BITÁCORA DE LA COTIDIANIDAD Dios los cría… · el Chalán para oponerse a la paz y ... tiene su...

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10 EL NUEVO SIGLO / miércoles 5 De octubre De 2016 / OPINIÓN “Ciudadanos y bancos deben extremar medidas preventivas” Gral (r.) Ernesto Gilibert “Uribe y Ordóñez serán pareja para campaña presidencial de 2018” Fernando Navas Talero “Prudente es repensar la reforma tributaria” Jaime Pinzón López L as imágenes del encuentro del señor Uribe, “ Chalán del Ubé- rrimo”, y de Ordóñez , “ Savonarola del piso 18”, en el escenario de Car- tagena , con motivo de la firma del Acuerdo de Paz, evoca la novela de Goethe, “Afinidades electivas”: ese misterioso imán que, al igual que en la química de los minerales, hace que unos metales se atraigan y otros se repelen con magia diabó- lica, como describe este fenómeno de la condición humana el creador de Fausto. Efectivamente, los “Ex”, se unen amorosamente en sus pro- pósitos guerreros y cada uno aporta a su ideológico matrimonio una cuota de fanatismo vengador para fortalecer su improvisado contuber- nio político, al igual que sucede en la novela evocada. Pero lo que más preocupa de esta historia es la similitud entre estos dos alienados por el poder y el con- sorcio histórico político vivido entre Rafael Núñez y Miguel Antonio Caro, precisamente con el telón de fondo de “El Cabrero”, la casa de re- creo de la amante del “regenerador”, localizada en la Ciudad Heroica, lugar a donde se refugia el reelegido cuatro veces presidente , mientras su títere ejecuta sus órdenes como su “Vice”, después de ser su amanuense en la redacción de la totalitaria Carta Política de 1886 Lo curioso de la afinidad entre estos personajes es el vínculo que los une: el fanatismo político-reli- gioso. Igualmente la personalidad dual del íncubo que llega al poder apoyado por el liberalismo y ter- mina fundando un partido político distinto, y el súcubo mojigato e intransigente apasionado, discípulo incondicional de los jesuitas, igual- mente aferrado al poder a tal colmo que para ejercerlo detrás del trono se vale del anciano Sanclemente, estrategia causa de la pérdida de Panamá y la traición de su “colega” Marroquín. El Savonarola de hoy, imitando al Papa Alejandro “VI”, se alía con el Chalán para oponerse a la paz y capitalizar la guerra. Se pronostica que serán pareja para la campaña presidencial del 2018. Una suma de personalidades políticas enfermas por el poder y el fanatismo religioso. Ordóñez es fruto de su educación de seminarista y de ahí su fanático catolicismo. Es una de las coinciden- cias de personalidad con su socio futuro, un hecho relevante que des- pierta inquietudes con respecto a la teoría de las “afinidades electivas”: Dios los cría y ellos se juntan. Su egolatría los hace seme- jantes, recuérdese el matrimonio de sus hijos, Natalia Ordóñez con el destituido Daniel Palias y de Tomas Uribe y la exreina Sofía Cabrales, hay un gran parecido de soberbia. Son detalles domésticos, auténti- cos, que revelan la personalidad de sus protagonistas. Ahora, después del fallo del pue- blo, producto de la pasión y no de la razón, el discurso de esta pareja será el alegato que lo movilizará para elegir una Asamblea Constituyen- te que redima a estos líderes de la venganza y los lleve al poder. ¡Pobre pueblo ignorante de su historia! E n la columna de la semana pasa- da nos dirigíamos a los ciudada- nos invitándolos a prevenir algunos delitos, que en el entorno asechan permanentemente su seguridad e integridad y nos referíamos a la prudencia en lugares públicos, como también sobre las llamadas millona- rias que tanto daño han causado en el país. Hoy ante la reacción civil que provocó la muerte del joven Yeison Méndez, víctima de un fleteo en la localidad de Kennedy, es obligado referirnos un poco a esa modali- dad delictiva, independiente de la avalancha de comentaros surgida en los medios. Lo primero es tener conciencia de las calidades crimi- nales de los hombres dedicados al fleteo, por tratarse de una actividad que demanda alto nivel de agresi- vidad y violencia; se trata de un artero delincuente convencido de su superioridad frente al objetivo, quién no cejará en la intención de lograr su cometido, como es despo- jar del dinero a la víctima y si para ello es necesario segar la vida de las personas no lo dudan un instante, así sean transeúntes ocasionales en el lugar, no olvidemos que estamos ante un grupo delictivo que se apoya entre sí al momento de