Si los Reyes Magos de Oriente hubieran sospechado que 2.000 años después de suprimera llegada, los juguetes que se fabrican en aquellas tierras suponen el 80% de lasalertas que las autoridades de consumo emiten, por su inseguridad y falta de calidad,poniendo en riesgo la salud de los más pequeños de la casa, seguro que hubieranocultado su apellido geográfico.

La Unión Europea es un espacio altamente protegido, pero sigue teniendo fisuras, másprofundas según se van ampliando las fronteras con la incorporación de nuevos miem-bros. De nada sirve ser muy exigentes con quienes viven en la Unión fabricandojuguetes, si luego nos llegan de terceros países millones de artículos que no cumplencon las mínimas normas de seguridad, calidad e información al consumidor.

Las normas bajo las que trabajan los fabricantes deterceros países son las que sus respectivos gobiernosdictan, normalmente, mucho menos exigentes quelas europeas. Por eso, nuestras autoridades debencontrolar lo que llega a nuestros comercios; pero tam-bién los importadores, distribuidores y minoristas debenponer de su parte para no poner en nuestro mercadojuguetes que no sean completamente seguros.

Por último, si todo eso falla, nos queda apelar a laresponsabilidad de sus Majestades, los Reyes Magos,cuando encaren las estanterías en busca de los sueños de quienes, cada año, lesescriben poniendo toda su ilusión en cada línea. Contentarlos es importante; pero loes aún más asegurarse de que lo que encuentren dentro del paquete que llevan todoel año esperando, no va a provocarles ningún daño. La infancia es un colectivo deespecial protección, según nuestro Estatuto de los Consumidores, pero si al problemade los juguetes añadimos, por ejemplo, el de las chucherías denunciadas por UCE enlas últimas semanas, vemos que, más bien, están especialmente desprotegidos.

Y no olviden que el juguete más aprovechable es aquel que nos permite jugar sólo conla imaginación. Un libro es más que un entretenimiento, y debe ocupar un lugar deprivilegio en los sacos de sus Majestades.

consumidorex

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colaboradorescristina rivero morenojosé manuel cabrera floresmª ángeles fernández pérezpetri fernández sánchez

impresióngráficas rejas

depósito legalBA-114-2001

ISSN 1888-6264

Hablamos de una industria que se caracteriza por serdinámica y crear muchas oportunidades de negocioa su paso. En sus inicios era un negocio llevado acabo por un pequeño grupo de profesionales, queconsumían parte del presupuesto total, pero, a medi-da que aumentaba la sofisticación de los juegos, setransformó en un proceso muy complejo y que ibarequiriendo más tiempo y trabajo de distintos profe-sionales, en diversos sectores, desde diseñadores,programadores, artistas, músicos, guionistas, direc-tores y hasta actores y acróbatas.

Es un negocio formado por una cadena deeslabones que comienza con los desarrolladores,quienes se encargan del diseño creativo de la idea,el guión argumental y la elección de la tecnologíaque usarán para su desarrollo. La tecnología irá liga-da a seleccionar el canal por el cual se jugará: con-sola, ordenador, teléfono móvil, dispositivos ma-nuales, on-line, etc. Por otro lado, están los fabri-cantes de consolas, entre los más populares, Sony,Nintendo y Microsoft, que compiten con sus equipos,como Playstation, Wii y Xbox. Ellos son la locomotorade esta industria y realizan importantes inversiones encrear productos y en marketing. Los publicadoressiguen a los desarrolladores en la cadena y hacenque el videojuego se pueda elaborar por losprimeros, para transformarlo en producto final ypueda ser comercializado, de manera que llegue alusuario final, que no es otro que el jugador. Pero,para ello, hay que organizar el desarrollo del juego,su marketing, financiación, precios y la relación conlos distribuidores y minoristas, que son el tercereslabón de la cadena. Los minoristas tienen mayorinfluencia por su cercanía al consumidor y al serviciode asesoramiento que ofrecen.

El sector en España y EuropaEspaña asume la cuarta posición en el ranking euro-peo de ventas de videojuegos, por detrás de ReinoUnido, Francia y Alemania y superando a paísescomo Italia y Holanda; alcanzó los 744 millones deeuros en ventas de software y un incremento del3,5% con respecto al año 2007. A escala mundial las

ventas en 2008 llegaron a los 38.514millones de euros, registrándose un cre-cimiento del 15,2% en relación a 2007.

Con respecto a los “Usos y Hábitos devideojuegos on line, en España”, segúnun estudio del Observatorio del Video-juego, los jóvenes de 14 a 17 años sonlos más aficionados a este tipo devideojuegos (el 86% juega on-line, almenos cada quince días). Le sigue lafranja de 18 a 24 años, con un 45% quelo hace y, al menos, el 20% de usuariosde 45 a 54 años juega también por lomenos cada quince días. Estos usuariosinteractúan con otros jugadores y lamayor parte acceden de forma legal,pero hay un 19% de jóvenes de 14 a 17años que se descargan el juego deInternet de forma ilícita.

La cara y la cruz del negocioUn serio obstáculo en este sector es lapiratería. El mercado de los videojuegosen España no está exento de esta pro-blemática. Según el primer Observatoriode Piratería y Hábitos de Consumo deContenidos Digitales en España, que ha-ce referencia a los últimos seis meses de2009, la tasa media de piratería es del52,3% en este sector. Es un porcentajemenor comparado con el dato de con-sumo ilegal medio de otros sectores co-mo el del cine y la música (76 y 84%),pero aún así supone pérdidas quehacen que se resienta esta industria.

