Acreditación Calidad o Instrumento de Legitimación Para La Educación Superior

Revista Electrnica "ActualidadesInvestigativas en Educacin"E-ISSN: [email protected] de Costa RicaCosta Rica

Guido Guido, ElsianaAcreditacin: calidad o instrumento de legitimacin para la educacin superior?

Revista Electrnica "Actualidades Investigativas en Educacin", vol. 5, 2005, pp. 1-20Universidad de Costa Rica

San Pedro de Montes de Oca, Costa Rica

Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=44759907

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Universidad de Costa Rica Facultad de Educacin

Instituto de Investigacin en Educacin

ACTUALIDADES INVESTIGATIVAS EN EDUCACION

ACREDITACIN: CALIDAD O INSTRUMENTO DE LEGITIMACIN PARA LA

EDUCACIN SUPERIOR? Elsiana Guido Guido1

Resumen: El presente artculo analiza el surgimiento de la acreditacin de carreras y de programas en Costa Rica en el marco de una redefinicin del sistema educativo superior dentro de la coexistencia de dos estilos de desarrollo. Se contextualiza a qu responde el surgimiento de la acreditacin en Costa Rica., cul es su vinculacin con las nuevas tendencias en el estilo de desarrollo nacional pos ajuste y cul es su funcin en la configuracin del sistema de educacin superior costarricense. Segn la autora, la acreditacin responde directamente a la lgica de un Estado que delega, en otras instancias, su rol ejecutor e interventor directo, mientras que las fuerzas del mercado se fortalecen y definen aspectos importantes de la organizacin y oferta del sistema de educacin superior. Palabras clave: ACREDITACIN/ EDUCACIN SUPERIOR/ ESTILO DE DESARROLLO/ Abstract: This article analyzes the arising of accreditation of careers and programs in Costa Rica on the frame of the Higher education system re-definition, and in a context where two development styles coexist. It is contextualize what does the arise of accreditation in Costa Rica respond to, which is its link to the tendencies of national development style, and which is its function in the configuration of the Costa Rican higher education system. According to the author, the accreditation responds directly to the logic of a State that delegates its roll as executive and direct supervisory body to other institutions while the national forces strengthen, and define important aspects of the organization and supply of the higher education system. Key words: ACCREDITATION/ HIGHER EDUCATION/ STYLE OF DEVELOPMENT/ I. Presentacin2 El surgimiento del debate y la praxis de la acreditacin de las carreras universitarias, se han

convertido en uno de los temas ms polmicos sobre el presente y futuro de la educacin

superior costarricense. Para algunas personas, la acreditacin vendra a llenar un vaco

respecto a los mecanismos para controlar y regular la calidad de la educacin superior,

2 El presente artculo se basa en algunas de las conclusiones de la investigacin La Acreditacin: Los desafos de la Educacin Superior Costarricense en un nuevo estilo de desarrollo; elaborada en el marco del Proyecto Camina-Costa Rica. 2002. Centro de Evaluacin Acadmica. Universidad de Costa Rica. CONARE. La investigacin fue realizada por la autora de este artculo y el politlogo Hrold Villegas, profesor universitario.

1 Politloga y administradora de programas educativos no formales, de la Universidad de Costa Rica. Investigadora del Departamento de Investigacin y Evaluacin Acadmica del Centro de Evaluacin Acadmica de la Universidad de Costa Rica. Investigadora en el Consejo Centroamericano de Acreditacin de la Educacin Superior. Estudios avanzados en Pedagoga Social, Ciencias Polticas y Sociologa en la. Universidad Johannes Gutenberg- Alemania. Correo electrnico: [email protected] Artculo recibido: 14 de julio, 2005 Aprobado: 19 de setiembre, 2005

Revista Electrnica Actualidades Investigativas en Educacin

_______________________________________________________Volumen 5, Nmero Especial, Ao 2005, ISSN 1409-4703

2

particularmente ante el aumento desproporcionado de la oferta superior privada; para otras,

la acreditacin significara un instrumento para legitimar y ocultar la psima calidad de

algunas instituciones de educacin privada, al homologarse carreras en el mismo nivel de las

carreras impartidas en la educacin superior estatal. De esta manera se ubican a las

universidades estatales en el mismo pedestal de algunas de las cuestionadas instituciones

privadas de educacin superior. Desde esta perspectiva, la acreditacin sera un

instrumento del negocio o de la iniciativa privada.

No obstante ambas tesis, el anlisis del surgimiento de la acreditacin de carreras

universitarias en Costa Rica se convierte en un proceso ms complejo de lo que podramos

esperar. Esto es as, en parte, por la trascendencia socio-econmica del contexto en que

empieza a ser necesaria la acreditacin, y en el que converge una serie de variables que

limitan una opcin de anlisis o explicacin reduccionista.

