El Gato, La Salud y La Espiritualidad

8
EL GATO, LA ESPIRITUALIDAD Y LA SALUD Quien no se relaciona bien con su propio inconsciente, no soporta a los gatos. Él surge entonces como una amenaza, porque representa esa relación precaria del hombre con su mismo misterio. El gato no se relaciona con la apariencia del hombre. Él ve mucho más allá, ve por dentro y por el revés. Se relaciona con la esencia. Si la demostración de cariño es falsa, de miedo, o sustituye inaceptables (pero existentes) impulsos secretos de agresión, el gato lo sabe. Y se defiende de la caricia. La relación de él es con aquello que está oculto y tan bien guardado, que ni nosotros queremos, sabemos o tampoco podemos ver. Por eso, cuando surge en él un acto de entrega, de treparse a la falda o alguna manifestación de afecto, es algo realmente verdadero que no puede ser dejado de lado. Es un gesto de confianza que honra a quien lo recibe, pues significa un juicio. El hombre no sabe “sentir” el gato, pero el gato sabe sentir al hombre… Si hay alguna falta de armonía real o latente, el gato la siente. Si hay soledad, él sabe y suaviza la situación como puede, pues él enfrenta su propia soledad de manera mucho más valiente que nosotros. No se manifiesta, no reclama. Solamente se aleja. Quien no sabe “leer” piensa que “él no está allí”. Presente o ausente, él enseña y manifiesta algo. Cerca o lejos, mirando o fingiendo no ver, él está comunicando códigos que no siempre (o casi nunca) sabemos traducir. El

description

Quien no se relaciona bien con su propio inconsciente, no soporta a los gatos. Él surge entonces como una amenaza, porque representa esa relación precaria del hombre con su mismo misterio.El gato no se relaciona con la apariencia del hombre. Él ve mucho más allá, ve por dentro y por el revés.Se relaciona con la esencia. Si la demostración de cariño es falsa, de miedo, o sustituye inaceptables (pero existentes) impulsos secretos de agresión, el gato lo sabe. Y se defiende de la caricia. La relación de él es con aquello que está oculto y tan bien guardado, que ni nosotros queremos, sabemos o tampoco podemos ver. Por eso, cuando surge en él un acto de entrega, de treparse a la falda o alguna manifestación de afecto, es algo realmente verdadero que no puede ser dejado de lado. Es un gesto de confianza que honra a quien lo recibe, pues significa un juicio. El hombre no sabe “sentir” el gato, pero el gato sabe sentir al hombre…"Podría extrañar esta pregunta, pero existen pruebas evidentes que lo demuestran: poseer un gato es bueno para nuestra salud. Existen dos razones para corroborar esta afirmación. En primer lugar, es sabido que el amistoso contacto físico con los gatos reduce de manera muy notoria el estrés en las personas que les acompañan. La relación entre hombre y gato es conmovedora en el sentido de reciprocidad de la palabra. El gato se frota contra el cuerpo de su amo, y el dueño acaricia y alisa el pelaje del gato. Si a estos dueños se les somete en el laboratorio a pruebas para comprobar sus respuestas fisiológicas, se descubre que sus sistemas corporales se relajan y se calman de una forma apreciable al efectuar el acto de acariciar a los gatos.

