeso a la individualización, pues es el centro de los proyectos colectivos en donde se
tejen relaciones y redes sociales de cooperación (…) pues dentro de éste existen espacios
públicos comunitarios, organizaciones sociales así como también redes de solidaridad,
reconocimiento y vecindad (p.33).
Debido a esto, se produce una construcción simbólica del barrio, ya que las personas la
perciben como el segundo hogar, esto les permite tener una sensación de seguridad y
alivio porque sus miembros se conocen, de esta manera la calle es concebida “como
espacio de socialización primaria, establece un paso entre la familia y la comunidad
21
barrial, es la vecindad más próxima y la prolongación de la familia” (Minango, 2010,
p.34).
Por su parte, Ezequiel Ander-Egg (citado en Ekdahl, 2011), muestra tres formas de
concebir el barrio:
(a) Administrativo, como una subdivisión administrativa, histórica o de otra índole, de las partes
o fracciones del territorio de un Municipio;
(b) Físico, como un grupo de casa que constituyen parte de un conjunto urbano, diferenciado
mediante límites (avenidas, línea férrea, canales, etc.) y que constituye un conjunto residencial
de edificaciones bastantes semejantes;
(c) Social, donde se alude a una instancia espacial de sectores en que se divide un pueblo o
ciudad, caracterizada por la proximidad y vecindario, determinados por factores sociales y/o
comerciales, los cuales surgen y se desarrollan como consecuencia de una dinámica sociocultural
que configura una identidad colectiva y un sentimiento de pertenencia y apego en sentido
espacial. (p. 39)
Además, Sabugo (2001) menciona que se podría considerar a un barrio como una
institución, por ser una “forma específica de organización comunitaria, comprensible
por sus aspectos sociales, sus actividades y sus vínculos culturales (p.3), de manera que
las personas se reúnen para alcanzar distintos objetivos, siempre pensando en el bien de
la comunidad.
Sin embargo, el barrio puede ser concebido desde diferentes perspectivas, en el sentido
que cada uno posee características distintivas, por lo que existen diversas formas en que
los individuos se relacionan, variando la intensidad en cada caso, por esto Estebanez
(1995) menciona que puede ser:
Un territorio mal definido, carente de identidad y cohesión social, pasando por el barrio físico, el
barrio homogéneo con ciertas características sociales, el barrio funcional donde se unen las dos
características de las dos anteriores y por último el nivel superior de barrio que sería la
comunidad, un grupo de personas con sentido de colectividad, que tienden a asociarse con sus
vecinos, más que con las personas que habitan fuera de él. (Citado en Ekdahl, 2011, p.38).
De esta manera, el nivel de cohesión que posea un barrio dependerá de diferentes
factores, como el tiempo que permanezcan en ella, las formas en que se desplazan
dentro de este territorio o simplemente por compartir alguna creencia, por lo que para
Ekdahl (2011) para hablar de barrio son necesarios dos elementos:
(a) elementos esenciales, como población, territorio y una historia particular, osea un tiempo, una
cultura de identificación, una organización y cohesión en base a centros de atracción o centros
articuladores; y, (b) elementos formales o de reconocimiento, donde se deben reconocer por la
actual legislación como entidad administrativa (p.38).
Con respecto a los centros articuladores, se podría decir que son los espacios donde se
reúnen las personas y desarrollan las actividades sociales dentro del barrio, como: el
22
parque, la plaza o la cancha. Pero también puede ser considerada la calle o la esquina,
que sería el punto de encuentro con los habitantes de las diferentes calles, es decir todos
los espacios que permitan desarrollar una actividad determinada.
Significa entonces que, a partir del desarrollo de estas actividades, van creando vínculos
de amistad entre las personas que componen los barrios, que a su vez provoca la
apropiación de estos espacios, generándose un sentido de pertenencia que es
Sentirse parte de un grupo, una sociedad o de una institución, esto tiene su origen en la familia ya
que es el primer grupo al que pertenecemos. Al serle fiel al grupo y siguiendo sus normas se da
una identidad y una seguridad, mientras más segura se sienta la persona, más elevado será su
sentimiento comunitario y estará más dispuesta a seguir normas de convivencia. (Gelvez
Landazabal, 2015)
Esto se logra a través de la intercomunicación entre los participantes de estos grupos,
puesto que tienen maneras distintivas de relacionarse usando su propio lenguaje y
códigos de comportamiento, que se afirmará en la interacción con otras personas, al
defender estos espacios.
2.2 LIGAS DE FÚTBOL BARRIAL
El fútbol llega a Ecuador en 1903, precisamente a Guayaquil, por su ubicación portuaria
y por los negocios que mantenían los ciudadanos ingleses en el país; años después
empezaría a masificarse, principalmente por la construcción del ferrocarril, por lo que se
lo conoce en Quito entre 1906 y 1924, es así que:
El fútbol apareció por acciones espontáneas que brotaron en un terreno solitarios de una esquina
del barrio; en los patios de la escuela, en la casa de un amigo caracterizando un punto de unión,
amistad, entusiasmo por una novedad, creando jubilo, alegría y competencia sana, para organizar
equipos, clubes de balompié; se formó en cada sector de la ciudad, en las diferentes clases
sociales y que en su mayoría eran zapateros, sastres remendones, talabarteros, hojalateros,
joyeros, relojeros, carpinteros, pintores, pequeños comerciantes, etc (Beltran y Novoa, 2007,
p.42)
Como resultado de esto, y la reciente aparición del fútbol, se fueron buscando lugares
para practicar el deporte, por lo que el espacio de más fácil acceso fue la calle del
barrio, que “es la célula primitiva donde el fútbol simplemente nace. En la calle, el
Estado no existe, es más, se desarrolla a sus espaldas” (Carrión, 2006, p.180), este sitio
serviría de punto de encuentro para niños y jóvenes.
Es así que con el pasar de los años y la rápida urbanización de las ciudades, fue más
difícil jugar en la calle, porque además se empezó a prohibir que se lo practique en estos
espacios, introduciéndose de esta manera en los barrios, que es “el ámbito privilegiado
de la connotación cultural de la identidad, de la construcción del sentido de pertenencia
23
de la población y de la matriz territorial en la cual se inscribe el vecindario” (Carrión,
2006, p.183) , esto permitiría el forjamiento de amistades y la creación de equipos,
acentuando el sentido de pertenencia a estos espacios, por lo que buscarían representar a
su barrio a través de este deporte, surgiendo de esta manera la Liga Barrial.
En consecuencia, para 1948 se empiezan a realizar torneos amistosos en “barrios como
La Tola y San Blas” (Terán, 2015, p.32), hecho que podría considerarse como el
nacimiento del fútbol barrial, posteriormente “el 3 de noviembre de 1951, se convocó a
los clubes existentes de la parroquia San Blas para fundar la primera Liga Jurídica,
denominada La Tola” (Segarra, 2010, p.29). De esta forma Carrión (2006) menciona
que:
La Liga Barrial como órgano institucional de gestión del deporte barrial logra legitimarse ante su
membresía cuando se apropia de un territorio especializado del barrio para el desarrollo de la
práctica deportiva: la cancha (p.183).
A partir de esto, diferentes barrios de la ciudad se fueron organizando de la misma
manera, por lo que se empezaron a conformar cada vez más equipos y ligas, que
buscaron fortalecerse más, hecho que llevó al señor Carlos Castañeda, el 3 de
noviembre de 1951, a convocar en el diario “El Sol”, a los equipos de fútbol de la
parroquia San Blas, para fundar la primera Liga Jurídica, con el nombre “La Tola”.
Posteriormente, se organizarían otras ligas barriales, utilizando el modelo seguido por
“La Tola”, una vez que se constituyeron, se buscó la creación de una institución que
regule y programe la actividad deportiva de Quito, para Terán (2015) este hecho llevaría
a los dirigentes barriales a organizarse, fundando así la Federación de Ligas Barriales, el
18 de marzo de 1957, siendo la primera institución en agrupar las ligas deportivas de la
ciudad, constituidas por: La Tola, Chaupicruz, La Magdalena, San Juan, Santa Prisca y
la Central Obrera de Chimbacalle. Después, en 1970 el municipio les concedería un
predio, que para 1984 se conocería como el edificio de la Casa del Deporte Barrial.
La Federación de Ligas Barriales y Parroquiales del Cantón Quito (2017) menciona lo
siguiente:
La Federación de Ligas Deportivas Barriales y Parroquiales del Cantón Quito es organización
deportiva de derecho privado, autónoma y sin fines de lucro, cuyo ámbito de acción es el Distrito
Metropolitano de Quito. Fue fundada el 18 de marzo de 1957. Está integrada por 88 ligas
deportivas barriales y parroquiales; su ámbito de incidencia es en unas 150.000 personas. Su
funcionamiento está basado en la labor voluntaria y desinteresada de sus dirigentes, quienes son
electos de una forma democrática, mediante voto directo de los representantes de sus ligas
filiales, y cuya acción está regida por la Constitución de la República, la Ley, los Estatutos y los
correspondientes reglamentos de la Institución.
24
Tabla 1. Organigrama de la Federación de Ligas del Cantón Quito
Fuente: Federación de Ligas Deportivas Barriales y Parroquiales del Cantón Quito (2007)
25
CAPÍTULO 3
METODOLOGÍA
3.1 INVESTIGACIÓN CUALITATIVA
La presente investigación se inscribe en el modelo cualitativo -en tanto- la comprensión
de la interacción, implica entender los significados que atribuyen las personas a las
relaciones y actividades que realizan dentro de una práctica social, de hecho “se
fundamenta en una perspectiva interpretativa centrada en el entendimiento del
significado.” (Sampieri, 1998, p.9), es decir qué sentido tiene para los sujetos la
vivencia del futbol barrial, sus formas organizativas y las relaciones que se establecen
en esta práctica social en la Liga Barrial Municipal.
En este marco, si la investigación cualitativa se la define como:
Un conjunto de prácticas interpretativas que hacen al mundo visible, transforman y convierten en
una serie de representaciones en forma de observaciones, anotaciones, grabaciones y
documentos. Es naturalista (porque estudia a los objetos y seres vivos en sus contextos ambientes
naturales) e interpretativo (pues intenta encontrar sentido a los fenómenos en términos de los
significados que las personas les otorguen). (Sampieri, 1998, p.9).
Es evidente entonces, que al buscar entender e interpretar esta expresión de la realidad
social, no es viable tratar los fenómenos que ocurren dentro de estos espacios de manera
estadística o medible, porque cada persona y grupo humano se maneja de formas
diferentes, de acuerdo a las experiencias y al contexto en el que se encuentran.
Su enfoque rechaza la pretensión racional de solo cuantificar la realidad humana, en cambio da
importancia al contexto, a la función y al significado de los actos humanos, valora la realidad
como es vivida y percibida, con las ideas, sentimientos y motivaciones de sus actores. (Mesías,
p.1)
Por lo que interesó comprender como vivenciaron los actores de la liga Municipal, su
historia y sus relaciones, que motivaciones son los que impulsaron ser sujetos actuantes
en este proceso.
En esta misma línea de reflexión, Guillermo Orozco (2000) plantea que la investigación
cualitativa desde una perspectiva comunicacional es:
26
Un proceso de indagación de un objeto al cual el investigador accede a través de interpretaciones
sucesivas con la ayuda de instrumentos y técnicas, que le permiten involucrarse con el objeto
para interpretarlo de la forma más integral posible. ( p. 83).