atacar, cir- cunstancia que hace más vulnerable al ciudadano. El primer llamado es para la co- munidad, que se debe comprometer para evitar caer en manos de estos maleantes, apoyando y ayudando a la policía en velar por su seguri- dad e integridad, y para lograrlo, se recomienda no manejar altas sumas en efectivo. Para ello existen a más de los cheques de gerencia, mucha formas para hacer transacciones bancarias, y en caso de ser imposible obviar estos movimientos, se debe recurrir a un grupo acompañante. La policía presta ese servicio de manera gratuita, además, estas actividades en efectivo deben contar con una total reserva, circunscrita solo a las personas involucradas en la opera- ción. El segundo llamado lo dirigi- mos a las entidades bancarias, pues no se escapa del ideario público, que en varios fleteos, estén comprome- tidos empleados de la entidad, una queja algo riesgosa por lo difícil de comprobar. Pero ante la duda seria saludable tomar medidas preventi- vas, como la prohibición a estos fun- cionarios de utilizar celulares dentro de la entidad y menos en horas de trabajo, restringir la comunicación externa o por lo menos monitorearla y, como existen códigos manuales, proteger los vidrios del banco con películas oscuras lo que blindaría el interior de miradas y comunicacio- nes con la periferia. Sumando a lo anterior la prohibición de parquear vehículos, motos y aun controlar la presencia de personas sospechosas sin objeto claro en los contornos de la entidad. Una vigilancia externa contratada por el banco sería acon- sejable. Por último, herramientas del fletero, las motos, las armas, un vehículo, los celulares, y el grupo. Alternativas del ciudadano: cargar poco dinero o si debe hacerlo pedir acompañamiento y sigilo. E l triunfo del No en el plebiscito, la invali- dación popular del Acuerdo de 297 páginas suscritas por los negociadores del Gobierno con las Farc, no implica que los colombianos estemos contra la paz, sino que lo pactado debe revisarse en aspectos como el de la justicia especial integrada por instancias extranjeras, una para los involucrados en la comisión de delitos atroces y otra la constitucional. No puede desmantelarse la rama judicial y no hay dere- cho contra derecho. Quienes van a ser juzgados no eligen sus jueces. Igual ocurre con la no aceptación de otorgar calidad de delito político al narcotráfico, de dispensar concesiones en oposición a la igualdad. A pesar de la abstención de más del sesen- ta por ciento, de los aguaceros, en una jorna- da positiva, el pueblo decidió y el presidente Juan Manuel Santos en alocución afortunada aceptó la determinación. “Timochenko,” tras conocer el adverso resultado leyó un comuni- cado en el cual reitera que la guerrilla man- tiene su voluntad de paz, reafirmó la “disposi- ción de usar solamente la palabra como arma de construcción hacia el futuro” y el expre- sidente Álvaro Uribe Vélez, principal líder del movimiento por el No y jefe del Centro Democrático, al igual que dirigentes parti- darios de esta opción, recibieron la noticia con tranquilidad, utilizando el verbo corregir, insistiendo en la unidad nacional. El camino del dialogo no fue revocado ni se cierra la op- ción de actuar con inteligencia y sensatez, ni desconocemos la labor de los negociadores. El cese al fuego bilateral se mantiene. Ojalá sea posible concertar el gran consenso nacional. El empecinamiento y la vanidad no son buenos consejeros, el respaldo al No es un voto castigo contra los políticos introductores de “micos y orangutanes” en la abultada iniciativa del blo- que de constitucionalidad. El Presidente de la República mantiene su fuero y atribuciones, ninguno disiente del per- dón ni de la reparación a las víctimas, ni de la necesidad de la amnistía, ni de la aplicación de penas menos rigurosas a quienes sinceramen- te digan la verdad, ni de la voluntad de seguir adelante en forma coordinada, ni de permitir la participación de las Farc en política con las garantías suficientes para adelantar la actividad proselitista. Lo anterior está claro. No era cierta la advertencia de que si se votaba por el No sobrevendrían la guerra y el caos. Eso no ha sucedido ni ocurrirá. Prudente es repensar la reforma tributaria porque el voto del plebiscito se extiende a evitar la aprobación de impuestos injustos. Apoyo las correcciones al borrador de acuerdo de paz para lograr que sea duradera y estable. BITÁCORA DE LA COTIDIANIDAD Dios los cría… PRISMA El flagelo del fleteo LO QUE SIGUE Por un Acuerdo mejor

