El Proceso de Cristo

N 232.962 E 74

Escobar Fornos, Ivn El proceso de Cristo /Ivn Escobar Fornos 2 ed. Managua : Hispamer, 2007 60 p. (Breviarios Jurdicos; No. 5) ISBN: 978-99924-57-89-41. PASIN DE JESS 2. DERECHO ROMANO-HISTORIA 3. PROCEDIMIENTO PENAL (DERECHO ROMANO) - CASOS

Equipo editorialAutor Coordinacin editorial Diseo interior Diseo de portada : : : : Ivn Escobar Fornos Alicia Casco Guido Alicia Casco Guido Sergio Flores Balmaceda

Todos los derechos reservados conforme a la ley Ivn Escobar Fornos, 2007 HISPAMER, 2007 Costado este de la UCA, Apartado A-221, Zona 13 Managua, Nicaragua Impreso en Nicaragua, por Servicios Grficos

ndicePresentacin ................................................................ Nota introductoria ....................................................... Palabras liminares ....................................................... I. El debido proceso .................................................1. Qu es el debido proceso? ................................. 2. Algunas condiciones del debido proceso ............

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II. Ideas generales ...................................................... III. Jurisdiccin hebrea ...............................................1. Su captura ............................................................ 2. Antejuicio ............................................................ 3. Comparecencia ante el Sanhedrn ....................... 4. Irregularidades en el juzgamiento de Jess por el Sanhedrn ...................................................

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IV. Jurisdiccin romana .............................................. V. Ejecucin de la sentencia (crucifixin) ................ VI. No existi el debido proceso ................................ VII.Destino de Judas y Pilato .....................................1. Judas se ahorc .................................................... 2. Condena de Pilato ................................................

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VIII. Destino de los apstoles ....................................

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BREVIARIOS JURDICOS 5

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PresentacinEditorial Hispamer inicia otra etapa de publicaciones, nueva en Nicaragua, pero de gran tradicin y de gran aporte a la cultura y al proceso formativo de estudiantes y profesionales, nos referimos a los Breviarios Jurdicos. No estamos seguros si su origen tenga base en los breviarios confesionales, muy conocidos por seminaristas, estudiantes de colegios catlicos y tambin por sacerdotes u hombres de fe ya formados. El breviario era ese libro donde se concentraba lo necesario y fundamental que todo cristiano deba conocer y dominar, desde las oraciones hasta los principales elementos de la doctrina y la liturgia. Tener un breviario era como quien dice tener a mano todo el conocimiento necesario para darse respuesta a cualquier duda, cualquier inquietud que un hombre de fe, pero inquieto, podra tener. Pero en un terreno ms profano y de orden prctico en Latinoamrica prestigiosas editoriales pioneras en la publicacin de breviarios, han abordado diferentes temas relacionados con economa, lingstica, antropologa, ciencias jurdicas, en fin diversas disciplinas del conocimiento humano tratado por eminencias en la materia y en forma breve. Un breviario es una buena entrada a la materia en la cual uno posteriormente se quiere especializar, y no importa cun grande sea la biblioteca particular o las fuentes de consulta, el breviario siempre resulta indispensable, como libro de bolsillo, libro de mano, libro de cabecera, para fijar conceptos sobre la marcha, al fragor de la vida cotidiana. Esta coleccin de Breviarios Jurdicos de Editorial Hispamer ser una fuente inicial de conocimientos para los estudiantes y profesionales, que sin recurrir a mayores

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bsquedas y mayores costos, pero con suficiente calidad, podr tener acceso a doctrinas jurdicas a las que hacer referencia en sus escritos judiciales y reflexiones jurdicas. En ella encontrar a eminencias como Carnelutti, Chiovenda y Couture, entre otros. Este tipo de publicaciones, aunque inicialmente estar dedicada al Derecho no se limitar a ello, sino que poco a poco se irn cubriendo otros mbitos de la cultura, pero s se consideran necesarios en el ambiente de modernizacin y de deseo de conocimiento de las ciencias jurdicas donde los libros suelen ser tan caros y de difcil adquisicin para estudiantes y trabajadores judiciales. En estos breviarios participarn tambin, y principalmente, las ms lcidas mentes de juristas nicaragenses que tratarn en forma sistemtica diferentes temas, establecern doctrina, trabajos de jurisprudencia de acuerdo a las sentencias judiciales de la Corte Suprema de Justicia. En fin el breviario es la publicacin de grandes temas en forma condensada, concisa, pero clara y precisa, que aporte y abra puertas, que d nuevas luces a los estudiosos y los oficiantes de todos los das en el difcil arte del litigio.


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Nota introductoria

El Viernes de Dolores del ao 2004 (2 de abril) fue invitado al programa De Maana, Canal 63, 100% Noticias que dirige el destacado periodista Licenciado Martn Madriz, Monseor Jorge Solrzano Prez, Obispo Auxiliar de Managua, para tener un dilogo sobre el Proceso de Cristo. En este dilogo particip como invitado especial de todos los viernes. Dur aproximadamente dos horas y posteriormente fuimos informados que fue visto por muchos televidentes y apreciado como muy interesante. Mucho aprend de las intervenciones de Martn Madriz y Monseor Jorge Solrzano. Para esa comparecencia prepar unos apuntes y como varias personas me pidieron que hiciera un estudio sobre el Proceso de Cristo, decid hacer de estas breves notas, una aproximacin al tema. Quiero manifestar mi agradecimiento a mi hijo Ivn Martn Escobar Aguilar quien me proporcion casi toda la bibliografa, orientaciones y consejos muy importantes. Tambin a mi esposa Ileana Aguilar Corts, a mi hija Mara Ofelia Escobar Aguilar y a los Licenciados Carlos Alemn Ocampo y Anbal Ruiz por su colaboracin.


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Palabras liminares

Dios cre al hombre a su imagen y semejanza, y le dio poder para gobernar la creacin (Gn 1,27-28). Aunque pec por desobediencia no lo abandon, sino que le prometi un Redentor: Pongo enemistad entre ti y tu descendencia y la mujer; ella te aplastar la cabeza (Gn 3,15). Feliz culpa que mereci tan grande Redentor! (Pregn Pascual). Los profetas lo anunciaron y el pueblo lo esperaba: He aqu que una Virgen concebir y dar a luz un hijo, y le pondr por nombre Emmanuel (Is 7,14). Los sufrimientos que el Salvador Varn de dolores deba de padecer fueron anunciados con cruda realidad en el Siervo de Yav (Is 53). Y llegada la plenitud de los tiempos Dios envi a su Hijo nacido de mujer para liberar de la ley y recibir la adopcin como hijos (Gl 4,4-5) y su reinado no tendr fin (Lc 1,33). El precio del rescate no iba a ser ni con oro ni con plata sino con la sangre preciosa de Cristo, que fue ofrecido en sacrificio como un cordero sin defecto ni mancha (1Pe 18-19). Jess varias veces anunci a sus discpulos su Pasin y sobre la clase de muerte que iba a tener: el Hijo del Hombre va a ser entregado y lo matarn, pero al tercer da resucitar (Mt 16,21; 17,22-23; 20,17-21). Y llegada la hora baj a Jerusaln para consumar la obra del Padre, para reconciliar al hombre con Dios: Ha llegado la hora en que el Hijo del Hombre va a ser entregado en manos de los pecadores. Todo est consumado (Mt 26,45-46; Mc 14,41-42; Jn 19,30).

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Ciertamente el drama de la Pasin, Muerte y Resurreccin de Cristo es el ms grande acontecimiento de la Historia, y bien puede estudiarse desde distintos puntos de vista, inclusive el jurdico, y analizar si se cumpli con el debido proceso teniendo en cuenta la legislacin vigente en aquel tiempo. En esta obra el doctor Ivn Escobar Fornos nos informa, de manera clara y sencilla, las irregularidades jurdicas que se cometieron en el Proceso de Cristo. Felicito al Dr. Escobar Fornos por la presente obra El Proceso de Cristo, que desde el anlisis jurdico nos hace conocer ms profundamente el amor de Dios manifestado en el proceso que Cristo padeci por la humanidad entera. Dado en la ciudad de Managua, a los veinticuatro das del mes de junio del ao del Seor dos mil cuatro y Solemnidad de la Natividad de San Juan Bautista. Mons. Jorge Solrzano PrezObispo Auxiliar Arquidicesis de Managua


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I. El debido proceso1. Qu es el debido proceso?Este es un concepto moderno, pero lo aplicamos al proceso de Cristo para su mejor comprensin y sencilla exposicin, principalmente de los juristas acostumbrados a apreciar algunos vicios judiciales del proceso dentro del marco de esta figura. Por tal razn, principio con un breve resumen del debido proceso. El debido proceso es el conjunto de ciertas condiciones fundamentales del juicio que garantizan un debate amplio, legal, rpido e igual para que desemboque en una sentencia vlida y justa (debido proceso adjetivo). Algunos autores no lo definen y prefieren sealar algunas condiciones de su funcionamiento. Es un concepto amplio que se extiende al Derecho Procesal penal, civil, laboral, administrativo y a cualquier otro procedimiento sancionatorio o patrimonial. Est ntimamente vinculado al derecho de defensa y algunos autores lo confunden con este. Tiene su origen en el Derecho norteamericano y es recogido en sus constituciones bajo la expresin de que nadie puede ser privado de su vida, libertad o propiedad sin el debido proceso legal (due process of law). La Constitucin Federal lo consagr en las enmiendas V y XIV. Despus fue consagrado por un gran nmero de constituciones democrticas del mundo. Tambin lo consagran el art. 6 del Convenio Europeo para la Proteccin de los Derechos Humanos y Libertades Fundamentales de 1950, el art. 10 de la Declaracin Universal de los Derechos Humanos de 1948 y el art.

