Año 1920

Gracias a Dios y a la bondad generosa de nuestras dignas bienhechoras, la señora Felicia Dorrego del Solar, y la señora Inés Dorrego de Unzué, las obras del Asilo San Luis y en particular las niñas internas, no sufren de las miserias generales ocasionadas, por la crisis de la cual, todo el mundo padece, hace ya cinco años.

Cuán grande es nuestro agradecimiento hacia ellas.

En Enero la buena y siempre generosa señora Inés Dorrego de Unzué, mandó un lindo juego de vestíbulo, para la entrada.

El 10 de Marzo, 29 varones y 30 niñas de afuera, hicieron la primera comunión.

A la tarde, al darles el recuerdo de la primera comunión, la señora de Unzué, les recomendó de mostrarse siempre hombres de fe, poniendo el práctica la enseñanza religiosa que habían recibido, los niños prometieron cumplir, y agradecieron la liberalidad de la señora de Unzué; cada año favorece a los niños de la primera comunión con todo lo necesario.

En la fiesta de Pentecostés, 23 de Mayo por fin se abrió al culto la iglesia de Victoria, era un día esperado por todos, y en particular por los corazones piadosos y deseosos del reino de Dios en las almas.

Una comisión de señoras y señores pudientes se había formado, a fin de hacer edificar una habitación para el sacerdote que debía ejercer el santo misterio en Victoria.

Monseñor Dr. Agustín Piaggio, Vicario General de la Armada Argentina, en representación del Señor Obispo de La Plata Dr. Don Juan N. Cerrero predicó y bendijo la iglesia y la casa parroquial.

Con algunas palabras llenas de emoción, el señor cura de San Fernando, el padre Mazimino Pérez agradeció a las buenas personas que habían contribuído en procurar a nuestro señor un templo digno de El; dió las gracias también en nombre de los católicos de Victoria.

En ésta ceremonia tan importante faltaba, la buena e inolvidable señora Enriqueta Lezica de Dorrego.¡ Como hubiera gozado!

Se interesaba por la gente de Victoria, era su pueblo, para él buscaba toda clase de bienes.

Su liberalidad para la iglesia de Victoria fue grandísima, la mayor parte de los fondos recolectados provienen de su valiosa cooperación.

Contribuyó a la creación del nuevo templo con la cantidad de sesenta mil pesos, moneda nacional.

Las niñas del Asilo San Luis asistieron a la bendición de la nueva iglesia.

Las niñas del Asilo San Luis se forman en todos los trabajos que pueden serles útiles en la vida, se les enseña los quehaceres domésticos, y también se les da una enseñanza un poco más adelantada, a las que sus aptitudes intelectuales les ayuda.

Dos niñas internas dieron exámen de 6° grado, fue la primera vez que un delegado del H. C. E asistió a los exámenes del Asilo San Luis.

El señor presidente Eduardo Vega delegó al señor Cabrera Galindez secretario. Este quedó complacidísimo con los resultados obtenidos, así lo manifestó el presidente del H. C. E en una nota de felicitación remitida y archivada en éste Asilo.

El 12 de Diciembre se celebró la primera comunión de las niñas que concurren a las clases; las niñas de afuera asisten ahora al catecismo que se da en la Iglesia de Victoria, 29 niñas tuvieron la dicha de acercarse por la primera vez a la Santa Mesa.

La fiesta de Navidad se celebró con solemnidad y la fiesta de los premios, con alegría y agradecimiento.