216912789 Freud Lacan Nosotros Rodriguez Ponte

20
1 FREUD, LACAN, NOSOTROS Ricard o E. Rod rígu ez Po nte  (*)Intervención en el Seminario Fundamentos de la Transferencia, dictado con  Alba Flesler y Analía Meghdessian. Escuela Freudiana de Buenos Aires, el 8 de Julio de 1996. Dado que es nuestra última reunión antes de las vacaciones de inviermo, conviene que acotemos bien nuestra reunión de hoy. ¿Ya sabemos con qué texto de Freud vamos a continuar cuando retomemos el seminario a fin de mes? Lo sospechamos: el de Recuerdo, repetición y elaboración... Bien, aquí mis compañeras me aclaran que junto con ese texto veremos también el de Puntualizaciones sobre el amor de transferencia. Pero hoy nos vamos a atener, en lo posible, al texto freudiano de 1912, titulado La dinámica de la transferencia. Nosotros hemos encarado este seminario, al menos en este primer recorrido del mismo, con la modalidad de una puntuación de los textos, lo cual no excluye que hayamos hecho, y que en lo sucesivo hagamos, alguna excursión más allá de los textos, siempre alrededor del tema que nos convoca, que es el de la transferencia.. Pero por el momento la estrategia ha sido, hasta ahora, la de atenernos lo más estrictamente posible al texto de Freud, dejándonos un amplio margen para la discusión en los momentos en que funcionamos bajo la modalidad del taller. No sé si luego de las vacaciones seguiremos con la misma estrategia. Se me ocurre, ahora, que se volverá un poquito difícil de seguir cuando abordemos los desarrollos de Lacan en relación a la transferencia. De todos modos, lo que quería decirles ahora, antes de entrar de lleno en el texto de Freud, son algunas cosas que me parece importante puntualizar, luego de haberlos escuchado, en la primera parte de nuestra reunión de hoy, cuando hablamos, un poco en general, de las dificultades que pudieron haberse presentado, referidas tanto a los textos de Freud como a la marcha misma de nuestro seminario.

Transcript of 216912789 Freud Lacan Nosotros Rodriguez Ponte

  • 5/25/2018 216912789 Freud Lacan Nosotros Rodriguez Ponte

    1/20

    1

    FREUD, LACAN, NOSOTROS

    Ricard o E. Rod rgu ez Ponte

    (*)Intervencin en el SeminarioFundamentos de la Transferencia, dictado conAlba Flesler y Anala Meghdessian. Escuela Freudiana de Buenos Aires, el 8 de

    Julio de 1996.

    Dado que es nuestra ltima reunin antes de las vacaciones de inviermo, conviene

    que acotemos bien nuestra reunin de hoy. Ya sabemos con qu texto de Freud

    vamos a continuar cuando retomemos el seminario a fin de mes? Lo

    sospechamos: el de Recuerdo, repeticin y elaboracin... Bien, aqu mis

    compaeras me aclaran que junto con ese texto veremos tambin el

    de Puntualizaciones sobre el amor de transferencia. Pero hoy nos vamos a atener,

    en lo posible, al texto freudiano de 1912, titulado La dinmica de la transferencia.

    Nosotros hemos encarado este seminario, al menos en este primer recorrido del

    mismo, con la modalidad de una puntuacin de los textos, lo cual no excluye que

    hayamos hecho, y que en lo sucesivo hagamos, alguna excursin ms all de los

    textos, siempre alrededor del tema que nos convoca, que es el de la

    transferencia.. Pero por el momento la estrategia ha sido, hasta ahora, la de

    atenernos lo ms estrictamente posible al texto de Freud, dejndonos un amplio

    margen para la discusin en los momentos en que funcionamos bajo la modalidad

    del taller. No s si luego de las vacaciones seguiremos con la misma estrategia.

    Se me ocurre, ahora, que se volver un poquito difcil de seguir cuando

    abordemos los desarrollos de Lacan en relacin a la transferencia. De todos

    modos, lo que quera decirles ahora, antes de entrar de lleno en el texto de Freud,

    son algunas cosas que me parece importante puntualizar, luego de haberlos

    escuchado, en la primera parte de nuestra reunin de hoy, cuando hablamos, un

    poco en general, de las dificultades que pudieron haberse presentado, referidas

    tanto a los textos de Freud como a la marcha misma de nuestro seminario.

  • 5/25/2018 216912789 Freud Lacan Nosotros Rodriguez Ponte

    2/20

    2

    Como ustedes saben, este seminario no se dicta en cualquier parte, se dicta aqu,

    en una Escuela de psicoanlisis. Qu implica esto? Que la funcin que nos

    hemos dado quienes convocamos este seminario, en principio, no es la de

    ?cmo decirlo?? la de compensar los dficits que hubieran quedado como

    remanentes de los estudios de grado, los que, en todo caso, se pueden continuar

    con los estudios de post-grado. Pero esto tampoco pretende ser un post-grado,

    cuyo sitio electivo es la universidad. Digo esto para circunscribir un poco desde

    dnde nos ubicamos nosotros para decir lo que decimos. Nuestra pretensin, al

    menos, no es la de hacer un discurso sabio, erudito, universitario sobre los textos

    de Freud y de Lacan; tampoco la de promover una doctrina standardde qu es

    Freud o qu es Lacan. Se supone que hablamos, leemos el texto, lo exponemos

    desde un punto particular que es el de nuestra prctica clnica cotidiana ? esto es

    lo que distinguira a nuestro seminario de un estudio de post-grado. No quiero

    decir con esto que nuestro seminario sera por eso mejor, ms sabio que un

    estudio de post-grado, ni tampoco que sea peor, sino que hablamos desde otro

    lugar, que nuestra posicin enunciativa es otra, o al menos lo pretende.

    A propsito de esto, me parece tambin importante que yo les diga algo acerca de

    mi lugar, o de lo que creo que es mi lugar, el lugar desde donde yo abordo estos

    textos de Freud que estamos considerando ? de manera que, como saldo de este

    seminario, pueda quedar algo, algo, tal vez, porque eso siempre est por verse,

    del orden de la enseanza... Vale la pena que aclare un poco esto.