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8 de la Convencin Americana sobre Derechos Humanos de San Jos, Costa Rica de 1969. La doctrina y la jurisprudencia norteamericana ha desarrollado esta garanta constitucional. Se distinguen entre debido proceso sustancial y el debido proceso adjetivo (procesal). El primero garantiza la razonabilidad de las leyes, y de las sentencias y la aplicacin de la constitucin en el proceso de la formacin de la ley. En torno a este concepto se ha construido tambin la teora de la inconstitucionalidad de las leyes. El segundo consiste en el cumplimiento de ciertas condiciones procesales para que se dicte una sentencia vlida. En resumen nadie puede ser privado de su vida, libertad o propiedad si no se cumplen con el debido proceso sustancial y adjetivo. Nuestra exposicin se refiere al debido proceso adjetivo o procesal. No est contemplado con su nombre propio, pero s en su contenido, en los arts. 33, 34, 165 y otros de la Constitucin de la Repblica de Nicaragua, y expresamente en el art. 14 de la Ley Orgnica del Poder Judicial. La Sala Constitucional de la Corte Suprema de Justicia sostiene que el debido proceso es un derecho humano y elemento fundamental del Estado de Derecho, y que forma parte del bloque de constitucionalidad.1

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S. 5:30 p.m. del 11 de septiembre del 2000, B.J.C., pg. 99. La misma Sala invoca el debido proceso para fundar su sentencia de las 3:30 de la tarde del 11 de septiembre del 2002, B. J.C., pg. 84.


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2. Algunas condiciones del debido procesoEste principio tiene gran amplitud y, por tal razn, se derivan muchas consecuencias. Sin agotar esas condiciones, pues muchas irregularidades procesales son calificadas como violaciones al debido proceso, sealamos las ms conocidas: a) Acceso a la jurisdiccin. b) Conocimiento personal de la demanda o acusacin. c) Oportunidad de las partes para ejercer sus peticiones, derechos y defensas. d) La doble instancia. e) El juzgamiento por el juez natural. f) La igualdad de las partes. g) La sentencia motivada de acuerdo con la ley. h) La prohibicin de la reformatio in peius. i) El derecho de explicarse en su propia lengua. j) El derecho a un proceso rpido, pblico y eficaz. k) La asistencia letrada al enjuiciado. l) El derecho a comunicarse libre y privadamente con su defensor. m) El derecho a probar. n) El derecho a un juez imparcial e independiente. o) El derecho a una sentencia congruente. p) La presuncin de inocencia. q) El derecho a ser juzgado por un tribunal de jurado. r) El derecho de revisar la sentencia definitiva firme en materia penal.2 s) El derecho a la irretroactividad de las leyes, salvo a favor del reo en materia penal. t) La no prisin por deuda. u) El derecho del acusado a no declarar contra s mismo, su cnyuge, compaero en unin de hecho y pariente dentro del cuarto grado de consaguinidad o segundo de afinidad, ni a confesarse culpable.3 v) Derecho a no

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Es una consecuencia de no haberse seguido un proceso debido. Para ampliar las condiciones sealadas vese Ivn Escobar Fornos. Los Derechos Humanos y su Defensa. Editorial Hispamer. Managua, 2003.

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ser procesado dos veces por el delito por el que fue condenado o absuelto mediante sentencia firme (non bis in idem). La revisin de sentencia solamente se concede a favor del condenado o de aquel que se le haya impuesto una medida de seguridad, segn el arts. 337 del Cdigo Procesal Penal que desarrolla el arts. 34 incs. 3 y 10 de la Constitucin. No procede la revisin contra el fallo absolutorio, por oponerse a ello el principio non bis in idem consagrado en el art. 34 inciso 10 de la Constitucin Poltica, el cual prohbe abrir nuevamente procesos por el delito en virtud del cual fue condenado o absuelto una persona mediante sentencia firme. Este principio tambin fue consagrado en el Art. 8 de la Convencin Americana sobre Derechos Humanos, el cual forma parte de nuestra Constitucin de acuerdo con el Art. 46, el que establece que el absuelto por sentencia firme no podr ser sometido a un nuevo juicio por los mismos hechos. Es cierto que la revisin propiamente es un juicio de impugnacin de la cosa juzgada, principalmente por la aparicin de nuevas pruebas y hechos y no un nuevo juicio, pero puede dar lugar a que el declarado culpable demuestre su inocencia y sea liberado o el absuelto sea condenado en caso de que se acepte este tipo de revisin. En el juicio de impugnacin evidentemente, como su palabra lo indica, existe un examen de revisin por los errores que se pudieron haber cometido y enmendarlos para que salga a flote la verdad material que es la finalidad del juicio penal.4 El art. 34 inciso 3 de la Constitucin no distingue en qu supuesto cabe la revisin, es decir, si en caso de condena o en caso de absolucin, pero como ya


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vimos el problema se soluciona aplicando el principio non bis in idem que en su funcin general evita la duplicidad del juicio y la doble sancin. Para evitar el doble juicio deben oponerse las excepciones de cosa juzgada o la de litis pendencia segn el caso. En Alemania se permite la revisin en contra del absuelto cuando confiesa el delito. En nuestro constitucionalismo se ha establecido nicamente a favor del condenado,5 excluyendo as su procedencia en contra del absuelto. Esta es una decisin poltica penal. Nicaragua ya decidi que no cabe contra el absuelto. Pero es importante advertir que no deja de ofender a la moral y a poner en duda la seguridad y la confianza del sistema ver pasearse a un delincuente que impunemente desafa a la sociedad. Expresa PrietoCastro y Ferrndiz E. Gutirrez de Cabiedes: La revisin penal espaola, como la de algunos otros sistemas jurdicos, ofrece como caractersticas especial (no conocida en lo civil), el estar pensada exclusivamente en beneficio del reo (pro reo).

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Javier Llobet Rodrguez, expresa que en Latinoamrica la doctrina considera con razn que una consecuencia del principio non bis in idem es que no es posible un recurso de revisin en contra del absuelto o condenado (Garantas y sistema penal. Ediciones Jurdicas Aret. San Jos, Costa Rica. 1999 pg. 250 y 251). Constituciones de 1939 (Art. 49); 1948 (Art. 105); 1950 (Art. 121) y 1974 (Art. 77). El Cdigo de Procedimiento Penal omite la indemnizacin a favor del condenado por error judicial. Es una omisin intencional que quiere evadir esta sancin econmica, pero sin lograr xito pues debe imponerse de acuerdo con los arts. 131 de la Constitucin, 19 de la Ley Orgnica del Poder Judicial y art. 10 de la Convencin Americana de Derechos Humanos.

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El caso inverso de revisin por la aparicin de nuevos elementos probatorios contra el acusado absuelto, no se acoge en el Derecho espaol, por estimarse que debe sobreponerse la seguridad de la libertad obtenida en virtud de la sentencia firme a la justicia de una posible condena que recayese en el proceso revisorio. Es una solucin sin duda metajurdica, y sin duda tambin perjudicial a la defensa de la Sociedad, que tal vez no se sienta tranquila si contempla que la aparicin de graves materiales de culpabilidad contra el absuelto en firme es irrelevante para la ley. En algn sistema, como el alemn, se admite la revisin tambin contra el absuelto injustamente. Nuestro sistema hipertrofia el principio pro reo.6

II. Ideas generalesLa vida de Jess transcurri entre los imperios de Octavio Augusto (primer emperador) y Tiberio. Naci en el ao 748 de la fundacin de Roma, bajo el imperio de Octavio Augusto.7 La Pasin y Muerte de Jess se dieron en el ao veinte de nuestra era. Cristo fue juzgado en dos jurisdicciones distintas: la hebrea (religiosa) y la romana (poltica).8 Ante el

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Derecho Procesal Penal. Editorial Tecnos. Madrid. Espaa. 1988, pg. 419. Los aos del nacimiento y muerte de Jess son objeto de controversia a causa de varios ajustes del calendario. Para Gustavo Zagrebelsky, magistrado de la Corte Constitucional de Italia, la escenificacin del proceso de Cristo, construido adrede como representacin simblica, es una conspiracin del

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Sanhedrn judo y el Gobernador o Procurador romano Poncio Pilato.9 Durante todo el proceso permaneci en silencio sin hacer mayores esfuerzos para defenderse, y las preguntas o acusaciones que contestaba, lo haca con pocas palabras, porque estaba consciente que su sacrificio ya estaba sealado en las Escrituras. Cristo no era un revolucionario poltico. Fue redentor de los pecados del hombre, enviado de Dios y no pretenda abrogar la Thor o Ley Juda (Ley mosica, Ley de los profetas).

