DANIEL LEÓN RUIZ CÉSAR AUGUSTO CASTAÑO...

1 Cornisa: EL PROPEDÉUTICO UN PROCESO EN DESARROLLO DE LAS DIFERENTES

DIMENSIONES DE LA FORMACIÓN SACERDOTAL

EL PROPEDÉUTICO UN PROCESO EN DESARROLLO DE LAS DIFERENTES


DANIEL LEÓN RUIZ

CÉSAR AUGUSTO CASTAÑO B.

UNIVERSIDAD CATÓLICA DE PEREIRA

FACULTAD DE CIENCIAS HUMANAS, SOCIALES Y DE LA EDUCACIÓN

LICENCIATURA EN EDUCACIÓN RELIGIOSA

PEREIRA

2015





DANIEL LEÓN RUIZ

CÉSAR AUGUSTO CASTAÑO B.

ASESOR

JHON JAIRO GRANADA, Pbro

UNIVERSIDAD CATÓLICA DE PEREIRA

FACULTAD DE CIENCIAS HUMANAS SOCIALES Y DE LA EDUCACIÓN

LICENCIATURA EN EDUCACIÓN RELIGIOSA

PEREIRA

2015



Nota del autor

Daniel León Ruiz, y César Augusto Castaño Licenciatura en educación religiosa,

Facultad de Ciencias Humanas Sociales y de la educación, Universidad Católica de

Pereira.

Esta tesis producto del trabajo de investigación denominado “el propedéutico un

proceso en desarrollo de las diferentes dimensiones de la formación sacerdotal"

dirigido por el programa de licenciatura en educación religiosa los derechos

patrimoniales de este producto corresponden a la LER, los derechos morales a su

autor.

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TABLA DE CONTENIDO

RESUMEN ................................................................................................................................................... 6

1. Referente situacional: Pastoral vocacional .................................................................................... 7

1.1 Título o nombre del estudio ............................................................................................................ 7

1.2 Planteamiento del problema: Pastoral Vocacional ..................................................................... 7

1.3 Formulación del problema ........................................................................................................ 8

1.4 Red de Preguntas ...................................................................................................................... 9

1.5. JUSTIFICACIÓN ........................................................................................................................... 10

1.6 OBJETIVOS.................................................................................................................................... 14

1.6.1 General .................................................................................................................................... 14

1.6.2 Específicos ............................................................................................................................. 14

1.7. DELIMITACIÓN DEL ESTUDIO ................................................................................................. 15

1.7.1. Cobertura poblacional: ......................................................................................................... 15

1.7.2. Cobertura temporal: .............................................................................................................. 15

1.7.3. Cobertura espacial: ............................................................................................................... 15

2. REFERENTE TEÓRICO Y CONCEPTUAL ..................................................................................... 16

2.1 Antecedentes. ................................................................................................................................ 16

2.2. Bases teóricas.............................................................................................................................. 18

2.2.1. Los Seminarios una Casa de Formación. ......................................................................... 23

2.2.2. Características de un seminario. ....................................................................................... 25

2.2.3. Importancia del Seminario. .................................................................................................. 27

2.2.4. Pensum Académico .............................................................................................................. 28

3. ACOMPAÑAMIENTO VOCACIONAL............................................................................................... 31

3.1. Discernimiento. ............................................................................................................................. 31

3.2. Motivaciones. ................................................................................................................................ 34

4. FORMACIÓN HUMANA Y CRISTIANA. .......................................................................................... 36

4.1. Personalidad. ................................................................................................................................ 38

5. DIMENSIONES (HUMANO AFECTIVA- INTELECTUAL- COMUNITARIA) .............................. 39

6. PASTORAL ....................................................................................................................................... 40

6.1. Pastoral Vocacional. .................................................................................................................... 41

6.2 Características de la vocación presbiteral ................................................................................. 42



7. DISEÑO METODOLÓGICO ............................................................................................................... 43

8. UNIDAD DE ANÁLISIS ....................................................................................................................... 44

8.1. Grupos Focales ............................................................................................................................. 44

8.1.1. Encuesta (Cuestionario) ............................................................................................................ 44

9. CONCLUSIONES ................................................................................................................................ 50

BIBLIOGRAFÍA ......................................................................................................................................... 51



RESUMEN

SINTESIS

Este trabajo de pastoral vocacional se enfoca en la

investigación del primer año de experiencia en el

seminario mayor Juan Pablo II, cuestionando la

deserción del candidato y la falta de participación

en la vida cristiana. Es así donde existe una

pastoral vocacional dinámica, y pedagógica

encargada de alimentar los vacíos y complejos

que vive el estudiante durante el proceso

formativo. También se intenta justificar la relación

entre el formador y el formando para indagar las

falencias que vive el candidato durante la

permanencia en la institución.

ABSTRACT

This work of vocations research focuses on the

first year of experience in the major seminary John

Paul II, questioning the candidate attrition and lack

of participation in the Christian life. Thus where a

dynamic vocation ministry responsible for feeding

and educational gaps and complex student lives

during the training process. It also attempts to

justify the relationship between the trainer and the

trainee to investigate the failures experienced by

the candidate during the stay in the institution.

Palabras clave: vocación, seminario, candidato,

educación, formador, formando, institución,

experiencia y pedagogía.

Keywords: Vocations, Seminary, Candidate,

Educational, Trainer, Trainee, Institution,

Experience, Pedagogy



1. Referente situacional: Pastoral vocacional

Es importante decir que este trabajo de investigación se ha propuesto brindar una

ayuda a el Seminario Mayor Juan Pablo II, y a la pastoral Vocacional de la diócesis

frente a la realidad del acompañamiento en el proceso de formación del año

Propedéutico, con miras a articular las etapas formativas en el Seminario.

Por esta razón nos situamos no sólo en la realidad del Año introductorio, sino en la

realidad de la pastoral vocacional de la Diocesis.

1.1 Título o nombre del estudio


DIMENSIONES DE LA FORMACIÓN SACERDOTAL.

1.2 Planteamiento del problema: Pastoral Vocacional

Los Seminarios en Colombia son conscientes de la necesidad de promover iniciativas

en la formación de los candidatos a la vida sacerdotal por ende se han venido

preocupando en fortalecer las distintas dimensiones en el proceso formativo. Por

consiguiente es preciso que la conferencia Episcopal estimule la delegación de

vocaciones para animar y proponer estrategias que ayuden a los seminarios a la

elección de los candidatos.

Es por eso que el año introductorio o propedéutico reviste una singular importancia en

la vida del seminario, pero a su vez esta formación inicial es la que genera más

preocupación. También se presentan casos de deserción de los candidatos al

sacerdocio por consiguiente Se identifican situaciones que influyen como por ejemplo:



1.2.1. La diversidad de edad y estilos de vida de los candidatos, pues muchos de ellos

son muy jóvenes y están terminando el bachillerato y otros un poco más adultos y con

títulos profesionales que en muchos momentos dificultan el proceso en el primer año de

formación sacerdotal.

1.2.2. Una de las dimensiones que revisten de una singular importancia es la

Académica puesto que ésta demanda mucho más tiempo en la formación inicial, y para

los candidatos a veces hace pensar que es lo más importante en la formación

sacerdotal llevando a descuidar otras áreas y generando un rechazo que dificulta la

armonía en el proceso de formación.

1.2.3. El acompañamiento en el proceso de discernimiento vocacional para el ingreso al

seminario no siempre está fundamentado en las directrices del seminario y en un

acompañamiento psicológico y pastoral generando en el candidato cierta apatía por

desconocimiento y no cumplimiento de las expectativas que generalmente llevan a que

el candidato se retire del Seminario.

1.2.4. No hay una orientación adecuada para lograr la transformación en los candidatos

que los lleve a vivir un proceso serio de formación y por eso generalmente no se logra

establecer el vínculo de las diferentes dimensiones en el proceso formativo.

