ASOCIACIÓN MEXVCANA DE GEÓLOGOS PETROLEROS · 2019. 10. 15. · greso de la República de...
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A S O C I A C I Ó N MEXVCANA DE
GEÓLOGOS PETROLEROS
FUNaONARIOS D E L C O M I T É E J E C U T I V O
cuyo ejercicio te rmina en Dic iembre de 1965
Ing. R A Ú L P É R E Z F E R N A N D E Z Presidente
Ing . L U I S B E N A V I D E S G Vice-Presidente
Ing . M O I S É S O L I V A S G Secretario Tesorero
Dr. M A N U E L M A L D O N A D O - K O E R D E L L Editor
Ing . C A R L O S C A S T I L L O T E J E R O . . Presidente en Ejercicio Anterior
B O L E T Í N D E LA A S O C I A C I Ó N
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Dr. M A N U E L M A L D O N A D O - K O E R D E L L , Edi tor
Ing . F E R N A N D O L O Z A N O R., Edi tor Asociado
Apar t ado Postal 1884
Tacuba No. 5
M É X I C O 1. D. F .
GEOLOGÍA PETROLERA Y EXPLORACIÓN EN NICARAGUA*
H. W A Y N E HOYLMAN* * y
GEORGE V . C H I L I N G A R * * *
INTRODUCCIÓN
Eln Julio de 1935 , el Gobierno do Nicaragua redactó y aprobó un CONTRATO-CONCESIÓN para la exploración y explotación de hidrocarburos y sus derivados en la República de Nicaragua. La concesión cubría, aproximadamente, once millones de acres: tres millones en el área costera del Pacífico y aproximadamente ocho millones en el área oriental o cosiera del Caribe. El contrato-concesión fué renovado por decreto del Ejecutivo y de la Cámara de Diputados en Mayo de 1939 . En 1943 el contrato se prorrogó por decreto del Ejecutivo y se amplió, además, por un período de tres años y seis meses hasta Junio de 1955.
El 3 de Diciembre de 1958 el Congreso de la República de Nicaragua votó el Decreto Número 372 , que corresponde a una nueva Ley sobre la exploración y explotación del petróleo. En
virtud de dicha Ley, la Nación, a I r a -vés del Gobierno, es la dueña de todos los yacimientos y manifestaciones de petróleo que se encuentren dentro del territorio de la República de Nicaragua.
Para el otorgamiento de concesiones para la exploración y explotaciones petrolíferas, el territorio nacional se ha dividido en cuatro zonas principales:
A) Zona del Pacífico, B ) Zona Central o Interior, C) Zona del Atlántico y D) Áreas cosieras continentales de
ambos océanos.
Como se muestra en la bibliografía, durante los últimos sesenta años o más varios geólogos con experiencia internacional han publicado los resultados de sus investigaciones hechas en el área costera del Pacífico en Nicaragua. Mu-
Traducido del inglés al español por Jenaro González Reyna, Gerencia de Exploración, Petróleos Mexicanos, México, D. F. Jefe de la firma consultora "Asociados Geomarinos", IAJS Angeles, California, E. U. A. Profesor del Departamento de Ingeniería Petrolera, Universidad del Sur de California, Jios Angeles, Calif., E. U. A.
Boletín de la Asociación
chos de esos trabajos tratan de volcanismo y sobre minas y problemas de ingeniería geológica en relación con proyectos para la construcción de canales.
En los años de 1930-31 se iniciaron los primeros trabajos exploratorios en busca de aceite y gas; tales trabajos fueron emprendidos por Miguel d'Es-coto en su concesión para perforar. Las actividades consistieron en una perforación de casi 160 metros. El pozo se localizó en el flanco ocidental del Anticlinal de San Cayetano, cerca de un escurrimiento en la porción norocciden-tal del área de la costa del Pacífico. Amparándose con los derechos correspondientes a la concesión, capital extranjero procedente de los Estados Unidos también perforó un pozo de cerca de 1,250 metros, localizado en el flanco occidental de la misma estructura, a unos ocho kilómetros al suroeste del pozo original. Ninguno de los dos pozos encontró aceite o gas, en cantidades comerciales.
Aproximadamente en 1931 , una compañía de la región central de los Es-lados Unidos perforó un pozo que alcanzó más o menos los 1.250 metros de profundidad. Se localizó como a unos 1.600 metros deK manadero o escurrimiento de aceite de San Cayetano, no lejos de la costa occidental, entre Managua y León. Ni este pozo, ni una perforación poco profunda de 150 metros hecha por la concesión petro
lera d'Escoto. en el año de 1930 , llegaron a descubrir aceite en cantidades comerciales.
El segundo esfuerzo principió en el año df» 1940, cuando se unieron dos compañías petroleras para efectuar un programa exploratorio dentro de los once millones (11 .000 ,000) de acres correspondientes a la concesión d'Escoto. Una de las empresas era una compañía de primera categoría y la otra era empresa independiente grande. El primer grupo o compañía se encargó de la ejecución de las operaciones.
Los trabajos iniciales consistieron en la exploración geológica superficial que se comenzó en la costa occidental. Aproximadamente una media docena de geólogos se encargaron de hacer el estudio de los afloramientos, siguiendo más o menos en los trabajos la costa occidental y las laderas de los flancos occidentales de las montañas. Como consecuencia, encontraron algunas condiciones estructurales, así como uno o dos escurrimientos de aceite; los encargados de las investigaciones de campo no se mostraron optimistas, ya que la mayoría de los afloramientos contenían cantidades considerables de ceniza volcánica, llegando a la conclusión de que limitaba las condiciones de origen y en particular afectaba las rocas almacena-doras (areniscas) y que era por lo tanto un factor desfavorable, impidiendo la acumulación de cantidades comerciales de aceite y gas.
