contarse

María Yolanda Aguirre Gómez Marcelo Álvarez Córdova

A L O M EDITORESS.A. DE C .V .

C6NZONTL6 (̂ TC f t V P O E D I T O R I A L ¡

I

CRECER JUNTOS

A L O M EDITORES S.A. DE C .V . CENZONTLE

q * v p o ( 0 I T 0 I I A L

Historias para contarse... y crecer juntos

María Yolanda Aguirre Gómez Marcelo Álvarez Córdova

Grupo Editorial Cenzontle Alom Editores

Historias para contarse... y crecer juntosMaría Yolanda Aguirre Gómez y Marcelo Álvarez Córdova

Publicado porGrupo Editorial Cenzontle S. A. de C. V., en coedición con Alom Editores, S.A. de C.V.

© María Yolanda Aguirre Gómez y Marcelo Álvarez Córdova © Grupo Editorial Cenzontle. Primera edición 2007

Colección: Crecer Juntos

Composición: Lizet Delgado y Benjamín Becerra Diseño de portada: Alejandra Elizabeth Álvarez Aguirre Ilustración de Portada: Story teller (cuenta cuentos), Phoenix, Arizona.

Ver la página 18.

Todos los derechos reservados conforme a la ley ISBN: 978-970-9929-10-2

Printed by Publidisa Impreso y Hecho en México Printed and Made in México

Domicilio de Grupo Editorial Cenzontle: w w w. cenzontle, wsManuel María Contreras No. 61 Bis 3. Colonia San Rafael CP 06470. Delegación Cuauhtémoc, México D.F.

Domicilio de Alom Editores: www.hipnosis.com.mxJosé Ma. Velasco N° 72-402, Colonia San José Insurgentes C.P. 03900. Delgación Benito Juárez, México D.F.

Instituto Milton H. Erickson Ciudad Nezahualcóyotl, Estado de México

Un lugar para crecer juntos...

El pueblo Azteca se asentó en el centro del lago de un valle que ahora co­nocemos como el valle de México; viajó en busca del lugar en que habrían de fundar la ciudad de Tenochtitlan. Reino, poderío y cultura fueron sem­brados por ese pueblo en estas tierras. Reyes, guerreros y príncipes fueron fruto también de esta semilla.

Un rico legado de ejemplo en el arte de construir donde no había en apa­riencia nada, a excepción de la posibilidad, la riqueza y los recursos ocultos a simple vista. La historia de éste legado quedó descrito en los múltiples códices y construcciones, la sabiduría de nuestro pueblo quedó plasmada en pinturas y piedras. La piedra del sol o calendario azteca es uno de estos maravillosos legados que cuentan la historia a través de sus diferentes gli­fos y es también la metáfora de nuestra misión en la tierra.

Malinalli, glifo correspondiente al doceavo día del calendario Azteca, es una de las figuras grabadas que expresa un mensaje escrito en piedra y que hemos elegido como símbolo de representación de nuestro instituto. Este glifo está formado por un manojo de hierba seca, probablemente hojas de tule saliendo por arriba de una mandíbula y un ojo-estrella; elementos que representan el índice de evolución del ser humano, desde las capacidades físicas primarias reflejadas en el estómago, hasta las más altas reflejadas en el cerebro. La característica evolutiva del humano está definida por un mar­cado crecimiento del cerebro y una continua disminución del estómago.

El lugar de las hojas secas ubicado en la posición que ocupa el cerebro, nos indica el papel de la mente en la regeneración del pensamiento, de la misma manera que el renacimiento de la hierba verde y fresca, ocurre después de que se ha secado la anterior. Así, las hojas secas significan la capacidad para la regeneración y el renacimiento asociado a las más altas capacidades hu­manas. Su posición privilegiada sobre la mandíbula representa por un lado la posición supeditada de las necesidades primarias y por, el otro el símbolo de la madre tierra. El ojo-estrella, muestra que su mirada está dirigida hacia niveles más altos, es decir, hacia las estrellas y hacia el pensamiento.

Malinalli significa que tenacidad y rejuvenecimiento no pueden ser desarraigadas permanentemente, porque los campos que parecen muertos cuando están secos, vuelven a la vida cada primavera y visten de nuevo a la tierra de un manto verde.

Nezahualcóyotl o coyote en ayuno, el príncipe poeta, puede represen­tar esta capacidad evolutiva del humano expresada en el crecimiento del cerebro que controla la disminución del estómago, que recibe la acción de ese cerebro. Ciudad Nezahualcóyotl es lugar en el valle de México elegido como asentamiento por un crisol de culturas provenientes primero de los estrados de Oaxaca y Guerrero; posteriormente de Michoacán, Hidalgo, Querétaro, Nayarit, Sonora, Veracruz y Tlaxcala; y finalmente del Distrito Federal e incluso de otras regiones del propio Estado de México, que cons­tituyen actualmente su población y que paulatinamente toman una identi­dad propia.

Ciudad Nezahualcóyotl, donde existe la posibilidad y la riqueza de re­cursos heredada de nuestro pueblo; representa el germen para construir donde aparentemente no hay nada y la capacidad de renovación y fecundi­dad de la tierra, donde fue sembrada la semilla y el mensaje de renovación que nos legaron nuestros antepasados. Estos son los materiales con que contamos para sustentar nuestra misión.

El Instituto Milton H. Erickson en Ciudad Nezahualcóyotl; es un lugar para crecer juntos y es el sitio donde nos reunimos con la misión de con­tribuir al renacimiento de Tas capacidades humanas, a la recuperación de los recursos internos, a colaborar en incrementarlos y a traducir nuestras acciones en la tarea de hacer de este pedacito de nuestro mundo, un lugar mejor a como lo encontramos, contribuyendo al crecimiento saludable y al bienestar de nuestra gente.

Dedicamos este libro:

A los viejos que contaban las historias de sus tiempos y de sus antepasados continuando la tradición de transmitir

costumbres, sucesos y sabiduría.

A los psicoterapeutas que han incluido en su prácticala narración de historias.

A los niños que se reunían por las tardes a escuchar las narraciones de sus mayores.

Al niño que un día fuimos todos los seres humanos por ser el mas antiguo generador de recursos y creatividad,

y por conservar fresca la fascinación y el asombro cuando adulto, al escuchar la narración de una historia.

Los autores.

■

Agradecimientos

Es un privilegio haber contado y seguir contando con tanta gente intere­sada en contribuir con esta labor de contar, escuchar, revisar y recomen­dar historias.

A todas las personas que intervinieron de una u otra forma en el logro de esta meta les agradecemos profundamente su colaboración.

Hemos decidido dejar testimonio de sus nombres, en especial porque parece una locura hacerlo y queremos generar una ola de expansión que permita florecer semillas de reconocimiento a la acción comprometida de cada una de esas personas.*

Sabemos que una parte de la humanidad ya comenzó a darle cauce a este tipo de locuras constructivas y esta es una de las formas en que nos sumamos a la labor de contagiar a otros del compromiso de edificar cosas y relaciones que nos permitan dejar este mundo mejor de cómo lo encontramos.

Consideramos que agradecer es una hermosa forma de retribuir a la vida y a la gente por todo aquello que hemos recibido de su parte; es enton­ces una oportunidad de otorgar la parte que consideramos nos correspon­de, para que la energía siga fluyendo y renovándose.

Agradecemos al Dr. Milton H. Erickson su ejemplo; a la Sra. Erickson su contribución y sus atenciones; a Betty Alice Erickson y Roxana Erickson sus enseñanzas, su sencillez, el haber abierto para nosotros las puertas de sus corazones y de su familia, y su dedicación en la preparación de nuestra ceremonia de 15 años de matrimonio.

Al Dr. Jeffrey Zeig por su sombrero, sus lentes y su gran corazón.A la Dra. Teresa Robles su energía, su apoyo constante y habernos con­

tagiado de sus locuras siempre atinadas, creativas y alentadoras.A Dirk Revenstorf su sencillez, sus enseñanzas, las historias que nos

compartió, la semilla que sembró en nosotros, su generosidad y su ejemplo de amor y entrega.

A Laura De La Piedra, compañera de esta aventura, su paciencia y entrega al trabajo, y por albergar en su corazón la semilla que ya comenzó a germinar.

Ma. Yolanda Aguirre Gómez Marcelo Alvarez Córdova

Directores del Instituto Milton H. Erickson de Ciudad Nezahualcóyotl. Estado de México.

instituto@hipnosisneza.com.mx • www.hipnosisneza.com.mx

Estos nombres los agregamos al final de la obra, como "Lista de participantes".

'

-

Presentación

Es un gran honor ser invitado a escribir la presentación de un libro. Este honor es más especial aun cuando la solicitud proviene de estimados amigos y colegas, antiguos discípulos conocidos durante largos años.

Yolanda Aguirre y Marcelo Alvarez surgen como dos psicólogos expertos con una profunda admiración por el del Dr. Milton H. Erick- son (1902-1980). Ambos se han dedicado a la promoción desintere­sada de la terapia efectiva, en particular entre los segmentos de la población más desprotegidos económica y socialmente, y vulnera­bles frente a la violencia de género, intra familiar, etcétera. Sé que Yolanda y Marcelo son gente de buen corazón.

En Historias para contarse nos hacen partícipes de su experiencia y nos abren sus corazones. El resultado es una formidable exposición del uso práctico de los cuentos en el proceso de cambio, un método derivado de las contribuciones de Erickson, reconocida autoridad en el campo de la hipnosis y de la terapia estratégica breve.

Integrando una estructura innovadora con ejemplos claros que pue­den aplicarse de inmediato en la práctica profesional, Yolanda y Marcelo han dado impulso al arte de la narrativa terapéutica. Tanto los princi­piantes como los especialistas, sin importar sus predilecciones teóricas, se verán enormemente beneficiados con la cuidadosa lectura de este libro.

Felicito a los autores por la originalidad y dedicación con las que promueven el arte de la terapia. Seguramente serán estudiados e imitados por muchos como autoridades importantes.

Me viene a la mente una anécdota sobre un hombre que busca sus llaves bajo la luz de un farol. Alguien le ofrece ayuda y le pregunta si es exactamente ahí donde las perdió. "N o —contesta risueño el hombre— pero aquí la luz es mejor".

Recomiendo estudiar con detenimiento Historias para contarse. Sin duda, sus cautivadores relatos resultarán iluminadores.

Dr. Jeffrey K. ZeigDirector de la Fundación Milton H. Erickson 3606 N 24 th Street, Phoenix, Az. 85016, USA

www.erickson-foundation.org

'

Presentación

Realmente es un placer presentar esta obra de Yolanda y Marcelo, amigos a los que quiero y admiro de corazón. Los admiro por ser gente sencilla en el mejor sentido de la palabra, ya que para mí, la sencillez va de la mano de la sabiduría.

Historias para contarse y crecer juntos, es un compendio delicioso de historias con mensajes de crecimiento, pero es al mismo tiempo produc­to de una investigación concienzuda y sistemática. Los autores narraron cada cuento a un grupo de 30 personas a las que después aplicaron un cuestionario para conocer el mensaje que habían percibido así como a quiénes consideraban que podía ser útil. Con estos resultados, constru­yeron un índice temático que facilita la consulta y su aplicación.

Pero empecé por la segunda parte de la obra. En la primera, nos explican en lenguaje sencillo y claro, los distintos tipos de narracio­nes, nos cuentan la historia de Milton H. Erickson, cómo utilizaba las historias para ayudar a sus pacientes y alumnos a cambiar, y nos enseñan a construir cuentos terapéuticos.

Historias para contarse y crecer juntos es un libro que se lee de corri­do, sin quererlo dejar, hasta llegar al final. Es una obra que comencé a aplicar el mismo día que la empecé a leer.

Por último quisiera comentar que, si bien Yolanda y Marcelo de­dican su libro a los abuelos, a nuestros mayores y ancestros contado­res de cuentos, al escribirlo, y aunque estén muy jóvenes pasan a ser parte de esa tradición.

Estoy segura de que Milton H. Erickson y los abuelos, estén don­de estén, se hallarán complacidos de la aparición de Historias para contarse y crecer juntos, y tal vez desde ahí ya lo estén disfrutando.

Yolanda, Marcelo, muchas gracias por permitirme tener un poquito de presencia en su trabajo y por compartir y caminar los mismos caminos.

Dra. Teresa RoblesCentro Ericksoniano de México

México, D. F, 7 de marzo del 2006 www.hipnosis.com.mx

..

Introducción

L O S NARRADORES DE CUENTOS

Una práctica constante en todas las culturas, de todos los lugares y de todos los tiempos, ha sido transmitir de generación en generación la historia, las costumbres, el conocimiento y la tradición.

Relatar los sucesos y las experiencias, se convirtió durante mu­cho tiempo en fuente de enseñanza para los jóvenes y para las nue­vas generaciones.

Sabemos que en la historia de la humanidad, durante mucho tiempo esa fue la única forma de transmisión del conocimiento; los viejos contaban las historias de sus tiempos y la de sus antepasados de la misma manera que sus abuelos habían podido escucharlas de sus mayores cuando fueron jóvenes.

¿Puedes imaginar a los niños reunidos por la tarde, después de las labores del día, para escuchar las narraciones de sus mayores, asegurando una vez más la transmisión de costumbres, religión, co­nocimiento y sabiduría?

Actualmente, los narradores de cuentos son en sí mismos una tradición que mantiene viva ésta antigua labor, que ha proporcio­nado a la humanidad la posibilidad de mantener tantos aprendiza­jes y misterios.

Sigue siendo mágico escuchar historias, anécdotas, relatos o cuen­tos, en especial cuando nos invitan a situarnos en el contexto en que se están desarrollando, tan sólo por el placer de dejar volar la imagi­nación o cuando generamos a partir de éstas una nueva idea o una nueva percepción de las cosas.

Con el paso del tiempo las historias y los cuentos se han converti­do en un arte y se han ido enriqueciendo. Pueden ser utilizadas para informar, para capturar la atención o para explicar algún fenóme­no; pueden ser empleadas para mitigar temores e incertidumbres, y para aliviar el aburrimiento y el tedio; y han sido empleadas también para desarrollar la creatividad y producir alegría.

18 Historias para contarse... y crecer juntos

Podemos agregar actualmente a las historias y los cuentos un sen­tido terapéutico, ya que sabemos con base en la experiencia, que po­sibilitan transformaciones en conceptos, percepciones, emociones, pensamientos o comprensión de las cosas.

Milton H. Erickson hizo de esta actividad un verdadero arte que aplicó magistralmente a la terapia y a la enseñanza, relatando a sus pa­cientes y alumnos historias, anécdotas o cuentos, proporcionando una versión generalmente no contemplada con anterioridad por el escucha.

En Phoenix, Arizona, lugar donde vivió Erickson los últimos años de su vida, han creado una figura representativa de estos personajes que vienen cumpliendo esta función en la historia; les han llamado story tellers (cuenta cuentos). Estas figuras tienen como caracterís­tica distintiva la presencia de muchos niños en torno de un adulto que los está cargando en diversas formas y posturas, significando el agrado e interés de los primeros, que permanecen atentos y refuer­zan la función del "cuenta cuentos". De esta manera, en Phoenix se hace homenaje a esta labor y por extensión a las personas que nos gusta y tomamos por vocación contar cuentos.

Los autores hemos concentrado en éste libro historias y cuentos que llevan el mensaje de recobrar interpretaciones no hechas hasta el momento y que están conectadas con la sabiduría milenaria del pensamiento humano, contribuyendo así con este homenaje a los "cuenta cuentos" de todos los tiempos.

De otro lado, en el ejercicio de la psicoterapia, explorando diver­sas formas de lograr que la persona encuentre el mejor camino para lograr sus objetivos, que encuentre sus propios recursos y haga con­tacto con su sabiduría interna, hemos encontrado que contar histo­rias es una forma maravillosa de envolver para regalo la idea de exa­minar aspectos que previamente no habían sido tomados en cuenta, de generar nuevas ideas o nuevas percepciones; en más de alguna ocasión, la historia en sí ha sido la intervención terapéutica.

Sabemos que el uso de la historia, independientemente del mo­mento de la sesión en que se incluya, constituye una poderosa he­rramienta de comunicación indirecta, que mantiene por ésta razón la individualidad de la persona sin agregar elementos, que mantiene el principio de cortar a la medida, dada su característica universal y que cualquier efecto que genere, lo hará desde el interior de la per­sona misma: desde su sabiduría inconsciente.

Milton Erickson podía mantenerse contando, una tras otra, anéc­dotas e historias para generar en sus pacientes y alumnos diversas reacciones, manteniéndolos interesados, atentos, absortos, ensimis­

Introducción 19

mados, maravillados, sorprendidos, aprendiendo y transformando sus experiencias de vida.

Es un verdadero reto mantenerse durante una hora y media re­cordando, contando y produciendo esos efectos en el oyente, en es­pecial si no se es Milton Erickson. Sin embargo, es cada vez mas fácil alcanzar la meta a fuerza de hacerlo.

Sabemos que especialmente al inicio de la práctica psicoterapéutica se cuenta con menos experiencia y repertorio; pero aun con gran expe­riencia y repertorio siempre es una ventaja contar con un acervo de me­táforas, anécdotas, cuentos, alegorías, leyendas, fábulas y/o historias. Es por esta razón que nos hemos dado a la tarea de usarlas, concentrar­las, clasificarlas y proponerlas en casos y circunstancias especificas.

Tenemos la agradable experiencia de haber sido tocados con las anécdotas e historias contadas por Erickson y sus más cercanos se­guidores, y en esa medida hemos podido experimentar los efectos que puede producir un relato. La primera experiencia fue mientras leíamos: Mi voz irá contigo, los cuentos didácticos de Milton Erickson, escri­ta por Sydney Rossen, y prácticamente en la lectura de cualquiera de sus obras; posteriormente tuvimos el privilegio de escucharlas directamente de Jeffrey Zeig, Betty Alice Erickson, Ernest Rosi, Ste- phen Lankton y Dirk Revenstorf. En adelante nos hemos dedicado literalmente a perseguir metáforas, fábulas e historias en general, y a crear nuevas de acuerdo a lo que hemos vivido y a lo que queremos transmitir.

El objetivo primordial de esta obra es brindarle un recurso a los psicoterapeutas para el manejo de historias en su labor. Sin embargo, consideramos que con esta colección podrán ser beneficiados tam­bién maestros, pacientes, alumnos, educadores, además de abuelos, madres, nietos, hijos, y toda persona que se tome el riesgo de com­partir los recursos de la magia escrita y contada en relatos.

A la Prim era Parte de este libro la hemos denominado "Los recursos de la magia". Aquí hemos incluido los ingredientes que considera­mos conveniente que conozca quien vaya a dedicar parte de su ejer­cicio a la narración de historias.

En el Primer Capítulo mencionamos las versiones de narración que pueden ser consideradas para contarse (historias, cuentos, anécdo­tas, fábulas, metáfpras y alegorías). Comentamos sobre la participa­ción de los hemisferios cerebrales durante la narración, explicamos su efecto sobre la mente consciente e inconsciente, y continuamos

20 Historias para contarse... y crecer juntos

con algunos aspectos acerca de la construcción y narración de histo­rias en el consultorio psicoterapèutico.

En el Segundo Capítulo presentamos algunos eventos de la vida de Milton H. Erickson, porque consideramos que es, verdaderamente, "una historia para contarse".

En la Segunda Parte, que hemos llamado "La magia de los recur­sos", incluimos 80 historias que encontramos que de una u otra ma­nera despiertan en el escucha y en el lector mecanismos, recuerdos y asociaciones que permiten disponer de recursos que podían en­contrarse dormidos o bien que no necesariamente estaban asociados a su forma de afrontar alguna situación determinada. El resto de la magia se encuentra en el interior de cada persona.

Hemos agregado una serie de índices que tienen la función de orientar al narrador acerca del contenido, el mensaje de la historia, y una sugerencia acerca del tipo de persona a quien puede ser conta­da, en qué tipo de situación y con qué intención.

Esta propuesta la hacemos a partir de la retroalimentación de las personas que las han escuchado y entre quienes las hemos ex­plorado.

Cada uno de los índices, sin embargo, son sólo una propuesta, porque cada persona es única, y tú puedes encontrar nuevas y dife­rentes formas creativas de aplicarlas en tu propio contexto?

Te recomendamos la lectura previa de cada historia y dar res­puesta a las preguntas que utilizamos para su exploración, con la intención de que experimentes el efecto que podría generar en tu escucha al contárselas. Las preguntas fueron: nombre de la historia, ¿qué enseñanza te deja la historia?, ¿a quién le contarías la historia y con qué intención?, ¿cuál es el mensaje de la historia?, ¿cómo lo puedes aplicar en tu vida?, ¿cuál es la moraleja?

Milton H. Erickson decía:"La terapia comienza en casa... en la casa del terapeuta".

‘ Agradecemos tus sugerencias a los siguientes correos electrónicos: hipnosisneza@hotmail.com; instituto@hipnosisneza.com. mx.

Cómo leer este libro

Nuestra recomendación inicial es que cada persona que lea esta obra haga lectura de cada una de las historias para conocerlas y percatarse del efecto que le produce el primer contacto con su contenido. Todas las historias que incluimos, dejaron en nosotros una huella y abrieron nuevas posibilidades de solución y entendimiento de situaciones a veces difíciles o simplemente no consideradas; el impacto que pro­dujeron en el primer contacto que tuvimos con ellas fue, por un lado, fuente de inspiración para explorar sus efectos en otras personas y, por otro, orientador en la selección de la historia "adecuada" para cada persona en el momento concreto en que la compartimos.

Consideramos útil también hacer anotaciones de esos efectos que producen en el primer encuentro. Hemos descubierto que después de un tiempo, en la medida en que nos acostumbramos al contenido de la historia, la intensidad del impacto se modifica y muchas veces no produce el mismo efecto en nosotros; sin embargo, cuando la con­tamos a alguna persona durante la consulta o a algún amigo durante una conversación, el efecto que produce en ellos por primera vez es muy parecido al que provocó en nosotros.

Queremos invitarte a responder para ti en un cuaderno especial para notas, las preguntas que nos hicimos a nosotros mismos y a las personas que nos apoyaron en la exploración de los efectos persona­les al escuchar las historias.

N o m b r e d e l a h i s t o r i a . Podemos entender este asunto de dos maneras; la primera es: ¿cómo se llama la historia que escuchaste o que leiste?; la segunda es: ¿qué nombre le pondrías a la historia? En el primer caso es orientador y puede ser usado el dato sólo para saber a qué historia nos referimos; en el segundo caso puede proporcionarnos una nueva interpretación o destacar aspectos de la historia que posteriormente pueden ser útiles para recordarla y o clasificarla mentalmente.

¿Qué e n s e ñ a n z a t e d e ja h i s t o r i a ? Responder a esta pregunta, puede esclarecernos las diferentes formas en que podemos reaccionar en

22 Historias para contarse... y crecer juntos

momentos diferentes de nuestra vida. Puede también ser útil para momentos futuros en que queramos contar a alguien una historia. Finalmente puede mostrarnos las múltiples interpretaciones que en­tre todos le damos.

¿A QUIÉN LE CONTARÍAS LA HISTORIA Y CON QUÉ INTENCIÓN? Esta pre­gunta podemos contestarla a partir de nuestra idea de a quién puede serle útil. Al escuchar o leer la historia podemos recordar a alguien o algún momento vivido con alguien. Podemos también recordar alguna situación vivida en la que quisimos decirle algo a alguna persona y no supimos qué o no supimos de qué manera decírselo. Esta última parte corresponde a la intención con la que queremos contar la historia. Qué es aquello que queremos decirle a nuestro escucha.

¿CuAl e s e l m e n s a j e d e l a h i s t o r i a ? Podemos descubrir muchos men­sajes para cada historia, comenzando con el mensaje que tú encuen­tras y que quieres enviar y siguiendo con el mensaje que recibe la persona a quien le contamos la historia, de tal manera que pueden ser incontables las posibles interpretaciones para una misma historia.

¿ C ó m o l o p u e d e s a p l i c a r e n t u v i d a ? Esta pregunta se refiere a la ense­ñanza, especialmente si fue sorprendente para ti. Cómo puedes aplicar esto en tu vida, qué fue lo que quedó al descubierto como enseñanza, cómo puede ser útil en el contexto de tu vida diaria y de tus acciones concretas en el futuro, o bien cómo puedes aplicarlo en una situación específica, lo cual puede orientarte para contarla a otra persona

¿Cuál e s l a m o r a l e j a ? Cuál es el consejo que puede extraerse de la lec­ción que nos deja la historia; de qué manera abreviada podemos dejar una recomendación para nosotros mismos o para otros en el futuro.

Como una guía para la revisión del libro, puedes también revisar los índices que hemos incluido y seleccionar la historia que llame más tu atención, ya sea por nombre, moraleja, a quién contarla, mensaje o tema que aborda.

El nombre de la historia es muchas veces orientador en relación con su contenido, aunque en otras ocasiones es insuficiente la infor­mación que nos proporciona. Los nombres los puedes encontrar en el índice general al final de la obra y encabezando el inicio de cada historia.

Cómo leer este libro 23

La moraleja de las historias podrás encontrarla tanto en el índi­ce general como bajo el nombre de cada historia en el cuerpo de la obra. La moraleja que representa a cada historia, fue seleccionada cuidadosamente con la intención de proporcionar una guía acerca del contenido de la historia sólo que en resumen. Para hacer una se­lección rápida puedes hojear el libro y revisar la moraleja. Para hacer una revisión premeditada puedes revisar el índice de nombres con moraleja e ir a la historia para leerla y prepararla.

A quién contar la historia es otra de las opciones para seleccionar la historia y puedes encontrar al pie de página de cada historia una leyenda que dice: "Historia para contarse a" y una serie de sugeren­cias de a qué personas contar esa historia.

El mensaje indirecto de la historia, lo podrás encontrar en el ín­dice de mensajes al final de la obra, con una serie de historias al­ternativas, donde éste se encuentra incluido de alguna manera. La primera historia referida es la que obtuvo mayor número de reco­mendaciones como representante de tal mensaje y así sucesivamente cada una de las historias recomendadas para ese mensaje. Le lla­mamos mensaje indirecto de la historia porque consideramos que el escucha recibe uno o varios mensajes que pueden no coincidir con el mensaje que queremos enviar. Milton Erickson narraba historias y anécdotas a sus pacientes y alumnos a través de una comunica­ción de multinivel que implicaba lenguaje verbal y no verbal; en el lenguaje verbal podía incluir entonaciones de voz y énfasis particu­lares que podrán resaltar algunas partes de la comunicación; esta comunicación de múltiples niveles incluye comunicación a la mente consciente y a la mente inconsciente. En el caso de estas historias el mensaje no es directo porque no se encuentra estrictamente mencio­nado de esa manera, pero desde luego que se encuentra implicado. Es un mensaje que el inconsciente construye, descubre y extracta del conjunto de la narración, mientras que el consciente se deleita con los detalles de la historia.

El tema: finalmente, existe la opción de seleccionar la historia por el tópico a que se refiere según la clasificación que elaboramos a través de la selección de palabras clave con base en la exploración realizada en más de 30 personas por historia, y contabilizadas para determinar cuál fue el tema sugerido por la mayoría de las personas con la mayor frecuencia.

Otra forma de leer y encontrarse con las historias es abrir el libro y conocerlas de manera aleatoria; sin embargo, consideramos que las opciones anteriores ofrecen mejores posibilidades.

'

■

Primera parteLos recursos de la m agia

Y en el siguiente instante el mago vuelve a mostrar su sombrero vacío.

Hace un pase mágico, mete la mano y ... ¡saca una palom a...! Y la gente que lo mira se muestra atraída por la posible form a de lograrlo...

Y dice "m agia", "magia", pero el mago sabe cómo hace su magia, porque la magia tiene una estructura... 1

"Muy bien padre — dijo el príncipe — . Puedo aceptar que tú seas mi Mago".En ese preciso instante... la muerte desapareció...

"Ves hijo mío — dijo el Rey — . También tú ya comienzas a ser un mago. 1

1 Fragmento de la historia N° 48: "E l mago y el sombrero"2Fragmento de la historia N° 36: "E l príncipe y el m ago".

.

Capítulo 1Las historias y su narración

T i p o s , d e f i n i c i o n e s y f u n c i o n a m i e n t o d e l a s h i s t o r i a s

Dado que recordar, contar y crear historias son de las más antiguas actividades del ser humano para enseñar, aprender y transmitir cos­tumbres, normas, modos de actuar, conocimiento y experiencia, po­demos encontrar una gran variedad de modalidades y estilos. En este capítulo vamos a mencionar y diferenciar algunos de los más comunes tipos de historias3.

Cuento

Iniciamos con la modalidad de cuento. La palabra proviene del la­tín "computum", cálculo: relación de un suceso, narración literaria breve; y tiene además una variedad de significados como: conseja, fábula, chisme, chiste, historia, mentira, falsedad y ficción.

Es entendido también como relación de palabras habladas o es­critas de un suceso cierto, falso o inventado, especialmente dirigido a muchachos para distraerlos. Es considerado dentro de la literatura como un texto que pertenece a la rama llamada narrativa, que uti­liza la descripción breve donde hay generalmente pocos personajes que están al servicio de un conflicto centrado sobre una característica particular de la sociedad o del individuo.

Hemos considerado el cuento como una de las acepciones de his­toria que vamos a utilizar en su significado más rico y más antiguo de transmisión, agregándole el encanto del encuentro de opciones novedosas de acción, con partes tanto verdaderas como mágicas de descripción que aun cuando pudieran parecer ficticias tienen un fuerte contenido de verdad.

3 En todos los casos consideram os las definiciones etimológicas, literarias, de diccionario y nuestra propia forma de considerar cada cual (Larousse, 2006; Cosmos, 2005).

28

Metáfora

Otra de las modalidades más usadas es la metáfora, que proviene del griego "m eta" que significa cambio, traslación, al otro lado, y "fero" llevar el sentido estricto de la palabra a otro figurado. Trasladar el sentido recto a otro distinto a través de una comparación implícita.

En literatura es considerada como una figura retórica que trasla­da el significado o sentido correcto de las cosas, ideas y las palabras con un sentido figurado.

Es darle a las cosas un nombre que pertenece a algo diferente, pero implicando una semejanza. Es una sustitución que presenta como idén­ticos a dos términos distintos; por ejemplo: "las perlas de tu boca".

Leyenda

Es una de las composiciones con gran contenido mágico que proporcio­na a los pueblos la posibilidad de explicar al mismo tiempo tanto suce­sos concretos naturales y accesibles, como inaccesibles y abstractos.

La leyenda es una obra que se lee y que incluye sucesos que tie­nen en su contenido más elementos maravillosos y de tradición, que históricos y verdaderos. Es una composición poética que se narra. Habla de cosas que tienen un contenido fabuloso, a veces con una base histórica que se transmite por tradición oral y escrita. Es varian­te y casi siempre evoca un ambiente misterioso y arcaico.

Fábula

Es un estilo de narración que utiliza el paralelismo entre una situa­ción real y una figurada, con el fin de encubrir o disfrazar la eviden­cia. Simula la situación real con personajes ficticios, generalmente emplea animales, agregándoles características humanas.

La fábula es considerada como rumor, relato o ficción con que se cubre una verdad; composición literaria que por medio de la ficción da una enseñanza moral; ofrece un suceso o acción que se narra o se representa para reconocer cualquiera de las ficciones de la mitología. Es generalmente corta y siempre incluye una moraleja explícita o implícita, es decir, una enseñanza o experiencia que se deduce del relato y se convierte en una lección provechosa.

Son tres los elementos más utilizados en cualquiera de los tipos de narración que hemos mencionado hasta el momento: el paralelis­

Primera parte: Los recursos de la magia 29

mo, el símil y la alegoría. Consideramos importante destacarlos por la futura utilización que haremos de ellos.

El paralelismo es una construcción que nos permite desarrollar una expresión reiterativa de una misma idea, con variantes que a fin de cuentas llegan al mismo punto.

El símil puede ser entendido como una figura de pensamiento que establece una relación entre dos términos, en virtud de la semejanza que puede existir entre ellos; por ejemplo: "tus dientes como perlas".

La alegoría se refiere a una sustitución a través de la cual una per­sona o cosa representa a otra distinta; por ejemplo, la paloma es una alegoría de la paz. También es considerada una composición litera­ria que utiliza una forma de ficción o representación, generalmente con fines didácticos.

Anécdota

La anécdota es un relato breve relativo a un suceso o incidente, que se hace como ilustración o ejemplo. Las anécdotas pueden ser ficti­cias o genuinas experiencias y aventuras de vida.

Milton Erickson utilizaba anécdotas de su vida, de su familia, co­nocidos y pacientes, y agregaba grandiosas descripciones para des­tacar aquellas cosas que consideraba importantes para sus escuchas. Aunque está definida como un relato breve, es posible hacer una anécdota tan extensa como consideremos pertinente (Rosen, 1994).

Narración

La narración puede ser considerada de diferentes maneras; aquí hare­mos énfasis en dos de las acepciones que consideramos directamente relacionadas con el trabajo que realizamos. Vamos a excluir su inter­pretación literaria para destacarla como acción y como contenido.

Por un lado la narración es considerada literalmente como la ac­ción realizada por una persona que relata de manera oral o escrita, y por otra parte es considerada como el discurso mismo que permi­te exponer los hechos de la manera más favorable para el esclareci­miento del asunto que se está tratando.

HistoriaI

Hemos querido finalizar con la consideración tanto de la narración como de la historia, porque pensamos que conforman el binomio que encierra

30 Historias para contarse... y crecer juntos

a todas las demás opciones, en el sentido de que todas son susceptibles de ser narradas y todas pueden ser manejadas como historias.

Estrictamente la historia es considerada como un conjunto de acon­tecimientos que pueden ser de carácter privado cuando se refieren a una persona, quien puede narrar la historia de su vida. Puede ser tam­bién de carácter público y referirse al relato de sucesos del pasado, especialmente cuando se trata de una narración ordenada cronológi­camente y que puede ser verificada por los acontecimientos.

A lo largo del texto consideraremos como historia a todas estas opciones: cuento, metáfora, leyenda, fábula, alegoría, narración, anécdota o historia. Aun cuando reconocemos que existe toda esa variedad y otros tantos géneros no mencionados aquí, hemos deci­dido denominarlas historias con el fin de unificarlas.

¿ C ó m o f u n c i o n a l a n a r r a c i ó n ?

Las historias son tan antiguas como la propia humanidad. Antes de inventarse la escritura, se trasmitían de una generación a otra las normas sociales, las experiencias y relaciones de hechos en forma de mitos, relatos, anécdotas, parábolas, canciones, cuentos, fábulas, alegorías e historias. Trataban de situaciones reales o inventadas, de dioses, hombres, animales, y espíritus y aunque no siempre se creía en ellos, las situaciones, experiencias y vivencias, que se presenta­ban, eran bien conocidas por la mayoría de las personas.

Desde entonces narrar historias y aprender a través de ellas sigue funcionando de una manera poderosa. Para dar explicación acerca de cómo es que ha sido posible esto, vamos a comenzar esta sección men­cionando algunas presuposiciones que están implicadas en nuestra concepción del manejo y funcionamiento de la narración de historias.

1) La primera presuposición es que todos los seres humanos posee­mos la capacidad de modificar nuestro comportamiento cuando es necesario. Solamente uno mismo puede transformarse. Pode­mos resolver cualquier problema, porque disponemos de la fuer­za y el potencial para hacerlo. Creemos que los seres humanos poseemos cualidades, energía, experiencia y recursos suficientes para vivir satisfactoriamente.

El Dr. Erickson postuló que las personas tenemos dentro de noso­tros mismos las capacidades naturales para superar dificultades y resolver problemas. Su enfoque consiste en hacer que esas capacida­des naturales emerjan, para lo cual existen múltiples posibilidades.

Primera parte: Los recursos de la magia 31

Dado que estas aptitudes se encuentran en un estado latente, habrá que encontrar las formas de aflorarlas para poder sacarles provecho. El estado de trance, es un estado natural del ser huma­no que le permite explorar y elegir los más adecuados dentro de ésta fuente de recursos.

2) Contar y/o escuchar historias es un método que facilita el acceso a los recursos del ser humano, capta poderosamente la atención del escucha o del lector, permitiendo conocer el mensaje de una manera segura y muchas veces mágica (dependiendo de la forma en que es contada o de la situación en que se encuentra el lector o el escucha).

Las historias tienen un gran poder de seducción invitante e ino­fensiva. Son una puerta hacia los recursos inconscientes latentes que están esperando ser "liberados".

Por tanto, a través de la narración de historias podemos contri­buir a que el escucha tenga acceso a todos sus recursos y conoci­mientos.

3) Los seres humanos podemos transformar con gran rapidez emo­ciones, pensamientos, sentimientos, formas de interpretar vi­vencias, aprendizajes, miedos y percepciones. Nuestro cerebro aprende rápido de manera natural y cuando se le facilita el proce­so aprende a gran velocidad.

4) La transformación del comportamiento de las personas depende exclusivamente de la persona misma y cuando el proceso de cam­bio es promovido mediante el acceso a los recursos inconscientes, se lleva a cabo en un ambiente de seguridad.

5) El comportamiento del ser humano se desarrolla en dos niveles distintos, uno consciente y otro inconsciente. Cada una de estas entidades influye continuamente una sobre la otra.

Lo consciente abastece al inconsciente, permanentemente, de informaciones perceptivas sobre la experiencia de la vida durante su desarrollo.

El inconsciente archiva y almacena las informaciones clasificán­dolas por asociaciones que son únicas para cada individuo.

Hemos encontrado útil para ejemplificar a la mente incons­ciente y a la consciente, la imagen de un témpano de hielo (ice­berg), del cual podemos distinguir sólo una pequeña porción de su dimensión total sobre la superficie del mar (mente con­sciente), quedando oculta la mayor parte (mente inconsciente) en una relación de proporciones aproximada de un 15% y un 85% respectivamente.

32 Historias para contarse... y crecer juntos

A manera de ejemplo: si piensas en todo lo que has aprendido desde el día de tu nacimiento hasta este mo­mento, quizá podrás tener una idea de la gran cantidad de conocimientos que has acumulado en tu experien­cia. Ahora piensa: de todo eso que sabes, de todas tus expe­riencias de vida, de todas tus habilidades adquiridas, ¿qué cantidad estás empleando en este preciso momento?

Estamos seguros que las respuestas son: gran cantidad de conocimiento y habilida­des en tu experiencia; y casi nada de todo eso es lo que es­tás utilizando ahora.

Sin embargo todo lo aprendido está ahí, dentro de ti, disponible para cuando lo requieras. Existen formas protegidas y saludables de poner a tu disposición esos recursos que has adquirido a lo largo de tu vida, en un mismo momento.

6) Todos los seres humanos de manera natural, podemos experimen­tar el estado de trance hipnótico porque es una función normal in­tegrada de nuestro cerebro. Queremos proponerte que recuerdes algún momento de tu vida en que perdiste la noción del tiempo; alguna ocasión en que realizaste una actividad que te gusta mucho, a la cual te entregaste absolutamente y pudo haber pasado mucho tiempo sin que te dieras cuenta. En otros momentos al realizar acti­vidades desagradables o de poco interés para ti, pudo haber suce­dido en tu percepción, que el tiempo transcurrió muy lento. A esto le llamamos distorsión del tiempo y nuestro cerebro lo lleva a cabo como una función normal. La única diferencia radica en la forma en que lo percibimos, porque estarás de acuerdo en que el tiempo transcurre a la misma velocidad ya sea que nos demos cuenta o no.

Lo importante es que nuestra mente puede llevar a cabo este tipo de fenómenos y que podemos ponerlos a nuestra dispo­sición en los momentos más adecuados para ello. Es grandio­so hacer una distorsión del tiempo logrando la percepción de

MENTE CONSCIENTE %

Primera parte: Los recursos de la magia 33

que ha sido breve ante una situación aburrida o desagradable, y prolongarlo cuando estamos disfrutando de una situación pla­centera. Esto es posible a través del trance hipnótico como una función normal de nuestro cerebro que podemos aprender a ma­nejar para ponerla a nuestro servicio.

7) Todos los seres humanos somos capaces de transform ar las pa­labras y los acontecim ientos de nuestra vida en símbolos, y esta capacidad de manejarnos con símbolos hace posible encontrar la solución de problemas de una manera simbólica también; como en el caso de las historias que exponemos en este libro. Los símbolos forman parte del lenguaje del inconsciente; así que, crear un símbolo en relación con el problema, abre una puerta directa al inconsciente. Podemos entonces intervenir directamente sobre el símbolo para modificar los elementos in­conscientes que representa, ya que para la mente inconsciente, el mapa ¡sí es el territorio!

Por ejemplo, una persona que se enfrenta a un problema que piensa que no puede resolver podría decirnos que "es como un muro" que le impide pasar o encontrar la solución. Simbólica­mente podemos sugerirle que llegue hasta el muro y encuentre un medio adecuado para pasar o asomarse al otro lado; podría utilizar una escalera, una puerta, un árbol, una cuerda, una venta­na, transformar el material del muro en algo transparente, volar, cavar un túnel por debajo del muro, etc., y cuando haya encontra­do el acceso que necesita, en ese mismo momento de una manera simbólica el inconsciente ha ofrecido una solución que podrá ser expresada en la acción futura.

8) Partimos del supuesto de que todos los seres humanos hemos for­mado símbolos universales a partir de las experiencias de cada individuo y de la historia de la humanidad, razón por la cual fun­cionan los símbolos de los personajes de los cuentos.

Cari G. Jung planteó la existencia de arquetipos que representan estos símbolos universales, y establece que nosotros los represen­tamos en nuestro interior como personajes que juegan papeles importantes en nuestra propia historia y cultura (Jung, 1992).

Podemos mencionar como ejemplos: la anciana, el niño, el Rey, el sabio, la curandera, el sanador, el hada, el héroe, la victima, el monstruo, el amigo, el chamán, la bruja, la princesa, la virgen, el huérfano, el abuelo, el sacerdote y el Yo (Jung, 1993).

Al contar historias que incluyen a este tipo de personajes esta­blecemos una comunicación simbólica con la parte inconsciente

34 Historias para contarse... y crecer juntos

de la persona y despertamos a esos representantes suyos que participan en la trama y que ponen a su servicio sus significados, sus posibilidades y sus experiencias, para resolver el conflicto que el personaje "real" (la persona y sus recursos conscientes) no ha podido resolver.

9) La narración de historias es una herramienta que facilita el acce­so a la mente inconsciente y al uso de los recursos naturales de toda persona.

10) La manera en que funciona la narración de historias está directamen­te relacionada con la forma de funcionamiento de los hemisferios cerebrales y con todos los supuestos mencionados anteriormente.

C ó m o h a c e r l a n a r r a c i ó n

Tanto el conocimiento como los elementos de la sabiduría humana se retienen mucho mejor cuando son transmitidos mediante his­torias, en especial si estas historias son narradas de una manera invitante, de una manera vivida, de una manera actuada. El relato es un instrumento maravilloso que pone en palabras eso que de otro modo podría correr el riesgo de no ser dicho; por ejemplo: los miedos, las angustias, los deseos, la culpabilidad, la rivalidad, etcétera.

Con los relatos, sabemos que podemos invitar al oyente a divertirse y a disfrutar a través de la comunicación con su mente inconsciente.

Es a través de la leyenda, del uso de fábulas, de los relatos histó­ricos, los cuentos de hadas, los poemas y los mitos que los pueblos han seleccionado y desarrollado de una manera intuitiva, que se encuentran recursos extraordinarios apropiados para ayudar a la persona cuando ésta se enfrenta a situaciones diversas, incluso a situaciones problemáticas.

De esta manera es como funcionan las historias en el consultorio psicológico; el uso del relato metafórico permite al individuo con­templar su problema bajo una nueva forma, bajo una nueva circuns­tancia, y al mismo tiempo le sugiere la posibilidad de soluciones, sin ser estrictamente directos; sabemos que ese relato influye en la persona de una manera poderosa, y la magia parece estar en el efecto que el cuento tiene sobre la mente inconsciente del oyente.

La manera en que funciona, es precisamente cuando la persona que está escuchando la narración e incluso muchas veces también la persona que la cuenta, se identifican con el personaje. Al hacerlo, puede surgir en cualquier momento una nueva idea o una nueva

Primera parte: Los recursos de la magia 35

percepción de las cosas. En ocasiones, el oyente ni siquiera relaciona esto con la historia escuchada y sólo se encuentra con que está ha­ciendo algo diferente o está considerando alternativas que antes no tenía; o cuando establece una correlación entre su situación actual y los nuevos datos suministrados por el relato.

A través de los relatos la persona tiene la posibilidad de percibir, tanto de manera consciente como de manera inconsciente, y ésa es una de las grandes riquezas de este tipo de manejo terapéutico; algo que le afecta, que le concierne o que tiene que ver directamente con algún aspecto particular de su vida puede ser entendido a manera de ficción o a manera de paralelismo, y de alguna forma su mente in­consciente es la que se encarga finalmente de establecer esas conexio­nes y así automáticamente revierte, arregla, transforma o soluciona.

Dado que las historias transmiten un mensaje, presentan situa­ciones paralelas o similares, muestran soluciones para tales situacio­nes y con ellas ofrecen nuevas posibilidades de afrontar los asuntos difíciles, resultan muy apropiadas porque son instructivas de una manera respetuosa, sutil, discreta y a la vez altamente eficaz.

El que escucha tiene la libertad de identificarse con las formas, relaciones, acontecimientos, dificultades, desarrollos y soluciones presentadas, o bien puede optar por quedarse a distancia de lo escu­chado. Tanto si acepta como si rechaza lo que la historia propone, el oyente lleva a cabo una búsqueda del sentido de lo contado.

El narrador introduce en ella su percepción, desarrollo y solución de las circunstancias. El oyente por su parte, toma nota de la historia que se adecúa con su mundo, y le da un significado personal.

Así pues, mientras escucha las palabras del narrador, el oyente examina todas las informaciones y analogías en la propia experien­cia y las dota de sentido personal. Esta es la finalidad de las historias terapéuticas, o que resuelven problemas. Movilizan en el escucha una búsqueda consciente e inconsciente para darle un sentido a esos personajes, acontecimientos, dificultades y soluciones, basados en su propia experiencia.

El oyente puede incorporar a los personajes con sus problemas, sus relaciones y las cosas que viven, a su propia situación, o puede adecuarse a ellos y analizar la solución presentada.

Si le parece que corresponde a su propio mundo, puede hacerla suya, y si considera que no corresponde, sabe cuando menos que existe una solución y eso es lo que estimula en él, la búsqueda de su propia solucion. Carece de importancia si se lleva la solución propuesta en la historia o no; lo verdaderamente importante es la

36 Historias para contarse... y crecer juntos

apertura hacia la búsqueda de nuevas opciones, especialmente si la persona las considera suyas.

En una película infantil llamada El Rey León, aparecen dos per­sonajes: "Tim ón" y "Pum ba", que ejemplifican de una manera muy clara el efecto de una historia cuando la persona ha hecho propia la solución a su situación.

Pumba le dice a Timón: "Oye Timón, se me acaba de ocurrir una gran idea: ¿por qué no tomamos el camino corto y así llegaremos pri­mero que Simba (el hijo del Rey León)?". Timón le responde: "Cálla­te Pumba, que no me dejas pensar". Momentos después le dice con expresión alegre: "Pumba, se me está ocurriendo una brillante idea: ¿por qué no tomamos el camino corto y de esa manera aseguramos llegar antes que Simba?"

En este ejemplo es claro cómo Timón lleva consigo la solución propuesta por su amigo, pero sólo la expresa hasta que la ha hecho suya, y sólo cuando eso sucede puede reconocerla como suya. Cuan­do en la narración de una historia logramos conseguir ese efecto, sabemos que hemos hecho un buen trabajo.

Las historias terapéuticas que presentamos en el libro producen este tipo de efecto, porque el escucha selecciona lo que tiene sentido para él y construye con los materiales de la historia su propia forma de abordar la situación. Cada persona desarrolla su propio y único modelo del mundo, que se basa, además, en los factores determina­dos por sus experiencias individuales.

Los HEMISFERIOS CEREBRALES Y SU PARTICIPACIÓN DURANTE LA NARRACIÓN

Sabemos que los dos hemisferios cerebrales del ser humano se dis­tinguen claramente por sus respectivas funciones. El neurólogo francés Pierre Paul Broca descubrió que una región específica del hemisferio izquierdo es la responsable de la motricidad lingüística en las personas diestras; ésta región aún sigue denominándose área de Broca.

Basados en estos hallazgos, los estudiosos del sistema nervioso humano han explorado las funciones diferenciales del cerebro; cada uno de los hemisferios cerebrales ha sido categorizado en relación con sus acciones y se han distinguido sus funciones respectivas.

El hemisferio izquierdo tiene una predominancia funcional re­lacionada con actividades analíticas y de relación como el lenguaje, la escritura, la aritmética, el pensamiento, la secuencia, el orden, la linealidad y la comunicación digital. Se encarga de procesar la

Primera parte: Los recursos de la magia 37

información en secuencias, en serie, según un patrón temporal de- codificando las señales y traduciéndolas en palabras después de haberlas analizado.

El hemisferio derecho se ocupa predominantemente de activida­des relacionadas con la emoción, la integración sensorial, la intui­ción, la música, los sueños, los gestos, el lenguaje no verbal, la comu­nicación analógica, y es totalizador. Está especializado en hacer un tratamiento simultáneo y analógico de la información, se encarga de los conjuntos e integra las partes para formar el todo, globalizando la información que recibe.

Por otra parte, sabemos también que se encuentran unidos y re­lacionados por una serie de fibras nerviosas que viajan de un lado a otro y que conocemos anatómicamente como el cuerpo calloso. Esta estructura es muy importante, especialmente por su función de re­lación y comunicación entre los dos hemisferios para su funciona­miento integral (Álvarez, 2005).

Las funciones integradoras del cerebro no están localizadas en un hemisferio cerebral, sino que están basadas en la conexión física y funcional establecida a través del cuerpo calloso entre los hemisfe­rios y en la relación permanente de todas las áreas cerebrales impli­cadas en el funcionamiento total del encéfalo.

En un funcionamiento mental óptimo, ambos hemisferios actúan intercomunicados y en estrecha colaboración (Álvarez, 2005).

Existe mucha información acerca del funcionamiento diferencial y del funcionamiento conjunto de los hemisferios cerebrales; men­cionaremos, sin embargo, sólo los aspectos generales que nos permi­ten explicar la participación de ambos en la narración de las historias terapéuticas, destacando que se trata de un continuo de información, función y participación; así que en el momento en que la historia es narrada ambos hemisferios están en funcionamiento, alternando in­formaciones, recursos, capacidades y especialidades.

Las palabras y los significados, la trama, la secuencia y la lógica, los acontecimientos y los personajes, son recibidos y organizados por el hemisferio izquierdo, predominante o categórico (en su acep­ción más reciente); en tanto que las entonaciones de voz, las inflexio­nes, el sentimiento con que es narrada la historia, la convicción del narrador, las pautas de problematización y solución, la emotividad, la traducción de las palabras en imágenes y símbolos, la vivencia de la narración en el aquí y ahora y la distorsión del tiempo, son mági­camente manejados por el hemisferio derecho, totalizador, globali- zador o analógico (Álvarez, 2005).

38 Historias para contarse... y crecer juntos

Ambos hemisferios participan en armonía y equilibrio para pro­porcionar una interpretación integrada.

M e n t e c o n s c i e n t e y m e n t e i n c o n s c i e n t e

Ya mencionamos en líneas anteriores, que partimos de la presuposi­ción de que existen dos niveles de comportamiento: uno consciente y otro inconsciente, y que eso implica también, dos diferentes niveles de entendimiento, aprendizaje, comunicación y conducta. Por otra parte, es importante mencionar que señalar éstas dos dimensiones es sólo una forma de simplificar, ya que consideramos que existen niveles múltiples de relación y asociación mental que podemos en­globar en estas dos grandes funciones.

Neurofisiológicamente, "consciente" e "inconsciente" corres­ponden al hemisferio izquierdo y derecho, respectivamente. Esto significa que mientras nuestro cerebro izquierdo (mente conscien­te), opera bajo un marco de lógica, de manera lineal y en función del tiempo, nuestro cerebro derecho (mente inconsciente), se de­senvuelve más bien desde la intuición, desde una perspectiva emo­cional, no rígida ni estrictamente lógica y sin percepción concreta del tiempo.

Es una creencia generalizada que la mayor parte del tiempo que permanecemos en vigilia predomina la función de nuestra mente consciente, y durante el sueño y la ensoñación predomina la fun­ción inconsciente. Sin embargo, durante el transcurso del día se presenta de manera natural, un estado de acceso especial a los re­cursos inconscientes en periodos de 60 a 90 minutos, lo que signi­fica que estos se encuentran disponibles todo el tiempo y lo mejor de esto es que podemos aprender a disponer de ellos de manera voluntaria (Rossi, 1986b).

Regresando al ejemplo del iceberg, acceder a la mente incons­ciente o, mejor dicho, a los recursos contenidos en la mente in­consciente, equivale a invertir el iceberg y esto es posible a través de una gran cantidad de mecanismos, entre los cuales contamos con la narración de historias terapéuticas.

Lo que no advertimos cotidianam ente es que la mayor parte de nuestra vida está determinada en forma inconsciente, aunque esto no significa de ningún modo que estemos predeterminados o que lo inconsciente sea inmodificable. Cada una de nuestras ex­periencias actuales afecta tanto nuestra mente consciente como inconsciente.

Primera parte: Los recursos de la magia

Estos cambios permanecen, porque involucran la emergen­cia y utilización de los aprendiza­jes inconscientes (Rosen, 1994).

Sabemos que la mayor par­te de la capacidad de nuestro cerebro es "desaprovechada" de manera cotidiana; existe la creencia general de que sólo usamos de un 20 a un 30% del total de su capacidad y al pa­recer esto se encuentra en re­lación estrecha con la función de la mente consciente.

Por el contrario, la función de la mente inconsciente que se encuentra en relación con la utilización del cerebro de­recho y de los aprendizajes acumulados durante la vida, constituye aproximadamente el 80% de la información almacenada.

Milton Erickson transformó el viejo concepto de inconsciente plan­teado por Freud como un recipiente de deseos reprimidos o un armario en el que se amontonan todos los acontecimientos que deseamos inhibir. En su lugar plantea al inconsciente como un contenedor de recursos, ex­periencia, información, vivencias y funciones (Cavallier, 1998).

Podríamos preguntarnos cómo es que el solo hecho de escuchar un relato, puede ser provechoso para un paciente; pero sabemos por experiencia que los relatos son una forma de ayudar a una persona a ponerse en contacto con su propio saber desaprovechado, porque al escuchar, lo más probable es que evoque e incorpore a su comporta­miento esos conocimientos previamente olvidados.

