Deporte y competición; The UNESCO courier: a window open...

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Amigos lectores, para esta secciónconfluencias, envíennos una

fotografía o una reproducción de unapintura, una escultura o un conjuntoarquitectónico que representen a sus

ojos un cruzamiento o mestizajecreador entre varias culturas, o bien

dos obras de distinto origen culturalen las que perciban un parecido o una

relación sorprendente. Remítannoslas

junto con un comentario de dos o treslíneas firmado. Cada mes

publicaremos en una página enterauna de esas contribuciones enviadas

por los lectores.

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EL ACRÓBATA

1991, grabado en acero (25 x 33 cm

de Francis Hunglerly^rY^

El artista francés Francis Hungler grabó en la lámina de una sierra hallada en un desván una

figura acrobática, inspirada en el arte hindú. En este espacio compuesto de formas

geométricas primordiales cuadrado, triángulo ve una imagen que resume eldestino del hombre, donde "equilibrio perfecto y punto de ruptura son una misma cosa".

AT Entrevista

Susana Rinaldiresponde a las preguntas de Femando Ainsa

Este númeroDICIEMBRE 1992

Deporte ycompetición

8 Editorial de Bahgat Elnadi y Adel Rifaat

9 Un concepto multiforme

por Pierre Henquet

14 El dinero del deporte

por Jean-François Nys

16 Tarjeta roja para el balón de fútbol

por François Thébaud

Nuestra portada:

Imagen realizada con computadora

para este número de El Correo de la

Unesco por el artista argentino

Ezechiel Saad.

Portada posterior:

Plancha a vela sobre la nieve,

Islandia.

Las islas en gloria ymajestad: Derek Walcott,Premio Nobel de literatura

1992

por Edouard J. Maunick

20 Brasil: un buen juego de cintura

por Roberto DaMatta

22 La Unesco lleva la delantera

31 El doping, un artificio inútil

por Miguel Angel Bermúdez Escobar

23Area verde

34 Rusia: final de juego

por Alexei Srebnitski

Consultor especial:

Fawzi Mahjoub

37 ¿Tiene el deporte una moral?

por Michel Caillât

41 Juegos y deportes tradicionales

por Roland Renson

47La crónica de

Federico Mayor

"Los gobiernos de los Estados Partes en la presente Constitución, en nombre de sus pueblos, declaran:

. _ . . .. .. . | « Que, puesto que las guerras nacen en la mente de los hombres, es en la mente de los hombres donde deben erigirse los baluartes de la paz;Gl ^^V^l\.l\C*V_y (...) Que, una paz fundada exclusivamente en acuerdos políticos y económicos entre gobiernos no podría obtener el apoyo unánime,-a??*^*^j- í-I IMF^i Cm sincero y perdurable de los pueblos, y que, por consiguiente, esa paz debe basarse en la solidaridad intelectual y moral de laHHH UeidUlNLJVJ»^ humanidad.

Por estas razones, (...), resuelven desarrollar e intensificar las relaciones entre sus pueblos, a fin de que éstos se comprendan mejor

Año XLV Revista mensualpublicada ' entre sí y adquieran un conocimiento más preciso y verdadero de sus respectivas vidas."en 33 idiomas y en braille Tomado del Preámbulo de la Constitución de la Unesco, Londres, 16 de noviembre de 1945

Correo

ENTREVISTA

SUSANA RINALDIresponde a laspreguntasde Fernando Ainsa

Susana Rinaldi, una de las

voces femeninas más

célebres del tango, nos habla

aquí del origen y la evolución

de esta compleja expresión

musical y poética que, nacida

en el crisol cultural del Río

de la Plata, canta temas

eternos y universales: la

soledad, el tiempo, el amor,

la muerte. Como un

reconocimiento por su acción

en favor de los ideales de la

Organización, la cantante

argentina ha sido nombrada

este año embajadora de

buena voluntad de la Unesco.

Usted era ya una conocida actriz de teatroy televisión cuando inició su carrera comointérprete de tango. ¿Cómo y cuándo nacióesa vocación que le ha dado renombre inter-nacionaH

Empecé a bailar y cantar tangos a loscuatro años. Luego, en mi vida de estudianteme divertía cantar en reuniones y fiestas.Claro que, como a todos los jóvenes de migeneración, me entusiasmaron también losboleros, el rock y los Beatles. Al ingresar enla Escuela de Arte Dramático olvidé esa afi¬

ción juvenil. Durante años estudié y trabajécomo actriz de teatro, hasta que en 1966 unaempresa grabadora me propuso registrar undisco con poemas del poeta español MiguelHernández. Lo rechacé porque me parecióque siempre lo haría peor que María Casaresque había grabado un disco similar. Propuseen cambio cantar tangos. Para mi sorpresalos empresarios de la grabadora se mostraronentusiasmados. Así apareció mi primer disco,donde ya están presentes temas que seríanluego muy familiares para mí: Melodía dearrabal, María, Sur.

Desde entonces me he interesado porrecuperar esa tradición del tango que hace dela injusticia, pero también de la soledad delos hombres y las mujeres de las grandes ciu¬dades, su tema principal. Trato de insuflar enesa música la dimensión humana del argen¬tino, esa solidaridad que ya no existe enmuchos países del mundo y que es la granvirtud de mi pueblo.

Durante la dictadura argentina, entre1976 y 1982, difundí el tango fuera de mipaís, sobre todo, un repertorio desconocidoen Europa, donde se tenía del tango laimagen de una danza sensual y espectacular,pero se ignoraba su sentido profundo comototalidad: música, danza y letras, y sobretodo su dimensión poética.

Precisamente, ¡cómo definiría usted eltango, un ritmo musical, una danza...?

El tango es, antes que nada, música y unamúsica muy característica, que se reconoce deinmediato, a diferencia de otros ritmos lati¬

noamericanos que el neófito puede confundir.Pero es algo más que música. Sus letras sontextos literarios que conforman una verda¬dera "poética", de ahí que pueda hablarse deuna "visión del mundo" a partir del tango.Además, el tango es danza. Ese gran creadorde tangos que fue Enrique Santos Discépolodio tal vez la definición más exacta: "Es un

pensamiento triste que se baila."

Fuera del Río de la Plata se piensa quepara bailar el tango hay que ser un iniciado...

En verdad bailar tango es un arte lleno devirtuosismos: cortes, quebradas, sentadas,pataditas y lustradas, pasos codificados,ritualizados. El cuerpo del bailarín de tangose divide prácticamente en dos. La partesuperior permanece casi inmóvil, mientras laconcentración de la danza se realiza en la

mitad inferior. A causa de esta división cor¬

poral, en sus orígenes se le acusó de serlúbrico y sensual.

Me atrevería a decir que el tango supone,incluso, una manera de andar y no sólo debailar. Ante la llanura y su horizonte infinito,ante la inmensidad agresiva de la ciudad, el

hombre de Buenos Aires experimenta unacierta melancolía que inspira el ritmo de suspasos y se traduce en la cadencia secreta deltango. Se trata de una danza dramática,introspectiva. Como observa Sábato, un ita¬liano que baila la tarantela lo hace para diver¬tirse; el porteño baila un tango para meditaren su suerte y rumiar su amargura.

En el mundo entero el tango se identificacon el que fue su intérprete máximo: CarlosGardel.

Sí, y ello es así porque el tango, porúltimo, es un arte interpretativo. Los grandesartistas, como Gardel, tienen un "estilo", una

manera peculiar de cantar el tango. En eseestilo hay incluso un manierismo y una exa¬geración de las posturas (que es resultado dela evolución de las letras de tango: cada unaha tenido que ir más lejos en la definición delos tópicos ya existentes). Esos estereotiposhan definido durante años lo que se entendíapor tango. El intérprete debía inevitable¬mente parecerse a Carlos Gardel. El mito de"Carritos", "el Mago", condicionó el com¬portamiento, la apariencia física (vestimenta,peinado, sonrisa) de todo cantor que aspiraraal éxito. Al mismo tiempo, el intérprete detangos debía reunir los atributos de lasfiguras arquetípicas del "compadrito", del"taita", en suma, del varón tanguera.

Hay un "cliché" del argentino que des¬cribe muy bien Julio Cortázar en su novela62, Modelo para armar: el hombre madurode sienes plateadas, peinado a la gomina yvestido con un traje cruzado a rayas.

El tango da, en efecto, una fisonomía muypeculiar al que lo vive, pero que va más alláde los signos exteriores, de la vestimenta.Hay que decir que esta música nacida en lossuburbios llegó a convertirse en una marcade identificación nacional, dentro y fuera desus fronteras. Como afirma Horacio Arturo

Ferrer, autor de letras poéticas de innume¬rables tangos contemporáneos, el tango es unestado de alma específico de la cultura riopla-tense. Por eso, decir, como algunos jóvenesque viven al ritmo del rock, que el tango "ya

no está de moda" es ignorar que el tango esuna expresión de la identidad cultural de unpueblo. Y esa manera de ser sigue existiendo,está viva y se respira en las calles de BuenosAires. En otros países podrá ser una moda,pero en el Río de la Plata es parte de nuestraidiosincrasia.

Tanto en sus aspectos positivos comonegativos, el tango es la mejor expresión dela cultura rioplatense y de cierto escepti¬cismo frente a la vida, de una actitud nostál¬

gica y decadente del que no cree o que nuncaha creído en nada, del que "está de vuelta sinhaber ido" a ningún lado.

Ese tono pesimista es casi como la marcade fábrica de numerosos tangos...

En verdad casi todas las canciones popu¬lares del mundo prefieren los temas tristes odesesperanzados a los alegres u optimistas.La esperanza anima sobre todo las cancionesde contenido político que inevitablementedeben ser optimistas, un optimismo quesuena en ocasiones artificial o falso. Claro

que el tango ha ido a veces demasiado lejosen esa visión pesimista de la vida.

Un tango como Cambalache, donde sedice que "el mundo fue y será una por¬quería" y que "el siglo veinte es un des¬pliegue de maldad insolente", donde resultaque "es lo mismo ser derecho que traidor,ignorante, sabio, chorro, generoso, esta¬fador", ha hecho daño, porque para eludirresponsabilidades el argentino se ha apoyadoen la idea de que nada vale la pena porque"todo es igual; nada es mejor; lo mismo unburro que un gran profesor". Esta filosofíade la existencia justifica la actitud negativa yla inacción. La culpa es siempre de los"demás", nunca de uno.

¿Cree usted que esa filosofía de la exis¬tencia está determinada por los orígenesmismos del tango, la nostalgia del inmi¬grante, el resentimiento del nativo, la faltade valores estables en un mundo en rápidatransformación...?

Se ha hablado y discutido mucho acerca delorigen del tango... La música popular de

América Latina es en buena parte el resultadode la transculturación de ritmos europeos delsiglo XIX adaptados y "mestizados" conritmos indígenas y africanos. Las variantescontinentales del vals son un buen ejemplo.El famoso vals vienes se transforma en el vals

Boston, bailado más lentamente en la costaEste de los Estados Unidos, en el vals criollodel Río de la Plata, en la "valsa" brasileña o

en el típico vals peruano. La mazurca seamericaniza en el "pericón oriental" de losuruguayos, en la "mazorca" y las "refalosas"de la época de Rosas en la Argentina. Laspolcas, en las polcas paraguayas.

Hay en el tango una transculturaciónsimilar, pero su origen es algo más complejo.Nace en ciudades-puerto como Montevideoy Buenos Aires, y por lo tanto es una músicade aluvión, un río formado por muchosafluentes, donde se mezclan aguas turbias,sustancias orgánicas y espirituales, barro yarena. ¡Vaya uno a saber de dónde procedenesos ritmos y cuántas coincidencias se handado para que el tango fuera rioplatense yfuera lo que es!

Es evidente que contribuyen a su génesisritmos africanos, como el candombe, otrosamericanos como la habanera y el danzón, yritmos europeos como el tango español,sobre todo el llamado tango andaluz, can¬tado con temas y aire de "cuplé". Todos ellosforman el humus de una música que empiezaen los llamados bailes de negros en Monte¬video, en los burdeles y los "piringundines"de Buenos Aires, esos bailes de medio pelo,"lugares de diversión donde concurrengentes de costumbres dudosas", como losdefine el Diccionario de la Academia del

Lunfardo. Es interesante notar que hayordenanzas de la época colonial en la BandaOriental que reglamentan las reunionesdonde se bailan los "tangos de negros".

El verdadero enigma es saber cómo coa¬gulan todos estos ritmos en lo que será eltango. No puede hablarse de una fecha pre¬cisa de nacimiento, pero lo cierto es que estamúsica pasa rápidamente a ser un baile de lossuburbios, del típico "arrabal" donde se dancita los gauchos, la soldadesca y las gentes demal vivir.

A partir de 1870 se produce un nuevofenómeno. Al Río de la Plata llegan oleadasde inmigrantes. Muchos van a vivir haci¬nados en casas de inquilinato, los llamados"conventillos". En 1887 61% de la poblaciónde Buenos Aires es extranjera, y en la franjade edad de- los 30 a los 44 años, por cadaargentino hay siete extranjeros. Un 20% de

la población vive en esos "conventillos"donde coexisten culturas muy diversas. Deese mundo habla precisamente El tango de lacasera, un tango de fines de siglo y uno delos primeros con música y letra de autorconocido.

El primer tango nacido en el suburbioque va a ser aceptado por la "buenasociedad" es La morocha, cantado en 1910

por la uruguaya Flora Rodríguez de Gobi,madre del gran violinista Alfredo Gobi. A sudifusión contribuye sin duda la aparición deldisco fonográfico en 1906. Pocos años des¬pués tenemos un tango como El entrerriano,compuesto por Rosendo Cayetano Men-dizábal, pianista en un burdel, donde ya sereconoce el ritmo contemporáneo.

A fines del siglo pasado el tango tiene yasus "academias", sus salones consagrados debaile, sus "milongas", cabarets criollosdonde la pasión tanguera llega hasta eldelirio. El baile se vive allí como una compe¬tencia entre compadritos que trazan ara¬bescos en el piso de tierra o sacan "viruta" alos tablones de pino con sus botines de tacofrancés. Es también el centro de reunión de

inmigrantes y nativos, de origen social muydiverso. Allí van los marineros de paso, los"niños mal de familia bien", los "jailaifes"(del inglés high life) que buscan emociones ylos "calaveras", solterones o casados en

busca de aventuras fáciles, todos atraídos porel tango y por la atmósfera de los lugaresdonde se bailaba. En esos verdaderos santua¬

rios del "bajo", algunos de cuyos nombres serecuerdan todavía con nostalgia, se define ycristaliza la mitología del tango. Allí se forjantambién muchos de los estereotipos quesiguen vigentes hoy en día.

Se diría que esos estereotipos siguen gus¬tando a la gran mayoría del público y quefuera del tango de la "guardia vieja" nohubiera otraposibilidad.

La televisión, la radio e, incluso, la publi¬cidad han apostado a una imagen nostálgicadel tango e insisten en la idea de que todotiempo pasado fue mejor. Como decía laescritora argentina María Elena Walsh, "sólo

quien no fue mujer ni trabajador piensa queel de ayer fue un tiempo mejor".

Mientras los medios de comunicación no

difundan un repertorio actual, es decir lascanciones que reflejan la realidad de laArgentina de hoy, seguirá existiendo un grandivorcio entre la sociedad real y su expresiónmusical. No es extraño, entonces, que lajuventud considere al tango como algo ana¬crónico, una música de "viejos" en la que nose reconocen ni perciben los signos y losmitos de su tiempo. Sin embargo, el nuevorepertorio existe, pero no se difunde porrazones comerciales, y sobre todo por laincapacidad de apostar a lo nuevo.

Hay tangos que cantan temas actuales,que pintan en breves brochazos las cosassimples y sencillas de la vida, las calles deBuenos Aires, las alegrías y tristezas de loshombres y mujeres de las grandes ciudades.Tangos que exaltan la imaginación y la fan¬tasía aplastadas por la rutina o la medio¬cridad, como Balada para un loco, deHoracio Arturo Ferrer, donde cada verso esuna metáfora que canta a los nuevos Qui¬jotes del mundo urbano que en vez de unyelmo llevan medio melón en la cabeza y dos

banderitas de taxi "libre" levantadas en las

manos en lugar de escudo y lanza.

Muchos escritores, de Roberto ArltajulioCortázar, pasando por Ernesto Sábato yJorge Luis Borges, se han sentido atraídospor el tango.

La gran riqueza del tango es la posibilidadde tener letristas tan opuestos como JorgeLuis Borges (autor, por otra parte, de unpoema titulado "Tango"), y de un autorpopular como Homero Manzi. El tango hapermitido el encuentro de Ernesto Sábato yde compositores que han musicalizado susobras. Ha estimulado la reflexión de

ensayistas como Ezequiel Martínez Estradaque le consagra un capítulo de su obra Radio¬grafía de la pampa o de Vicente Rossi, inves¬tigador de las influencias africanas. El tangoes el motivo de la poesía de EnriqueGonzález Tuñón. Y escritores como Baldo¬

mcro Fernández Moreno y Petit de Muratson letristas de varias canciones. Algunosautores de tangos como Homero Expósito,lector de Homero, de Baudelaire, de Góngora,son un ejemplo del "letrista letrado". Yo, porejemplo, canto canciones de otro poeta,Héctor Negro, que es un excelente letrista.

Usted lleva años luchando para imponernuevos valores.

Hay que saber buscar y equilibrar unrepertorio. El esfuerzo para no ceder a lafacilidad del éxito asegurado de antemanodebe ser constante. Yo podría cantar siempreSur, El motivo, Tinta roja.... Sin embargo,no lo hago porque me siento obligada hacialos autores y los compositores de mi tiempo.

Los grandes intérpretes se han tomadosiempre el trabajo de volverse hacia el pasadoy, simultáneamente, de apostar a lo nuevo yapropiárselo. Carlos Gardel, por ejemplo,hizo una severa revisión del repertorio querecibió como legado, dejando de ladomuchos éxitos y descubriendo valores igno¬rados. Cantó viejos temas de una maneradiferente, e incorporó otros nuevos. Peropara él tampoco fue fácil. No hay queolvidar que Carlos Gardel sólo tuvo un reco

nocimiento postumo en la Argentina. Mien¬tras triunfaba en Europa y en EstadosUnidos, apenas llenaba dos filas de platea enlas salas donde actuaba. Como él mismo

decía: "A Buenos Aires hay que aprender aquererla de lejos."

He procurado hacer lo mismo en rela¬ción con mi tiempo. Por ejemplo, he rehabi¬litado al poeta Cátulo Castillo, excelenteletrista de los años cuarenta y cincuenta,autor de piezas teatrales de éxito como Elpatio de la morocha, pero al que se relegó alolvido y se consideró injustamente un autorpintoresco y superficial. Sin embargo, creóun vocabulario que ha quedado incorporadoen el lenguaje porteño. Si no hubiera editadoen los años sesenta mi long-play Trova, Cas¬tillo habría conservado la etiqueta que lehabían endilgado veinte años antes. Creo quela tarea de cada generación es hacer unarelectura del pasado que pueda ayudar aentender mejor el presente.

Yo misma, que vengo del teatro, intentodestacar en cada tango la historia que relata ynada más, eliminando la carga de tópicos conque se ha cubierto a lo largo de los años yque, en definitiva, ocultan su significado pro¬fundo. No hay una manera preestablecida decantar los clásicos; hay sólo una historiaesencial que hay que recuperar en cada caso.

El hecho de ser mujer, ¿no ha supuestopara usted una dificultad suplementaria?

Desde sus orígenes el tango ha tenidointérpretes femeninas extraordinarias, autén¬ticas artistas como la pionera Rosita Quiroga,pero todas ellas han cantado siempre historiasde hombres, historias contadas "por" y"para" los hombres, donde la personalidad dela mujer quedaba velada. Ahora la evolución,diría incluso la verdadera revolución, es la

presencia de la mujer como letrista y compo¬sitora. Eladia Blásquez, Carmen Guzmán,Margarita Duran, Mangui, cuentan historiashumanas con las que cualquiera, varón omujer, puede identificarse. Escriben y com¬ponen como seres humanos y no en funciónde arquetipos femeninos o masculinos.

La verdad es que a mí, como intérprete,

me gusta "vender", en el mejor sentido de lapalabra, esas historias escritas y compuestaspor mujeres. Las he incluido en mi reper¬torio porque dan otra dimensión al tango,más allá de los tópicos clásicos. Hay en esasletras una metafísica existencial muy dife¬rente de la de la "guardia vieja". Tambiéndesde el punto de vista musical los tangos dela "nueva guardia" rompen esquemas e ideaspreoconcebidos. Un compositor como AstorPiazzolla ha marcado una línea armónica

muy fuerte, al punto que ninguno de loscompositores jóvenes, aunque lo pretenda,puede escapar a la vía que él trazó. Ya nadiepuede componer en armonías rígidas, alestilo de los años cuarenta.

¿Cree usted que el tango puede todavíadecir algo a las nuevas generaciones?

Mi gran preocupación como intérprete eslograr que los jóvenes aprecien el tangocomo algo actual, como una música capaz dereflejar problemas y preocupaciones de hoy,y no como una música de "viejos". ¿Cómoenseñarles a escuchar esta música siemprevigente y, sobre todo, a descubrir la granpoesía de muchas de sus letras? Estoy segurade que un cabal conocimiento de nuestra tra¬dición musical ayudaría a resolver natural¬mente muchos de los problemas actuales dela sociedad argentina. Trato de decir todoesto cantando, porque creo que es mi modode luchar en favor de lo que creo. Ö

EDITORIAL

8

El deporte se ha convertido en un lenguaje universal. Nadie se sustraea su influjo, en un momento u otro de su vida, como forma deesparcimiento, de cultura física o de superación de sí mismo.Concierne a todas las sociedades, como fenómeno de masas, motivo

de entusiasmo colectivo y a veces instrumento de integración social. Yen ciertas circunstancias copas del mundo, juegos olímpicos

burla todas las fronteras políticas o ideológicas y logra la comunión,en un mismo fervor, de casi mil millones de personas, es decir de unpúblico planetario.

