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Edición al cuidado de: Luis Duyos García, Feliciano Antonio Yeves Descalzo, Rafael M d o z García, Juan Duyos García e Ignacio Latorre Zacarés.

Dirección recital poético: Feliciano Antonio Yeves Descalzo.

Edita: M. 1. Ayuntamiento de Requena. Concejalía de Cultura.

Co 1 a bo ran: Dirección General del Libro y Bibliotecas. Club de los Poetas Vivos. Biblioteca Municipal de Requena. 60 Fiesta de la Vendimia.

Fotomecánica e Impresión: GOVl (Requena)

Diseño de Cubierta: Miguel Ángel Roda.

Fotografias: Archivo de la familia Duyos García.

Depósito Legal: V - 2.532 - 2007

I.S.B.N.: 978-84-85340-07-8

RECITAL DE HOMENAJE AL POETA

RAFAEL DUYOS -EN EL CENTENARIO DE SU NACIMIENTO-

1~~~~~~~~ PARA LA POES~A" REQUENA - 2006

SESIÓN CELEBRADA EL D ~ A 2 DE DICIEMBRE, A LAS 18 HORAS

EN LA BIBLIOTECA MLTNICIPAL

" ALFORJAS PARA LA POES~A" REQUENA - 2006

Siendo Rafael Duyos poeta valenciano aun con mucho de madrile- ño, su vinculación con toda nuestra comarca, con nuestra vecina Utiel (donde yace junto a su esposa) y con nuestro municipio (tanto con San Antonio como con Requena) fue tan estrecha que no podemos dejar de considerarlo un poeta, en cierto sentido, comarcano y con un algo de requenense.

Si la muerte no le hubiera abordado hace poco más de veinte anos, el pasado año Duyos hubiera cumplido los 100. En ese centenario, el Ayuntamiento quiso no dejar de aprovechar la ocasión de ratificar el reconocimiento a su figura. Recordar y reconocer a quienes se han ganado meritoriamente un lugar destacado, a quienes más y mejor han contribuido y aportado a la sociedad, a través en este caso de la literatura, es una obligación moral.

Así, desde la Concejalía de Cultura, se recogió entusiastamente el proyecto que dio origen a este libro. En una tarde de diciembre a la vez memorable y entrañable, asistidos por el impulso y el talento de Feliciano A. Yeves, celebramos un humilde pero sincero homenaje donde debe ser, tratándose de un hombre de letras: en la casa de los libros, en la Biblioteca Municipal. El recital de poemas de Rafael, a la manera de las "alfo j a s para la poesía" a las que él contribuyera significativamente, se celebró con la participación de requenenses amigos y amantes de la poesía y de Rafael Duyos, con la presencia alentadora y emocionada de su familia.

La vivencia tuvo un algo de evanescente, como una memorable faena de toros -de las que tanto gustó Rafael- que una vez consumada sólo queda en la retina de los que, con exclusividad, fueron testigos del evento. Para hacerlo extensivo a todos y para que quede constancia del hecho para la posteridad, hemos entendido que aquella sesión de "alforjas para la poesía" con la obra exclusiva de nuestro poeta debía renacer bajo una publicación, la que ahora tiene usted en sus manos. De esta manera, el aprecio a la figura de Rafael Duyos por parte del Ayuntamien- to de Requena queda así expresado, inasible al olvido.

Adelo Montés Diana Alcalde de Requena


RECITAL-HOMENAJE A RAFAEL DUYOS GIORGETA

E n varias de las antologías de la Poesía en Lengua Castellana consultadas, y en los prólogos de los libros poéticos de Rafael Duyos -escritos por ilustres poetas, profesores y académicos, compañeros y críticos coetáneos-, con rara unanimidad, y escasas variaciones y matices, se viene a decir asi de nuestro poeta:

El madrileñisimo autor del romance "La Chata en los toros", uno de los clásicos de la poesía popular españoln del siglo X X , era valenciano.

Compartió estudios primarios y amistad con Juan Gil Albert, en los escolapios de Valencia, y con Agustín de Foxá y Luis Felipe Vivanco en los marianistas del Colegio del Pilar de Madrid.

Doctor en Medicina (carrera que curso en Madrid en compafiía de Severo Ochoa, el Padre Arrupe y otros compañeros de indudable celebridad posterior), se especializó encardiología en Viena y Heidelberg, y fue el que introdujo en España la técnica del cateterismo de inspección cardio-vascular.

De 1932 a 1942 residió y ejerció la profesión en Tánger -donde fue nombrado Poeta de la Casa Imperial del Jalifa de Marruecos-, salvo el paréntesis de 1937-1939, en que recorrió Iberoamérica como poeta rapsoda. Instalado en Madrid en el otoño de 1942, compartió la Medicina con el Teatro y la Poesía. Y así como en sus anteriores manifestaciones líricas cantaba ardorosa y emotivamente al mar, al amor y al romkntico fervor "becqueriano" en rimas, cartas, dedicatorias y romances de exquisita factura y hondura, ya enMadrid adquiere enorme popularidad con sus poemas taurinos recogidos en un libro que se hizo famoso, "Los ángeles hacen palmas.. ." -título tomado del penúltimo verso del romance dedicado a Pepe Luis Vázquez- (1946), prometiendo otro segundo tomo del mismo tema, que con el título de "Desde los palcos del cielo", habría de incluir el de su meteórica popularidad: "La Chata en los toros", llevado en repertorio por los más renombrados actores y rapsodas (Alejandro Ulloa, Gabriela Orte- ga, José González Marín. .., y en la actualidad, Francisco Cambres, Francisco Valladares, etc.)

Rafael Duyos llegó a ser uno de los poetas más populares de E,spaña. Su poesía delicada, graciosamente imaginativa, espléndida- mente coloreada, rítmica y deliciosamente musical, de temas llcnos de cncanto, llegaba a todos 1-0s oyentes y lectores, con singular ernoci6n.

Solían presentarlo diciendo: "Es un médico poeta, rapsoda más quc galeno, recita más que receta". ~l poeta y dramaturgo ~duardo ~ a r ~ u k a dijo de él "que tiene de arcángel el nombre y el ala"; y Manuel Machado,

le escribió el prólogo de "Los ángeles hacen palmas" -romancero taurino-, lo proclamó "Nuevo Píndaro español".

Formó parte, desde su fundación en 1948, del "Grupo Alforjas para la Poesía", creado por Conrado Blanco en el Teatro Lara deMadrid, recorriendo muchas ciudades y poblaciones, con sus recitales populares "al modo de La Barraca lorquiana".

Casado en Valencia, en 1934, con Da María del Carmen Garcia y García-Berlanga, de estirpe utielana, tuvo de ella seis hijos; Rafael, Juan José, Luis Fidel, Luis Manuel, Carmen Sofía y Victoria. Luis Fidel y Carmen Sofia murieron a las pocas semanas de nacer. El primogénito, Rafael, falleció a sus 11 años, en 1948 -según el propio Duyos, en su dolor, "el aroma de su vida temprana, el clavel de su primer hijou- (en su recuerdo trazó junto al pinar de su finca de San Antonio de Requena el "Camino de los poetas", integrado hoy en el parque "María García", su esposa, que falleció en 1962). Rafael Duyos, al enviudar y tras una profunda reflexión y crisis interna, se decidió a empezar sus estudios de Teología y en 1970 ingresó en el Seminario de Madrid; el cardenal Vicente Enrique y Tarancón le ordenó sacerdote en la Navidad de 1972. Vivió con ejemplaridad su sacerdocio como coadjutor de la parroquia madrileña de San Marcos, escribiendo -ya desde mucho antes- versos llenos de hondo misticismo y religiosidad: "La hora décima", "Versos a Roma" y "A Santa Teresa de Jesús" fueron sus últimos libros.

De estos versos dijo Sainz de Robles que "aparte la enorme popularidad de Duyos por los romances taurinos, si se insiste en la lectura de sus poemas más alejados de la popularidad jaleadora, se llegará a comprender la trascendencia sugerente que los asiste; son poemas que encandilan el alma y turban el corazón: dos acciones, turbar y encandilar, que son los valores máximos de la poesía desde que el mundo es mundo, en cualquier idioma y en cualquier geografía".

Una docena de libros poéticos -desplegando el amplio panorama de su creación lírica- salieron de su pluma, y sus discursos, conferencias,


recitales, pregones de Semana Santa y Fiestas en diversas capitales, ciudades y pueblos, se hicieron famosos, mereciendo altos elogios por su voz pausada y modulada, elocuente y graciosamente expresiva.^^ en vano había sido nombrado Catedrático Honorario de Declamación del Conservatorio de Valencia, y su feliz nacimiento ocurrió el 23 de noviembre, día siguiente a Santa Cecilia, que pareció gratificarle musi- calmente, dotándolo de tan clara y abierta expresión oral.

Habiendo enfermado gravemente, sufrió la amputación de una pierna y falleció en Madrid el 24 de septiembre de 1983. Trasladados sus restos a San Antonio de Requena, su lugar de residencia habitual veraniega durante muchos años, fue llevado a Utiel y enterrado junto a su esposa y su hijo Rafael, en el panteón familiar de los García-Berlanga, segiín dejó dispuesto, primeramente en su composición titulada "Autoepitafio" y después en su "Testamento Espiritual".

Pero todo lo dicho anteriormente sobre la vida, obra y popularidad de Rafael Duyos -aunque nos sea gratísimo por su alta estimación y valoración a nivel nacional, avalados por su diversidad temática y su constancia en amistades, afabilidad y sentimientos- no constituye real- mente la motivación de vernos hoy, aquí, en Requena, convocados y reunidos, dispuestos a rendirle el homenaje debido a su recuerdo.

Hoy nos con170can -y en ello estamos una veintena de sus seguidores poetas y amantes de su creación literaria y artística-, dos circuns- tancias extraordinarias:

En primer lugar, en recuerdo de su amistad, disponibilidad y amor excepcional por todo lo que respira en requenense, demostrado con su amplitud de miras, generosidad y entrega, en sus versos compuestos y declamados en honor de Requena, su Fiesta Vendimial, su historia, tradiciones, sus tierras y gentes; este amor y esta amistad los compartía con todos los que le pedían poemas, pregones festivos, recitales y actuaciones como mantenedor en actos solemnes requenenses.

En segundo lugar, porque este año, 2006, se cumple el Centenario de su nacimiento; y, aunque Requena y sus instituciones mas represen- tativas ya le otorgaron su reconocimiento, rotulando una amplia calle con su nombre, nos ha parecido el momento justo para refrendarle nuestro afecto y un especial recuerdo.

La singularidad de este recuerdo-homenaje consiste en revivir el movimiento poético de "Alforjas para la Poesía", que é1 tanto queria y

celebraba, y cuya primera y última versión y recital se efectuó aquí en Requena, bajo su dirección, en agosto de 1970, homenajeando a la XXIII Fiesta de la Vendimia -de la que fue pregonero-, y a otro Centenario: el del nacimiento de D. Venancio Serrano Clavero, el señero y total poeta de Requena.

Y a ello vamos, querido y recordado Rafael; "Unas verdaderas alforjas" contienen los nombres de tus amigos, los poetas requenenses, que actuarán "leyendo o recitando únicamente tus poemas más antológicos", segun el orden que la suerte les dcpare, cuando una mano inocente vaya extrayendo la papeleta correspondiente.

La presentación de poetas y poemas, por el orden que la suerte establezca, ya corre a mi cargo. Y la lectura de tus poemas por tus seguidores requenenses en este especial escenario, prestado acondi- cionado por el M. I. Ayuntamiento de Requena para este lírico y emotivo evento, hará el resto.

Perdona si nuestra poquedad no refleja lo mucho que mereces. iQue Dios, tu ayuda y tu sonrisa nos valgan en la empresa! ;Va por ti, Rafael! . . . jQue las Alfo j a s decidan y comience el recital!

Feliciano A. Yeves Descalzo.

La esposa de Rafael Duyos, fotografiada en Valencia (Navidad de 1947) con sus hijos Victoria, Luis Manuel, Juan José y Rafael, que moriría cuatro meses después,

el dia de la Virgen de Ios Desamparados (8 de mayo de 1948).

SOROLLA Y LA MAR

Con este título aparece el primero de los poemas de la trilogía marinera -"Sorolla y la mar", "Torrero de faro" y "Mar Cantá bricol'- galardonada con el Premio Nacional de Poesía "Virgen del Carmen", del Ministerio de Marina, en 1983 (unas semanas antes de su muerte). Fue, sin duda, uno de los últimos poemas escritos y recitados por Rafael Duyos en su casa de San Antonio. Fue grabado magnetofónicamente, para la posteridad, el 31 de agosto de 1983. Pocas semanas después -el 24 de septiembre,- fallecía nuestro gran poeta en Madrid (a la hora en que Radio Utiel emitía esa grabación).

Se volvió a escuchar la voz de Duyos, recitando este hermoso poema, en el homenaje póstumo que se le tributó en Utiel e1 28 de octubre del mismo año. Aparece -junto a los otros dos que componen la trilogía marinera- en el libro titulado " Recuerdo-Homenaje de LItiel a Rafael Duyos ", impreso y editado en 1985.

Abrió este poema el recital-homenaje a Rafael Duyos, e n Requena "Alforjas para la Poesía 2006" (2 de diciembre de 2006) con motivo de cumplirse el centenario del nacimiento del poeta. Fue leído, armoniosa y magistralmente, por el poeta, pintor y dibujante requenense ANTONIO MOTOS DOMINGUEZ, según decidió la suerte de las "Alforjas ... ", que sirvieron para este acto, corno el propio Duyos hubiese querido, reviviendo sus recitales predilectos.

" ALFORJAS PARA LA P O E S ~ A REQUENA - 2006

SOROLLA Y LA MAR

"Tres flagatitas reales se llevaban a tu novia

f f -jariiós amor!- por los mares.

(de la dedicatoria de Xafael Alberti a Xafael Duyos de su libro "Marinero en tierra")

Junto al Mediterráneo de mi cuna me he quedado a dormir en la barraca para sentir el impulso misterioso que mueve el oleaje con la brisa que nos anuncia el alba y el retomar del sol sobre las barcas.. .

La Malvarrosa está esperando que el caballete de Joaquúi Sorolla -el pintor de estas playas- vuelva a plantarse sobre las arenas doradas con su lienzo de luces milagrosas, luces inesperadas.. .

Yo le vi de pequeño a don Joaquín pintar niños desnudos en el agua de transparencias increíbles, vírgenes, bajo la espuma de olas verdiblancas.. .

También le vi pintar barcas del "bou" con aquel aleteo en el que palpitaban peces aún vivos; y los gritos de mujeres con cestos de altos mimbres y medio despeinadas esperando a sus hombres por las orillas de la mar crispada, inquietas, revoltosas, "el mocaor al cap", y las enaguas -pantorrilla desnuda- al viento de la playa.. .

Le vi pintar la barca abandonada que ya no tiene nombre ni dueño y aún aguarda al que quiera llevarla mar adentro en busca de los bancos de pajeles de plata.. . Y en ese despertar del siglo veinte por las arenas de mis correrías siempre pobladas de algas, vi también al buen Plá, Cecilio Pla, -que era pintor de ya crecida fama- acercar se en silencio, cauteloso, al caballete en que Joaquín pintaba por descubrir ese secreto de los brochazos rápidos, sin trampa, del sorollismo que inventó la luz y el rezumar inquieto de las aguas por las telas maestras que él con genio manchaba.. . Pero Joaquín, celoso de su técnica, siempre se lo ocultaba.. .


Mar con velas de nieve y playería de toallas blancas. Mar con el alboroto del pescado saltando dentro de la red mojada.. . Mar con olor de brea, yodo y sal, que aún siento en mi memoria con nostalgia.. . Mar con sol de verdad mar al desnudo con galerna o calma.. . Mar del "aún dicen que el pescado es caro", cuando Tonet llegó muerto en la barca y se oyeron las voces, los aullidos de su madre y hermanas en una escena irrepetible sobre los lienzos, trágica.. .

Mar del Sorolla de la Malvarrosa de mi lejana infancia.

Por ver salir el sol sobre este mar me he quedado a dormir en la barraca.. .


LA PLAZA DE ESPANA

Estc poenia, í7scuifo en coplas por Duyos, lefile sugerido eii su r~injc a Roma cli 1960, ril pasar por la renoinbrada "Plaza de España': cli la Ciudad Eterlia. Lo dedico exprtJsamente a Lucíri Bosé, esposa del tuyero L~i i s Miguel Dornin,quín -bueiios arnj<yos L ~ F Rafnel y padres de ~iuestro ce7ebre cantan te Mi'yzíel Bus¿-. Apnrece el1 el iíltirno libro de Rafnvl Duyos, titulado "Versos a Roma': editado por la Coja de Ahorros de ~ r w i l l e n t e en 1981.

Fue leído en segurido lugar por riuestra bibliotecnria yft.rz?orosn aniaizte de la poesía, ISABEL S A N C H ~ S MART~NEZ.

Rafael Duyos en Roma en junio d e 1960. De este viaje surgiría el libro Versos a Roma>,.

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" ALFORJAS PARA LA POESÍA" REQUENA - 2006

LA PLAZA DE ESPANA

A LtdcEa Bosé

Voy por la Plaza de España. Toda la plaza es bandera. Con flores rojas y gualdas dice adiós la primavera.

Voy por la Plaza de España y tanto quiero mirar que los ojos se me abrasan y los tengo que entornar.. .

Voy por la Plaza de España. Tengo en vilo el corazón. En un ruedo de guitarras se despierta una canción:

"Las muchachas de la Plaza de España son tan bonitas.. ."

Y ellas pasan entre un delirio de dalias, claveles y margaritas. . .