Sin embargo, nos encontramos enun sector donde el cambio esconstante y aunque los datosrecientes presentados en la 4ªedición de la FICOD (ForoInternacional de ContenidosDigitales) informan que dis-minuyó su facturación un14,2% con respecto a2008, las prediccionespara los próximos añosson muy favorables. Sepresentan grandes o-portunidades con lallegada de nuevosdispositivos, así

como el aumentodel uso y la cober-tura de la bandaancha fija y móvil,que van a tener unimpacto muy po-sitivo en el mer-cado de losvideojuegos ei m p u l s a r á nfuertementeesta activi-dad, sobre to-do en su ver-tiente “online”.Así, según da-tos del propiosector, duranteel primer trimes-tre del 2010 elmercado del vi-deojuego se incre-mentó un 10% so-bre el mismo periododel año anterior.

No es por casualidad que los mensajes emitidos porfabricantes y comerciantes relacionados con losjuguetes se concentren en el último mes del año: secalcula que en Navidad se mueve el 80% del volu-men de negocio del sector juguetero. La publicidaden los medios de comunicación y en nuestrosbuzones nos recuerda que se acercan Papá Noel ylos Reyes Magos, y que es hora de que los máspequeños escriban sus cartas.

Pero también es este el momento en el que las aso-ciaciones de consumidores y las instituciones públi-cas que velan por nuestra seguridad, tanto sanitariacomo económica, hacen un llamamiento a laresponsabilidad de los padres para que repasen lascartas de sus hijos y comprueben que lo que en ellashan escrito no pueden convertir sus sueños enpesadillas.

Y no es un mensaje alarmista sin fundamen-to. Rapex, que es como se llama el Sistemade Alerta Rápida de la Unión Europea deproductos peligrosos para los consumidores,que incluye todo tipo de artículos exceptocomida, medicamentos y productos sanita-rios, ha lanzado, sólo en lo que va de año,471 alertas relacionadas con juguetes. Yesta cifra se eleva a 2.401 sin contabilizamoslas emitidas desde que se creó esta base dedatos, en el año 2005.

Por qué se retira un jugueteCuando un fabricante europeo produceun juguete, debe cumplir una serie derequisitos muy estrictos encaminados aproporcionar una tripe protección alconsumidor: información, calidad yseguridad. Como es lógico, estos mis-mos requisitos se le exige a cualquierproducto fabricado en terceros paísesque quiera entrar en nuestras fronteras.

Pero, en muchas ocasiones, ejercer elcontrol sobre lo que llega a nuestro mer-cado es prácticamente imposible. Porejemplo, tomemos el tráfico marítimoque cada día entra en nuestro país conmercancías de todo tipo. En los 46 puer-tos españoles de interés generalentraron, sólo en los siete primerosmeses de este año, casi 245 millones de

toneladas de mercancías. ¿Es posiblecontrolar semejante volumen de artícu-los? Evidentemente, no. Y, aunque lofuera, el barco rechazado probaría enBarcelona, en Marsella, en Amsterdam oen cualquier otro punto de entrada alespacio comunitario. Y, una vez dentrode él, podría moverse librementetraspasando unas fronteras interioresque prácticamente no existen.

Llegamos a la conclusión, pues, de quees imposible evitar que se pongan a laventa en la Unión Europea juguetes que,de forma más o menos grave,incumplen la normativa.

Por eso, es vital el correcto fun-cionamiento de la Red de Alertas, quees capaz de, una vez detectado un

tiva. Afortunadamente, en Extremaduradispondremos de uno de estos laborato-rios en 2011, y el Instituto de Consumo,además, lo ha puesto a disposición delas asociaciones de consumidores. Sinduda, será una herramienta muypoderosa para proteger mejor a uncolectivo especialmente vulnerablecomo es la infancia.

Hasta entonces, debemos confor-marnos con comprobar si los juguetesreunen los requisitos más visibles que sele exigen, es decir, los que deben ha-cerse constar en su etiquetado.

Dado que el 80% de las alertasrecibidas por el Instituto Nacional delConsumo son provocadas por produc-tos fabricados en China, hemos visitadovarios establecimientos de comercioasiático para comprobar el etiquetadode los miles de juguetes que ofrecen ensus estanterías. Y hemos observado uncambio de tendencia.

Hasta hace poco, los productos fabrica-dos en el país asiático incumplían sis-temáticamente una de las obligacionesprimordiales de todo etiquetado: ofre-cer la información en la lengua oficialdel país en el que se ponía a la venta.En varias ocasiones hemos denunciado

El 80% de losjuguetes retirados sonfabricados enChina

el dato juguete peligroso, poner en marcha unmecanismo de comunicación quepropaga la alerta por todo el territoriocomunitario casi en tiempo real, permi-tiendo la retirada de ese producto enmuy breve espacio de tiempo.

En general, se retira cualquier jugueteque no cumpla con la normativa euro-pea, principalmente, con la norma EN71, que detalla en sus once apartadoslos requisitos de seguridad de todo tipode juguetes en cuanto a sus caracterís-ticas físicas, químicas, inflamabilidad,resistencia, etc.

La situación en EspañaDe todos los problemas que puedegenerar un juguete que no cumpla lanormativa, los más graves son, sin duda,los que afectan a su seguridad. Porejemplo, si se rompe con facilidadgenerando piezas pequeñas o bordescortantes, si está fabricado con produc-tos tóxicos o si la pintura que lo adornacontiene plomo. Para el consumidor dea pie, resulta imposible saber si eljuguete que tiene en la mano puedetener alguno de esos problemas. Poreso, las autoridades competentes rea-lizan todo tipo de controles en laborato-rios homologados para certificar que undeterminado juguete cumple la norma-

desde estas páginas la existencia ennuestro mercado de productos de todotipo (desde juguetes hasta cosméticos)cuya etiqueta aparecía escrita sólo enchino o, a lo sumo, en inglés.

