29 La Base Alemana de Carros de Combate

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LA BASE ALEMANA DE CARROS DE COMBATE EN LASARGUIJUELAS, CCERES (1936-1937)

Antonio Rodrguez Gonzlez

Las publicaciones ms recientes suelen coincidir cuando sostienen que lavictoria de los militares rebeldes en la guerra civil espaola no habra sido posi-

ble sin el apoyo y la ayuda que recibieron por parte de las potencias fascistaseuropeas, esto es, de Italia y Alemania. Aparte del establecimiento de relacionescomerciales y contactos diplomticos con el gobierno de Burgos, la interven-cin de ambos pases se concret en el envo de tropas, tanto del ejrcito regularcomo voluntarios, y de toda clase de armamento: aviones, artillera y carros decombate, armas convencionales y municin, que a la larga resultaron indis-

pensables para que los insurrectos le ganaran la guerra a la Repblica.

Extremadura goz de una situacin estratgica privilegiada durante losaos que dur la contienda, de un parte por su proximidad a la frontera conPortugal, pas cuyo gobierno, aunque oficialmente se haba declarado neutral,tambin apoyaba a los militares sublevados; y por otra, porque desde el mes deagosto de 1936 esta regin constitua el nico nudo de comunicacin terrestreentre los ejrcitos rebeldes del norte y el sur de la Pennsula. Por estas mismasrazones, el trasiego de tropas y unidades militares extranjeras, de los pases queapoyaban a los facciosos, fue constante mientras dur el conflicto.

En algunos casos, como el que nos ocupa, estas unidades militares llegarona establecer su cuartel general en tierras extremeas. Estos centros tuvieron unadoble funcin: por una parte servan de base de operaciones, desde donde secoordinaban las acciones militares de estas unidades en otros frentes, por logeneral, alejados del extremeo; y al mismo tiempo, en sus instalaciones seinstrua a soldados espaoles en el manejo del armamento enviado, y los oficia-les aprendan las modernas tcnicas de combate, que muy pronto seran ensaya-das en nuestra guerra civil y llevadas a la prctica en la prxima conflagracinmundial.


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Los alemanes proponen a Franco el envo de una fuerza blindadaEl da 5 de septiembre de 1936, el teniente coronel Walter Warlimont haba

llegado al aerdromo de Cceres con el propsito de entrevistarse con el general

Franco. Le acompaaban el general italiano Mario Roatta y, posiblemente, elempresario alemn, afincado en Tetun, Johannes Bernhardt. Warlimont eraagente de la Abwehr, el servicio de inteligencia del ejrcito alemn, que porentonces diriga el controvertido almirante Wilhelm F. Canaris. Su preparacinmilitar, as como sus conocimientos de economa y poltica, junto con un ca-rcter firme e inquebrantable, fueron cualidades que seguramente pesaron paraque sus superiores decidieran ponerle al frente de esta misin.

A la maana siguiente, Franco recibi a los representantes de las potenciasfascistas en el palacio de los Golfines de Arriba, su cuartel general desde me-

diados de agosto, desde donde diriga las operaciones encaminadas a romper elcerco del Alczar de Toledo. En la reunin que mantuvieron, se concretaron lostrminos en que deba desarrollarse la ayuda que tanto Alemania como Italiallevaban ms de un mes proporcionando a los rebeldes espaoles.1

Tras su entrevista con Franco, Warlimont se instal en Sevilla, desde donderemiti varios informes a Berln, en los que daba cuenta a sus superiores de lasconversaciones y los acuerdos alcanzados con las autoridades rebeldes, al mis-mo tiempo que aprovechaba para describir y evaluar el desarrollo de la guerraen los distintos frentes. En uno de estos informes haca constar los buenos ser-

vicios que haban prestado los aviones suministrados por la Luftwaffe en losprimeros combates y en el paso del Estrecho de Gibraltar por las tropas suble-vadas procedentes de frica. Sin embargo, el teniente coronel germano eraescptico en cuanto al xito futuro de los rebeldes en las operaciones militares,a no ser, segn su opinin, que Alemania incrementara sin tardanza su ayudamaterial, sobre todo en lo referido a unidades blindadas, caones antiareos yanticarro, armas de las que los espaoles carecan casi por completo.2

En este sentido, Warlimont solicitaba a Berln el envo de una fuerza blin-dada, as como material contra carros de combate, y, desde luego, se sentira

1 Este encuentro tuvo un carcter discreto y no oficial, por lo que no podemos precisar los detalles de la conversacin entre los delegados alemn e italiano con el general Franco, de la que no ha quedado constancia documental ni trascendi nada en su momento. Los detalles de esta entrevista son tratados con mayor profundidad en mi ponencia titulada Los antecedentes de la intervencin militar alemana en Extremadura durante la guerra civil (julio-septiembre 1936), que present en el

Congreso Memoria Histrica e Historia: Estado de la cuestin, celebrado en la Facultad de Filoso-fa y Letras de Cceres, en abril de 2008. En breve se publicarn las actas de este congreso.2P. Elstob,La Legin Cndor. Espaa 1936-39, Madrid, San Martn, 1980, p. 103-104.


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sorprendido por la respuesta obtenida de su sugerencia, ya que, como veremos acontinuacin, el material recibido sobrepas con creces sus expectativas.3

Fig.1. El teniente coronel WalterWarimont, agente del Abwehr y

primer agregado militar alemnen la Espaa rebelde.

Fig. 2. El almirante Wilhelm F.Canaris, jefe del Abwehr (serviciode inteligencia del ejrcito ale-mn). Haba llevado a cabo labo-res de espionaje en Espaa duran-te la Primera Guerra Mundial, yen octubre de 1936 estuvo de

incgnito en varias ciudades espa-ola, entre ellas en Cceres.

3 L. Molina Franco y J. M. Manrique Garca,Los hombres de von Thoma. El Ejrcito alemn en laGuerra de Espaa (1936-39), Valladolid, Quirn, 2003, p. 12.


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Fig. 3. El coronel Mario Roatta,jefe de los servicios secretos delejrcito italiano y primer co-mandante del Cuerpo de TropasVoluntarias en Espaa.

Fig. 4. Johannes Bernhardt,miembro del partido nazi y delas SS, afincado en Tetun (Ma-rruecos espaol). Tras el golpemilitar de julio del 36, estuvo alfrente de la HISMA, una socie-dad empresarial a travs de lacual el Reich canalizaba suayuda a los rebeldes espaolessin levantar sospechas.