Voy por la Plaza de España, roto de melancolía.. . Sueño. . . Ríe una muchacha.. . ¿Será su nombre Lucía.. .?

Voy por la Plaza de España. Santa Trinidad en lo alto voltea alegres campanas al cielo de oro y cobalto.. .

Voy por la Plaza de España. El reloj se queda quieto.. . Todo, en la tarde de Italia, me da su viejo secreto.. .

Todo -en la Plaza de España-, plaza de España romana -muchacha, flor y campana- jes ya romance y soneto!

. . . jVoy por la Plaza de España!


a) GENARO LAHUERTA Y RAFAEL DUYOS b) JUAN GIL ALBERT

C) EQUILIBRIO

Trip tico de poemas, -10s dos primeros, sonetos, y el tercero en verso de arte menor, blanco y libre-, que aparece en el libro "Caba~zyal ", editado en Valencia en 1932; libro de "versos al amor y a la mar", seglin la propia definición del poetn. El primero lo dirige -ya expresamente en el título- al pintor Genaro Lnhuerta, su amigo de siempre. En el segundo, también m a p $ c o soneto, itornemjea a su amigo y compañero de clase en los escolapias de Valencia, luan Gil Albert, con la apostilla: "Jacinto Mayor en la última Primavera de las Letras"; y el tercero, que dedica a Alejandro Gaos, equilibra en poética balanza a la "inteligencia y al sentimiento".

Fueron recitados en tercer lugar por el poeta, director y actor teatral rcquenense, profesor de Letras en el Instituto "Oleana" de Requena, JOSÉ LUIS PRIETO RbTIZ.

Fiesta Bucanera, durante el verano de 1930 en Valencia. En primer plano, tatuado y descamisado, Vicente Izquierdo. Detrás -de izquierda a derecha-, su hermana, sentada sobre Rafael Duyos -tocado con un "lepanto "-; a continuacián, Teresa Pinazo y su marido -el señor Costa-, Conchita Leonardo, el pintor Pedro de Valencia y Tina Gil-Albert. De pie, el escritor Pascua1 Pla y Beltrán, Salvador Regües, el pintor Genaro Lahuerfa y e/ escritor Juan Gil- Aibert, con sombrero chambergo.


GENARO LAHUERTA Y RAFAEL DUYOS

Sobre una huerta viva de claveles los dos, tú y yo, vestidos de luceros, soñando los paisajes marineros desvelados de remos y laureles.

A mástiles de espuma cien cordeles nos sujetan el sol de los senderos. Por la playa, sin aire, los veleros esperan el fervor de tus pinceles.

Pescadores de besos concluidos, iremos por levantes encendidos despertando de amor todas las cosas, y en un cielo de versos y pinturas, con las abiertas manos calurosas jrobaremos la luz de las alturas.. .!

JUAN GIL ALBERT

Por ti quebrada fue, Juan de las mieles, la dulce dalia que al amor convida. De empalagas de sol, la luz perdida resucitó temblando en tus laureles.

De eucalipto y azúcar los rieles silban trenes de gloria por tu vida sobre el jardín florido en bienvenida por donde tu en ti mismo soñar sueles.

Yo quisiera asomarme a la laguna donde una madrugada tú y la luna hundisteis los desnudos más azules.

Mirarte a ti tendido entre topacios y escotado de lirios y abedules i la esmeralda cruzar de los espacios.. . !

EQUILIBRIO

Para Alejandro Gaos

Para la Medicina, la Inteligencia. Para el Amor y la Amistad -jla Vida!- el corazón.. . jel corazón!

Y todo el Sentimiento sin prejuicios inteligentes desbordando alegrías -i y tristezas ! -.

Y toda la Inteligencia sin obstáculos de corazonadas trayéndome y llevándome también.

Los dos en la balanza - Corazón y Cerebro - limpios y equilibrados sin rozarse jamás.


a) PREGÓN DE LA XXIII FIESTA DE LAVENDIMIA DE REQUENA

(Fragmento final) b) REQUENA

El primero de es tos poemas de Duyos es el flagmento jirzal y apoteósico del Pregán, en verso romance, con el que abrid, en 1970, los festejos de la XXIII Fiesta de la Vendimia de Rcqtlena. En el pregón se exalta clamorosamente todo lo que se respira, crrltiua y vive en requenense, y finaliza con la fiase -que hizo fortuna y quedó para siempre totalmente arraigada- "Requena, donde la Vendimia es Fiestn", invención del presidente de aquella XXIII edición de la Fiesta, Joaquín Pkrez-Salas. Quedó recogido es teflPregón': gracias al esmerado trabajo del impresor Antonio Molina, en dicho afio 1970.

El segundo de los poemas, titulado simplemente "Reqiiena", cornpz4esto en endecasílabos y romance heroico, es un canto de sing~ilar belleza, escrito por Rafael Duyos en stl casa de San Antonio, verano de 1970, y fue recitado por él mismo en la sesión -como brochefinal- de las Aiforjac para la Poesía, celebrada en Requenn el 28 de agosto de 1970, como homenaje a la Fiesta de la Vendimia y al C& tenario de nuestro gran poeta Serrano ~ l&ero . Todo ello, una historia poNica m u y bonita, que recuerda el único superviviente de aquellas "Alfor- jas .. . ': Feliciano A. Yez~es. El poema "Requena " fue publicado en la revista "E l Trzillo" de agosto de 1970, y ambos aparecen en la "Antología de Poetas Xeqtlenenses ..." de Bernabeu y Yeves, editada en 1991.

Estos dos magn2;ficos poemas fueron leídos y declamados fervorosamente por nuestragran poeta M A R ~ A DOLORES GRAO F E R N ~ D E Z , quien en sus años juvt.niles, ya enamorados de la poesía, conoció a Rajael Duyos, de cuya amabilidad y maestría recibió consejos y ánimo para seguir en su afición poética, como así lo'ha venido demostrando.

" ALFORJAS PARA LA PO ES^ A" REQUENA - 2006

DE LA XXIII FIESTA D E LA VENDIMIA

(Fragmento final)

i Por orden del Presidente ! i Hidalgos todos ! i Alerta ! Y haced honor a la historia que sobre vosotros pesa; que el señorío lo da la sencillez de maneras y los escudos se lucen, más que por favor de herencia, por la feliz ricahombría de un pueblo todo nobleza en el que todos son "hijos de algo.. ." Por ser de esta tierra, la de esforzados varones y gentilísimas dueftas . . .

jRequenenses! ¡Van llegando a su madurez las cepas! iBrillan en los altos cielos las más lejanas estrellas! ¡Rueden con los vientos báquicos giraldillas y veletas! ¡Repiquen los campaniles en ermitas y en iglesias! iCuelguen grímpolas y colchas y tapices en las rejas y balconajes del pueblo! Y en las casas solariegas, armaduras, lanzas, cascos en arcones y alacenas, ¡tomen al río de luz de seculares grandezas!

iArdan los arcos eléctricos junto a antorchas y luciérnagas! Y en posadas y mesones los hogarcs se conviertan.. . iAbran las bodegas hondas, pasadizos y escaleras, y alcaicerías de antaño manténgase siempre abiertas, porque ya viene Dyonisos trayendo el aire de Grecia con su corona de pámpanos y en las manos la uva prieta! ... Y de toda la comarca, gentes jóvenes y viejas, rían, beban, canten, bailen en la ciudad de Requena, donde la vendimia es júbilo, i i donde la vendimia es fiesta!!

REQUENA

Requena suena a piedra inconmovible que en las murallas iza sus banderas cuando el verano y el otofio juntan sus vendimiales manos en la Fiesta.

Requena sabe a señorío añejo, donde las uvas exprimidas llenan ánforas con que el Cid escanció un día para brindar por la feraz Valencia.

Requena dice clara y susurrante a todo aquel que hasta su lar se acerca cómo el amor es más amor templando los labios con mosto de sus cuevas.


Requena cuelga en sus bodegas hondas un misterio de siglos y soleras y enciende con el sol los caldos nuevos rosándolos de luz a flor de tierra.

Requena pone, sobre los altares de su Virgen de los Dolores, velas para el Cáliz honrar cuando sus vinos en la sangre de Cristo se conviertan.

Requena da en la Villa un monacal silencio a sus antiguas plazoletas cuando en septiembre apunta de amoríos y entre pámpanos une las parejas.

Requena escucha al son de una guitarra que acompasa el rimar de sus poetas, mientras jazmines y geranios pintan los hierros de balcones y de rejas.

Requena ofrece a todo caminante que cruza por sus calles y glorietas posada para el logro del descanso, el que a Teresa de Jesús le diera.. .

Requena con sus huertas y viñedos en la idílica paz de sus aldeas, deportiva en sus nuevas avenidas, comercial, industriosa, grácil, nueva.. .

Requena sabe, dice, escucha, da, entiende, suena, ofrece, pone, cuelga.. . Requena dentro de su pensamiento siempre que suena y quiere ser poeta.. .

Rafael dar de su hija

Duyos c la reina Victoria

Requena sustentando las raíces del pino, que en mi casa solariega, dará sombra a mis años y a mis versos en San Antonio hasta que Dios lo quiera.. .

Requena sin ser cuna de mi vida, siéndolo de mis gozos y tristezas.. . Requena, cerca o lejos, en la noche de mis nos tal gias, siempre tu. . . ;Requena!

( E l Trullo, agosto 1970)

mantene- ,ti1 que era


HIROSHIMA

Este célebre poema fue compuesto por Xafael Duyos en Godella (Valen- cia), en agosto de 1 950, y dado a conocer, por primera vez en Utiel por S u autor, una noche de feria, en u n magn@co recital, celebrado en el Circulo Cultural "Horizontes". Es u n tríptico que ya subtitula el autor como "oda elegíaca a manera de sinfonía en tres tiempos"..

La dedicatoria no puede ser más expresiva, ya que lo hace al Padre Pedro Arrupe, compañero del poeta en la Facultad de Medicina de Madrid, a quien aquel preciso, triste y patético momento del primer bombardeo atómico en el Japón (8 h.10 min. del 6 de agosto de 1945) le sorprendió como maestro de novicios en el convento jesuita de las afueras de Hiroshima. Dirige Duyos el poemaa Xobert Lewis -que tripulaba el avión, "Enola Gay", que lanzó la bomba atómica-. El primer fragmento, "allegro" en el todo sinfónico, es el vuelo sobre la víctima obedeciendo órdenes y el final trágico del lanzamiento. El segundo poema, "largo maestoso ", en versos libres de arte mayor, imagina el poeta la placidez del cielo y la tierra de Hiroshima "antes de las ocho y diez de la mañanatf, sin sospechar la tragedia. E 1 tercer tiempo, "adagio canta bile y presto final", es u n patético reproche al aviador -que cumplió órdenes superiores, ignorando lo que hacía: " t u no sabes lo que has hecho.. . "-; está escrito en romance y finaliza así: " j quién sabe si para siempre ha muerto la primavera! ". Aparece completo este poema en la "Antología Poética de Autores Utielanos "

de 1952.

La lectura de estefamoso poema de Duyos corrió a cargo de MIGUEL ÁNGEL PLAZA G A R C ~ , Catedrático de Literatura en el IES no 1 de Aequena, director del grupo "Club de los Poetas Vivos " de nuestra Ciudad, con sus peculiares modos de entender, enseñar y vivir la poesía, y el tono y sentimiento especiales que caracterizan los momentos y el desenlace del poema que nos ocupa.

'' ALFORJAS PARA LL4 POES~A" REQUENA - 2006

HIROSHIMA

- 6 de agosto de 1945-

Oda elegíaca sobre Robert Lewis -tripulante del avión que lanzó sobre Hiroshima la primera bomba atómica;

luego, franciscano en un convento cstadoui~idensc-

(A manera de sinfonía, en tres tiempos) Para el reverendo Padre Pedro Arnlpe, com- pañero mío de promoción mndrileiía de Medicina, misionero jesuita, rector del No- viciado de Hiroshima, fiatemísimarnente.

VOLANDO A CINCO MIL METROS (Allegro)

Solos la hélice y tú, los dos canta que canta.. . El motor repicando en do mayor y en un si sostenido tu palabra.. . II Si, si, si, si, si, si.. .", dijo tu morse. ";Vuele a cinco mil metros!", te ordenaban. Y tú: "Si, si, si, si.. .", rumbo a Hiroshima. Al alcance del sol iba tu máquina. Te repetían desde San Francisco: "Evite el encontrarse con los cazas. Manténgase en los cinco mil, regrese si sospecha una amenaza, o en el aire, destrúyase; todo antes de entregarse con su carga. En 1 ínea recta. Siempre a cinco mil. . . " I I Si, si, si, si.. .", tu corazón cantaba.

Disciplina de hierro de la guerra. Un cóndor fiel, tu cuerpo de aeronauta. Pacífica, sin paz, la mar pacífica, rubíes presentía en su esmeralda, venas del maremoto de la guerra, abriéndose en la verde mar en calma.. . Solos la hélice y tú, Roberto Lewis, con tu católica medalla prendida en el altímetro, soñando la inaccesible altura inmaculada. . . Abajo, tierra y mar, locos de angustia.. . Arriba, el cielo, en plenitud de gracia.. . " iSiga Roberto Lewis. Adelante!" "~Es~oY sobre Hiroshima! ", contestabas. Tu corazón, alerta. Más alerta tu alma. Desde el lejano puesto, la voz que ordena se posó en tus alas: "Lance el número uno. Luego, vuelva". ¿No oyes, Roberto Lewis.. .? jTe lo mandan! "Al1 right.. . ., yes.. ., yes.. ." ¡Si.. ., no sabes lo que haces! Fiel soldado, moviste la palanca. Auroras, mediodías y tramontos, confundieron sus luces en el mapa. De su tranquilo sueño de milenios, el átomo, por fin, se despertaba.. . Todos los minuteros de la tierra, detuvieron su marcha. Para Hiroshima, en su reloj de sol, eran las ocho y diez de la mañana. Solos la hélice y tú, Roberto Lewis, -el infierno, sin verlo, a las espaldas-, inocente, feliz, mascando chicle.. ., jvolviendo grupas, rumbo a Yanquilandia!

ALFORJAS PARA LA POESÍA" REQUENA - 2006

AMANECER SOBRE HIROSHIMA (Largo maestoso)

La tierra, en calma, adormecida, leve, sobre los viejos volcanes jubilados.. . Con su ración de arroz, sueñan los niños huérfanos de pilotos suicidas. Novias, ya viudas antes de casarse, rezan al sol de un cielo sin gorriones. Té hirviendo, sin azúcar, para labios con sed de triunfo ya lejano, incierto.. . Leña de almendros canta crepitando en la boca infantil de las cocinas. Desperezo de geishas sin perfume.. . iOh frágil Hiroshima, levantada, como de niños, con papel y arena.. .!

Buda sonrfe oblicuo y en cuclillas, mientras el jesuita misionero espafiol toca a misa de ocho, para novicios amarillos.. . ¿Dónde está Dios? ¿En dónde? ¡En todas partes! En el bambú que cerca las casitas. En el cerezo joven de los huertos. En la laca de añil de los paypayes. En el kimono verde no estrenado. En la mano con roña del mendigo y en ese pebetero que alimenta día y noche la propia Emperatriz.. . Dios en todo; en lo feo y en lo hermoso y en el cerebro del Emperador, Dios-Hombre, Hijo del Sol, aletargado por un mando de siglos incontables, por el que ir a la muerte es ser bendito, por quien morir en guerra es ir al cielo.. .

jOh, rito sin temblor del "harakiri", ofreciendo al Mikado, en vientre abierto, los celofanes del peritoneo.. . !

Así, todo el Japón. Así, Hiroshima, loto de las ciudades, ciudad flor.

El gong de la mañana anuncia un nuevo sol; un día más. Nadie sospecha que es el señalado, que faltan tres minutos para el fin.. . Las "ocho y siete" marcan los relojes.. .

Alto, a cinco mil metros, vuela un hombre, sin los ojos oblicuos, de tez blanca, con nombre de galán de Hollywood. Representa, perfecto, su papel. Él, en la vida, es diferente, puro; pero en esta película es el malo, que, sin saberlo, es sembrador de muerte. El celuloide de la historia rueda por él, desde el lejano Washington.

Hiroshima, allá abajo, es un paisaje para el blanco abanico en que dibujan tras los biombos y entre porcelanas, el retorno imposible del amado, las nietas de "madama Butterfly".

'' ALFORJAS PARA LA POES~A" REQUENA - 2006

111 TÚ NO SABES LO QUE HAS HECHO

(Adagio cantábile y presto final)

Tú no sabes lo que has hecho; cuando del aire desciendas, te leerán los altos jefes, el parte de tu "proeza". . . Tú no sabes lo que has hecho; has dado fin a la guerra, pero trocando en mortaja cien mil kimonos de seda.. . " ¡Enhorabuena!" -te dicen- -te abrazan- " jenhorabuena!" ";Enhoramala! ", una voz, martiriza tu conciencia. Cien mil cadáveres nuevos bajo tus alas se hielan.. . Segundos antes hablaban, gozaban, sufrían. . . , ;eran! Minutos después se hicieron ceniza de la escombrera, cuando la ciudad en llamas, bramaba agónicas quejas, rigidez repentizando como una oriental Pompeya.

Estatuas de piel y huesos: en la alcoba de las geishas, coyunda de eternidad se aseguran las parejas. Dos mil calorías suman a las del beso su fuerza y, como electrocutadas, gentes a la lucha ajenas quedan con rostro de espanto para un museo de cera.

Ojos fuera de las órbitas. Espaldas, en llaga abiertas. Manos, con gesto de garras. Voces, con timbre de fieras. Cunas vacías retuercen sus barandas de madera, donde ya nunca las nanas rumiaran su cantilena.