Es as como el anlisis del tema debera situarse en dos niveles diferentes: el primero, las

razones objetivas del surgimiento de la acreditacin en Costa Rica. El segundo, los efectos

de la acreditacin en la configuracin del sistema de la educacin superior costarricense. En

el presente artculo se desarrolla el primer nivel mencionado y se pretende aportar algunos

elementos que contribuyan al anlisis del segundo nivel en lo que se refiere a la

reconfiguracin de todo el sistema de educacin superior, tanto estatal, como privado. Para

esto, se plantean algunas interrogantes, que pueden contribuir a futuras investigaciones,

sobre la prctica de la acreditacin desarrollada en el pas y sus efectos sobre el

mejoramiento de la calidad.

El objetivo del artculo se enfoca en analizar el origen de la acreditacin en Costa Rica, en el

contexto de un nuevo estilo de desarrollo, y sus posibles implicaciones para el sistema de

educacin superior estatal y privado.

En un esfuerzo por dar respuesta a estas inquietudes, se plantean las siguientes

interrogantes:

A qu responde el surgimiento de la acreditacin en Costa Rica? Cul es su vinculacin con las nuevas tendencias en el estilo de desarrollo nacional posterior al



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ajuste? Cul es su funcin en la configuracin del sistema de la educacin superior

costarricense?

1. Cambios en la concepcin del Estado 1.1 Estilo de desarrollo Los cambios en el mbito de la educacin superior deben analizarse dentro del contexto de

reconfiguracin del Estado costarricense, principalmente, en sus funciones econmicas y

sociales. Como no puede afirmarse que el Estado ha pasado a manos privadas la totalidad

de sus tareas, se habla en este sentido de un trnsito inconcluso de un Estado

intervencionista a un Estado regulador. Con esta connotacin, se hace referencia a la

coexistencia actual de rasgos pertenecientes a diferentes estilos de desarrollo. (Proyecto

Estado de la Nacin, Informe 10, 2004, p.155)

El estilo de desarrollo se refiere aqu, siguiendo los planteamientos de Jorge Rovira Mas, a la

forma concreta como se mueve una sociedad en el transcurso de un perodo histrico

particular. Se refiere al resultado social y poltico de la interaccin de las alternativas

propuestas por los diversos grupos sociales. Segn lo anterior, el estilo de desarrollo:

no es el fruto nicamente [] de los grupos sociales que patrocinan una estrategia

de desarrollo especfica y por completo hegemnica. Constituye ms bien el fruto

que se va decantando (a manera de valores que se difunden y de distintas prcticas

que cobran vida institucional) de la interaccin entre distintas estrategias, proyectos

polticos y planteos en defensa de intereses sectoriales, los que son promovidos por

grupos sociales que cuentan con recursos de poder con peso diferenciado en la

escena poltica. (Rovira, 1995, pp. 5-6)

Estas estrategias y proyectos diversos son promovidos por grupos sociales que cuentan con

recursos de poder con un nivel diferenciado en la escena poltica y que conllevan una

ideologa capaz de sustentar ese nuevo proyecto de desarrollo. En este sentido, hay varias

opciones de desarrollo posibles; la que se impone no necesariamente constituye la ms

conveniente, sino la viable en ciertas condiciones histricas especficas.



4

1.2 De la crisis al camino de un nuevo estilo de desarrollo En los inicios de la dcada de los ochenta el pas se sumerge en una crisis econmica sin

precedentes, desde la acontecida durante la gran depresin de los aos treinta, producto de

una serie de desequilibrios internos, agravados por el impacto de variaciones en el entorno

internacional. Esta crisis pone en entredicho el estilo de desarrollo basado en la industria

sustitutiva de importaciones (predominante en Costa Rica desde la dcada del 50 del siglo

pasado), facilitando la irrupcin de las primeras iniciativas y polticas que van decantando

una nueva concepcin sobre los mecanismos y estrategias para lograr el desarrollo.

El debate actual sobre el concepto de desarrollo es muy amplio y complejo a la vez. Se

rescata la conceptualizacin del Programa de las Naciones para el Desarrollo en su informe

de 1994, adoptada por el Proyecto Estado de la Nacin, la cual trasciende lo meramente

econmico. En esta definicin el concepto de desarrollo se ampla al de desarrollo humano

sostenible, el cual se conforma como

un proceso continuo e integral, que rene componentes y dimensiones del desarrollo

de las sociedades y de las personas, en los que resulta central la generacin de

capacidades y oportunidades de, por y para la gente, con las que la equidad se

acreciente para las actuales y futuras generaciones. (Proyecto Estado de la Nacin

Informe 8, 2002, p. 40)

Por otra parte, el Proyecto Estado de la Nacin en Desarrollo Humano Sostenible, en su

octavo informe, contextualiza el concepto al considerar que:

El desarrollo humano sostenible tiene un componente histrico, pues sus

componentes, dimensiones y desafos sufren una evolucin distinta en cada

sociedad, as como lo hacen las expectativas de la gente y las metas de referencia

localizables en otros pases. (2002, p. 40)

Es entonces en este perodo crtico de los aos ochenta cuando se plantea la redefinicin

de la estructura productiva y de las funciones histricas del Estado, con consecuencias

directas, particularmente, sobre el gasto y la inversin social.