Pero la mundialización del deporte sólo se ha conseguido dando

cada vez más importancia a un aspecto específico de éste, lacompetición, y más concretamente a la alta competición, en perjuiciode sus elementos lúdicos y educativos, y supervalorando en definitivaun número limitado de disciplinas espectaculares. Ello ha acarreado a

su vez una mediatización y una comercialización crecientes de lasproezas deportivas.

De ahí las desviaciones que se observan estos últimos años: la

profesionalización a ultranza que conduce a una especializaciónprecoz de los atletas, provoca en ellos un agotamiento excesivo yllega incluso a inducirlos al dopado; el afán de lucro ligadoindisolublemente a las proporciones gigantescas que ha cobrado el

espectáculo deportivo de masas; la irrupción del sectarismo, cuandono del chovinismo, resultante de un espíritu de competiciónexacerbado y utilizado, de manera más o menos irresponsable, comoun derivativo frente a las frustraciones sociales o nacionales.

Para algunos todo ello justifica una condena del deporte mismo.Pero sería olvidar que, más allá de sus excesos, el deporte es ysigue siendo para la mayoría de los hombres una fuente

irreemplazable de perfeccionamiento a la vez que una magníficaescuela de convivialidad, una forma por demás civilizada deconfrontación individual y colectiva. Basada en la sutil alquimia de unesfuerzo en que el deseo de ir más lejos que el otro se expresa en el

respeto absoluto de reglas que son las mismas para todos, lacompetición termina por acercar a los adversarios, haciendo quevictoria y derrota se fundan en un mismo amor al arte practicadoen común.

Para la Unesco, una de cuyas misiones es velar por la pureza delos valores éticos que sirven de base al deporte, éste seguirá siendoun vector indispensable de fraternidad planetaria mientras conserve,para la mayoría de los hombres, ese carácter de "escuela de nobleza"que según Pierre de Coubertin, hace ya cien años, constituía suvocación primordial.

Bahgat Elnadi y Adel Rifaat

Spiros Louis,

el pastor griego que ganó la

maratón en las primeras

olimpiadas modernas, en

Atenas en 1896.

¡Iñ (OneptO multiforme por Pierre HenquetEL deporte ha cobrado un auge extraordi¬

nario a lo largo de este siglo y en losúltimos treinta años se ha universalizado.

Sus analistas y sus partidarios, ya sean políticos,investigadores, periodistas o directivos, sos¬tienen que se trata de uno de los aspectos princi¬pales de la cultura contemporánea, un camposocial por derecho propio, una pieza clave de laestrategia política o un factor económico de pri¬mera categoría. Pareciera tratarse, en resumidascuentas, de un fenómeno determinante de

nuestra época. Hay quienes, aun más entusiastaso más líricos, no vacilan en afirmar que es eldenominador común del género humano, laforma sublimada del capitalismo competitivo, elsistema más accesible de comunión colectiva o,

por citar las palabras de Pierre de Coubertin,

fundador de las Olimpiadas modernas, "el máspoderoso fuego que abrasa a la humanidad".

Concepto proteiforme, técnica, esparci¬miento, institución y mito a la vez, el deporteinteresa a los estudiosos de las numerosas disci¬

plinas que constituyen lo que se conoce como"ciencia del deporte", aun cuando pueda parecerque linda con lo irracional. No faltan las másvariadas definiciones, muchas veces parcialescuando no incompletas, y han surgido polé¬micas, casi siempre artificiales o de tipo semán¬tico, acerca de qué lo separa o distingue deljuego, del ejercicio físico, de las prácticas corpo¬rales, de la educación física o de la cultura física.

La UNESCO, por su parte, tanto en su programacomo en el texto de la Carta Internacional pro¬mulgada en 1978, alude a una sola entidad

Encendiendo la llama

olímpica en la ceremonia de

Inauguración de los Juegos

de Verano en Barcelona, en

1992.

10

conceptual que engloba "la educación física y eldeporte".

Magnitud y desequilibrio del

movimiento deportivo

En estos últimos años ha aumentado incesante¬

mente la función institucional del deporte, queen la mayoría de los países ha dado lugar a lacreación de un sistema deportivo administradoconjuntamente por los poderes públicos y lasorganizaciones voluntarias. Este sistema, con sucarácter benévolo y su inagotable capacidad desacrificio, constituye seguramente el movi¬miento asociativo más importante por sunúmero de adhérentes. Entre el 15% y el 70%de la población, según los países, practica regu¬larmente algún deporte, con o sin monitor, y,según cálculos fiables, hay en el mundo más demil millones de participantes. Para algunos', eseimpresionante conjunto que comprende unamultitud de clubs, ligas y federaciones en elplano local, regional, nacional e internacional esuno de los pilares de la democracia concreta, un

Festejando el gol del equipo

de Camerún en la Copa del

Mundo de Fútbol, Ñapóles,

1990.

aprendizaje del pluralismo democrático parti¬cularmente bien adaptado a las necesidades delos jóvenes, que suelen ser mayoritarios.

Ahora bien, el acceso a la educación física yel deporte que, según proclama la Carta Inter¬nacional, constituye un derecho para todos,dista mucho de ser umversalmente disfrutado.

El mapa del subdesarrollo deportivo coincide,con algunos matices, con el del mero subdesa¬rrollo. En muchos países del Sur, cuatro decada cinco jóvenes no tienen la posibilidad depracticar una actividad física o deportiva.

No obstante, más allá de las diferencias ydesigualdades, que dicho sea de pasotienden a acentuarse, el deporte se ha democrati¬zado enormemente: minoritario y marginalcomo era hace menos de cien años, se ha conver¬

tido hoy en día en un fenómeno de masas que, sise utiliza con fines políticos, puede ser un mediopara fanatizarlas e infantilizarlas.

Entre la tradición

y la modernidad

Hijo del juego y, sobre todo, de los juegos decompetición (así como los juegos de imitacióny de ilusión prefiguran las artes del espectá¬culo), el deporte, para que siga siendo juego,debe vivirse y entenderse como "una actividadlibre y desinteresada del hombre libre", segúnpalabras de René Maheu, ex Director Generalde la UNESCO, para quien representaba la caba¬llería de los tiempos modernos, y que agregabaque "el deporte que se parece al trabajo no esdeporte". La evolución reciente del deporte dealto nivel, ilustrada por la renuncia a la prácticapor mera afición (concepto que ha desaparecidode la Carta Olímpica), hace temer que elaspecto lúdico se vaya olvidando y que eldeporte de competición sea cada vez más pare¬cido a un trabajo o a una profesión como cual¬quier otra. Para el atleta que se somete a todaslas penosas obligaciones derivadas de las téc¬nicas de entrenamiento modernas, el deportedeja de ser una diversión para convertirse enuna agotadora faena, en un pernicioso excesode trabajo. Algunos análisis más sutiles ponende relieve la ambigüedad del deporte, unasveces juego y otras trabajo, trabajo jugado yjuego trabajado al mismo tiempo. Para otros, eldeporte guarda estrecha relación con el juego,en la medida en que siga siendo una actividadgratuita. Pero, ¿acaso no ha dejado de serlo?¿No reciben públicamente principescas remu¬neraciones los campeones de los deportes tele-génicos?

Este comentario no se refiere a los juegos,deportes y prácticas corporales tradicionales,que, preñados de signos y símbolos que repre¬sentan la historia de las sociedades tradicionales,se integran en la totalidad de una cultura de laque son medio de expresión y regulación; losvalores que encarnan y las capacidades y técnicasque exigen son casi siempre distintos, cuando noopuestos, a los del deporte moderno. Las prác¬ticas tradicionales, que suelen ser informales y no

institucionalizadas, son el reflejo de la identidadcultural individual y colectiva, así como impor¬tantes factores del desarrollo cultural.

¿Es irreversible la erosión que en tantospaíses las está minando, pese a la vitalidad quemuestran unos poquísimos juegos y deportesnacionales o regionales que gozan de granpopularidad? Es muy de temer, y hay quienesno vacilan en. afirmar que la cultura lúdicamundial está desapareciendo en su riqueza y sudiversidad aunque subsisten formas momifi¬cadas en algunas exposiciones o manifesta¬ciones folklóricas en beneficio de una cultura

deportiva universal, aseptizada, institucionali¬zada y normalizada, erigida en parámetro de lamodernidad. Sin embargo, la forma deportivade la actividad física no ha sido nunca la prác¬tica universal, transhistórica, que muchos pre¬tenden. Imponer el triunfo del deporte a costade las otras formas de actividad física queexisten en el mundo equivale a consagrar lahegemonía de un deporte determinado, el queOccidente prefiere en la actualidad.

Ahora bien, los juegos y deportes tradicio¬nales forman parte del patrimonio culturalinmaterial de la humanidad, por lo que mereceninventariarse y describirse, como acaba de reco¬mendar a la UNESCO el Congreso Internacionalsobre Actividades Físicas, Deporte y Desa¬rrollo celebrado en Nabeul (Túnez) en febrerode 1992. Si ha de haber exposiciones folklóricas,que tengamos por lo menos un catálogo.

Los países más expuestos a la seducción queejerce el deporte moderno, encarnado ademásen un muy reducido número de deportes(fútbol y tenis más que nada), corren el riesgode que su identidad cultural se empobrezca. Y,sin embargo, muchos dirigentes del mundo endesarrollo estiman que ú*na política de revitali-zación de los juegos y deportes nacionales o de

La prensa ha contribuido

ampliamente a la

internacionalización del

deporte de alta competición.

repliegue en las prácticas corporales tradicio¬nales tendrá como consecuencia una margina-ción aun mayor de los jóvenes, pues les estaríanvedadas las prácticas modernas y se les cerraríael acceso a las realizaciones deportivas mensu¬rables internacionalmente, que son motivoincomparable de orgullo y prestigio nacional.Una política semejante sería contraria a losesfuerzos en pro de la integración, al favorecerlas prácticas culturales arraigadas en el sustratoétnico en perjuicio del sentimiento de identidadnacional y de pertenencia a la comunidad inter¬nacional. Así pues, el mundo se encaminainexorablemente a la adopción de una culturadeportiva universal en la que el deporte, fielreflejo de las propias sociedades, puede perderen significación lo que gane en poderío.

Un sector floreciente

de la economía

El deporte es un mercado. Un mercado flore¬ciente y en plena expansión. La industria deldeporte genera ingresos que representan entreel 1% y el 2% del PNB en los países industria¬lizados y que aumentan a un ritmo superior alde la mayoría de los demás sectores. Durante lacrisis del pasado decenio, tuvo un índice mediode crecimiento anual del 5%.

Este nuevo sector de la economía es objeto deestudios e investigaciones que ponen de relieve laimportancia de la cifra de negocios correspon¬diente a la producción, el intercambio y la distri¬bución de bienes y servicios relacionados con losdeportes. En Francia, por ejemplo, la Federaciónde Industrias del Deporte agrupaba ya en 1980casi siete mil empresas, que daban empleo a másde 300.000 personas. En un estudio realizado enAlemania se estima en 45.000 el número de

puestos de trabajo remunerados de este sector.No existen datos comparables sobre los países

El deporte, hijo del juego.

en desarrollo, pero cabe pensar que en ellos semanifiestan las mismas tendencias, aunque enmenor grado y con cierto retraso.

Al mismo tiempo la industria del deporte seinternacionaliza y da lugar a intercambios querepresentan entre 2 y 2,5% del comercio mun¬dial. Sin tener en cuenta las' infraestructuras ylas instalaciones, el mercado mundial de artícu¬

los deportivos supera ampliamente los 50.000millones de dólares. Pero la relación de inter¬

cambio es desfavorable para los países del Sur,dependientes de los países industrializados paraimportar productos que requieren una tecno¬logía avanzada, mientras ellos a su vez sóloexportan bienes con escaso valor añadido. Elsubdesarrollo deportivo no es sino el corolariodel subdesarrollo económico, como ponen derelieve los modestos resultados que consiguenlos países en desarrollo en las manifestacionesdeportivas internacionales (de 687 atletas quesubieron al podio en las Olimpiadas de 1984,tan sólo 62, un 9%, eran nacionales de esos

países) y la fuga de músculos que viene asumarse a la fuga de cerebros. Tal vez no faltemucho para que a un atleta le resulte práctica¬mente imposible subir al podio olímpico si nose ha entrenado en un país con todas las facili¬dades necesarias y su entrenador no es de unpaís del Norte.

El deporte se ha convertido así en un factorimportante de la economía mundial. Esta evo¬lución, relativamente reciente, y la paralelainternacionalización hasta el punto de quecabría hablar de un "deporte-mundo", similar ala conocida fórmula de la "economía-mundo"

del historiador Fernand Braudel obedecen en

gran medida a los estrechos y complejos lazos,casi simbióticos, que han ido tejiéndose y queno dejan de estrecharse, entre el deporte, losmedios de comunicación y la publicidad.Aunque no se pueda negar la importancia quetuvo la prensa escrita en el desarrollo inicial delos deportes, es la televisión, más que cualquierotro medio de comunicación, la que se ha apo¬derado del deporte para instrumentalizarlo yhacerlo entrar en una lógica publicitaria. Para

financiarlo también: así, por ejemplo, en 1980,en un país como Francia la financiación delfútbol corría por cuenta de los espectadores enun 33% (frente a 80% en 1970), en 23% de latelevisión, 22% de los patrocinadores y 20% delas poderes públicos.

Los intereses económicos inextricablemente

asociados a los intereses de los medios de

comunicación van configurando cada vez máslos programas deportivos, inspiran sus regla¬mentos, transforman el deporte en espectáculoe influyen poderosamente en su interpretación.Existe un grave riesgo de que la práctica y elsignificado del ejercicio físico se vuelvan aunmás uniformes, pues hay tres deportes (elciclismo, el tenis y el fútbol) que se llevan ellossolos la mitad del tiempo de antena que las tele¬visiones europeas dedican al deporte. El podereconómico, el poder de los medios de comuni¬cación y el poder deportivo están condenados aentenderse y a ponerse de acuerdo para crear yrentabilizar el acontecimiento deportivo. Eldeporte de competición en el año 2000 serátelevisado o no será.

¿Deporte de alto nivelo deporte

PARA TODOS?

Está por precisar qué lugar debe ocupar eldeporte de alto nivel frente al deporte paratodos y al fomento de la actividad física ydeportiva en la escuela y en los programas deeducación extraescolar, especialmente en lospaíses en desarrollo. No cabe duda de que eldeporte de alto nivel es caro y que sus costosaumentan más deprisa que los participantes.Cada país tiene la obligación de atender priori¬tariamente las necesidades fundamentales de su

población, pero ¿es lícito considerar el deportede alto nivel como una necesidad' fundamental?

¿Es razonable o rentable para esos paísesinvertir en él y acoger grandes competicionesinternacionales? Los economistas no se ponende acuerdo, en vista del costo de las instala¬

ciones que precisa: difíciles de amortizar y demantener, superan con mucho las necesidades

12

"Tres disciplinas deportivas

(ciclismo, tenis y fútbol) se

llevan ellas solas la mitad

del tiempo de antena

consagrado al deporte." A la

derecha, el campeón

estadounidense Pete

Sampras en el torneo de

Roland Garros de 1991.

PIERRE HENQUET,francés, ex funcionario de la

Unesco, es actualmente

secretario general adjunto delConsejo Internacional para laEducación Física y la Ciencia

del Deporte (CIEPSS), del quees representante ante la

Organización. Ha publicadonumerosos artículos sobre

educación no formal,

alfabetización funcional,

comunicación, y sobre lajuventud y el deporte.

de la población y acarrean una dependencia tec¬nológica imputable a la complejidad de los,equipos indispensables. La organización de losJuegos Olímpicos o de grandes campeonatosmundiales suele ocasionar gastos superiores alos inicialmente previstos, lo que obliga arecurrir a empréstitos. Sin embargo, las autori¬dades deportivas del Tercer Mundo, obede¬ciendo a consideraciones de orden político másque económico, conceden gran importancia aldeporte de alto nivel y siguen pidiendo unadeslocalización más sistemática de las grandesmanifestaciones y una representación más equi¬librada de los distintos países en las instanciasdeportivas internacionales.

No cabe duda, en cambio, de que elfomento del ejercicio físico y el deporte paratodos debe considerarse como parte integrantee instrumento del desarrollo. Las ventajas indi¬viduales y colectivas que se derivan de la prác¬tica regular, racional y moderada del deporte

son innegables y repercuten en diversosámbitos. En el plano físico, la práctica de losdeportes combinada con uña alimentaciónracional, es, con toda seguridad, el método máseficaz, agradable y barato de conservar la salud,retrasar el envejecimiento y reducir los gastosde seguridad social. ¿Acaso hay un factor dedesarrollo más importante y significativo paraun país que la salud de sus ciudadanos?

En el plano psicosocial, el deporte favorecela afirmación del carácter y el desarrollo de lapersonalidad, mejora el equilibrio afectivo ypermite relativizar los éxitos y los fracasos.Intelectualmente es un medio de conocimiento

y sirve de guía en el proceso de aprendizaje. Eldeporte favorece, por último, las actitudes decooperación, solidaridad y mutuo entendi¬miento y puede ser, por ello, un instrumento deintegración e inserción social, un medio paraluchar contra la marginación en todas susformas. D 13

ff Omero del deporte por Jean-François Nys

"Cada deporte posee una

imagen particular con la que

se asocia al patrocinador..."

Abajo, el velero de la

navegante francesa Florence

Arthaud, que terminó

primera en la Ruta del Ron,

en 1990.

LOS estadios, las camisetas de los depor¬tistas, los suelos de las salas de deporte, lacarrocería de los coches.... durante una

competición deportiva las empresas están alacecho del más mínimo espacio para asentar sunombre. Los Juegos Olímpicos son la únicacompetición exenta de publicidad, aunque lospatrocinadores oficiales están autorizados a uti¬lizar el emblema de los Juegos (los cinco anillosque simbolizan los cinco continentes), unaautorización que, por otra parte, han tenidoque pagar muy caro.

Lo que observamos en los Juegos Olímpicosse comprueba en todos los encuentros depor¬tivos. Para poder hacer frente a desembolsoscada vez mayores (sueldos, gastos de organiza¬ción), los clubs y organizadores de competi¬ciones deportivas buscan "patrocinadores" o"padrinos", y son numerosas las empresas queresponden a este requerimiento. Así, los fondosprocedentes de esta fuente que en 1970 no lle¬gaban a 1% de los ingresos de los clubs defútbol profesional en Francia, representaban en

14

1991 casi un 25%. El deporte, capaz de trans¬mitir una imagen fuerte y de suscitar emociones,entusiasmo, incluso pasión, constituye para unaempresa un medio ideal de afirmar su funciónsocial, motivar a su personal, acrecentar su noto¬riedad, y fortalecer o modificar su imagen anteel público. Según estudios semiológicos reali¬zados al respecto, cada deporte posee unaimagen particular con la que se asocia al patroci

nador: la navegación a vela simboliza el espacio,la atracción del océano, la pericia; la esgrima, lanobleza, la tradición, la precisión; mientras queel automovilismo encarna la virilidad, el dina¬mismo, la autenticidad, el afán de superación. EnEuropa las inversiones de los patrocinadoresdeportivos se aproximan a los 20 mil millones defrancos. En Estados Unidos superan los 2 milmillones de dólares.

Sin embargo, el patrocinio no constituyeuna fuente de financiación estable. Favorecer el

desarrollo del deporte no se cuenta entre lasprioridades de ninguna empresa, salvo deaquellas que explotan directamente ese mer¬cado fabricantes de artículos de deporte o dematerial deportivo, prensa especializada, etc. Lamayoría de las empresas lo utilizan paraalcanzar sus objetivos en materia de comunica¬ción. Ahora ,bien, en ese terreno, las actividadesculturales, la defensa del medio ambiente, lasgrandes causas humanitarias y la investigacióncientífica hacen al deporte una dura compe¬tencia. Además, las inversiones en comunica¬ción dependen de que la situación económicasea más o menos favorable. No poseen, pues,un carácter seguro y permanente, y sería arries¬gado basar una política deportiva en recursostan aleatorios.

Pero los fondos del deporte no provienenúnicamente de agentes privados: aficionados,espectadores, canales de televisión, patrocina¬dores... El Estado y las asociaciones públicastambién contribuyen, en mayor o menormedida, a su financiación, en proporciones quevarían según la estructura económica del país.En la ex Unión Soviética, el Estado otorgaba lacasi totalidad de esa financiación, mientras enEstados Unidos el deporte es un asunto pri¬vado. En Francia, los fondos públicos que sededicaban al deporte en 1990 representabanunos 32 mil millones de francos, monto equiva¬lente a la contribución de las empresas privadasy de los particulares.

Esta característica del sistema francés llevó

al Parlamento Europeo a interrogarse acerca dela legitimidad de las subvenciones de las institu¬ciones públicas a los clubs deportivos, puesalgunos parlamentarios veían en ello un aten¬tado al libre juego de la competencia. Sinresponder a este interrogante se puede ampliarel debate y examinar la naturaleza económicadel deporte. Si se considera como un asuntoprivado, su gestión y financiación incumben alsector privado y es la lógica del mercado la quese impone. La competencia es entonces lanorma: entre las federaciones para dominar elmercado de la práctica deportiva, entre los

JEAN-FRANÇOIS NYS,francés, es profesor en la

Universidad de Limoges e

investigador en el Centro deDerecho y de Economía delDeporte. Ha escritonumerosas obras sobre el

deporte, entre las que

merecen particular menciónLa santé: consommation ou

investissement (La salud:consumo o inversión, 1980)

y, con W. Andreff, Economiedu sport (Economía deldeporte, 1986) y Le sport et

la télévision (El deporte y latelevisión, 1987).

Salto en paracaídas con

motor en Kenya.

clubs para contratar a los jugadores, vender losespectáculos y atraer a los aficionados.

Considerado como un asunto público, eldeporte es un bien colectivo. El Estado y lasinstituciones públicas construyen las instala¬ciones, remuneran a los profesores y a losatletas, hacen que la actividad deportiva seaaccesible a todos.