III. Jurisdiccin hebrea1. Su capturaLuego de celebrada la ltima Cena10 con sus discpulos, donde compartieron el pan y el vino, su cuerpo y su sangre, convirtindose en el sacramento de la Eu-

gobierno terrenal (representado por Pilatos), el gobierno autocrtico (representado por el Sanedrn) y el democrtico (representado por la muchedumbre que liber a Barrabs) (Interpretaciones Polticas de Pilatos. Separata de la Revista Peruana de Derecho Pblico, Ao 4, No. 6, enero-junio, Lima 2003, pag. 17). 9 La tradicin dice que era hijo bastardo de Tiro, rey de Maguncia. A causa de un asesinato fue exiliado de Roma, pero por sus acciones en el Asia Menor lo nombraron gobernador de Judea. Pero no perteneca a una familia rica y fue nombrado por la influencia del origen de su mujer Claudia Prcula, hija ilegtima de Claudia, esposa del Emperador Tiberio, y nieta del Emperador Augusto. Era buen administrador y dur diez aos como procurador, en cambio sus cuatro antecesores ocuparon el cargo durante veinte aos. (Cfr. Andrs-Marie Gerard. Diccionario de la Biblia. Anaya y Mario Muchnik. Madrid, 1995, pg. 1188).

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carista, se encaminaron al Monte de los Olivos. En esa cena Jess les asegur que uno de ellos lo entregara. Tristes, uno por uno, le preguntaron si eran ellos. Judas Iscariote, con un gran complejo de culpa, le pregunt a Jess, si era l. Jess le contest: T lo has dicho. Les haba dicho que pobre de aquel que lo entregue. Sera mejor no haber nacido.11 Judas Iscariote se encontraba desilusionado porque se haba convencido que Jess no quera liberar al pueblo judo de la ocupacin romana y establecer su reino terrenal del cual formara parte, lo cual le proporcionara lucrativos ganancias, ya que era un hombre ambicioso, avaro, intrigante y astuto. Esto lo llev a entregar a Cristo. Segn los Evangelios Apcrifos Judas Iscariote era sobrino de Caifs. Era de noche cuando Jess, acompaado de sus discpulos, lleg al huerto de Getseman, al oeste del Monte de los Olivos, acompaado de los discpulos. Se retir a orar tres veces y tres veces encontr dormidos a sus discpulos y los invit a la oracin. Tema, se entristeca, sufri una grave angustia mental, su sudor se convirti en grandes gotas de sangre que caan al

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Se celebra al atardecer y la forma en que Jess indic que se escogera el lugar, tena el propsito de ocultarlo de Judas para que no impidiera la celebracin de la Cena. Cristo conoca desde haca un ao de la traicin de Judas y as se lo dijo en voz baja al lavarle los pies, en varias ocasiones lo insinu y Mara presenta la traicin y se la manifestaba a su hijo. (Cfr. Ana Catalina Emmerich. La Amarga Pasin de Cristo. Editorial Planeta, Barcelona. Espaa 2004, pgs. 23, 24, 27, 36 y 50). Segn Emmerich, nada en el transcurso de la Pasin afligi tanto a Cristo como la traicin de Judas. (Ob. cit., pg. 27).

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suelo12 y empaparon sus vestiduras, el pelo y la barba. Fue tentado por el Diablo de diferentes maneras, su Pasin le fue mostrada en sus detalles y sufri por los pecados presentes y futuros de la humanidad, los cuales expiara con su sacrificio para salvarla. 13 En el Evangelio de Lucas se expresa: Entonces se le apareci un ngel del cielo que vena a animarlo y empez a luchar contra la muerte. Poco despus de medianoche, de pronto apareci Judas, 14 uno de sus discpulos, con un batalln armado15 de espadas y palos, acompaados por los jefes de los sacerdotes y por los fariseos, iluminados con antorchas. Judas les haba dado la seal: El que yo bese, se es; arrstenlo. Judas le dio un beso a Jess y ste le dijo: Judas, con un beso traicionas al Hijo del Hombre. En las visiones de Ana Catalina Emmerich se aprecia que en dos ocasiones algunos soldados cayeron al

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El sudor sanguneo (hematrdosis o hemoddosis) puede ocurrir en altos estados emocionales (stress) o en personas con desrdenes sanguneos. Como resultado de la hemorragia de las glndulas sudorficas la piel se vuelve frgil y tierna para el azote que le daran despus. Por conocer los horrores que sufri en el Monte de los Olivos vase Emmerich. Ob. cit, pg. 41 y sigts. Judas se retir inmediatamente despus de la Cena y se comunic con el Sanhedrn. Ya saba que Jess frecuentaba Getseman. Alfred Edersheim asegura que eran soldados romanos los que capturaron a Jess y se lo llevaron a Ans y se regresaron a sus cuarteles. (La Vida y los Tiempos de Jess el Mesas. Libros Clie, Barcelona Espaa, 1989, T. II, pgs. 499 y 501). Pero otra versin expresa que eran soldados de la guardia del Templo y de los que estaban a la orden de Ans y Caifs.

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suelo como atacados de apopleja y epilepsia cuando Jess les contest que l era a quien buscaban.16 Pedro sac su espada e hiri al sirviente del jefe de los sacerdotes (Maleo) y le cort una oreja. Jess le dijo que enfundara la espada, pues quien usa la espada perecer por ella. Le pregunt que si no crea que poda llamar al Padre y mandarle ms de doce ejrcitos de ngeles, pero entonces no se cumpliran las Escrituras, donde se afirma que esto deba suceder. Jess san al herido y ste se convirti al cristianismo. Jess les dijo que lo arrestaban con espadas y palos como a un ladrn; que se sentaba diariamente con ellos en el Templo para ensear y no lo arrestaron, pero que todo esto ha pasado para que se cumpla lo escrito por los profetas. Pedro neg tres veces andar con Jess y se acord, cuando escuch que cant el gallo por segunda vez, lo que Jess le dijo: Hoy antes que cante el gallo dos veces, t me negars tres veces. Se puso a llorar y se arrepinti. Lo capturaron17 y lo condujeron a la casa de Ans. Lo ataron, se burlaron y maltrataron en el camino de la manera ms cruel. Durante el trayecto cay siete veces. Todos sus discpulos lo abandonaron y huyeron.

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Emmerich Ob. cit., pg. 73 y sgt. Este libro inspir la polmica pelcula de Mel Gibson La Pasin de Cristo. El Sanhedrn se haba reunido anteriormente en el Palacio de Caifs y se pusieron de acuerdo para detener con astucia a Jess y darle muerte. Pero expresaron que durante la Fiesta no se realizara para evitar que el pueblo se alborotara. Era un verdadero complot para matarlo.

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2. AntejuicioEn un antejuicio, Jess fue llevado a la casa de Ans, hombre poderoso, lleno de odio, Presidente del Tribunal encargado de vigilar la pureza de la doctrina y de acusar ante el Sumo Sacerdote a quienes la violaban, y suegro de Caifs, donde sostuvieron un dilogo. Ans le pregunta que quin lo autoriz hablar en nombre de Dios y contra la ley de los profetas, a la cual contest que para ensear y predicar la ley de Dios no se necesita mayor ttulo y autorizacin acadmica y que l siempre ha predicado el Reino de los Cielos. Fue objeto de golpes, humillaciones y de numerosas acusaciones y cargos de parte de testigos parciales y falsos. Ans le formul una serie de cargos y acusaciones.

3. Comparecencia ante el SanhedrnPosteriormente Jess fue llevado atado a la casa de Caifs donde se encontraba reunido de urgencia el Sanhedrn. Lo condujeron entre una multitud que lo injuriaba, se burlaba y lo maltrataba. Estuvo en un calabozo y lo ataron a un pilar. El Sanhedrn era el Tribunal Supremo del pueblo judo. Estaba compuesto de setenta y un miembros, incluido el presidente.18

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Este nmero es dado por Flavio Josefo y todos los historiadores judos (Josefo, Las Guerras de los Judos, 2.10.5; Maimnides, Yadchazaka, o Abridgment de el Talmud, Libro 14; Constitucin de el Sanhedrn, cap. 1).