Significa entonces, que para realizar el presente estudio, se tuvo acercamientos con
distintos actores, y así encontrar el sentido comunicacional del proceso de interacción.
3.2 TÉCNICAS DE INVESTIGACIÓN
Dadas las condiciones que anteceden, fue necesario asumir varias técnicas que guíen la
investigación, por lo que se utilizó a la etnografía, como técnica1, que permite
“describir contextualmente las relaciones complejas entre prácticas y significados para
unas personas concretas sobre algo en particular” (Restrepo, 2016, p.16). Bajo este
presupuesto, fue importante interactuar con los sujetos en sus locaciones naturales, esto
nos permitirá comprender los significados que atribuyen a cada actividad que realizan
dentro de la Liga Municipal.
El propósito de la investigación etnográfica es describir y analizar lo que las personas de un sitio,
estrato o contexto determinado hacen usualmente; así como los significados que le dan a ese
comportamiento realizado bajo circunstancias comunes o especiales, y finalmente, presenta los
resultados de manera que se resalten las regularidades que implica un proceso cultural. (Alvarez-
Gayou, 2003, citado en Salgado, 2007)
En este sentido, se aplicaron, otras técnicas cualitativas vinculadas a la comunicación
como la observación participante, la entrevista a profundidad y testimonio de vida, para
realizar el trabajo de campo, que permite hacer el levantamiento de la información, y
describir los fenómenos que ocurren dentro de la liga barrial.
El trabajo de campo, (…), hace referencia a la fase de investigación orientada
predominantemente a la obtención de los datos. Por tanto, es la fase en la cual se ponen en juego
1Se ha tomado como referencia la idea de Restrepo (2016) sobre etnografía, él menciona que “la etnografía suele significar tres cosas distintas. En primer lugar, se ha considerado que la etnografía es una técnica de investigación que estaría definida por la observación participante. (…) La etnografía también se entiende como un encuadre metodológico. (…) La metodología es la manera particular en que se operacionalizan ciertas técnicas de investigación y cómo se articulan consistentemente varias de ellas en función de una pregunta o problema de investigación; por lo tanto, la metodología apunta a sustentar el cómo se realiza la investigación. El método, por su parte, tiene que ver con una discusión más amplia que articula las convicciones que llevan al investigador a resolver su investigación de la manera en que decidió hacerlo. De cierta manera, la discusión que supone el método no es tanto por la elección de las técnicas utilizadas sino que es de carácter epistemológico: refiere al porqué del cómo, esto es, sustentar persuasivamente las razones que articulan coherentemente los presupuestos teóricos y conceptuales de la investigación con la metodología que se diseñó”. (p. 31- 32)
27
las diferentes técnicas de investigación y la metodología en aras de levantar empíricamente la
información requerida para responder a la pregunta de investigación. (Restrepo, 2016, p. 36).
Ante la situación planteada, se aplicó la observación participante, eso implicó estar en el
espacio con los sujetos y compartir las actividades que realizan, para tener una
comprensión más amplía del fenómeno de estudio, en este sentido Cruz (2007)
menciona que esta técnica “se realiza a través del contacto del investigador con el
fenómeno observado para obtener informaciones sobre la realidad de los actores
sociales en sus propios contextos” (p.47).
En consecuencia, esta técnica nos permitió advertir detalles como: los espacios que son
asignados a cada actividad, el comportamiento de las personas de acuerdo al lugar en el
que se encuentran, la forma de expresarse ante las situaciones que se les presentan o los
rituales que tienen los equipos de fútbol.
El trabajo del observador de campo requiere plantearse una serie de cuestiones o estrategias
antes y durante su estancia en el lugar de estudio. Antes de la entrada al campo y una vez
decidido el problema central de estudio, tendrá que tomar decisiones acerca de la selección del
escenario o escenarios de observación: cuando y donde acuden, con quien hablan, a quienes
observan, etc. (Munarriz, p. 111).
En efecto, una vez que se hizo el primer acercamiento, fue necesario realizar un diálogo
informal, con los directivos de la institución, para indicarles sobre la investigación que
se iba a llevar a cabo, esto permitió definir específicamente con que personas se haría el
levantamiento de la información, para conocer los aspectos más relevantes de la liga
barrial, pero sobre todo para familiarizarse y crear confianza con las personas que
serían entrevistadas.
Las entrevistas no son una técnica de investigación para instrumentalizar en los primeros
momentos de trabajo de campo, sino cuando ya el investigador tenga unos conocimientos
básicos y, sobre todo, haya creado relaciones de confianza con sus posibles entrevistados”
(Restrepo, 2016, p. 56).
Después de lo anteriormente expuesto, fue posible hacer entrevistas semiestructuradas
que es cuando “hay temas y subtemas con preguntas amplias (no específicas), que
permiten que el entrevistado pueda semiconectarse libremente con el subtema
abordado” (Orozco, 2000, p.108). Este tipo de entrevistas fueron aplicadas a las
personas que estuvieron desde el nacimiento de la institución, además para
complementar la información se aplicó una variante de las historias de vida, bajo la
determinación de testimonio, que sirve para recabar información de experiencias de vida
de los sujetos sobre una situación específica.
28
Hecha la observación anterior, Restrepo (2016) menciona que la historia de vida es
“producto del diálogo; se elabora en el contexto de una relación entre una demanda de
conocimiento por parte del investigador y un bien, el saber que tiene el entrevistado”
(Restrepo, 2016, p.62). Resulta preciso aclarar que para aplicar esta técnica, son
necesarias varias sesiones de entrevistas a profundidad, con el fin de conocer todos los
aspectos concernientes a la institución y los cambios que se produjeron a lo largo del
tiempo.
Con referencia a lo anterior, Galindo Cáceres (1998) menciona que la entrevista a
profundidad se “utiliza técnicamente en la metodología de historias de vida como un
ejercicio de recopilación de información sobre acontecimientos y experiencias sociales
que no se pueden observar directamente” (p.306). Al respecto Galindo Cáceres (1998)
menciona que este tipo de entrevistas permiten
La reconstrucción de acciones pasadas, ya sea la construcción de enfoques biográficos (historias
de vida), la creación de archivos orales o, más bien, el análisis retrospectivo de una acción o un
acontecimiento social” (p. 309).
Todo esto con el fin de hacer una reconstrucción cronológica de la historia de la Liga
Municipal, por lo que además del diálogo, fue necesario la compilación de documentos
y fotografías, que nos permitieron encontrar información relevante que los entrevistados
obviaron, como es el caso de la revista de la institución, que sirvió para dar cuenta de
cómo se manejaba la organización en sus inicios. Asimismo, el registro documental y
los recortes de prensa, sirvieron para ubicar las fechas exactas de los acontecimientos
narrados.
Cabe destacar que el registro visual, es importante en esta investigación, en el sentido
que “amplía el conocimiento del estudio porque nos permite documentar momentos o
situaciones que ilustran el cotidiano vivido” (Cruz 2007: 49), puesto que a través de las
fotografías se puede observar el cambio y la trasformación que tuvo la Liga Municipal
desde sus inicios, a principios de los años 60, hasta la actualidad, que permite además
contextualizar y dar veracidad a los datos brindados por los actores.
Sobre la base de las consideraciones anteriores, debemos tener claro que la interacción
es un proceso que no involucra solamente el lenguaje oral o gestual, sino que se
tomaron en cuenta los distintos lenguajes que están inscritos en registros, como el
textual o el visual, con el fin de precisar todos los significados que encierra el proceso
de comunicación dentro de estos espacios.
29
Nos comunicamos mediante la construcción de significados/sentidos compartidos (o
fragmentariamente compartidos) a través de distintos códigos. Estos, como sistemas de signos
gobernados por reglas, sean analógicos o digitales, pueden tener mayor o menor grado de
formalización o gramaticalización e incluyen no solo la lengua, oral o escrita, sino diversos
intercambios no verbales: lo corporal, lo gestual, la mirada, el movimiento y la distancia, hasta
los propios sentidos” (Ford, 2002, p.21)
Alrededor de las técnicas mencionadas en párrafos anteriores, se definieron los campos
de la investigación, ya que por un lado se hizo el estudio de registro y los testimonios de
vida, para reconstruir la historia de la organización, mientras que por otro aportaron
para definir las cuestiones que tienen que ver con las relaciones que establecen dentro
de la Liga Municipal a través de las interacciones producidas cada fin de semana.
En ese mismo sentido fue necesario hacer esquemas que contengan los principales
temas abordados durante el marco teórico, con el objetivo de tener una congruencia
entre la teoría abordada y la investigación de campo. Una vez definidos estos aspectos
se procedió a realizar entrevistas etnográficas, que nos permitió obtener los datos para
comprender las motivaciones y las formas en que se relacionan las personas en estos
espacios, de manera que se entrevistó a los directivos de los equipos y los jugadores,
Restrepo (2016) considera que a través de la entrevista, se pueden conocer aspectos que
con otras técnicas no sería posible como:
Acceso a las percepciones y valoraciones que los entrevistados poseen sobre
situaciones, hechos y personajes, así como sus deseos, temores y aspiraciones.
Descripción de saberes, artes y oficios desempeñados o conocidos por el entrevistado,
así como de la urdimbre de relaciones sociales en las cuales se encuentra inscrito.
Pesquisa del conocimiento y epistemología local expresados en la cosmovisión de los
entrevistados. (p. 56)
Esto permitió que nos vayamos adentrando más en la organización, con la finalidad de
entender todos los elementos que entran en juego durante la interacción, como el tipo de
acciones que llevan a cabo los sujetos, de acuerdo al lugar y la situación que se les
presenta, además de los rituales que organizan las relaciones dentro de la institución. De
igual forma, consideramos necesario abrir nuevos espacios de diálogo con el barrio de la
Mena Dos, para indagar cuál es su perspectiva y la forma en que perciben a la Liga
Municipal.
Se analizaron los siguientes elementos:
Historia de la Liga Municipal: A través del análisis de los testimonios y los
registros, tanto documentales como visuales, permitió describir las primeras
30
formas de organización, la cuestión de la territorialidad y el espacio, la
estructura organizativa y la conformación de los equipos de fútbol.
Roles: Se entendieron como las conductas que definen y orientan la forma en
que interactúan los miembros de la Liga Municipal, de manera que estudiamos a
los equipos de fútbol, dirigentes, jugadores, hinchas y árbitros.
Símbolos: Son los significados compartidos por grupos particulares que
influencian a los sujetos para actuar de una forma determinada, expresadas en
las ligas barriales, a través de diversos elementos como uniformes, escudos y
banderas; elementos que tienen la finalidad de diferenciar a las personas a través
de la identificación y apropiación de estos.
Rituales: Fueron entendidos como el sistema de reglas que rigen la manera en
que interactúan las personas, ante diversas situaciones. Es decir los
comportamientos establecidos que tienen los actores dentro de la Liga
Municipal, al momento de realizar alguna actividad, que pueden ser las formas
en que los equipos salen a la cancha, el comportamiento dentro de los camerinos
y las conductas que se instauran antes, durante y después de los encuentros
deportivos.
Espacios: Dentro del marco de la interacción, esta categoría es importante,
puesto que, determina el comportamiento de las personas según el significado
que atribuyan a cada lugar. En efecto, se describieron los propósitos que tienen
los espacios dentro de la institución y las actividades que se realizan dentro de
estos, es así que se tomó en cuenta el estadio, camerinos, graderíos, bar y los
espacios de comunicación que existen en la Liga Municipal.