No sólo mueren los hombres; superviviente, un poeta solloza, sobre su verso, por las golondrinas muertas. . . El nenúfar de los lagos se agosta en la arcilla seca, y dragones y faisanes de repente se incineran, dando pluma y piel al humo de la aurora violenta.. .

Todo.. . es nada: aire en el aire, o estiércol sobre la piedra.. . Ayes hondos, largos, anchos, de ancha, larga, honda tragedia le dan dimensión al cielo, tan lejano de la tierra. El Dante no imagind en su "Divina Comedia", infierno como este infierno sobrc la faz del planeta. El Dantc, de haberte visto con tus alas, te escogiera de ángel exterminador para un último poema, donde el reino de Luzbel sería un edén en fiesta junto a este incendio en el que los hombres a diablos juegan.. .

'' A1,FORIAS PARA LA POESIA" REQUENA - 2006

Tú no sabes lo que has hecho, Lewis; y cuando lo sepas, te latirá en la garganta un corazón de sorpresa y el "ihurra!" de tus hermanos lo dejarás sin respuesta, mientras un escalofrío brinca en tus jóvenes vértebras, y a cambio del uniforme, de la novia y la bandera, por tu voluntad, abrazas, rosario, cruz y estameña. . .

¿Sabrás esperar tu muerte como los santos la esperan? Detrás de las celosias de tu convento, ¿en qué piensas? ¿Tienes la fe necesaria para enterrarte en tu celda? La tentación de volar de nuevo, ¿no te atormenta?

Tú no sabes lo que has hecho.. . iHas dado fin a la guerra! Pero también, a merced de tu sin par inocencia, peligran Roberto Lewis, el altar de una fe vieja y la sonrisa del mundo y la paz fecunda y cierta y el tener hijos, las madres, con una alegre promesa.. .

Tú no sabes lo que has hecho.. . ¡Has dado fin a la guerra! Mas la noche sigue oculta detrás de la luz que empieza

y en adelante, "my boy", tendréis que vivii alerta sueño de tártaros puños en amenaza sin tregua, pues quienes triunfan contigo quizá contra ti se vuelvan y no sepas dónde el átomo dcbc romper sus cadenas.. . Hiroshima es el comienzo, no el final de la contienda. iLa victoria! ¿Sobre quién? ¿Sobre qué? iSobre tinieblas! De nuevo, la confusih.. . -¿donde ya la de las lenguas.. .?-. Torre de los triunfadores. . . Rio revuelto de ideas.. . iSólo en cl nombre de Cristo caerán las Babeles nuevas!

Tú no sabes lo que has hecho.. . ;Has dado fin a la guerra! Pero a tus manos -joh llanto de amor en todo el planeta!- iquién sabe si para siempre ha muerto la primavera.. . !

" ALFORJAS PARA LA POFSIA" REQUENA - 2006

El nsí titiclndo "Rommnnce cristiano-judío" (2s re~lmcrzte lu "rinin dc nnzor" niímero 40, que aparccc en el libro de Rafnel Di1 yos "Pcnurnbra ", pziblicado rn Vnlencia en 1945; su primera pnrtc se siibtituln "Rimns r k c j

arrior ", y conro apkndice contiene "Fragmentos dr carfns jnmis escritas ", qiie se edituron por vcJz pvilnevn en Tbnytr (17-2-1 936), donde Duilos ejercía como nlc;rlico cnrdiólogo. Los "Fragmentos de ca rtas jamás escritlis " nncir- yon del izzlnirn pocítico de Dilyoc pnm conmemorar el centenario del naci- rnicnto de Gustavo Adolfa Bicqucr. El conjunto dcl libro "P~iiurnbm", qlip dntil dc 1945-46, fire dedicado por Duyos a Jimna de Ibarboirrou, poc~tiso uriigiiaya de grrrn fama -a quien había conocido y adn~irado en 1.937 iiiz sil etapn iberomnericnna-con est11 dedicatoria: "A ]liana dr ibnrboi¿roir, fervorosnrnerite, desd[> mi orilla, con nosta'gili s i empr~ de su casa, sil citylo, su niar y sus ~~er sos , allá rn Monteoidm".

Estp romaflce, rima XL del conjioito de 62 "Rimas d~ Amor", sentido popmn dl? i~~zposibles oriiorcs pou motivos étnico-religitaos,fii~ leído eri sexto Iilgnv pri cd horizc~~uje a Uuyos, por Zn poetu rLyiteriense, niltodidacta 11 siempre Ií~icn, P U R I F I C A C T ~ N BALLESTEROS M A R T ~ N E Z .


RIMA DE AMOR XL (romance cristiano-jlr díu)

Cuando pasas por mi lado, siempre a mirarme te vuelves. Lo sé porque yo también me vuelvo solo por verte.

Yo digo, iquién sera ésta? Y tú piensas, iqujkn es éste? Y nos miramos los dos sin querer, y nos parece que hay un algo que se gana en el algo que se pierde.. .

Después, las horas, los días, las semanas y los meses, sin que en la calle siquiera nuestros pasos se tropiecen.. .

Ahora que ya te conozco, quisiera no conocerte. El fuego del disimulo quemando la leña verde en el tormento sin nombre de si sabrán, de si entienden.. .

De vez en cuando jel adiós! Ni el adiós algunas veces.. .

Y yo soñando contigo, sin hablar, sin atreverme, y tú soñando conmigo, en un paisaje de nieve que de tu casa a la mía su blanca sábana tiende.. .

Ya sé que no puede ser, que en tu casa 110 me quieren.. . porque vengo de otra sangre v otro mundo diferentes ... Pero dejemos al alma una esperanza rebelde.. .

Ya ~ L I C en silencio ha de ser este querer sin quererse, este cilicio dc cstar jiintos sin comprometerte, este abrazarnos en sueños y esperar inútilmente.. . -porque lo leo en tus ojos y tú en los míos lo lees-, -tormenta de razas, guerra de prejuicios y d e leyes-, ya que es así, si11 remedio, al rnerios, cuando ine encuentres, cuando pases por ini lado, ivuél vete a mirarme siempre!

María del de Rafael nos Aires

Carmen García García-Berlanga, Duyos, con su hijo mayor. Rafael, en 1938.

esposa en Bue-


PEPE LUIS VÁZQUEZ

Estefarnosísimo romance taurino al más fino y elegante torero sevillano, Pepe Luis Vázquez, lo escribió Rafael Duyos en su casa de San Antonio - Reqnena- el verano de 1943; lo dedicó a los poetas y críticos katrales Enrique Azcoaga y Alfredo Mnrquerie. Su penúltimo verso "los dngeles Izacen palmas" le serviría al poeta para titular s u romancero taurino -con el mismo y exacto título-editado en Valladolid en 1946. De este poema dijo el crítico tazlrino del periódico ABC. "Giraldillo", que era "el definitivo examen taurino del poeta Duyos". Manuel Machado prologó este libro tratando a Rafael D~lyos como "nuevo Píndaro español". Este romance aparece en casi todas las antologías pokticas en lengua castellana, junto n otros de sus más célebres poemas, y fue siempre tema obligado en recitales y sesiones de "AIforjas para la Poesía" en su propia y arinoniosa voz, y para otros célebres rapsodas. El libro "Los ángeles hacen palmas" le hicieron tan famoso y popular, que proyectó una segunda parte, en la qtie incluiría, entre otros nuevos poemas taurinos, el madrileñísimo romance "La Chata en los toros", y que habria de titularse con el último de los versos del romance a Pepe Luis Vázquez, " ... Desde los palcos del cielo". El proyecto no se llevó a cabo y, aun sin éditarse, el romance de "La Chata en los . -

toros", recitado miles de veces en el teatro y en la radio, mantuvo la celebridad y la popularidad de Rafael Duyos.

Inesperada y sorpresivamente, en el juego poético de estas "Alforjas para la Poesía" -Requena 2006-, apareció en séptimo 1 ugar la "papeleta" con el nombre del homenajeado, RAFAEL DUYOS GIORGETA, y su voz, majestuosa, alegre, como una sinfonía torera de versos imperecederos, sanó invad irn- do de gozo a los atbnitos y desprevenidos espectadores, por arte y parte de las modernas técnicas magnetofónicas. La rescatada voz provenía del recital que, en febrero de 1976, ofreció en Valencia, para la "Agrupacián Amigos de la Poesía", precisamente en el Centro de Cultura Valenciana, con sede en La Lonja, marco idóneo para la voz de Rafael Dziyos, cuando ya iba a cumplir sus 70 años.

Plumilla de Antonio Ferrer para el poema "Pepe Luis Vázquez", del libro "Los Ángeles hacen palmas"

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'' ALFORJAS PARA 1 !4 POESÍW REQUENA - 2006

PEPE LUIS VÁZOUEZ

Él entorna así los ojos y esta un segundo muy quieto, en una mano el capote, la otra en el burladero y la vista en los toriles donde asoma el toro negro.. .

Él entorna así los ojos y dice: "iDéjalo, déjalo, que el toro ya vendrá solo!" y el toro, que aún está lejos, escucha esa voz y la quiere prender en los cuernos.

El sol de la Maestranza para su carro de fuego porque la luz se esté quieta sobre el alamar torero.

Pepe Luis - celeste y plata - inmóvil, niño, flamenco, lo está mirando, mirando, sin perder un movimiento y el toro lo busca, busca y él, esperando en el tercio, le abre el abanico grana de su capote pequeño. Todo el calor de la tarde se deshace en blando céfiro.

Torear así, parece muy fácil. . . Es como un juego. . . Pero no. Es lo más difícil, porque es torear sabiendo.. . Tener en el corazón, el justo presentimiento

de lo que va a hacer el toro cuando el toro aun está quieto. Es, adivinar, sentir la voz del toro por dentro y saltarse a la garrocha los taurinos evangelios sin que tengan que enseñárselos porque ya nació sabiéndolos.

Él entorna así los ojos y dice: "iDéjalo, déjalo!" Y el toro va donde e1 quiere y es tan ágil el torero y tan sabio y tan gracioso y tan rubio y tan pequeño y tan hombre y tan barbián y tan valiente y tan diestro, que la cuadrilla obedece sus imperceptibles gestos -banderilleros de seda y picadores de hierro- y todo parece como una danza de aire viejo bajo una batuta de oro entre palmas y requiebros.. . La verónica de olor, el molinete de fuego, la chicuelina de nardo, la gaonera de incienso.. .

-Pepe Luis, Pepe Luis Vázquez, anda, dime tu secreto.. . -Si he "nasío" en San Bernardo.. . Les que no basta con eso?


Él entorna así los ojos -la espalda en el burladero, el corazón en las manos, la mirada en los chiqueros- y dice al peón de turno: " jDéjalo, déjalo, déjalo que el toro ya vendrá solo!. . ."; y el toro sale corriendo, olfateando, mirando, ciego de sol y recelo, con nostalgia de olivar caliente y de río fresco.. . Pepe Luis le llama: "itoro!" y el toro clava los cuernos en el aire de la tarde y se funden sobre el ruedo, en un milagro de gracia, capote, toro y torero.. .

;Los ángeles hacen palmas desde los palcos del cielo!

" ALFORJAS PARA LA POESÍA REQUENA - 2006

RIMAS DE AMOR (1)

Son una selección de las Rimas de Amor, que forman la primera parte del libro "Penumbra", publicado en Valencia en 1945. Concretamente son nueze rimas amorosas compuestas por Rafael Duyos en décimas, según le enseñara a vers$car en Valencia el escolapio Padre Calasanz Rabaza, "al estilo Es pinel ". Todas y cada una pueden leerse conjuntamente o por separado, ya que su temática, de corte becqueriano romántico, enlaza cada décima con la siguiente o puede constituir una unidad, que, como en el caso de la sexta rima, es dignn de figurar por sísola en cualquier antología de la poesía amorosa; es la titulada " E 1 beso" y que en el citado libro, sim plemen te se encabeza con -VI- (es 11i sexta décima de esta selección). Se ha elegido la ininterrumpida sucesión de las rimas IV, V, VI, VII, VIII, IX, X, XI, y XII, para este recital homenaje a Rafael Duyos.

Correspondió la lectura de estas nueve "Rimas de amor" al poeta requenense, musicólogo y articulista, MARCIAL G A R C ~ BAL LES TE- ROS, en el octavo lugar de los autoconvocados para este evento, en homenaje a Rafael Duyos en el centenario de su nacimiento.


RIMAS DE AMOR (del libro "Penumbrd"'

Iv Gustavo Adolfo, tu estás dentro de m' navegando. Tu barca viene anunciando los sueños del nunca más.. . ~ P o r qué venas mías vas al encuentro de mis rimas? Yo he subido hasta las cimas de tu verso milagroso. Duerme en mí. soy tu reposo. Tú en las nubes.. . Yo en las simas.. .

v Cuando la noche venía con brusquedad tropical, cuando la estrella estival en tu frente se encendía, cuando la ternura d a daba a la tiniebla flores y goces y sinsabores sobre el césped resbalaban, nuestras vidas enlazaban los labios suspiradores.. .

Un beso es más fuerte lazo que la palabra más fuerte. Un beso es -a vida o muerte- signo eterno, firme trazo, más abrazo que un abrazo total en delirio pleno. Un beso es como el veneno que embriaga aunque no mata.. . Nudo que no se desata.. .

I

Rueda que rueda sin freno.. .

VI1 Mi mano busca aturdida la caricia de la tuya. . . ¡Cómo tiembla el aleluya en la boca sorprendida! iAy, el dulzor de la herida que sangra dentro del sueño! iAy, el conseguido empeño de tenerte sin premura! Lentitud de la hermosura que sabe y goza a su dueño.. .

VIII Todo el campo para ti! ¡Para ti la playa entera! Tierra adentro y mar afuera, jcarro y barca para m'! Y la aurora carmesí en tus ojos encendiendo luces que yo no comprendo si no están en tu mirada, brisas que por la enramada van tus palabras moviendo.. .

IX Nunca, amor mío, tendrán nuestros sueños su palacio. Nunca, a pesar del espacio, que dominamos, serán dueños de casa y afán a un tiempo. Pero la vida, previsora y desprendida, para nuestro amor, con creces, ha de darnos muchas veces tierra y cielo por guarida.. .


X ¡Si mis idilios más viejos pudieran resucitar! iSi esto que dicen amar -dulce son y amargos dejos-, fuera -de cerca o de lejos- quimera del que delira, jaquí está mi verde lira, tierna de gozo y dolor, cantando verdad y amor sobre la alegre mentira!

¿Qué miisica en tomo mío su melodía descubre? qué luna niña de octubre pisa el callejón sombrío? I Q U ~ sombra de desafio me acecha con impaciencia? jMi hombría y tu adolescencia se juran eternidades! ¡Verso y beso -claridades- bajo el cielo de Valencia!

XII Perdí mis versos. TU estabas mi larga angustia acechando.. . y llegaste preguntando por mi pena. La esperabas.. . Perdí m l s versos. Triunfabas. Te sonreíste de mí.. . Nunca más te he visto así.. . ;Gloria en tu boca de gloria! jvolvían con tu memoria los versos que yo perdí!


ROMANCE DE MARIANO BENLLIURE (La estocada de la tarde)

Es una composicióiz poktica dc Rafael Du yos, en roniatice clásicu popular, doride enaltcce lafij.ura drl nicjor dc los escultores de sii tierrrpo, el ualericiario Mariaiio Benlliure, quieil, ju~ i to a loaquiri Sorollo i/ Vicei~tcy Blosco 1báiic.z -c>n fi~rnoso trío z~alencin~io- alca~iznrori el iriayor rtviombre artistico i/ lifernrio cri Valencia, Maririd, i/ deriiro y fueru de Espnñrr. Lo subtitula "Lo estucaria de la tnrdc" pucs así se llnma cl r~a~yistral gr~rpo escuitó~ico qire ~ s c u l p i ó dari Marinno evocalida u n ~nemouable zwlapié dc Mnchriqui fo en la plaza de foros de Madrid. El poenza reciicrda así la cq~ari aficicíri de Brnlliurr por lus toros y In fauroinaqi~in, trns szr co~isagracióii escirltdrica al realizou r l riiairsoleo de "Josrlito" oi St~z~illn, panteón delfninoso torero. Este rumarice úriicuintrlte aparece cij rl librito "Sorictus dc un amor" p~lblicado por la AgriipaciÓn Ani (yos de la Porsín - Valeizcia 1 953-, corno firzul y aphidicc del viisnio, hoiiie~zaic dc Duyos al artisti~ plástico, "el / ~ ~ i ~ ~ i i l d t > picapedrerii" -ti it nca qiriso quc se le ilulnara "Mnestro"- D. Mavinno Brnlliitre. El poema Ira sido rescatado, jurl lo o1 librito citado, pou u n bihliúfilo rpqurnense -Rafuel Mi4 fioz-, y rzra este homenaje.

La suerte, por exfrarcióii de las "Alfuujas.. ."asicy~icíd nouelio lugar a este magnijcic-o roiliance tyn la ooz y cl eritlrsiasmo del arites rcfirirlo "bit7licylo, poeta y tcatrcro autodidacta y ctida í?cz más enainorado d e los libros" e1 requeneme 'RAFAEL M ~ O Z G A R C ~ A , cofahorador infntigable en esta Iierlilosa tavea del rclcitnl-lzonrcnaj~ n Rafael Diiyos, cn la Requeiza del ano 2006.

*' ALFORJAS PARA LA PO ES^ A" REQUENA - 2006

ROMANCE DE MARIANO BENLLIURE (LA ESTOCADA DE LA TARDE)

Para Godofredo Ros, con la admiración y el cariño de Rafael Duyos

Orgulloso de su España,, de sí mismo era modesto. Más que escultor, prefería llamarse "picapedrero". . .