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En el caso de Costa Rica, esta crisis econmica coloc en tensin expresa dos estilos de

desarrollo diferentes: por un lado, un estilo que privilegi un fuerte intervencionismo estatal

en actividades econmicas y productivas y una sistemtica inversin social; y por otro lado,

un nuevo estilo de desarrollo que va a privilegiar la liberalizacin econmica, la privatizacin

de lo pblico y la redefinicin de las funciones econmicas y sociales del Estado

(fundamentalmente en trminos de menor intervencin y la bsqueda de mayor eficiencia en

el uso de los recursos pblicos).

El principal fundamento ideolgico de este nuevo estilo de desarrollo ser el pensamiento

neoliberal y predominar desde la dcada de los ochenta, hasta nuestros das, sin que haya

implicado un total abandono del intervencionismo estatal en la vida econmica y social

costarricense. El nuevo estilo de desarrollo que se va implementando en Costa Rica, a partir

de estos aos, no surge de manera espontnea o por la inevitabilidad del destino. Al

contrario, es parte de proyectos polticos, estrategias y planteos, en defensa de ciertos

intereses sectoriales promovidos, tanto en lo interno como en lo externo, con un impacto

directo sobre la situacin del pas.

1.3 Cuestionamiento a lo pblico Las caractersticas principales del estilo de desarrollo que se va perfilando en el pas,

corresponden a los planteamientos de organismos internacionales, tales como el Fondo

Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM), y son tambin acordes con las

polticas del Consenso de Washington.

Como bien lo apunta Joseph E. Stiglitz (2002, pp. 44-45), con el Consenso de Washington se

sacralizaron las ideas a favor del libre mercado. Los instrumentos de poltica econmica

respondan, de esta manera, a los fallos encontrados en el papel del Estado como generador

de empleo. Por este motivo, el FMI, el BM y el Tesoro de los Estados Unidos disearon las

polticas que deban seguir los pases subdesarrollados, destinadas a eliminar la excesiva

intervencin estatal en la economa.

Dentro de esto, el conjunto de polticas del Consenso de Washington defina el crecimiento

econmico como el parmetro para evaluar el desarrollo de un pas (y el xito de las

polticas). La estrategia que propona este grupo, fue centrar las polticas nacionales y las

reformas en la estabilidad macroeconmica, la apertura y liberalizacin comercial y la



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reduccin de la presencia del Estado. Posteriormente y, ante el deterioro de las condiciones

de vida de amplios sectores de la poblacin, incluy dentro de su men de polticas, las

acciones de compensacin social.

Las ideas pregonadas por los organismos internacionales y acogidas por diversos sectores

sociales con acceso al poder poltico, adems de la disciplina fiscal, el control de la inflacin

y la liberalizacin comercial, impulsaron la reduccin de las funciones y el tamao del

Estado (Proyecto Estado de la Nacin. Informe 10, p. 155).

Estos planteamientos significaron un sistemtico cuestionamiento a lo pblico y, entre tanto,

una redefinicin de las funciones econmicas y sociales del Estado, coherentes con los

postulados y principios que pregonaban los llamados defensores del neoliberalismo en toda

Amrica Latina.

En el mbito cultural y social, estos planteamientos estuvieron dirigidos para modificar la

concepcin histrica de la ciudadana con respecto al Estado y a cambiar de la concepcin

paternalista y de Estado de bienestar a la de Estado regulador. Este intento tendr

consecuencias en la manera cmo se va configurando el papel del Estado, respecto a la

educacin superior costarricense 3 .

2. Del cuestionamiento de lo pblico al control de la calidad en la educacin superior

2.1 Factores que propician que se hable de acreditacin Las nuevas condiciones requeridas por el estilo de desarrollo, les demandan a las

universidades estatales un replanteamiento de sus relaciones con la sociedad y con el

Estado. Como consecuencias directas del nuevo papel estatal y de la liberalizacin comercial

del pas, se ubican la proliferacin cuantitativa de las instituciones de educacin superior y la

acentuacin del debate en torno al tema del financiamiento de la educacin estatal. Estos

dos resultados se exponen seguidamente, ya que constituyen factores determinantes que

delinearon el impacto que la reforma estatal tuvo en el sector educativo.

3 Para ampliar sobre este tema vase: Vega, M. (1996). Cambios en la sociedad costarricense en las dcadas de los ochenta y noventa.



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2.1.1 Proliferacin cuantitativa de instituciones privadas de educacin superior y

algunos de sus efectos ms notorios El perodo que comprende entre 1981 y el 2000, es el de mayor expansin de las

instituciones privadas de educacin superior en Costa Rica, denominadas tambin

universidades privadas, tanto en cuanto a creacin de nuevos centros privados, como en la

absorcin de la matrcula y expansin por reas de estudio. Esta expansin reconfigura de

manera significativa el sistema de la educacin superior costarricense, colocando nuevos

desafos y abriendo el debate en torno a los argumentos que promuevan una mayor calidad

y mejores condiciones competitivas para las universidades estatales.