    No me refiero a lo que podra ser mienseanza. Al menos, en primer lugar, no se

    trata de eso. Lo que plantea Lacan en relacin a esto es que cuando el discurso

    analtico se ofrece a la enseanza, eso lleva al analista a la posicin del

    analizante. No es el analista el que se ofrece a la enseanza ?como a veces se

    entiende, mal, este enunciado de Lacan?, el analista, al exponer su prctica clnica

    y su prctica terica, da la ocasin para que el discurso psicoanaltico, que lo

    trabaja y que lo sostiene en su actividad cotidiana, se ofrezca a la enseanza.

  • 5/25/2018 216912789 Freud Lacan Nosotros Rodriguez Ponte

    3/20

    3

    Entonces, en posicin de analizante, con todo lo que esto puede comportar de

    sntoma, eventualmente, voy a subrayar que, aun cuando en tal ocasin yo diga

    "Freud dice" o "Lacan dice", en todo momento soy yo quien dice lo que, si quieren,

    Freud o Lacan me habran dicho, al leerlos. Este subrayado, lo voy a hacer

    esclareciendo para ustedes cul es mi posicin en relacin a los textos que

    estamos comentando, y comienzo dicindoles que me parece interesante

    puntualizar ?a m me parece interesante puntualizar, no estoy diciendo que sea la

    nica posibilidad? puntualizar que, en el psicoanlisis, en la elaboracin de lo que

    mal se llama "teora", hay tiempos. En relacin a esto, tenemos un tiempo 1,

    originario, que es eltiempo de Freud:

    1) el tiempo de Freud.

    Freud es un seor que invent una cosa nueva, abri un nuevo campo de

    experiencia, que antes no estaba, no exista ? no es un descubridor, en el sentido

    de Coln, por ejemplo, que descubri un continente que no estaba conocido pero

    que ya estaba, digamos, en el mundo, ya exista. Freud "descubri" ?lo digo entre

    comillas? algo nuevo, que es el inconsciente, que es totalmente relativo al modo

    de acceso que se di, es decir, al procedimiento que estableci ?digamos: la

    asociacin libre y la atencin libremente flotante, para formularlo de un modo

    deliberadamente vago, por ahora?. En ese sentido, creo que es ms correcto

    hablar de "invencin" que de "descubrimiento": Freud es el inventor del

    inconsciente, y por eso Lacan dice, en uno de sus escritos, Posicin del

    inconsciente, que "el inconsciente de antes de Freud no espura y

    simplemente"(1). El inconsciente del que hablamos nosotros no es cualquier

    inconsciente, no es cualquier cosa que carezca del atributo de conciencia, es el

    inconsciente freudiano, que nada tiene que ver con los procesos fisiolgicos,corporales, que son inconscientes en otro sentido, ni con el inconsciente de la

    psicologa o de la parapsicologa o de lo que sea. No decimos que esas cosas no

    existan, sino que eso, sobre lo que no abrimos juicio, est de derecho por fuera

    del campo en el que nuestras proposiciones resultan pertinentes. Es el

    inconsciente freudiano, y este inconsciente freudiano, invencin de Freud, es

  • 5/25/2018 216912789 Freud Lacan Nosotros Rodriguez Ponte

    4/20

    4

    resultado de la invencin freudiana de un procedimiento. Ya adelantamos algo en

    relacin a este procedimiento, cuando aludimos al mtodo, a la regla de la

    asociacin llamada "libre", y podramos agregar algo ms, como propio del

    procedimiento freudiano: el estudio singularizado del caso, es decir, la propuesta

    freudiana, su regla metodolgica, que l explicita en varios textos ?entre otros, en

    el historial sobre El Hombre de los Lobos?, en el sentido de que l est dispuesto

    a dejar aparte todo su saber previamente establecido a cambio de lo que puede

    aprender de un caso nuevo. Es decir, que la primaca de la singularidad del caso

    forma parte esencial de lo que llamamos el procedimiento freudiano. En ese

    sentido, el procedimiento freudiano es el procedimiento que ponemos en juego,

    cada vez, en cada nueva experiencia: ponemos en suspenso todo saber

    establecido, lo que Lacan denomina el saber referencial, para atenernos ?es una

    especie, no de ignorancia, sino de puesta en suspenso del saber establecido, ya

    adquirido a partir de otras experiencias, anteriores? para atenernos a lo que en la

    nueva experiencia pueda surgir como saber textual, nuevo, singular, que se vaya

    desprendiendo del texto, tambin nuevo, incalculable previamente, impredecible,

    singular, del analizante en cuestin.

    Bien, entonces, Freud descubre, inventa este campo nuevo, y a partir de ah el

    asunto es cmo nos vamos a situar. Hay una historia, y es que despus de Freud,

    o con Freud, o al ratito de Freud, vinieron los que se llaman, los llamamos hoy,

    lospost-freudianos. Entonces:

    2) el tiempo de los post-freudianos.

    Los post-freudianos eran analizantes, alumnos, gente amiga, que rodeaban ms o

    menos de cerca a Freud, o a los que estaban o haban estado ms o menos cerca

    de Freud, y que, con distintas posiciones en relacin a la obra de Freud,

    decidieron tomar a su cargo, para seguirlo, para llevarlo adelante, el invento de

    Freud. Esas posiciones no eran las mismas. Por ejemplo, una muy graciosa era la

    de Stekel, que por otra parte no dur mucho en el campo freudiano. Stekel deca

    algo as: "Freud es un gigante, nosotros somos enanos, pero un enano subido a

  • 5/25/2018 216912789 Freud Lacan Nosotros Rodriguez Ponte

    5/20

    5

    los hombros de un gigante tiene los ojos ms arriba y alcanza a ver ms lejos", por

    lo que su posicin en relacin a la obra de Freud era ms o menos algo como

    esto: agrupar todo lo que haba descubierto Freud, y que cada uno, cada uno de

    los enanos subidos a los hombros de ese gigante, agregara a dicho acervo su

    pequea cosita propia, su pequea contribucin, que permitira as ir ms all de

    Freud. Otra posicin, entre los post-freudianos, era la de Fenichel ?les doy

    ejemplos al azar?, donde se trata de amalgamar, en una especie de masa

    unificada, sincronizada, lo que Freud fue desarrollando a lo largo del tiempo,

    desde 1895 a 1938, y hacer con eso un conjunto ms o menos coherente.