Sin embargo, esto ha cambiado. Lainmensa mayoría de los productos estu-diados tienen, en la parte trasera de suembalaje, una pegatina en la que seadvierte de que de deben ser usadospor niños menores de 36 meses, asícomo de la identidad y dirección delimportador. Estas pegatinas son adheri-das por el propio distribuidor, nunca porel fabricante o el vendedor, que fabricamiles para todo tipo de artículos. Esoprovoca algunos problemas de incon-gruencia, como se explica en el cuadroadjunto, pues hay artículos en los que,en inglés, se indica que la edad mínimarecomendada es de 6 años, mientrasque la que figura en español, la rebajahasta 36 meses. Una situación quepuede confundir gravemente al con-sumidor.

Crear una etiqueta adhesiva idénticapara distintos tipos de juguetes no nosparece la forma idonea de preservar elderecho a la información de los con-sumidores, aunque la generalización dela advertencia de la edad mínima

recomendada es un paso importante.

En otros casos, lo que no aparece es ladirección del fabricante o importador,por lo que, de surgir algún problema,sería muy difícil trasladar nuestra recla-mación al responsable del juguete,incluso para las autoridades compe-tentes.

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sistema social europeo es, afortunada-mente para quienes vivimos en él, privi-legiado para los trabajadores, quegozamos de unas óptimas condicioneslaborales y un salario, cuanto menos,digno. Sin embargo, la situación decientos de millones de personas en otrospaíses no es tan buena. Trabajar de sola sol por un plato de comida, indepen-dientemente de la edad que se tenga,permite a quienes explotan este tipo desistema, producir muy barato.

También es más barato arrojar los dese-chos de la fábrica o los excedentes depintura al río cercano, que transportarloshasta la planta de reciclaje.

La elección de un juguete, como deotros muchos productos, no tiene unaúnica faceta individual. Si acertamos,contentaremos a nuestro hijo. Pero sitomamos en consideración nuestraimportancia como parte del mundo enel que vivimos, nuestra elección con-tentará, sin que seamos plenamenteconscientes de ello, a muchos queviven lejos de nosotros. Y quizás, tambiénellos, tengan este año Navidad.

Los padres, responsablesCuando compramos un juguete con“buena pinta” por dos o tres euros,debemos preguntarnos: ¿cómo puedeser tan barato?

Como padres responsables, debemosresponder buscando las causas en lobarato que resulta fabricarlo. Elcumplimiento de las normas técnicasde un juguete le cuesta mucho dinero alos fabricantes europeos. Los materialesde calidad, las pinturas libres deagentes tóxicos, los laboratorios en losque se realizan las pruebas de resisten-cia e idoneidad son, desde luego,mucho más caros que los que se utilizanen otros países. Eso permite asegurarque el juguete, no sólo es mejor, sinotambién más seguro. Por eso, nuestraelección debería ser clara y nunca estarmarcada exclusivamente por el precio:mejor pocos juguetes buenos, quemuchos malos o inseguros.

Pero también debemos responder aesta pregunta como seres humanos. Esverdad que la calidad de un juguete loencarece, pero también lo hace la ca-lidad de vida de quienes lo fabrican. El

Todos hemos visto alguna vez, en películaso en persona, una gran estantería repletade libros. Y muchos hemos pensado: “ojalápudiera yo tener una biblioteca así”. Pero elprecio de los libros y, sobre todo, el espaciodel que disponemos en casa, han hechoimposible materializar ese sueño.

Sin embargo, y como en infinidad de oca-siones, las nuevas tecnologías están ahípara ayudarnos, en este caso, a tener unabiblioteca que sería la envidia de cualquierparticular o institución, por grande que seasu colección de libros. La irrupción en elmercado del libro electrónico ha supuestouna revolución en la forma que hasta ahorateníamos de leer. Tienen una fantástica pan-talla, una gran autonomía y un completísimocatálogo de obras que podemos descargarfácilmente.

Pero, como sucede en telefonía móvil,donde los terminales cada vez se parecenmenos a un teléfono y más a un ordenador,la proliferación de fabricantes y modeloshace que cada nueva generación presentemás y más complementos que facilitan su

utilización o lo convierten en dispositivosmultimedia, es decir, capaces no sólode mostrarnos las páginas de un libro,sino también de permitirnos subrayar oanotar como en sus hermanos depapel, mientras escuchamos nuestramúsica favorita y estamos conectadosa nuestro perfil de Facebook. Todo eso,y mucho más, nos ofrecen los actualesebook o libros electrónicos.

Nuestra comparativaPara intentar orientar la compra del quese presume será uno de los regalosestrella de estas Navidades, hemostomado siete de los modelos más ven-didos en nuestro país con pantalla táctil.Empezando por sus dimensiones, esextraordinario que en un dispositivo quenunca supera los 20 centímetros de alto,los 13 de ancho y cuyo grosor es siem-pre menor de un centímetro y medio,

quepan miles de libros. Los ebook sonpequeños, delgados y muy ligeros: dosde ellos, el Grammata y el EnergySystem no llegan a los 200 gramos. Encualquier caso, llevarlo encima nuncaserá un problema por tamaño o peso.

En cuanto a la pantalla, ya hemos dichoque, en todos los casos, es táctil.Además, en los modelos de Booq yGrammata es capacitiva (ver cuadroadjunto), por lo que su sensibilidad esmayor. Un tamaño de 6 pulgadas(excepto el Energy System, de 5), seantoja suficiente para poder leer sin difi-cultad, pues supone una medida endiagonal de 15,2 centímetros, bastantemayor que la que presentan los telé-fonos móviles de última generación,cuya pantalla suele rondar las 4 pul-gadas. Otro aspecto importante, puesde ello dependerá la calidad de las ilus-

Sin duda, el éxito de los ebook dependerá en buena medida del catálogo deobras disponible. En la actualidad, la plataforma de distribución creada por losprincipales grupos editoriales (como Planeta o Santillana, a la que se han unidodespués otras como Anagrama o Edebé) ofrece sus servicios a través de 23 tien-das on-line y dispone de un catálogo de 1.876 obras en las lenguas oficiales delestado español. Pueden parecer muchas, pero, en realidad, es una cantidadridícula si la comparamos con el catálogo de Amazon, la mayor librería virtual delmundo, que pone a disposición de los clientes que compren su ebook (el Kindle,sólo disponible, de momento, en Estados Unidos), más de un millón de títulos.