Transcript of El Gato, La Salud y La Espiritualidad

EL GATO, LA ESPIRITUALIDAD Y LA SALUD

Quien no se relaciona bien con su propio inconsciente, no soporta a los gatos. l surge entonces como una amenaza, porque representa esa relacin precaria del hombre con su mismo misterio.El gato no se relaciona con la apariencia del hombre. l ve mucho ms all, ve por dentro y por el revs.Se relaciona con la esencia. Si la demostracin de cario es falsa, de miedo, o sustituye inaceptables (pero existentes) impulsos secretos de agresin, el gato lo sabe. Y se defiende de la caricia. La relacin de l es con aquello que est oculto y tan bien guardado, que ni nosotros queremos, sabemos o tampoco podemos ver. Por eso, cuando surge en l un acto de entrega, de treparse a la falda o alguna manifestacin de afecto, es algo realmente verdadero que no puede ser dejado de lado. Es un gesto de confianza que honra a quien lo recibe, pues significa un juicio. El hombre no sabe sentir el gato, pero el gato sabe sentir al hombreSi hay alguna falta de armona real o latente, el gato la siente. Si hay soledad, l sabe y suaviza la situacin como puede, pues l enfrenta su propia soledad de manera mucho ms valiente que nosotros. No se manifiesta, no reclama. Solamente se aleja. Quien no sabe leer piensa que l no est all.Presente o ausente, l ensea y manifiesta algo. Cerca o lejos, mirando o fingiendo no ver, l est comunicando cdigos que no siempre (o casi nunca) sabemos traducir. El gato ve ms, ve dentro y ms all de nosotros. Se relaciona con los fluidos, auras, fantasmas amigos y opresores.El gato es mdium, brujo, alquimista y parapsiclogo. El gato es una oportunidad de meditacin permanente a nuestro lado; a ensear la paciencia, atencin, silencio y misterio. El gato es un monje silencioso, meditativo y sabio para contestar las preguntas dudosas, aguardando a que, en nuestra eterna bsqueda, encontremos el camino, en vez de ensearlo ya preparado, conocido y trillado.El gato contesta siempre con una nueva incgnita, encaminndonos a la permanente investigacin de lo real, de la bsqueda incesante de la seguridad de que cada segundo contiene la posibilidad de creatividad y de nuevas relaciones infinitas entre las cosas.El gato es una leccin diaria de afecto verdadero y fiel. Sus manifestaciones son ntimas y profundas. Exige dedicacin, entrega y atencin. Las personas descuidadas no son del agrado de los gatos. Personas chillonas le irritan. Todo lo que necesite promocin o explicacin requiere afirmacin.El gato vive de la verdad y no se ilusiona con las apariencias. Nadie en la naturaleza ha aprendido a bastarse (hasta en la higiene) a s mismo, como el gato. Ejemplo de sueo y musculacin, el gato nos ensea todas las posiciones de respiracin yoga. Ensea a dormir con entrega total y nos muestra la solucin de recuperacin en el Cosmos. Ensea a desperezarse con el masaje ms completo de todos los msculos, preparndolos para una accin inmediata. Si los preparadores fsicos aprendiesen el calentamiento que hace el gato, los jugadores de la banca no llevaran tanto tiempo (15 minutos) ejercitndose para entrar al campo.El gato sale del sueo para el mximo de accin, tensin y elasticidad en un segundo. Conoce el desempeo preciso y milimtrico de cada parte de su cuerpo a la cual ama y preserva como un templo. El gato es ejemplo de salud y sensualidad, de relaciones amorosas con dedicacin integral de varios das, ejemplo de organizacin familiar y definicin del espacio propio y territorio personal, administra lecciones de anatoma, equilibrio y desempeo muscular.Ejemplo de salto, de silencio, de descanso de introversin, de contacto con el misterio, con lo oscuro, con la sombra. Ejemplo de religiosidad sin iconoslecciones de alimentacin y fitnesse, de buen gusto y sentido de oportunidad. Ejemplo de vida; en fin, la vida ms completa, diaria, silenciosa, educada, sin cobranzas, sin vehemencias, sin exigencias.EL GATO ES UNA OPORTUNIDAD DE INTERIORIZACIN Y SABIDURA, HECHA POR EL MISTERIO A LA DISPOSICIN DEL HOMBRE. El gato es un animal que tiene mucho cuarzo en la glndula pineal y, por lo tanto, es un transmutador de energa y til para la cura, pues capta la energa negativa o mala del ambiente y la transforma en saludable.Normalmente, donde se acuesta con frecuencia es una seal de que la energa no est buena en el caso de que el animal se arrime a alguna parte de nuestro cuerpo de manera insistente, es una seal de que aquel rgano o miembro est enfermo o cerca de enfermarse, pues ya percibi la mala energa en determinado rgano y entonces, opta por elegir esa parte de cuerpo para limpiar lo que existe all.Observe que, de la misma manera que el gato se acuesta en determinado lugar, salta de repente; pues siente que ya limpi la mala energa del lugar y no necesita estar ms all. El amor del gato por su dueo es de desapego pues, mientras lo necesita l est cerca y cuando no, se aleja.En el Egipto de los faraones, el gato era adorado en la figura de la diosa Bastet, representada comnmente con el cuerpo de una mujer y cabeza de gata. Esta bella diosa era el smbolo de la luz, del calor y de la energa. Era tambin el smbolo de la luna y se crea que tena el poder de fertilizar la tierra y los hombres, curar enfermedades y conducir el alma de los muertos. En aquella poca, los gatos eran considerados guardianes del otro mundo y eran comunes en muchos amuletos.El gato inmortal existe en algn mundo intermediario entre la vida y la muerte, observando y esperando, pasivamente, hasta el momento en que el espritu humano se vuelve libre. Entonces, y solamente as, el ir a liderar el alma hasta su reposo final.

POR QU LOS DUEOS DE GATOS TIENEN MAYOR SALUD QUE LAS DEMS PERSONAS?

"Podra extraar esta pregunta, pero existen pruebas evidentes que lo demuestran: poseer un gato es bueno para nuestra salud.Existen dos razones para corroborar esta afirmacin. En primer lugar, es sabido que el amistoso contacto fsico con los gatos reduce de manera muy notoria el estrs en las personas que les acompaan. La relacin entre hombre y gato es conmovedora en el sentido de reciprocidad de la palabra. El gato se frota contra el cuerpo de su amo, y el dueo acaricia y alisa el pelaje del gato. Si a estos dueos se les somete en el laboratorio a pruebas para comprobar sus respuestas fisiolgicas, se descubre que sus sistemas corporales se relajan y se calman de una forma apreciable al efectuar el acto de acariciar a los gatos. Su tensin se apacigua y sus cuerpos se relajan. Esta forma de terapia felina no es fruto de la imaginacin de algn acadmico con exceso de entusiasmo. Se ha demostrado en la prctica en un nmero de casos agudos, que mejoraron algunos pacientes mentales de una forma asombrosa, tras permitrseles la compaa de gatos domsticos.Ms de una vez nos relajamos por la simple y honesta relacin con el gato. sta es la segunda razn que prueba el benfico impacto del felino sobre el ser humano. No se trata slo del toque, por importante que ste pueda ser. Es tambin asunto de relacin psicolgica, de una clase que carece de las complejidades, traiciones y contradicciones de las acciones humanas. Todos quedamos marcados por ciertas relaciones humanas de vez en cuando, algunos de manera ms aguda, otros de forma ms somera. A los que les hayan quedado graves cicatrices mentales puede resultarles difcil creer de nuevo en alguien. Para ellos, un nexo con un gato puede proporcionar recompensas tan grandes que hasta les devolver la fe en las relaciones humanas, destruir su cinismo y su suspicacia, y curar a la vez sus cicatrices ocultas. En Estados Unidos, un estudio reciente ha revelado que, para aquellos cuyo estrs les haba conducido a trastornos cardacos, el poseer un gato pudo marcar, literalmente, la diferencia entre la vida y la muerte, reduciendo la presin sangunea y sosegando un corazn muy sobrecargado"