P a s o h a c i a l o s r e c u r s o s d e l a i n f a n c i a a t r a v é s d e l a f a n t a s í a

En el transcurso normal de la vida, todos los individuos vamos desarrollando cualidades y habilidades que nos capacitan para el desempeño de actividades y comportamientos propios de la espe­cie, la cultura y la edad. Al inicio del desarrollo, cuando niños, nos encontramos en contacto íntimo con el mundo del inconsciente (de la imaginación y la fantasía), absorbiendo de una manera impre­

1 40 Historias para contarse... y crecer juntos

sionante información, valores, normas, desarrollando habilidades, capacidades y recursos; es un tiempo en el que la fantasía y el pensamiento son la misma cosa y se convierten en inseparables e indistinguibles.

Es a través del tiempo, con la socialización y el constante recuerdo por parte de los adultos, que debemos responder a las expectativas culturales; nos fuimos alejando del mundo fantástico y mágico de la infancia para dar paso al mundo "real" de los adultos, el mundo de los problemas, los conflictos y las interrupciones del proceso perso­nal de desarrollo mental.

A pesar de que fuimos forzados a abandonar este mágico mun­do, logramos establecer un fuerte lazo y una inseparable asociación entre la infancia, la fantasía y el inconsciente con sus recursos, de tal manera que cuando contactamos con cualquiera de estos elementos, desencadenamos automáticamente esas relaciones.

Cuando niños estamos dispuestos a aprender y a tomar riesgos, a divertirnos, a no juzgar y a relacionarnos con el mundo, y por esa razón es que tenemos disponibles las funciones inconscientes de una manera permanente. Es como si en la infancia, todos estuviéramos continuamente en trance hipnótico. Estos vínculos quedan entonces poderosamente establecidos.

Es lamentable que también aprendimos a ignorar y descalificar nues­tros propios intereses; por tanto, no es que carezcamos de recursos, sino que estos se encuentran bloqueados por los aprendizajes y sentimientos

Primera parte: Los recursos de la magia 41

negativos dirigidos contra nosotros mismos o contra cualquier otro por causa de la imagen que nos creamos y el empeño que ponemos en serle fiel y en forzamos a mantener. Quien sufre un bloqueo no puede darle salida a su potencial; no mientras permanezca el bloqueo.

A muchas personas les agrada comentar sus problemas. Hablar de ellos les produce la tranquilizadora sensación de que están haciendo algo por sí mismos; pero la experiencia nos dice que son escasos los problemas que pueden solucionarse con sólo hablar, porque la úni­ca forma de hacer, es haciendo, y una forma efectiva de aprender es hacer; indagando en nuestra estructura interior y estando realmente dispuestos a ocuparnos de lograr un cambio (Watzlawick, 1995).

Es por esa razón que los relatos son tan atractivos, en especial cuando en ellos se encuentran personajes o situaciones con las que podemos identificarnos y que presentan soluciones o alternativas que no habíamos imaginado; podemos a través de la imaginación tener el coraje, la agudeza, la calma o aquella capacidad que le per­mite al o a los personajes de la historia solucionar exitosamente cual­quier situación. Al apropiarnos de esos recursos podemos lograr lo mismo; sin embargo, debemos tener en cuenta que los recursos sólo sirven si los utilizamos y esto es algo que solamente cada persona puede hacer. Podemos llevar al sediento a la fuente de agua, pero no podemos beber por él.

Al narrar historias terapéuticas llevamos a nuestro sujeto a la fuente misma y al encontrarse ahí puede establecer contacto con sus recursos inconscientes a través de la fantasía, de la vivencia de cada parte significativa de la historia, logrando lo que hemos llamado "in­vertir el iceberg", disponiendo de aquellos recursos de la infancia abandonados y olvidados, invirtiendo el predominio consciente y a veces limitante, para dar paso al potencial del inconsciente.

Finalmente, queremos enfatizar que el predominio funcional no significa la limitación de otras funciones. Es común apreciar sola­mente las funciones conscientes y despreciar las inconscientes y vi­ceversa; sin embargo, ambas funciones son importantes y una no anula a la otra sino que se acompañan, aunque en su momento pre­domine alguna de ellas. A lo que tenemos acceso en esos momentos es a los recursos que ya habíamos perdido de vista. Imaginamos a la mente consciente e inconsciente en un vaivén constante y continuo, como el de una hamaca que mece a un individuo llevándolo de un lado a otro hasta, conseguir equilibrar el arrullo, para lograr el obje­tivo; por ejemplo, para relajar a la persona, realizar alguna actividad o disponer de todos los recursos para elegir entre ellos los más útiles

42 Historias para contarse... y crecer juntos

en cada momento, generando una solución alterna, una nueva idea, una nueva percepción o una nueva conducta.

A l g u n o s a s p e c t o s a c e r c a d e l a c o n s t r u c c i ó n d e h i s t o r i a s

La eficacia del relato depende del paralelismo que tenga con la situa­ción real del oyente, es decir, conviene crear un símil de la situación que está viviendo. Al despertar el máximo interés podemos colabo­rar en desarrollar su propia creatividad y llevarlo a reencontrarse a sí mismo, a reconocerse y hasta a sorprenderse ante el descubrimien­to de estar representando alguno de los papeles del relato.

Fritz Perls decía que en el sueño, el soñante es cada uno de los ele­mentos del sueño y llevarlo a vivenciar cada una de esas partes del sueño como si fuera un personaje, brinda a la persona una cantidad de información que está disponible a nivel simbólico (Perls, 1994).

Erickson decía que cuando una persona habla de autos, quien la oye piensa en autos, que cuando alguien habla de hermanos el oyen­te piensa en sus propios hermanos o en que no los tiene si ese fuera el caso (Rosen, 1994).

Se trata por tanto, de crear una analogía entre los personajes y los sucesos concretos que está viviendo el paciente. Podemos men­cionar como elementos importantes a manejar en la creación de una historia terapéutica: la situación problema, la meta a alcanzar o la situación tal como deseamos que ocurra, la creación de una situación isomórfica que incluya una estrategia de solución y que llegue a la resolución de la situación problema de una manera no contemplada previamente por la persona.

Un relato que nosotros construimos y que solemos emplear al fi­nal de la terapia, cuando la persona está ya en la última sesión; es el siguiente: "Imagina que eres invitado(a) a un gran banquete, es un banquete preparado especialmente para ti, puedes encontrar una larga mesa muy adornada y con hermoso mantel; sobre esa mesa hay toda clase de platillos: bebidas, postres, frutos y pan. Todo está disponible para que tú lo puedas tomar; asegúrate de tomar aque­llo que está bien para ti, puedes tomar cualquier cosa que vayas a necesitar en el camino que vas a iniciar ahora, asegúrate de tomar aquello que es verdaderamente útil, aquello que requerirás durante el camino, ni más ni menos de lo que necesitas, lo justo. Toma todo aquello que verdaderamente requieres para ti..."

Cuando conocemos los gustos de la persona, le mencionamos al­gunos platillos que sabemos le son significativos, y si desconocemos

Primera parte: Los recursos de la magia 43

esos datos o hacemos la invitación a un grupo de personas, decimos: "todo lo que a ti te gusta"; y solemos ser tan descriptivos como la situación específica lo requiera, según nuestra opinión.

Esta es una de las formas de diseñar un relato terapéutico. A con­tinuación, haremos algunas recomendaciones para su construcción, terminando con uno de los métodos de elaboración que considera­mos más sencillo.

R e c o m e n d a c i o n e s

■ Elaborar un objetivo concreto y claro.Es importante saber a dónde queremos llegar para asegurar que tomamos el camino adecuado. Mientras más concreto y claro sea nuestro objetivo, nuestro relato será más orientador y será más sencillo llegar.

■ Elaborar el objetivo en términos positivos.Es conveniente plantearnos la meta en relación a lo que sí que­remos conseguir en lugar de hacerlo en relación a lo que no queremos. Es notable que al preguntar a las personas qué es lo que quieren lograr, generalmente responden diciendo qué es lo que no quieren.

Sabemos que el inconsciente no registra las negaciones; por ejemplo, si le decimos "no pienses en rosas, ¿qué es lo que ocu­rre?, piensa un poco, date la oportunidad de revisar tu propio pensamiento y date cuenta si no fue en rosas justo en lo que pen­saste..." Hasta ahora todas las personas a las que hemos hecho esta pregunta nos han dicho que no pueden evitar pensar en rosas aun cuando querían complacernos en no hacerlo, lo más que lo­gran es reducir la cantidad de tiempo en que lo mantienen en su mente.

Ocurre que para hacer caso a las negaciones la mente con­sciente primero repasa el significado de las palabras empleadas y por ello pensamos en las rosas si las mencionamos, aun cuando después podamos minimizar la duración o el efecto; el objetivo establecido en términos negativos genera poca creatividad.

Por el contrario, si invitamos a nuestros pacientes a imaginar en términos positivos conseguimos una comunicación eficiente y ellos consiguen la imaginación enriquecida.

Por ejemplo, les decimos: "Imagina, sólo imagina que ahí en el piso, cerca de tus pies, protegidamente se encuentra un conejo y puedes darte cuenta de que ahí está y puedes mirar sus ojos

44 Historias para contarse... y crecer juntos 1

rojos, sus orejas rosadas por dentro y blancas por fuera; puedes también percatarte de sus movimientos respiratorios en su cuer­po y en su naricita y puedes también darte cuenta de la tempera­tura de su cuerpo, el calor que se desprende de su cuerpo y llega hacia tus pies, y puedes también sentir la suavidad de su pelaje y asegúrate de disfrutar este momento. Mientras todo esto ocurre, quiero pedirte que hagas una respiración profunda y me mires a los ojos. ¿Dónde estaba el conejo...?"

Y la mayoría de las personas da una de las dos siguientes respuestas: 1) En mis pies, 2) En mi mente. Y sin importar cual sea la respuesta, es claro que lograron imaginarlo. Desde luego que corroboramos eso con preguntas tales como: ¿pudiste ver sus ojos?, ¿cómo era el movimiento de su respiración, lento o rápido?, etc. Y mientras todo esto ocurría, ¿dónde estaban las rosas?Y la respuesta para esto es: "no sé", "no estaban".

Así que en este momento la persona se encuentra en condicio­nes de plantear en términos positivos, y en presente sus objetivos.

• Enunciar el objetivo en términos sensoriales (visuales, auditivos, y kinestésicos).

Se puede enriquecer la información si exploramos en la per­sona qué cosas va a escuchar al llegar a la meta terapéutica, qué va a sentir, qué va a mirar y que sea posible verificarlo para evaluar nuestro desempeño. En el ejemplo anterior, cuando la persona responde cómo era el movimiento, el color de los ojos y la tem­peratura, nos ofrece datos que nos informan que efectivamente logró el objetivo del ejercicio.

Estos datos pueden ser elegidos por el paciente, por la perso­na que va a elaborar la metáfora o por ambos y lo importante es tener los elementos de verificación.

• El uso de palabras vagas o generales es recomendable para esti­mular la creatividad en el escucha.

Mientras más vagos seamos en las palabras que contenga la historia, será más fácil que la persona le ponga su propio con­tenido o gusto. Por ejemplo, es diferente sugerir a la persona imaginar un bosque que sugerirle ir a un lugar que le resulte placentero, porque en el caso del bosque se reducen las opcio­nes y en el caso del lugar placentero se multiplican; podría ser la sala de su casa, su cama, un helicóptero, un paracaídas, una cascada, una playa, etcétera.

• Dar prioridad a las palabras que invitan a la acción, es decir, ver­bos ya sea en infinitivo o en gerundio. Por ejemplo: "En este lugar

Primera parte: Los recursos de la magia 45

que elegiste estás realizando las cosas que hacen que sea placen­tero", o "está sucediendo aquello que tú quieres que suceda".

• Para plantear la solución es muy útil hacer uno de los símbolos universales que mencionamos anteriormente. Por ejemplo, el hombre sabio, el rey, la princesa, la curandera, los animales del bosque, el genio, los héroes mitológicos, personajes célebres, los elementos naturales y sus propiedades (agua, fuego, tierra y vien­to), etcétera.

C ó m o c r e a r u n a h i s t o r i a e f i c a z

Aun cuando este es un libro en el que incluimos 80 historias tera­péuticas y no de elaboración de ellas, hemos elegido mencionar este método de construcción para proporcionar a nuestros lecto­res los elementos mínimos necesarios para comenzar a hacer sus propias historias o enriquecer con sus ensayos las que presenta­mos aquí.

Para diseñar una historia terapéutica eficaz, debemos tener pre­sentes tres criterios:

1) Mantener un paralelismo2) Incluir una solución o alternativa3) Mantener el principio ecológico.

Mantener un paralelismo

Si queremos hacer una historia que influya en la solución de un pro­blema, procuramos que ésta sea parecida en estructura a ese pro­blema y/o al contexto cultural, familiar, idiosincrásico del paciente; debemos considerar sus relaciones y el contexto de la persona y del problema. Debe mantener congruencia con el mundo y los princi­pios del paciente y del terapeuta.

Incluir una solución o una alternativa

Para que además de eficaz sea terapéutica, la historia debe contener el mensaje de que existe solución; pueden ser propuestas una o mu­chas soluciones y podríamos incluso no incluir soluciones, pero en definitiva debe contener un mensaje de que ésta existe.

El mensaje debe contemplar que la solución es sencilla y que pue­de conseguirse de una manera muy natural. Si se cumplen estas con­

46 Historias para contarse... y crecer juntos

diciones de equivalencia estructural y existe una solución, la historia puede tener efecto terapéutico.

En ocasiones la persona que escucha la historia puede percatarse de la similitud estructural y pudiera generar un poco de resistencia, por lo cual conviene buscar la forma de mantener la equivalencia sin ser tan obvios. No obstante, aunque éste fuera el caso, sigue existien­do la efectividad terapéutica que consiste en el reconocimiento de la posibilidad de una solución, que puede impulsar al paciente a la búsqueda de la misma en su propio contexto.

Mantener el principio ecológico

Nosotros conocimos este principio a través de la Programación Neu- rolingüística (pn l) y desde entonces lo incluimos en cada cosa que hacemos o enseñamos a nuestros alumnos.

Este principio se basa en evaluar y valorar que nuestras acciones o decisiones están dentro del rango de tolerancia y aceptación, tan­to para nosotros mismos como para la demás personas implicadas. Podemos identificarlo como b a t í , que son las iniciales de las cuatro cosas que debemos considerar:

Para mí

Bueno SíAdecuado SíTolerable SíIntolerable Sí

Esto significa que si es bueno para mí y para los demás, entonces es ecológico. Si es adecuado para ambas partes es ecológico también. Si es tolerable para ambas partes aun sigue siendo ecológico. En el caso de ser tolerable para alguna de las partes y bueno para la otra parte cumple con el principio ecológico.

En el caso de que para cualquiera de las partes sea intolerable, entonces aunque sea bueno, adecuado o tolerable para la otra parte, no cumple con el principio ecológico.

Para que sea ecológica la historia hay que excluir aquello que es inútil, peligroso, negativo o evidentemente dañino.

Al cumplir con estos tres requisitos en la construcción terapéutica de historias, estamos listos para transportar nuestro aprendizaje casi

Para los demás

Sí iSí > EcológicoSí JSí No ecológico

Primera parte: Los recursos de la magia 47

a cualquier situación hipotética. Piensa en una persona o en un pro­blema y pregúntate "a qué se parece".4

Por ejemplo, si es una persona podrías pensar, respetuosamente, a qué animal del bosque podría representar; de ser un color, qué co­lor sería; de ser un sonido, qué sonido sería, etc. Si es una situación, podrías preguntarte: ¿esto a qué se parece? Y cuando encuentras un símil, entonces tienes los elementos. Ahora, imagina construir una historia que incluya tanto la situación problemática como la solu­ción, la ecología y el paralelismo con respecto al problema; cuida de construir una solución en el contexto de la persona en quien hayas elegido pensar. Escribe lo que imaginaste y luego sin explicación cuéntale la historia que creaste y date cuenta de los efectos.

R e c o m e n d a c i o n e s p a r a l a n a r r a c i ó n d e h i s t o r i a s

Contar una historia a alguien significa invitarlo a un ritual de imagi­nación y crecimiento personal (Limón, 2005).

Si queremos que nuestro relato tenga un efecto mágico, debemos comenzar con "vivir" el relato de una manera mágica y cargado de autenticidad e inocencia. Es importante la selección de las palabras que podrán fluir si es que nos entregamos al momento y en lugar de inventar describimos las cosas que estamos viviendo, sintiendo, es­cuchando y mirando en ese mundo mágico creado por nosotros mis­mos en este ritual; son importantes también el tono de voz, los movi­mientos de la cabeza y del cuerpo, las pausas, los silencios, el énfasis en algunas palabras y promover la expectativa en el escucha.

Por supuesto que la forma de presentar las historias puede ser diver­sa y que no existe una forma única de hacerlo; el narrador puede apro­vechar al máximo su creatividad y los recursos de su personalidad.

Para iniciar, podemos decir directamente: "te voy a contar una historia", "esto me recuerda...", "érase una vez...", "hace mucho tiempo", "un día, hace muchos años", "conozco una persona que...", "mi padre un d ía ...", "cuando mi m am á...", etc.; o podemos tam­bién sólo comenzar a contarla sin previo aviso: "Caminaban cierto día por la playa dos am igos..." (Historia N° 2).

A veces utilizamos introducciones más complejas para generar un poco de confusión: "A sí me llega y como me llega te lo digo, por­que yo confío en mi mente inconsciente porque sé que tu mente y mi

4 Zeig, Jeffrey. Diplomado Internacional de Hipnosis: Hipnosis en Tiempo Reducido. Be­nemérita Universidad Autónoma de Puebla. Puebla, México, 1998. Comunicación personal.

48 Historias para contarse... y crecer juntos

mente inconsciente son altamente confiables y mi mente inconscien­te pone a tu servicio algo que he recordado y yo digo que por algo me lo ha recordado, así que sé que de algo servirá y aunque yo no sepa para qué, y tú ahora no lo sepas, creo que tu mente inconsciente te dará la oportunidad de utilizar ese aprendizaje..."

De la misma manera que los cuentos de hadas, es preferible con­tar las historias de una manera flexible; por ejemplo, dependiendo de la persona a quien se la contamos podemos usar un volumen de voz alto o bajo, dependiendo del efecto que queremos lograr pode­mos susurrarla, contarla como si fuera un secreto, del lado derecho o del lado izquierdo, los personajes pueden cambiarse de sexo, edad, religión o características para adaptar los contextos apropiados para la persona a la que son contadas.

Podemos cambiar el orden de la presentación de los eventos en la historia; por ejemplo, la historia N° 22, "La casa de los espejos ", la conocimos en un orden de eventos diferentes; el perrito estaba con­tento y luego enojado y en algunos casos fue útil contarla así o sim­plemente no encontramos inconveniente en contarla de ese modo, pero en otras situaciones nos encontramos con personas cuyo pro­blema era precisamente el enojo y nos parecía poco apropiado dejar como mensaje final el enojo.

Como narradores de historias podemos ir adquiriendo cada vez más habilidades y hacerlo cada vez más fácilmente. Podemos dar tiempo suficiente a nuestros oyentes para que ellos enriquezcan su imaginación. Podemos aprender a reconocer y utilizar las señales corporales que nos proporciona la persona o el grupo de personas en momentos cumbre, como por ejemplo los cambios de coloración de la piel, el ritmo de la respiración, la expresión facial u otras señales apenas perceptibles.

En algunos momentos puede ser conveniente repetir alguna par­te de la historia para enfatizarla o bien para darle nuevamente la posibilidad de crear algo enriquecedor en ese momento.

Para comenzar la narración, podemos contar algo que no tenga relación alguna con el problema, algo fuera de lugar pero respetuo­so, o podemos iniciar con conversación hipnótica, siempre con la fi­nalidad de hacer el mensaje mas indirecto.

Por otra parte, existen momentos muy oportunos para contar una historia como los momentos de confusión, sorpresa, duda, o sim­plemente utilizando los estados de trance natural que todos los in­dividuos presentamos en periodos de 60 a 90 minutos (Rossi, 1986).

Primera parte: Los recursos de la magia 49

Este estado lo podemos reconocer con algunos signos discretos que la persona muestra de manera inconsciente; puede ser la mirada perdida, la expresión "planchada", bostezo, ruido de movimientos intestinales, parpadeo frecuente e incluso el cerrado de los ojos de manera voluntaria.

Durante la narración de la historia podemos agregar como suge­rencia incluir entonaciones elementales de dramatización. Jeffrey Zeig comenta que la terapia es drama y el terapeuta tiene mayor éxito cuando dramatiza y pone énfasis en las cosas que dice o hace5. Podemos "subrayar" paraverbal o corporalmente, es decir, pro­nunciar enfáticamente palabras y movimientos. La convicción que nosotros tengamos de que la historia va a ser útil es fundamental para que surta el efecto; si nosotros no creemos en que la narración de historias funciona, vamos a impregnar de eso el ambiente, si creemos que es la historia lo que no va a funcionar también vamos a influenciar con eso a nuestro escucha. Si por el contrario tenemos confianza en el efecto de las historias y en particular de la historia que seleccionamos, vamos a impregnar el ambiente y el contexto con esa seguridad.

Si todo esto parece difícil, podemos sugerir algunos ejercicios:

1) Sólo leer la historia.2) Leerla en voz alta, haciendo énfasis paraverbal en los momentos o

fragmentos significativos.3) Leer una frase pequeña, el contenido de palabras entre uno y otro

signo de puntuación y voltear a ver a la persona, regresar al texto y mencionar la siguiente parte, mirar hacia otro sitio o nuevamen­te a la persona y así sucesivamente.

4) Leer un fragmento de la historia, hacer una pausa y después de 10 segundos continuar con la lectura.

5) Leer la historia alargando algunas palabras en el momento de pro­nunciarlas o sólo alargar la terminación de la palabra.

6) Dividir las palabras en silabas y elegir algunas para leer rápido y otras lento.

Antes de terminar con esta sección vamos a comentar algunos elementos útiles sobre cómo seleccionar la historia que habremos de contar, y vamos a responder a una serie de preguntas que nos han hecho frecuentemente:

5 Ver nota anterior.

¿Se debe explicar la historia?, ¿qué pasa si se explica la historia o la razón por la cual la elegí?; si no comento nada acerca de la historia, ¿cómo hago para terminar o pasar a otra cosa?

Acerca de la explicación de la historia

Consideramos que es preferible no hacerlo, porque en cierto sentido le podemos quitar la magia, además de que estaríamos resaltando nuestras razones y no las cosas que la persona misma pudo extrac­tar; las historias son ventajosas, porque cada persona le agrega el propio contenido de acuerdo a su experiencia y si explicamos nues­tro propio contenido estaríamos limitándole esa posibilidad a nues­tro escucha.

¿Cómo hacer para terminar o para pasar a otra cosa?

Existen muchas posibilidades; de la misma manera que para iniciar podemos contar cosas que no tienen relación alguna con la historia, concluir con alguna cosa similar, es decir, sin relación. Algunos ejem­plos pueden ser preguntas acerca de cosas que atañen a la persona: ¿cuál es tu color favorito?, ¿qué desayunaste hoy?, ¿cómo elegiste la ropa que te pusiste hoy...? O puede ser alguna otra cosa que el narra­dor elija con anterioridad acerca de planes o acuerdos con respecto a la siguiente sesión o el curso de los objetivos terapéuticos futuros. El evitar hablar de la historia o hacer algún comentario sin relación, es en sí mismo una forma indirecta de decirle a nuestro paciente que de eso no hablaremos, de tal forma que queda capturada su atención consciente en otro asunto mientras su inconsciente utiliza la infor­mación de la manera en que le es más útil.

Sin embargo, si la persona busca el comentario y pregunta por­qué le hemos contado eso, podemos responder con honestidad — sin revelar el contenido profundo — que consideramos que es más po­tente si lo elabora su mente inconsciente y la persona lo hace suyo. Podríamos responder por ejemplo: "porque creo que puede serte útil", "porque me recordé de ella y confío en los mensajes que me da mi mente inconsciente"; podríamos inclusive hacer la sugestión de que su mente inconsciente puede encontrar posteriormente una respuesta o generar una nueva idea y que en ese momento podemos continuar con otra cosa.

Si la pregunta fuera: "pero ¿me estás queriendo decir que yo soy como el personaje x de la historia?", podemos responder: "lo que en

Primera parte: Los recursos de la magia 51

realidad quiero decirte es que creo que pudiera ser útil de alguna manera que quizás ahora mismo no te quede claro", etc. Las res­puestas pueden ser variadas pero la recomendación principal es que sean honestas y respetuosas.

Es frecuente que un paciente nos diga que hizo las cosas tal cual yo se las dije y que le fue bien o que logró algo, y lo único que yo hice fue contarle una historia. Este tipo de comentarios nos llegan a sorprender y nos preguntamos frecuentemente: ¿cuándo le dije eso?Y la respuesta más honesta es que no se lo dije yo, fue la persona misma quien lo hizo.

Cómo seleccionar la historia

Los relatos de historias pertenecen al desarrollo de la humanidad, son parte natural de crecim iento de toda civilización y de toda persona. Podemos por tanto dirigirlas a niños, jóvenes, adultos, ancianos; todos podemos ser captados por los cuentos, leyendas, m etáforas, relatos populares, y podemos además envolvernos en ellas una y otra vez con cierto grado de avidez, porque todos esos relatos nos hablan de nosotros, de los demás y de nuestras relaciones.

A través de la imaginación, tanto niños como adultos establece­mos lazos entre el mundo simbólico y el mundo real e interiorizamos sus significados. Hemos sido acostumbrados, sin embargo, a valorar más las cuestiones "racionales" y todo aquello que tiene relación con el pensamiento lógico, estructurado, formal, "comprobable" y de­mostrable.

Por otro lado, todo aquello que se aleja de esos principios de rea­lidad es devaluado y considerado muchas veces como una pérdida de tiempo y de contacto con la realidad.

Estamos ya tan acostumbrados a desechar el mundo de la fanta­sía, que cuando tenemos oportunidad de tener un encuentro con él, nos atrae, nos fascina y nos captura. Creemos que mantenernos en contacto con los relatos puede funcionar de contrapeso a las explica­ciones lógicas que recibimos, damos y elegimos. Seguir alimentando la imaginación, la capacidad de sorprendernos, maravillarnos con la recreación mental que podemos lograr tan sólo con escuchar una historia y recuperar nuestra capacidad de asombro; son todas accio­nes que nos permiten nutrir al cerebro derecho y sus funciones que normalmente son castigados o reprimidos por la educación formal que hemos sobrestimado (Robles, 2005).

52 Historias para contarse... y crecer juntos

Por todos estos valores que poseen los relatos, son estos por sí solos una herramienta de atracción; si además los enriquecemos con particularidades de la persona, tema, situación y propuesta de solu­ción, se transforman en una herramienta poderosa y eficaz de comu­nicación verbal (Zeig, 1992).

Para hacer particular la historia y elegirla en relación con la per­sona o personas a quienes vamos a narrarla, podemos comenzar a pensar en qué se parece esta situación, problema, forma de rela­cionarse, solución, etc.6; si nos hacemos esta pregunta, llegarán a nosotros las diversas relaciones que nuestra mente puede produ­cir. Podemos además crear nuevas formas de abordar la situación, pensando en alguien que puede o pudo manejar de forma adecua­da en su momento alguna situación similar. Si ya hemos leído las historias de este libro y/o conocemos otras y nos hemos familiari­zado con ellas, podemos recordar un relato concreto y utilizarlo en ese momento

Recuerda que tu mente inconsciente es confiable y que la relación estrecha con la persona que estás compartiendo en ese momento, implica una conexión de consciente a consciente y de inconsciente a inconsciente (Robles, 2005). Si relacionaste alguna historia con lo que están compartiendo tú y tu paciente o la persona con quien platicas, confía en esa relación y cuéntale la historia, que el resto lo hará por sí mismo quien te escucha.

La simbolización es otra herramienta poderosa; si atendemos a las cosas que la persona nos dice y somos literales en nuestra co­municación, tenemos otra forma de seleccionar la historia. En una ocasión, una persona nos decía en su relato: "...es un gran abismo el que nos separa y pienso que si me quedo quieta está mal y si avanzo estoy en riesgo de caerme en ese abismo; es una gran con­fusión y no se qué hacer...". Tomamos literalmente algunos de los elementos que simbólicamente nos estaba ofreciendo; tomamos como símbolo "el abism o", "riesgo de caer", "gran confusión", y utilizamos una de las historias que está contenida en éste libro, que implica de alguna manera estos elementos: "El sendero blan­co" (Historia N° 19).

Cuando hablamos, estamos usando las palabras para transmitir lo que vivimos interiormente, así que si hablamos de un abismo, en nuestro interior hay un abismo; si pensamos en una barrera, hay li­teralmente en nuestro mundo interno una barrera (Gergen, 1992), y

6 Ver nota 4.

Primera parte: Los recursos de la magia 53

al ser literales vamos a establecer nuevamente una conexión de in­consciente a inconsciente porque justo en ese mismo sentido pueden comenzar a generarse las posibles formas de quitar una barrera o cruzar de una manera protegida ese abismo, o bien podemos pensar en la forma de atravesarlo sin tomar el riesgo o ponerse en peligro, de tal forma que generamos la utilización de los recursos inconscien­tes. La simbolización es el lenguaje de nuestro cerebro y especial­mente de la mente inconsciente; por tanto, estaremos en el mismo nivel de comunicación que el inconsciente de nuestro paciente nos está ofreciendo.

Por otra parte podemos utilizar como orientador el mensaje que queremos trasmitir al oyente, es decir, ¿qué quiero decirle? Después de haber escuchado su forma de percibir los acontecimientos, hace­mos nosotros mismos una interpretación, una conclusión y la mayor parte de las veces pensamos en lo que estaría bien decirle; sólo que las personas no queremos escuchar lo mismo que todo mundo quie­re decimos, ya hemos escuchado suficiente cuando nos dicen por ejemplo: "lo que tú necesitas es un cambio drástico", "haz algo que cambie totalmente tu destino", "siempre haces lo mismo y te queda claro que no es suficiente con eso", "échale ganas". Es claro que en lugar de eso queremos ser escuchados o escuchar una respuesta no tan obvia o más "inteligente".

Podemos entonces hacernos otra pregunta que puede resultar orientadora: ¿de qué manera le digo indirectamente eso que quiero decirle? Una alternativa es elegir una historia, inventar alguna o con­sultar un libro de historias.

En este libro hemos incluido un índice de mensajes. En él hemos agregado el mensaje que coincidieron que se encuentra implícito, un cierto número de personas que leyeron la historia.

Otra forma de elegir la historia es pensar en el efecto que quieres producir en la persona, y para esto puedes recurrir a las notas que se hiciste acerca del impacto que produjo en ti mismo alguna historia.

También puede ser que pienses en alguna situación de tu propia vida o de alguna persona con la que compartiste alguna vivencia im­portante o determinante para tu vida. En este mismo sentido pode­mos incluir en nuestro repertorio la pregunta: "¿para qué le contaría una historia?", o "¿para qué le contaría esa historia?".

Preguntarnos ¿para qué le será útil?, puede guiarnos al fondo de lo que queremqs transmitir como mensaje. En especial, si se es te­rapeuta es un buen ejercicio encontrar varias formas de decir una

Historias para contarse... y crecer juntos

misma cosa porque de esa manera, la variedad de opciones puede ayudar a ser más certeros. Si tú quieres decirle a tu paciente: "ponte contento" y se pone contento, no necesitas más, pero si no lo logras sólo con eso, entonces busca otra forma de decírselo y especialmente de generar esa emoción o sentimiento en la persona7. Si le cuentas un chiste y con eso se pone contento o alegre, hiciste un buen trabajo; pero si logras que se lleve la estrategia aprendida de cómo ponerse contento cuando lo desee o lo requiera, entonces habrás logrado ha­cer contacto con su inconsciente, dejando una huella que le será útil para toda la vida.

Desde el enfoque ericksoniano, Jeffrey Zeig llama a esta es­trategia: "envolver una idea para regalo" (Robles, 2006). La psi­coterapia es como una tienda de regalos en donde vendemos y compramos ideas, estrategias, técnicas para alcanzar la meta que perseguimos. Por otro lado, existen formas diversas de envolver para regalo, con la decoración que más le guste a cada quien, y se pueden lograr una tremenda cantidad de envolturas con sólo libe­rar la creatividad donde el límite es la imaginación, que en nuestra opinión no tiene límites.

Una de las formas de envolver para regalo es a través de la hipnosis, que es una envoltura poderosa y atractiva. Otra herra­mienta para envolver una idea o mensaje, es la narración de his­torias, y es tan sencillo manejarla, en especial si se cuenta con una recopilación escrita como ésta o con una buena memoria y conocimiento de muchas historias. Si se utilizan las historias du­rante la hipnosis, entonces se potencia el efecto de la historia y las posibilidades de éxito

Durante el seminario que ha sido ya citado, Jeffrey Zeig nos dijo: "si alguien habla acerca de la escuela secundaria donde estu­dió, puede llamar nuestra atención y en ese momento recordamos también la secundaria donde estudiamos, pero si alguien mencio­na el nombre de la primaria en que estudio y es la misma en que yo estudié, llamará poderosam ente mi atención"; "s i esa misma persona menciona el nombre de la maestra que me dio clase en el año en que fui alumno de primaria, ha capturado mi atención totalmente y quiero seguir escuchando y estoy tan comprometido con el evento, que quiero contar mi propia historia y compartir mi experiencia"8.

7 Ver nota 4.8 Idem.

Primera parte: Los recursos de la magia 55

Esto es lo que llamamos envolver para regalo una idea, es decir, ponerle ciertas características para hacerla llamativa y atractiva, de tal manera que aún sin abrir el regalo y conocer su contenido, la persona quiera llevarse el regalo inmediata e indiscutiblemente por lo atractivo de su envoltura; si lo logramos, el regalo será recibido y acogido con agrado.

En resumen, para seleccionar la historia recomendamos pensar en:

■ A qué se parece la situación.■ Hacer caso de la simbolización.■ Hacer caso de la literalidad.■ Qué quiero decirle.■ De qué manera decir lo que quiero.■ Qué efecto quiero producir.■ Para qué contaría esa historia.• Envolver la idea para regalo (con una historia).

Como recomendación para contarla:

■ Tener la convicción de que funciona.■ Tener la convicción de que esa historia estará bien.■ Contar la historia con esa convicción.■ Sólo leerla.■ Hacer entonaciones de voz.■ Hacer subrayado para verbal.■ Usar lenguaje corporal.• Contar la historia dramatizando verbal y/o corporalmente.■ Iniciarla con otros comentarios o sólo comenzar a decirla.• Al final, cambiar de tema.■ Si la persona insiste, hacer preguntas de referencia general.

L a n a r r a c i ó n d e h i s t o r i a s e n e l c o n s u l t o r i o p s i c o t e r a p é u t i c o

Las historias tienen tal riqueza que no se conocen contraindicaciones para su utilización en ningún contexto; pueden ser empleadas en todo tipo de psicoterapia y en cualquiera de los momentos o fases de transcurso del tratamiento (diagnóstico, establecimiento de rapport y tratamiento); pueden también usarse en cualquier fase de la sesión e incluso durante toda ella (Robles, 2006).

En la psicoterapia ericksoniana podemos utilizar la narración en los diferentes momentos terapéuticos para obtener información, res­puestas, acciones y cambios del paciente. En el diagnóstico al contar

56 Historias para contarse... y crecer juntos

historias podemos percatarnos de las respuestas no verbales de la persona e identificar su disposición, preferencia y velocidad de res­puesta. Respecto al rapport la historia misma es un buen instrumento para el contacto directo con el inconsciente del paciente; de la misma manera, al preguntarnos a qué se parece la situación, la persona, el problema, etc., podemos seleccionar la historia o historias que re­fuercen la relación con el paciente y sus características.

Situaciones en que resulta muy útil el uso de las historias durante la relación terapéutica:

a) Cuando queremos dar una opinión, puede ser mucho mejor ofre­cer una historia que la represente.

b) Para sugerir alguna solución concreta. Puede ser también para nosotros una meta terapéutica dentro de la sesión y ofrecer una o varias historias que la sugieran.

c) Sembrar ideas o posibles soluciones, anticipando al paciente algo que más tarde puede suceder o que ocurrirá dentro o fuera de la terapia. Este procedimiento puede preparar a la persona para recibir la intervención o tarea terapéutica.

d) Podemos usar también las historias para que el paciente logre re­conocer y permita surgir algo que no estaba siendo evidente.

e) Reducir la resistencia en las personas que pudieran estar predis­puestas negativamente con respecto al trabajo terapéutico. Es muy eficaz cuando el paciente tiene miedo o su estilo de vida es muy rígido.

f) Cuando queremos que la persona redefina una situación, opinión o problema, las historias pueden ayudar a dar un nuevo encuadre a la situación, y abre nuevas opciones.

Estrategias para narrar historias

El uso de predicadosEn el trabajo con p n l , los autores aprendimos que usar el mismo len­guaje del paciente incrementa la eficacia de los mensajes comunica­dos en historias.

Al hablar, expresamos nuestras preferencias sensoriales. Si po­nemos atención en la forma de hablar de la persona a la que vamos a contar la historia, podemos darnos cuenta qué tipo de predicados utiliza con mayor frecuencia e incluso de la secuencia en que los uti­liza. En el momento de contar la historia podemos agregar este tipo de predicados. Para quien tiene conocimiento y experiencia en estas

Primera parte: Los recursos de la magia 57

estrategias puede resultar más sencillo y para quienes no lo tienen, les recomendamos familiarizarse con los libros y talleres de pnl.

Hacemos a continuación una breve referencia a los tipos de predicados comunes en relación con las preferencias sensoriales de las personas:■ Si la persona tiene preferencia sensorial visual, los predicados más

comunes que se pueden emplear son: veo, mira* como yo lo veo, desde mi perspectiva, veo todo negro, todo es gris, etcétera.

■ Si la persona tiene preferencia sensorial auditiva, se pueden usar predicados como: a mí me suena, es un gran escándalo, no me estás escuchando^ el silencio mata, es como hablarle a la pared, por más que le digo, etcétera.

■ En el caso de la preferencia sensorial kinestésica o sensitiva, el tipo de pre­dicados más comunes son; me late que, yo siento, me duele, como que me oprime, siento que me asfixia, etcétera (Grinder y Bandler, 1975).

De la misma manera que comentamos en la sección anterior, pode­mos utilizar estas expresiones para usarlas como símbolos y aplicar­las para la selección y la narración de la historia.

Uso del tiempoEl tiempo verbal en que narramos la historia tiene también una apli­cación interesante que nosotros conocimos a través del Dr. Dirk Re- venstorf, un extraordinario terapeuta ericksoniano, en un entrena­miento en hipnosis clínica9.

Al hacer una demostración, cuando leía sus historias a alguno de nosotros, elegía si la contaría en pasado o en presente dependiendo de la forma en que había manejado toda la intervención terapéu­tica. En alguna ocasión le preguntamos cómo elegía si contarla en presente o pasado y nos comentó que para recuperar recursos en la persona resulta muy conveniente contar la historia en pasado, como para que la persona pueda registrar que esos están ahí desde hace mucho tiempo y estando en trance hipnótico, los puede liberar más fácilmente. Cuando cuenta una historia en presente, es porque la persona necesita generar nuevos recursos.

Nosotros hemos empleado este estilo de contar historias a partir de entonces y hemos integrado nuevas formas, agregando el futuro como opción cuando hacemos un sembrado que consideramos va a

9 Revenstorf, Dirk. Diplom ado én Hipnosis Clínica Ericksoniana. Facultad de Estudios Supe­riores Zaragoza, UNAM, México. 1997-99.

58 Historias para contarse... y crecer juntos

ser útil en el futuro de la persona, o cuando queremos que construya en su mente un futuro alterno con opciones enriquecidas.

También hemos hecho combinaciones de tiempos verbales en una misma historia, poniendo en pasado lo que es el problema, la dificul­tad o cualquier situación o circunstancia limitante para invitarlo a de­jar en el pasado todo aquello que le restaba posibilidades; en presente ponemos todo lo que tiene referencia a posibilidades, mecanismos, opciones, motivación, y acción para comunicarle que así es como pue­de estar ahora, en el momento presente; en futuro lo que queremos comunicar a nuestros pacientes como algo que harán o sucederá para ellos, abriendo nuevas posibilidades y creando futuros alternos. De esta manera logramos comunicar al inconsciente de manera indirecta estas tres formas de manejar y clasificar la información.

Historias embebidas

En el Diplomado Internacional de Hipnosis que tomamos en Puebla en el año 1998 aprendimos una técnica poderosa para el uso de las his­torias, con Stephen Lankton Ph. D. Él lo llama historias embebidas y se trata de elegir tres historias, una principal y dos acompañantes o que refuercen a la principal. Comenzamos contando una de las historias acompañantes y elegimos un punto de la historia, aproximadamente a la mitad o en un punto crucial de la historia, y la interrumpimos para comenzar a contar la segunda historia acompañante, que también va­mos a interrumpir en un momento crucial. Entonces pasamos a narrar la tercera historia que es la principal, el mensaje más importante que queremos transmitir al paciente, y la narramos completa.

Luego, continuamos con la segunda historia exactamente donde habíamos interrumpido, sin repetir palabras, sólo continuar donde corresponde hasta concluirla; luego, retomamos la primera histo­ria acompañante y de la misma manera que la anterior la tomamos exactamente donde la interrumpimos, y terminamos su narración10.

10 Lankton, Stephen. Diplomado Internacional de Hipnosis: Hipnosis en Tiempo Reducido. Benemérita Universidad Autónoma de Puebla. Puebla, México, 1998.

59

Gráficamente podemos explicarlo así:

Historia 1 ----------- ----------- Historia 1

Historia 2 Historia 2

Historia 3 completa

Esta técnica tiene la facultad de crear amnesia, por lo que evita el juicio de la mente consciente y potencia los resultados terapéuticos; no­sotros hemos tenido experiencias de acompañamiento con los pacien­tes que han logrado, en sus propias palabras, "cambios extraordinarios que no saben cómo pero saben que fue con este tipo de terapia".

Estilo del paciente

Otro elemento importante a considerar es el estilo del paciente. Hay personas que se dicen a sí mismas "realistas" y generalmen­te rechazan los cuentos de hadas o los personajes mágicos; para este tipo de paciente es muy conveniente compartir experiencias de gente conocida por el terapeuta o por tipos de personas que puedan darle la referencia de un principio de realidad. Podemos también contarle experiencias o anécdotas vividas por nosotros con otros pacientes (manteniendo el anonimato) y la forma en que ellos en­contraron opciones realistas y útiles. Otra recomendación con este tipo de paciente es sólo hacerle la invitación a pensar qué pasaría si... "se diera la oportunidad de probar esa nueva propuesta que se encuentra en la historia".

Con esto le invitamos a juzgar o evaluar la historia de un modo parti­cular; eso mantendrá ocupada y atenta su mente consciente, mientras su mente inconsciente puede tener la oportunidad de ensayar la propuesta.

Por otra parte si el estilo del paciente es un estilo mágico, una persona que acepta la fantasía, sin que por ello pierda el principio de realidad, podremos con mayor confianza mencionar a los personajes mágicos y tendrá con ellos un buen efecto. Las historias podrán ser bien recibidas, independientemente de la cantidad de los contenidos mágicos, ficticios o fantásticos.

60 Historias para contarse... y crecer juntos

Como sugerencia, si al ensayar estas formas encontramos que algo no funciona, convendrá más hacer otra cosa en lugar de querer demostrar que esto tiene que funcionar. Dice Jeffrey Zeig: "si no fun­ciona la técnica, cambia de técnica; si no funciona la forma, cambia la forma; si no funciona el terapeuta, cambia al terapeuta. Es decir, modifica tú tus propias formas de hacer las cosas..."

Estilo del terapeuta

Llegamos entonces a otro punto importante a considerar y que es el esti­lo del terapeuta; aquí podemos pensar en el marco teórico, las habilida­des, las preferencias, las convicciones y las experiencias terapéuticas.

Si el terapeuta tiene una formación teórica y técnica diferente a la ericksoniana, probablemente elegirá comenzar a usar historias sólo como complemento de su trabajo terapéutico y contar la historia en el momento que de acuerdo a su experiencia sea el más adecuado. Nosotros en algunos momentos les damos historias escritas a nues­tros pacientes y les pedimos que lean al llegar a casa o después de alguna tarea que les pedimos que hagan.

Si el terapeuta es ericksoniano y utiliza historias, puede potenciar el efecto de la misma contándola durante el trance hipnótico, poten­ciando su eficacia.

La intención del terapeuta

Desde el enfoque ericksoniano, la efectividad de la historia no de­pende del nivel de profundidad del trance o del momento durante la terapia en la que la contemos o de otras variables circunstanciales; más bien parece depender del contexto del paciente y de la intención con la que la contamos, y aun cuando en todos los casos los resulta­dos suelen ser sorprendentes, la intención con la cual escogemos y contamos una historia, parece tener relevancia.

Queremos cerrar este capítulo, compartiendo una experiencia mágica de aprendizaje que tuvimos con el Dr. Jeffrey Zeig en el Cuarto Encuentro de Terapeutas Ericksonianos de América Latina (Cuernavaca, Morelos, México, en mayo del 2003). Nos decía Zeig que todos los terapeutas tenemos objetivos terapéuticos para nues­tros pacientes y dependiendo de eso preparamos de una o de otra manera nuestra sesión y a nuestra persona. Nos propuso un ejemplo vivencial, con el que nos quedó clara la diferencia entre una inten­ción y otra. Pidió que alguien en el salón fuera voluntario para el

Primera parte: Los recursos de la magia 61

ejercicio y la condición fue que debía ser ese día su cumpleaños. Pasó una joven de nombre Rocío y Zeig nos preguntó: ¿cuando alguien cumple años, cuál es la intención que podemos tener? La respuesta fue obvia: felicitar a esa persona, así que nos pidió que entre todos cantáramos un happy birthday to you para felicitar a Rocío; quisimos primero cantar en español las mañanitas, pero Zeig nos invito a can­tar en ingles. Cantamos todos en el auditorio la canción y fue bo­nito; después nos pidió que pensáramos en una persona a la que queremos mucho y pensando en esa persona le cantáramos a Roció nuevamente la canción y el resultado fue hermoso. Finalmente nos dijo: ahora vamos a cantar la canción para Rocío pensando en un bebé que vamos a arrullar, poniendo todo nuestro amor en la can­ción. Nuevamente todos en el auditorio cantamos al mismo tiempo y el resultado fue mágicamente emotivo, tanto para ella como para cada uno de los que estábamos presentes en ese momento. Es como si todos nos hubiéramos transformado en ternura y amor.

Hemos encontrado que, desde entonces, somos más intensos en nuestras comunicaciones y relaciones terapéuticas, buscamos siem­pre rescatar la parte más sensible y exquisita de la persona a quien va dirigida la intención.

En psicoterapia y particularmente en psicoterapia ericksoniana, "todos tenemos una intención o debemos tenerla, en y durante la sesión, así que si te aseguras de que tu intención esté presente, se la puedes agregar a tu trabajo ..."11

Asegúrate de impregnar tu consultorio o la habitación donde te encuentras, de tu intención y la esencia de tu ser; que toda la habi­tación esté llena de lo que tú eres y de tu intención y, desde luego, hazlo cuando hagas la narración de una historia.

La envoltura para regalo y la intención terapéutica pueden unirse en este punto y crear la magia que muchos queremos encontrar en nuestras vidas; hemos tenido el privilegio de acompañar a muchos de nuestros pacientes en ese descubrimiento de sí mismos y en la creación de la magia que no saben explicar pero se llevan.

11 Concepto manejado por Zeig en el Cuarto Encuentro de Institutos Ericksonianos de Améri­ca Latina, Cuernavaca, México, m ayo de 2003.

Capítulo 2M ilton H. Erickson

U na historia para contarse

En el año de 1993 tuvimos la oportunidad de conocer el trabajo de Milton H. Erickson, primero mediante la lectura del libro Mi voz irá contigo, escrito por Sidney Rosen, uno de sus discípulos. A partir de ese momento generamos, junto con la admiración y el respeto, un profundo interés y un creciente asombro, que se incrementa con cada nuevo descubrimiento acerca de su vida y de su obra.

Ha sido tan grande la influencia y tantos los cambios positivos que han determinado en nuestra vida personal y académica el co­nocimiento de su historia y el estudio de sus enseñanzas, que la in­tención de difundir su obra se ha convertido para nosotros en una necesidad y un compromiso con aquellos que no lo conocen y que podrían obtener también grandes beneficios aplicando sus siempre sorprendentes estilos de enfrentar la vida.

Si logramos a partir de ésta historia interesarlos en la búsqueda de más información, de nuevos estilos de vida, de cada día hacer mejores acercamientos para entendernos, entender a los demás y ser felices, habremos entonces logrado sólo el principio de lo que cree­mos se puede obtener explotando las enseñanzas de un personaje singular, que ha influenciado también la vida de muchos autores de libros y creadores de teorías y escuelas.

Erickson es considerado como el padre de la hipnosis moderna, la hipnosis sin trance formal y de múltiples estrategias terapéuti­cas que han dado origen a escuelas y teorizaciones, tales como la terapia estratégica, la terapia centrada en las soluciones, el enfoque sistèmico, la programación neurolingüística y otras más cuyos re­presentantes han revisado e integrado a su trabajo la epistemología ericksoniana, que hace referencia a su especial forma de conocer y concebir el mundo.

Por esto, estamos convencidos de que su vida es Una historia para contarse. Presentamos a continuación los elementos más importan­

Primera parte: Los recursos de la magia 63

tes de su biografía, que nos proporcionan un panorama general de su obra.

Comenzaremos con la descripción de sus años de infancia, donde encontramos ya los primeros brotes de su futura genialidad; poste­riormente presentamos su primer enfrentamiento a la enfermedad y el concomitante autodescubrimiento de la hipnosis, los años de entrenamiento médico en la facultad, los primeros años de investi­gación y la madurez profesional que le dieron solidez y credibilidad científica a su trabajo, así como prestigio mundial a su persona y a sus métodos terapéuticos.

Sus PRIMEROS A Ñ O S ...

Milton Erickson, nació el 5 de diciembre de 1901 en Nevada, Estados Unidos de América, en una cabaña de Aurum, un campo minero de la época. Cuando alcanzó la edad escolar, la familia se mudó a Wisconsin, donde compraron una granja y Milton y su hermana cur­saron la educación básica.

Desde muy pequeño percibió la realidad en forma muy diferen­te a los demás, debido a sus problemas constitucionales; tenía dis- cromatopsia o daltonismo, que es un tipo de ceguera para los colores rojo y verde. Era incapaz de distinguir tonos y no podía reconocer ni ejecutar ritmos típicos de música y canciones; aunado a todo esto, era disléxico. Este problema, sorprendió enormemente a su mente infantil y sólo después de muchos años pudo reconocer y entender esta alteración.

Las confusiones y los malentendidos en la representación del mundo que produjeron estas alteraciones en la mente infantil de Milton, estimularon su curiosidad y asombro ante la vida y tal vez lo más importante fue que esto lo llevó a una serie de experiencias poco comunes que ahora constituyen la base de algunas investigaciones acerca de lo relativo a la percepción humana y de los problemas que se desprenden de tales fenómenos.

Cierta vez, Erickson comentó a Ernest Rossi12 acerca de su niñez:A los seis años —contaba Milton — , siendo disléxico, era incapaz

de distinguir una "m " de un "3 ". Su maestra, sin importar cuánto lo intentara, no podía convencerlo de que el 3 y la m eran diferentes.

12 Alumno y seguidor (le Erickson, recibió sus enseñanzas con lujo de detalles en la explicación de los procedimientos e intenciones específicas utilizadas por el maestro. Escribió junto con Milton una compilación de sus trabajos e investigaciones, publicación que ahora se conoce con el nombre de "las obras completas de Milton Erickson".

64 Historias para contarse... y crecer juntos

Un día, su maestra escribió un 3 y una m, guiándole su mano con la de ella; a pesar de esto no pudo reconocer todavía la diferencia en­tre las dos. "Repentinamente —agregaba Mil ton —, experimenté una alucinación visual, en la cual vi claramente la diferencia, envuelta en un rayo de luz enceguecedora. Vi el 3 y la m; ésta, estaba parada sobre sus pies y el 3 estaba de lado, con sus pies levantados hacia la izquierda, dentro de un rayo de luz tan brillante que me impedía ver cualquier otra cosa y en el centro de ese rayo de luz cegadora, el 3 y la m..."

Rossi le preguntó si verdaderamente vio un rayo de luz cegadora o estaba haciendo referencia sólo a una metáfora. Erickson le contestó;

"Sí, fue un rayo de luz cegadora y todo se obscureció alrededor del 3 y la m..."

Rossi preguntó de nuevo: "¿estaba usted consciente de estar en un estado alterado?, ¿se preguntó usted algo acerca de esa rara ex­periencia...?" Erickson respondió:

"¡Esta es la forma de aprender cosas! No puedo recordar ningu­na otra cosa relacionada con ese día. Verdaderamente, experimenté un importante descubrimiento intelectual en la forma de una aluci­nación visual. Durante mi segundo año de preparatoria tuve la más deslumbrante e impresionante alucinación visual que pueda recor­dar. Todos en la escuela me conocían con el sobrenombre de 'dic­cionario', dado que me pasaba mucho tiempo leyéndolo en el fondo del salón... Un día, mientras leía el diccionario, tuve de pronto una alucinación visual, un rayo de luz enceguecedora obscureció todo alrededor, en el momento en que aprendí cómo utilizar el dicciona­rio. Hasta ese momento, cada vez que yo quería buscar una palabra en el diccionario, comenzaba leyendo por la primera página y seguía leyendo columna tras columna, página tras página, hasta llegar a la palabra que buscaba. En ese rayo de luz enceguecedor, me di cuen­ta de pronto, cómo se utiliza el alfabeto como un sistema ordenado para buscar las palabras. Nadie me había dicho que así era. Cuando mis compañeros me preguntaron por qué no había salido a tomar el refrigerio con ellos, me di cuenta que no les diría que ese día había aprendido a utilizar el diccionario. No sé por qué me tomó tanto tiempo aprender eso. ¿Será tal vez que mi inconsciente lo evitó, dado el gran cúmulo de conocimiento que me proporcionó el haber leído tantas palabras en el diccionario...?

"Durante el segundo año de la secundaria, la maestra de 'debates' (algo así como un profesor de oratoria), se pasó una hora comple­ta tratando inútilmente de enseñarme cómo decir 'government'. De

Primera parte: Los recursos de la magia 65

pronto Miss Walsh, en un brote de inspiración, utilizó el apellido de un compañero de clase, esto es: 'La Verne'. A continuación escribió en el pizarrón la palabra 'gov' seguido del apellido 'La verne' y al final la palabra 'ment' y yo leí 'govlavernement'; entonces ella me pidió que omitiera el 'La' de 'La vern' y en el momento de hacerlo, un rayo de luz enceguecedora borró todo lo que había alrededor, incluyendo el pizarrón. Le doy todo el crédito a Miss Walsh por mi técnica de incluir lo inesperado e irrelevante en un patrón fijo, con el objeto de hacerlo explotar. Otro principio básico que aprendí con Miss Walsh fue el de la utilización; ella utilizó mi habilidad para pronunciar La Verne para enseñarme cómo romper con mi error es­tereotipado al pronunciar 'government'..." (Rossi, 1980:108-110).

