EL PROBLEMA DE LA RAZÓN Y LA FE EN PASCAL. Anotaciones desde una perspectiva crítica actual.

Fr. Jesús Piedra Barboza. OFM Cap.

_________________________________________________________________________

Resumen: El presente trabajo realiza una exposición sistemática del

problema de la razón y la fe en el pensamiento pascalino, por lo que se expone en

sí el problema del conocimiento de Dios tal y como lo concibió Pascal. Además

como la razón debe subordinase a la fe para llegar a conocer al Absoluto,

concluyendo con una crítica actual sobre el tema tratado.

Abstract: This paper makes a systematic exposition of the problem of faith

and reason in thinking Pascalino, so that the problem presents itself the knowledge

of God conceived as Pascal. Furthermore, as the reason must subordinate itself to

faith to get to know the Absolute, concluding with a critical current on the subject.

Palabras claves:

Razón: Al hacer uso del término razón hago referencia a la capacidad

cognoscitiva natural al ser humano, y por la cual llega a conocer un objeto que se

presenta frente a él.

Fe: El término fe en este trabajo hacer referencia a una capacidad sobrenatural

del ser humano dada por Dios, y por la cual el hombre es capaz de reconocer al

absoluto, quien le permite adentrase en el misterio del conocimiento divino.

Dios o Absoluto: Aquí no hace referencia a un ser personal que posee la

existencia como esencia y que existe por de suyo, propio de la filosofía, sino que

hace referencia al Dios presentado por Jesucristo, al Dios cristiano. Si se usase en

otro contexto al presentado anteriormente se diferenciara por su uso en minúscula.

La discusión entre la fe y la razón ha sido uno de los temas de mayor discusión a

lo largo de la historia, ya por ejemplo, los griegos superaron los mitos por medio

de la razón, más adelante la fe se impuso colocando a la razón como a su sierva,

no obstante, con el redescubrimiento del pensamiento antiguo se repudió

nuevamente la fe dando lugar a la razón como superior a ella, ya en la actualidad

se busca un compendio de ambas perspectivas en las cuales se llegan a

complementar ambos conocimientos.

Es precisamente en este contexto actual en el que surge la elaboración del

presente trabajo, con el que se presenta primeramente el desafío actual de

compendiar ambas perspectivas, por lo que busco delimitar los campos de acción

en el pensamiento moderno y el pensamiento fideista; seguidamente se presenta

el problema que para Pascal representa la fe y la razón, además de la necesidad,

no de exclusión sino de subordinación de estas, es desde aquí donde se presenta

un breve excursos de las reacciones que provoco el pensamiento de Pascal en su

época, concluyendo con una crítica actual al respecto del tema tratado, desde la

perspectiva de papa Benedicto XVI.

Uno de los desafíos actuales es el de la racionalidad, en nuestros días todo debe

poder ser explicado de una manera racional, por lo que la fe ya no tiene cabida,

especialmente en los ambientes universitarios, en los cuales crece día con día la

población.

Aquel punto de partida de la edad media, ahora es visto como retrograda y poco

valido. Esto despertó a principios de la edad moderna una doble posición, aquellos

que, como Pascal, intentaban volver al modelo de pensamiento antiguo, en el que

la fe era la piedra angular de cualquier estructura de pensamiento, mismos que

ahora agrupamos bajo el nombre de fideistas, y la otra reacción fue la de los

ilustrados, quienes, dejando atrás los antiguos modelos, se lanzaban a la aventura

del fundamento científico tan en boga en el momento. Estas reacciones se

polarizaron haciendo que se excluyesen mutuamente y de manera tajante y

definitiva.

Pero, ¿Cuál es el problema de la razón y la fe en Pascal? Según Pascal el

conocimiento del Absoluto es el único capaz de saciar nuestra sed por conocer,

sin embargo, a este conocimiento solo se puede acceder por medio de la fe, no

obstante, y es aquí donde radica el problema, el conocimiento de Absoluto es el

único saber veraz, lo malo es que por de suyo es un saber incognoscible.

Algo que debemos de tener claro, es que al dar la primacía a la fe, Pascal no está

eliminando la razón, es cierto que el Absoluto no es cognoscible por la razón

natural del hombre, teoría opuesta a los padres de la Iglesia y algunos medievales,

sin embargo, puede ser conocido por una razón sobrenatural (fe) dada por el

mismo Dios que se revela, por lo que solo podríamos conocer al Absoluto por el

mismo Absoluto, en una reflexión cristiana solo podemos conocer al Padre por

medio del Hijo y por la gracia del Espíritu.

Por lo que no podemos decir, entonces, que la razón queda suprimida por Pascal

sino que la pone en su lugar, sometida a la fe, es por este motivo que este autor

no es un irracionalista, sino un fideista.

Ahora bien, el motivo de esta subordinación de la razón a la fe es porque la razón

debe reconocerse a sí misma como carente y limitada, así que donde la razón no

llega, le supera la fe.

Según Pascal, si la razón no deja paso a la fe, quedara hueca e infecunda,

solamente sostenida por la fe es capaz de encontrar su sitio y su valor, de lo

contrario los caminos racionales que demuestran al Absoluto carecen de validez, y

al ser erróneas se enfrascan en sí mismas, quedando aisladas y rayando en el

ateísmo.

Como queda claro, la razón no es negada por Pascal, sino que se le ve como

limitada e insuficiente, la sola razón es incapaz de acceder al conocimiento de

Dios, por lo que solo se le puede dar validez si se le ata a la fe por la cual y por

medio de Jesucristo se conoce a Dios.