3.3 PROCESAMIENTO DE LA INFORMACIÓN
Por último, el procesamiento de información, es una interpretación que se produce a
partir del registro y los diálogos mantenidos con los distintos actores, donde se
examinaron todos los campos tratados a lo largo de la investigación, mediante una
matriz de análisis por campo propuesto, de manera que valoramos la información
recabada, a fin de agrupar los datos obtenidos en las categorías establecidas, para
después proceder a explicar los resultados obtenidos durante la investigación.
31
En este sentido, Guillermo Orozco (2000), menciona que el campo de la comunicación
proporciona “un involucramiento que tiene límites y también posibilidades” (p.84),
debido a que existe la oportunidad de llegar a las conclusiones más rápido, incluyendo a
más sujetos de investigación, ideándose técnicas que permitan invertir menos tiempo,
energía y recursos en general.
Cabe destacar que los resultados obtenidos fueron evaluados para tener claro si es
necesario seguir ahondando en la investigación, siempre pensando en los
condicionamientos que pueden presentarse durante este proceso, teniendo en cuenta que
hay personas que por la edad o la salud ya no son parte de la Liga Municipal, pero que
aportaron mucho a este trabajo académico; también durante el estudio, se tuvo que
considerar, que la programación se realizan únicamente los fines de semana,
reduciéndose el tiempo para obtener la información necesaria para llegar a una
conclusión, pese a que el estudio fue realizado por un lapso de dos meses.
3.4. MUESTREO DE LOS ACTORES
Para aplicar las técnicas cualitativas explicadas en los párrafos anteriores se hizo una
segmentación de los actores que componen la Liga Municipal, con la finalidad de
conocer las funciones y roles que cumple cada uno, de esta forma se trabajó con: ex
dirigentes barriales, dirigentes, jugadores y personas que han hecho aportes a estas
agrupaciones desde las instituciones estatales locales. Además, se debe tener en cuenta
que estas personas permitieron llegar a informantes, que complementaron la
información obtenida a lo largo de la investigación.
Cabe destacar que para citar los diálogos mantenidos con los actores de la institución, se
asignó un código, con el fin de preservar la confidencialidad de sus testimonios.
GM, Presidente de la Liga Barrial Municipal
WS, Vicepresidente de la Liga Barrial Municipal
EM, Presidente de la Liga Barrial Municipal de 1979 a 1981
RV, Fundador del Club Pichincha
WA, Club Hermano Miguel
JA, Fundador del equipo Excélsior
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LT, Club Necaxa
AG, Club Hermano Miguel
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CAPÍTULO 4
EXPOSICIÓN DE RESULTADOS
4.1. HISTORIA DE LA LIGA MUNICIPAL
En la década de 1950, el municipio de Quito empezó a desarrollar políticas de
urbanización en la ciudad, debido al crecimiento sin control y a la especulación de la
tierra por parte de los terratenientes, ejecutando planes que organicen territorialmente
las diferentes zonas urbanas.
La propuesta contempla por un lado, el desarrollo concéntrico o nucleado de funciones: centro
cívico, centro deportivo, centro cultural, etc.; y, por otro lado, la especialización del territorio por
usos y zonas demarcadas: zonas de vivienda (obrera, media, residencial), zonas de trabajo
(industria, artesanado, oficinas y negocios), y zonas de esparcimiento (deportes, paseo y
descanso). (Carrión y Erazo, 2012)
Esta forma de organización urbana, es considerada como antecedente para que en 1952
surja la Liga La Tola, que es calificada como una de las primeras entidades jurídicas y
reconocidas del deporte barrial, ésta sería la que da el puntapié, para que otros barrios se
organicen y se apropien de los terrenos baldíos que se encontraban en la ciudad.
En Quito, (…) el carácter especulativo del suelo urbano y la forma alargada de la ciudad dieron
lugar a la existencia de –espacios vacíos– en los intrínsecos urbanos y en los espacios abiertos en
las periferias. Estos lugares, por la proximidad a la función residencial y por ser proclives a la
práctica deportiva, fueron los espacios donde inicialmente se jugó al fútbol. (Carrión, 2006,
p.183)
Significa entonces, que las ligas barriales surgieron en ciertos sectores que aglutinan el
crecimiento poblacional, institucionalizándose al momento de construir la cancha de
fútbol, con el tiempo y la continuidad de las actividades que se realizan en estos
espacios, va construyéndose un sentido de pertenencia, tomando en cuenta que es el
sitio donde se reúne la comunidad, es así que se constituyen en otras formas de
centralidad, al organizar la vida del barrio en torno a la práctica deportiva. Después, con
el crecimiento urbano, se modifica la conformación de la ligas, extendiéndose a otros
lugares de la ciudad, pasando a ser interbarrial.
34
Sin embargo, el caso de la Liga Barrial Municipal es bastante particular, en el sentido
que al fundarse no tiene una zona definida, recorriendo varias canchas de Quito antes de
establecerse en un solo sitio, por lo que las centralidades son de los equipos fundados a
partir de la rivalidad de los barrios del centro de la ciudad, no del espacio, como se
mencionaba en el párrafo anterior, movilizándose las cuestiones de inscripción a un
lugar, por lo que una vez que encuentran donde asentarse, se convierte en un espacio
interbarrial desde el primer momento.
4.1.1. EL ORIGEN
A partir de la disidencia de varios directivos y equipos de la Liga San Sebastián en
1957, se crea una nueva agrupación con el nombre de Liga Municipal, en donde el señor
Leonardo Alzamora se desenvolvió como promotor y presidente, junto con Hugo
Pacheco, vicepresidente, y el Sr. Jorge “chino” Carrera, periodista de radio Tarqui,
como secretario. Se opta por esta nueva nominación, pensando que recibirían apoyo del
Municipio, sobre todo en cuanto a infraestructura se refiere.
Años más tarde, durante una sesión en 1961, interviene el Sr. Samuel Bautista, uno de
los promotores de fundar la Liga, y hace una amplia exposición sobre las ventajas de
constituirse como institución deportiva barrial jurídica, que les permita la práctica
organizada del deporte y la recreación, a la vez del trabajo mancomunado dentro de la
comunidad.
Por consiguiente, el 15 de enero de 1962 en la parroquia San Sebastián, en la calle
García Moreno 254 y Ambato, se reúnen varias personas vecinas de la localidad con el
fin de conformar la Liga Deportiva Barrial “Municipal”, sujetándose a las disposiciones
de la Ley de Educación Física, Deportes y Recreación.
Es así que se nombra al primer directorio provisional que, mediante votación,
posesionan a las siguientes personas:
Presidente: Luis Ibarra
Vicepresidente: Alfredo de la Cruz
Secretario: Eduardo Gutiérrez
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Tesorero: Olguer Heredia
Primer Vocal: Robinson Proaño
Segundo Vocal: Iván Acuña
Tercer Vocal: Rómulo Urquizo
Título 1.Primer Presidente de Liga Municipal, 1961
Fuente 1: Propia
Después de un mes, el 5 de febrero de 1962, aprueban los estatutos, enviándolos al
Consejo Nacional de Deportes para su respectiva aprobación y su posterior publicación
en el registro oficial. En el año de 1963 se afilia a la Federación de Ligas Deportivas
Barriales y Parroquiales del Cantón Quito, y la personería jurídica la obtiene el 11 de
agosto de 1993 con Registro Oficial Nº 251.
4.1.2. ESPACIO Y CONFLICTOS
En busca de una sede social
La Liga Municipal se crea con la particularidad que no tenían espacio propio, razón por
la cual debían buscar un lugar para realizar las sesiones y su programación deportiva, de
manera que las primeras reuniones se realizaron en los billares “Cenit”; ubicado frente
36
al teatro Atahualpa, en las calles Venezuela y Bolívar, en el Centro Histórico de Quito,
dónde se inscribieron los primeros equipos llamados: Toluca, Teniente Hugo Ortiz,
Juvenil 5 de Junio, Pichincha, TAME, Cristal, Loja, Estadio y Real Cúcuta. En la
actualidad sólo existen el Club Pichincha y Cúcuta (JA, 12 de septiembre 2017).
Título 2. Publicidad del Club "Cenit", publicado en la revista "Deporte, Trabajo y Cultura", 1965
Fuente 2. Familia Mantilla
Para el año de 1961 pasan a reunirse en el domicilio de la familia Albuja, ubicado en las
calles Quijano y Loja, por el que pagaban de arriendo 7 sucres mensuales, cuando no
podían cancelar este valor les quitaba la luz (EM, 7 de octubre 2017).
Posteriormente, el Sr. Rodrigo Moreno, consigue unas instalaciones donde podrían
realizar las sesiones de la Liga, prestada por el Sindicato de Cadeneros, ubicada en la
parte superior de la cárcel García Moreno, en el complejo Yavirac (GM, 24 de
septiembre 2017).
Por último, en el año de 1999, durante la presidencia del Sr. Vicente Camacho, se
construye la sede social en la Mena 2, propiedad de la Liga Municipal, dónde los
dirigentes sesionan hasta la actualidad.
37
Un lugar para jugar
En vista que tampoco contaban con espacio deportivo, tenían que recorrer varios lugares
de Quito, para realizar su programación, como: Liga Iñaquito, Liga Chillogallo, Liga
San Bartolo, Liga La Magdalena, incluso una final de su torneo la efectuaron en el
estadio Olímpico Atahualpa en el año de 1968, a las ocho de la mañana, donde el Club
Recoleta le ganó el campeonato al Club Minerva, jugando como preliminar de un
partido entre Liga de Quito y Aucas (EM, 7 de octubre 2017).
Después de varios años de ir de un lado a otro, solicitando se les preste una cancha, a
principios de 1970 obtienen el primer terreno, ubicado en el sector del Panecillo, logro
obtenido por el señor Samuel Bautista, estas instalaciones no pudieron ser utilizadas por
la oposición existente de los moradores del barrio y cuyo principal opositor era la Sra.
Luz Endara conocida como “Mama Lucha”, por lo que empiezan a hacer las gestiones
para obtener el terreno de la Hacienda Mena 2, donde funciona actualmente.
Sin embargo, la primera propiedad se consiguió en el Colegio Montufar, por gestión de
los Sres. Guillermo Serrano, Ernesto Flores, Samuel Bautista, Iván Bustillos, Rodrigo
Moreno, Víctor Ramos y Eduardo Mantilla. El terreno estaba ubicado en donde se
encontraba la piscina abandonada, en la parte superior del colegio, cedido mediante
comodato verbal, llegando a un acuerdo entre las autoridades del colegio y la Liga
Municipal, en el que se expresaba que podían usar las instalaciones a cambio de las
mejoras del espacio, razón por la cual empezaron a construir la cancha reglamentaria de
fútbol.
Una vez que se obtiene el terreno, empiezan con la construcción de los primeros
camerinos realizados por el Consejo Provincial de Pichincha. El contratista fue el Ing.
Luis Chiriboga, que a la postre fue el presidente de la Federación Ecuatoriana de Fútbol
de 1998 al 2016. Después implementaron graderíos y una pista atlética, mientras que
por gestiones del Sr. Vicente Camacho se realizan nuevos camerinos y la visera de los
graderíos.
No obstante, en el 2016 el Colegio Montúfar fue intervenido, razón por la cual se
impidió que la Liga Municipal siga utilizando las instalaciones de este establecimiento,
donde se desarrollaba la máxima categoría, esta decisión trajo varios problemas a la
institución porque durante ese año no pudieron realizar el torneo con normalidad (GM,
24 de septiembre 2017).