Fue tal vez desde la confusión producida por esas dificultades de percepción que Milton aprendió a hacer más preguntas que el resto de los niños de su edad. Por ejemplo, antes de los 10 años de edad, quería saber por qué su abuelo plantaba las papas orientadas de una manera peculiar y sólo durante ciertas fases de la luna. No quedó sa­tisfecho con la explicación de su abuelo y en consecuencia procedió a diseñar y ejecutar su primer experimento controlado: plantó par­celas con papas en muchas diferentes formas y en diferentes fases de la luna y en otra parcela plantó papas de la misma forma en que lo hacía su abuelo, y cuando su abuelo no le creyó que todas las par­celas de papas habían dado el mismo resultado, se puso muy triste (Erickson, 1983: 8-9).

Fue durante la misma época que su talento nato quedó ilustrado en un incidente que él recordó y relató muchos años después. En este incidente, recuerda cómo utilizó el doble vínculo para resolver un problema. Por supuesto, que el término aún no había sido acuñado.

"La primera vez que recuerdo bien haber utilizado intencional­mente el doble vínculo, sucedió en mi niñez temprana en la granja. Un día de invierno, con el clima bajo cero, mi papá llevó a un corde­ro desde el granero hasta el abrevadero; después de que el cordero satisfizo su sed, lo regresó al granero, pero en la entrada, el cordero atrancó las patas y se negó a entrar. A pesar de los esfuerzos de mi padre para jalarlo al interior del granero, el cordero se negó terca­mente a moverse. Yo me encontraba afuera jugando en la nieve y al ver la situación, comencé a reír fuertemente. Mi padre me retó a que jalara al cordero al interior del granero y entonces yo decidí darle al cordero la oportunidad de resistirse, ya que eso parecía ser lo que deseaba. Siendo así, presenté al animal un doble vínculo ja­lándolo por la cola en sentido inverso al granero, mientras mi padre

66 Historias para contarse... y crecer juntos

continuaba tirando de él hacia el interior. El cordero rápidamente, escogió resistir a la más débil de las dos fuerzas y me arrastró hacia el interior del granero..." (Rossi, 1980: 412-429).

Estos son algunos ejemplos de cómo Erickson tenía ya desde su in­fancia una serie de experiencias que habrían de brindarle en el futuro la posibilidad de improvisar y utilizar el ingenio y la espontaneidad.

El a u t o d e s c u b r i m i e n t o d e l a h i p n o s i s

Si alguna vez ha existido alguna persona que aprendió a sanar a otros sanándose primero a sí mismo, ésta fue Milton Erickson. La experiencia más formativa en su juventud fue su primer ataque de polio en 1919, a la edad de 17 años (el segundo fue a los 51 años). Fue una infección severa que lo dejó paralizado completamente; sólo podía pronunciar con dificultad y mover sus ojos. Se daba cuenta de que tenía pocas probabilidades de sobrevivir.

Él mismo comenta a Ernest Rossi su recuerdo de aquella crisis y sus experiencias en los estados de percepción alterada que sólo mu­chos años después reconoció como autohipnosis.

"Mientras estaba yo en cama —recuerda M ilton—, alcancé a es­cuchar a los tres doctores que me vieron, diciéndole a mis padres en la otra habitación, que su hijo estaría muerto por la mañana. Yo sentí mucha rabia de que alguien quien fuera, le dijera a una madre que su hijo estaría muerto por la mañana. Mi madre entró en el cuarto tan serena como podía y yo le pedí que moviera el tocador y que lo colocara en un lado de la cama en cierto ángulo. Ella pensó que yo estaba delirando por la petición y por mi dificultad para hablar, sin embargo hizo lo que le pedí, colocando el tocador en un lado de la cama, con lo cual yo podía ver por el espejo, a través de la puerta, hasta la ventana occidental de otra habitación de la casa. ¡Maldita sea, yo no iba a morirme sin ver otro atardecer! Si yo tuviera alguna habilidad para el dibujo, aún ahora podría hacer uno de ese atarde­cer..." (Rossi, 1980:111).

Sólo muchos años después Erickson reconoció ésta experiencia como autohipnótica; él mismo relató a Rossi:

"Yo vi ese atardecer cubriendo todo el cielo y cubriendo toda la ventana, pero yo sé que afuera había un árbol y, sin embargo, yo lo borré y fue esta percepción selectiva la que me permite ahora saber que me encontraba en un estado alterado. No lo hice conscientemen­te, yo vi el amanecer pero no vi la cerca ni la gran piedra que estaban allí, yo borré todo con excepción del atardecer. Después de que vi

Primera parle: Los recursos de la magia 67

el atardecer, perdí la conciencia por tres días y cuando finalmente desperté le pregunté a mi padre ¿por qué habían quitado el árbol, la cerca y la gran piedra? No me di cuenta de que los desaparecí cuan­do fijé mi atención tan intensamente en el atardecer.. " (Idem)

Fue la intensidad de su experiencia interna, su espíritu de lucha y el sentimiento de desafío lo que lo mantuvo vivo para ver el atarde­cer y lo llevaron a una recuperación sorprendente. Viviendo en una granja, alejada de la ciudad, tenía pocas probabilidades de acudir a un programa de rehabilitación. Fue atendido en la misma granja por su mamá y por una enfermera de planta, que utilizó un tipo de tera­pia que fue popularizado mucho tiempo después por una enfermera australiana, en el cual se aplica calor local, se masajean los miembros mientras se les da movilización y se motiva al paciente a participar. Milton por su parte, desarrolló un sistema de concentración men­tal en movimientos mínimos, revivenciando los movimientos una y otra vez (Zeig, 1985).

Cuando estaba solo, lo ataban a una silla mecedora junto a la ven­tana, con el fin de que pudiera tener alguna distracción. Cierto día, la familia olvidó que estaba solo, atado a la silla mecedora en medio de la recámara.

Milton miraba la ventana, deseando intensamente encontrarse más cerca para tener cuando menos, el placer de contemplar la granja. Mien­tras se encontraba sentado allí, inmóvil, deseando y preguntándose, repentinamente se dio cuenta de que la mecedora comenzó a mecerse muy lentamente. Este fue un descubrimiento sorprendente...; fue su intenso deseo de estar más cerca de la ventana lo que estimuló un mí­nimo movimiento corporal y que hizo que la mecedora se moviera.

Esto hizo que iniciara un periodo febril de autoexploración y au- todescubrimiento; durante las siguientes semanas, se dedicó a bus­car entre sus recuerdos y sensaciones, para reaprender a moverse. Se pasaba horas enteras con la vista fija en sus manos y trataba de recordar cómo sentía sus dedos cuando empuñaba un tridente, re­cordando cómo sus dedos se asían a las ramas al escalar un árbol, cómo sus pies se tensaban al apoyarse al empujar firme hacia arriba y así. Poco a poco, sus dedos empezaron a moverse, primero en for­ma incoordinada pero con el tiempo, los movimientos se hicieron más y más precisos en respuesta a las ordenes directas, hasta que pudo finalmente controlarlos conscientemente; estos ejercicios eran ejercicios de activación de recuerdos sensoriales reales, recuerdos que estimularon suficientemente su coordinación sensorial y motriz, con lo cual consiguió una recuperación casi total.

6 8 Historias para contarse... y crecer juntos

Se ejercitaba a sí mismo utilizando cadenas de ligas de hule para hacer fuerza, aumentando el número de ligas conforme adquiría fuerza; caminaba esforzándose tanto que la fatiga mitigaba el dolor; así aprendió que si ponía toda su atención en caminar, en la fatiga y en el descanso que se daría posteriormente, se liberaba del dolor de una form a efectiva.

Por ese tiempo, su hermana menor estaba aprendiendo a cami­nar y Milton se dio a la tarea de observarla todo el tiempo con el fin de aprender sus patrones de aprendizaje de la marcha, de tal forma que él pudiera reconstruirlos conscientemente y con esto obligar a su cuerpo a hacer lo mismo. Así, reaprendió a pararse observando cóm o lo hacía su hermanita, practicando para erguirse, conservar el equilibrio, fallando y tratando de nuevo. Después de once meses de autoentrenamiento aprendió a caminar, después aprendió a utilizar las m uletas y hasta a andar en bicicleta.

L O S AÑOS DE FACULTAD

Desde los inicios de su enfermedad, Milton sabía que no podría trabajar com o granjero y decidió que estudiaría medicina. Ingresó a la Universidad de W isconsin y aun cuando podía caminar con rapidez, su cuerpo aún estaba débil. Al terminar su primer año, un m édico le aconsejó pasar el verano en contacto con la natu­raleza con el fin de fortalecer su cuerpo y decidió tomar el reto de hacer un viaje en canoa. Obtuvo algunas provisiones, equipo de cam pam ento, algunos dólares y la decisión de viajar durante todo el verano en canoa, com enzando en el lago cercano a la Uni­versidad, siguiendo hacia el río Mississippi, para continuar hacia el sur hasta San Louis y regresar después río arriba siguiendo el cam ino opuesto.

Un amigo suyo lo acompañaría, dado que en sus condiciones, su­bir a una canoa utilizando muletas al mismo tiempo, resultaba de lo más complicado; al último minuto sin embargo, su amigo decidió no acompañarlo por lo que Milton sin avisar a sus padres emprendió solo su aventura, enfrentándose con múltiples problemas y apren­diendo a resolverlos.

Pronto, se volvió muy hábil en solicitar indirectamente la ayuda de la gente en las situaciones en las que simplemente no podía hacer algo sin ayuda; aprendió también a hacerse invitar a comer por los campistas, pasando las tardes contándoles historias, siempre frente a una mesa llena de comida.

Primera parte: Los recursos de la magia 69

A lo largo del trayecto, tomó trabajos temporales con los granjeros locales con el fin de ganar algún dinero para comprar provisiones. Descubrió también que su habilidad para cocinar era redituable. Para cuando se inició el viaje de regreso, había aumentado considerable­mente su capacidad muscular para remar en contra de la corriente y podía cargar la canoa sin ayuda. Al final del viaje, después de diez semanas, había recorrido más de 200 kilómetros, inició el viaje con muletas y terminó solamente con una ligera cojera que le acompañó más de 30 años; inició el viaje con un estado físico precario y termi­nó como un joven robusto, con un nuevo sentido de confianza, de orgullo de sí mismo y de independencia. Exaltado y fortalecido por esta experiencia, volvió a la universidad con mayor determinación (Erickson, 1983:14-15).

Cuando se encontraba a la mitad de su segundo año de la carrera de medicina en la Universidad de Wisconsin, solicitó empleo al edi­tor de un periódico local, escribiendo editoriales para el diario; éste, sonriente, le dijo que escribiera los editoriales y los depositara en su buzón por la mañana en su camino a la Universidad y que si estos eran buenos, los incluiría en el diario.

Él sabía que tenía mucho que estudiar y leer, pero recordó que cuando estaba en la secundaria solía corregir problemas de aritméti­ca durante sus sueños, así que planeó dormirse a las 10 de la noche; puso la alarma de su reloj a la una de la mañana con el fin de levan­tarse a escribir y regresar después a dormir nuevamente. A la maña­na siguiente se despertó tarde pensando que se había dormido sin escuchar la alarma, pero se sorprendió de encontrar un escrito sobre su maquina sin recordar haberlo hecho. Esto le enseñó que podía hacer cosas sin involucrar a su mente consciente.

Fue hasta el tercer año de la facultad cuando en un seminario sobre hipnosis conoció a Clark L. Hull y comenzó él mismo sus investigaciones. Ahora, todas sus experiencias tenían nombre; se dio cuenta que fenómenos como los que él había experimentado en sí mismo eran comentados y discutidos por otros bajo el rubro de hipnosis. Esto fue lo que lo llevó a su primer curso formal de hipnosis. Siendo aún un estudiante, bajo la supervisión de FIull presentó un seminario de hipnosis en el cual mostró sus hallaz­gos experimentales y los sometió a la discusión de los estudiantes graduados del departamento de Psicología de la Universidad de W isconsin. Hubo mucho debate, argumentación y discusión acer­ca de la naturaleza de la hipnosis, del estado psicológico que ésta constituye y, sobre todo, la identificación de la figura más im por­

Historias para contarse... y crecer juntos

tante en el desarrollo del trance hipnótico: ¿era más importante el operador o el receptor?

Los seminarios semanales solían durar muchas horas y se lleva­ban a cabo sesiones extra de manera informal durante las tardes, los fines de semana y aún en días de fiesta; sin embargo, nunca hubo consenso en relación con los problemas, ya que las opiniones y las interpretaciones eran muy variadas. Esto llevó a Erickson a iniciar un proyecto especial de investigación, pero los resultados de esta in­vestigación nunca fueron publicados, debido a la controversia entre él y Hull acerca de la importancia del operador. Hull tenía la convic­ción de que el operador era más importante por lo que hacia y decía, que cualquier proceso interno del sujeto receptor.

El inevitable conflicto entre Erickson y Hull, partió de sus prime­ras experiencias de autohipnosis y del trabajo que había realizado y que aún realzaba en favor de su estado de salud y que parecían acordes a los planteamientos de otros autores respecto a la impor­tancia de las fuerzas internas y de las motivaciones de cada persona como individuo, lo cual se convirtió en el sello pionero de su enfo­que "naturalista", "perm isivo" e "indirecto" de la hipnosis.

Erickson demostró que los estados alterados13 de conciencia, así como el fenómeno hipnótico, son también una parte normal de la vida diaria. Estos conceptos fueron la base de sus estudios posteriores de psicopatología, así como del enfoque naturalista ele la hipnoterapia. Erickson transformó el concepto autoritario de la hipnosis clásica en un enfoque permisivo y facilitador de las capacidades inherentes del sujeto; cambió la idea del operador como alguien que dicta órdenes en una mente obediente y sin voluntad, por la de ur\ estado de intensa interacción entre dos personas, en la cual el receptor puede utilizar sus recursos y capacidades para facilitar el proceso de salud14.

A la edad de 23 años, Erickson se casó por primera vez y se di­vorció 10 años después; el dolor y confusión que experimentó du­rante este primer matrimonio, lo llevaron a enfocar su atención en el entendimiento de las relaciones humanas entre hombres y mujeres. Erickson fue uno de los primeros psiquiatras en los años cuarenta, en trabajar con parejas y con familias.

Consideram os que es m ás adecuado utilizar la palabra "alterno" e n lugar de "alterado", d^do que la primera corresponde adecuadam ente al estado y la segu nda tiene en español una connotación negativa. Sin em bargo, respetam os el término en inglés "a lte red ".

Este conjunto de recursos y capacidades inherentes a todo ser hu m ano es lo que Erickson llam ó "la parte sabia".

71

Los AÑOS DE TRABAJO Y DE INVESTIGACIÓN

Erickson entró como interno en el Hospital General de Colorado y sirvió también como interno de psiquiatría en el Departamento de Psicopatología; recibió simultáneamente su título de Médico y la li­cenciatura en Psicología y después de que se recibió, le otorgaron un nombramiento en 1929 y 30 como médico psiquiatra asistente en el Hospital Estatal para Enfermedades Mentales en Rhode Island (Ha- ley, 1973: 3). Su tesis de Maestría fue sobre el tema del retraso mental. Posteriormente, amplió su trabajo, explorando las relaciones entre aspectos tales como inteligencia/ matrimonio, abandono y crimen. Sus hallazgos fueron publicados en diferentes revistas médicas, so­ciales y legales, en una serie de siete artículos entre 1929 y 1931.

En 1930, se unió al departamento de investigación del Hospital Es­tatal de Worcester y rápidarnente pasó de ser asistente de Psiquiatría a ser jefe del servicio en el área de investigación; durante éste tiem­po, publicó su primer artículo en relación con la hipnosis. Demostró experimentalmente que la hipnosis es un procedimiento sin riesgos. Durante este periodo la hipnosis aún era considerada como una for­ma de sueño y, gracias a la s teorías pavlovianas en boga, como un estado de inhibición cortical- Erickson, sin embargo, con base en su propia experiencia, entendió y propuso a la hipnosis como un estado en el cual los sujetos experim entan un estado de atención intensapero sin un foco preciso.

Enseñaba y alentaba a s u S estudiantes de medicina y de psiquia­tría a utilizar la hipnosis, p o n ía énfasis en la observación, enseñaba a sus alumnos a observar a l o s pacientes. Sus propias habilidades de observación, desarrolladas clesde niño, le enseñaron que un porcen­taje muy alto de la com unicación, depende más de los movimientos corporales y de las actitudes <lue de las palabras, que la gente realiza movimientos casi i m p e r c e p t i b l e s que son altamente reveladores si son tomados en cuenta. Él j^odía reconocer a un buen pianista, no por los sonidos que p ro d u cía en el piano, ya que era sordo para los tonos, sino por los m ovim ientos de las manos y de los dedos, por momentos firmes y por m om en tos suaves, como lo requiere la ejecu­ción adecuada de una p artitu ra ; enfatizaba que muchos patrones de conducta son más evidentes la forma en que la persona dice algo que en el contenido de lo q u ^ dice (Haley, 2007).

En 1934, a la edad de 33 a r io s , Erickson con tres hijos de su primer m atrim onio, aceptó el nom bram iento de director del Departamento de Investigación y Form aciór* Psiquiátrica en el Hospital General del

72 Historias para contarse... y crecer juntos

Condado de Wayne, en Eloísa, Michigan, donde inició un intenso capitulo de investigación en su vida personal y profesional.

Fue profesor de tiempo completo en la Universidad Estatal de Wayne, en el área de posgrado, así como profesor asociado de Psi­quiatría y Psicología Clínica en la Universidad Estatal de Michigan.

En el primer año, conoció a Elizabeth Moore, quien se convirtió en su esposa, su compañera de investigación y la madre inicialmente de los tres hijos de su primer matrimonio, y posteriormente de otros cinco más: fue la compañera del resto de su vida.

Su nombramiento en el Hospital como director de investigación y entrenamiento psiquiátrico, le proporcionó el escenario adecuado para sus más importantes investigaciones experimentales sobre la naturaleza y la realidad del fenómeno hipnótico. Realizó ayudado por su esposa, experimentos cuidadosamente controlados sobre ce­guera a los colores y sordera hipnóticos.

Aun cuando mucho de su trabajo se fundamentaba en las teorías psicoanalíticas en boga, nunca se limitó a una teoría o a una escuela particular; creía firmemente que las teorías eran limitantes para el libre desarrollo de nuevas estrategias y para la libre exploración de los fenómenos; se deleitaba en el estudio y en la utilización terapéu­tica de los recursos naturales del individuo y pensaba que no había necesidad de tejer una teoría alrededor de esto. Su reputación como observador y como comunicador se extendió tanto desde esta fase de su carrera, que llegó a ser consultor del gobierno de los EUA du­rante la Segunda Guerra Mundial.

En 1940, Margaret Mead lo consultó por primera vez para que le ayudara a analizar sus filmaciones del trance espontáneo de los ha­bitantes de Bali (Indonesia, al noroeste de Australia). Pronto, ambos fueron colaboradores cercanos.

Durante los años de la guerra, trabajó como psiquiatra en el co­mité local de reclutamiento y frecuentemente escribía acerca de los incidentes que se presentaban en forma de anécdota y se los enviaba a un amigo suyo, columnista de un periódico de Detroit; éste los editaba ligeramente y los publicaba bajo un seudónimo. Muchas de estas anécdotas fueron publicadas posteriormente por su amigo en forma de libro y algunas más fueron reproducidas en publicaciones populares tales como Selecciones del Reader's Digest.

En éste tiempo, los medios de información lo consideraron como un consultor experto, lo cual aprovechó para clarificar el concepto popular del fenómeno hipnótico, tanto en la prensa como en la radio (Erickson, 1983: 25-27).

73

Los AÑOS DE MADUREZ PROFESIONAL

Durante los años de la guerra se incrementó su actividad en forma importante en el Hospital de Eloísa, como clínico y como profesor de los residentes, así como en la Facultad de Medicina de la Universi­dad de Wayne; adicionalmente, pasaba muchas horas haciendo exa­men médico a los reclutas en las estaciones de reclutamiento. Todo este trabajo no parecía molestarle a pesar de haber tenido algunos breves episodios de dolor muscular y articular.

En el inicio del otoño de 1947, mientras viajaba en su bicicleta en el camino de su casa hacia su oficina, lo cual hacía normalmente con el fin de ejercitarse, un perro le hizo caer produciéndose ras­pones y pequeñas heridas superficiales, algunas de ellas en la cara, todas llenas de tierra; como nunca había recibido protección an­titetánica, decidió aplicarse el toxoide. Aproximadamente 10 días después, desarrolló una reacción sérica severa que le llevó a un estado semicomatoso. Después de algún tiempo, tuvo una recupe­ración suficiente como para reintegrarse a su trabajo y a sus labores de enseñanza; sin embargo, para la primavera de 1948 tuvo una recaída tan severa que tuvo que ser hospitalizado y ninguno de los médicos que lo atendieron llegó a una conclusión diagnóstica precisa y el único consejo que le dieron fue que se alejara de Mi­chigan, dadas las condiciones climáticas y la cantidad de alergenos de todas las estaciones en ese estado. Le sugirieron un clima seco y cálido, por lo que decidieron mudarse a Phoenix, Arizona, ya que allí conocían al Dr. John Larson, un viejo amigo y un magnífico in­vestigador que por ese tiempo era el superintendente del hospital estatal de Arizona.

La familia Erickson vivió dentro del área del hospital durante un año, hasta que Larson se fue a trabajar a un hospital en otro estado y los Erickson se mudaron a una casita en la calle Ciprés, de Phoenix. Aquí inició su práctica privada que continuó hasta su muerte en 1980 (Erickson E., 2007).

A pesar de que el clima seco y cálido de Arizona fue de gran uti­lidad para disminuir sus calambres y alergias, seguía estando pro­penso a períodos de vértigo y severa debilidad, atribuidos a las se­cuelas de la aplicación del toxoide tetánico a la edad de 46 años. No importaba cómo se sintiera en general, el dolor se convirtió en su acompañante permanente, debido al deterioro del tejido muscular a consecuencia de la polio y a la deformación de su columna vertebral, que adquirió desde joven.

74 Historias para contarse... y crecer juntos

Durante ese tiempo tuvo varias recaídas que fueron minando su resistencia física, y su fuerza muscular, que en ocasiones le llevaron a ser hospitalizado; en una de esas ocasiones, un doctor llegó a la conclusión de que sus síntomas eran consistentes con un segundo ataque de polio, lo cual es raro pero no imposible.

Como consecuencia de esas recaídas, decidió poner su oficina en una habitación de su casa en lugar de poner una oficina en la ciudad, porque así podía tomar descansos entre un paciente y otro, durante los cuales retomaba el control autohipnótico del dolor.

Cobraba por sus consultas y enseñanzas sólo lo mínimo necesario para mantener a su familia; por ese tiempo, cuando la tarifa normal era de 100$US/hora, él cobraba 80, repartidos entre el número de participantes a sus talleres; si eran 10, cada uno pagaba 8 y les decía: "si tienen más, paguen más, y si tienen menos, paguen m enos... "

En una de las conversaciones con Rossi, Erickson cuenta cómo renovó sus esfuerzos para recuperar el control de su cuerpo, pero sobre todo para el control autohipnótico del dolor:

"Después del segundo ataque de polio, pude dejarle el trabajo a mi inconsciente, dado que ya había pasado una vez por toda esa situación, sólo entraba en trance y le decía a mi inconsciente: 'Incon­sciente, haz tu trabajo'.

"Aprender a escribir con mi mano izquierda fue muy laborioso; en este segundo ataque de polio mi mano derecha quedo nuevamen­te inhabilitada, por lo que tuve que utilizar la izquierda para escribir; eso no lo había hecho más desde los 19 años. Ahora, escribo dete­niendo la pluma con la mano derecha, pero guiándola con la mano izquierda; utilizo ésta (levantando la derecha), siempre que puedo...; es mejor que se mantenga en uso tanto como sea posible. Frecuente­mente ayudo en la cocina pelando papas..." (Rossi, 1980:124).

"U n día, después de ver a un paciente, entré a la casa al mediodía porque tenía un dolor terrible en la espalda. En el camino a la recá­mara, le pedí a mi esposa que me diera unas uvas y lo siguiente que recuerdo, es que llegué de nuevo al consultorio y me comí las uvas, sólo entonces me di cuenta que ya no tenía ese terrible dolor...

"El dolor, sólo es una parte de tu experiencia total, de tal forma que tú puedes separar el dolor de tu experiencia total. Ese día el dolor era terrible cuando estaba aquí en el consultorio, así que decidí ir a la cama con el fin de controlar el dolor y después me olvidé de hacerlo, yo no sabía cuándo sucedería pero sabía que sucedería, yo no sabía cómo, pero sabía que lo haría y al dejar de ponerle aten­ción, tu inconsciente hace el resto. Dejas de preguntarte ¿cuándo

Primera parte: Los recursos de la magia 75

se me quitará el dolor?, ¿cómo me voy a quitar el dolor? Y dejas de pensar que lo puedes quitar conscientemente. Tú puedes decirle a tu inconsciente qué es lo que quieres lograr pero exactamente cómo o cuándo, debes dejárselo a él... Esto es una ventaja, ya que mientras quieras saber cómo quitas el dolor, lo llevas contigo...

"Algunas personas se preocupan demasiado cuando su incons­ciente parece no hacer las cosas bien, suelen sentirse atrapados en un callejón sin salida, pero el inconsciente sabe más de lo que el conscien­te sabe, tu inconsciente es más listo que tu consciente, así que fun­cionará sin duda alguna, eventualmente..." (Erickson, 1983: 29-31).

El proceso hipnótico para Erickson es un fenómeno natural que uti­liza los procesos psicológicos normales, tales como memoria, olvido, disociación, reinterpretación cognitiva de las creencias, etc. General­mente requiere, como todo, de entrenamiento, inteligencia y trabajo por parte del terapeuta para lograr que un paciente logre resultados que parecen milagrosos. Sin embargo, esto sólo parece milagroso para el paciente y para el observador casual, dado que no conocen todo lo que se necesita para el logro planeado de los efectos hipnóticos.

El terapeuta debe saber todo lo posible acerca de psicología, bio­logía, desarrollo humano, lenguaje, comunicación y cultura. Cada persona es un microcosmos único que debe ser entendido en sus propios términos, con el fin de aprovechar su potencial individual en su propio beneficio.

Con dedicación, imaginación y mucha práctica, la hipnosis puede convertirse en casi una "segunda naturaleza" del terapeuta, de tal manera que aquello que logra con su labor, da la apariencia de ser algo natural, en ausencia de esfuerzo.

En ese tiempo y a pesar de su minada salud, aceptó el puesto de director clínico en el Hospital Estatal de Arizona en Phoenix, cargo que llevó a cabo con empeño y energía durante dos años. Probable­mente, este fue hasta su muerte, el periodo más importante de su carrera, como terapeuta, maestro, consultor y como líder mundial en hipnosis clínica.

Durante los años cincuenta, Erickson comenzó a enseñar en dife­rentes escuelas locales y comenzó a dar talleres en su casa a profesio­nales de las diferentes disciplinas del área de la salud de todo el país y, eventualmente, de todo el mundo. Durante este periodo conoció y trabajo con Aldous Huxley; junto con él realizó investigaciones en torno a la naturaleza de los diversos estados de conciencia; por ese tiempo también conoció y trabajó con Linn Cooper sobre el fenóme­no de distorsión del tiempo, trabajo que amplió posteriormente jun­

76 Historias para contarse... y crecer juntos

to con su esposa Elizabeth M. Erickson; en enero de 1959, en México, en el inicio de los trabajos del "Grupo de Estudio sobre Hipnosis Clínica y Experimental", puso en estado de trance a una enfermera que no sabía nada de hipnosis, nada de inglés y no conocía nada de Erickson, tan sólo con pantomima, ya que él no sabía nada de espa­ñol (Rossi, 1980: 331-339).

En 1957 la demanda profesional de entrenamiento era tal que en­tre él y otros colegas suyos fundaron la Sociedad Americana de Hip­nosis Clínica, de la cual fue presidente durante los siguientes tres años; mientras tanto, fue fundador y director del American Journal o f Clinical Hypnosis, revista que editó durante 10 años (Haley 1973: 4).

En 1965 trabajó con Jay Halley y John Weakland en la ampliación de sus trabajos sobre el doble vínculo. ¡Jalar a un cordero por la cola, tuvo muchos efectos sorprendentes! (Erickson, 1983: 40-42).

Esta fue la época más productiva de su vida; su reputación como editor, consultor, terapeuta y maestro llegó virtualmente a todo el mun­do. Lo consultaba el más variado rango de grupos: gobierno, atletas, sociedades tanto académicas como civiles y asociaciones de todo tipo.

Su increíble capacidad para activar y utilizar y enseñar los mecanis­mos mentales, originó un flujo constante de profesionales e investiga­dores hasta su consultorio, en busca de sus enseñanzas, durante las úl­timas dos décadas de su vida. Milton Erickson enfrentó y superó nume­rosos problemas de salud durante toda su vida. En 1967 sus problemas musculares lo confinaron a una silla de ruedas y el dolor se convirtió en su compañero permanente; sin embargo, a pesar de su edad, Erickson fue un hombre joven, con una alegría de vivir que comunicaba a quien estaba cerca de él y que valoraba intensamente la capacidad creativa del ser humano, manifestada a cada momento de la vida.

Aun cuando nadie puede negar los efectos brillantes y poco co­munes que él lograba con sus intervenciones hipnóticas, sólo unos cuantos han logrado entender y reproducir su trabajo. ¿Cómo puede hacer un profesional para lograr esos éxitos terapéuticos que logra­ba el Dr. Erickson? ¿Cómo puede cada uno de nosotros crear una relación más efectiva entre la problemática y los recursos de nues­tra individualidad? ¿Cómo podemos utilizar las enseñanzas del Dr. Erickson para ayudar a otros a hacer frente a los dilemas de nuestra condición humana?

Milton Erickson murió a los 78 años, el 25 de marzo de 1980, en Phoenix, Arizona, ocho meses y medio antes del Primer Congreso Internacional que se celebra desde entonces cada tres años en torno a las Técnicas Ericksonianas de Hipnosis y Psicoterapia y todos los

Primera parte: Los recursos de la magia 77

modelos terapéuticos que actualmente se han desarrollado tomando como base sus enseñanzas.

Este primer congreso sé realizó del 4 al 8 de diciembre de 1980 y fue planeado por Jeffrey K. Zeig15 con la intención de reunir a los maestros, compañeros y amigos de Milton Erickson, y de brindarle a él la oportunidad de comprobar el influjo de su obra, así como ce­lebrar su cumpleaños 79. Lamentablemente no se cubrieron los dos últimos objetivos, pero no cabe duda que se habría complacido con el evento, ya que acudieron unos dos mil profesionales interesados en su obra (Zeig y Gilligan, 1990:15).

Durante la apertura del Primer Congreso Ericksoniano organiza­do por Jeffrey K. Zeig y Sherron S. Perters, al mirar la cantidad de gente que acudió al congreso, la señora Erickson comentó al público que de haber estado el Dr. Erickson presente, la habría llevado de­trás de las cortinas para decirle lleno de emoción: "Si tan sólo mamá y papá pudieran mirar esto ..." (Zeig, 1982).

Cuando era niño, Milton Erickson solía salir muy temprano de su casa durante el invierno, para tomar el camino de la escuela, haciendo un camino sinuoso sobre la nieve que cubría la calle; después, se deleitaba observando cómo cualquiera que viniera detrás de él seguía exactamen­te sus pasos... (Rosen, 1994).

15 Alumno dilecto del Dr. Erickson, fue su estudiante directo durante seis y medio años; como una forma de agradecer sus enseñanzas, planeó y organizó el Primer Congreso Ericksoniano, el cual se viene realizando desde entonces cada tres años. Es considerado com o su heredero intelectual.

Segunda parteLa m agia de los recursos

Historias para contarse 1

1 ) B e b e r a g u a f r e s c a 1

Lo que descubrieron otros, tú también lo p u ed es descubrirHistoria:

Después de todos los tiempos de la civilización, un maestro de sabi­duría, congregaba a los jóvenes para mostrarles en historias toda la experiencia de la humanidad.

Uno de los jóvenes, inquieto por captar todo el co n ten id o verda­dero de los mensajes de su maestro, le preguntó...— ¿Maestro, cuál es el contenido verdadero de la experiencia que reúnen esas historias que nos cuentas?— Eso es algo que te corresponde descubrir a ti — dijo el maestro.— Pero maestro eso es verdaderamente difícil, prefiero que tú me digas su real significado...—¿Si yo te ofreciera beber agua fresca preferirías bebería de mi boca...?

2 ) E s t r e l l a d e m a r 2

Una segunda oportunidad puede hacer Ia diferenciaHistoria:

Caminaban cierto día por la playa dos amigos, Ariel y Mac, era una mañana cálida de verano; la playa se encontraba tapizada por estre­llas de mar que durante la noche, con la marea, subieron a la playa y que al retirarse las aguas, las dejó atoradas en la arena. Las gaviotas se daban un festín mientras otras se morían o morirían con seguri­dad por la desecación y el intenso sol. Era un panorama singular, pero muy común en esa época del año.

1 H istoria para contarse a: Personas dependientes. Quien no se sienta capaz de hacer algo por sí mismo. Quien quiere que los otros le resuelvan sus problemas. Personas que no están convencidas de lo que aprenden. Q uien no entienda el valor de aprender con la propia experi­encia. Adolescentes para que descubran, experimenten y decidan por sí mismos-

2 Historia para contarse a: Quien no cree en segundas oportunidades. Quien cree que ayudar es una pérdida de tiempo. Quien no ve las oportunidades que le da la vida. Personas que no crean importante ayudar. Alguien que esté dejando pasar su vida. Alguien que ya no quiera luchar.

82 Historias para contarse... y crecer juntos

Así mientras caminaban y platicaban, Mac recogía algunas estrellas de mar con sus manos y las arrojaba de nuevo al agua; Ariel, después de un tiempo, le preguntó a Mac:— ¿Para qué haces eso...?A lo que Mac le contestó:— ¡Para darle una segunda oportunidad a esa estrella de mar!Ariel le dijo:— Pero: ¿qué diferencia hace eso? Igual se mueren miles de estrellas de mar y además le sirven de alimento a las gaviotas y... al fin y al cabo, ¿a quien le importa...?Mac le contestó:— ¿Quieres saber a quien le importa...?— ¡Si!, dijo Ariel fervientemente.— Entonces, ¡pregúntaselo a la estrella que ha regresado al fondo del mar!

3 ) E m p i e z a p o r t i 3

Tu ejemplo puede hacer que el cambio sea una realidadHistoria:

Cuando era joven y libre, y mi imaginación no tenía límites, soñaba con cambiar el mundo.

Al volverme más viejo y más sabio, descubrí que el mundo no cambiaría; entonces, acorté un poco mis objetivos y decidí cambiar sólo mi país. Pero también, él parecía inamovible.

Al ingresar en mis años de ocaso, en un último intento desespera­do, me propuse cambiar sólo a mi familia, a mis allegados; pero, por desgracia, no me quedaba ninguno.

Y ahora que estoy en mi lecho de muerte, de pronto me doy cuenta... "Si me hubiera cambiado primero a mí mismo, con el ejemplo

habría cambiado a mi familia; a partir de su inspiración y estímulo, podría haber hecho un bien a mi país y ... ¿quién sabe?, tal vez inclu­so habría cambiado el mundo".

3 Historia para contarse a: Quien se la pasa corrigiendo a los demás. Quien está esperando que los demás cambien. Quien cree que el mundo jamás cambiará. Personas que siempre le están diciendo a los demás cómo comportarse. Personas que culpan a los otros porque las cosas no le salen como querían.

83

Todo acto tiene consecuenciasHistoria:

Un viajero se extravió en el desierto y casi se moría de sed. Al final llegó al mar y en su desamparo trató de beber el agua salada. Cuando se dio cuenta que el agua de mar no le iba a quitar su sed, hundió sus manos en la tierra y gritando a Dios, pidió su misericordia. En este momento descubrió no muy lejos de él una pequeña palmita de un verde fresco. Obviamente la planta había logrado vivir muy bien en el ambiente agreste de arena y agua salada. En su coraje, reclamando la injusticia tomó una piedra y la lanzó hacia la palmita. La piedra le pegó duramente, le quebró una de la dos hojitas y se incrustó en el corazón de la palma. Unos momentos después el hombre se desma­yó. Horas más tarde unos pescadores lo descubrieron y lo salvaron.

La palmita casi muere de este golpe; pero después de unos días recuperó sus fuerzas y después de unas semanas le creció una hojita nueva de verde fresco. Después de unos meses crecieron más hojas y el tronco creció también. Años más tarde se convirtió en una palma muy alta e impresionante. Los pescadores solían juntarse alrededor de ella al atardecer para prender una fogata, platicar y tomar vino. Ellos querían sentarse cerca de la palma.

Un día llegó un extranjero y se sentó con los pescadores, escu­chando los cuentos y platicando sobre sus viajes. A media noche, todos los pescadores se fueron y sólo se quedaron un viejo de cabello blanco y el extranjero. Éste preguntó al anciano por qué la palma era tan hermosa e impresionante, con un tono tan duro como una piedra. El viejo le contó al extranjero la historia de la palmita y el hombre desesperado, añadió que la piedra todavía se encontraba en el corazón de la palma. El viajero se quedó silencioso y después dijo con voz baja que él era el hombre que había lanzado la piedra. Pre­guntó al anciano:

— Eres tan viejo y sabio, ¿Puedes aconsejarme qué hacer para que la palma me perdone?

El viejo permaneció en silencio por un momento y contestó.

— No mucho. Tú debes llevar la culpa como la palma lleva la piedra; pero si quieres, puedes hincarte y sin tocarla, pedirle perdón.

4) La p a l m a c o n e l c o r a z ó n d e p i e d r a 4

4 Historia para contarse a: Personas orgullosas o rencorosas. Quien no se atreva a pedir perdón. Al­guien que se sienta lastimado por otra persona. Personas que sean muy hirientes con sus palabras.

El hombre se hincó y cuando pidió perdón, se oyó un sonido como un corcho de una botella que se destapa y los dos vieron que la pie­dra brincó de la palma y cayó en la tierra. Llevaba tanta fuerza que hizo un hoyo profundo y llegó hasta una fuente. Después de unos momentos brotó agua fresca. Y en los meses siguientes el lugar se convirtió en un oasis tan verde y refrescante que la gente pasaba mucho tiempo ahí, para descansar bajo la sombra de la palma y dis­frutar de ese lugar tan agradable. Además, el oasis de la palma con el corazón de piedra salvó la vida de muchos viajeros que se extra­viaron en el desierto.

5 ) L a ú l t i m a v e z 5Si lo dejas para después será insuficiente la última vez

Historia:

Un empresario que trabajaba mucho, siempre padecía de dolores en el corazón y también en el estómago. Una noche que estuvo traba­jando hasta las ocho, tuvo verdaderos espasmos en el pecho y fue al médico urgentemente. Éste le tomó una prueba de sangre y al mirar­la en el microscopio se puso pálido.— Probablemente usted no va a sobrevivir la noche —dijo el médico al paciente.El empresario se afligió bastante y se fue a su casa. Le contó a su es­posa y ambos lloraron un poco. Así, dijo su mujer:— Voy a cocinar tu plato favorito, puede ser ésta la última vez.Cuando comieron, vieron televisión un rato y a las once se fueron a acostar. Antes de dormir, la esposa dijo:— Vamos a hacer el amor, puede ser la ultima vez.El marido lo aprobó. A las once y media se durmieron.A la una de la mañana el marido despertó a su mujer y le rogó:— ¿Podemos hacerlo de nuevo? Después de todo, puede ser la últi­ma vez.La mujer dijo:

— Claro que sí —y a la una y media se durmieron.A las tres, el marido despertó a su mujer otra vez y rogó:

1 Historia para contarse a: Alguien que chantajea con sus dificultades. Alguien que no toma tiempo para sí mismo. Personas que han dejado de interesarse en su vida. Alguien que es chanta­jeado por la dificultad de otro. Quien piensa más en el ayer o en el mañana que en su presente.

begunaa parte: La magia de los recursos 85

— Mira, es tarde pero, ¿no podemos hacerlo de nuevo? Después de todo, puede ser la última vez.La esposa contestó:— Déjame por favor, después de todo, tu no tendrás que levantarte en la mañana.

6) Wu W ei6Rescata la utilidad de cada experiencia

Historia:

En la China antigua un campesino que vivía en la montaña, tenía un hijo y un caballo. Un día, el caballo se escapó.

Los vecinos vinieron y lo compadecieron, porque ahora tenían que hacer todo el trabajo a mano.

El campesino viejo respondió:— Wu Wei, qué quiere decir: "Quién sabe para qué es bueno".Unas semanas después el caballo volvió con un rebaño de caballos salvajes, de los cuales era el guía. Los vecinos vinieron y lo felicita­ron y dijeron:— Que suerte, eres el más rico del pueblo.El viejo contestó:

— Wu Wei, qué significa: "Quién sabe para qué es bueno".Los vecinos se asombraron y salieron.

El hijo del campesino empezó a montar a caballo, ir en coche, criar caballos y la pasó muy bien. Un día se cayó del caballo y se rompió los huesos de las piernas.

Los vecinos vinieron y compadecieron al padre, que ahora tenía que hacer todo el trabajo él solo.

El campesino viejo respondió:— Wu Wei, qué significa: "Quién sabe para qué es bueno".Una semana después los oficiales del ejército llegaron al pueblo anun­ciando que había guerra con Mongolia. Entonces reclutaron a todos los hombres jóvenes. Sólo al que tenía las piernas rotas no lo quisieron.

Esta vez, los vecinos no vinieron porque ya sabían lo que el viejo les contestaría...

' Historia para contarse a: Personas que pasan por un mal momento. Personas que no aceptan nin­gún tipo de cambio. Personas que se preocupan por todo. Quien se la pase quejándose de su vida.

8 6

7) E l p i n t o r d e l e m p e r a d o r 7Roma no se hizo en un día

Historia:

Un emperador chino deseaba un cuadro de su ave preferida. Fue a ver al pintor más famoso del país, un genio en omitir lo que es inne­cesario. Le encargó un dibujo de esta ave y le preguntó:— ¿Cuánto tiempo necesitas para el encargo?

El pintor contestó:

— Dos años.El emperador no lo podía creer y exigió que terminara el dibujo en un mes. Pero el pintor insistió en dos años y el emperador cedió.

Sin embargo, después de un año, el emperador envió a un men­sajero para preguntar si el cuadro estaba listo. El pintor dijo que to­davía no estaba.

Después de seis meses el emperador mismo visitó al artista y le dijo:— Después de 18 meses seguramente puedes enseñarme algo de lo que has dibujado.Pero el pintor contestó:— Tenemos un contrato de dos años. No me apresures.El emperador tuvo que reconocer, que tenían un contrato de dos años y entonces se fue.

Un mes antes de la fecha acordada, el emperador volvió, lleno de im­paciencia y dijo:— Ahora tiene que estar casi acabada la obra.Pero el pintor le dijo que lo sentía mucho y el emperador tuvo que salir otra vez.

Finalmente volvió un día antes de la fecha fijada y rogó que le enseñara la pintura. Pero sin compasión dijo el artista:— Es demasiado temprano por favor, vuelve mañana, emperador mío.

A la madrugada del día siguiente, enfadado, el emperador se encon­tró ante la puerta del artista reclamando ver el dibujo.

Historia para contarse a: Personas impacientes y desesperadas. Quien crea que no puede hacer algo. Personas que busquen ahorrar tiempo. Quien esté en un proceso largo y difícil. Personas que no respetan el tiempo de los demás.

jc g w n u u fiui ¡L-. lm magia ae ios recursos 87

El artista lo dejó entrar y cuando estuvieron sentados tomó una hoja blanca y un lápiz. En menos de dos minutos dibujó un ave ma­ravillosa en el papel.

El emperador estuvo encantado y enfadado al mismo tiempo, y se sublevó:

— ¿Por qué me has tenido en suspenso tanto tiempo?

El artista no dijo nada, pero abrió un armario del cual cayeron al suelo dos mil bocetos del ave que había dibujado.

8) El v i u d o c o n t e n t o 8

En todo acontecimiento hay un regalo de la vidaHistoria:

Un viudo de cincuenta y seis años estaba deprimido desde hacía dos años; después de la muerte de su mujer, no había podido trabajar más. Fue con la psicóloga, a quien le explicó su situación. Luego de discutir las perspectivas de su vida y la posibilidad de cambiar su situación, la psicóloga le preguntó:— ¿Habría preferido usted morir antes que su mujer?El viudo contestó:— Nunca, porque es una miseria sobrevivir a quien tú amas. Entonces, la psicóloga comentó:— Mire usted..., así que esta miseria se la ha ahorrado usted a su mujer y por eso vale la pena sufrir un poco...

9) El z a p a t e r o h o n e s t o 9

Siempre es mejor avanzar acompañadoHistoria:

Un zapatero fue honrado durante toda su vida y nunca engañó a nadie. Después de su muerte llegó con San Pedro y le preguntó:— ¿Este es el lugar indicado para mí?San Pedro contestó:

8 H istoria para contarse a: Una persona que acaba de perder a un familiar o amigo. Alguien que se sienta deprimido por una pérdida. Quien vive atorm entándose con el pasado. Personas que sólo piensan en ellos.

g Historia para contarse a: Quien no comparte sus virtudes con los demás. Quien no cree en hacer acciones buenas. Personas con alguna enfermedad terminal. Personas que no se hacen responsables de sí mismas. Personas buenas que no hagan nada para que otros lo sean.

88 Historias para contarse... y crecer juntos

— Sí hombre, sí; tenemos reservado un sitio para ti.Luego le indicó una nube blanca. Ahí se sentó el honrado zapatero entre los ángeles, limpiando sus alas y cantando "Aleluya".

Cuando se inclinó para mirar abajo, pudo reconocer a todos sus amigos en el infierno.

Estaban sentados en mesas largas cantando, bebiendo grandes ja­rras de vino y comiendo platos exuberantes. El zapatero honrado se incorporó y se quedó en silencio.

Al medio día rogó a San Pedro por su comida. Después de unos minutos, San Pedro le trajo una bandeja de plata con un vaso de agua y un pedazo de pan. El zapatero no le dijo nada y la tomó. Al día siguiente el hombre bueno, de nuevo sentado en su pequeña nube blanca, miró hacia abajo y vio otra vez a sus amigos celebrando en el infierno. Al medio día pidió a San Pedro algo molesto:— ¿No le importa traerme mi comida?San Pedro asintió y volvió con la bandeja de plata con el agua y el pan como el día anterior. Esta vez el zapatero se quejó:— No me imaginé que el cielo fuera así.San Pedro respondió:— Está bien, pero por una persona no voy a empezar a cocinar; ¿a cuantos trajiste contigo?

10) E l t e s o r o e n t u j a r d í n 10

La riqueza está en tus recursos y es interiorHistoria:

En los alrededores de lo que siglos atrás había sido la Gran Tenoch- titlan, vivía un anciano solitario de nombre Jorge, que soñó que via­jaba a San Pablo, un poblado de Brasil cercano a la ciudad del Bello Horizonte donde a la orilla del río, sobre el camino, se hallaba un frondoso árbol. Él mismo cavaba un pozo al lado del árbol y de ese pozo sacaba un tesoro que había estado oculto durante siglos y que devolvía a su vida la riqueza perdida.

Al principio Jorge no le dio importancia a su sueño, pero después de soñarlo varias veces, interpretó que era un mensaje y decidió que haría caso a su intuición. Y fiel a ella, se preparó para la larga trave­sía y partió hacia Brasil.

10 H istoria para contarse a: Personas con temor a equivocarse. Quien no se valora y duda de sí mismo. Personas que no creen en sus sueños o en sí mismos. Personas que no ven que la solución está a su alcance.

Segunda parte: La magia de los recursos 89

Después de muchos días de marcha, el anciano llegó a San Pablo y se dedicó a buscar aquel árbol frondoso al lado del río para comen­zar a cavar el pozo.

Encontró el lugar que buscaba. Todo era igual que en su sueño. El río, él y el árbol debajo del cual debía encontrar el tesoro. Sin em­bargo no se animaba a cavar porque lo intimidaba la gente que se encontraba en los alrededores y los guardias que rondaban cerca del árbol que identificó como el de su sueño.

Después de dos días de circundar el lugar, le pareció sospechoso a uno de los guardias, quien se aproximó para interrogarlo.

Jorge convencido de su sueño y la razón de su viaje, le contó que ve­nía viajando desde una ciudad lejana y antigua llamada México, porque había soñado que en San Pablo encontraría un tesoro bajo un árbol en el cual cavaría un pozo; de acuerdo con su sueño, el árbol que les brindaba su sombra en ese momento, bien podría ser el que buscaba.

El guardia empezó a reírse a carcajadas y le dijo:—Si yo creyera en mis sueños, perdería mi tiempo igual que tú. Ima­gínate que yo una vez tuve un sueño, en el que iba a encontrar un tesoro, exactamente, bajo un árbol que se encuentra en un jardín del centro de una ciudad antigua, frente a una casa en ruinas. Pero yo no estoy loco para creerme eso.Jorge al darse cuenta de que la descripción se parecía al jardín que se encontraba frente a su casa, no dijo nada. Se despidió agradeciendo al guardia su comentario. Volvió a su casa en México, cavó debajo del árbol más frondoso del jardín y verdaderamente encontró allí un tesoro como en el sueño del guardia.

1 1 ) L a h i s t o r i a d e u n á g u i l a 11

Si eres un águila siempre podrás volarHistoria:

Un campesino encontró un águila, que se había caído del nido. La re­cogió y la puso en el gallinero. Allí creció el águila entre las gallinas, comiendo sólo granos.

Un día llegó un veterinario y dijo:— Eso es un águila.

11 H istoria para contarse a: Hijos adoptivos. Personas indecisas. Quien desiste fácilmente. Quien no se siente capaz. Personas con baja autoestima. Quien requiere recordar su capacidad de superación y crecimiento.

—Sí, pero se siente como una gallina, porque se le ha criado en el gallinero —contestó el campesino.— No, no —dijo el veterinario. La recogió, la puso en su brazo y le dijo:— Vuela —pero el águila saltó del brazo y volvió a los granos.Al día siguiente el veterinario recogió el águila otra vez y la puso en la punta del tejado. Le dijo de nuevo.

— Expande tus alas y vuela, tú eres la reina del aire.

Pero el águila saltó al suelo y volvió a pie al gallinero.Dijo el campesino:

— Ve usted, se siente como una gallina.El veterinario contestó:—Si pero tiene corazón de águila.Al tercer día el veterinario recogió el águila y la subió a la cima del monte. Ahí le repitió:— Expande tus alas y vuela.El águila comenzó a temblar y miró hacia el valle. Se asombró de que pudiera reconocer el gallinero e incluso las gallinas y se asombró aún más al reconocer los granos.

Pero se quedó posada sobre el brazo. Al final el veterinario la sos­tuvo contra el sol naciente y le dijo:— ¡Vuela!

Y efectivamente el águila levanto el vuelo y desapareció en dirección al sol.

Ahora bien, no es seguro si algún día no llegó a casarse con una gallina.

1 2 ) E l G r a n H a k im 12

La verdad cae por su propio pesoHistoria:

En cierta ocasión, un Jeque árabe descubrió con desagrado que había perdido el sentido del gusto y la capacidad de decir la verdad.

Se preocupó por su situación y decidió ir a consultar al gran Hakim, un hombre de gran tradición en la región, quien era reconocido por sus curas rápidas y milagrosas, aún en los casos más difíciles y desesperados.

90 Historias para contarse... y crecer juntos

12 Historia para contarse a: Quien se inventa enfermedades. Quien no crea en sus capacidades. Personas que constantem ente están enfermas. Personas que se quejan continuamente.

Segunda parte: La magia de los recursos 91

El Jeque dijo a Hakim:—Sufro de una enfermedad muy grave, si tú me curas te prometo que serás rico hasta el final de tus días.— Cuéntame tu problema —contestó Hakim; y el Jeque respondió:— He perdido el sentido del gusto y ya no puedo decir la verdad. He visitado una gran cantidad de médicos que dicen que decir la verdad es algo interno, profundo, que requiere de un gran sentido de com­promiso y que puedo hacerlo. Pero hasta ahora no ha habido nadie capaz de lograr que yo diga la verdad.El gran Hakim se quedó pensando un momento y le dijo:— Hombre, eso es realmente un problema, en verdad que tu caso es difícil. Tengo que consultarlo con la almohada. Por favor vuelve mañana por la mañana y te daré la respuesta.Al día siguiente, volvió muy temprano el Jeque y le preguntó impa­ciente al médico:— ¿Has pensado lo suficiente y has encontrado la medicina?El gran Hakim contestó:— Sí aquí tengo una píldora para ti, tómala y mastícala.— ¿Ahora mismo? —preguntó el jeque.

— ¡Sí, enseguida!El jeque masticó la píldora... Inmediatamente le gritó al Hakim:— ¡Qué vergüenza! ¡Cerdo, maldito!El gran Hakim preguntó:

— ¿Qué pasa?El jeque exclamó:— Esa píldora no es otra cosa más que excremento.— ¡Ah! — dijo el Hakim tranquilamente—, ¡me parece que estás curado puesto que has recuperado el gusto y evidentemente has dicho la ver­dad!

92

Si invades las actividades de los demás te puedes olvidar de las tuyas

Historia:

Había una vez en un lejano país europeo, una princesa que vivía muy contenta en compañía de sus padres y hermanos.

Cierto día, la reina le pidió ayuda a su hija Alejandrina para organi­zar una fiesta en honor a los caballeros del reino. Debía arreglar el salón, mandar invitaciones, contratar bufones, músicos, danzantes y no sé que tantas cosas más, propias de la preparación de un banquete real.

A la princesa Alejandrina le extrañó un poco esa petición, pues generalmente son las reinas las encargadas exclusivas de organizar dichos festejos.

La fiesta se llevó a cabo. Y al día siguiente, la reina le pidió a Ale­jandrina que le acabara de terminar el favor. "Pero si sólo soy tu hija, no soy la reina...", pensaba ella para sus adentros.

La princesa tenía razón, no es que se negara a ayudarle, sino que en su fuero interno ella sabía que para hacer lo que su madre le soli­citaba primero tendría que ser reina.

No sé qué poderes mágicos tienen todos los reyes y reinas que siempre convencen a todo el mundo y se salen con la suya. La madre de Alejandrina no fue la excepción.

Acabó cansadísima, eso era lógico: arreglar y cargar mesas, sillas, candelabros, era demasiado.

Hay tareas para reinas y las hay para princesas; éstas no cansan tanto. Pero las tareas exclusivas de reinas, cuando las hacen sus hijas, realmente agotan a cualquiera.