Tenía una extraña mezcla de señor y de bohemio. Bebía en copa de plata o en botijo verbenero y "parlaba en valenciá" o en castellano correcto. Lo mismo esculpía al rey que al golfillo colillero. . .

Dejaba, al pasar, la brisa de Roma y el arte griego y con un algo de clásico y un poco de picaresco, la lujuria del barroco le reventaba en los dedos. Un Fidias y un Miguel Ángel. Partenón y Coliseo. Todo amasado con sal de su Cabañal velero.. .

Así, se asomó a las plazas con sus mostachos tremendos. con su risa ancha y jovial, con sus ojillos pequeños y en su mente fue grabando caballos, reses, toreros, mulillas y monosabios,

gradas, arenas y cielos. . . Espectador desde su barrera, siempre en acecho, él selecciona los toros ;como el mejor ganadero! Y en la lidia, sin perder un detalle en los tres tercios, escoge los sementales su musa de imaginero.

Y los tienta y los aparta; este bravo, aquel pastueño; aquel que tarda en morir y el que se muere al momento, y ese que remata en tablas al salir de los chiqueros, o ese otro que a los caballos no quiere ni en broma olerlos, o el que al salir se encampana y se hace el amo en el ruedo.. .

Algún apunte furtivo; la verónica, el coleo, un buen par, un molinete o la alegre vuelta al ruedo.. .

Parece que no se fija, mas todo lo caza al vuelo y es su sin igual memoria el gran libro de recuerdos donde guarda la armonía de la corrida, en secreto.. .

Después, está en el estudio -madrugadas de desvelo- frente a frente con el barro, el problema resolviendo, y le van brotando en vcz


de rosas, como en el verso del poeta, toros bravos de sus entrañables dedos, recreándose creando, modelando sin modelo, un toro de su invención, jm toro! ... jel toro perfecto!

De los cortijos de España, él fue el mejor cortijero, asombro de Villalones, Miuras y Pablorromeros, que nunca de sus camadas tendrían toros tan buenos. Y las vacas, en el campo, rurniaban locas de celos por quien sin contar con ellas paria toros tan bellos.. .

La "Señera" valenciana fue su divisa; y el hierro, las letras con que su nombre marcaba en el barro tierno.

~To~os! ¡Toros de Benlliure! i Q ~ é mas quisieran los diestros! Pero los toros estaban solo. . . ¡sólo para verlos! Eran como erales de humo corneando los deseos, sin acudir al capote grana de ningún torero.. . iToros para la vitrina del escultor del Imperio.. . !

Pero una tarde de mayo, bajo el cielo madrileño, Machaquito mató un toro.

Mariano lo estaba viendo. Y el toro, tambaleándose como barco sin barquero, rodó con el volapié y eran los rizos del pecho de la camisa del hombre, como unos zorros al viento, como cintas de victoria de la bandera del diestro.. .

¡Vaya un torero matando y vaya un toro muriendo.. . !

"¡La estocada de la tarde!" Soñó con ella el maestro.. .

iQué fácil era crear los toros.. . vivos.. . o muertos! Pero éste, así, entre la vida y la muerte, resistiendo, el toro del cordobés, qué difícil era hacerlo babeando y con las patas flojas, ya en compás abierto, con su espadón en los rubios hasta la cruz y, en los cuernos, como un temblor de coraje de dejar vivo al torero.. .

iQué toro, "Mare de Deu" . . . ! iY un toro! ¡Un toro cinqueño!


Noches y noches luchando con un solo pensamiento; "¡La estocada de la tarde!" Y una mañana, entre sueños, y como si el mismo Dios bajara a empujar sus dedos, se puso a palpar el barro y fue el milagro surgiendo.. .

Después, cuando la esculpió, Siguió buscando modelos; esa gitana, aquel conde, un orador, un guerrero y el mismo José "el Gallito" cuando lo llevaban muerto por Sevilla fue, en sus manos, de bronce y mármol eternos.. . Y niños, jniños desnudos!, junto a las fuentes corriendo.. . Y ángeles, cabezas de ángeles, como guirnaldas de cielo. . .

Pero los toros -jsus toros!- en su cortijo bebiendo, desde el Jardín al Estudio, del Estudio al salón viejo, iban tras él escolt6ndole como unos mansos corderos.. . Y mayoral sin garrocha, dándoles a mano el pienso, sonreía entre las reses el escultor-ganadero . . .

~To~os! ~ T O ~ O S de Benlliure! i Q ~ é más quisieran los diestros! Él no les daba importancia.. . Toros, juguetes de yeso.. .

Orgulloso de su España, de si mismo era modesto y suplicaba a las gentes que le llamaban "maestrof'; -No me digáis don Mariano, ni escultor, ni nada de eso.. . Yo soy solo Marianet, alias "El Picapedrerof'.

¡Bien pudo este remoquete ser mote de algún torero.. .!

La noche en que se murió -el estudio ya en silencio-. . . desmandándose de pena, ¡por 61, sus toros mugieron.. .!

"La Estocada de la Tarde': Escultura de Mariano Benlliure.


LOS PERROS DE JUAN Y JUDAS

Este poema, en clcísico y popular romance, fue escrito por Rafael Duyos -se~gún propia anotación al final del mismo- en San Antonio de Requena (Valencia), Pascua de Resurrección de 1958. Le o d i ó para i~jsertarlo, casi una década después, en su libro "La hora décima ", publicado en Madrid en 1967, obra ya izetamente de carácter religioso y mictico, como exp~esarnetzte sulititt~la: "Versos de un novicio de la Compañía de María", prologado por el capellhz del Noviciado y profesor de Literatura Victoriano Mateo en La Parra (Áviln) - Safi fa María de Gredos-, en 1966.

Incluye además este libro los "Versos de la Pasión del Sefior", que compuso durante la Semana Santa de 1963, en Ctibas de la Sagra (Madrid) en un retiro espiritual, y que dedicóa su difunta esposa así: -"A Marih del Carmen García García-Berlanga de Duyos. Afiliada a la Compañía de María. Murid para vivir el 23 de nzarzo de 1962"-. Siguielido idh t i ca pauta y estela de los anteriores, aparecen segziidamente elz "La hora décima" otras c-omposiciones de indudable altura poética, entre las que se encuentra el romance hermoso en la angelical ternura y fidelidad de los perros que, inzaginariarnente, seguían a dos de los rnk signlfcados Apóstoles, Juan y Judas.

S e leyó este poema en décimo lugar, con la voz dulcísima y melódica de la poda reqt4eenerisr ENCARNACI~NHERRERO PÉREZ, musa y pregoneya en Xequena dc nlgunasjiestas y solemnidades, amanteferr~orosn de la poesía lírica.

Rafael Duyos, ya el Camino de los casa de San Antc

sacerdote, en m Poetas de su mio.

" ALFORJAS PARA LA POESIA" REQUENA - 2006

LOS PERROS DE LUAN Y TUDAS

En el olivar ladraron los perros cuando Él salía. El perro del Iscariote -negros pelaje y pupilas, grande, sucio y olvidado por su amo en la noche impía- y el perro blanco y chiquito de Juan el Evangelista.. .

De tanto caminar juntos -canes de razas distintas-, los perros de Juan y Judas se peleaban y querían.. . Junto al Señor, muchas veces, en las noches palestinas, dejando a Judas y a Juan, plácidamente dormían o tomaban de su mano los restos de las comidas, saltando en torno de Cristo, recibiendo sus caricias.. .

Fieles perros.. . Cuando el Jueves se fundó la Eucaristía y el pan fue Cuerpo de Dios y el vino su Sangre misma, ellos se quedaron fuera, solos en la corraliza, esperando inútilmente la llamada del Mesias.. .

Ni Judas, huyendo en busca de las monedas malditas, ni Juan, absorto, soñando con la Comunión pristina, se acordaron de sus perros

en la Cena de aquel día. Los perros abandonados están; y en la noche tibia, con la luna del Nis%n, grande, redonda, blanquísima, cuando Cristo salió al Huerto mientras sus hombres dormian se oyeron dulces gruñidos.. .

Los canes -hambre canina- saltaron viendo al Señor y el Sefior. . . nada traía.. . Lamen sus pies, cariñosos, como una señal sumisa y Él reza, solo, postrado y suda sangre y suspira.. . Pero no esta solo. Mientras los Apóstoles dormitan, antes que Pedro despierte, los buenos canes vigilan.. . Y cuando llega la chusma y Judas dice mentira besando a Jesús, su peno ladra loco.. . Es que adivina que el beso y el "Salve, Maestro. . . " de su amo, con voz fingida, son el beso y las palabras de un traidor. . . Y desconfía y ladra y quiere a su dueño morder.. . Y Jesús se inclina y acariciando a los canes les habla y les tranquiliza. . .

-No. No es nada.. . Yo me voy. Pero volveré en seguida. . .


Mas el Señor no volvió, y al pie de la Cruz bendita, subiendo tras de su rastro -calle de Amargura arriba- los dos perros alcanzaron a ver a Jesús con vida.. . De doce hombres, sólo Juan estaba allí con María.. . Y los dos perros, los perros, los perros fieles gemían ululando, estremecidos, viendo morir al Mesías.. . Y cuando el de Arimatea cedió su huerta vecina para sepulcro de Cristo, los perros allí seguian, sin fuerzas para ladrar, pero seguros vigías de aquella tumba que sólo los cielos abrir podían.. .

¿Y Judas.. .? ¿Y los demás Apóstoles.. .? Con María, sólo Juan.. . y.. . los dos canes con las orejas caídas y los hocicos hambrientos.. .

Los soldados -vino y risa- les maltrataron, pero ellos pegados a las rendijas del Sepulcro, no tuvieron miedo de lanzas y chirlas. No fueron como los hombres que niegan con cobardía.. . Fieles siempre, le siguieron ahora muerto como en vida.. .

Cuando al nacer el Domingo -

la tumba quedó vacía y las mujeres llegaron con las luces matutinas y habló el Ángel: "Quien buscáis resucitó al tercer dia . . . ", los dos perros ya no estaban ni en el jardín ni en la cripta.. . Nadie los vio más.. . ¿Se fueron con Él.. .? ¿Se convertirian en lebreles celestiales de las estrellas altísimas.. .?

Por todo Jerusalén, Juan los buscó muchos días.. . Y una tarde, ya de vuelta del Huerto de la Agonia, reviviendo huellas del Señor, el Evangelista encontró a los canes, muertos con las abiertas pupilas, en las puertas del Cenáculo, esperando la comida, la comida celestial que a ellos nunca llegaría.. .

Juan, llorando, contempló la azul cúpula infinita.. .

Nubes, con forma de perros, ladraban cielos arriba.. .


LAS MANOS DEL SEÑOR

Místico, encendido y subyugante poema, que, con este título, aparece, como uno de los antológicos y amados por su autor, en tres desus últimos libuos: "Versos de la Pasión del Señor", (1963), "La hora décima",(1967) y "Versos a Roma" (1981). También fue incluido en la Antologúl de la Poesía Española, de Federico Carlos Sainz de Robles (Aguilar, Madrid 1967) y en algunos otros poemarios consultados.

En "Versos a Roma" hay u n subtítulo: "Ante La Piedad, de Miguel Angeln, como apostilla testimonial de su viaje poético y místico a Roma en junio de 1960, con motivo de la canonización de Juan de Ribera. Esta emoción lírica es la inspiradora del poema y la primera en el tiempo, aunque s61o la refiriera en el último de los tres libros citados.

La lectura de este poema "encandila y turba el alma y el corazón': y más en la voz de su autor -como así sucedió en el recital de las "Alforjas para la Poesía" celebrado en Requena en agosto de 1970, bajo su dirección-. Su majestuosa voz de vocales abiertas, templada y modulada con catedrática armonía declarnatoria, claro y sincero testimonio de su fe y esperanza en lo trascendente y eierno, nos elevó y llevó a regiones donde la humanidad se siente como imantada e inmersa en el misterio de la Redención ...

El turno undicimo de estas "Alforjas ... ", correspondió al poeta FELI- CítUVO A. Y E E S DESCALZO, uno de los organizadores de esia rememo- ración, sin mas méritos -aunque todavía entregado amorosamente a todo lo requenense y comarcano-, que el haber sido testigo y parte en algunas de las actuaciones poéticas de Duyos en nuestra Ciudad. Y dice que se conforma con el premio amistoso y cordial que el propio Rafael Duyos le concedió, al dedicarle -de su puño y letra y entrega en estrecho abrazo- de uno de los ejemplares de su librito "Versos de la Pasión del Señor': que dice: "Paro Feliciano Antonio Yeves, gran poeta, estupendo amigo, con mi afecto y adm iración sinceros. Rafael Duyos, VIlI - 70. Requena . . . " ~ M u c ~ ~ s gracias, Rafael!


LAS MANOS DEL SEÑOR (Ahora que está muerto)

-Ante "La Piedad" de Miguel Angel-

"Después de esto, José, natural de Arirnatea, que era discípulo de Jesús, bien que oculto por miedo de los judíos, pidió licencia a Pila to para recoger el cuerpo de Jesús: y Pila to se lo permitió. " San Juan (XX, 38)

Las manos del Señor eran.. . como eran las de Moisés al recoger las Tablas, duras para imponer los Mandamientos, y ásperas, recias, firmes, despiadadas, arrojando del Templo a mercaderes con látigo implacable y vcz airada.

Las manos del Señor eran.. . como eran las de David, ya Rey, pulsando el arpa. Eran de alegre giro en la armonía de acompasar el son de sus palabras, musicales batutas para el coro de sus celestes bienaventuranzas. . .

Las manos del Señor eran.. . como eran las de los carpinteros; toscas, rápidas, diestras para tallar viejos maderos; dentro de su humildad, como doradas, pues los rayos del sol de Galilea las encendían mientras predicaba. Y parecía, con la luz del véspero, que eran como de fuego, pura llama.. .

Las manos del Señor eran palomas huidas de la jaula en torno de su Verbo estremecido por el fervor de las parábolas.. .

Las manos del Señor, en su ternura, sólo con acercarse, acariciaban.. . Se sentia su piel ardiente y suave sin llegar a tocarlas, sólo con inclinarse a recibir su bendición cuando Él pasaba.. .

Las manos del Señor, Pastor y Príncipe, Artesano y Rabí, Siervo y Jerarca, se hubieran conocido entre millares de manos de judías congregadas, por su perfume indescifrable y único, por el gesto de amor que a todos daban

En la tarde del Viernes cuando el fiel José de Arimatea desclavaba el Cuerpo de Jesús para enterrarlo en el jardín cercano de su casa, las manos del Señor fueron -jde pronto !- como las de su Madre, frías, blancas. Frías y blancas como las tenía la Virgen desde aquella impar mañana en que el Arcángel Mensajero su respuesta esperaba.. .

Jesús ya muerto se torno como Ella, con su perfil de nazarena traza, más claro aún que en vida y por honrar a Aquella que le tuvo en sus entrañas.. .

En el instante del Descendimiento, la muerte le acercó a la dulce infancia; y sus m k s , sus manos sobre todo, inmóviles, sin pulso ya, enlunadas, hicieron exclamar a las mujeres;


-i Tiene las manos de Miriam ! i Miradlas !

Todos miraron a María.. . Todos -de Hijo a Madre- las manos comparaban, medrosos, sorprendidos, entre gritos y lágrimas.. .

-i Se le han puesto las manos de su Madre.. .!

Miriam, la Madre, no decía nada.. . Sabía que esas manos no eran suyas, ni siquiera del Hijo al que enterraban, i sino de Dios, exangües, pero a punto de la Resurrección, llenas de Gracia ! "llenas de Gracia" aun más, mucho más que Ella cuando vino Gabriel a saludarla.. .!

i Eran como eran las del Padre el día en que creó a los mundos de la Nada !

i Las manos del Señor.. .! i Ay, quien pudiera -junto a Juan y María de Magdala- como ellos, bajo el cielo del Calvario, acercarse a esas manos y besarlas.. .!


ROMANCILLO TAURINO DE LUIS FRANCISCO PELÁEZ

(que se alojó en Utiel en la Posada de las Dos Puertas)

Romance taurino, fechado y firmado por Rafael Duyos en Utiel, el 20 de agosto de 1950. Únicamente aparece en la Antología Poética de Autores Lltielanos, de 1951. Parece ser que el poeta lo reservaba para incluirlo, junto a otros romances taurinos, en el segundo tomo de "Los ángeles hacen palmas", que debería titularse ". . .Desde los palcos del cielo".

Es u n romance, igual por igual homenaje, tanto al torero talaverano Luis Francisco Peláez -que entonces se destapaba con fuerza-, como a la vieja y acogedora Posada de las Dos Puertas, de Utiel. Tanto es así que, por muchos anos y hasta su demolicidn,figuraron en artística azulejería y lugar privilegia- do de la Posada, los versos (catorce en total) que ocupan el centro y el j na l de este romancil1o:"j Posada de las Dos Puertas / taurina y vieja posada, / donde durmió Lagartijo 1 soñando toros y palmas.. . !

Ocupó la lectura de este hermoso romance el duodécimo lugar y fue leído magistralmente por el poeta requenense ANDRÉS NAVARRO FERNAN- DEZ, perteneciente al Club de los Poetas Vivas, de Xequma, gran amante de la tauromaquia y de la poesía épica y sentiment~l.


ROMANCILLO TAURINO DE LUIS FRANCISCO PELÁEZ (que se alojó en Utiel en la Posada de las Dos Puertas).

De azul cobalto la seda, los alamares de plata, y color sangre de toro la pañoleta y la faja.