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Título 3. Nota de prensa publicada en el diario Extra, 2016
Fuente 3: Facebook Liga Municipal.
El Presidente de la Liga Municipal, Sr. Guillermo Mantilla, menciona que “al no existir
documentos legales donde conste que se pueden utilizar estos espacios, se complican las
negociaciones para volver a jugar en esa cancha. A través de la Dirección Distrital de
Educación, se están haciendo las diligencias para volver a usarla”. El afán de los
directivos por conseguir este espacio, es porque la institución deportiva hizo todas las
adecuaciones que existen en el lugar.
De igual manera, en 1974 consiguen su segundo terreno a través del Municipio, y es
entregado al Presidente de la Liga Deportiva Parroquial “Municipal”, como se la
conocía en ese momento, Sr. Ernesto Flores, mediante un comodato por 50 años, el
predio está ubicado en la Mena Dos, tiene una superficie de 5.400 metros cuadrados,
que en su momento fue avaluado por cuatrocientos veintitrés mil sucres.
El 21 de junio de 1974, con un programa especial realizado en el Salón de la Ciudad y con la
presencia de los principales personeros: el Prefecto, Dr. Álvaro Pérez Intriago; Alcalde Arq.
Sixto Durán Ballén; Vicepresidente de la Concentración Deportiva de Pichincha, Alberto
Estrella; Consejeros de la Provincia y Concejales de Quito, fueron firmadas las escrituras de
entrega de comodatos de ocho canchas deportivas para las ligas barriales: Cotocollao, Conocoto,
Iñaquito, La Tola, Alangasí, La Vicentina, Municipal y Oriental (La Batea). (Quito, 2007, p. 64)
Esto ocurre pese a que la totalidad de los equipos pertenecían al centro de la ciudad, sin
embargo, para esta época, Quito había tenido un crecimiento importante en su
39
población, por lo que en 1973 se empezaron a construir los túneles por el crecimiento
de la carga vehicular. (Puente, 2016)
Las transformaciones de Quito (como organización urbano-territorial) no se hicieron esperar:
entre 1962 y 1980 el área urbana tuvo un crecimiento cercano al 500 %, y en ella no se
consideraron las áreas conurbanas ni el crecimiento en altura; la densidad global de la ciudad
bajó ostensiblemente de 213 a 68 habitantes por hectárea; aparecieron nuevas alternativas
residenciales para los sectores de bajos ingresos en los eufemísticamente considerados «barrios
periféricos»; se produjo una relocalización de las actividades industriales, comerciales y
administrativas; el parque automotor de la ciudad creció en más de seis veces, etc. A la par del
conjunto de la ciudad, se modifica el uso del suelo. (Carrión y Erazo, 2012)
El Sr. Guillermo Mantilla, presidente de la Liga Municipal, recuerda que para
movilizarse a la cancha de la Mena Dos, debían ir a la 24 de Mayo, donde se encontraba
una especie de terminal, aquí debían tomar el bus conocido como “Chillogallo - 24 de
Mayo”, y desde ahí era un viaje largo, a pesar que para ese entonces Quito no era tan
extenso, llegar al sector resultaba difícil por su acceso, dado que estaba lleno de potreros
y haciendas (GM, 24 de septiembre 2017).
Cabe destacar que por estos años el Centro Ecuatoriano de Investigación Geográfica
(CEDIG), realizó estudios acerca del peligro que representaba el crecimiento desmedido
en la ciudad de Quito, debido a que se pasa de menos de 100.000 habitantes a principios
de 1900 a casi un millón de habitantes para el censo de 1982 (Blanca Carrera, citado por
CEDIG, 1984). Es por esto que en el estudio realizado por la CEDIG (1984) se cita a
Nelson Gómez (1983) que realiza un estudio llamado “La Mena II, un barrio de Quito
con una lesión congénita”, donde menciona:
Construido en una zona donde había existido una red de túneles subterráneos que originaron
hundimientos en la época de grandes lluvias. Se supone que los túneles tenían por objeto extraer
arena, pero es una incógnita –su desarrollo en forma de caracol, que culmina en una verdadera
estancia de algunos metros de superficie-. Concluye que la Mena II es -un barrio populoso en
permanente estado de emergencia- (Gómez, 1983, citado por CEDIG, 1984)
Es por esto que las personas que pertenecen a la institución, mencionan que en el lugar
donde se construiría las instalaciones de la Liga Municipal, se parecía a un chaquiñán
debido al mal estado del sector, además tenían que arreglárselas para practicar este
deporte, precisamente porque esta zona, como muchas otras de la ciudad de Quito, era
un relleno (WS, 10 de septiembre 2017).
A pesar de que ya contaban con un terreno propio en 1983, el Dr. Álvaro Pérez,
mediante memorando Nº 0798 M, pide a la Dirección Administrativa tenga una reunión
con el Presidente de la Liga Municipal, Rodrigo Moreno, por la solicitud de una
permuta del terreno que ocupa la Pelota Nacional en la hacienda Mena Dos, para que
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ahí se construya el estadio de la liga, puesto que este terreno fue el que negociaron
desde un principio, pero cuando estaba por concluir el trato, se optó por construir el
complejo de la Pelota Nacional.
Título 4. Memorándum emitido por el Municipio de Quito, 1983
Fuente 4: Familia Mantilla
En 1986 y gracias al apoyo del Municipio de Quito, se llevó adelante la edificación de
cuatro camerinos por el valor de un millón quinientos mil sucres, teniendo como alcalde
de Quito al Sr. Rodrigo Paz Delgado; su complejo se encuentra ubicado en la ciudadela
Vencedores de Pichincha, en la calle Portoviejo y Río Nuevo, sector de la Mena Dos.
Por último, para el 2017, se hizo necesario implementar luminarias, para poder realizar
el torneo con normalidad, por lo que se recibe el apoyo de todos los equipos que
conforman la institución.
4.1.3 COMUNICACIÓN
Al momento de fundarse la Liga Municipal, la comunicación era un aspecto muy
importante, debido a que el modo de organización se parecía a la del fútbol profesional,
41
es por esto que se tenían delegaciones destinadas a relacionarse directamente con
medios de comunicación locales, como el diario "Últimas Noticias".
La importancia de esto radicaba en los intentos que hacían las ligas barriales, para que
publiquen las actividades que realizan en los medios de comunicación locales, con el fin
de ser reconocidos por la sociedad.
En esta etapa de formación del fútbol barrial organizado como parte importante del directorio del
club, se nombró un secretario de prensa y propaganda, elegido del grupo de dirigentes que
iniciaba un nuevo proceso de trabajo voluntario, el objetivo era tener una relación directa con los
medios de comunicación. Diríamos que esta función de informar de las actividades que realiza la
organización barrial para ser destacada en los medios; el secretario de prensa, se convertiría en el
reportero de la información barrial, quien entregaba la programación de los partidos de fútbol
que se establecía en la liga o en el barrio. (Ramírez, 2004, p. 93)
Por esto, para 1965 el Secretario de Prensa y Propaganda era el Sr. Eduardo Córdova,
mientras que los asesores técnicos culturales eran Víctor Fernández y Pedro Zambrano;
estas personas eran los reporteros de la institución, tenían el trabajo, voluntario por su
puesto, de entregar la información de los campeonatos y las actividades que realizaban,
a los medios de comunicación, estos a su vez apoyaban al deporte barrial, mediante
contribuciones, que servirían para publicar la revista de la liga.
Como consecuencia de esto, está el tercer número de la revista, llamado “Deporte,
Trabajo y Cultura”, que contaba con varios auspiciantes que hacían posible su
publicación desde 1964.
Título 5. Patrocinadores de la revista "Deporte, Trabajo y Cultura"
Fuente 5: Familia Mantilla
42
En este medio, los principales temas que se tratan, están enfocados a las necesidades
que tenían varias ligas barriales para realizar sus actividades, debido a que no contaban
con las instalaciones necesarias; además, lo utilizan para denunciar los abusos de los
políticos hacía estas instituciones, como es el caso del artículo llamado “Yo te ofrezco”,
donde mencionan el actuar de algunas personas, que acuden al deporte barrial a ofrecer
varias cosas, con el único objetivo de alcanzar votos, después del periodo de elecciones
desaparecían sin cumplir nada de lo prometido anteriormente.
Del mismo modo, a través de este medio se puede conocer la importancia que tiene la
construcción de espacios deportivos, sobre todo para los jóvenes que carecen de lugares
para la práctica del fútbol. Es así que en el artículo llamado “¿Cuál es la semilla del
profesionalismo?” mencionan:
De aquí la necesidad de que las Autoridades, sobre todo Municipales, ayuden al crecimiento de
esos cientos de semillas que con peligro de su vida, practican el deporte en las calles. La solución
está en proporcionarles canchas deportivas, construyendo lugares en los que libre de peligro,
pueda la juventud ver florecer sus más sanas aspiraciones. (Marcial Páliz, 1965, p.4)
Además de estos temas, se utiliza a este medio para informar sobre los logros de
diversos equipos de la liga barrial, ya sea en competiciones con otras ligas o en torneos
internos, presentando tablas de posiciones y felicitando a los ganadores de estas
competiciones. El sumario de la tercera edición de la revista de la Liga Municipal es la
siguiente:
Título 6. Sumario de la revista “Deporte, Trabajo y Cultura”, 1965
Fuente 6: Familia Mantilla
43
4.1.4 EQUIPOS
La Liga Barrial Municipal, se fundó con equipos que representaban a sus barrios,
debido a que este era interés de los dirigentes de principios de los 60, por ello al
constituirse en San Sebastián, se crea una rivalidad, razón por la cual, los jugadores
tenían que ser únicamente de un sector, es así que los primeros clubes son de las calles
que cubren la Venezuela, Murgueytio, Guayaquil, General Maso, Ambato, 5 de Junio y
Recoleta (JA, 12 de septiembre 2017).
De esta forma los primeros equipos que se inscriben en la naciente liga barrial son:
Pichincha, Toluca, Teniente Hugo Ortiz, Juvenil 5 de Junio, y TAME.
El Club Pichincha, es fundado en 1958, en el sector de la 5 de Junio entre las calles
Ambato y Guayaquil, en sus inicios es conformado por la familia Vivanco, debido a que
8 de sus integrantes eran del equipo y el resto del barrio, en la actualidad el presidente
es Ramiro Vivanco y siguen participando los primos de él (RV, 10 de septiembre 2017).
Título 7: Logros que alcanzó el Club Pichincha a lo largo de su historia, 2017
Fuente 7: Familia Vivanco
Para el año de 1965 la Liga Municipal ya contaba con 9 equipos, hecho que consta en la
revista de la institución, acerca del torneo realizado en ese año. En la actualidad solo
existen el Club Pichincha y Cúcuta.