Pasó el tiempo, y la soberana le volvió a solicitar a la princesa su ayuda. Alejandrina accedió de nuevo, una y otra vez; tantas veces lo hizo, que ella misma empezó a creer que la obligación le pertenecía sólo a ella, y más de una vez, cuando se veía en el espejo, creía que estaba viendo a su propia madre, con todo y corona.

Hasta dónde llegó la imaginación de la princesa empezó a hablar y a caminar igualito que la reina.

Un buen día, cuando Alejandrina estaba muy cansada, se le ocurrió una idea. Fue con Giorgio, el honorable sastre del reino y le ordenó que le hiciera una armadura digna de una reina para no sentir tanto peso.

13) L a a r m a d u r a 13

13 Historia para contarse a: Quien ejerce acciones que no le corresponden. Familias que han invertido sus roles. Personas que no viven de acuerdo a su edad. Personas que no hacen lo que les corresponde. Personas que no saben decir no y por eso la gente se aprovecha de ellas.

Segunda parte: La magia de los recursos 93

Giorgio tuvo que hacer diferentes aleaciones hasta que finalmen­te se la entregó.

Cuando la princesa la vio, dijo:— No es precisamente la armadura más bonita que hay en el reino.Parecía tosca y poco práctica, pero cuando supo que tenía la ventaja de que, al ponérsela, cualquier peso sobre sus hombros se reducía a una cuarta parte, se animó.

Durante los siguientes años la jovencita se encargó prácticamente de todo en el reino, hasta que un día, después de una ducha caliente y a pesar de las esencias, aceites y perfumes del baño, al ponerse la armadura se dio cuenta de lo maltratada que estaba la piel de su cuerpo. Y obviamente, esto ya no le agradó tanto. Además, con el paso del tiempo, la armadura le parecía cada vez más pesada.

Los beneficios de ser reina cuando no debía serlo, habían desapa­recido, justo ahora que ya debía empezar a pensar en serlo. Habló con sus padres sobre el asunto, pero nada cambió.

Casi sin ganas, fue a visitar al sabio del reino. El la recibió con sor­presa y con un fuerte abrazo. Alejandrina le confesó lo cansada que se encontraba, lo fea y estorbosa que estaba su armadura, aunque el sabio le preguntó:— ¿Para qué quieres esa armadura?La princesa le contestó:—Para poder realizar con menor peso todas las cosas que mi madre no hace; como ordenar el salón de fiestas, cuidar a mis hermanos.— ¿No es obligación exclusiva de la reina? —preguntó el anciano.— Sí —contestó la muchacha, pero ella me pide que le ayude.— Y ¿quién hace los trabajos exclusivos de la princesa?Alejandrina se quedó pensando un largo rato...:— Nadie, nadie los hace —contestó.El sabio ya no preguntó nada.

94

1 4 ) E l d i s f r a z d e l o b o 14Aparentar pone en peligro la identidad

Historia:

Había estado pensando en eso...: "tengo que lograr que la gente vol­tee a verme y hable de mí. No importa lo que tenga que hacer..." Sú­bitamente vino una excelente idea a su cabeza: "U n disfraz, un dis­fraz capaz de hacer voltear hasta a la más distraída de las personas, un disfraz completo, de pies a cabeza, algo que me cubra totalmente, por fuera y por dentro..." Se dedicó semanas, meses, años enteros a diseñarlo, hasta que por fin estuvo listo; era perfecto.

"El disfraz me amolda al cuerpo de una manera increíble. Ade­más, estoy seguro, esto me cubrirá y me protegerá, sin tantas com­plicaciones..." Se miró en el espejo y se quedó pensando: "A l fin des­pués de tanto tiempo tendrán que notarme. Ahora sí podré salir a caminar por la calle...; ¡eso es, todos están mirándome!"

Anduvo por los parques asustando a los perros, en los edificios y en las oficinas mostraba los colmillos a las empleadas; entró a las escuelas, a las jugueterías y a las casas, en donde aullaba para amedrentar a los niños. Era obvio que lo habían notado.

Sin embargo, pasado el tiempo, el encanto desapareció, había algo ilegible en esos ojos que lo miraban, algo que no le acababa de gustar. En una ocasión en que estaba escondido detrás de un árbol en un parque, tratando de asustar a unos niños, uno de ellos volteó hacia él y lo descubrió; se detuvo, se acercó al árbol, le observó fija­mente y exclamó:— ¿Ya vieron que cosa más fea?La cara que puso el niño al verlo fue lo que más le desconcertó... "Cóm o es posible que después de tanto trabajo, de tanta dedicación, alguien pueda hablar así de mi genial disfraz. He logrado acaparar la atención de los demás, pero no contaba con esto, no es como yo quiero. Ni siquiera como protección me sirvió, ya no me gusta te­ner esto encima, ¡no se qué pasó!, ¡me siento tan avergonzado! Es necesario hacer algo, quitarme el disfraz será lo mejor, lo tiraré, lo destrozaré, lo alejaré de mi vida..."

Se paró frente al espejo, recorrió con su mirada el cuerpo, la boca, sus orejas largas, las mejillas, la nariz, y al llegar a sus ojos, quién sabe qué vio pues puso inmediatamente manos a la obra; y se dijo:

14 Historia para contarse a: Quien piensa que no es aceptado. Alguien con problemas de iden­tidad. Personas que m uestran lo que no son. Gente exageradam ente autosuficiente. Personas que sientan que no necesitan de nadie.

Segunda parte: La magia de los recursos 95

"Al fin que quitármelo de encima no será nada difícil, sólo es cues­tión de dar un buen tirón". Pero tiró y tiró... estiró y forcejeó, aquí y allá... Era inútil, no podía deshacerse de él, el disfraz no se le des­prendía, seguía pegado a su cuerpo como su piel.

De pronto recordó... "¡Claro, el cierre!; eso es, le puse un cierre; seguramente por ahí se abrirá, voy a buscarlo, no lo veo, ni lo siento por ningún lado, sólo pelos y más pelos. Esto es desesperante ¿Cómo es posible que no pueda controlarlo, si yo mismo lo hice? En algún lugar debe estar el cierre; sólo tengo que buscarlo con paciencia. Si tan sólo pudiera tener a alguien que me viera desde afuera y me di­jera dónde está el cierre..."

No quería aceptarlo, pero por fin se decidió: saldría a la calle y pedi­ría ayuda... era necesario. Buscó a la persona adecuada, se acercó a ella y le explicó su problema, lo más confidencial y claramente que pudo.

El desconocido empezó a buscar el cierre y después de un buen rato, por fin lo encontró...; estaba tan bien cerrado que apenas pudo correrlo unos milímetros, pero eso fue muy liberador.—Gracias, le dijo al desconocido, con eso es suficiente, ahora estoy seguro que el resto lo puedo realizar yo mismo.

1 5 ) L a c i m a d e l a m o n t a ñ a 15

Caminando llegas más lejos que preocupándote por llegar

Historia:

Cuando niña, veía todos los días como paisaje natural la majestuo­sidad de los volcanes. A pesar de ser tan cotidiano, no dejaba de maravillarme. Un día pensé: "N o he de morir sin haber subido a la montaña ".

Cuando marzo llegó a mi vida, me encontraba plena y en condi­ciones de hacer una escalada. Conocí entonces a un hombre joven pero sabio que supo de la inquietud mia por alcanzar la cima.

Un día ese hombre sabio; dijo:— Hoy es el gran día, prepara todo lo necesario, vamos a subir a la montaña.Que energía impetuosa sentía, llevaba conmigo los sueños, la fuerza, la promesa y la alegría.

15 Historia para contarse a: Jóvenes que creen que nunca acabarán la escuela. Alguien que esté perdiendo las esperanzas. Alguien que quiera desistir de sus metas. Personas que no recono­cen su esfuerzo. Alguien que se esté dando por vencido. Personas dependientes.

96 Historias para contarse... y crecer juntos

El paisaje era esplendoroso, las dimensiones de la montaña se habían multiplicado, ante mi vista sólo existía montaña... ¡Que grande era...!

Comenzamos a subir, ya no había vegetación y al momento me di cuenta de la dificultad que implicaba. Una cosa era soñar subir la montaña y otra la fuerza y esfuerzo para subirla.

Cada paso, cada respiración costaba, y avanzar cada paso se esta­ba convirtiendo en un verdadero triunfo.

Cansada de subir sin llegar, le pregunté a mi guía:— ¿Cuánto falta para llegar a la cima?"— El siguiente paso..., sólo un paso es lo que sigue... lo único que cuenta es el siguiente paso, pero si quieres saber realmente cuánto falta, mira hacia abajo y date cuenta lo que has avanzado.Busqué alrededor y no era posible apreciar la distancia avanzada, parecía que sólo había cielo y montaña; y hacia abajo, sólo arena volcánica pero nada claro acerca de la distancia.

Seguimos avanzando en silencio, guardando la energía para el trabajo inmediato, es decir, para el siguiente paso.

Volví a preguntarle:— ¿Todavía falta mucho? Ahora veo roca y comienza a haber nieve.— Hemos avanzado suficiente como para eso —me dijo — , el paisaje cambiará y sabrás que hemos llegado cuando la nieve y el hielo sea lo que predomine y la arena sea imperceptible.

Parecía broma del mal gusto. Ante mis ojos sólo podía verse are­na en abundancia y la nieve estaba apenas salpicada. El paisaje que miraba era todo lo contrario.

Caminamos mucho tiempo más; parecían interminables, el can­sancio, la duda y el esfuerzo...

Me sumergí concentrada en cada instante y repentinamente sentí una mano en mi hombro; mi guía volteó a mirarme y me dijo:— Para saber cuanto te falta para llegar a la cima, hay que voltear hacia abajo...

Al voltear encontré ante mis ojos un paisaje hermoso nunca antes sospechado por mí. La ciudad ante nosotros allá a lo lejos, en di­minutas dimensiones; y la sensación de logro dentro de mi pecho incrementada.

97

1 6 ) P e d r o e s c a r a b a j o y J u a n o r u g a 16El que piensa mucho poco avanza

Historia:

Juan oruga es el encargado de repartir el correo a todos los anima- litos del bosque. Todos los días por la mañana muy temprano, se levanta, ata con cuidado las agujetas de todos sus zapatitos y sale diligentemente hacia el gran hongo rojo con círculos blancos que tie­ne forma de sombrero y que sirve como estación de correos, para recoger el saco de reparto.

Pedro escarabajo que vive colina arriba, diariamente observa a Juan oruga hacer su recorrido desde el hongo rojo hasta el viejo tronco para dejar el correo a los inquietos insectos que viven allí, y después hacia el gran hormiguero situado en el montículo junto al gran abeto donde deja una buena parte de su carga; hasta la orilla del riachuelo, donde alegra a los insectos que viven en el agua al entregarles sus noticias, y después alguna carta ocasional para algún gusano o algún folleto de información para alguna oruga en la mo­rera cercana.

Pedro escarabajo contemplaba extasiado diariamente este espec­táculo; muy temprano por la mañana salía en reversa de su hogar en la tierra, empujando la bola de excremento que le servía de puerta y, después, con movimientos torpes, arrastraba su amplio corpachón para dirigirse lentamente hacia una pequeña elevación del terre­no, desde donde podía observar cómodamente todo el recorrido de Juan. Simplemente estaba maravillado, así que un día se levantó más temprano que de costumbre y recorrió todo el camino hasta llegar justo al lugar por donde Juan pasaría en su diario recorrido.

Pedro escarabajo estaba extenuado y respirando con dificultad, cuando vio con alegría que Juan como siempre, venía caminando a toda prisa. "Juan es verdaderamente confiable", pensó, mientras le llamaba pidiéndole detenerse un momento. Juan oruga, con un gesto de impaciencia se detuvo y le pidió que fuera breve, "pues el correo debe ser entregado sin dilación", dijo. Pedro escarabajo explicó:— Verás Juan, desde donde yo vivo, te veo todos los días caminar a toda velocidad para repartir el correo, y me pregunto: ¿cómo haces

16 Historia para contarse a: Quien desconfía de sus capacidades. Quien se topa con alguna dificultad. Quien no ha sabido valorar lo que tiene. Personas que no aprecian todas sus capa­cidades. Alguien que tuviera problemas por ser metódico. Personas que creen que no pueden lograr las cosas. Alguien que no quiere hacer algo hasta saber cómo. Alguien que piensa que no es capaz de hacer las cosas.

98 Historias para contarse... y crecer juntos

para coordinar tan precisa y maravillosamente todas esas patitas que tienes?, ¿cómo haces para que todas se muevan con tanta armonía y precisión?; verás, yo sólo tengo seis patas y moverlas es verdadera­mente un lío porque se traban y atoran de tal forma que camino con dificultad y lentitud; pero tú ...— ¡Al grano! —dijo Juan un poco impaciente por continuar su cami­no.— Si —dijo Pedro anhelante—/juan, lo que yo quiero pedirte es que me expliques cómo coordinas tus patitas para caminar como cami­nas, cómo haces para que se muevan tan rápido sin tropezar.Pedro, sorprendido por la pregunta le dijo que nunca lo había pen­sado; sin embargo..., empezó a examinar haciendo pequeños mo­vimientos con sus patitas y hablando consigo mismo... "Bueno yo muevo hacia delante la patitas 1, 3, 5, 7, 9, 11, 13, 15 y 17 del lado izquierdo mientras del lado derecho apoyo las patitas 2, 4, 6, 8 ,10 , 12, 14, 16 y 18; después detengo las patitas 3 y 7, pero las ..." y de pronto, las patitas se le enredaron, tropezó y rodó cuan largo es por una pequeña ladera.

Muy serio, Juan, se enderezó, sacudió la tierra de su cuerpo, tomó su saco de correos y sin decir una sola palabra salió de allí caminan­do a toda velocidad como siempre lo había hecho.

17) El A r q u e ó l o g o 17Si buscas la luz interior encontrarás los recursos

Historia:

En cierta ocasión, un arqueólogo caminaba por el desierto mientras era azotado por una tormenta de arena; miles de agujas herían su rostro y sus brazos, y la fuerza del viento le hacía caer de vez en vez...; el silbido del viento hería sus oídos y sus ojos entreabiertos y tapados por sus manos apenas podían distinguir algo entre los remolinos de arena de la tormenta.

De pronto, sin darse cuenta cómo, se encontró ante una gigan­tesca construcción de piedra; se trataba de una gran pirámide y al frente se encontraba la entrada.

Entró inmediatamente; cesó el silbido del viento y el azote de la arena que como miles de agujas herían su cuerpo, pero todo era os­

17 Historia para contarse a: Alguien que esté pasando por un m omento que cree que no tiene solución. Personas que les cuesta trabajo encontrar salidas fáciles y rápidas. Quien le sea muy difícil cumplir sus metas. Quien necesite recuperar sus recursos. Personas que sólo ven los obstáculos. Alguien que se esté dejando vencer. Quien necesite tocar fondo.

Segunda parte: La magia de los recursos 99

curidad. Tocando las paredes, se percató de que se encontraba en un túnel.

Este túnel oscuro le fue llevando hacia abajo, cada vez más y más profundo en el interior de la pirámide.

Siguió caminando poco a poco, lentamente, sin ver, sintiendo so­lamente las paredes con sus manos y su cuerpo, adentrándose cada vez más y más en lo profundo de la pirámide, hasta que de pronto vio allá a lo lejos, en lo más profundo, una luz brillante.

Poco a poco se fue acercando a ella y descubrió que la luz prove­nía de la gran cámara del tesoro, y que esta luz era producida por el inmenso tesoro allí guardado; sólo que en la puerta se encontraba un guardia, un gigante con un solo ojo, el izquierdo, ya que en el lugar del derecho tenía incrustado un diamante, lo que le impedía la visión de todo aquello que se encontrara del lado derecho.

Así, el arqueólogo se deslizó por el lado derecho sin ser visto por el gigante, entrando en la gran cámara del tesoro.

Una vez allí, tomó todo cuanto de valor quiso llevar y caminando poco a poco, emprendió el viaje de regreso a la superficie. Así, en algún momento percibió la frescura del aire y llegó a sus ojos la luz; entonces supo que siempre que quisiera, podría volver...

1 8 ) L a p r e g u n t a m á g i c a 18

Hay que creer para verHistoria:

Si te fueras a acostar hoy por la noche y mientras te duermes, te sucede repentinamente un milagro y el problema que tenías cambia exactamente en la forma en que tú deseas que cambie.

Así, te despiertas al día siguiente y examinas las cosas para darte cuenta de qué es lo que está pasando.

¿De qué te darías cuenta que te hiciera saber que las cosas están cambiando en la dirección correcta?

¿Qué estás haciendo contigo mismo, que pueda servir para este cambio?¿Qué es lo que están haciendo y diciendo otras personas con rela­

ción a ti acerca del problema que tenías?

18 Historia para contarse a: Personas que crean tener muchos problem as. Quien no encuentre la solución a sus problemas. Ouien no sabe aué hacer cuando tiene un Droblema.

100

19) E l s e n d e r o b l a n c o 19El que no se arriesga no vence el miedo

Historia:

Un hombre quiere viajar cien millas hacia el oeste; cuando ya lleva recorrido medio camino ve dos ríos frente a él. El primero es un río de fuego, que se halla hacia el sur. El segundo es un río de agua, y se encuentra hacia el norte. Ambos tienen cien zancadas de ancho, su profundidad no se puede determinar, y en cuanto a su longitud, los dos corren infinitamente hacia el norte y hacia el sur.

Hay un sendero blanco entre los dos ríos de fuego y agua. Apenas tiene diez o doce centímetros de ancho. Se extiende de la orilla este a la orilla oeste, y tiene también cien zancadas de largo. Las llamas del río de fuego chamuscan el sendero. El fuego y el agua se mezclan constantemente y de manera infinita.

Esta persona se ha aventurado ya hasta un amplio claro solitario. Allí no hay nadie. En la distancia se vislumbran bandidos y animales viciosos. Al ver a esa persona sola, se interfieren unos a otros en sus prisas por matarla. De repente, se encuentra frente a los dos grandes ríos. Con gran alarma piensa para sus adentros: estos ríos no tienen límite ni al norte ni al sur.

"El sendero blanco es extremadamente estrecho...", se dice a sí mismo el hombre. "Aunque las dos orillas están cercanas, ¿cómo puedo cruzar? Es indudable que hoy mismo me espera la muerte. Si doy la vuelta, tendré sobre mí a los bandidos y las bestias. Si trato de escapar hacia el norte, o hacia el sur, es casi seguro que me al­canzarán animales viciosos y apestosos insectos. Si intento cruzar el sendero hacia el oeste, probablemente me caeré en el río de agua o en el de fuego..."

Entonces le inundaron un terror y un miedo inexplicables. Pensó nuevamente para sus adentros: "Si doy la vuelta, con toda seguridad moriré. Si me quedo, con toda seguridad moriré. Si sigo adelante (por el sendero blanco) moriré. Si no hay alternativa que me permita escapar a la muerte, prefiero probar suerte con el sendero blanco y continuar ade­lante. Tengo este sendero frente a mí, y he de cruzarlo sin resbalar..."

Justo cuando acababa de tomar esta determinación, oyó una voz en la orilla oriental que decía, apremiante:

|L) Historia para contase a: Personas indecisas o inseguras. Personas que no creen en sí mis­mas. Una persona que va a tomar una decisión. Aquellos que hayan perdido la esperanza. Personas que no confían en sus decisiones. Quien no encuentra la solución a sus problemas. Personas cuya solución es tomar una decisión.

Segunda parte: La magia de los recursos 101

—Todo lo que tienes que hacer es decidirte a cruzar por este sendero. No hay peligro de muerte. Si te quedas aquí, es seguro que morirás. Luego le llama alguien desde la orilla occidental, diciéndole:— Eh, tú, ven ya, con una sola mente y con el pensamiento adecua­do. Te protegeré bien. No temas caer en los peligros del fuego y el agua.Al oír la persuasiva voz y la imploradora llamada procedentes de más allá, las incorpora en su cuerpo y su alma. Comienza a cruzar el sendero sin miedo, sin dudar, sin intención de volver atrás. Cuando ya ha avanzado dos pasos, los bandidos le llaman desde la orilla oriental, diciendo:— Eh, vuelve. El sendero es tan peligroso que no conseguirás cruzar­lo. Ciertamente morirás. Nosotros no queremos hacerte daño. Aunque la persona oye voces que le llaman, no vuelve la cabeza. Con una única idea en la mente, avanza con rapidez a lo largo del sendero. Está absorto en ir colocando los pies. En poco tiempo alcanza la orilla occidental. Todos los terrores quedan atrás para siempre, y se encuentra con el buen amigo. Se alegra enorme e incesantemente.

20) El r e y s a b i o 20Si quieres que cambien primero cambia tú

Historia:

Existió una vez en la lejana ciudad de Wirani un Rey que gobernaba a sus vasallos con tanto poder como sabiduría.

Y le temían por su poder y le amaban por su sabiduría.En el corazón de dicha ciudad existía un pozo de agua fresca y trans­

parente del que bebían todos los habitantes, inclusive el rey y sus súbdi­tos, ya que este era el único pozo que existía.

Cierta noche, cuando todo estaba en calma, entró una bruja en la ciudad y echó siete gotas de una sustancia misteriosa en el pozo, al tiempo que decía:— Desde este instante, todo el que beba agua de este pozo se vol­verá loco.

211 Historia para contarse a: Quien no se sienta aceptado. Quienes se sientan superiores a los demás. Una persona que sólo acepta su propia forma de pensar. Quien se encuentre renuente a aceptar lo que dicen los demás.

102 Historias para contarse... y crecer juntos

Al día siguiente, todos los habitantes del reino con excepción del rey y su gran chambelán, bebieron agua del pozo y quedaron completa­mente locos, tal como lo había predicho la bruja.

Y ese día, la gente en las calles y en la plaza del mercado, se cu­chicheaba: "El rey está loco. Nuestro rey y su gran chambelán han perdido la razón. No podemos permitir que un loco nos gobierne; debemos destronarlo".

Aquella misma noche, el rey dio órdenes para que llenaran una gran copa de oro con el agua del pozo.

Y cuando se la llevaron, pasó la copa a su gran chambelán para que bebiera.— Pero Majestad —dijo el chambelán— Esto es muy peligroso...— Bebe — ordenó el rey ...Al beber el agua, el chambelán comenzó a decir...:— Es verdad, nuestro rey se ha vuelto loco, debemos derrocarlo.En ese mismo momento el rey bebió ávidamente de la copa...

Hubo entonces una gran alegría en la distante ciudad de Wirani, porque el rey y el gran chambelán habían recobrado la razón.

Historias para contarse 2

2 1 ) L a e s e n c i a d e l h o m b r e 1

Aunque sea en el lugar menos esperado la respuesta siempre está ahí

Historia:

Hace mucho tiempo, un Dios bueno quiso poner a prueba los apren­dizajes de los hombres y reuniéndose con ellos les planteó la siguiente pregunta: ¿cuál es la esencia del hombre, de qué está hecha su alma?— Yo —dijo D ios— les ofreceré la mitad de la respuesta y ustedes, buscarán la otra mitad. El fuego es la mitad de su esencia; sí, el fuego transformador, constructor, fuerte, caliente, abrasador. Ahora —dijo Dios — , ustedes deberán encontrar la otra mitad de su esencia, algo que dentro del fuego pueda permanecer, sin ser quemado, algo que ahí dentro sea uno con el fuego. Por favor, dijo, busquen desde su corazón.Y los hombres ahí reunidos, unos humildes, otros poderosos, con todos sus defectos, cualidades, bondades, maldades, corduras y lo­curas, de inmediato pensaron qué podrían poner en el fuego que no fuera destruido.

Uno muy rico trajo lingotes de oro los colocó en el fuego y después de un tiempo el oro se fundió; el Dios bueno le comentó su error.

Otro trajo piedras y después de un tiempo de calentarse, éstas se abrieron haciéndose cenizas. Muchos fueron y vinieron, trayendo obje­tos fuertes y pesados, pero nadie encontraba la otra mitad de la esencia.

Mientras tanto, un hombre callado, observando a los otros, sim­plemente tomó en sus manos un poco de barro que por ahí encontró y mezclándolo con agua empezó a jugar con el mismo; cuando se dio cuenta, sin querer, había elaborado una pequeña vasija de barro. Los demás hombres se rieron de él cuando la llevó al fuego, y la colocó

1 Historia para contarse a: Personas que se sienten vacías. Personas que evadan ser frágiles. Personas que tienden a racionalizar. Q uien esté perdiendo el sentido de su vida. Personas que pierden de vista sus valores. Personas que se complican en encontrar una respuesta.

104 Historias para contarse... y crecer juntos

ahí. Después de un tiempo esa vasija frágil, en comunicación con el fuego, tomó una consistencia diferente, una textura diferente, aun­que siguió siendo frágil.

Todos los hombres ahí reunidos quedaron admirados de cómo la vasija permaneció en armonía con el fuego; hasta el hombre, calla­do y observador, se asombró del descubrimiento y en ese momento el Dios bueno dijo: "Esa es la otra mitad de la esencia del alma del hombre".

22) La c a s a d e l o s e s p e jo s 2Cosechas lo que siembras

Historia:

Se dice que hace tiempo, en un pequeño y lejano pueblo, había una casa abandonada.

Cierto día, un perrito buscando refugio del sol, logró meterse por un agujero de una de las puertas.

El perrito subió lentamente las viejas escaleras de madera. Al termi­nar de subir se topó con una puerta semi-abierta y se metió en el cuarto.

Para su sorpresa, se dio cuenta que dentro de ese cuarto había mil perritos más observándolo tan fijamente como él los observaba a ellos.

El perrito se sintió amenazado, ya que lo estaban viendo de una manera agresiva. Posteriormente empezó a gruñir; obviamente vio cómo los mil perritos le gruñían a él.

Comenzó a ladrarles ferozmente y los otros mil perritos le ladra­ron también.

Cuando este perrito salió del cuarto pensó: "¡Qué lugar tan horri­ble es éste! Nunca más volveré a entrar aquí!"

Tiempo después, otro perrito callejero entró al mismo sitio y se encontró entrando al mismo cuarto. Pero a diferencia del primero, este perrito al ver a los otros mil comenzó a mover la cola y a levan­tar sus orejas poco a poco.

Los mil perritos hicieron lo mismo. Posteriormente sonrió y le ladró alegremente a uno de ellos. El perrito se quedó sorprendido al ver que los mil perritos del cuarto también le sonreían y ladraban alegremente con él.

Cuando el perrito iba saliendo del cuarto, mientras bajaba por la escalera se quedó pensando para si mismo: "¡Qué lugar tan agrada­ble! Voy a venir más seguido a visitarlo".

• Historia para contarse a: Quien atribuya su infelicidad a los demás. Quien se queja de todo lo que le pasa. Quien siempre está de mal humor. Quien cree que las cosas le pasan. Personas que son groseras.

Segunda parte: La magia de los recursos 105

Cuando finalmente salió de la casa volteó a mirar aquél lugar donde había sido recibido tan alegremente...

...en el frente de la casa se encontraba un viejo letrero desvencija­do que decía: "La casa de los mil espejos".

2 3 ) L a s e ñ a l d e h u m o 3El punto más oscuro de la noche

es justo un momento antes del amanecerHistoria:

Después de navegar a través de muchos mares y a pesar de su expe­riencia para navegar, un día un marino naufragó y se convirtió en el único sobreviviente del naufragio.

Llegó a la playa de una isla que además estaba deshabitada. Pidió al cielo ser rescatado y cada día esperaba mirando el horizonte en busca de ayuda, pero ésta no parecía llegar.

Cansado de esperar ante las inclemencias del tiempo, pensó en hacer una cabaña de palma para protegerse del sol y la lluvia.

Seguía pidiendo al cielo ser rescatado y conforme pasaban los días lo deseaba más fervientemente; deseaba ver a otros seres huma­nos, regresar a su mundo y a sus acostumbrados viajes.

Un día salió a buscar comida por la isla, y al regresar se encontró con que su cabaña estaba envuelta en llamas, el humo había ascendi­do hasta el cielo y sólo habían quedado cenizas.

Era lo peor que había ocurrido, lo había perdido todo.La tristeza y la rabia se apoderaron de él; miró al cielo y hacia todas

partes de la isla gritando su desesperación, su frustración y su enojo.¿Por qué?, gritaba al cielo... si ya era lo único que tenía. ¿Por qué

a mí? ¿Por qué tanta injusticia? ¿Por qué yo? ¿Por qué? ¿Por qué? Cansado física y emocionalmente se quedó dormido a la intemperie muy cerca de la playa.

Temprano al día siguiente, lo despertó el sonido de un barco que se acercaba a la isla... ¡habían venido a rescatarlo!— ¿Cómo supieron que estaba aquí? —preguntó emocionado el hombre.

3 Historia para contarse a: Quien se encuentre desesperado. Quien ha perdido la esperanza. Per­sonas que se quejan de todo. Quien sólo ve lo negativo de las cosas. Personas que creen ahogarse en un problema. Alguien que considere que tiene muchos problemas. Quien toma los problemas como si fuera el fin del mundo.

106 Historias para contarse... y crecer juntos

— Ayer en el ocaso, vimos tu señal de humo y de inmediato nos di­rigimos hacia acá, pensando que alguien necesitaba ayuda y te en­contramos a ti...

24) La m a e s t r a 4Conoce la esencia de las personas

Historia:

Hace muchos años, al inicio del año escolar dentro de un salón de clases se encontraba una maestra de primaria de nombre María Es- ther, al frente de sus alumnos de quinto grado.

En la fila de adelante se encontraba hundido en su asiento un niño llamado Raúl Soto, a quien María Esther conocía desde el año anterior, y había observado que era un niño que no jugaba bien con los otros niños, que sus ropas estaban desaliñadas y constan­temente necesitaba un baño. Con el paso del tiempo, la relación de la maestra con Raúl se volvió desagradable. Llegó al punto que sentía gusto al tachar con rojo sus tareas y al ponerle notas que decían: "M al".

Un día, en la dirección le pidieron a la maestra María Esther revi­sar los expedientes anteriores de cada niño de su grupo y ella puso el de Raúl hasta el final; sin embargo, cuando revisó su archivo, se llevó una gran sorpresa.

La maestra de primer grado escribió: "Raúl es un niño brillan­te con una sonrisa espontánea. Hace sus tareas limpiamente y tiene buenos modales; es un deleite tenerlo cerca".

Su maestra de segundo grado escribió: "Raúl es un excelente alumno, apreciado por sus compañeros, pero tiene problemas debi­do a que su madre tiene una enfermedad incurable y su vida en casa debe ser una constante lucha".

Su maestra de tercer grado escribió: "La muerte de su madre ha sido dura para él. El trata de hacer su máximo esfuerzo pero su pa­dre no muestra mucho interés y su vida en casa le afectará pronto si no se toman algunas acciones".

Su maestra de cuarto escribió: "Raúl es descuidado y no muestra mucho interés en la escuela. No tiene muchos amigos y en ocasiones se duerme en clase". En este momento la maestra María Esther se dio cuenta del problema y se sintió apenada consigo misma.

4 Historia para contarse a: Quien tiene a su cargo a niños pequeños. Alguien que descalifica a los demás. Quien juzga a los demás sin conocerlos. Quien no considera las repercusiones que tienen sus actos.

Segunda parte: La magia de los recursos 107

Al llegar la Navidad, todos los alumnos le llevaron sus regalos envueltos, en papeles brillantes y preciosos listones, excepto Raúl; su regalo estaba torpemente envuelto en el pesado papel café que tomó de una bolsa de pan.

Algunos niños comenzaron a reírse cuando ella encontró dentro de ese papel una pulsera a la que le faltaban algunas piedras y la cuarta parte de un frasco de perfume. Pero ella minimizó las risas de los niños cuando exclamó... ¡Qué pulsera tan bonita!, poniéndosela y rociando un poco de perfume en su muñeca.

Raúl se quedó ese día después de clases sólo para decir: “maestra, hoy usted olió como olía mi mamá".

Después de que los niños se fueron, ella lloró por largo rato. Desde ese día María Esther renuncio a enseñar sólo lectura, escritura y aritmética; en su lugar, comenzó a enseñar valores, sentimientos y principios a los niños.

Le tomó especial atención a Raúl. A medida que trabajaba con él, su mente parecía volver a la vida; mientras más lo motivaba, más rá­pido respondía. Al final del año Raúl se había convertido en uno de los niños más listos del grupo y se volvió uno de sus consentidos.

Un año después, ella encontró una nota de Raúl debajo de la puerta del salón, diciéndole que ella era la mejor maestra que había tenido en su vida. Pasaron seis años antes de que recibiera otra nota de Raúl; él entonces le escribió que ya había terminado la Preparato­ria, había obtenido el tercer lugar en su clase, y que ella todavía era la mejor maestra que había tenido en su vida.

Cuatro años después, recibió otra carta, diciéndole que no im­portando que en ocasiones las cosas hubieran estado duras, él había permanecido en la escuela y pronto se graduaría de la Universidad con los máximos honores, y aseguró a María Esther que ella aún era la mejor maestra que él había tenido en toda su vida.

Luego pasaron otros cuatro años, y llegó otra carta, esta vez le explicó que después de haber recibido su título universitario, decidió ir un poco más allá. Y le volvió a reiterar que ella aún era la mejor maestra que ha­bía tenido en toda su vida. Sólo que ahora, su nombre era mas largo y la carta estaba firmada por el Dr. en Ciencias Raúl Soto Martínez.

El tiempo siguió su marcha y en una carta posterior Raúl le decía que había conocido a una chica y que se iba a casar. Explicó que su pa­dre había muerto hacía dos años y le preguntaba si accedería a sentarse en el lugar que normalmente está reservado para la mamá del novio.

Por supuesto que accedió. Para el día de la boda ella usó aquella pulsera con varias piedras faltantes y se aseguró de usar el mismo perfume con que Raúl recordó a su mamá en aquella Navidad.

108 Historias para contarse... y crecer juntos

Ellos se abrazaron y el Dr. Soto susurró al oído de la maestra Ma­ría Esther:— Gracias por creer en mí. Muchas gracias por hacerme sentir im­portante y por enseñarme que Yo podía hacer la diferencia.María Esther, con lágrimas en sus ojos, le susurró de vuelta dicién- dole:— Raúl, estás equivocado, fuiste tú el que me enseño que Yo podía hacer la diferencia. No sabía cómo enseñar, hasta que te conocí.

25) Lo QUE PUEDE HACER EL MIEDO5Venciendo el miedo a lo desconocido puedes encontrar cosas maravillosas

Historia:

En una tierra en guerra, había un rey que causaba espanto; siempre que hacía prisioneros, no los mataba, los llevaba a una sala donde había un grupo de arqueros de un lado y una inmensa puerta de hierro del otro, so­bre la cual, se veían grabadas figuras de cadáveres cubiertas por sangre.

En esta sala, él les hacía formar un círculo y les decía:

— Al venir a la guerra, ustedes pueden seguir eligiendo morir fle­chados por mis arqueros o bien, en este mismo momento pasar por aquella puerta, sólo que después de haber pasado será atrancada y nadie podrá regresar por ella.Todos preferían ser muertos por los arqueros...

Al terminar la guerra, un soldado que por mucho tiempo sirvió al rey, se dirigió a él y le dijo:— Señor, ¿puedo hacerle una pregunta?— Dime soldado.— ¿Qué ha habido atrás de la aterradora puerta?— ¡Ve y mira tú mismo!El soldado entonces abrió temerosamente la puerta y al hacerlo...

Entraron rayos de sol que iluminaron el lugar y aclararon el am­biente... Cuando pudo mirar finalmente, descubrió, sorprendido, que la puerta se abría sobre un camino que conducía... a la libertad.

El soldado, admirado, miró a su rey, quien le dijo:— Yo les di siempre la opción, pero prefirieron morir que arries­

garse a descubrir lo que había detrás de la puerta.

5 Historia para contarse a: Personas temerosas de la vida. Personas que se niegan a nuevas alternativas. Quien no se arriesga a probar algo diferente. Personas que no se arriesgan a co­nocer cosas nuevas. Personas que por m iedo dejan de hacer muchas cosas.

109

26) La n a t u r a l e z a d e l a l a c r á n 6Si miras bien sabrás cómo hacer el bien

Historia:

Un maestro oriental que vio cómo un alacrán se estaba ahogando, decidió sacarlo del agua, pero cuando lo hizo, el alacrán lo picó.

Por la reacción al dolor, el maestro lo soltó, y el animal cayó al agua y de nuevo estaba ahogándose. El maestro intentó sacarlo otra vez, y otra vez el alacrán lo picó.

Alguien que había observado todo, se acercó al maestro y le dijo:— Perdone, ¡pero usted es terco! ¿No entiende que cada vez que in­tente sacarlo del agua lo picará?El maestro respondió:— La naturaleza del alacrán es picar, y eso no va a cambiar la mía, que es ayudar.Y entonces, ayudándose de una hoja sacó al alacrán del agua y le salvó la vida.

27) M i r a r a s u s o j o s 7Los ojos son el espejo del alma

Historia:

El comandante en jefe de las fuerzas de ocupación le dijo al alcalde de la aldea:— Tenemos la absoluta seguridad de que ocultan ustedes a un ene­migo en la aldea. De modo que, si no nos lo entregan, vamos a hacer­les la vida imposible a usted y a toda su gente, por todos los medios a nuestro alcance.En realidad, la aldea ocultaba a un hombre que parecía ser bueno e inocente y a quien todos querían. Pero ¿qué podía hacer el al­calde, ahora que se veía amenazado el bienestar de toda la aldea? Días enteros de discusiones en el Consejo no llevaron a ninguna solución. De modo que, en última instancia, el alcalde planteó el asunto al cura del pueblo.

6 Historia para contarse a: Quien no respeta lo que es. Personas que se dan por vencidas fá­cilmente. Quien deja que las cosas las determinen los demás. Quien ayuda a los demás para obtener una recompensa. Personas que sólo ayudan si las otras personas lo solicitan. Quien esté decepcionado de ver los resultados de su esfuerzo.

7 Historia para contarse a: Quien tenga que tomar decisiones respeto a otras personas. Quien no sabe cómo solucionar una situación interpersonal. Alguien que tiene a su cargo a otras per­sonas. Alguien de quien dependa la vida de otros. Quien es muy rígido respecto a las reglas. Parejas que se están separando.

n o Historias para contarse... y crecer juntos

El cura y el alcalde se pasaron toda una noche buscando en la ley y, al fin, apareció la solución. Había un texto en las escrituras que decía: "Es me­jor que muera uno solo por el pueblo y no que perezca toda la nación".

De forma que el alcalde decidió entregar al inocente a las fuerzas de ocupación, si bien antes le pidió que le perdonara. El hombre le dijo que no había nada que perdonar, que él no deseaba poner a la aldea en peligro.

Fue cruelmente torturado hasta que, por fin, fue ejecutado. Veinte años después pasó un profeta por la aldea, fue directa­

mente al alcalde y le dijo:— ¿Qué hiciste? Aquel hombre estaba destinado a ser el salvador de este país. ¿Y tú le entregaste para ser torturado y muerto?— ¿Y qué podía hacer yo? —alegó el alcalde — . El cura y yo estuvi­mos mirando la ley y actuamos en consecuencia.— Lo que podían haber hecho — dijo el profeta— era mirar a sus ojos.

28) Los EXPERTOS8

Tan valiosa la ciencia como la experienciaHistoria:

En cierta ocasión un hombre llegó al cielo y cuando lo recibió San Pedro, le dijo:

— ¿Qué haces aquí? ¡Aún no es tu tiempo! Deberías estar todavía en el mundo de los vivos.— Quizá estoy aquí por error, pero todos allá abajo dijeron que yo estaba muerto y no pude demostrar lo contrario.Un día, cuando me consideraron muerto, me llevaron mis familiares y amigos a enterrar. Yo me di cuenta cuando estaban por bajar el ataúd en la tumba y comencé a golpear la tapa del féretro.

Abrieron el féretro y me enderece contento de que hubieran escucha­do. Les pregunté qué estaban haciendo... "¡Estoy vivo, no he muerto!"

Todos guardaron silencio por un momento, tenían expresiones de asombro y de incomodidad.

Después de un tiempo, uno de mis amigos se acercó y me dijo:— Amigo mío, los médicos y los sacerdotes han certificado que estás muerto... ¿Cómo van a equivocarse si son expertos?

8 Historia para contarse a: Quien no escucha. Alguien que duda al tomar decisiones. Personas que creen tener siempre la razón. Personas que juzgan y castigan sin verificar. Personas que toman al pie de la letra la opinión de un experto. Alguien a quien le hayan diagnosticado una enfermedad incurable.

Segunda parte: La magia de los recursos 111

Después de eso volvieron a atornillar la tapa del féretro y así es como he llegado aquí.

29) La m e d a l l a 9

No tapas un hoyo abriendo otroHistoria:

Había una madre que no conseguía que su hijo pequeño dejara de jugar y regresara a casa antes del anochecer.

De modo que, para conseguir su objetivo, optó por asustarlo; le dijo que en el camino de regreso a su casa aparecían espíritus que salían tan pronto como se ocultaba el sol.

Desde aquel momento ya no tuvo problema para hacer que el niño regresara a casa temprano.

Varios años después, cuando creció, el muchacho tenía tanto mie­do a la oscuridad y a los espíritus, que no había modo de hacerlo salir de casa por la noche.

Entonces su madre pensó en solucionar el problema, le dio una medalla y le convenció de que, mientras la llevara consigo, los espí­ritus no podrían hacerle ningún mal en absoluto.

Ahora el muchacho ya no tiene miedo de adentrarse en la oscuridad, siempre y cuando lleve consigo fuertemente apretada su medalla.

3 0 ) D i e n t e s d e l e ó n 10

Utiliza lo que tiene fuerza propiaHistoria:

Un hombre que se sentía muy orgulloso del césped de su jardín se encontró un buen día con que en éste crecían una gran cantidad de dientes de león.

Y aunque trató por todos los medios de librarse de ellos, no pudo impedir que se convirtieran en una auténtica plaga.

Al fin escribió al ministerio de Agricultura, refiriendo todos los inten­tos que había hecho, y concluía la carta preguntando: ¿Qué puedo hacer?

9 Historia para contarse a: Quien les m iente a sus hijos y no se da cuenta del daño que les causa. Los padres para que eduquen con verdades y con ejemplos. Quien no se da cuenta que sus actos tienen consecuencias. Q uien se sugestione fácilmente con lo que le dicen. Quien chantajea a sus hijos para que obedezcan. Q uien no se da cuenta de las manipulaciones. Quien no enfrente sus miedos.

10 Historia para contarsé a: Personas intolerantes. Alguien que reniegue de la vida. Personas que no saben vivir con alguien. Alguien que sienta que todo está en su contra. Personas que no saben apreciar lo que tienen. Personas que enfrentan cam bios que no pueden controlar.

112 Historias para contarse... y crecer juntos

Al poco tiempo llegó la respuesta: "Le sugerimos que aprenda a amarlos..."

Yo compartí esta experiencia, porque también tenía un césped del que estaba muy orgulloso, y también sufrí una plaga de dientes de león que traté de combatir con todos los medios a mi alcance. De modo que el aprender a amarlos no fue nada fácil.

Comencé por hablarles todos los días cordial y amistosamente. Pero ellos sólo respondían con su hosco silencio; aún les dolía la batalla que había librado contra ellos. Probablemente recelaban de mis motivos.

Pero no tuve que aguardar mucho tiempo a que volvieran a son­reír y a recuperar su sosiego.

Incluso ya respondían a lo que yo les decía.Pronto fuimos amigos. Por supuesto que mi césped quedó arrui­

nado, pero ¡qué delicioso se hizo mi jardín...!

31) La e s t r a t e g i a d e l t r i u n f o 11

Los resultados dependen de la forma de hacer las cosasHistoria:

Un gran general japonés decidió que respondería al ataque de sus enemigos, a pesar de que sólo contaba con un grupo pequeño de sol­dados. Por cada diez hombres del país en conflicto, contaba sólo con un soldado. Él estaba seguro de ganar la batalla, pero sus soldados tenían muchas dudas y temor al respecto.

Cuando marchaban hacia el sitio de conflicto, se detuvieron en un santuario, donde quiso reflexionar acerca de la estrategia para vencer a sus enemigos, además de hacer oración.

Después de orar, el general salió, convencido de haber encontra­do la estrategia que le daría la victoria. Llamó a los soldados y les dijo:

— Ahora voy a echar una moneda al aire. Si sale sol, es nuestro des­tino que venceremos, si sale águila seremos derrotados. El destino nos revelará su rostro.Lanzó la moneda y salió sol. Los soldados se llenaron de tal ansia de luchar y de tanta energía que no hubo duda ni encontraron ninguna dificultad para vencer.

Al día siguiente, un ayudante le dijo al general:

11 Historia para contarse a: Personas que no creen en sus capacidades. Quien crea que no pue­de lograr sus metas. Personas que tienen creencias limitantes. Personas que no tengan fe en sí mismos. Q uien esté resignado a su destino. Quien tenga poca motivación.

Segunda parte: La magia de los recursos 113

— Todo estuvo excelente, es determinante que nadie puede cam­biar el rostro del destino.— Exacto, comento el general —mientras le mostraba una moneda falsa que tenía sol por ambos lados.

3 2 ) E l z o r r o m u t i l a d o 12

A Dios rezando y con el mazo dandoHistoria:

Un hombre que paseaba por el bosque vio un zorro que había perdido sus patas, por lo que el hombre se preguntaba cómo podría sobrevivir.

Entonces vio llegar a un tigre que llevaba una presa en su boca. El tigre ya se había hartado y dejó el resto de la carne para el zorro.

Al día siguiente Dios volvió a alimentar al zorro por medio del mismo tigre. El hombre comenzó a maravillarse de la inmensa bon­dad de Dios y se dijo a sí mismo: "Voy también yo a quedarme en un rincón, confiando plenamente en el Señor, y éste me dará cuanto necesito".

Así lo hizo durante muchos días; pero no sucedía nada y el pobre hombre estaba casi a las puertas de la muerte cuando oyó una voz que le decía:— ¡Oh tú, que te hallas en la senda del error, abre tus ojos a la verdad! Sigue el ejemplo del tigre y deja ya de imitar al pobre zorro mutilado.

3 3 ) E l m o n j e y l a m u j e r 13

No te tortures después de la torturaHistoria:

De camino hacia su monasterio, dos monjes budistas se encon­traron con una bellísim a mujer a la orilla de un río. Al igual que ellos, quería cruzar el río, pero éste bajaba demasiado crecido. De modo que uno de los monjes se la echó a la espalda y la pasó a la otra orilla.

El monje más joven estaba absolutamente escandalizado y por espacio de dos horas estuvo censurando su negligencia en la ob­

12 Historia para contarse a: Quien se sienta a esperar la solución de los problemas. Personas que no están usando sus capacidades. Personas dependientes emocionalmente. Quien se deja abatir o rinde fácilmente. Personas que han perdido la esperanza. Quien cree que es un inútil. Alguien que no pide ayuda.

13 Historia para contarse a: Q uien se negara a dar ayuda por el qué dirán. Q uien se juzga una y otra vez por lo mismo. Q uien sé aferra demasiado al pasado. Quien deje de disfrutar su presente. Personas con prejuicios.

114 Historias para contarse... y crecer juntos

servancia de la Santa Regla. ¿Habría olvidado que era un monje? ¿Cómo se había atrevido a tocar a una mujer y a transportarla al otro lado del río? ¿Qué diría la gente? ¿No había desacreditado la Santa Religión...?

El acusado escuchó pacientemente el interminable sermón. Y al final estalló:— Hermano, ¿eres tú quien la lleva ahora?; yo he dejado a aquella mujer en el río.

3 4 ) E l p e s c a d o r s a t i s f e c h o 14

Des cubre tu propia manera de ser felizHistoria:

El rico industrial del Norte se horrorizó cuando vio a un pescador del Sur tranquilamente recostado contra su barca y fumando una pipa.— ¿Por qué no has salido a pescar? —le preguntó el industrial.— Porque ya he pescado bastante por hoy — respondió el pescador.— ¿Y por qué no pescas más de lo que necesitas? —insistió el indus­trial.— ¿Y qué iba a hacer con ello? —preguntó a su vez el pescador.— Ganarías más dinero —fue la respuesta — . De ese modo podrías poner un motor a tu barca. Entonces podrías ir a aguas más profun­das y pescar más peces. Entonces ganarías lo suficiente para com­prarte unas redes de nylon, con las que obtendrías más peces y más dinero. Pronto ganarías para tener dos barcas... y hasta una verdade­ra flota. Entonces serías rico, como yo.— ¿Y qué haría entonces? —preguntó de nuevo el pescador.— Podrías sentarte y disfrutar de la vida —respondió el industrial.— ¿Y qué crees que estoy haciendo en este preciso momento? —res­pondió el satisfecho pescador.

11 Historia para contarse a: Personas obsesionadas con el trabajo. Quien no se dé cuenta de todo lo que tiene. Personas que no disfrutan lo que tienen plenamente. Quien crea que el tener más cosas ma­teriales le va a dar felicidad. Personas que no se dan cuenta que existen tantas cosas para ser feliz.

115

3 5 ) U n d i a m a n t e 15

El mundo será mejor si las personas encuentran la riqueza del aprendizaje

Historia:

El extranjero había llegado a las afueras de la aldea y acampó bajo un árbol para pasar la noche.

De pronto llegó corriendo hasta él un habitante de la aldea y le dijo:

— ¡La piedra! ¡La piedra! ¡Dame la piedra preciosa!— ¿Qué piedra? —preguntó el extranjero.— La otra noche se me apareció en sueños el hombre sabio —dijo el aldeano— y me aseguró que si venía al anochecer a las afueras de la aldea, encontraría a un extranjero que me daría una piedra preciosa que me haría rico para siempre.El extranjero rebuscó en su bolsa y extrajo una piedra.— Probablemente se refería a ésta —dijo mientras entregaba la pie­dra al aldeano — . La encontré en un sendero del bosque hace unos días. Por supuesto que puedes quedarte con ella.El hombre se quedó mirando la piedra con asombro. ¡Era un dia­mante! Tal vez el mayor diamante del mundo, pues era tan grande como la mano de un hombre.

Tomó el diamante y se marchó. Pasó la noche dando vueltas en la cama, totalmente incapaz de dormir. Al día siguiente, al amanecer, fue a despertar al extranjero y le dijo:— Dame por favor la riqueza que te permite desprenderte con tanta facilidad de este diamante.

3 6 ) E l p r í n c i p e y e l m a g o 16

Ve más allá de la verdad o la mentiraHistoria:

Érase una vez un joven príncipe que creía en todo, salvo en tres co­sas: no creía en las princesas, no creía en las islas y no creía en Dios.

15 H istoria para contarse a: Quien piensa que el valor de las personas se m ide con lo m a­terial. Q uien basa su felicidad en lo que hay fuera de él. Q uien no se da cuenta que la vida es m aravillosa. Q uien ha perdido la capacidad de asombro. Quien no valora lo que tiene. Personas am biciosas.

16 Historia para contarse a: Quien haya intentado suicidarse. Alguien triste, confundido o de­primido. Adolescentes en busca de identidad. Q uien cree sólo en lo que ella o él dice. Persona que no se sienta capaz de realizar algo. Alguien que piense que ya no tiene sentido la vida.

116 Historias para contarse... y crecer juntos

Su padre, el rey, le había dicho que esas cosas no existían.Como no había ni princesas, ni islas en los dominios de su padre,

y ningún signo de Dios, el príncipe le creía a su padre.Pero un día el príncipe se escapó de su palacio y llegó a otras

tierras. Ahí, ante su asombro, vio islas desde la costa, y en estas islas vio a unas extrañas criaturas que no se atrevió a nombrar. Mientras buscaba un bote, se le aproximó un hombre, al que le preguntó.— ¿Esas son islas verdaderas?— Por supuesto que son islas verdaderas —dijo el hombre.— ¿Y esas extrañas criaturas?— Son princesas auténticas y genuinas.— Entonces, ¡Dios también debe existir! —exclamó el príncipe.— Yo soy Dios —respondió el hombre haciendo una reverencia.El joven príncipe regresó a casa lo más rápido que pudo.— Veo que has regresado —dijo su padre, el rey.— He visto islas, he visto princesas y he visto a Dios —dijo el prínci­pe en tono de reproche.El rey permaneció inmutable.— No existen islas verdaderas, ni princesas verdaderas, ni Dios ver­dadero.— ¡Yo los vi!— Dime cómo estaba vestido Dios.— Dios tenía un vestón.— ¿Tenía las mangas enrolladas de su vestón?El príncipe recordó que efectivamente el hombre llevaba las mangas de su vestón enrolladas. El rey sonrió.— Ese es el uniforme de un mago.... Has sido engañado.Ante esto, el príncipe regresó a esas tierras, y fue a la misma playa, donde nuevamente se encontró con el hombre de la túnica.— Mi padre, el rey, me ha dicho quién eres tú — dijo el príncipe indig­nado—. La última vez me engañaste, pero no lo harás nuevamente. Ahora sé que ésas no son islas verdaderas, ni princesas verdaderas, porque tú eres un mago.El hombre de la playa sonrió.— Eres tú quien está engañado, muchacho. En el reino de tu padre hay muchas islas y muchas princesas. Pero tú estás bajo el hechizo de tu padre y no puedes verlas.

Segunda parte: La magia de los recursos 117

Pensativamente, el joven regresó a casa. Al ver a su padre lo miró a los ojos.— ¿Padre, es cierto que tú no eres un verdadero rey, sino un mago?— Sí, hijo mío, soy sólo un mago.— Entonces el hombre de la playa es D ios...— El hombre de la playa es otro mago.— Debo saber la verdad, la verdad más allá de la magia.— No hay verdad más allá de la magia, respondió el rey.Al príncipe lo invadió una gran tristeza y dijo:

— Entonces, me mataré.El rey, mediante la magia, hizo aparecer a la muerte. La muerte se de­tuvo en la puerta, llamando al príncipe. Este se estremeció... Recordó las bellas, pero irreales islas y las irreales, pero bellas princesas.— Muy bien padre —dijo— puedo aceptar que tú seas mi mago.En ese preciso instante, la muerte desapareció.— Ves, hijo mío —dijo el rey — , también tú ya comienzas a ser un mago.

3 7 ) D e q u é t a m a ñ o e s l a l u n a 17

Las cosas no son lo que parecenHistoria:

Cierta vez, en un reino lejano, la pequeña princesa pidió a su padre el rey un obsequio y el rey sin titubear, le dijo:

Pídeme cualquier cosa que quieras y yo te la daré.La pequeña princesa dijo al rey:

—Todas las noches al irme a la cama, veo por mi ventana asomarse a la luna... Padre, dame la luna...El rey inmediatamente llamó a los sabios del reino y les dio la enco­mienda de traer la luna, para la princesa.

Uno de ellos le dijo:— Imposible, rey mío, la luna está a una distancia de diez mil veces mil la extensión de tu reino, de tal manera que es imposible alcan­zarla.

