El Niño y El Medio Ambiente

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ANALES ESPAÑOLES DE PEDIATRÍA.VOL. 56, SUPLEMENTO 6, 2002 353 Introducción: el niño y el medio ambiente Josep Ferrís i Tortajada, Juan Antonio Ortega García, Joaquín Aliaga Vera, Ana Ortí Martín y Júlia Garcia i Castell.* Unidad de Oncología Pediátrica y Departamento de Pediatría Hospital Infantil Universitari La Fe. Valencia. Servicio de Anatomía Patológica. Hospital de Sagunt * (An Esp Pediatr 2002; 56 [Supl 6]: 353-359) INTRODUCCIÓN En los albores del nuevo milenio, nuestros niños ha- bitan un mundo muy diferente al que todos los pedia- tras hubiésemos deseado. Más de 2/3 partes de la po- blación infantil tienen su salud y, desgraciadamente sus vidas, amenazadas por riesgos medioambientales en sus casas, en los lugares donde aprenden, juegan y, tristemente, trabajan (1, 2). En todos los países la pobreza constituye el deter- minante más poderoso de morbimortalidad prematura (3, 4). Genera una constelación de factores medioam- bientales negativos (biológicos, conductuales y psico- sociales) determinantes de una deficiente salud y de numerosas y graves enfermedades asociadas. La po- blación pediátrica es la más vulnerable por su inma- durez anatomofisiológica y dependencia psicosocial. Globalmente, el 98% de todas las muertes en menores de 15 años ocurre en los países subdesarrollados y es- tán asociadas a la pobreza (4, 5). La denominada “cri- sis infantil” consiste en que cada día fallecen más de 40.000 niños por malnutrición y enfermedades infecto- contagiosas y cada año más de 150 millones sobrevi- ven con enfermedades que hipotecan irreversiblemen- te su desarrollo físico y mental (1, 6). Las causas in- mediatas de esta “crisis infantil” son los agentes medioambientales, biológicos y químicos que conta- minan el aire, agua, alimentos y suelos y por la caren- cia doméstica a los recursos naturales básicos como agua potable, alimentos sanos y combustibles. Estas amenazas ambientales lógicamente también afectan a los padres y familiares adultos y generan mayores di- ficultades para que los niños reciban de sus progeni- tores un medioambiente, seguro, estable y estimulan- te. Las soluciones para tratar y prevenir la “crisis in- fantil” consisten en medidas políticas, económicas y tecnológicas basadas en la solidaridad, dignidad y jus- ticia humana que, desgraciadamente, no se adoptan por los organismos e instituciones nacionales e inter- nacionales competentes (1, 4, 6). La población pediátrica también paga un “peaje” es- pecialmente elevado en las denominadas por la UNI- CEF “circunstancias especialmente dificultosas(1, 6). Engloba a dos grupos diferentes: en primer lugar a los niños sin hogar” que malviven (explotados, prostitui- dos Y asesinados) en las calles y suburbios de las gran- des ciudades, y en segundo lugar a los “niños de la guerra” (víctimas mortales, amputados, huérfanos, ni- ños soldados y hacinados en campos de refugiados). Las causas medioambientales predominantes no son externas sino internas y hay que buscarlas en las mi- serias y ambiciones de la condición humana que son inmensas e insaciables. Las sociedades de los países occidentales, ante la inoperancia de los sistemas políticos en solucionar los graves problemas comentados, orientan las preocupa- ciones medioambientales hacia otros temas como la polución química del suelo, aire, agua y alimentos; los contaminante físicos atmosféricos; la degradación y erosión de los ecosistemas minerales y vegetales; re- cursos energéticos renovables y combustibles fósiles; tratamiento y manipulación de los residuos y basuras; pérdida de la biodiversidad; depleción de la capa de ozono estratosférica; repercusiones del cambio climá- tico global; y otras agresiones medioambientales de menor trascendencia (7, 8). En estos países, la mayo- ría de las enfermedades carenciales e infecciosas pre- valentes en el pasado pueden ser prevenidas o con- troladas con los aportes nutricionales adecuados y con las vacunaciones y el uso de los antibióticos. En el mundo industrializado están siendo substituidas por patologías crónicas o subagudas emergentes que van asociándose con mayor evidencia científica a la conta- minación medioambiental (2, 7). Entre las enfermedades emergentes destacan las alérgicas respiratorias o asmáticas, las patologías neu- rológicas y las neoplásicas (2, 7, 8). En los países in- dustrializados mueren actualmente por asma tres veces más que hace 20 años, a pesar de los avances farma- cológicos y de asistencia hospitalaria que se han pro- ducido durante este periodo de tiempo (9, 10). La po- blación pediátrica, aunque sólo representa el 20-25% del total de personas, incluye el 40-45% de todos los casos de asma (6, 9). Estos datos ilustran la especial vulnerabilidad pediátrica y el enorme “peaje” que pa- gan los niños ante las injusticias y agresiones medio- ambientales. MESA REDONDA: SALUD MEDIOAMBIENTAL PEDIÁTRICA

