30 consejos prácticos para educar hoy

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Eva Pérez Gallardo 30 CONSEJOS PRÁCTICOS PARA EDUCAR HOY

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30 consejos prácticos para educar hoy

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Eva Pérez Gallardo

30 CONSEJOS PRÁCTICOS PARA EDUCAR HOY

El libro 30 consejos prácticos para educar hoy es una obra de Santiago Galve, un profesor que nos narra su experiencia de más de 40 años como educador. Para ello nos cuenta treinta anécdotas vividas por él mismo, y en algunos casos por otros profesores, con jóvenes estudiantes. Estas vivencias concluyen con unos principios educativos, a modo de moraleja, muy fáciles de aplicar tanto en el ámbito escolar como en el familiar.

A continuación presentaré un breve resumen de algunas anécdotas más representativas y algunos de sus correspondientes principios educativos.

En educación pocas palabras, muchos hechos y sobre todo mírales a la cara

En esta primera vivencia el autor relata la anécdota vivida por su amiga Rocío, profesora de Francés. Ésta tenía una alumna con un comportamiento un tanto desafiante, y cómo no, el grupito de amigas que le apoyaban. Dicha alumna trató de evidenciar a la novata profesora preguntándola el significado de unas cuantas palabras un tanto rebuscadas. Entonces, Rocío, mantuvo la calma y les mandó buscarlas en el diccionario para el próximo día, a ella y al resto de la clase.

En la siguiente clase, Rocío, pidió a la alumna que se cambiase de sitio, y como era de esperar, ésta se negó. Entonces decidió seguir el consejo que Santiago le había dado de no repetir su petición, no contestar a las réplicas y simplemente cruzarse de brazos y mirar constantemente el reloj hasta que la alumna decidiera obedecer.

Principios educativos:- Un buen educador no necesita repetir constantemente las cosas, pues esto suele

generar en los niños un hábito negativo (saben que luego no va a pasar nada). - La palabrería en un primer momento puede ser creíble, sobre todo con los más

pequeños, pero siempre acaban percibiendo que debajo no hay nada.- Los niños y adolescentes suelen emplear la técnica de sacar de quicio a los adultos

para conseguir lo que quieren, pero no debemos caer en la trampa, pues cuando vean que este truco no funciona, desistirán.

- En los casos más difíciles lo mejor es colocarse en un lugar predominante, mirarles a la cara y no hablar hasta que estén en absoluto silencio.

Cumple siempre lo que digas

En una charla de sexualidad, hablando de la etapa fálica, en la que el niño se descubre, una alumna narró lo que le ocurrió a su vecina. Ésta tenía dos hijos: un niño de cinco años, que se encontraba en esa fase, y una niña algo mayor. Los padres

continuamente le decían al niño que dejase de tocarse, que como no parase le iban a cortar la colita (algo que evidentemente nunca harían). Ante estas amenazas el niño mantenía su comportamiento, pero un día se quedaron en casa solos, él y su hermana, y la niña cumplió la amenaza que tantas veces había oído, corto a su hermano la colita.

Principios educativos- Para mantener la autoridad y credibilidad siempre debemos cumplir nuestra palabra.- Si tenemos bien claro que vamos a cumplir nuestra palabra, seguramente mediremos

más nuestras palabras.- Siempre se debe cumplir el castigo impuesto, aunque sea un poco desproporcionado.

Esto nos servirá para medir nuestras advertencias en las próximas ocasiones.

La educación es un proceso muy largo, en el que el educador tiene que repetir constantemente las mismas cosas. En casa, el educador se enfrenta a uno o dos educandos, pero en el aula sólo un educador se enfrenta con veinticinco o treinta.

Frecuentemente el educador se topará con uno o varios alumnos decididos a echarle un pulso y, ante estas situaciones debe mantener la calma y contar hasta 10 si es necesario, pero hay que evitar las típicas expresiones o amenazas que se utilizan para asustar y que nunca se cumplen.

Se cazan más moscas en un barril de miel, que con un barril de vinagre

Esta vivencia transcurre en un colegio interno de chicos de entre 14 y 19 años. La mayoría eran huérfanos, no solían recibir visitas y el colegio estaba aislado, por lo que sus relaciones sociales se reducían al centro escolar.

Uno de ellos se orinaba todas las noches en la cama, a pesar de recibir castigos como duchas frías en invierno, atarle el pene con una cuerda, etc., incluso dormía en un dormitorio especial, y como es de esperar, sus compañeros se mofaban de él.