Así se vistió en Utiel, por torear en su plaza, un mozo talaverano que Luis Francisco se llama.

i Posada de las Dos Puertas taurina y vieja posada, donde durmió Lagartijo soñando toros y palmas, dejándola para siempre de su aroma empavesada.. .! ¿Quién sabe si por tu huésped de hoy te cantarán mañana.. .? i Posada de las Dos Puertas, alegra las viejas galas, que a Luis Francisco Peláez, de los ruedos esperanza, rabioso de alternativa, diste tu pan y tu cama.. .!

¿En qué cerámica nueva, su nombre de pila graban.. .? ¿Con qué sangre está injertado.. .? ¿De donde viene su casta? ¿Quién le ha enseñado a citar con las banderillas bajas, para luego, al reunirse, subirlas, juntas, con gracia.. .?

¿Y ese correr a los toros, dando a los cuernos la espalda, con piernas de duro acero que el huracán envidiara.. .? ¿De quién tomó la sonrisa de ángel de la Tauromaquia, para robarle al tendido el clamor que da la fama.. .?

La chicuelina, a sus manos, en un compás se adelanta, para que el toro le vea girar al tiempo que pasa, sin que por ello la res pueda prenderle en sus astas cuando el lance da la vuelta como un vals por sevillanas.. . LChicuelinas del Chicuelo que a Luis Francisco, en su capa, le suenan a pastoriles seguidillas castellanas.. . ?

Y su muleta, tan seria, quisiera ser la heredada de aquella que -de Borox, también tierra toledana- le nació a Domingo Ortega en desvelos de labranza.. .

Luis Francisco cita al toro -juncal y quieta la planta- y el toro va hipnotizado como el torero le manda. La muerte, ni se adivina; vergonzosa se agazapa entre los pliegues burlones de la pañosa encarnada. Nada es muerte. Todo es vida con Luis Francisco en la plaza.. .


Y hasta la improvisación tiene su medida exacta cuando el toro va hacia él con la embestida lejana y en quiebro, dobla al milímetro la griega cintura alada.. .

Luego, impecable, en los rubios, el acierto de la espada. i Ya tiene un torero en flor la tierra talaverana ! Las gentes le han contemplado, triunfador de la jornada, salir en hombros del júbilo por las calles utielanas.

i Posada de las Dos Puertas, taurina y vieja posada, donde durmió Lagartijo soñando toros y palmas, dejándola para siempre de su aroma empavesada.. . ! ¿Quién sabe si por tu huésped de hoy, te cantarán mañana.. .?

j Posada de las Dos Puertas !, alegra las viejas galas que a Luis Francisco Peláez, de los ruedos esperanza, rabioso de alternativa.. . i diste tu pan y tu cama !

Rafael Duyos, en la Posada de las Dos Puertas, de Utiel, delante de los azulejos

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con sus vers os.


Aparece este poema como inicio y primicia del libro de Rafael Duyos, titulado, por razón y méritos de sus comienzos, "La hora décima", publicado en Madrid el año 1967, con el subtítulo (Versos de u n novicio de la Compañía de María), El libro contiene también sus "Versos de la Pasión del Señor" -"versos que están llenos de sinceridad y teologíaM-, según carta de Jost María Pemán a Rafael Duyos (1 966) agradeciéndole su envío.

El magn@co poema a que nos referimos fue escrito y fechado por Duyos en la primavera de 1960, y es a modo del descubrimiento ideal de la escena evangélica en que Jesús llama a sus primeros discípulos (San Juan, 1.38-39) y que sirve de subsiguiente apostilla al poema: "era como la hora décima". . . (Y Juan y Andrés le siguieron.. . '7 .

Algunos críticos literarios, y particularmente el prologuista de este libro, Victoriano Mateo S.M., autor de una excelente "Historia de la Literatura Contemporánea", no vaciló en calificar como los mejores poetas religiosos (iniciada la década de los años 60) por este orden, a Rafael Duyos, José María Valverde, José Luis Hidalgo, Blas de Otero, Javier de Bengoechea y Rafael Montesinos.

(La reforma del Oficio Divino ordenada por Pablo VI tras el Concilio Vaticano 11 dio lugar a que en la versión de la Conferencia Episcopal Española de esta "Liturgia de las Horas " o"Diurna1" se incluyera este poema de Duyos como uno de los himnos de Visperas -oración del atardecer-).

La lectura de este hermoso poema correspondió a la poeta ISABEL GARRUDO HERNÁNDEZ, salmantina de nacimiento y requenense de corazbn, que acompafia siempre en el Club de los Poetas Vivos, de Requena, a S u esposo, Miguel Angel Plaza, su cn tedrático y mentor en estas lides pokticas, que ella sabe aprovechar con su dulce y sentida expresividad lírica.

" ALFORJAS PARA LA POESIA REQUENA - 2006

LA HORA DÉCIMA

"Era como la hora décima." (Son Juan 1-39.)

Muchas veces, Señor, a la hora décima -sobremesa en sosiego- recuerdo que a esa hora, a Juan y a Andrés les saliste al encuentro. Ansiosos, caminaron tras de Ti.. . -¿Qué buscáis.. .?

Les miraste. Hubo un silencio. El cielo de las cuatro de la tarde halló en las aguas del Jordán su espejo y el río se hizo más azul de pronto, jel río se hizo cielo! -Rabí-hablaron los dos-jen dónde moras? -Venid y lo veréis.

Fueron y vieron.

Muchas tardes, sonando la hora décima, salgo a buscarte, Nazareno. Y o no soy pescador ni tengo redes como en Betsaida los primeros, pero quiero aprender cuanto dijiste y mi estandarte hacer con tu Evangelio y contarlo a las gentes inflamándoles el corazón can tu divino fuego.. . La ciudad con sus calles y los pasos de la sierra están llenos de tu Gracia por tantos ignorada y que me quita el sueño si la pierdo.. .

-¿Adónde vas, Jesús? ¿Cuál es tu Casa? -Sígueme y lo verás.

Y ando y no veo, porque te desvaneces a la vuelta de la primera esquina y estoy ciego de querer verte. Aunque de pronto noto que vienes a mi lado si en Ti pienso.. . -Señor.. . ¿en dónde vives? -Ven y veras.

Y yo te sigo y siento que estás. . . jen todas partes! iy que es tan fácil ser tu compañero!

Al sol de la hora décima, lo mismo que a Juan y a Andrés -es Juan quien da fe dc ello- lo mismo, cada vez que yo te busque, Señor, jsal a mi encuentro!


RIMAS DE AMOR (11)

Del libro "Penumbra", obra poética de Rafael Duyos publicada en Valencia en 1945, se han seleccionado para este recital e n homenaje al centenario del poeta, siete -de las llamadas así, "rimas de amoru- (aparte las ya recitadas en el octavo lugar), escritas por Duyos en décimas o espinelas -estrofas que demuestran s u facilidad versificadora-. Todas ellas poseen u n lkxico "amorosamente limpio de impurezas", justificando sus sentimientos y verbos apasiona- dos con el introito donde (apelando a la Epístola de San Pablo a los Romanos) dice que "El amor que se tiene al prójimo no sufre que se haga daño alguno. Y asiel amor es el cumplimiento de la Ley").

Es preciso reiterar que todo el libro, "Penumbra"/ que incluye, como apindice, los "Fragmentos de cartas jamás escri fas " (Tánger, 193 6 ) e n memoria del centenario de Bécquer, fue dedicado a Juana de Ibarbourou, la gran poetisa uruguaya, a qz-iien conoció y de quien recibió "el definitivo espaldarazo alta y elogiosamente poético", e n su etapa viajera por Iberoamérica (1 937-39).

La lectura de estas siete rimas de amor correspondió al poeta JOSÉ M A R ~ A G A R C ~ A AGUAYO, seguidor e integrante del Club de los Poetas Vivos, de Requena, uno de los últimos románticos que todavúl leen -o leemos- versos para disfrute propio y ajeno.


RIMAS DE AMOR (del libro "Penumbra ")

XLIX SIEMPRE. Mi vida. Mi muerte. Tú en la vena. Tú en el nervio. Siempre tú. Siempre; el adverbio de tiempo al tiempo de verte. Juntas mi suerte y tu suerte para siempre; y siempre son, mi pasión y tu pasión, equilibradas y unidas, dos siemprevivas nacidas en un mismo corazón.

L La palabra SIEMPRE tiene siempre la misma expresión, cuando una misma razón une al que va y al que viene. Siempre es letra que mantiene nuestro romance primero.. . Y tu sentir verdadero tanto tiempo amordazado, dice con labio asustado: -¡Te quiero SIEMPRE, te quiero.. .!

LI Lo que nunca se ha pensado, nunca vendrá al pensamiento y menos al sentimiento de tu abril ruborizado.. . Pero yo, junio exaltado por tu amor, me comprometo a romper el firme veto de tu dulce timidez y por siempre, de una vez, ihago mío tu secreto!

LII No tengas ningún temor de este cariño inaudito que no es romance ni grito de labio pregonador. En la penumbra mejor de nuestra casa labriega, donde tu voz se me entrega encarnando en mi palabra, ~ D ~ o s mismo será quien abra la puerta al amor que llega!

LIII Dios no puede castigar el que dulce y mansamente, sin que lo sepa la gente, venga por ti a suspirar. Porque es lograrte, lograr que toda mi sangre en masa pueda quemarse en la brasa perfecta de tu cuidado.. . Y que de ti, enamorado, jmás amor tenga en mi casa!

LIV Mucho me quieres. Aún más tiene que ser. Yo te quiero y de quererte me muero pensando dónde estarás. Y sueño con que vendrás como en la noche primera, con tu virginal manera -fondo de luna y sardana- encendiendo mi ventana ¡para siempre en primavera!

" ALFORJAS PARA LA POESÍA~ REQUENA - 2006

Quiero tu nombre en la brisa y en la tierra y en el agua

en el yunque de la fragua martilleando tu risa. Quiero tu boca indecisa que nunca la miel Iibó y que solo se entregó a la llamada de un hombre, cuando llevaba mi nombre ;y cuando el hombre era yo!

Rafael Duyos, con sus hijos Victoria, Juan José y Luis Manuel, en el despacho de su casa de Madríd, hacia 1954.


ROMANCE DE LA "VÍSPERA DE BODA"

Como bien indica el título de este poema, es u n sentido, amoroso y Zuminoso romance, pleno de metúforas y alegorías, dedicado a Ernestina de Champourcín -musa y poeta entre los famosos delageneración del 27,y esposa de uno de ellos: Juan josé Domenchinn-. Está escrito en 1933 e incluido en el segundo libro de versos de ieRafael Duyos, "Cabanyal': publicado dicho aAo en Valencia (Si1 primer libro poético lo fue con u n claro apelativo taurino, "Toros y pan" - Valencia, 1932-).

Todo el libro "Cabanyal" -exponente titulación de cara 'R la mnr" de su Levante natal y s24s primerizos suspiros y endechas al cielo y a las gentes que llenaron su juventud- es u n continuo envio a sus admirados amigos, compañe- ros, artistas y poetas de aquella generación tan "enorme" liel primer tercio del siglo X X . Ya , como un preámbulo de dedicatorias carifiosas, todo el libro es u n envío escueto qrr e -como todas las cosas hermosas- manaba de S u corazón: "Para Rosario, en la isla de Cuba". Y siguen sus poemas con dedicatorias a Rafael Alberti,]uan Gil Albert, Genaro Lahuerta, Alejandro Gaos, Gerurdo Diego, Pla y Beltran, las hermanas Pinazo, Cipriano de Rivas Cherif, Enrique de Juan, Andrés Ochando. Víctor M. COY tezo, ]osé ~ o n z d l ez Marín -el gran rapsoda- Gustavo Pit taluga, Tina Gil-Al bert, etc. y más largo etcttera, que crr 1 mina en la del Romance de la "Víspera de boda", a Ernestina de Charnpourcín.. . (de la ilustre familia requenense Larno de Espinosa).

Fue leído en decimoquinto lugar por nuestro artista y artesano, excelente poeta y rapsoda requenense, MANUEL LÓPEZ ANDRÉS, asombrándonos con su entregada declamación.


ROMANCE DE LA J l ~ í ~ ~ ~ ~ ~ DE BODA" Para Emes tina de Champourcín

Entre charcos de luceros y lirios de madrugada, los caminos de mis ojos sin sus ojos se quebraban. -¿De dónde vienes? -me dijo- -iVengo de Todo y de Nada! Vengo de las largas brisas y de las nubes mas altas, de los senderos de estrellas por los que mi Dios cabalga, en donde se difuminan entre coros de cien arpas los crepúsculos sonoros que soñé para tu cara. He visto arpegios pulsados sin manos y sin guitarras sobre las cuerdas del aire por dedos de luz del alba. Ciudades vivas de amor en amor amortajadas. Playas de mujeres rotas de besos que nunca acaban con la cicatriz del mar desleída en las espaldas. Sueños de muslos de arena dóciles a mis palabras. Presagios de bocas duras que rondan mi boca blanda. -¿De dónde vienes -jmi Vida!-?

-Vengo de Todo y de Nada! Vengo porque solo tú eres y estás encarnada por los años de los años en el vientre de mi casa, y vengo porque te quiero y vengo porque me llamas.. .! La luna teje de lirios la colcha de nuestra cama. Los mares del Este saben que me caso y que te casas y que la noche de bodas quiero dormir en sus playas. iAdi6s mi Virgen caída para mí sobre las algas! Por el faro de mi puerto se estremece la luz blanca, y un horizonte de velas cuelga redes de las barcas mientras tu vida y la mía peinan el vaiven del agua. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 6 . .

Entre charcos de luceros y lirios de madrugada, los caminos de mis ojos con tus ojos se entrelazan. -¿De dónde vienes, Amor? - iVengo de Todo y de Nada!


EL BARRIO CHINO DE BARCELONA

Hasta hoy, pocos conocían la existencia de esta composición poética de Rafael Duyos. Parecía un poema inédito y que se hallaba perdido; ha sido rescatado del olvido por el bibliójlo requenense Rafael Muñoz, incansable seguidor de la obra de nuestro homenajeado poeta, obtenido a través de una referencia de Internet.

(Lo cierto es que este poema, estrenado por su autor en el Ateneo de Barcelona en 1945, sólo está publicado en una singular, sorprendente y muy bella recopilación: la "Primera Antología Española de Médzcos Poetas -siglos X V al X X - " ("Cultura Clásica y Moderna ", Madrid, 1957). Esta joya biblio- gráfica, preparada por Alfiedo Juderías, tiene como prólogo el discurso que el doctor Gregorio MaraAón pronuncid en mayo de 1951 en el Teatro Iara en una sesión extraordinaria de "Alforjas para la poesía" dedicada a los médicos poetas. Intervinieron las doctoras h u r a Solans y Luisa Trigo y los doctores Pío Baroja, Rafael Duyos, Manuel Pom bo Angulo, Antonio García Muñoz, Cristóbal Jiménez Encinas, Francisco Loredo, Enrique Rubio y Alfredo luderías).

En el poema -en clásico romance- desfilan calles, paseos y parajes barceloneses, al aire y tipismo de los encubiertos personajes que frecuentaban el famoso "Barrio Chino". Con bastante ironía, desdén y asomos de melancolía, el poeta dibuja la bohemia noctámbula y el devenir -entre nostálgico y "peca- minoso"- de las latitudes barriochinescas, con aportes portuarios y marineros de aventura, y el imprescindible dicterio quejicoso a cierta veleidosa peripatética, en las primerizas edades de superficial enamoramiento.

Fue leído este romance de Duyos por JOSÉ ANTONIO NAVARRO HERNÁNDEZ, poeta venturreno y requenense, adscrito al Club de los Poetas Vivos de nuestra Ciudad, desde que se incorporó a las tareas de enserí'anza secundaria en nuestro IES 1 como profesor de Literatura Espafiola. Su bien declamado, sentido y poético verbo -de personal profundidad y ternura lí'ricns- deleitó nuestros sentidos y nos transportó a vivencias juveniles pasajeras ..., entre lo inconfesable y lo romántico.


EL BARRIO CHINO DE BARCELONA

Sé que vives en el Barrio y conozco.. . ihasta tu calle! Allí te he visto, ayer noche, de madrugada, muy tarde, del brazo de un marinero -iFrancia, Suecia, Italia, Gales?-. ¡Qué importa si es timonel y trae nostalgia de mares! ¿Verdad? iC6m0 te conozco, antigua musa impagable, amiga que diste alientos a mis versos iniciales, cuando empecé a ser poeta y a ser mujer comenzaste! Yo te leía mis rimas; tú llorabas escuchándome. Más que la llama amorosa nos quemó el rayo del arte.

Ahora. . . vives en el Barrio, y conozco.. . ¡hasta tu calle!

Pasabas cerca de mí, tan distinta, tan distante, tan huyendo de ti misma, ¡que no me atreví a llamarte!

Él te decía en voz baja cuentos de brea y velamen. Tú, por dentro, indiferente, sonreías escuchándole.. .

Te he visto ayer en el Barrio del brazo de tu almirante -tabaco negro, pernod, prisas en celo, tatuaje-. Te he visto -clavel payés- con tus dulces ojos grandes y tu cintura pequeña y tu pelo de azabache ...

¡Luna llena por el Barrio! Plenilunio de Levante, con su sabor de mariscos perfumando, azul, el aire.

La Rambla entona sardanas, el Paralelo, romances, y entre Rambla y Paralelo canta el Barrio su aquelarre. La Rambla prefiere el sol, con sus flores y sus árboles. El Paralelo - jay Talía!-, las luces artificiales.. . jPero el Barrio es de la luna! -luna creciente o menguante- que penetra en las alcobas descerrajando cristales, celestineando besos cálidos, interminables, besos de "a tanto el minuto", con su propina de balde.. . Barrio con Asia en la cédula y Europa en la vieja sangre, con rumbas afrocubanas y chirimías de Tánger.. .