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10 EL NUEVO SIGLO / miércoles 5 De octubre De 2016 / OPINIóN 10 EL NUEVO SIGLO / miércoles 5 De octubre De 2016 / OPINIÓN

“Ciudadanos y bancos deben

extremar medidas preventivas”

Gral (r.) Ernesto Gilibert

“Uribe y Ordóñez serán pareja

para campaña presidencial de 2018”

Fernando Navas Talero

“Prudente es repensar la reforma

tributaria”

Jaime Pinzón LópezLas imágenes del encuentro del señor Uribe, “ Chalán del Ubé-

rrimo”, y de Ordóñez , “ Savonarola del piso 18”, en el escenario de Car-tagena , con motivo de la firma del Acuerdo de Paz, evoca la novela de Goethe, “Afinidades electivas”: ese misterioso imán que, al igual que en la química de los minerales, hace que unos metales se atraigan y otros se repelen con magia diabó-lica, como describe este fenómeno de la condición humana el creador de Fausto. Efectivamente, los “Ex”, se unen amorosamente en sus pro-pósitos guerreros y cada uno aporta a su ideológico matrimonio una cuota de fanatismo vengador para fortalecer su improvisado contuber-nio político, al igual que sucede en la novela evocada.

Pero lo que más preocupa de esta historia es la similitud entre estos dos alienados por el poder y el con-sorcio histórico político vivido entre Rafael Núñez y Miguel Antonio Caro, precisamente con el telón de fondo de “El Cabrero”, la casa de re-creo de la amante del “regenerador”, localizada en la Ciudad Heroica, lugar a donde se refugia el reelegido

cuatro veces presidente , mientras su títere ejecuta sus órdenes como su “Vice”, después de ser su amanuense en la redacción de la totalitaria Carta Política de 1886

Lo curioso de la afinidad entre estos personajes es el vínculo que los une: el fanatismo político-reli-gioso. Igualmente la personalidad dual del íncubo que llega al poder apoyado por el liberalismo y ter-mina fundando un partido político distinto, y el súcubo mojigato e intransigente apasionado, discípulo incondicional de los jesuitas, igual-mente aferrado al poder a tal colmo que para ejercerlo detrás del trono se vale del anciano Sanclemente, estrategia causa de la pérdida de Panamá y la traición de su “colega” Marroquín.

El Savonarola de hoy, imitando al Papa Alejandro “VI”, se alía con

el Chalán para oponerse a la paz y capitalizar la guerra. Se pronostica que serán pareja para la campaña presidencial del 2018. Una suma de personalidades políticas enfermas por el poder y el fanatismo religioso. Ordóñez es fruto de su educación de seminarista y de ahí su fanático catolicismo. Es una de las coinciden-cias de personalidad con su socio futuro, un hecho relevante que des-pierta inquietudes con respecto a la teoría de las “afinidades electivas”: Dios los cría y ellos se juntan.

Su egolatría los hace seme-jantes, recuérdese el matrimonio de sus hijos, Natalia Ordóñez con el destituido Daniel Palias y de Tomas Uribe y la exreina Sofía Cabrales, hay un gran parecido de soberbia. Son detalles domésticos, auténti-cos, que revelan la personalidad de sus protagonistas.

Ahora, después del fallo del pue-blo, producto de la pasión y no de la razón, el discurso de esta pareja será el alegato que lo movilizará para elegir una Asamblea Constituyen-te que redima a estos líderes de la venganza y los lleve al poder. ¡Pobre pueblo ignorante de su historia!

En la columna de la semana pasa-da nos dirigíamos a los ciudada-

nos invitándolos a prevenir algunos delitos, que en el entorno asechan permanentemente su seguridad e integridad y nos referíamos a la prudencia en lugares públicos, como también sobre las llamadas millona-rias que tanto daño han causado en el país.

Hoy ante la reacción civil que provocó la muerte del joven Yeison Méndez, víctima de un fleteo en la localidad de Kennedy, es obligado referirnos un poco a esa modali-dad delictiva, independiente de la avalancha de comentaros surgida en los medios. Lo primero es tener conciencia de las calidades crimi-nales de los hombres dedicados al fleteo, por tratarse de una actividad que demanda alto nivel de agresi-vidad y violencia; se trata de un artero delincuente convencido de su superioridad frente al objetivo, quién no cejará en la intención de lograr su cometido, como es despo-jar del dinero a la víctima y si para ello es necesario segar la vida de las personas no lo dudan un instante, así sean transeúntes ocasionales en

el lugar, no olvidemos que estamos ante un grupo delictivo que se apoya entre sí al momento de atacar, cir-cunstancia que hace más vulnerable al ciudadano.