De aplicarse una lógica estrictamente pri¬vada se correría el riesgo de crear desigualdadesy limitar el acceso de los menos favorecidos a lapráctica del deporte. Conviene pues que laintervención del sector público corrija las defi¬ciencias del mercado, así como debe también

controlar los abusos y extravíos, como eldopado y la violencia. O 15

-y«r,«

te 'Sfr^sS

ínr/afn roja para el balón de fútbolpor Francois Thébaud

16

FRANÇOIS THEBAUD,periodista francés, fundador y

jefe de redacción de larevista Le Miroir du football

(1959-1977), ha comentado

las grandes competicionesinternacionales de fútbol

desde la Segunda GuerraMundial. En la actualidad

dirige la sección deportiva delperiódico suizo La Tribune deLausanne. Es autor de un

ensayo sobre el jugador defútbol brasileño Pelé (1974) yde Le temps du Miroir: une

autre idée du football y dujournalisme (La época deMiroir, una idea diferente del

fútbol y del periodismo,1982).

AYO de 1964, Estadio Nacional de

Lima: 320 muertos. Junio de 1968,Estadio River Plate, en Buenos Aires:

80 muertos. Enero de 1971, Ibrox Park, en

Glasgow: 66 muertos. Febrero de 1974, ElCairo: 48 muertos. Octubre de 1982: Lujniki,Moscú: 99 muertos. Mayo de 1985, Heysel,Bruselas: 39 muertos. Abril de 1989, Hillsbo¬

rough, Sheffield: 94 muertos.Todas estas catástrofes han tenido como

escenario estadios de fútbol, y sus víctimas hansido hombres, mujeres y niños que asistían aimportantes encuentros deportivos. Ningúnotro deporte se ha enlutado con tragedias simi¬lares. ¿Habrá que llegar a la conclusión de queentre el fútbol y la violencia existe un vínculoparticular?

Los aficionados al fútbol refutan los cargosque se hacen al más popular de los deportes,alegando que en la sociedad moderna la vio¬lencia está en todas partes. Adopta las formasmás diversas, desde las hecatombes bélicas hasta

las manifestaciones cotidianas de delincuencia ycriminalidad. Los estadios de fútbol no están a

salvo de esas oleadas de violencia porquequienes los frecuentan son un producto de esamisma sociedad.

Pero, entonces podría objetarse , ¿porqué las competiciones de atletismo, los campeo¬natos de baloncesto o de rugby no sufren losmismos efectos perniciosos de su entorno socialy no dan lugar a escenas como las que horrori¬zaron a los telespectadores del drama de Heysel?

Medidas tardías

Evidentemente el fútbol no es en sí mismo

fuente de violencia, pero se diría que le brindamayores oportunidades de manifestarse. Enprimer lugar porque en las 166 naciones afiliadasa la Federación Internacional de Fútbol Asocia¬

ción (FIFA) es el deporte más importante por elnúmero de quienes lo practican, la cantidad depúblico que atrae y las pasiones que desata.

El hacinamiento de los espectadores en las

Wpt^ï

En abril de 1989 el estadio

de Anfield, en Liverpool, se

cubrió de flores y coronas en

memoria de los aficionados

de esa ciudad muertos en el

tumulto que pocos días

antes se produjo en el

estadio de Sheffield, durante

la semifinal de la Copa de

Inglaterra.

tribunas "populares" suele provocar incidentesque la prensa no siempre recoge. Pero cuandolos que ocupan esas localidades económicas sonseguidores incondicionales que han venido a"hinchar" por su equipo y a manifestar unahostilidad igualmente incondicional hacia elequipo adverso y sus partidarios, la promis¬cuidad desemboca naturalmente en explosionesde violencia colectiva.

Se ha procurado separar las hinchadas ymantenerlas en tribunas alejadas unas de otras,así como establecer controles a la entrada y lasalida del estadio, pero esas medidas, comodemuestra la tragedia de Heysel, son insufi¬cientes. Los dirigentes de los clubs y las federa¬ciones deportivas han comprendido que seimponía una transformación total de las instala¬ciones, construidas en su mayoría antes de laguerra e incluso a principios de siglo, como en elReino Unido. Los estadios donde se celebran las

competiciones internacionales sólo tienen locali¬dades con asiento no tanto para ofrecermayor comodidad al público popular como pormotivos de seguridad. Están equipados ademáscon aparatos de vigilancia electrónica que per¬miten detectar cualquier amenaza de violencia ygarantizar una rápida intervención de las fuerzasdel orden.

Rugby: prioridad al juego

Pero el número de aficionados al fútbol no

explica por sí sólo esta inclinación a la vio¬lencia. En Europa y en Oceania, el rugby reúnevarias veces al año multitudes de 50.000 espec¬tadores sin que se produzcan nunca incidentesgraves. Este deporte, tan "viril" como el fútbol,atrae a un público diferente y no suscita lasmismas reacciones.

El público del rugby no ha variado desdemediados de siglo. Relativamente homogéneo,sigue dando preeminencia al "amateurismo" yatribuye menos importancia a los resultados

que al espíritu deportivo y la calidad del juego.De allí que los espectadores conserven susangre fría ante resultados o arbitrajes litigiososy que la tranquilidad y la corrección reinen enlas tribunas incluso en caso de violento

conflicto en la cancha.

En cambio, la afición europea de fútbol seha transformado. Los obreros, ampliamentemayoritarios antes de la segunda guerra mun¬dial, han sido reemplazados en las graderías porlos empleados, mientras que la burguesía y lapequeña burguesía ocupan las tribunas dehonor. Por otra parte, pesan cada vez más sobreel fútbol profesional los cuantiosos interesesfinancieros que están en juego en los grandescampeonatos. El resultado del partido seconvierte en la preocupación principal, por nodecir única, de jugadores y espectadores. Losmedios que se utilizan, el juego en sí, dejan detener importancia. La prensa escrita y audiovi¬sual agrava la situación al conceder menosespacio a los comentarios técnicos y al análisisdel juego, mientras los concursos, pronósticosy apuestas de todo tipo exaltan aun más esteverdadero culto del resultado.

En tales circunstancias, ¿por qué motivo elespectador de fútbol se interesaría por el juego,su calidad, su táctica, su ingenio? ¿Y por qué noparticiparía en la conquista del resultado inter¬viniendo en el partido? La intimidación delarbitro y de los jugadores del equipo adversomediante amenazas, insultos, lanzamiento de

botellas o de piedras constituye el preludiohabitual de las riñas entre aficionados y de losarrebatos de pánico que son la causa directa delas tragedias que hemos mencionado.

Nacionalismo y violencia

Pero no siempre ha imperado ese estado deánimo entre los aficionados al fútbol. No hace

mucho tenían la oportunidad de manifestar ale¬gría y entusiasmo en el transcurso de partidos

"El fútbol es el deporte

más importante por el

número de quienes lo

practican, la cantidad de

público que atrae y las

pasiones que desata."17

El partido Francia-Australia

en la Copa del Mundo de

Rugby, Sydney, 1987.

que eran momentos de júbilo compartidos portodos. ¡Los encuentros de los equipos de Hun¬gría y Brasil en los años cincuenta y las exhibi¬ciones que brindaban grandes clubs como elReal Madrid en el estadio de Reims en los años

sesenta han dejado un magnífico recuerdo! Aligual que esas inolvidables finales de la Copa deInglaterra, cuando antes del saque inicial loscien mil espectadores de Wembley unían susvoces en un coro gigantesco, creando unambiente de fiesta en el que sólo contaba la be¬lleza del juego. Tales acontecimientos son raroshoy en día.

En lugar de confrontaciones pacíficas entreestilos de juego que reflejan las característicasgeográficas, históricas, económicas y culturalesde los equipos adversos, las competiciones inter¬nacionales se transforman a menudo en enfren-

tamientos donde todo está permitido. Durantela Copa del Mundo y la Copa Intercontinentalse han visto múltiples e irritantes ejemplos deanti-juego que no sólo no suscitaban la reproba¬ción del público, sino que en algunas oportuni¬dades despertaban incluso su adhesión.

Los himnos nacionales que interpretanbandas militares antes de los partidos y que losaficionados entonan a coro no contribuyen a

serenar los ánimos en las tribunas ni favorecen

elfair-play en el campo de juego. Se han alzadovoces pidiendo que se ponga término a estasprácticas obsoletas, pero han pasado inadver¬tidas en esta república mundial del fútboldonde la sumisión voluntaria a una ley común

la del juego debería proscribir todo chovi¬nismo generador de violencia.

Tras el drama de Heysel se buscó primero alos responsables entre los hooligans, queencuentran en las multitudes compactas de losestadios el medio ideal para dar rienda suelta asus frustraciones. Después se advirtió, a medidaque avanzaban las investigaciones, que explicarla violencia no era tan sencillo. Producto de la

sociedad, de sus contradicciones, de sus taras, la

violencia no puede dejar de manifestarse tam¬bién en los estadios, pero el mundo del fútbol ensí no es tan ajeno a este fenómeno como pre¬tende. Dirigentes, entrenadores, jugadores, arbi¬tros, periodistas y espectadores deben tomarconciencia de que la lucha contra el sectarismonacionalista y por la rehabilitación del espíritudeportivo les concierne directamente. Tal vezesa nueva conciencia no ponga fin a la violenciaen los estadios, pero podrá al menos atenuar susmanifestaciones y sus consecuencias. O

18

Si bien la proeza tiene una patria,la virtud es puramente humana

I"

Es cierto que el deporte se ha exten¬dido extraordinariamente. Es, sin

duda, el aspecto de nuestras cos¬tumbres que más se ha difundido en elmundo entero: es quizá el único común almismo tiempo a las sociedades industriali¬zadas y a los países en vías de desarrollo.También, y en un grado cada vez mayor,constituye uno de los elementos másactivos de las relaciones internacionales:

pocos contactos, confrontaciones o inter¬cambios internacionales tienen tan ampliaresonancia entre las masas de la pobla¬ción como los encuentros deportivos.

v Pero, si bien el deporte es ahora cadavez más internacional en su realidad, ¿esverdaderamente internacionalista en su

espíritu, como lo pensaba y deseaba Cou-bertin? Por desgracia, nada es menoscierto. De hecho, los encuentros interna¬cionales se ven cada vez más dominados

es decir, perdidos por el naciona¬lismo, el patrioterismo e incluso elracismo. Las emociones y las pasiones quedespiertan esos encuentros, de las que sehacen eco, amplificándolas a todos loshorizontes, los potentes medios de infor¬mación moderna, la prensa, la radio, latelevisión y el cine, se inspiran sólo muyexcepcionalmente, hay que reconocerlo,en la moral antigua, sobre la que velabaZeus Philios, dios de la amistad. Ya es

tiempo de reaccionar, si no se quiere queel Altis de Olimpia degenere en el Circode Roma o en el Hipódromo de Bizancio:

Pero entendámonos. No se trata de

pensar en frenar el poder emotivo delespectáculo deportivo, que es el grandrama popular moderno. Sería absurdo, ypor lo demás imposible. Una de las fun¬ciones y de las más sanas de eseespectáculo, es la misma, pero en ungrado mucho más elevado de intensidad,que la asignada por Aristóteles al teatro: lafamosa catarsis, la válvula de escape de

las pasiones y de los instintos. Tampoco setrata de privar al atleta de la admiración, ymenos de la de sus compatriotas: comotodo lo sobresaliente, la proeza deportivamerece suscitar esa admiración, y es

natural que quienes simpaticen más fácil

mente con el autor de la hazaña sean

quienes experimenten más vivamente esesentimiento, que por otra parte, es muynoble.

Pero, como no existe competición

deportiva sin voluntad de victoria, tam¬poco la hay sin reglas y sin ética. Son esasreglas y la ética que las informa lo quediferencia al deporte de la lucha salvajede la vida, a la que llamamos guerra. Elatenerse a esas normas transforma la

proeza en virtud, y como esas normas sonuniversales por definición, de ello seinfiere que si bien la proeza tiene unapatria, la virtud es puramente humana.

Por lo demás, nada más bárbaro queesa identificación del público con el cam¬peón, esa apropiación nacional de la vic¬toria de un individuo o de un equipo. Esasbanderas, esos himnos, esos grandes titu¬lares en los periódicos para anunciar"Hemos ganado" o "Derrota nacional",¿no creen ustedes que constituyen verda¬deramente una exageración monstruosade lo más espontáneo de la sensibilidadde las multitudes, e incluso una explota¬

ción desvergonzada de sus impulsos másdesinteresados? En todo caso, es locontrario de la catarsis: es el retorno a una

mentalidad primitiva.Estimo que se impone una enérgica

reacción, e incluso el abandono de deter¬minadas prácticas que se han establecidoen los Juegos Olímpicos, y con el consen¬timiento de Coubertin, como los himnos

nacionales, y a pesar suyo, como la clasi¬ficación por naciones que, como essabido, no está oficialmente reconocida, sise quiere dar de nuevo al deporte yquiero decir el deporte por entero, atletas,dirigentes y público su vocación inter¬nacionalista de fomentar la amistad entre

los pueblos.

René Moheu,Director General de la Unesco (1961-1974),

con ocasión del centenario del

nacimiento de Pierre de Coubertin.

París, 28 de octubre de 1963.

Brasil: im buen ¡uego de miarapor Roberto DaMatta

20

ROBERTO DAMATTA,brasileño, fue profesor deantropología social en elMuseo Nacional, Universidad

Federal de Rio de Janeiro, yactualmente es profesor ydirector de investigaciones enel Kellog Institute de laUniversidad de Notre-Dame

en Estados Unidos. Ha

publicado varias obras, entre

las que cabe mencionar:Carnavals, malandros e

heróis (Carnavales, bandidosy héroes), A divided world:apinayé social structure (Unmundo dividido: estructura

social apinayé) y,recientemente, Conta dementiroso: sete ensaios de

antropología brasileira(Cuentos de mentiroso: siete

ensayos de antropologíabrasileña).

UN dicho popular brasileño afirma que enel Brasil sólo existen tres cosas serias: la

cachaza, la lotería y el fútbol. Así los tresfundamentos del consenso nacional serían una

bebida alcohólica que acompaña los momentosfelices y ayuda a olvidar las penas, un juego deazar basado en los números, los sueños y eldeseo de ascenso social y, por último, undeporte moderno inventado por los ingleses yque los brasileños han adoptado con una pasióncuya intensidad sólo es comparable a su des¬treza para practicarlo.

Cabe observar que de los tres, el fútbol es elmenos autóctono, ya que fue importado por loshijos de familias acomodadas que se aficionaronal fútbol en Inglaterra donde sus padres loshabían enviado a estudiar. Pero el pueblo brasi¬leño terminó por adoptar el viejo foot-ball asso¬ciation, al que bautizó futíbol, convirtiéndoloen una actividad siempre de actualidad que sus¬cita sentimientos apasionados de identificaciónindividual y colectiva.

Después de cierta resistencia inicial, elfútbol ha llegado a ser en Brasil la manifesta¬ción más popular del deporte, entendido éstecomo una actividad que asocia la competicióncon la libre utilización del cuerpo. Tal vez ellose deba a que el fútbol es un juego de equipodonde se encuentra simbólicamente expresadala idea de una comunidad tan exclusiva como la

casa o la familia, a la que se está unido porestrechos lazos de afinidad, simpatía y amor.

Otro motivo que explica la entusiasta afi¬ción de los brasileños por el fútbol: se juega conlos pies y no con las manos, lo que introduce

un factor suplementario de azar, exige de losjugadores un alto nivel técnico y contribuye agarantizar la "noble imprevisibilidad deldeporte", incluso entre equipos de nivel muydiferente.

En cambio en Estados Unidos se ha adop¬tado una variante del fútbol que se juega con lamano y que exige una extraordinaria precisióntécnica y táctica: ello excluye. prácticamentetoda intervención del azar en un partido queopone a dos equipos de nivel comparable. Losdeportes de pelota a mano no permiten puesuna disparidad demasiado grande entre losequipos; la preferencia por este tipo de deportestal vez guarde relación con la tendencia al racio¬nalismo científico, la abstracción y la especiali-zación de las sociedades que poseen una sólidatradición democrática.

El estilo brasileño

La utilización de los pies, por oposición a lasmanos, supone el empleo de todo el cuerpo, y enparticular de las piernas y las caderas, precisa¬mente una parte de la anatomía que en el Brasilposee una fuerte carga simbólica. Así se dirá deun buscavidas, de un pillo que sabe sacar partidode todo, que tiene un buen juego de cintura,expresión que se aplica tanto al político sagazcomo al buen jugador de fútbol, al punto deidentificarse con la manera brasileña de practicareste deporte. Como es sabido, el fútbol "a labrasileña" se caracteriza, incluso para los pro¬pios interesados, por una extraordinaria habi¬lidad para servirse del cuerpo y de las piernas.¿Y no habría también en este uso exclusivo de

"El fútbol afirma

simbólicamente que el mejor

y más diestro puede

triunfar... y que ante las

reglas del juego todo el

mundo es igual."

El juego de piernas de la

capoeira. Esta lucha atlétlca

originaria de Africa se ha

convertido en una danza

popular del Nordeste

brasileño.

los pies, tan peculiar del fútbol brasileño, unlejano eco de la capoeira, esa forma de luchaque practicaban los esclavos venidos de Africa,que utiliza exclusivamente las piernas y los piespara desequilibrar al adversario?

El fútbol se ha convertido en un instru¬

mento privilegiado de representación de nume¬rosos aspectos de la sociedad brasileña, enprimer lugar y sobre todo porque es un formi¬dable vector de integración social. El fútbolprueba también que es posible ganar actuandode manera conjunta y coordinada. Ahora bien,esa experiencia de identificación abierta y posi¬tiva es poco frecuente en la realidad cotidianade los brasileños, cuyas instituciones se hanvisto debilitadas durante décadas por la infla¬ción y por los abusos de un clientelismo quedesmoraliza a los ciudadanos.

Pero el fútbol es también una fuerza de inte¬

gración en la medida en que ofrece la posibi¬lidad de compartir la experiencia del triunfo, loque el mundo moderno designa con la palabramágica de "éxito" y que pocos brasileños tienenla oportunidad de conocer en una sociedadjerarquizada donde la riqueza está en manos deunos pocos. Los espectadores sienten que supapel de "hinchas" es decir, de aficionadosque se dan sin reservas a su club y a susídolos no es inútil pues produce resultados ypuede contribuir a la victoria.

El fútbol, un espectáculo a la vez complejoy regido por reglas sencillas que todo el mundoes capaz de comprender, afirma simbólicamenteque el mejor y más diestro puede triunfar. Quecon entrenamiento, técnica y un poco de suertees posible ganar y sobre todo que ante las reglas

de juego todo el mundo es igual: grandes cam¬peones o equipos de segunda, clubs ricos opobres, negros y blancos, letrados y analfa¬betos. Desde este punto de vista, el fútbol esuna escuela de democracia y de igualitarismo,pues mientras observamos jugar a nuestroequipo en la cancha sabemos que esas reglasson universales, que todos deben respetarlas,que son claras y precisas, y que un arbitro estáallí para aplicarlas incluso en medio de la mayorbarahúnda.

El espectador tiene la seguridad de que,contrariamente a lo que sucede en otros camposde actividad, ni el vencedor ni el vencido puedenmodificar repentinamente esas reglas, pues ellasestán por encima de las pulsiones y los deseos delos equipos adversarios. El fútbol nos enseñaque de ese carácter inmutable de las reglas nacela alternancia entre ganadores y perdedores. Esprecisamente por asociar hasta ese punto loformal con lo informal, el derecho con la rea¬

lidad, que el fútbol se ha convertido en Brasilcomo en el resto del Tercer Mundo en una

incomparable fuente de emociones.En todo caso, gracias al fútbol los brasileños

han llegado a identificarse con los símbolos delEstado-nación: himno nacional, bandera, tradi¬ción. Las mañas para sobrevivir, el "juego decintura" como expresión nacional, un deporteque vincula el corazón y la cabeza, la fuerza y elingenio: sí, es con y por el fútbol que nuestroBrasil existe como sociedad y como nación. Sí,es la conmovedora y formidable experiencia deltriunfo en tres Copas del Mundo lo que nos hainfundido confianza en la creatividad y la gene¬rosidad de nuestro pueblo. O

21

LA UNESCO LLEVA LA DELANTERA

Clase de gimnasia en Pnom Penh (Camboya).

La Unesco es la única organización de lasNaciones Unidas que tiene por misión

ocuparse del conjunto de los problemasrelacionados con el desarrollo internacional de

la educación física y el deporte. Otras institu¬

ciones, como la Organización Mundial de laSalud (OMS) y la Organización Internacional

del Trabajo (OIT), pueden intervenir en ese te¬rreno, pero sólo en aspectos específicos que

corresponden a su competencia constitucional

deporte y salud, o práctica del deporte en las

empresas, por ejemplo.La acción de la Unesco se ha orientado en

las siguientes direcciones:En lo tocante a los aspectos institucionales y

normativos del deporte, la Unesco ha adop¬tado medidas encaminadas a establecer meca¬

nismos intergubernamentales de protección enese ámbito. En 1978, la Conferencia General

aprobó una Carta Internacional y creó un

Comité Intergubernamental para la Educación

Física y el Deporte. Paralelamente se esta¬

bleció un Fondo Internacional para el Desa¬rrollo de la Educación Física y el Deporte

(FIDEPS), que se encarga de movilizar losrecursos necesarios para la extensión de los

programas. Los estatutos del Fondo se han

modificado recientemente con objeto de poder

acoger en su Consejo de Administración a

representantes del sector privado, ya que losEstados se desentienden paulatinamente del

problema por considerar que el deporte posee

recursos suficientes para financiarse por símismo.

En 1 988 la Conferencia de Ministros y Altos

Funcionarios Encargados de la Educación Físicay el Deporte que se celebró en Moscú, trashacer un balance de la situación de la educa¬

ción física y el deporte en el mundo, tomó notade las nuevas formas de cooperación y asocia¬

ción que se establecen entre los poderes

públicos y las organizaciones de voluntarios, y

aprobó once recomendaciones que constituyenuna suerte de soporte conceptual, así como un

texto titulado Declaración de Moscú, que

contiene diez proposiciones de carácter

general. En esta ocasión, la Unesco y el ComitéOlímpico Internacional adoptaron una declara¬

ción conjunta que fija los objetivos comunes a

ambas organizaciones.

