Art 08 el año de los tiros hoy

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1 1888 - 2014. EL AÑO DE LOS TIROS HOY. fieldworkRIOTINTO [email protected] El 4 de febrero de 1988 yo estaba en 8º de E.G.B., y durante las semanas prevías nos habían estado contando algunas historias relacionadas con diversos hechos sucedidos en el antiguo pueblo de Rio-Tinto que habían dejado una marca imborrable en sus gentes. “Los humos”, “Las Teleras”, “el Año de los Tiros” fueron conceptos que aprendí aquel curso, pero una duda quedó: si aquello quedó grabado a fuego en sus gentes ¿Por qué nunca escuché hablar de ello? La revisión que hemos realizado durante esta semana me ha llevado a la misma pregunta ¿Qué es del Año de los Tiros hoy día?, y llego a la conclusión personal de que se ha avanzado mucho. ¿Qué encontramos hoy del 4 de febrero en nuestras calles? ¿En nuestra cultura? Vamos a lo más fácil, a lo tangible. Nuestras calles se encuentran salpicadas de referencias que nos llevan de uno u otro modo a aquella fecha: el monumento conmemorativo al centenario en el pueblo de Minas de Riotinto, para el cual algunas voces locales piden un lugar más relevante acorde a la importancia histórica de los hechos, o las calles Maximiliano Tornet y 4 de febrero en este mismo municipio, aunque esta última se confunde un poco. El pasado año en Nerva, con motivo del 125 aniversario, se rotuló con la fecha del 4 de febrero a la calle que une el instituto con la salida hacia la estación de tren, lugar por el que pasaron en 1888 los manifestantes que procedían de Nerva y el Ventoso. Y en Zalamea la Real nos encontramos con un monumento ya centenario, la plaza Talero, en recuerdo a uno de los personajes que trabajó por darle voz a las reivindicaciones más allá de la comarca minera y que llega a nuestros días como muestra clave de que, precisamente era Zalamea el lugar donde menos fuerza tuvo la Compañía para obligar a olvidar los hechos. Cómo vemos, al menos en nuestro entorno más cercano encontramos referencias que evocan los sucesos. Ahora hay que lograr transmitirlo a las nuevas generaciones para que se apropien de ello y lo reconozcan como parte de su propia historia. Ese trabajo, al menos desde el centenario, también se realiza, y raro es el colegio de la zona que no realiza alguna actividad al respecto cuando se aproxima la fecha. Además está la difusión cultural porque, si hasta 1988 las referencias eran escasas, desde entonces a nuestros días muchos son los trabajos que se han inspirado en “El Año de los Tiros”: las recientes publicaciones de Manuel Pérez Mayorga, “Riotinto, 4 de febrero de 1888 (Año de tiros, año de humos, año de muertes)”, obra teatralizada; la reedición de la novela 1888, El Año de los Tiros, Una historia de Cine” de Rafael Moreno; el documental “El Latido de la Tierra” que tanta difusión alcanzó; trabajos recientes como “Yo también estuve en Huelva. Al otro lado de la mina” realizado por estudiantes onubenses. Pero sin duda, el trabajo que más ha contribuido a dar a conocer el Año de los Tiros ha sido 4 de febrero de 1888: “El Año de los Tiros” (VIII)

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1888. "El Año de los Tiros". Qué es de esta historia hoy, cómo está presente en nuestras vidas y qué avances muestran los trabajos de investigación.

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1888 - 2014. EL AÑO DE LOS TIROS HOY.

fieldworkRIOTINTO

[email protected]

El 4 de febrero de 1988 yo estaba en 8º de E.G.B., y durante las semanas prevías nos habían estado contando algunas historias relacionadas con diversos hechos sucedidos en el antiguo pueblo de Rio-Tinto que habían dejado una marca imborrable en sus gentes.

“Los humos”, “Las Teleras”, “el Año de los Tiros” fueron conceptos que aprendí aquel curso, pero una duda quedó: si aquello quedó grabado a fuego en sus gentes ¿Por qué nunca escuché hablar de ello?

La revisión que hemos realizado durante esta semana me ha llevado a la misma pregunta ¿Qué es del Año de los Tiros hoy día?, y llego a la conclusión personal de que se ha avanzado mucho.