17 Historia para contarle a: Quien añora lo que cree que no puede tener. Alguien desesperado por conseguir una meta! Personas que crean que su felicidad no está cerca. Personas que no reconozcan el cariño de los demás. Q uien tenga una meta y la vea muy grande o muy lejana. Personas derrotistas para decirles que los deseos sí se pueden cumplir.

118 Historias para contarse... y crecer juntos

Otro dijo:— Imposible, rey mío, la luna tiene el tamaño de diez mil veces mil la extensión de tu reino y no habría donde ponerla, imposible traerla. Otro más dijo:— Imposible rey mío, la luna alumbra diez mil veces mil más que todos los candelabros del reino, así que quedaríamos ciegos al ins­tante, imposible traerla.

Con esas respuestas, el rey dijo a la princesa que no podría traerle la luna. Al instante cayó enferma la princesa y la sabiduría de todos los sabios del reino fue incapaz de devolverle la salud.

Así, la princesa se fue consumiendo poco a poco y su única ale­gría consistía en observar cada noche desde su lecho, aparecer a la luna por su ventana.

El rey desesperado, ofreció grandes recompensas a quien trajera la luna y la salud para la pequeña princesa.

Por la recámara real desfilaron todos los sabios del reino y de los reinos vecinos, pero la respuesta era siempre la misma.

En poco tiempo, dejaron de venir los sabios y la recámara real fue quedando sola; sólo el fiel bufón, un hombre pequeño y contrahecho acompañaba siempre a la princesa que cada vez se acercaba más al momento de su muerte.

Una mañana, el bufón preguntó a la princesa:— Dime princesa, ¿qué tan lejos puede estar la luna?Y la princesa contestó:— No puede estar más lejos que el viejo roble que veo por mi venta­na, ya que todas las noches la veo que se enreda entre sus ramas...— Y dime —preguntó de nuevo el bufón— ¿que tamaño podrá tener la luna?Y la princesa le dijo:— No puede ser más grande que la uña de mi dedo meñique, ya que si lo pongo delante la tapo completamente.Y dime, preguntó por último el bufón:

— ¿Que pasaría si yo te trajera la luna y dejara al cielo sin ella?Y la princesa le contestó:

— Inmediatamente sería repuesta por otra, ya que desaparece de tiempo en tiempo y después vuelve a presentarse por mi ventana. Con ésta información, el bufón pidió al orfebre real que fabricara una pequeña luna de plata que colgó de una fina cadena y se la llevó

Segunda parte: La magia de los recursos 119

a la princesa, quien la recibió gozosa y en breve tiempo recuperó la salud y la alegría.

3 8 ) L a f ó r m u l a d e l a v i d a e t e r n a 18

Es muy distinto saberse el camino que andarloHistoria:

Un hombre, que había dedicado la mayor parte de su vida a la bús­queda de la fórmula de la vida eterna, escuchó decir que en cierto lugar lejano, había un hombre sabio que a ciencia cierta poseía el secreto. Alentado por esta información, el hombre dejó todo y partió en su busca.

Después de mucho viajar, finalmente llegó hasta el lugar donde se encontraba el sabio, a quien dijo:— Me han dicho que tú posees la formula de la vida eterna; ¿es cierto?

El sabio asintió con un movimiento de cabeza.El hombre preguntó de nuevo:

— ¿Estarías dispuesto a compartirla conmigo?—Sí —dijo el sabio — , pon mucha atención... En primer lugar, debe­rás eliminar totalmente de tu vocabulario toda palabra negativa... En segundo lugar, todas las noches al irte a dormir, deberás asegurarte que te levantarás vivo al día siguiente... En tercer lugar, deberás evi­tar a toda costa morirte durante el día... Y eso es todo.— Pero maestro, inquirió el hombre, ¿cómo hago eso...?— Espera —le detuvo el sabio — , tú me pediste la fórmula y yo te la he dado; la práctica te toca a ti...

3 9 ) R e c u e r d a l o i m p o r t a n t e 19

Si descuidas a las personas podrás perder una parte importante de tu vida

Historia:

Cuenta la leyenda que una mujer pobre con un niño en los brazos pasaba delante de una caverna, cuando escuchó una voz misteriosa que desde adentro la invitó a pasar y le dijo:

18 Historia para contarse a: Quien no tiene todo lo que desea. Quien depende de los demás para todo. Quien busca consejos sobre cómo vivir. Quien no hace nada por mejorar su exis­tencia. Quien espera a que los demás hagan su trabajo. Q uien espera que otro le diga lo que tiene que hacer.

19 Historia para contarse a: Alguien que da poco valor a lo que tiene. Alguien que lo absorbe el trabajo y descuida a su familia. Alguien que ha sacrificado el afecto y compañía de sus seres queridos.

120 Historias para contarse... y crecer juntos

— Esta es una oportunidad para ti y para tu criatura. Si entras estás autorizada a tomar toda la riqueza que puedas y en adelante no les faltará nada a ti y a tu hijo. Pero debes tener mucho cuidado de no caer en la misma situación que la mayoría de la gente, que cuando encuentran algo novedoso terminan olvidando siempre lo más im­portante. Entra y toma todo lo que desees, tienes ocho minutos pero, recuerda, lleva siempre contigo lo más importante, porque después que salgas, la puerta se cerrará para siempre. Aprovecha la oportu­nidad, recuerda lo principal..., elige bien lo que vas a llevar.La mujer entró en la caverna y encontró mucha riqueza. Fascinada por lo que miraban sus ojos y todo lo que había allí, puso al niño en el piso y empezó a juntar todo lo que podía en su delantal.

"Debo fijarme bien para elegir adecuadamente y no repetir lo que hace la mayoría de la gente..."

La voz misteriosa habló nuevamente:— Recuerda que tienes sólo ocho minutos.Agotados los ocho minutos, la mujer, apresurada, corrió hacia afuera de la caverna, la puerta se cerró, se puso a revisar lo que había elegido y pensó... "Creo que sí elegí bien, con esto podremos asegurar vivir cómodamente".

Volteó a tomar al niño en sus brazos y en ese instante se dio cuenta que la puerta estaba cerrada, y que había olvidado al niño adentro.

40) El á g u i l a y e l e l e f a n t e 20

La belleza de tu ser es única y diferenteHistoria:

Dos monjes viajaban juntos durante una peregrinación mientras compartían dudas y conocimientos.

El alumno pregunta:— ¿Cómo puedo saber que estoy haciendo lo que verdaderamente me corresponde? Estoy confundido porque a veces me desespero al darme cuenta que no sé todo lo que tú y quisiera ya saber todo lo que puedes enseñarme y caminar por este mismo camino con un alum­no, en lugar de darte a ti este trabajo. Yo quisiera hacer mi parte como un maestro y enseñar a alguien más... Otras veces quisiera permanecer siendo tu alumno porque tu sabiduría y tu paz me reconfortan; aun­que a veces me parecen inalcanzables.

•ü Historia para contarse a: Personas que no les guste su apariencia física. Quien no esté satisfe­cho con ser lo que es. Personas que se comparan con los demás. Personas que no se aceptan como son. Adolescentes que imitan modelos. Personas que no se quieren. Personas que se rechazan.

Segunda parte: La magia de los recursos 121

El maestro, reflexivo, le responde:— Es maravilloso el potencial del águila que se actualiza al surcar el cielo, lanzándose luego en picada, atrapando animalitos y constru­yendo nidos... Es maravilloso también el potencial del elefante que se actualiza en su tamaño, su fuerza y su aparente torpeza al caminar y moverse... Que maravilloso es que ningún águila quiera ser un ele­fante y ningún elefante quiera ser un águila. Ellos se "aceptan" a sí mismos. No, ni siquiera se aceptan a sí mismos, ya que eso signifi­caría un posible rechazo. Se asumen a sí mismos. No, ni siquiera es esto, ya que implicaría la posibilidad de ser otra cosa. Simplemente son... Son lo que son.

Historias para contarse 3

4 1 ) D a m i á n y P e d r o 1

La lealtad se gana con lealtadHistoria:

Un día mi abuelo me contó que supo de la historia de dos muchachos que demostraron ser amigos verdaderos porque fueron arriesgados y leales. Es una historia muy antigua, tan antigua como la lealtad y la amistad...

En una ocasión el gobernante de un imperio mandó ejecutar injus­tamente a Damián, un chicp responsable y amoroso que preocupado por el destino de su familia imploró que le dejara ir a despedirse y hacer algunas recomendaciones. El tirano desconfiando, pensó que no regresaría y le negó la autorización.

Pedro, compañero y amigo de Damián, al mirar la angustia refle­jada en el rostro del joven condenado no vaciló en entregarse como garantía del regreso de su amigo. Así Damián obtuvo el permiso para volver a su hogar en una ciudad lejana y arreglar sus asuntos pendientes antes de morir.

Aquél que había estado en peligro, ahora estaba libre, y Pedro que podía haber permanecido seguro, se encontraba a prueba y en peligro. Todo el mundo se preguntaba cuál sería el desenlace de esta "dudosa" situación...

Al acercarse el día señalado para la ejecución no había regresado Damián, y todos condenaban a Pedro que se había ofrecido como rehén. Pero él insistía en que no dudaba de la palabra de su amigo y por tanto no tenía nada que temer; estaba convencido de que regre­saría y si no regresaba, era seguro que ya estaría sin vida; en cuyo caso, estaba dispuesto a cumplir el castigo.

1 Historia para contarse a: Personas solitarias. Personas desconfiadas. Quien no esté valoran­do la amistad. Alguien que cree que la amistad no existe. Quien no crea que puede ampliar su m arco de creencias. Quien no se dé la oportunidad de confiar en alguien más. Q uien no tenga claro que sus acciones determinan la lealtad.

Segunda parte: La magia de los recursos 123

Había llegado el momento y comenzaron con los preparativos de la ejecución; Pedro, resignado y dispuesto a cumplir, miró hacia el horizonte y miró a su amigo acercándose apresuradamente para tomar el lugar que le correspondía. Al momento mismo de la hora fijada como límite por el gobernante, Damián demostró que había sido digno de confianza.

Todos estaban asombrados por el valor de los dos amigos. El gober­nante, contagiado del asombro de la gente, del sentimiento de herman­dad de los amigos y maravillado ante la lección de lealtad y valentía, decidió retirar la sentencia que había puesto en peligro sus vidas.

4 2 ) ¿ C ó m o l o h i z o ? 2

Qué harías si no tuvieras miedoHistoria:

En las Tierras Altas de Escocia, una tarde nublada y fría, Jessica y Ariel jugaban y patinaban sobre una laguna congelada. El hielo era cortante y grueso en algunas partes, y delgado y frágil en otras, pero los niños jugaban sin preocupación...

De pronto, el hielo se reventó y Jessica cayó al agua helada; Ariel, viendo que su hermana se ahogaba debajo del hielo, tomó una pie­dra y empezó a golpear con todas sus fuerzas hasta que logró que­brarlo y así salvarla.

Cuando llegó el equipo de salvamento y vieron lo que había suce­dido, se preguntaron desconcertados: ¿Cómo lo hizo? ¡El hielo está muy grueso en esa zona, es imposible que lo haya podido quebrar con esa piedra y sus manos tan pequeñas!

En ese instante apareció el anciano de la aldea, Manuel, hombre de pocas pero certeras palabras, un personaje que aparecía cuando se le necesitaba y muchas veces de manera inesperada. Al darse cuenta de la sorpresa del equipo de salvamento dijo:— Yo sé cómo lo hizo...— ¿Cóm o...? —le preguntaron impacientes.Él, acercándose encorvado y con sus inequívocos pasos lentos, con­testó:— No había cerca de ellos alguien que le dijera a Ariel que no podía hacerlo...

2 Historia para contarse a: Quien tuviera la creencia de que no puede hacer algo. Personas que se dan por vencidas antes de intentarlo. Quien crea que los cam inos se le han cerrado. Personas que dudan de sus capacidades. Q uien siempre diga que no puede. A quienes el miedo los detiene.

124

Rescata tu propósito en la vidaHistoria:

Una gitana le había dicho al pequeño pastor que encontraría un teso­ro, lejos de su pueblo. El chico estaba confundido por la noticia y en ese momento apareció un anciano que se sentó a su lado...— Soy el rey de Salem —dijo el viejo.— ¿Por qué un rey conversa con un pastor? —preguntó el muchacho admiradísimo.— Existen varias razones. Pero la más importante es... cumplir tu Le­yenda Personal.El muchacho no sabía lo que era la Leyenda Personal.— Es aquello que siempre deseaste hacer. Todas las personas, al comien­zo de su juventud, saben cuál es su Leyenda Personal. En ese momento de la vida todo es claro, todo es posible, y ellas no tienen miedo de soñar y desear todo aquello que les gustaría hacer en sus vidas. No obstante, a medida que el tiempo va pasando, una misteriosa fuerza trata de con­vencerlas de que es imposible realizar la Leyenda Personal.

El muchacho... quería saber lo que eran esas "fuerzas misteriosas..."— Son fuerzas que parecen malas, pero en verdad te están enseñando cómo realizar tu Leyenda Personal. Están preparando tu espíritu y tu vo­luntad, porque existe una gran verdad en este planeta; seas quien seas o hagas lo que hagas, cuando deseas con firmeza alguna cosa, es porque este deseo nació en el alma del Universo. Es tu misión en la Tierra.— ¿Aunque sólo sea viajar? ¿O casarse con la hija de un comerciante de tejidos?— O buscar un tesoro; el Alma del Mundo es alimentada por la felici­dad de las personas. O por la infelicidad, la envidia, los celos. Cum­plir su leyenda personal es la única obligación de los hombres. Todo es una sola cosa. Y cuando quieres alguna cosa, todo el Universo conspira para que realices tu deseo... ¿Por qué cuidas ovejas?— Porque me gusta viajar.

43) L e y e n d a p e r s o n a l 3

3 Historia para contarse a: Alguien que no se plantea objetivos y sólo vive por vivir. Alguien desesperado porque no ha logrado lo que quiere. Personas a punto de rendirse ante las di­ficultades. Alguien que no sepa cóm o tomar una decisión. Personas que no confían en sus sueños. Alguien pesimista, triste o deprimido. Alguien confundido con su futuro. Quien se haya rendido en la vida.

Segunda parte: La magia de los recursos 125

El hombre señaló a un vendedor de palomitas de maíz que, con su carrito rojo, estaba en un lado de la plaza.

— Aquel vendedor también deseó viajar, cuando era niño; pero pre­firió comprar un carrito para vender sus palomitas y así juntar dine­ro durante años. Cuando sea viejo, proyecta pasar un mes en África. Jamás entendió que siempre estuvo en condiciones de realizar sus sueños en el mismo momento de soñarlos, la gente siempre está en condiciones de realizar lo que sueña.— Debía haber elegido ser pastor —pensó en voz alta el muchacho.— Lo pensó — dijo el viejo —. Pero los vendedores de palomitas de maíz son más importantes que los pastores. Tienen una casa, mien­tras que los pastores duermen a la intemperie. Las personas pre­fieren casar a sus hijas con vendedores de palomitas antes que con pastores... En fin, que lo que las personas piensan sobre vendedores de palomitas y pastores pasa a ser más importante para ellos que la Leyenda Personal...— ¿Por qué hablas de todo esto conmigo?— Porque tú intentas vivir tu Leyenda Personal. Y estás a punto de desistir de ella.— ¿Y tú apareces siempre a estas horas?— No siempre de esta forma, pero jamás dejé de aparecer. A veces aparezco bajo la forma de una buena salida o de una buena idea. Otras veces, en un momento crucial, hago que todo se vuelva más fácil. Y cosas así. Pero la mayor parte de la gente no se da cuenta.El viejo le contó que la semana anterior había tenido que aparecer ante un buscador de oro y piedras preciosas, bajo la forma de una piedra. Él había dejado todo para partir en busca de esmeraldas. Du­rante cinco años trabajó en un río, y había partido 999,999 piedras en busca de una esmeralda. En ese momento pensó en desistir, y sólo le faltaba una piedra, solamente una piedra para descubrir su esme­ralda. Como él había sido un hombre que había apostado por su Le­yenda Personal, el viejo se transformó en una piedra, que rodó sobre su pie. El buscador de piedras preciosas, con la rabia y la frustración de los cinco años perdidos, arrojó la piedra lejos. Pero la arrojó con tanta fuerza que se golpeó contra otra y se rompió, mostrando la esmeralda más bella del mundo.— Las personas aprenden muy pronto su razón de vivir... Tal vez sea por eso que desisten tan pronto también... Si quieres saber sobre tu tesoro, tendrás que cederme la décima parte de tus ovejas.— ¿Y no sirve una décima parte del tesoro?...

126 Historias para contarse... y crecer juntos

—Si empiezas por prometer lo que aún no tienes, perderás tu volun­tad para conseguirlo... De cualquier manera, es bueno que aprendas que todo en la vida tiene un precio. Si estás dispuesto a jugártela por tu Leyenda Personal, mañana a esta misma hora me traes aquí una décima parte de tus ovejas y yo te diré cómo conseguir el tesoro escondido.El viejo devolvió el libro al muchacho... y desapareció por una de las esquinas de la plaza.

4 4 ) S e c r e t o d e l a f e l i c i d a d 4

La verdadera felicidad es disfrutar lo que tienes y lo que no tienes

Historia:

Un mercader envió a su hijo para aprender el secreto de la felicidad con el más sabio de todos los hombres.

El joven anduvo durante cuarenta días por el desierto, hasta lle­gar a un hermoso castillo, en lo alto de una montaña. Allí vivía el sabio que buscaba.

Sin embargo, en vez de encontrar a un hombre santo, entró en una sala y vio una actividad inmensa; mercaderes que entraban y salían, personas conversando en los rincones, una pequeña orquesta que tocaba melodías suaves y una mesa repleta de los más deliciosos manjares de aquella región del mundo.

El sabio conversaba con todos, y el joven tuvo que esperar dos horas hasta que le llegara el momento de ser atendido.

El sabio escuchó atentamente el motivo de su visita, pero le dijo que en aquel momento no tenía tiempo de explicarle el secreto de la felicidad. Le sugirió que diese un paseo por su palacio y volviese dos horas más tarde.

— Pero quiero pedirte un favor —completó el sabio, entregándole una cucharita de té en la que dejó caer dos gotas de aceite — . Mien­tras estés caminado, llévate esta cucharita cuidando de que el aceite no se derrame.El joven comenzó a subir y bajar las escalinatas del palacio, mante­niendo siempre los ojos fijos en la cuchara. Pasadas las dos horas, retornó a la presencia del sabio.

4 Historia para contarse a: Adolescentes. Alguien descuidado. Personas angustiadas. Quien no disfruta su vida. Personas tristes o deprimidas. Quien por hacer una cosa, descuida las demás. Q uien no sepa que la felicidad está en sus manos.

Segunda parte: La magia de los recursos 127

—Qué tal —preguntó el sabio — . ¿Viste los tapices de Persia que hay en mi comedor? ¿Viste el jardín que el Maestro de los Jardineros tardó diez años en crear? ¿Reparaste en los bellos pergaminos de mi biblioteca?El joven, avergonzado, confesó que no había visto nada. Su única preocupación había sido no derramar las gotas de aceite que el Sabio le había confiado.— Pues entonces vuelve y conoce las maravillas de mi mundo — dijo el Sabio — , No puedes confiar en un hombre si no conoces su casa.

Ya más tranquilo, el joven cogió nuevamente la cuchara y volvió a pasear por el palacio, esta vez mirando con atención todas las obras de arte que adornaban el techo y las paredes.

Vio los jardines, las montañas a su alrededor, adornaban la de­licadeza de las flores, el esmero con que cada obra de arte estaba colocada en su lugar.

De regreso a la presencia del sabio, le relató detalladamente todo lo que había visto.— Pero ¿dónde están las dos gotas de aceite que te confié? — pregun­tó el sabio. El joven miró la cuchara y se dio cuenta de que las había derramado.— Pues éste es el único consejo que tengo para darte — le dijo el más sabio de los sabios —: el secreto de la felicidad está en mirar todas las maravillas del mundo, pero nunca olvidarse de las dos gotas de aceite en la cuchara.

4 5 ) C a r r e r a d e s a p o s 5

Son mejores los actos que las palabrasHistoria:

En una carrera de sapos... el objetivo era llegar a lo alto de una gran torre. Había en el lugar una gran multitud. Mucha gente para vibrar y gritar por ellos. Comenzó la competencia, pero como la multitud no creía que pudieran alcanzar la cima de aquella torre, lo que se escuchaba era: "¡Que pena!, esos sapos no lo van a conseguir... no lo van a conseguir..."

Los sapos comenzaron a desistir. Pero había uno que persistía y con­tinuaba subiendo en busca de la cima. La multitud continuaba gritando:

5 Historia para contarse a: Personas que se dejan influenciar fácilmente. Alguien que no cree en su propia capacidad. Personas muy sensibles a las críticas. Quien necesita creer en sí mismo.

128 Historias para contarse... y crecer juntos

"¡Qué pena!, mira como se van resbalando, seguro que no lo van a conseguir..."

Los sapos estaban dándose por vencidos, salvo por aquel sapo que seguía tranquilo y ahora cada vez con más fuerza. La multitud seguía diciendo: "Mira, se están cayendo, no lo van a conseguir..."

Ya acercándose al final de la competencia, desistieron. Menos ese sapo que curiosamente, continuaba. Finalmente llegó a la cima con todo su esfuerzo. Todos estaban asombrados. El sapo más viejo fue a preguntar cómo había conseguido llegar a la cima... Fue así que descubrieron que el sapo ¡era sordo!

46) C a c h o r r i t o s e n v e n t a 6

El juicio te puede cegarHistoria:

El dueño de una tienda de mascotas estaba colocando un anuncio en la puerta que decía: "Cachorritos en venta". Esa clase de anuncios siempre atraen a los niños, y pronto un niño apareció en la tienda preguntando:— ¿Cual es el precio de los perritos?— Entre $30 y $50 — contestó el dueño.

El niñito metió la mano en su bolsillo y sacó unas monedas:— Sólo tengo $2.50. ¿Puedo verlos?El hombre sonrió y silbo. De la trastienda salió una perra corriendo seguida por cinco perritos. Uno de los perritos estaba quedándose considerablemente atrás. El niño inmediatamente señaló al perrito rezagado que cojeaba.

— ¿Que le pasa a ese perrito?, preguntó.

El hombre le explicó que cuando el perrito nació, el veterinario le dijo que tenía una cadera defectuosa y que cojearía por el resto de su vida. El niño se emociono mucho y exclamo:— ¡Ese es el perrito que yo quiero comprar!Y el hombre replicó:

6 Historia para contarse a: Alguien que piense que no es útil por tener alguna discapacidado enfermedad. Personas que miran con lástima a quienes consideran en desventaja. Personas que menosprecian a quien tiene alguna deficiencia. Gente intolerante con el comportamiento de los demás. A quien subestima el potencial de los seres humanos. Alguien que se sienta inca­paz de realizar algo. Personas que se sientan rechazadas. Persona con baja autoestima.

Segunda parte: La magia de los recursos 129

— No, tú no vas a comprar ese cachorro, si tú realmente lo quieres, yo te lo regalo.El niño se disgustó, y mirando directo a los ojos del hombre le dijo:— Yo no quiero que usted me lo regale. El vale tanto como los otros perritos y yo le pagaré el precio completo. Le voy a dar mis $2.50 aho­ra y 50 centavos cada día hasta que lo haya pagado completo.El hombre contestó:— Tú en verdad no querrás comprar ese perrito, hijo. Él nunca será capaz de correr, saltar y jugar como los otros perritos.El niño se agachó y se levantó la pierna de su pantalón para mostrar su pierna izquierda, cruelmente retorcida e inutilizada, soportada por un gran aparato de metal. Miró de nuevo al hombre y le dijo:— Bueno, yo no puedo correr muy bien tampoco, y el perrito necesi­tará a alguien que lo entienda.El hombre se mordió los labios, y sus ojos se llenaron de lágrim as- sonrió y dijo:-H ijo , sólo espero y rezo para que cada uno de estos cachorritos tengan un dueño como tú.

47) Los 87 a ñ o s d e R o s a 7

Nunca es tarde para comenzarHistoria:

El primer día en la universidad nuestro profesor se presentó y nos pidió que conversáramos con alguien a quien todavía no conociéra­mos. Me puse de pie y miré a mí alrededor, cuando una mano me tocó suavemente el hombro. Me di la vuelta y me encontré con una viejita arrugada cuya sonrisa le alumbraba todo su ser.— Hola, buen mozo. Me llamo Rosa. Tengo ochenta y siete años. ¿Te puedo dar un abrazo?Me reí y le contesté con entusiasmo:— ¡Claro que puede!Ella me dio un abrazo muy fuerte...— ¿Por qué está usted en la universidad a una edad tan temprana, tan inocente? — le pregunté.

7 Historia para contarse a: Personas que prefieren perder su tiempo. Personas que dicen que ya no es tiempo. Jóvenes que hayan abandonado sus estudios. Alguien que se sienta decep­cionado de la vida. Personas que piensan que ya es demasiado tarde. Aquellas personas que dicen: yo ya estoy viejo para eso.

130 Historias para contarse... y crecer juntos

Riéndose, contestó:— Estoy aquí para encontrar un marido rico, casarme, tener unos

dos hijos, y luego jubilarme y viajar.— Se lo digo en serio — le dije — . Todos queremos saber que la ha

motivado a afrontar este desafío a su edad.— Siempre soñé con tener una educación universitaria y ahora la

voy a tener — me dijo.

Después de clases caminamos al edificio de la cafetería y comparti­mos un licuado de chocolate. Nos hicimos amigos enseguida.

Todos los días durante los tres meses siguientes salimos juntos de clase y hablamos sin parar. Me fascinaba escuchar a esta "máquina del tiempo", que compartía su sabiduría y experiencia conmigo.

Durante ese año, Rosa se hizo muy popular en la universidad; hacía amistades a donde iba, le encantaba vestirse bien y se deleita­ba con la atención que recibía de los demás estudiantes. Se la estaba pasando de maravilla. Al terminar el semestre la invitamos a hablar en nuestro banquete de fútbol. No olvidaré nunca lo que ella nos enseñó en esa oportunidad.

Luego de ser presentada, subió al podio y cuando comenzó a pro­nunciar el discurso que había preparado, se le cayeron al suelo las tarjetas donde tenía los apuntes; frustrada y un poco avergonzada, se inclinó sobre el micrófono y dijo simplemente:— Disculpen, es que estoy tan nerviosa. No voy a poder volver a po­ner mi discurso en orden, así que permítanme simplemente decirles lo que siento.

Mientras nos reíamos, ella se aclaró la garganta y comenzó:— Durante mi corta vida me he podido dar cuenta que no dejamos de jugar porque estamos viejos, sino que nos ponemos viejos porque dejamos de jugar. Hay algunos secretos para mantenerse joven, que les quiero compartir. Reír y encontrar el buen humor de todos los demás. Tener un ideal, porque cuando perdemos de vista nuestro ideal, comenzamos a morir. ¡Hay tantas personas caminando por ahí que están muertas y ni siquiera lo saben! Hay una gran diferencia entre ponerse viejo y madurar. Si ustedes tienen diecinueve años y se quedan en la cama un año entero sin hacer nada productivo se convertirán en personas de veinte años. Si yo tengo ochenta y sie­te años y me quedo en la cama por un año sin hacer nada tendría ochenta y ocho años, todos podemos envejecer, no se requiere ta­lento ni habilidad para ello. Lo importante es que maduremos en­contrando siempre la oportunidad en la transformación. Envejecer

Segunda parte: La magia de los recursos 131

es obligatorio; madurar es opcional. No me arrepiento de nada. Los viejos generalmente no nos arrepentimos de lo que hicimos sino de lo que no hicimos. Los únicos que temen la muerte son los que tienen remordimientos.Terminó su discurso cantando. Todos nos quedamos en silencio por unos momentos, reflexionando en aquello que Rosa nos había compar­tido. Después de un tiempo Rosa terminó sus estudios y una semana después de la graduación, murió tranquilamente mientras dormía.

Más de dos mil estudiantes universitarios asistieron al funeral, para rendir tributo a esa maravillosa mujer que nos enseñó con su ejemplo que nunca es demasiado tarde para llegar a ser todo lo que se puede ser.

48) El m a g o y e l s o m b r e r o 8

La magia está dentro de tiHistoria:

Cuando el mago muestra su sombrero vacío..., mantiene la expecta­tiva de su público...

En el siguiente momento hace un pase mágico, mete la mano... y saca un conejo... y la gente que lo mira se asombra... y dice: "m agia", "m agia"...

El mago, satisfecho, agradece con un gesto a su público; en el si­guiente instante vuelve a mostrar su sombrero vacío, hace un pase mágico, mete la mano... y saca una paloma..., y la gente que lo mira se muestra atraída por la posible forma de lograrlo... y dice: "m a­gia", "magia"...

Pero el mago sabe cómo hace su magia, porque la magia tiene estructura.

En un momento más, la gente pide más magia, y el mago mues­tra nuevamente su sombrero vacío. Y la gente se prepara para lo que podrá suceder en el siguiente instante, porque sabe que el mago hará un pase mágico y al meter la mano, sacará el producto de su magia.

Y la gente dirá: "m agia", "m agia", disfrutando del resultado; pero el mago sí sabe lo que pasará, porque la magia tiene una estructura y él, conoce la estructura de su magia...

8 Historia para contarse a: Personas que no creen en la magia. Alguien que no sepa de lo que es capaz. Personas que piensen que todo és magia. Personas que han dejado de sorprenderse. Quien no cree en todo lo que puede hacer. Personas que se están formando en alguna disciplina.

Si tienes algo „, “Ue agradecer, tienes algo a 6

compartirHistoria: r

Imagina que estás en el desierto y puedes ver, tanto cort\0vista, sólo dunas... cance u

Hacia donde voltees, ves sólo dunas y el sol es abr^Sg^ ^ estás ahí en medio de ese desierto v justo estás en un oa$;c/ unme y maravilloso oasis con una fuente de agua abundar^/cristalina que forma un lago de aguas quietas y frescas,del lago hay palmeras, grandes palmeras con copas alt^s reque proporcionan sombra y protección de los rayos del $0 j a P

En cada palmera hay racimos enormes de dátiles queto dulce y jugoso. Ese oasis es tuyo, ese oasis de aguas a,sombra y alimento abundantes, te pertenece. a es e

Un día ves venir a un viajero luchando por su vida ah>rael sol, lastimado por las arenas candentes... Llega hasta tv. a ,° Porle ofreces de tu agua abundante y le ofreces de tu sombra ^ tUy le ofreces de tu comida abundante sólo porque lo tiene§ 1111 an e

El viajero se refresca, come, descansa y un día él quiere p .lo dejas ir porque diste lo que tenías sólo porque lo tenías r*ir' ̂*U

Imagina que estás en el mismo desierto con sólo un sorb0un mendrugo de pan bajo los rayos del sol, y ves venir a } , . e a8ua' j . . 3 J J icriero enlas mismas condiciones que tú... ’

¿Qué harías?

50) E l á r b o l y e l s a b i o 10

Las decisiones acerca de ti >Historia: tomas tu

En una ocasión, una mujer que era muy infeliz por la _tenía con su esposo se enteró de que había un ermitaño vi^j^ on en un bosque cercano, y quiso ir a visitarlo en busca de un u ^ sa 10 sejo para resolver su situación. en con"

49) El o a s i s y e l v i a j e r o 9

4 Historia para contarse a: Personas envidiosas y egoístas. Quien no com parta j Q uien da esperando algo a cambio. Personas que se quejan por haber dado. S ue tiene,piensan que sólo ellas dan. Personas que exigen retribución por lo que han d ^ rs° nas 4 ueque no se han dado cuenta de todo lo que tienen. Personas que a pesar de que t¡e Personasson capaces de compartir. er> todo no

10 Historia para contarse a: M ujeres m altratadas. Personas que se sientan a tra p ,^ puladas. Quien no sepa que tiene el poder de controlar su vida. Personas qu e s ? s ° mani' tienen que hacer pero les da miedo. Quien diga que quiere dejar algo y en re a l;,. en *° que nada por dejarlo. * * * » no haga

Segunda parte: La magia de los recursos 133

Cuando llegó al lugar donde se encontraba el ermitaño, lo miró atentamente y observó que pasaba mucho tiempo meditando, yendo de un lado a otro, arreglando el lugar, observando y consigo mismo. Cuando finalmente se decidió a hablarle, se acercó, mientras realiza­ba sus actividades acostumbradas, y le dijo:— Hombre sabio, me he enterado de que tú puedes darme un buen consejo para arreglar mi situación; cada vez es más difícil vivir en esta condición. He estado casada con mi esposo por más de quince años y durante todo ese tiempo él solamente ha abusado de mí, me ha humillado y me ha obligado a hacer cosas que no deseo hacer. Me insulta, me grita y me trata como si fuera una persona sin valor. Quiero preguntarte qué es aquello que me recomiendas, me encuen­tro desesperada y ya no tengo de dónde tomar fuerzas.El hombre continuaba realizando sus actividades sin mirar, ni hacer caso a la mujer; se comportaba como si en realidad no le estuviera hablando a él, como si ella no hubiera dicho nada.

La mujer continuó hablando al ermitaño, sin resultado satisfacto­rio. Después de estar así toda la tarde, le dijo:— Por favor responde a mis preguntas, ya me tengo que ir porque si él regresa a casa y no me encuentra habrá problemas, porque no soy libre de hacer lo que me gusta, ni de salir adonde yo quiera.El ermitaño no volteó siquiera a verla; la mujer, desesperada, se mar­chó con el temor de llegar a casa después que su esposo.

Al día siguiente desde temprano regresó a ver al hombre y nue­vamente le preguntó:— Hombre sabio, ¿qué puedo hacer?, he venido una vez más a pedir tu consejo para arreglar mi situación, que cada vez es más difícil.La mujer continuó hablando al ermitaño, sin resultado satisfacto­rio...; después de estar así toda la tarde, le dijo:— Por favor responde a mis preguntas, es el segundo día que vengo a verte, he estado todo el día y parte de la tarde, pero si no me voy ahora él regresará a casa, no me encontrará y nuevamente habrá pro­blemas porque no soy libre de hacer lo que quiero.Una vez más el ermitaño se mantuvo en silencio y no volteó siquiera a verla; la mujer, desesperada, se marchó con el temor de llegar a casa después que su esposo.

Al día siguiente desde temprano regresó a ver al hombre sabio. Cuando él la vio venir, dejó de hacer lo que estaba haciendo y se di­rigió hacia un árbol, de tronco fuerte y ancho, lo abrazó fuertemente con brazos y piernas.

134 Historias para contarse... y crecer juntos

Ella lo miró asombrada, en los días anteriores no había hecho algo igual. ¿Qué extraño comportamiento era ese?

De cualquier manera, iba decidida a obtener respuesta a sus pre­guntas ese día, así que le dijo:— Hombre sabio, he venido por tres días consecutivos a consultarte porque me he enterado de que tú puedes ayudarme. Responde por favor a mis preguntas...El viejo, al fin, habló y le dijo:— Espera que este árbol me suelte y entonces te responderé...

51) E m p u ja l a v a q u i t a 11

El que arriesga se fortaleceHistoria:

Un maestro de la sabiduría paseaba por un bosque con su fiel dis­cípulo, cuando vio a lo lejos un sitio de apariencia pobre y decidió hacer una breve visita al lugar.

Durante la caminata le.comentó al aprendiz sobre la importancia de las visitas, también de conocer personas y las oportunidades de aprendizaje que tenemos de estas experiencias.

Llegando al lugar constató la pobreza del sitio, era una casa de madera apolillada; los habitantes, una pareja y tres hijos vestidos con ropas sucias y rasgadas, sin calzado.

Entonces se aproximó al señor, aparentemente el padre de familia y le preguntó...:

— En este lugar no existen posibilidades de trabajo ni puntos de co­mercio tampoco; ¿cómo hacen usted y su familia para sobrevivir aquí?El señor le respondió con calma:— Amigo mío, nosotros tenemos una vaquita que nos da varios li­tros de leche todos los días. Una parte del producto la vendemos o la cambiamos por otros géneros alimenticios en la ciudad vecina, y con la otra parte producimos queso, crema y cuajada para nuestro consumo, y así es como vamos sobreviviendo.El maestro agradeció la información, contempló el lugar por un mo­mento, luego se despidió y se fue.

11 Historia para contarse a: Padres sobreprotectores o que menosprecian a sus hijos. Personas que no se atreven a tomar riesgos por miedo. Padres que desconfían de las habilidades de sus hijos. Alguien que tenga miedo de hacer algo diferente. Personas conformistas.

Segunda parte: La magia de los recursos 135

En el medio del camino, volteo hacia su fiel discípulo y le ordenó:— Busque la vaquita, llévela al precipicio de allí enfrente y empújela al barranco.El joven espantado, vio al maestro y le cuestionó sobre el hecho de que la vaquita era el medio de subsistencia de aquella familia. Pero como percibió el silencio absoluto del maestro, fue a cumplir la or­den. Así que empujo la vaquita por el precipicio y la vio morir.

Aquella escena quedó grabada en su memoria. Un bello día el joven resolvió abandonar todo, regresar a aquel lugar, contarle todo a la familia, pedir perdón y ayudarlos.

Así lo hizo, y a medida que se aproximaba al lugar veía todo muy bonito, con árboles floridos, todo habitado, con carro en el garaje de tremenda casa y algunos niños jugando en el jardín.

El joven se sintió triste y desesperado imaginando que aquella humilde familia tuviese que vender el terreno para sobrevivir, ace­leró el paso y llegando al lugar, fue recibido por un señor muy sim­pático; el joven preguntó por la familia que vivía en esa casa, hacía unos cuatro años; el señor respondió que allí seguían viviendo.

Sorprendido, el joven entró corriendo a la casa y confirmó que era la misma familia que visitó hace algunos años con el maestro. Elogió el lugar y le pregunto al señor (el dueño de la vaquita) cómo hizo para mejorar este lugar y cambiar de vida...

El señor, entusiasmado, le respondió:— Nosotros teníamos una vaquita que cayó por el precipicio y mu­rió, de ahí en adelante nos vimos en la necesidad de hacer otras cosas y desarrollar otras habilidades que no sabíamos que teníamos; así alcanzamos el éxito que sus ojos vislumbran ahora.

5 2 ) L a c o l a d e l g a t o 12

La felicidad está más cerca de lo que creesHistoria:

En el mundo de los gatos, siempre los gatos mayores se han encarga­do de dar orientación a los gatos pequeños, transmitiéndoles de una o de otra manera sus experiencias.

Un día, mientras el más anciano de los gatos observaba como ju­gaban los cachorros, se dio cuenta de que uno de ellos perseguía

12 Historia para contarse a: Quien piensa que poseer objetos condiciona su felicidad. Cual­quier persona triste, desilusionada o deprimida. Jóvenes que se apresuran con las relaciones amorosas. Quien esté en un m omento de confusión. Quien no disfruta el presente.

136 Historias para contarse... y crecer juntos

su cola y se esmeraba en atraparla, persiguiéndose, revolcándose, girando y esforzándose por lograr atraparla sin conseguirlo.

Al recordar sus días de juego, el anciano le preguntó al cachorro por qué quería pescarse la cola.— Escuché a alguien decir que la felicidad de los gatos está en su cola — dijo el cachorro—, y yo quiero la felicidad, así que por eso persigo mi cola...El gato mayor, divertido al recordar su propia historia, le dijo:— Sí, yo también caí en la trampa y ocupé mucho tiempo de mi vida persiguiendo a la felicidad sin conseguir atraparla. Hasta que un día dejé de perseguirla y comencé a disfrutar cosas que nunca antes me había percatado que podrían ser tan interesantes y divertidas. Cuan­do recordé que en algún tiempo estuve obsesionado con la felicidad, mire hacia atrás y descubrí que ahora era ella quien me perseguía a mí.

5 3 ) E l c í r c u l o d e l 9 9 13

Rico no es quien tiene más, sino quien necesita menosHistoria:

Había una vez un rey muy triste que tenía un sirviente muy feliz.Todas las mañanas llevaba el desayuno y despertaba al rey can­

tando y tarareando alegres canciones.Un día el Rey lo mandó llamar y le preguntó

— ¿Cuál es el secreto de tu alegría?— No hay ningún secreto alteza.— No me mientas, ¿por qué estás siempre alegre y feliz?— Majestad, no tengo razones para estar triste, vivo en palacio y ten­go todo para mí, para mi esposa y mis hijos, y además usted me da algunas monedas por atenderlo. ¿Cómo no estar feliz?El rey, desesperado, mandó llamar al más sabio de sus consejeros y le preguntó

— ¿Por qué el paje es tan feliz?— Ah majestad, lo que pasa es que él está fuera del círculo— ¿Y eso lo hace feliz?— No majestad, eso es lo que no lo hace infeliz.— ¿Y cómo salió del círculo?— No, nunca entró.

13 Historia para contarse a: Personas que creen que lo material es lo más importante. Personas angustiadas por acumular riquezas. Quien crea que el dinero es la felicidad. Alguien que no valora lo que tiene. Personas atrapadas en los hábitos.

Segunda parte: La magia de los recursos 137

— ¿De qué círculo me hablas?— Del círculo del 99.— ¿Y eso qué es?, no entiendo nada, eso no me explica por qué es tan feliz.— No estamos seguros de que él sea verdaderamente feliz.—Y cómo podemos saberlo— Para eso es necesario que él entre al círculo.— Eso es, obliguémoslo a entrar o engañémoslo para que entre.— No se puede obligar a nadie, ni hará falta engañarlo. Si no es ver­daderamente feliz como es y con lo que hace, entrará solo en el cír­culo y sufrirá las consecuencias.— ¿Y no se dará cuenta de que eso es su infelicidad?—Si se diera cuenta... entonces no entraría. No lo podrá evitar, ¿quie­re probar?- S í .— Esta noche deberá tener preparada una bolsa de cuero con 99 mo­nedas de oro. Ni una más ni una menos.Así fue, por la noche el consejero pasó a buscar al rey. Cuando el paje despertó por la madrugada y encendió la primera vela, el sabio tomó la bolsa de cuero con las 99 monedas y le pinchó un papel que decía: "Este tesoro es tuyo, es el premio por ser un buen hombre. Disfrútalo y no cuentes a nadie cómo lo encontraste". Luego ató la bolsa a la puerta del paje, golpeó la puerta y se escondió.

El sirviente vio la bolsa, leyó el papel, agitó la bolsa, la apretó a su pecho, miró para todos lados de la puerta y entró a su hogar.

El rey y el sabio se acercaron a la ventana para ver la escena. El paje arrojó al piso todo lo que estaba sobre la mesa, dejando sólo la vela. Se sentó y vació el contenido de la bolsa, sus ojos no podían creer lo que veían.

Era una montaña de monedas de oro. Las tocaba y amontonaba, las acariciaba y las hacía brillar a la luz de la vela, las juntaba y las desparramaba, hacía pilas de monedas. Así jugando comenzó a ha­cer pilas de diez monedas.

Una pila de diez, dos pilas de diez, tres pilas, cuatro, cinco, seis... y mientras sumaba 10, 20, 30, 40..., hasta que formó la última pila: ¡9 monedas...!

Su mirada recorrió la mesa buscando una moneda más, luego bus­có en el piso y finalmente en la bolsa. "N o puede ser", pensó. Puso la última pila al lado de las demás y confirmó que era más baja.— Me robaron —gritó— ¡me robaron!

138 Historias para contarse... y crecer juntos

Una vez más buscó en la mesa, en el piso, en la bolsa, en sus bolsillos, en sus ropas, movió los muebles, pero no encontró lo que buscaba. Sobre la mesa, como burlándose de él, una montañita resplandecien­te le recordaba que había solo 99 monedas de oro.

"99 monedas es mucho dinero", pensó, "pero me falta una mone­da. Noventa y nueve no es un número completo... Cien es un núme­ro completo pero noventa y nueve, n o ..."

El rey y el sabio miraban por la ventana la cara del paje que ya no era la misma; tenía el seño fruncido y los rasgos tiesos. El paje guar­dó las monedas en la bolsa y, mirando hacia todos lados para ver si lo estaban viendo, escondió la bolsa entre la leña. Luego comenzó a hacer cálculos de cuanto tiempo necesitaría ahorrar para comprar su moneda número cien.

Estaba dispuesto a trabajar duro hasta conseguirla. Después qui­zá no necesitaría trabajar más. Con cien monedas de oro un hombre puede dejar de trabajar. Con cien monedas de oro un hombre es rico. Con cien monedas de oro se puede vivir tranquilo. Sacó el cálculo: si trabajaba y ahorraba su salario y algún dinero extra que recibía, en once o doce años juntaría lo necesario.

Quizás pediría a su esposa que buscara trabajo por un tiempo. Y él mismo... después de todo, él terminaba su tarea en el palacio a las 5 de la tarde, podría trabajar en el pueblo hasta la noche y recibir algu­na paga extra. Sacando cuentas, con sus dos trabajos y el de su espo­sa, en siete años reuniría el dinero; aún así era demasiado tiempo.

Quizá pudiera llevar al pueblo lo que quedara de comidas todas las noches y venderlo por una monedas. De hecho, cuanto menos comie­ran, más habría para vender. Además hacía mucho calor, así que para qué tanta ropa en invierno, sí, podrían vender sus ropas y con eso ob­tener otro tanto. ¿Para qué más de un par de zapatos? Era un sacrificio pero en cuatro años de sacrificios llegaría a su moneda cien.

El sabio y el rey volvieron a palacio. El paje había entrado al cír­culo del 99...

Durante los siguientes meses, el sirviente siguió sus planes tal como se le ocurrió aquella noche. Una mañana el paje entró a la alco­ba real golpeando puertas y refunfuñando.— ¡Qué te pasa? —preguntó el rey de buen modo.— Nada me pasa, nada me pasa.— Antes, no hace mucho, reías y cantabas todo el tiempo.— Hago mi trabajo, ¿no? ¿Que quería, que además fuera su bufón?No pasó mucho tiempo antes de que el rey despidiera al sirviente. No era grato tener un paje que estuviera siempre de mal humor.

139

Cada experiencia es única y por lo tanto una nueva posibilidad

Historia:

Cuando niña, Laura asistía con regularidad al circo y escuchaba que era sorprendente la valentía del domador de elefantes, en el circo.

Ella sólo miraba atenta, sin entender todavía con claridad el suce­so. El domador podía poner una pelota que a ella le parecía enorme, pero que ante el elefante era pequeña y frágil.

Lo espectacular —escuchaba la niña— es que el domador ha con­seguido que el elefante ponga su pata sobre la pelota y no se caiga.

Pero lo verdaderamente sorprendente fue el momento en que el domador puso su cabeza en el piso para que el elefante depositara su pata sobre ella. ¡Que valiente!, comentaban quienes nunca antes habían visto el espectáculo.

Después de muchos años, cuando Laura comenzó a ir a la univer­sidad, descubrió que lo que aprendió de niña acerca de la valentía del domador, en realidad era una virtud del elefante porque ahora sabe que los elefantes no determinan el paso que van a dar en fun­ción del paso que ya dieron, porque éste no les dice nada en realidad acerca del siguiente paso.

Cuando el elefante va a dar un nuevo paso, tiene tres de sus cua­tro patas apoyadas en el piso, pone una al aire y antes de depositarla en el terreno que pisará prueba para ver si lo sostendrá o no con todo su peso corporal, si no es así puede permanecer con la pata en el aire, depositarla en el punto donde antes la tenía o retroceder, hasta que encuentra el terreno que lo sostendrá.

A cada paso, con cada pata hace lo mismo ya que la última vez no le dice nada acerca de esta vez. Cada paso es diferente y nuevo, el paso anterior no dice nada con respecto al terreno por pisar, ni con respecto al paso siguiente.

Ahora Laura sabe que la valentía del domador estaba depositada en su conocimiento de la maravillosa capacidad de reconocimiento de los elefantes.

54) La p a t a d e l e l e f a n t e 14

14 Historia para contarse a: Quien tenga que tomar una decisión importante en su vida. Al­guien que se aterra en cómo ha hecho las cosas antes. Personas que actúan igual en diferentes situaciones. Quien crea que el pasado define cóm o será el futuro. Quien piensa que ya sabe todo de todo. Q uien hace las cosas sin pensar. Alguien apresurado.

140

Es preferible actuar que esperarHistoria:

Sucedió en medio de un desastre natural; por exceso de lluvia se desbordaron los ríos. Aquel pueblo comenzó a inundarse y cada vez el agua subía más y más.

La gente subía primero a los muebles, después a la parte alta de las casas, a postes, árboles y techos para salvar sus vidas; las brigadas de socorro se empezaron a movilizar.

Había un hombre en el pueblo que decía de sí mismo estar lleno de fe; era un ser extraño y al igual que todos tuvo que subir a la azo­tea de su casa con la idea fija de que "Dios lo iba a salvar".

Se aproximó una balsa, y los que la conducían le dijeron que se su­biera y se pusiera a salvo, él contesto:

— No se molesten por mí, rescaten a otros, Dios me va a salvar.La balsa se retiró y el agua seguía subiendo.

Tiempo después la armada envío una lancha, los soldados reco­gían a todos los que encontraban, al verlo le dijeron que subiera, pero él dijo:— Olvídense de mí, Dios me salvará, ayuden a otros.La lancha se alejó y el agua continuaba en aumento. El hombre se tuvo que subir al tinaco.

Más tarde escucho el motor de un helicóptero, éste se posó arriba de él y con altoparlante le dijeron que se subiera a la escalerilla, que lo iban a rescatar. El hombre a gritos les contestó:

— Vayan a rescatar a otros, Dios me salvará.El agua subió más y él hombre se ahogó; al llegar al cielo, muy triste y decepcionado le dijo a Dios:— Yo tenía mucha fe en ti, ¿por qué no me rescataste?A lo que Dios contestó:— Yo te mande una balsa, una lancha y un helicóptero...

55) La i n u n d a c i ó n 15

15 Historia para contarse a: Personas que se quejan todo el tiempo de que les va mal en la vida. Personas que no creen tener el poder en sí mismos. Personas inconformes con lo que se les ofre­ce. Personas que no hacen nada por ellas mismas. Quien piensa que nadie le puede ayudar.

141

Lo mejor es lo que eresHistoria:

Había una vez un hombre que sin importar el clima, ya fuera con el intenso sol o con la abundante lluvia, pasaba el día rompiendo pie­dras al pie de la montaña en el borde del camino; mientras realizaba su trabajo se preguntaba por qué razón había tenido ese destino.

Romper piedras no es una labor muy enriquecedora. "Ah, si pu­diese ser un gran señor... descansaría finalmente".

Cerca de ahí había un genio que lo oyó: "Sea escuchado tu deseo", dijo. Dicho y hecho.

El pedrero se encontró en un hermoso palacio, servido por un gran número de siervos. Podía descansar a su gusto...

Un día convertido en gran señor tuvo la idea de levantar los ojos al cielo, y vio aquello que quizás no había mirado nunca: ¡el sol! "¡Ah, si pudiese ser como el sol¡", suspiró. "N o tendría ni siquiera el fastidio de verme rodeado por todos estos siervos". También esta vez el genio lo quiso contentar. "¡Hágase como quieres!", le dijo.

Pero cuando el hombre se convirtió en sol, una nube se posó de­lante, ofuscando su esplendor. Ante tal experiencia, se inconformo y pensó... estar en mejor posición... "¡Si pudiese ser una nube...!, una nube es más poderosa que el sol."

Al convertirse en nube, sintió la ligereza de su consistencia; con­vertido en vapor y ser tan liviano le dio una nueva experiencia que jamás había experimentado.

Mientras disfrutaba de esta maravilla, sopló el viento que arrastra todo y también ahora pensó... "quiero ser el viento". Y el genio, com­placiente de nuevo, lo escuchó.

Convertido en viento impetuoso y violento, encontró la montaña que lo detuvo... y quiso ser montaña.

Mientras disfrutaba su nueva posición escuchó y sintió el gol­peteo constante en su pequeña base y pensó... "¡Ah, si pudiese ser aquello que rompe la montaña!".

Y por última vez el genio lo escuchó; así, de nuevo el pedrero se encontró al pie de la montaña, al borde del camino, rompiendo pie­dras. Y pensó: "si sólo pudiera ser todo aquello que quiero a través de la im aginación..."

16 Historia para contarse a: Personas inestables. Quien no valora lo que es. Personas incon- formes con lo que tienen. Personas insatisfechas con su papel en la vida. Alguien que no tiene muy claros sus objetivos. Quien se queja todo el tiempo de su mala suerte. Personas que no creen poder tener lo que quieren. Personas que creen que lo que hacen no tiene importancia.

5 6 ) E l p e d r e r o 16

142

57) L a s v a s i j a s .DEL AGUADOR17

Historia: Es más valioso el que ilumina que el que brilla

Un cargador d . e vivía en un pueblo colonial de México,tenía dos granc^^

vasijas que colgaban a los extrem os de un e,e de madera que H e \ . sobre ios hombros y la espald a .

Una de las v g tenía varias grietas, mientras que la otra estabaíntegra y consev > da d a a durante el largo camino a pie querealizaba, desd^ ^ arroyo hasta el granero. Cuando llegaba, la vasijarota sólo c o n t e n ^ mitad del agua.

Durante dos gños compietos ocurrió de la m isma manera. La va­sija íntegra e s t a ^ muy orguliOSa de sus logros, pues se sabía perfec­ta para los fines había sido creada.

La vasija a g r ^ ^ estaba muy avergonzada y se sentía mal, por­qué sólo podía ^ acer ja mitad del trabajo que le correspondía y des­perdiciaba la m i , , d d a que ^ ponían.

Después de < ^ o g a ñ Q S l a v a s i ja agrietada le habló al aguador, di- ciéndole...

-E sto y avergor^zada quiero disculparme contigo. Porque debido a mis grietas, sólo pUedes entregar la mitad de mi carga...El aguador, le d ^ .Q.

-M añ an a cuan q mos a entregar la carga quiero que pongasatención en el c ^ minQJ me digas qué diferencia encuentras del lado donde viajas tú

Nodos los días y del lado donde v i*ja la otra vasija.Así lo hizo la va y descubrió, maravillada, que a lo largo del tra­yecto y sólo de

S\u lado del camino crecían bellísimas flores. Entonces el a ^ uadorle dijo ...

-P a r a que fu e r^ ibXe esa belleza, has colaborado, regando pri­mero las semilla g

luego las flores a lo largo del Camino por donde has viajado todo >g ^ díag

17 Historia para contáis .ne sentido Quien se a v ^ se a: Personas con baja autoestima. Quien p iensa que su vida no tie- quiere. Personas que s iO ,ergüenza Por no haber estud>ado. Quien creé no poder lograr lo que ningún sentido el existíRentan que están desperdiciando su vida. A lguien q Ue crea que no tiene

W . Personas que crean que su labor es pequeña e insignificante.

143

Mirar a través de la imaginaciónHistoria:

Dos hombres ocupaban la misma habitación de un hospital; ambos estaban muy enfermos.

A uno se le permitía sentarse en su cama cada tarde, durante una hora, para ayudarle a drenar el líquido de sus pulmones. Su cama daba a la única ventana de la habitación.