    Tambin podramos mencionar a Melanie Klein, cuya posicin era la de:

    "macanudo, todo eso est bien, pero agreguemos algo ms, que Freud no vi", a

    saber, que el complejo de Edipo en verdad es anterior a la fase flica, o que tiene

    un tiempo que se podra denominar "Edipo temprano", y adems la cuestin de las

    posiciones, esquizo-paranoide y depresiva...

    Ahora bien, entre esos post-freudianos, tambin tenemos a Lacan. Pero vamos a

    singularizar de algn modo su inclusin en esta historia:

    2) el tiempo de Lacan.

    Por qu? En principio, Lacan es un post-freudiano ms. Qu es lo que

    singulariza su posicin, adems de la razn ?tal vez la razn fundamental, pero la

    dejo para ms adelante? de que somos nosotros quienes determinamos las

    escansiones de esta historia, es decir, que esta historia la contamos desde el

    tiempo en el cual nos posicionamos de la misma? Lacan, a partir de un

    diagnstico de la situacin que efectu ?diagnstico que podemos resumir en

    estos trminos: los post-freudianos haban olvidado la verdad esencial de la que

    era portador el discurso freudiano, la haban, en verdad, reprimido?, se propuso

    como objetivo el de volver a esa verdad, o el de devolverle a esa verdad la

    palabra, lo que nosotros conocemos con el nombre de retorno a Freud, por el cual

    l se pretenda ms, y ms verdaderamente freudiano, que los post-freudianos.

    Cul fue su estrategia? No la de volver a Freud de cualquier manera, no la de

  • 5/25/2018 216912789 Freud Lacan Nosotros Rodriguez Ponte

    6/20

    6

    agregarle alguna contribucin nueva, no, en principio, agregndole nuevos

    desarrollos a la doctrina establecida. Sino aplicndole al texto freudiano, para

    leerlo como conviene, lo que l al principio llamaba "tres categoras", o "tres

    rdenes" o "tres registros", sin los cuales ?segn Lacan? nada puede entenderse

    ni del mensaje freudiano ni de los datos de la clnica. Es decir, propone aplicarle,

    al conjunto del texto freudiano, as como al conjunto del texto de la experiencia,

    una especie de rejilla, de grilla ?construida con tres registros o categoras que

    parecen sacados de la galera?, para que este texto sea ledo como conviene.

    Estas tres categoras, u rdenes, o registros, ustedes conocensus nombres: lo

    simblico, lo imaginario y lo real.

    Son tres registros para leer los datos y las nociones de la experiencia ?aclaro estopor una pregunta que me hicieron al comienzo de esta reunin?: no hay

    transferencia simblica", "transferencia imaginaria" y "transferencia real", hay

    registro simblico de la transferencia, registro imaginario de la transferencia y

    registro real de la transferencia. No hay tres transferencias, ni se pasa de una

    transferencia a otra. Tenemos la transferencia, y la unidad de la nocin permite, o

    ms bien requiere, su lectura en tres dimensiones. En todo caso, en tal o cual

    momento de la experiencia, tal de sus dimensiones pasar a ocupar un primer

    plano, un papel ms relevante, ms aparente. Pero si se trata de la transferencia,

    estn en juego las tres dimensiones. Lo mismo vale para todas las nociones de la

    doctrina. Estos tres registros, estas tres dimensiones, estas tres dit-mensiones,

    como las denominar finalmente Lacan, no son cajones, estantes, receptculos

    donde se distribuiran las nociones, como a veces se escucha, qu se yo, por

    ejemplo: el inconsciente o el deseo perteneceran al cajoncito de lo simblico, el

    narcisismo o la imagen especular perteneceran al cajoncito de lo imaginario, y el

    goce lo meteramos en el cajoncito de lo real. No es as como funcionan estas tres

    categoras. Sino que a las nociones de la doctrina y a los datos de la experiencia,

    los leemos con estas tres dit-mensiones.

    Bien, segn Lacan ?insisto, a propsito, en este "segn Lacan", para ir anticipando

    que hay en esta historia un tiempo tercero donde eventualmente podramos

  • 5/25/2018 216912789 Freud Lacan Nosotros Rodriguez Ponte

    7/20

    7

    ubicarnos?, sin esas tres categoras lo esencial del mensaje freudiano se pierde y

    no se entiende nada, volvemos a la psicologa general.

    Pasemos a lo que sera un tercer tiempo en esta historia, donde podramos

    situarnos nosotros:

    3) el tiempo de nosotros.

    Pero de qu manera? No es sencillo responder a esta pregunta, no es una

    cuestin de cronologa, no depende simplemente del hecho de que nosotros, por

    ejemplo hoy, en 1996, venimos despus de Lacan, que muri hace quince aos.

    Tenemos dos maneras de ubicarnos, me parece, y eso depende de una decisin,

    que es tica. Cuando digo "tica", no quiero decir con esto que habra decisiones

    "ticas" y decisiones "no ticas"; toda decisin es tica: si yo elijo mentir, por

    ejemplo, esto es una decisin tica, no es una falta detica, sino una falta enla

    tica. Entonces, cuando digo que se trata de algo en relacin a la tica, me refiero

    a que hay decisiones que uno toma, y de las cuales se hace responsable, y se

    ubica en relacin a esa decisin que tom, que no es la nica posible.

    Entonces, una decisin que yo he tomado ?que no es la nica posible, otros han

    tomado otra? es la de ubicarme deliberadamente en un tercer tiempo que no

    est dado de antemano, que es preciso drselo, y que podemos llamar: lacaniano:

    3) el tiempo de nosotros: lacaniano?