1.3 Formulación del problema

¿Cuál es la Articulación en los criterios metodológicos, estructurales y armónicos en

las dimensiones del proceso de Formación en el Propedéutico del Seminario Mayor

Juan Pablo II de la Diócesis de Armenia?



1.4 Red de Preguntas

1.4.1 ¿Cómo está estructurado el Pensum Académico del año propedéutico de los

seminarios de la Provincia?

1.4.2 ¿Es tenido en cuenta el perfil del candidato sugerido por la conferencia Episcopal

Colombiana en el discernimiento de los candidatos para el Seminario de la Diócesis de

Armenia?

1.4.3 ¿Hay una articulación entre las asignaturas del año Propedéutico y las

metodologías usadas por los formadores?

1.4.4 ¿Cómo incide en los candidatos la articulación del proceso formativo de la

pastoral vocacional?



1.5. JUSTIFICACIÓN

Este trabajo investigativo de la Pastoral Vocacional muestra un interés positivo al

trabajar con una población en etapa del desarrollo juvenil o adolescente. Y es así

donde la LER, desde la universidad se interesa por el trabajo con comunidades

apoyado en el constructo social para la promoción de iniciativas vocacionales que

respondan a la formación del Ser humano en su proceso cristiano. Tal como propone

S.S. Francisco.

“Las universidades son un ámbito privilegiado para pensar y desarrollar este

empeño evangelizador de un modo interdisciplinario e integrador. Las escuelas

católicas, que intentan siempre conjugar la tarea educativa con el anuncio

explícito del evangelio, constituyen un aporte muy valioso a la evangelización de

la cultura, aun en los países y ciudades en la que una situación adversa nos

estimule a usar nuestra creatividad para encontrar los caminos adecuados”.

(Evangellii Gaudium # 134 ).

Conocedores de la necesidad y de la urgencia que tienen los seminarios de promover

una formación autentica en sus procesos con miras a la ordenación sacerdotal, se

propone una dinámica que articule las actividades académicas y vocacionales en la

formación del año propedéutico del Seminario Mayor Juan Pablo II de la Diócesis de

Armenia, unida a la propuesta de la LER en un ambiente misionero transmitido por la

universidad Católica. Así el Concilio Vaticano II en el decreto Optatam Totius # 5

propone:

“Puesto que la formación de los alumnos depende ciertamente de las sabias

disposiciones, pero, sobre todo, de los educadores idóneos, los superiores y

profesores de los Seminarios han de elegirse de entre los mejores, y han de

prepararse diligentemente con doctrina sólida, conveniente experiencia pastoral

y una formación espiritual y pedagógica singular. Conviene, pues, que se

promuevan Institutos para conseguir este fin o, por lo menos, hay que celebrar

cursos oportunos y asambleas de superiores de seminarios en tiempos

preestablecidos”.



Este proceso de formación sacerdotal exige a los candidatos una respuesta autentica a

su formación, y a los seminarios promover los espacios, elementos y condiciones

necesarias para que esta respuesta sea cada vez vivida desde la fe y la verdad; a fin

de que, el candidato tenga unas bases sólidas en su discernimiento vocacional y

persevere en su llamado. Por consiguiente el seminario buscará crear estrategias

acordes para la transformación y discernimiento del individuo.

No es fácil determinar que el proceso de formación Sacerdotal dependa exclusivamente

de la dimensión intelectual, ya que este comprende otras dimensiones como: Pastoral,

Espiritual, Comunitaria, Sacerdotal. Pero se ha notado que gran parte de la formación si

esta dinamizada por la alta carga académica en los proceso formativos, y por ende se

busca hacer propuesta con componentes pedagógicos evaluativos orientados a

dinamizar y proporcionar una formación objetiva, y coherente para innovar el

conocimiento del vacacionado frente a las exigencias propuestas por la Institución.

Fraca, L. (2003) afirma:

“Si partimos de la noción de mediación de Vygotsky, bajo la consideración de

que, dentro del proceso de aprendizaje, mediador es todo aquello que incide

favorablemente en el desarrollo histórico social del individuo, la evaluación

dinámica funciona, y es un agente mediador que le permite al docente y al

estudiante canalizar, encausar y redimensionar la didáctica, y por ende, sus

procesos en el aprendizaje.” (Pedagogía integradora en el Aula. Pag. 203)

Podríamos decir, que este trabajo investigativo nos abre la posibilidad de darnos cuenta

que la formación en los seminarios no sólo consciente en trasmitir conocimientos sino

que esto es un espacio acorde para conocer al candidato desde las diferentes

dimensiones, como por ejemplo conocer sus cualidades, limitaciones, y despertar una

actividad pastoral.

De igual modo se busca que este año tenga un proceso de nivelación de conocimientos

a fin de lograr por lo menos una nivelación en el proceso para que se llegue a una



armonía en el discernir vocacional de los candidatos transmitiéndoles una formación

humana, y afectiva. Por consiguiente se puede realizar un trabajo de estímulo para el

individuo ocasionando una respuesta positiva desde la dimensión pastoral, y desde su

vivencia social.

El Seminario estará sujeto a comunicar una excelente formación desde el aspecto

cultural, social, biológico, científico, filosófico, epistemológico, pedagógico, psicológico,

y pastoral, introduciendo al ser humano a una realidad experimentada en el entorno

religioso. Es así donde el formador utilizara estrategias de acompañamiento

psico pedagógico para conocer al candidato, y enterarse del conflicto interno de cada

uno porque es importante conocer la vida del hombre.

Según Rodríguez, Lestegas, F. (2008)

“La vida del hombre (o conjunto de fenómenos que integran el individuo

orgánico) tiene una dimensión trascendente en que, por decirlo así, sale de sí

mismo y participa de algo que no es ella, que está más allá de ella. El

pensamiento, la voluntad, el sentimiento estético, la emoción religiosa,

constituyen esa dimensión.” (Identidad y ciudadanía reflexiones sobre la

construcción de identidades. Pág. 36)

Por tal razón es importante fortificar al individuo desde los valores religiosos teniendo

en cuenta la importancia de estos en la vida humana. Es así donde el seminario, y los

formadores estarán dispuestos a transmitir dichas características positivas para

solucionar los problemas arraigados a la deserción del individuo en el Seminario Mayor.

Por otra parte la problemática del siglo XX para S.S Juan Pablo II era el desarrollo

humano del adolecente, y por tal razón su trabajo pastoral estaba enfocado hacia la

vida juvenil manifestando una inclusión directa con ellos.

S.S Juan Pablo II se convierte en un modelo pedagógico para trabajar con la persona

desde la dignidad, y los componentes axiológicos. Es importante centrarse en la



sensibilidad del ser humano atendiendo sus necesidades desde el campo ético, y moral

para lograr así una formación integral, inclusiva, humana, cultural, social, y biológica

dando un valor objetivo a la integración humana, y cristiana. Tal como propone Haba,

P. (1952)

“Los valores son objetos ideales, esencialmente distinto de las cosas valiosas

(…) una teoría de la filosofía muy difundida considera que el valor es una

cualidad para GE.MORE el valor es una cualidad simple e indefinible como el

color amarillo pero que a diferencia de este, dependo del carácter intrínseco de

la cosa valiosa, sin ser una propiedad de ella como lo es el amarillo”. (Elementos

básicos de Axiología general: epistemología del discurso pág. 51)

En conclusión el objetivo del trabajo sobre la formación de la persona en el primer año

(propedéutico) busca desde los parámetros curriculares, metodológicos, pedagógicos,

teológicos, pastorales y humanos articular todo el proceso con características positivas

estimulando al individuo a continuar en su discernimiento con enfoque ético, y así

orientarlos a descubrir los caminos salvíficos propuestos por una pastoral vocacional

que representa y anuncia la luz del evangelio.



1.6 OBJETIVOS

1.6.1 General

Trabajar en una articulación positiva de las actividades académicas y vocacionales en

el proceso de formación en el Propedéutico del Seminario Mayor Juan Pablo II., y su

incidencia en el candidato.