" ALFORJAS PARA LA P O E S I A ~ REQUENA - 2006

La calle del Mediodía -medio tascas, medio bares-, con sus esquinas calientes de caricias trashumantes.. . Ginebra en "El Sacristán", y en "La Criolla", cantares; Amargura de Ojos verdes, dulzor de "El noi de Ia mare", mientras por "En Robador" -pitillo rubio y desplante- los medios hombres esperan al primer novio que pase.. .

Acordeón marsellés con tufo de soleares.. . Cuplé español de "iOh, gran Gilbert!" con regusto de Montmartre, los gestos de Fornarina, la voz de viejo compadre, en el sótano secreto de la tienda despistante.. .

El señor cónsul de Egipto con el de los alemanes -éste, con su smoking rígido, aquél, con su fez granate- han cenado en "Mar Azul" con unas chicas de Cádiz y andan buscando el "Cau d'Art" para el champaña del trance.

Nietos del "señor Esteve" con frac de gala fragante -cheques a pwito de firma, gardenias en los ojales- del Parsifal del Liceo bajan al café cantante con sus mujeres legítimas, gozosas en el alarde de dar a los bajos fondos las luces de sus diamantes,. .

Va por "Conde del Asalto" una panda de estudiantes -los libros en el olvido, recién planchados los trajes, los labios sin experiencia, las maneras virginales-. Vienen de Cortes y Gracia (ique no se enteren sus padres!) con sus pesetas de sábado en las manos anhelantes, tímidos del primer cock-tail, jal Barrio Chino! .. . ja estrenarse.. . !

Buda sin ojos oblicuos, Shangay de los catalanes, Barrio con Asia en la cédula y Europa en la vieja sangre, con rumbas afrocubanas y chirimías de Tánger. . . iLupanar del gran tunsmo de la Barcelona grande! . . . . a , . . . i..


Allí te he visto, ayer noche, del brazo de tu almirante. Allí te he visto, jen el Barrio!, por esa que ahora es tu calle, amiga que diste alientos a mis versos iniciales, cuando empecé a ser poeta y a ser mujer comenzaste.

Pasabas cerca de mí, tan distinta, tan distante, tan huyendo de ti misma ¡que no me atreví a llamarte!


YO NO SÉ LO QUÉ ES "EL MAR"

Poema escrito por Rafael Duyos en su Casa Aquilina de San Antonio el 4 de octubre de 1949, recitado en varias sesiones poéticas por su autor. Se deleitaba en su lectura como si estuviera mirando las oleadas blanquiazules del Cabañal de sus amores y primeros años, y can el singular énfasis de proclamar la feminidad de "la marfJ, siempre así en el lenguaje marino y pescador del Mediterráneo, musa y fontana frecuentes en sus versos. . .,fientea lo masculino de "el mar': propio de "gentes de tierra adentro".

Escrito en romance, de sabor muy popular, este bello poema aparece en la Antología de la Poesla Española, de Sainz de Robles (Aguilar, Madrid 1967) y en la de Antonio Burgos (Rapsodia Española, 2006) Pero no figura en otros libros del poeta (Cabanyal, Siempre y nunca, Penumbra, etc.) caso extrano, dada la predilección de Duyos por este poema, gustando declamarlo.. ., junto a otro, "Enterradme en la playa", del mismo corte, impulso y querencia marinera, que sí está incluido en su libro "PenumbraJ' como colofón yfinal a sus rimas de amor (rima LXW. Atrapado enlre su nostalgia marinera -hasta más allá de su muerte- y la seguridad de su tumba "tierra adentro", en nuestra vega, Rafael Duyos resolvió su dilema presagiando en u n poema mariano que

"La mar subirá al Remedio el día menos pensado.. . "

Este hermoso romance fue leído en homenaje y recuerdo a Rafael Duyos, por LEANDRO ARENAS DOMÍNGUEZ, poeta integrante del Club de los Poetas Vivos, de Requena, labrador vegano (Barrio Arroyo), poeta de romances, quintillas y iglogas cantarinas, sencillas o profundas -según temas y casos-, casi totalmente entregado a la poesía popular.

Rafael Duyos, en el jardín de su casa de San Anfonio el verano de 1950.


YO NO SÉ LO OUE ES "EL MAR"

Yo no sé lo qué es "el mar". . . "La mar" si que sé lo que es.. . No digáis "el mar", amigos, porque "la mar" es mujer. Amante del pescador, amiga del timonel, esposa que siempre aguarda, novia y hermana a la vez.. .; sombra de espuma que tienta con sus olas en vaivén, sirena de blanco nácar -mitad niña, mitad pez- que a los hombres de la orilla les tiende su verde red.. .

Quienes la llaman "el mar" de tierra adentro han de ser, hombres sin brújula, ciegos de su gracia, que no ven. . .

Yo que he nacido a su vera y mil veces la crucé -niño almirante de sueños en mi barco de papel y hombre ya sobre los buques gigantes, de ella a través-, yo que respiro su brisa y esclavo soy de su ley y he crecido entre sus velas y morir quiero a sus pies.. . Si voy a bordo del verso, con mi nombre -Rafael- en el mascarón de proa de mi mañana y mi ayer.. .

Si el coral mediterráneo de sus labios mío fue, y amo sus besos de brea con el oro de mi piel.. . Si he bebido su salitre bajo el sol de los Roger -de Lauria y de Flor, marinos en la estela de la Fe.. .- Si es castigo, a sus espaldas vivir, para mí y no ver los cambiantes con que juega la esmeralda de su tez.. . Si esto que siento por ella como entraña de mi ser es amor y yo soy hombre, ¿cómo -joh, mar!- la nombraré.. .?

Yo no se lo que es "el mar". . . "La mar" sí que sé lo que es.. . ¡NO digáis "el mar", amigos, porque "la mar" es mujer. . . !


AUTOEPITAFIO

El autor de la "Antología poética de autores utielanos" (1951), José Martínez Ortiz, profesor de Literatura, historiador y cronista de Utiel,al hablar de la figura y la obra de Rafael Duyos, dice -entre otros muchos elogios-, sobre el tema ti tu lado "Epitafio":

"... El gran mérito que para nosotros tiene Rafael Duyos es el de ser utielano de corazón, cuyo amor a nuestro pueblo fluye en sus versos, llegando hasta la gentileza de haber escogido -nos lo dice con mucho garbo en el "Au toepitafio "-, para descanso de sus huesos la tierra utielana, a la que entregó el aroma de su vida temprana, el "clavel" de su primer hijo".

Duyos lo escribió en Madrid, en 1950. También, y en atención al amor que siempre demostró por las cosas requenenses (historia, cultura, tradiciones, festejos, certámenes, recitales, etc.), es te poema fue seleccionado e incluido en la Antología de Poetas Requenenses y Requenistas (1991) de R. Bernabeu y F. A. Yeves.

El poema, romance en populares octosilabos, es una delicia cantarina y garbosa, el auto biográfico sentir torero que inundaba S u corazón y su armoniosa pluma -después de haber escrito aquella "gloriaff de la tauromaquia hispana en sus poemas y romances de "Los ángeles hacen palmasf'- vertiendo versos nostálgicos y prernonitores, entre apenados recuerdos y alegres deseos de vislumbres celestes. . .

"Se lo llevaron a Utiel/-luna por 1acarretera-I.. .con la Virgen del Remedio 1 allá en lo alto de la sierra .. .I Quiso ser algo en los Toros.. . 1 y fue. .. sólo ... jsu poeta!"

Fue leído este magnífico poema en decimoctavo lugar según el azar de "Las Alforjas.. . 2006", en Requena, por el poeta JOSÉ ENRIQUE EJARQUE EJARQUE, maestro en Utiel, nacido en El Rebollar (Requena), aman tísimo de sus dos pueblos -el natal y el deadopción vivencial-, del Club de los Poetas Vivos de Requena, escritor y pintor de singular maestría y oficio.. . iy siempre u n gran poeta!


AUTOEPITAFIO

Quiso ser algo en los Toros y fue. .. sólo. .. su poeta.

Soñó un vestido de luces -oro y grana o negro y perla- y todo lo más lució el traje corto en las tientas, con un capote atrevido en las manos inexpertas.

Soñaba arenas doradas y no pasó, entre barreras, de la metáfora fácil a punto de revolera.. . i Al menos, banderillero -pensó- o ese peón de brega que al torero de cartel el toro en suerte le deja.. .! Fue un día mozo de espadas en una plaza pequefia, con timidez de novicio sin liturgia macarena, sirviéndole a Luis Miguel las algebraicas muletas donde duerme el logaritmo secreto de las faenas.. .

Quiso ser algo en los Toros y fue. . . sólo. . . isu poeta! Cantó a los diestros de fama con sus luchas y grandezas y siempre fue su romance pregón, clarín y bandera, dándole al jay! y al ¡olé! la rima precisa y nueva, según el iolé! y el iay! que cada diestro encendiera.. .

Porque viese a Pepe Luis quien creó Cielos y Tierra, invitó a Dios a las Plazas, consiguiendo que, en la Fiesta "desde los palcos del Cielo, ángeles palmas hicieran. . ."

Nació en el feliz Levante de su huertana Valencia el año en que Alfonso Trece casó con Victoria Eugenia. Tenía sangre de moros -artesanos de la seda- y con la sangre moruna, mucho de sangre gallega -el "Duyos" le rebrincaba de saudade en las arterias-, gotas de polaca linfa y una austro-itala ascendencia que le asomaba a los ojos en su triestina pureza añorando el sol adriático de la casona materna.. . (7 Desde el calcáneo al frontal midió casi "un metro ochenta". , . Pelo castaño, piel blanca, mirar leve, mano prieta y un pronunciar con un suave son de vocales abiertas.. .

Gozó media luna en Tánger y Cruz del Sur en ~rnkrica. Tomó de los andaluces las gracias que, a manos llenas, ellos mismos le cedieron en interminable entrega.. . Tuvo por novia a Granada, quiso de querida a Huelva y fue amante de Sevilla con Triana de celos muerta.. .


Llevó el nombre cordobés del Arcángel de las sendas, como Lagartijo el Grande, como el Machaco y el Guerra.. .

Mujer e hijos le otorgaron felicidad con largueza; en ellos y el verso tuvo cuanto más quiso en la tierra. No sintió envidia de nadie y menos de quien hiciera, como él mismo y mejor que él, versos de amor y de guerra.. .

Creyó en Jesús y en la Virgen y en la Santa Madre Iglesia. Fue amigo de sus amigos y aun de los que no lo fueran.. . Fue médico por aquello de "que estudie una carrera". . . Pero su pasión fue el arte; de él se dijo con justeza, "rapsoda antes que galeno, recita más que receta. . . 1,

Y un año del siglo veinte, un día de un mes cualquiera, se fue -Dios sabe la causa-, dejando un romance a medias, el del novillero a punto de alternativa torera, y unos penúltimos chatos, sin beber, sobre su mesa y unos antiguos deseos, sin cumplir, bajo las venas.. .

Se lo llevaron a Utiel -luna por la carretera-, carretera de Castilla -carninito de Valencia-, con la Virgen del Remedio allá en lo alto de la sierra, velando la eternidad de los que a sus plantas suenan.. . Se lo llevaron en hombros, no triunfador en la arena, sí quizás flor natural póstuma de sus quimeras, en esos juegos florales de muerte, que a todos llega.. . Se lo llevaron meciéndole mozos de rumbo y coleta, y, al verle pasar, ks gentes decían como el que reza:

"Éste es aquél que del verso hizo capote de seda, soñó un vestido de luces y quedó en traje de tienta.. .

Quiso ser algo en los Toros . . . y fue.. . solo.. . jsu poeta!."

(*) Fueron abuelos maternos del poeta Sofía Kermaschi -de familia polaca- y el mariscal Nicolds Miniussir, nacido en Trieste, en la f ion tem austroitaliana, a orillas del Adridtico.


LA CHATA EN LOS TOROS

-Romance de la Infanta Isabel-

Popularísimo romance, estampa madrileña de comienzos del pasado siglo X X , en el que inmortaliza la figura, la simpatía y el popular "alias" con que las gentes humildes solían llamar a la Infanta Isabel de Borbón "La Chata" (Madrid, 1854-París, 193 1 ) primogénita de Isabel II y Princesa de Asturias en dos periodos diferentes: hasta que nació su hermano A'fonso y desde su proclamación como rey (Alfonso XII) hasta que nació la infanta María de las Mercedes.

Fue escrito por Rafael Duyos en 1947, en Madrid, para que iniciara lo que debería ser el segundo tomo de su romancero taurino "Los ángeles hacen palmas" (1946), con el título de "Desde los palcos del cielo': que no llegó a editarse.

Sin embargo, el romance "La Chata en los Toros "alcanzó tal popularidad que fue difundido por antologías, recitales, discos, reuniones literarias y taurinas. Su difusión radiofónica fue casi diaria durante años y los grandes arfistas dramáticos y rapsodas de entonces. . . y de después, lo llevaron en sus repertorios, declamándolo por los más importantes escenarios de España y de Iberoamérica (Alejandro Ulloa, José González Marín, Gabriela Ortega.. ., Francisco Valladares, etc. ).

Fzre recitado por el poeta y rapsoda sanantonero Rafael Leyvu en el homenaje póstumo que se le rindió en Utiel (X-1983), y figura recopdo en el libro-recuerdo de aquella sesión. Y sigue apareciendo todavía en libros y grabaciones; y, como ejemplo de ello, nos remitimos a la publicación "Rapsodia Espa fiola" de Antonio Burgos (2006).

Y aquí, en Requena, la suerte quiso quefuera leído -mejor dicho, recitado y maravillosamente declamado- en decimonoveno lugar, ya casi alfinal y como broche de esta celebración, por el poeta, actor dramático, rapsoda y artesano requenense, LUIS LATORRE PEREZ, maestro en arte declamatorio y en eniusiasmos.


LA CHATA EN LOS TOROS -Romance de la Infanta Isabel-

-i Deprisa, que no llegamos! iQuiero la mantilla blanca!

iQué runrún por los salones del palacio de Quintana! Mayo y tarde dominguera. En el piano, una sonata se le deshace en los dedos gordezuelos a la Infanta.

-Maestro Saco del Valle: tanto Beethoven me cansa. Te lo digo sin rodeos: Chopin sí me llega al alma. Siempre se lo pido a Emilio Serrano: "Cuando me traigas algún artista infantil, quiero música romántica. Como Aroca el otro día, o como en cosas de España el niño Lucas Moreno con la Danza Diez. . . " icararnba, son las cuatro menos cuarto; no llegamos a la plaza! Maestro, mientras me visten, tecléame tú la danza.

Juanita Bertrán de Lis -que hoy está malhumorada- va y viene por la saleta. Se turna con su otra hermana. Mañana vendrá Margot, siempre alegría en la cara.. . Juanita, incansable, ordena: -El coche a las cuatro.

Pasan las doncellas con el traje de Su Alteza -lila y grana-, con encajes de Bruselas apretando cuello y mangas y rematando la orilla manola de la gran falda. Mientras la visten, no cesa de hablar la señora Infanta:

-Dame el abanico verde de Mercedes, mi cuñada; el que ella llevó a los toros cuando era Reina de España. No. No quiero ese collar. Ni esos pendientes. No. Nada. Unos claveles prendidos en el pelo, iy a la plaza! Recuerda que Romanones viene a merendar mañana y que el martes bajaremos a la Pradera. Me encantan las rosquillas de la "tía Javiera". Como soy "gata", me pirro por ir al Santo y mezclarme en la jarana de los puestos de botijos y pitos.. . Vamos, jen marcha! Venga, deprisa, ligeras, ique las cuadrillas no aguardan!

-iArmas a Su Alteza Real.. .!- grita el teniente de guardia. Flecha de seda y charol, sale el "rnilord" de la Infanta y al ritmo de pasodoble van las yeguas alazanas llevando a doña Isabel de Borbón casi en volandas.


Princesa, Bailen, Mayor, Alcalá.. .

-Dame el programa. Hoy torea mi torero. ¿Cuál es tu torero, Juana.. .? -El mío es "El Gallo", Alteza. -¿"El Gallo"? iQuién lo pensara! Torero gracioso, pero no te arriendo la ganancia. Yo, del "Chico de la Blusa", que a serio nadie le gana; y del "Machaco" las tardes en que esculpe la estocada. Tú, los toros no los hueles.. . Cuando iba con Lola Nájera, que era del "Bomba", no quieras saber, ardía la plaza. . . Yo, siempre de los valientes que en las puntas de las astas se dejan, tarde tras tarde, la chorrera almidonada. Yo, de los toreros machos.. . Hija, ¿que quieres? Soy maja como me alumbró mi madre.. . iMiiira, mira! Antonio Maura.. . Me choca.. . i Adiós! iCuanta gente! La reina se queda en casa pretextando una jaqueca.. . LOS toros la asustan! jVaya, ya estamos! ¿Y mi abanico.. .?

Junto al coche de la Infanta la gente se arremolina.

-Buenas tardes. Muchas gracias.. . ¿Qué tal, Arbós, a los toros.. .? No faltaré esta semana. Quiero asistir al estreno que anuncian dc ese tal.. . Falla. ¿Qué hay, Benlliure? iHola, Tamames! ¡Con Dios, duque de Veragua; ya sé que los toros que hoy se lidian son de tu casa.. .!

Abren paso como pueden los de la Guardia Montada.

-iQuitasoles! iAbanicos! -iAlmohadillas y naranjas.. .!

-Hola, empresario, jcontento? Vengo y o sola. . . j más ancha! El rey me envía en su nombre.. . La reina se encuentra. . . mala.. . Sí. Sí. Que me brinden toros. No. No. Al contrario, me agrada Ya traía, en previsión, tres pitilleras de plata.. .

