Ante la arremetida mediática: La unidad del chavismo

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por Raúl Cazal Grecia: la crisis de un sistema Deuda griega, solución europea 27 de febrero de 1953. La República Federal Alemana colapsa por las deudas y amenaza con arrastrar a todos los países euro- peos en la tormenta. Preocupadas por su propia salvación, sus acreedores –como Grecia–- toman nota de un fenómeno que no sorprende a los liberales: la política de “devaluación interna”, es decir la reducción de los salarios, no asegura el reembolsamiento de las sumas adeudadas, al contrario. Veintiún países, reunidos en Londres durante una cumbre excepcional, deciden reevaluar sus exigencias unidas a las capa- cidades reales que tiene su contraparte para hacer frente a sus obligaciones. Ellos amputan la deuda nominal acumulada de Berlín, de 60% y acuerdan darle a Alemania una moratoria de cinco años (1953-1958), así como un plazo de treinta años para pagar. También instauran una “cláusula de desarrollo” autori- zando al país a no consagrar al servicio de la deuda más de un veinteava parte de sus ingresos por exportaciones. Europa, así, se manifiesta contra el Tratado de Versalles (1919), y sienta las bases del desarrollo de Alemania occidental después de la guerra. Es esto precisamente lo que la Coalición de la izquierda radical griega (Syriza) propone hoy día: proceder a revertir todos los pe- queños tratados de Versalles que impusieron la canciller alemana Angela Merkel y su ministro de Finanzas Wolfgang Schäuble a los países endeudados, e inspirarnos en uno de los más grandes momentos de clarividencia que conoció la Europa de la posguerra. Los diferentes programas de “rescate” de los países de Europa del Sur fracasaron, dejando un sinnúmero de “pozos sin fondo”, que se intentan tapar invitando a los contribuyentes a hacerlo con sus aportes. Jamás fue tan urgente llegar a una solución global, colectiva y definitiva para enfrentar el problema de la deuda. Y no se comprendería el objetivo de esto, si éste fuese tapado para asegurar la reelección de la canciller alemana. En estas condiciones, la idea adelantada por Syriza de una conferencia europea sobre la deuda, con base en el modelo de la Conferencia de Londres de 1953 (citada más arriba), repre- senta, según nuestro punto de vista, la única solución realista y beneficiosa para todos: una respuesta global a la crisis del crédito y al constante fracaso de las políticas llevadas a cabo en Europa. Esto es lo que pedimos para Grecia: •Una reducción significativa del valor nominal de la deuda pública acumulada. •Una moratoria sobre el servicio de la deuda, con el fin de que las sumas conservadas sean destinadas a la recuperación de la economía. •La instauración de una “cláusula de desarrollo”, con el fin de que el reembolsamiento de la deuda no afecte la recuperación económica. por Alexis Tsipras* (CONTINÚA EN LA P. 8) ECONOMÍA PETROLERA: LOS CONVENIOS DE SERVICIOS OPERATIVOS VENEZOLANOS CONFLICTO EN EL NORTE DE ÁFRICA ¿Qué hace Francia en Malí? P. 14-15 Año V. Número 40 Ante la arremetida mediática La unidad del chavismo P. 3-7 L a orquestación de medios hege- mónicos internacionales con los nacionales de Venezuela para ase- sinar mediáticamente al presidente Hugo Chávez ha llegado al paroxismo. Cien años después, El País de España emula al sensacionalista estadounidense William Randolph Hearst con aquella célebre fra- se: “Usted ponga las ilustraciones, que yo pondré la guerra”, y entregó una foto falsa a sus lectores. En esa competencia morbosa por ser los primeros en mostrar la falsas informa- ciones sobre la salud de Chávez, mientras éste se encuentra en tratamiento posto- peratorio en La Habana, Cuba, y ahora en Caracas, en el Hospital Militar, no ha habido ningún tipo de compasión con el paciente y, en especial, con sus familiares. Para estos medios no son suficientes las informaciones dadas por aquellos que visi- tan a Chávez, ni los comunicados oficiales de los ministros. El diario El País, en el caso de la foto falsa, consideró un error porque no pudo “verificar de forma independiente las cir- cunstancias en que fue tomada la imagen”. Se justifica en el texto como si ellos fue- ran “independientes”, cuando realmente forman parte de una cruzada de medios de comunicación que desinforman sobre los procesos soberanos que desde hace una década se está desarrollando en La- tinoamérica. Pero esto no queda allí, continúa: “Las particularidades políticas de Cuba y las restricciones informativas que impone el régimen lo han hecho imposible”, puntua- liza El País, para quitarse cualquier culpa. A este “prestigioso” diario nada debe achacársele, para eso está Cuba, la pie- drita en el zapato de Estados Unidos y sus aliados. Su director ha dado la orden de impresión, mientras se encontraba en una reunión en Davos (Suiza) “asistiendo al Foro Económico Mundial en el que se COLOMBIA: MESA DE DIÁLOGO EN LA HABANA “Paz con justicia social” reúnen las élites sociales y económicas del planeta”, palabras textuales del diario. Sin duda, una “buena” noticia para tanta gente reunida que controla las finanzas globales y que no ha podido con la crisis mundial que han producido. El asunto no es la foto falsa, ni la ética, que sin duda está en cuestiona- miento. Es la guerra despiadada que han desatado contra Venezuela y su pueblo, específicamente para desmo- ralizar a este último, que ha decidido recientemente por intermedio de dos elecciones; primero, la presidencial, en donde Chávez gana por 12 puntos de diferencia, y segundo, la de gobernado- res, en la cual el chavismo obtiene 20 de 23 gobernaciones, y sale victorioso en cuatro bastiones de la oposición que pa- recían irreductibles: las fronterizas Zulia y Táchira, la insular Nueva Esparta y la centro-costera Carabobo. La tesis de esta arremetida mediática es que si Chávez está fuera de la escena electoral, el chavismo pierde en Vene- zuela y quienes lo apoyan en el exterior caerán como naipes. Pero esto no fue lo que sucedió el 16 de diciembre con las gobernaciones venezolanas, así como tampoco en Ecuador el 17 de febrero, donde el presidente Rafael Correa logra en primera vuelta vencer con 57% de los votos, alejándose de su contrincante más cercano con una brecha de 35 puntos. Todo esto sucedió mientras Chávez se mantenía en absoluto reposo, debido a las complicaciones que sobrevinieron a la operación. El pueblo chavista no ha perdido la fe en la recuperación del Presidente que ha enfrentado a la enfermedad que padece con dignidad. Sin duda, este es el deseo de todos quienes creemos en los ideales políticos que él ha profesado y practi- cado: el socialismo. Su batalla diaria es una victoria. Es por ello que el pueblo se mantiene unido y jura por él el 10 de enero de este año. Por el socialismo marcha el 23 de enero, para reafirmar la democracia participativa y protagónica. Por la rebelión del 4 de febrero y porque las políticas neoliberales no retornen al continente, vuelve a marchar el pueblo, también el 27 de febrero. La cruzada de la derecha nacional e internacional, en alianza con los medios hegemónicos, buscará la manera de des- estabilizar y alterar la paz con que se vive en el país. Sin duda, le va a costar lo- grar sus objetivos en esta hora en que la unidad ha encarnado en el pueblo como una de sus principales herramientas para mantener y profundizar esta democracia participativa y protagónica. l VENEZUELA Caracas, febrero de 2013 • 20 Bs