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Como es que se modifica uno y otro

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    Introduccin: el nio y el medio ambiente O

    toag

    fantil consisten en medidas polticas, econmicas ytecnolgicas basadas en la solidaridad, dignidad y jus-

    ms que hace 20 aos, a pesar de los avances farma-colgicos y de asistencia hospitalaria que se han pro-

    MESA REDONDA: SALUD MEDIOAMBIENTAL PEDITRICAANALES ESPAOLES DE PEDIATRA. VOL. 56, SUPLEMENTO 6, 2002

    ticia humana que, desgraciadamente, no se adoptanpor los organismos e instituciones nacionales e inter-nacionales competentes (1, 4, 6).

    La poblacin peditrica tambin paga un peaje es-pecialmente elevado en las denominadas por la UNI-CEF circunstancias especialmente dificultosas (1, 6).Engloba a dos grupos diferentes: en primer lugar a los

    ducido durante este periodo de tiempo (9, 10). La po-blacin peditrica, aunque slo representa el 20-25%del total de personas, incluye el 40-45% de todos loscasos de asma (6, 9). Estos datos ilustran la especialvulnerabilidad peditrica y el enorme peaje que pa-gan los nios ante las injusticias y agresiones medio-ambientales.Josep Ferrs i Tortajada, Juan Antonioy Jlia Garcia i Castell.*

    Unidad de Oncologa Peditrica y DepartamenServicio de Anatoma Patolgica. Hospital de S

    (An Esp Pediatr 2002; 56 [Supl 6]: 353-359)

    INTRODUCCINEn los albores del nuevo milenio, nuestros nios ha-

    bitan un mundo muy diferente al que todos los pedia-tras hubisemos deseado. Ms de 2/3 partes de la po-blacin infantil tienen su salud y, desgraciadamentesus vidas, amenazadas por riesgos medioambientalesen sus casas, en los lugares donde aprenden, juegan y,tristemente, trabajan (1, 2).

    En todos los pases la pobreza constituye el deter-minante ms poderoso de morbimortalidad prematura(3, 4). Genera una constelacin de factores medioam-bientales negativos (biolgicos, conductuales y psico-sociales) determinantes de una deficiente salud y denumerosas y graves enfermedades asociadas. La po-blacin peditrica es la ms vulnerable por su inma-durez anatomofisiolgica y dependencia psicosocial.Globalmente, el 98% de todas las muertes en menoresde 15 aos ocurre en los pases subdesarrollados y es-tn asociadas a la pobreza (4, 5). La denominada cri-sis infantil consiste en que cada da fallecen ms de40.000 nios por malnutricin y enfermedades infecto-contagiosas y cada ao ms de 150 millones sobrevi-ven con enfermedades que hipotecan irreversiblemen-te su desarrollo fsico y mental (1, 6). Las causas in-mediatas de esta crisis infantil son los agentesmedioambientales, biolgicos y qumicos que conta-minan el aire, agua, alimentos y suelos y por la caren-cia domstica a los recursos naturales bsicos comoagua potable, alimentos sanos y combustibles. Estasamenazas ambientales lgicamente tambin afectan alos padres y familiares adultos y generan mayores di-ficultades para que los nios reciban de sus progeni-tores un medioambiente, seguro, estable y estimulan-te. Las soluciones para tratar y prevenir la crisis in-rtega Garca, Joaqun Aliaga Vera, Ana Ort Martn

    de Pediatra Hospital Infantil Universitari La Fe. Valencia. unt *

    nios sin hogar que malviven (explotados, prostitui-dos Y asesinados) en las calles y suburbios de las gran-des ciudades, y en segundo lugar a los nios de laguerra (vctimas mortales, amputados, hurfanos, ni-os soldados y hacinados en campos de refugiados).Las causas medioambientales predominantes no sonexternas sino internas y hay que buscarlas en las mi-serias y ambiciones de la condicin humana que soninmensas e insaciables.

