La segunda venida:

1. Tiempo de la segunda venida:

a) Cristo realmente volverá:

«Y si me voy y se lo preparo, vendré para llevármelos conmigo. Así ustedes estarán donde yo esté» (Jn 14:3).

«El Señor mismo descenderá del cielo con voz de mando, con voz de arcángel y con trompeta de Dios» (1 Ts 4:16).

Santiago escribió: «Aguarden con paciencia la venida del Señor, que ya se acerca» (Stg 5:8).

«Sí, vengo pronto» y la respuesta de Juan: «Amén. ¡Ven, Señor Jesús!» (Ap 22:20).

b) No sabemos cuándo:

Por eso también ustedes deben estar preparados, porque el Hijo del hombre vendrá cuando menos lo esperen» (Mt 24:44).

Jesús dijo: «Pero en cuanto al día y la hora, nadie lo sabe, ni siquiera los ángeles en el cielo, ni el Hijo, sino sólo el Padre. ¡Estén alertas! ¡Vigilen! Porque ustedes no saben cuándo llegará ese momento» (Mr 13:32-33).

Su retorno será: Inminente, pero repentino e inesperado.

La única señal inconfundible será que Antes, habrá una Predicación del evangelio a todas las naciones (Mateo 24:14).

Cuidado con señales falsas... como en todo tema, hay que acudir a la Biblia.

c) ¿Cómo estar preparados?: Hechos 1:6-8:

Entonces los que se habían reunido le preguntaron, diciendo: Señor, ¿restaurarás el reino a Israel en este tiempo? Y les dijo: No os toca a vosotros saber los tiempos o las sazones, que el Padre puso en su sola potestad; pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra.

Si bien no sabemos cuándo Cristo viene, debemos estar preparados, y la forma de estarlo, es siendo testigos.

2. Propósito de la segunda venida:

a. La resurrección de los muertos y la transformación de los que estén con vida (1° Tes 4:16, 1° Cor 15:23 y 15:52).

b. El juicio final de la humanidad.

Para los incrédulos será su condenación definitiva. Los salvos estarán eternamente con Dios en su reino celestial.