26º domingo t.o.

4

Click here to load reader

Transcript of 26º domingo t.o.

Page 1: 26º domingo t.o.

1

1

DOMINGO 26º DEL T.O.25 de septiembre de 2011

1. MONICIÓN DE ENTRADA

Sed bienvenidos a esta Eucaristía. Hoy, la Palabra de Dios nos pone muy claro el compromiso de decir SÍ. El problema que tenemos nosotros es que nos cuesta mucho comprometernos seriamente y con sinceridad. Decimos SÍ con facilidad, pero si ese SÍ lleva detrás un compromiso serio, la cosa no es tan fácil. Creemos merecerlo todo porque hemos dicho "voy Señor”, y no nos damos cuenta que no engañaremos a Dios por un SÍ repentino. Él ve en lo profundo del corazón, y sabe lo que las afirmaciones encierran. En medio de nuestra monotonía, tristezas y alegrías que atravesamos aquí en la prisión, Jesús nos ha convocado para esta celebración de la eucaristía. Y nosotros hemos respondido a la llamada y nos hemos reunido dejando en el patio otras cosas, otras actividades, como el no hacer nada, la partida del dominó, las cartas, el parchís,… Quizás también hemos tenido que vencer las pocas ganas de venir a la misa.

Pero sabemos que escuchar la Palabra es importante para levantar nuestros ánimos durante la semana y para mantener vivas dentro de nuestros corazones las llamas de la fe y de la libertad.

2. ACTO PENITENCIAL.- Señor Jesús, tu Sí era un Sí firme a la voluntad del Padre, aún cuando te llevó al sufrimiento y a la cruz. R/. Señor, ten piedad de nosotros. Cristo Jesús, tu palabra era de fiar, ya que vivías de acuerdo a lo que creías: R/. Cristo, ten piedad de nosotros. Señor Jesús, debemos nuestro perdón y nuestra vida a tu Sí al Padre: R/. Señor, ten piedad de nosotros.

3. ORACIÓN Oh Padre amoroso: Tú no quieres que los pecadores mueran, sino que se alejen de su pecado y que hagan lo que es recto y bueno para que vivan. Tú sabes que somos frágiles y débiles. No dejes de perdonarnos, danos la mentalidad de Jesús, para que con él te digamos Sí con el amor profundo de quienes han sido perdonados.

Page 2: 26º domingo t.o.

2

2

Haznos también misericordiosos para con otros. Te lo pedimos por Jesucristo nuestro Señor.

4. PALABRA DE DIOS PRIMERA LECTURA

⇒ Comentario El profeta Ezequiel nos invita a modificar nuestra manera de vivir. Siempre hay posibilidad de cambio, siempre existe la posibilidad del arrepentimiento, de mejorar la conducta, de optar por el bien. Sin embargo nosotros despreciamos a determinadas personas que se cruzan en nuestro camino, olvidando que su arrepentimiento puede ser mayor que el nuestro.

LECTURA DE LA PROFECÍA DE EZEQUIEL 18, 25-28 Así dice el Señor: Comentáis: no es justo el proceder del Señor. Escucha, casa de Israel: ¿es injusto mi proceder?, ¿o no es vuestro proceder el que es injusto? Cuando el justo se aparta de su justicia, comete la maldad y muere, muere por la maldad que cometió. Y cuando el malvado se convierte de la maldad que hizo y practica el derecho y la justicia, él mismo salva su vida. Si recapacita y se convierte de los delitos cometidos, ciertamente vivirá y no morirá. Palabra de Dios. SALMO RESPONSORIAL (SALMO 24.) R.- RECUERDA, SEÑOR, QUE TU MISERICORDIA ES ETERNA. Señor, enséñame tus caminos, instrúyeme en tus sendas: haz que camine con lealtad; enséñame, porque tú eres mi Dios y Salvador, y todo el día te estoy esperando. R.- Recuerda, Señor, que tu ternura y tu misericordia son eternas;

no te acuerdes de los pecados ni de las maldades de mi juventud; acuérdate de mí con misericordia, por tu bondad, Señor. R.- El Señor es bueno y es recto, y enseña el camino a los pecadores; hace caminar a los humildes con rectitud, enseña su camino a los humildes. R.-