1.6.2 Específicos

Identificar la carga académica del grupo propedéutico de algunos de los seminarios.

Revisar si el proceso de acompañamiento y discernimiento vocacional son acordes al

perfil propuesto para el ingreso del candidato del seminario.

Evaluar si las asignaturas del propedéutico están articuladas con la metodología

propuesta por el formador.

Conocer que incidencia tiene la articulación de las actividades en el candidato.



1.7. DELIMITACIÓN DEL ESTUDIO

1.7.1. Cobertura poblacional:

Este trabajo se realizará teniendo como población de estudio los seminaristas de Año

Propedéutico del Seminario mayor Juan Pablo II, de la Diócesis de Armenia. Pero a su

vez se tendrán en cuenta algunas consideraciones de los seminarios de la Provincia

Eclesiástica de Manizales, a la cual pertenecen las Diócesis de La Dorada, Pereira,

Armenia y Manizales.

1.7.2. Cobertura temporal:

Este Trabajo se estima realizar en el segundo semestre del año 2014 y el primer

semestre del año 2015, delimitado de la siguiente manera:

En la primera fase se hará toda una presentación teórica del trabajo investigativo.

La segunda fase se hará la elaboración de la investigación como encuestas y

recolección de los datos.

1.7.3. Cobertura espacial:

El Trabajo se ha propuesto realizar en los espacios del Seminario Mayor Juan Pablo II.



2. REFERENTE TEÓRICO Y CONCEPTUAL

2.1 Antecedentes.

Titulo Autor Pregunta Objetivo Tópicos Métodos Resultados

El periodo

Propedéutico

Congregación

para la

Educación

Católica.

Pio. Card.

Laghi.

Prefecto.

Que se está

haciendo en

los procesos

del

propedéutico

Orientar el

trabajo que

deben tener

los

seminarios

con el año

propedéutico

Orientaciones

sobre el

propedéutico.

Elementos

formativos en

el proceso del

propedéutico

Fuentes

documentales

que recopilan

las

experiencias

de diferentes

seminarios.

Tendencias y

orientaciones

significativas.

Define que el

año

propedéutico

tiene su propia

finalidad y su

propia razón de

ser.

De la

Práctica al

Saber

pedagógico

Jesús

Olmedo

Castaño

López.

¿Posibilita

la pedagogía

una reflexión

entre el

Saber y la

práctica?

Establecer si

existe una

relación

entre la

práctica y el

Saber

pedagógico

La reflexión de

la globalización

y la

mundialización,

exigen retos.

Pedagogía

Social,

modelos

pedagógicos,

formación

humanística y

ciencias de la

educación.

Las

comunidades

signifiquen la

existencia de

sus propios

problemas y al

manejo que

hace de ellos.

Transferencia de

su propio

proyecto de

vida.

Decreto

Otatan

Totios

Concilio

Vaticano II

¿Es

necesaria la

formación

Conocer los

lineamientos

de la Iglesia

Una academia

pastoral

Normas de

Establecimientos

de directrices

para la



Sacerdotal

en los

Seminarios?

para la

formación

Sacerdotal

formación

Sacerdotal, el

tiempo, el

espacio, los

momentos.

formación

permanente

formación

sacerdotal.

La atención y el

cuidado que se

debe prestar a la

formación

sacerdotal.



2.2. Bases teóricas

Se puede proponer una observación al inicio del año propedéutico de modo que se

permita evidenciar si existe un intercambio de costumbres alienantes y contaminantes

como la diversión humorista y la libertad desencadena frente al mundo consumista,

donde muchas veces la persona pierde su identidad y contexto cultural por estar

inmerso en una realidad globalizada y mundanizada orientando al ser humano a vivir el

vacío espiritual y personal que lo lleva en muchas ocasiones a experimentar conflictos

sociales. Podríamos mirar el aporte que nos hace Mario, Yory, C. 2006. Donde afirma:

“No obstante, como la ciudad de hoy tiene una particularidad y es su disposición

al cambio, como si quisiera escaparse de su historia viviendo a alta velocidad.

Una velocidad que, de otra parte , acelera los conflictos y las contradicciones al

arrasar a su paso aquellos reductos de lo fragmentario que subsiste y, de hecho,

alimentan, su enorme complejidad social y cultural.” (Ciudad, consumo y

globalización: Caracterización de las grandes Metrópolis. Pag. 16)

Por ende el proceso muestra al individuo en este primer año de experiencia valores

positivos incluyendo una disciplina que a diario se practica en el Seminario, y es

interesante redescubrir dimensiones puestas por la estructura formativa como por

ejemplo el aprovechamiento de las cuatro dimensiones, a saber: intelectual, espiritual,

pastoral, y comunitaria.

Es importante hacer una anotación en la dimensión comunitaria porque es difícil

convivir con otros individuos que también inician el proceso, y no es fácil acomodarse a

las costumbres negativas y desconocidas que cada candidato práctica, y estas podrían

ser envidia, individualismo, elitismo, entre otras y que pueden estar sujetas al ser

humano.



Por tal razón es importante que los formadores desarrollen diálogos entre los individuos

para conocer sus falencias y dificultades que interrumpen una verdadera formación.

Según Stigliano, D, Gentile, D. 2008 comparten:

“Se desarrollara una estrategia de enseñanza centrada en el alumno que

permite producir conocimiento desde la interacción entre pares en grupos de

aprendizaje cooperativo. Se pretende estimular y desarrollar el pensamiento

reflexivo, la comunicación y socialización del pensamiento, la formulación de

juicios, la discriminación de valores, y la tolerancia por el tiempo y la opinión del

otro” (Enseñar y aprender en grupos cooperativos. Pág. 13)

Es así donde la formación busca articular una pedagogía conceptual para desarrollar

en el candidato una excelente formación dentro del Seminario Mayor. Es decir,

profundizar en una conceptualización pedagógica para estimular la cognitividad del

candidato, y que logrando innovar con este proceso educativo posiblemente se podría

regular la deserción del candidato del seminario. Tal como lo dice Samper, Subiria, J.

2002.

“en Síntesis, como trataremos de sustentarlo, hay que reconocer que el

conocimiento se construye por fuera de la escuela, pero que es reconstruido de

manera activa e interestructurada a partir del diálogo pedagógico entre el

estudiante, el saber y el docente, y para que ello ocurra es condición

indispensable contar con la mediación adecuada de un maestro, que favorezca

de manera intencionada, significativa y trascendente el desarrollo integral del

estudiante. (Feuerstein, 1993). (Los Modelos Pedagógicos: hacia una pedagogía

dialogante. Pág. 15)

El primer año se debe convertir para el candidato en una experiencia inolvidable

fundamentando valores y virtudes positivas que le sirvan como base en los siguientes

años de formación. Este nuevo camino se podría obtener con la reflexión profunda del

formador y desde el alimento positivo de la pedagogía profesional.



Por otra parte la experiencia de las clases en el Seminario Mayor podría estar animada

por una pedagogía dinámica construyendo conocimientos innovadores con técnicas

para agilizar el proceso de aprendizaje en cada candidato.

Por consiguiente el trabajo es ayudar a la persona con una construcción positiva frente

al conocimiento para obtener una aprehensión real del objeto generando conectores

fluidos en el pensamiento y así poder desarrollar técnicas positivas frente a la posición

académica.

También es importante iniciar en el proceso de formación un verdadero trabajo del

constructo social para concientizar al candidato sobre el tema y de las virtudes y los

valores, podríamos poner como ejemplo el tema de la paz porque nuestro país ha sido

afectado durante muchos años por la violencia, y es así, donde los afectados son las

generaciones actuales y futuras de donde están saliendo no fácilmente pero tampoco

desesperanzador los candidatos al seminario Mayor.