R E S U M E N D E LAS CONDICIONES R E G I O N A L E S
Nicaragua puede dividirse en tres unidades fisiográficas principales (F ig . 1 ) :
1 ) La angosta llanura costera del
Pacífico, con una cadena de conos volcánicos de noroeste a sureste, en su borde oriental;
2) Cadenas montañosas de la por-
Mexicana de Geólogos Petroleros
3 )
ción central; afalladas y plegados predominantemente de este a oeste en la porción centro oriental del país y Áreas de tierras bajas siguiendo la costa oriental.
En las áreas angostas de la llanura costera del Pacífico la deformación estructural dio origen a dos pliegues anticlinales que se encuentran dominados por afallamientos en sus flancos occidentales. Los ejes de dichos plie
gues van de noroeste a sureste, es decir, son esencialmente paralelos a la costa del Pacífico. El situado más al norte se identificó con el nombre de Anticlinal de San Cayetano (Fig. 1 ) . Esta estructura asimétrica tiene buzamientos más pronunciados en su flanco occidental, del orden aproximado a los 4 5 ° en la costa, inclinándose hacia el noroeste. Las capas superficiales quedan marcadas con numerosas fallas cruzadas que muestran una or¡>>nlación de este a oeste.
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n c 1 «tSCOS CtOLOSICOS l«tKIIUt.C$
Boletín de la Asociación
Hacia el sur, siguiendo la línea costera occidental del Lago Nicaragua, existe un anticlinal regional mucho más grande, cuyo rumbo se desarrolla paralelamente a la costa del Pacífico. En esta estructura aparecen notables fallas cruzadas, que van de este a oeste y
han ocasionado varios afloramientos ( Formación Rivas ) a lo largo de su cresta. El flanco occidental de la estructura de Rivas se encuentra cubierto por las aguas del Lago Nicaragua y el volcanismo que aparece en el borde este de la llanura costera del Pacíf ico.
MONTAÑAS CENTRALES D E L I N T E R I O R
En el interior del país existen tres cadenas montañosas prominentes que tienen una orientación general de este a oeste. En la Fig. 1 pueden identificarse como sigue, de norte a sur:
1) Cordillera Isabela (cerca de la frontera con Honduras) ; la topografía se levanta a más de 2,440 metros;
2 ) Cordillera Dariense (precisamente al norte del Lago Managua) ; la topografía se levanta a sólo 1,220 metros y
3 ) Montañas de Haupi (justamente ai occidente de la punta norte del Lago Nicaragua) ; la topografía alcanza unos 915 metros.
La porción nororiental de la Cordillera Isabela se extiende para penetrar en territorio de Honduras y forma pliegues anticlinales entre los ríos Waiks y Patuca. Dichas estructuras hacen aflorar rocas calizas de edad Cretácica.
La porción sur de la Cordillera Isabela tiene una orientación ligeramente hacia el noreste y se ha cartografiado como un anticlinorio. Se inclina hacia el este, con su eje atravesando la costa oriental en Punta Gorda (Fig. 2 ) . Los tres pozos perforados en la región ñor-oriental de Nicaragua se localizaron, sin excepción, sobre rasgos estructurales locales que se desarrollaron sobre este arco regional (Fig. 3 ) .
Las cadenas montañosas más pequeñas, hacia el sur, se encuentran cubiertas por densa vegetación del tipo selvático y sus influencias estructurales hacia el este aún no han sido cartogra-fiadas, excepto por un trabajo muy superficial de mero reconocimiento. Se recorrieron itinerarios de reconocimiento geológico siguiendo los cursos de varios ríos en las porciones central y sur de la costa oriental. La escasa extensión de los afloramientos de rocas sedimentarias encontradas hizo muy aven-
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KAMANOM KAMAMOM
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f IS 2 SECCIÓN GCOlOCICt mu P»TUC« - RIO COCO
GEOLOGÍA PETROLERA Y EXPLORACIÓN EN NICARAGUA*
INTRODUCCIÓN
H . W A Y N E H O Y L M A N * * y GEORGE V . C H I L I N G A R * * *
En Julio de 1935 , el Gobierno de Nicaragua redactó y aprobó un CONTRATO-CONCESIÓN para la exploración y explotación de hidrocarburos y sus derivados en la República de Nicaragua. La concesión cubría, aproximadamente, once millones de acres: tres millones en el área costera del Pacífico y aproximadamente ocho millones en el área oriental o costera del Caribe. El contrato-concesión fué renovado por decreto del Ejecutivo y de la Cámara de Diputados en Mayo de 1939 . En 1943 el contrato se prorrogó por decreto del Ejecutivo y se amplió, además, por un período de tres años y seis meses hasta Junio de 1955 .
El 3 de Diciembre de 1958 el Congreso de la República de Nicaragua votó el Decreto Número 372 , que corresponde a una nueva Ley sobre la exploración y explotación del petróleo. En
virtud de dicha Ley, la Nación, a través del Gobierno, es la dueña de todos los yacimientos y manifestaciones de petróleo que se encuentren dentro del territorio de la República de Nicaragua.
Para el otorgamiento de concesiones para la exploración y explotaciones petrolíferas, el territorio nacional se ha dividido en cuatro zonas principales:
A) Zona del Pacífico, B ) Zona Central o Interior, C) Zona del Atlántico y D) Áreas costeras continentales de
ambos océanos.
Como se muestra en la bibliografía, durante los últimos sesenta años o más varios geólogos con experiencia internacional han publicado los resultados de sus investigaciones hechas en el área costera del Pacífico en Nicaragua. Mu-
Traducido del inglés al español por Jenaro González Reyna, Gerencia de Exploración, Petróleos Mexicanos, México, D. F. Jefe de la firma consultora "Asociados Geomarinos", Las Angeles, California, E. U. A. Profesor del Departamento de Ingeniería Petrolera, Universidad del Sur de California, Los Angeles, Calif., E. U. A.
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chos de esos trabajos tratan de volcanismo y sobre minas y problemas de ingeniería geológica en relación con proyectos para la construcción de canales.