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Raúl Cazal / febrero 2013

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por Raúl Cazal

Grecia: la crisis de un sistema

Deuda griega, solución europea27 de febrero de 1953. La República Federal Alemana colapsa por las deudas y amenaza con arrastrar a todos los países euro-peos en la tormenta. Preocupadas por su propia salvación, sus acreedores –como Grecia–- toman nota de un fenómeno que no sorprende a los liberales: la política de “devaluación interna”, es decir la reducción de los salarios, no asegura el reembolsamiento de las sumas adeudadas, al contrario.

Veintiún países, reunidos en Londres durante una cumbre excepcional, deciden reevaluar sus exigencias unidas a las capa-cidades reales que tiene su contraparte para hacer frente a sus obligaciones. Ellos amputan la deuda nominal acumulada de Berlín, de 60% y acuerdan darle a Alemania una moratoria de cinco años (1953-1958), así como un plazo de treinta años para pagar. También instauran una “cláusula de desarrollo” autori-zando al país a no consagrar al servicio de la deuda más de un veinteava parte de sus ingresos por exportaciones. Europa, así, se manifiesta contra el Tratado de Versalles (1919), y sienta las bases del desarrollo de Alemania occidental después de la guerra.

Es esto precisamente lo que la Coalición de la izquierda radical griega (Syriza) propone hoy día: proceder a revertir todos los pe-queños tratados de Versalles que impusieron la canciller alemana Angela Merkel y su ministro de Finanzas Wolfgang Schäuble a los países endeudados, e inspirarnos en uno de los más grandes momentos de clarividencia que conoció la Europa de la posguerra.

Los diferentes programas de “rescate” de los países de Europa del Sur fracasaron, dejando un sinnúmero de “pozos sin fondo”, que se intentan tapar invitando a los contribuyentes a hacerlo con sus aportes. Jamás fue tan urgente llegar a una solución global, colectiva y definitiva para enfrentar el problema de la deuda. Y no se comprendería el objetivo de esto, si éste fuese tapado para asegurar la reelección de la canciller alemana.

En estas condiciones, la idea adelantada por Syriza de una conferencia europea sobre la deuda, con base en el modelo de la Conferencia de Londres de 1953 (citada más arriba), repre-senta, según nuestro punto de vista, la única solución realista y beneficiosa para todos: una respuesta global a la crisis del crédito y al constante fracaso de las políticas llevadas a cabo en Europa.