Con miras a reducir las diferencias y las desi¬

gualdades entre los países en la esfera de la edu¬cación física y el deporte, se han emprendido y

continúan emprendiéndose diversas actividades

con la cooperación de organizaciones no guber¬namentales, en particular del Consejo Interna¬

cional para la Educación Física y la Ciencia del

Deporte. Esas actividades se proponen:a) favorecer el acceso y la participación en la

educación física y deportiva de los niños y

adolescentes dentro del sistema escolar y en el

marco de programas de educación no formal;b) promover el deporte para todos en los dis¬

tintos sectores de la población;

c) formar educadores a nivel nacional,

regional e internacional;

d) organizar anualmente semanas mundiales deeducación física y deporte que en el futuro

podrían incorporarse a un proyecto más vasto ymás sistemático titulado "El mundo en forma";

e) estimular el desarrollo de investigaciones enel campo de las ciencias del deporte, asícomo la internacionalización de los intercam-.

bios de datos mediante la creación de meca¬

nismos especializados.

Un tercer grupo de actividades tienen porobjeto la salvaguardia y la protección de los

valores éticos que el deporte reivindica: fair-

play, desarrollo armonioso de la personalidad,afán de superación, solidaridad, espíritu de

camaradería, lealtad, generosidad, respeto delas normas establecidas y del adversario,

control de la agresividad y la violencia. Estosvalores se encuentran hoy día amenazados

por fuerzas exteriores al deporte, que tienden

a convertirlo en una empresa meramentelucrativa y a transformar las competiciones

deportivas en enfrentamientos violentos y a

veces mortales. Aunque las legislaciones y los

reglamentos pueden ser útiles e incluso indis¬

pensables, la salvaguardia de esos valores nopuede establecerse por decreto. Es una tarea

que incumbe a la sociedad en su conjunto a

través de la educación. Los juegos corporales

sólo cobran significado en relación con elespíritu que los anima. O

EL CORREO DE LA U N E S C O - D I C I E M B R E 1992

EDITORIAL

Motivosdeesperanzapor France Bequette

El año 1992 pasará a la historia como el de la Cumbre deRío. Ahora bien, más allá de las graves amenazas que seciernen sobre la Tierra y de las grandes resoluciones amenudo difíciles de poner en práctica, no hay que olvidarlos proyectos de dimensiones modestas de los que nadie

habla justamente porquefuncionan muy bien.Algunos han surgido por iniciativa de la Unesco, como los

proyectos de desarrollo de las agencias de prensa del AfricaOccidental (WANAD), Central (CAÑAD), Oriental y Austral(SEANAD), gracias a los cuales muchos periodistas se inicianen las cuestiones relativas al medio ambiente. Otros, como el

proyecto PIRATTES, son fruto de iniciativas individuales. Unjoven bretón de vacaciones en Africa empieza a explicar cómoobtiene la sal de Guérande con la ayuda del sol y del viento. EnBenin la sal es hija del fuego. Las mujeres del país tienen querecorrer kilómetros en busca de leña para poder hervir la sal¬muera y obtener la sal. Pero al cortar el manglar destruyen loslugares donde desovan los peces y ponen en peligro la pesca.Protegidos por los "vodu", poderes invisibles, bretones y beni-neses están trabajando juntos. Ya funcionan cincuenta salinasbasadas en el modelo bretón. El año que viene serán cien, y lossalineros bretones, que hasta ahora se turnaban, ya no estarán,pues los han llamado de Guinea y de Niger.

Del otro lado del océano, en Puerto Rico, un grupo de ciuda¬danos profundamente enamorados de su país han creado unfondo para la conservación de la isla. Era el momento dehacerlo, porque ya empezaban a dejarse sentir las consecuen¬cias de la contaminación por los desechos, la especulacióninmobiliaria y el turismo. El Fondo, que ha adquirido cente¬nares de hectáreas en las zonas más interesantes, protege así anumerosas especies animales y vegetales, algunas de ellas úni¬cas en el mundo.

Estos esfuerzos que con inteligencia se llevan a cabo en todoslos continentes, ¿no constituyen otros tantos motivos de espe¬ranza?

23 Editorial

24 De todas las latitudes

26

28

30

Terna

por France BequetteLa sal, ¿hija del

fuego, o del sol y elviento?

Rico salva

sus tesoros

A lo largo de lossiglosEl trueno y elrelámpago sonhermanos

Leyenda de losesquimales caribúes

23

mffît

De todas las latitudes

¿ï SI LOS DESECHOS TÓXICOSTI

La Convención de Basilea de 22 de marzo de 1989,relativa al control de los movimientos transfronterizos

de los desechos tóxicos y de su eliminación, entró envigor el 5 de mayo de 1992. Según la Convención, el paísdestinatario de los desechos debe estar al corriente de

la naturaleza de éstos y en condiciones de tratarlos.Francia posee en Saint-Vulbas, en el Ain, una central"única en el mundo" capaz de destruir los PCB sincontaminar, gracias a un incinerador a 1.200"C. Sinembargo, cuando el pasado mes de septiembreAustralia exportó residuos de policlorobifenilo (PCB)para que fueran destruidos en Francia, la asociaciónecologista Greenpeace presionó al gobierno para queprohibiera su importación. Si se cierran las fronteras alos desechos y cada Estado tiene que dotarse de insta¬laciones tan caras como técnicamente avanzadas, ¿noes mayor el riesgo de encontrarse con paquetes enve¬nenados en plena naturaleza?

Ï

24

No es en los barrios elegantes, sinoen los suburbios pobres dondesuelen encontrarse vertederos de

desechos tóxicos. La mayoría de los40.000 habitantes de Williamsburg,una barriada obrera al nordeste de

Brooklyn, son oriundos del Caribeo de Centroamérica. Según uninforme del Centro Comunitario de

Salud Ambiental (CommunityEnvironmental Health Center) de laUniversidad Hunter de Nueva York,existen 28 vertederos de desechos

peligrosos e incluso "sumamentepeligrosos". Esta situación ha lle¬vado a la constitución de un grupode estudiantes conocido como "Los

vengadores tóxicos". Cuando elgrupo descubre un almacén atibo¬rrado de bidones de los que seescapan líquidos tóxicos, avisa inme¬diatamente a los servicios compe¬tentes encargados de la limpieza. Almismo tiempo realiza actividadesde sensibilización de su comunidad

y explica que la lucha contra lacontaminación tiene el mismo

carácter prioritario que la luchacontra la droga y la delincuencia.

Desde hace casi treinta años, elPrograma Mundial de Alimentos(PAM) es una de las organizacionesque más han invertido en los paísesen desarrollo. ¿Cuál es su objetivo?Poner coto a la degradación delmedio ambiente, aumentando al

mismo tiempo la producción de ali¬mentos. Creado en 1961 conjunta¬mente por laAsamblea General de lasNaciones Unidas y la Organizaciónde las Naciones Unidas para laAgriculturaylaAlimentación (FAO),el PAM empezó en 1991 a evaluar losresultados de sus actividades rela

cionadas con el medio ambiente. Un

desarrollo sostenible y compatiblecon el medio ambiente debe serlo

también con la economíayla estruc¬tura de la sociedad. Toda estrategiatiene que basarse, pues, en lavoluntad de los ciudadanos de par¬ticipar en las actividades de desa¬rrollo yseguir llevándolas a cabo unavez suspendida la ayuda exterior.

Para cualquier información dirigirse

a: PAM, via Ternie di Caracalla,

Roma, Italia.

En la noche del 2 1 al 22 de agostode 1986 se escapó del lago Nyos,situado en la dorsal volcánica del

oeste de Camerún, una nube de gascarbónico que provocó la muerte porasfixia de unas 1.700 personas y demillares de cabezas de ganado. Dosaños antes, el 16 de agosto de 1984, sehabía producido una catástrofesimilar, que causó 37 muertos, en ellago Monoun, que se encuentra aunos cien kilómetros. Por iniciativa

de la Unesco, en 1987 se celebró unaconferencia en Yaunde (Camerún), a

la que asistieron más de doscientosinvestigadoresyexpertos. ¿Se trata deun desprendimiento repentino degases, parcial o total, de las aguas dellago? ¿Provocado porun corrimientode tierras, la caída de una roca, un

viento violento, una surgencia deaguas profundas? ¿O podría tratarsede una erupción volcánica queexpulsó una reserva de gas carbó¬nico existente bajo el lago? Un equipode laUniversidad de Saboya (Francia)trata de extraer mediante tuberías el

gas que permanece apresado bajo elagua y cuyo volumen se calcula en250 millones de m3 en el lago Nyos yen 9.400.000 m3 en el lago Monoun.Para evitar toda nueva catástrofe, los

científicos han instalado una boyacon transmisión por satélite, vigi¬lancia sísmicayplataformas de medi¬ciones meteorológicas. Pero cuatromil personas han sido desplazadas desus hogares y se ven obligadas avivirlejos de ambos lagos.

LA L AL

LA PROTECCIÓN 1 US SELVAS GALERÍA

El estado de Sao Paulo, en Brasil, apenas conservahoy en día el 3% de su cubierta vegetal natural, y porculpa de la erosión se han perdido 200 millones detoneladas de tierra. Partiendo de estos datos se ha

puesto en marcha un programa de restauración delas selvas-galería de la cuenca de Jacaré-Pepira, bajola dirección de Carlos Joly, de la Universidad deCampinas. Hace ya varios decenios que las selvas-galería de orillas del río Jacaré-Pepira y de susafluentes han dejado paso a cultivos de caña de azú¬car y naranjales, pastos, zonas de recreo y obras deconstrucción de embalses hidroeléctricos. Con

ayuda de los propietarios de los terrenos y de losmunicipios se han reforestado 250 hectáreas.

Acaba de publicarse una obraextraordinaria, Environmental edu¬

cation for our common future,realizada conjuntamente por elPrograma de las Naciones Unidaspara el Medio Ambiente, la Unescoy Noruega. Este libro, destinado alos profesores europeos desde eljardín de infancia hasta la ense¬ñanza secundaria, presenta en suprimera parte un balance de lasituación ecológica de nuestro pla¬neta. En la segunda expone ejem¬plos de proyectos educativos denumerosas escuelas de Europa,ilustrados con diagramas y foto¬grafías. Los profesores de todas lasasignaturas encontrarán aquí suge¬rencias pedagógicas tan innova¬doras como útiles. Existe sólo en

inglés y puede obtenerse en laUnesco. 25

Tema

por France Bequette

En la playa de arena gris se ali¬nean las piraguas talladas entroncos. Sobre ellas se mecen

las palmas de los cocoteros. Losniños juegan alrededor de las .cabanas con techumbre de

hojas. Nos encontramos en Houakpé,cerca de Ouidah, a sesenta kilómetros

de Cotonú, en la provincia de Mono,relativamente cerca de la frontera

con Togo y a orillas del OcéanoAtlántico. Cuando en enero de 1988

Alain Courtel decidió pasar sus vaca¬ciones en Benin no lo hizo al azar.

De arriba hacia abajo, evaporación de salmuera

en la salina de Kpablé, en Benin. Marmitas de salmuera

encastradas en fogones "mejorados" que consumen

menos combustible.

26

Desde hace quince años es salinerode profesión esto es, explotadorde salinas en Guérande, una

pequeña ciudad francesa del depar¬tamento de Loire-Atlantique. Sabíaque el océano baña dos pueblos desal. La región de Ouidah se ha espe¬cializado precisamente en la extrac¬ción de sal marina. Apasionado por eldesarrollo y el medio ambiente, llegócon algunas direcciones, tarjetas pos¬tales de la salina de Guérande y undensímetro. Visitó los pueblos, seinformó y conoció a Matthias Toffi,un geógrafo que abandonó la uni¬versidad por el terreno. Se enteró deque la región era muypobre, la pescacada vez menos rentable, el trabajode la sal agotador para las mujeres yla leña escasa. ¿Leña para extraer lasal? No era ésta laúnica sorpresa queesperaba aAlain.

En efecto, las técnicas no son paranada las mismas. La que se empleaen Guérande consiste en dejar quelas fuertes mareas lleven el agua porcanales a depósitos de muy pocaprofundidad. El agua se calienta yse concentra por evaporación yluego, por gravedad, pasa a unsegundo estanque para ir a pararfinalmente a unos cristalizadores.

. La recolección es diaria entre junio yoctubre. Por término medio cada

cristalizador produce una toneladade sal. Cerca de 200 salineros pro¬ducen en Guérande 10.000 toneladas

de sal al año, a veces, los años buenos

como 1989, el doble, casi sin herra¬

mientas y sin causar daños al medioambiente.

¿Por qué rechazar una tradiciónsecular que parecía ser plenamentesatisfactoria? Porque la producciónde sal tenía consecuencias catastró¬

ficas para el medio ambiente.Durante la estación seca, el agua dela laguna de Ouéoué se retira total¬mente. Mientras los hombres van

a pescar, las mujeres rastrillan elsuelo impregnado de sal. Luego

lavan varias veces con agua lamezclade tierra y sal. En el fondo de loscanastos, en jofainas o crisoles seforma una salmuera de color ana¬

ranjado, que se vierte después enenormes marmitas encastradas en

un fogón "mejorado", esto es, conmenor consumo de combustible, yaque tiene una sola abertura paraintroducir la leña. A veces hay tresfogones encendidos bajo el techo delas oscuras cabanas. El calor, yaintenso fuera, es insoportabledentro. Y, sin embargo, las mujeresy los niños remueven con palos ellíquido espumante para que el aguase evapore más de prisa. "Hacen faltatres horas de ebullición para obtener 'cuatro kilos de sal", explica Matthias.Es decir, un metro cúbico de leña

por 125 kg de producción de sal.La mejor madera, que arde des¬

pacio y apenas deja cenizas, es la delmangle, árbol extraño que pareceestar encaramado en unos zancos

plantados en medio del cieno en quecrecen los manglares. Una franja deselva a la orilla del mar, entre cuyasraíces entrelazadas desovan los

peces. Como ya no queda casi nada,hay que recorrer a pie entre 6 y 10kilómetros o comprar haces de leñaque cuestan una fortuna: 8.000francos CFA, cuando 30 kg de sal sevenden por 2.000 . Unas dos mil per¬sonas, mujeres en su mayoría, pro¬ducen de 1 a 1,5 toneladas anuales

por familia. Alain habla a Matthias deGuérande: "En mi país, en Bretaña,decimos que la sal es hija del sol ydel viento, aquí es hija del fuego."Matthias comprende perfectamentela ventaja que significaría prescindirde la leña: el manglar se reconsti¬tuiríay los peces reaparecerían. Estádispuesto a probar.

En el verano de 1988 nace el

proyecto Pirattes (proyecto inte¬grado de investigaciones sobre elperfeccionamiento de las técnicastradicionales de extracción de sal),

Las salinas de

Guérande, en

Francia. Arriba a

la derecha, los

depósitos donde

se efectúa la

cristalización de

la sal.

financiado por la Misión Francesade Cooperación, el Ministerio deCooperación de Francia, el ComitéFrancés de Lucha contra el Hambre,

la Fundación de Francia y la regiónde la Baule. Lo animan la agrupa¬ción de productores de sal deGuérande, el Centro de InvestigaciónCientífica y Técnica de Benin y laAsociación de Voluntarios del

Progreso. Se trata de un extraordi¬nario ejemplo de cooperación Norte-Sur basado en la amistad, que tratade ofrecer soluciones simples yadaptadas tanto al medio como alas condiciones de lavida cotidiana.

Alain regresa a Bretaña para ocu¬parse de su recolección, y en octubrevuelve acompañado de François,salinero como él, para pasar cincomeses en Benin.

La primera formalidad indispen¬sable es presentarse al Dagbo Hou-non, gran sacerdote del mar y jefede los sacerdotes "vodu". Acom¬

pañado por Matthias, Alain se pre¬senta como servidor de la sal y esbien recibido. Hay que poner manosa la obra. Empieza por construir dosestanques pequeños en la aldea deLanhou, situada en la Boca del Río.Pero las cosas no son fáciles: el suelo

no es como el de Guérande, la arcilla

no es homogénea. Otros problemasson la humedad del aire, la pocafuerza del viento, la irregularidad dela amplitud de las mareas, las varia¬ciones de la salinidad del agua de lalaguna y los túneles que excavanunos cangrejos marinos llamados"toklins". Surgen también las difi

cultades inherentes a todo proyecto"yovo" (blanco) enAfrica. GenevièveDelbos, etnóloga del Centro Nacionalde Investigaciones Científicas deFrancia, que siguió el experimento, loexplica así: "El trabajo se hizo al ritmoentrecortado yagotador que imponíael doble aprendizaje del medio físicoy humano con el que los salinerosquerían colaborar..." A ello sesumaba la complejidad de las rela¬ciones humanas en una cultura en la

que persiste una interpretación tra¬dicional de los éxitos y reveses per¬sonales, de los desórdenes de la

sociedad humana y de los desequi¬librios de la naturaleza, que sebasa en la actuación de fuerzas

ocultas manipuladas por los quetienen el temible y temido poder de"dirigirlas".

Benin, cuna del vodu, es un paísmágico en el que hay que concillarselo sobrenatural seguramente másque en cualquier otro de Africa. Unanoche, bruscamente, la laguna sedividió en dos. El mar se metió por labrecha e inundó la salina, arrui¬

nando el primer mes de trabajo. Sóloquedaba una solución: alimentar lasalina con la salmuera que lasmujeres habían recogido en el fondode sus enormes canastos llenos de

tierra salada. Las dos tecnologías sefusionaron a la perfección. Pero notodo el mundo está convencido.

Entrevistamos a Marguerite, unamatrona que divide su tiempo entrelos partos y la recogida de la sal. Enuna islita de la laguna, cerca de lachoza donde se encuentra el horno

que su hijo alimenta con palmassecas, hay dos estanques poco pro¬fundos, tapizado uno con una pelí¬cula de plástico de color azul intensoy el otro con una buena capa dearcilla. Recoge un puñado de cris¬tales que se han formado en dosmeses: "El blanco pasa, dice lo quehay que hacer y luego se va. No nosgusta esta sal con los granos tangruesos. Hay que molerla." Aunqueno estaba en absoluto convencida,

Marguerite se avino a probar. Pero amediados de marzo de 1989 estaba

demasiado cansada para asistir a lagran fiesta dada por Pirattes enhonor del primer saco de sal frutode la cooperación. La semanasiguiente hubo una visita del DaboHou-non en persona. Recibió unaofrenda de djé (sal en fon, una de laslenguas oficiales del país) , aprovechóla ocasión para recordar a todos elcarácter sagrado de los bosques de lalaguna e imploró la benevolencia delos vodu para Pirattes, que en 1992ha sido galardonado con el GranPremio "Tecnología sin fronteras"del concurso Empresa y MedioAmbiente, organizado por laComisión de las Comunidades

Europeas.

FRANCE BEQUETTE,

periodistafrancoamericanaespecialista en problemasambientales, contribuye desde 1985al programa WANAD-Unesco deformación de periodistas africanosde agencias de prensa.

Tema

<

11 U

Taller Infantil en

la reserva de Las

Cabezas de San

Juan, un

programa "

educativo del

Fondo de

Conservación de

Puerto Rico.

"|"o cabe duda de que el Señorhizo horas extraordinarias

para crear una isla tan mara¬villosa", suelen decir los por¬torriqueños, ciudadanosestadounidenses un tanto

especiales, ya que no paganimpuestos federales y su lengua ofi¬cial es el español.

Formada hace 120 millones dé

años como consecuencia de una

serie de erupciones volcánicas,Puerto Rico es la más pequeña y lamás oriental de las grandes Antillas,a unos cien kilómetros al este de la

República Dominicana. Fue descu¬bierta por Cristóbal Colón en 1493.En 1898 dejó de ser española paraconvertirse en un estado libre aso¬

ciado (commonwealth) de EstadosUnidos. En su minúsculo territorio

de 160 km por 35 kmviven3.500.000habitantes locamente enamorados

de su isla. Esta, tradicionalmente

agrícola, empezó a industrializarsehace exactamente cincuenta años.

El programa llamado Bootstrap y enespañol Fomento se puso en marchapara que los portorriqueños sehicieran cargo de su propio destino.Sus polos principales son la industriafarmacéutica, la informáticay el ins¬trumental científico. Pero el desem¬

pleo afecta al 16% de la poblaciónactiva. Más de la mitad de las familias

de la isla son tan pobres que recibensubsidios y ayuda alimentaria delgobierno de Estados Unidos, y2.500.000 portorriqueños van abuscar trabajo ydinero al continente.

Sin embargo, al aproximarse elavión al aeropuerto de San Juan,Puerto Rico se ve como un rectán¬

gulo verde rodeado por el mar colorturquesa. Las playas blancas y lashileras de cocoteros hacen pensaren el Paraíso. Pero más allá del

paraíso para turistas, Puerto Rico lo

28

es del arqueólogo, del botánico ydel ornitólogo. Las primeras exca¬vaciones han permitido descubrir

vestigios de grupos de indígenasprocedentes del nordeste de Amé¬rica del Sur a principios de la eracristiana: alfarería, mascarillas mode¬

ladas en arcilla y petroglifos rupes¬tres. El estudio de la naturaleza es

apasionante. Existen en la isla 3.000especies vegetales, 232 familias depájaros y numerosos reptiles y anfi¬bios. La mayor parte de la fauna yde la flora es endémica, y algunasespecies son únicas en el mundo.Por esta razón, el 24 de diciembre

de 1968 el gobernador de PuertoRico, el ministro del Interior de

Estados Unidos y el director de laadministración del desanollo econó¬

mico decidieron actuar para pro¬teger los tesoros amenazados ycrearon un Fondo de Conservación

(Conservation Tmst) alimentado con

la contribución de las compañíaspetroleras instaladas en la isla y condonaciones privadas, deducibles delos impuestos.

La reserva de

Punta Ballena,

Guánica (Puerto

Rico).