    Las sociedades de los pases occidentales, ante lainoperancia de los sistemas polticos en solucionar losgraves problemas comentados, orientan las preocupa-ciones medioambientales hacia otros temas como lapolucin qumica del suelo, aire, agua y alimentos; loscontaminante fsicos atmosfricos; la degradacin yerosin de los ecosistemas minerales y vegetales; re-cursos energticos renovables y combustibles fsiles;tratamiento y manipulacin de los residuos y basuras;prdida de la biodiversidad; deplecin de la capa deozono estratosfrica; repercusiones del cambio clim-tico global; y otras agresiones medioambientales demenor trascendencia (7, 8). En estos pases, la mayo-ra de las enfermedades carenciales e infecciosas pre-valentes en el pasado pueden ser prevenidas o con-troladas con los aportes nutricionales adecuados y conlas vacunaciones y el uso de los antibiticos. En elmundo industrializado estn siendo substituidas porpatologas crnicas o subagudas emergentes que vanasocindose con mayor evidencia cientfica a la conta-minacin medioambiental (2, 7).

    Entre las enfermedades emergentes destacan lasalrgicas respiratorias o asmticas, las patologas neu-rolgicas y las neoplsicas (2, 7, 8). En los pases in-dustrializados mueren actualmente por asma tres veces

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    VULNERABILIDAD PEDITRICALos nios constituyen uno de los grupos poblacio-

    piran ms aire que los adultos.

    las grandes ciudades y en particular en los barrios mar-ginales o suburbios.

    Humo del tabaco

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    eANALES ESPAOLES DE PEDIATRA. VOL. 56, SUPLEMENTO 6, 2002

    3) Son ms vulnerables por su inexperiencia en au-toprotegerse, especialmente en los primeros aos devida donde pasan mucho tiempo a ras del suelo.

    FACTORES MEDIOAMBIENTALES EN PATOLOGASCRNICAS

    Comentaremos superficialmente las patologas cr-nicas ms importantes (respiratorias, neoplsicas yneurolgicas) y los principales contaminantes medio-ambientales asociados.

    Patologas respiratorias (10-17)Exceptuando las enfermedades infecciosas en cuya

    etiopatogenia tienen un papel decisivo los contami-nantes biolgicos (virus y bacterias) medioambienta-les, es en los procesos alrgicos donde la contamina-cin domstica y externa est ocasionando problemasmuy importantes en la salud infantojuvenil.

    En EE.UU., el asma, que afecta a casi 5 millones depacientes menores de 18 aos, es la principal enfer-medad crnica que ocasiona absentismo escolar. A pe-sar de los avances teraputicos se estima que cada aoms de 150.000 nios precisan hospitalizacin y falle-cen ms de 600. En dicho pas en los ltimos 20 aosla mortalidad infantil por asma ha aumentado un 78%.Tambin se ha documentado un aumento espectacularde las hospitalizaciones de los nios que habitan en

    TABLA 1. Principales enfermedades peditricas asociadas al

    Grupo I: Retraso del crecimiento intrauterino, Sndrome de Infeccin respiratoria superior e inferior, InduccinRinitis

    Grupo II: Abortos espontneos, Dficits de funcione cognitivde la funcin pulmonarHipereactividad bronquial, Alteracin del perfil lip

    Grupo III: Malformaciones congnitas. Leucemia linfoblsticaWilms. Neuroblastoma. Sarcomas seos y de parte

    Grupo I: Relacin causa-efecto concluyente. Grupo II: Relacin causa-efecto probablEntre la mitad y dos terceras partes de la poblacinpeditrica vive en ambientes domsticos con al menosun fumador activo. Respiran involuntariamente las4.000 substancias qumicas del humo del tabaco, in-cluyendo monxido de carbono, nicotina, alquitrn,formaldehdo y cianuro de hidrgeno. La mayora sonirritantes respiratorias y varias decenas estn cataloga-das como carcingenos humanos.