    No es obligatorio, no es un tiempo de hecho, como dije, es preciso drselo, es

    resultado de una perspectiva que uno construye o no, y que por eso pongo entre

    signos de pregunta. Uno debe construirlo e, incluso, confirmarlo. Ahora bien, qu

    implicara este tercer tiempo? Bueno, empecemos con una perogrullada que, de

    hecho, no es tal: ubicarse en un tercer tiempo implica que uno no se ha ubicado ni

    en el primer tiempo ni en el segundo, y es a partir de ah que, en verdad, podemos

    hablar de "tiempos" ?si nos dedicramos a la fsica, o a la matemtica, no se nos

    ocurrira nada semejante?. En segundo lugar, que tampoco el segundo tiempo se

  • 5/25/2018 216912789 Freud Lacan Nosotros Rodriguez Ponte

    8/20

    8

    confunde con el primero, y en particular, posicionarse en relacin a que Lacan

    efectu, con sus categoras, una lectura del texto de Freud ?es decir, que esa

    lectura ya est hecha?, pero adems que, esa lectura ya hecha, espera algo de

    nosotros, que digamos algo al respecto, si en efecto nos situamos como herederos

    de esa lectura, lo que implica que, salvo renegatoriamente, el acceso directo al

    texto de Freud es imposible, que no hay acceso al texto de Freud sino pasando

    por Lacan.

    Veamos un ejemplo, para que esto no parezca demasiado abstracto. Tomemos

    una simple frase de Lacan, del Seminario 11, sobre Los cuatro conceptos

    fundamentales del psicoanlisis. La habrn ledo muchas veces, la habrn

    escuchado repetidamente, tal vez hasta la habrn repetido:"la Vorstellungsreprsentanzes el significante". Como esta frase, hay cientos: "la

    condensacin es la metfora", "el deseo es el deseo del Otro", "el inconsciente es

    el discurso del Otro", "la represin es lo mismo que el retorno de lo reprimido", "la

    transferencia es el sujeto supuesto saber", etc... Cul es, en qu consiste, el

    mecanismo comn a esas frases? En que se ha tomado una nocin del texto de

    Freud, y que se efecta, en esa frase, una identificacin, gracias al empleo de la

    cpula, el es. Ahora bien, qu implica esto? Consideremos el ejemplo que les he

    propuesto: "la Vorstellungsreprsentanzes el significante ? Esto implica,

    evidentemente, si Lacan no est loco, que hay en el texto de Freud algo que

    permite tal asimilacin, tal identificacin. Esto en primer lugar, pero hay algo ms.

    Porque no se trata de que ah, meramente, se encuentra algo que ya estaba, sino,

    en verdad, se trata de que en esa frase se produce algo que no estaba. Porque

    cuando Lacan dice que "la Vorstellungsreprsentanzes el significante", en el

    mismo momento, en el mismo paso con el que hace esa identificacin, est

    descartando todo un sector, todo un importante sector, de la teora freudiana. No

    slamente est agregando a ese cuerpo doctrinal un trmino, el trmino

    "significante", que antes no estaba ?en otro sentido, podramos decir que "estaba",

    en ese sentido especial que Lacan destac tantas veces en el pretrito imperfecto:

    "estaba", porque algo de la nocin freudiana permita, toleraba, abrochar ah la

    palabra "significante", sin que la nocin misma se evaporara absolutamente?, no

  • 5/25/2018 216912789 Freud Lacan Nosotros Rodriguez Ponte

    9/20

    9

    slamente, entonces, agrega a ese cuerpo doctrinal freudiano el trmino

    "significante" que antes, como trmino al menos, no estaba, sino que en el mismo

    paso en que tal identificacin se produce, con esa y por esa identificacin se dejan

    de lado una serie cosas; por ejemplo, en este caso, se deja de lado toda la

    concepcin de la representacincomo "nueva presentacin", se deja de lado todo

    aquello en lo que la percepcin intervena como fundamento del aparato psquico

    y con ello una topologa de "interior" versus"exterior" o de "realidad

    psquica" versus"realidad material", as como la doctrina de la "autopercepcin" o

    de la "percepcin endgena" tal como aparece por ejemplo en el historial sobre el

    Presidente Schreber ?cuando Freud sugiere que la teora de los nervios, parte

    integrante del delirio de Schreber, era la manera en que ste perciba los

    movimientos de su libido? o en algn recodo de La interpretacin de los sueos.

    Todo eso queda descartado por obra y gracia de esta palabrita, "significante",

    engrampada por el empleo de la cpula, por el esde la frase esa. Pero todava

    algo ms: no slo se agrega una palabra nueva al corpus anterior, no slo se

    descartan partes importantes de ese corpuspor la introduccin en l de esa

    palabra nueva, sino que, con esa palabra nueva, se aade tambin a

    ese corpus algo importantsimo, que tampoco estaba en el corpus freudiano, que

    es la nocin de sujeto.

    Se entiende? Entonces, cuando tenemos una de estas frases portadoras del

    verbo ser, como la de que "la Vorstellungsreprsentanzes el significante",

    debemos tener en cuenta que ah hay el agregado de algo nuevo, que deja de

    lado algo anterior, y que arrastra consigo al menos otra novedad.

    Subrayo todo esto porque tiene que ver con una posicin que vengo sosteniendo

    en la Escuela desde hace rato, al menos desde hace diez aos, que es la de quehay que tomar en serio un par de frases de Lacan, en las que afirma que l,

    Lacan, es freudiano, pero que Freud no es lacaniano(2). Es decir, que hay una

    tensin, ah, entre esas dos afirmaciones, que es difcil de sostener, pero que es

    preciso sostener, o en todo caso es una decisin sostenerse en esa tensin, no

    aplanando a Lacan con Freud.