Esta política, contra lo que piensan algunos en España, parece funcionar: en latienda de Amazon, en los 10 títulos más vendidos, las ventas de ebook ya doblana las de papel. Y eso que el gigante norteamericano tiene previsto comenzar apermitir el préstamo de libros electrónicos entre sus clientes, como haría con unlibro convencional.

¿Por qué esa diferencia? Además de otros factores, el precio puede ser decisivo.Por ejemplo, si tomamos la última novela de Ken Follet, “La caída de losgigantes”, y comparamos su precio en edición papel y electrónica en España,vemos que, siendo importante, la diferencia puede no ser decisiva: 24,99 y 16,99euros respectivamente, es decir, sobre un 35%. Sin embargo, en Amazon, la dife-rencia es del 62% (36,00 frente a 13,79 dólares).

traciones que muestre, es el número degrises que puede presentar: la mayoríatiene 16 niveles de grises, preferible a los8 de Energy System y Samsung. En todoslos casos, la resolución es idéntica, porlo que no se convierte en factor deter-minante para nuestra elección.

Cuántos libros cabenLa memoria disponible es el dato quenos indica cuántos libros seremoscapaces de almacenar, por lo que,cuanto mayor sea, mejor. Los 2 giga-bytes (GB) que ofrecen la mayoría seantojan más que suficientes, pues per-

miten alojar unos 1.800 libros, depen-diendo de su tamaño. Además, todosson ampliables mediante tarjetas dememoria externa de, en algunos casos,hasta 32 GB, lo que aumenta la capaci-dad hasta unos 30.000 libros. Más de loque podremos leer en varias vidas.

Muy importante también es laautonomía que nos permita la batería.Es curioso que, en el caso de los ebook,la duración se mide en páginas y no entiempo (excepto en la información deSony). Esto obedece a que la tec-nología utilizada en estos dispositivos

Acelerómetro: dispositivo electromecánico quemide las fuerzas de aceleración. Su aplicación prác-tica en los ebook permite cambiar la orientación dela pantalla si lo giramos, de forma que podremos uti-lizarlo en cualquier postura.

Impresora virtual: es un programa informático quetransforma cualquier documento que tengamos ennuestro ordenador a un formato legible desde nues-tro ebook, normalmente, pdf.

Niveles de grises: dado que los ebook comparadostienen la pantalla en blanco y negro, se valen de losgrises para, por ejemplo, representar imágenes con

degradados. Por ello, cuanto mayor sea el númerode grises que puede mostrar, de mayor calidad serála imagen mostrada.

Pantalla capacitiva: tecnología que permite unmayor brillo de la pantalla y, además, que puedanser utilizadas directamente con la mano o el dedo,sin necesidad de utilizar dispositivos como lápices opunteros ni hacer presión sobre la pantalla.

Teclado qwerty: es la manera tradicional de colocarlas letras en un teclado. Su nombre viene del ordende las letras de la fila superior del mismo, empezan-do por la izquierda.g

losa

rio d

e t

érm

ino

s

sólo gasta energía cuando se pasa lapágina, no cuando la estamos leyendo.Evidentemente, el uso de otras aplica-ciones del aparato, como el reproduc-tor de música, puede acortar conside-rablemente su autonomía, que en elGrammata y el Booq llega a las 10.000páginas.

Aunque las tiendas de libros electrónicospermiten descargarlos en nuestro orde-nador para después, conectar el dispo-sitivo y volcar en él nuestra compra, loideal es poder hacerlo directamentedesde el ebook y ahorrarnos esaoperación. Para ello, necesitamos poderconectarlo a internet y eso sólo es posi-ble en los modelos de Booq,Grammata, Samsung y Wolder. Además,esto nos permite navegar por la redcomo si estuviéramos en un ordenadorconvencional.

Formatos y siglasPara la gran mayoría de usuarios, los for-matos básicos serán más que sufi-cientes para acceder a un número con-siderable de las obras deseadas. Detodos los modelos comparados, el que

mayor número de formatos, tanto detexto como de imagen, es capaz deleer, es el Grammata. Aunque, insisti-mos, esto es un detalle que no afectaráa la mayoría de los lectores.

Interesante es la incoroporación enalgunos modelos de un acelerómetro,es decir, que podemos leer tanto en for-mato vertical como horizontal, pues eldispositivo girará la pantalla automáti-camente. Todos incorporan, además,un diccionario y la posibilidad de incluirobras en distintos idiomas, pues inclusohay algunos con traductores.

Especialmente llamativo es que los deEnergy System y Samsun tienen un tecla-do convencional, que facilitará la entra-da de texto a quienes no estén habitua-dos a la utilización de teclados en pan-talla.

Por último, en cuanto al precio, hayenormes diferencia que, a nuestro juicio,no tienen fácil justificación. Entre el máscaro, el Wolder y el más barato, el Booq,hay 200 euros de diferencia, lo quesupone doblar el precio.

Esta vez, la elección del mejor producto comparado ha sido sencilla. ElAvant de Booq, no sólo es el más barato con diferencia (50 euros deventaja con respecto al siguiente), sino que tiene una pantalla capa-citiva, memoria interna de 2 GB, es el más delgado, tiene una de lasbaterías de mayor duración, tiene conexión Wifi, lee todo tipo de for-matos de texto y un número suficiente de sonido e imagen, dispone deun diccionario inglés-español y acelerómetro. Y, por si fuera poco, vienecon una precarga de 1.000 libros, para que podamos empezar a uti-lizarlo nada más sacarlo de la caja.