    Las principales patologas respiratorias peditricasasociadas al tabaquismo pasivo estn expuestas en latabla 1. Su frecuencia depende directamente de la can-tidad de humo domstico y los nios que viven condos padres fumadores tienen ms infecciones respira-torias que los que tienen un solo padre fumador. Lasfrecuencias ms bajas de asma e infecciones respirato-rias ocurren en hijos de padres no fumadores. El taba-quismo materno gestacional est asociado con una in-cidencia del 10% de la mortalidad perinatal y con un in-cremento del sndrome de la muerte sbita del lactante.

    En EE.UU. el Center for Disease Control estimaque los nios fumadores pasivos cada ao tienen msde 18 millones de das de actividad restringida, ms de10 millones de das de estar encamados y pierden msde 7 millones de das escolares que los nios no ex-puestos al humo del tabaco. Estos datos ilustran las pa-tologas agudas y crnicas asociadas al tabaquismo pa-sivo infantil.

    abaquismo pasivo (14)

    uerte sbita infantily exacerbacin de asma, Sntomas respiratorios crnicos, Conjuntivitis,

    s y conductuales, Exacerbacin de Fibrosis Qustica, Disminucin

    ico.

    mieloide aguda. Tumores del sistema nervioso central. Tumor deblandas.

    . Grupo III: Relacin causa-efecto posiblenales de mayor riesgo para los contaminantes medio-ambientales (6, 9, 11). Fundamentalmente es debido atres razones:

    1) Son ms susceptibles a las amenazas medioam-bientales porque los sistemas corporales an se estndesarrollando, presentando cambios rpidos en el cre-cimiento, variaciones en la inmadurez orgnica y tisu-lar, y dficits cuantitativos y cualitativos en su sistemade inmunovigilancia.

    2) Estn ms expuestos a los peligros medioam-bientales porque proporcionalmente por kilogramo depeso comen ms alimentos, beben ms lquidos y res-

    La pobre calidad del aire domstico y externo estntimamente relacionada con patologa alrgica y as-mtica, as como con un incremento de otras patolo-gas respiratorias, como infecciones de vas altas, bron-quitis y neumonas. Describiremos brevemente loscontaminantes domsticos y externos.

    A) Contaminantes domsticosEn los pases occidentales la gente pasa el 90% del

    tiempo en el hbitat domstico. Los principales conta-minantes en las casas, guarderas y escuelas son los si-guientes:

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    J. Ferrs i Tortajada, J.A. Ortega Garca, J. Aliaga Vera, A. Ort Martn y J. Garcia i Castell.Introduccin: el nio y el medio ambiente

    Compuestos orgnicos voltilesSon contaminantes que se evaporan a partir de de-

    duccin de la funcin pulmonar en nios no asmticosni alrgicos. La American Lung Association ha demos-terminadas substancias como productos domsticos delimpieza, adhesivos, colas pinturas, barnices de mue-bles, etc. Desde estos productos pasan al aire y que-dan atrapados en las habitaciones de los edificios es-casamente ventilados. Algunos trabajos han documen-tado hasta concentraciones 10 veces superiores a lasencontradas en espacios abiertos exteriores. La expo-sicin aguda a estas substancias ocasiona irritacinocular, nasal, farngea y bronquial, dermatitis inespec-ficas, cefalea, nuseas y vmitos y desencadena crisisasmticas. La exposicin crnica a algunos compues-tos orgnicos voltiles como el benceno y el cloruro devinilo pueden causar cncer.

    El formaldehdo, otro de los componentes incluidosen este grupo de substancias, es un gas incoloro quese usa en la industria maderera (conglomerados, ta-bleros, contrachapados, etc.), pinturas, revestimientos,cosmticos, materiales aislantes, etc. Tambin se liberaen la combustin de la madera, keroseno, gas natural,motores de automviles y de los cigarrillos. Ocasionasntomas irritativos en las mucosas oculares y respira-torias, desencadenando crisis asmticas en las perso-nas alrgicas. Adems, est reconocido como un agen-te cancergeno humano. Los nios desarrollan urticariay otros signos alrgicos dermatolgicos.

    xido de nitrgenoLos xidos de nitrgeno, aunque predominan en los

    espacios exteriores, tambin pueden contaminar losambientes domsticos. Estn producidos por la com-bustin de combustibles fsiles (cocinas de carbn,gasleo, gas natural, estufas no elctricas, etc.) y por elhumo del tabaco. Son irritantes respiratorios muy po-tentes, desencadenando y agravando crisis asmticas yotras enfermedades respiratorias.