44
Título 8. Equipos que participaron en el campeonato de 1965
Fuente 8. Familia Mantilla
Título 9. Club Cúcuta Jr. Fundado en 1960
Fuente 9: Propia
Años después se crean dos clubes, que junto con el Club Pichincha y el Cúcuta Jr. son
los más antiguos de la Liga Municipal:
El Club Atlético Recoleta, fundado en 1966 por Víctor Ramos, en el sector de la
Recoleta, pasa a formar parte de la Liga Municipal en 1968 (Quito, 2007, p. 127)
45
Título 10. Atlético Recoleta, fundado en 1966
Fuente 10: Propia
El Club Minerva, fue fundado el 31 de junio de 1967 en las calles Murgueytio y
Ambato, por los hermanos Víctor Hugo Mantilla, Eduardo Mantilla y Rodolfo Díaz; al
momento de organizar el club, buscan a una persona que les ayude económicamente
para comprar los uniformes, por esta razón acuden donde el Sr. Lorgio Carrasco,
fundador de Café Minerva, donde llegan a un acuerdo y crean el equipo bajo el auspicio
de la institución. Apoyo que tiene hasta la actualidad con los uniformes, hubo un tiempo
que les daban una mensualidad, para pagar vocalía y arbitraje. En la actualidad lo dirige
el Sr. Eduardo Mantilla, hijo del Sr Víctor Mantilla (GM, 24 de septiembre 2017).
Título 11. Fundadores e integrantes más destacados del Club Minerva, 1967-1983
Fuente 11: Familia Mantilla
46
Otros equipos que conformaron la Liga Municipal son:
Título 12. Club Arrayanes, fundado en 1981
Fuente 12: Propia
Posteriormente, para el año de 1984, la Liga Municipal estaba compuesta por 44
equipos, divididos en las categorías: máxima, primera y segunda. En aquel momento ya
contaban con dos canchas de fútbol, haciendo posible realizar la programación de todos
los clubes.
Título 13. Publicación del diario La Hora en 1984 titulado "Liga Municipal inauguró torneo"
Fuente 13: Familia Mantilla
47
En la actualidad, cuentan con 32 equipos de fútbol, distribuidos en sus dos categorías,
donde pueden ingresar personas de cualquier edad, teniendo 14 equipos en máxima y 18
en primera, cada equipo tiene la posibilidad de inscribir 30 jugadores, por tanto se
estima que esta organización cuenta con más de 900 personas inscritas en el
campeonato.
Además para principios del 2018 esperan organizar el primer torneo femenino, por lo
que están empezando a convocar e incentivar a las mujeres para que conformen sus
equipos y realizar torneos largos como ocurre con los equipos masculinos (GM, 24 de
septiembre 2017).
4.2 LA LIGA BARRIAL MUNICIPAL COMO ESPACIO DE INTERACCIÓN
SOCIAL
4.2.1 ACTORES
Equipo de Fútbol
De acuerdo a los resultados obtenidos a lo largo de la investigación, se observó que los
equipos de fútbol barrial surgen a través de la práctica deportiva, alrededor del núcleo
familiar, extendiéndose en procesos de filiación hacia los amigos, podríamos decir
entonces que estos se constituían a partir de relaciones intergeneracionales y relaciones
interpersonales próximas de cada integrante.
La vida social está compuesta por individuos que llevan a cabo propósitos u objetivos de varios
tipos. En este cometido siempre actúan dentro de un conjunto de circunstancias previamente
establecidas que ofrecen a los individuos diferentes inclinaciones y oportunidades. Estas
circunstancias pueden ser concebidas como campos de interacción (Thompson, 1998, p. 28).
La conformación de estas agrupaciones permitió que interactúen varios sectores de la
sociedad, sin importar su raza o condición social, que se reúnen cada fin de semana en
los torneos de fútbol, teniendo como meta común la defensa de su club, donde se
disputan los “universos simbólicos de grupos afines y la defensa de la camiseta como
elemento principal de construcción identitaria” (Carrión, 2006, p.184).
48
Esta nueva forma de integración vincula a una gran cantidad de practicantes y simpatizantes de
una misma comunidad o sector, con metas comunes orientadas al fomento de la actividad a base
de la confraternidad y hermandad en la práctica cotidiana para el desarrollo del fútbol
comunitario. (Quito, 2007, p.88)
En principio, los equipos se agruparon para defender una cuadra o un barrio, sin
embargo, cuando la ciudad empieza a crecer y dejan de organizarse en torno a un solo
sector, emergen nuevos propósitos y objetivos que pueden ser: practicar un deporte,
compartir con la familia y amigos, o competir para ganar títulos deportivos (JA, 12 de
septiembre 2017).
Entonces, a partir de estas experiencias, hay dos formas que se han mantenido a lo largo
del tiempo para estructurar los equipos de fútbol; en la primera se ha mantenido el
carácter familiar e intergeneracional del club, mientras que en la otra sus propósitos
tienen que ver más con la competencia y la consecución de títulos.
De esta forma han perdurado equipos como el Club Pichincha, que a lo largo de sus 58
años de vida institucional, ha estado presente la familia Vivanco, por esto, Ramiro
Vivanco, su actual presidente, menciona que han permanecido en competencia por
tantos años “por amor al deporte” (RV, 10 de septiembre 2017), y sobre todo para
compartir su juego favorito con la familia y amigos.
Título 14. Club Pichincha, conformado por la familia Vivanco
Fuente 14: Propia
49
Esto no quiere decir que los equipos no piensen en ganar un torneo, sino que hay
propósitos que van más allá de esto, debido a que las acciones de cada integrante están
encaminadas a fortalecer el grupo, manejando ciertos valores como el compañerismo y
la solidaridad, y una vez que se consiga esto, los dirigentes creen que los logros
“llegarán solos” (JA, 12 de septiembre 2017).
Por otra parte están los equipos que tienen como meta común la consecución de logros
en el deporte barrial, estas organizaciones se fundan con personas de varios sectores de
la ciudad, predominando su habilidad para jugar al fútbol, esto era posible solo si los
directivos invertían dinero, que servía de incentivo para que los jugadores alcancen el
título (GM, 24 de septiembre 2017), y así poder participar en el torneo de mayor
trascendencia dentro del deporte barrial, que es el Campeonato de Campeones, donde
juegan los tres mejores equipos de cada liga barrial adscrita a la Federación de Ligas. En
la actualidad son alrededor de 120 equipos que disputan el título.
Equipos como el Santa Fe tenían este modelo de organización, donde se pagaba a los
jugadores, como consecuencia de esto, es de los equipos con más títulos que ha tenido
la Liga Municipal, sin embargo es un modelo que no se pudo sostener, “por lo que el
equipo terminó desapareciendo por la imposibilidad de los dirigentes para pagar a cada
jugador” (AG, 24 de septiembre 2017).
Título 15. Logros alcanzados por el Club Santa Fe
Fuente 15: Propia
50
Dirigentes
El carácter intergeneracional de los equipos, se puede observar en todos los niveles del
grupo, principalmente en la dirigencia, siendo un legado que han dejado los fundadores
a sus hijos “llevo de familia ese gusto por dirigir, reemplacé a mi padre en la
presidencia del Club, porque ya no tenía energías para seguir dirigiéndolo, ha sido parte
de la vida de él y yo como su hijo no podía dejar lo que es parte de su vida así” (GM, 24
de septiembre 2017).
Los dirigentes son los responsables legales del club, por lo que deben cumplir diversas
funciones como: asistir a las sesiones todos los martes, ser el veedor de los partidos que
se realicen antes o después que juegue su equipo, según se determine en los sorteos del
calendario deportivo; en ciertos casos pagar la vocalía, que es el monto económico por
el árbitro, sanciones disciplinarias y mensualidades (LT, 10 de septiembre 2017).
Del mismo modo, se observó que son considerados los directores técnicos del club,
muchas veces sin tener conocimientos tácticos de fútbol, antes de cada partido es quien
saca los carnets de los jugadores y empieza a ponerlos en el piso a manera de realizar
una alineación para el compromiso, ubicando a cada uno casi de manera aleatoria o
porque preguntan a cada integrante en qué posición sabe jugar; durante el juego es el
encargado de realizar los cambios ya sea porque observa que alguien está cansado o
porque le solicita el capitán del equipo.
Título 16. Alineación del Club Hermano Miguel
Fuente 16: Propia
51
Es por esto que, a partir de la observación, se estableció que los dirigentes siempre
acuden a la cancha con los carnets, banda de capitán y un botellón de agua, porque de
lesionarse algún jugador es quien entra a la cancha para atenderlo, desconociendo el
grado de afección de las personas, sin embargo a todos les tratan del mismo modo, que
consiste en dar masajes en la parte que reciben el golpe y estirar las piernas en el caso
de algún calambre; también hidratan a los jugadores cuando estos lo requieran.
Además, pese a la edad de la mayoría de los dirigentes, siempre están listos con sus
uniformes, ya sea para entrar a completar los equipos, en el caso que no tengan los 11
jugadores, o si alguien se lesiona y no puede continuar jugando.
Jugadores
Una de las características de las ligas barriales, es el libre acceso a los equipos, por esto
hay una gran variedad de personas que los conforman, además con la reglamentación
que exige tener al menos una persona menor de 18 años durante los 90 minutos del
partido, se puede ver en la cancha gente de toda edad y condición física.
Estos aspectos no importan a la hora de jugar fútbol, puesto que por medio de la
observación, se pudo establecer que se ubica a las personas de acuerdo a sus
habilidades, pero principalmente a la edad, es así que aquellos que pasan de los 40 años
se los coloca de defensas o arqueros, porque se hace menor esfuerzo físico, mientras que
los jóvenes están en la delantera, donde más se corre. Igualmente a los juveniles se los
coloca en la media cancha que es donde hay menos contacto, esto con el fin de
protegerlos ya que hay jugadores desde 12 años y pueden resultar golpeados por el
ímpetu con el que se desarrollan los partidos.
Igualmente, dentro de la cancha se puede ver una jerarquización, en el sentido que
siempre se elige a un capitán, considerado el líder del equipo, se diferencia de los demás
jugadores porque lleva una banda en el brazo, esta función la encargan generalmente a
la persona con más experiencia, o al que consideran que tiene capacidad de liderazgo, es
el representante del equipo dentro de la cancha, siendo el único que tiene derecho para
demandar o hacer observaciones al árbitro.
En este orden de ideas se puede citar a Blumer (1982), al mencionar que todos los
grupos poseen una organización, donde se hace necesaria la presencia de un líder “que
fijen las normas, individuos que actúen como portavoces del grupo, y otros que tomen
iniciativas en representación de todos” (p. 154).
52
Al mismo tiempo, se pudo observar que es el encargado de organizar y dar instrucciones
al equipo durante el partido, siendo el intermediario entre el técnico y los jugadores,
ubicando a las personas en ciertos lugares, pidiendo cambio cuando alguien esté
lastimado y no pueda seguir jugando o porque alguien tiene una mala actuación, en
estos casos discute con las personas que están fuera del campo de juego sobre quién
sería la mejor opción, de acuerdo a las necesidades del equipo.
Es por esto que Mead (1972) menciona que durante la interacción los sujetos irán
cambiando sus actitudes de acuerdo a la situación que se les presente, donde la
comunidad, o el grupo en este caso, influirá al sujeto, provocando cambios en su forma
de ser. De igual forma Blumer (1982) señala que en el proceso de interacción las
personas necesariamente deberán tener en cuenta los actos de las demás personas para
realizar los suyos.
Las personas hacen que sus actividades encajen en las ajenas, a la vez que forman su propia
conducta individual. La actividad conjunta y el comportamiento individual se forman dentro y a
través de este proceso continuo. (Blumer, 1982, p. 8).