La libreríaAmazonvende, de los10 betsellersdel momento,el doble deejemplaresebook que depapel

el dato

Muchos ciudadano que pasan el año de espaldas ainternet, vuelven su mirada en Navidad a la red paraahorrar dinero y molestias en el envío de sus felicita-ciones y en la compra de los regalos. Para todos,pero más para este colectivo de “novatos”, es nece-sario conocer las principales amenazas cibernéticasque nos han asolado en 2010 y poner medios paraque no nos afecten.

Falsas ofertas: los descuentos y las ofertas espe-ciales de artículos de temporada son utilizados porlos autores de código malicioso para inducir a quelos usuarios hagan clic en enlaces maliciosos y pro-porcionen información en páginas falsas. Porejemplo, el reciente TROJ_AYFONE.A se registró comoun Browser Helper Object (BHO) en el navegador deInternet del sistema infectado para asegurar así suejecución cada vez que el usuario abre el nave-gador. Éste desplegaba un anuncio falso delentonces recién lanzado iPhone, así como una webfalsa de una tienda online donde podía comprarseel dispositivo.

Sitios de caridad falsos: los falsos sitios de caridadpidiendo donaciones se han puesto de moda entre

los delincuentes. Frases como¡Ayudemos a los ahitianos! o ¡Ningúnniño sin juguete estas navidades! o simi-lares, invitan a la caridad, explotan lascalamidades y las tragedias de lahumanidad y la buena voluntad queaumenta en épocas navideñas.Normalmente, los spammers, es decir,quienes envían estos mensajes falsos,piden donativos a los receptores y losusuarios generosos que abren el men-saje y hacen clic en el vínculo paradonar son víctimas de un robo, en estecaso de información confidencial(cuentas bancarias, contraseñas,número de DNI,…).

Felicitaciones con sorpresas: es posi-ble que la felicitación de Navidad queacaba de recibir tenga en su interior unvirus que perjudique la confidencialidadde sus datos o la seguridad de su orde-nador. Por tanto, si no conoce a quien le

envía esa felicitación, no la abra; y si loconoce, pásele el antivirus que debetener instalado, antes de hacerlo.

Resultados de búsquedas de comprasnavideñas contaminados: la infabili-dad no es una característica de losactuales buscadores. En muchas oca-siones, los ciberdelincuentes consiguencolocar, entre la lista de resultados denuestra búsqueda, páginas infectadas.Por ejemplo, en años anteriores lograroncolocar páginas para la búsqueda“compra de regalos de navidad” entreel top10, lo que le permitió accederfraudulentamente a muchos orde-nadores. Así mismo, la búsqueda deantivirus 2009 producía un resultado quepermitia la descarga de un falsoantivirus que infectaba el ordenador.

Los sitios webs con alto volumen detráfico pueden estar comprometidos:durante estas fechas, algunos de lossitios web de grandes centros de com-

Las ventas on-linecrecerán un23,5% estaNavidad

el datopra, se pueden ver saturados por la visi-ta de millones de clientes. Por eso,puede desbordarse la capacidad devigilancia de los mismos y producirse undesvío de nuestra compra a otra páginadesde la que accederan a nuestrosdatos personales y económicos. Por ello,es fundamental cerciorarse siempre dela dirección de la web en la que esta-mos comprando, así como hacerlo sóloen páginas seguras, identificablesporque su dirección comienza porhhtps:\\ en lugar de http:\\, siendo la “s”el factor diferenciador.

Facturas de compra para transaccio-nes fantasma: esto guarda relacióncon recibos falsos enviados por correoelectrónico que están infectados concódigo malicioso. Cuando los usuariosabren o hacen clic en el vínculo mali-cioso, son inmediatamente vulnerablesal robo de identidad, incluso los usuarios

que no esperan un recibo de compraonline pueden abrir el archivo adjuntosimplemente por curiosidad.

Phishing: los bancos no mandan nuncacorreos donde solicitan las claves. Lastarjetas de crédito tampoco, ni las cuen-tas de paypal, eBay o similares envíanmensajes donde las soliciten. Ningunaentidad bancaria le solicitará sus datospor internet. Aunque el correo electróni-co parezca legítimo, los delincuentesvincula estos emails con aparienciabuena a un sitio web que tambiénparece legítimo, pero copia las carac-terísticas del sitio atacado y envia, encaso de que incautos escriban sus datospersonales, esta información al ata-cante.

En definitiva, se trata de adoptar las mis-mas precauciones que en la “vida real”:no de sus datos a quien no conozca ydesconfíe de quien le da mucho pornada.

España es un país con una gran tradición en esto delas bromas. En la entrada en la universidad, en loscolegios mayores, lo normal es que el novato seavíctima de alguna que otra gracia, aunque enalgunos casos -la mayoría por desgracia- se trate debromas muy pesadas.

Pero el día de broma por excelencia es, sin duda, el28 de diciembre, festividad de los Santos Inocentes.¿Quién no ha colgado alguna vez un muñeco depapel en la espalda del prójimo o ha gastado unabroma telefónica en este día?. O cuantas veceshemos visto en los programas de vídeos caseros dela televisión cómo una broma inocente acababacon los pelos ardiendo, familiares corriente desfa-vorecidos y el recepto de la broma visiblemente per-judicado.

Probablemente, a no ser que los bromistas fueranunos gamberros de dudoso gusto, habría bastadopara evitar esta situación un etiquetadocorrecto y completo del produc-to, que nos ofreciera la informa-ción precisa para su uti-lización sin riesgos,

y claro está, su atenta lectura por partede los usuarios.

Pero en ocasiones ocurre que esa eti-queta (que, seguida a rajatabla, nosindica que esa broma tan graciosa noes aconsejable hacérsela a un niñomenor de cierta edad, o que puedenacabar de mala manera las chuflas conproductos inflamables, si se la hacemosa ese amigo que se está fumando unpuro) no contiene la información deforma clara y precisa, y el usuario care-ce de instrucciones para utilizar correc-tamente el producto.