El otro hombre tenía que estar todo el tiempo boca arriba miran­do el techo y no tenía permitido sentarse en la cama.

Los dos charlaban durante horas. Hablaban de sus mujeres y sus familias, sus hogares, sus trabajos, su estancia en el servicio militar, dónde habían estado de vacaciones...

Cada tarde, cuando el hombre de la cama junto a la ventana podía sentarse, pasaba el tiempo describiendo a su vecino todas las cosas que podía ver a través de la ventana.

El hombre de la otra cama empezó a desear que llegaran esas ho­ras en que su mundo se ensanchaba y cobraba vida con todas las actividades y colores del mundo exterior.

A través de la ventana podía ver un parque con un precioso lago, patos y cisnes que jugaban en el agua, mientras los niños lo hacían con sus cometas. Los jóvenes enamorados paseaban de la mano entre flores de todos los colores del arcoiris. Grandes árboles adornaban el paisaje, y se podía ver en la distancia una bella vista de la línea de la ciudad. El hombre de la ventana describía todo eso con un detalle exquisito; el del otro lado de la habitación cerraba los ojos e imaginaba la idílica escena.

Una tarde calurosa, el hombre de la ventana describió un desfile que estaba pasando; aunque el otro hombre no podía oír a la banda, podía verlo, con los ojos de su mente, exactamente como lo describía el hombre de la ventana con sus mágicas palabras.

Pasaron días y semanas en las que compartieron la habitación, las tardes y la amena charla... Una mañana, la enfermera de día entró con el agua para bañarles, encontrándose con el cuerpo sin vida del hom­bre de la ventana, que había muerto plácidamente mientras dormía.

Se lleno de pesar y llamó a los camilleros del hospital, para lle­varse el cuerpo. El otro hombre se entristeció por la muerte de su compañero y por la ausencia de esas maravillosas tardes.

58) E l h o m b r e d e l a v e n t a n a 18

18 Historia para contarse a: Personas deprimidas. Personas que se quejan mucho. Personas con pensam ientos negativos. Personas con una enfermedad terminal. Alguien que se encuentre decepcionado. Personas que estén atravesando obstáculos.

142

Es más valioso el que ilumina que el que brillaHistoria:

Un cargador de agua que vivía en un pueblo colonial de México, tenía dos grandes vasijas que colgaban a los extremos de un eje de madera que llevaba sobre los hombros y la espalda.

Una de las vasijas tenía varias grietas, mientras que la otra estaba íntegra y conservaba toda el agua durante el largo camino a pie que realizaba, desde el arroyo hasta el granero. Cuando llegaba, la vasija rota sólo contenía la mitad del agua.

Durante dos años completos ocurrió de la misma manera. La va­sija íntegra estaba muy orgullosa de sus logros, pues se sabía perfec­ta para los fines que había sido creada.

La vasija agrietada, estaba muy avergonzada y se sentía mal, por­qué sólo podía hacer la mitad del trabajo que le correspondía y des­perdiciaba la mitad del agua que le ponían.

Después de dos años, la vasija agrietada le habló al aguador, di- ciéndole...— Estoy avergonzada y quiero disculparme contigo. Porque debido a mis grietas, sólo puedes entregar la mitad de mi carga...El aguador, le dijo:— Mañana cuando vayamos a entregar la carga quiero que pongas atención en el camino y me digas qué diferencia encuentras del lado donde viajas tú todos los días y del lado donde viaja la otra vasija.

Así lo hizo la vasija y descubrió, maravillada, que a lo largo del tra­yecto y sólo de su lado del camino crecían bellísimas flores.

Entonces el aguador le dijo....

— Para que fuera posible esa belleza, has colaborado, regando pri­mero las semillas y luego las flores a lo largo del camino por donde has viajado todos los días...

5 7 ) L a s v a s i j a s d e l a g u a d o r 17

15 Historia para contarse a: Personas con baja autoestima. Quien piensa que su vida no tie­ne sentido. Quien se avergüenza por no haber estudiado. Quien creé no poder lograr lo que quiere. Personas que sientan que están desperdiciando su vida. Alguien que crea que no tiene ningún sentido el existir. Personas que crean que su labor es pequeña e insignificante.

143

Mirar a través de la imaginaciónHistoria:

Dos hombres ocupaban la misma habitación de un hospital; ambos estaban muy enfermos.

A uno se le permitía sentarse en su cama cada tarde, durante una hora, para ayudarle a drenar el líquido de sus pulmones. Su cama daba a la única ventana de la habitación.

El otro hombre tenía que estar todo el tiempo boca arriba miran­do el techo y no tenía permitido sentarse en la cama.

Los dos charlaban durante horas. Hablaban de sus mujeres y sus familias, sus hogares, sus trabajos, su estancia en el servicio militar, dónde habían estado de vacaciones...

Cada tarde, cuando el hombre de la cama junto a la ventana podía sentarse, pasaba el tiempo describiendo a su vecino todas las cosas que podía ver a través de la ventana.

El hombre de la otra cama empezó a desear que llegaran esas ho­ras en que su mundo se ensanchaba y cobraba vida con todas las actividades y colores del mundo exterior.

A través de la ventana podía ver un parque con un precioso lago, patos y cisnes que jugaban en el agua, mientras los niños lo hacían con sus cometas. Los jóvenes enamorados paseaban de la mano entre flores de todos los colores del arcoiris. Grandes árboles adornaban el paisaje, y se podía ver en la distancia una bella vista de la línea de la ciudad. El hombre de la ventana describía todo eso con un detalle exquisito; el del otro lado de la habitación cerraba los ojos e imaginaba la idílica escena.

Una tarde calurosa, el hombre de la ventana describió un desfile que estaba pasando; aunque el otro hombre no podía oír a la banda, podía verlo, con los ojos de su mente, exactamente como lo describía el hombre de la ventana con sus mágicas palabras.

Pasaron días y semanas en las que compartieron la habitación, las tardes y la amena charla... Una mañana, la enfermera de día entró con el agua para bañarles, encontrándose con el cuerpo sin vida del hom­bre de la ventana, que había muerto plácidamente mientras dormía.

Se lleno de pesar y llamó a los camilleros del hospital, para lle­varse el cuerpo. El otro hombre se entristeció por la muerte de su compañero y por la ausencia de esas maravillosas tardes.

58) E l h o m b r e d e l a v e n t a n a 18

1R Historia para contarse a: Personas deprimidas. Personas que se quejan mucho. Personas con pensamientos negativos. Personas con una enfermedad terminal. Alguien que se encuentre decepcionado. Personas que estén atravesando obstáculos.

144 Historias para contarse... y crecer juntos

Pasado un tiempo, tan pronto como lo considero apropiado y en­contrarse en mejores condiciones, pidió ser trasladado a la cama que había ocupado su compañero de cuarto, al lado de la ventana.

La enfermera le cambio encantada y tras asegurarse de que es­taba cómodo, salió de la habitación. Lentamente, y con dificultad, el hombre se irguió sobre el codo, para lanzar su primera mirada al mundo exterior.

¡Por fin tendría la alegría de verlo él mismo!Se esforzó para girarse despacio y mirar por la ventana, pero se en­

contró con una pared blanca. El hombre preguntó a la enfermera qué po­dría haber motivado a la gente del hospital para poner una pared frente a la ventana habiendo tenido tan maravillosa vista hacia el parque.

La enfermera le comentó que no había ningún parque en esa di­rección, ni en algún punto cercano del hospital, y que la pared blan­ca estaba ahí desde que el hospital fue construido. El hombre res­pondió que su compañero de habitación recién muerto, le describía todas las tardes el hermoso paisaje que veía a través de la ventana y la gente que visitaba el parque.

La enfermera le dijo entonces que el hombre era ciego y que no habría podido ver ni siquiera la pared; salió de la habitación y lo dejó solo con su desconcierto.

5 9 ) L a t r i s t e z a y l a f u r i a 19

Si miras más allá de lo superficial, se te revelará lo oculto

Historia:

En un reino encantado, donde los humanos nunca creyeron llegar, donde en realidad transitan eternamente sin darse cuenta. En un rei­no mágico, donde las cosas no tangibles, se vuelven concretas...

Había una vez... un estanque maravilloso; era una laguna de agua pura y cristalina, donde nadaban peces de todos los colores existen­tes y las tonalidades del verde se reflejaban permanentemente...

Hasta este estanque mágico y transparente se acercaron a ba­ñarse, sin darse cuenta de la presencia de la otra, la tristeza y la furia.

Las dos se quitaron sus vestimentas y desnudas las dos, entraron al estanque.

19 Historia para contarse a: Personas que disfrazan lo que sienten. Personas que confunden sus emociones. Quien no pueda expresar sus emociones. Quien no reconoce ni acepta sus sentimientos. Personas que actúan sin darse cuenta de cóm o lo hacen. Quien no es consciente de sus verdaderos sentimientos.

Segunda parte: La magia de los recursos 145

La furia, apurada, urgida, sin saber por qué, se bañó rápidamente y más rápidamente aún, salió del agua...

La prisa y sus formas de hacer las cosas, le impidieron distinguir claramente la realidad, al grado de volverla ciega, así que desnuda y apurada, se encontraba desprotegida y con la urgencia de cubrirse; entonces, al salir, se puso lo primero que encontró...

Muy calmada y serena, dispuesta como siempre a quedarse en el lugar donde se encuentra, la tristeza terminó su baño y sin prisa, en realidad sin conciencia del paso el tiempo y len-ta-men-te, salió del estanque.

En la orilla se encontró con que su ropa ya no estaba; ante el ries­go de quedar al desnudo, se puso la única ropa que había junto al estanque, la ropa de la furia.

Desde entonces han buscado cada una a la otra, y así fueron en­viadas al mundo de los humanos.

Se encuentran vagando confundidas en estas tierras... Cuando acude la tristeza, lleva consigo inevitablemente a la furia, ciega, cruel y despiadada...

Al encontrarte con la furia, se presenta constantemente mezclada con la velada tristeza.

60) El b a m b ú j a p o n é s 20

El que persevera alcanzaHistoria:

Un anciano Japonés, experimentado agricultor, sabía bien que una bue­na cosecha requiere de buena semilla, buen abono y riego constante.

Después de haber sembrado semillas de bambú se dedicó a abo­narlo y regarlo dedicadamente, día tras día, mes con mes. Tempora­da tras temporada, abonaba y regaba su semilla sembrada.

Otro agricultor principiante, lo miraba todas las mañanas y lo es­piaba por las noches, porque creía que había alguna especie de truco en sus siembras, pues era uno de los más reconocidos agricultores.

Este agricultor principiante había sembrado también bambú, pero al primer año desistió de su cultivo porque no había crecido ni un cen­tímetro y no había descubierto aún el secreto del hombre experto.

De cualquier manera, tampoco el anciano había obtenido nada para el primer año. Sin embargo, él continuó abonando y regando el

20 Historia para contarse a: Padres preocupados por lo que harán sus hijos o que quieren ver logros inmediatos. Personas que requieren de un tratamiento médico o psicológico de larga duración. Personas que quieren desistir de algún proyecto como los estudios. Personas con poca esperanza o confianza en sí mismas.

146 Historias para contarse... y crecer juntos

área donde había depositado la semilla de manera paciente e incan­sable a lo largo de seis temporadas más.

Después de la aparente inactividad de la semilla, durante los siete años, de manera sorprendente en un periodo de sólo seis semanas, la planta creció más de treinta metros.

Ante tal asombro, el agricultor inexperto quiso preguntar directa­mente al anciano cuál había sido el secreto de su éxito, y fue a verlo.

El anciano le respondió que el verdadero secreto le pertenecía al bambú porque durante los primeros siete años de aparente inactivi­dad, había estado generando un complejo sistema de raíces que le harían posible sostener el gran crecimiento que mostraría después de siete años de incesante crecimiento interior.

Historias para contarse 4

6 1 ) E l p o r t e r o d e l h o t e l 1

Cuando tengas una idea, ponía en prácticaHistoria:

No había en aquel pueblo un oficio con peor reputación y peor pa­gado que el de portero de un hotel de paso... Pero, ¿qué otra cosa podría hacer aquél hombre?

De hecho, nunca había aprendido a leer ni a escribir, no tenía nin­guna otra actividad ni oficio. En realidad, era su puesto porque su padre había sido el portero de ese hotel y también antes, el padre de su padre.

Durante décadas, el hotel se pasaba de padres a hijos y la portería también.

Un día, el viejo propietario murió y se hizo cargo del hotel un jo­ven con inquietudes, creativo y emprendedor. El joven decidió mo­dernizar el negocio.

Modificó las habitaciones y después citó al personal para darle nuevas instrucciones. Al portero le dijo:— A partir de hoy usted, además de estar a cargo de la puerta, anota­rá la cantidad de parejas que entran día por día. A una de cada cinco, le preguntará cómo fueron atendidas y qué corregirían del lugar. Y una vez por semana, me presentará por escrito los comentarios que usted crea convenientes.El hombre tembló, nunca le había faltado disposición para el trabajo pero...— Me encantaría satisfacerlo señor —balbuceó— pero yo... yo no sé leer ni escribir.

1 H istoria para contarse a: Personas que creen que no pueden hacer cosas por falta de es­tudios. Personas que discrim inan a las dem ás por no saber leer o escribir. Q uien se sienta con pocas aptitudes para lograr algo. Personas que piensan que su vida será un fracaso. Personas que se sientan discrim inadas. Personas que subestim an a los dem ás, Personas analfabetas.

148 Historias para contarse... y crecer juntos

— ¡Ah! ¡Cuánto lo siento! Como usted comprenderá, yo no puedo pagar a otra persona para que haga esto y tampoco puedo esperar hasta que usted aprenda a escribir, por lo tanto...— Pero señor, usted no me puede despedir, yo trabajé en esto toda mi vida, también mi padre y mi abuelo...No lo dejó terminar.— Mire, yo comprendo, pero no puedo hacer nada por usted. Lógi­camente le vamos a dar una indemnización, esto es, una cantidad de dinero para que tenga hasta que encuentre otra cosa. Así que, lo siento. Que tenga suerte.Y sin más, se dio vuelta y se fue.

El hombre sintió que el mundo se derrumbaba. Nunca había pen­sado que podría llegar a encontrarse en esa situación. Llegó a su casa, por primera vez, desocupado. ¿Qué hacer?

Recordó que a veces en el hotel cuando se rompía una cama o se arrui­naba una pata de un ropero, él, con un martillo y clavos, se las ingeniaba para hacer un arreglo sencillo y provisorio. Pensó que ésta podría ser una ocupación transitoria hasta que alguien le ofreciera un empleo.

Buscó por toda la casa las herramientas que necesitaba, sólo tenía unos clavos oxidados y una pinza mellada. Tenía que comprar una caja de herramientas completa. Para eso usaría una parte del dinero que había recibido.

Pero en su pueblo no había una ferretería, y debería viajar dos días en muía para ir al pueblo más cercano a realizar la compra. "¿Qué más da?", pensó, y emprendió la marcha.

A su regresó, traía una hermosa y completa caja de herramientas. No había terminado de quitarse las botas cuando llamaron a la puer­ta de su casa. Era su vecino.— Vengo a preguntarle si no tiene un martillo para prestarme.— Mire, sí, lo acabo de comprar pero lo necesito para trabajar... como me quedé sin empleo...— Bueno, pero yo se lo devolvería mañana bien temprano.— Está bien.

A la mañana siguiente, como había prometido, el vecino tocó la puerta.— Mire yo todavía necesito el martillo. ¿Por qué no me lo vende?— No, yo lo necesito para trabajar y además, la ferretería está a dos días en muía.

Segunda parte: La magia de los recursos 149

— Hagamos un trato —dijo el vecino. Yo le pagaré a usted los dos días de ida y los dos días de vuela, más el precio del martillo, total usted está sin trabajar. ¿Qué le parece?Realmente esto le daba trabajo por cuatro días.... Aceptó.

Volvió a montar su muía.Al regreso otro vecino lo esperaba en la puerta de su casa.— Hola vecino. ¿Usted le vendió un martillo a nuestro amigo?- S í . . .—Yo necesito unas herramientas, estoy dispuesto a pagarle sus cuatro días de viaje y una pequeña ganancia por cada herramienta. Usted sabe, no todos podemos disponer de cuatro días para nuestras compras.El ex portero abrió su caja de herramientas y su vecino eligió una pinza, un destornillador, un martillo y un cincel. Le pagó y se fue. "N o todos disponemos de cuatro días para hacer compras...", recor­dó. Si esto era cierto, mucha gente podría necesitar que él viajara a traer herramientas.

En el siguiente viaje decidió que arriesgaría un poco del dinero de la indemnización, trayendo más herramientas de las que había ven­dido. De paso podría ahorrar algún tiempo en viajes. La voz empezó a correr por el barrio y muchos quisieron evitarse el viaje. Una vez por semana, viajaba y compraba lo que necesitaban sus clientes.

Pronto entendió que si pudiera encontrar un lugar donde alma­cenar las herramientas, podría ahorrar viajes y ganar más dinero; lo alquiló. Luego le hizo una entrada más cómoda y después una vidriera, el lugar se transformó en la primera ferretería del pueblo.

Ya no viajaba, de la ferretería del pueblo vecino le enviaban sus pedidos. Él era un buen cliente. Con el tiempo todos los comprado­res de pueblos pequeños más lejanos, preferían comprar en su ferre­tería y ganar dos días de marcha.

Un día se le ocurrió que su amigo el tornero podría fabricar para él las cabezas de los martillos. Y luego, ¿por qué no?, las tenazas, y las pinzas y los cinceles. Y luego fueron los clavos y los tornillos.

En diez años aquel hombre se transformó con honestidad y tra­bajo en un millonario fabricante de herramientas. El empresario más poderoso de la región. Tan poderoso era, que un día, decidió donar a su pueblo una escuela. Allí se enseñarían, además de lecto-escritu- ra, artes y oficios.

El intendente y el alcalde organizaron una gran fiesta de inaugura­ción de la escuela y una importante cena de agasajo para su fundador.

150 Historias para contarse... y crecer juntos

El alcalde le entregó las llaves de la ciudad y el intendente lo abrazó y le dijo:— Es con gran orgullo y gratitud que le pedimos nos conceda el honor de poner su firma en la primera hoja del libro de actas de la escuela.— El honor sería para mí — dijo el hombre —. Creo que nada me gus­taría más que firmar allí, pero yo no sé leer ni escribir.— ¿Usted? —dijo el intendente, que no alcanzaba a creerlo — , ¿Usted no sabe leer ni escribir? ¿Usted construyó un imperio industrial sin saber leer ni escribir? Estoy asombrado. Me pregunto, ¿qué hubiera hecho si hubiera sabido leer y escribir?— Yo se lo puedo responder —dijo el hombre con calma.— Si yo hubiera sabido leer y escribir... ¡sería portero del hotel!

6 2 ) E l c o r r e o d e l Z a r 2

El respaldo de las acciones se encuentra en las creencias

Historia:

Existe una leyenda rusa en la que cuentan que un jinete que viaja­ba solitario, cabalgó durante largas horas sobre una planicie barrida por el viento y cubierta de nieve.

Llegó finalmente aquella noche invernal a la puerta de una posada donde buscó calor y refugio. El encargado de la posada, sorprendido al verlo llegar por ese rumbo, le preguntó en qué dirección venía.

El viajero le contestó señalando la ruta.El encargado, más asombrado que nunca y con gran expresión de

espanto, le dijo que había cabalgado a través de un lago congelado que se encontraba cubierto por una delgada capa de nieve.

Mientras el legendario jinete creyó que había viajado sobre tierra firme, llegó exhausto pero alcanzó su meta.

La tragedia ocurrió cuando se percató de que había cabalgado sobre una delgada capa de hielo, porque sobrecogido por el shock del descubrimiento, cayo muerto a los pies del encargado de la posada.

2 Historia para contarse a: Quien se da por vencido fácilmente. Quien cree que no controla lo que hace. Quien quiere hacer algo pero no lo hace. Personas que no reflexionan acerca de sus actos. Alguien que se está poniendo en peligro por lo que cree. Personas que están luchando por tener aquello que quieren.

151

Cuando el alumno no quiere escuchar tiene mejor efecto actuar

Historia:

Había un hombre muy rico que poseía muchos bienes, mucho gana­do, varios empleados, y un único hijo, su heredero.

Lo que más le gustaba al hijo era hacer fiestas, estar con sus ami­gos y ser adulado por ellos.

Su padre siempre le advertía que esos amigos sólo estarían a su lado mientras tuviese algo que ofrecerles, y que después le abando­narían; pero el hijo ignoraba sus palabras.

Un día, el preocupado padre, ya avanzado en edad, dijo a sus empleados que construyeran un establo. Dentro de él, preparó una horca y, junto a ella, una placa que decía: "aprovecha las palabras de tu padre".

Mas tarde llamó a su hijo, lo llevó al establo, y le dijo: Ya estoy viejo, y cuando yo me vaya, tú te encargarás de todo lo que es mío..., pero si sigues así tu futuro peligra, si dejas todo en manos de los em­pleados y gastas todo el dinero con tus amigos, cuando no tengas ya nada, seguro se apartarán de ti. Quizá entonces cuando no cuentes con nadie te arrepentirás amargamente. Es por esto que construí esta horca... ¡Es para ti! Quiero que me prometas que, si sucede lo que yo te dije, te ahorcarás en ella.

El joven se rió, pensó que era un absurdo pero, para no contrade­cir al padre, hizo la promesa, pensando que eso jamás sucedería.

El tiempo pasó, el padre murió, y su hijo se quedó con todo, pero muy pronto, perdió los bienes, perdió sus amigos y hasta la propia dignidad.

Desesperado y afligido, comenzó a reflexionar sobre su vida y encontró que había sido un tonto. Se acordó entonces de las palabras de su padre y dijo:

"Ah, padre mío... Si yo hubiese escuchado tus consejos... Pero ahora es demasiado tarde..."

Apesadumbrado, el joven levantó la vista y vio el establo. Con pasos lentos, se dirigió hasta allá y entrando, vio la horca y la placa llenas de polvo, y entonces pensó:

3 Historia para contarse a: Personas que no escuchan consejos. Un joven que no valora lo que tiene. Quien esté educando niños o jóvenes. Quien no esté escuchando a los demás. Personas que ven la vida como un juego. Alguien que esté desperdiciando su vida. Padres desespera­dos por no saber qué hacer. Gente joven para que se dé cuenta de lo que le dicen sus padres. Personas que tienen enfrente las oportunidades y no las ven.

6 3 ) O t r a o p o r t u n i d a d 3

152 Historias para contarse... y crecer juntos

Nunca seguí las palabras de mi padre, no le alegré cuando estaba vivo, pero, al menos esta vez, haré su voluntad.

Subió los escalones, se colocó la cuerda en el cuello, y se tiró des­de lo alto; por un instante, sintió que la cuerda apretaba su gargan­ta... Era el fin.

Pero el brazo de la horca era hueco y se quebró fácilmente, el joven cayó al piso. Sobre él cayo un sobre cerrado, algunos billetes y una carta, de su padre que decía: "Si estás leyendo esta carta es porque te has arre­pentido y estuviste dispuesto a todo, te dejo aquí sólo lo necesario para que vivas un par de meses sin pasar hambre, mientras diseñas la forma en que vas a vivir tu vida de aquí en adelante. Con amor, tu viejo..."

Secándose las lagrimas, el joven beso la carta y se comprometió consigo mismo a aprovechar esta nueva oportunidad.

6 4 ) L O S MUEBLES4

Aligera la cargaHistoria:

Cierto día estaba yo de' turista y llegué de visita a la casa de un sabio maestro.

Al entrar, me di cuenta que la morada del viejo consistía de un colchón en el piso y unos pocos libros.

Extrañado, le pregunté:— Disculpe, pero, ¿dónde están sus muebles?El anciano me miró con calma y respondió:— ¿En dónde están los suyos?— Pero si yo sólo estoy aquí de paso —le repliqué.El maestro sonrió levemente y continúo:— Yo también estoy de paso en esta vida.

6 5 ) E l p u n t o c r í t i c o 5

Unos cuantos podemos hacer el cambioHistoria:

Un científico de nombre Gregorio, mientras paseaba por las Islas Fili­pinas, fue atraído por un grupo de monos que manifestaban un com­

4 Historia para contarse a: Quien vive lamentándose. Quien guarda enojos del pasado. Personas que se hacen pesada la vida. Quien dice tener muchos problemas. Personas que tienen muchos apegos.

5 Historia para contarse a: Personas que siempre están esperando que alguien haga algo. Quien crea que no puede hacer algo para mejorar el mundo. Personas que no creen que el mundo pue­da ser diferente. Alguien que cree que sólo las cosas malas se transmiten. Quien no sepa que un solo acto puede cambiarlo todo. Personas que tienen ideas buenas y temen exponerlas.

Segunda parte: La magia de los recursos 153

portamiento extraño con respecto al resto de los monos de otros luga­res en el mundo. Generalmente a los integrantes de esta especie no les importa comer los frutos sucios o con tierra; es un acontecimiento que no tiene la mayor trascendencia. Sin embargo, en esta isla los monos comenzaban a lavar los frutos sumergiéndolos en un arroyo antes de comerlos, siguiendo el ejemplo de una mona que fue transmitiendo esta habilidad, uno por uno, a cada uno de sus compañeros.

Repentinamente, después de que un grupo de cien monos apren­dió la técnica de lavado, ocurrió un fenómeno que llamó la aten­ción de Gregorio; instantáneamente todos los monos de la colonia comenzaron a lavar los frutos.

El biólogo describió el repentino aprendizaje de este modo: "Un día martes, aproximadamente a las once de la mañana había ya un grupo de noventa y nueve monos que realizaban en conjunto la la­bor de lavar su fruto. Un instante después se unió uno más de la manera usual que el resto, y era el número cien. Sólo fue al parecer la suma del mono numero cien, lo que logró que sobrepasará algún li­mite alcanzando un punto crítico, alguna barrera natural de tiempo- espacio, porque además de que todos los monos de la isla realizaban esta tarea, lo verdaderamente asombroso es que otros monos de islas cercanas también comenzaron a hacerlo sin que nadie les hubiera enseñado nada..."

66) L a l e y e n d a d e N a r c i s o 6

La belleza está en los'ojos de quien la miraHistoria:

Narciso era un joven hermoso que todos los días contemplaba su imagen reflejada en el agua de un lago, le agradaba ver sus grandes ojos, su hermoso cabello, sus definidos labios; disfrutaba su propia belleza en el lago.

Estaba encantado consigo mismo; tanto, que un día por mirar­se más de cerca, se cayó dentro del lago. Al caerse, se sumergió y murió ahogado.

Cuando Narciso murió, las diosas del bosque vieron el lago trans­formarse, de un lago de agua dulce, en un lago de lágrimas.

Al verlo llorando le preguntaron:— ¿Por qué lloras?

6 Historia para contarse a: Personas vanidosas. Alguien con baja autoestima. Q uien crea que todo gira alrededor de sí mismo. Quien no considera que sus acciones siempre repercuten en otros. Personas que requieren de alguien para darse cuenta de lo valiosos que son.

154 Historias para contarse... y crecer juntos

— Lloro por Narciso.— ¡Ah!, no nos asombra que llores por Narciso, nosotras siempre co­rríamos tras él por el bosque, tú eras el único que tenía la oportuni­dad de contemplar de cerca su belleza.— Pero, ¿Narciso era bello? —preguntó el lago.— ¿Quién podría saberlo más que tú? Si era ante ti que él se inclinaba para contemplarse todos los días.El lago se quedó algún tiempo callado. Finalmente dijo:— Yo lloro por Narciso, porque cada vez que él se inclinaba sobre mis aguas yo podía ver, en el fondo de sus ojos, mi propia belleza reflejada.

6 7 ) C ó m o s e a r r e g l a e l m u n d o 7

La verdadera transformación del mundo empieza por tiHistoria:

Marcelo, un científico que vivía preocupado con los problemas del mun­do y estaba resuelto a encontrar medios para disminuirlos, pasaba días encerrado en su laboratorio, en busca de respuestas para sus dudas.

Cierto día, Alelí, su hija de siete años, invadió su santuario, deci­dida a ayudarlo en su trabajo. El científico, nervioso por la interrup­ción, intentó hacer que su hija fuera a jugar a otro sitio. Viendo que sería imposible sacarla de allí, procuró algo para darle a Alelí, con el objetivo de distraer su atención.Tomó un mapa del mundo de una revista con la que la niña había estado jugando, y con una tijera recortó el planisferio en gran canti­dad de pedazos, y junto con un rollo de cinta adhesiva lo entregó a su hija diciendo:

— ¿A ti te gustan los rompecabezas, verdad? Entonces voy a darte el mundo para arreglar. Aquí está el mundo todo roto. ¡Mira si puedes arreglarlo bien! Hazlo todo sola.Calculó que la niña no podría recomponer el mapa, o que le llevaría días... Algunas horas después, oyó la voz de Alelí que le decía:— Papi, ya lo hice. ¡Conseguí arreglar todo!

Al principio Marcelo no dio crédito a las palabras de Alelí. ¿Sería posible a su edad, haber conseguido recomponer un mapa que no

7 Historia para contarse a: Personas que se sientan atrapadas por sus problemas. Quien crea que sólo hay una solución para sus problemas. Quien no se da cuenta que el mundo es el reflejo de lo que somos. Personas que no se dan cuenta que el cam bio empieza en sí mismas. Personas pesimistas que piensen que no pueden solucionar las cosas.

Segunda parte: La magia de los recursos 155

había visto? Entonces, el papá levantó los ojos de sus anotaciones, seguro que vería un trabajo digno de una niña de siete años, con huecos, quizá chueco y con piezas fuera de su lugar. Para su sorpre­sa, el mapa estaba completo y todos los pedazos habían sido coloca­dos en su sitio.

¿Cómo era posible? ¿Cómo la niña había sido capaz?— Tú no sabías cómo era el mundo, Alelí, ¿cómo lo conseguiste?— Pa', yo no sabía cómo era el mundo, pero cuando tú quitaste el pa­pel de la revista para recortar, yo vi que del otro lado había la figura de un hombre. Cuando me diste el mundo para arreglarlo, yo lo intenta­ba y no lo conseguía. Entonces me acordé del hombre, le di vuelta a los recortes y empecé a arreglar al hombre, que sí sé cómo es... Cuando conseguí arreglar al hombre, le di vuelta a la hoja y encontré que se había arreglado el mundo.

6 8 ) El a v e y e l p e r r o 8

Ayúdate que yo te ayudaréHistoria:

En tiempo de invierno un leñador acompañado de su perro, traba­jaba por las tardes en el bosque. Un día fue atraído por un ave que llevaba una presa grande en el pico. Vio que se acercó a una cueva y dejó la comida, saliendo enseguida de ahí.

Al día siguiente el ave volvió a pasar con una nueva presa, que dejó nuevamente en la cueva y luego se marchó.

Extrañado el leñador, llegó hasta la cueva y vio a un lobo mal herido que comía la presa que había dejado el ave.

Se maravilló por la grandeza de la naturaleza y la forma tan her­mosa de compartir del ave. Su perro lo acompañó todo el tiempo y pudo observar con detalle todos los acontecimientos.

Cuando el invierno concluyó, el leñador salió una mañana a tra­bajar, y por el camino, al ver un ave volando, el perro que lo acom­pañaba se tiró en el piso y comenzó a aullar como si estuviera mal herido, mientras miraba al ave volando...

El leñador, adivinando su intención, le dijo:— Deja de fingir porque tú nada necesitas y puesto que todo lo tie­nes..., mejor imita el comportamiento del ave.

8 Historia para contarse a: Quien se rinde fácilmente. Quien cree que es un inútil. Personas dependientes emocionalmente. Quien cree que no puede lograr sus metas. Personas que no es­tán usando sus capacidades. Quien se sienta a esperar a que llegue la solución. A quien puede contribuir y no se ha dado cuenta.

156

6 9 ) E l b u r r o 9

La fortaleza ante la adversidad puede ser la soluciónHistoria:

Un día, el burro de un campesino se cayó en un pozo.El animal lloró fuertemente por horas, mientras el campesino tra­

taba de buscar algo que hacer.Finalmente, el campesino decidió que el burro ya estaba viejo y

el pozo ya estaba seco y necesitaba ser tapado de todas formas; que realmente no valía la pena el esfuerzo para sacar al burro del pozo.

Invitó a todos sus vecinos para que vinieran a ayudarle.Cada uno agarró una pala y empezaron a tirarle tierra al pozo. El

burro se dio cuenta de lo qué estaba pasando y lloró horriblemente.Luego, para sorpresa de todos, dejo de llorar después de unas

cuantas paladas de tierra.El campesino finalmente miró al fondo del pozo y se sorprendió

de lo que vio...; con cada palada de tierra, el burro estaba haciendo algo increíble: se sacudía la tierra, la comprimía en el fondo del pozo y daba un paso encima de la misma.

Muy pronto todo el mundo vio sorprendido cómo el burro llegó hasta la boca del pozo, pasó por encim a del borde y salió trotando...

7 0 ) E l g a t o d e l g u r ú 10

La importancia de las cosas depende de las personasHistoria:

Cuando, cada tarde, se sentaba el gurú para las prácticas del cul­to, siempre andaba por allí el gato del Ashram distrayendo a los fieles.

De manera que ordenó el gurú que ataran al gato durante el culto de la tarde.

Mucho después de haber muerto el gurú, seguían atando al gato durante el referido culto.

Y cuando el gato murió, llevaron otro gato al Ashram para poder atarlo durante el culto vespertino.

9 Historia para contarse a: Quien se dé por vencido cuando los demás lo atacan. Quien no sepa que tiene la fuerza para salir adelante. Personas que juzgan y condenan a otros. Personas que menosprecian a los demás. Q uien ya no quiera seguir adelante.

111 Historia para contarse a: Personas dependientes. Una persona supersticiosa. A quien siga tra­diciones sin sentido. Alguien que se deja llevar por los demás. Personas que se aterran a algunos sucesos de su vida. Quien crea que las cosas tienen que seguir siendo del mismo modo.

Segunda parte: La magia de los recursos 157

Siglos más tarde, los discípulos del gurú escribieron doctos trata­dos acerca del importante papel que desempeña el gato en la reali­zación de un culto como es debido...

71) El l e ñ a d o r e s f o r z a d o 11

Lo más elemental es lo fundamentalHistoria:

Había una vez un leñador que se presentó a trabajar en una madere­ra. El sueldo era bueno y las condiciones de trabajo mejores aún; así que el leñador se decidió a hacer un buen papel.

El primer día se presentó ante el capataz, quien le dio un hacha y le designó una zona.

El hombre entusiasmado salió al bosque a talar. En un solo día cortó dieciocho árboles.— Te felicito —dijo el capataz — , sigue así.Animado por las palabras del capataz, el leñador se decidió a mejo­rar su propio desempeño al día siguiente; así que esa noche se acostó bien temprano.

A la mañana se levantó antes que nadie y se fue al bosque. Pero a pesar de todo el empeño, no consiguió cortar más que quince árboles.

"M e debo haber cansado...", pensó, y decidió acostarse con la puesta del sol.

Al amanecer, se levantó decidido a batir su marca de dieciocho árboles. Sin embargo, ese día no llegó ni a la mitad.

Al día siguiente fueron siete, luego cinco y el último día estuvo toda la tarde tratando de voltear su segundo árbol.

Inquieto por el pensamiento del capataz, el leñador se acercó a contarle lo que le estaba pasando, y jurarle y perjurarle que se esfor­zaba al límite de desfallecer.

El capataz le preguntó:— ¿Cuándo afilaste tu hacha la última vez?— ¿Afilar? No tuve tiempo de afilar, estuve muy ocupado cortando árboles.

11 Historia para contarse a: Alguien que trabaje mucho y no descanse. Una persona que se esté dando por vencida. Quien se empeña en una cosa descuidando otra. Alguien que requiera mejorar la calidad de su1 trabajo. Quien trabaja mucho y no consigue lo que quiere. Quien se somete totalmente al trabajo y se olvida de sf mismo. Quien no sabe cómo ha llegado a los resultados que tiene.

158

7 2 ) L a p a j a q u e r o m p i ó l a e s p a l d a d e l c a m e l l o 12

Subestimar pequeños detalles puede tener grandes consecuencias

Historia:

En una comunidad en la que acostumbraban transportar cosas en la espalda de los camellos, llevaban cargas de ropa, madera y paja.

Como se daban cuenta que el camello aguantaba mucho, ponían más y más, hasta que un día decidieron probar hasta dónde podría ser el verdadero límite y comenzaron a poner, primero ropa, luego madera, después montoncitos de paja...

Llegaron a creer que si ponían una pajita más, no pasaría nada por­que esa pesaba muy poquito, entonces colocaron otra paja; como no sucedió nada cuando menos en apariencia, colocaron otra pajita que pesaba casi; no fue evidente nada en este momento tampoco.

Así que continuaron y continuaron aumentando pajitas que casi no pesaban nada, hasta que, ante la sorpresa de todos se le rompió la espalda y cayó muerto el camello, que desde luego, no pudo cumplir más con la tarea de llevar la carga que estaba destinada para él.

7 3 ) L a p e r l a n e g r a 13

Te puedes desprender de lo que tienes, cuando eres rico en espíritu

Historia:

Un pescador que vivía en una pobre casucha, tuvo un sueño en el que un mago le dijo que buscara en los caminos próximos a la ribera a un hombre con vestimenta extraña que acamparía ahí, bajo la som­bra de un árbol, para pasar la noche.— Ese hombre traerá consigo una perla negra de un valor incalcula­ble y una belleza extraordinaria. Si consigues que te la dé, serás rico para el resto de tu vida — dijo el mago.El pescador al despertar, corrió hacia la ribera, donde efectivamente había un hombre. Se aproximó apresurado y le dijo:— ¡La perla!, ¡la perla!, ¡dame la perla preciosa!

12 Historia para contarse a: Quien persiste en sus actos a pesar de las consecuencias. Quien desprecia las cosas por ser pequeñas. Q uien carga con m uchos problemas. Quien se excede de sus límites. Personas que abusan de otras. Quien se satura de trabajo.

13 Historia para contarse a: Personas deprimidas. Personas que no crean en sí mismas. Quien crea que no puede ayudar a nadie. Personas que se consideren innecesarias. Quien ha perdido la capacidad de asombro. Alguien que no encuentre el sentido de su vida. Personas que se sientan insatisfechas con lo que hacen.

Segunda parte: La magia de los recursos 159

— ¿Qué perla? —preguntó el forastero.El pescador le contó su sueño y su historia de pobreza. El extranjero buscó en sus ropas, le dio la perla y le dijo: "puedes quedarte con ella".

El pescador se quedó mirando la perla con asombro. ¡Era en ver­dad hermosa! Tal vez la más preciosa del mundo. Su valor debía ser insuperable pues era fantástica... A pesar de su embebecimiento, reaccionó, tomó la perla y se marchó.

Ante lo sorpresivo de los acontecimientos el pobre pescador pasó la noche, sin poder conciliar el sueño y preguntándose qué pudo haber inspirado al forastero a tal comportamiento.

Al día siguiente, fue a buscar al extranjero y le dijo:— Por favor enséñame esa riqueza que te permite desprenderte con tal facilidad de las cosas; permíteme conocer tu verdadera fortuna.— Yo voy a compartir ahora mi historia —dijo el forastero — . Me en­contraba muy triste desde hace algún tiempo; un día, caminando por el sendero del bosque, me encontré con un mago que me dijo: "Deja tu tristeza, sigue tu camino y comparte lo que tienes". Puedo compar­tir lo que tengo sin problema, le contesté, pero dejar mi tristeza, eso no puedo. "¿Cuál es la razón de tu tristeza?", me preguntó entonces el mago. Soy un ser inútil, le dije, no soy importante para nadie y no hay persona en el mundo a quien yo pueda enseñarle algo. "Ante esta confesión voy a darte esta perla negra —agregó—, y con ella encontra­rás lo que buscas". Tú perla no me sirve, le dije, llévatela y déjame en paz con mi tristeza. "Sí, voy a irme —me contestó—, pero te dejaré la perla, ve por los caminos próximos a la ribera, elige una buena sombra de árbol para acampar y ahí encontrarás lo que has estado buscando. Obséquiale esta perla a una persona, recibirás a cambio una evidencia de lo equivocado que has estado".

74) Los SIETE TARROS DE ORO14

De nada sirve atesorar lo que no se puede utilizarHistoria:

Al pasar un barbero bajo un árbol embrujado, oyó una voz que le decía:— ¿Te gustaría tener los siete tarros de oro?

14 Historia para contarse á: Q uien no sepa usar los recursos materiales. Personas que envidianlo que tienen otros. Personas que no valoran lo que tienen. Personas que quieren más y más. Quien no disfruta su vida, hoy.

160 Historias para contarse... y crecer juntos

El barbero miró en torno suyo y no vio a nadie. Pero su codicia se había despertado y respondió anhelante:— Sí, me gustaría mucho.— Entonces ve a tu casa enseguida —dijo la voz — , y allí los encon­traras.El barbero fue corriendo a su casa. Y en efecto allí estaban los siete tarros, todos llenos de oro excepto uno que sólo estaba medio lleno. Entonces el barbero no pudo soportar la idea de que un tarro no estuviera lleno del todo. Sintió un violento deseo de llenarlo, de lo contrario no seria feliz.

Fundió todas las joyas de la familia en monedas de oro y las echó al tarro. Pero este seguía igual que antes: medio lleno. ¡Aquello le exasperó! Se puso a ahorrar y a economizar como un loco, hasta el punto de hacer pasar hambre a su familia.

Todo inútil: por mucho oro que introdujera en el tarro, éste seguía estando medio lleno.

De modo que un día pidió al rey que le aumentara su sueldo. El sueldo le fue doblado y reanudo su lucha por llenar el tarro. Incluso llegó a mendigar. Y el tarro engullía cada moneda de oro que en él se introducía, pero seguía estando obstinadamente a medio llenar.

El rey cayó en la cuenta del miserable aspecto del barbero. Y le preguntó:

— ¿Qué es lo que te ocurre? Cuando tu sueldo era menor, parecías tan feliz y satisfecho. Y ahora que te ha sido doblado el sueldo estás destrozado y abatido. ¿No será que tienes en tu poder los siete tarros de oro?El barbero quedó estupefacto:— ¿Quién te lo ha contado, majestad? —preguntó.El rey se rió...

— Es que es obvio que tienes los síntomas de la persona a quien el fantasma ha ofrecido los siete tarros de oro. Una vez me los ofreció a mí y yo le pregunte si el oro podía ser gastado o era únicamente para ser atesorado; y él se esfumó sin decir una sola palabra. Aquel oro no podía ser gastado. Lo único que ocasiona es el vehemente impulso de amontonar cada vez más. Anda, ve y devuélveselo al fantasma ahora mismo y ya verás que volverás a disfrutar.

161

7 5 ) ¿ P o r q u é n o h a c e s n a d a ? 15

La solución está en tus manosHistoria:

Por la calle vi a una niña aterida y tiritando de frío dentro de su ligero vestidito y con pocas perspectivas de conseguir una comida decente.

Me encolericé y le dije a Dios:— ¿Por qué permites estas cosas? ¿Por qué no haces nada para solu­cionarlo?Durante un rato, Dios guardó silencio. Pero aquella noche, de im­proviso, me respondió:— Ciertamente que he hecho algo. Te he hecho a ti...

7 6 ) N u b e A l t a y T o r o B r a v o 16

Cada persona requiere su espacioHistoria:

Cuenta una vieja leyenda de los Indios Sioux que, una vez, hasta la tien­da del viejo brujo de la tribu llegaron, tomados de la mano, Toro Bravo, el más valiente y honorable de los jóvenes guerreros, y Nube Alta, la hija del cacique y una de las más hermosas mujeres de la tribu.— Nos amamos —empezó el joven.— Y nos vamos a casar —dijo ella.— Y nos queremos tanto que tenemos miedo.— Queremos un hechizo, un conjuro, un talismán.— Algo que nos garantice que podremos estar siempre juntos.— Que nos asegure que estaremos una al lado del otro hasta encon­trar a Manitú el día de la muerte.— Por favor —repitieron. ¿Hay algo que podamos hacer?El viejo los miró y se emocionó de verlos tan jóvenes, tan enamora­dos, tan anhelantes esperando su palabra.— Hay algo... —dijo el viejo después de una larga pausa. Pero no sé... es una tarea muy difícil y sacrificada.— No importa —dijeron los dos.

13 Historia para contarse a: Alguien que no da a los demás. Q uien sólo ve las situacionesdifíciles. Quien no valora lo que tiene y desperdicia las cosas. Personas que siem pre se estánquejando y no hacen nada.

16 Historia para contarse a: Quien no se-despega de su pareja. Situaciones de violencia intra- familiar. Personas que viven con muchas ataduras. Personas que quieren atar a su lado a otra. Personas que creen que el amor es atarse a alguien. Parejas que a pesar de que se lastiman siguen juntas. Padres que lastimen a sus hijos por buscar corregirlos.

162 Historias para contarse... y crecer juntos

— Lo que sea —ratificó Toro Bravo.— Bien —dijo el brujo. Nube Alta, ¿ves el monte al norte de nuestra aldea? Deberás escalarlo sola y sin más armas que una red y tus ma­nos, y tendrás que cazar al halcón más hermoso y vigoroso del mon­te. Si lo atrapas, deberás traerlo aquí con vida al tercer día después de la luna llena. ¿Comprendiste?La joven asintió en silencio.— Y tú, Toro Bravo —siguió el brujo — , deberás escalar la montaña del Trueno y cuando llegues a la cima, encontrar la más bravia de todas las águilas y solamente con tus manos y una red deberás atra­parla sin heridas y traerla ante mí, viva, el mismo día en que vendrá Nube Alta... Salgan ahora.Los jóvenes se miraron con ternura y, después de una fugaz sonri­sa, salieron a cumplir la misión encomendada; ella hacia el norte, él hacia el sur... El día establecido los dos jóvenes esperaban frente a la tienda del brujo con sendas bolsas de tela que contenían las aves solicitadas. El viejo les pidió que con mucho cuidado las sacaran de las bolsas. Los jóvenes lo hicieron y expusieron ante la aprobación del viejo los pájaros cazados. Eran ejemplares verdaderamente her­mosos, sin duda lo mejor de su estirpe.— ¿Volaban alto? —preguntó el brujo.— Sí, sin duda. Como lo pediste... ¿Y ahora? —preguntó el joven — . ¿Los mataremos y beberemos el honor de su sangre?— No — dijo el viejo.— Los cocinaremos y comeremos el valor de su carne — propuso la joven.— No, repitió el viejo. Líagan lo que les digo. Tomen las aves y áten­las entre sí por las patas con estas tiras de cuero... Cuando las hayan anudado, suéltenlas y que vuelen libres.El guerrero y la joven hicieron lo que se les pedía y soltaron los pá­jaros. El águila y el halcón intentaron levantar vuelo pero sólo con­siguieron revolcarse en el piso. Unos minutos después, irritadas por la incapacidad, las aves arremetieron a picotazos entre sí hasta lastimarse.

— Este es el conjuro. Jamás olviden lo que han visto. Son ustedes como un águila y un halcón; si se atan el uno al otro, aunque lo ha­gan por amor, no sólo vivirán arrastrándose, sino que además tarde o temprano, empezarán a lastimarse uno al otro. Si quieren que el amor entre ustedes perdure, vuelen juntos pero jamás atados.

163

7 7 ) E l c e n t a u r o 17

Es tan importante actuar como pensarHistoria:

Había una vez un centauro que, como todos los centauros, era mitad hombre y mitad caballo. Una tarde, mientras paseaba por el prado sintió hambre.

"¿Qué comeré? —pensó—, ¿Carne o alfalfa, alfalfa o carne...?" Y como no pudo decidirse, se quedó sin comer. Llegó la noche y el centauro quiso dormir.

"¿Dónde dormiré? —pensó — , ¿En el establo o en un hotel, en un hotel o en el establo...?" Y como no pudo decidirse, se quedó sin dor­mir. Claro sin comer y sin dormir el centauro se enfermó.

"¿A quién llamar? —pensó — . ¿A un médico o a un veterinario, a un veterinario o a un médico...?" Enfermo y sin poder decidir a quién llamar, el centauro murió. La gente del pueblo se acercó al cadáver y sintió pena.— Hay que enterrarlo —dijeron—, Pero, ¿adonde? ¿En el cementerio del pueblo o a campo traviesa, a campo traviesa o en el cementerio del pueblo? La gente del pueblo no supo qué hacer... lo dejó todo en el olvido. El centauro después de un ciclo volvió a vivir y se pregunto: "¿Qué com eré...?"

7 8 ) L a t e r c e r a h o j a 18

Es tan importante tener- un motivo para vivir como una perfecta salud

Historia:

A mitad de un frío invierno, una joven mujer se encontraba entre la vida y la muerte, luchando con una terrible enfermedad que parecía ensañarse con ella.

Debido a esto, se encontraba postrada en cama mientras, día a día, iba perdiendo fuerzas; aun cuando tenía inmensos deseos de vivir e innumerables sueños por cumplir, se daba cuenta de que el momento fatal estaba cerca.

17 Historia para contarse a: Personas indecisas. Quien no se toma el riesgo. Quien no sabe to­mar decisiones. Q uien no se atreve a hacer las cosas. Personas que sufran de alguna adicción.

18 Historia para contarse a: Personas enfermas. Personas deprimidas. Personas con pensa­mientos suicidas. Persortas que no quieren seguir luchando. Personas que atraviesan situacio­nes difíciles. Personas que se dan por vencidas muy rápido. Quien centrado en los problemas no ve las soluciones. Quien no se dé cuenta de que hay mucho por qué vivir.

164 Historias para contarse... y crecer juntos

Todos los días desde su cama observaba, a través de su ventana, la enredadera que subía por la pared del edificio de enfrente, la cual, de­bido al invierno, estaba deshojándose lentamente; veía cómo una a una iban cayéndose al paso de los días, las hojas que un día habían sido ver­des y que cubrían por completo la pared de ladrillo del viejo edificio.

Una mañana se percató de que sólo quedaban tres hojas en la única rama verde sobre la pared; hablando en voz alta, se dijo a sí misma que cuando la tercera hoja cayera, ella también moriría. Estaba convencida de que así sería y cerró sus ojos cayendo en un sopor febril e inquieto.

Su vecino y amigo, un pintor cuyos mejores años habían pasado, solía visitarle para llevarle sopa caliente y alguna compañía; ese día, escuchó a la joven mujer cuando fijaba su destino al de la última hoja de la enredadera. Pensando que no podía hacer nada para evitarlo, se limitó a acompañarla como de costumbre, mientras veía caer las dos primeras hojas.

Sin embargo, una idea empezó a rondarle por la cabeza: en sus mejores años de pintor nunca pudo crear una verdadera obra de arte, la obra maestra que le llevara a la fama y a la gloria; su trabajo nunca le había dejado satisfecho, aun cuando se había esmerado, así que viejo y cansado había desistido y se conformaba con vender de vez en cuando algún cuadro por unos pesos para ir viviendo.

Para el anochecer sólo quedaba una hoja y él sabía que habría caído para la mañana siguiente, con lo cual su joven amiga moriría también. Así que decidido, tomó sus pinceles y pinturas y salió a la intemperie en la fría noche, subió por una escalera y sobre la pared dibujó una réplica exacta de una hoja, tan bella y perfecta, que no podía distinguirse de una verdadera. ¡Era su obra maestra!

A la mañana siguiente, cuando la joven despertó, descubrió que aún quedaba una hoja y lo mismo al día siguiente y al siguiente y al siguiente y así al paso de los días; mientras veía la hoja resistir a las inclemencias del tiempo, ella también iba mejorando y al cabo de unas semanas finalmente recuperó sus fuerzas y venció a la enfermedad.

165

Cada uno puede ser el eslabón que falta para unir al mundo

Historia:

El día estaba frío, lluvioso y gris. Alberto, que regresaba a su casa, pudo ver a una anciana parada junto a un lujoso auto moviendo los brazos en actitud de pedir ayuda.

Se estacionó, bajó del auto y vio en la actitud de la anciana el re­flejo del miedo y la preocupación.

Pensó entonces en su propia apariencia; humilde, sucio y con hambre. Encontró que sus palabras interrumpían sus pensamientos, cuando dijo:— Vengo para ayudarla señora, entre en su auto, que allí estará có­moda, seca y caliente, mi nombre es Alberto.Sólo era una llanta ponchada, pero para la anciana era una situación difícil. Al terminar el trabajo Alberto, y mientras caminaba rumbo a la ventanilla donde observaba la anciana agradecida, ella le preguntó:— ¿Cuánto le debo joven?

Ella estaba dispuesta a pagar lo que le hubiera pedido en esas cir­cunstancias.

La anciana se sorprendió cuando escuchó la respuesta de Alberto, que le dijo:

— No me detuve por dinero, pero si quiere pagarme, le pediré que la próxima vez que encuentre a alguien en necesidad, y esté a su alcan­ce asistirlo, hágalo de manera desinteresada; y entonces... acuérdese de mí.

Cuando el auto se alejó, Alberto sintió un poco de frío, pero se sintió bien al haber terminado el día de esta forma.

Un poco más adelante, la señora vio una cafetería, y se detuvo para calentarse con un poco de café. Una mesera, muy cortés, se le acercó y le ofreció unas toallas de papel para que se secara el cabe­llo, mojado por la lluvia; la anciana notó que la mesera tendría unos ocho meses de embarazo, y que caminaba lento y con dificultad. Se quedó reflexionando unos momentos y pensó: "Cómo hay gente que

7 9 ) A c u é r d a t e d e m í19

19 Historia para contarse a: Quien no cree en el milagro. Quien no confía en los demás. Quien brinda su ayuda de manerá interesada. Personas que no creen en la ayuda desinteresada. Per­sonas que creen que no necesitan de los demás. Quien cree que sólo deben ayudar a sus seres queridos. Personas que piensan que no se puede contar con los demás.

166 Historias para contarse... y crecer juntos

tiene tan poco, y todavía así puede ser tan generosa con los extra­ños". Entonces se acordó de Alberto...

Luego de tomar su café caliente, pagó la cuenta con un billete de 500 pesos. Cuando la mesera estuvo de regresó con el cambio, la ancia­na ya se había ido y en su mesa había dejado una nota junto con otros cuatro billetes de 500. Sus ojos se llenaron de lágrimas cuando leyó la nota que decía: "Este dinero es para ti, no debes nada...; yo estuve una vez en una situación difícil, tal como ahora estás tú y alguien me ayu­dó como hoy te estoy ayudando a ti. Si quieres pagarme, la próxima vez que encuentres a alguien en necesidad y esté a tu alcance asistirlo, hazlo de manera desinteresada y entonces acuérdate de mí..."

Esa noche, al llegar la mesera a casa, y entrar a la recamara, vio a su esposo que dormía cansado por el trabajo del día; entró sigilo­samente para no despertarlo, mientras pensaba en la anciana y en cómo sabría de las necesidades que tenían ella y su esposo, y de los problemas económicos que estaban pasando ahora con la llegada del bebé...

