Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no,...

45
Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

Transcript of Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no,...

Page 1: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

BécquerCristhian Edwin Rodríguez

Hoy como ayer, mañana como hoy,¡y siempre igual!

Ratón, no, por favor.

Page 2: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

Un cielo gris, un horizonte eternoy andar... andar.

Page 3: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

la torpe inteligencia del cerebrodormida en un rincón.

Page 4: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

El alma, que ambiciona un paraíso,buscándole sin fe;

Page 5: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

fatiga sin objeto, ola que ruedafatiga sin objeto, ola que ruedaignorando por qué.ignorando por qué.

Page 6: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

Voz que incesante con el mismo tonocanta el mismo cantar,

Page 7: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

gota de agua monótona que cae,y cae sin cesar.

Page 8: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

Así van deslizándose los díasunos de otros en pos,

Page 9: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

hoy lo mismo que ayer... y todos ellossin gozo ni dolor.

Page 10: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

¡Ay! ¡a veces me acuerdo suspirandodel antiguo sufrir!

Page 11: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

¡Amargo es el dolor; pero siquiera¡Amargo es el dolor; pero siquierapadecer es vivir!padecer es vivir!

Page 12: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

De lo poco de vida que me restaDe lo poco de vida que me restadiera con gusto los mejores años,diera con gusto los mejores años,por saber lo que a otrospor saber lo que a otrosde mí has hablado.de mí has hablado.

Page 13: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

Y esta vida mortal y de la eternalo que me toque, si me toca algo,por saber lo que a solasde mí has pensado.

Page 14: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

Tú eras el huracán y yo la altatorre que desafía su poder:

Page 15: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

¡tenías que estrellarte o que abatirme!...¡No pudo ser!

Page 16: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

Tú eras el océano y yo la enhiestaroca que firme aguarda su vaivén:

Page 17: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

¡tenías que romperte o que arrancarme!...¡tenías que romperte o que arrancarme!...¡No pudo ser!¡No pudo ser!

Page 18: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

Hermosa tú, yo altivo: acostumbradosuno a arrollar, el otro a no ceder;

Page 19: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

la senda estrecha, inevitable el choque...¡No pudo ser!

Page 20: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

Como en un libro abiertoleo de tus pupilas en el fondo.

Page 21: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

¿A qué fingir el labio¿A qué fingir el labiorisas que se desmienten con los risas que se desmienten con los ojos?ojos?

Page 22: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

¡Llora! No te avergüences¡Llora! No te avergüencesde confesar que me quisiste un de confesar que me quisiste un poco.poco.

Page 23: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

¡Llora! Nadie nos mira.¡Llora! Nadie nos mira.Ya ves; yo soy un hombre... y también Ya ves; yo soy un hombre... y también lloro.lloro.

Page 24: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

Alguna vez la encuentro por el mundoy pasa junto a mí;

Page 25: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

y pasa riéndose y yo digo:¿Cómo puede reír?

Page 26: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

Luego asoma a mi labio otra sonrisa,máscara del dolor,

Page 27: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

y entonces pienso: —Acaso ella se ríe,como me río yo.

Page 28: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

Volverán las oscuras golondrinas en tu balcón sus nidos a colgar, y otra vez con el ala a tus cristales         jugando llamarán.

Page 29: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

Pero aquellas que el vuelo refrenaban tu hermosura y mi dicha al contemplar, aquellas que aprendieron nuestros nombres...         ¡esas... no volverán!.

Page 30: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

Volverán las tupidas madreselvas de tu jardín las tapias a escalar, y otra vez a la tarde aún más hermosas         sus flores abrirán.

Page 31: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

Pero aquellas, cuajadas de rocío Pero aquellas, cuajadas de rocío cuyas gotas mirábamos temblar cuyas gotas mirábamos temblar y caer como lágrimas del día... y caer como lágrimas del día...         ¡esas... no volverán!         ¡esas... no volverán!

Page 32: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

Volverán del amor en tus oídos las palabras ardientes a sonar; tu corazón de su profundo sueño         tal vez despertará.

Page 33: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

Pero mudo y absorto y de rodillas como se adora a Dios ante su altar, como yo te he querido...; desengáñate,         ¡así nadie te querrá!