    AlergenosSon los clsicos agentes que causan o agravan las

    crisis asmticas de origen domstico como caros delpolvo, cucarachas, caspa de los pjaros, plenes, es-poras de hongos, virus y bacterias. Tambin ocasionanmanifestaciones alrgicas digestivas y dermatolgicas.

    B) Contaminantes atmosfricos externosLos principales contaminantes atmosfricos urbanos

    son el ozono troposfrico, los xidos de nitrgeno,monxido de carbono, dixido de azufre, partculas yplomo.

    Los nios son especialmente vulnerables a los efec-tos del ozono y de las partculas. El ozono troposfri-co se forma por reacciones fotoqumicas a partir de losxidos de nitrgeno y de los compuestos orgnicosvoltiles. El ozono se asocia constantemente con elagravamiento del asma bronquial y tambin con la re-ANALES ESPAOLES DE PEDIATRA. VOL. 56, SUPLEMENTO 6, 2002

    trado que los nios asmticos tienen un 40% ms deposibilidades de desarrollar crisis los das de alta con-taminacin comparados con los das con bajas con-centraciones. Recientemente se ha asociado la exposi-cin a partculas, especialmente de pequeo tamao(dimetro inferior a 2,5 micras), con un aumento de lamortalidad perinatal por problemas respiratorios y porel sndrome de la muerte sbita del lactante.

    En verano, por las condiciones climatolgicas, escuando habitualmente se alcanzan las mayores con-centraciones atmosfricas de ozono y partculas. En di-cha poca los nios pasan ms tiempo al aire libre ypractican actividades fsicas ms vigorosas, que deter-minan una mayor exposicin y absorcin respiratoriade dichos contaminantes atmosfricos. Mientras queen los adultos slo ocasiona ligeras dificultades respi-ratorias, en los nios las repercusiones a corto, medioy largo plazo son ms importantes.

    Enfermedades neoplsicas (7, 9, 11, 18-22)En los pases occidentales, entre el 25-30% de la po-

    blacin es menor de 20 aos y, globalmente, desde ladcada de los 70 se observa un incremento progresivode su incidencia. Segn datos del National Cancer Ins-titute obtenidos durante el periodo 1975 a 1997, el in-cremento medio anual ha sido del 0,7%. A pesar de losavances en la supervivencia, constituyen la primeracausa de mortalidad por condiciones mdicas durantela poca peditrica.

    Aunque el origen del cncer es multifactorial, la in-fluencia de los agentes cancergenos medioambientales fundamental y decisiva. El periodo de actuacin yde latencia es de varios aos a dcadas por lo que enla aparicin de los cnceres peditricos deben tenerseen cuenta los periodos preconcepcional, gestacional ypostnatal. Adems de la posibilidad de desarrollar cn-cer en nios, la exposicin a los agentes cancergenosdurante los periodos comentados, puede ocasionarcnceres en los adultos.

    La poblacin est expuesta a los agentes cancerge-nos a travs de mltiples vas o vectores de transmi-sin como el aire, agua, alimentos, drogas, contactocutneo y uso de tabaco. A continuacin comentare-mos solamente algunos ejemplos de factores medio-ambientales asociados a cnceres.

    Humo del tabaco en ambientes cerradosLa poblacin peditrica, especialmente durante la

    primera dcada de la vida, est expuesta al humo am-biental del tabaco en mltiples lugares (hogares, guar-deras, escuelas, autobuses de transporte escolar, ba-res, restaurantes, etc.). Son fumadores pasivos que in-halan las 4.000 substancias txicas contenidas en el

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    desintegrando en otras partculas radiactivas que pue-den ser inhaladas y quedar retenidas en las clulas mu-

    La sobreexposicin a las radiaciones ultravioletas so-lares puede daar la piel de los nios en mayor inten-