Se quedó mirando a su.marido por un momento, le acarició los cabellos, le dio un beso en la frente y le susurró al oído: "Todo va a estar bien Alberto... te amo".

80) D e c u a l q u i e r m a n e r a 20

Asegúrate de hacer tu parteHistoria:

En Calcuta existe una casa dedicada a niños que no tienen padres, ni recursos económicos. En ese lugar, en la pared de la entrada se encuentra una leyenda dedicada especialmente a esos niños y a todo aquel que pueda verla; es un mensaje, un poema hecho por la madre Teresa de Calcuta que dice así:

"Las personas, aunque las ames pueden ser, irrazonables, ilógicas y egoístas... Ámalas de cualquier manera...

Si haces el bien a la gente, no obstante, podrán acusarte de tener motivos egoístas escondidos... Decide hacer el bien de cualquier ma­nera...

Si tienes éxito corres el riesgo de ganar amigos falsos y enemigos verdaderos... Logra el éxito de cualquier manera...

20 Historia para contarse a: Personas decepcionadas con respecto a las relaciones con otras personas. Quien piensa que sólo debe hacer para sus seres queridos. Alguien que piensa que no tiene sentido contribuir. Q uien piensa que deben ser otros los que hagan. Personas desconfiadas.

Segunda parte: La magia de los recursos 167

El bien que hagas puede ser olvidado el día de mañana, aún por quien lo haya recibido... Sigue haciendo el bien de cualquier manera...

La honestidad y la franqueza te harán vulnerable... Sé honesto y franco de cualquier manera...

Lo que pases años construyendo puede ser destruido en una no­che... Construye de cualquier manera...

Las personas necesitan ayuda y aun si las ayudas pueden atacarte... Ayuda a las personas de cualquier manera..."

Yo quiero agregarle que...Aunque encuentres en tu vida a quien ame a las personas aún siendo

irrazonables, ilógicas y egoístas, ámalas tú también de cualquier manera...Si conoces en la vida personas que ya hacen el bien a la gente,

no obstante que se les acuse de tener intereses egoístas escondidos, también haz tú el bien a la gente de cualquier manera...

Aunque hayas olvidado el bien que otros han hecho por ti, co­mienza a hacer, o sigue haciendo el bien de cualquier manera...

Aunque la honestidad y la franqueza se le olvide a casi todo tu pueblo... o aunque la mayoría de tu pueblo ya lo sea... sé honesto y franco tú de cualquier manera...

Aunque pienses que no te toca hacerlo a ti, o veas que otros ya lo están haciendo... construye tú para todos de cualquier manera...

Da al mundo lo mejor que tengas y si aún así no eres escuchado, sigue diciendo y dando al mundo lo mejor que tengas.

Y si otro comenzó antes que tú y lo hace muy bien, y ya son mu­chos los que están haciendo, haz tu parte tú, de cualquier manera...

.

.

Fuentes de las historias

1) "Beber agua fresca". Aguirre G., M. Yolanda. México: Inédita. 2003.2) "Estrella de mar". Aguirre G., M. Yolanda. México: Inédita. 2004. Inspi­

rada por: "Rescatando una estrella"; en http://www.cablenet.com.ni/entretenimiento/mensajes_historias/rescatandounaestrella.html (mayode 2007).

3) "Empieza por ti". En Galicias.com. "Revolución: Construir un mundo mejor". 2007; en http:// www.galicias.com/frases/revolucion.htm (ma­yo de 2007).

4) "La palma con el corazón de piedra". Revenstorf, Dirk*. México: Inédita.1996. Versión libre en español tomada del Diplomado de Hipnosis Eric- ksoniana, impartido por Revenstorf en la Facultad de Estudios Superio­res, Zaragoza, UNAM.

5) "La última vez". Revenstorf, Dirk. Puebla: Inédita. 1997. Versión libre en español tomada del taller de Hipnosis Ericksoniana, impartido por Revenstorf en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla.

6) "Wu Wei". Revenstorf, Dirk. Puebla: Inédita. 1997. Versión libre en espa­ñol tomada del taller de Hipnosis Ericksoniana, impartido por Revens­torf en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla.

7) "El pintor del emperador". Revenstorf, Dirk. 1996. Versión libre en espa­ñol inspirada por un cuento chino: "El dibujo de un cangrejo". Italo Calvino; en http://iacd.oas.org/La Educa 119/prede 3.htm (mayo de 2007).

8) "El viudo contento". Revenstorf, Dirk. Puebla: Inédita. 1997. Versión li­bre en español tomada del taller de Hipnosis Ericksoniana, impartido por Revenstorf en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla.

9) "El zapatero honesto". Revenstorf, Dirk. Puebla: Inédita. 1997. Versión libre en español tomada del taller de Hipnosis Ericksoniana, impartido por Revenstorf en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla.

10) "El tesoro en tu jardín". Aguirre G., M. Yolanda. México: Inédita. 2004. Inspirada por: "El tesoro enterrado"; en Bucay, J. (1999). Recuentos para Demian. México: Océano.

* Desconocemos si existe Otra referencia para las historias que corresponden a este autor. Si el lector conoce otra fuente o la fuente original, favor de hacerlo de nuestro conocimiento a través de correo electrónico que se encuentra en los datos de este libro, para darle los créditos correspondientes.

170 Historias para contarse... y crecer juntos

11) "La historia de un águila". Revenstorf, Dirk. México: 1996. Versión libre en español inspirada por la fábula del águila y la gallina. Leonardo Boff. Producción MCCLP, México; en http://vinculando.org/documentos/ cuentos/aguila_gallina.html (mayo de 2007).

12) "El gran Hakim". Revenstorf Dirk. México: Inédita. 1996. Versión libre en español tomada de un Seminario de trabajo con sueños, impartido por Revenstorf en el Instituto Milton H. Erickson de México.

13) "La armadura". Pérez, Federico; en El vuelo del Ave Fénix. México: Pax. 1994.

14) "Disfraz de lobo". Pérez, Federico; en El vuelo del Ave Fénix. México: Pax. 1994.

15) "La cima de la montaña". Aguirre G., M. Yolanda. México: Inédita. 2004.

16) "Pedro escarabajo y Juan oruga". Álvarez, C. Marcelo. México: Inédita. 2003.

17) "El arqueólogo". Álvarez, C. Marcelo. México: Inédita. 2003.18) "La pregunta mágica". Shazer, Steve. "La pregunta mágica"; en Claves

para la solución en terapia breve. México: Paidós. 1991.19) "El sendero blanco". Spi'egelman J.M. y Miyuki Mokusen; en Budismo

y psicología junguiana. México: Indigo. 1988.20) "El Rey Sabio". Gibran Halil. 2007. Versión libre tomada de un cuento;

en http:// www.ciudadseva.com/textos/cuentos/otras/gibran/reysa- bio.htm (mayo de 2007).

21) "La esencia del hombre". Bengoa G. Juana. México: Inédito. 1999.22) "La casa de los espejos". Cablenet. 2002. Versión libre en español to­

mada de "Los mil perritos"; en http:// www.cablenet.com.ni/entreteni­miento/ mensajes_historias/milperritos.html (mayo de 2007).

23) "La señal de humo". Cablenet. 2002. Versión libre en español tomada de "El náufrago"; en http://www.cablenet.com.ni/entretenimiento/mensa- jes_historias/el naufrago.html (noviembre de 2002).

24) "La maestra". Aguirre G., M. Yolanda. Inspirada en Autor desconoci­do. "Su nombre era la señorita Thompson"; en http:// www.cablenet. com.ni/entretenimiento/mensajes_historias/thompson.html (mayo de 2007).

25) "Lo que puede hacer el miedo". Cuentos de lo que hace el miedo. 2007; en http://www.felicidadparatodos.org/lelmiedo.pps (mayo de 2007).

26) "La naturaleza del alacrán". Mello, Anthony (1982). En: El canto del pájaro. México: Sal Terrae.

27) "Mirar a sus ojos". Mello, Anthony; en El canto del pájaro.México: Sal Terrae. 1982.

28) "Los expertos". Mello, Anthony; en El canto del pájaro. México: Sal Te­rrae. 1982.

Fuentes de las historias 171

29) "La medalla". Mello, Anthony; en El canto del pájaro. México: Sal Te- rrae. 1982.

30) "Dientes de león". Mello, Anthony; en El canto del pájaro. México: Sal Terrae. 1982.

31) "La estrategia del triunfo". Mello, Anthony; en El canto del pájaro. Méxi­co: Sal Terrae. 1982.

32) "El zorro mutilado". Mello, Anthony; en El canto del pájaro. México: Sal Terrae. 1982.

33) "El monje y la mujer". Mello, Anthony; en El canto del pájaro. México: Sal Terrae. 1982.

34) "El pescador satisfecho". Mello, Anthony; en El canto del pájaro. Méxi­co: Sal Terrae. 1982.

35) "Un diamante". Mello, Anthony; en El canto del pájaro. México: Sal Terrae. 1982.

36) "El príncipe y el mago". O'Connor y Seymour. En: Introducción a la Programación Neurolingüística. Barcelona: Urano. 1993.

37) "De qué tamaño es la luna". Álvarez Córdova, Marcelo. 2004. Inspirado en "La princesa que quería la luna". 2006; en http://caminanditovoy.blogs- pot.com/2006/04/la-princesa-que-quería-la-luna.html (mayo de 2007)

38) "La fórmula de la vida eterna". Smullyan, Raymond; en Juegos para imitar a un pájaro imitador. México: Gedisa. 1989.

39) "Recuerda lo importante". Coelho, Paulo; en El alquimista. México: Gri- jalbo. 1999.

40) "El águila y el elefante". Aguirre G., M. Yolanda. México: Inédita. 2003.

41) "Damián y Pedro". Aguirre G., M. Yolanda. México: Inédita. 2005. Ver­sión libre, inspirada en la historia romana de Damón y Pitias; en http:// www.cablenet.com.ni/entretenimiento/mensajes_historias/damon_pi- tias.html (mayo de 2007).

42) "¿Cómo lo hizo?" Aguirre G., M. Yolanda. México: Inédita. 2005. Ver­sión libre, inspirada en "Hielo roto"; en http://www.cablenet.com.ni/ entretenimiento/mensajes_historias/hielo_roto.html (mayo de 2007).

43) "Leyenda personal". Coelho, Paulo; en El alquimista. México: Grijalbo. 1999.

44) "El secreto de la felicidad". Coelho, Paulo; en El alquimista. México: Grijalbo. 1999.

45) "Carrera de sapos". Sergio Irizarry. 2003. Lugar para compartir cuen­tos; en http:// www.motivaciones.org/ctosecarreradesapos.htm (mayo de 2007). Versión libre.

46) "Cachorritos en venta". Socorro, Pilar. 2006. Textos para pensar. Cacho­rros en venta; eri http://www.pilarsocorro.com.htm (mayo de 2007). Versión libre.

172 Historias para contarse... y crecer juntos

47) "Los 87 años de Rosa". Página digital. 2001. "Madurar es opcional"; en http:// www.paginadigital.com.ar/artículos/reflexión/envejecer.html (mayo de 2007).

48) "El mago y el sombrero". Álvarez C., Marcelo. México: Inédita. 2004.49) "El oasis y el viajero". Álvarez C., Marcelo. México: Inédita. 2004.50) "El árbol y el sabio". Revenstorf, Dirk. Puebla: Inédita. 1997. Versión

libre en español tomada del Taller de Hipnosis Ericksoniana, impartido por Revenstorf en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla.

51) "Empuja la vaquita". Cablenet. 2002; en http://www.cablenet.com.ni/ entretenimiento/mensajes_historias/vaquita.html (mayo de 2007).

52) "La cola del gato". Aguirre G., M. Yolanda. México: Inédita. 2003.53) "El círculo del 99". Bucay, Jorge; en Recuentos para Demian. México:

Océano. 2003.54) "La pata del elefante". Aguirre G., M. Yolanda. México: Inédita. 2003.55) "La inundación". Busca cuentos. 2004. Versión libre de una versión de

Internet; en http: / / www.buscacuentos.com / ver_cuento_impresora. phtml?cod=8487 (mayo de 2007).

56) "El pedrero". Busca cuentos. 2004. Versión libre de un cuento chino; en http:/ / www.buscacuentos.com / ver_cuento_impresora.phtml?cod=8487 (mayo de 2007).

57) "Las vasijas del aguador". Cablenet. 2002. Versión libre de "Vasija agrie­tada"; en http:// www.cablenet.com.ni/entretenimiento/mensajesjiis- torias/ vasija_agrietada.html

58) "El hombre de la ventana". Minusval. 2002.; en http://www.minusval2000. com/literatura/archivosliteratura/el hombredelaventana.html. (mayo de 2007).

59) "La tristeza y la furia". Bucay, Jorge; en Recuentos para Demian. Méxi­co: Océano. 2003.

60) "El bambú japonés". Aguirre G., M. Yolanda. México: Inédita. 2003. Versión libre, inspirada en "El bambú japonés"; en http:// www.elrin- condeluz.com.ar/cuentos/el_bambu_japones.htm (mayo de 2007).

61) "El portero del hotel". Bucay, Jorge. "El portero del prostíbulo"; en Re­cuentos para Demian. México: Océano. 2003.

62) "El correo del Zar". Séller, Fred. La definición de Psicología. México: Trillas. 1996.

63) "Otra oportunidad". Minusval. 2002. Versión corregida; en http:// www.minusval2000.com/literatura/archivosliteratura/el hombredela­ventana.html (mayo de 2007).

64) "Los muebles". Mello, Anthony; en El canto del pájaro. México: Sal Te- rrae. 1982.

65) "El punto crítico". Aguirre G., M. Yolanda. México: Inédita. 2003. Ver­sión libre inspirada en "Teoría del Imo"; en h ttp ://www.eumed.net/te­sis/jeme/2e.htm (mayo de 2007).

Fuentes de las historias 173

66) "La leyenda de Narciso". Coelho, Paulo; en El alquimista. México: Gri- jalbo. 1999.

67) "¿Cómo se arregla el mundo?" Aguirre G., M. Yolanda. México: Inédi­ta. 2003. Versión libre inspirada en http:// www.elrincondeluz.com.ar/ cuentos/arreglar el mundo.htm

68) "El ave y el perro". Aguirre G., M. Yolanda. México: Inédita. 2003.69) "El burro". Grijalva, Juan Manuel. 2007. Versión libre del cuento del

burro. "Zoología con aplicabilidad"; en http://www.grijalvo.com/ Zoologia_con_aplicabilidad/Donkey_Story _es_Cuento_del_burro.htm (mayo de 2007).

70) "El gato del Gurú". Mello, Anthony; en El canto del pájaro. México: Sal Terrae. 1982.

71) "El leñador esforzado". Bucay, Jorge; en Recuentos para Demian. Méxi­co: Océano. 2003.

72) "La paja que rompió la espalda del camello". Aguirre G., M. Yolanda. México: Inédita. 2003.

73) "La perla negra". Aguirre G., M. Yolanda. México: Inédita. 2003.74) "Los siete tarros de oro". Mello, Anthony; en El canto del pájaro. Méxi­

co: Sal Terrae. 1982.75) "¿Por qué no haces nada?" Mello, Anthony; en El canto del pájaro.

México: Sal Terrae. 1982.76) "Nube Alta y Toro Bravo". Bucal, Jorge; en Cuentos para pensar. Méxi­

co: Océano. 2003.77) "El centauro". Bucay, Jorge; en Recuentos para Demian. México: Océa­

no. 2003.78) "La tercera hoja". Álvarez C., Marcelo y De La Piedra G., Laura. México:

Inédita. 2003. Versión libre, inspiradas en O. Henry. "La última hoja"; en http://www.ciudadseva.com/textos/cuentos/ ing/henry/ultima- ho.htm (mayo de 2007).

79) "Acuérdate de mí". Cablenet. 2002. Versión libre de "Mi nombre es Alberto"; en http://www.cablenet.com.ni/entretenimiento/mensajes_ historias/alberto.html (mayo de de 2007).

80) "De cualquier manera". Aguirre G., M. Yolanda. 2003. Inspirada en fra­ses de la Madre Teresa de Calcuta; en http:// www.frasedehoy.com/call. php?file=autor_mostrar&autor_id=171 (mayo de 2007).

_ -----

■

Bibliografía

Álvarez, Marcelo (2005). En Robles, T. Concierto para cuatro cerebros. México: Alom.

Cavallier, Francois (1998). Hipnosis según Erickson. Madrid: Gaia.Cosmos (2005). Diccionario Enciclopédico Ilustrado. Madrid: LibsaErickson, Elizabeth. "About Erickson: His Physical Struggles"; en http://

www.erickson-foundation.org/health.htm (mayo de 2007).Erickson, Milton (1983). Healing in Hipnosis. Los seminarios, talleres y conferen­

cias de Milton H. Erickson Vol. I. N.Y: Irvington Publishers, Inc. pp. 8-9.Haley, Jay (1973). Terapia no convencional: Las técnicas psiquiátricas de Milton

Erickson. Buenos Aires: Amorrourtu. p. 3Haley Jay. "Dr. Erickson's Personality and Life"; en http://www.erickson-

foundation.org/early.htm (mayo de 2007)Gergen, K. y Kaye, J. (1992). "Más allá de la narración en la negociación del

significado terapéutico". En Limón, Gilberto (2005). El giro interpretativo en Psicoterapia: Terapia narrativa y construcción social. México: Pax.

Ginder, John.y Bandler, Richard (1975). De sapos a príncipes. Santiago de Chile: Cuatro Vientos.

Jung, Carl G. y otros (1993). Espejos del yo. Barcelona: Kairos.Jung, Carl G. (1992). El hombre y sus símbolos. Madrid: Biblioteca Universal

Contemporánea.Limón, Gilberto (2005). El giro interpretativo en Psicoterapia: Terapia narrativa

y construcción social. México: Pax.Pequeño Larousse (2006). Diccionario Enciclopédico. Bogotá: Agrupación

Editorial.Perls, Frtitz (1974). Sueños y existencia. Santiago de Chile: Cuatro Vientos.Robles, Teresa (2005).Concierto para cuatro cerebros. México: Alom. 3a Edi­

ción.Robles, Teresa (2006). Terapia cortada a la medida: Un seminario ericksoniano

con Jeffrey K. Zeig. México: Alom.Rosen, Sydney (1994). Mi voz ira contigo. Los cuentos didácticos de Milton H.

Erickson. Barcelona: Paidos.Rossi, Ernest (1980). Autohipnosis en crisis. En The collected Papers o f Milton H.

Erickson on Hypnosis. Vol. I. NY: Irvington Publishers. Pp. 111.

176 Historias para contarse... y crecer juntos

Rossi Ernest (1980). Experiencias de autohipnosis de Milton H. Erickson. En The Collected Papers o f Milton H. Erickson on Hypnosis. Vol I. NY: Irvington Publishers. Pp. 108-110.

Rossi, Ernest (1980). El medico herido. En The Collected Papers o f Milton H. Erickson on Hypnosis. Vol. I. NY: Irvington Publishers. Pp. 124.

Rossi, Ernest (1980). Variedades de doble vínculo. En The collected Papers of Milton H. Erickson on Hypnosis. Vol. I. NY: Irvington Publishers. Pp. 412- 429.

Rossi, Ernest (1986). "Los estados alterados de conciencia en la vida diaria: Los ritmos ultradianos". En Handbook of altered states o f consciusness. NY: Van Nostrand. Wolman B.

Rossi, Ernest (1980). "Técnicas de pantomima en la hipnosis y sus implica­ciones". En The collected Papers o f Milton H. Erickson on Hypnosis Vol I. NY: Irvington Publishers. Pp. 331-339.

Rossi. Ernest (1986b). Hipnosis y ritmos ultradianos. NY: Norton.Watzlawick, Paul y Nardote, Giorgio (1995). El arte del cambio. Barcelona:

Herder.Zeig, Jeffrey (1982). Ericksonian Approaches to Hypnosis and Psychotherapy.

NY: Brunner/Mazel.Zeig, Jeffrey (1985). Experiencing Erickson. An Introduction to the Man and his

Work. NY: Brunner/Mazel. Pp. 7-12.Zeig, Jeffrey y Gilligan, Stephen (1990). Terapia Breve: Mitos métodos y metá­

foras. Buenos Aires: Amorrourtu. Pp. 15.Zeig, Jeffrey (1992). Un seminario didáctico con Milton H. Erickson. Buenos

Aires: Amorrourtu.

índice analítico*

A

Abuso, 90personas que ejercen el..., 154a

Acciones...automáticas, 95 lo importante son la s .. . , 137 ...integradas, 95

Aceptación, 137 buscar la..., 92 .. .de sí mismo, 118 lograr la..., 99

Aceptar...las cosas como son, 82b

Actitudpositiva y negativa, 102

Actosconsecuencia de tus..., 102

Actuar...automáticamente, 95 ...es la clave, 136 te corresponde..., 157a

Aferrarse, 129 dejar de..., 135

Afrontar...los miedos, 106

Agresiónevitarla..., 82b

Altruismo, 81b Altruista

...ser, 128b Amar

...sin dañar

...en libertad, 157b Ambición

.. .como obstáculo, 133 Amigos

cuidar a los..., 119i Amistad

valorarla..., 119

’ La letra "a " corresponde a la primera hi: a la segunda.

Amordar..., 104

Analfabetismo, 143 Aparentar

lo que no soy, evitar... 92 Apariencias

evita juzgar por las..., 104 Apegos

liberarse de los..., 148a Apoyo, 159b

brindar..., 81b recibir..., 92

Apreciar...la vida, 123

Aprender, 103...de la experiencia, 112b, 154b .. .de los problemas, 131

Aprovechar...el tiempo, 126 ...las oportunidades, 136 ...la vida, 84a

Arriesgarse, 98,106 Astucia

A. Vs. Suerte, 110 Ataduras

liberarse de las..., 129,157b Atención

llamar la..., 92 Atrapado

en un problema sentirse..., 92 Atreverse, 131 Atrevimiento, 159a Autoestima, 149,118

elevar la..., 138 Autovaloración, 118 Avaricia, 155 Ayuda

aceptar la..., 92 ,136 ,128b

de la página acotada; la letra "b " corresponde

178 Historias para contarse... y crecer juntos

Ayudaa los demás, I l la , 151, 90 a los que lo necesitan, 157a .. .desinteresadamente, 161 ...evitando invadir, 90

B

Belleza...interior, 149

Bien...hacer el, 86b

Buscar.. .en tu interior, 132, 87,139

cCalcular

...el tiempo, 85 Cambiar

. . .tú mismo, 99, 67,82 Cambio, 152b

crear el.., 82a, 128a de ti depende el..., 148b, 82a obtener el..., 97

Caminodisfrutar el..., 93 encontrar el..., 96 . . .más de uno hay, 98

Capacidadactivar la... o usar la, 151,111a aprovecha la, 125 date cuenta de tu ..., 138 descubre tu ..., 88 natural, 95 te corresponde..., tiene sentido..., 162 rescata la..., 131

Cargalibérate de la..., 154a ...pesada, 148a

Cargardeja de..., 148a

Chantajedate cuenta del..., 89

Ciclorepetir el..., 159a

Clavetú eres la..., 150

Codicia, 155 Comparaciones

evita las..., 118 Compartir 128b, 154b

...desinteresadamente, 161

...lo bueno, 86b Complicaciones

evita las..., 101 Comportamientos

.. .específicos de la edad, 90 Común

usa el sentido..., 108 Concentración

tener..., 93 Confianza, 119 Conformista

evita ser, 131 Confundir

...las emociones, 141 Conocimiento

construir el..., 128a lleva su tiempo el..., 85

Consecuenciade los actos, 102

Consecuencias asume las..., 98 considera las..., 104 ,154a

Consejosescucha los..., 147

Constancia tener..., 142

Contrariedad, 109 Contribuir

con los demás, 151,112a te corresponde..., 157a tiene sentido..., 162

Controlejercer el..., 82a

Convicciónmantener la..., 107a

Convivenciaaprender la ..., 109b

Convivirevitando lastimar, 157b

Corazónsigue los dictados de tu ..., 111b

Costumbres, 152b

índice Analítico 179

buenas, 86b Crecimiento

...Interno, 142 Creencias, 152b, 146

...limitantes, 110 impacto de las..., 109

Creer, 113en ti, 88,110,98 .. .que puedes, 120

Cualidadesdestacar las, 138

Cuida...lo que tienes, 133

Culpaevitar la..., 111b

Cumplir.. .con tu responsabilidad, 90b

DDar

...a los demás, 162

...sinesperar, 86b

...sin exigir, 128b Decepción

evita la ..., 162 supera la..., 107a

Decidircomo si fuera para ti, 107b

Decisión, 159atoma tus propias..., 98,135

Dependencia, 81a, 116 Depresión, 148a

...por duelo, 86a tendencia a la..., 113

Descalificar evita..., 104

Desconfianza, 119 en sí mismo, 146 evita la... 162

Descubrir...algo nuevo, 106 ...por ti mismo, 81a

Descuido...de detalles, 153

Desesperación, 103.. .por conseguir algo, 115

Desprendimiento, 112b Desquitarse

evitar..., 82b

Destino...lo creas tú, 110

Detalles, 81belementales, 153

Develar...lo oculto, 141

Diferenciapuedes hacer la..., 104, 81b

Diferenciascarecen de importancia, 104 respeta las..., 125

Dinero...no es la felicidad, 133 ...no lo es todo, 155

Dirige...tu esfuerzo,

Discapacidad, 138, 95 respeta la..., 125

Discriminación, 143 Disfrazar

...las emociones, 141 Disfrutar

...de la vida, 139,123,116,112a, 84a

...lo que haces, 137 Distinguir

...quien eres, 92 Distracción

evita la, 93 Dominar

...la situación, 152a Duelo, 86a

E

Educar...con sabiduría, 147

Efecto...de tus acciones, 148b

Ejemploponer e l...,162

Elegir, 98 Empezar

.. .contigo mismo, 82a Enfermedad, 159b

...ficticia o inventada, 89 tener una..., 86a

Enfermos, 159b Enfócate

...en la tarea, 93

...en lo importante, 117

180 Historias para contarse... y crecer juntos

Enseñar...a otros, 86b ...valores, 104

Envejecer. . .depende de ti, 126

Envidia...puede destruir, 133

Equivocarse...por negarse a escuchar, 108

Escuchar...los consejos, 147

Esenciadestacar la..., 88

Esfuerzodirigir el..., 153

Esperanzasiempre existe u n a ..., 81b, 103

Estructuratodo tiene..., 128a

Evitajuzgar por las apariencias, 104 aparentar, 92las comparaciones, 125,135,118

Evitarla agresión, 82b la comparación, 118

Excesos...de trabajo, 153,154a ...de alimento, 154a

Existenciasentido de la..., 138

Experienciaaprender de la..., 154b, 108 comparte la..., 154b ...propia, 81aescucha la voz de la..., 147,132 siempre es nueva, 135

Experimenta...por ti mismo, 81

Explicacionesestán de mas, 95

F

Felicidaddisfruta de la..., 112a en busca de la ..., 137 en ti está la..., 132 ,154b, 112b cuida la..., 155,111 tú creas la..., 123

Flexibilidad, 9 9 ,109b Formula, 116 Fragilidad

...interna, 88 Fuerza, 101

...interna, 88 Furia, 141

G

Grandezabusca la..., 137

H

Habilidadesdesarrolla tus..., 95,143 utiliza todas tus..., 131

Hábitos, 152b Hacer

el bien, 86b Honestidad

actúa con..., 86

I

Idealtener un..., 126

Ideasconsidera otras..., 99

Identidadconserva tu..., 118,92

Ignorarel desanimo, 124

Imaginaciónel poder de la..., 137 usar tu ..., 139

Imitaciónevita la..., 118

Impaciencia, 142 Importancia

...de las personas 117 Imposible

nada es..., 115 ...es relativo, 120

Inconformidad, 137,109b, 116, 82a Inconsciente

confía en tu..., 95,96 Incredulidad, 119 Indecisión, 159a

índice Analítico 181

Individualidadconserva tu..., 157b

Inestabilidad, 137 Infelicidad, 155 Influencia

negativa, rechaza la..., 124,146 Insatisfacción, 137 Inseguridad, 146 Intolerancia, 109b Inversión

...de roles, 90

JJuzgar

acciones de otros, 111ba la ligera, 108,113por las apariencias, 107b, 120

LLealtad, 119 Liberarse

de los apegos, 148a Liberarse

de las ataduras, 129,157b ...de miedos, 106 de resentimientos, 148a

Libertadconserva tu, 157b

Límite, 146todo tiene un, 154a

Lograrlo importante, 120

Luchar, 159b.. .por tus ideales, 124 .. .por lo que queremos, 126 ...por objetivos, 121 ...por todos, I l la , 151 ...por tus sueños, 115

MMadurar, 126 Magia

crear la..., 128a existe en ti, 113

Magotu puedes ser un..., 128a

Maltrato, 129

Manipulaciónlas consecuencias de la..., 109a hay cosas más importantes que la..., 154b, 112b

Mejorar, 148b Mentir

.. .para obtener ayuda, 89 Mentira

evita la, 109 Metas

grandes o lejanas, 115 cumplir con la..., 121,124,96,126

Miedo...a lo desconocido, 106 enfrentarlo..., 106 deja de lado el..., 88 enfrenta el..., 9 8 ,109a evita generar e l..., 109a vence el..., 96

Miedosafrontar los..., 106

Mirar...más allá de la realidad, 139

Misióncumple con tu ..., 107a

Modelosevita los..., 99

Motivación, 159b ...para hacer, 110

Mundopuedes cambiar ál..„ 148b

N

Naturalezasigue tu ..., 88 reconoce tu..., 107a

Necesidadrevalora tu..., 151

O

Objetivosalcanzar los..., 96 realizar..., 107a

Obligacionesacumulación de..., 154a cumple con tus..., 90

Obsesión, 112a Obstáculos

182 Historias para contarse... y crecer juntos

enfrenta los... ,96 vence los..., 82b, 121

Opcionesescoge tus..., 111b

Opinióntoma en cuenta la..., 99

Oportunidad, 81b, 159aaprovéchala..., 147,136,131 toma la..., 96

Optimismovive con..., 139

P

Pacienciatener..., 142,103,85,93

Palabradarle valor a la ..., 119

Parejaconservar a la..., 157b

Participación, 150 Pasado

deja atrás el..., 148a evita aferrarte al..., 82a

Pasividad, 116 Paso

.. .con seguridad, 135 Pensar

.. .antes de actuar, 135 Perdón

.. .es liberación, 82b Perdonar, 82b Perfeccionamiento, 85 Perseverancia, 142,143 Pesimismo

evita el..., 103 Poder

...de la mente, 146 tú tienes el..., 120 recupera tu ..., 88

Posibilidadsiempre existe una..., 120

Posibletodo es..., 115,120

Positivoencuentra el lado..., 103,138,84b

Practica...hasta hacerlo bien, 85,116

Prejuiciosevítalos..., 111b, 125,104

Presentevive el..., 84a, 148a, 93

Principiosmantén firme tus..., 107a

Prioridadesestablece tus..., 117

Problemasafróntalos..., 157,103 contribuye a resolver los..., I l la , 151 solucionar los..., 152a, 150,97,129,136 aprende de los..., 84b, 131

Propósitotodo tiene un..., 138

Proyectos.abandonar los..., 142

Prudencia, 155

QQuejas, 103,102

R

Razónsólo veces se tiene la..., 108

Reacciones...que tú provocas, 102

Realidad¿es importante la... ?, 113 es lo que está en tu mente, 139 tú creas tu ..., 128a

Rechazarse, 118 Reconocer

...tu identidad, 92 Recursos

desarrolla tus..., 131 ...internos, 87

Reflejotus actos tienen un..., 102

Reflexionar...en tu participación, 150

Regalosla vida te da ..., 86a

Reglas, 111bevita hacer absolutas las..., 107b

Rescatar...lo esencial, 104

Resolver...problemas, 136

Respeto, 107a

...a las diferencias, 125,118 Responsabilidad

cumple con tu, 90 evadir la..., 89 tomar la..., 98 ...de tus actos, 82b

Respuestaen ti encuentra la..., 157a

Resultado...de tus actos, 102

Riesgotoma el..., 131,159a

Riqueza...del aprendizaje, 112b

Rolesrespeta los..., 90 inversión de, 90

sSalud

propicia la... ,97 Seguir

...adelante, 98 Seguridad

...al caminar, 135 Sencillez

elige la..., 101 Sentido

común usa el..., 108 .. .de existencia, 138

Sentidosutiliza los..., 139

Sentimientosdiferencia los ..., 141

Ser...tú mismo, 101,92,118

Significado...verdadero de las cosas, 115

Soledad, 119 Solución, 157a

en tu interior buscar la..., 136,157 encontrar la..., 150 ingeniosa, 89 tú tienes la..., 129 siempre hay una..., 103 vivir la..., 97

Subestimación, 143 ,Sueños, 159b

creer en los..., 87,121

índice Analítico

luchar por los..., 87 realizar los..., 126,121

Suertesuerte vs. astucia, 110

Sufrimiento...por una pérdida, 86a ...ajeno, 81b

Suicidiotendencia al..., 113

TTarea

enfocarse en la..., 93 Tareas

acumulación de..., 154a Temores

vencer los..., 110 ...a lo desconocido, 106

Tenacidadtener..., 142,121

Tesoroen ti está un..., 87

Tiempo, 142aprovecha el..., 126 date..., 85 todo a su..., 90,142 tomate un..., 153

Tolerancia, 109b Trabajo, 154

acumulación de..., 154a la calidad del..., 153

Tradición, 152b Traición, 119 Tristeza, 141,159b

uUnión crear, 161,148b Utilidad, 154b

VValentía, 88 Valor

...en tu interior, 87 Valoración

...personal, 149 Valorar

...a las personas, 117,107b

183

184 Historias para contarse... y crecer juntos

...el aprendizaje, 112b

...la vida, 58,123

...lo hecho, 93

...lo importante, 154b, 101

... lo que tienes, 133,147 Valorarse, 137,138 Valores

enseña los..., 104,150,125,154b Vanidad, 149,152a Vencido

evita ser..., 152a Ventajas

rescata las..., 84b Verdad

buscar la..., 89 .. .es relativa la, 108

¿existe la...?, 113 habla con la, 109a

Víctimadeja de ser la..., 152a, 151, I l l a

Vidaapreciar la..., 123,159a aprovechar la, 84a Disfrutar la, 112a, 116,123

Violenciadetén la..., 157b

Virtudestodos tenemos..., 95,138,104

Vivir...intensamente, 121,58 .. .el presente, 84,116

índice de mensajes*

A

A pesar de los obstáculos puedes llegar (17,45, 37,60, 69,73).A ti te corresponde hacer (68, 80, 2).A veces el consciente estorba (16,17).A veces idealizas la felicidad (34, 74, 53).A veces las cosas que te hacen más felices son las más sencillas (37, 52).A veces puedes confundir lo que estás sintiendo (59).Abre opciones (71,19, 69,30).Abre tu perspectiva de soluciones (30,19,69, 71).Ábrete a la posibilidad de creer que existen cosas diferentes (35, 73).Acepta a la gente como es (61,36, 24).Acepta ayuda (14, 79).Acéptate como eres (40,56,14).Acéptate con todas tus características (40, 56,14).Acéptate (14, 56,40).Actúa por ti mismo (28,1, 42, 38, 45, 68, 69, 75).Admírate de las maravillas del mundo (44, 58,15, 34, 36).Agradece lo que tienes dando a otros (49, 80, 46, 32, 2, 73, 78, 79).Algo bueno puede salir de cada situación (23, 8, 6, 7 ,10 ,31, 51, 57, 61).Algunas cosas requieren de tu paciencia (60, 7, 63,11,15,44, 79).Algunas veces abusas de algo o alguien sin considerar el daño que le causas

(72 ,4 ,13,14,27, 29).Ama lo que está a tu alrededor (30,2, 26, 57, 80).Ante los conflictos y obstáculos puedes encontrar soluciones (17,18,19,20, 22,31,37). Antes de llegar al límite, soluciónalo (72, 78, 76, 55,27,14,13).Aprecia la imaginación (58,18, 48, 69).Aprecia lo que hay en ti y en los demás (44, 24,40, 66, 57).Aprecia lo que tienes (66, 75, 73, 74, 57,56, 53,34, 32,30,11,10).

"Al consultar este índice sugerimos revisar los mensajes para familiarizarse con ellos. Los nú­meros que están colocados al final de cada mensaje, corresponden al número de la historia tal y com o se encuentra en el índice general. El prim er núm ero corresponde a la historia que con mayor frecuencia fue sugerida para expresar tal mensaje en su contenido. Posteriormente se agregaron en orden de frecuencia descendiente los números de las siguientes historias en que se encuentra expresado el mismo mensaje.

Aprecia tu esencia (21, 57, 56,60, 66).Aprende a convivir (30, 41, 26, 22,9,76).Aprende de la experiencia de otros (33, 20, 58, 68).Aprende de los problemas (6,30,41).Aprender del sufrimiento (8, 6, 26).Aprendizaje se puede transmitir de persona en persona (65, 9).Aprovecha el tiempo (47,63, 57,43).Aprovecha la vida y las oportunidades que se te ofrecen (63,47, 8, 55,69, 57,53,2). Aprovecha lo que tienes y ayúdate a ti mismo (32,68, 61, 56, 74, 69, 60, 57, 63). Arriesga para ganar (25,19, 31).Aún en la adversidad hay soluciones (69, 78, 23,51,37,19).Ayuda a las personas respetando su esencia (26).Ayuda a quien lo necesite (32, 68, 26, 2, 46,49, 75).Ayuda en vez de esperar ser ayudado (68,32, 75).Ayudar desinteresadamente (79, 80, 49).

B

Básate en lo que tú percibes (27, 2, 28,45).Brindar tu ayuda a las personas (49, 46, 41, 26,80, 75, 2).Busca caminos diferentes para cumplir tu objetivo (26,43,31, 20,19, 78, 37).Busca el tesoro que tienes dentro (10,73,57,17,18).Busca en tu interior (21,17,18).Busca la forma inteligente de ayudar (26, 37,12).Busca las cosas por ti mismo (68,32,1).Busca las respuestas en ti (1 ,21,18,17,58).Busca siempre nuevos caminos y experiencias (61,1).Busca soluciones creativas (12,26, 37).Busca tu propia identidad (11,14,40).Busca una solución más sencilla (21,17, 34, 67).Busca por tus propios medios lo que quieres (55, 80, 75 ,1 , 45).

cCada cosa tiene su propio tiempo (60,7, 47).Cada persona requiere su espacio (76).Cada persona tiene experiencias distintas (1, 37 ,45 ,46 , 57).Cada quien tiene su versión de lo que es disfrutar la vida (34, 37,44, 56,58, 52). Cada situación es nueva (54).Cambia tu reacción ante el enojo (4,5, 59, 75, 30).Cambiar es de sabios (20, 36).Cambio depende de ti (18, 65, 3, 9, 20, 22, 32,73).Centrarte en los obstáculos (15,14,19, 22, 26, 45, 42).Comparte lo que puede servir a los demás (9, 80, 79, 49).

lg6 Historias para contarse... y crecer juntos

índice de mensajes 187

Con tu actitud puedes hacer un ambiente bueno o malo (22, 26, 33, 45).Confía en ti (10, 31, 60, 45).Confianza, seguridad y lealtad existen (41, 31, 24, 79).Conserva tu individualidad (76,1 ,13,14, 40).Considera todas las opciones (71, 66, 57, 31).Continúa dando a los demás (80, 24, 79, 2, 9).Continúa en tus proyectos (60, 80,15,45).Contribuir tiene sentido (80, 24, 79, 2, 9).Cuando hay amor no son necesarias las ataduras (76,41).Cuando juegas el papel de otro puedes olvidar el tuyo (13, 59, 40,14,11).Cuando te arriesgas puede que salga mejor (25, 31,17,19 42).Cuida lo que ya tienes (53,34,36, 39, 78).Cumple tu misión (26,43, 3,80, 75).

D

Da a los niños las herramientas para defenderse (29, 24).Dale más fuerza a tus acciones que a las posibles limitaciones (62,45,42, 77).Date cuenta de lo maravilloso que es el mundo (58,44, 52,34).Date cuenta de que eres importante (57,61,48).Decide qué opción tomar (28, 20, 31, 33).Decir la verdad es una decisión (12, 36,29).Dedícate de lleno a lo que haces (60,58,45, 31).Deja atrás lo pasado (64, 54,33).Deja de cargar con lo que no te sirve (64, 72, 33,3).Deja de creer que no puedes (42, 31, 51).Deja de hacer cosas que no tienen sentido (70, 68, 52, 50,16).Deja de quejarte y haz algo (75, 50, 32, 30, 68).Deja de vivir a la deriva (77, 56).Deja que cada persona viva su experiencia (63,1).Demuestra el amor a tus seres queridos en vida (8, 79, 5).Dentro del problema está la solución (67, 53, 37, 29, 23, 60, 74).Depende de ti cómo uses lo que recibes de otras personas (69, 55, 33,46).Descubre el origen de las tradiciones (70).Descubre la fuerza que está dentro de ti (78,11,10,17,45, 51, 58).Descubre lo importante que puede ser compartir tus experiencias (73,65,58,49,24,9). Descubre tu propio yo (66,14,13,11, 56).Despréndete de lo que te ata (35,33,14, 53, 51,32, 76).Destino no existe, tú lo creas (31, 78, 55,19).Dinero no garantiza la felicidad (74, 53,39,44,64).Disfruta cada etapa del camino (15, 54, 44).Disfruta cada instante de la vida (34,15,44,45).Disfruta cada momento (44,15, 54).Disfruta la vida con responsabilidad (44,15, 38, 39).Disfruta la vida (47, 34, 52, 58).

186 Historias para contarse... y crecer juntos

Aprecia tu esencia (21, 57, 56, 60, 66).Aprende a convivir (30,41, 26, 22, 9, 76).Aprende de la experiencia de otros (33, 20,58, 68).Aprende de los problemas (6,30, 41).Aprender del sufrimiento (8, 6, 26).Aprendizaje se puede transmitir de persona en persona (65, 9).Aprovecha el tiempo (47, 63, 57, 43).Aprovecha la vida y las oportunidades que se te ofrecen (63,47, 8, 55,69, 57, 53, 2). Aprovecha lo que tienes y ayúdate a ti mismo (32, 68, 61,56, 74,69, 60,57, 63). Arriesga para ganar (25,19, 31).Aún en la adversidad hay soluciones (69, 78, 23, 51,37,19).Ayuda a las personas respetando su esencia (26).Ayuda a quien lo necesite (32, 68, 26, 2, 46, 49, 75).Ayuda en vez de esperar ser ayudado (68, 32, 75).Ayudar desinteresadamente (79, 80,49).

B

Básate en lo que tú percibes (27,2, 28, 45).Brindar tu ayuda a las personas (49, 46,41, 26, 80, 75,2).Busca caminos diferentes para cumplir tu objetivo (26,43, 31, 20,19, 78,37).Busca el tesoro que tienes dentro (10, 73, 57,17,18).Busca en tu interior (21,17,18).Busca la forma inteligente de ayudar (26, 37,12).Busca las cosas por ti mismo (68,32,1).Busca las respuestas en ti (1, 21,18,17,58).Busca siempre nuevos caminos y experiencias (61,1).Busca soluciones creativas (12,26, 37).Busca tu propia identidad (11,14,40).Busca una solución más sencilla (21,17, 34,67).Busca por tus propios medios lo que quieres (55, 80, 75,1, 45).

cCada cosa tiene su propio tiempo (60, 7, 47).Cada persona requiere su espacio (76).Cada persona tiene experiencias distintas (1, 37,45, 46, 57).Cada quien tiene su versión de lo que es disfrutar la vida (34,37,44,56,58, 52). Cada situación es nueva (54).Cambia tu reacción ante el enojo (4, 5, 59, 75, 30).Cambiar es de sabios (20, 36).Cambio depende de ti (18,65, 3,9 , 20,22, 32, 73).Centrarte en los obstáculos (15,14,19, 22, 26, 45, 42).Comparte lo que puede servir a los demás (9, 80, 79, 49).

Con tu actitud puedes hacer un ambiente bueno o malo (22, 26, 33, 45).Confía en ti (10, 31, 60,45).Confianza, seguridad y lealtad existen (41, 31, 24, 79).Conserva tu individualidad (76,1,13,14, 40).Considera todas las opciones (71, 66, 57, 31).Continúa dando a los demás (80, 24, 79, 2, 9).Continúa en tus proyectos (60,80,15,45).Contribuir tiene sentido (80, 24, 79, 2, 9).Cuando hay amor no son necesarias las ataduras (76,41).Cuando juegas el papel de otro puedes olvidar el tuyo (13, 59, 40,14,11).Cuando te arriesgas puede que salga mejor (25, 31 ,17,19 42).Cuida lo que ya tienes (53, 34, 36,39, 78).Cumple tu misión (26, 43, 3, 80, 75).

D

Da a los niños las herramientas para defenderse (29, 24).Dale más fuerza a tus acciones que a las posibles limitaciones (62,45,42, 77).Date cuenta de lo maravilloso que es el mundo (58,44, 52,34).Date cuenta de que eres importante (57, 61,48).Decide qué opción tomar (28, 20,31, 33).Decir la verdad es una decisión (12, 36,29).Dedícate de lleno a lo que haces (60,58,45,31).Deja atrás lo pasado (64, 54,33).Deja de cargar con lo que no te sirve (64, 72, 33,3).Deja de creer que no puedes (42,31, 51).Deja de hacer cosas que no tienen sentido (70, 68, 52, 50,16).Deja de quejarte y haz algo (75, 50, 32, 30, 68).Deja de vivir a la deriva (77, 56).Deja que cada persona viva su experiencia (63,1).Demuestra el amor a tus seres queridos en vida (8, 79, 5).Dentro del problema está la solución (67, 53, 37, 29, 23,60, 74).Depende de ti cómo uses lo que recibes de otras personas (69, 55, 33,46).Descubre el origen de las tradiciones (70).Descubre la fuerza que está dentro de ti (78,11,10,17,45, 51, 58).Descubre lo importante que puede ser compartir tus experiencias (73,65,58,49,24,9). Descubre tu propio yo (66,14,13,11, 56).Despréndete de lo que te ata (35, 33,14, 53, 51, 32, 76).Destino no existe, tú lo creas (31, 78,55,19).Dinero no garantiza la felicidad (74,53,39, 44,64).Disfruta cada etapa del camino (15, 54,44).Disfruta cada instante de la vida (34,15,44, 45).Disfruta cada momento (44,15, 54).Disfruta la vida con responsabilidad (44,15, 38, 39).Disfruta la vida (47, 34, 52, 58).

índice de mensajes 187

188 Historias para contarse... y crecer juntos

Disfruta todo lo que haces (35,47, 34,58).Distingue tus disfraces (14,13,40, 22).

E

Ejemplo es la mejor enseñanza (16, 79, 80, 65, 20,39).Ejerce con valor tus potencialidades (11, 3 ,15,19, 31,69).El tesoro siempre va a estar ahí (17).Elige la acción en vez de la resignación (19, 78,54, 51, 50, 31).Empezar por lo simple o lo que se conoce (67, 37, 71).En función de tu actitud (22, 26, 33,45).Encuentra el punto que haga que el mundo cambie y sea mejor (65,75,80,68,73,24,32). Encuentra la belleza y la importancia de las cosas (30,39,44,15,34).Encuentra la fuerza que llevas dentro (11,10,17,16,31,42,45).Encuentra la solución dentro de ti (18,48,10,42,45, 50).Encuentra lo bello de la vida (44, 58, 57, 36).Encuentra lo bueno de lo malo (8, 5, 57, 36).Enfrenta todo obstáculo, sigue adelante (17, 9, 25, 26, 31,45).Enfrenta tus miedos y temores (19, 25,42, 31,19,11).Enseñar con el ejemplo (79, 80, 65, 20,3, 9).Entiende a los demás (20, 2,22, 24, 27, 26,46).Eres capaz de auto engañarte (12,62,59,22,14).Eres especial por las habilidades que tienes (40,11,16).Eres maravilloso y diferente (40,11, 57).Eres poderoso (56, 75,67,58).Eres tú quien se ha puesto las ataduras (50,13,14, 55).Eres tú quien hace agradables o desagradables las cosas que vives (22,19,33,36,56,57,58). Eres único y como tú nadie (40,11, 56, 57).Error quedó en el pasado (33, 63).Es más importante lo que estás haciendo que lo que te falta (15, 66, 65, 54, 47).Es más valioso desprenderse que atesorar (35, 73, 53, 39, 34).Es mejor actuar que esperar (68, 55, 42).Es posible hacer lo que crees imposible (48, 45, 31, 51, 65).¿Es real tu enfermedad? (12, 32, 59, 70, 78).Escucha tus mensajes inconscientes (10,16,17,18, 54).Escucha consejos de quienes tienen experiencia (52, 30, 36, 38,44, 76, 50).Escucha la voz de la experiencia (63, 74, 52, 50, 30,36, 38,44, 76).Está a tu alcance brindarle apoyo a otra persona (2, 79, 80, 73, 68).Evita depender de las cosas (70, 33, 35, 34, 45, 51, 64).Evita juzgar por las apariencias (24,42,44,46,51, 57, 58,59,60, 66).Evita la agresión (4, 22, 27, 29).Evitar hacer suposiciones (62, 2, 23, 25, 36,37, 46, 54, 66, 70).Evoca habilidades que has olvidado (11, 78, 51,17, 31, 42).

índice de mensajes 189

Examínate cuando algo no esté funcionando (71,3,9,18,22,27,29,45,50,51,59,67,75). Existe una riqueza diferente en cada persona (35,40,46, 57, 66).Existen los buenos amigos (41,68, 79,32).Extrae la enseñanza de los problemas (6,4, 8,14, 30,51).

F

¿Falta todo o no estás mirando lo esencial? (39,27, 21, 67).Felicidad depende de la riqueza interna (35, 44,52, 34,58).Felicidad idealizada (34, 74, 53).Felicidad, puedes dar a los demás (37, 2,49, 35, 50, 58, 73).Forma inteligente de ayudar (36,37,12).Formamos parte del mismo jardín (30, 41, 26, 22,9, 76).Formas diferentes de alcanzar objetivos (17, 52, 37, 34 31).Fortalece tus acciones (62,45,42, 77).Fuerza en tu interior (78,11,10,17,45, 51, 58).Fuerza que llevas dentro (11,10,17,16, 31, 42, 45).

G

Ganar requiere de arriesgar (2,25,19,31).Genera acciones en lugar de limitaciones (62, 45, 42, 77).Genera opciones (71,19, 69, 30).Gente aceptarla como es (61, 36, 24).Gente que se corrompe por ambición (53, 74,39).Goza cada instante de la vida (34,15,44,45,54).Goza con todo lo que haces (35,47,34, 58).Goza de la vida (47, 34, 52, 58).Goza de la vida con responsabilidad (44,15, 38, 39).

H

Habla con la verdad desde el principio (29, 7,12).Hay algo más de lo que se ve a primera vista (66, 79, 73, 70, 67, 60, 59, 58, 57, 21,17). Hay cosas más allá de lo que tienes y crees (35, 27,31,42, 45,46, 51,57, 58, 60, 73). Hay cosas que haces sin tener plena conciencia (16,54, 48,42, 22, 70).Hay diferentes formas de alcanzar tus objetivos (17, 52,37, 34, 31).Haz lo necesario para obtener lo que quieres (20,80, 75, 65,31, 38,43).Haz lo que te corresponde (13, 55,38,43, 65,80, 75).Haz algo diferente y tendrás resultados diferentes (51, 63, 60, 32, 30,22).Haz lo que te gusta hacer para ser feliz (52,34).Haz todo lo posible por hacer felices a las personas (37,2,49, 35, 20, 58, 73).

190 Historias para contarse... y crecer juntos

I

Insiste en la meta que te hayas propuesto (43,31, 44,45,47,80).

L

La actitud de las personas es tu reflejo (22, 79, 65, 4,13, 3).La ambición puede corromper a la gente (53, 74, 39).La ambición y la codicia limitan la felicidad (74, 53, 39).La amistad es un lazo poderoso (41, 78, 24,46).La amistad es valiosa (41, 78,24,46).La avaricia puede llevarte a olvidar a las personas (74,53,39).La ayuda puede llegar de quien menos lo esperemos (79, 78, 73).La ayuda puede manifestarse de muchas formas (55, 50,51, 2).La constancia y el ingenio son la solución (37, 78, 69, 65, 63, 60, 47, 7).La costumbre puede convertirse en ley (70, 71).La decisión es el inicio (19,11, 65,47).La educación no necesariamente te hace triunfar (61, 63).La envidia puede destruir (53). ‘La experiencia sólo la adquieres por ti mismo (1 ,16,17,18,38).La felicidad depende de la riqueza interna (35,44,52, 34,58).La felicidad está a tu alcance (56, 52, 34, 37,44, 58).La felicidad está en ti (44, 52, 34, 58).La felicidad vale más que la riqueza (53, 35, 74).La fuerza es el elemento de transformación (21,11,30, 51, 65,69, 78).La grandeza es inevitable (11, 21, 24, 45, 47, 51).La imaginación puede ser infinita (56, 37, 58, 70).La imaginación te puede liberar (58,56, 78).La indecisión no te lleva a nada (77,19, 55,25,28).La lealtad alimenta la confianza (41,46, 2, 78, 79).La lealtad es invaluable (41, 78, 79, 2).La ley puede ser sólo costumbre (70).La magia de la vida se encuentra en ti mismo (35 ,48,10,21,45,48, 57).La opinión negativa influye en el rendimiento (45, 29,42, 53).La respuesta a tu problema puede estar en otro punto (67,51,10,21, 27,37). La respuesta está en tu mente (58, 27, 67, 58, 75,31).La respuesta puede estar enfrente de ti (27, 55, 22, 23, 31).La riqueza verdadera es aquella que permanece contigo (35, 73,10,16, 64). La sabiduría es mejor que los consejos (63,1, 6 ,24 ,42 ,45 , 58).La solución está en tus manos (38, 69, 50,10,19, 20, 22, 27, 36,42).La tristeza puede ser el resultado de una gran furia contenida (59, 4, 75).La única forma de hacer es haciendo (15, 2, 3 ,16 ,18 ,19 , 31, 32).La única manera de lograrlo es creyéndolo posible (62, 31,18,11, 37).La verdadera riqueza está en nuestros actos (35, 73, 80, 78, 75, 69, 31, 45).