En los años de 1930-31 se iniciaron los primeros trabajos exploratorios en busca de aceite y gas; tales trabajos fueron emprendidos por Miguel d'Escoto en su concesión para perforar. Las actividades consistieron en i m a perforación de casi 160 metros. El pozo se localizó en el flanco ocidental del Anticlinal de San Cayetano, cerca de un escurrimiento en la porción norocciden-tal del área de la costa del Pacífico. Amparándose con los derechos correspondientes a la concesión, capital extranjero procedente de los Elstados Unidos también perforó un pozo de cerca de 1,250 metros, localizado en el flanco occidental de la misma estructura, a unos ocho kilómetros al suroeste del pozo original. Ninguno de los dos pozos encontró aceite o gas, en cantidades comerciales.
Aproximadamente en 1931, una compañía de la región central de los listados Unidos perforó un pozo que alcanzó más o menos los 1.250 metros de profundidad. Se localizó como a irnos 1.600 metros del manadero o escurrimiento de aceite de San Cayetano, no lejos de la costa occidental, entre Managua y León. Ni este pozo, ni una perforación poco profunda de 150 metros hecha por la concesión petro
lera d'Escoto. en el año de 1930, llegaron a descubrir aceite en cantidades comerciales.
El segundo esfuerzo principió en el año de 1940, cuando se unieron dos compañías petroleras para efectuar un programa exploratorio dentro de los once millones (11 .000 ,000) de acres correspondientes a la concesión d'Escoto. Una de las empresas era una compañía de primera categoría y la otra era empresa independiente grande. El primer grupo o compañía se encargó de la ejecución de las operaciones.
Los trabajos iniciales consistieron en la exploración geológica superficial que se comenzó en la costa occidental. Aproximadamente una media docena de geólogos se encargaron de hacer el estudio de los afloramientos, siguiendo más o menos en los trabajos la costa occidental y las laderas de los flancos occidentales de las montañas. Como consecuencia, encontraron algunas condiciones estructurales, así como uno o dos escurrimientos de aceite; los encargados de las investigaciones de campo no se mostraron optimistas, ya que la mayoría de los afloramientos contenían cantidades considerables de ceniza volcánica, llegando a la conclusión de que limitaba las condiciones de origen y en particular afectaba las rocas almacena-doras (areniscas) y que era por lo tanto un factor desfavorable, impidiendo la acumulación de cantidades comerciales de aceite y gas.
RESUMEN D E LAS CONDICIONES REGIONALES
Nicaragua puede dividirse en tres unidades fisiográficas principales (Fig. 1 ) :
1 ) La angosta llanura costera del
Pacífico, con una cadena de conos volcánicos de noroeste a sureste, en su borde oriental;
2 ) Cadenas montañosas de la por-
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3 )
ción central; afalladas y plegados predominantemente de este a oeste en la porción centro oriental del país y Áreas de tierras bajas siguiendo la costa oriental.
En las áreas angostas de la llanura costera del Pacífico la deformación estructural dio origen a dos pliegues anticlinales que se encuentran dominados por afallamientos en sus flancos occidentales. Los ejes de dichos plie
gues van de noroeste a sureste, es decir, son esencialmente paralelos a la costa del Pacífico. El situado más al norte se identificó con el nombre de Anticlinal de San Cayetano (Fig. 1 ) . Esta estructura asimétrica tiene buzamientos más pronunciados en su flanco occidental, del orden aproximado a los 4 5 ° en la costa, inclinándose hacia el noroeste. Las capas superficiales quedan marcadas con numerosas fallas cruzadas que muestran una or¡i»nlación de este a oeste.
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FIS. 1 RASCOS GCaO«ICOS IIC6I0IIALCS
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Hacia el sur, siguiendo la línea costera occidental del Lago Nicaragua, existe un anticlinal regional mucho más grande, cuyo rumbo se desarrolla paralelamente a la costa del Pacífico. EJI esta estructura aparecen notables fallas cruzadas, que van de este a oeste y
han ocasionado varios afloramientos ( Formación Rivas ) a lo largo de su cresta. El flanco occidental de la estructura de Rivas se encuentra cubierto por las aguas del Lago Nicaragua v el volcanismo que aparece en el borde este de la llanura costera del Pa rífico.
MONTAÑAS CENTRALES D E L I N T E R I O R
En el interior del país existen tres cadenas montañosas prominentes que tienen una orientación general de este a oeste. En la Fig. 1 pueden identificarse como sigue, de norte a sur:
1) Cordillera Isabela (cerca de la frontera con Honduras) ; la topografía se levanta a más de 2,440 metros;
2 ) Cordillera Dariense (precisamente al norte del Lago Managua) ; la topografía se levanta a sólo 1,220 metros y
3 ) Montañas de Haupi (justamente af occidente de la punta norte del Lago Nicaragua) ; la topografía alcanza unos 915 metros.
La porción nororiental de la Cordillera Isabela se extiende para penetrar en territorio de Honduras y forma pliegues anticlinales entre los ríos Waiks y Patuca. Dichas estructuras hacen aflorar rocas calizas de edad Cretácica.
La porción sur de la Cordillera Isabela tiene una orientación ligeramente hacia el noreste y se ha cartografiado como un anticlinorio. Se inclina hacia el este, con su eje atravesando la costa oriental en Punta Gorda (Fig . 2 ) . Los tres pozos perforados en la región nororiental de Nicaragua se localizaron, sin excepción, sobre rasgos estructurales locales que se desarrollaron sobre este arco regional (Fig . 3 ) .