Ante la situación planteada, William Arcos, capitán del Club Hermano Miguel, cree que
el rol principal de un capitán es el de incentivar a sus compañeros para que jueguen
bien, sobre todo a los que no “den todo en la cancha” (WA, 17 de septiembre 2017), sin
embargo se podría decir que su papel es más sancionador que motivador, en el sentido
que recriminan a aquellas personas que se equivoquen constantemente dentro del campo
de juego, con la finalidad de cambiar su actitud y así conseguir que jueguen mejor.
Los gestos significantes que envuelven el uso de símbolos siempre presuponen la habilidad de
cada individuo en un proceso comunicativo para visualizar su propio desempeño desde el punto
de vista de los otros, para asumir el rol de los otros. (Mead (1968) citado en Diaz y Mantilla,
2008, p. 60)
Por otra parte, están las personas menores de edad que forman parte del equipo, quienes
esperan su oportunidad de jugar, mientras tanto su función es de ser el comúnmente
conocido como "pasabolas", por ello, tienen que recuperar los balones que han sido
arrojados fuera del estadio, incluso muchas veces se trepan a las casas aledañas a
buscarlos, ya que estos son propiedad del club y en caso de perderse deben hacerse
responsables todos los jugadores (JA, 12 de septiembre 2017).
Otra característica de los jugadores de fútbol es su comportamiento dentro del campo de
juego, donde se pudo observar una fuerte influencia de los equipos profesionales, sobre
todo de los más representativos a nivel mundial, por lo que muchas veces las posturas
que toman en determinado momento tratan de emular a sus ídolos deportivos, como por
53
ejemplo al momento en que festejan un gol o van a cobrar una falta cerca del área,
intentan realizan los mismos movimientos que Cristiano Ronaldo, parándose derecho y
con los brazos abiertos, o como Ronaldinho, contando tres pasos hacia atrás desde la
posición del balón.
Hinchas
Son las personas que han generado un sentido de pertenencia hacia el club, ya sea por la
filiación de un familiar o por alguna relación sentimental con los jugadores,
acompañándoles a la cancha todos los fines de semana, vistiendo alguna prenda del club
o con sus colores característicos.
Por lo general son los niños quienes siempre llevan la camiseta del equipo al que
pertenece su papá, identificándose desde muy pequeños con este, razón por la cual
desde la adolescencia ya empiezan a formar parte del club.
La camiseta no identifica al individuo como individuo, sino que lo vincula a un grupo, a una
comunidad, a una corriente, lo muestra como una persona que aceptó una "ideología"
representada en su equipo, ponerse la camiseta es revalidar su elección implícita de manera
explícita, para mostrarse, identificarse y ser identificado. (Gómez, 2007)
De igual forma, los padres de los jugadores son los que acuden con más regularidad a la
cancha para apoyar a sus hijos, además, es el grupo que expresa sus sentimientos con
mayor fervor, por lo que es habitual verlos discutir con la hinchada contraria, sobre todo
cuando hay mucha fricción entre los jugadores.
Finalmente, en los graderíos se pueden observar que los familiares y amigos de los
futbolistas se ubican en los costados para diferenciarse del equipo contrario, en este
sector las personas, comentan el partido, alientan a los jugadores, insultan al árbitro o a
jugadores del equipo contrario, se emocionan y se enojan, se puede decir que es un
sentir generalizado, donde se reconoce al “otro” por medio de ofensas o considerándole
inferior.
Cada enfrentamiento suministra a los espectadores un soporte para la simbolización de alguno de
los aspectos ya sea local, profesional, regional o cultural de su identidad. El sentimiento de
pertenencia se construye aquí, de la misma forma que en otras circunstancias, en una referencia
de oposición más o menos virulenta hacia el otro. (Bromberger, 1999, p. 28)
Árbitros
Dentro del campo de las interacciones que se producen en la cancha de fútbol, existen
normas y reglas “que no tienen solamente un efecto limitador sino que ejercen una
acción reguladora que favorece la socialización de las pulsiones (…), el intercambio, el
54
equilibrio y la reciprocidad” (Marc y Picard, 1992, p. 75), en este caso, el árbitro cuida
que se cumplan las reglas durante el compromiso.
Es así que se producen relaciones de autoridad dentro de la institución, teniendo la
potestad de sancionar a las personas que no acaten las reglas o no respeten su función
dentro de la Liga Municipal. Asimismo se encarga de dirigir y cronometrar la duración
del juego, cabe destacar que las reglas son tomadas del fútbol profesional.
A partir de la observación se pudo inferir que desde que el árbitro entra a la cancha
comienzan sus facultades, la primera acción que realiza antes de empezar un partido de
fútbol es hablar con los capitanes de cada equipo, para indicar las reglas que deben
seguir durante el juego; inmediatamente decide quién hará el saque inicial y en qué lado
del campo de juego se ubicará cada equipo, para después dar el pitazo inicial.
Sin embargo, pese a que se han dado estas advertencias, durante el desarrollo del
encuentro, se puede ver que los árbitros se encuentran con varios inconvenientes, debido
a que tanto los jugadores como los hinchas descargan su frustración contra el árbitro,
por las decisiones que toma durante el juego.
Otra cuestión por la que los árbitros son tratados de mala forma, es porque no pueden
recorrer todo el campo de juego, ya sea por la condición física o por su edad, razón por
la cual se molestan jugadores y aficionados.
Muchas veces la manera en que se comunican es únicamente mediante señas, o
mediante el sonido del pito, estos gestos son acatados por todas las personas que se
encuentran dentro del campo de juego, por ejemplo al momento que el árbitro alza su
brazo y pita, significa que un jugador estaba en fuera de juego u “offside”, por lo que
toda acción queda invalidada, es decir que a través de la comunicación no verbal se
define la norma, Goffman (1987) menciona que en este tipo de interacciones entran “en
juego normas de interpretación culturalmente determinadas y no simplemente rasgos
sistémicos de lenguas particulares” ( p.241)
55
Título 17. Gestualidad utilizada por los árbitros para determinar un “offside”
Fuente 17: Propia
Una vez que el partido de fútbol concluye se observa que hace conocer los aspectos más
relevantes del encuentro, mediante un informe, donde indica que jugadores fueron
sancionados y aquellos que marcaron un gol; de igual forma el árbitro es calificado
según su actuación como bueno, regular o malo, de acuerdo esto se evaluará si está en
condiciones de seguir trabajando en la liga, ya que por partido cada equipo le paga 12
dólares.
4.2.2. SÍMBOLOS
Los equipos de fútbol tienen diversas maneras de expresarse. De manera inicial se
estructura sobre la base de lo simbólico a través de diversos artículos como son: los
escudos de los equipos, colores de uniformes, banderas y todo cuanto represente al club.
Estos elementos tienen un significado para los integrantes de un equipo, siendo una
forma de identificación y a la vez de diferenciación con los demás equipos, puesto que
es lo que defenderán durante el encuentro deportivo. A razón de ello, Blumer (1982)
manifiesta que “el significado de los objetos para una persona emana fundamentalmente
del modo en que éstos le han sido definidos por aquellos con quienes –interactúa-“(p.
8).
56
El resultado de la identificación de una pluralidad y diversidad de individuos con un colectivo
social que los unifica a través de la mediación de distintos símbolos y ritualidades que al ser
compartidos generan un sentido de pertenencia. (Guerrero, 2002, p. 101)
Título 18. Club Necaxa, 2016
Fuente 18: Facebook Liga Municipal.
Dentro de la Liga Municipal predomina una influencia de los equipos más
representativos del mundo, por lo que gran parte de los equipos usan la misma
indumentaria que estos clubes, pero también hay equipos que mantienen los colores con
los que empezaron a jugar, ya sea por el nombre del equipo como el Pichincha, que
utiliza los colores que representan a la provincia; o el Minerva que usa los colores de la
institución que los auspicia.
Es decir que el fútbol funciona a través de lealtades cuyo mecanismo puede ser comparado al del
amor por la región o al país. Pertenecer a un país significa serle fiel, sentimiento que a veces es
llamado patriotismo. Pertenecer a un club significa ser leal, es vibrar cuando el equipo gana y se
sufre resignadamente cuando pierde (Ramírez, 2004, p. 85).
Los escudos son realizados de manera rudimentaria, debido a que se busca a alguien del
equipo que tenga conocimientos básicos de diseño gráfico y se le encarga la creación,
razón por la cual se ven escudos que no tienen nada que ver con el club de fútbol, o se
adapta escudos de los equipos profesionales, con las letras y los colores de su equipo.
Por otra parte están las banderas, diseñada con los colores del equipo, ubicando en el
centro el nombre del club y su escudo. En principio se ubicaba en las mallas de la
cancha, siendo una manera de identificarse con la institución y de diferenciarse con el
otro equipo; sin embargo en la actualidad esta práctica se está perdiendo, porque se
decidió pintar los escudos de todos los equipos que conforman la institución en las
57
paredes que rodean la cancha, por lo que ya no hay la necesidad de llevar sus banderas
distintivas.
Título 19. Escudos de los equipos de la Liga Municipal
Fuente 19: Propia
Otro elemento que tiene una fuerte carga simbólica es el agua, que a más de cumplir la
función de hidratar a los jugadores, tanto dentro como fuera de la cancha, es
considerada como una “bebida milagrosa”, según el argot popular. En muchas ocasiones
los jugadores caen al piso dando muestras de dolor intenso, es aquí cuando acuden los
dirigentes, que al momento del encuentro se transforman en "médicos" del equipo y les
dan de beber agua. Después de ello, las personas se van incorporando de a poco, por
último les mojan la cabeza, sin importar si el golpe fue en esta parte del cuerpo, con lo
cual se recupera de manera instantánea y está listo para continuar con el cotejo.
4.2.3. RITUALES
Dentro de la Liga Municipal se pueden observar una serie de rituales sociales, siendo el
más importante la inauguración del campeonato que se celebra cada año, razón por la
cual tanto dirigentes barriales como los integrantes de los equipos se preparan de
diferentes maneras para que este evento se desarrolle de la mejor manera posible,
teniendo en cuenta que participan: dirigentes barriales, jugadores, familiares, madrinas,
58
mascotas y delegados de instituciones locales, ya sean gubernamentales o no
gubernamentales.
La planificación de este programa lo realizan con meses de antelación, porque se deben
adecuar las instalaciones, conseguir fondos para el alquiler de un local donde se llevará
a cabo el evento nocturno, adquirir trofeos y medallas que serán entregados a los
equipos campeones y deportistas más destacados (GM, 24 de septiembre 2017).
Esta celebración está dividida en dos partes: la primera, se realiza en las instalaciones de
la Liga Municipal, que es donde cada equipo tiene la obligación de presentarse bien
uniformado, acompañado por los directivos del club y su madrina. En este acto
demuestran el respeto por la institución y los dirigentes barriales. Cada equipo estará
representado a su vez por las madrinas, que están vinculadas ya sea por afinidad o por
amistad de algún integrante del club, quienes participan por distintas dignidades como:
Señorita Deportes, Virreina, Señorita Confraternidad y Señorita Simpatía (GM, 24 de
septiembre 2017).
Título 20. Madrina Seleccionada en la inauguración de la Liga Barrial Municipal en 1971
Fuente 20: Familia Mantilla
59
La segunda, se realiza en la noche, que es una fiesta de gala, donde la institución premia
a los equipos que han quedado en los tres primeros puestos en cada categoría, además
de esto, entregan una medalla al jugador más destacado de cada equipo, que es electo
por el propio club. Este tiene la particularidad de no ser entregado al más hábil con el
balón, sino a la persona que se ha esforzado por defender los colores del equipo, es
decir, al que ha dejado todo por su club (GM, 24 de septiembre 2017).