Ya era hora de hacerlo. El cañón

San Cristóbal, que corta como unespadazo la cadena montañosa delcentro de la isla, se había convertido

en un vertedero en el que las ciu¬dades próximas amontonabanbasuras y restos de automóviles.Regularmente se producían incen¬dios. En 1974 el Fondo compró casi500 hectáreas en la ribera septen¬trional del cañón e inició su lim¬

pieza, devolviéndolo a la vida sal¬

vaje y a los halcones. Actualmentepiensa seguir adquiriendo terrenosen la ribera meridional y trazar enella senderos que permitan descu¬brir y explicar este sitio y los ani¬males salvajes que lo pueblan.

La verdadera amenaza contra

Punta Ballena, en la región sudocci¬dental de la isla, no eran las basuras,sino el turismo. Se trata de un eco¬

sistema único, una serie de caletas de

aguas claras y manglares que bor¬dean el bosque costero seco deGuánica, de tal belleza que en 1984la Unesco decidió declararla Reserva

de Biosfera. En cuanto el Fondo

compró al Club Méditerranée las 80hectáreas de bosque, quedó prote¬gido el habitat de especies raras yamenazadas, como el sapo concresta, el chotacabras portorriqueño,el mirlo de lomo amarillo, el manatí

y la tortuga con pico de halcón. Lamisma amenaza, sumada a la urba¬

nización, se cernía también sobre la

bahía fosforescente de la Parguera,un poco más al oeste. En la oscu¬ridad de la noche, unos microorga¬nismos luminiscentes (Pyrodiniumbahamensis) transforman la bahía

en un mar de fuego. Como el centrode la isla está formado por colinas ymontañas, la población se amon¬tona en una estrecha llanura quebordea el mar. De no ser por la inter¬vención del Fondo, lo que es ahora lareserva de Las Cabezas de San Juansería un estacionamiento.

El Fondo consiguió arrancar 150hectáreas a la especulación inmo¬biliariapara convertirlas en la reservaInés María Mendoza de Muñoz

Marín, al sudeste de la isla. Es una

zona de pastos y de acantilados de

gres bordeados de árboles en la queviven el gorrión saltamontes, elpinzón real portorriqueño, el car¬denal de bigotes negros y el halcóncernícalo americano. Otra maravilla

de la región oriental de la isla es elbosque de pterocarpos. Estos árbolesde frutos alados, también llamados

"madera de coral" por el color rojode su savia, tienen poderosas raícesque se hunden en el suelo panta¬noso. Desde 1990 se han comprado350 hectáreas que gozan de la pro¬tección del Fondo.

Puerto Rico, pese a la industriali¬

zación, la urbanizacióny la gran den¬sidad de población, da la impresiónde un oasis de limpieza en el que seha atajado la contaminación. Losvientos alisios purifican constante¬mente el aire. Y la voluntad de pre¬servar el medio ambiente es una

preocupación fundamental. ElFondo de Conservación resulta

eficaz y está bien administrado. ¿Noconstituye acaso un modelo dignode ser imitado?

A lo largo de tossiglos

* Tomado de Iglulikand Caribou texts,

por K. Rasmussen,Nueva York, AMS

Press, 1930.

T os inuit (a los que se sueleI llamar esquimales) viven enJJ tierras árticas diseminadas porAlaska, Groenlandia y Canadá,pero tienen en común la lengua yla cultura. Su literatura, de

tradición oral, así como su arte,

de una gran audacia plástica,muestran un acuerdo profundodel hombre con el mundo.

En esta página se citan textos de Compagnons dusoleil, una antología de los grandes textos de lahumanidad sobre las relaciones entre el hombre yla naturaleza, coeditada por la Unesco, lasediciones de La Découverte (Paris) y la Fundaciónpara el Progreso del Hombre. La dirección de estaantología, publicada en 1992, estuvo a cargo delhistoriador africano Joseph Ki-Zerbo, conïacolaboración de Marie-Josèphe Beaud.

En tiempos remotos no había ladrones entrelos hombres; pero un día, durante unafiesta,ocurrió que unos hermanos, mientras los demáscantaban, se quedaron solos en una casa dondeencontraron una piel curtida y un pedernal. Seapoderaron de esos objetos, peroinmediatamente después les entró un grantemor de sus semejantes.

"Qué hacer para escapar de todo el mundo",dijo uno de ellos.

"Transformémonos en caribúes", respondió elotro.

"Pero la gente nos matará. ""Transformémonos en lobos. ""Pero la gente nos matará. ""Transformémonos en zorros. "Pasaron así revista a todos los animales, pero

siempre tenían miedo de que la gente losmatara; entonces uno de ellos declaró:

"Transformémonos en trueno y en relámpago,y así nadie podrá atraparnos. "

Así lo hicieron y subieron al cielo. Hoy día,cuando hay truenos y relámpagos, es porqueuno de ellos tamborilea sobre la piel seca decaribú mientras el otro saca chispasfrotando supedernal.

(Relatado por Anarquil G.)

Il doping, an artifido inútilpor Miguel Angel Bermúdez Escobar

Dibujo de Blachon.

CUENTA la leyenda que un día un jovencazador de una tribu del norte de lo quemuchísimo más tarde se llamaría conti¬

nente americano fue a pedir a su chamán la fór¬mula para llegar a ser el cazador más veloz ydiestro de la tribu. Este le respondió: "Atrapa laprimera mariposa monarca que veas alcomenzar el verano, frótate el pecho con elpolvo dorado de sus alas y llegarás a ser tanveloz como ella." El cazador así lo hizo yadquirió con ese hechizo la velocidad de flechade la iridiscente soberana.

También la historia nos relata que en laAntigua Roma los gladiadores comían la carne

cruda de las bestias salvajes para adquirir así sufuerza y ferocidad, y que en Grecia con elpolvo y el sudor de los cuerpos de los lucha¬dores se fabricaba un preciado tónico que susémulos y admiradores se disputaban conven¬cidos de que les daría el vigor y la valentía desus ídolos.

Gracias al testimonio de los cronistas de

Indias conocemos el uso que se hacía dediversas plantas y compuestos en las sociedadesprecolombinas con fines curativos o ceremo¬niales o para evitar la fatiga. Sabemos así que losindios que se desempeñaban como auxiliares deHernán Cortés en México empleaban el peyote

31

32

durante sus fatigosas marchas, y que los nativosde las regiones andinas de Bolivia, Perú,Ecuador y Colombia masticaban las hojas decoca para distraer el hambre y el cansancio.Estas culturas cultivaban la Erythroxylon-coca,cuyas propiedades estimulantes y anoréxicasconocían muy bien. Tan difundido fue su usoque las hojas de esta planta llegaron a ser unaespecie de moneda dé cambio denominada"cocada".

Más cerca de nosotros, durante la SegundaGuerra Mundial, se distribuía a las tropas"raciones especiales" para combatir el can¬sancio, el frío y excitar a' los soldados para elcombate. Es también conocido el consumo de

marihuana y de otras sustancias psicotrópicaspor los soldados norteamericanos durante laguerra de Vietnam.

Aunque no se sabe con precisión en quémomento este uso se derivó hacia el deporte,podemos estar seguros de que el hombre no hacejado nunca en su afán de mejorar sus apti¬tudes y su rendimiento físico. Con el avance yel desarrollo de la tecnología muchas de esasprácticas se han ido perfeccionado hasta llegar ala moderna farmacopea, madre de los simpati-comiméticos y anabolizantes actuales.

La varita mágica del doping

Tanto en las prácticas primitivas como modernasresulta imposible distinguir con claridad losefectos psicológicos o de sugestión, conocidos enla medicina moderna como efecto "placebo", dela acción fisiológica propiamente dicha, quealtera de manera real y efectiva el rendimientofísico.

El efecto mágico de las prácticas primitivasno está ausente del deporte moderno. Entrena¬dores y deportistas coinciden en reconocer quefactores psicológicos, como la confianza en símismo, la motivación, el deseo de ganar, tienenuna influencia decisiva sobre los resultados

deportivos. Del mismo modo, un alimento, unavitamina o una inyección sin ninguna eficaciareal pueden ser de gran utilidad para el depor¬tista si éste está convencido de su acción bené¬

fica. Hay que tener en cuenta también el efectopsicológico sobre los demás competidores,como sucedió por ejemplo con el empleo deoxígeno por la delegación norteamericanadurante los Juegos Olímpicos de México o conaquel atleta que lograba minar la confianza desus adversarios llevándose a la boca en la línea

de partida una gran tableta totalmente inocua.El resultado de una competencia depende de

innumerables factores el determinante bioge-nético, la preparación física y técnica, la estra¬tegia táctica, el estado psicológico . Además,las diferencias entre las marcas que los depor¬tistas obtienen son tan escasas que hay querecurrir a aparatos electrónicos para medirlas.Resulta pues imposible determinar entre todosaquellos factores cuál ha sido responsable de laventaja y más aun si las ayudas extradeportivas,como el doping, han jugado algún papel. Y en elsupuesto de que el doping haya contribuido amejorar el rendimiento del deportista, cómo

La atleta norteamericana

Florence Griffith (la primera

de la derecha) antes de la

partida de la carrera de

relevos de 4 x 400 metros

v femeninos en los Juegos

Olímpicos de Seúl, 1988.

MIGUEL ÁNGEL

BERMÚDEZ ESCOBAR,especialista colombiano en

administración del deporte,es profesor en la Universidad

del Rosario, Bogotá. Directorgeneral del InstitutoColombiano de la

Juventud y el Deporte yvicepresidente del Comité

Intergubernamental para laEducación Física y el Deporte(CIGEPS), ha contribuidoactivamente al desarrollo del

deporte en su país, enparticular del ciclismo.

saber qué parte de responsabilidad correspondeal efecto placebo y qué parte al efecto químico.

Estamos convencidos de que si fuera posibledeterminar con precisión la acción de cada unode estos factores, la que correspondería aldoping sería tan pírrica que un deportista o unentrenador sensato se convencería rápidamentede que por un margen tan escaso no vale lapena recurrir a prácticas reñidas con la ética yque perjudican gravemente la salud.

La victoria a cualquier precio

Todos queremos ganar, porque el triunfo pareceser hoy día la clave de la felicidad, la llave delparaíso terrenal. Tener éxito, ser el primero, sinque importe el precio que haya que pagar porello, es la divisa del hombre moderno.

El deporte desde luego no podía escapar aesa obsesión. Así el afán de ganar a toda costaha terminado por pervertir el espíritu depor¬tivo que quiso infundir el barón Pierre deCoubertin a los Juegos Olímpicos cuandoafirmó en 1908 que lo importante "no es ganarsino participar".

¿Y ello por qué? ¿Por el mero placer de lavictoria, de ser el primero? Bien sabemos queno. Los principios románticos que animaban al

deporte unas décadas atrás han sido reempla¬zados por otros menos altruistas y más afinescon nuestra sociedad de consumo.

En primer lugar, el triunfo en el deportetiene hoy día un valor material que nuncahubieran imaginado quienes idealizaron susbeneficios, como los antiguos griegos, oquienes sentaron las bases del deporte contem¬poráneo como Pierre de Coubertin. Además,los que rodean al deportista y se benefician consu triunfo, suelen incitarlos, sin preocuparse enabsoluto por el bienestar físico del atleta, a uti¬lizar sustancias que mejoran el rendimientodeportivo pero que son en realidad contrapro¬ducentes a largo plazo.

Todas estas presiones, el deseo de victoriapersonal, las exigencias del equipo, de las orga¬nizaciones deportivas y comerciales, así comode la sociedad en general, llegan a pesar másque todas las advertencias acerca de los riesgosdel doping e incluso que las prohibiciones delos reglamentos deportivos.

UN PROBLEMA ÉTICO

Los deportistas se ven, pues, ante una tristealternativa: o bien usar drogas o cualquier otraayuda para mejorar su rendimiento o resignarse

a que los adversarios que recurren a ellas lesaventajen.

Para acallar cualquier tipo de escrúpulos, losdefensores del doping esgrimen múltiples argu¬mentos. Así suelen señalar que los daños queprovocan las drogas son menores que laslesiones, muertes y secuelas de por vida quecausa la práctica del deporte en sí mismo, o nohacen distinción alguna entre el empleo dedrogas para combatir la enfermedad y elrecurso a ellas para mejorar las marcas depor¬tivas. Todos estos argumentos, desde luegonada convincentes, hacen caso omiso de ladimensión ética del problema.

El doping, como cualquier otra prácticafraudulenta que pretenda alterar el potencialbiológico de manera artificial, pervierte la natu¬raleza del deporte, pues niega la posibilidad deque la excelencia humana se manifieste demanera natural y auténtica. Al dar una ventajadesleal e injusta a un competidor sobre losdemás, el doping desconoce y viola las reglasmismas del deporte. No sólo corrompe moral-mente al deportista, sino que pone en peligro subienestar físico, psicológico y social. Porúltimo, afecta negativamente a la imagen deldeporte y de cualquier evento deportivo. l3 33

ffus/a: final de juego por ju srebnHskí

H

34

ALEXEI SREBNITSKI,

periodista ruso, es jefe deredacción del periódicomoscovita Ismailovski

Vestnik (El mensajero deIsmailovo). Miembro de laAsociación Internacional de

Periodistas Deportivos (AIPS),ha publicado numerosas

obras sobre los deportistas y

el deporte.

ACE unos días recibí en la dirección de la

que fuera la agencia de prensa Novosti,donde trabajé durante treinta años, un

paquete procedente de Estados Unidos. Ste¬phanie Vogel, de Seattle, se había enteradoleyendo mis reportajes en Soviet Ufe de que yoera un viejo amigo de Valeri Brumel, su depor¬tista favorito, y me rogaba que le hiciera llegaralgunos recuerdos tarjetas postales, catá¬logos, insignias, medallas conmemorativas.Encontré también dentro del paquete unasrodajas de salchichón en un embalaje de plás¬tico con una tarjeta que decía: "¡Brumel, ojaláque en estos tiempos de penuria el salchichón teayude a recobrar fuerzas!"

Este gesto que a primera vista pareceabsurdo, en realidad no lo es tanto. En efecto,en Soviet Ufe yo había relatado las dificultadesdel ex campeón olímpico (1964) de salto dealtura desde que una grave lesión lo había ale¬jado del deporte de alta competición. De lanoche a la mañana, Brumel, orgullo de la UniónSoviética, había quedado en la calle: sus servi¬cios ya no eran necesarios. Gracias a su opti¬mismo y a su desenvoltura había conseguidosobrevivir dictando conferencias y publicandosu autobiografía. Pero había pasado momentosmuy duros, y en ocasiones para poder comerhabía tenido que retornar botellas consignadasa 12 copeks. Recién con la perestroika gorva-choviana empezó a recibir una pensión de inva¬lidez de 110 rublos mensuales. Con semejantesingresos, el salchichón de la amiga norteameri¬cana no estaría de más en la mesa del ex cam¬

peón del mundo.En el contexto soviético esta historia no

tiene nada de extraordinario. Mientras aportanal país medallas y divisas , los deportistasreciben subsidios, y los medios de informaciónlos cubren de honores. Pero al primer traspié,se les abandona a su suerte. Si son compla¬cientes y están en buenos términos con sussuperiores, pueden llegar a obtener un puestode entrenador o de administrador. Pero si,

como Brumel, tienen un carácter más indepen¬diente, entonces es mejor que no esperen ayudaalguna. Por ese motivo, durante mucho tiempo,los deportistas soviéticos que tenían oportu¬nidad de viajar al extranjero se dedicaron al trá¬fico ilícito de todo tipo de mercancías en previ¬sión de un futuro difícil.

La carrera de un atleta es breve. Las ten¬

siones que el organismo debe soportar, la pre¬sión permanente y el estrés acaban por pro¬vocar inevitablemente traumatismos graves yun envejecimiento precoz. "Para la salud la cer¬veza es más saludable que el deporte", se diceen broma, pero no sin razón. A los veintitrésaños, Brumel, joven veterano del deporte, ya se

había sometido a una operación del meniscopor una afección frecuente entre los atletas desalto de altura. Pero no todos los deportistastienen la misma suerte. Sólo se ayuda a los quesiguen en la pugna por las medallas y lasmarcas. Incluso se les envía a seguir un trata¬miento en Finlandia, como al legendario VictorSaneev, campeón del mundo y campeón olím¬pico (1968 y 1976) de triple salto. Y si es nece¬sario el Ministerio de Deportes pagará endivisas. En cuanto a los que ya están fuera deservicio, qué se va a hacer....

la triste historia de

Vladimir Kissilev

Empezamos apenas a reconocer, no sinmalestar, que la fiebre del doping "fruto delas costumbres burguesas" como se decíaentonces se había apoderado también del"primer Estado obrero y campesino" delmundo. En las Olimpiadas de 1980 en Moscú

calificadas entonces de "brillantes" y hoy díade "vergonzosas" la selección soviética apro¬vechó su condición de anfitrión para entregarseal doping como nunca antes lo había hecho.Sólo en atletismo los soviéticos arramblaron

con quince medallas de oro, lo que es excesivoy sospechoso, incluso si los norteamericanosestaban ausentes del torneo. Entre los cam¬

peones, hubo algunos de los que nunca se habíaoído hablar antes de los Juegos y de los quenunca se supo después.

Vladimir Kissilev sorprendió a todo elmundo al ganar la prueba de lanzamiento debala. Poco después desapareció por completode la escena. Recién hoy conocemos su tristedestino. Los estragos del doping no tardaron enhacerse sentir: el ex campeón quedó lisiado ymás de una vez estuvo a punto de morir.Consiguió salir adelante, pero sin que las ins¬tancias superiores, esos funcionarios a los quesus proezas aportaron distinciones y puestoslucrativos, hicieran nada por él.

El célebre jugador de hockey Victor Yaku-chev, por su parte, se salvó de la invalidez gra¬cias a la solidaridad de un deportista extranjero.Yakuchev había obtenido un puesto de entre¬nador y disfrutaba de una situación relativa¬mente cómoda cuando las consecuencias de

viejas lesiones empezaron a manifestarse. A lolargo de su brillante carrera, Yakuchev habíasufrido varias fracturas del fémur. Apenas enpie se le enviaba nuevamente a la pista de hielo.Afectado de coxartrosis, estaba definitivamentecondenado a la inmovilidad de no someterse a

una operación de la cadera, que no se practicabaen nuestro país.

Sin la lenta pero segura democratización dela sociedad rusa, el famoso jugador sueco de

Valerl Brumel,

campeón olímpico de salto

de altura en 1964

y recordman del mundo

hasta 1973.

hockey Tumba-Juhensson, convertido enhombre de negocios, nunca hubiera abierto unclub de golf en Moscú. Al enterarse, duranteuna de sus frecuentes estancias en la capital, dela desgracia de su viejo camarada y adversariode juego, lanzó una colecta en Suecia. Amplia¬mente difundida por los medios de comunica¬ción, la colecta logró reunir las 15.000 coronasnecesarias para la operación. Como más tardelos cirujanos se negaron a percibir honorarioalguno, con esta suma se creó la FundaciónTumba de ayuda a deportistas inválidos. Yaku¬chev volvió a caminar.

Campeones en venta

Los vientos del cambio que han soplado en laUnión Soviética, primero, en la CEI más tarde,

y por último en Rusia, han llegado también almundo del deporte. Así, han surgido variosfondos de beneficencia en favor de deportistasveteranos o inválidos, y se ha creado un sindi¬cato de trabajadores de la educación física, eldeporte y el turismo.

Todos estos organismos proclaman noblesobjetivos y se expresan en términos más noblesaun, pero el caos económico en que se debate elpaís es tal que sería ilusorio esperar una rápidasolución de esos problemas. Sin embargo, expe¬rimento un profundo malestar al ver quejóvenes deportistas, ni veteranos, ni inválidos,no tienen reparos en pedir lo que cabría cali¬ficar de limosna. Alexandre Zaitzev, campeónolímpico de patinaje artístico en parejas, que qhfue marido y compañero de Irina Rodnina, OD

m

Serguel Bubka emprende el

vuelo por el récord mundial

en un salto con pértiga de

seis metros en el Meeting de

París, en 1985.

36

observó consternado que, en una conferenciade prensa durante los Juegos de Invierno deAlbertville, Francia, en 1992, algunos depor¬tistas susurraban al oído de los periodistas unnúmero de cuenta bancaria, apelando por suintermedio a la generosidad del público.

Desde que se ha levantado là cortina dehierro, han aparecido en el mercado mundialdecenas e incluso centenares de jóvenes atletasde la CEI que se ofrecen al mejor postor. Salvoraras excepciones, se les proponen condicionesmodestas, aunque superiores a las que encuen¬tran en sus propios países. Serguei Bubka, queacaba de instalarse en Alemania, me confió queel club de atletismo de Berlín le propuso120.000 dólares, una vivienda excelente, uncoche y otras ventajas, como por ejemplo laposibilidad de viajar con su familia cuando lodeseara a Donetsk, su ciudad natal. Pero setrata de Bubka, un campeón insuperable, quemerecería mucho más. Sus colegas en diferentesdisciplinas aceptan ofertas menos tentadoras,pero que les aseguran, a ellos y a su familia, unavida decente durante algunos años.

Resultado: el fútbol en la CEI se ha desan

grado. Cientos de grandes jugadores han par¬tido para defender los colores de clubs profe¬sionales en toda Europa occidental. La selec¬ción nacional de hockey, por su parte, estáobligada a presentarse en los torneos interna¬cionales con su segunda e incluso su terceradivisión, ya que sus mejores elementos estánahora del otro lado del Atlántico.

En las fauces del monstruo

Si los jóvenes deportistas logran defenderse, lasituación de los mayores es menos brillante.Son pocos los que salen tan airosos como YuriSedykh. A los treinta y siete años no sabe másque lanzar el martillo. Pero lo lanza muy lejos,y nadie en el mundo lo ha superado. Este viejodeportista aportará mucho al atletismo deFrancia, donde se ha instalado con su familia; yse ganará la vida mejor que en su país. Pero esun caso excepcional. La mayoría de los queabandonan la competición están condenados avegetar.