Por otra parte el formador con su conocimiento intelectual está en la misión de

redescubrir en el candidato vacíos durante el proceso transformacional. Es así donde

el candidato corre el riesgo de iniciar un proceso formativo en el cual puede verse

involucrado en ciertas realidades o situaciones de otros candidatos como por ejemplo:

farmacodependencia, prostitución, hurto, y otras características negativas manifestadas

en la sociedad, y pueden acompañar sus vidas de moque que opaquen así un proceso

serio, maduro y equilibrado y su discernimiento Vocacional que lo potencialice en su

respuesta al Señor y en su deseo de configuración con Cristo.

En conclusión la preparación al sacerdocio no puede ser reducida a una carrera

académica. Hemos insistido a lo largo del curso en la singularidad de la identidad y la

misión del sacerdote, y se ha hablado de la formación como transformación y

configuración en Cristo. No basta, pues, que los seminaristas asistan a unos cursos de

filosofía y teología más o menos densos y completos. Se requiere, sobre todo, la



atención al campo de formación que contemplábamos al hablar del área de formación

espiritual, afectiva, y humana.

También el curso propedéutico facilitaría la necesaria adaptación del joven a la nueva

mentalidad y estilo de vida que supone la vocación sacerdotal. Basta un mínimo de

experiencia para constatar que los jóvenes que entran al seminario suelen venir con

muy buenas disposiciones pero que no siempre están preparados para iniciar

directamente la vida de seminario. Sus hábitos, sus costumbres, su modo de ver las

cosas suelen distar mucho de lo que configura a una persona llamada a ser ante el

mundo otro Cristo. No es raro que al inicio se encuentren "desubicados". Si no se les

ayuda desde el primer momento se corre el riesgo de que se pasen la vida ubicándose.



FORMACIÓN EN LOS

SEMINARIOS

Definición de

Seminario.

Características

Seminario.

Importancia de

Seminario.

Pensum

Académico

Situaciones

Objeto

Claves

Señales

Humana-

Afectiva

Intelectual

Comunitaria

Espiritual.

Discernimiento

Motivaciones

Personalidad

Dimensiones

Pastoral

Vocacional

Pastoral

Sacerdotal

Apostolado

Vida Sacerdotal

Características

de la Vocación

Categorías de trabajo en el Proyecto

ACOMPAÑAMIENTO

VOCACIONAL

FORMACIÓN HUMANA

Y CRISITNA

PASTORAL

Currículo

Integrado

Funciones de

la Formación

Inicial

Naturaleza

Tipo

Seguimiento

Seguimiento



2.2.1. Los Seminarios una Casa de Formación.

Quizás para muchos no sea conocido que antes que existieran los seminarios Mayores,

la formación sacerdotal se entendía desde el acompañamiento que los Sacerdotes

hacían a los candidatos en las parroquias y desde allí se iban formando en todas las

áreas del proceso tanto en la parte espiritual como en la Parte académica. Por eso se

hacía fundamental que cada uno de los Párrocos respondiera a las necesidades de los

Candidatos.

Esto fue despertando la intención de ir agrupando los candidatos para que fuera ya un

grupo de sacerdotes los que acompañaran este proceso de formación. Desde el

Concilio de Trento (1545-1563), convocado por el Papa Pablo III, presidido por el Papa

Pablo III y culminado por el Papa Pio IV, se estructura y decreta que la formación

Sacerdotal se hará en los Seminarios. Tal como lo afirma Ruiz, Mantaras, F:

Con el primero de estos documentos aportará el concilio de Trento, a través del

obispo Guerrero, sus ideas reformistas necesarias para mejorar la santidad del

clero. Entre otras cosas pedirá que en cada obispado haya un colegio diocesano

por el que pasa todos aquellos que vayan a ser ordenados, establecerá criterios

exigentes a la hora de admitir candidatos y de ordenarlos, y expondrá la

necesidad de una educación disciplinada. (Discernimiento vocacional y derecho

a la intimidad en el candidato al presbiterado Diocesano.Pag.48)

En la actualidad la Iglesia Católica con su conocimiento y con la fidelidad a la doctrina

transmitida a través de los siglos sigue proponiendo la conservación y maduración del

proceso formativo a las ordenes sagradas, desde una institución apropiada y que

cumpla con los requisitos necesario para la formación sacerdotal y que tenga como fin

principal la vivencia del cristianismo y la clara opción por una vida de servicio y

configuración con Cristo Buen Pastor.



Así la conformación de los seminarios como los lugares apropiados para este fin, así

como lo propone CONFERENCIA EPISCOPAL DE COLOMBIA. Ratio Fundamentalis

1998.

Los Seminarios Mayores como instituciones de la Iglesia, son una necesidad

propuesta claramente por el Vaticano II. (cof.OT 4-5). El Papa ratifica esta

necesidad del Seminario, incluso para los religiosos como análoga casa de

formación, como un lugar óptimo de formación… ambiente normal, incluso

material... para la formación de los candidatos al sacerdocio. (. # 65)

Desde el punto de vista formativo, el Seminario y otros y otras modalidades de

formación presbiteral constituyen ante todo, un proceso de acompañamiento al

candidato, un camino que hacen juntos, formadores y formando, en orden a un

auténtico discernimiento vocacional. (. # 66)

La Palabra Seminario aunque en el lenguaje común se identifica como estructura física,

comporta una realidad más amplia, podríamos definirlo como un tiempo propicio en el

cual se escucha, se discierne y se responde a la voz de Dios según como expresa San

Pablo: “nos eligió en la persona de Cristo desde antes de la fundación del mundo para

ser santos e inmaculados en su presencia en el Amor” (Ef 1, 4).

También el Seminario Mayor Juan Pablo II, maneja dentro de su estructura

reglamentaria articulaciones asignadas al significado de la casa formacional por

consiguiente explica con objetividad dicha definición como lo propone el Reglamento

interno Seminario Mayor Juan Pablo II (2008)

El Seminario es una realidad que logra conjugar dos circunstancias: Tiempo y

espacio. Y todo para favorecer un encuentro personal con el Señor, que ha

tomado la iniciativa de llamarnos no por lo que somos, sino a pesar de lo que

somos. En el tiempo son muchos los signos que nos permiten interpretar como y

desde donde dar respuesta al Señor, que permanece a la puerta del corazón

llamando, de modo que si se le escucha y se le abre, podrá entrar y cenar con

nosotros. (cf. Ap 3,20). En el espacio tenemos un ambiente propicio que nos



puede ayudar a contemplar (oración), profundizar (estudio), compartir

(convivencia) y testimoniar (pastoral), la experiencia que hemos hecho de aquel

a quien consideramos causa y razón de ser de nuestra existencia. (Reglamento

interno)

2.2.2. Características de un seminario.

Reconociendo el carácter fundamental de lo que es un Seminario se presentan una

serie de característica que deben ser tenidas en cuenta para que la formación

Sacerdotal sea realmente una autentica experiencia de configuración con Cristo.

La Conferencia Episcopal de Colombia en el documento Ratio Fundamentalis del año

1998 Propone:

Una institución con características eclesiales tan definidas inspira su método

pedagógico para poder formar auténticos pastores al estilo de Jesús en los diferentes

rasgos específicos:

a) Apostólico: es decir, Inspirado en la íntima comunión de vida de Jesús con los

doce para revivir, en la medida de lo humanamente posible, esta experiencia

formativa.

b) Evangélico: es decir, abierta a la escucha de la palabra de Jesús y dirigido a los

que integran la comunidad del seminario, a fin de inspirar en toda su vida valores

evangélicos: ninguno que no esté evangelizado podrá aspirar a ser

evangelizador.

c) Comunitario Eclesial: ya que el seminario debe constituir una verdadera

comunidad eclesial educativa que permita a sus integrantes una formación en

las dimensiones humana, espiritual, intelectual y pastoral, con miras a que los

formandos vayan aprendiendo su futura pertenencia al presbiterado, que sepan

responder a su vocación y prepararse para recibir el sacramento del orden y

ejercer la misión a él anexa, con sus gracias y responsabilidades propias.



d) Participativo: de modo que involucre todas las potencialidades de los formadores

y formandos en un proyecto educativo, claro y elástico a la vez, y con unidad de

dirección en el que los alumnos son protagonistas de su formación con

responsabilidad.

e) Personalizado: con una atención diversificada que evite la masificación y

promueva el cultivo de los propios dones y carismas dentro de un dinamismo de

equilibrio humano. ( #67)

Estas características responden entonces a la tarea propia de los Seminarios de formar

sacerdotes en la integralidad de su ser personal y espiritual, de modo que todo este

ejercicio de Fe sea construido con valores propios y trascendentes en los seminaristas

que lleguen realmente a la consolidación de un proyecto de vida de mano de Dios.