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Tiene origen divino (es el Tribunal de Jehov) y sus resoluciones tenan rango de fallos de Dios. Entre los miembros del Sanhedrn que juzgaron a Jess se encontraba Gamaliel (su discpulo secreto y posteriormente preceptor de Saulo, San Pablo), Jos de Armatea y Nicodemus, su defensor.19 En tiempos de Jesucristo el Sanhedrn estaba compuesto de tres Cmaras: La Cmara de los Sacerdotes La Cmara de los Escribas La Cmara de los Mayores En la Cmara de los Sacerdotes posiblemente estaban presentes: 1. Caifs, Sumo Sacerdote, yerno de Ans. 2. Eleazar, hijo mayor de Ans. 3. Jonathan, hijo de Ans. 4. Theophilus, hijo de Ans. 5. Matas, hijo de Ans. 6. Ananus, hijo de Ans. 7. Joazar, hijo mayor de Simn Boethus. 8. Eleazar, segundo hijo de Simn Boethus. 9. Simn Cantharus, tercer hijo de Simn Boethus. 10. Jess ben Sie. 11. Ismael ben Dhabi. 12. Simn ben Camithus. 13. Juan, sacerdote ordinario. 14. Alexander, sacerdote ordinario. 15. Ananas ben Nebedeus. 16. Helcias, sacerdote ordinario tesorero del templo, el que posiblemente le dio el dinero a Judas Iscariote. 17. Sceva, uno de los principales sacerdotes. En la Cmara de los Escribas posiblemente estaban presentes:

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Su defensa es brillante y famosa segn los textos histricos (Cfr. Ignacio Burgoa. El Proceso de Cristo. Editorial Porrua, Mxico 2001. pgs. 24 y sigts.).


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1. Gamaliel, de sobrenombre el Anciano, el futuro maestro de San Pablo. 2. Simn, hijo de Gamaliel. 3. Onkelos, uno de los discpulos eminentes de Gamaliel. 4. Jonathan ben Uzie. 5. Samuel Hakaton. 6. Chanania ben Chiskia. 7. Ismael ben Eliza. 8. Rabbi Zadok. 9. Jochanan ben Zakai. 10. Abba Sal. 11. R. Chanania, de sobrenombre el vicario de los Sacerdotes. 12. Rabbi Eleazar ben Partah. 13. Rabbi Simn Hamizpah. En la Cmara de los Mayores posiblemente estaban presentes: 1. Jos de Arimatea. 2. Nicodemo. 3. Ben Kalba Shevuah. 4. Ben Tzitzith Hacksab. 5. Simn. 6. Doras. 7. Juan, hijo de Juan. 8. Dorotheas, hijo de Nathanael. 9. Tryphon, hijo de Theudion. 10. Cornelius, hijo de Cern.20 Su competencia, en el Derecho Penal sustantivo, se extenda a los delitos de blasfemia e idolatra, que se castigaban con la pena de muerte. Los jefes de los sacerdotes, los jefes de los judos, los maestros de la ley y todo el Tribunal o Consejo queran condenar a Jess porque sus ideas ponan en

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Sin embargo, de acuerdo con los testimonios rabnicos haban tres tipos de tribunales: en las ciudades con menos de ciento veinte habitantes varones haba un solo tribunal inferior integrado por tres jueces, su jurisdiccin era limitada y no poda conocer de causas en que se aplicara la pena de muerte; otro tribunal de veintitrs miembros con competencia limitada, pero que poda conocer de la pena capital; y el Gran Sanhedrn, el de mayor jerarqua e integrado por setenta y dos miembros. En la versin expuesta anteriormente es de setenta y un miembros.

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peligro su prestigio, su hegemona religiosa, el rumbo de sus aspiraciones polticas, sus privilegios econmicos, la organizacin social del pueblo, su forma de vida y sus aspiraciones polticas. Los jefes de los sacerdotes pertenecan a familias pudientes, los cuales se peleaban por los puestos porque se aprovechaban del dinero del Templo. Con antelacin a su captura efectiva, el Sanhedrn se haba reunido en la casa de Caifs y decidi capturar y matar a Jess porque era peligroso ya que podra propiciar la intervencin romana, destruir el Templo y la raza. Caifs dijo que era preferible la muerte de un solo hombre (Jess) y no de toda la nacin.21 Como saban que era inocente, buscaron testigos falsos ante la inexistencia de testigos imparciales. Se presentaron varios testigos falsos, pero no estaban de acuerdo con lo que decan. Eran contradictorios. Dos de ellos manifestaron que Jess haba expresado destruir el Templo hecho por manos de hombres y que en tres das construira otro no hecho por el hombre. Pero tampoco en estas declaraciones estaban de acuerdo a que templo se referan, al de Jerusaln o al lugar donde Jess haba celebrado la Cena Pascual. Le preguntaron a Jess sobre esas afirmaciones y call. Entonces el jefe de los sacerdotes le pregunt si era el Cristo, el Hijo de Dios: Contest que as era, y que un da veran al Hijo del Hombre sentado a la derecha del Dios Todo poderoso.

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Juan, 12:45-59.


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El Jefe de los sacerdotes se rasg sus vestiduras y expres que esa declaracin ofenda a Dios; que encerraba blasfemia; y que para que queran testigos. Fue condenado por blasfemia, la que mereca la pena de muerte. Todos estuvieron de acuerdo que mereca la pena de muerte, lo vendaron, escupieron, golpearon y humillaron. Caifs quiso incriminar a los discpulos, pues le pregunt a Jess acerca de sus discpulos y de sus enseanzas. La pregunta la diriga contra ambos. Al contestar no involucr a sus discpulos y se limit a decir que sus enseanzas eran pblicas y conocidas y que le preguntaran a los que le haban escuchado.22

4. Irregularidades en el juzgamiento de Jess por el SanhedrnA. Se viol el principio de imparcialidad. Jess fue juzgado por sus enemigos, que con anterioridad al juicio haban decidido matarlo. Prcticamente eran jueces y partes y as fue su comportamiento en el juicio. B. Se viol el principio de publicidad. El proceso tena que hacerse ante el pueblo y el Sanhedrn, en el recinto oficial llamada Gazith, a la sombra del Santuario. Pero se hizo en la casa de Caifs, a puerta cerrada, sin la presencia del pueblo. C. Se viol el principio de la diurnidad. Este es un principio del Derecho hebreo, que fue violado, pues el

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Juan, 18:20.

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proceso se hizo de noche. De la una de la madrugada al amanecer.23 D. Se viol el derecho de defensa. Este se manifiesta principalmente en materia probatoria: a) No se le concedi la oportunidad de presentar prueba testifical. b) La accin se fund en testigos falsos. c) Cerrada la instruccin del procedimiento, se admitieron nuevos testigos. d) Se le neg el derecho de presentar testigos antes de la ejecucin de la sentencia. Por otra parte, los testigos falsos no fueron procesados. E. No poda realizarse ningn proceso sbado o da de fiesta o en la vspera de ste. F. Hubo incongruencia e imposicin de penas no contempladas. Jos Palls,24 que analiza extensamente la Pasin del Redentor, sostiene que fue condenado por los judos por blasfemia a la pena de crucifixin25

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Lucas (22:56) relata que fue juzgado cuando amaneca. La explicacin que se da es que en la madrugada fue juzgado por el Sanhedrn poltico en la casa de Caifs y al amanecer fue juzgado por el Sanhedrn religioso en el templo en presencia de fariseos y sacerdotes, el que tambin lo encuentra culpable de blasfemia. Samuel Vila Ventura y Santiago Escuain sostienen que la ley obligaba al Sanhedrn a promulgar sus decretos de da y no de noche, por lo que se volvi a reunir temprano y repitieron el proceso. (Nuevo Diccionario Bblico. Editorial Clie. Barcelona, Espaa, 1985, pg. 591). La verdad es que la segunda reunin no hizo ms que ratificar la primera. Fue nicamente un requisito formal y se realiz rpidamente. Citado por Ignacio Burgoa. Ob. Cit, pgs. 60 y 61. Burgoa acepta que el Sanhedrn le impuso la pena de crucifixin, como puede verse en las pginas citadas.