Consumidorex, ha acudido a estableci-mientos donde venden, entre otrascosas, artículos de broma, y ha adquiri-

do 11 de estos artículos, conocidoscomo; spray fétido, bombones amar-gos, caramelos amargos, fulminantespara cigarrillos, goma de mascar,polvos para estornudar, polvos de escri-tura invisible, putty pedos, tinta mágica,bombas fétidas y jabón de manossucias, con el fin de comprobar sus ca-racterísticas, etiquetado e instruccionesde uso. Estos artículos los hemos dife-renciados en cuatro tipos; Aerosoles (sonaquellos que vienen embasados en unbote de aerosol). Combustible (porquepara que funcionen tienen que entrar encontacto con una llama de calor).Comestibles (para que funcionen hayque metérselos en la boca). Químicos(aquellos que contienen ingredientesquímicos). Diversos (el resto de produc-to).

Que dice la LeyLos artículos de broma están reguladospor el Real Decreto 2330/1985, de 6 denoviembre, por el que se aprueban lasnormas de seguridad de los juguetes,útiles de uso infantil y artículos de broma,así como por otras normativas comple-mentarias. Este establece en su artículo2.3, la definición de artículo de bromacomo “se entiende por artículos debroma, aquellos productos utilizados

principalmente por los usuarios en deter-minadas fechas y épocas del año, enlas que tienen lugar fiestas o festejospopulares de índole local o nacional yque tienen como fin causar sorpresa aotras personas”.

La normativa vigente establece la regu-lación de los artículos de broma aten-diendo a sus propiedades químicas, físi-cas y de inflamabilidad. Así, se prohíbela utilización de sustancias peligrosas encantidad o en forma que puedanimplicar un riesgo para la salud de losusuarios. Deben estar fabricados demanera que no impliquen riesgos si seutilizan convenientemente y no debencontener materiales inflamables.

En el etiquetado, además de los datosobligatorios como indicar quién es el fa-bricante o distribuidor (nombre, direc-ción y número de identificación), el paísde fabricación, los ingredientes o com-posición, las instrucciones o las adver-tencias, hemos valorado la mención dela edad recomendada de uso, que lasinstrucciones o advertencias sean ade-cuadas y un teléfono de contacto.

DeficienciasPara empezar, en caso de problemas,“las reclamaciones al maestro armero”,parecen decir los responsables de lapuesta en el mercado de losBombones, del Jabón Manos Sucio y de

la Invisible Powder. Ya que, no aparecenen las etiquetas de estos artículos ladirección del fabricante o distribuidor.

Los bombones picantes, son el peor detodos los artículos, por su carencia totalde información, ya que no sabemosnada de este producto, se vende porunidad, y al preguntarle al tendero, estenos saca la bolsa de plástico dondevienen envasados, la cual no dice abso-lutamente nada. Por lo tanto, lo máscorrecto sería no comprarlos, ya queamén de que este bombón seapicante, “al menos eso nos han indica-do”, no sabemos cuales son sus ingredi-entes, y en el peor de los casos, puedenque incluso estén caducados.

Otro de los productos comestibles quehemos adquirido han sido lo caramelospicantes, estos vienen envasados enuna bolsita de plástico, y la etiquetadoque le acompaña no indica ni el paísde origen del producto, ni las instruccio-nes o advertencias, o algo tan necesarioy fundamental como son la lista deingredientes o la fecha de caducidad.Lo mismo sucede con la goma de mas-car Pepper, no informa sobre la fechade caducidad, y aunque indica la listade ingredientes, dice utilizar “especiesautorizadas”, cuando debería informaren todo caso de que especies se trata.

El spray fétido, está envasado en un

Más de lamitad de losartículosincumplen lasobligacionesde informaciónen la etiqueta

el dato

aerosol, y aunque la información queaparece en la etiqueta sobre el fabri-cante o distribuidor, instrucciones, adver-tencias y modo de empleo están bien,en el envase no han incluido el símboloque advierte de que se trata de un pro-ducto inflamable.

En el caso de los pedos putty, el etique-tado está correcto, aunque a nuestrojuicio creemos que incompleto, ya que,al ser una masa viscosa que viene en-vasada en un pequeño bote de plásti-co, el fabricante no indica las instruccio-nes para que funcione el producto.

El resto de los productos adquiridos;bombas fétidas, Fulminantes para ciga-rrillos, polvos para estornudar y la tintamágica, no presentan ningún proble-ma, ni en su etiquetado, ni ha nuestrojuicio.

En resumen, de los once artículos quehemos comprado para realizar esteinforme, casi el 55%, más de la mitad,presentan algún incumplimiento en suetiquetado, lo que conlleva a una faltade información para el consumidor, queen algunas ocasiones puede producirun daño para la salud, o bien la imposi-bilidad de reclamar al fabricante o dis-

tribuidor del artículo.

En todos los artículos que hemos adquiri-do para realizar este informe, se hechaen falta, aunque no sea obligatorio, unnúmero de teléfono de información alconsumidor, por si fuese necesario po-nerse en contacto con el fabricante odistribuidor.

Desde Consumidorex, el único consejoque se podemos ofrecer a los consumi-dores es que extremen las precau-ciones. A nuestro entender, los artículosque no indican la composición de losingredientes o la fecha de caducidad,pueden generar problemas de salud,sobre todo a los alérgicos a ciertos ali-mentos o la intoxicación que puedegenerar un chocolate caducado.

En el caso de los artículos de bromaenvasados en aerosol, por su particularuso, deberían exhibir al máximo lasadvertencias de precaución. Ante lapresencia de componentes inflamables,el símbolo que los indica (una llama) nosparece absolutamente imprescindible.¿Cuántos vídeos de aficionados sobreaerosoles ardiendo como verdaderoslanzallamas han sido exhibidos en tele-visión?