1.WILHELM RITTER VON THOMA, EL JEFE DE LOS BLINDADOS

ALEMANES

El 23 de septiembre de 1936, Wilhelm JosefRitter von Thoma, teniente co-ronel jefe del 2 Batalln del Panzer-Regiment IV, con base en Schweinfurt(Baviera), fue pasaportado para Espaa. Su misin, definida por el mando del

Heer,4 era hacerse cargo de la direccin del grupo acorazado alemn que, unasemana ms tarde, se embarcara con destino a la Pennsula.5

4Ejrcito de Tierra alemn.5L. Molina y J. M. Manrique, op. cit., p. 13.


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Wilhelm von Thoma (1891-1949) era un oficial proveniente del arma deCaballera, que se haba destacado por ser uno de los pioneros, junto con elclebre general Heinz Guderain, en el desarrollo y formacin de las fuerzas

blindadas alemanas. Estaba convencido de que los carros de combate habran dedesempear un papel decisivo en el nuevo tipo de guerra moderna que se aveci-naba. Segn la idea de von Thoma y Guderain, los tanques tenan que ser consi-derados como un arma independiente y no estar supeditados a la Infantera. Portanto, no era partidario de la tctica que se haba empleado en los ltimos mesesde la Primera Guerra Mundial y que todava era tenida muy en cuenta por mu-chos ejrcitos europeos.

No existe un acuerdo unnime acerca de la fecha en que von Thoma llegrealmente a Espaa. Segn Ral Arias, siguiendo la tesis del historiador britni-

co Basil H. Liddell Hart, el coronel alemn ya se encontraba en territorio de losrebeldes espaoles en el mes de septiembre.6 De hecho, Julin Chaves va msall al asegurar que von Thoma (al que le otorga el ttulo de barn) se reunicon Franco a finales de agosto en Cceres.7 Sin embargo, en sus testimoniosepistolares, Walter Warlimont, no sin cierta indignacin, desmiente estos su-

puestos y dice: (...) Eso era imposible! No habra tanques alemanes en Espaahasta octubre cuando von Thoma lleg con las compaas que haba pedido deBerln.8 As pues, no sabemos con seguridad si von Thoma se encontraba ya enEspaa con anterioridad al 23 de septiembre o lleg al comps del resto de la

expedicin que habra de dirigir; el caso es que desde esta fecha, hasta el 1 deagosto de 1939, pas a la situacin de oficial en destinos especiales, es decir,que a efectos legales dejaba de pertenecer a Wehrmacht, dado el alto contenidosecreto de la misin que se le haba encomendado.9

6 R. Arias Ramos, La Legin Cndor en la Guerra Civil. El apoyo militar a Franco, Madrid, La

Esfera de los Libros, 2003, p. 95;7 J. Chaves Palacios, La guerra civil en Extremadura: operaciones militares (1936-1939), Mrida,Editora Regional de Extremadura, 1997, p. 224. Ramn Garriga afirma que von Thoma se traslada Lisboa pasando por Marsella y aguard la conquista de Mrida por Yage para establecer contactocon Franco y hablar de los tanques. Una vez en Cceres, segn este autor, lleg a entrevistarse conWarlimont, despus de que ste hiciera lo mismo con Franco (R. Garriga Alemany, La LeginCndor, Madrid, G. del Toro, 1975, pp. 54-55).8

R. L. Proctor, Hitlers Luftwaffe in the Spanish Civil War, Westport (Connecticut, EEUU),Grennwood Press, 1983, p. 42.9L. Molina y J. M. Manrique, op. cit., p. 13; R. Garriga, op. cit., p. 54.


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Fig. 5. Carnet militar espaol expedido a nombre del coronelGuillermo v. Thoma, perteneciente a la seccin

de carros de combate.

2.LOS ALEMANES LLEGAN A CCERES: CONSTITUCIN DE LASBASE DE CARROS BLINDADOS EN LA FINCA DE LASARGUIJUELAS

Tres das antes, el 20 de septiembre de 1936, se haba reunido en la base deNeuruppin (Brandenburgo) a todos los oficiales, suboficiales y tropa de los dos

batallones que formaban el Panzer-Regiment VI. All mismo se solicitaron vo-luntarios para desempear una misin de cierta relevancia y alto secreto, sinindicarse, en ningn momento, que tal misin se desarrollara en un pas enguerra como lo era Espaa. Lo que los jefes si advirtieron a sus subordinados esque no se tratara de meros ejercicios o maniobras, sino que habra fuego real yque caba la posibilidad de caer prisioneros, ser heridos o incluso muertos en elcampo de batalla. La misma situacin se dio aquella maana en el cuartel delRegimiento IV en Schweinfurt, del que era comandante von Thoma.10 Los vo-

10 L. Molina y J. M. Manrique, op. cit., no mencionan en ningn momento que parte del contingen-te de esta primera expedicin partiese de Schweinfurt. Como se ver, los testimonios aportados por


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luntarios seran dados de baja en sus respectivas unidades mientras se encontra-ban desempeando el servicio en tierras extranjeras, pues era preciso no com-prometer la presencia en la guerra espaola de militares alemanes, apoyando o

combatiendo a favor del bando de los rebeldes.11

Con el personal seleccionado se organizaron, en principio, una unidad deplana mayor, dos compaas de carros de combate, una de transporte y otra detaller. Se dispusieron 41 tanques del modelo que en ese momento era reglamen-tario de la unidad: el Panzerkampfwagen I Ausf. A,12 adems de diferentes tiposde vehculos, camiones y motocicletas, as como el armamento necesario paracumplir con la misin encomendada.