Las cadenas montañosas más pequeñas, hacia el sur, se encuentran cubiertas por densa vegetación del tipo selvático y sus influencias estructurales hacia el este aún no han sido cartogra-fiadas, excepto por un trabajo muy superficial de mero reconocimiento. Se recorrieron itinerarios de reconocimiento geológico siguiendo los cursos de varios ríos en las porciones central y sur de la costa oriental. La escasa extensión de los afloramientos de rocas sedimentarias encontradas hizo muy aven-
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F K 2 SECCIOII GEOLOeiCt . AKÜ P<TUC> - RIO COCO
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turado intentar siquiera extrapolar cualesquiera rasgos estructurales vistos, aún en el caso de los cauces superiores de los ríos principales donde se hicieron observaciones. La presencia de rocas volcánicas que cubren la superficie ha venido a crear nuevas complicaciones en la búsqueda de afloramientos siguiendo el curso de los itinerarios fluviales.
No cabe duda que la mejor manera de hacer exploraciones de reconocimiento para estudiar las características geológicas del centro y sureste de Nicara
gua sería mediante el empleo de métodos geofísicos (magnetométricos) aéreos. La información que se lograse podría permitir el cálculo o estimación correspondiente al espesor o potencia aproximada de los sedimentos que so-breyacen al basamento, siguiendo las manifestaciones o rasgos regionales antes mencionados. Considerando el método geofísico aéreo ya mencionado, sería fwsible delinear la extensión del área ocupada por las cuencas sedimentarias.
FK. S SeCCIM ESTRATIMAFICA ML HMESTE K NICUACUA . CNTRt AUTAMM T CAT05 MSUTOS
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ESTRATIGRAFÍA GENERAL
Para los propósitos del presente trabajo, la estratigrafía se presenta en dos partes, la oriental y la occidental. Las edades de las formaciones en ambas partes van desde el Cretácico hasta el Reciente. La discordancia que se presenta en la porción media del Tercia rio en Nicaragua aparentemente fué acompañada de mayor actividad volcánica en el occidente del país que en lo tocante a la costa oriental.
En el norte de la costa oriental la actividad volcánica quedó confinada especialmente hacia las partes donde se originan los ríos principales. Sin embargo, bajando hacia el sur, a lo largo de la costa oriental, se encuentra local-mente que la actividad volcánica ocurrió más cerca de la costa. En áreas reducidas al sur de Bluefields (Fig. 1) se presentan tobas volcánicas en la costa, etc. También se encuentran, prácticamente en todo el desarrollo del curso del Río San Juan, aue forma el límite entre Nicaragua y Costa Rica.
El propósito de este trabajo no es presentar una discusión detallada de la estratigrafía del país; no obstante, se dará un pequeño resumen de las divisiones principales de las formaciones según quedan determin-^das únicamente por sus afloramientos en la costa occidental y por una combinación de afloramientos y datos de pozo en la costa oriental.
ESTATIGKAFIA DE LA
COSTA OCCIDENTAL
Las formaciones más antiguas que aparecen aflorando se presentan a lo largo de la costa occidental, en el suroeste del país. Al explorar la costa de
la región noroccidental se descubren formaciones más jóvenes después de la extensa discordancia que se extiende del Mioceno Superior al Plioceno. La actividad volcánica trajo como consecuencia derrames lávicos y el depósito de cenizas y materiales tobáceos que cubrieron una extensa área comprendida entre el Lago Manasrua y la parte oriental del Anticlinal de San Cayetano. Los materiales volcánicos a que antes se ha hecho referencia se extendieron hacia el noroeste, rumbo a la frontera con Honduras, para cubrir todos las rocas sedimentarias que hubieran aflorado en el área.
FORMACIÓN RIVAS (Cretácico Supe r io r )
La Formación Rivas está compuesta, principalmente, por lutitas (más del 5 0 % ) que contienen cantidades variables de sedimento clástico fino y arena ; contenidas en algunas capas de lu-tita se encuentran areniscas de un color verde olivo obscuro. En algunos lugares se componen de una arenisca ar-kósica con cierta apariencia de grauva-ca y también se tienen capas poco potentes de conglomerado. Existiendo una predominancia de lutita en esta formación, la superficie ¡ntemperizada del terreno origina una topografía de lomeríos bastante regulares en su forma. Además, existen algunas Jmtes de capas calizas constituidas por una roca bastante pura, densa y de color que va de claro a obscuro, que se presentan, sobre todo en la parte superior de Id sección.
El rasgo más distintivo de esta formación lo constituye su apariencia de
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"molasse", que posiblemente sea el resultado del relleno más o menos rápido experimentado en una área de sub-sidencia. La condición ya indicada trajo como consecuencia su escaso contenido faunístico; sin embargo, la formación corresponde por su edad, al Cretácico Superior. La sección tipo puede observarse mejor a lo largo de la Carretera Panamericana, en el área cercana a la ciudad de Rivas.
FORMACIÓN BRITO (Eoceno)
Estratigráficamente la Formación Bri-to se depositó sobre la Formación Rivas, sin ninguna evidencia de interrupción en el proceso de sedimentación. Aunque de carácter lutítico, localmente es más predominante una caliza conteniendo capas lutítico-calcáreas con espesores cercanos a los 3 1 0 metros. Se trata de una caliza densa, firmemente estratificada, conteniendo equinoides identificables. En la porción superior de esta sección se presentan tobas volcánicas, señalando un quiebre en la sedimentación. Predominantemente son de origen marino en su sedimentación y contienen foraminíferos en su parte más alta. Contenida dentro de las areniscas calizas, se encuentra una fauna de moluscos. La potencia total es del orden aproximado a los 213 .5 metros; la Formación Brito aflora a lo largo de la costa suroccidental de Nicaragua.
FORMACIÓN MASACHAPA (Oligoceno)
La Formación Masachapa queda integrada por una serie de lutitas no bien consolidadas y con potencia de unos 1,065 metros cuya expresión topográfica corresponde a áreas erosionadas o deprimidas. Dentro de las areniscas existen capas o lentes de tobas. En las sec
ciones de lutitas los foraminíferos son bastante abundantes y colocan a la Formación Masachapa en la porción inferior del Oligoceno. Esta formación puede verse en el miembro occidental del \nt icl inal de San Cayetano, siguiendo la carretera que se aproxima a Masa-chapa.