Santiago un día le pidió que le dijese todas las mañanas si se había orinado o no, simplemente por saberlo, pues no pensaba premiarle ni castigarle. Desde ese día no se volvió a orinar.

Las conclusiones fueron las siguientes: simplemente se trataba de una incorrecta educación en el proceso evolutivo por desatención, celos o falta de cariño. Es una manera de llamar la atención para que te quieran o para castigar a quienes no te quieren.

Principios educativos: - No es adecuado realizar un castigo o represión delante de los compañeros, sobre

todo ante casos de este tipo.- Cuando se comete una falta o un error es mejor hablar de ello en otro momento,

pues se encuentra en una situación de violencia y no escuchará.

El primer año sancho el bravo, el segundo sancho el fuerte y el tercero sancho panza

Actualmente la disciplina entre niños y jóvenes es muy escasa. Santiago, para justificar su afirmación, nos narra lo que le sucedió en un instituto al que fue a dar una charla de sexualidad.

Nada más entrar pudo observar el bajo nivel de disciplina, pues no le prestaron atención alguna y continuaron con su “charloteo”, hasta que unos minutos después se dieron cuenta de la situación y todos se callaron. No obstante, durante la charla se comportaron adecuadamente, así Santiago se pudo permitir incluso hacerlos reír.

Principios educativos:- Algunos profesores tienen graves problemas con sus alumnos, pues van de amigos

desde el principio. Es preciso empezar muy serio, luego ya te podrás permitir el lujo de ser gracioso.

- Hay que mostrarse serios y exigentes en la medida justa.- Principio del placer: si me gusta una cosa la hago, si no me gusta no la hago.- Principio del deber: si debo hacer algo, me guste o no me guste, lo hago; si no debo

hacer algo, me guste o no me guste, no lo hago.

Cuanto más grites, más gritan

En este caso la vivencia narrada le ocurrió a una amiga de Santiago. Ésta le contó que estaba desesperada porque todos los días terminaba afónica, pues se pasaba toda la clase gritando porque sus alumnos no le hacían ningún caso. El consejo que recibió fue totalmente opuesto a su actitud: SILENCIO.

Principios educativos: - La actitud de los padres y profesores es captada por los adolescentes, por tanto

debemos mostrarnos sosegados y razonables para crear una situación educativa idónea.

- Si se grita, se pierde la razón y nuestro comportamiento violento justificará posteriormente su mal comportamiento.

- En algunos casos, con las voces se obtiene una sumisión inmediata, pero tarde o temprano surgirá la rebeldía y se convertirá en una actitud imitada.

Equivocándose se aprende

Santiago estaba de campamento con unos alumnos y uno de ellos tenía un problema personal, un problema de autoestima. El profesor no dudo en emplear una técnica para ayudarle a superar ese problema, técnica que funcionó. Meses después

utilizó esa misma estrategia con otro alumno que tenía un problema similar, pero en este caso no ocurrió lo mismo, sino que desencadenó a una situación más complicada.

Principios educativos:- La primera lección básica en un educador: cada persona es diferente.- La segunda lección básica: en psicología no existen leyes matemáticas. Una misma

causa, incluso aplicada en un mismo individuo, puede producir efectos no ya sólo diferentes, sino hasta opuestos.

- La tercera lección básica: la intuición puede ayudarnos a solucionar problemas, pero tratándose de la vida de una persona, debemos pensar más de dos veces la puesta en práctica de esa intuición.

Di siempre los porqués

Esta vivencia tuvo lugar en una charla de sexualidad en un colegio religioso. Las alumnas se mostraban a la defensiva defendiendo sus ideas, sin embargo, Santiago les dijo que, aunque no estuvieran de acuerdo con lo que les iba a contar él, demostraría el porqué de sus ideas (algo que ellas no podían hacer). Además Santiago les hizo unas preguntas, a las que los alumnos contestaron sin saber dar una explicación de porqué habían elegido esa respuesta.

Principios educativos:- Cuando se dialoga con los hijos o alumnos, debemos tratar de razonar nuestras

opiniones o mandatos. Si no tienen capacidad para comprenderlo, debemos concluir con: no te preocupes que aunque ahora no lo puedes entender, yo te lo explicaré más adelante.

- La única forma de ser libres es conocer los porqués de todo aquello que significa una obligación.