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que no estaba contemplada en el Derecho hebreo, sino la de lapidacin26 (apedreamiento). La crucifixin tampoco era contemplada por el Derecho romano para delitos religiosos que tampoco contempla la blasfemia.27 Por tal razn, para que Poncio Pilato homologara la condena de muerte en la cruz, acusaron a Jess del delito de sedicin.28 Este argumento slo es admisible si se acepta la tesis de Palls, la cual no goza de aceptacin. F. Adems de los anteriores argumentos se sostiene que no fue juzgado y sentenciado oficialmente por el Sanhedrn, que cincuenta aos atrs haban dejado de pronunciar penas capitales y, aunque se hubiera reunido oficialmente, se habra violado el orden legal judo hasta en los detalles. Algunos historiadores estiman que no hubo sentencia y que lo que se hizo fue levantar una instructiva para fundar la acusacin ante Pilato, ya que ste le manifest a los judos que lo juzgaran de acuerdo a sus leyes, a lo cual contestaron simplemente que no

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Emmerich expresa que los fariseos haban hecho una cruz especial de cinco piezas a fin de ejecutar la sentencia cuando fuese homologada por Pilato (ob. cit., pg. 67 y 103). En la Ley Juda en la poca de la Pasin de Jess la pena capital se cumpla por lapidacin, hoguera o degollacin. La crucifixin en el Derecho romano slo se aplicaba por delitos graves, tales como la desercin de los soldados, la piratera, la sedicin y rebelin. Segn Jos Palls, citado por Ignacio Burgoa la sentencia fue pronunciada por sesenta y cinco votos en contra y seis a favor de Jess, entre ellos los de Nicodemus y Jos de Arimatea (ob. cit, pgs. 59 y 60).

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eran competentes para juzgar penas capitales29 y no dijeron que ya lo haban juzgado. Pero Marcos,30 aunque no con claridad, expresa que estuvieron de acuerdo con la pena de muerte. Es cierto que en general en los Evangelios no se habla de un juicio y sentencia formales por el Sanhedrn, pero el testimonio de Marcos pone en duda tal argumento.

IV. Jurisdiccin romana1. Al amanecer los jefes de los sacerdotes, los maestros de la ley y miembros del Consejo llevaron a Jess ante Pilato para que ordenara la ejecucin de la sentencia (exequatur), pues la pena de muerte impuesta por las autoridades locales de las provincias ocupadas deban ser aprobadas por el Gobernador romano, quien al examinar el caso poda ordenar o no su ejecucin. El Sanhedrn pretenda, pues, simplemente ejecutar la sentencia y que no conociera la causa Pilato, pero ste se neg.31 Durante el trayecto se form una muchedumbre y Jess fue objeto de ultrajes, injurias y malos tratos. Mara y Jess se vieron y ella se desmay. Para que Pilato ordenara la ejecucin de la sentencia de muerte acus el sanhedrn a Jess del delito de sedicin.32 Cambiaron la causa fundamental, que era la blasfemia.

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Juan, 18:31. Marcos, 14:64. Juan, 18:29-32. Emmerich seala tres acusaciones principales con la finalidad de demostrar que era el cabecilla de una conspiracin contra Roma: engaar al pueblo, perturbar la paz pblica y excitar la


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2. Cuatro veces eludi Pilato ejecutar la sentencia de muerte, en parte influenciado por su esposa Prcula (Claudia-Prcula)33 y en parte por temor a asumir esa responsabilidad frente al pueblo judo y Tiberio. Claudia lo consideraba un santo y haba tenido un sueo terrible por causa de l.34 As se lo manifiesta a su marido. Pilato pregunt a los acusadores: De qu acusan a este hombre. Contestaron que eran un malhechor que no pagaba impuestos, que agitaba al pueblo. Entonces Pilato les dijo que se lo llevaran y lo juzgaran segn su ley. Los judos contestaron que no tenan autorizacin para aplicar la pena de muerte.35

sedicin; que animaba al pueblo a no pagar tributos al Emperador; y que pretenda proclamarse rey, el Mesas, el rey prometido a los judos. Ob. cit., pgs. 120 y 121).33

Prcula era una esclava libertada y adoptada por la familia romana Claudia. Era costumbre que el liberto antepusiera a su nombre el de su amo, por tal razn se le conoce con ClaudiaPrcula. Se convirti al cristianismo y est canonizada por la Iglesia Ortodoxa griega. Esta es otra versin histrica diferente a la dada en la nota No. 5. Segn Emmerich, Claudia en sus sueos vio las principales circunstancias de la vida de Jess: La Anunciacin de Mara, el Nacimiento de Jess, la Adoracin de los pastores y de los reyes, la Huida a Egipto, las tentaciones en el desierto, etc. Jess se le apareci rodeado de un halo de luz, vio la maldad y la crueldad de sus enemigos bajo la forma ms horrible, su padecimiento infinito, su paciencia y amor inagotable y la angustia de su Madre. Ob. cit., pg. 125). Juan, 19:28-30. Lucas, 23:1-3. Esto da a entender que Jess no haba sido juzgado oficial y legalmente o que exista otro procedimiento para juzgarlo. En realidad en el ordenamiento jurdico judo exista la ejecucin inmediata al sorprendido en flagrante delito de blasfemia, pero no la aplicaron porque queran guardar las apariencias y no podan ejecutar la pena de muerte.

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3. Pilato le pregunt a Jess en el interior del tribunal: Eres t el rey de los judos?. Jess contest: T lo has dicho.36 Esta contestacin parece evasiva, pues puede significar que fue Pilato el que lo dijo. Pero no es as, pues adems le contesta Jess que su Reino (lo que supone que es Rey), no era de este mun-

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Mateo, 27:11. En el Evangelio de Juan (37-38), Cristo agrega: Yo soy un rey, nacido y venido al mundo para dar testimonio de la verdad. Todo el que siga la verdad oye mi voz. Pilatos le vuelve a preguntar: Qu es la verdad?. Para Hans Kelsen esta pregunta de duda, de escepticismo y el plebiscito a que fue sometido Cristo y Barrabs por orden de Pilatos, es una manifestacin del relativismo filosfico, de la verdad relativa, frente al absolutismo filosfico, de la verdad absoluta, que en poltica se traslada esta dicotoma filosfica al Estado democrtico o al Estado autocrtico (Esencia y Valor de la Democracia. Colofn, S.A. Mxico. 1992, pg. 150 y sigts). Para Gustavo Zagrebelsky la historia ha convertido a Pilatos como arquetipo del hombre poltico accidental, el que unas veces es representado como el poltica cobarde que rehuye su responsabilidad, pues le dijo a la muchedumbre que no encontraba ninguna culpa en Jess, pese a la cual lo dejo en poder de la muchedumbre y de los sacerdotes, no asumi ninguna responsabilidad y se lavo las manos. Otras veces se representa Pilatos como democrtico, caracterizacin realizada por Kelsen en el famoso dialogo entre Jess y Pilatos sobre la verdad. Este mismo dialogo ha sido invocado por los polticos autocrticos para demostrar el escndalo a que se llego sometiendo a la fuerza de los nmeros la escogencia entre Barrabas y el hijo Dios, determinando la libertad para el primero y la cruz para el segundo. Pero Kelsen invirti esa concepcin autocrtica del poder que juega con verdades absolutas, ya que Pilatos es escptico y no saba que cosa era la verdad, la verdad absoluta de la que Dios saba, por lo que actu democrticamente al someter a la decisin del caso al voto del pueblo). (Interpretaciones Polticas de Pilatos. Ob. cit., pg. 21 y sigts).


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do, pues si as fuere sus servidores habran luchado para que no cayera en manos de sus perseguidores. La expresin correcta es: T lo has dicho, yo soy Rey, pero mi Reino no es de este mundo. Pero en Marcos confiesa que es el Rey de los judos, lo que equivala a ser el Mesas y constitua una rebelin poltica contra Roma.37 Pilato le pregunt: Tu eres el rey de los judos?. Jess respondi: As es, t lo dices. Pilato le expresa a los acusadores que no vea delito alguno en ese hombre, pero stos insistieron que estaba alborotando a Judea, comenzando en Galilea. Cuando Pilato se entera que Jess era de la Provincia de Galilea, envi a Jess al rey Herodes Antipas, encargado de esa provincia. Como tretarca, Herodes no poda homologar la sentencia, pero poda pronunciarse sobre su inocencia o culpabilidad. Bien lo saba Pilato, sin embargo envi a Jess con la esperanza de obtener una opinin favorable de su inocencia y mejorar su amistad con Herodes. Se alegra Herodes al ver a Jess por la fama que haba adquirido y esperaba que le hiciera un milagro. Lo trat con desprecio y le lanz varias preguntas que aquel no le contest, le hizo un manto blanco para burlarse, no dio ninguna resolucin y lo envi el mismo da a Pilato sin absolverlo ni declararlo culpable, se neg a ello. Estaban presentes los jefes de los sacerdotes y los maestros de la ley y no se cansaban de acusarlo.

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Marco, 15:2-3.