Se destaca en este aspecto, el hecho de que la educacin superior deja de ser competencia

exclusiva del Estado costarricense, ya que se redefinen algunas de sus principales

funciones redistributivas en la sociedad. Dentro de la liberalizacin de funciones y

actividades econmicas, la educacin superior se reconfigur, sobre todo en la dcada de

los noventa, como un negocio ms para la iniciativa privada. Es as cmo el Estado pierde

su presencia, casi exclusiva hasta entonces, en el mbito de la educacin superior (Vega,

1996, pp.138-139).

Los datos cuantitativos suministrados por el investigador ngel Ruiz (2001a, pp. 39-40) son

claros: hasta el ao 1985 la Universidad Autnoma de Centro Amrica era la nica

universidad privada del pas. Entre 1985 y 1991 se crearon siete y de 1992 al 2000,

emergieron 40 universidades privadas en el contexto costarricense.

Otra manera numrica mediante la cual se puede evidenciar el impacto que la educacin

superior privada ha tenido en Costa Rica, se refiere a la absorcin de la matrcula. En efecto,

en el ao 1980 las universidades estatales concentraron el 94,2% del total de la matrcula,

mientras que las universidades privadas solo recibieron el 5,8% del total para la educacin

superior. Ya para el ao 1991, el panorama era distinto: las universidades estatales

absorbieron el 78,7% de la matrcula y las universidades privadas el 21,3% del total. Lo que

significa que durante este perodo, la absorcin de matrcula por parte de las universidades

estatales, tuvo un decrecimiento del 16,5%, mientras que en las privadas creci un 37,5%.

En 1996, la matrcula en las universidades privadas casi se quintuplic con el incremento de

un 479%, en relacin con la matrcula de 1980. En la dcada de los ochenta, la participacin



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de las universidades privadas en la absorcin de la matrcula total universitaria, se vio

incrementada ao tras ao, de un 5.8% en 1980 a un 21.3% en 1991 (Ruiz, 2001b, pp. 221-

223).

Durante los ltimos aos, no ha sido posible determinar el aumento en la matrcula en las

instituciones privadas de educacin superior, debido a que stas no suministran la

informacin ni tampoco han estado obligadas a hacerlo. Para 1998, el Quinto Informe del

Estado de la Nacin sealaba precisamente, como un gran reto para la educacin superior,

que deba generarse un sistema de estadsticas de las universidades privadas, similar al que

ha implementado el Consejo Nacional de Rectores (CONARE) para las universidades

estatales (Proyecto Estado de la Nacin. Informe 5, 1998, p. 84).

Otro hecho fundamental de la proliferacin de la oferta de educacin superior privada, es el

otorgamiento de ttulos. Ya no ser solo el Estado quien los confiera, sino que el mercado se

encarga de una oferta de ttulos que satisface todos los gustos.

En 1997, el Proyecto Estado de la Nacin, en su cuarto informe, dedic una seccin al

incremento del nmero de diplomas otorgados por las casas de enseanza superior y

confirm la tendencia hacia la disminucin de las instituciones estatales de educacin

superior en el otorgamiento de diplomas, tal y cmo se vena observando desde 1990. En

ese ltimo ao, las universidades estatales otorgaron el 77.6% del total de diplomas,

mientras que siete aos despus, el porcentaje disminuy a un 52% (Proyecto Estado de la

Nacin. Informe 4, 1998, p.74).

En 1990, el total de ttulos entregados por las instituciones de educacin superior en su

conjunto, fue de 7.254, de los cuales 5.629 correspondieron a las universidades estatales y

1.625 a las instituciones privadas de educacin superior. En el ao 2003, estos datos

cambian drsticamente, ya que de 25.710 ttulos, las cuatro universidades estatales

entregaron 10.507 en total, contra 15.203 de las universidades privadas (Proyecto Estado

de la Nacin. Informe 10, 2004, p. 407).

El resquebrajamiento de la hegemona estatal, es an ms notorio, si se analizan los datos

relativos al postgrado. En 1990, las universidades estatales otorgaron 52 ttulos de



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maestra; y 1.030 en el 2003. Por su parte, las universidades privadas pasaron de 2 ttulos

de maestra en 1991 a 1.297 en el 2003 (Proyecto Estado de la Nacin. Informe 10, p. 407).

De este modo, se va reconfigurando el panorama nacional en el rea de la formacin

superior, en donde el Estado deja de ser el nico que otorga diplomas universitarios, ya que

las instituciones privadas de educacin superior van asumiendo ese papel, cada vez con

mayor fuerza.

