Un pulverizador o atomizador es un utensilio que se emplea para producir una fina

pulverización de un líquido, mediante una bomba manual (de pera de goma o de

émbolo), basándose en la aspiración debida al efecto Venturi.

Contenido

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1 Principio de funcionamiento

2 Uso

3 Véase también

4 Nota

5 Enlaces externos

[editar]Principio de funcionamiento

Principio de funcionamiento de un pulverizador.

Cuando se inyecta aire a presión a través de un tubo que disminuye de sección, sufre

una aceleración, lo que reduce la presión en el punto más estrecho (debido

al principio de Bernoulli).

La presión reducida absorbe, a través de un tubo estrecho, el líquido del recipiente

inferior (de hecho puede estar en cualquier posición mientras llegue el líquido al

orificio), debido a la diferencia de presión existente entre los dos puntos, y lo proyecta

hacia delante en forma de una fina lluvia de pequeñas gotas (no de átomos a pesar

del nombre).

[editar]Uso

Los atomizadores se utilizan para rociar perfumes, para la aplicación de pintura, en los

carburadores y sistemas de inyección de combustible, y en instalaciones de secado

por atomización.