FORMACIÓN SAN CAYETANO (Mioceno Inferior a Medio)
Y a sea en el Oligoceno Superior o en el Mioceno Inferior ocurrió aparentemente una actividad volcánica bastante extensa. Este cambio de las condiciones del medio ambiente queda señalado por Una brecha tobácea que aparece en la sección. La Formación San Cayetano consiste, principalmente, en una roca lutítica; sin embargo, a intervalos bastante regulares aparecen materiales calizos y tobáceos. Las capas de toba alcanzan un espesor cercano a los 3 0 metros y en algunos lugares las estratificaciones tobáceas están compuestas por un material de grano grueso, que forma capas de matatenas de origen volcánico con una matriz caliza. La formación tiene más o menos un espesor de 1,525 metros y existen de ella afloramientos excelentes siguiendo la parte occidental del Anticlinal de San Cayetano, precisamente al este del poblado costero de Masachapa. En la Formación Masachapa existe un tipo mi-crofaupíslico de edad comprendida entre el Mioceno Inferior v el Mioceno Medio; sin embargo, la litología inclina a pensar que corresponde al Mioceno Medio.
FORMACIÓN F R A I L E (Mioceno Medio)
Se caracteriza por las capas tobáceas que aparecen entre las lutitas con algo de caliza. Si se comparan con ca-
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pas más viejas se nota que hay un incremento considerable en el contenido de arena, así como presencia de algunas capas o zonas con madera fósil. En la porción superior de la Formación Fraile se encuentran, por primera vez. estratificaciones de origen continental definitivo. Se trata de la formación más joven con una secuencia concurrente y su espesor se aproxima a los 2 ,440 metros.
En la cima aparente de esta formación se presenta una discordancia bien marcada. El depósito de la Formación Fraile fué seguido del levantamiento y plegamiento de sus integrantes, así como de una erosión considerable. También se ve que se sobreponen las tobas de la sierra, más ióvenes, así como los sedimentos aluviales recientes. La sección típica de esta formación se encuentra en las cercanías del poblado de El Fraile, al noroeste de León.
FORMACIÓN E L SALTO (Plioceno)
Se trata de una formación poco potente, con espesor de aproximadamente poco más de 90 metros y que descansa discordantemente sobre las formaciones más antiguas. Ya para el tiempo de la Formación El Salto existía la cadena de conos volcánicos que se desarrollaba paralelamente a la costa a 45 ó 65 kilómetros tierra adentro. La formación, aunque compuesta principalmente por material tobáceo, tiene arenas sucias, lutitas arenosas y lutitas margosas que pasan a margas. Sin embargo, dentro de las capas arenosas y lutíticas hay Conchas formando una especie de construcciones arrecifales con ostras de tamaños más o menos grandes, junto con los depósitos de conchas mezcladas, que ocupan extensiones considerables. Contenidas en los depósitos más potentes de conchas, se presentan coquinas.
S E R I E S S I E R R A S (Pleistoceno a Reciente)
En el Pleistoceno y a distancias de 4 5 a 65 kilómetros tierra adentro existió una serie de aparatos volcánicos jó venes y explosivos. Se extendían hacia el sureste, desde el Golfo de Fonseca y por las planicies de León hasta los Lagos Managua y Nicaragua, siguiendo una zona de falla. A lo largo de esa zona de falla, con sus volcanes activos, hubo grandes erupciones de materiales piroclásticos. La manifestación actual de esos centros de gran actividad ígnea se representa por enormes bocas volcánicas (calderas) rodeadas por grandes áreas de subsidencia aue son la expre-a\ón de la magnitud de la violencia de las erupciones habidas. Los efectos de esta actividad quedan confirmados hacia la parte noroccidental de las llanuras costeras, donde las tobas pueden cubrir algunos rasgos estructurales en las capas marinas más viejas.
No es posible establecer el tiempo de origen que corresponde a las erupciones volcánicas; sin embargo, parece que se realizaron durante el Pleistoceno superior. Por lo menos, parece que existe un lapso considerable de tiempo entre el depósito y la erosión parcial de los componentes de la Formación Salto; antes aparecía parcialmente cubierta por abanicos de piroclásticos.
ESTATIGRAFIA DE LA
COSTA ORIENTAL
La estratigrafía en esta parte del país se determinó usando pequeños afloramientos encontrados en los bordes de las cubetas y especialmente, en los cursos superiores de los ríos principales. Posteríormente, la perforación de tres pozos en el noreste de Nicaragua proporcionó mayor información geológica sobre la estratigrafía del área de la
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cuenca correspondiente a esta parte del país.
La sección estratigráfica más completa de afloramientos que encontró el grupo de exploración geológico-petro-lera de los Drs. Roy Wilson, Jeffery Crickmay, William Fagginer-Auer y Sres. Davies y Nichols, a principios de la década de los cuarentas, fué tierra adentro a unas 125 millas aéreas (232 kilómetros) siguiendo el curso del río Coco en las cercanías de Awawas (Fig. 1 ) . Los afloramientos más antíeruos se localizaron en esta área hacia el norte, a través de las Montañas de Colón y muestran gradación, al sur y al este, en las gravas, arcillas y aluviones recientes de la sabana. Las corrientes de lava dentro de las formaciones en el norte del área del río condujeron a especular que regionalmente también los sedimentos en el área de Punta Gorda (noreste de Nicaragua) podrían contener materiales volcánicos. Sin embargo, la estratigrafía establecida posteriormente, como consecuencia de los datos de pozo, no encontró rocas correspondientes a corrientes ígneas.
Las formaciones principales que se han identificado en la porción oriental de Nicaragua, en los últimos años, serán objeto de las consideraciones siguientes.