SEGUNDA LECTURA

⇒ Comentario En la segunda lectura San Pablo nos recuerda cómo Cristo se hizo siervo y bajó hasta tocar la mayor humillación, ocupó el último puesto hasta llegar a anonadarse, marcando así el camino a sus seguidores. Sin embargo la vida común parece olvidarse de ello. Buscamos el prestigio, el ascenso, los títulos, los honores y por desgracia, a veces lo buscamos, en nombre del que arrinconó los privilegios para hacerse esclavo. LECTURA DE LA CARTA DEL APÓSTOL SAN PABLO A LOS FILIPENSES 2, 1-11 Hermanos: Si queréis darme el consuelo de Cristo y aliviarme con vuestro amor, si nos une el mismo Espíritu y tenéis entrañas compasivas, dadme esta gran alegría: manteneos unánimes y concordes con un mismo amor y un mismo sentir. No obréis por envidia ni por ostentación, dejaos guiar por la humildad y considerad siempre superiores a los demás. No os encerréis en vuestros intereses, sino buscad todos el interés de los demás. Tened entre vosotros los sentimientos propios de Cristo Jesús.

Page 3: 26º domingo t.o.

3

3

Él, a pesar de su condición divina, no hizo alarde de su categoría de Dios; al contrario, se despojó de su rango y tomó la condición de esclavo, pasando por uno de tantos. Y así, actuando como un hombre cualquiera, se rebajó hasta someterse incluso a la muerte, y una muerte de cruz. Por eso Dios lo levantó sobre todo y le concedió el "Nombre-sobre-todo-nombre"; de modo que al nombre de Jesús toda rodilla se doble --en el Cielo, en la Tierra, en el Abismo-- y toda lengua proclame: “Jesucristo es Señor, para gloria de Dios Padre”. Palabra de Dios. EVANGELIO

⇒ Comentario El evangelio de Mateo nos recuerda todas esas veces que somos fieles sólo de fachada. Somos correctos, respetamos las formas pero rechazamos una fidelidad que supone sacrificio, un compromiso hondo, una entrega por amor, una generosidad sin excepciones, una vida que grite a los demás. No nos engañemos creyendo que tenemos el Reino en posesión. Otros a los que precisamente catalogamos de irresponsables, quizá se hayan conmovido con la invitación de Cristo y hayan respondido el SÍ con su arrepentimiento. Pensemos que nunca se acaba de ser cristiano de verdad.

LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN MATEO 21, 28-32 En aquel tiempo, dijo Jesús a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo: ¿Qué os parece? Un hombre tenía dos hijos. Se acercó al primero y le dijo: "Hijo, ve hoy a trabajar en la viña". Él le contestó: "No quiero." Pero después recapacitó y fue. Se acercó al segundo y le dijo lo mismo. Él le contestó: "Voy, señor." Pero no fue. ¿Quién de los dos hizo lo que quería el padre? Contestaron: El primero. Jesús les dijo: Os aseguro que los publicanos y las prostitutas os llevan la delantera en el camino del reino de Dios. Porque vino Juan a vosotros enseñándoos el camino de la justicia, y no le creísteis; en cambio, los publicanos y prostitutas le creyeron. Y, aun después de ver esto, vosotros no recapacitasteis ni le creísteis. Palabra del Señor.