También podemos decir otras características propias a las necesidades de cada

Diócesis.

En el caso del Seminario Mayor de la Diócesis de Armenia, unas características propias

son:

1. Que los candidatos pertenezcan a la Diócesis, con el fin de hacer un mayor

acompañamiento al candidato y sus familias como parte constitutiva de la

formación.

2. Que los candidatos estén entre las edades de los 16 y 24 años, de modo que el

acompañamiento vocacional responda a las necesidades de los mismos

jóvenes.

3. Que los candidatos pertenezcan a una comunidad Parroquial de modo que

desde allí se ayude a clarificar su llamado vocacional.



4. Que los candidatos cuentes con unos mínimos a nivel académico (terminado

grado once) espiritual, comunitario (buena relaciones) y pastoral con el fin de

direccionar el acompañamiento Vocacional.

En realidad podemos darnos cuenta que estas características propias de un seminario

constituyen unas herramientas acordes para el proceso de formación adecuado para

los candidatos a las ordenes sagradas.

2.2.3. Importancia del Seminario.

Abordada la definición y las características de un Seminario nos permite entonces decir

que para la formación de los sacerdotes es importante considerar la tarea que hace la

iglesia en los Seminarios, pensando no sólo en los candidatos, sino también en las

comunidades y en la Iglesia universal.

Por consiguiente es clave decir la importancia de los seminarios en esta tarea:

Así lo sugiere el plan de Formación sacerdotal para los Seminarios Mayores de la

Conferencia Española en su LXVI Asamblea plenaria de la conferencia episcopal:

Toda la educación de los seminarios debe tender a la formación de verdaderos

pastores de almas a ejemplo de nuestro Señor Jesucristo, maestro, sacerdote y

padre. La formación de pastor es, por tanto, la finalidad y el objetivo fundamental

de los seminarios mayores. (# 16)

Considerando la importancia del Seminario como lugar, estructura, espacios

académico, en la tarea de la formación integral de los candidatos no se puede

desconocer el carácter primordial de cada una de las dimensiones a trabajar en el

seminario con el fin de lograr una armonía e integralidad en la vida de los futuros

sacerdotes de la iglesia.

Así lo sigue sustentado el plan de Formación Sacerdotal:



Las diversas dimensiones de la formación, humana, espiritual, intelectual,

pastoral y comunitaria, incluso la disciplina y metodología de la comunidad

educativa del seminario, han de ordenarse conjuntamente a esta finalidad

pastoral especifica que unifica y determina toda la formación de los futuros

sacerdotes. (#17).

Se puede mirar también que desde la normatividad de la Iglesia en su disciplina

también determina la importancia que tienen los seminarios, la comunidad y la misma

iglesia en la tarea de la formación sacerdotal.

Leyes eclesiales:

La iglesia movida por la responsabilidad que le incumbe y por el “derecho propio

y exclusivo de formar a aquellos que se destinan a los misterios sagrados”

Código de derecho Canónico, libro I, # 232.

Incumbe a toda la comunidad cristiana el deber de fomentar las vocaciones, para

que se provea suficientemente a las necesidades del ministerio sagrado en la

iglesia entera; especialmente, este deber obliga a las familias cristianas, a los

educadores y de manera peculiar a los sacerdotes , sobre todo a los párrocos.

Los Obispos diocesanos a quienes corresponde en grado sumo cuidar de que se

promuevan vocaciones, instruyan al pueblo que les esta encomendado sobre la

grandeza del misterio sagrado y la necesidad de ministros en la Iglesia,

promuevan y sostengan iniciativas para fomentar las vocaciones, sobre todo por

medio de las obras que ya existen con esta finalidad.

Código de derecho Canónico, libro I, # 233.

2.2.4. Pensum Académico

Tomado de la CONFERENCA EPISCOPAL DE COLOMBIA. Currículo Académico para

los Seminarios Mayores de Colombia. 2005



El Santo Padre Benedicto XVI dirigió un mensaje a la Conferencia Episcopal

Italiana al iniciar su asamblea general en la ciudad de Asís reunida el 14 de

Noviembre de 2005 con la finalidad de tratar el Tema “La formación para el

ministerio Sacerdotal” y producir un documento sobre “Orientaciones y

Normas para los Seminarios”.

El Papa pidió en la misiva, “definir cada vez mejor la propuesta formativa de

manera que se garantice una preparación espiritual, humana, intelectual y

pastoral que esté a la altura de los nuevos desafíos que el ministerio sacerdotal

está llamado a afrontar; la Iglesia hoy tiene necesidad de sacerdotes que

sean plenamente conscientes del don de la gracia que reciben con la

Ordenación Presbiteral y de la misión que se les confía en tiempos de

cambios rápidos y profundos. Les insistió.

Con el fin de que se aproveche al máximo el Nuevo currículo tanto de la

Filosofía como de Teología, aprobado por la Conferencia episcopal, es

conveniente tener en cuenta los objetivos del mismo.

Entre los objetivos más importantes, del Nuevo Currículo para los Seminarios

Mayores de Colombia, están los siguientes:

Unificar criterios a nivel académico, teniendo en cuenta las indicaciones

emanadas de la congregación para la Educación católica, que deben ser

observadas por los formadores de los seminarios mayores, tanto diocesanos

como religiosos.

Ofrecer una “Hoja de Ruta” o criterios a tener en cuenta en la implementación

del Nuevo Currículo. Consideramos que se trata de un Instrumento valioso, que

debe ser conocido tanto por los formadores y profesores de la Institución, como

por los alumnos del Seminario…



Otro objetivo del Nuevo Currículo es proponer una programación para cada

asignatura, pero dejando en claro que esta no debe ser considerada como una

camisa de fuerza, sino como una mera propuesta, que debe ser enriquecida y

complementada por los profesores de cada área y ojala en común acuerdo con

los formadores, de tal manera que la academia y la formación caminen juntas.

Tomado de la Ratio Fundamentalis (1998) # 61

El Año de Propedéutico tiene por objetivo proponer a los candidatos al

presbiterado un tiempo que les permita vivir una intensa experiencia de fe y de

oración, una iniciación en el misterio de Cristo y de la Iglesia, una iniciación en

los compromisos presbiterales, una nivelación académica y un acompañamiento

personal y grupal orientado a completar el discernimiento vocacional inicial.

(CONFERENCIA EPISCOPAL DE COLOMBIA)

El pensum Académico en los Distintos seminarios de la provincia eclesiástica que

comprende los Seminarios de (Manizales, Pereira, Dorada-Guaduas y Armenia) se rige

por el currículo académico de los Seminario Mayores de Colombia, dado por la

conferencia Episcopal.

Si presentan a nivel interno algunas variaciones debido a la singularidad que cada

seminario maneja, pero en lo esencial conservan la misma estructura.



3. ACOMPAÑAMIENTO VOCACIONAL

En este apartado se verán algunos elementos que constituyen el proceso de formación

sacerdotal con miras a que la tarea del seminario se lleve a cabo pensado en los

candidatos que aspiran a una clara configuración con Cristo buen pastor.