  • 5/25/2018 216912789 Freud Lacan Nosotros Rodriguez Ponte

    10/20

    10

    As, cuando tomamos un texto de Freud, cul ha de ser nuestra posicin, si nos

    ubicamos en esta perspectiva, que no es otra que la perspectiva del retorno a

    Freud de Lacan? Bueno, en primer lugar, ubicarse en esta perspectiva implica lo

    siguiente, por ejemplo: no ir a leer a Freud como lo haca Lacan ? es decir, que no

    nos identificaremos con una enunciacin que fue la de Lacan, sino que nos

    daremos el lugar para otra posicin enunciativa, que tenga en cuenta a la anterior,

    por supuesto, pero que no podra identificarse con ella ms que borrndola. Es

    decir que, eventualmente, nosotros tal vez podramos elaborar proposiciones del

    tipo: "la Vorstellunsreprsentanz es el significante"... pero sera por identificacin a

    la posicin enunciativa de Lacan.

    En cambio, otra posicin enunciativa, que es la que les propongo como propia deun tercer tiempo en esta historia, es la que tomara nota, por ejemplo, de que esa

    identificacin que efectu en su momento Lacan, cuando dijo que

    "la Vorstellungsreprsentanzes el significante", implica una operacin sobre el

    texto freudiano que consiste en introducir en l cosas que no estaban y descartar

    cosas que estaban.

    Por qu digo esto? Porque una tentacin, en la que no he dejado de caer, y ms

    de una vez, es la de lacanizar el texto freudiano, encontrando en Freud como ya

    dado todo lo que despus va a producir Lacan por su lectura del mismo. Por eso,

    creo que se los deca al comienzo, esto que les digo a ustedes tambin lo digo

    para m, para ver si puedo evitar caer en esta tentacin, y atenerme, hoy, en esta

    primera vuelta, a lo que me parece que est en el texto de Freud, sin agregados,

    para darme tiempo a que, en una segunda vuelta, podamos ver qu es lo que la

    operacin lacaniana, la operacin de lectura del texto de Freud por Lacan, ha

    descartado e introducido. Entonces, por ejemplo, me voy a prohibir a m mismoencontrar, en este texto, nociones como las del sujeto supuesto saber y el deseo

    del analista, que son nociones que no estn, ni podan estar, en el texto de Freud,

    que Lacan introduce, y que le dan otro piso a la cuestin de la transferencia, un

    nuevo piso en el que, tambin, algunas consideraciones de Freud van a ser

    dejadas de lado ? pero esto lo dejo para una segunda vuelta, entonces.

  • 5/25/2018 216912789 Freud Lacan Nosotros Rodriguez Ponte

    11/20

    11

    SOBRE LA DINAMICA DE LA TRANSFERENCIA

    Entonces, qu es la transferencia? ?que era una de las preguntas que surgieronal comienzo de esta renunin? qu es la transferencia en este texto de

    1912, Sobre la dinmica de la transferencia? Freud comienza diciendo que los

    "fenmenos de transferencia" ya han sido tratados por otros autores, pero que l,

    en ese texto, va a tratar de decir algo sobre su "dinmica". Qu es lo que quiere

    decir ac la palabra dinmica? Dos cosas: su mecanismo de produccin y su

    funcin en la cura.

    Respecto del mecanismo de produccin va a decir algo ?aqu yo ya

    estoy leyendoel texto, quiero decir, no estoy repitindolo? que podramos formular

    as: lo que est en elfundamento de la transferenciaes general e independiente de

    la cura. Me parece que sta es la posicin de Freud en este texto. La transferencia

    depende de lo que l llama ac "las condiciones de amor", es decir, una serie de

    cliss, que se reimprimen, se repiten, que tienen componentes concientes ligados

    a lo que Freud llama "la realidad objetiva", y componentes inconscientes ligados a

    la fantasa, que implican una especie de expectativa de que, a cada encuentro, elclis pueda amoldarse ms o menos, o viceversa, que el encuentro se amolde

    ms o menos al clis. En este sentido, la transferencia no va a ser un resultado de

    la cura, sino que la cura va a ser el lugar donde esta transferencia se va a

    manifestar con un particular relieve, donde va a poder ser teorizada ?a diferencia

    de lo que ocurre en los institutos de internacin", como dice Freud, donde la

    transferencia se manifiesta tambin un montn, pero donde nadie la puede

    pensar?, y donde se va a poder operar con ella.

    Entonces, ste sera el primer punto: las condiciones de amor. Podramos decirlo

    a la manera de Lacan en Intervencin sobre la transferencia: "los modos

    permanentes segn los cuales [el sujeto] constituye sus objetos"(3), pero

    atengmonos por ahora a la manera en que lo est pensando Freud: estas

    "condiciones de amor" resultaran de una especie de "complejos", con

  • 5/25/2018 216912789 Freud Lacan Nosotros Rodriguez Ponte

    12/20

    12

    componentes concientes y con componentes inconscientes, que por una razn

    que Freud denomina ac frustracin, es decir, falta de satisfaccin en la vida

    cotidiana, generan algo as como una expectativa permanente, flotante, de un

    encuentro amoroso satisfactorio, y, entre esos encuentros posibles, est el

    encuentro con el mdico, quien entonces recibira la impronta de estos cliss.

    Ahora bien, en esta definicin, en esta manera de plantear las cosas, me parece

    que esto se parece bastante a la manera en que aparece la transferencia en el

    texto Sobre la psicoterapia de la histeria, es decir, como "falso enlace", como

    "falsa conexin". Hay ah como una especie de encuentro, que podra no darse. Si

    bien en el texto de 1895 Freud no habla de las "condiciones de amor", sino de las

    resistencias de la represin, lo que en definitiva ocurre, o Freud dice que ocurre,es que cuando se llega a un punto particularmente espinoso en esa bsqueda de

    recuerdos en la que consiste la cura catrtica, y el paciente busca "zafar", o el

    sentimiento est ah pero el que no est ah es el recuerdo, bueno, resulta que el

    mdico s est ah, a diferencia del recuerdo penoso reprimido, y entonces se

    produce la falsa conexin entre el sentimiento y el mdico, de un modo que parece

    automtico, como resultado de una especie de horror vacui. Bueno, a ese

    esquema de Sobre la psicoterapia de la histeria, Freud le aadira esto de las

    "condiciones de amor", pero de todos modos lo que resulta de ambos esquemas

    es que la transferencia, si por un lado es del orden de lo necesario, en el sentido

    de que no cesa de producirse, su irrupcin en tal o cual momento de la cura, como

    fenmeno puntual, no deja de ser contingente. Como que el "mdico", como lo

    llama Freud en este texto, no tiene nada que ver en el asunto. Este es el punto

    que me interesaba destacar. Simplemente, l est ah, hace su tarea, y su tarea,

    en la medida en que implica tocar lo reprimido, lo vuelve un lugar electivo para

    este encuentro con las "condiciones de amor".