Este es el tiempo de gran convocatoria mayor, donde se distingue trabajo voluntario,
confraternidad, alegría, folklor, organización, encuentro familiar, inversión económica,
presentación de sus mejores trajes (uniformes deportivos), las madrinas son el símbolo mágico
de atracción del acto socio-deportivo que lo comparten con invitados especiales quienes se
confunden entre la fiesta y la multitud. Esta es la tradición que se vive desde los años cuarenta
cuando se inicio está noble actividad deportiva en los barrios. (Ramírez, 2004, p. 43).
Título 191. Fiesta de gala para premiar a los mejores jugadores y equipos, 1981
Fuente 21: Familia Mantilla
En cuanto a los rituales de los equipos, estos tienen diversas formas de comportarse
dentro de la liga barrial, en principio al llegar se dirigen al camerino, que es el lugar de
encuentro con familiares y amigos, usado no sólo para cambiarse de ropa, sino que es el
espacio en el que se comparte lo que ha pasado durante la semana, se pregunta sobre la
familia o hacen bromas, es el sitio donde los jugadores se relajan antes del encuentro
deportivo (WA, 17 de septiembre 2017)
Cuando el partido está por comenzar se puede observar al dirigente del equipo
instruyendo a cada jugador sobre lo que debe hacer en la cancha, aquellas personas que
no van a jugar empiezan a dar ánimos a sus compañeros. Antes de empezar el partido,
60
los jugadores se forman en un círculo y realizan el grito de guerra característico de La
Liga: “¡Tres rases, por el 41 Junior… Ras, Ras, Ras, 41 Junior!”
Título 202. Ritual del Club Ex Combatientes del 41 Junior antes de iniciar un partido, 2016
Fuente 22: Facebook Liga Municipal
Una vez que el árbitro entra a la cancha, junto con el delegado para hacer la vocalía, las
personas saben automáticamente que tienen que formarse en el centro, aquí cada uno
presenta su carnet al vocal, acto que sirve para dar validez y transparencia al encuentro,
puesto que se comprueba que la persona que va a jugar está en los registros de la liga
barrial. Además de ello, se verifica que los jugadores tengan los implementos
necesarios, es decir canilleras y pupos y que estén bien uniformados, pidiendo que “se
pongan la camiseta dentro de la pantaloneta” (LT, 10 de septiembre 2017), con lo que se
da más solemnidad y formalidad al acto.
Toda comunicación implica compromiso, por ende, define la relación. Esta es otra manera de
decir que una comunicación no solo transmite información sino que, al mismo tiempo, impone
conductas. (Watzlawick, 1981, p. 52).
Asimismo, el vocal es el encargado de ver el encuentro y detallar en la “hoja de vocalía”
los aspectos más relevantes como: jugadores que participaron, quién hizo los goles,
tarjetas amarillas o rojas y determinar si el partido se llevó con normalidad o hubo algún
tipo de incidente, ya que será el responsable por el encuentro en las sesiones (WS, 10 de
septiembre 2017).
61
Título 213. Ritual antes de iniciar el partido de fútbol entre Ex Combatientes del 41 Jr. VS.
Cúcuta Jr., 2016
Fuente 23: Facebook Liga Municipal
4.2.4. ESPACIO
El espacio más importante dentro de las instituciones deportivas es la cancha, para el
caso de la Liga Municipal está hecha de tierra, donde su reglamentación se simula a la
de los estadios de fútbol profesionales, pese a que es un terreno irregular y en ocasiones
por el clima no es posible jugar con normalidad, para los jugadores poco importa las
condiciones en las que se encuentra, lo importante es poder jugar con su club y sobre
todo vencer al equipo contrario.
Este espacio permite que las personas descargan sus frustraciones y estrés acumulados
durante la semana, posibilita además que se desconecten de la realidad durante los 90
minutos que dura el juego, donde lo único que piensan es la mejor forma para hacer
goles y no recibirlos, mediante el trabajo en equipo.
Aquí expresan su adhesión, deseos de integración a su barrio a su sector, es decir el fútbol tiene
un parecido al carnaval, actúa como una forma de manifestación de la pertenencia, de los deseos
con frecuencia frustrados en el ámbito funcional de inversión o igualación social (Ramírez, 2004,
p. 81).
Si bien es cierto que es importante el desarrollo del juego, lo es también la preparación,
es decir lo que ocurre antes de que inicie el partido de fútbol, para esto los equipos
cuentan con camerinos, que es el espacio reservado solo para los integrantes del club,
aquí se hacen las tácticas del juego, pese a que no se conoce formalmente de estrategia y
tácticas de fútbol, es donde el dirigente o el técnico da la charla antes de empezar el
62
partido, motivando a cada uno, ya sea que vaya a participar o no, “se pide a las personas
que den todo por el equipo, que sientan la camiseta, se les hace saber que son un grupo
unido y que el rival no es competencia” (WA, 17 de septiembre 2017).
Otro espacio significativo son los graderíos y el bar, estos lugares permiten que se
reúnan los aficionados, pero además una vez concluido el encuentro deportivo, se
reúnen las personas que participaron del juego, se increparán por no haber hecho más
durante el partido, se felicitará a los que tuvieron una buena actuación, es decir se
discutirá de lo sucedido durante el encuentro; también es el lugar donde se comparte con
el equipo contrario, donde se resuelven los problemas ocurridos dentro de la cancha,
mencionando que “son cosas que pasan adentro, pero que no deben salir de la cancha”
(WA, 17 de septiembre 2017), cerrando el pacto con un vaso de cerveza.
La representación del barrio, sea este popular, medio o alto, aquí se junta el hombre común, de
raza negra, mestizo o blanco, que en la cancha de juego muestra su virtuosidad, rivalidad, pero
fuera de ella, sigue siendo el mismo. (Ramírez, 2004, p. 41)
Existen también espacios de comunicación, como las dos carteleras con las que cuenta
la Liga Municipal, en una se encuentra el día y la hora que va a jugar cada equipo; en la
segunda, ubicada dentro de la sede social, hay información importante tratada en las
reuniones, tablas de posiciones de las dos categorías y las sanciones que tienen los
jugadores.
Título 224. Cartelera de programación de la Liga Municipal
Fuente 24: Propia
63
CAPITULO V
CONCLUSIONES
A partir de la experiencia de la Liga Municipal, se podría afirmar que las ligas
barriales se van constituyendo en nuevas centralidades, ello, frente al
debilitamiento de otras organizaciones barriales como los comités pro-mejoras,
los cabildos entre otras. Se establecen como nuevos lugares de encuentro, y que
dinamizan prácticas comunicativas asociadas al deporte barrial.
Esto permite que las personas interactúen dentro de estos espacios, construyendo
y fortaleciendo permanentemente sus vínculos sociales, sobre todo porque
comparten los mismos significados.
Las ligas barriales paradójicamente emergen de manera independiente de los
procesos comunitarios, es decir mayoritariamente no se encuentran ancladas a
las demandas comunitarias, y establecen formas singulares de organización
distintas a la dinámica de la comunidad. Dentro de estos espacios las
agrupaciones tienen sus propias reglas y normas que definen el comportamiento
de las personas, destinados al fortalecimiento de la institución deportiva.
Las ligas barriales estructuran formas organizativas, que definen normas, roles y
relaciones alrededor de personajes o actores propios de las dinámicas de la
organización deportiva barrial. Se diría entonces que los roles se manifiestan en
la producción de discursos y prácticas que construyen unas formas de
interacción, con maneras singulares de conflictividad. El dirigente, el jugador, el
hincha, el árbitro, son los intérpretes de la trama de la organización.
La conformación de las ligas barriales, en sus primeros años de actividad, estaba
destinada a buscar el reconocimiento de la sociedad, principalmente a través de
los medios de comunicación escritos, para lo cual designaban a un secretario de
prensa, quien tenía la labor de informar sobre sus actividades y demandas. Para
64
el caso de la Liga Municipal, fundaron su revista llamada “Deporte, Trabajo y
Cultura”, en donde expresan, sobre todo, la necesidad de ser reconocidos por los
organismos estatales locales y la necesidad de obtener terrenos para la práctica
del deporte.
Las ligas barriales se constituyen bajo formas dirigenciales centralizadas
(cacicazgo), concentrando el poder en pocos dirigentes, quienes toman las
decisiones y realizan las gestiones para la institución. A través de estas prácticas
adquieren reconocimiento y prestigio entre la comunidad, legitimando el
populismo deportivo, que da paso a la construcción de clientelismos con
diversas organizaciones estatales, con el fin de conseguir mejorar los espacios
deportivos.
La liga barrial es una organización que va construyendo diversas finalidades
sociales, a pesar de que operan distantes de la comunidad, contribuyen con sus
espacios deportivos para fomentar la recreación y el ejercicio, donde los
dirigentes consideran que favorecen más a los jóvenes, “al alejarlos de vicios
como las drogas y el alcohol”. Además son lugares que dinamizan la economía
de la zona, como parte de la cuestión de espacios de interacción, beneficiándose
de esto las personas que tienen sus negocios alrededor de la institución.
La Liga Barrial Municipal, es un caso bastante particular, en el sentido que
aparece sin tener espacio definido ni lugar de pertenencia, por lo que tuvieron
que operar en diversas canchas de Quito, hasta obtener sus propias instalaciones,
alejadas de su lugar de nacimiento, por lo que fue necesario construir un proceso
identitario.
La liga barrial es un espacio que crea identidades móviles, al estar constituidas
por actores que no pertenecen a la zona donde está ubicada la institución, pero
que aun así se identifican con esta, produciéndose la paradoja de lo interbarrial
como lo barrial.
La liga barrial es un espacio físico y simbólico, al estar cargado de rituales, que
son repetidos cada fin de semana por espectadores, hinchas y jugadores, a través
65
de códigos y lenguajes propios de cada agrupación, permitiéndoles escapar de
sus problemas y de lo rutinario. Es decir que es un espacio, que por un lapso de
tiempo determinado, permite una ruptura con la cotidianidad.
El fútbol es un ritual que va construyendo nuevas formas de filiación,
relacionado con los intereses específicos que persigue cada agrupación. A través
de conductas que son repetidas por los actores que componen la organización,
como resultado de un producto social e histórico.
El fútbol es una práctica cargada de símbolos, que se evidencian a través del uso
de camisetas, banderas y escudos; elementos que tienen un alto valor
significativo para las personas, permitiéndoles diferenciarse del “otro” y
hacerlos parte de un grupo.
Los equipos de fútbol barrial dan muestra que se van configurando alrededor de
relaciones intergeneracionales e interpersonales, hecho que permite la inclusión
e interacción de diversos sectores de la sociedad. Además estas organizaciones
han ido sufriendo transformaciones, una de estas es la inclusión de género, al
producirse una ruptura de la hegemonía masculina en el fútbol barrial.
Se determinó entonces que las ligas barriales fortalecen las relaciones sociales
de los actores que componen estas organizaciones, al entender el proceso
comunicativo que se desarrolla dentro de estas instituciones, y las disputas
generadas en estos espacios, como producto de la apropiación de distintos
símbolos que identifican a un grupo, teniendo en cuenta además, que el actuar de
las personas es la consecuencia de un proceso social e histórico determinado,
que se reproduce en sus conductas, a través de la utilización de códigos y del
lenguaje, principalmente el no verbal, propio de cada agrupación. Se podría
afirmar también que el estudio de la Liga Municipal, podría reflejar la realidad
de otras ligas barriales, en el sentido que hay similitudes en el actuar de las
personas que las conforman.