Debemosdescartar lacompra deartículoscomestiblesque noindiquen losingredientes

La congelación se ofrece entonces como unaopción más que aceptable y no sólo en esta épocadel año, aunque es necesario tener en cuenta unaserie de recomendaciones para que este sistema deconservación de los alimentos se realice correcta-mente.

A la hora de realizar la compra, debemos de llevarun orden. Los últimos alimentos que vamos a intro-ducir en el carro de la compra serán, y por esteorden, los frescos, refrigerados y congelados. Conesto buscaremos interrumpir lo menos posible lacadena del frío, por ello sería aconsejable disponerde bolsas isotérmicas para introducir estos alimentosy transportarlos los antes posibles en las mejorescondiciones de conservación a nuestro hogar.

Una vez que estemos en casa, los primeros alimen-tos que deberemos colocar serán los congelados,seguidos de los refrigerados y frescos.

¿Qué es la cadena del frío? Los productos se pueden congelar, bien desde suestado natural o una vez que han sido elaborados.Los alimentos, se ven afectados por la actividadbacteriológica, llegando incluso a convertirlos enincomestibles. Unos de los principales factores quecontribuyen a favorecer esta actividad bacteriológi-ca, es la temperatura. Al disminuir ésta, se reduce la

velocidad de crecimiento de las bacte-rias, por ello es uno de los métodos másaconsejable de conservación de los ali-mentos. Existen dos formas de conser-vación a través del frío: la congelación,con ella conseguimos que se solidifiqueel agua que contiene los alimentos ysirve para conservarlos a largo plazo, yla refrigeración, que sirve para mante-ner los alimentos durante unos días osemanas.

Efectos de la congelaciónLa congelación tiene un efecto mínimoen el contenido nutricional de los ali-mentos. En el caso de la carne y pesca-do, no afecta ni a las proteínas, ni a losminerales, en cambio en el proceso decongelación se produce una pérdidadel líquido que contiene vitaminas, quese perderán al cocinar el producto a noser que se aproveche el mismo.

En el caso de las verduras y frutas, si seproduce una mayor pérdida de vitami-nas, sobretodo vitamina C.

Restricciones de la congelaciónAlgunos alimentos pueden dañarsecuando se congelan, debido a la for-mación de cristales de hielos querompen las membranas celulares,aunque este hecho no afecta a laseguridad del alimento, si afecta a suspropiedades y puede quedar una vezdescongelado menos crujiente o firme.

Hay que tener una especial precaucióncon los alimentos que tengan un mayorcontenido de grasa, como la nata oalgunas salsas, ya que cuando se estáncongelando tienden a cortarse.

Consejos para congelar• Los congeladores deben estar siem-pre como mínimo a -18 °C, para para-lizar el crecimiento de las bacterias y evi-tar que el alimento se deteriore. Estatemperatura es la fijada como estándarde congelación para la cadena de fríointernacional.

• Los congeladores funcionan mejorcuando están llenos y sin mucho espa-cio entre los alimentos.

• Los alimentos calientes no se debenmeter en el congelador, ya que alteraríala temperatura del congelador y podríadañar el resto de los alimentos. Por esoes mejor esperar a que se enfríe.

• Los alimentos que se han congelado ydescongelado nunca deben volver acongelarse. Por lo que es importanteque a la hora de comprar, nosinformemos si ese producto ha sido con-gelado antes de su venta.

Conservación de lo congeladoTodo depende del alimento que con-gelemos, oscila entre los 3 y 12 meses,para que no se vea afectada su cali-dad, por ello recomendamos fijarnos enel etiquetado del producto, ya que nosindica cual es el tiempo recomendado.

Cómo descongelarEs mejor sacar los alimentos la nocheanterior y realizar el proceso de descon-gelación en la bandeja inferior del fri-gorífico.

Si hay una época del año en la que las casas se de-coran especialmente, esa son las navidades. Belenes,árboles y plantas diversas son los adornos por excelen-cia, pero su uso debe estar en algún caso sujeto a cier-tas recomendaciones. La razón es que se puede estarutilizando un árbol protegido o una planta que, por sutoxicidad, puede ocasionar algún disgusto.

En navidad, el adorno más tradicional en los hogaresha sido siempre el belén, aunque desde hace ya bas-tante tiempo no hay casa que se precie que no tengatambién un árbol lleno de bolas, muñecos y espu-millones. Los pinos, los abetos comunes y los abetosrojos son las especie naturales típicas de estas fechas yjunto a ellas, las ramas de acebo empiezan a ser ya unelemento común de decoración. Aunque en un princi-pio, todos ellos no parezcan más que otro adorno de lacasa, no hay que olvidar que se trata de seres vivos.

A excepción de los abetos rojos, que sólo se encuen-tran de forma silvestre en el norte de Europa y que enEspaña se cultivan en viveros o bien importando planta-ciones, los pinos y los abetos comunes son abundantesen el paisaje español. Su reproducción es fácil, de ahíque ninguna de las tres especies se halle protegida. Apesar de ello, es conveniente que los pinos y abetosque se vendan en estas fechas provengan de un viveroy no del monte, y por supuesto que lleve cepellón. Estoes la tierra que lleva adosada la raíz y que permite queel árbol siga viviendo y pueda volver a plantarse, ya quesin él acabará en la basura o en la chimenea. Alcomprar un pino o un abeto es recomendable, portanto, asegurarse de que lleva incluido el cepellón, yaque ocurre muchas veces que, camuflada en bolsasde plástico, se venden por el cepellón original tierra decualquier tipo. Elegir un establecimiento con garantíaspuede ser un buen paso. En casa hay que dispensar alárbol unos cuidados esenciales para que no se seque,tales como situarlo lejos de focos de calor y ventilar laestancia a menudo, pulverizarlo de vez en cuando yregarlo todos los días con un vaso de agua.