    TABLA 2. Substancias qumicas cancergenas identificadas en el humo del tabaco (10, 18)

    as

    etie

    ilali

    annicmbafo

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    iloANALES ESPAOLES DE PEDIATRA. VOL. 56, SUPLEMENTO 6, 2002

    cosas del aparato respiratorio y parnquima pulmonar.Las pequeas cargas de radiacin van daando el pa-rnquima broncopulmonar y con el paso del tiempoaumentando el riesgo de cncer pulmonar. Cada ao laEnvironmental Protection Agency atribuye entre 7.000a 30.000 muertes por cncer al radn, siendo la segun-da causa de morbilidad por cncer broncopulmonar enadultos por detrs del tabaco. El riesgo individual desufrir cncer pulmonar asociado al radn dependeprincipalmente de tres factores: nivel de radn, dura-cin de la exposicin y existencia del hbito tabquico.

    AsbestoEs un mineral fibroso que se usa ampliamente en

    materiales de construccin: placas de techo y revesti-miento, aislamiento de tuberas y calderas, baldosas depisos, paneles de tejados, refugios y juntas de imper-

    sidad que los adultos por el menor grosor de la capade queratina, menor cantidad de melanocitos, menorcapacidad antioxidante en las clulas basales drmicasy por su mayor tiempo global al aire libre. Antes de los18 aos de vida se absorbe ms de la mitad de radia-cin ultravioleta esperada durante el transcurso de unavida media (75-80 aos). Este tipo de radiacin en losltimos aos se est incrementando debido al dao enla capa de ozono estratosfrica por la emisin de ga-ses clorofluorcabornados en los pases industrializa-dos. Las radiaciones ultravioletas A y B son agentescancergenos asociados a carcinoma de clulas basa-les, de clulas escamosas y a melanomas malignos. Losnios que durante los primeros 10-15 aos de vida su-fren excesivas quemaduras solares, presentan un ries-go tres veces mayor al esperado de desarrollar mela-noma maligno en la poca adulta.humo tabquico, estando catalogadas como cancerge-nas ms de 40 de ellas (Tabla 2). A pesar de las difi-cultades inherentes a los estudios epidemiolgicos encnceres peditricos, el tabaquismo pasivo est asocia-do a las siguientes neoplasias: leucemias agudas, tu-mores del sistema nervioso central, neuroblastoma, tu-mor de Wilms, sarcomas de partes blandas y seos.

    RadnEl radn es un gas incoloro, inodoro, e inspido que

    se origina por la desintegracin del uranio contenidoen el suelo y rocas de la corteza terrestre. A travs delsuelo penetra por fisuras y otras aberturas de los edifi-cios en el ambiente domstico. Adems, el radn se va

    HPA N-Nitrosamin

    Benz(a) antraceno N-NitrosodimBenzo(b) fluroanteno N-NitrosoetilmBenzo(j) fluroanteno N-NitrosodietBenzo(k) fluoranteno N-NitrosopirroBenzo(a) pireno N-NitrosodietCriseno N-NitrosonorDibenz(a,h) antraceno 4-(MetilnitrosaDibenzo(a,i) pireno N-NitrosoanaDibenzo(a,l) pireno N-NitrosomorIndeno(1,2,3-c,d)pireno 5-metilcriseno

    Aza-arenos Aminas arom

    Quinolina 2-ToluidinaDibenz(a,h) acridina 2-NaftilaminaDibenz(a,j) acridina 4-Aminobifen7H-Dibenzo(c,g) carbazol Benceno

    HPA: hidrocarburos policclicos aromticosmeabilizacin. Est presente en escuelas y otros edifi-cios pblicos as como en estructuras de residenciasdomsticas. Est asociado a mesotelioma pulmonar yabdominal y a cncer de pulmn. Los hijos de trabaja-dores estn expuestos al polvo de asbesto a travs delos vestidos y zapatos. Actualmente se estima que enlos prximos 30 aos fallecern prematuramente 1000nios por la exposicin escolar al asbesto en losEE.UU. El asbesto nicamente es peligroso cuando esinhalado. Cualquier material que contenga asbesto sise deshace o fragmenta sin producir partculas micros-cpicas areas no produce efectos cancergenos.