No tengas inconveniente en reconocer un error

Muchos son los profesores incapaces de admitir ante sus alumnos sus propios errores, y mucho menos su ignorancia (lo que suele llevar a errores). En este caso, Santiago narra la anécdota de un compañero, el cual que tuvo la idea de inventarse la respuesta de una pregunta propuesta por un alumno a la que no sabía contestar, lo que rápidamente fue descubierto por sus alumnos.

Principios educativos: - No se pierde autoridad por reconocer los errores. Es más, admitir nuestros errores

evitará la frustración cuando un alumno se equivoca. - Mostrar que nosotros también desconocemos algunas cosas puede motivarles,

incluso podemos proponer la búsqueda de información conjunta.

- No obstante, tenemos que tener en cuenta que algunos alumnos consideran que un maestro no puede equivocarse, por lo que debemos guardarnos en la manga alguna estrategia para poder emplearla en estas situaciones.

Si los alumnos nos plantean una duda que no sabemos resolver, debemos actuar de diferentes maneras en función del alumnado:- Si nuestro alumnado es poco tolerante y sabemos que nos desacreditarán por no

saber contestar, podemos emplear la siguiente estrategia (propuesta por Santiago): hacernos los sorprendidos y decir que eso deberían saberlo, así les mandaremos informarse por su cuenta para trabajar el tema el próximo día (al igual que nosotros).

- Por el contrario, si sabemos que nuestros alumnos van a aceptar y comprender que desconozcamos algo, podremos explicar que no estamos seguro de la respuesta y que recabaremos información para explicárselo el próximo día.

Quien no quiere trabajar, no tiene derecho a comer

Santiago fue con sus alumnos a un campamento en el que no había ningún tipo de asistencia, por lo que los jóvenes debían realizar todas las tareas. Un día uno de los muchachos decidió que pasaría la mañana tocando la guitarra en lugar de realizar sus tareas con el resto, y así lo hizo. El profesor no le dijo nada respecto a sus tareas, pues él ya conocía su cometido, pero a la hora de comer le dijo que ese día no comería por no haber trabajado.

Principios educativos:- Si los padres trabajan, tienen derecho a que sus hijos también se ganen el pan con el

sudor de su frente, y no con el sudor del de enfrente.- Aquel niño o adolescente que tiene todo sin realizar ningún esfuerzo, es un buen

candidato a la depresión o el sinsentido de su vida cuando se dé cuente de que en la edad adulta el pedir ya no sirve.

- Algunos padres que en su juventud pasaron necesidades, han cometido el error educativo de prometerse que a sus hijos no le va a faltar de nada de lo que ellos carecieron.

En síntesis, el principio educativo en este caso se basa en el esfuerzo y trabajo para ganarse las cosas, algo que habitualmente los padres no suelen hacer, lo que está llevando a la generación ni-ni.

Premio o castigo es lo que se hace pasar por tal

Esta anécdota ocurrió en un centro de Formación Profesional. Santiago propuso a sus alumnos del último curso la opción de entrar a clase una hora antes para preparar las asignaturas del día. A casi todos les pareció buena idea, además así se evitaban el

ritual diario de formar filas en el patio antes de entrar a clase, lo que supuso para ellos un auténtico premio. Sin embargo, uno de los profesores a sabiendas de que los alumnos estaban en clase antes de la hora, decidió iniciar sus clases quince minutos antes, lo que se convirtió en un castigo para los alumnos.

Principios educativos:- Los premios han de tener un sentido de gratuidad y no de chantaje.- Las alabanzas por las buenas acciones reafirman la autoestima y estimulan.- Los castigos han de ser proporcionados a la falta y razonados.- Ante actuaciones negativas lo pedagógico es dialogar. Este diálogo no ha de ser

inmediato (según la edad), pues estaremos probablemente enfadados. Así la consecuencia del diálogo puede ser un castigo, pero seguro que éste será justo, adecuado y asumido por el niño.

El castigo supone una de las mayores controversias en educación, dando lugar a opiniones tan radicales como el rechazo rotundo, o por el contrario, actitudes en las que se abusa de éste.

No hagas nunca lo que pueda hacer él

Antes de plantear esta vivencia, Santiago nos habla de la libertad, del sentido que para él tiene esta palabra, considerándola la cualidad más destacada de la persona, pues supone no depender de otro para actuar y ser capaz de tomar las propias decisiones. Así mismo, nos explica que él considera que la libertad plena no existe, y así es, al igual que él, pienso que la libertad absoluta no puede darse en las sociedades.

En esta vivencia Santiago nos pone como ejemplo a los niños y jóvenes que cuando sus padres les mandan hacer algo se hacen los remolones, tardan mucho,… lo que hace que al final sean los padres quienes acaban haciéndolo.