La Infanta llega a su palco y, al entrar, toda la plaza puesta en pie la vitorea batiendo alegre las palmas, mientras la Marcha de Infantes resuena en las gradas altas y el sol pone al rojo vivo las barreras encarnadas,


En la andanada del "tuesten", con popular algazara, los "morenos" se alborotan y gritan: ¡Viva la Chata! La Infanta, por popular, como el que más, tiene su alias.. . Y en los tendidos de sombra, las cabezas inclinadas se rinden por un segundo ante su augusta mirada. La tía del Rey saluda con sus manos enguantadas, como diciendo: "Muy buenas tardes", sin darle importancia. Parece ella el presidente cuando agita -seda blanca- el pañolito real, complacida y campechana. Cuando se sienta Isabel, resuena el clarín de plata y, entre un clamor, las cuadrillas cruzan la arena dorada. "Pastor, Machaco y El Gallo", jun trío de rompe y rasga!; La Almudena, la Mezquita y un remate de Giralda, que, aunque el Gallo es madrileño, tiene andaluza la savia.. .

La corrida se desliza bien y mal. . . juna de tantas! Sólo Vicente Pastor, al bicho que rompe plaza, mete el sable recibiendo y la ovación es de gala.. . El Machaco mata bien, porque ... matar, siempre mata ...

Brinda a María Guerrero su segundo, y la estocada se queda en lagartijera, media en la yema, sin trampa.. . No es como la de la tarde ya famosa, pero basta.

Doña Isabel de Borbón, tras de la regia baranda, bulle, ríe, palmotea y hasta jalea en voz baja, y rompiendo el protocolo más de un olé se le escapa, con el acento chispero que suspira en su garganta, cuando Rafael el Gallo, tras su clásica "espantada", se adorna por bulerías con la larga afarolada.. . Por un momento, Isabel, al "enemigo" se pasa y aplaude al hijo de "la Gabriela" el lance de capa.. . No hay que negarle la sal a aquel que la sal derrama.. .

La Infanta, luego, al salir -la tarde ya de oro y malva-, desde Alcala, por Cibeles, remonta la Castellana. Dan unas vueltas,, . Por Génova suben después hacia casa. En Glorieta de Bilbao, al pasar, piden horchata de un puesto en que se le antoja beber.. . No pueden pagarla. No llevan ni un perro chico. j Apuros de la Azafata.. .!


-Mi lacayo es previsor.. . Anda, Marcelino, paga como el día del tranvía que nos subimos sin blanca.. . YO siempre voy sin un céntimo!

-¿Pagarme? ¡Está convidada! Yo estoy "pagao" ya tan sólo con verla a "ustez" en mi casa y con poner un letrero: "Proveedor de la Infanta". . .

La Infanta y el horchatero ríen de muy buena gana.. . Palmoteos. Sombrerazos. El coche sigue su marcha.

-iFijaos, la Infanta Isabel! -jLa Infanta Isabel! iMiradla!

Cuando llega, oscureciendo, al Palacio de Quintana, un organillo, en la esquina, con su ritmo alegre canta notas de "El cabo primero", mientras presentan sus armas al paso de la Señora los soldados de su Guardia.

-iVamos que hay cena en Palacio! iY en el Real, La Traviata! Como siempre, llegaremos al acto segundo.. . iVaya! Se me olvidó preguntar a la empresa de la plaza para el domingo que viene que corrida nos prepara.. . ¡Cómo ha estado mi paisano! No me negarás, mi dama,

que este Vicente Pastor es el que manda en España.. Se entiende, después del Rey.. . Vicente es hombre sin trampa; me gustan esos toreros que juegan a todo o nada.. . Averigua quién torea la próxima tarde, Juana. Yo quizás no pueda ir.. . ¡Con esto de ser Infanta! ¡Demonio del protocolo! Y yo soy protocolaria, ;que conste!; pero es que hay días en que me da mucha rabia no poder ir como quiera y donde me dé la gana. Quisiera el genio de azogue que tiene mi hermana Eulalia carnpando por su respeto sin atenerse a programas; o ser como Paz, tranquila en su Baviera romántica.. . ¡Id despacio, no vayáis a romperme las enaguas! No me petan estas modas con la cintura tan baja. ¿Cómo dices? Sí, sí claro, la noche es noche de alhajas; quiero el collar de chatones y ese broche de esmeraldas.. . Quiero "epatar" a esa tonta de Embajadora de Francia.. . En fin. . . Vamos a Palacio. . . Con lo bien que se está en casa o, como mi hermano hacía, cenando por esas tascas de tapadillo. Era un hombre que, aun siendo rey, se saltaba las cosas a la torera.. .


Sonríe. Empolva su cara frente al espejo que usó su madre, la destronada, y parece suspirar con una oculta nostalgia -recuerdos de libertades por bulevares y plazas-.

-jAy, madre y Seíiora! ;Quién volver a nacer lograra, para ser mujer tan sólo, en vez de nacer Infanta.. .!

Unos minutos después, con sus sobrinos estaba. Alfonso Trece la embroma:

-Tía Isabel, te retrasas. Tú, siempre tan puntual; ide donde vendrás, tunanta.. .?

-Sobrino, me siento "Isidra", y este Madrid nuestro daba gozo y no era cosa de meterse tan pronto en casa. ¿Los toros? Ni fu, ni fa.. . Eso sí, llena la plaza. i Q ~ é calor! iC6m0 podrán resistir en la solana! Menos mal que ya se acerca mi veranillo en La Granja. Llevas torcido el borrego del collar. Siempre te pasa igual. Deja que yo misma te arregle.

Ríen. Se abrazan. Las dos reinas, impacientes, se acercan para besarla: 1 a reina madre, tan seria.. .; la reina joven, tan guapa.. .

Chicoleo con los nobles, sonrisa a la diplomacia, taconazos del saludo, golpes d e las alabardas.. .

-¡Paso a su Alteza Real la Infanta Isabel de España!

Fuera, en la plaza de Oriente, las violetas pregonaban.. .

- i Y . ."Heraldo1', con la corrida! -iDel Santo, fresquita el agua!

Y un chavea, un raterillo, con la colilla apagada, por calle de Arrieta arriba decía:

-i ¡He visto a la Chata!!

Madrid, 1947

Rafael Gomez "El GalloWentrevistado por Rafael Duyos en el programa taurino "Entre barreras", que dirigía y presentaba el poeta.


C O L O F ~ N REQUENENSE.. .

Para finalizar el recital-homenaje a Rafael Duyos Giorgeta que se anunció con el títu lo "Alforjas para la Poesía, Requena, 2006", celebrado el dos de diciembre de 2006, conmemorando el centenario de su nacimiento (1906- 2006), se han elegido dos de sus varias composiciones, escritas y recitadas por nuestro poeta para S u "siempre querida y admirada Requena ", que dejaron su huella y su voz en ámbitos tan poéticos y exul tantes de historia, honor y "amor vinatero': como son Bodega Honda -en la vieja Villa-, y en el Mesón del V i n o - e n el industrioso y moderno Arrabal-; ambos lugares cargados de nostalgia, pasos, posada, refvigerio, leyenda y "mester de juglaría" -que fue poesía del pasado y del presente en el alma, la pluma y la voz de Duyos, cedidos gratuita y elogiosamente, a perpetuidad a Requena, como m u y bien nos ha recordado María Dolores Grao al recitar la "proclamación amorosa de su entrega": - "Requena, sin ser cuna de mi vida / siéndolo de mis gozos y tristezas.. . / Requena, cerca o lejos, en la noche / de mis nostalgias, siempre tú. .. jRequena!"-

El primero de los poemas seleccionados para este broche final, "En el ámbito de Bodega Honda", es el puro elogio a Rafael Bernabeu y su guitarra; al maestro, historiador, cronista y músico que amenizó algunos de sus recitales, a quien invitaba Duyos -como homónimo, además de en onomástica, en arte, cultura y generosidad- a realizar ensayos conjuntos para gozos a Santa María, abrazados a su guitarra y solicitando, también, sus rimas, a los fantasmas de Gonzalo de Berceo y de Ausias March, "para cantar y requebrar a 'nuestra' Requena con dedos de cordaje y de milagro.. . "

Fue recitado este poema por Rafael Duyos en Bodega Honda, la noche del 23 de septiembre de 1967. La voz de Duyos y los acordes de la guitarra de Bevnabeu robaron a las musas sus encantos para transferirlos a una noche de ensueño, en comunión poética desvelada, llenando de gozo nuestras almas.

Y como segunda y ya final -para este acto- composición poética de Rafael Duyos, nos hemos atrevido a repetir una vez mas las dos estrofns, dos décimas

o espinelns según prefería decir el poeta, que figuran en el atrio del Mesón del V i n o y que con sus dos títulos, "iDetentej " ynjBeber!", invitan y brindan, a la vez, a gozar de la hospitalidad requenense y de su rzqueza fundamental: el vino. Fueron escritns y dedicadas por Duyos en 1959, y desde entonces, lapidaria y atractivamentr -en bella azulejería- aparecen encuadradas a ambos lados de la puerta de entrada interior del establecimiento, de solvente y divulgada fama, sito en la Avenida del Armbal, orgullo de nuestra Ciudad.

Ambos poemas finales fueron leídos por FELICIANO ANTONIO YEVES DESCALZO, quien ya había intervenido e n s u turno de las Alforjas para la Poesía, y dirigido el recital-homenaje a Duyos "a s u leal saber y entender ", quizás por dos motivos: ser el decano -por edad, que no por méritos- entre todos los poetas que intervinieron, y por haber colaborado con Rafael Duyos en ya antiguas sesiones poéticas, tal como la de Alforjas para la Poesía, 1970, e n homenaje al poeta requenense Don Venancio Serrano Clavero, en el centenario de su nacimiento.

" ALFORJAS PARA LA POESLA" REQUENA - 2006

':M EL AMISITO DE BODEGA HONDA .+. . - - . , , . , - - . .- .- --. . .. . - -. .-

Rafael Bernabeu; en tu guitarra que apenas rozan tus sensibles manos, i q ~ é "sterio de escalas musicales g ~ ~ a r d , a s corno celoso enamorado?. . .

Yo soñaba con mis versos junto a tu guitarra, andando por esas sendas de Dios, juglares los dos, marcados por las alas del Arcángel que nos dio el nombre y el hálito; y que aquí, en Bodega Honda habría ñochec de ensayo para pensar en cantares por caminos nunca hollados.. .

Por cierto, Rafael, a tu p i t a r ra abrazados, bajan esta noche aqui los fantasmas de Gonzalo de Berceo y Ausias March.. .

Quiero ir contigo, Rafael, contigo y ellos cantando gozos a Santa María y al amor entre naranjos.. .

Aquí, esta noche, en Bodega Honda comienza el ensayo.. . Y es tu guitarra hecha corazón y manos, la que para saludar al otoño recién nacido con dejos de maitines teresianos, en la madrugada requenense ya con rocío en los aleros de casonas y palacios,

es tu guitarra en esta catacumba vendimia1 la que está ya cantando, cantando, requebrando a mi Requena con dedos de cordaje y de milagro.. .

( En Bodega Honda, la noche del 23 de Septiembre de 1967)

Detente aquí, caminante, en este Mesón del Vino, y dale pausa al camino de Castilla o de Levante. Mira el rosado semblante de este néctar valenciano.. . Requena pone en tu mano el vaso para beber.. . iA gustarlo has de volver desde el rincón más lejano!

¡Beber! j Q ~ é bueno es beber cuando las copas se encuentran y en ese brindis se centran los sueños de hombre y mujer! Y para, al beber, tener el gozo pleno y mejor, hay que sentir el sabor de este vino de Requena, que quita y mata la pena.. . i1a pena del mal de amor!

Rafael Duyos Giovgeta -2959


CONGRATULACIONES :

La organización, realización y el 6xito del recital-homenaje al poeta Rafael Duyos Giorgeta con motivo del centenario de su nacimiento, poniendo en juego el invento poético, simpático y popular de, "Alforjas para la Poesía" -que él tanto quería y celebraba-, precisamente aqui, en Requena, donde tuvo lugar la última de aquellas sesiones poéticas con tal curiosa denominación (28 de agosto de 1970), nos mueve a felicitamos, porque en estas nuevas "Alforjas.. .", resucitadas en su recuerdo y memoria, han concurrido muchos valores, que enaltecieron el acto y lo dejaron grabado para siempre en los corazones de quienes, de una forma u otra -organizando, actuando, asistiendo y escuchando- lo vivieron muy gratamente.

Y sin que suponga "autobombo ni mutuo elogio" -que siempre resultan hipócritas e insinceros-, debernos congratularnos todos de la brillantez, altura, cariño y clamoroso exito logrado; que se debieron a la concurrencia de los valores a que anteriormente nos referimos y que, destacados y recogidos -ya que estamos inmersos e imbuidos en ello- en el ideal búcaro de una "pentaloa" -quíntuple alabanza y alegría-/ procede diversificarla, con gratitud y reconocimiento:

lo A nuestro M. 1. Ayuntamiento -representado por su concejal de Cultura, don Roberto Garda Rodríguez, que presidió, inició y cerró el acto- por haber facilitado el local de la Biblioteca Publica, por el artístico cartel anunciador y por facilitar el equipo de sonido y megafonía, vitales para esta clase de eventos. Y por la colaboración del archivero-biblioteca- rio, don Ignacio Latorre Zacarés, disponiendo la exposición de la obra y otros detalles del poeta homenajeado.

2" A la familia Duyos García -representada por dos de los hijos del poeta homenajeado, Juan y Victoria (acompañada de su esposo), y sus sobrinas Carmen y Soledad-, por su asistencia al acto, que siguieron con la alegría -y la tristeza- de añoranzas y recuerdos gratisimos y entemecedores hasta el punto emocional de escuchar la voz de su padre en la gracia y salero de un romance taurino. Su hijo Luis Manuel no pudo asistir por estar recién operado, pero se ha mantenido muy cercano al acto.

3" A la especial colaboraci6n de la LX Fiesta de la Vendimia, con la presencia de su presidente, dan José Enrique García, y la reina central,

señorita Paula Valiente Viana, que formo parte de la mesa presidencial y actuó como "mano inocente" extrayendo de las "alforjas", una a una, todas las papeletas, rigiendo el orden de actuación de los poetas participantes en este recital-homenaje.

4" Al conjunto y a cada uno de los poetas y admiradores del homenajeado que intervinieron en este acto, movidos todos, por su afición y afección al mundo de las letras y a las musas, prestando su voz y aptitudes para leer o recitar "únicamente poemas del homenajeado Rafael Duyos Giorgeta", renunciando a manifestar su admiración y recuerdo con sus propias creaciones, razón por la que se hizo más digna y encomiable su participación. Su recompensa -ya percibida y gozada al figurar sus nombres junto al del homenajeado-, constará además, para el recuerdo y propia estima, en el indice de poetas y poemas que cierran esta pequeña antología recitada en honor de Duyos.

5" Al publico asistente y seguidor de este evento, que mostró su amor a la poesía y a la cultura en general, conla ejemplaridad y respeto que el acto requería, y porque supo escuchar y aplaudir -no por pura cortesía y educación protocolaria- con emoción y sinceridad el goce espiritual que le produjo cada una de las intervenciones de los poetas convocados y sumados al acto, con entrañable afecto.

La suma de los valores expuestos, parece ser que -según manifestaciones espontáneas-, constituyó en éxito notabilísimo. Resultó tan emotivo, grato y simpático -sencillo y brillante, al mismo tiempo-, que las dos horas de su duración transcurrieron como volandera ráfaga intemporal, dejando, sin embargo, huella, sedimento emotivo, y una amenisima congratulación en todos y para todos.

En verdad, la poesía de Rafael Duyos se hizo sentimiento y admira- ción, se hizo música y espíritu, evocación y singular emoción, recorriendo todas sus escalas y todas sus épocas.. . Creemos que, el propio Rafael, desde su eterno descanso, nos contemplaba, se alegraba.. . y sonreía. Y nos daba las gracias.. .

-¡Gracias a ti, amigo y compañero Rafael!

La Comisión Organizadora del Homenaje a Rafael Duyos


~NDICE ALFABÉTICO DE LOS POETAS PARTICIPANTES, CON LOS POEMAS RECITADOS EN EL HOMENAJE A RAFAEL DUYOS

lo.- Leandro ARENAS DOMÍNGUEZ.- (Actuó en 17" lugar) -Yo no se 10 que es "el mar"

2 O . - Purificación BALLESTEROS MARTINEZ.- (Actuó en 6" lugar) -Romance cristiano-judío

3"- Rafael DWOS GI0RGETA.- La prodigiosa voz del poeta homenajeado en este acto, rescatada por la moderna tecnología, recitó su famoso romance taurino Pepe Luis Vázquez. La suerte de las "Alfor- jas para la poesía, Requena 2006" decidió su actuación en el 7" lugar o turno de este recital

4".-José Enrique EJARQUE EJARQUE.- (Actuó en 1 8 O lugar) - A u t o e p i t a f i o

5".-José María GARCIA AGUAY0.- (Actuó en 14O lugar) -Rimas de Qmor, I

óO.-Marcial GARCÍA BALLESTEROS.- (Actuó en 8O lugar) -Rimas de amor, II

T.-Isabel GARRUDO HERNÁNDEZ.- (Actuó en 13" lugar) -La hora décima

8O.-María Dolores GRAO FERNÁNDEZ.- (Actuó en 4 O lugar) -Pregón XXIlI Fiesta de la Vendimia de Requena y el poema Requencr.