    Radiacin ultravioleta

    Aldehdos

    lamina Formaldehdotilamina Acetaldehdomina Crotonaldehdodina Compuestos orgnicosolamina Acrilonitrilootina 1,1-Dimetilhidracinaino)-1-(3-piridil)-1-butanona 2-Nitropropanosina Cloruro de vinilo

    lina

    icas Compuestos inorgnicos

    HidracinaArsnicoNiquelCromoCadmioPlomoPolonio-210

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    J. Ferrs i Tortajada, J.A. Ortega Garca, J. Aliaga Vera, A. Ort Martn y J. Garcia i Castell.Introduccin: el nio y el medio ambiente

    Residuos peligrososLa exposicin a basuras peligrosas produce substan-

    Al mismo tiempo, estudios clnicos y en animales deexperimentacin demuestran que una gran variedadcias txicas cancergenas y no cancergenas que con-taminan el medioambiente en los lugares cercanos a sualmacenamiento. Entre los agentes cancergenos desta-can diversos compuestos orgnicos (dioxinas, furanos,policlorobifenilos, hidrocarburos policclicos aromti-cos, etc.) y metales (cadmio, arsnico, cromo, cobalto,nquel, etc.). Los nios de las poblaciones marginalesque habitan en las zonas prximas a los depsitos overtidos de residuos peligrosos estn expuestos a ma-yor concentracin de los agentes cancergenos a travsdel aire, agua y alimentos que consumen.

    Enfermedades neurolgicas (7, 9, 11, 23-29)Las substancias neurotxicas son compuestos qu-

    micos que, dependiendo del periodo de actuacin yde las dosis, pueden afectar el desarrollo morfolgicocerebral e interferir con las funciones del sistema ner-vioso. Pueden tener repercusiones negativas en el ni-vel de inteligencia, capacidad de lenguaje y de aten-cin, problemas conductuales y sociales y modifica-ciones del estado anmico. A dosis muy altas losneurotxicos producen estupor, coma, convulsiones,parlisis respiratoria y muerte.

    En los ltimos aos numerosos estudios epidemio-lgicos de enfermedades neurolgicas en la poblacinpeditrica sobre discapacidades conductuales, trastor-nos del aprendizaje y del desarrollo neurocognitivohan evidenciado los siguientes resultados:

    a) El 17% (unos 12 millones de nios) de la pobla-cin de EE.UU. menor de 18 aos sufre una o ms dis-capacidades conductuales, de aprendizaje y neurocog-nitivas.

    b) El sndrome de hiperactividad y dficit de aten-cin que afectaba al 3-6% de la poblacin escolar es-t aumentando su prevalencia hasta el 17%. El nme-ro de nios que toman medicacin para este sndro-me se dobla cada 4-7 aos desde 1971 hasta laactualidad.

    c) El 5-10% de los nios de escuelas pblicas pre-sentan discapacidades de aprendizaje.

    d) El nmero de nios que han precisado progra-mas especiales de educacin por presentar discapaci-dad de aprendizaje se ha incrementado un 191% des-de 1977 a 1994.

    e) Aproximadamente el 1% de todos los nios sondeficientes mentales.

    f) La prevalencia de autismo se ha duplicado duran-te el periodo 1966 a 1997, llegando en la actualidad ados casos cada 1.000 nios.

    La interpretacin de estos resultados puede reflejarincrementos reales, mejores criterios de deteccin ouna combinacin de ambos, pero su anlisis reflexivosugiere un problema de proporciones epidmicas.ANALES ESPAOLES DE PEDIATRA. VOL. 56, SUPLEMENTO 6, 2002

    de substancias qumicas son txicas especialmente enel cerebro en desarrollo y generan enfermedades neu-rolgicas y neurocognitivas. Estos neurotxicos pue-den lesionar directamente a las clulas nerviosas o in-terferir hormonas (disruptores endocrinos), neuro-transmisores u otros factores de crecimiento. Losprincipales neurotxicos son los siguientes:

    PlomoLos niveles elevados de plomo en sangre durante

    los primeros aos de vida se asocian con dficits deatencin, escaso rendimiento escolar, hiperexcitabili-dad, agresividad y conductas delictivas y antisociales.Los efectos adversos en el aprendizaje se estn obser-vando en niveles plasmticos considerados reciente-mente como seguros.

    MercurioLa exposicin fetal a metilmercurio causa retraso

    mental y alteraciones visuales y trastornos de la mar-cha. Incluso las exposiciones puntuales como las queresultan del consumo materno de pescado se asociana problemas del lenguaje, atencin y disminucin dela memoria que pueden ser permanentes.