Nos cuenta que a él le gusta regalar a los hijos de sus amigos un triciclo y les aconseja que cuando el niño saque el triciclo al parque, luego sea él mismo quien le lleve de vuelta casa, y si no quiere recogerlo deban dejarlo en el parque, y no llevarlo los padres. Así el niño aprenderá a ser responsable y que no todo se lo van a hacer los demás y si el niño luego quiere un triciclo recomienda que se lo vuelvan a comprar, pero con sus ahorros para que vaya comprendiendo que todas las cosas cuestan.

Principios educativos:- Educar es un duro trabajo que requiere estar siempre alerta. Cuando bajamos los

brazos, después tendremos que empezar de nuevo. Los alumnos y los hijos continuamente nos están echando un pulso, pues es su forma de conquistar su libertad.

- Uno de los mayores placeres es conseguir metas y a mayor dificultad, más satisfacción. Por tanto no debemos privarles de este crecimiento en su libertad, por una comodidad mal entendida.

- La exigencia es necesaria.

Procura conocer a los padres de tus alumnos

En este capítulo Santiago reflexiona sobre la influencia de la genética en los comportamientos de los niños y la influencia del entorno. Él se considera mayor la influencia de la genética y para constatar su inclinación nos cuenta varios casos, como por ejemplo el de su nieto adoptivo, que tiene la “manía” de esconder las cosas de los demás, comportamiento idéntico al que tenía su abuelo biológico. Por eso considera que para conocer al alumno debemos conocer a sus padres.

Principios educativos- Debemos reunirnos con los padres de los alumnos de manera individual, pues al

hablar con ellos a solas y tranquilamente podremos deducir algunos rasgos de cultura, exigencia, relación familiar,… que nos ayudará a conocer mejor el comportamiento de su hijo.

- En caso de que el padre no asista, debemos interesarnos de los porqués y no dejarnos engañar (la madre tiende a justificar su ausencia). Esto nos ayudará también a conocer el tipo de educación que el niño recibe en casa.

- En esta entrevista el tutor debe interesarse por recibir información acerca de la familia y no de dar información sobre el comportamiento del alumno.

En este caso mi opinión no coincide con la del autor, pues considero que el entorno influye mucho más que la genética en el comportamiento de un niño.

Es cierto que dos niños educados en un mismo entorno pueden desarrollar una personalidad y una manera de ser muy diferentes, pero creo que el comportamiento siempre se ve influido por lo que ve en casa y en el entorno más cercano. Cuántas veces hemos oído a los niños decir cosas impensables para ellos, cosas que escuchan y después repiten como loritos.

Cuanta menos TV vean, más libres serán

Santiago considera que la TV nos es buena, ni para niños, ni para adultos y en este caso nos cuenta lo que le contó una abuela que había hecho su nieto de cuatro años.

El pequeño estaba jugando con un amigo en su habitación con un pollito que su padre le había comprado, cuando de repente oyeron piar al pollo de un modo muy extraño. Cuando se asomaron a la habitación el pollo ya no piaba, pues los niños le habían desplumado y rajado para sacarle las pilas.

Aunque parece que éste hecho no está relacionado con la TV, Santiago si lo relaciona, pues los niños de hoy en día están acostumbrados a los juguetes con pilas y a ver la TV continuamente, es su única diversión, lo que lleva a estos comportamientos extraños e inadecuados en niños pequeños, y por supuesto, a una falta de creatividad.

Principios educativos:- A más TV más pasividad y menos libertad.- No es adecuado ver la TV durante las comidas, pues es la hora de reunión familiar.- No debemos ver los programas en directo, sino a través del video, para poder pasar

los anuncios y verlo cuando nosotros decidamos, no cuando la TV quiere.- Es frecuente el zapeo, y tras varios intentos dejamos lo menos malo, pero no la

apagamos.

De nuevo no estoy de acuerdo al 100% con las ideas del autor, pues creo que son demasiado extremista. Desde mi punto de vista la TV en su medida justa no es perjudicial, y menos para los adultos. En mi casa se ve todos los días el telediario a la hora de comer y no por eso, si tenemos que hablar algo, dejamos de hacerlo. Además la TV nos mantiene informados y nos entretiene con películas y algunos programas que están muy bien. Ver un rato al día la TV no creo que sea tan malo.

Santiago Galve (2007). 30 consejos prácticos para educar hoy: guía útil y divertida para Maestros, Profesores y Padres. Editorial CCS