Un total de 267 hombres fueron concentrados en el campamento de Dbe-ritz, en las cercanas de Berln,13 donde recibieron una paga extraordinaria de

200 marcos para sufragar sus gastos ms inminentes, as como ropas civiles ypasaportes falsos. Los voluntarios se haran pasar por un grupo de turistas ale-manes en espera de embarcar con incierto destino, para pasar sus vacaciones deverano al clido sol de un pas del que, por el momento, nada saban. De aqufueron transportados por carretera a Stettin, donde, el 30 de septiembre, embar-caron en los buques Passages y Girgenti rumbo a Espaa14.

unos y otros autores, suelen ser un tanto contradictorios, sobre todo en lo que se refiere al nmero de hombres que componan la expedicin y al material blico que les acompaaba.11 La menor graduacin que se eligi para seleccionar a los voluntarios fue la de Gefreiter, equiva-lente al rango espaol de cabo. Una vez en Espaa, todos ellos fueron asimilados a sargentos.12

El modelo A fue el primero de los fabricados en Alemania de este carro de combate. Estabaarmado con dos ametralladorasDreyse MG-13 de 7,92 mm y dotado de un motor de gasolina KruppM-305 de 57 CV a 3.000 r.p.m., que le proporcionaba al tanque una autonoma de 145 km y unavelocidad mxima de 37 km/h. El blindaje alcanzaba, en su parte ms gruesa, unos 13 mm; y su tripulacin era de dos hombres: conductor y jefe de carro-tirador. Para saber ms sobre este tipo de tanques, v. J. Mazarrasa Coll, Blindados en Espaa, Valladolid, Quirn, 1991, vol. 1, p. 68; y L.Molina y J. M. Manrique,Las armas de la Guerra Civil Espaola, Madrid, La Esfera de los Libros,2006, pp. 308-311.13

El nmero se aleja mucho de los 600 de los que habla J. Chaves, op. cit., p. 224.14 R. Arias, op. cit., p. 95, sostiene que el contingente pas de Stettin a Dantzig, en donde se embar- c en los buques citados. Esta afirmacin nos resulta un tanto inverosmil, ya que, como es sabido,el puerto de Dantzig, tras los acuerdos de Versalles, haba pasado a disponer del status de ciudadlibre dentro de los territorios que Polonia se anexionara de Alemania despus de la Primera GuerraMundial. Hubiera podido ser posible que los soldados que se hacan pasar por turistas alemanes seembarcaran en Dantizg, como parte de la estrategia de distraccin que pretendan desarrollar, pero

lo que no resulta creble es que todo el material blico y los vehculos atravesasen territorio polaco sin despertar las sospechas de las autoridades de este pas, lo que habra dado lugar, sin duda, a unincidente diplomtico de graves consecuencias.


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En las bodegas de los mismos barcos, camuflado en enormes cajas de ma-dera, se carg el siguiente material:

- 41 carros de combate Pankerkampfwagen 1 Ausf. A.- 20 caones anticarro Pak 35/36 de 37 mm.- 8 caones de 20 mm.- 10 camiones todoterreno (Kbelwagen)BssingNAG-80, para remol-

car plataformas portacarros.- 45 camiones de carga (entre ellos 14 portacarros Vomag DL-48).- 19 plataformas portacarros con ejes bajos Sd. Ah. 115.- 18 motocicletas BMW R-12.- 11 automviles ligeros.- 6 camiones taller.- Municiones para los tanques, todo tipo de armas ligeras con su corres-

pondiente municin, as como diversos accesorios y piezas de repuestopara todos los vehculos citados15.

-

El 7 de octubre los buques alcanzaron aguas jurisdiccionales espaolas y, apartir de ese momento, fueron escoltados por los acorazados de bolsilloAdmiral

Scheer yDeutschland, as como por el torpedero Seeadler, hasta llegar al puertode Sevilla, donde desembarc todo el personal y el material transportado. Entrelos das 8 y 10, despus de varias expediciones por ferrocarril, los miembros dela unidad de carros fueron llegando a Cceres. El grupo a las rdenes de vonThoma se instal en una finca situada a unos 15 kms. de la ciudad, en la carrete-ra que va hacia Mrida, y en la que se erigen dos castillos conocidos por losnombres, respectivamente, de las Arguijuelas de Arriba y de Abajo.16 stos eran

propiedad del vizconde de Roda, quien tras el golpe militar, los haba cedido alas autoridades nacionalistas para que los emplearan de la manera que mejor les

conviniera mientras durase la guerra.

15 Todos estos datos son proporcionados por L. Molina y J. M. Manrique, Los hombres de vonThoma, pp. 15-16, y compartidos por Manuel Gonzlez lvarez, Aspectos militares de la GuerraCivil: la actuacin en Espaa de la Legin Cndor, Len, Univ. de Len, 2005, p. 80, aunque stecita los ocho caones de 20 mm. de los que Molina y Manrique no hablan en su obra. ManuelGonzlez, por su parte, tambin revela la fuente de la que obtiene esta informacin: procede de losfondos de la Luftwaffe que se conservan en el Archivo Militar de Friburgo (Bundesar-

chiv/Militrarchiv) y se corresponde con la signatura BA/MA, RL 2/v. 3187, parte IV, p. 8.16P. Mogoll Cano-Corts, Castillos de Cceres, Len, Lancia, 1992, pp. 14-17.


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Fig. 6. Los hombres de la segunda compaa del Gruppe Thoma descansan en lacubierta del Girgenti durante su travesa a Espaa.

Fig. 7. Los primeros Panzer I A llegan por va frrea a la estacin de Aldea del Cano(Cceres), el 9 de octubre de 1936.


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Figs. 9 y 10. El general Franco, acompaado por el teniente coronel Antonio Barroso,jefe de su Cuartel General, pasa revista junto a Wilhelm von Thoma a las tropas alema-

nas acantonadas en Cceres (18 de octubre de 1936).


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La base de las Arguijuelas cumpli durante los ltimos meses de 1936 unadoble funcin: sirvi de depsito de armas pesadas y como escuela de instruc-cin para soldados de infantera del ejrcito nacionalista en el manejo de esas

armas, as como de la conduccin de los carros de combate. Junto a los alema-nes siempre se encontraba un oficial del ejrcito espaol que habra de desem-pear la funcin de enlace. Si estos mandos, en principio, eran designados porlas autoridades nacionalistas, el comandante de la base, el coronel von Thoma,se reservaba el derecho de aceptarlos, tratando de imponer su criterio en cuantoal nombramiento de estos colaboradores. De este modo, von Thoma elev en elmismo mes de octubre de 1936 una propuesta a Franco en la que le indicabaque no consideraba idneo al oficial asignado en la base teniente Sanz-, parael cargo en anti-carros, deseando que se quedase como oficial intrprete; y pro-

poniendo al comandante Pujales, al frente de la legin (sic) encargada del lanza-llamas.17