Después de haber sacrificado su vida y susalud a ese monstruo devorador que es eldeporte de alto nivel, su destino es esperaralgún favor de esos nuevos fondos de ayudaque se han creado para ellos, pero cuyas posibi¬lidades no hay que sobreestimar. Brumel mecontó, esforzándose por disimular la ironía, queBoris Lagutin, ex boxeador de peso medio ydos veces campeón olímpico (1960 y 1964), lehabía hecho entrega, de parte de un fondo deprotección social, de una asignación excep¬cional de ... 500 rublos.

He sabido también que el Fondo Yachin dela sociedad deportiva Dynamo ha establecidopara sus veteranos, con la ayuda de sus equiposde fútbol y de hockey, una pensión mensual de500 rublos. Algunos pagos ya se han realizado.Conozco la valiosa ayuda que el fondo de laAsociación XXI presta a los- deportistas: hapermitido por ejemplo la recuperación deNikolai Babochin, un maravilloso luchador quehabía perdido toda esperanza de curación. Haymil ejemplos concretos de lo que esos orga¬nismos de beneficencia pueden hacer paradevolver la vida, y el término no es exagerado, aviejas estrellas del deporte que corren el riesgode apagarse prematuramente como los juga¬dores de baloncesto Anatoli Polivda yAlexandre Siznenko, el hombre más alto delmundo con sus 2,42 m.

La situación está cambiando y los resultadosterminarán por verse. Todo esto es nuevo paranosotros, acostumbrados como estábamos aesperarlo todo del Estado, que actualmentetiene otros motivos de preocupación.

Todavía no he tenido oportunidad deentregar a Brumel su salchichón. Se encuentraactualmente en Italia, donde los genoveses lehan otorgado un premio por sus proezas depor¬tivas y país donde desea obtener la naturaliza¬ción, pues los ciudadanos rusos tienen ahoraderecho a la doble nacionalidad. Sigo conser¬vando su salchichón en recuerdo de la amable

Stephanie y de la época, todavía reciente, en quelas cosas no iban tan bien. O

¿I/ene ef deporte ana moral?por Michel Caillot

S

Salto de longitud del atleta

norteamericano Carl Lewis,

en los Juegos Olímpicos de

Los Angeles, en 1984.

íí ^^ I, el deporte es una orden de caba¬llería, es honra, ética y estética, peroconcebidas para todas las clases y

todos los pueblos, a los que mezcla fraternal¬mente por todo el orbe terrestre. (...) Sí, eldeporte es una educación, la educación másconcreta, la del carácter. (...) Sí, el deporte esuna cultura, porque los gestos efímeros quetraza en el tiempo y en el espacio para nada,por puro placer, como dice Platón ponen demanifiesto, con dramático brillo, los valoresmás elementales pero también, precisamentepor ello, los más profundos y amplios queposee cada pueblo y hasta la propia especiehumana, y finalmente porque es creador de be¬lleza, sobre todo para quienes menos posibili¬dades tienen de gozar de ella."

En un discurso pronunciado en 1963, elDirector General de la Unesco, Sr. René Maheu,

se hacía eco de los grandes temas de la mitologíadel deporte, para la que esta palabra está aso¬ciada a lealtad, pureza, belleza, moralidad y fra¬ternidad, y dotada a la vez de un sentido ético yestético.

LOS DISCURSOS Y LA REALIDAD

El concepto de ética, que es reciente en elmundo de los negocios, parece ser consubstan¬cial al deporte, del que se diría que es ético porexcelencia. Los mitos deportivos tienen unpoder devastador: el mito de la perennidad deldeporte a través de los tiempos (el deporte esahistórico), el mito del origen primitivo deldeporte y de la naturaleza humana (el hombre esun animal deportivo) y el mito del deporte per¬vertido (el puro deporte, neutro, ha sido desca¬rriado, corrompido, confiscado). La distinciónentre el deporte por sí mismo y el deporte

exclusivamente orientado al triunfo puede darlugar a bizantinismos sin cuento acerca delgrado de perversión de un ideal fantasmagórico.

Habría que empezar por ponerse de acuerdosobre qué es el deporte. Para el sentido común,esta palabra se aplica a todas las formas, más omenos intensas, de actividad física, desde la

excursión en bicicleta con los amigos hasta lafinal de la Copa del Mundo de fútbol. Esta defi¬nición es, por su amplitud, inoperante: unaactitud rigurosa nos lleva a entender el deportecomo una actividad física competitiva, institu¬cionalizada y estructural e históricamente vincu¬lada con la sociedad industrial. Práctica corporalpreponderante en las sociedades basadas en lacompetencia, es al mismo tiempo competiciónsometida a reglas y jerarquización de loscuerpos. La forma deportiva competitiva de lasactividades corporales, caracterizada por la bús¬queda sistemática de la proeza, es;un fenómenosocial relativamente reciente: el deporte de hoyen día no es el que ha existido siempre. Plantéaseentonces la siguiente pregunta: ¿qué valorestransmite realmente el deporte actual? ¿No hayun abismo entre los valores que proclama y losque pone en práctica?

Caída libre en monoesquí.

Moral y religión

Según Kant, el postulado de la moral es la exis¬tencia de Dios. Pierre de Coubertin, renovador

de las Olimpiadas, basa también las nocionesmorales en la creencia religiosa. En A losjóvenes deportistas de todas las naciones (1927),

proclama: "Al renovar una institución que tieneveinticinco siglos de antigüedad, hemos que¬rido que podáis volver a ser adeptos de la reli¬gión del deporte tal como la entendían losgrandes antepasados. En el mundo moderno,pletórico de vigorosas posibilidades y al mismotiempo amenazado por una peligrosa deca¬dencia, el olimpismo puede ser escuela denobleza y de pureza morales, tanto como deresistencia y energía física." Para él no cabe lamenor duda: el deporte, lo mismo que la reli¬gión, esta "íntimamente unido a la moral". Aligual que ella, tranquiliza y consuela. Su prác¬tica muy extendida constituirá la base de unavasta reforma social y ética capaz de forjar unacivilización nueva. El deporte debe librar a lasociedad de todos sus males (el alcoholismo, ladepravación de las costumbres, la malignidad,la holganza, el erotismo desenfrenado, etc.) einstaurar la concordia nacional, la unión

sagrada, al haber resuelto definitivamente elproblema de la lucha de clases.

Su doctrina filosófico-religiosa según suspropias palabras ha inspirado a la inmensamayoría de los ideólogos, periodistas y escri¬tores que, hoy como ayer, se embriagan con lasvirtudes terapéuticas del deporte y con susupuesta capacidad de "perfeccionar las almasal perfeccionar los cuerpos". En 1942, en plenaguerra, Maurice Baquet, teórico del PartidoComunista francés, estimaba que la actividadfísica competitiva nos conducía "hacia la crea¬ción del antiguo ideal: el hombre hermoso,

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Ochenta paracaidistas

europeas se encontraron en

1990 en el cielo de Niort

(Francia) para formar esta

figura, con la que lograron el

récord del mundo.

MICHEL CAILLAT,francés, es profesor deeconomía. Ex periodista, ha

publicado L'idéologie du

sport en France (La ideologíadel deporte en Francia, 1989)y Sport en miettes (El deportehecho añicos, 1981). Escoautor de dos ensayos quetratan del ollmpismo y delmundo del fútbol.

bueno y valiente, no sólo en el estadio sinotambién fuera de él". Doce años después, en elotro extremo del espectro político, se decía enel Ensayo de doctrina gaullista: "La esenciamoral de la actividad deportiva no es el desin¬terés, sino la lealtad (...). El juego limpio es laregla básica del deporte (...). La lealtad de lacompetición es la garantía de la autenticidad delos valores establecidos en el estadio. Confiere

una calidad humana al mundo deportivo (...). Eldeporte, factor de desarrollo individual, ele¬mento indispensable de la organización social,contribuye al progreso de la humanidad."

La historia de los discursos deportivos, esaincesante logorrea, ese increíble tartamudeoextático, ¿es la historia del deporte? ¿No siguesiendo el discurso deportivo un discurso deldeber-ser? Desde sus principios, el deporte estáamenazado. La hora de su nacimiento es tam¬

bién la de los primeros síntomas y la de las pri¬meras angustias para curarlo. Ya en 1902 Pierrede Coubertin denunciaba la inmoralidad de las

exhibiciones a bombo y platillo y pedía que eldeporte pudiera prosperar en un ambiente dedesinterés y espíritu caballeresco. El dinero, la

violencia, las trampas, la politización, el nacio¬nalismo y el doping están minando la institu¬ción. Pero sus turiferarios exigen regularmenteque se ponga "orden en este escándalo, endefensa de la elevada moral del deporte". Sediría que va siendo hora de plantear claramentela pregunta: ¿tiene el deporte una moral?

La violación

de los derechos humanos

Desde un punto de vista ético es inconcebiblejustificar una acción meramente por su eficacia.¿Cómo hablar entonces de ética en el deportede competición? El atleta, cualquiera que sea sunivel, se prepara constantemente en función deun único objetivo: la victoria. Victoria sobre eladversario, sobre sí mismo, sobre el tiempo,victoria por la patria. Aquí tiene su origen laformidable ilusión del deporte, la de la omnipo¬tencia corporal del deportista. Pero el deportede competición es ante todo desposesión delcuerpo. Cuerpo atrapado enseguida por el sis¬tema (problema, frecuentemente soslayado, delentrenamiento intensivo y precoz), cuerporobotizado (en aras de la eficacia óptima), 39

Abajo, ceremonia de

Inauguración de los XI

Juegos Olímpicos de Berlín,

en 1936.

A la derecha, el

entrenamiento precoz, un

problema que suele

soslayarse.

cuerpo maltratado (masoquismo, aceptación deriesgos, heridas), cuerpo dominado y mante¬nido a raya, alienado, cuerpo mercancía. En esaloca carrera en pos de la proeza, el deportistainstrumentalizado está dispuesto a todo porconseguir que brillen los colores de su país, desu región o de su pueblo.

La moral de la competición es una moral deesfuerzo, de sacrificio, de violencia, simbólica o

no. El sistema deportivo escoge, clasifica, dis¬tingue, elimina, selecciona, y todo el que lopractica, ya sea un dios del estadio (!) o unsimple atleta de algún club, lleva en su cuerpouna especie de "amor-odio". Tiene que llegarhasta el límite para experimentar el más intensojúbilo en medio del dolor más intenso. Es el"ascetismo gozoso", pero también es un adoc¬trinamiento moral, en la medida en que imponevalores que son los cimientos de nuestrasociedad: elitismo, abstinencia, sumisión, obe¬

diencia y privación.Para hablar de una ética del deporte de com¬

petición hay que creer en su pureza original, enun ideal pervertido por la sociedad y por laforma en que lo ha utilizado. Y hay que negarsea ver también que este deporte ha sido conharta frecuencia cómplice de algunas viola¬ciones de los derechos humanos. En 1936 el

movimiento deportivo, con el apoyo de la clasepolítica y de la prensa, celebra alegremente laXI Olimpiada en Berlín. En 1956, los Juegos deMelbourne se abren en el momento mismo en

que los tanques soviéticos "pacifican" Hungría,país hermano. Doce años más tarde, en México,

la llama olímpica se enciende pocos días des¬pués de la invasión de Checoslovaquia por lastropas del Pacto de Varsovia y a pocas horas deque la represión de una manifestación de estu¬diantes y obreros mexicanos dejara 40 cadá¬veres en la Plaza de las Tres Culturas. La Copadel Mundo de 1978 se jugó en Argentina, dondelas desapariciones y los asesinatos estabanentonces a la orden del día, a escasos metros de

un centro de tortura. ¿Es aceptable organizaruna importante competición deportiva en unpaís en el que las violaciones de los derechosson masivas y sistemáticas? En 1980, elCOBOM (Colectivo para el Boicoteo de losJuegos Olímpicos de Moscú), vuelve a plantearla pregunta. Una vez más la comunidad depor¬tiva (deportistas, periodistas y directivos) seencastilla en una línea de defensa inflexible e

inaceptable: no hay por qué mezclar la políticay el deporte.

Abundan los acontecimientos que, desde lasOlimpiadas de Berlín hasta las de Moscú, danuna lastimosa imagen del ideal olímpico y de laética deportiva. El deporte es el niño bonito delpoder siempre y cuando siga siendo obediente.Es un mundo de quimeras, una búsqueda de loabsoluto, no de la verdad. Refiriéndose al valor

moral de las mentes científicas, Stendhal procla¬maba su entusiasmo por las matemáticas, en lasque la "hipocresía es imposible". Al aceptar loque Marcel Mauss llama una "creencia obliga¬toria de la sociedad", deportistas y espectadoresaceptan al mismo tiempo engañarse a sí mismosy participar en una forma de hipocresía. O

40

Jaegos y deportes tradláonales

Carrera de troncos de los

indios canela, Brasil.

EN comparación con lo que solemos llamar"deportes modernos", a saber, las disci¬plinas olímpicas altamente codificadas que

se practican en gran parte del mundo, losdeportes y juegos tradicionales tienden a confi¬narse en una zona geográfica reducida y es sólitoque se les califique de "nacionales" o "locales".Generalmente pasan por símbolos de la iden¬tidad étnica o regional; de ahí que se les llame"juegos populares" o "folklóricos" por analogíacon la música o la danza populares. Tal folklori-zación de los deportes tradicionales presentatanto aspectos positivos como negativos.

El aspecto positivo radica en que esa "tradi-cionalización" deliberada de algunas actividadesdeportivas les otorga una especie de carta deprotección cultural. Ahora bien, esa carta nodebe servir para confinarlas en una suerte dereserva o de museo folklórico a donde los espec¬tadores o turistas puedan ir a contemplarlascomo curiosidades; por el contrario, lo que hayque hacer es conservarlas incorporándolas anuestra cultura del juego y del movimiento.

Curiosa ocurrencia de la historia fue el quelos deportes típicos de la Inglaterra victorianacobraran preeminencia internacional como sím-

por Roland Rensonbolos del progreso gracias al barón francés Pierrede Coubertin (1863-1937). Esos "deportesmodernos" pasaron a formar parte de un nuevoestilo de vida dinámico de la elite social, la lla¬mada "clase ociosa". Pero, en contraste con lairrupción internacional del movimiento depor¬tivo moderno al final del siglo pasado, poco apoco se fue considerando a los deportes y juegostradicionales como vestigios anacrónicos de unasociedad preindustrial estática y rústica. Hoy seestá produciendo el mismo proceso, pero"exportado" a los países del Tercer Mundo.

Y así como esos países estiman que la cre¬ciente conciencia ecológica del mundo occi¬dental es un lujo que no pueden permitirse, lasprioridades que se fijan en los planos tecnoló¬gico y económico hacen caso omiso de la pro¬tección de sus deportes y juegos tradicionales.Por otro lado, sienten la tentación de esforzarsemás bien por triunfar en el escenario deportivointernacional a fin de lograr prestigio y recono¬cimiento mundiales. Se ha llegado incluso aestimar como un síntoma de colonización este

proceso combinado de modernización y dedesarrollo deportivo a ultranza, con su imita¬ción del modelo cultural de Occidente.

'

41

Los atletas de la Isla de

Nias, en Indonesia, son

famosos por la altura de

sus saltos.

42

En este artículo definimos los deportes tra¬dicionales como "aquellos deportes que yaexistían o tenían su origen en actividades físicasantes de la generalización del moderno sistemade deporte internacionalmente organizado". Acontinuación, para ilustrar la gran riqueza deese patrimonio humano, damos una brevemuestra de deportes tradicionales.

Juegos de balón o pelota

Numerosos y variados, se juegan con la mano,el pie o un instrumento para golpear o bate.Entre los juegos de pelota tradicionales exis¬tentes en Europa pueden citarse el p'drkspel dela isla sueca de Gotland, el kaastsen de la pro¬vincia neerlandesa de Frisia, la baile pelote deBélgica y Francia, elpallone elástico italiano y eljuego de pelota de Valencia (España) y del PaísVasco. La mayor parte de las antiguas formasde juego de balón, generalmente violentas, handesaparecido siendo sustituidas por el modernofútbol, con excepción del tradicional calcio flo¬rentino en Italia.

En numerosos países del Asia sudoriental sejuega al sepak, una especie de "balón volea conel pie" que utiliza una pelota ligera de junco. EnAmérica Central y del Sur se practicabandiversos juegos con pelota de goma en los quese hacía uso de la cac>eza, la mano, el codo, lacadera o el pie; la mayoría de ellos han desapa-

recidoi aunque a veces se organizan partidoscomo atracción turística.

Hay juegos de balón, como el fútbol gaélicoen Irlanda y el fútbol australiano o neoze¬landés, que se juegan simultáneamente con lasmanos y los pies. Se emplean toda clase de ins¬trumentos, para golpear, desde las raquetas,como en el tenis y en el juego francés de longuepaume, hasta los palos utilizados para jugar a lacrosse, variante del golf difundido en el norte deFrancia y en Bélgica. Los primeros explora¬dores franceses llamaron también crosse a un

juego tradicional de pelota y palo practicadopor los indios norteamericanos que ahora seconoce con el nombre de lacrosse. En otros

juegos de pelota se emplea una pandereta(Francia e Italia), un forro de antebrazo o brac-chiale, como en el pallone de Italia, o la chisteradel espectacular jai alai de los vascos.

. Juegos de bolos

En los juegos de bolos se utiliza un objeto esfé¬rico compacto que se echa a rodar o se lanzacontra un blanco. Se trata de derribar esos

blancos o bolos puestos de pie. El bocee italianoy el jeu de" boules francés se juegan hoy enregiones muy alejadas de sus países de origen.Un caso especial es el juego del closh, que ya entiempos de Erasmo (1469-1536) y de Brueghel elViejo (1525-1569) era popular en toda Europa.En este juego se emplea un bate en forma de palapara empujar una pesada bola redonda que debepasar por un anillo fijado en el suelo. Aparte delconocido juego de bolos sobre césped, que pasóde Inglaterra a las colonias británicas, en GranBretaña y en los países de Europa central ymeridional existen una gran variedad de juegosde bolos. .

El moderno juego norteamericano de losdiez bolos de madera representa unas cuantasvariantes históricas, algunas de las cuales hanalcanzado un alto grado de codificación y meca¬nización. Los demás juegos de bolos van desdeel de Carelia, en el que en vez de una bola selanza un bastón o bate, hasta A pendelkegeln deAlemania, en el que la bola lanzada contra losblancos pende de un alambre.

Juegos de lanzamiento

Lanzar un palo o una piedra lo más lejos posibleo para dar en un blanco es un antiguo gesto delhombre que podemos observar en modernaspruebas atléticas como la jabalina, el disco, elmartillo y el peso. En el juego tradicional suecode la varpa los proyectiles son discos muypesados. En los juegos de lanzamiento que entodo el mundo practican niños y adultos seemplean discos más pequeños o, en ocasiones,piedras. Hay pueblos que aun practican el lanza¬miento de la jabalina no sólo como forma deentrenamiento para el combate o la caza sinotambién con fines recreativos y de competición.Esos juegos existen en numerosas regiones deAmérica del Sur. Los indios norteamericanos

han resucitado el juego de la "serpiente denieve" consistente en lanzar lo más lejos posibleuna pequeña flecha por un carril abierto en lanieve. Lanzar el martillo y sacudir un tronco depino son juegos característicos de las montañasde Escocia. Un juego parecido de lanzamientode tronco se practica en Portugal con el nombrede jogo do panco y en Suecia donde recibe el

Figura de terracota que

probablemente representa

un jugador de pelota. Cultura

colima (900-1350), México.

Luchadores nuba

preparándose para el

combate, Sudán.

nombre de stängstörtning. A su vez, el lanza¬miento de piedras se practica en las fiestas tradi¬cionales de los agricultores de los Alpes suizos.

El juego conocido como road bowls enIrlanda, klootschieten en los Países Bajos y bos¬seln o klootschiessen en la Frisia Oriental (Ale¬mania) es un ejemplo interesante de la expre¬sión de la identidad étnica regional y, a la vez,del creciente conocimiento y aprecio interna¬cional de los juegos tradicionales. En 1969 tresgrupos independientes de entusiastas practi¬cantes de esas formas de juego de bolos se

unieron para crear la Asociación Internacionalde Juegos de Bolos.

Juegos de disparo o tiro

Este tipo de juegos han florecido en todas lasculturas y exigen actualmente un alto grado detecnología. El disparo contra un "grajo" o seriede "grajos" de madera atados a un alto mástil sedescribe en numerosos grabados y pinturas de laEdad Media y del Renacimiento y sigue siendoun deporte tradicional sumamente popular enFlandes (Bélgica). Llegó incluso a figurar en losJuegos Olímpicos de Amberes en 1920. El tiro alblanco practicado por los samurais y monjes zenjaponeses es otro ejemplo del arte del tiro conarco. El origen de algunas hermandades de ba¬llesteros existentes hoy en Flandes se remonta alos siglos XIV y XV, por lo que se las puedeconsiderar como los primeros clubs deportivosde Europa. Tienen también un largo historial losimpresionantes festivales de tiro al arco de losbalestrieri italianos que se celebran en la hermosaciudad de Gubbio, en las colinas de Umbría, yotros lugares. Contemplar el soberbio espec¬táculo de los arqueros compitiendo para ganar labandera (elpalio) es como revivir el pasado.

Cuando aparecieron las armas de fuego,Î;ran número de sociedades de arqueros y ba-lesteros substituyeron sus armas por mos¬

quetes o carabinas. Estas asociaciones de fusi¬leros, particularmente en Alemania y Austriapero también en Dinamarca, están fuertementeorganizadas y han conservado por lo general sucarácter de clubs masculinos, sobre todo en laszonas rurales.

Juegos de lucha

La lucha es probablemente el más viejo y univer¬sal de los deportes tradicionales de la humanidad.

43

1El yabusame, Juego ecuestre

de tiro al arco que se

practica en Japón desde el

siglo XI, es también una

forma de meditación del

budismo zen. Al costado de

una pista de 218 metros de

largo se colocan tres

blancos en los que el tirador,

tradicionalmente un samurai,

debe acertar pasando al

galope.