Page 34: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.
Page 35: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.
Page 36: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.
Page 37: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.
Page 38: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.
Page 39: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.
Page 40: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.
Page 41: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

Hoy como ayer, mañana como hoy,¡y siempre igual!Un cielo gris, un horizonte eternoy andar... andar.Moviéndose a compás como una estúpidamáquina el corazón:la torpe inteligencia del cerebrodormida en un rincón.El alma, que ambiciona un paraíso,buscándole sin fe;fatiga sin objeto, ola que ruedaignorando por qué.Voz que incesante con el mismo tonocanta el mismo cantar,gota de agua monótona que cae,y cae sin cesar.Así van deslizándose los díasunos de otros en pos,hoy lo mismo que ayer... y todos ellossin gozo ni dolor.¡Ay! ¡a veces me acuerdo suspirandodel antiguo sufrir!¡Amargo es el dolor; pero siquierapadecer es vivir!

De lo poco de vida que me restadiera con gusto los mejores años,por saber lo que a otrosde mí has hablado.Y esta vida mortal y de la eternalo que me toque, si me toca algo,por saber lo que a solasde mí has pensado.

Tú eras el huracán y yo la altatorre que desafía su poder:¡tenías que estrellarte o que abatirme!...¡No pudo ser!Tú eras el océano y yo la enhiestaroca que firme aguarda su vaivén:¡tenías que romperte o que arrancarme!...¡No pudo ser!Hermosa tú, yo altivo: acostumbradosuno a arrollar, el otro a no ceder;la senda estrecha, inevitable el choque...¡No pudo ser!

Page 42: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

Como en un libro abiertoleo de tus pupilas en el fondo.¿A qué fingir el labiorisas que se desmienten con los ojos?¡Llora! No te avergüencesde confesar que me quisiste un poco.¡Llora! Nadie nos mira.Ya ves; yo soy un hombre... y también lloro.

Alguna vez la encuentro por el mundoy pasa junto a mí;y pasa sonriéndose y yo digo:¿Cómo puede reír?Luego asoma a mi labio otra sonrisa,máscara del dolor,y entonces pienso: —Acaso ella se ríe,como me río yo.

   Volverán las oscuras golondrinas en tu balcón sus nidos a colgar, y otra vez con el ala a tus cristales         jugando llamarán.   Pero aquellas que el vuelo refrenaban tu hermosura y mi dicha al contemplar, aquellas que aprendieron nuestros nombres...         ¡esas... no volverán!.   Volverán las tupidas madreselvas de tu jardín las tapias a escalar, y otra vez a la tarde aún más hermosas         sus flores abrirán.   Pero aquellas, cuajadas de rocío cuyas gotas mirábamos temblar y caer como lágrimas del día...         ¡esas... no volverán!   Volverán del amor en tus oídos las palabras ardientes a sonar; tu corazón de su profundo sueño         tal vez despertará.   Pero mudo y absorto y de rodillas como se adora a Dios ante su altar, como yo te he querido...; desengáñate,         ¡así... no te querrán!

Page 43: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

Amarte es mi pecado,por no entender que nunca fuiste mía,por las ganas de llenar este vacío que se formó entre el sentimiento y la razón.

Amarte es mi pecado.�Amarte es mi pecado, por no entender que nunca fuiste mía,por las ganas de llenar este vacío que se formó entre el sentimiento y la razón.Amarte es mi pecado.�Amarte es mi pecado.�

Amarte es mi pecado.�Amarte como lo hice yo, sin darle tregua al sentimiento,resulta siempre un juego peligroso, porque al final el que más dio es el perdedor.

Amarte como lo hice yo, vaciándome por ti los díasgasté cien mil palabras en el viento, me entregué a cada momentopara verte feliz.

Amarte es mi pecado, porque adorarte fue una fantasía,porque quererte fue una tontería y le hice caso al corazón.

Amarte como lo hice yo,sin limite en el horizonte,Resulta siempre un juego peligroso, porque al final el que mas dio es el perdedor.

Amarte como lo hice yo, vaciándome por ti la vidagasté cien mil palabras en el viento, me entregué a cada momentopara hacerte feliz.Amarte es mi pecado, porque adorarte fue una fantasía,porque quererte fue una tontería y le hice caso al corazón.

Amarte es mi pecado, por no entender que nunca fuiste mía.Por las ganas de llenar este vacío, que se formó entre el sentimiento y la razón.

Page 44: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.
Page 45: Bécquer Cristhian Edwin Rodríguez Hoy como ayer, mañana como hoy, ¡y siempre igual! Ratón, no, por favor.

No cortes, si quieres seguir escuchando