Durante el tiempo que los castillos de las Arguijuelas fueron utilizados tan-to como centro de formacin como almacn, su emplazamiento se mantuvo enel mayor de los secretos, ya que no se permita el acceso a ninguna persona quecontase con el correspondiente permiso. Esto dio pie a algn incidente entre las

propias autoridades de la ciudad y los mandos del Ejrcito. As, en la segundaquincena de octubre, el gobernador civil de Cceres concedi a tres periodistas

portugueses la autorizacin para visitar la finca de las Arguijuelas, pero, por

orden expresa de Franco, se les prohibi la entrada, al mismo tiempo que instal gobernador a que se abstuviera de proporcionar a persona alguna facilidadespara visitar lugares en que existan medios de combate, pues sobre stos debemantenerse siempre el mayor secreto posible.18

A lo largo del mes de noviembre se incorporaron a la base cacerea 37hombres ms, 28 caones antitanque Pak 35/36 y 21 nuevos carros de combate,en este caso del modelo Panzerkampfwagen Ausf. B,19 que haban llegado aSevilla el 25 de ese mismo mes a bordo del buque Urania, procedentes delPanzer Regiment IV de Schweinfurt.20 Con estos nuevos tanques se compuso la

3 Compaa de Carros, que qued al mando del Hauptmann (capitn) KarlErnst Bothe. Al mismo tiempo, la plana mayor del Panzer Gruppepas a insta-

17AHPCC, GC, Documentos varios, octubre de 1936, en J. Chaves, op. cit., p. 224.18Ibd., p. 226.19

El Panzer I Ausf. B fue una variante del modelo A realizada a la vista de la poca potencia quegeneraba el motor Krupp M-305. Se le mont un motorMaybachNL-38 Tr de gasolina, que dotabaal blindado de una potencia de 100 CV frente a los 57 del modeloAusf. A. Para acoplarle este motorhubo que prolongar la barcaza y modificar la disposicin de ciertos elementos del grupo motopro-pulsor, as como incrementar el nmero de ruedas de marcha, que pasaron a ser cinco en lugar de

cuatro, y de rodillos de vuelta, que pasaron de tres a cuatro (v. n. 12).20 AGMA, CGG, Operaciones, arm. 6, leg. 314, carp. 43; DN, Legin Cndor, arm. 36, leg. 1, carp.1, doc. 1.


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larse en la poblacin madrilea de Cubas de la Sagra, ms cercana al frente,donde tambin se organiz una escuela de instruccin y donde se estableci eltaller.

Figs. 11 y 12. Tiendas cnicas que servan de alojamiento a los voluntarios alemanesconcentrados en las Arguijuelas.


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Fig. 13. Panzerkampfwagen I Ausf. A Fig. 14. Can anticarro Pak 35/36 de 37 mm.

El 31 de diciembre de 1936, el Gruppe Thoma estaba organizado segn in-dica el siguiente cuadro:21

Jefatura del Grupo Coronel Wilhelm von Thoma

Unidad de PlanaMayor

35 componentes

Jefe de Unidad: Teniente coronel Eberhard von Ostman (8.10.36-29.8.37)

Mdico: Comandante Johannes Engelhardt (8.10.36-1.8.37)

Intendente: Comandante Fritz Muehlenkamp (8.10.36-15.5.37)Componentes: 4 alfreces, 18 brigadas, 9 sargentos y 1 intrprete

1 Compaa deCarros

65 componentes

Jefe de Compaa: Comandante Joachim Ziegler (8.10.36-18.3.38)2 Jefe de Compaa: Capitn Ferdinand von Planitz (8.10.36-28.9.37)Jefe de Seccin: Teniente Erwin Strauchmann (8.10.36-20.7.37)Componentes: 7 alfreces, 43 brigadas, 9 sargentos, 1 sanitario y 2

intrpretes

2 Compaa de

Carros66 componentes

Jefe de Compaa: Comandante Heinz Wolf (8.10.36-25.7.37)

21Los grados que se muestran en la tabla son los que ostentaban los alemanes en Espaa, que, como

hemos tenido ocasin de comentar, era el inmediatamente superior al alcanzado en su pas de origen. Al lado de los nombres que se citan, aparecen las fechas de llegada a Espaa y la de su partida o, en su caso, de su muerte.


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2 Jefe de Compaa: Capitn Gerhard Willing (8.10.36-14.9.37)Jefe de Seccin: Teniente Hannibald von Moerner (8.10.36- 24.7.37)Componentes: 7 alfreces, 44 brigadas, 9 sargentos, 1 sanitario y 2

intrpretes

3 Compaa de Ca-rros

64 componentes (organizada el 6.12.1936)

Jefe de Compaa: Comandante Karl-Ernst Bothe (1.11.36-16.12.37)2 Jefe de Compaa: Teniente Karl Pfannkuche (1.11.36-6.12.37)Jefe de Seccin: Teniente Ottfried Sanfft von Pilsa (1.10.36-15.10.37)

Componentes: 6 alfreces, 43 brigadas, 9 sargentos, 1 sanitario y 2intrpretes

Compaa de Trans-

porte36 componentes

Jefe de la Compaa: Capitn Hans Schruefer (8.10.36-31.5.39)Componentes: 6 alfreces, 18 brigadas, 9 sargentos, 2 mecnicos

Compaa de Taller 23 componentesJefe de Compaa: Capitn Albert Schneider (1.11.36-31.5.39)Jefe del Taller: Teniente Paul Jaskula (8.10.36- 30.4.37)Componentes: 1 alfrez, 8 brigadas, 10 mecnicos y 2 intrpretes

Unidad de Instruccin Antitanque 9 componentesJefe de Unidad: Comandante Peter Jansa (1.11.36-18.3.38)Componentes: 3 alfreces, 4 brigadas y 1 intrprete

Armera 6 componentesComponentes: 2 alfreces, 3 brigadas y 1 armero

Intrpretes 2 intrpretes, dependientes de la Legin Cndor

Total: 307 componentes llegados entre septiembre y diciembre de 1936


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Durante el tiempo que permanecieron en Cceres, la relacin de los solda-dos alemanes con la poblacin civil fue muy limitada. No tenan necesidad desalir de la finca que les serva de cuartel y trasladarse a la ciudad, ni tan siquiera

los das de permiso, ya que contaban con sus propios servicios de intendencia yde una cantina instalada en uno de los dos castillos. El nivel de autoabasteci-miento llegaba hasta el punto de que la cerveza que consuman les era tradadirectamente desde Alemania.