    Al comienzo del texto, Freud se hace dos preguntas que en verdad van a ser una

    sola, porque a la primera la descarta en seguida: por qu es ms fuerte en los

    neurticos que estn en anlisis, el fenmeno de la transferencia? ?sta la

    descarta inmediatamente y dice: no, no es ms fuerte en los neurticos en

  • 5/25/2018 216912789 Freud Lacan Nosotros Rodriguez Ponte

    13/20

    13

    anlisis, porque en los "institutos" tambin se observa, o en la novela de Gabriele

    Reuter, y al menos con tanta intensidad, simplemente que ah nadie est para

    teorizar eso en trminos de transferencia?; en cambio, le va a dar un poco ms de

    soga a la segunda pregunta, que es la siguiente: por qu en el anlisis la

    transferencia nos sale al paso como la ms fuerte resistencia al tratamiento?

    De esta ltima frase quisiera subrayar una palabra, porque aqu tambin vamos a

    encontrar una ambigedad, que me parece que no estaba tan ambigua en Sobre

    la psicoterapia de la histeria, como si ?disculpen la manera en que lo digo? como

    si en este punto Sobre la psicoterapia de la histeriafuera ms "progresista"

    que Sobre la dinmica de la transferencia. Porque en Sobre la psicoterapia de la

    histeriaestaba claro, como ya hemos visto en una reunin anterior, que laresistencia es algo relativo al movimiento de acercamiento al ncleo de lo

    reprimido, al famoso "ncleo patgeno"; en ese sentido, la resistencia tiene como

    un aspecto positivo: es como una "funcin de cercana" ? nadie estara autorizado

    a decir, a partir del esquema de Sobre la psicoterapia de la histeria, que alguien, el

    paciente, digamos, "se resiste". La resistencia es algo que ocurre cuando el flujo

    de las asociaciones atraviesa determinados senderos estrechos, para decirlo de

    algn modo, que se aproximan demasiado a un ncleo que suscita una repulsa

    que no es tan claro que sea la del sujeto ? y menos que menos se podra decir

    que alguien "se resiste al tratamiento".

    En cambio, en Sobre la dinmica de la transferenciapodemos encontrarnos con

    un par de frases ?no es todo el texto as? donde, por un lado, la nocin de

    resistencia desliza hacia la idea de "resistencia altratamiento ?no

    resistencia en el tratamiento, para decirlo de una manera que valore su funcin,

    entendido el tratamiento como el cumplimiento de la regla fundamental?, y hacia laidea de la resistencia como algo relativo a alguien ?y no relativo al propio flujo de

    las asociaciones?, por ejemplo cuando Freud escribe: esa es la meta [la de

    resistirse] que quiere alcanzar el analizado cuando hace coincidir el objeto de sus

    mociones de sentimiento con el mdico"(4). Es decir, como que el analizado "se

  • 5/25/2018 216912789 Freud Lacan Nosotros Rodriguez Ponte

    14/20

    14

    aprovechara" tcticamente de la transferencia para resistirse mejor a la confesin

    de lo reprimido.

    Entonces, en este punto la transferencia aparece como una resistencia, y Freud

    localiza este punto de una manera menos discutible cuando describe un modo de

    aparicin de su fenmeno: "cuando las asociaciones libres de un paciente se

    deniegan"(5), es decir, cuando algo se interrumpe.

    Bueno, ac conviene recordar que el primer empleo metapsicolgico de la

    palabra transferenciafue en plural: transferencias, en el texto de 1900, sobre La

    interpretacin de los sueos. En este texto el planteo es el siguiente: el deseo,

    inconsciente, no se puede decir; entonces, lo que no se puede decir, se dice... por

    transferencia. Es el ejemplo de los dos dentistas: el dentista americano que quiere

    ejercer en Viena pero carece del ttulo habilitante y entonces se vale de un

    dentista viens: como no puede ejercer, ejerce... con el ttulo del dentista viens.

    Ahora bien, en este punto, donde lo que no se puede decir no obstante se dice,

    por transferencia, se introduce tambin una ambigedad, que es la siguiente: lo

    que no se puede decir, es del orden de lo decibleo del orden de lo indecible?

    Se entiende la pregunta? Porque me parece que esto es central. Es decir, lo que

    no se puede decir, es posible que no se pueda decir porque es indecible, porque

    no hay palabra para eso, o porque la palabra que lo dira... despierta fuertes

    resistencias. Por qu me parece importante destacar esta alternativa? Porque la

    segunda opcin lleva a la transferencia del lado del disfraz: algo que tiene un

    rostro, un rostro verdadero, digamos, para recargar las tintas, se pone un disfraz,

    una mscara, y se presenta con otro rostro, engaoso, falso. Mientras que la

    primera opcin ?la de que lo que no se puede decir, no se puede decir porque es

    indecible? lleva a que esto que no se puede decir tambin se dice gracias aldisfraz... pero detrs del disfraz no hay un rostro que sera el verdadero, detrs del

    disfraz no hay nada... o hay nada, lo que implica que lo que estamos llamando el

    disfraz sea engaoso, falso, y al mismo tiempo no haya otra cosa que eso como

    verdadero.