Considero necesario aclarar que cuando Pascal hace referencia al Absoluto o a

Dios, no se refiere a la divinidad metafísica, propia del estudio de la filosofía, sino

que se refiere al Dios cristiano, he aquí otra exclusión de Pascal, saca al dios de la

filosofía y coloca en su lugar al Dios cristiano.

Llegados hasta este punto, podemos afirmar que el problema de la razón y la fe en

Pascal no es un problema de contrarios que se excluyen mutuamente, sino que es

un problema de subordinación, en el cual una debe de subordinarse a la otra de

manera servil.

No obstante los modernos no pueden quedarse así, ellos, al comentar a Pascal,

dicen que bajo la teoría presentada por él, Dios es incognoscible, y así mismo lo

declara Pascal. «Si hay un Dios, es infinitamente incomprensible ya que, no

teniendo ni partes ni límites, no tiene ninguna relación con nosotros. Somos, pues,

incapaces de conocer, ni lo que es ni si existe» (Gonzales, 2003: 456). Sin

embargo, estos autores que critican a Pascal lo hacen desde una perspectiva

filosófica, la cual según mi opinión personal es errónea, puesto que al excluir al

dios de la filosofía, como lo explique ya anteriormente, Pascal no hace un tratado

filosófico, aunque es lo que quiere hacer, sino que realiza un tratado apologético

de conclusiones muy erradas. En otras palabras no realiza un trabajo filosófico

sino un trabajo teológico poco fundado.

Considero interesante la postura de Gonzales cuando afirma que Pascal fue el

primero en vislumbrar la desdivinización que trajo consigo la filosofía moderna y a

la cual Heidegger apunto luego como una de las características de esta época, y

tal vez es este atisbo de desdivinización la que llevo a Pascal a aislarse del

pensamiento de su época y realizar una diferenciación entre el Dios de los

cristianos y el dios de la filosofía.

Luego de lo que hemos dicho y haciendo una crítica desde la época actual,

podemos encontrar que no en pocos ambientes se han conciliado las perspectivas

modernas y fideistas haciendo que se complementen. Estos nuevos movimientos

provocaron que se criticasen y excluyesen ambos modelos.

Al fin y al cabo lo más importante es la comprensión de Dios y la realización

concreta de la religión, ya que el hombre es un ser religioso, por lo que se puede

actuar a favor de Dios sin ir en contra de la naturaleza divina, de esto da fe san

Juan al iniciar su evangelio con la afirmación de que en el principio era el logos,

era la razón, por lo que la naturaleza divina es ser razonable. Así que en el

conocimiento de Dios existe también una ilustración, dicho de otra manera, el

correcto conocimiento de Dios es, en el fondo, un encuentro entre fe y razón; entre

ilustración y religión, al respecto dice Benedicto XVI “el Dios verdaderamente

divino es el Dios que se ha manifestado como logos y ha actuado y actúa como

logos lleno de amor por nosotros. (2006). Al respecto escribía también el beato

Juan Pablo II.

“En efecto, la Iglesia está profundamente convencida de que fe y razón " se

ayudan mutuamente ", ejerciendo recíprocamente una función tanto de

examen crítico y purificador, como de estímulo para progresar en la

búsqueda y en la profundización.” (1998: 58).

A manera de conclusión debo decir que, según lo expuesto el problema de la

razón y la fe en Pascal no es un problema de contrarios que se excluyen

mutuamente, sino que es un problema de subordinación, en el cual la razón debe

de subordinarse a la fe de manera servil. Y partiendo de este punto se puede

afirmar que la razón no es negada por Pascal, sino que se le ve como limitada e

insuficiente, la sola razón es incapaz de acceder al conocimiento de Dios, por lo

que solo se le puede dar validez si se le ata a la fe por la cual y por medio de

Jesucristo se conoce a Dios.

Podemos de igual manera concluir que, gracias a esta postura tomada por Pascal,

él es el primero en vislumbrar la desdivinización que trajo consigo la filosofía

moderna y a la cual Heidegger apunto luego como una de las características de

esta época.

Al analizar esto desde las nuevas perspectivas no nos queda otra opción más que

negar la postura pascalina y decir que el correcto conocimiento de Dios es, en el

fondo, un encuentro entre fe y razón; entre ilustración y religión. Ya que fe y razón

se ayudan mutuamente y no de manera servicial.

Bibliografía:

Benedicto XVI.(2006) Fe, Razón y universidad. Recuerdos y reflexiones. Letio inaguralis en la universidad de Bonn.

de Salas Ortueta, J. (1979, January). La crítica a la razón en Pascal y la situación de ésta dentro del proceso de secularización. In Logos. Anales del Seminario de Metafísica (No. 14, p. 47).

Gonzales, Ángel L. (2003) ¿Solamente el Absoluto expresa adecuadamente al Absoluto? Acotaciones sobre el fideísmo de Pascal. Scripta Theologica, may-aug 2003, Vol. 35, Issue 2, p.447-459

Juan Pablo II. (1998) Fide et Ratio. Ediciones Vaticanas. Vaticano.

Pascal, Blaise. (1790). Pensamientos de Pascal sobre la religión. La oficina de Viuda de Blas

Miedes; Madrid.

Universidad Teológica de América Central.

Mons. Oscar Arnulfo Romero.

Filosofía Moderna.

Prof. Pedro J. Solís.

7 de junio del 2013.