Fig. 15. La segunda compaa del Gruppe Thoma al completo. En el centro,su jefe elHauptman Heinz Wolf, y el segundo jefe, el Oberleutnant Gerhard Willing.


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Fig. 16. Otto Maeder, msico de la segunda compaa del Panzergruppe, hace pasarun rato alegre a sus compaeros tocando el acorden sobre un burro. Octubre de 1936.

Fig. 17. Los voluntarios del Gruppe Drohne se arremolinan alrededor de un aparatode radio para escuchar las noticias que llegan desde Alemania.


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Fig. 18. Los soldados de la segunda compaa abren las cartas que sus familias les hanenviado en tan emotivas fiestas (24 de diciembre de 1936).

Apenas una semana despus de la llegada de los voluntarios alemanes, ladesgracia quiso que su presencia se hiciera notar. Concretamente el 9 de octu-bre, un brutal accidente conmocion tanto a los miembros de la base como a losvecinos de Cceres. Un sidecar conducido por dos alemanes se estrell contraun muro, cuando circulaba a gran velocidad por la avenida que circunda el co-nocido Paseo de Cnovas. A consecuencia del fatal choque muri el brigadaPeter Kempe, de 24 aos, mientras que su compaero Paul-Wilhelm Schneider,tambin brigada y de su misma edad, result gravemente herido, por lo que fuetrasladado inmediatamente a Alemania para que se recupera se de sus lesiones,


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aunque finalmente falleci a consecuencia de ellas el 26 de enero de 1937.22 Enel lugar de la colisin se coloc un monolito con una placa, en la que se recor-daba el nombre de los dos fallecidos y apareca el emblema de la unidad de

tanques alemana: una calavera sobre un tanque, orlada de hojas de roble. Aosdespus, tambin se decidi por este motivo darle el nombre de Avenida deAlemania al lugar donde haba tenido lugar el desgraciado accidente, y que noera sino la prolongacin de la carretera de Mrida, por donde los dos instructo-res alemanes seguramente venan o se dirigan hacia los castillos de las Argui-

juelas23.

Fig. 19. Varios sidecares, seguidos de otros vehculos, circulan por la parte dearriba del Paseo de Calvo Sotelo. Al fondo, se puede distinguir la

desaparecida Casa de la Chicuela.

22 L. Molina y J. M. Manrique,Los hombres de von Thoma, p. 81 sealan como fecha de la muertede Schneider el 5 de enero. Por su parte, R. Hidalgo Salazar, La ayuda alemana a Espaa 1936-39,Madrid, San Martn, 1975, p. 221, as como R. Arias, op. cit., p. 134, creen que el accidente ocurriel 11 de octubre. Aunque en el Registro Civil de Cceres no se encuentra el acta de defuncin dePeter Kempe, la fecha del da 9 inscrita en el monumento que se coloc en el lugar del siniestro no deja lugar a duda alguna.23 Por paralelismo, otra avenida cercana, que tambin parte de la llamada plaza de la Cruz de los Cados (en alusin al monumento all erigido desde 1938, en memoria de las vctimas del bando

franquista), recibi el nombre de Avenida de Portugal, pas que, como hemos comentado, tambin prest una inestimable ayuda a los militares rebeldes espaoles. Para completar la triloga, el lugarconocido como Pea Redonda fue tambin rebautizado como la Plaza de Italia.


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Fig. 20. Placa que en su momento se coloc al principio de la Avda. de Alemania, en recuerdo de los dos voluntarios alemanes que fallecieron

en el mismo lugar tras un accidente de circulacin.

El contingente terrestre de la Legin Cndor recibi el nombre clave deImker (apicultor) y, aunque organizado en un principio por Walter Warli-mont, en su calidad de enlace delHeer con el Cuartel General del Generalsimo,cuando ste regres a Alemania, en noviembre de 1936, pas a depender delOberstleutnant Hans Freiherr von Funck, que actu durante toda la guerracomo agregado militar alemn en la zona nacional. El Gruppe Imker, que con-taba con una plana mayor, inclua a la unidad acorazada al mando de von Tho-ma. sta recibi el nombre de Panzer Gruppe Drohne (zumbido), aunquecotidianamente se le denominara Gruppe Thoma24.

24L. Molina y J. M. Manrique,Los hombres de von Thoma, pp. 5 y 208-209.


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Fig. 21. El Oberstleutnant von Funck, con un cigarrillo en la boca, responsablede las tropas terrestres alemanas en Espaa, denominadas con el nombreclaves de Gruppe Imker, acompaado de su intrprete Vollrath.

Aunque en un principio fue pensada como una unidad de accin rpida, quetendra que haber entrado inmediatamente en combate, las autoridades naciona-listas consideraron que sera mejor emplear a los hombres y el material recibidoen la instruccin de personal espaol. Por tanto, el Gruppe Thoma, a diferencia

de las unidades areas enviadas por la Luftwaffe, espina dorsal de la LeginCndor, no puede ser considerado como una unidad de combate, aunque encasos puntuales s encontramos que se interviniera en apoyo de las tropas rebel-des, como a lo largo del mes de noviembre cuando el grupo tom parte en algu-na accin en el frente de Madrid25.

25 Hugh Thomas,La guerra civil espaola, Barcelona, Mondadori, 2003, vol. 2, p. 521; R. Garriga,

op. cit., p. 109.


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4.LA INSTRUCCIN DE SOLDADOS ESPAOLES EN EL MANEJODE ARTILLERA Y CARROS BLINDADOS

La labor de instruccin de los alemanes muy pronto dio sus frutos. Comoya hemos apuntado, uno de los objetivos del contingente germano era la ins-truccin y la capacitacin de las tropas nacionales en el manejo y la utilizacinen el campo de batalla de los carros alemanes Panzerkampfwagen I, as comode los vehculos especiales de la unidad de transporte y el diverso material queaportaron los, tal como caones antitanque, lanzallamas...26.

Fig. 22. El comandante Jos Pujales Carrasco, jefe del batalln de carrosespaol, el intrprete Heinrich Winkler y elHauptmann Heinz Wolf,jefe de la segunda compaa de instruccin.