44

ROLAND RENSON,

belga, dirige la unidad deinvestigación sobrekinantropología socioculturalen el Instituto de Educación

Física de Lovaina. En 1990

fue elegido presidente de laAsociación Internacional para

la Historia del Deporte y laEducación Física. Es autor de

varias obras sobre la

evolución y la difusión de losdeportes tradicionales. Cabemencionar, en particular, un

ensayo escrito encolaboración con V. van Melé

sobre los juegostradicionales en América del

Sur (1992), publicado con losauspicios del ConsejoInternacional para la

Educación Física y la Cienciadel Deporte y el apoyofinanciero de la Unesco.

La llamada lucha grecorromana, hoy recono¬cida como deporte olímpico, no tiene relaciónalguna con las formas de lucha de la antigüedadgriega y romana; la lucha que se practicaba enOlimpia tiene mucho mayor parecido con elactual pelivan (lucha turca) e incluso con elmoderno judo. En el Japón la forma de luchallamada sumo representa el deporte nacionalpor excelencia.

Junto con la danza, la lucha es en África eldeporte tradicional más extendido. Particular¬mente famosa es la violenta forma de lucha

propia de los nuba de Sudán. Pero el tipo decombate tradicional de Africa está cambiando

rápidamente o desaparece del todo; lo sustituyendeportes tales como el boxeo y el karate. Hoy seestá intentando crear una federación interna¬

cional de formas de lucha tradicionales. En

Europa se han organizado ya competicionesinternacionales en las que se enfrentaron lucha¬dores de glima de Islandia con adeptos de lalucha canaria practicada en las islas del mismonombre. Por otra parte, en 1985 se fundó unaFederación Internacional de Lucha Céltica quereúne el glima islandés, el backhold escocés y elgouren bretón.

Los torneos, el deporte favorito de loscaballeros de la Europa medieval, fueron prohi¬bidos en Francia cuando el rey Enrique IIresultó mortalmente herido en un combate de

este tipo con el capitán de su guardia. Aun así,han sobrevivido algunas de sus variantes. Tal esel caso del torneo de anillas y del quintain, quepueden practicarse en tierra o en el agua, comoocurre con las joutes girondines en Francia ycon el Fischerstechen en Alemania.

En todo el mundo se practican las artesmarciales. Muchos de estos deportes han sidoobjeto de una marcada ritualización y estiliza¬ción a fin de hacerlos menos peligrosos. Así, losf>racticantes de juegos como el kendo japonés ya esgrima llevan puesto un equipo protector

especial (la esgrima fue admitida ya en los pri¬meros Juegos Olímpicos de la época modernacelebrados en Atenas en 1896).

Juegos con animales

Son varios los deportes con animales que se hanhecho famosos por lo sangrientos a lo largo de lahistoria y que han terminado por ser prohibidosoficialmente en numerosos países. Juegos tancrueles como los de provocar y enfurecer a lostoros y a los osos eran populares en Inglaterradurante la Edad Media y en los siglos XVI yXVII; pero estos combates, en los que se utili¬zaban perros dogos especialmente amaestrados,no han sobrevivido al llamado proceso civili¬zador. En cambio, las riñas de gallos siguensiendo muy populares en Asia sudoriental, espe¬cialmente en Indonesia y Filipinas, en AméricaLatina y en el norte cíe Francia. Hay paísesdonde, aunque ilegales, estos juegos siguenteniendo sus adeptos clandestinos pero fer¬vientes. También se utilizan animales en ciertas

competiciones de feria, como en los concursosde palomas y en las carreras de perros.

En la mayoría de estos juegos con animaleslas personas tienen que entrenarlos. En otroscasos son los hombres mismos los que seenfrentan directa y peligrosamente con ani¬males, como en los rodeos de Estados Unidos,los encierros o carreras de toros de Francia yEspaña, y las corridas de Francia, España, Por¬tugal, y varios países hispanoamericanos.

Juegos de locomoción

Aun subsisten algunas formas de carreras tradi¬cionales con un significado ritual. Los indiostarahumaras de México participan en una ca¬rrera en la que avanzan dando puntapiés a unapelota; pueden así recorrer más de 300 km en48 horas atravesando descalzos valles y mon¬tañas y dándole a la pequeña pelota de duramadera. Otra extraordinaria hazaña de este jaezes la carrera de troncos que practican los indiostimbira y kraho del Brasil. En esta carrera, quese celebra todos los años, se enfrentan dos

equipos que han de recorrer una distanciaconsiderable transportando un pesado tronco.Todos los participantes tienen que hacer latotalidad del recorrido con relevos cada 100 o150 metros. Para estas etnias del Brasil se trata

de un acto de culto, por lo que no parece aquíapropiado hablar de "competición", sino másbien de ceremonia o proeza.

Los watusi de Rwanda y los habitantes de laisla indonesia de Nias son famosos por susproezas como saltadores de altura. En amboscasos los saltadores utilizan una piedra incli¬nada para tomar impulso, pero mientras losatletas watusi saltan por encima de una barrerahorizontal de madera, los de Nias han desuperar un sólido muro de piedra.

Entre los pueblos nómadas que dependencasi exclusivamente para su sustento de losrenos, los caballos o los camellos, los deportestradicionales suelen hacer hincapié en la habi¬lidad para cabalgar. Ejemplos notables son lascarreras con trineos tirados por renos de lossami de Noruega, Suecia y Finlandia, el juegodel buzkaski de Afganistán en el que dosequipos de jinetes compiten por apoderarse delcadáver de un ternero, o la carrera real decamellos que se celebra anualmente en ArabiaSaudita y en la que toman parte casi tres miljinetes. El famoso Palio de Siena, la tradicionalcarrera anual de caballos que tiene lugar en laplaza central de la vieja ciudad italiana, atrae

Corrida de toros en

Pamplona (España).

hoy a tal número de visitantes que ha termi¬nado por celebrarse dos veces al año.

Acrobacia

Dadas las limitaciones del sistema neuromus¬

cular del hombre, que apenas ha cambiadodesde la aparición del homo sapiens, las proezasacrobáticas son muy semejantes de una época aotra y de una a otra cultura. Por ejemplo, lasacrobacias que podemos ver en el circo actualse parecen mucho a las que se realizaban en lasarenas de la antigua Roma. A su vez, los saltoscon pértiga y los saltos mortales de la modernagimnasia no difieren mucho de los ejerciciosque en 1599 describía el acróbata profesionalitaliano Tuccaro (1536-1604). Los ejerciciosgimnásticos del Cong-Fou que practicaban losmonjes taoístas chinos y a que alude el jesuítafrancés Amiot (1718-1793) presentaban tantosrasgos comunes con la gimnasia sueca de PerHenrik Ling (1776-1839) que el médico francésNicolas Dally (1859) tendía a creer que Ling sehabía limitado a copiarlos.

En todas las culturas los hombres tratan de

estar físicamente en forma realizando ejerciciossistemáticos que tienen una clara relación con lasuperestructura ideológica. Esos ejercicios vandesde la meditación zen, el tai chi y el yoga de lasculturas orientales hasta el aerobismo y la gim¬nasia acuática del mundo occidental. Un ejemplocurioso de este tipo de acrobacia tradicional es el

de los castells, las pirámides humanas que rea¬lizan gimnastas aficionados en Cataluña y queson como símbolos de la identidad catalana.

¿Cenicienta o Pulgarcito?

A los deportes y juegos tradicionales se lossuele tratar con frecuencia de "Cenicienta" de

los deportes modernos. Pero no debe olvidarseque han dado origen a casi todos los deportesactuales y que pueden ofrecer una alternativaválida al proceso mundial de uniformizacióndeportiva que tiende a reducir la inmensavariedad de juegos antiguos y actuales a unaestrecha categoría formada por los deportescompetitivos modernos.

Dada la radical transformación sociocultural

y económica que está experimentando elmundo y que le convierte cada vez más en unasola "aldea planetaria", corremos el riesgo deque se pierdan para siempre gran número dedeportes tradicionales. En ellos radica unaspecto importante de nuestro patrimonio cul¬tural, por lo que merecen ser estudiados más.cuidadosamente. Este estudio a fondo podríaayudarnos a comprender y modificar ciertosaspectos negativos de los deportes modernos.Así pues, los deportes tradicionales no debenseguir haciendo el papel de Cenicienta descalza.Ha llegado la hora de que calcen las botas desiete leguas de Pulgarcito y hagan acto pleno depresencia con su personalidad propia.

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46

ACCION/UNESCO

NOTICIAS BREVES

sabiausted

otrofeos internacionales

de fair-play pierre de

coubertin 1991

Desde 1964 el Comité

Internacional para el Fair-Play,

apoyado por la Unesco, otorgatodos los años trofeos a los

deportistas, personalidades delmundo del deporte o instituciones

deportivas que se han distinguidopor su comportamiento ejemplar.

Hasta el día de hoy son más deun centenar las personas oinstituciones así laureadas.

El 15 de octubre de 1992, elDirector General de la Unesco hizo

entrega de los trofeos del año1991 a:

Robert Veghelyl (Hungría),

esgrima:Durante el campeonato del mundo

de esgrima infantil en Foggia(Italia), el esgrimista húngaroRobert Veghelyi enfrenta en lassemifinales al australiano Seamus

Robinson. Veghelyi ataca y su luzverde se enciende. El arbitro le

concede el punto, y el equipo de

Hungría exulta. Robert Veghelyiseñala entonces a los jueces que

ese punto corresponde a un toqueen el suelo que ha pasado

inadvertido. El punto se anula, yse reanuda el combate. Robinson

termina por imponerse,

calificándose así para la final en

la que saldrá vencedor. Su títulode campeón del mundo debe

mucho al juego limpio de RobertVeghelyi.

* Equipo del Racing Club de

Francia, rugby:En la semifinal del campeonato de

Francia, el equipo del Racing Clubjuega contra el de Toulouse. A losveinticuatro minutos, un jugadorde Toulouse trata de marcar un

tanto pero la pelota pasa justo

bajo el travesano. El arbitro, alque el sol impide ver

correctamente la jugada, concedeun punto a Toulouse. Los

jugadores de Racing han vistoclaramente que el tanto no es

válido, pero aceptan sin protestar

la decisión. Toulouse gana elpartido por un punto de ventaja,13 a 12. Después del encuentro,

los jugadores de Racing explicaronque no tenían costumbre dediscutir las decisiones de los

arbitros y que de todas manerasello no les habría impedido ganar

el partido ¡si hubieran jugadomejor!

Arthur Ashe (Estados Unidos),tenis:

Este gran campeón recibió elhomenaje de sus pares por su

constante actitud de fair-play a lo

largo de su carrera de jugador detenis profesional. Fue el primer

atleta negro que ganó el torneodel Gran Chelem: US Open en

1968, Australian Open en 1970 yWimbledon en 1971. Tras

retirarse del tenis ha seguidoencarnando esa actitud de

caballerosidad que locaracterizaba en la cancha de

tenis al poner su prestigio de excampeón al servicio de una acción

pedagógica y social por ladignidad humana.

UNESCO, ONG Y SECTORPRIVADO: CRONOLOGÍA DE UNACOLABORACIÓN FECUNDA

El Fondo Internacional para elDesarrollo de la Educación Física

y el Deporte (FIDEPS) de la Unescobusca los medios de favorecer,

entre otras actividades, la

concepción y construcción deinstalaciones deportivas en los

países en desarrollo y de reducirasí las diferencias en ese ámbito

entre países ricos y pobres.

Con el apoyo de la AsociaciónInternacional para la Promociónde las Actividades Físicas yCulturales (Arte, Deporte, Cultura,

ASC), una organización nogubernamental que agrupa adiversas personalidades delambiente deportivo, artístico,

cultural y económico, el Fondolanzó en 1988 un concurso de

arquitectura. El tema: concepciónde una sala multideportiva, que

se adapte a climas diferentes y

que pueda construirse a bajocosto con elementos

prefabricados utilizando técnicas ymateriales locales.

En 1991 la Fundación BMW

Francia acepta incluir ese tema en

su concurso de arquitectura

bienal. No se trata de la primeracolaboración de ese tipo puesto

que en 1990 BMW habíaorganizado con el FIDEPS laexpedición motociclista París-Astracán de las Rutas de la Seda.

Esta fructífera colaboración

proseguirá en 1993 con elpróximo concurso de arquitecturade la Fundación BMW sobre el

tema: el medio ambiente, la

ciudad y el automóvil.

DIA INTERNACIONAL DE LOS

VOLUNTARIOS

Una vez más la Unesco se asocia

este año al Programa de lasNaciones Unidas para el

Desarrollo (PNUD) y a losVoluntarios de las Naciones

Unidas para celebrar, el 5 dediciembre, el Día Internacional delos Voluntarios. En 1991

numerosas manifestaciones

marcaron este día: lucha contra la

contaminación y sensibilizacióndel público a la protección delmedio ambiente en Ghana,

plantación de árboles en

Mauritania, Indonesia y Guyana,inauguración de un dispensario

gratuito en Jamaica, jornada detrabajo en hospitales de Berna(Suiza), reuniones públicas ycampañas de información en elmundo entero.

El Programa Voluntarios de lasNaciones Unidas, bajo la égida delPNUD, ofrece a jóvenesprofesionales de todos los paísesla posibilidad de participar enactividades de desarrollo a escala

mundial. Desde su creación en

1970, más de 7.500 voluntarios

han trabajado en el terreno, encontacto con las poblaciones másdesfavorecidas, ofreciendo sus

conocimientos y experiencia encampos muy diversos (hidrología,educación, ingeniería civil o saludpública).

La Unesco participa en este

programa por intermedio delComité de Coordinación del

Servicio Voluntario Internacional,

una organización no

gubernamental fundada con susauspicios en 1948. Esta ONG

cuenta con 130 organizacionesafiliadas que participarán,

juntamente con otrasasociaciones voluntarias locales o

nacionales, en las actividades de

este Día Internacional el próximo5 de diciembre. O

ElDirectorgeneral

de la Unesco

expone cada mes a los

lectores de El Correo

los grandes ejes

de su pensamiento y

de su acción

Que el deporte seauna escuela de nobleza

ESTE año olímpico ha sido, una vez más, unaocasión para que todos midamos la impor¬tancia del espíritu deportivo y de los

valores universales encarnados por una llama quearde, siempre tan viva, en los atletas. Fui testigopersonalmente, en Barcelona, de la universalidaddel acontecimiento. ¡Más de 10.000 atletas, 65.000

espectadores en el estadio de Monjuic y cerca de3.500 millones de telespectadores durante la cere¬monia de inauguración unidos en el mismo fervorpara celebrar el ideal deportivo!

Al observar la inmensa y abigarrada multitudme venían al espíritu estas palabras del barónPierre de Coubertin: "El espectador ideal enmateria de deporte es el deportista en reposo queinterrumpe su propio ejercicio para seguir losmovimientos de un compañero más hábil o mejorentrenado." Es evidente que el campeón queconoce al dedillo las reglas de su disciplina ydomina a la perfección el movimiento, está enmejores condiciones que nadie para apreciar losresultados obtenidos por los demás en todos susaspectos técnicos y tácticos. Pero en un mundo enel que los medios de comunicación permiten quela población de los cinco continentes siga simultá¬neamente la competición olímpica, ha habido unaevolución considerable del propio espectador.Hoy día, el profano se apasiona por el espectáculoque se le ofrece comienza también a apreciar lacalidad estética de los movimientos deportivosque se despliegan ante él.

Sabemos también que, lamentablemente,algunos espectadores, así como ciertos atletas,adoptan a veces comportamientos que puedendesvirtuar la función educativa del deporte. Nome referiré a la causas de esas desviaciones, contra

las que existen remedios, que se analizan en estas

páginas y que denuncian todos los que luchan endefensa de la ética deportiva. Insistiré simple¬mente en la necesidad que me parece capitalde promover los valores de "fair-play", desde lamás temprana edad, en la escuela, pero también através de los movimientos de jóvenes y las asocia¬ciones, y con la colaboración de los medios deinformación.

Con este propósito la Conferencia General dela UNESCO acaba de añadir a la Carta Interna¬

cional de la Educación Física y el Deporte un artí¬culo en el que llama a los poderes públicos, lasorganizaciones no gubernamentales especiali¬zadas, el movimiento olímpico, el mundo depor¬tivo, los educadores, los profesionales de la salud,los padres y, muy en especial, los medios de infor¬mación, a cooperar en la lucha contra todas lasinfluencias negativas que amenazan el deporte.

A esas corrientes deletéreas se oponen feliz¬mente imágenes exaltantes, que quedan grabadasen nuestras memorias. Pienso en el comporta¬miento de los laureados con los trofeos queotorga anualmente, desde hace veintiocho años, elComité Internacional para el Fair-Play, como unhomenaje a las cualidades morales y deportivas decampeones de nacionalidades y disciplinasdiversas.

Pienso también con una emoción siemprerenovada en esas dos atletas que corrieron los10.000 metros femeninos en los últimos JuegosOlímpicos. Dos africanas, que la política oponía,se encontraron reunidas por el deporte; siguiendola misma huella, se reconocieron en el esfuerzo.

La vuelta de honor que dieron, tomadas de lamano, después de la carrera, difundió por todaslas latitudes del planeta la más elevada imagen dela fraternidad que puede nacer del deporte. o

Las islas en gloria y majestad:por Edouard J. Maunick

48

UNA noche del verano de 1962 en Castries, la capital de laisla de Santa Lucía, asistí a la representación de una piezateatral: The Malfinis. A la salida, pasé a saludar al autor,

Roderick Walcott, para expresarle mi admiración por su obra.Aunque apreció mis elogios, me confió, sonriendo, que su talentono era nada comparado con el de su hermano gemelo Derek.

Vivamente interesado, moví cielo y tierra hasta que localicé aDerek Walcott. No vivía en Santa Lucía sino en Trinidad y, mien¬tras esperaba conocerlo personalmente, compré la única obrasuya disponible en el lugar: In a Green Night (1962), colección depoemas de una rara belleza. Me encontraba en presencia de unforjador de palabras dignas de un intérprete de las islas: la suya encomunidad con las demás del Caribe; pero más allá, consubstan¬cial al universo, sin por ello negar, ni descuidar, ni callar ningunade sus especificidades. Un canto profundo, en el grito como en elsilencio. Un canto que he vuelto a encontrar, más tarde, en otrasobras de Derek Walcott: The Castaway and Other Poems (1965),Sea Grapes (1976), The Fortunate Traveller (1982), The ArkansasTestament (1987) por el que tengo una debilidad especial , yaque no puedo citarlas todas.

Terminé por conocer personalmente a Derek Walcott en 1964,en Berlín, en un encuentro entre poetas y escritores del mundonegro y los de Occidente. Fue como si nos conociéramos desdesiempre. Ningún protocolo, ninguna digresión docta: un apretónde manos cálido y sencillo, una cena con cerveza y un largo paseopor las calles de Berlín, donde no quisimos buscar los estigmas de

un pasado de noches y brumas. Sólo nos importaban los solesinteriores que nuestra poesía sueña con mostrar en la plaza uni¬versal. Hablamos en inglés, algo en francés y a menudo en criollo.Curiosamente, el de Santa Lucía es semejante, pero muy seme¬jante al de Mauricio. En resumen, fuimos cómplices...

Ahora que ha sido galardonado con el Premio Nobel, estoyfeliz por él y por la poesía. También lo estoy por las islas. Alhonrar a Derek Walcott, sin restar nada del genio de este inmensopoeta, el jurado le ha dado razón por haber navegado sólo con subrújula, contra viento y marea, llevando a su Santa Lucía natal, ycon ella a las islas de todos los mares, a buen puerto.

Ni que decir tiene que la obra de un poeta, elevada a talescimas del reconocimiento internacional, va a suscitar gran interés.¡Tanto mejor! Pero de todos modos es lamentable que haya queesperar el acontecimiento para que se escuche y se oiga la voz deun poeta. Ignoro cuánto y cómo se ha traducido la obra de DerekWalcott.

Ahora bien, se insiste con majadería en que la poesía no selee, por no confesar que se publica muy poco. Editores y lectores

sin absolver totalmente a los propios poetas no se dan cuentade que suprimir la poesía equivale a condenar la forma más aca¬bada de oración, venga de un creyente o de un pagano. Asumo laentera responsabilidad de este exabrupto. Los best-sellers hanabolido el milagro, la literatura mediocre adormece el sentido crí¬tico y hace confundir un trémolo con un estremecimiento. Y hayseudo poetas, piratas de tierra firme, que nos hablan de abordajes

nio Nobel

y tempestades y nos infligen logomaquia tras logorrea, cuando nose erigen en papas de iglesias fantasmas, en nombre de congrega¬ciones con un único miembro. ¡Basta de escándalo! Que se deje alcanto la amplitud del canto, a las palabras la magia de decir. Lapoesía no es un lujo y menos aun un postre: es una necesidad y elalimento por excelencia.

Cuando Derek Walcott escribe (traduzco al azar de su libroThe Fortunate Traveller):

La luna brilla como un botón perdido;el agua negra apesta bajo las luces de sodiodel muelle. La noche se enciende tan claramente

como con un interruptor, se oye ruido de platostras las ventanas iluminadas,

avanzo junto a los muros por donde pasan sombras ocasionalesque no hablan. A veces, en los umbrales estrechoslos viejos juegan los mismos juegos tranquiloscartas, dados, dominó. Les doy nombres.La noche es afable, el día tan violento comoelporvenir del hombre en cualquier sitio. Puedo entenderel amor ciego de Borges por Buenos Aires,como un hombre puede sentir las venas de una ciudadhincharse en su mano}

no sólo se relata: nos relata también. Nos infunde la hermosa ten¬

tación de mirar en torno nuestro para ver, para sentir, para vivir el

instante como un trozo de eternidad. Nos convoca a nuestra

propia asamblea, vengamos de donde vengamos. Y a menudo nossugiere, a cada uno, la posibilidad de nuestra odisea personal. Unavez más lo traduzco:

Al terminar esta frase, empezará la lluvia.Al ras de la lluvia, una vela.

Lentamente, la vela perderá de vista las islas;en una llovizna se desvanecerá la creencia en puertosde toda una raza.

La guerra de diez años ha concluido.La cabellera de Helena, una nube gris.Troya, un cenicero blancoa la orilla del mar bajo la llovizna.