2.1.2 Financiamiento a la educacin superior estatal El tema del financiamiento de las universidades estatales estuvo siempre en la discusin

pblica y las propuestas para restringir el financiamiento a la educacin superior por parte del

Estado, se tornaron cada vez ms fuertes.

Como bien lo seala Olimpia Lpez (1999), en los noventa, continuaron los cuestionamientos

a la eficiencia de la educacin superior estatal y, las negociaciones para la obtencin del

presupuesto, alcanzaron niveles de enfrentamiento, tanto entre el entonces presidente

Caldern Fournier y su Ministro de Hacienda, Thelmo Vargas, como entre stos y

representantes de la sociedad civil, como universitarios, docentes y sindicatos. 4

Para entonces, las tesis que favorecan el financiamiento de la educacin bsica en contra

de la superior, pregonadas a su vez por organismos financieros internacionales de gran

influencia en el pas, correspondan plenamente con corrientes que abogaban por un Estado

que se desprendiera de su relacin con la educacin superior, la cual se visualizaba como

elitista y por ende no como una prioridad para un pas pobre como Costa Rica.

De esta manera, las polticas de reduccin del gasto pblico y del aparato del Estado,

jugaron un papel significativo en la modificacin de la educacin superior en Costa Rica. De

acuerdo con ngel Ruiz (2001a, p. 62), el estancamiento o contraccin de los presupuestos

para las universidades estatales, impidi el crecimiento institucional y de su matrcula, y

4 En este sentido, es rescatable la discusin pblica sobre el carcter redistributivo del financiamiento a la educacin superior, entre el ex ministro de Hacienda, Thelmo Vargas y el acadmico, Miguel Gutirrez Saxe por el diario La Repblica en el ao 1994.



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favoreci, entre otras cosas, la vertiginosa expansin cuantitativa de las instituciones

privadas de educacin superior, sobre todo en la dcada de los noventa.

Ruiz relaciona estos cambios con el estilo de desarrollo que se est delineando en el pas, al

sealar que:

El estilo de desarrollo en construccin ha planteado dejar en manos de la iniciativa

privada un mayor nmero de espacios de la actividad social y concentrar los del

Estado solo en ciertas acciones. Existen dentro de este escenario algunos elementos

ideolgicos y polticos que llevan a extremos los lmites para el Estado y la sociedad

civil, por ejemplo, la formacin de profesionales ha sido asumida en este estilo ms

como un beneficio individual, y entonces privado, que como un inters pblico.

(2001a, p. 63)

3. Cundo se empieza a hablar de controlar la calidad de las universidades? 3.1 Medir la calidad En el contexto de los programas de ajuste estructural y estabilizacin econmica- como

consecuencia de la crisis del estilo de desarrollo- se empieza a cuestionar no solo la calidad

de los procesos universitarios, sino tambin se inician la preocupacin y las discusiones

acerca de cmo se puede evaluar la calidad de la educacin superior.

Esta preocupacin toma especial relevancia por una razn particular: las restricciones en el

financiamiento pblico se asociaron a percepciones sobre la baja calidad y pertinencia de la

educacin superior. Esta discusin toma un tono singular, segn Tnnerman (1998, p. 83),

en funcin de los fenmenos de globalizacin y competitividad internacional, ya que se

requiere formar profesionales de alta calificacin para que puedan insertarse en el mercado.

Se sealan varios aspectos que incidieron en que a la educacin superior se le cuestionara

la calidad de sus servicios. Como bien lo apunta Olimpia Lpez (1999, p. 18), antes, en el

mbito acadmico se hablaba de excelencia; luego se empieza a hablar de calidad, pero

vinculada a los conceptos de eficiencia, eficacia y evaluacin. Estos temas, agrega,

adquieren relevancia en el marco de las crisis presupuestarias, lo que aunado a los

cuestionamientos en torno al uso de los recursos estatales y los problemas de gestin de las

universidades, favoreci el planteamiento de la exigencia de rendir cuentas a la sociedad

sobre la utilizacin de los fondos estatales.



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Por otra parte, diversos cambios sociales han favorecido la irrupcin de una ciudadana ms

observante del uso de los recursos pblicos. En este sentido, Rollin Kent, citado por Carlos

Tnnerman, indica que

el debate actual sobre evaluacin y calidad marca un viraje radical. A diferencia de

dcadas pasadas, ahora encontramos una sociedad que critica a la universidad, una

universidad que debe rendir cuentas frente a pblicos externos, y un sistema de

educacin superior donde actores tradicionalmente excluidos (bajo el concepto de

autonoma) ahora son copartcipes o hasta protagonistas del cambio. (Tnnerman,

1998, p.84)

Adicionalmente, los organismos internacionales como el BM y la UNESCO, manifiestan

tambin la importancia de que se construya un paradigma de calidad. El BM propone la

definicin de polticas en procura de la calidad, la equidad y la pertinencia. En sus anlisis

sobre la situacin de la educacin superior, concluye sealando el inters internacional en

definir parmetros y modelos de evaluacin, acreditacin y determinacin de la eficiencia y

eficacia (Lpez, 1999, p. 8-9).