Con este fin se abordaran estas categorías que ayudan a comprender mejor esta

realidad de la formación sacerdotal.

3.1. Discernimiento.

Cuando se habla de Discernimiento no sólo se puede abordar esta definición desde su

realidad etimológica, ya que esta lo define:

Discernir es, como lo dice la palabra misma, pasar por la criba, seleccionar,

distinguir. Es la acción del trabajador de la construcción con la arena que

prepara para hacer la mezcla. Es la tarea del pastelero que pasa por el tamiz la

harina, para cocinar un fino bizcocho. La harina o la arena serían- aplicándolo a

nuestro campo vocacional- las opciones o decisiones que hay que ir tomando

en el caminar vocacional. La criba seria la experiencia de Dios desde la

meditación de su Palabra y la participación en los misterios de la fe, a través de

la Liturgia y los Sacramentos.

Sino que se debe abordar desde la realidad que compete y es en el acompañamiento

vocacional, donde está palabra adquiere una dimensión específica.



Así lo propone la conferencia Episcopal Colombiana en su documento Ratio

Fundamentalis del año 1998.

En el proceso de formación Específica del Seminario se destaca por su

importancia decisiva el discernimiento vocacional. La finalidad de este es

descubrir la voluntad de Dios con respecto a la vocación del candidato. Para

hacer este discernimiento es preciso comprobar, por una parte, que el aspirante

al sacerdocio al sacerdocio posee unas aptitudes humanas, intelectuales,

morales y espirituales adecuadas y, por otra, que tiene recta intención y voluntad

libre para dedicarse al ministerio presbiteral. (# 329)

En la tarea de discernir aparecen o existen varios elementos que se deben considerar,

pues, cuando se aborda este proceso se debe considerar las situaciones que en

muchas circunstancias que viven las personas y en este caso las situaciones que viven

los candidatos al sacerdocio.

Pues es importante ayudar al candidato a que se dé cuenta que es lo que a Dios le

agrada, y como su respuesta entra a constituir una clara participación es ese querer de

Dios, descubriendo en sí mismo el sentido de la vida y el camino que debe seguir en

su realización personal.

En este sentido nos daos cuenta entonces que el objetivo central del discernimiento es

la conducta o los comportamientos de la persona.

Es necesario entonces que consideremos una fase del discernimiento.

Un discernimiento dialogado y progresivo:

El discernimiento vocacional corresponde por una parte, al candidato mismo que

desea llegar al sacerdocio y, por otra a la Iglesia, y, en última instancia al

Obispo, que acoge esta aspiración del aspirante y que en su día, antes de la



llamada definitiva a las ordenes da un juicio sobre su idoneidad para ejercer su

ministerio sacerdotal.

Esta doble participación debe ir acompañada por la oración personal del

seminarista y por la oración comunitaria ya que sólo puede realizarse bajo la

acción del espíritu santo que anima la vida de cada cristiano y de toda la Iglesia.

Cfr: Conferencia Episcopal Colombiana Ratio Fundamentalis # 330. 1998.

Criterios fundamentales para el Discernimiento:

A continuación se cita a la luz de la conferencia Episcopal de Colombia año 1998.

Unos criterios esenciales en la tarea del discernimiento vocacional.

Los criterios fundamentales para el discernimiento vocacional se encuentran unos

explícitamente formulados y otros implícitamente indicados.

Criterios:

1. La consecución progresiva de los objetivos que se señalan para cada etapa

del proceso de formación.

2. La integración personal de los distintos aspectos formativos (humano,

intelectual, espiritual, pastoral y comunitario), teniendo en cuenta la condición

personal de cada seminarista sus lagunas y cualidades.

3. La adaptación de las expectativas vitales del seminarista a las exigencias que

se le derivan del ministerio presbiteral tal como este se realiza hoy en la

Iglesia.

4. La aceptación realista de las características de la diócesis concreta a cuyo

servicio va a ordenarse y la disponibilidad para los servicios que en ella se le

encomiende.

5. La disponibilidad para el servicio de la Iglesia universal, sobre todo en sus

comunidades más necesitadas, como pueden ser hoy los pobres,

marginados, desplazados, jóvenes, familias. (Ratio Fundamentalis # 336).



También es importante mencionar que en este elemento del discernimiento vocacional

aparecen unas señales que ayudan al candidato y a los formadores tomar las

decisiones correctas, esta señales se evidencian a través de los frutos que se producen

en el proceso, como pueden ser: el vivir una vida profundamente cristiana, con buenas

conductas, una vida de oración, en sus buenas intenciones o recta intención y en una

sana interioridad.

3.2. Motivaciones.

Otro elemento importante a tener en cuenta en este proceso de acompañamiento en la

formación sacerdotal es precisamente las motivaciones.

Se puede definir las motivaciones como ese impulso, razón o fuerza que mueven a una

persona a conseguir las metas que se propone.

En el caso del acompañamiento vocacional las motivaciones hacen que una persona

con inquietud vocacional actúe con recta intención, responsabilidad, conciencia y sobre

todo libertad en la respuesta al llamado del Señor a servirle de cerca.

Veamos unas claves en las motivaciones en el proceso de Discernimiento vocacional.

Tomado (perspectiva de la formación presbiteral en America Latina. 1980. Pag. 72.

#289.

1. Que haya recta intención en la aspiración al ministerio presbiteral, verdadero

amor a Dios y deseo de servicio al prójimo.

2. Que los ideales que mueven al candidato correspondan a la imagen real del

presbítero.



Es necesario decir además como lo Cita Mantara Ruiz F.:

Que para un aspirante ser admitido al seminario se requiere que el candidato haya

hecho una opción suficientemente clara por el sacerdocio, aunque es normal que al

principio la vocación se base en valores confusos, donde las motivaciones naturales y

sobrenaturales se encuentren mescladas. Aunque las motivaciones no sean claras al

comienzo, han de ser al menos rectas y buenas, susceptibles de ser maduradas en el

futuro. Ello supone que abría que excluir desde un principio aquellos candidatos con

motivación de evasión, de refugio, o de búsqueda de una vida fácil. (Discernimiento

vocacional y derecho a la intimidad del candidato) pág. 181.



4. FORMACIÓN HUMANA Y CRISTIANA.

En un proceso de Formación Sacerdotal hablar de la formación humana y cristina

reviste de una singular importancia puesto que no se puede desconocer una realidad

esencial en la vida del futuro sacerdote y es su ser personal, una dimensión que no

desaparece con la ordenación Presbiteral sino todo lo contrario que se une más

estrechamente a esta nueva condición que no pierde su humanidad si no que la

madura, por esta razón en clave que los seminarios de modo particular en el año

introductorio se dedique el tiempo necesario para dar la bases en esta formación

humana y Cristiana de modo que el candidato responde a las exigencias de un mundo

cada vez más secularizado y ajeno a la mirada de Dios. Por eso el candidato debe

estar con la gente, por la gente y para la gente.

En este sentido la Conferencia Episcopal de Colombia en la Ratio Fundamentalis,

1998. Nos propone que consideremos:

Jesús cuando, al pasar por el lago, encontró a Simón y Andrés, a Santiago y

Juan, los asumió como pescadores pero les ofreció un proceso formativo y

transformador: “vengan conmigo y haré que lleguen a ser pescadores de

hombre” Mt. 1,17. Cuando la Iglesia acepta a unos candidatos para formación al

presbiterado parte de su contexto concreto pero les ofrece todo un trabajo

formativo que les permita realizarse humanamente y los vaya transformando en

los servidores de su pueblo.

La Iglesia en Colombia busca ante todo formar un Presbítero íntegro y capaz de

ser Pastor. Los candidatos llegan para su formación con una historia personal,

familiar y social concretas. Corresponde a los responsables de la formación

conocerlos seria y profundamente, y sobre todo ayudarles, en un proceso

liberador a conocerse, aceptarse y asumir con entereza la construcción de su

propia personalidad. Para esto es fundamental promover sus valores y



habilidades, enfrentar, maduramente sus limitaciones y trabajar en la tarea de

construir la propia identidad. ( # 14 y 15)

Esta formación humana y cristiana debe estar orientada a lograr en el candidato a las

órdenes Sagradas las herramientas necesarias para lograr el objetivo de ser otro

Cristo.