66
RECOMENDACIONES
Se recomienda hacer estudios similares con otras ligas barriales, por el valor
que tiene la reconstrucción de la memoria histórica para una comunidad, así
como también los significados que encierra la práctica del deporte dentro de
estos espacios.
Trabajar desde los registros visuales y la memoria social en las ligas
barriales es una estrategia importante.
Investigar el vínculo y el papel que juegan los partidos políticos dentro de las
ligas barriales, como generadores de populismos deportivos.
Analizar los obstáculos o límites que impiden a las nuevas generaciones ser
parte de la dirigencia, por el aporte que pueden dar a la organización,
pensando en la consecución de nuevos proyectos.
Investigar el significado que tienen las ligas barriales para la comunidad y
que imposibilita a las instituciones deportivas ser parte de las dinámicas del
barrio y estar inmiscuidas dentro de sus intereses.
Apoyar procesos de construcción de medios de comunicación, y buscar las
causas que impiden a las ligas barriales desarrollar estas alternativas, que
posibilitarían informar a la comunidad sobre las actividades que realizan.
Analizar de qué manera los marcos legales inciden en los procesos de
interacción, al tener que fomentar la acción de los miembros de las ligas
barriales, para evitar perder los predios donde funcionan.
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72
ANEXOS
Anexo 1. Ficha de observación
FICHA DE OBSERVACIÓN
Fecha 2 de septiembre del 2017 Duración: 2:20:00
Encuentro Palestino vs Pichincha
Hora Observación Comentario
10:00
El árbitro que va a dirigir el
encuentro ingresa a la
cancha y se ubica en el
centro, hace sonar el pito
para indicar a los jugadores
que deben ingresar para
empezar el partido de fútbol.
Se observa que los dirigentes de los
equipos empiezan a presionar a los
jugadores para que ingresen a la
cancha.
Empieza a dar las alineaciones del
equipo y la función que debe cumplir la
persona que va a jugar.
10:06 Los jugadores empiezan a
ingresar a la cancha.
Con el carnet en la mano los jugadores
entran en la cancha, empiezan a correr
y estirar las piernas.
10:09
Cada equipo se forma en un
círculo y gritan “¡Tres rases
por el Club Pichincha… ras,
ras, ras Pichincha!”, el
equipo contrario realiza lo
mismo.
Los jugadores junto con el dirigente
hacen un círculo, en el que todos se
abrazan y el dirigente y capitán dan una
charla antes de realizar su grito
característico.
10:10
El vocal del encuentro entra
a la cancha para que los
jugadores entreguen los
carnets.
Los jugadores se forman en el centro de
la cancha junto con el árbitro que se
ubica entre los dos equipos, el vocal
menciona que la camiseta debe estar
dentro de la pantaloneta, recoge los
carnets y se cerciora que cada jugador
esté bien uniformado y comprueba que
sea la persona que entrega el carnet.
10:16
El vocal se retira, mientras
que el árbitro pide que se
acerquen los capitanes de
cada equipo al centro de la
cancha, para realizar el
sorteo de la misma,
lanzando una moneda al
aire. Además les hace saber
a los capitanes que quiere un
juego limpio.
Los jugadores siguen corriendo a
manera de calentamiento hasta que se
decida en qué lugar de la cancha
empezarán a jugar.
10:19
Los equipos se ubican en el
lado de la cancha que ha
sido sorteada mientras que
Antes que el árbitro de el pitazo inicial
regresa a ver a cada arquero para
cerciorase que estén preparados y estos
73
un jugador se coloca en el
centro de la cancha, el
árbitro pita e inicia el
encuentro.
responden levantando la mano. Las
personas que se encuentran en los
graderíos aplauden y empiezan a dar
ánimos a los jugadores. Se observa que
los jugadores que juegan en posiciones
de ataque son jóvenes, mientras que los
defensas son gente adulta.
10:35
El árbitro pita una falta
sobre un jugador del Club
Pichincha y lo sanciona con
tarjeta amarilla.
El jugador sancionado reclama al
árbitro que no fue falta para que le
sancionen de esa manera, mientras que
el jugador que recibió la falta se
incorpora lentamente. Los hinchas en
los graderíos gritan que jueguen limpio.
10:41
El delantero del Palestino se
pierde un gol y sus
compañeros le reprochan.
Los compañeros del delantero
empiezan a gritarle que esté más atento
para la próxima, mientras que los
aficionados del equipo contrario se
burlan del jugador y los hinchas de su
equipo se lamentan la pérdida del gol
mientras comentan la jugada.
10:47 El Club Pichincha mete el
primer gol del encuentro.
Tanto dirigente, jugadores e hinchas
celebran el gol, mientras el equipo
contrario envía el balón al centro de la
cancha para reanudar el encuentro
rápidamente. El capitán del Club
Pichincha pide calma a sus jugadores y
que sigan jugando como lo vienen
haciendo.
10:51
El árbitro detiene una
posibilidad de anotar del
Palestino al pitar un offside.
El delantero se enoja por la decisión y
grita que no estaba en offside, el árbitro
se acerca al jugador para advertirle que
no le vuelva a gritar, de lo contrario
será sancionado. Los aficionados en los
graderíos gritan al árbitro que “corra
más para eso se le paga”
11:03
El árbitro levanta los brazos
mientras pita, el primer
tiempo ha concluido.
Mientras los jugadores se retiran a los
camerinos, el capitán del Palestino se
acerca a reclamar por el offside que les
pitaron.
11:07
Los dirigentes de los
equipos se acercan al vocal
para preguntar el valor que
deben pagar.
Los jugadores se empiezan a recuperar
tomando agua, mientras comentan las
jugadas que fallaron. El dirigente les
comunica cuanto deben pagar y pasa
por cada persona pidiendo dos dólares.
11:15
El árbitro ingresa y pita para
que los jugadores sepan que
va a empezar el segundo
tiempo.
Los jugadores empiezan a ingresar a la
cancha y se ubican en las posiciones
asignadas para empezar el encuentro.
11:22 El balón es enviado fuera de
la cancha por lo que el
El capitán del Club Pichincha grita al
directivo que es su balón y que vayan a
74
árbitro pide al vocal que
envíe el balón del otro
equipo.
recuperarlo, el directivo manda a su
jugador juvenil a ver el balón.
11:27 El árbitro pita una falta
contra el Palestino.
La hinchada pide que sea amonestado
porque recibió la falta el jugador
juvenil, además de gritar en contra de
la persona que realizó la falta.
11:28
El árbitro pide que ingrese
el directivo del equipo para
que atiendan al jugador que
recibió la falta.
El directivo del Palestino ingresa a la
cancha corriendo con el botellón de
agua, estira la pierna de su jugador y le
da masajes, luego le ayudan a
incorporarse para darle agua y siga
jugando. Mientras tanto los jugadores
empiezan a increparle e insultarle al
jugador que hizo la falta, indicándole
que es juvenil y juegue limpio.
11:30
El jugador número 16 del
Palestino se acerca al vocal
con su carnet para realizar
un cambio de jugadores.
El vocal pregunta la persona por la que
van a realizar el cambio, y controla que
el jugador esté bien uniformado. Este
ingresa a la cancha y a lo que sale el
balón pide el cambio el árbitro al su
brazo para detener el encuentro y hace
salir al jugador 9 para que ingrese el
jugador 16
11:38
El árbitro pita falta cerca del
área del Club Pichincha a
favor del Palestino, el
jugador número 10 anota un
gol.
El jugador número 10 ubica el balón
pone su pie junto a este y camina tres
pasos hacia atrás, pone sus brazos
firmes y patea. El balón entra al arco y
los hinchas celebran indicando a los
jugadores que hay tiempo para hacer un
gol más y ganar.
11:42
El árbitro pita una falta a
favor del Palestino, el
jugador número 4 es
amonestado por reclamar.
Al momento que el árbitro pita la falta
el jugador número 4 se molesta
indicando que no le topó al jugador del
Club Pichincha por lo que empieza a
gritarle al árbitro que pite bien y corra
más, el árbitro se acerca al jugador le
saca tarjeta amarilla y le indica que al
próximo reclamo lo expulsa. El capitán
del Club Pichincha se acerca para
mediar la situación y calmar al árbitro.
Los aficionados insultan al árbitro por
la decisión tomada.
12:02 Finaliza el encuentro.
Los capitanes se acercan a indicar al
árbitro que se equivocó en algunas de
sus decisiones, mientras que los demás
jugadores se dan la mano con los del
equipo contrario felicitándoles por el
encuentro.
75
12:04
El árbitro se acerca al vocal
para realizar su informe,
sonde indica las tarjetas
amarillas, los jugadores que
hicieron gol y los incidentes
con la barra del Club
Pichincha.
Mientras llena el informe indica al
vocal los incidentes que se dieron
durante el encuentro.
12:07
Los capitanes de cada
equipo se acercan para
firmar la hoja de vocalía.
Tanto el árbitro como el vocal ponen
los hechos más relevantes del
encuentro y se califica al árbitro, los
capitanes se cercioran que todo esté
bien y firman la hoja de vocalía.
Anexo 2. Plano del terreno entregado a la Liga Municipal en la Mena Dos
76
Anexo 3. Fiesta de gala de la Liga Municipal, 1971
Anexo 4. Reinas del campeonato de la Liga Barrial Municipal, inaugurado en 1984
77
Anexo 5. Fiesta de gala realizada en 1981
Anexo 6. Directiva de la Liga Barrial Municipal, 1981.
78
Anexo 7. Elección de la reina del campeonato de la Liga Barrial Municipal
79
Anexo 8. Línea del tiempo A
ño
1957 1961 1962 1963 1964 1971 1974 1986 1993 1999 2016
Aco
nte
cim
ien
to Separación de
la Liga San
Sebastián y
conformación
de la Liga
Municipal por
parte del Sr.
Samuel
Bautista.
Consiguen
su primera
sede en el
domicilio de
la familia
Albuja
Legalización
de la Liga
Deportiva
Barrial
“Municipal”.
Primer
presidente:
Luis Ibarra
Afiliación a
la
Federación
de Ligas
Deportivas
Barriales y
Parroquiales
del Cantón
Quito.
Publicación
del primer
número de
su revista
“Deporte,
Trabajo y
Cultura”
Consiguen
el primer
terreno en el
Colegio
Montufar
Municipio
otorga
comodato
por 50
años en la
Mena Dos
Municipio
dona
1’500.000
sucres para la
construcción
de los
camerinos.
Obtienen
la
personería
jurídica
con
Registro
Oficial Nº
251
Construcción
de la sede
social de la
Liga Barrial
Municipal
Ministerio
de
Educación
interviene
el Colegio
Montufar
1958
Fundación del
Club Básico
Barrial
“Pichincha
PMS”.
1972
Club
“Pichincha
PMS” alcanza
el tercer lugar
en el torneo
Campeón de
Campeones
1996
Club “Santa Fe”
consigue el
primer
tetracampeonat
o en la máxima
categoría
1994
Selección
Liga
“Municipal”
Campeón del
torneo Sub 40
1960
Fundación del
Club “Cúcuta Jr.”
1967
Fundación
del Club
“Minerva”
1965
Fundación del
Club “Recoleta.”
Fundación de los equipos y logros más importantes