El primer llamado es para la co-munidad, que se debe comprometer para evitar caer en manos de estos maleantes, apoyando y ayudando a la policía en velar por su seguri-dad e integridad, y para lograrlo, se recomienda no manejar altas sumas en efectivo. Para ello existen a más de los cheques de gerencia, mucha formas para hacer transacciones bancarias, y en caso de ser imposible obviar estos movimientos, se debe recurrir a un grupo acompañante. La policía presta ese servicio de manera gratuita, además, estas actividades en efectivo deben contar con una total reserva, circunscrita solo a las personas involucradas en la opera-

ción. El segundo llamado lo dirigi-mos a las entidades bancarias, pues no se escapa del ideario público, que en varios fleteos, estén comprome-tidos empleados de la entidad, una queja algo riesgosa por lo difícil de comprobar. Pero ante la duda seria saludable tomar medidas preventi-vas, como la prohibición a estos fun-cionarios de utilizar celulares dentro de la entidad y menos en horas de trabajo, restringir la comunicación externa o por lo menos monitorearla y, como existen códigos manuales, proteger los vidrios del banco con películas oscuras lo que blindaría el interior de miradas y comunicacio-nes con la periferia. Sumando a lo anterior la prohibición de parquear vehículos, motos y aun controlar la presencia de personas sospechosas sin objeto claro en los contornos de la entidad. Una vigilancia externa contratada por el banco sería acon-sejable.

Por último, herramientas del fletero, las motos, las armas, un vehículo, los celulares, y el grupo. Alternativas del ciudadano: cargar poco dinero o si debe hacerlo pedir acompañamiento y sigilo.

El triunfo del No en el plebiscito, la invali-dación popular del Acuerdo de 297 páginas

suscritas por los negociadores del Gobierno con las Farc, no implica que los colombianos estemos contra la paz, sino que lo pactado debe revisarse en aspectos como el de la justicia especial integrada por instancias extranjeras, una para los involucrados en la comisión de delitos atroces y otra la constitucional. No puede desmantelarse la rama judicial y no hay dere-cho contra derecho. Quienes van a ser juzgados no eligen sus jueces. Igual ocurre con la no aceptación de otorgar calidad de delito político al narcotráfico, de dispensar concesiones en oposición a la igualdad.

A pesar de la abstención de más del sesen-ta por ciento, de los aguaceros, en una jorna-da positiva, el pueblo decidió y el presidente Juan Manuel Santos en alocución afortunada aceptó la determinación. “Timochenko,” tras conocer el adverso resultado leyó un comuni-cado en el cual reitera que la guerrilla man-tiene su voluntad de paz, reafirmó la “disposi-ción de usar solamente la palabra como arma de construcción hacia el futuro” y el expre-sidente Álvaro Uribe Vélez, principal líder del movimiento por el No y jefe del Centro Democrático, al igual que dirigentes parti-darios de esta opción, recibieron la noticia con tranquilidad, utilizando el verbo corregir, insistiendo en la unidad nacional. El camino del dialogo no fue revocado ni se cierra la op-ción de actuar con inteligencia y sensatez, ni desconocemos la labor de los negociadores.

El cese al fuego bilateral se mantiene. Ojalá sea posible concertar el gran consenso nacional. El empecinamiento y la vanidad no son buenos consejeros, el respaldo al No es un voto castigo contra los políticos introductores de “micos y orangutanes” en la abultada iniciativa del blo-que de constitucionalidad.

El Presidente de la República mantiene su fuero y atribuciones, ninguno disiente del per-dón ni de la reparación a las víctimas, ni de la necesidad de la amnistía, ni de la aplicación de penas menos rigurosas a quienes sinceramen-te digan la verdad, ni de la voluntad de seguir adelante en forma coordinada, ni de permitir la participación de las Farc en política con las garantías suficientes para adelantar la actividad proselitista. Lo anterior está claro.

No era cierta la advertencia de que si se votaba por el No sobrevendrían la guerra y el caos. Eso no ha sucedido ni ocurrirá. Prudente es repensar la reforma tributaria porque el voto del plebiscito se extiende a evitar la aprobación de impuestos injustos. Apoyo las correcciones al borrador de acuerdo de paz para lograr que sea duradera y estable.

BITÁCORA DE LA COTIDIANIDAD

Dios los cría…

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El flagelo del fleteo

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