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Herodes tena cierto temor de Jess y remordimiento por la muerte de Juan el Bautista. Por otra parte, detestaba a los sacerdotes que no haban querido excusar su adulterio con Herodas y lo haban excomulgado y excluido de los sacrificios. Nuevamente Pilato se present donde estaba el Sanhedrn y les dijo que no encontraba ningn motivo para condenar a Jess; que no exista ah ningn crimen que mereciera la muerte, que Herodes no lo juzg culpable, pues lo envi de regreso. Era costumbre en la Pascua dejar libre a un reo y les pregunt si queran que liberaran al Rey de los Judos y estos gritaban que soltaran a Barrabs (un sedicioso que haba participado en un motn y asesinado a alguien). Entonces Pilato, liber a Barrabs y orden que azotaran a Jess38 y despus lo dejaran libre. Lo azotaron con gran rigor.39 Despus los soldados tejieron una corona de espina40 la pusieron en su cabeza y le

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La ley Porcia y la ley Semprona de los aos 195 y 123 antes de Cristo eximan del azote a los ciudadanos romanos. San Pablo, que era ciudadano romano, invoc ese privilegio y se le eximi de ser azotado (Hechos de los Apstoles 22:25). Esta brutalidad de trato aparece registrado en Isaas (52:13-5, 53:1-12) y Pedro que expresa: l mismo subiendo a la cruz carg con nuestros pecados para que, muertos nuestros pecados, empecemos una vida sana. Y por sus llagas fueron ustedes sanados. Pues eran ovejas descarriadas, pero han vuelto al pastor y guardin de sus almas. De la Sbana Santa se deduce que fue un casquete de ramas de espinas y no una corona la que le fue puesto en la cabeza producindole cincuenta orificios sangrientos en la totalidad de la cabeza.

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colocaron en los hombros una capa de color rojo como lo que usan los reyes. Le decan: Viva el Rey de los judos y le daban bofetadas. Sali nuevamente Pilato con Jess y les dijo a los jefes de los sacerdotes y al pueblo que no encontraba causa para condenarlo, que ya lo haba castigado y lo dejara libre. Entonces le contestaron que lo crucificaran. Pilato contest nuevamente que lo tomaran ellos y lo crucificaran porque no encontraba motivos para condenarlo. Pilato buscaba como liberar a Jess, pero sus perseguidores le comenzaron a gritar: Si lo dejas libre, no eres amigo del Csar; porque todo el que se proclama rey va contra el Csar. Ante tal presin, Pilato entreg a Jess al Sanhedrn para que lo crucificaran, y lo calific como el Rey de los judos, lo que fue negado por los jefes de los sacerdotes, pues decan que no tenan ms rey que el Csar.41 Pilato manda a escribir un letrero que deca: Jess de Nazaret, Rey de los Judos, lo que fue protestado por los judos porque deba decirse el que dijo ser rey de los judos. Pilato contesta: Lo que he escrito, est escrito. En los Evangelios Apcrifos aparece la sentencia de Poncio Pilato donde narra, entre otras cosas, a manera de considerando, lo sucedido en el juicio y expresa que Jess es un sedicioso contrario al gran emperador Tiberio Csar; que no ha cesado de promover tu-

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Juan, 19:14-16.

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multos por toda Judea, hacindose pasar por Hijo de Dios y Rey de Jerusaln; que amenaza la ruina de la ciudad y de su Templo; que niega el tributo al Csar. Resolvi que su muerte fuera en la cruz. Segn Emmerich, Pilato dict su sentencia en forma oral, comenzando con un largo prembulo en el cual elogiaba al Emperador Tiberio; despus expresa las acusaciones presentadas por el Sanhedrn; seal que lo haban condenado a muerte por haber perturbado la paz pblica y violado la ley, llamndose Hijo de Dios y Rey de los Judos; que el pueblo haba pedido unnimemente cargar con la responsabilidad de su muerte; que no encontraba esa sentencia conforme a la justicia; y que l no haba cesado de proclamar la inocencia de Jess. Pilato tambin escribi la sentencia, pero en forma diferente de lo que haba dicho, en la cual expres que fue forzado por el Sumo Sacerdote; que los miembros del Sanhedrn pedan la muerte de Jess por ser culpable de haber agitado la paz pblica, blasfemado y violado la ley y, como consecuencia, lo entreg para ser crucificado, aunque sus inculpaciones no le parecan claras porque no fue acusado delante del Emperador de haber favorecido la insurreccin de los judos.42

4. Consecuencias jurdicasA. Jess fue condenado a muerte por el delito poltico de sedicin, que no haba cometido. Se elimin la acusacin por blasfemia. Por eso Pilato se lav las ma-

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Ob. cit., pg. 150 y sigt.


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nos, delante del pueblo y expres que no se haca responsable de la sangre que se iba a derramar: Esta cosa es de ustedes. El pueblo contest que su sangre caiga sobre nosotros y sobre nuestros descendientes. B. Pilato actu parcialmente por el temor (sin valenta) que le infundi la presin poltica de los judos de que traicionara al Emperador Tiberio si no condenaba a Jess. En el juicio intervinieron intereses polticos y religiosos.43 C. Se present un conflicto de competencia negativa entre Herodes y Pilato (ninguno de los dos quera conocer de la causa). D. Se le conden por un delito (sedicin) que no haba cometido y ni haba sido objeto del proceso desde el inicio en la sede jurisdiccional hebrea. No se le concedi el derecho de defensa sobre tal delito. E. Los culpables de la muerte de Jess son principalmente los romanos por las razones siguientes: los judos estaban conquistados por los romanos, sostenan una sangrienta lucha contra la ocupacin y la destruccin de su nacin, y esperaban al Mesas que los liberara del yugo de Roma; teman provocar represalias de los romanos, lo cual conducira a la destruccin de las ciudades y sus habitantes, su desaparicin

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La peor dictadura es la del gobierno de los jueces, bajo su mandato se cometen los peores crmenes amparados con falsa aplicacin de la ley. Se condenan inocentes, se absuelven a culpables, se otorgan derechos al que no tiene y se priva de sus derechos a sus verdaderos titulares, convirtindose ms tarde en terrorismo judicial. Es a lo que hemos entrado en Nicaragua y que es necesario detener.

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como nacin; a Jess no lo consideraban como el Mesas libertador; Roma y principalmente Pilato, no quera a los judos y tema levantamientos; Pilato tena en sus manos ejecutar o no ejecutar a Jess y con un gesto hipcrita, lavndose las manos, decidi crucificarlo; fue ejecutado a la manera romana; fue juzgado por sedicin contra el Csar y se le aplic una pena romana, como es la crucifixin; aunque haya sido condenado por blasfemia por el Sanhedrn44 (delito que mereca la pena de muerte) y ser aprobada la condena por Pilato, la pena que deba aplicarse no era la crucifixin, la cual no exista en el ordenamiento legal judo; los directamente culpables con Caifs y Pilato y no el pueblo judo.45

V. Ejecucin de la sentencia (Crucifixin)La ltima Cena se haba celebrado el jueves seis de abril, y Jess fue crucificado el viernes siete de abril. Jess fue duramente flagelado, lo que le produjo graves laceraciones en forma de rayas y considerable

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Paul Winter escribi un libro dedicado a comprobar que no fue condenado a muerte por el Sanhedrn, sino por un tribunal romano y como consecuencia, fueron las autoridades romanas las que decidieron sacrificarlo. (El Proceso de Jess. Muchnik Editores, S. A. Mxico, D.F. 1974). Se ha dicho por algunos profesores estudiosos universitarios que los culpables son Caifs y Pilato y que Cristo en el cumplimiento de su destino y las escrituras precipit su muerte con su pasividad en su defensa y con acciones que inducan a su muerte (su entrada triunfal a Jerusaln, su amenaza de destruir el Templo y la expulsin del Templo de los vendedores), lo que representara una participacin pasiva y activa de la vctima en el hecho.