FORMACIÓN BALSAMO (Cretácico Superior)
La Formación Bálsamo se caracteriza en la sección del afloramiento, en la vecindad del río Patuca (Honduras) , por su caliza maciza. Contiene cantidades menores de lutitas calcáreas in-terestratificadas, con pocos fósiles. Los afloramientos en la vecindad del río Coco, hacia el sur, se toman más lutí-
ticos. Sin embargo, en toda la formación existe una preponderancia de calizas.
La Caliza Bálsamo varía en color y apariencia de gris perla y cristalina o coralina a arcillosa obscura y foliada. Cuando se examinó esta formación por primera vez en el campo, se encontró especialmente en el caso de seccione."? con color claro que expedía un olor casi petrolífero cuando se acababa de romper; en cambio, la caliza arcillosa de color obscuro no daba ese olor aún teniendo la apariencia de las capas generadoras. Investigaciones posteriores vinieron a demostrar que el olor fétido es característico de ciertas capas de caliza que no tienen ninguna relación con el contenido de petróleo.
Por su litología esta caliza se parece a las calizas del Terciario v consecuentemente, su contenido fosilífero necesita estudiarse con mucho cuidado a fin de poder distinguir entre ambas. Afortunadamente en el área de los ríos Coco y Patuca se tiene la ventaja de que existe una fauna fosilífera abundante que permitirá hacer la distinción.
La potencia o espesor de la Formación Bálsamo sólo puede apreciarse aproximadamente diciendo que varía de 4 5 0 a 9 0 0 metros. La mayor potencia se encontró en el área del río Patuca y la Fección menos potente aparece hacía el sur en el área del río Coco.
Desgraciadamente, la formación que se describe no fué encontrada en ninguno de los tres pozos perforados en el noreste de Nicaragua. Y a que en varios lugares de Centro-América y norte de Sud-América las calizas cretácicas son productoras importantes de petróleo, se anticipó que esta formación al encontrarse en el subsuelo en una trampa estructural tendrían aceite y gas en cantidades comerciales.
10 Boletín de la Asociación
FORMACIÓN KAMANON ( M i o c e n o M e d i o )
La Formación Kamanón, en la vecindad de Awawas (Fig. 1 ) , sobre el río Coco, parece que sobreyace sin discordancia a la Formación Bálsamo. Sin embargo, localmente, existe en las Montañas Colón una deformación estructural que se resuelve en plegamiento, afallamiento y sobrecorrimicnto según se ilustra en la Fig. 2. La sección transversal se orienta hacia el noroeste de Awawas al río Patuca.
Los dos pozos próximos a la costa en el área de Punta Gorda se perforaron a menos de 300 metros de la sección reconocida, según lo identificó Fagginer-Auer (informe inédito). Sin embargo, existen poco más de 500 metros de capas rojas estériles, justamente sobre la Formación Kamanón y bien pueden formar parte de ella.
FORMACIÓN WAMPÚ (Mioceno Med io )
La sección tipo que corresponde a la Formación Wampú, siguiendo el río Wampú, se encuentra hacia el noroeste del río Patuca. Queda constituida casi exclusivamente por capas rojas físiles y material suave, frecuentemente arcillosas y arenosas, así como de lutitas rojas estériles. Las areniscas, interestrati-ficadas con lutitas, son de grano fino a medio, quebradizas, un tanto porosas y con algo de material arkósico. El espesor de esta formación sobrepasa los 1,975 metros.
Dentro de la Formación Wampú existen dos miembros de conglomerados. El miembro superior contiene matatenas y pedrejones de caliza que se cree corresponden a materiales derivados de la Formación Bálsamo, del Cretácico Superior. El miembro inferior tiene' en
vez de matatenas y pedrejones de caliza abundantes matatenas de cuarzo.
Como uno de los resultados de la actividad ígnea de este tiempo, ambos tipos de conglomerados contienen pedruz-cos y matatenas de andesita, diorita, lava, granito y argilita, así como una matriz de lutita roja.
Debido a la carencia de fósiles, excepto en los pedrejones retrabaiados de caliza, no ha sido posible establecer de manera definitiva la edad correspondiente a esta formación, pero no cabe duda de que es más joven que la Formación Bálsamo y probablemente más joven que la Formación Kamanón. Desafortunadamente, la Formación Wampú no se identificó en ninguno de los pozos perforados en el noreste de Nicaragua. Se necesita más trabajo de campo a lo largo del río Wampú a fin de establecer, de manera segura, la edad de esta formación.
FORMACIÓN BRAGMAN AMARILLO NARANJA (P l ioceno)
Compuesta por capas superficiales que se encuentran a lo largo de las costas y sabanas en el noreste de Nicaragua. En el área donde se han perforado los dos pozos cercanos a la costa (noreste de Nicaragua, en la zona de intempe-rismo) la formación alcanza un espesor de aproximadamente 55 metros (F ig . 3 ) . Los acarreos quedan integrados por materiales de cuarzo, angulares o sub-arredondados, por sílice o calcedonia y por rocas ígneas de grano fino, a veces porfiríticas.
En el pozo de Punta Gorda existen arcillas con manchas de colores rojo pálido y verde desde una profundidad que varía aproximadamente entre 60 y 250 metros. Subyaoiendo a este míem-
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bro arcilloso se presenta una arena de composición básica, así como un miembro constituido por grava. En este intervalo predominan las gravas y arenas volcánicas. La composición de estas are
nas, andesitas, basaltos, etc., sugiere el
uso del término "básicos" a fin de diferenciarlos de las gravas "acidas" (de cuarzo) supra yacentes.
E X P L O R A C I Ó N P E T R O L E R A
ESCAPES DE ACEITE Y GAS
Desde principios de 1920 se conoce un escape de aceite y gas en la costa occidental. Próximo a dicho lugar se perforó en 1 9 3 0 un pozo poco profundo (1 ,220 metros) , pero no se encontraron manifestaciones importantes ni de aceite ni de gas.