Orientada a:

Lograr en el candidato que sea un fiel discípulo de Jesucristo donde se viva la

verdadera experiencia de fe y de adhesión al Señor.

Lograr en el Candidato que busque tener un corazón según el corazón de Dios, de

modo que siente y ame a los demás como Dios nos amó.

Lograr en el Candidato que sea un verdadero servidor de los demás donde su caridad

sea cercana y sin fingimiento.

Lograr en el Candidato que sea un verdadero Obrero de y para la Iglesia diocesana.

Lograr en el Candidato que sea un verdadero defensor de la vida y la paz. Dando

testimonio de la verdad en medio de sus comunidades.

Lograr en el Candidato que sea un misionero, que encarnando a Cristo lo lleve a todas

partes donde vaya. ( Cfr. Ratio Fundamentalis)

Algunos elementos a tener en cuenta en esta Formación Humana y Cristiana.



4.1. Personalidad.

Hablar de la personalidad nos llevaría a tener que considerar muchísimos factores,

pero la intención de citar este elemento en la formación Humana y cristiana es con el fin

de tener presente que en un proceso inicial de formación nos vamos a encontrar con

jóvenes de realidades totalmente distintas influenciadas por las edades, los

comportamientos, actitudes, formas de ser, pensar y sentir tan diversas que al entrar en

relación con el otro y asumir las condiciones propias de la opción sacerdotal

manifestadas en el seminario, en ciertas ocasiones puede generar en los candidatos

reacciones diferentes, donde se hace preciso que se acompañe esta realidad de modo

que sin que se justifique a la persona se le pueda entender y valorar desde su ser de

persona y de su vida cristiana.

Teniendo presente esto definimos la personalidad tomando como autor: Dr. Melchor

Escriva Pellicer.

La personalidad es la organización integrada por todas las características

cognoscitivas, afectivas, volitivas de un individuo, tal como se manifiesta a

diferencia de otros. (Medicina de la personalidad. 1985. Pág. 26.)

La formación Humana Y Cristiana constituye otro elemento en el proceso Sacerdotal

de los candidatos al Seminario a fin que se aproveche todo lo necesario en las

personas para lograr consolidar la opción vocacional y así la respuesta sea autentica,

madura y libre.



5. DIMENSIONES (HUMANO AFECTIVA- INTELECTUAL- COMUNITARIA)

En el proceso de formación sacerdotal y considerando las características que revisten

un seminario reconoce que los pilares esenciales de esta formación están a la base de

las dimensiones Humana-afectiva, Intelectual, Comunitaria, Espiritual. Donde cada una

de ellas reviste un papel importante y debe ser comprendida y trabajada desde su

particularidad, con los cuidados necesarios y el tiempo prudente, pero considerando a

demás que no son ruedas sueltas de la formación sino que cada una de ellas debe

estar relacionadas, es decir, deben estar unidas y articuladas de modo que configuren

toda la formación integrar de los candidatos al Sacerdocio.

Como se ha indicado cada dimensión constituye una perspectiva, un ángulo visual, así

se prefiere, un modo de consideración particularizado. Cada una de ellas abarca la

totalidad del Ciclo Propedéutico, en cuanto proceso formativo, y la totalidad de la

persona del postulante, solo que desde su respectivo ángulo.

Rodríguez, Melgarejo, G. 1989 dice:

En una sociedad cuya escala de valores se halla en continua transformación,

adquiere particular importancia la calidad humana de la persona del sacerdote.

El significado último de la existencia solo será perceptible a los ojos del a fe,

mientras que sus cualidades humanas constituirán su mejor tarjeta de

presentación frente a los no creyentes, los agnósticos e incluso ante los no

practicantes. Las exigencias objetivas de la nueva evangelización requieren, por

tanto, prestar a la dimensión humana una atención mayor a la que se dio en

otras épocas de la historia de la Iglesia. (CELAM. Elementos de un curso

introductorio. pag.34)



6. PASTORAL

Cuando se habla de pastoral en la formación sacerdotal en los seminarios se tendría

que pensar inmediatamente en el mandato del Señor “Id, pues, y haced discípulos a

todas las gentes, bautizándolas en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo…”

Mt. 28,19. Fieles a este mandato se reconoce que la realidad pastoral constituye un

paso clave en el discernimiento de los candidatos, por ende es necesario que se

considere la pastoral desde los momentos claves en vida de seminario.

Un momento previo que corresponde a la etapa antes del seminario para reconocer

como llegan los jóvenes en este ámbito pastoral, cuáles son sus motivaciones

pastorales.

Una etapa en el Seminario que corresponde a la formación propiamente dicha sobre

esta dimensión y a su práctica en los apostolados de fin de semana.

Una etapa final y permanente que corresponde a la vida Sacerdotal ejercida en la

parroquia o en otra realidad pastoral.

Es en el Año introductorio donde se empieza a ver de manifiesto esta realidad pastoral

del candidato y por consiguiente es necesario prestar bastante atención porque allí se

confirma como llegan los candidatos pastoralmente y cuáles son los desafíos y retos

que se deben considerar para dar las bases necesarias para lograr una articulación en

proceso de formación Sacerdotal.



6.1. Pastoral Vocacional.

Corresponde a la pastoral vocacional dinamizar en los futuros candidatos al seminario

la etapa inicial de esta dimensión pastoral, pues, será desde allí que los niños,

adolescentes y jóvenes sientan el llamado del Señor a su servicio concreto desde una

vida consagrada.

La conferencia Episcopal de Colombia en la Ratio Fundamentalis, 1998, nos dice:

… La pastoral vocacional tiene como razón de ser aclarar y definir que la vocación al

ministerio es parte de un proceso de maduración de la fe. ( # 51)

La pastoral vocacional en su trabajo dinamizador tiene como objetivo o busca mejor

llevar a los jóvenes que disciernan su vocación y por ende debe estar atenta:

En el Candidato al presbiterado se esperan determinadas cualidades a su

ingreso al seminario: “la Recta Intención, un grado suficiente de madurez

humana, un conocimiento bastante amplio de la doctrina de la fe, alguna

introducción a los métodos de oración y costumbres conformes a la tradición

cristiana. Tengan también aptitudes propias de sus regiones mediante las cuales

se expresa el esfuerzo de encontrar a Dios y a la Fe. (Ratio Fundamentallis #53)

Tarea esta de la pastoral vocacional que debe estar acompañada de toda la realidad

del joven, sin involucrarse pero tampoco desligarse que se lleve a cometer errores o

injusticias con los candidatos al Seminario.

Es así como el Año propedéutico se constituye en un excelente medio para

complementar los vacíos humanos, personales, afectivos, intelectuales, y sobre todo

cristianos con los que los jóvenes que ingresan al seminario suelen llegar.



6.2 Características de la vocación presbiteral

se reconoce que si bien el Año Propedéutico es la etapa inicial en la formación

sacerdotal no se puede negar que esta etapa también tiene que estar animada por las

características que acompañan la Vocación presbiteral de moque que durante todo el

proceso de formación se pueda vivir una armonía y una maduración de la opción

sacerdotal.

Ya la pastoral vocacional ofrece una propuesta y acompañamiento en la etapa inicial,

pero ésta debe articularse con la que se vivirá en el Seminario y posteriormente en la

vida Sacerdotal.

El Año propedéutico debe entonces encaminarse sobre estas características Tomado

de CELAM (Perspectivas de la formación Presbiteral en América Latina. 1980, Pág. 74)

1. Ser comunidad penetrada por el Espíritu de Caridad.

2. Tener capacidad de iniciar en la vida presbiteral en comunión Jerárquica y

fraterna.