As, dentro del modelo de reduccin de lo pblico, en donde parte de la educacin superior

se convierte en respuesta a la demanda y la oferta que indica el mercado, se empieza a

perfilar la necesidad de determinar la calidad de las instituciones de educacin superior y de

las carreras que ofrecen. De este modo, se proponen diversos modelos para medir la

calidad de las universidades, de sus programas y carreras. Al respecto Daz Barriga (1995)

argumenta que las polticas educativas se empezaron a apoyar en nuevos conceptos como:

excelencia acadmica, calidad de la educacin, eficiencia y desarrollo con equidad. Segn

el autor, lo que se trata de reducir es el gasto pblico, lo cual comporta el desfinanciamiento

de la educacin ah donde sta se ve no como inversin, sino como gasto (Daz, 1995,

p.38).

Daz Barriga sostiene que la educacin, desde esta perspectiva neoliberal, no tiene que

responder a un problema de justicia social, sino de eficiencia social, ya que, dentro del

modelo liberal, lo que se requiere es preparar profesionales para la industrializacin del pas

y gestionar la Universidad, mediante modelos administrativos gerenciales que permitan el

desplazamiento de la estructura acadmica tradicional. Paralelamente a este proceso, se va

modificando un conjunto de concepciones sobre la educacin superior. Como indicadores



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de estas transformaciones, el autor seala la utilizacin, en el mbito de la educacin

superior, de un lenguaje de genealoga fabril, al generalizarse ahora el uso de conceptos

tales como el de calidad de la educacin, eficiencia y excelencia acadmica.

En general, en Amrica Latina el debate reciente en torno a la bsqueda de la calidad en la

educacin superior universitaria, se asocia a los cambios sociales que motiva la nueva

proyeccin del Estado, ya que no regula la totalidad de la oferta educativa de educacin

superior, ni es el nico responsable de la calidad de los servicios sociales y econmicos.

Tambin el debate es una respuesta a la tendencia de disminuir la inversin pblica, lo que

ha conducido, en cierta forma, a la necesidad de buscar criterios para la asignacin de

fondos pblicos, entre las instituciones de educacin superior e, incluso, en el interior de

ellas mismas.

3.2 La acreditacin como propuesta de las universidades estatales Desde inicios de la dcada de los noventa se debate con mayor intensidad, en las esferas

universitarias, el tema de la acreditacin de las carreras ofrecidas por las instituciones de

educacin superior.

Segn Camacho Monge (2001, pp. 92-93), el boom de la acreditacin obedece a varias

transformaciones sociales, entre las que se encuentran la privatizacin de lo pblico, la

desregulacin de las actividades humanas, el desmantelamiento de sectores estatales y el

inters por deslegitimar al Estado, como el ente encargado de dar garanta de la calidad de

la enseanza y de la idoneidad profesional de los graduados. Segn el autor, el problema no

es el dilema entre universidades pblicas y privadas, sino las orientaciones de mercado que

tienen las universidades privadas. Por esta razn seala que era necesario buscar un

mecanismo privado, desregulado y no estatal, que paliara el problema.

Otros autores, como es el caso de Aura Barrantes (2001, p. 79), consideran que la

proliferacin de universidades privadas, ha inquietado mucho al Gobierno, a la opinin

pblica y al Consejo Nacional de Rectores (CONARE), por lo que ste ltimo, dada la

necesidad de garantizar la calidad de la educacin superior, promueve la creacin de una

entidad independiente que coadyuve al respecto.



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En este contexto, diversas fuerzas internas y externas favorecen la creacin del Sistema

Nacional de Acreditacin de la Educacin Superior (SINAES). La iniciativa para establecer

un mecanismo de acreditacin para carreras universitarias en Costa Rica provino del

CONARE, el cual est conformado precisamente por las personas rectoras de las

universidades estatales.

Los orgenes de esta propuesta se remontan al ao 1992, cuando el CONARE elabor un

documento titulado "Sistema de acreditacin de instituciones, carreras y programas de

educacin superior. Una propuesta de organizacin". Este documento de 17 pginas, que

fue tambin revisado y modificado por las Vicerrectoras de Docencia de las universidades

estatales, constituy la base para la futura creacin del SINAES.

En el documento del CONARE, elaborado por la Oficina de Planificacin de la Educacin

Superior (OPES), se deja claro que, de acuerdo con la experiencia internacional, en materia

de acreditacin, los sistemas con una administracin no gubernamental, son ms flexibles y

ms eficientes (CONARE, 1992, p. 1).

El propsito de la acreditacin se plantea en ese estudio, como el "otorgar informacin

fidedigna acerca de las instituciones educativas, de las carreras y de los programas

acreditados, y se presenta a la acreditacin como "una opcin para ordenar la educacin

superior del pas" (CONARE, 1992, p. 2).