Con anterioridad de algunos años a 1940 el señor Walter Link dio informes de im escurrimiento de aceite sobre el río Patuca, Honduras (F ig . 1 ) . Se presentaba en una caliza rota donde las fisuras y fracturas estaban rellenas con aceite pesado. Varios de los miembros del grupo geológico de exploración trataron de localizar el "escurrimiento Link" a principios de los años de la década de los cuarentas, pero sin tener éxito. E!ste escurrimiento se localizaba siguiendo un banco del río Patuca donde se encuentra vegetación del tipo de selva espesa y tal vez por eso no fué posible volver a localizarlo.
Siguiendo la orilla norte desde Puerto Cabeza (Fig . 1 ) , se encontró evidencia más interesante de que existe aceite. Después de fuertes tempestades en el mar aparecieron bitúmenes arrojados a la costa, lo que indica la probable existencia de un escape de cierta consideración en la plataforma continental. Los indios Miskito, según sabemos, han usado esos bitúmenes durante muchos años para calafatear sus embar
caciones. En 1940-41, durante varias semanas, se buscó activamente cualquier indicio de posibles escapes activos de aceite y / o gas que pudieran existir en los cayos de Miskito, pero sin resultados positivos. En la actualidad, pudien-do disponer de los equipos geofísicos para la búsqueda de aceite y para los escapes de gas especialmente, podría emprenderse una exploración muy sistemática que vendría a determinar la localización de los escapes o escurrimientos en la plataforma continental.
Posiblemente la información más prometedora por lo que respecta a existencia de aceite en cantidades comerciales que pudiera existir en la costa oriental de Centro-América, es la de que hace varios años se perforó un pozo en las cercanías de Puerto Limón, Costa Rica, que tuvo una producción de 2,000 barriles diarios de aceite durante varias semanas, antes de convertirse en un pozo totalmente productor de agua salada. Posteriormente se perforó una media docena de pozos en esta misma área que no obstante tener buenos indicios de aceite y gas, nunca produjeron en cantidades comerciales. Uno de esos pozos penetró aproximadamente 3,350 metros de sedimentos y lo anterior indicaría bien que en el sureste de Nicaragua también puede existir una sección sedimentaria muy potente que subyace a las rocas volcánicas que cubren la superficie.
12 Boletín de la Asociación
TRAMPAS ELSTRÜCTÜRALES PARA LA ACUMULACIÓN DEL PETRÓLEO
En la costa occidental existen dos grandes estructuras superficiales (trampas definitivas) que indican condiciones favorables para la acumulación de aceite y gas. En esta parte del país no se ha hecho trabajo geofísico de exploración petrolera.
En la costa oriental las indicaciones de estructuras superficiales quedan ocultas por las arenas y gravas de edad reciente. El trabajo de exploración geofísica en busca de yacimienos petrolíferos que se ha hecho en los últimos veinticinco anos en esta área, ha costado varios millones de dólares. Del trabajo de exploración sismológico en la costa ha resultado el levantamiento cartográfico de muchas estructuras del subsuelo. La Fig. 4 muestra una estructura sísmica típica de la costa.
El trabajo sismológico más reciente que^ se ha hecho fuera de la costa se practicó en los Cayos de Miskito. Aquí se encontraron, también, numerosas estructuras y la Fig. 5 representa ui» prospecto típico, alejado de la costa.
Las investigaciones con magnetóme-tro tanto en tierra como aerotranspor
tados cubren aproximadamente 16 ,000 kilómetros cuadrados del noreste de Nicaragua. En las limitadas áreas donde se trazaron perfiles sismológicos cruzando las anomalías magnéticas, se descubrió que existen condiciones estructurales que sobreyacen a la topografía indicada en el basamento.
Teniendo hasta ahora únicamente dos estructuras del subsuelo perforadas en esta área, donde se han señalado más de veinte como localidades que deben perforarse, debe considerarse que las exploraciones en busca de aceite y gas aoenas si se han iniciado.
P o z o s DE EXPLORACIÓN
El primer pozo. Punta Gorda Núm. 1, perforado en 1943-1944 sobre la costa noreste de Nicaragua (Figs . 1 y 3 ) , se localizó en una anomalía magnética. El aumento en la magnitud de los buzamientos a medida que se alcanzaban mayores profundidades indicó la presencia de la estructura. Este pozo se abandonó en un conglomerado basal a la profundidad de 2 ,052.8 metros. A dos profundidades, aproximadamente 1,555 y 1,920 metros, respectivamente, se notaron olores de gas provenientes del depósito de lodos. Pero ese gas no quema.
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I N T E R V A L O DE C U R V A S 1 0 0 -4300-
FIG. 4 ESTRUCTURA SÍSMICA MAR A F U E R A
14 Boletín de la Asociación
El segundo pozo. Twara Núm. 1, perforado en 1947-1948 sobre la cresta de una estructura sismológica en la Laguna de Twara, quedaba unos 215 metros más alto estructuralmente (.«obre la misma estructura) que el pozo Punta Gorda Núm. 1, pero los datos sismológicos indicaron que solamente debería situarse a 182.8 metros más arriba. La perforación de este pozo alcanzó granito a los 1,900.4 metros de profundidad. Este granito es el mismo que aflora en Auyapini (Fig. .3), aproximadamente a .32 kilómetros al oriente del pozo. Se encontraron únicamente vestigios de aceite, pero a los 1.64.5 metros aproximadamente se notó un fuerte olor a gas en un núcleo constituido por una capa poco potente de lutita de color obscuro.