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prdida de sangre, lo que probablemente contribuy al shock hipovolmico, como se evidencia por el hecho de que estaba demasiado dbil para cargar la cruz hasta el Glgota. Jess no tena fuerza suficiente para cargar la cruz hasta el lugar de la crucifixin, entre seiscientos y seiscientos cincuenta metros, por eso le ayud Simn. Jess carg la cruz ya integrada, no solo el travesao como lo hacan algunos, pues generalmente pesaba trescientas libras. Los dos ladrones slo cargaron el travesao. Sus muecas fueron clavadas al patibulum segn el Sudario de Turn.46 Sus pies tambin fueron clava-

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El Sndone o Sbana, que se conserva en Turn, ha despertado una gran polmica, pues algunos lo consideran como una pintura de la Edad Media, otros como fraude y la mayora como un autntico sudario que cubri el cuerpo de Jess despus de su muerte, el que ha sido sometido a rigurosos estudios cientficos que le otorgan un porcentaje muy elevado de autenticidad. Es considerado como el quinto Evangelio, pero no un dogma que haya reconocido la Iglesia, la cual sigue fiel a los Evangelios. Se someti a modernos anlisis qumicos, fsicos, matemticos, anatmicos, fotogrficos y de computadoras. No es este el lugar de estudiar su historia, pero s sealar los principales exmenes que apoyan su autenticidad: a) La imagen o impronta en el Sndone o Sbana Santa es clnicamente exacta pues representa la de un hombre realmente crucificado. La perfeccin de la imagen fisiopatolgica hace imposible la falsedad en la Edad Media por el atraso de la medicina en ese entonces. La imagen es producto de una proyeccin fotocspica, una radiacin termoluminosa uniforme, emanada del propio cuerpo en forma fugaz, pero suficiente para dejar la huella impresa sobre la Sbana en forma tridimensional. b) Esta comprobado que existe sangre en la tela. d) Se encontr polen de los lugares donde estuvo el Sudario y de Palestina. e) No aparecen partidas las piernas. f)

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dos al poste (estpete). Los clavos que se usaron fuera de cinco a siete pulgadas. Se usaron tres clavos: dos en las muecas y uno en los pies, se clav el pie izquierdo sobre el derecho. No se le puso el sedile para apoyar los pies. El mayor efecto patolgico de la crucifixin era la interferencia en la respiracin. La muerte resulta bsicamente del shock hipovolmico y la asfixia. Su muerte fue asegurada con una punzada de lanza en su costado. La medicina indica que Jess estaba muerto cuando fue bajado de la cruz. Estudios recientes fundados en conocimientos cientficos, el avance de la medicina, el Sudario de Turn (considerado como la tela con que envolvieron a Jess), los descubrimientos arqueolgicos, ponen ms claro el mecanismo de la muerte de Jess y sobre la prctica de la flagelacin y la crucifixicin. Jess era un hombre sano que viajaba a pie a travs de Palestina.47 Sin embargo, durante las doce hoEncima del prpado derecho (para que no se cayera) aparece una moneda romana (leptn) que corri en el tiempo de Tiberio y Pilato. g) La herida de lanza en el costado le fue infligida despus de muerto. h) No muestra seales de corrupcin. i) Nunca fue desenvuelto. Coinciden estos datos con los Evangelios. Fue sometida la Sbana a la prueba del carbono, pero no fue correcta la fecha que arroj (700 aos de antigedad) porque se trataba de un objeto irradiado y contaminado por multitud de bacterias que no se eliminaron en el clculo de la fecha.47

De los estudios de los expertos de la NASA sobre la imagen electrnica del Hombre de la Sbana se deduce que era de extraordinaria belleza masculina, media 1,78-1,83 metros de altura, tena una perfecta anatoma, era masatcefales, rostro alargado, frente amplia, nariz rectilnea, pmulos grandes, cabellera espesa partida en dos.


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ras entre las 9:00 p.m. del jueves y las 9:00 a.m. del viernes, sufri enorme tensin emocional, sudoracin de sangre, abandono de sus discpulos, el castigo fsico, el desvelo, la caminata de cuatro kilmetros de un lugar a otro donde se celebraron los juicios. Todas estas condiciones contribuyeron a que los efectos de la flagelacin fuesen ms duros de lo normal. Jess or siete veces desde la cruz. Estas frases cortas fueron difciles y dolorosas porque el habla ocurre durante la exhalacin. Son las siete palabras. Como a las 3:00 p.m. del viernes, Jess clam a gran voz, inclin la cabeza y muri. El Sanhedrn no deseaba que los cuerpos permanecieran en la cruz, despus del atardecer, comienzo del da de reposo, por lo que pidieron a Pilato que adelantara la muerte de los tres crucificados. Los soldados quebraron las piernas de los dos ladrones, pero como vieron que Jess ya estaba muerto no le partieron las piernas. En cambio, uno de los soldados le atraves el costado con una lanza lo cual produjo un flujo repentino de sangre y agua. El costado donde se produjo la herida no fue indicado por Juan, pero se reconoce que fue al lado derecho. La lanza perfor el pulmn derecho, el pericardio y el corazn. La crucifixin es uno de los mtodos de la pena de muerte ms crueles y degradantes y se reserv nicamente para esclavos, extranjeros, revolucionarios y los ms viles criminales. En Roma no se le aplicaba a los ciudadanos romanos, con excepcin de los soldados desertores y otros. La crucifixin comenz entre los persas. Alejandro El Grande la introdujo en Egipto y Cartago. De

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stos la tomaron los romanos y la perfeccionaron para producir una muerte lenta, con mximo dolor y sufrimiento. La flagelacin era un preliminar legal para toda ejecucin romana. El instrumento para flagelar era un azote corto con varias tiras de cuero entrelazadas de diferente longitud, a las cuales se ataban pequeas bolas de hierro o trocitos de huesos de oveja. Para flagelar a la persona se desnudaba y sus manos atadas a un poste. Eran azotados en la espalda, las nalgas y las piernas y se debilitaba la vctima a una situacin prxima a la muerte, los soldados se burlaban de sus vctimas despus de la flagelacin. Cuando la flagelacin era fuerte y repetida se desgarraba la piel en tiras y se causaba prdida de sangre que produca un shock hipovolmico. Jess fue severamente azotado en el pretorio. 48 La Ley Juda se limitaba a treinta y nueve azotes. En el Sudario de Turn se comprob que le propinaron aproximadamente ciento veinte azotes por dos soldados diestros a un metro de distancia. La flagelacin se la dieron en la espalda, piernas, pecho, vientre, nalgas y la regin genital. Se le causaron seiscientas contusiones y heridas. La nariz aparece rota y desviada a la derecha.

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La pelcula de Mel Gibson La Pasin de Cristo, rodada en Italia, es un ejemplo del sufrimiento y duros azotes y golpes que recibi Jess. Jim Caviezel, el que hizo de Jess, accidentalmente fue azotado y sinti un profundo dolor. Fue dos veces azotado y le caus una herida de 14 centmetros en la espalda. El filme est bastante ajustado a los Evangelios.


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Despus de condenado, los soldados condujeron a Jess al Palacio del Gobernador, le quitaron su vestido, le pusieron la capa de color rojo, le colocaron una corona de espinas en la cabeza y en la mano derecha una caa. Los soldados se burlaban de Jess, se arrodillaban ante l y le decan viva el rey de los judos, le escupan la cara, le quitaron la caa y le pegaron en la cabeza. Posteriormente le quitaron la capa de soldado, le pusieron su ropa y se lo llevaron al Glgota para crucificarlo. La triste procesin sali a las ocho de la maana y lleg al Calvario antes de las nueve. Las tiendas, bazares y mercados estaban cerrados por ser da de Fiesta Santa. En las calles ya se estaban formando filas de gentes y a medida que se avanzaba se sumaban, especialmente mujeres que lanzaban gemidos y lamentos como muestra de simpata y compasin. Pero la mayora del pueblo, incluyendo personas que eran simpatizantes se unieron a la muchedumbre que lo insultaba y humillaba. Los dos ladrones estaban a la derecha y a la izquierda de Jess. El mal ladrn maldeca e insultaba a Jess y el buen ladrn estaba tranquilo y pensativo. En el camino49 doloroso50 encontraron a un hombre llamado Simn, originario de Cirene, y lo obliga-

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Jess hizo un recorrido doloroso hasta el Calvario para su ejecucin, escrita en versos de la manera ms bella por Enrique Fernndez Morales. Son doce las estaciones registradas: Primera estacin: Jess sentenciado a muerte. Segunda estacin:

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ron a cargar la cruz de Jess, quien, adems de los suplicios recibidos, no haba probado alimento o bebida desde la comida de Pascua. Al llegar al Glgota ofrecieron a Jess vino mezclado con hiel (mirra) que segn algunos autores quizs signifique cierta forma de analgsico, pero se neg a beberlo. Le quitaron su ropa y se la rifaron entre los soldados. Por orden de Pilato encima de su cabeza haban puesto un letrero que deca: Jess es el Rey de los Judos. Segn parece el letrero lo llevaba un centurin.51 La crucifixin de Jess se realiz a las nueve de la maana y su muerte a las tres de la tarde. Pero existe duda porque se calcula que su muerte ocurri entre tres y seis horas52 despus de la crucifixin.