3. Exponer de una manera clara y profunda la doctrina sobre la vida y el ministerio

del presbítero.

4. Dar la oportunidad de probar la vocación y confirmarla con signos y cualidades

ciertas, a fin de que los formadores puedan ofrecer al Obispo un juicio

ponderado de la idoneidad de los futuros presbíteros.



7. DISEÑO METODOLÓGICO

Enfoque y Tipo de investigación:

El enfoque que se ha considerado para este trabajo investigativo es el Empírico

Analítico puesto que nos dedicaremos desde la experiencia y recolección de

información de los candidatos y formadores del Seminario a revisar y valorar los

elementos existentes en el proceso de formación y de esta manera analizar si existe

una articulación en dicho proceso.

El Tipo de Investigación señalado para el trabajo es el descriptivo puesto que se busca

mirar las características que acompañan todo el proceso de formación del Año del

Propedéutico del Seminario y establecer de esta manera los elementos que permitan

valorar si existe una articulación en el proceso de Formación.

Esta investigación busca describir dichos elementos, no se pretende explicar los

motivos o situaciones que llevan a una articulación o no, simplemente al describirlos se

hará la valoración de dichas realidades



8. UNIDAD DE ANÁLISIS

La unidad de análisis es para jóvenes desertores del proceso formativo, y también para

estudiantes del primer año del propedéutico en el Seminario Mayor Juan Pablo II.

También se define el público que hace parte del grupo focal para preguntar sobre su

proceso vocacional.

El proceso de la encuesta va a ser por medio de un cuestionario con preguntas

amplias, y abiertas.

8.1. Grupos Focales

8.1.1. Encuesta (Cuestionario)

1. Información GENERAL

1.1. Nombre completo :

1.2. Edad:

1.3. Grado de Escolaridad:

1.4. situación Militar:

Definida: ( ) Indefinida: ( ) En Tramite ( )

1.5. Teléfono contacto:

1.6. Correo electrónico:

2. Información vocacional Marque con una x una de las siguientes motivaciones:



2.1. Hace cuanto sintió el llamado Vocacional.

2.2. Que le llama la atención de la vida Sacerdotal.

2.3. De lo que conoce del seminario que es lo que más le llama la atención.

2.4. Sabe de las renuncias que implica el ingreso al Seminario ¿Está de acuerdo? Si ( ) No ( ) ¿por qué?

3. ¿Cuáles son tus principales motivaciones? Marque con una x tres de las siguientes

opciones:

( ) 1. Seguimiento de Cristo

( ) 2. Reconocimiento Social

( ) 3. Adquirir posición económica.

( ) 4. Servicio a los más necesitados.

( ) 5. Participación más activa en la iglesia.

( ) 6. Intimidad con Cristo.

( ) 7. Posibilidad de estudio.

( ) 8. Ayuda para el sostenimiento de la familia

( ) 9. Estudios profesionales a bajo costo.

4. ¿CÓMO SE SIENTE EN EL SEMINARIO ? Marque con una x una de las siguientes

opciones:

( ) 1. Muy inseguro

( ) 2. Algo inseguro

( ) 3. Algo seguro

( ) 4. Muy seguro



5. ¿COMO PERCIBE EL PENSUM ACADEMICO DEL SEMINARIO EN EL SEMESTRE?

( ) 1. Saturado

( ) 2. Normal

( ) 3. Apropiado

( ) 4. Exagerado

6. El Seminario cumple con la expectativa que tiene en su proceso Vocacional.

Si ( ) No ( ) Por qué.

7. cree usted que las asignaturas vistas en el Seminario responden a las necesidades del mundo Actual.


8. ve usted pertinente el año propedéutico en los seminarios mayores


9. El Año Propedéutico está integrado al proceso de formación del seminario




Esta investigación se realizó con un grupo de jóvenes del Seminario mayor Juan pablo

II, de la Diócesis de Armenia, pertenecientes al año introductorio. La cual permitió

evidenciar una realidad concreta y es precisamente como se está articulando el

proceso de formación en el Semanario y las incidencias que tiene la dimensión

académica en las otras áreas de la formación sacerdotal, de modo que lleve a

reflexionar las condiciones que se están dando en los candidatos y que en muchos de

ellos ha ocasionado el retiro del proceso de formación.

La encuesta dirigida a los jóvenes que han pasado por el año introductorio y por los que

actualmente lo cursan. En total fueron 25 jóvenes encuestados arrojando los siguientes

resultados.

Las preguntas de la 1 a la 4 están orientadas a conocer un poco las motivaciones y

expectativas que los candidatos tienen acerca del Seminario. Por ende estas

respuestas permitieron ver la tarea que viene haciendo la pastoral vocacional de la

diócesis, pero también los desafíos y retos que tiene en este proceso de

acompañamiento.

Las preguntas de la 5 a la 7. Están enfocadas a la realidad concreta del pensum

Académico del año propedéutico del seminario Mayor Juan Pablo II.

10. El Año propedéutico aporta al candidato las herramientas necesarias para continuar su proceso de

formación en el seminario




A la pregunta cómo percibe el pensum académico del Seminario en el Semestre.

Los encuestados respondieron así:

15 candidatos respondieron que saturado.

5 candidatos que normal

5 candidatos que Exagerado.

A la pregunta si el Seminario cumple con las expectativas en su proceso vocacional los

encuestados respondieron así:

17 de ellos respondieron que si cumple y 8 que no cumple las expectativas, se

argumenta que por falta de conocimiento no era lo que se imaginaban y querían del

Seminario.

A la pregunta si las asignaturas vistas en el seminario responden a las necesidades del

mundo actual. Los encuestados respondieron así:

15 respondieron que sí, y 10 que no. Argumentando a que muchas veces no se ponen

en práctica los conocimientos aprendidos.

Las preguntas 8 a la 10 están orientadas a la importancia del Año propedéutico del

Seminario. Estas preguntas de respuesta sí o no arrojaron los siguientes resultados:

18 de los encuestados ven pertinente el año propedéutico en los seminarios

7 encuestados ven que es demasiado tiempo la formación y que este año no es

necesario.

A la pregunta el año propedéutico está integrado al proceso de formación del

seminario? Los encuestados respondieron así:

18 de ellos si piensan que esta integrado

7 dicen que no, porque se ve la diferencia en la formación.



A la pregunta el propedéutico aporta las herramientas necesarias para continuar su

proceso de formación en el seminario.

Respondieron así:

15 encuestados respondieron que si

10 encuestados respondieron que no. Porque se dedica más tiempo a la actividad

académica y las otras áreas se descuidan un poco por cansancio o por estudio.



9. CONCLUSIONES

A lo largo del trabajo investigativo se describe la realidad que se vive en el Seminario

Mayor Juan Pablo II, de la Diócesis de Armenia con el fin de determinar ciertas

situaciones que se presenta en el proceso de formación Sacerdotal. Por consiguiente

de concluye:

1. La formación sacerdotal es una responsabilidad de todos y a la que se le debe

prestar mayor atención en su etapa inicial, puesto que es allí donde se

garantizará un proceso maduro e integral de los candidatos al sacerdocio.

2. El Año propedéutico reviste una importancia fundamental en la formación inicial

de los candidatos al sacerdocio, pues, es allí donde se ponen las bases de los

criterios y elementos primordiales que llevan a los seminaristas a una respuesta

más auténtica en su seguimiento al Señor.

3. Es necesario que las iniciativas como conocer la realidad vocacional de los

candidatos, el mostrar el seminario como una experiencia apasionante y

atractiva, los elementos pedagógicos articulados en la formación constituyan una

propuesta seria en la formación inicial en proceso sacerdotal.



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Yory, Carlos, M. (2006) Ciudad, consumo y globalización. Bogotá: Pontificia

Universidad Haveriana

DANIEL LEÓN RUIZ CÉSAR AUGUSTO CASTAÑO...

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