El 1 de octubre se cre en Cceres un Batalln de Carros de Combate conpersonal procedente del Regimiento de Infantera Argel n. 27. Una semanadespus pasaban destinados a los castillos de las Arguijuelas, donde el da 12 seorganiz la unidad al mando del comandante de infantera retirado Jos Pujales

26L. Molina y J. M. Manrique,Los hombres de von Thoma, p. 29.


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Carrasco, al que ya hemos hecho referencia, y que, sin duda, era la persona msadecuada para el puesto, pues durante la Repblica haba pertenecido a la Com-

paa de Carros Ligeros de Asalto, afecta a la Escuela Central de Tiro de Infan-

tera, y gozaba, pues, de una gran experiencia al respecto de los medios blinda-dos.27

Los espaoles organizaron la unidad a imagen y semejanza de la alemana,que acaba de llegar a Cceres: una plana mayor, dos compaas de carros, unaunidad de transportes, un taller y una compaa antitanque. Para mandar la

primera Compaa de carros fue destinado el capitn Jos Garca Garca, proce-dente de la Legin, auxiliado por el sargento Virgilio Arens Clemens, y para lasegunda, el capitn Juan Garca Garca, ayudado tambin por el brigada Anto-nio Gonzlez y el sargento Eloy Martn Serrano.28

Pero los instructores del Gruppe Drohne no solo se dedicaron a ensear alos espaoles el manejo de los panzer (conduccin, tcnica, tctica...), sino que

pusieron todo su empeo en ilustrarlos tambin en otras disciplinas, quizs notan vistosas pero fundamentales e igualmente importantes en el marco de unaguerra moderna y multidisciplinar. La instruccin impartida por el Gruppeenglobaba aspectos tan diferentes como el empleo de lanzallamas, de caonesantitanque, la conduccin de los pesados camiones de la compaa de trans-

portes...

As, con los caones anticarro de 37 mm. recibidos en octubre se form una

unidad de instruccin al mando del Hauptmann Peter Jansa. Esta unidad lacomponan adems los alfreces Gerhard Nethe, Karl Rieschick y Joahn Ver-meulen; los brigadas Hans Novak, Martin Wolf, Hugo Ulrich y Joahnn Seifert;as como el intrprete Josef Wieseler.

A mediados de octubre comenz la formacin de las primeras dotacionesespaolas, cuando, por orden del Generalsimo al general jefe del Ejrcito del

Norte, era enviado a Cceres el alfrez de artillera Pedro Sanz Ruano parahacerse cargo de las unidades que resultasen del perodo de instruccin. Tam-

bin fueron asignados a la base de las Arguijuleas un brigada, cinco sargentos,

27 Como podemos comprobar los deseos de von Thoma de destinar al comandante Pujales a la unidad de instruccin de caones antitanque fueron desestimados por las autoridades nacionalistas,porque al final desempe su cometido en el batalln de tanques (v. n. 17).28

El da 14 se incorpor a la Primera Compaa el brigada Ricardo Amors Navarro, mientras que ala Segunda lo hizo el tambin brigada Jos Gmez Garca. Por su parte, el 16, se incorpor a laplana mayor del Batalln el teniente Juan Barrechengure Berganza, que fue destinado como ayudan-te; a la Primera Compaa, los tenientes Eladio Valdobn Lpez, Maximiliano Galiana Castilla yJos Losada Vera, los brigadas Secundino Calvo Castro, Santos Snchez Rolln y Francisco Porto;y a la Segunda Compaa, los tenientes Antonio Lpez de Haro, Jos Cerdn Salas y Ramn Fer-

nndez Garca, los brigadas Joaqun Ainoza Soro, Antonio Tegel Abad y Alberto Mateos Molinero. Todos pertenecan al Regimiento de Carros n. 2 situado en Zaragoza (Herldica e historiales delEjrcito, Madrid, Servicio Histrico Militar, 1984, vol. VI, p. 26).


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once cabos, sesenta tiradores, doce conductores, un carpintero, un mecnico, unalbail, dos escribientes y ocho soldados, que fueron los componentes de la

primera unidad contracarro organizada por el arma de artillera en la zona sub-

levada.

Figs. 23 y 24. Para la enseanza de los conductores espaoles, los alemanes trajeron unPanzerkampfwagen I Ausf. A ohne aufbau, o lo que es lo mismo, sin superestructu-

ra. Como se puede apreciar en las imgenes, adems del instructor y el alumno conduc-tor, podan ir varios alumnos ms, sentados en los laterales del vehculo.


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Un mes ms tarde, el 16 de noviembre, se convoc un nuevo periodo deinstruccin. Como hemos visto, estaba a punto de recibirse de Alemania nuevomaterial para la base cacerea, entre el que se inclua tanto blindados como

piezas antitanque, y con l se pretenda organizar una tercera compaa de Pan-zer I (para agregar a las dos que ya combatan junto a las columnas que avanza-ban sobre Madrid) y tres nuevas compaas antitanque. Aunque los carros decombate se recibieron en Cceres, lo cierto es que esta tercera compaa seform ya en la localidad madrilea de Cubas, donde el Gruppe haba instaladootra base ms cerca del frente.

A finales de noviembre la base de las Arguijuelas contaba con 32 caonesPak de 37 mm., as como diez camiones ligeros Krupp Protze, con los que seorganizaron tres compaas antitanque, de diez piezas cada una, dos de ellas

cargadas sobre camiones, y una motorizada con los Protze. Durante el pero-do de instruccin, que dur quince das, se form a un total de siete oficiales(entre ellos un capitn), 30 suboficiales, 120 artilleros y 10 chferes. La primerade las compaas organizadas e instruidas fue la que mandaba el capitn deInfantera Jos del Toro, que sera agregada a las columnas que avanzaban so-

bre Madrid, en sustitucin de las primeras piezas enviadas con anterioridad, yaque precisaban urgente reparacin.

Tan slo un mes despus, von Thoma propuso al Cuartel General delGeneralsmo la creacin de una Escuela de Anticarros, dependiente del propio

Cuartel General y englobada en un proyecto ms ambicioso denominado Cen-tro de Instruccin y Reserva de Carros y Anticarros. Franco dio el visto buenoal proyecto, y en el mes de junio de 1937 dieron comienzo en Cceres los pri-meros cursos de instruccin de caones antitanques. A finales de mayo se hab-an recibido en el puerto de Vigo cien nuevas piezas de las de 37 mm. Inmedia-tamente se orden el transporte de dicho material con destino a Cceres, paraentregrselo a las cinco compaas que all se estaban formando.29 Con ellas,

junto las que ya operaban en el frente de Madrid, se constituy la Agrupacinde Artillera Antitanques del Ejrcito Nacional, que qued al mando del citado

capitn Jos del Toro.30

29AGMA, CGG, Operaciones, arm. 11, leg. 498, carp. 89, doc. 29.