La llovizna se tensa como las cuerdas de un arpa.Un hombre, con nubes en los ojos, recoge la lluviay arranca la primera página de la Odisea.1

1. Fragmento de "Port of Spain", poema de The Fortunate Traveller, Faber & Faber ©1982, de Derek Walcott.

2 "Archipelagoes", poema de la obra citada.

EDOUARD J. MAUNICK, poeta y escritor mauriciano, es autor denumerosas obras, entre las que merecen particular mención Ensoleillé vif

(premio Apollinaire 1976), Anthologies personnelles (1984), Paroles poursolder la mer (1989).

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LOS LECTORESNOS ESCRIBEN

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UN FRESCO DE CIMABUE

He sido profesor titular de historia delarte en la Universidad Nacional de

Cuyo. Desde que me he jubilado, miesposa y yo viajamos mucho, aunqueno tanto como quisiéramos. Hepodido así visitarAsís y me heinteresado por su basílica y por losfrescos de Giotto, Cimabue, SimoneMartini, Pietro Lorenzetti.

Precisamente en el número de julio-agosto pasado de su revista figura undetalle de un fresco de Cimabue querepresenta a San Francisco de Asís. Esefresco se encuentra en el temploinferior de la basílica y no en elsuperior como indica la leyenda (p.62). El santo está de pie, a la izquierdade la Virgen, entronizada, con el Niñoen los brazos y rodeada de cuatroángeles. Déjenlo ahí, en la iglesiainferior, pues se halla en muy buenacompañía.

Estoy suscrito a El Correo desdejulio de 1947. Conservo todos losnúmeros y los tengo indizados.También he obsequiado variassuscripciones. Sigan publicándolo.Está mes a mes mejor. Felicitaciones.

Abdulio B. Giudici

Paso de los Andes 1352

5500 Mendoza

ArgentinaSomos nosotros quienes lofelicitamospor su atenta lecturaypedimosdisculpas a nuestros lectores por elerror.

MUJERES Y MEDIOAMBIENTE

El número de marzo de 1992 de El

Correo es un fiel reflejo de lapreocupación de las mujeres de todoel mundo por el porvenir de nuestroplaneta. En nombre de la redWorldwide de Mujeres por elDesarrollo y el Medio Ambiente, deseofelicitar a la redacción y a suscolaboradoras, en particular a JuditheBizot, por el excelente trabajorealizado. Quiero también señalar queen la Conferencia de Río, Worldwide

organizó un seminario sobre lasmujeres y la gestión comunitaria delmedio ambiente, en el queparticiparon representantes de Africa,el Caribe, América del Sur, Asia yEuropa. Confiamos en que El Correocontinúe abordando los problemasambientales y dando la palabra a lasmujeres.

Helen Freeman

Presidente p.i.Worldwide Network

Washington D.C. (Estados Unidos)

APIÁDENSE DE DOLE

Los errores como las leyendas suelenser indestructibles. He leído en el

número doble de julio-agosto de 1992el interesante artículo de Roy Malkinsobre la salina de Arc-et-Senans. Pero,

¿por qué esa obstinación (página 71)en poner un acento circunflejo en la"o" de Dole, que nunca ha llevadoacento? Me rebelo a menudo contra

ese error de ortografía. Resultaincreíble que el diccionario Laroussede 1911 incurra en la misma falta.

Hace algunos años tuve que realizarpara un amigo una investigaciónprecisamente sobre este tema. Revisélos archivos departamentales hasta larevolución francesa, e incluso antes, yen ninguna parte encontré ese acentoque tanto me irrita.

Robert Cuvelier

Chomerac (Francia)

Pedimos disculpas por ese lamentableerror, que nos disgusta tanto como anuestro lector.

EL TESTIMONIO DE LASPIEDRAS

En "Los lectores nos escriben" del

número doble julio-agosto de 1992,me ha interesado vivamente la carta

de la señora Lacoustille, de Monpezat(Francia). Contrariamente a lo quepiensa esta lectora, me resultainconcebible considerar al hombre, en

el que ella dice interesarse,prescindiendo de sus creacionesartísticas y arquitectónicas. Y elllamamiento para "Salvar Angkor", quemotiva su carta, ilustra perfectamenteese parámetro esencial de lacondición humana. Por otra parte, laspiedras constituyen un testimonioesencial del contacto entre los

pueblos.

LA SABIDURÍA DELMUNDO

Deseo felicitar a la redacción de El

Correo de la Unesco, del que soy un fiellector, por la calidad y variedad de susartículos, procedentes de todos loshorizontes geográficos, así como porla belleza de las ilustraciones (en

Mapasy cartógrafos yen Las moradasde lo sagrado, por ejemplo). Me haninteresado particularmente losnúmeros sobre La búsqueda de lautopía, El desafío demográfico (en miopinión, el problema más grave) y Louniversal, ¿es europeo? (creo que sí,pero, ¡qué cuestionamiento radical!).

Me parece admirable, y ese fueprecisamente el motivo que inspirónuestra lucha, que esos textos sepubliquen en decenas de lenguas yque puedan leerlos ciudadanos detodo el mundo. He llegado a una edaden que hay que sacar conclusiones, yme alegra que mi generación hayaimpulsado esos movimientos, comoactualmente el de la unidad europea,contribuyendo así a que el mundo seamás sensato.

Yves Doriac

ex animador de los Clubs Unesco

Anglet (Francia)

ACERCA DE HOMBRES YDE INSECTOS

A los interrogantes que se plantea eleditorial de El Correo de la Unesco de

julio-agosto de 1992 acerca de labúsqueda de lo universal, podría talvez agregarse esta pregunta:¿evolucionará el hombre hacia lo

universal mientras continúe haciendo

uso y abuso de herbicidas, fungicidas,pesticidas, insecticidas, bactericidasy... homicidas?

Jean ChaumetSimiane-Ia-Rotonde (Francia)

LOS TESOROS DESAGARMATHA

He leído con sumo interés el brillante

artículo de José Serra Vega (cuyadescripción de la selva amazónicaperuana en el número de agosto-septiembre de 1991 me pareciótambién excelente) sobre el ParqueNacional de Sagarmatha en Nepal(junio de 1992). Describe con talentoel esplendor natural y la riquezacultural de ese sitio del patrimoniomundial así como los peligros que loamenazan. He vivido cinco años en

Nepal, y las medidas de protecciónpreconizadas en la conclusión delartículo deberían extenderse a todo el

Himalaya: en todas partes es necesarioreforestar y reconstituir los recursos deleña, construir pequeñas centraleshidroeléctricas y lograr que lasexpediciones de alpinistas lleven suspropias reservas de combustible.

Confiar este tipo de artículos aautores de países en desarrollo meparece una excelente idea, pues ellospueden aportar un punto de vistaoriginal sobre regiones que sufrenproblemas similares a los de suspaíses.

Teresa Crichton-Stuart

Londres (Reino Unido)

Créditos fotográficosPortada, página 3: © Ezechiel Saad,

París. Portada posterior, página 15: §Alain Guillou, Le Croisic. Página 2: ©

Francis Hungler, Gubwiller. Páginas 4,5, 6, 7: Derechos reservados. Páginas8,9,10,11,14,16,18,20,32-33,

36, 37, 38, 39, 40 izquierda, 45:©

Vandystadt, Paris. Página 12: © Marie

Ange Donzé, París. Página 13: © A.

Muñoz de Pablos, París. Página 17:Cranham © Rapho, París. Página 21:

M. Rio Branco © Magnum, París.

Páginas 22, 40 derecha: © ClaudeSauvageot, Paris. Página 23: Ricardo R.Medina © Fondo de Conservación de

Puerto Rico. Página 24 arriba: © 1 990

Erica Berger, New York Newsday.Página 24 abajo: PAM, Roma. Página

25 arriba: © J. Grangeon. Página 25

abajo: UNESCO-Norwegian University

Press. Páginas 26, 27: © Bruno Jouan,

Paris. Páginas 28, 29: Marvin Schwartz© Fondo de Conservación de Puerto

Rico. Página 30: P. Reimbold © Hoa

Qui, Paris. Página 31: © Dibujo de

Blachon, tomado de Sport - tomo 2Editions Robert Laffont, París. Página

35: © Y. Semov © APN, París. Página

41: © J. Dieckert. Página 42, 43 arriba:

© Charles Lénars, París. Página 43

abajo: George Rodger © Magnum,París. Página 44: E. Weiland © Rapho,

París. Página 46: UNESCO- Dominique

Roger.

El tema de nuestro próximo

número (enero 1 993) será

Cita con el

espacio

el Correo^tlelaUNESCO

AñoXLV

Revista mensual publicada en 33 idiomas y en braille

por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación,la Ciencia y la Cultura.31, rue François Bonvin. 75015 París. Francia.

Teléfono: para comunicarse directamente con las personas quefiguran a continuación marque el 4568 seguidq de las cifras que

aparecen entre paréntesis junte a su nombre.FAX: 45.66.92.70

Director: Bahgat ElnadlJefe de redacción: Adel Rifaat

REDACCIÓN EN LA SEDESecretaria de redacción: Gillian Whitcomb

Español: Miguel Labarca, Araceli Ortiz de UrbinaFrancés: Alain Lévêque, Neda El KhazenInglés: Roy MalkinUnidad artística, fabricación: Georges Servat (47.25)Ilustración: Ariane Bailey (46.90)Documentación: Violette Ringelstein (46.85)Relaciones con las ediciones fuera de la sede y prensa:Solange Belin (46.87)Secretaría de dirección: Annie Brächet (47.15), Mouna ChattaAsistente administrativo: Prithi Perera

Ediciones en braille (francés, inglés, español y coreano):Marie-Dominique Bourgeais (46.92),

EDICIONES FUERA LA SEDE

Ruso: Alexandre Melnikov (Moscú)Alemán: Werner Merkli (Berna)Arabe: El-Saïd Mahmoud El Sheniti (El Cairo)Italiano: Mario Guidotti (Roma)Hindi: Ganga Prasad Vimal (Delhi)Tamul: M. Mohammed Mustapha (Madras)Persa: H. Sadough Vanini (Teherán)Neerlandés: Claude Montrieux (Amberes)Portugués: Benedicto Silva (Río de Janeiro)Turco: Mefra llgazer (Estambul)Urdu: Wali Mohammad Zaki (Islamabad)Catalán: Joan Carreras i Martí (Barcelona)Malayo: Azizah Hamzah (Kuala Lumpur)Coreana: Yi Tong-ok (Seúl)Swahili: Leonard J. Shuma (Dar-es-Salaam)Esloveno: Aleksandra Kornhauser (Liubliana)

Chino: Shen Guofen (Beijing)Búlgaro: Dragomir Petrov (Sofía)Griego: Sophie Costopoulos (Atenas)Cingalés: S.J. Sumanasekera Banda (Colombo)Finés: Marjatta Oksanen (Helsinki)Vascuence: Juxto Egaña (Donostia)Thal Savitri Suwansathit (Bangkok)Vietnamita: Do Phuong (Hanoi)Pashtu: Ghoti Khaweri (Kaboul)Hausa: Habib Alhassan (Sokoto)Bangla: Abdullah A.M. Sharafuddin (Dacca)Ucraniano: Victor Stelmakh (Kiev)

Checo y eslovaco: Milan Syrucek (Praga)Galllego: Xavier Senín Fernández (Santiago de Compostela)

PROMOCIÓN Y VENTASSuscripciones: Marie-Thérèse Hardy (45.65), JocelyneDespouy, Alpha Diakité, Jacqueline Louise-Julie, ManichanNgonekeo, Michel Ravassard, Michelle Robillard, MohamedSalah El Din, Sylvie van Rijsewijk, Ricardo Zamora-PérezRelaciones con los agentes y los suscrlptores: GinetteMotreff (45.64)Contabilidad: (45.65)Correo: Martial Amegee (47.50)Depósito: Hector García Sandoval (47.50)

SUSCRIPCIONES. Tél. : 45.68.45.651 año: 211 francos franceses. 2 años: 396 francos.

Para los países en desarrollo:1 año: 132 francos franceses. 2 años: 211 francos.

Reproducción en microficha (1 año): 113 francos.Tapas para 12 números: 72 francos.Pago por cheque, CCP o giro a la orden de la UNESCO.

Los artículos y fotografías que no llevan el signo © (copyright)pueden reproducirse siempre que se haga constar "De El Correode la UNESCO", el número del que han sido tomados y el nombredel autor. Deberán enviarse a El Correo tres ejemplares de larevista o periódico que los publique. Las fotografías reproduciblesserán facilitadas por la Redacción a quien las solicite por escrito.Los artículos firmados no expresan forzosamente la opinión de laUNESCO ni de la Redacción de la revista. En cambio, los títulos ylos píes de fotos son de la incumbencia exclusiva de ésta. Porúltimo, los límites que figuran en los mapas que se publican oca¬sionalmente no entrañan reconocimiento ofical alguno par parte delas Naciones Unidas ni de la UNESCO.

IMPRIMÉ EN FRANCE (Printed in France)DEPOT LÉGAL: Cl - DECEMBRE 1992COMMISSION PARITAIRE N° 71842 - DIFFUSÉ PAR LES N.M.P.P.

Fotocomposición: El Correo de la UNESCO.

Fotograbado-impresión: Maury-lmprimeur S.A.,Z.I., route d'Etampes, 45330 Malesherbes.ISSN 0304-3118 N° 12-1992-0PI-92-5010 S

Este número contiene además de 52 páginas de textos, un encartede 4 páginas situado entre las p. 10-11 y 42-43.

Indice de el Correo de ïa Unesco 1992

ENERO

El desafío demográfico. Unesco 1946-1991: una trayectoria de 45 años (1968-1974). Entrevista a Carlos Fuentes. Eldesafío demográfico (R. Urzúa). La transición demográfica (J. Véron). Pobreza y contaminación, una alianzapeligrosa (N. Sadik). El medio ambiente y el elemento humano (R. Lee). El juego de las cifras (H. Brookfield). El marde fondo de la inmigración (A. B. Simmons). La explosión urbana (M. Amani). Migraciones africanas (A. Adepoju).El peso de los años (J.C. Chasteland). Hampâté Bâ (D. Diallo). Petra: la rosa del desierto (J. Rewerski).

FEBRERO

El apartheid: crónica de un fin anunciado. UNESCO 1946-1991: una trayectoria de 45 años (1975-1980). Entrevista aJoseph Ki-Zerbo. Historia de una tragedia (M. Ndiaye). Regreso al país natal (R. Lazarus). Por una democraciaoriginal (A. Sachs). La clave constitucional (G. Gordon y D. Davis). Mujeres de Sudáfrica (F. Meer). Ladiscriminación racial en la vida cultural (S. Sepamla). La literatura del pueblo (N. Gordimer). Las Naciones Unidascontra el apartheid. El combate de la Unesco (F. Fournier). Cronología sudafricana: represión y resistencia.

MARZO

La voz de las mujeres. UNESCO 1946-1991: una trayectoria de 45 años (1981-1986). Entrevista a Vandana Shiva. Lamujer y la naturaleza, una alianza vital (P. Huston). "Tengo miedo al futuro" (M. Cherkasova). El movimiento delCinturón Verde de Kenya (W. Maathai). Cuando las mujeres dicen no (J. Martin-Brown). El mundo de Miuda (G.Borrini). Más allá de la sociedad de consumo (El Club Seikatsu). "Viviendas sí, tugurios no" (M. Trejos). Alzando lavoz (Entrevista a Bella Abzug). Detener el avance del desierto (J. Ouedraogo). ¿Quién habla detrás de las máscaras?(P. Antrobus y N. Peacocke). Dubrovnik, en medio de la tormenta (J. d'Ormesson). La UNESCO: ¿una empresaerrada? (L. Soliman). Música birmana (Khin Mya Kyu).

ABRIL

El arte en la calle. UNESCO 1946-1991: una trayectoria de 45 años (1987-1988). Entrevista a William Styron.Acróbatas, payasos y trapecistas (A. van Buren). La ciudad en colores (J. C. Langlois). En el puente de Vierzon (C.Groud). El lenguaje de los muros chicanos (A. Treguer). La calle, el pueblo y el poder (F. Gründ). Sri Lanka: laofrenda teatral (A. J. Gunawardana). Metro-arte y metro-polis (M. Ström). Música andariega (F. Bensignor).Esplendor y miseria de Cartagena de Indias (E. Bailby). Medio ambiente: un cambio radical (L. Brown). El derechointernacional. Una entrevista a Mohammed Bedjaoui.

MAYO

Redescubrir 1492 (Federico Mayor). Retrato de un continente (M. León-Portilla). Profecías del encuentro (F.Ainsa).El nuevo mundo de la cartografía (W. E. Washburn). Extranjeros al servicio de España (J. Gil). En busca del otro (J.A. Seabra). Viaje a través de la América precolombina. La ruta del Pacífico (A. de la Serna). América y Rusia: undiálogo interrumpido (V. Kuteischikova). La Declaración de Guadalajara. El surgimiento de la Edad Moderna (E.Montiel). Invención de una cultura (L. Zea). Quinientos años después... (F. Fernández Shaw). UNESCO 1946-1991:una trayectoria de 45 años (1989-1991).

JUNIO

Elogio de la tolerancia. Entrevista a Osear Niemeyer. Elogio de la tolerancia (E. Naraghi). Una virtud incómoda (B.Williams). Un pionero llamado Voltaire (J. Lesay). Siguiendo las huellas de Gandhi (R. Jahanbegloo). Africa negra:sociedades abiertas (I. Der Thiam). Islam: un conflicto de modelos (M. Arkoun). No al rechazo del otro (E. Pisani).Los equilibristas de Vondelpark (N. Maharaj). Area verde: Peligra la capa de ozono de la atmósfera (F. Bequette).Preguntas a Francisco di Castri (1). La crónica de Federico Mayor. Everest, techo del mundo. Por los senderos deSagarmatha (J. Serra Vega).

JULIO-AGOSTO

Lo universal ¿es europeo? Entrevista a Mikis Theodorakis. Las dos caras de Europa (E. Barón Crespo). Unimperativo moral (K. O. Apel). Hechos y no palabras (S. Nair). Un Hombre multiplicado (M. Hussein). El deber delvigía (T. Ben Jelloun). La fuerza de Africa (A. Kourouma). Europa del Este: las trampas de ía libertad (A. Liehm).América Latina: un "retraso" saludable (E. Sábato). Los filósofos del Universo (V. Vassilikos). Dos concepciones delmundo (Wang Bin). El rostro: reclamo y exigencia (E. Lévinas). Area verde: La Antártida, ¿continente de ciencia ypaz? (F. Bequette). Preguntas a Francesco di Castri (2). La crónica de Federico Mayor. La ciudad ideal de la salina (R.Malkin). Stefan Zweig (G. Steiner). Ziryab, músico y maestro (M. Guettât). Un cieio, un mundo (T. Krol).

SEPTIEMBRE

Perfiles del maestro. Entrevista-homenaje a Atahualpa Yupanqui. Homero y el ideal griego (B. Geoffroy).Peregrinos místicos (L. Echghi). El guru y su discípulo (D. S. Queini). De Sócrates a Spinoza (P-.F. Moreau). SimónRodríguez, un visionario (J. López Palma). Sartre (R. Sabbaghi). El torneo de Go (K. Watanabe). Los profesores en laencrucijada. Preguntas a Jacky Beillerot. Hacia una nueva concepción de la enseñanza (J. Hallak). La Unesco y laformación de maestros (A. Lokisso lu'Epotu). Area verde: ¿A quién beneficia el intercambio de deuda pornaturaleza? (F. Bequette). Entrevista a Francesco di Castri (3). La crónica de Federico Mayor. La Estatua de laLibertad (S. Patterson).

OCTUBRE

Tele-visiones. Entrevista a Hervé Bourges. La fuerza subversiva de la televisión (J.-C. Guillebaud). La informacióncomo espectáculo (M. Berrah). Una televisión diferente (N. Magnan). Lágrimas en directo (J. Boissard). Lageneración de Goldorak (B. Cormier-Rodier y B. Fleury-Vilatte). Estados Unidos: los pioneros (A. Garel). Egipto: lavida se detiene a la hora de la novela (S. Gharib). India: la epopeya catódica (A. Vasudev y L.K.Malhatra). Brasil: laverdad de las mentiras (D. di Donato). Del filme al telefilme (F. Garçon). Area verde: ¿Hacen buenas migas la energíanuclear y el medio ambiente? (F Bequette). La crónica de Federico Mayor. Gorea, la isla de los esclavos (C. Haardt).Gorea: balance e inventario (A. Verdiani).

NOVIEMBRE

El reto democrático. Entrevista a Abdel Rahman El Bacha. ¿Qué es la democracia? (A. Touraine). La exigencia (A.Maalouf). Africa: ¿Campo de batalla o laboratorio de la democracia? (E. M'Bokolo) América Latina: Libertad ypenuria (F. Henrique Cardoso). Polonia: Reconstruir la sociedad (V Adamski). Sur: Los extravíos de un ideal (R.Thapar). Irán: La escuela lacia y la escuela religiosa (E. Naraghi). Occidente: La mujer y la sociedad democrática. Elartista considerado como un insecto (A. Brink). Area verde: Vivir con nuestros desechos (F. Bequette). La crónica deFederico Mayor.

DICIEMBRE

Deporte y competición. Entrevista a Susana Rinaldi. Un concepto multiforme (P. Henquet). El dinero del deporte(J.-F. Nys). Tarjeta roja para el balón de fútbol (F. Thébaud). Brasil: un buen juego de cintura (R. DaMatta). LaUnesco lleva la delantera. El doping, un artificio inútil (M.A. Bermúdez Escobar). Rusia: final de juego (A. Sreb-nitski). ¿Tiene el deporte una moral? (M. Caillât). Juegos y deportes tradicionales (R. Renson). Area verde: La sal,¿hija del fuego, o del sol y el viento? Puerto Rico salva sus tesoros (F. Bequette). La crónica de Federico Mayor. Lasislas en gloria y majestad: Derek Walcott, premio Nobel de literatura 1992 (E. J. Maunick).