índice de mensajes 191

La vida tiene sentido y está en nosotros encontrarlo (48, 36,43,19, 58).Las cosas no llegan solas, ve a buscarlas (32, 38, 43, 75).Las cosas no suceden por sí solas, tú haces que sucedan (48, 78, 2, 32, 38, 43, 75). Las cosas pequeñas si se van acumulando se hacen grandes (72, 65, 29, 55, 74, 79). Las cosas pueden tener una razón positiva de ser (6, 25, 51, 57).Las cosas son en función de lo que crees que son (62, 28, 31, 36, 70).Las cosas te pueden servir si las usas (74, 71,38, 70).Las creencias son muy importantes y determinantes (62, 28,31,36, 70).Las creencias tienen un fuerte impacto en las personas (29, 28, 31, 36).Las dificultades pueden ser una oportunidad (51,19,25,46, 69).Las normas establecidas pueden llegar a ser injustas (27, 33,41).Las oportunidades llegan para quien las sabe identificar (55, 2 ,11 ,19, 25,34, 69). Las personas se pueden desarrollar a pesar de no tener conocimientos básicos (61,51,79). Las respuestas se presentan de diferentes formas (55,6,10,21,29,31,35,50,59,60,67). Las situaciones pueden tener dos sentidos (6, 59,60, 66, 67, 22,23, 34).Liberarte de tus ataduras (50, 64, 76,14, 33, 51, 74, 58, 72).Libérate de los resentimientos (4, 22, 26, 33, 36, 50, 64, 72).Lo frágil se vuelve fuerte (21, 4,11, 46, 60, 69).Lo importante de la realidad es cómo la interpretas (58 ,1 ,6 ,25,31,37,42,52, 57,62). Lo importante es observar qué hay dentro de cada persona (66,2, 22, 24, 27).Lo importante es que realices las cosas (56,19, 55, 61, 65, 80).Lo más pequeño puede influir en los resultados (71, 78, 72, 67, 3).Lo que descalificas puede ser útil (46,3,57).Lo que estás buscando, ahí está (23,10,34,52, 60, 66).Lo que haces es determinante aunque no lo sepas (57, 2,4 , 22,24, 79, 80).Lo que haces tiene efecto a largo plazo (57, 24, 60, 70, 79).Lo que hagas a los demás será lo que vas a recibir (22, 65).Lo que hagas depende más de la astucia que de la suerte (31,1-6,20, 39,44, 69, 78). Lo que importa es lo que hay dentro de cada ser humano (39,10,11,24,43,57,58,66). Lo que no te debilita te hace más fuerte (4,19, 46, 51).Lo que te parece terrible puede dejar de serlo (8, 6,51, 23,58, 69).Los bienes materiales no son lo importante (39).Los frutos de tus actos dependen de ti (4, 70, 62,45, 75,32, 68).Los límites te los pones tú (42,45, 31, 50, 62, 70).Los miedos inculcados detienen el desarrollo (29, 26,27, 28,33).Los sentimientos pueden venir disfrazados (59, 66).Lucha por tus metas y sueños (10,15,31,43,45,47).Lucha por lo que quieres (10,15, 31,43,45,47).

M

Madurar es una decisión (47).Mantén el interés en las personas (39, 2, 9, 20, 27).Mantén firmes tus convicciones (10, 7 ,45,47, 65,80).Mantén viva la esperanza (23, 78, 79, 65, 60,19, 31, 37).

192 Historias para contarse... y crecer juntos

Mentir tiene riesgos (29,13, 53).Milagro existe dentro de ti (18,10,17, 21,36,45).Milagro puede ocurrir (23, 79, 78, 65,23).Mira la vida con optimismo (58, 6, 31, 57, 58).Mira lo esencial (39, 27, 21, 67).Mira lo que no quieres mirar (50, 76, 75, 59, 55, 32).Mira más allá de las dificultades (58, 6, 20, 23, 24, 37,57, 69).

N

Nada está escrito (31,19, 36, 38).Nadie más que tú decide sobre su vida (69,19, 25, 31, 43, 45,50, 55, 61).No acumules problemas (72,13, 20, 32, 50, 64).No aparentes lo que no eres (14,11,13).No bases tu felicidad en lo que no tienes (56, 74).No basta con hacer bien las cosas compártelas con los demás (9, 65).No basta sólo con esforzarte (71, 9, 72, 80).No busques problemas donde no los hay (53, 35, 74).No cargues con la culpa (33, 64),No dejes las cosas para después (5, 71,11, 34,43, 51, 75).No dejes que la avaricia te quite la alegría (53, 35, 74).No dejes que otros diseñen el plan para tu vida (69,1,13, 20,45, 70, 80).No des por hecho todas las opiniones (28,1,12, 37).No desistas a pesar de las adversidades del camino (45, 57, 58, 60,43,19).No es casualidad (23, 6, 8,46, 70, 60, 61, 72, 79).No esperes hasta el último momento (63,5,9,55).No esperes que las cosas se resuelvan solas (32,80, 75,55, 69, 31).No hagas cosas de las que después te puedas arrepentir (4,14,25, 27, 29).No hay que esperar la muerte, para disfrutar la vida (5, 9).No hay que subestimar a las personas (67,51, 57,61,46,49).No imites sino aprende (16,1, 28,33, 36, 58, 63, 68, 70).No importa lo simple de la tarea sino el valor de los resultados (57,16,36,37,65,69,78). No juzgues a las personas por simple apariencia (27, 36, 47,57, 69, 7).No le tengas miedo a los cambios (51, 6, 8).No lo pienses tanto; sólo hazlo (16,80, 38,36, 34, 31,15).No menosprecies a las personas (46, 24 ,27,40,51, 57, 69).No necesitas de mucho para ser feliz (34, 58).No necesitas saber todo para poder hacer algo (61, 3 ,27 ,36, 37, 65, 67, 78).No obligar a nadie a estar junto a ti (76, 36, 49, 50).No permitas que te desalienten (42, 45, 20, 30, 43, 69, 80).No pierdas tu identidad (40,11,13,14).No pueden ayudarte si tú no te ayudas (50,14, 32, 55, 68, 63).No rechaces lo que digan los demás (20, 30, 55, 68, 63).No siempre es necesaria la cultura para sobresalir (61, 36, 37, 51).No siempre la solución más obvia es la correcta (37, 67, 46).

No siempre los expertos tienen la razón (28, 27, 37).No subestimes a los demás (69, 2, 42, 46, 51, 57).No te dejes cegar por la presión (27, 69, 7, 71, 72).No te des por vencido (69, 78, 80, 61, 65, 47, 31,19).No te sugestiones, fíjate (29).No tienes porqué posponer la felicidad (34).No tomes como tuyos los problemas o responsabilidades de otros (13).Nunca digas no se puede (42,31,45, 69).Nunca es tarde para comenzar (47, 51).

O

Observa las cosas positivas (52).

P

Para cambiar lo que te rodea, cambia algo en ti (3, 65, 26, 22, 32, 67, 75, 65, 80). Para arreglar el mundo comienza contigo (67, 3, 22, 32, 65, 68, 73, 75).Para hacer un buen trabajo hay que practicar (7, 65,38)Para que los demás cambien debes empezar tú (3, 67,22, 32,65, 68, 73, 75). Para solucionar tus problemas busca dentro de ti (58,17,10,18,48).Para todo hay solución (69, 37,42, 67, 78).Pedir perdón te libera (4,57).Peor obstáculo es creer que no puedes (42, 37,45, 51).Pequeños detalles pueden hacer la diferencia (72, 79, 37, 24,21).Persiste a pesar de las fallas (57, 26, 33, 36, 37,46).Persiste en las cosas que quieres (43, 80, 65,15).Piensa qué puedes hacer tú (75, 3 ,9 ,32 , 58,67, 73, 68).Piensa en las demás personas (2, 9, 20, 65).Piensa en las posibles soluciones (18, 78, 69, 51,37).Poder está, utilízalo (73, 7).Pon atención a todo lo hermoso que te brinda la vida (44,1,34, 36,58).Pon atención en lo importante (44, 39, 6,18, 24, 27, 76, 71).Pon el ejemplo (80,3, 20, 22, 32,67, 75, 65).Poner límites en lugar de mentir (29, 7,13).Ponte en la situación de los demás (20, 2, 22, 27, 46).Por no decidir se te pueden ir oportunidades (77,1, 27, 56).Puedes apreciar aún lo que no te agrada (30, 6 8, 26, 36).Puedes ayudar cuando das lo mejor de ti (78, 79, 80, 58, 73,24, 26,42, 9). Puedes conseguir lo que quieras (45,10,15, 31, 47, 73, 78, 42).Puedes contagiar a los demás con tu buen humor (22, 9, 46, 58).Puedes disfrutar de lo que tienes en este momento (34,52).Puedes estar creándote enfermedades (12,14, 78).Puedes estar perdiéndote de cosas buenas (25, 36, 51).

índice de mensajes

194 Historias para contarse... y crecer juntos

Puedes hacer algo para mejorar el mundo (3, 9, 24, 49, 67, 79, 80).Puedes hacer lo que te propones (42, 45 ,10 ,15 ,31 ,47 , 73, 78, 43).Puedes realizar lo que realmente quieres (43, 42, 45, 37, 31, 47, 43, 73, 78).Puedes realizar el objetivo que desees (37,42, 45, 43, 31, 47, 73, 78, 43).Puedes seguir adelante a pesar de las heridas (4, 2, 8, 6, 24, 26, 30, 46,57, 58). Puedes ser lo que deseas (56, 43,47, 73).Puedes tomar lo molesto en algo agradable (30, 57, 58, 46, 51).Puedes ver tu propia grandeza en los demás (66,10, 22).

Q¿Qué estás haciendo para solucionar el problema? (75, 32, 67, 68).Quítate la mascara (14, 22,40, 59).Quizá lo verdaderamente importante no lo ves (52, 72,55, 57, 58,60).Quizá quien debe cambiar eres tú (20, 58, 67, 75,22, 31, 32, 36, 3).

R

Realiza un cambio radical (51, 20, 30, 32, 31, 36, 52).Reconoce las cosas positivas aún en la tristeza (8, 6, 23,46, 57).Reconoce quién eres (14,21 ,36 ,40 ,43 ,48 , 66, 26).Reconoce tu propia naturaleza (26,14, 21,36,40, 43, 48, 66, 26).Recuerda compartir con los demás (9, 2, 20,49, 79).Recuerda tu propósito en la vida (43, 73,11).Recupera lo valioso del aprendizaje (35,24,65,46).Recupera tu poder (11, 36, 68, 32).Reflexiona acerca de tus prioridades (39,13,19, 27, 33, 43,53, 71).Resalta los aspectos positivos (57,8 ,6 , 23,46, 58, 51).Rescata lo bueno de las situaciones adversas (6, 57 ,8 ,23 ,46 , 58,46, 51).Rescata lo esencial de cada experiencia (35,1, 6 ,15,18, 21, 58, 73).Rescata lo mejor de cada persona (24,27, 61).Respeta lo que te rodea (30, 2, 3, 20, 26,46, 70).Respeta los acuerdos (7,36,41, 79).Respuestas que otro te dé limita tu propia capacidad de descubrirlas (1, 42, 36, 45). Resuelves tus problemas cuando verdaderamente quieres hacerlo (50,45,51,55,69,

67, 78,19,31, 32).Revisa y valora lo que has hecho en tu vida (15, 5, 9, 43, 47, 73).

sSaber escuchar te evita llegar al absurdo (28, 37, 27).¿Sabes las consecuencias que pueda traer una mentira? (29,14, 53).

índice de mensajes 195

Sabes más de lo que crees que sabes (51,16,11,17,18).Saca provecho de cada situación (6, 51, 36, 69).Sal adelante a pesar del dolor (8, 6, 23, 57, 24, 26, 46, 58).Sé activo ante la vida (68, 75, 32, 9, 45, 80).Sé compartido (49, 2, 9, 80).Sé constante (60, 7, 80).Sé el creador de tu propia historia (32,1,19, 31,43, 45, 75, 68).Sé firme con lo que quieres alcanzar (43, 60, 7, 80,45,10,15, 31,47, 73, 78,42).Sé flexible (20, 6,30, 33).Sé generoso (49,2,9, 27, 73, 79).Sé joven de corazón (47, 58).Sé paciente y tolerante (7, 38, 30, 26, 60, 80).Sé perseverante (60,80,45, 7, 65, 26, 43,47).Sé persistente (45, 60, 80, 7, 65, 26,43,47).Sé positivo (23, 57, 8, 6 ,45,58, 51).Sé tú mismo (14, 21, 36,40, 43, 26).Si crees en ti, logras lo que quieres (31,10, 60,45,1 , 54,42).Si crees que puedes, puedes (42,31,10,45).Si empiezas a cambiar tú se puede cambiar el mundo (3, 67,22, 32, 65, 68, 73, 75). Si lo piensas mucho puedes perder espontaneidad (16,56, 54).Si luchas por algo lo obtendrás (43,10, 60,45,42).Si puedes hacer algo por alguien hazlo (68, 32, 75, 80, 2, 9, 33, 46, 49).Si quieres ver cosas buenas empieza por hacerlas tú (79, 3, 32, 67, 68, 75).Si te esfuerzas puedes lograr tus objetivos (31,42,45,15,47,43).Si te valoras a ti puedes valorar a los demás (46).Si todos ayudamos el mundo sería diferente (79,80, 67).Si tú cambias los demás también lo harán (3, 67, 22, 32, 65, 68, 73, 75).Si tú haces tu parte seremos más (80,65,3, 9, 32, 68, 79).Si tú verdaderamente lo crees es posible (62,42,31,10,45).Siempre existe una esperanza (69, 6,19, 24, 23, 79, 80).Siempre hay algo nuevo que aprender (54, 46,42).Siempre hay algo que hacer (47, 37, 51, 61, 69, 78).Siempre hay algo que identifica a cada ser (11,13,57, 66,21,40,46).Siempre hay opciones en la vida (25,19, 31, 36, 47, 51, 73, 2).Siempre hay otra manera de entender las cosas (33, 20, 42, 46, 57, 66, 67, 6). Siempre hay personas que necesitan de ti (46,2, 9 24, 73, 75, 78, 79).Siempre hay una razón para vivir (78, 36, 43, 46, 57, 75).Siempre podrás aprender algo (23,1, 36, 47, 51, 73).Siempre podrás hacer algo (23, 4,19, 20, 31, 36, 37, 42, 51, 61, 69, 80).Sigue adelante superando obstáculos (15, 6 ,11 ,19, 30, 45, 46, 69, 80).Sigue la cadena (79, 80, 9,15, 65).Sigue tu camino hacia la meta (47,45, 43, 7,15, 24, 37, 60,80).Sigue tu propio patrón de vida (40,1,11, 26, 34, 43, 70).Sigue tus convicciones (26, 43, 34, 47, 80).Sólo haz tu parte (80, 79, 65,67, 72, 75, 3).

196 Historias para contarse... y crecer juntos

Sólo lleva contigo lo esencial (64, 74, 33).Sólo puedes dar aquello que tienes (49, 20, 22, 46).Son más contundentes los hechos que las palabras (41, 42, 38, 79, 80).Son más largos los caminos, si vas cargando de más (64,14, 72, 74).Superar temores (25,11,19).

T

Ten confianza en ti mismo (77,1, 36, 42, 45, 51).Ten contigo sólo aquello que vas a usar (74, 64,14, 72).Ten paciencia y ocúpate del camino (15, 23, 7, 60).Ten paciencia y templanza para superar lo adverso (23, 7, 60,15).Ten paciencia (7,60,23,15).Ten un gran sentido de humanidad y cooperación (79, 80,46,49,27, 24, 20, 57). Ten valor para tomar decisiones (19, 25, 31, 51).Tener una incapacidad puede ayudarte a descubrir otras capacidades (61,24,46,58,51). Termina lo que iniciaste (15, 7, 45).Tienes algo valioso que encontrar (10 ,1 ,17 ,21 ,35 ,44 ,48 , 51).Tienes capacidades sin descubrir (11, 24, 51,42, 45).Tienes cualidades que te hacen especial y único (57,11, 24, 40, 47).Tienes el poder para lograr lo inimaginable (48, 42,19, 25, 32, 45, 47, 62).Tienes la decisión para tomar el camino correcto (19, 27, 79).Tienes la fuerza de hacer cambiar al mundo (9, 79, 80, 3, 20, 65, 67, 75).Tienes muchos tesoros y puedes tomarlos (17 ,10 ,1 ,21 ,35 ,44 ,48 ,51 ,11 ,24). Tienes todo en ti para lograr lo que quieres (56,11, 21,51).Toda decisión tiene un riesgo (77,31, 41, 51,19,62).Toda experiencia deja un aprendizaje (35, 4, 6,14, 20, 24, 27, 30, 36, 37,38, 51, 54). Toda solución está dentro de ti (21,10,17, 35, 66, 51).Todas las cosas pasan por alguna razón (6, 7, 8, 70, 71, 72).Todas las cosas tienen una utilidad aunque me desagraden (30, 57).Todas las personas nos pueden enseñar algo (67 ,47,3 ,20,24, 79, 80).Todas las vidas valemos (46,2,24, 78,27).Todo a su tiempo, espera el momento preciso (7,60,5,15).Todo en la vida tiene un ciclo (77,2, 79,47).Todo lo que quieras lo puedes lograr si estás motivado (31, 45, 42, 43, 47, 24, 78). Todo ser vivo es importante (27, 46 ,2 ,24, 78).Todo tiene un límite (72, 64,13, 65, 74, 76).Todo tiene un proceso para que suceda (48, 60,15,16).Todo tiene un uso y un provecho (57, 29, 30, 35, 71).Todos tenemos algo que dar (46, 80, 24, 2, 75, 79).Todos merecemos una segunda oportunidad (2, 63).Todos somos buenos en algo (57, 7,11, 80, 24, 40).Todos somos útiles para algo o alguien (73, 57).Todos tenemos cualidades que nos definen (40,11, 46, 66, 21).

índice de mensajes 197

Todos tenemos la capacidad de realizar cosas (42,47, 24,40, 45).Todos tienen una segunda oportunidad (2, 63, 20, 44).Toma conciencia de lo que tienes y sé feliz con ello (74,53,8,44,52).Toma decisiones confiando en ti mismo (19, 29, 55, 54, 36, 45).Toma el control de tu vida (3, 50, 80, 58, 69, 74).Tomar responsabilidades que no te corresponden puede afectar tu integridad (13). Tómate el riesgo y vence los miedos (19,25,55,54, 36,45).Tómate tu tiempo, ejercítate (7, 60,11).Trabaja por lo que deseas (32, 68, 34,43,10, 47, 20,80).Tu bienestar depende de ti (77, 78,17,18, 32, 68).Tú creas tu propia magia (48,1,18, 31, 34, 66, 67, 78, 79).Tú eres dueño de tu destino (69, 38, 34, 51, 52).Tú eres forjador de tu propio destino (38, 69, 45,43,19, 31).Tú eres único y valioso (40,11, 57, 66, 73).Tú haces tu propio destino (78, 58,44, 78, 75, 61,47).Tú le das el sentido a tu vida (58, 44, 78, 75, 61, 47).Tú le das el significado a las cosas (1,8, 26,27).Tú no necesitas que alguien lo resuelva por ti (68,1, 42, 45, 48, 75).Tú provocas la reacción de los demás (22,41, 24,14, 4).Tú puedes ayudar (75, 2, 24, 26, 32, 73).Tú puedes controlar las cosas (48, 3, 25, 38, 55, 64, 67, 72, 75).Tú puedes hacer la diferencia (3, 65, 80, 79, 75, 67, 65, 55, 44, 24, 3, 2).Tú puedes hacer la diferencia en la vida de alguien (32, 2, 24, 79, 80, 68).Tú puedes hacer la diferencia en tu vida (68, 3, 50).Tú puedes ser el mago de tu vida (35, 3, 48).Tú puedes vencer cualquier obstáculo (78,15, 23, 25, 42, 45, 47, 58, 61, 69).Tú sabes mucho practícalo (38, 7,16).Tú tienes los recursos para hacer mejor las cosas (71,3,11, 24,26,31,48).Tus actitudes influyen en las actitudes de los demás (22, 79,58,46, 24, 3, 67).Tus pensamientos condicionan tu conducta (62,25, 70).Tus problemas no son tan graves como crees (12).Tus recursos están disponibles (17, 71 ,3 ,11, 24, 26, 31,48).Tus resultados serán consecuencia de tus actos (22, 79,4).Tus sentimientos no siempre se presentan tal cual son (59).Tus sentimientos verdaderos pueden estar disfrazados (59).

uUn pequeño detalle puede hacer una gran diferencia (2, 79, 80, 67, 61, 58, 27, 24). Un solo acto puede trascender y cambiar lo que te rodea (65, 67, 79,2, 63).Una segunda oportunidad debes aprovecharla (63, 2).Usa cualquier cosa que se te presente para aprender (73,1, 8, 39, 69).Utiliza bien tu condición (46, 47, 68,11, 24).Utiliza el sentido común (28, 27).

198 Historias para contarse... y crecer juntos

V

Vale más prodigar que atesorar (9, 64, 73, 35, 74, 79).Valor puede ser sencillez (21, 37,31, 57, 64).Valora cada una de las oportunidades que se te presentan (73, 63, 51).Valora la amistad y la confianza (41).Valora lo que tienes (39, 63,53, 57, 74).Valora lo que ya has hecho (15, 34, 60).Valora y aprecia la vida y todo lo que tienes (5,39, 63,53, 57,74).Valorar lo que tienes (53, 30,6, 23, 34,40, 74).Valórate y valora a los demás (21,41,46,45).Vence las barreras que te pones (46, 45,11,19, 25,42, 47,51).Vence tus limitaciones y el miedo (17,25, 45,11,19, 25, 42, 47, 51).Venciendo el miedo puedes encontrar cosas maravillosas (25,19,46,45,11,25,42,47,51). Verifica lo que te dicen (28, 70, 62).Vive cada día como si fuese el último (5, 38, 36).Vive cada día siempre con la misma intensidad (38, 5).Vive como si fuese la última vez (5, 38, 36).Vive de acuerdo a tu etapa de vida (13).Vive el presente y disfruta cada momento (64,5, 52, 56).Vive la solución (18,38,31,16,17).Vive sin ataduras (76, 74, 53, 64, 70).Vive y disfruta al máximo cada día (38, 5, 64, 52,34, 58).Vive y experimenta cada situación como única (54, 33,58).

índice General

Presentación por Jeffrey K. Zeig 13Presentación por Teresa Robles 15Introducción 17Cómo leer este libro 21

P r im e r a P a r t e . L o s r e c u r s o s d e l a m a g ia 25

Capítulo 1. Las historias y su narración 27Tipos y definiciones 27¿Cómo funciona la narración? 30Algunos aspectos acerca de la construcción de las historias 42Recomendaciones para la narración de historias 47La narración de historias en el consultorio psicoterapéutico 55

Capitulo 2. La vida de Milton H. Erickson.Una historia para contarse. 62

Sus primeros años 63El auto descubrimiento de la hipnosis 66Los años de la facultad 68Los años de trabajo e investigación 71Los años de madurez profesional 73

S e g u n d a P a r t e . L a m a g ia d e l o s r e c u r s o s 79

Historias para contarse 11. Beber agua fresca. Lo que descubrieron otros

tú también lo puedes descubrir 812. Estrella de mar. Una segunda oportunidad

puede hacer la diferencia 813. Empieza por ti. Tu ejemplo puede hacer

que el cambio sea una realidad 824. La palma con el corazón de piedra.

Todo acto tiene consecuencias 835. La última vez. Si lo dejas para después

será insuficiente la última vez 846. Wu wei. Rescata la utilidad de cada experiencia 84

7. El pintor del emperador. Roma no se hizo en un día 868. El viudo contento. En todo acontecimiento hay un regalo de la vida 879. El zapatero honesto. Siempre es mejor avanzar acompañado 87

10. El tesoro en tu jardín. La riqueza está en tus recursos y es interior 8811. La historia de un águila. Si eres un águila siempre podrás volar 8912. El gran Hakim. La verdad cae por su propio peso 9013. La armadura. Al invadir las actividades de otros

te puedes olvidar de las tuyas 9214. El disfraz de lobo. Aparentar pone en peligro la identidad 9415. La cima de la montaña. Caminando llegas más lejos

que preocupándote por llegar 9516. Pedro escarabajo y Juan oruga. El que piensa mucho poco avanza 9717. El arqueólogo. Si buscas la luz interior encontrarás los recursos 9818. La pregunta mágica. Hay que creer para ver 9919. El sendero blanco. El que no arriesga no vence el miedo 10020. El rey sabio. Si quieres que cambien, primero cambia tú 101

Historias para contarse 221. La esencia del hombre. Aunque sea en el lugar menos esperado

la respuesta siempre está 10322. La casa de los espejos. Cosechas lo que siembras 10423. La señal de humo. El punto más oscuro de la noche

es justo un momento antes del amanecer 10524. La maestra. Conoce la esencia de las personas 10625. Lo que puede hacer el miedo. Venciendo el miedo a lo desconocido

puedes encontrar cosas maravillosas 10826. La naturaleza del alacrán. Si miras bien sabrás cómo hacer el bien 10927. Mirar sus ojos. Los ojos son el espejo del alma 10928. Los expertos. Tan valiosa la ciencia como la experiencia 11029. La medalla. No tapas un hoyo abriendo otro 11130. Dientes de león. Utiliza lo que tiene fuerza propia 11131. La estrategia del triunfo. Los resultados dependen

de la forma de hacer las cosas................................................................... 11232. El zorro mutilado. A Dios rezando y con el mazo dando 11333. El monje y la mujer. No te tortures después de la tortura 11334. El pescador satisfecho. Descubre tu propia manera de ser feliz 11435. Un diamante. El mundo será mejor

si las personas encuentran la riqueza del aprendizaje 11536. El príncipe y el mago. Ve más allá de la verdad o la mentira 11537. De qué tamaño es la luna. Las cosas no son lo que parecen 11738. La formula de la vida eterna. Es muy distinto saberse el camino

que andarlo............................................................................................... 119

39. Recuerda lo importante. Si descuidas a las personas,podrás perder una parte importante de tu vida 119

40. El águila y el elefante. La belleza de tu ser es única y diferente 120

Historias para contarse 341. Damián y Pedro. La lealtad se gana con lealtad 122

42. ¿Cómo lo hizo?. Qué harías si no tuvieras miedo 12343. Leyenda personal. Rescata tu propósito en la vida 12444. El secreto de la felicidad. La verdadera felicidad

es disfrutar lo que tienes y lo que no tienes .............................................. 12645. Carrera de sapos. Son mejores los actos que las palabras 12746. Cachorritos en venta. El juicio te puede cegar 12847. Los 87 años de Rosa. Nunca es tarde para comenzar 12948. El mago y el sombrero. La magia está dentro de ti 13149. El oasis y el viajero. Si tienes algo que agradecer,

tienes algo que compartir 13250. El árbol y el sabio. Las decisiones acerca de ti las tomas tú 13251. Empuja la vaquita. El que arriesga se fortalece 13452. La cola del gato. La felicidad está más cerca de lo que crees 13553. El circulo del 99. Rico no es quien tiene más,

sino quien necesita menos 13654. La pata del elefante. Cada experiencia es única

y por lo tanto una nueva posibilidad 13955. La inundación. Es preferible actuar que esperar 14056. El pedrero. Lo mejor es lo que eres 14157. Las vasijas del aguador. Es más valioso el que ilumina

que el que brilla 14258. El hombre de la ventana. Mira a través de la imaginación 14359. La tristeza y la furia. Si miras más allá de lo superficial

se te revelará lo oculto ..................................................................... ....... 14460. EL bambú Japonés. El que persevera alcanza 145

Historias para contarse 461. El portero del hotel. Cuando tengas una idea,

ponía en práctica 14762. El Correo del Zar. El respaldo de las acciones

se encuentra en las creencias....................................................................... 15063. Otra oportunidad. Cuando el alumno no quiere escuchar

tiene mejor efecto actuar 15164. Los muebles. Aligera la carga 15265. El punto critico. Unos cuantos podemos hacer el cambio 15266. La leyenda de Narciso. La belleza está en los ojos de quien la mira 153

67. Cómo se arregla el mundo. La verdadera transformacióndel mundo empieza por ti 154

68. El ave y el perro. Ayúdate que yo te ayudaré 15569. El Burro. La fortaleza ante la adversidad puede ser la solución 15670. El gato del gurú. La importancia de las cosas

depende de las personas 15671. El leñador esforzado. Lo más elemental es lo fundamental 15772. La paja que rompió la espalda del camello. Subestimar pequeños

detalles puede tener grandes consecuencias 15873. La perla negra. Te puedes desprender de lo que tienes,

cuando eres rico en espíritu 15874. Los siete tarros de oro. De nada sirve atesorar

lo que no se puede utilizar 15975. ¿Por qué no haces nada?. La solución está en tus manos 16176. Nube alta y Toro bravo. El amor no impide la libertad 16177. El centauro. Es tan importante actuar como pensar 16378. La tercera hoja. Es tan importante tener un motivo para vivir

como una perfecta salud 16379. Acuérdate de mí. Cada uno puede ser el eslabón que falta

para unir al mundo 16580. De cualquier manera. Hazlo de todos modos 166

Fuentes de las historias........................................................................................ 169Bibliografía ........................................................................................................... 175índice analítico 177Indice de mensajes ............................................................................................... 185Lista de participantes 203

Lista de participantes*

De manera generalizada, al elaborar una obra lo más que se pide es una disculpa por no "poder" mencionar a todas las personas que contribuyeron a su logro. Nosotros hemos decidido sí hacerlo e invitamos al lector a leer la historia número 2 para entender con claridad nuestra intención. Así, hemos incluido en la siguiente lista a todas las personas que pensamos intervi­nieron de una o de otra manera en el logro de nuestra meta, agradeciendo profundamente su colaboración. Dejamos testimonio de sus nombres, aun­que parezca un exceso, porque además estamos comprometidos en generar una ola de expansión que permita florecer semillas de reconocimiento a la acción comprometida de cada uno de ellos...

Abraham Flores Yolanda. Abreu Lemus Alvaro. Acevedo Martínez Estrella. Aceve­do Rojas César J. Acosta Gutiérrez Sandra. Acuña Vázquez Isabel Mariana. Adalid Martínez Fernando. Aguilar Alcocer Yuripsi. Aguilar García Omar. Aguilar Marín Alma Edith. Aguilar Mora Mariana Gabriela. Aguilar Paz Martha. Aguilar Solís Mi­riam. Aguilar Valdez Janeth. Aguilar Villarón María de la Luz. Aguilera Basurto Mónica. Aguilera Pastrana Fabiola. Aguirre Gómez María Dolores. Aguirre Martí­nez Erika. Alba Gómez Claudia Guadalupe. Alba Romero Luis Elizabeth. Alcánta­ra Alderete Diana. Alcántara Monroy Joana Griselda. Alcántara Nancy. Alcántara Suárez Gabriela. Alcázar Mancilla Edith. Alegría de la O Paulina. Alfaro Aguilar Alicia. Almazán Reyes Brenda. Alonso García Fernando Amaury. Alpache Ramí­rez Virginia. Altamirano Grande Omar. Alvarado Maldonado Carla. Alvarado Ruiz Zully. Alvarado Santa Rosa Claudia. Alvarez Aguirre Alejandra Elizabeth. Alvarez González Patricia. Alvarez Robles Alejandra. Anaya Galván Alfonso. Angelares To­rres Mireya. Ángeles Fuentes Celeste Verónica. Ángeles Nieto Saúl. Aparicio López Alma Claudia. Aragón Cabrera Erick David. Aranda Macias José L. Arcos García Jessica N. Arenas Cheverría María de los Ángeles. Arenas Hernández Dora. Arévalo Sánchez Carlos Alberto. Argueta Medrano Irving. Arias García Blanca Delia. Arias

'S i algún otro de los participantes no se encontrara en la lista, es probable que sea así porque no dejó su nom bre escrito; de cualquier manera, le agradecemos igual y esperam os su comu­nicación a nuestro correo electrónico.

204 Historias para contarse... y crecer juntos

Herrera Diana Gabriela. Arizmendi Nateras Dayana Jazmín. Arizmendi Sosa Leti­cia. Armenta García Lilian Carolina. Armenta Hinojosa Jenny. Armenta Jara Carlos. Arratia Martínez Susana Lizzette. Arredondo Barrón Fernando. Arredondo Téllez Jessica. Arreóla Garay Felipe de Jesús. Arrieta Avitia José Luis. Arroyo Cortés Amol­do. Arroyo Pérez Abraham. Arzate Meza César. Ateus Donatien Pragmatista. Atila- no Cruz Karla. Avendafto León H. Claudia. Ávila Corona Abraham. Ávila de la Rosa Diana. Ávila Ortega Claudia. Ávila Pérez Iliana. Avilés Zúñiga Arlae Nayeli.

Badillo Gonzáles Jazmín. Balbuena González Ana Laura. Barajas Luna Liliana. Bar­bosa Santamaría Hugo A. Bárcenas López Arlette Vanesa. Barriga Sánchez Edith. Barrios Sánchez Enrique Javier. Barrios Villar Raquel. Barrón Aguilar Nancy Noemí. Bayard Rodríguez P. Becerril Corona Marisol. Becerril Cruz Ricardo. Bejarano Cer­vantes María Guadalupe. Beltrán Páez José Luis. Benítez Jiménez Cintya. Benítez Martínez Juvani Sofía. Bernal Pérez Belem. Blanco Fresan Sofía. Blanco Guzmán Ta- nia Itzel. Blanco Sofía. Blas Flores Nancy Marlene. Bonilla Méndez Elizabeth. Bravo Rodríguez Andrea. Brito Vargas Jacqueline Angélica. Bustos Bravo Tañía Ixchel.

Cabriales Pérez Oziris Israel Alberto. Cachzafla Sanguino María de Jesús. Calderón Vázquez Martha Eugenia. Calvillo Jaramillo Miriam. Camacho Hernández Nyzma. Camargo Gaona Cynthia. Cambroni Franco Catalina. Campa Sotelo Carlota Aurora de Guadalupe. Campos Campos Reyna. Campos Hernández Guillermo. Campos Pérez Berenice Concepción. Canales Sosa Erika. Cantú Galván Rebeca. Capacini Roldán Felipe Enrique. Cardenal Rojas Gloria. Cárdenas García Dalia. Cárdenas Mendoza Diana. Carmona Arellano Estefany Guadalupe. Carmona Urbina Ana Rosa. Carrillo Olivera Arturo. Carrión Galindo Ivone. Carrosoza Méndez Belem Guadalupe. Carvente Grimaldo Diana Cecilia. Carvillo Jaramillo Miriam. Casiano de Luis Azucena Berenice. Casiano de Luis Berenice. Casillas Hernández Erick. Ca- sique Vera Miguel. Castelán Castro Erika Dianeli. Castillo Fernández Andrea Den­se. Castillo Flores José Eduardo. Castillo Hernández Leticia. Castillo Maldonado Francisco. Castillo Mendoza Isabel Patricia. Castillo Montañez Isaías. Castillo Pan- toja Martha. Castillo Solache Mario. Castro Alfaro Karina Araceli. Castro Hernán­dez Olga Yarely. Cazares Benavides Nancy. Cazares Martínez Georgina. Cedillo Estrada Susana Jazmín. Cedillo Sánchez Elizabeth. Cedillo Tlahuech María Elizabe­th. Cedillo Tlahuech Víctor. Cerda Soria Enith. Cerón Cardoso Mónica. Chávez Lu­ciano C. Chávez Luciano Verónica J. Cholico Martínez Idalid. Chulin Canal Anitzel. Cienfuegos Zepeda Evelyn. Cisneros Mora Fabiola. Contreras Mendoza Ananke. Córdoba Citlali. Coria Hernández Francisco Javier. Corona Calderón Citlalli del Ro­cío. Coronel González Martín Víctor. Cortés González Isabel. Cortés Israel. Cortés Jiménez Karina. Cortés Medrano Kenia. Cortés Ortiz Magali. Cortés Rodríguez Luz María. Cortés Villaseftor Sergio. Cruz Bonilla Nayeli. Cruz Guerrero Susana Bere­nice. Cruz Hernández Yuly. Cruz López Ornar. Cruz Mejía Mónica. Cruz Mejía Yu-

Lista de participantes 205

riko Romina. Cruz Velásquez Brenda. Cruz Victoriano Francisco Alfonso. Cruzado García Sara. Cuadros Aguilar Carla Selene. Cuéllar Palapa Beatriz. Cuevas Corona­do Cristina. Cuevas Guerra Roberto. Cuevas Hernández Laura Olivia. Cuevas Job Sonia. Cuevas Villegas Ana Lilia. Curiel Neri María del Carmen.

Damián Herrera Ximena Tzuri. Dávila García Karla Beatriz. De La Piedra Gómez Familia. De La Rosa Francisco. De La Rosa González Jorge. De La Rosa Ortiz Isabel. De La Torre Jiménez Azucena. De la Torre Reyes Vianey. De Santiago Samoaya Martha Elizabeth. Del Moral Roldán Marco Antonio. Delgadillo Carrasco Donanin. Delgado Aguirre Daniel Isaac. Díaz Camacho María Elena. Díaz Gerardo. Díaz Na- paltitla María Dolores. Díaz Ramírez Karina. Domínguez Aguilar Dalia. Domín­guez Castro María Concepción. Domínguez Laureano Cristina. Duarte Montaño Cinthya. Durán Ayala Celina.

Edith. Elizarrás Montero Rosalía Ariadna. Elizondo Hernández Gloria. Eminente Bautista Berenice. Enciso García Martín G. Escandón Escalante María de la Luz. Escudero Robles Mauricio. Espino León Ixchel. Espinobarro Melgarejo Milkom Os­car. Espinosa Cigarroa Thamara. Espinosa Espinosa Ivonne. Espinosa Meraz Da- niel.Estévez Marcela. Estrada Ángel Laura Airam. Estrada López José Luis. Estrada Silvia Félix. Estrella Luna Yuliana Montserrat. Estrella Santoyo William. Estudillo Montecillos Nidia Irene.

Fabián Guzmán Elizabeth J. Fajardo Gómez Belinda. Fernández Maya Sergio David. Ferra Cisneros Claudia. Filio Andrade Arturo Daniel. Fioratti Zamora Norma. Flores Fuerte Brenda Daniela. Flores García Alma Viridiana. Flores Gil Laura. Flores Gómez Berenice. Flores Mateos Margarita. Flores Montoya Patricia. Flores Ramos Cecilia. Flo­

res Rangel Oscar. Flores Velasco Denice Areli. Francisca. Franco Medina Rosa Isabel.

Gallegos Sandoval Laura Ivonne. Gamboa Jiménez Susana. García Arenas Bardo Guadalupe. García Castillo Dulce Viridiana. Garda Curiel Lucía. García Espejel Nancy. García González Lucio M. García Guzmán Estela. García Leal María Anto- nieta. García Maldonado Metztli. García Nava David. García Plata Norma I. García Rancel María Guadalupe. García Rancel Marilú. García Sánchez Oscar Iván. García Santiago Gustavo. García Sierra Nancy Adriana. García Suárez Israel. García To­rres Fernando. García Valeriano Ana Paola. Garduño Bonilla Israel. Godoy Monroy Mariana. Gómez Balcazar Eleazar. Gómez Flores Tlanesi. Gómez Jiménez Guiller­mo. Gómez Méndez Alma. Gómez Monroy Maribel. Gómez Rodríguez Alejandra. Gómez Salas José. González Águila Elisa Anny. González Barrera Claudia. Gon­zález Cabrera Pedro. González Carranza Marco Antonio. González Chávez Erika. González Contreras María Magdalena. González García Karina. González González Roxana. González Guerrero Gloria. González Islas Ana María. González Juárez Ana

206 Historias para contarse... y crecer juntos

Lilia. González Lina Víctor Manuel. González Márquez Leopoldo. González Mar­tínez Ana María. González Ortiz Rebeca Vasti. González Ramírez Miguel Angel. González Rodríguez Guadalupe. González Sandoval Ana. González Tirado Alfon­so. Gorostieta Ordaz Laura Adriana. Granados Hernández Ahilud. Granados Pérez Deyanira. Guadarrama Herrera Erendira Beatriz. Guadarrama Jiménez Neyda An­drea. Guadarrama Zamora José Ramón. Güemez Álvarez Patricia. Guerrero Miran­da Zugeily. Guevara Genis Guadalupe. Guevara Verduzco Violeta. Guillén Bautista Yésica L. Gutiérrez Guarrama Alfonso Isaac. Gutiérrez Navarrete Ofir. Gutiérrez Pecina Hermelina. Gutiérrez Van Dyck Erika. Guzmán Cacique César Eduardo. Guzmán Fernández Elias. Guzmán Jaimes Laura Viridiana. Guzmán Pérez Miguel. Guzmán Ramos Alma Berenice.

Hernández Acosta Roberto Noé. Hernández Catalán Luis Andrés. Hernández Ca­talán Norma. Hernández Cervantes Emma Argelia. Hernández Cortés Laura. Her­nández Guzmán Araceli. Hernández Jalpa María Areli. Hernández López Alma D. Hernández Lozano Verónica. Hernández Macedo Lairem. Hernández Martínez Alma Rosa. Hernández Martínez Virginia. Hernández Olvera Jorge Jesús. Hernán­dez Olvera Wendy. Hernández Osorio Juan de Jesús. Hernández Padilla Claudia. Hernández Paredes Eliazel. Hernández Pérez Magda Luliana. Hernández Pérez Martha Patricia. Hernández Ramírez César. Hernández Ruiz Paloma del Carmen. Hernández Ruiz Perla Elena. Hernández Tavera Andrea. Hernández Velásquez José Alfredo. Hideroa Álvarez Marlene.

Ibáñez López Guadalupe. Ibarra Guadalupe. Islas García Martha Cecilia. Islas Ve- lasco María. Islas Velasco Mario Juan de Dios. Iturbide Chiñas Rebeca.

Jéssica Sevilla. Jiménez Estrada Gloria. Jiménez Rivera Claudia Iveth. Jiménez Ro­dríguez Eduardo. Jiménez Velasco Geraldine. Juárez Salinas María Guadalupe. Ju­rado Rivera Verónica Victoria. Justo Estrella Janeth.

Lagunas Pantaleón Norma Yolanda. León Hernández Erika Jazmín. León Pichardo Verónica. Lira Castro Alan E. Lizárraga Fabián. Loman Sánchez Susana. Lomelí Oso- rio Karla Roxana. López Esquivel Anayeli. López Flores Rosario. López Hernández Silvia Jazmín. López Maya Estéfani. López Miramontes Gustavo. López Montes Eli- zabeth. López Pacheco Yadira. López Sandoval Edwin. López Solís Enrique. López Torres Diana Scarlet. Lorenzo de la Rosa Alimedi Mauricio. Luján Salazar Dilery. Lu- ján Yeni Magdalena. Luna García Nelly C. Luna Jara Xóchitl. Luna Romero Jéssica.

Macías González Eloísa. Macías Sayde Ornar. Magadaleno Luján Yeni. Manjarrez Silva Saúl. Marañón Rosal Héctor. María Dolores. Martín Flores Oscar. Martínez Cardoso Elvira. Martínez Becerra Margarita. Martínez Fernando A. Martínez Flores

Lista de participantes 20 7

Abraham. Martínez González Edíth. Martínez González Maribel. Martínez Martí­nez Cinthya. Martínez Martínez Genoveva. Martínez Olivar José. Martínez Ortega Giovanni. Martínez Ortigoza Saúl. Martínez Ortíz Irlanda Lorena Patricia. Martí­nez Ramírez Arianna. Martínez Uribe María del Carmen. Martínez Valdez Andrés. Mata Godínez Viviana. Matías Juárez Mónica. Maya Cruz Estela. Maya García Lilia­na Araceli. Maya Ramírez Oscar Gerardo. Maya Vázquez María Cristina. Medellín Castro Erika Ingrid. Medina Garcés Mayté. Medina Martínez Héctor. Medina Yón- natan. Medrano Rivera Eva. Mejía Bárcenas Yalina. Mejía Romero Karina Damaris. Melchor Ortega María Guadalupe. Meléndez Martínez Misael. Mellado Cisneros A. Lizabeth. Meló López Julio César. Méndez Cruz Wendy Paola. Mendieta Méndez María Laura. Mendoza Chávez Alejandra. Mendoza Hernández Diana. Mendoza Lecanda Verónica. Mendoza Mondragón Ma Luisa Ivonne. Mendoza Ramos Lau­ra C. Mercado Díaz Xóchitl. Mercado Mendoza Alma Angélica. Mestas Espinosa Virginia. Meza Contreras Lucía. Miranda García Marcela M. Miranda Rico Bertha. Míreles Mado Lenika Aliñe. Molina de la Rosa Berenice. Montalvo Kida Sara Elba. Montalvo Kilo María Virginia. Montalvo Ordaz Denis. Montero Alvarado Adriana. Montes Díaz Gerardo. Montes Peralta Violeta. Montes Soria Miriam. Montiel Ruíz Nayeli. Mora Arellano Montserrat. Morales Armenla Jéssica. Morales Cruz Rocío. Morales Godínez Perla. Morales Rodríguez Brenda. Morales Rugerio Brenda Morán Alvarado Sara Stephany. Moreno Aldama Cecilia Xóchitl. Moreno Barajas Cinthya. Moreno Gordillo Karla Grisel. Moreno Sánchez Nayeli Guadalupe. Morgado Coro­nel Viridiana. Munguía Serrano María Guadalupe. Murguía Plama Laura Susana.

Narváez González Paloma. Nava Lobato Brenda. Nava Razo Claudia Gabriela. Na- varrete Galeana Yazmín. Navarro Álvarez Dulce Angélica. Nieto Medina J. Luis. Nogueira Castrejón Eva. Nolasco Morgaín Edwin Darío. Nóvales Martínez Gabriel. Novañón Rosal Héctor. Núñez García Adriana Berenice. Núñez Zacatzi Octavio.

Olguín Martínez Thalía. Oliva García Viviana. Olivares Torres Paulina. Oparra Bo­nifacio Anabel. Orozco Hernández Héctor. Ortega Carrillo Alfonso. Ortega Hernán­dez Maribel Adalid. Ortega Ibarra Juan Antonio. Ortega Martínez Carlos. Ortega Ortiz Elizabeth. Ortega Plascencia Braulio. Ortega Ramírez Carlos. Ortega Trejo Ivonne. Ortíz Andrés Miguel. Ortíz Coronel Grecia. Osorio Cruz Leopoldo. Osorio Osorio Jorge Armando. Otero Rodríguez Miriam A.

Padilla Amaya Mónica. Páez Méndez Nelly Judith. Palafox Martínez Marisol. Pal­ma Contreras Leslie Daniela. Palomares Mercado Lilia Paulina. Panzo Silverio Ve­rónica. Parra Bonifacio Anabel. Pastelín Taboada Salvador. Peña Aguirre Georgina. Peña Aguirre Luis. Peña Cruz Manuel Alejandro. Pérez Arias Adriana. Pérez Espi­no. Pérez Franco Maribel. Pérez Lares Sara Stephanie. Pérez López Alejandro. Pérez Méndez Karina. Pérez Montiel Gustavo. Pérez Nava José. Pérez Ortiz Jesús Mario.

208 Historias para contarse... y crecer juntos

Pérez Ruiz Eduardo. Pérez Velásquez Maury Elena. Piedras López Itzel Alejandra. Pineda Gil Cristian. Pinelo Cuevas Nallely Berenice. Ponce Mejía Tomas. Posadas García Claudia. Pozos Gutiérrez José Luis. Puga Tello Xóchitl Nitzet.

Quezada Sánchez Néstor. Quintero Bonilla Lino. Quintero Gómez Guadalupe Na­talia. Quiroz Ramos Beatriz.

Ramírez Anaya Oscar. Ramírez Garrido Daniel. Ramírez González Blanca. Ramírez Gutiérrez Alma C. Ramírez Juárez Nancy Jazmín. Ramírez Salinas Dulce María. Ramírez Sánchez Silvia Susana. Ramírez Torres Paulina. Ramos Mendoza Gabriela. Ramos Ríos Adriana. Ramos Rosas María Albina. Rangel Fonseca Ernesto. Rangel García José Carlos. Rangel Rojas Ana Rosa. Rendón Berenice. Rendón Medellín Mi­guel Angel. Reséndiz Gómez María de Lourdes. Revilla Sánchez Iván José. Reyes Flores Areli. Reyes Hernández Alejandro. Reyes Montaño Laura Rosalía. Reyes Ramírez Ana María. Reyes Regalado Fabián. Reyes Romero José Arnulfo. Reyes Suárez Armando. Ríos Barrios Ricardo. Rivera Bravo Bianca Lizbeth. Rivera Pérez María Eugenia. Rivera Romeo Rubí. Roa Gallardo Beatriz Berenice. Robles Ibarra Adelaida Margarita. Robles Villegas Mónica. Rocha Carlos Adrián. Rocha Martínez Norma Angélica. Rodríguez Cabrera Miguel Ángel. Rodríguez Carmona. Rodrí­guez Castillo Eleonor. Rodríguez Caudillo Alethia. Rodríguez Estrada Berenice Eli- zabeth. Rodríguez Estrada Marco Antonio. Rodríguez González Diana. Rodríguez Hernández Angélica. Rodríguez Martínez Beatriz. Rodríguez Matus Alejandro. Rodríguez Pacheco Miguel Ángel. Rodríguez Soriano Luis Miguel. Rodríguez Váz­quez Gabriela. Rojas Camacho Víctor Manuel. Rojo Muñoz Gabriela. Roldán Ortega C. Reyna. Román Escalona Nadin. Román Matías Francisca. Román Ruiz Celeste Shi. Romero Acosta Paola. Romero Alvarado Erika. Romero García Laura. Romero González Orlando. Romero Martínez Nayeli. Romero Peralta Mentían Marel. Ro­mero Pérez Mario Alberto. Rómulo Barón Belem. Rosado González Isidro Moisés. Rosales López Beatriz. Rosas Silva Orlando. Rosas Vela Maribel Rosa. Rósete Gil Héctor Saúl. Rubio Cristino Diana. Rubio Trejo Daniel Alejandro. Ruiz García Froy- lán. Ruiz Méndez José Ángel. Ruiz Ortega Oscar. Ruiz Pérez Ángeles.

Salgado Magallanes Jennifer Pamela. Salguero González Alejandra. Salvador Ginez Octavio. Salvador Leal Enrique. Samperio Juárez Manuel. San Juan Vázquez Julieta. San Luis Reséndiz Alfredo. Sánchez Bazán Anayeli. Sánchez Cruz Luis Armando. Sánchez Cruz Silva. Sánchez Cruz Silvia. Sánchez Domínguez Ricardo. Sánchez Es- píndola Rogelio. Sánchez Garduño Martha A. Sánchez Guerrero Eunice. Sánchez León Karina. Sánchez Marín Elizabeth. Sánchez Mendoza María de Lourdes. Sán­chez Spindola Rogelio. Sánchez Valencia Cinthia Nayeli. Santillán Cruz Elvia. San­tos Ángeles Noemí. Segundo Cruz Flor. Serrano Loaeza Mayra. Serrano Pila Marga­rita. Serrano Vera Erika M. Sevilla Sánchez Jéssica. Silva Márquez Vanessa Ivonne.

Lista de participantes 209

Silva Reyes Ángel de Jesús. Solano Trejo Verónica. Solís Ávila Verónica. Soriano Patricia. Sosa Morán Hazael Fabián. Soto Espinosa Ixchel. Souberville Brenda.

Tejocote Caro Anayeli. Téllez Román Hugo. Teodoro Terán Bernabé. Tinoco Solares Tanya. Tiscareño Espitia Guillermo. Torres Castañeda Miguel Ángel. Torres García Brenda. Torres Sosa Israel. Torres Vargas Tania E. Tovar Ramírez Janet. Trejo Gama Sarai. Trejo Navarrete Aarón. Trejo Ortega O. Iván. Trejo Sigueza Andrés. Trujillo López Osiris Marlén.

Urquijo Galán Nidia.

Valadez García María De la Luz. Valdez Alonso Josué. Valdez Morales Aurora. Val­dez Ruiz Blanca Rocío. Valencia Frias Leandro Camilo. Varela Genis Nidia. Var­gas Aguilar Manuel. Vargas Flores Sandra Anaís. Vargas González Ana Cristina. Vargas Vázquez Claudia Iveth. Vázquez Banda Xóchitl. Vázquez Cadena Ménica Angélica. Vázquez Cisneros Blanca Leticia. Vázquez Jiménez Berenice. Vázquez Martínez María del Rosario. Vázquez Montoya Ana L. Vázquez Rodríguez Dulce Olivia. Vázquez Rodríguez Sonia. Velasco Romero Alma Heli. Velásquez Campos Rubí. Velásquez Marín Brenda. Velásquez Medina Lorena. Velásquez Montoya Ana Laura. Ventura Medina Patricia Mayte. Vera Hernández Diácono Raúl. Veras Flores Sandra Anaís. Vergara Cruz Itzel. Vergara Manzana Juan. Vicuña Rosales Sendy. Vidal Torres Rocío. Vilchis Maya José Luis. Villa Cortés Delia. Villa Domínguez Mi­riam Edith. Villa García Valery Jacqueline. Villa Rivera Gertrudis. Villalobos Pérez Carlos E. Villegas Aída Esther.

Xoxocotla Muñoz Lucio Alberto.

Zacarías García Martha. Zacatenco Tapia Nancy. Zamora López Cesia Eunice. Za- mudio Jaramillo María G. Zárate Lara Sylvia. Zarza Pérez Adriana. Zavaleta Jéssica. Zécatl Francisco Javier. Zenil García Jéssica. Zúñiga Ayala María Guadalupe. Zúñi-

ga Bustos Miguel Ángel.

Historias para contarse... y crecer juntos, se term inó de imprimir durante el mes de octubre de 2007 en Publidisa, Calzada Chabacano N° 69, C.P.- 06950, M éxico

D.F. La edición, en papel de 90 gram os, consta de 1,500 ejem plares.

ISBN: 978-970-9929-10-2

ISBN

: 978

-970

-992

9-10

-2

Al explicar con un lenguaje claro y directo en este libro la manera en que puede ser utilizada una historia como un recurso que se convierte en una poderosa herramienta de comunicación indirecta, Yolanda y Marcelo, psicoterapeutas, directores del Instituto Milton H. Erickson de Ciudad Nezahualcó- yotl, en el Estado de México (Un lugar para crecer juntos...), explican el proceso de trabajar con historias, conservando la individualidad de la persona, al "cortara la medida", dado que la caracte­rística universal del relato es generar un efecto, "desde el interior de la persona misma: desde su sabiduría inconsciente..."Historias p ara contarse... y crecer juntos es una obra cuyo objetivo primordial es brindar un recurso a los psicoterapeutas para el manejo de historias en su labor; pero que por sus características podrá beneficiar también a maestros, pacientes, alumnos, educadores, además de abuelos, madres, nietos, hijos, y a toda persona "que se tome el riesgo de compartir los recursos de la magia escrita y contada en relatos..."

El libro incluye, con la propuesta de utilizar cada una de ellas para situaciones específicas, 80 historias "que despiertan en el escucha y en el lector mecanismos, recuerdos y asociaciones que permiten disponer de recursos que podían encontrar­se dormidos o bien que no necesariamente estaban asociados a su forma de afrontar alguna situación determinada. El resto de la magia —concluyen— se encuentra en el interior de cada persona..."

*mmi J 1