30 Con las cinco compaas que estaban recibiendo instruccin en Cceres se compuso un PrimerGrupo, mientras que otras cinco que se encontraban en Cubas de la Sagra formaron un Segundo Grupo. Con respecto al grupo de las Arguijuelas, contaba con una Plana Mayor al mando del capi-tn Fernando Castellanos, ayudado por el teniente Juan Huertas Rodrguez y dos sargentos. Elmismo Castellanos era el jefe de la Primera Compaa, donde tena por auxiliares a los alfreces Raimundo Vellido, Antonio Archanco y Miguel Fernndez Muoz. En la Segunda Compaaestaban el capitn Manuel Daz Cuado y los alfreces Fernando Ramrez y Ramn Font Cuberta;

en la Tercera, el capitn Jos Peral Snchez y los alfreces Antonio Fernndez Saenz; en la Cuarta,el teniente Lorenzo Romero Compan y los alfreces Rafael Candau Candau y Manuel Surez; yen la Quinta, el teniente Juan Huertas y los alfreces Fernando Martn Bretn, Jos Luis Manzana-


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Figs. 25 y 26. Un instructor del grupo Drohne ensea a un grupo de soldados espaolesel manejo del armamento alemn. En este caso se trata de la ametralladoraDreyse

MG-13, que armaba a los carros Panzerkampfwagen I.

res y Antonio Perea. Cada compaa se completaba con diez sargentos, diez cabos y treinta artille-ros (AGMA, DN, Legin Cndor, arm. 36, leg. 1, carp. 6. doc. 1).


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Tres meses ms tarde, el 20 de agosto de 1937, otras cincuenta piezas anti-tanque desembarcaron en el puerto de Vigo. Venan junto a dieciocho carros decombate, treinta mil fusiles, veinte millones de cartuchos de 7,92 y diez mil

proyectiles para los propios antitanque.31 Seguramente este material pasara porCceres, para ser a continuacin redistribuido entre las unidades que operabanen el frente y las distintas escuelas de instruccin. Aunque los primeros cursosde caones antitanques se desarrollaron en Cceres, posteriormente ya seranimpartidos en Cubas de la Sagra, y ms tarde fueron trasladados a los pueblosde Carranque y Cedillo del Condado (Toledo).

El comandante Peter Jansa, instructor jefe de los caones antitanques, fuetambin el encargado, desde enero de 1937, de dirigir varios cursos sobre elmanejo de lanzallamas. sta haba sido un arma muy empleada durante la Pri-

mera Guerra Mundial y, como su propio nombre indica, no era ms que unaparato que poda evacuar a cierta distancia un lquido inflamable a presin,producindose la ignicin al salir dicho lquido del depsito a travs de un tubolo suficientemente largo como para evitar quemaduras en el individuo que lomanejara.

A travs del Gruppe Thoma se suministraron un total de nueve lanzallamas,cuatro de un modelo ligero y transportable por una persona denominado Flam-menwerfer 35, y cinco de otro modelo ms pesado, denominado tambin gran-de o de trinchera. El 17 de octubre de 1936, el Cuartel General del General-

simo enviaba un telegrama al general Varela para que con mxima urgenciadisponga salgan para Cceres un oficial y treinta soldados escogidos entre Ban-deras de esas columnas (...) para ser enviados al Castillo Arguijuela donde seinstruir en el manejo lanzallamas. Horario instruccin ser fijado en dichocastillo por seor Thoma. Terminada instruccin se incorporarn a sus unidades

para emplear en ellas dichos artefactos (...).

Al final la instruccin no se imparti en el castillo de la Arguijuela, sino enOropesa (Toledo), y nueve das ms tarde, los hombres del Tercio se incorpora-

ban al frente de Talavera dotados de estos lanzallamas. Sin embargo, pocos das

ms tarde, el 1 de noviembre, se le volva a ordenar a Varela que designaraquince hombres para instruirse en el manejo de los lanzallamas que quedan enlas Arguijuelas: (...) instruccin preferible en sitio donde est seor Thomas(sic).

Llegados a este punto, es conveniente sealar tambin que no todos los in-tegrantes del Gruppe Drohne llegaron directamente desde Alemania, en la suce-sivas expediciones que hemos ido relatando. A finales de septiembre de 1936fueron asignados a la unidad varios sbditos alemanes que se encontraban enEspaa con anterioridad al comienzo de la guerra civil, pues se trataba en todos

31AGMA, CGG, Operaciones, arm. 12, leg. 593, carp. 17, doc. 1.


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los casos de miembros de la Legin. Fueron los siguientes: el alfrez Otto PreilWeitia, el sargento Virgilio Arens (al que ya hemos hecho referencia) y loscaballeros legionarios Alois Loira, Ferdinand Kaisser, Francisco Hartzkhon,

Juan Dez Kozki, Luis Rtract y Vctor Kissenberger.32

Su dominio del espaolfue probablemente muy til para von Thoma, que prefiri emplearlos para ta-reas de intrpretes.

Fig. 27. El coronel von Thoma junto a su intrprete, Adolf W. Klauss. ste habacombatido en el frente de Guadarrama desde agosto de 1936, integrado en la Falange de Valladolid, pero cuando el contingente de carros alemn lleg a Cceres fue destinado a

servir como traductor de su plana mayor.

Los hombres de von Thoma llevaron a cabo de manera diligente su labor deinstruccin de la tropa espaola, para satisfaccin de Franco y los militaresrebeldes. Sin embargo, stos, aunque agradecidos por el material recibido,siempre desconfiaron del empleo de medios blindados en la guerra, acostum-

brados como estaban a un tipo de tctica militar que tena sus principales refe-rentes en las pasadas campaas de frica. Von Thoma fue muy crtico con sussuperiores espaoles, cuando en ms de una ocasin desoyeron sus consejos

32AGMA, DN, Ejrcito del Norte, arm. 15, leg. 1, carp. 70.