9".-Encarnación HERRERO PÉREZ.- (Actuó en lo0 lugar) -Los perros de Juan y Judas

loo.-Luis LATORRE PÉREZ.- (Actuó en 19" lugar) -La Chata en los toros

1l0.- Manuel LÓPEZ ANDRÉS.- (Actuó en 15" lugar) -Romance de la Víspera de la Boda

l2O.-Antonio MOTOS DOM~NGUEZ.- (Actuó en lo lugar) -Soyolla y la mar

13O.-Rafael MUÑOZ G A R C ~ . - (Actu6 en 9" lugar) -Romance de Mariano Benlliuve (La estocada de la tarde)

14O.-Andrés NAVARRO FERNÁNDEZ.- (Actuó en 1 2 O lugar) -Romancillo taurino de Luis Francisco Peláez

15".-José Antonio NAVARRO HERNÁNDEZ.- (Actuó en 16' lugar) -E2 Barrio Chino de Barcelona

lb0.-Miguel Ángel PLAZA GARCÍA.- (Actuó en 5 O lugar) -Hiros h im

17.- José Luis PRIETO RUIZ.- (Actuó en 3' lugar) -Genaro Lahuerta y Rafael Duyos, Juan Gil Albert y Equilibrio

18.- Isabel SANCHIS M A R ~ E Z . - (ActuO en 2O lugar) -La Plaza de Espaiia

19.-Feliciano A. YEVES DESCALZO.- (Actuó en 1 1" y 20° lugar) -Las manos del Sefior y "Colofón Requenense"


PERFIL BIOGRAFICO DE RAFAEL DUYOS GIORGETA (por Luis Manuel Duyos García)

El médico y escritor Rafael Duyos Giorgeta nació en Valencia en 1906. Su madre, Sofía, era hija de Cesar Giorgeta, el patriarca de la fábrica de Tinta Sarnas, al que aiín recuerda el callejero valenciano. Su padre, Rafael Duyos Sedó, fue un militar de amplia cultura, excelente orador y conferenciante, y consumado esperantista (autor de una de las primeras gramáticas de ese idioma). Su prestigio y preparación le granjearon la confianza del rey Alfonso XIII, que le nombró Gentilhom- bre de Su Majestad y profesor de los infantes. Murió en enero de 1931, unas semanas antes de ser ascendido a general de Infantería.

Rafael Duyos Giorgeta, en su niñez y primera juventud entabló amistad con compañeros que luego serian escritores de renombre: con Juan Gil-Albert, en los escolapios de Valencia, y con Agustin de Foxá y Luis Felipe Vivanco, en los marianistas del Colegio del Pilar de Madrid. Estudió Medicina en la madrileña Facultad de San Carlos, en la promo- ción (1929) de Pedro Arrupe (luego, Superior General de los Jesuitas) y Severo Ochoa (Premio Nobel de Medicina). De esta época universitaria datan sus primeros poemas, con preferencia por los temas taurinos. Sus compañeros, sabedores de su afición poética y de sus dotes declamatorias, aprovechaban cualquier retraso de los catedráticos para animarle a subir al estrado a recitar sus versos. Y en la entrada de la nada romántica Sala de Disección clavaron este breve compromiso lírico de Duyos con la Medicina:

Yo médico seré de un cazatorpedero y he de tomar el pulso de la arteria del mar. Yo médico seré de un avión de ensueño: de las venas del viento la sangre haré pulsar

Que tu pulso y el mío, y el del mar y el del aire, isócronos y limpios, se aceleren de fe. ¡Dios te salve, muñeca del inválido traje! iDe tu cuerpo de alambre yo médico seré ... !

En estos años surge también su amistad con Eduardo Marquina, Carlos Arniches, Rafael Alberti -su vecino del barrio de Salamanca-, José Bergam'n y el grupo que frecuenta la cercana Residencia de Estudiantes -entre ellos, Federico García Lorca-.

Rafael Duyos se especializó en Cardiología en Viena y Heidelberg; y fue el que introdujo en Espafia la técnica del cateterismo, de inspección cardiovascular.

En 1931 puso en Valencia su consulta de cardiólogo, que al caer la tarde se convertía en la redacción de la revista MURTA, dirigida por 61 y Ramón Descalzos. En ella empezaron a publicar sus escritos Max Aub, Plá y Beltrán, Juan Gil Albert ... Se editan entonces sus dos primeros libros de versos: "Toros y pan" y "Cabanyal".

Por sugerencia de sumaestro, el eminente cardiólogo Luis Calandre, en 1932 se trasladó a vivir aTánger como jefe del Servicio de Cardiología del Hospital Español. Marruecos fue su gran deslumbramiento poético. El Tanger multicultural le aportó un caudal inagotable de sugerencias líricas. Afectuoso, extravertido y buen conversador, pronto se integró en la sociedad tangerina, sobre todo entre la numerosa colonia española y en los ámbitos hebreo y musulmán. Se encontró a gusto en una ciudad abierta y mixta, eco lejano de la España medieval de judíos, moros y cristianos. Y aunque él llegaba a Tánger como médico "de última generación", no pudo disimular su condición y vocación de juglar, y a las pocas semanas recibia el nombramiento de "poeta" de la casa de su Alteza Imperial el Jalifa de Marruecos.

En 1934, Rafael Duyos se casó en Valencia con María G. García- Berlanga, con la que tendría seis hijos. Ese mismo año publicó en Tánger, ya residencia familiar, "Fragmentos de cartas jamás escritas".

De 1937 a 1939 residió en Argentina y Uruguay. Sus "Romances de la Falange" se imprimen en Buenos Aires en 1938; y se reeditan al año


siguiente en Valencia, con dibujos de Genaro Lahuerta y Pedro de Valencia. En 1941, sus amigos de Montevideo publican una recopilación de sus poemas rioplatenses en un libro titulado "Junto al Plata". El soneto inicial -"Poetau- sugiere ya una decidida vocación por la poesía, aunque compartida con su profesión de mkdico.

Lo he sentido en la música del viento y en las voces del mar que me llamaba. Lo he visto en el velero que arrullaba la espuma de mi sueño. En el tormento de esconder el amor y el sentimiento por lo que más se quiere. Cuando hablaba la mano en el teclado. Cuando alzaba los ojos, con rubor, mi amor contento. Cuando la puerta se abre sola y gira una mano en la llave y alguien mira y se acerca hacia mí volcando rosas bajo la luna de la noche inquieta ... No los hombres, mujer, sino estas cosas me dicen que he nacido y soy poeta.

En la primavera de 1942, los Duyos dejan su casa de Tánger, regresan a la península y, en otoño, se instalan en Madrid. Ese año, Rafael publica "Siempre y nunca" (Homenaje del Levante al Sur) y, en 1945, "Penumbra", con mezcla de referencias marroquíes, valencianas y de otros ámbitos.

En Madrid reanuda su afición lírica por los toros y publica en 1946, con un bello poema-prólogo de Manuel Machado, "Los ángeles hacen palmas", una de las joyas de la bibliofilia taurina, con dibujos de Antonio Casero, Martínez de León y Roberto Domingo. Forma parte del grupo de "Alforjas para la Poesía", fundado por Conrado Blanco en 1948, que recorre durante &os España entera dando recitales.

Continúa entreverando su consulta médica con la literatura. Escri- be teatro, cine, los libretos de las zarzuelas "Volodia" y "Los cachorros", y letras de pasodobles y canciones ("Dieguito León", "Nana del cabrerillo", "Era una flor", "Enterradme en la playa". . .). Los mejores recitadores -Gabriela Ortega, González Marín.. .- incorporan poemas de Duyos a su repertorio: "Pepe Luis Vázquez", "El Blanquet", "Cielo

Benamor" y el popularisimo romance de "La Chata en los toros". En 1952 se publica en Tetuán su libro "Muecines y campanas", con el subtítulo de "Mis versos a Marruecos". Es generoso pregonero de numerosas celebraciones populares (Semana Santa, fiestas patronales y de la Vendimia.. .).

En 1962, la muerte de su esposa cambia su rumbo vital y literario. Inicia su poesía de temas religiosos: "La hora décima" (1967), "Versos a Roma" (1981), "ATeresa de Jesús" (1982). En 1969, con62 años,ingresa en el seminario de Madrid; y en la Navidad de 1972 es ordenado sacerdote. Unos meses antes, ultimando sus estudios, escribe este soneto, que es mitad balance, mitad búsqueda aún, tras una vida fecunda, apasionada, intensa, contradictoria a veces y polifacética:

Gracias, Señor, por tanto que me has dado -alegría y dolor, gozo y olvido-; gracias por lo que soy y lo que he sido, y por lo que seré con t u cuidado.

De tu mano camino, renovado, como vuelto a nacer, recién nacido, ruiseñor de ala aún corta en torno al nido que Tú mismo, Señor, me has preparado.

Cantaré tu alabanza noche y día. Por Ti, mi pobre verso sera de oro sobre las cuerdas del salterio al viento.

Arpa, timbal y clave y chirimía su fondo musical darán al coro de mis rimas, ya sólo con tu acento..

Rafael Duyos falleció en Madrid el 24 de septiembre de 1983. Esta enterrado en el panteón familiar de Utiel, ciudad valenciana que le habíanombrado hijo adoptivo, honor que tambiénrecibió de Crevillente (Alicante) por su generosa condición de buen amigo y pregonero de su Semana Santa.


Diez años después de la muerte de Rafael Duyos, en la víspera de Nochebuena de 1993, el Centro Cultural de la Villa de Madrid le brind6 un sentido homenaje, organizado por la poetisa Fina de Calderón. Tras sus emotivas palabras de presentación intervinieron los toreros Angel Luis Bienvenida y Pepe Luis Vázquez, y el escritor Fernando Vizcaíno, recordando su admiración y su entrañable amistad con Rafael Duyos. Varios de sus poemas fueron recitados por el poeta y actor Rafael de Penagos, el periodista Matías Prats y el actor y excelente recitador valenciano Francisco Cambres. El poeta de Arcos de la Frontera Carlos Murciano, veterano amigo y compañero de "Alforjas", le dedicó estas bellas décimas:

ESPINELAS DECEMBRINAS PARA PEDIR LA VUELTA DE RAFAEL DUYOS

Tierra adentro . . . j qué silencio! ¡NO, no! i Enbradme en la playa. . . !

En la playa, junto al mar, que azul mediterranea, al compás de la marea y al ritmo del olear. . . allí quiso deshojar la última rosa del sueño quien fuera señor y dueño del verso más encendido. ¡Miradlo ahora dormido en el aire navideño!

Almuédanos y campanas dicen su nombre de arcángel mientras un ángel con ángel repica por sevillanas. Las marquesas, las gitanas, la propia Infanta Isabel y, en medio del redondel, Pepe Luis, el valiente, piden al Dios presidente la vuelta de Rafael ...

Rafael Duyos tenía un gran sentido musical y buen dominio del idioma. Por eso, aunque escribió verso blanco, se inclino sin dificultad por la poesía rimada de "metros" clásicos, desde el alejandrino hasta la seguidilla. Y quizá por sus excelentes dotes de recitador -era Catedrá- tico Honorario de Declamación del Conservatorio de Valencia- abunda también en su obra la poesía como "mester de juglaría", como el arte oral que fue al principio: De ahí que, en sus poemas recitables, para ser escuchados, emplee adrede un vocabulario llano y directo, sin conceptismos, entendible a la primera.

Sobre su obra poética anda pintado el arco iris que unifica su vida compleja de médico, escritor y sacerdote. En el amigable aroma de sus versos se adivina que sus tres oficios no fueron tan distintos, tan distantes. En los tres se dedicó a salir de sí mismo para volcarse en el otro, en "lo otro", para conocerlo y amarlo. A lo mejor por eso dijo en una entrevista, al estrenarse como sacerdote, abandonando la Medicina: "Todo me resulta bastante familiar: sigo preguntándole a la gente dónde le duele., . ".

Seguro que la lectura de sus poemas suscitará un ramillete de grato bienestar, por la fuerza evocadora y la luminosa belleza de sus versos.


(Diario ABC, 8 de diciembre de 2000)

ALFORJAS PARA EL RECUERDO -Luis Manuel Duyos-

<<PARTIR>> no siempre es "morir un poco», en contra de lo escrito por Haraucourt en su «Rondel de 1°adieu». Hace algo más de medio siglo, en mayo de 1948, el escritor burgalés Conrado Blanco se inventó una manera de viajar con el alma entera en las alfo jas, la única forma de emprender el camino sin partir, sin partirse ...; que a esa pena escondida entre los adioses deben de aludir la palabra partida y la metáfora del Rondel. Retornando la vida de juglares y trovadores -y de los «Jocs Florals» de la Renaixenca-, Conrado convocó a sus amigos los poetas, de cualquier signo, para que le acompañaran a declamar sus versos por los pueblos y ciudades de España. Todos -siempre un grupo de media docena al menos- emprendían el viaje pletóricos, con el corazón empapelado en sus cuartillas recién escritas, entre el latido sereno de una espinela y la arritmia de una seguidilla. Y desparramaban generosamente sus poemas, como en la sementera a voleo.

Con tan ligero y, a la vez, colmado equipaje, el grupo -siempre con el mecenazgo de Conrado Blanco- se llamó aAlforjas para la poesía». Y

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las alforjas eran de verdad. Colgaban del respaldo de una silia, situada en el proscenio de cada teatro. En uno de sus bolsillos figuraba en papeles plegados el nombre de cada uno de los poetas presentes, sentados en semicírculo. Después del «bando » del pregonero, en prosa o en verso, Conrado sacaba de la alforja, al azar, un papel y leía en voz alta el nombre. Era el rito que establecía el orden de actuación. Entre pregoneros y recitadores pudimos ver y escuchar nada menos que a Marañón, Baroja, Benavente, Concha Espina y su hijo Víctor de la Serna, D'Ors, Pemán, Del Valle, Jardiel, Dicenta, José Carlos de Luna, Ruano, Foxa, Luca de Tena, Gerardo Diego, Cela, García Nieto, Panero, Benitez Carrasco, Albareda, Garfias, Manolo «El Pollera», Medrano, José J. Aleixandre, Anglada, Murciano, Vegas, Ochaíta, Martínez Rernis, Castelo, Alcántara.. y a muchos más, inolvidables, como el propio Conrado. Fueron varias pleyades de escritores. Algunos de ellos, de la Real Academia Española y galardonados -entonces o después- con el Premio Nacional, el Cervantes, el Nobel.. .

En aquellos recitales «de baldes -en Madrid, en el Teatro Lara-, la poesía trazaba un mágico viaje de ida y vuelta. Se rescataban los versos de su papel impreso o manuscrito; se escuchaban en la voz de su autor y se regresaba a casa con la adicciói~ incurable a la lectura de los poetas. Miles de españoles fueron y son lectores de poesía porque tuvieron la suerte de asistir a alguna sesión de «Alforjaso.

La literatura española de esta centuria que termina está en deuda con aquellas matinales nacidas en el Teatro Lara. Conrado Blanco murió hace dos años, casi en el olvido, unas semanas después de cumplirse medio siglo de sus ciAlforjas*, que aún no se han evocado como se merecen. Da lo mismo, Conrado; porque, como dijo uno de tus cabales «al forjeros>) -de cuyo nombre no quiero olvidarme-,

K.. en un mundo en que todo llora desintegrado ríe e1 átomo intacto de nuestro verso en flor...)).

Sesión d e A Iforjas para /a poesía (prima vera de 197 1) en homenaje a Pastora Pa von, 'La Niña de los Peines" (fallecida en 7969)) una de las mejores y mis completas cantaoras de todos los tiempos, tan extraordinaria como su hermano Tomás y SU marido Pepe Pinto. En el centro de la imagen, de pie, Rafael Duyos. Detrás de él -en un tercer plano-, Rocío Jurado, excelente fandanguera. De ~zquierda a derecha, Gerardo Diego, Federico Muelas (tras la silla con las alforjas), Juan Ignacio Luca de Tena, Francisco Garfias y Manuel Alcánfara. A la derecha del escenario -a continuación del busto de Pastora-, Conrado Blanco, Ginés Albareda y José García Nieto.


INDICE

PREAMBULO 7 1.- SOROLLA Y LA MAR 11 2 .-LA PLAZA DE ESPAÑA 17 3 .-a) GENARO LAHUERTA Y RAFAEL DUYOC 21

b) JUAN GIL ALBERT 21 c) EQUILIBRIO 21

4.- a) PREGÓN DE LA XXIII FIESTA DE LAVENDIMIA DE REQUENA ( F r a p e n to final) 25 b) REQUENA 25

5.- HIROSHIMA 31 6.-ROMANCE CRISTIANO-JUDí0 41 7.- PEPE LUIS VÁZQUEZ 44 8.- RIMAS DE AMOR (1) 50 9.- ROMANCE DE MARIANO BENLLIURE

(La estocada de la tarde) 57 10.- LOS PERROS DE JUAN Y JUDAS 65 11 .- LAS MANOC DEL SENOR 71 12.- ROMANCILLO TAURINO DE LUIS FRANCISCO PELÁEZ- 77 13.- LA HORA DÉCIMA 83 14.- RIMAS DE AMOR (11) 87 15.- ROMANCE DE LA "VÍSPERA DE BODA" 93 16.- EL BARRIO CHINO DE BARCELONA 97 17.- YO NO SE LO QUÉ ES "EL M A R 105 18.- AUTOEPITAFIO 109 19.- LA CHATA EN LOS TOROS 115

20.- COLOF~N REQUENENSE.. . 127 ÍNDICE ALFABÉTICO DE LOS POETAS PARTICIPANTES 133 PERFIL BIOGRÁFICO DE RAFAEL DUYOS GIORGETA 135

ALFORJAS PARA EL RECUERDO 141

Explicit hic totum. Frater Raphael, pro Christo, da mihi potum. Presens codex est explicitus ánno duo millesirno VI1

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