    ManganesoEs un metal esencial en la catlisis de procesos en-

    zimticos muy importantes, pero los niveles elevadosse relacionan con hiperactividad y alteraciones en elaprendizaje.

    NicotinaLos nios de madres fumadoras durante el embara-

    zo presentan un mayor riesgo de dficits en su inteli-gencia, trastornos en el aprendizaje y dficits de aten-cin. Adems los que nacen de madres pasivamenteexpuestas al humo tabquico tambin presentan unmayor riesgo de retraso en la capacidad del lenguaje yde inteligencia.

    Dioxinas y policlorobifenilosLa exposicin intrauterina humana y de primates

    origina alteraciones en el aprendizaje, dficits en elcoeficiente de inteligencia, hiperactividad y dficit deatencin.

    PesticidasEn animales, la exposicin a insecticidas organofos-

    fatados a pequeas dosis en das crticos del desarro-llo embrionario puede causar hiperactividad y altera-ciones permanentes en los niveles de neurotransmiso-res cerebrales. El clorpyrifos (Dursban#R), uno de lospesticidas ms populares, disminuye la sntesis de

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    ADN en el cerebro en desarrollo, y reduce el nmerode neuronas adultas. Algunos pyretroides, otra clase

    BIBLIOGRAFAANALES ESPAOLES DE PEDIATRA. VOL. 56, SUPLEMENTO 6, 2002

    muy comn de pesticidas, tambin causan hiperactivi-dad permanente en animales expuestos a pequeasdosis en un da crtico de su desarrollo cerebral.

    Los nios de comunidades agrcolas expuestos a di-versos pesticidas, evidencian disminucin de la me-moria, coordinacin y capacidad de resistencia.

    SolventesLa exposicin durante el desarrollo embrionario a

    solventes orgnicos puede causar un amplio espectrode patologa desde alteraciones congnitas hasta hipe-ractividad, dficits de atencin, disminucin del coefi-ciente de inteligencia, menor capacidad de memoria yproblemas en el aprendizaje.

    La exposicin fetal a pequeas dosis de alcohol co-mo la ingesta de una bebida alcohlica, en das crticosdel desarrollo cerebral puede ocasionar conductas im-pulsivas, dficits de memoria y del coeficiente de inteli-gencia, pobre rendimiento escolar y conducta antisocial.

    Trabajos en animales y en humanos evidencian quela exposicin prolongada fetal a tolueno, tricloroetile-no, xyleno y styreno origina dficits en el aprendizajey problemas conductuales en pocas infantojuvenilesy adultas.

    COMENTARIOS FINALESEn los ltimos aos existe una creciente preocupa-

    cin popular por los efectos en la salud humana oca-sionados por la imparable contaminacin medioam-biental (2, 7). Contrasta con la escasa atencin mdicaque se dedica a la salud medioambiental en la forma-cin acadmica pre y postgraduada y en los libros demedicina general y peditrica (9, 11). Concretamente,la informacin relativa a las repercusiones de las agre-siones medioambientales en la poca fetal e infantoju-venil, aparece muy dispersada en revistas cientficasselectivas que habitualmente no leen la mayora de pe-diatras clnicos (9, 11). La creacin del Grupo de Tra-bajo de Salud Medioambiental (GTSMA) de la Socie-dad Valenciana de Pediatra (SVP), pretende, modesta-mente, fomentar el estudio, conocimiento ydivulgacin de esta parcela de patologa peditrica in-justamente olvidada y relegada (30).

    El GTSMA de la SVP agradece el apoyo del Presi-dente y de la Junta Directiva de la SVP y la confianzadel Comit Cientfico del 51 Congreso de la AEP. Apro-vecha esta oportunidad para estimular a todo el colec-tivo peditrico la constitucin de otros GTSMA en susrespectivas sociedades regionales, para conocer mejorlos efectos reales de la polucin medioambiental, diag-nosticar correctamente las patologas asociadas, prote-ger adecuadamente a nuestros nios y mejorar la saludde las generaciones actuales y venideras.1. Satterthwaite D, Hart R, Levy C, Mitlin D, Ross D, Smith J, Step-hens C. The Environment for Children. United Nations Chil-drens Fundation (UNICEF). London: Earthscan Publ Ltd, 1996.

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