El tercer pozo. Toucbe Núm. 1, perforado en 1956-1957, se localizó cerca de la cresta de una estructura sismológica y sobre el flanco de una fuerte anomalía aeromagnética que probablemente reflejaba la topografía del basamento afallada en el flanco norte. No se encontraron vestigios de aceite en este pozo, aunque a los 914.4 metros de la perforación (3 ,660 a 4,570 meros) se encontraron evidencias casi continuas de gas. A la profundidad total de 4,472.1 metros el pozo explotó. Los perforadores, después de algunas dificultades lograron cerrar el pozo antes de que se incendiara y la presión al cerrarse era de 3,800 libras por pulgada cuadrada. Ei pozo se taponó y abandonó, informándose que el costo total de la perforación del pozo fué de 2.5 millones de dólares.
Teniendo únicamente tres pozos de exploración localizados en dos de los veinte prospectos geofísicos, debe considerarse que la exploración petrolera en Nicaragua está muy lejos de ser ade
cuada y debe considerarse como apenas principiada en escala significante. Desde luego se justifican perforaciones adicionales de pozos no sólo en el oriente, sino también en la costa occidental. Teniendo actualmente a la disposición nuevos métodos geofísicos que se han mejorado constantemente, se aconseja que deben emprenderse adicionales trabajos geofísicos de exploración que deberán efectuarse antes de intentar operaciones de perforación en cualesquiera de ambas áreas.
RESUMEN DE LAS EXPLORACIONES Y CONCLUSIÓN
En el c u i s o de los últimos treinta años ha habido tres períodos de actividad en lo que respecta a investigaciones petroleras en Nicaragua:
a ) El primero fué de 1930 a 1931 , cuando se perforaron dos pozos (de 152.4 y 1,200 metros de profundidad) no lejos de un escurrimiento de aceite encontrado en la costa occidental; como resultado no se encontraron manifestaciones significativas ni de aceite ni de gas;
b ) El segundo cubre de 1 9 4 0 a 1 9 5 0 ; durante este lapso de diez años se procedió al reconocimiento y levantamiento de la geología superficial en ambas costas, dándose preferencia especial a la porción noreste de Nicaragua, donde se desarrolló la parte principal de las actividades; las formaciones sedimentarias estudiadas y representadas cartográficamente por su edad van del Cretácico Superior al aluvión del Pleistoceno-Reciente; el estudio de los aflo-
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ramientos se l imitó principalmente a las proximidades de los cursos superiores de los ríos más grandes; en las áreas costeras y de sabana, en el noreste de Nicaragua, la exploración geofísica comprendió trabajos magnéticos en t ierra y aéreos y durante varios años se han hecho trabajos con métodos de refracción y reflexión s í smica ; únicamente dos pozos fueron perforados
c )
( 1 9 4 3 - 1 9 4 S ) en un prospecto geofísico situado sobre la costa, llegándose a profundidades de 2 ,052 .8 y 1,927.8 metros; como consecuencia no se encontró aceite en estos pozos y solamente aparecieron manifestaciones pe-queñasde gas (metano) y
El tercero quedó comprendido de 1955 a 1957 , habiéndose hecho un trabajo geofísico de re-
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FIG. 5 E S T R U C T U R A SÍSMICA EN COSTA
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flexión sísmica, alejado de la costa y cubriendo una amplia porción ya volada para una investigación magnetométrica; se perforó hasta la profundidad de 4 , 5 7 1 . 1 metros en una de las esructuras sismológicas más grandes, sin que hubiera maniÍFesa-ciones de aceite, pero aproximadamente a los 3 , 7 5 5 metros de profundidad total se encontraron cantidades de gas contenido en lutitas (principalmente metano) hasta que sobrevino una explosión a los 4 , 5 7 1 . 1 metros ; hubo informes contradictorios en lo tocante a la composición del gas de explosión; el pozo se taponó y fué abandonado.
AGRADECIMIENTOS
El autor principal de este trabajo desea expresar sus agradecimientos a sus colaboradores por su tooperación, en particular a los Drs. Roy T. Wilson y Jeffery Crickmay, con quienes trabajó de 1 9 4 1 a 1 9 4 2 en e! oriente de Nicaragua, cuando estuvieron empeñados en correlacionar la geología del terreno y los estudios geofísicos. En 1 9 5 5 - 1 9 5 6
recibió la magnífica ayuda del señor Robert Curran y de otros miembros de la Canadian British Empire Oil Com-pany, Ltd., al haber renovado esta compañía las actividades de exploración en el noreste de Nicaragua. Antes de cesar las actividades exploratorias, los últimos trabajos fueron hechos por la Waterford Oil Company y F . Ray Me Dermott and Co., Inc., estando a cargo de este último las operaciones. El señor Davis, de la Compañía McDer-mott. era el geólogo y su permanencia en el pozo fué constante; la revisión nue hizo en compañía de los autores de algunas de las operaciones de perforación fué muy valiosa.
El segundo autor desea manifestar sus agradecimientos al Dr. A. Hammer y a E. C. Reíd de la Occidental Oil Co., quienes bondadosamente proporcionaron información geológica correspondiente a la costa occidental de Nicaragua.
Ambos autores reconocen, de manera especial y con su mayor agradecimiento, la ayuda y cooperación que brindó el Sr . Presidente de la República de Nicaragua, Ing. Don Luis A. So-moza D. y la del Sr . Ing. Don Roberto Solórzano, Director del Servicio Geológico Nacional.
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Yol. XVII. Núms. 1-2, 1965
R I V A S
ÁREA DEL P A C I F I C O OE N I C A R A G U A ANEXO AL INFORME GEOLÓGICO PRELIMINAR
E S C A L A t 1 0 0 . 0 0 0 — J U N I O O E 1 . 9 6 2 N o r C i l O P o r H i v « r o
_ i 1 1 — i
^ Tí. • / v i
L E Y E N D A
F o r m a c i ó n " R i v Q s ' - C r e t á c i c o S u p e r i o r .
F o r m a c i ó n " B r i t o " E o c e n o .
T o b a s - P l i o - P l e i s t o c e n o .
R o c a s í g n e a s I n t r u s i v a s
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