¿Qué encontramos hoy del 4 de febrero en nuestras calles? ¿En nuestra cultura? Vamos a lo más fácil, a lo tangible. Nuestras calles se encuentran salpicadas de referencias que nos llevan de uno u otro modo a aquella fecha: el monumento conmemorativo al centenario en el pueblo de Minas de Riotinto, para el cual algunas voces locales piden un lugar más relevante acorde a la importancia histórica de los hechos, o las calles Maximiliano Tornet y 4 de febrero en este mismo municipio, aunque esta última se confunde un poco. El pasado año en Nerva, con motivo del 125 aniversario, se rotuló con la fecha del 4 de febrero a la calle que une el instituto con la salida hacia la estación de tren, lugar por el que pasaron en 1888 los manifestantes que procedían de Nerva y el Ventoso. Y en Zalamea la Real nos encontramos con un monumento ya centenario, la plaza Talero, en recuerdo a uno de los personajes que trabajó por darle voz a las reivindicaciones más allá de la comarca minera y que llega a nuestros días como muestra clave de que, precisamente era Zalamea el lugar donde menos fuerza tuvo la Compañía para obligar a olvidar los hechos.

Cómo vemos, al menos en nuestro entorno más cercano encontramos referencias que evocan los sucesos. Ahora hay que lograr transmitirlo a las nuevas generaciones para que se apropien de ello y lo reconozcan como parte de su propia historia. Ese trabajo, al menos desde el centenario, también se realiza, y raro es el colegio de la zona que no realiza alguna actividad al respecto cuando se aproxima la fecha. Además está la difusión cultural porque, si hasta 1988 las referencias eran escasas, desde entonces a nuestros días muchos son los trabajos que se han inspirado en “El Año de los Tiros”: las recientes publicaciones de Manuel Pérez Mayorga, “Riotinto, 4 de febrero de 1888 (Año de tiros, año de humos, año de muertes)”, obra teatralizada; la reedición de la novela “1888, El Año de los Tiros, Una historia de Cine” de Rafael Moreno; el documental “El Latido de la Tierra” que tanta difusión alcanzó; trabajos recientes como “Yo también estuve en Huelva. Al otro lado de la mina” realizado por estudiantes onubenses. Pero sin duda, el trabajo que más ha contribuido a dar a conocer el Año de los Tiros ha sido 4

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la obra de Juan Cobos Wilkins “El Corazón de la Tierra” y la película homónima basada en ella dirigida por el también onubense A. Cuadri (con alguna licencia histórica), la cual además ha tenido como consecuencia que se incluya la Cuenca Minera de Riotinto dentro de la ruta Andalucía de Cine.

Ahora queda hablar de la investigación, el adentrarnos en el fondo de modo riguroso con un fundamento científico buscando resolver las dudas que encierra esta historia. En este aspecto también se ha avanzado mucho, tan solo hay que repasar la bibliografía a la que hemos recurrido para la preparación de este seguimiento monográfico que nos ocupa, donde podemos observar que ha sido en los últimos años cuando más se ha trabajado en este aspecto con investigadores como Mª. Dolores Ferrero o Juan M. Pérez López, que se han imbuido en el estudio aprovechando la documentación existente. Pero nos gustaría llamar la atención a un hecho singular pero no menos importante: la contribución en estos avances de personas sin la formación reglada que se presupone, pero que hacen un trabajo escrupuloso buscando siempre el asesoramiento de los expertos, personas a las que su vínculo sentimental con su tierra los lleva por estos derroteros, como Alfredo Moreno Bolaños o Pedro Real Valdés que, con su trabajo, han ayudado y mucho a resolver algunas de las lagunas existentes.

Y por suerte hay más, un episodio singular que muestra perfectamente lo que comentamos: la resolución del enigma de Maximiliano Tornet. Un personaje clave del que nadie supo explicar que fue de él tras los tiros en la plaza de la Constitución de Rio-Tinto, y hoy, más de cien años después, sabemos que no murió aquellos días. Sabemos que murió en Panamá y, además, se ha continuado su árbol genealógico hasta hoy día. Detrás de este logro no hay un estudio académico, un procedimiento articulado, todo ello ha sido posible gracias a la curiosidad de algunos por la historia de su pueblo, por ellos y por lo que nos ha acercado Internet, ya que fue en sus foros, sus grupos, donde se encontró ese cabo suelto, y uno de sus descendiente se puso en contacto con ellos. “jepane”*, “cerro-salomón”*, “mayorre”*, etc… tiraron de aquel cabo y abrieron una ventana por la que ahora le toca a los investigadores mirar y poner orden.

¿Qué es del Año de los Tiros hoy día? Llego a la conclusión personal de que se ha avanzado mucho, pero también queda mucho por hacer, mirar desde el ángulo de los que lo sufrieron en su vida diaria, especialmente después de aquel 4 de febrero. Seguimos en ello.

* Personas con nombre y apellido, aunque conocidos por nosotros, hemos creído oportuno que sean ellos los que hablen por propia voz si así lo deciden.

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