En consonancia con la necesidad de ordenar la educacin superior, la proliferacin

cuantitativa de instituciones privadas de educacin superior y la disminucin del

financiamiento estatal dirigido a este sector educativo, fueron factores que contribuyeron, en

gran medida, a que las autoridades universitarias estatales, buscaran diversas perspectivas y

soluciones, internas y externas, tendientes a evaluar la accin universitaria, sus procesos y sus

productos, entendidos stos como su produccin acadmica, su proyeccin y accin social y

sus personas egresadas y graduadas; y que se estableciera, as mismo, que se iba a utilizar el

criterio de calidad para diferenciar a las instituciones de educacin superior. De este modo, la

discusin se centr en torno a la preocupacin por la calidad de la educacin, y sobre quin

podra garantizar la calidad de la educacin superior en Costa Rica.

En esta bsqueda, los rganos rectores de las universidades estatales reconocieron la

importancia de establecer mecanismos de autoevaluacin y de evaluacin externa que



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pudieran dar fe pblica de la calidad acadmica de las carreras y programas de las

universidades de la educacin superior costarricense. Dentro de este contexto, surgieron, de

manera central, el tema y el debate sobre la calidad y, de manera particular, la acreditacin en

la educacin superior.

El tema de la acreditacin no es nuevo. En el mbito mundial y, especficamente en el

latinoamericano, la acreditacin de carreras o instituciones cuenta con un apoyo decisivo de

las mismas universidades y de los Estados. En Costa Rica, la acreditacin surgi como un

mecanismo defensivo de las autoridades universitarias estatales, con el cual se pretenda

revertir el desbalance suscitado en la oferta universitaria, como resultado de los aspectos del

estilo de desarrollo, los cuales favorecen la desregulacin del mercado.

Los objetivos de la acreditacin quedan claros en la Ley 8256 que da origen al SINAES, al

expresar que los procesos de acreditacin deben garantizar continuamente la calidad de las

carreras y de los planes y programas ofrecidos por las instituciones de educacin superior.

Adems, expresa que el proceso de acreditacin tendr como prioridad, garantizar la calidad

de los planes, las carreras y los programas que ofrecen las instituciones y se caracterizar por

ser un generador de mejoramiento voluntario, participativo, abierto, endgeno, confiable y

peridico en el marco del diseo de un modelo que deber atender los estndares

internacionales utilizados en estos procesos (Asamblea Legislativa de Costa Rica, Decreto

Legislativo 8256).

Segn el SINAES, el Estado cumple dos papeles diferentes con la acreditacin: primero,

informar a la sociedad; segundo, reconocer pblicamente el logro de determinados niveles

de calidad. A la vez, la acreditacin implica mejorar la calidad de los programas y carreras

que ofrecen las instituciones universitarias, y garantizar pblicamente la calidad de estos.

De esta manera, la acreditacin tiene como propsito identificar, con carcter oficial, las

carreras y los programas universitarios que cumplan los requisitos de calidad que establezca

el SINAES, para mejorar con ello la calidad de los programas y las carreras ofrecidas por las

instituciones universitarias pblicas y privadas, y garantizar pblicamente su calidad.



15

3.3 La calidad paga? Dentro de la lgica neoliberal de organizacin de la educacin superior, las consecuencias

de la acreditacin de programas y carreras parecen obedecer a diferentes motivos, segn se

trate de universidades pblicas o privadas.

Para algunas de las instituciones privadas de educacin superior, la acreditacin de sus

carreras sirve como negocio y factor de mercadeo, ya que la certificacin pblica de que se

cuenta con una carrera acreditada, atrae a las personas desde el punto de vista de la oferta

y la demanda de opciones de educacin superior. Por otro lado, y teniendo en cuenta el

estilo de organizacin y la capacidad de absorcin de matrcula de las instituciones de

educacin superior estatales, pareciera ser que a las universidades privadas no les interesa

competir con las universidades estatales, en cuanto a la captacin de estudiantes, dado que

estas ltimas tienen una capacidad de absorcin de matrcula que ya alcanz los lmites

mximos en relacin con su infraestructura, y con los recursos econmicos de que

disponen.

Es as cmo la acreditacin, vista como factor de mercadeo por las universidades privadas,

se presenta como un elemento que favorece la competencia entre ellas, de manera tal que la

acreditacin de la calidad es una inversin que les permite consolidarse en el mercado.

Para las universidades estatales, la acreditacin de carreras se enmarca dentro de la lgica

de rendicin de cuentas propia del estilo de desarrollo, donde el Estado privilegia sus

funciones supervisoras-controladoras por sobre las ejecutoras. Dentro de este razonamiento,

el Estado les asigna fondos pblicos a las universidades estatales y luego cuestiona y

espera informes acerca de cmo se estn utilizando. Este control no se aplica a las

universidades privadas.