TóxicosExisten árboles y plantas típicas navideñas, que puedenser perjudiciales para la salud. Por ejemplo, el acebo, esuna planta navideña con la que hay que tomar ciertasprecauciones si se tienen niños pequeños. La razón es

que pueden producir graves intoxicaciones por con-tacto o ingestión.

Además del acebo, la flor de Pascua, el muérdago,el tejo y el castaño de Indias, son las plantas quetienen efectos tóxicos, por lo que si un niño ingieresus frutos o, en algunos casos, toca sus hojas,puede llegar a tener serias complicaciones. Lossíntomas y consecuencias de la intoxicaciónvarían según la especia.

• Flor de Pascua: El contacto cutáneo con sushojas y tallo puede originar erupciones en lapiel, conjuntivitis en los ojos e irritaciones en laboca si el niño se chupa las manos. En casode ingestión, lo que se produce es una gas-troenteritis aguda, que secomplica con excitación,vértigo, delirio y aumentode la sudoración si laingesta es importante.Normalmente, sin embar-go, no se producen cua-dros neurológicos graves.

• Muérdago: Encierra unaalta toxicidad. A las doshoras de la ingestión de unacantidad suficiente deplanta –unos cinco o seisfrutos-, se producenfuertes dolores gastroin-testinales acompaña-dos de diarrea y vómi-tos, que pueden llevar in-cluso a un estado de shocksi no se trata adecuadamente.

• Tejo: Es un arbusto de hoja perennecon unos frutos de forma cilíndrica y de uncolor rojo llamativo. Si se ingiere una cantidadsuficiente de estos frutos, unos veinte o treinta, lossíntomas que aparecen son palpitaciones, alte-raciones del ritmo cardíaco, somnolencia y, en oca-siones, un cuadro neurológico grave con pérdida deconciencia.

• Acebo: Contiene unas sustancias que tienenacciones diuréticas, purgantes y excitadoras del sis-tema nervioso central.

Nuestro consejoEl consejo más sensato, por la toxicidad y por la pro-tección de la especie, es no comprar acebos enningún caso y utilizar como adorno las imitaciones quese hacen en plástico. Si, de cualquier forma, se deseatener una rama en casa, es imprescindible elegir un

establecimiento adecuado.

Un consejo que también podríamos extrapolar a todaslas especies naturales utilizadas en navidad. Aunque enel salón de casa queden muy bien, no hay que olvidar,que cualquier especie, siempre estará mejor en suentorno natural. A la hora de adquirir un árbol navideño,una buena opción sería la imitación en plástico,además, puede ser igual de bonita y durar muchosaños.

Cómo conservar la apariencia y fragancia de su árbol durante la temporada navideña.

Algunas de las preguntas que hacemos con frecuencia a los productores deárboles de navidad son: cómo escoger el mejor árbol y cómo conservarlo

fresco y seguro una vez que lo compramos. He aquí unos consejos útiles:

Cuando compre un árbol, haga una prueba para ver si es fresco. Agarre una rama entre el pulgar y el índice y tire del árbol hacia usted.Si el árbol es fresco, sólo quedarán en su mano de 5 a 10 agujas.

Una vez que compre el árbol, manténgalo en un lugar cubierto, sin cale-facción, como por ejemplo un corredor o garaje para protegerlo delviento hasta que esté listo para decorarlo.

Antes de poner el árbol en su casa, corte unos 2 centímetros (1 pulgada)del tronco por arriba del corte original e inmediatamente ponga el árbol en

una base o macetero adecuado, con capacidad mínima de 4 litros deagua.

No deje su árbol sin agua -hay que revisar el nivel de agua todos los días paraasegurarse que nunca va a quedar sin agua. Un árbol nuevo absorbe 4 litros de

agua el primer día y de ahí en adelante va a consumir un litro de agua por día. Si seagota el agua de su árbol por más de dos horas, haga otro corte recto sobre la basedel tronco. El agua es importante porque evita que se sequen las agujas y se caigan.Además, ayuda a mantener la fragancia del árbol.

Árbol extraído del suelo sin apenasraíces: Es lo más frecuente hoy en día. Enel vivero se arranca el ejemplar con muypocas raíces o talado a ras de suelo direc-tamente, por lo que tras las fiestasmuere irremediablemente. Son árboles"de usar y tirar". Algunos ayuntamientosdisponen contenedores para su recogiday luego triturarlos y reciclar ese materialcomo abono; siempre será mucho mejorque incinerarlos o tirarlos a un verte-dero.

Árbol extraído con un cepellón de tierra:Si se ha sacado con un buen "pegote" detierra adherido a sus raíces, hay algunaposibilidad de que sobreviva tras per-manecer en la casa. Se puede intentar su

plantación posterior en el jardín o poner-lo en una maceta, pero ciertamente elarraigo es muy difícil; se habla de por-centajes de supervivencia de 1 por cada1.000, aunque no creo que sea tan bajo.

Ciertos ayuntamientos recogen losabetos y pinos o hay que llevarlos a unvivero municipal para intentar su recu-peración y posterior replantación en par-ques y jardines. Los que se secan se reci-clan para abono.

Árbol cultivado en maceta: Lo mejor escomprar una planta cultivada en macetay que tras el 6 de enero se la pueda man-tener como planta de interior o plantarlafuera. Un consejo, comprueba si ha sido

recientemente enmacetada, se ve fácil-mente. Tira de ella o saca la maceta ydebe mantenerse el cepellón de tierraentero, sin deshacerse. Eso es señal deque la planta lleva ahí un tiempo y lasraíces, por tanto, mantienen compactodicho cepellón.

Árbol artificial: Si bien los primeros mo-delos de árboles artificiales eran pocorealistas, los que ahora se venden estánbien hechos, son decorativos, utilizanmateriales más ecológicos y duranmuchos años. No es una mala opción, sipensamos que comprar un árbol artificialpuede indultar como mí-nimo a otroscinco o seis abetos, uno por año.

Alternativas a la tala de árboles