  • 5/25/2018 216912789 Freud Lacan Nosotros Rodriguez Ponte

    15/20

    15

    En esta ltima alternativa, entonces, la interpretacin no va a consistir en quitar el

    disfraz, en arrancar las mscaras, como se dice, para que aparezca el verdadero

    rostro oculto tras la mscara, sino que consistir en un desciframiento, tal como es

    indicado en ese mismo texto de La interpretacin de los sueos: se tomarn las

    imgenes a las que han sido trasladados los restos diurnos en s indiferentes,

    digamos, pero tramados por el deseo inconsciente, y se las descifrar a la manera

    de los jeroglficos, del rbus.

    Bueno, esto mismo que ocurra con las "transferencias", en plural, me parece que

    tambin est en juego en Sobre la dinmica de la transferencia, aunque aqu la

    transferencia est tomada en singular, y en el lugar de los restos diurnos

    encontremos la persona del mdico. Qu es lo que no se puede decir y que,entonces, se dir por transferencia? Me parece que Freud se va a inclinar, segn

    el momento del texto, hacia las dos respuestas. A veces se va a inclinar del lado

    de que lo que no se puede decir es del orden de lo decible, y entonces la

    transferencia es un modo de disfrazar una realidad velada, por decirlo as, y ah

    habla entonces de, por ejemplo, que "cancelamos la transferencia hacindola

    conciente"(6), es decir, nombrando el rostro oculto de la transferencia, la persona

    sustituda, digamos. Pero hay otro aspecto, que no est bien marcado en el texto

    como tal ?tal vez en los prximos artculos se vea un poco mejor?, que es que hay

    algo que no tiene otra existencia que ese disfraz mismo, y que va a poner en juego

    lo que ac sera del orden de la "actualizacin", el actuar, elagierende la

    transferencia(7), que no es reductible por la interpretacin que promueve la

    rememoracin.

    PARTICIPANTE: [no se escucha en la grabacin]

    S, me parece que s, que esa sera mi interpretacin de lo que va a aparecer

    despus en el texto. Es decir, hay algo, del orden de la transferencia, que es,

  • 5/25/2018 216912789 Freud Lacan Nosotros Rodriguez Ponte

    16/20

    16

    podramos decir, reductible a la rememoracin, a un "le pasa a usted esto

    conmigo, que tiene que ver con tal o cual cosa de su pasado", y hay otro costado

    de la transferencia, que tiene que ver con la puesta en acto, que no sera

    reductible, por la interpretacin, a la rememoracin. En la medida de esto, que la

    interpretacin, en el sentido de empujar hacia la rememoracin ?lo que remite a lo

    que veremos en Recordar, repetir y reelaborar, y que es casi un aforismo

    freudiano: "el analizado repite en vez de recordar, y repite bajo las condiciones de

    la resistencia"(8) ? implicara rechazar el componente de lo actual que tiene la

    transferencia.

    PARTICIPANTE: [no se escucha en la grabacin]

    Exactamente, pero bueno, ese es el punto que, deliberadamente, dejo fuera en

    esta lectura sin agregados, o, en todo caso, sin otro agregado que la lectura que

    hago del texto. Pero bueno, es as como decs: si el mdico fuera meramente un

    resto diurno indiferente que simplemente est ah para recibir la carga del deseo

    inconsciente, o la carga de los complejos infantiles, de las condiciones de amor,

    etc., evidentemente toda la transferencia sera, de derecho, reductible a la

    rememoracin. Ahora bien, reducir toda la transferencia a la rememoracin implica

    rechazar, por parte del analista, el carcter actual del sentimiento, para decirlo a la

    manera de Freud.

    PARTICIPANTE: [no se escucha en la grabacin]

    Las dos cosas: la puesta en acto y la actualidad.

  • 5/25/2018 216912789 Freud Lacan Nosotros Rodriguez Ponte

    17/20

    17

    PARTICIPANTE: [no se escucha en la grabacin]

    S. Entonces: hay algo que se pone en acto, all donde no hay palabra, peroadems es algo que se pone en acto en la actualidad, para decirlo de una manera

    un poco redundante ?otra cosa es el acting-out, que es una convocatoria al

    anlisis, es una transferencia sin anlisis?. A ver, lo voy a decir con un ejemplo

    que est cercano al texto...

    En un momento del texto, Freud se pregunta por qu la transferencia sirve tanto a

    la resistencia, y da dos razonamientos que sin embargo se contradicen. Por un

    lado, dice, gracias a la transferencia el paciente puede resistir mejor ? por qu? ?

    y, porque parece ms difcil decirle a alguien en la cara "te deseo", supongamos,

    "confesar una mocin de deseo prohibido ante la misma persona sobre quien esa

    mocin recae", como dice Freud (9). Pero por otro lado, dice tambin, tambin

    esto podra jugar a la manera de un "ante usted no tengo secretos", o algo as.

    En cul de las dos alternativas estaramos ante la dimensin de la actualidad?

    Evidentemente, en lo que aqu Freud llama "confesin". Entonces, he aqu el

    ejemplo: decir "yo te deseo" no es lo mismo que decir, como me dijo una vez unapaciente, "mi marido dice que yo estoy enamorada de usted". En la frmula de

    esta paciente, es cierto, hay algo del orden de la confesin... pero que no se

    asume como tal, el dicho es atribudo a otro, al marido. El desvo de la actualidad

    puede ser un poco ms sutil: no es lo mismo decir "en este momento estoy sujeta

    a las pasiones de la transferencia" que decir "estoy caliente con usted". En ese

    sentido, comenzar una confesin con la frmula "ante t no me avergenzo, puedo

    decrtelo todo", como dice Freud, me parece que es una coartada, que reduce la

    dimensin de actualidad de lo que est en juego.

    Bueno, siguiendo con esta puntuacin del texto, quiero subrayar un punto sobre el

    cual Lacan va a llamar mucho la atencin ?por eso lo subrayo?, es que la

    transferencia sobreviene en un punto, en el punto donde cesan las asociaciones.