En trminos generales, la acreditacin significa para las universidades estatales, un

acercamiento al proceso de rendir cuentas ante la sociedad sobre la utilizacin de los

recursos pblicos. Por otro lado, para las instituciones privadas de enseanza superior, la

acreditacin aparece como un mecanismo de legitimacin con efectos concretos en el

reconocimiento social, al formar parte del mismo sistema de control que las universidades

estatales y con sus mismos estndares.



16

4. Comentarios finales La reconfiguracin del sistema de educacin superior costarricense, se plantea en el

contexto de un estilo de desarrollo neoliberal, en donde la acreditacin de carreras

universitarias, y la consecuente definicin de la poltica pblica, tendiente al establecimiento

del rgano acreditador nacional, el SINAES, responde directamente a la lgica de un Estado

que delega, en otras instancias, su papel ejecutor e interventor directo, mientras que las

fuerzas del mercado se fortalecen y definen aspectos importantes de la organizacin y oferta

del sistema de educacin superior.

En efecto, las caractersticas del modelo neoliberal exacerbaron, en alguna medida, ciertas

tendencias que se venan observando desde los aos ochenta, tales como el incremento de

la oferta de educacin superior y los problemas para conseguir el financiamiento estatal para

las universidades. Esto, aunado a las demandas sociales de rendicin de cuentas y de

peticin de que las universidades demostraran la calidad de sus productos y sus procesos,

hace que se visualice a la acreditacin, como una respuesta de las autoridades de la

educacin superior a la nueva configuracin del sistema de educacin superior, acorde con

las tendencias nacionales e internacionales.

Vista la acreditacin como verificacin pblica de la calidad de las carreras y de los planes y

programas ofrecidos por las instituciones de educacin superior, sta se perfila como un

instrumento que permite diferenciar la oferta educativa del pas y obtener tambin

retribuciones diferentes, por parte de la sociedad que demanda sus servicios.

Desde los orgenes mismos de la creacin del SINAES, en donde las universidades estatales

desempearon un rol decisivo, la acreditacin de carreras implica recurrir a criterios de

calidad frente a la necesidad de rendir cuentas ante la sociedad. Con esto se pretenda

deslegitimar, de alguna manera, a muchas de las universidades privadas recientemente

fundadas, aduciendo que estas no atendan a criterios de calidad en su gestin ni en su

oferta educativa.

Sin embargo, vista como un factor de mercadeo, la acreditacin de carreras y programas de

educacin superior, posibilita que algunas de las instituciones de enseanza superior, cuya

finalidad es lucrar mediante la oferta y demanda de formacin universitaria, puedan recurrir



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al mismo sistema ideado y aplicado a las universidades estatales para acreditarse con los

mismos criterios y estndares que estas utilizan.

Finalmente, es importante dejar claro que las discusiones en torno a la calidad de la oferta

educativa universitaria, implica realizar antes un proceso de reflexin y definicin de lo que

debe ser una Universidad, lo que sta debe ofrecer a la sociedad y cmo debe contribuir a la

construccin de sociedades ms democrticas y equitativas. Sin esta reflexin previa,

quedaran varias interrogantes: qu se est acreditando y la calidad de qu? Se est

acreditando lo que siempre se ha venido haciendo? Se estn acreditando programas y

carreras pertinentes, de acuerdo con las necesidades del pas? Y, si esto es as, a cules

necesidades concretas se trata y a las necesidades de qu pas o de qu parte del pas?

Se estn acreditando alternativas de educacin superior realmente relevantes y acordes

con el concepto de desarrollo que favorezca una reinsercin favorable de nuestro pas en el

sistema mundial? Se estn acreditando carreras que impulsan el equilibrio ecolgico, por

ejemplo?

Previo al sello de acreditacin que otorga la agencia externa a la universidad, se desarrolla

un proceso de autoevaluacin, al final del cual las carreras se comprometen a revisar a

fondo, los aspectos en los cuales la evaluacin encontr deficiencias. El plan de

mejoramiento propuesto se asume como un compromiso. Ah reside gran parte del reto de la

acreditacin para universidades, tanto estatales como privadas: se basan esos planes

nicamente en mejoras de infraestructura, equipos, gestin, o por el contrario, suponen

replanteamientos que van ms all de una visin reduccionista y esttica de la acreditacin?

El plan de mejoramiento debera ser la esencia de la acreditacin y la posterior

reacreditacin la prueba de fuego de las carreras, a las cuales se les ha certificado la

calidad.

Vale entonces preguntarse, si estn dispuestas, tanto las carreras de las instituciones

privadas de educacin superior como estatales, a continuar el proceso y buscar la re-

acreditacin. Van a seguir apostando a la calidad de sus carreras? Continuar en las

universidades privadas, el esfuerzo y la inversin en la calidad como manera de legitimarse,

distinguirse y ganar mercado? Cul ser el papel de la agencia acreditadora nacional en la

reacreditacin de las carreras? Qu harn las autoridades universitarias en la definicin del

concepto de calidad y pertinencia subyacente en los procesos de reacreditacin?



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