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acerca de como las unidades de tanques podan ser empleadas con independen-cia de la infantera y conseguir de este modo grandes avances en el campo de

batalla.33 El tiempo y la Segunda Guerra Mundial le daran la razn.

An a pesar de todo, el material recibido y la instruccin impartida por losalemanes de las Arguijuelas fue decisivo para el desarrollo del arma acorazadade los militares sublevados, ya que, al iniciarse la guerra, apenas haba en Espa-a sesenta vehculos blindados, todos modelos muy anticuados, y la mayora delos cuales quedaron en poder de la Repblica al producirse el golpe de Estado.34

Aunque von Thoma consideraba a los espaoles rpidos para aprender y rpi-dos para olvidar,35 sin embargo, la aportacin germana en este aspecto fuedecisiva para el desarrollo de la guerra y puede decirse, con total seguridad, queest en el origen del actual arma blindada espaola.36 Von Thoma y sus hom-

bres vinieron en parte para adiestrar a los espaoles, pero tambin, por otraparte, para adquirir ellos la experiencia que slo se consigue en el combate.Quizs durante la guerra civil, el papel que desempearon los medios blindadosno lleg a ser tan decisivo, como, por ejemplo, el empleo de la aviacin porambos contendientes, pero el consiguiente conflicto mundial demostr hastaqu punto era importante la leccin aprendida en Espaa.

5.EL FINAL DE LA BASE DE LAS ARGUIJUELAS

Suponemos, dada la escasa documentacin que existe al respecto, que des-de diciembre del 36 y a lo largo de los primeros meses de 1937, se fue desalo-

jando la base de las Arguijelas. Hemos visto como, ya en el mes de noviembre,la plana mayor del grupo, el taller y la celebracin de algunos cursos de instruc-cin se fueron trasladando paulatinamente a otras bases en la que se haba esta-

blecido el Gruppe Thoma, como la de Cubas de la Sagra. El ltimo perodo deinstruccin que tuvo como emplazamiento los castillos de las Arguijuelas y delque tenemos constancia se desarroll en junio, y de l result la creacin unaagrupacin de artillera antitanque con personal espaol que parti inmediata-

mente hacia el frente. Lo ms probable es que durante el resto de la guerra, una

33 V. el memorial, cargado de crticas y disconformidades, que elev a las autoridades rebeldes el 29de abril de 1938: AGMA, CGG, Operaciones, arm. 8, leg. 388, carp. 10. Se encuentra transcrito en su totalidad en L. Molina Franco y J. M. Manrique Garca,Los hombres de von Thoma, pp. 61-62.34 L. Molina y J. M. Manrique,Las armas de la Guerra Civil, pp. 291-296.35

B. H. Liddell Hart, The other side of the hill, Londres, Cassell, 1948, p. 98.36 La boina negra del uniforme de los miembros del Gruppe Drohne sigue formando parte de laindumentaria de los conductores de carros blindados del Ejrcito Espaol. Por otra parte, la doctrinay los materiales siguieron presentes hasta bien entrados los aos cincuenta en las filas del ejrcito,

cuando, tras la firma de los acuerdos con los norteamericanos, y la llegada de material acorazado deese pas, se daba de baja a los ltimos y renqueantes Panzerkampfwagen Iprocedentes de la guerracivil.


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vez que se hubieran ido marchando todos los instructores, no habra quedado enCceres ms que un pequeo destacamento de soldados alemanes y que la fincade las Arguijuelas pasara a cumplir slo la funcin de depsito o almacn de

material.

Fig. 28. De izquierda a derecha:Leutnant Hannibald von Moerner, Oberleutnant

Gerhard Willing y Unteroffizier Joachim Freitag.

Fig. 29. El Oblt. Heinz Wolf (en el centro), comandante de la segunda compaa decarros, junto con el Oblt. Willing, a su izquierda, y otro oficial desconocido.


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Wilhelm von Thoma desempe su labor al frente del Drohne durante elresto de la guerra civil, y por los servicios prestados fue condecorado por elmando nacionalista con la Medalla Militar Individual al finalizar la contienda.

Despus regres a Alemania, donde ascendi a general y tom parte en la Se-gunda Guerra Mundial como jefe de diferentes unidades acorazadas. Sin em-bargo, para l la guerra termin antes de tiempo, pues el 4 de noviembre de1942 fue capturado por los ingleses en Tel el Mampsra, al oeste del El Alamein(Egipto), ya que por entonces formaba parte del Estado Mayor del generalRommel, el clebre Zorro del Desierto. Hasta 1946 pas por varios penales dealta seguridad de Gran Bretaa, y durante este tiempo declar que haba partici-

pado en Espaa en 192 acciones de guerra. Esta afirmacin no era ms queun farol que el general pretenda marcarse ante sus colegas britnicos, pues,

como hemos visto, su labor en nuestro pas no sobrepas las competencias quele correspondan como jefe de los instructores germanos. De regreso a Alema-nia, muri en Dachau (Baviera) el 30 de abril de 1948.37

Fig. 30. Von Thoma junto a un teniente coronel espaol. En su boina se puede distinguirel distintivo de la unidad de carros de combate: una calavera y la esvstica.

37Para saber ms sobre la biografa de von Thoma, v. http://en.wikipedia.org/wiki/Wilhelm_Ritter_von_Thoma.
http://en.wikipedia.org/wiki/http://en.wikipedia.org/wiki/


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Fig. 31. El Panzertruppenazbeichen, emblema de lostanquistas de la Legin Cndor.

Fig. 32. El brigada instructor de carros Heinrich Becker, que estuvo en Espaa entreoctubre de 1936 y agosto de 1937. Durante la Segunda Guerra Mundial recibi la Cruz

de Caballero, cuando era Oberfeldwebel (subteniente) en el 31 Regimiento dePanzers de la V Divisin.


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Fig. 33. El brigada instructor Rudolf Vogt, en una fotografa tomada durantela Segunda Guerra Mundial.

9.BIBLIOGRAFA

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10.ARCHIVOS CONSULTADOS

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Cuartel General del Generalsimo (CGG).

-Operaciones.

Documentacin Nacional (DN).

-Ejrcito del Norte.

-Legin Cndor.

Archivo Histrico Provincial de Cceres (AHPCC).

-Gobierno Civil (GC).

-Orden pblico.

-Documentos varios.

29 La Base Alemana de Carros de Combate

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