    Despus Freud va a decir, en otro texto, que no es la resistencia la que ha creado

  • 5/25/2018 216912789 Freud Lacan Nosotros Rodriguez Ponte

    18/20

    18

    la transferencia (10) ?esto es importante?, sino que, en ocasin de una

    resistencia, o de una resistencia incrementada, o de una resistencia de otro orden

    ?por eso les deca que aqu hay cierta ambigedad que conviene destacar:

    cuando se pasa al acto, a la actualidad, qu es? es que estamos en un sector

    de lo todava ms reprimido, o es algo de otro orden que lo reprimido, en el

    sentido de que lo reprimido se recupera como recuerdo??, en fin, en ese punto

    donde no hay palabra, sobreviene la transferencia, lo cual no quiere decir que sea

    la resistencia la que crea la transferencia. La transferencia, en este texto, al

    menos, depende de "las condiciones de amor".

    Bueno, dos cositas ms y termino, as tenemos tiempo para charlar entre todos.

    En primer lugar, un lo brbaro que se hace Freud, cuando introduce los trminosde "transferencia positiva" y "transferencia negativa": no queda para nada claro lo

    que est diciendo, no slo porque a la transferencia "positiva", en seguida, la

    divide en dos, en "tierna" y "ertica", sino porque la "negativa" no se sabe de

    dnde sale, porque todo el razonamiento vena por el lado de las "condiciones de

    amor", de los deseos edpicos reprimidos, de la libido retirada en la fantasa

    inconsciente, por lo que es difcil ver de dnde puede venir la transferencia

    "negativa" en el sentido de la transferencia de sentimientos hostiles. Lo que ocurre

    es que cuando Freud no sabe a qu santo encomendarse, entonces mete una

    especie de trmino que equivale a decir "aqu no se pregunta ms", por ejemplo,

    el trmino "ambivalencia", o la referencia al asesinato del orangutn primitivo. Es

    un punto de detencin de la pregunta obligado por el procedimiento recursivo de

    su razonamiento.

    Pero aunque esto sea un gran lo, una especie de respuesta... En cuanto a la

    transferencia positiva, es una especie de respuesta meramente verbal a lapregunta que se haba hecho. La pregunta que se haba hecho era: de dnde

    viene la transferencia? de dnde viene su papel en la cura? Y la respuesta verbal

    es decir: hay transferencia positiva y hay transferencia negativa, y la transferencia

    positiva... una de ellas, la que l va a llamar "sublimada"... Pero lo que es

    interesante en el texto, independientemente de este lo, es que la cancelacin de

  • 5/25/2018 216912789 Freud Lacan Nosotros Rodriguez Ponte

    19/20

    19

    la transferencia "hacindola conciente", como dice en la pgina 103, lo que hace

    en definitiva es elevar el poder de la sugestin. Porque, vean, el argumento de

    Freud es, palabras ms, palabras menos, ste: "cuando nosotros cancelamos la

    transferencia hacindola conciente", desligamos las condiciones de amor infantiles

    de la persona del mdico, pero esto quiere decir que desligamos lo reprimido, y

    entonces ahora nos queda slamente la transferencia positiva, tierna, etc., y

    entonces ahora podemos operar por sugestin ? slo que como somos piolas, y

    analistas, y adems lo lemos a Ferenczi, decimos que la sugestin se explica por

    la transferencia. Pero en definitiva es eso, es: los poderes de los que el analista se

    vale para operar sugestivamente sobre el paciente una vez que es descartado el

    aspecto resistencial de la transferencia.

    Y el ltimo punto que quera destacar en este texto ?en verdad, salte mucho?, es

    este asunto del final, de que nadie puede ser ajusticiado in absentiao in

    effigie"(11), es decir, la ltima frase del texto. Esto quiere decir que, ms all de

    todo lo que vino diciendo de los complejos infantiles, de la rememoracin y qu s

    yo, hay algo en la transferencia que tiene que ver justamente con la actualidad,

    con la puesta en acto, en el sentido siguiente: qu sera in absentia? ? in

    absentiaes lo simblico, es la representacin que representa otra cosa ausentada,

    es el camino de la rememoracin ? y qu sera in effigie? ? in effigietiene que

    ver con la imagen, con lo imaginario. Hay una dimensin de la transferencia que

    no puede reducirse ni a lo simblico ni a lo imaginario, y que requiere entonces

    determinada maniobra o posicin del analista, no dice Freud cul, pero me parece

    que ste sera el punto que remite a que esa dimensin otra de la transferencia es

    ineliminable y que, adems ?a esto Freud no lo dice as, pero se puede deducir?,

    requiere una respuesta del analista, que no puede transitar por el camino ni de la

    simbolizacin ni de la imaginarizacin. Bueno, hasta aqu llegu por hoy.

    NOTAS

    (1) cf. Escritos, p. 809.

  • 5/25/2018 216912789 Freud Lacan Nosotros Rodriguez Ponte

    20/20

    20

    (2) Ricardo E. RODRIGUEZ PONTE, La articulacin Freud-Lacan en la

    perspectiva del retorno a Freud de Lacan(1987), Freud-Lacan: efectuaciones de

    retorno. El Retorno Borromeo(Seminario, 1990), El retorno borromeo.

    Presentacin nodal del retorno a Freud (1990), Para una clnica lacaniana: acoger

    lo que Lacan ha dicho(1991), El Padre: la falta en Freud (1991), Freud-Lacan: un

    irreductible tres(1991). Algunos de estos textos han sido publicados en libro o en

    fichas, pero todos se pueden encontrar en la Biblioteca de la E.F.B.A.

    (3) Escritos 1, p. 214.

    (4) Obras Completas, volumen XII, Amorrortu editores, Buenos Aires, 1980, p.

    102.

    (5) op. cit.,p. 99.

    (6) op. cit.,p. 103.

    (7) op. cit.,p. 105.

    (8) op. cit., p. 153.

    (9) op. cit., p. 102.

    (10) "Sin embargo, la resistencia no ha creado este amor; lo encuentra ah, se

    sirve de l y exagera sus exteriorizaciones", leeremos en su

    artculo Puntualizaciones sobre el amor de transferencia, de 1914. Cf.op. cit., p.

    171.

    (11) op. cit., p. 105.