Reflexión.- En el trasfondo del evangelio de hoy está la sociedad judía en que Jesús vive. Era una sociedad llena de barreras y discriminaciones: judíos y extranjeros excluidos, personas puras y gente impura a la que hay que evitar, justos y pecadores de profesiones deshonrosas, indeseables; y ve la hipocresía social y religiosa, la incoherencia de los que dicen y no son. Las ve, y denuncia y lo rompe en su actuación diaria. Su actuación sorprende, escandaliza y provoca. Desde esta perspectiva el evangelio de este domingo es una invitación a la conversión, pero no a una conversión hecha de palabras y propósitos vacilantes sino a una conversión sincera que suponga un cambio de vida. Recordemos que para ser cristiano no basta decir y afirmar la fe sino que hace falta ser consecuente con esa afirmación. La parábola de los dos hijos es la primera de un tríptico que la liturgia nos presenta en tres domingos sucesivos. El tema central de las tres es la diversa respuesta de quienes han sido invitados por Dios a trabajar en la viña, a dar fruto y participar en la fiesta del reino de los cielos. Son tres aspectos de la predicación de Jesús sobre el reino. Jesús hace un análisis crítico de la sociedad dividida socialmente entre la clase alta y el “pueblo de la tierra”, y religiosamente entre los justos y los pecadores. Desenmascara la supuesta justicia de los dirigentes y acusa a los escribas y fariseos de ser de aquellos que dicen y no hacen. Jesús sale en defensa de los llamados injustos de los que dicen “no quiero” pero luego van a trabajar a la viña. Y pronuncia una de las sentencias más escandalosa favor de los publícanos, prostitutas y pecadores. No porque apruebe su pecado, sino porque están mejor dispuestos a acoger el evangelio y cambiar de vida.

Page 4: 26º domingo t.o.

4

4

5. ORACION FINAL

YO SI QUIERO, SEÑOR Ir contigo hasta el final Colaborar con tus cosas Corregirme con tu Palabra YO SI QUIERO, SEÑOR Marchar por tus caminos Vivir en tu verdad Amar con tu mismo amor YO SI QUIERO, SEÑOR Cuidar lo que Tú cuidas Sembrar lo que Tú siembras Dar lo que Tú das

YO SI QUIERO, SEÑOR Trabajar en tu campo Cuidar tu viña Llevar alegría al mundo Aportar ilusión y esperanza YO SI QUIERO, SEÑOR Pero, si en algún momento, te digo que “si quiero” y es un “no quiero” perdóname, Señor, y haz que vuelva al camino verdadero Amén.

SEÑOR, INSTRÚYEME EN TUS SENDAS (SAL 24)

Nuestras sendas no son las tuyas. Conocemos la senda de los violentos, llevan a la sumisión y la muerte, y tú eres libertad, eres vida. Señor Jesús, instrúyeme en tus sendas.

Conocemos la senda de los codiciosos,

llevan a la esclavitud y miseria, y tú eres gratuidad y comunión. Señor Jesús, instrúyeme en tus sendas. Conocemos la senda de los lujuriosos, llevan a la degradación y el vacío, y tú eres dicha y plenitud. Señor Jesús, instrúyeme en tus sendas.

Enseñas el camino a los humildes, a los niños, a los pecadores, y tu camino es misericordia. Señor Jesús, instrúyeme en tus sendas. Tu camino es la verdad, eres luz, pero vivimos en la mentira, en el engaño, en el error y en las medias verdades. Señor Jesús, instrúyeme en tus sendas. ¿Qué es la verdad?, seguimos preguntando. ¿Es lo que aprueba la mayoría, aunque sólo sea por un voto más que los otros? ¿Es lo que dice el oráculo de turno o la tertulia? ¿Es lo que se lleva, lo que está de moda? Señor Jesús, instrúyeme en tus sendas.

Tu verdad nace muy arriba y muy dentro,

deslumbra la mente y el corazón, nunca la agotamos, no la poseemos, ella nos posee, es don y misterio. Señor Jesús, instrúyeme en tus sendas. Tu camino es la belleza, tú seduces. Nos dejamos seducir por la belleza de las formas, la belleza de los cuerpos, de lo joven, damos culto a la belleza. Señor Jesús, instrúyeme en tus sendas. No hemos aprendido la belleza del espíritu, del amor. ¿Hay belleza en un crucificado, en un leproso, en una ancianita arrugada... por amor? Señor Jesús, instrúyeme en tus sendas.

Tu camino es el amor, eres fuego. El amor entre nosotros está devaluado, envolvemos con esta palabra realidades feas y egoístas, a cualquier cosa llamamos amor. Señor Jesús, instrúyeme en tus sendas. El amor es el camino real, autopista, en la que confluyen todos los caminos. El que camina con amor nunca se equivoca, porque tú eres Amor. El amor es la belleza que embellece todas las sendas. El amor es la verdad suprema. La verdad está en gastarse poco a poco, en olvidarse de sí y entregar la vida. Señor Jesús, instrúyeme en tus sendas.