Esto es lo que pedimos para Grecia:•Una reducción significativa del valor nominal de la deuda

pública acumulada.•Una moratoria sobre el servicio de la deuda, con el fin de

que las sumas conservadas sean destinadas a la recuperación de la economía.

•La instauración de una “cláusula de desarrollo”, con el fin de que el reembolsamiento de la deuda no afecte la recuperación económica.

por Alexis Tsipras*

(continúa en la p. 8)

ECONOMÍA PETROLERA: LOS CONVENIOS DE SERVICIOS OPERATIVOS VENEZOLANOS

CONFLICTO EN EL NORTE DE ÁFRICA

¿Qué hace Francia en Malí?P. 14-15

A ñ o V. N ú m e r o 4 0

Ante la arremetida mediática

La unidad del chavismo

P. 3-7

La orquestación de medios hege-mónicos internacionales con los nacionales de Venezuela para ase-

sinar mediáticamente al presidente Hugo Chávez ha llegado al paroxismo. Cien años después, El País de España emula al sensacionalista estadounidense William Randolph Hearst con aquella célebre fra-se: “Usted ponga las ilustraciones, que yo pondré la guerra”, y entregó una foto falsa a sus lectores.

En esa competencia morbosa por ser los primeros en mostrar la falsas informa-ciones sobre la salud de Chávez, mientras éste se encuentra en tratamiento posto-peratorio en La Habana, Cuba, y ahora en Caracas, en el Hospital Militar, no ha habido ningún tipo de compasión con el paciente y, en especial, con sus familiares. Para estos medios no son suficientes las informaciones dadas por aquellos que visi-tan a Chávez, ni los comunicados oficiales de los ministros.

El diario El País, en el caso de la foto falsa, consideró un error porque no pudo “verificar de forma independiente las cir-cunstancias en que fue tomada la imagen”. Se justifica en el texto como si ellos fue-ran “independientes”, cuando realmente forman parte de una cruzada de medios de comunicación que desinforman sobre los procesos soberanos que desde hace una década se está desarrollando en La-tinoamérica.

Pero esto no queda allí, continúa: “Las particularidades políticas de Cuba y las restricciones informativas que impone el régimen lo han hecho imposible”, puntua-liza El País, para quitarse cualquier culpa. A este “prestigioso” diario nada debe achacársele, para eso está Cuba, la pie-drita en el zapato de Estados Unidos y sus aliados. Su director ha dado la orden de impresión, mientras se encontraba en una reunión en Davos (Suiza) “asistiendo al Foro Económico Mundial en el que se

COLOMBIA: MESA DE DIÁLOGO EN LA HABANA

“Paz con justicia social”

reúnen las élites sociales y económicas del planeta”, palabras textuales del diario. Sin duda, una “buena” noticia para tanta gente reunida que controla las finanzas globales y que no ha podido con la crisis mundial que han producido.

El asunto no es la foto falsa, ni la ética, que sin duda está en cuestiona-miento. Es la guerra despiadada que han desatado contra Venezuela y su pueblo, específicamente para desmo-ralizar a este último, que ha decidido recientemente por intermedio de dos elecciones; primero, la presidencial, en donde Chávez gana por 12 puntos de diferencia, y segundo, la de gobernado-res, en la cual el chavismo obtiene 20 de 23 gobernaciones, y sale victorioso en

cuatro bastiones de la oposición que pa-recían irreductibles: las fronterizas Zulia y Táchira, la insular Nueva Esparta y la centro-costera Carabobo.

La tesis de esta arremetida mediática es que si Chávez está fuera de la escena electoral, el chavismo pierde en Vene-zuela y quienes lo apoyan en el exterior caerán como naipes. Pero esto no fue lo que sucedió el 16 de diciembre con las gobernaciones venezolanas, así como tampoco en Ecuador el 17 de febrero, donde el presidente Rafael Correa logra en primera vuelta vencer con 57% de los votos, alejándose de su contrincante más cercano con una brecha de 35 puntos. Todo esto sucedió mientras Chávez se mantenía en absoluto reposo, debido a las complicaciones que sobrevinieron a la operación.

El pueblo chavista no ha perdido la fe en la recuperación del Presidente que ha enfrentado a la enfermedad que padece con dignidad. Sin duda, este es el deseo de todos quienes creemos en los ideales políticos que él ha profesado y practi-cado: el socialismo. Su batalla diaria es una victoria. Es por ello que el pueblo se mantiene unido y jura por él el 10 de enero de este año. Por el socialismo marcha el 23 de enero, para reafirmar la democracia participativa y protagónica. Por la rebelión del 4 de febrero y porque las políticas neoliberales no retornen al continente, vuelve a marchar el pueblo, también el 27 de febrero.

La cruzada de la derecha nacional e internacional, en alianza con los medios hegemónicos, buscará la manera de des-estabilizar y alterar la paz con que se vive en el país. Sin duda, le va a costar lo-grar sus objetivos en esta hora en que la unidad ha encarnado en el pueblo como una de sus principales herramientas para mantener y profundizar esta democracia participativa y protagónica. l

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