Jess con la cruz a cuestas camina en la calle de la amargura. Tercera estacin: Jess cae por primera vez. En esta cada le vuelven a poner la corona de espinas que se la haban quitado mientras llevaba la cruz. Cuarta estacin: Jess cae por segunda vez junto con la cruz al tropezar con una piedra. Mara cae de rodillas ante Jess, pero los soldados la apartan. Quinta estacin: Jess cae por tercera vez y el Cirineo es obligado a ayudar a cargar la cruz. Sexta estacin: La Vernica enjuga con un lienzo el rostro ensangrentado de Jess que aparece en todos sus detalles. Sptima estacin: Jess consuela a las santas mujeres de Jerusaln. Octava estacin: Jess es despojado de sus vestidos. Novena estacin: Jess es clavado en la cruz. Dcima estacin: Jess muere en la cruz. Onceava estacin: Jess es bajado de la cruz. Doceava estacin: Sepultura de Jess. Segn Emmerich, Jess cay siete veces. La Iglesia Catlica registra de catorce a quince estaciones. Registro doce porque el encuentro de Jess con su madre la inscrib en la segunda cada y la ayuda del Cirineo en la tercera cada.


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Los que pasaban por el Calvario insultaban a Jess, dicindole que si derribaba el templo y lo reedificaba en tres das, que se librara del suplicio de la cruz si era el hijo de Dios.

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Mientras Jess era conducido a Pilato, la Virgen, Juan y Magdalena recorrieron todos los lugares en los que Jess haba estado desde que lo prendieron. Volvieron a la casa de Caifs, de Ans, por Ofel, Getseman, al huerto de los Olivos y en todos los sitios donde Jess haba cado o sufrido. Se paraban en silencio, lloraban y sufran. La Virgen bes la tierra donde su hijo haba cado. Este es el origen y principio del Va Crucis. (Emmerich. Ob. cit., pg. 124). En el recorrido de la crucifixin se designaba a una persona que llevaba una placa de madera blanca que anunciaba la ndole del crimen. Se acostumbraba seguir el camino ms largo y pasar por las calles ms concurridas para atraer la atencin del pblico, pero esto no fue puesto en vigencia con Jess. Sin embargo, segn Emmerich, Pilato formaba parte de la marcha precedido por un escuadrn de caballera y seguido de trescientos soldados para evitar la sublevacin popular, un joven llevaba la inscripcin que ste haba mandado a escribir para la cruz. Una trompeta se tocaba en todas las esquinas y se proclamaba la sentencia. Ob. cit., pgs. 158 y 159. Los crucificados podan morir en horas (3 o 4 horas) o en varios das (3 a 4 das). Pilatos se sorprendi por la forma rpida en que muri Jess. Mdicamente contribuyeron varios factores, el cansancio y el sufrimiento, particularmente el shock hipovolmico, asfixia por agotamiento y agudo paro cardaco. Pero era el Hijo de Dios y l poda decidir su momento. Fue un acto de voluntad. l le haba dicho a sus discpulos: Yo pongo mi vida, para volverla a tomar. Nadie me la quita, sino que yo de m mismo la pongo. Tengo poder para ponerla y tengo poder para volverla a tomar (Juan 10:17,18).

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Los jefes de los sacerdotes, los jefes de los judos y los maestros de la ley lo insultaban: has salvado a otros y no te puedes salvar; si eres rey de Israel baja de la cruz y creeremos en ti; si Dios te ama y eres hijo de l que te libere. Desde el medioda hasta las tres de la tarde el sol se ocult y todo el pas oscureci53 Jess deca con voz fuerte: El, El, lam sabractani, lo que quiere decir: Dios mo, Dios mo, por qu me has abandonado? Algunos de los presentes decan que estaba llamando a Elas. Alguien con una esponja empapada de vinagre en la punta de una caa le ofreca de beber; pero otros le decan djalo, veamos si viene Elas a liberarlo. Jess expres: Padre, en tus manos encomiendo mi espritu y con un fuerte grito expir y entreg su espritu. Junto a la cruz estaban su madre, Mara, esposa de Cleofs y Mara Magdalena, lo mismo que Juan. Su madre sufri intensamente la Pasin de su hijo. En seguida la cortina o velo54 que cerraba el Santuario del Templo y la tierra se partieron en dos;

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La presencia de un eclipse de sol es descartado porque era tiempo de luna llena. Fue un fenmeno sobrenatural. Pero no se descarta un eclipse de luna, la cual se pone roja. Algunos eclipses han coincidido con sucesos desastrosos o muerte de grandes hombres, como Csar. Se expresa que los velos tenan enormes dimensiones y grosor, requeran hasta de trescientos hombres para manejarlos. Pero algunos consideran que es exagerada esa apreciacin. La cortina se rasg porque las dos columnas que la sostenan se separaron por el terremoto.

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los soldados y el Centurin romano, al ver el terremoto expresaron que verdaderamente Jess era Hijo de Dios;55 los sepulcros se abrieron y resucitaron varias personas santas, las que regresaron a sus sepulcros despus de la resurreccin de Jess. En la Ciudad Santa estos muertos se aparecieron a mucha gente, principalmente a los que contribuyeron a condenar a Jess. Muchas personas pensaron que haban condenado a un inocente. Los Evangelios Apcrifos aseguran que sobrevino un terremoto y se derrumb el Santuario y el Pinculo. Las Siete Palabras de Cristo no fueron parte de las concesiones que suelen darse a los que sern ejecutados. Son las ltimas que como hombre y con impulso divino pudo dirigir al mundo. Estas son: Primera palabra: Padre, perdnalos porque no saben lo que hacen. Pide al Seor el perdn a los soldados, a los que participaron en su suplicio y de todos los pecados de la humanidad porque se convierte en el Redentor. Por otra parte, rechaza la venganza y la ley del Talin (ojo por ojo, diente por diente) contemplada en el Derecho hebreo. Segunda palabra: En verdad te digo que hoy mismo estars conmigo en el paraso. Se dirige a Dimas, el buen ladrn, por haberse arrepentido. Confirma que el arrepentimiento consciente y sincero lleva a la salvacin. Tercera palabra. Al referirse a Juan, su discpulo, le dice a su madre: Mujer, ah tienes a tu hijo. Despus le dijo a Juan: Ah tienes a tu madre. Se deja claro que Mara, su madre, es la madre de la Iglesia, de sus dirigentes y de sus fieles y de toda la

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Mateo. 27:51-52.

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humanidad. De aqu el culto a la Virgen en sus diferentes manifestaciones: Virgen del Pilar, Virgen de Guadalupe, etc. Cuarta palabra: Tengo sed. Es una sed del cuerpo y del alma para cumplir la misin de redimir a la humanidad. Quinta palabra: Padre mo, por qu me has abandonado? Son expresiones en el extremo de la agona que marca el fin del sufrimiento de cristo, cuya culminacin fue el abandono de Dios y la agobiante soledad. Sexta y Sptima palabra: Todo est consumado. Padre mo, en tus manos encomiendo mi espritu. Estas expresiones nos dicen que Jess termin la misin que el Padre le encomend en la tierra. Jess fue crucificado junto con dos ladrones, Gestas (el mal ladrn) y Dimas (el buen ladrn). Segn los Evangelios Apcrifos, Gestas mataba a los viandantes, a otros los desnudaba, colgaba a las mujeres de los tobillos cabeza abajo para despus cortarles los pechos, tena predileccin por beber la sangre de miembros infantiles, nunca conoci a Dios, no obedeca a las leyes y era violento. Dimas era galileo y tena su posada, le robaba a los ricos y les ayudaba a los pobres, sepultaba a los muertos, saqueaba las tumbas, rob los libros de la ley en Jerusaln, dej desnuda a la hija de Caifs, que era la sacerdotisa del santuario. Dimas se arrepinti y Jess le dijo que estara con l en el Paraso. Por el contrario Gestas lo insult. Jos de Arimetea fue donde Pilato para pedirle el cuerpo de Jess y enterrarlo. Fue bajado de la cruz y despus preparado para su entierro. Nicodemo ayuda en esta labor. Posteriormente, fue depositado en un sepulcro cavado en una roca y despus la entrada en la tumba fue cerrada con una piedra grande. Fue enterra-


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do en el huerto de Jos. Se encontraba all Mara Magdalena y Mara, madre de Jess. A peticin de los sacerdotes y fariseos, Pilato orden que el sepulcro fuera vigilado por soldados porque los discpulos podran robarse el cadver y despus informarle al pueblo que haba resucitado, como lo anunci con anterioridad. Posteriormente, Mara Magdalena, Mara madre de Santiago y Salom, fueron al sepulcro y observaron que haba sido echada a un lado la gran piedra que cerraba la entrada. Entraron al sepulcro y vieron a un joven vestido de blanco sentado al lado derecho que les dijo que no se asustaran porque Jess haba resucitado y que ya no estaba. Agreg que se lo fueran a decir a Pedro y a los otros discpulos que Jess ira delante a Galilea. Ah lo veran tal como l se los dijo. 56 Ya Jess les haba dicho a sus discpulos: El Hijo del Hombre va a ser entregado en manos de los hombres. Lo van a matar; y a los tres das de muerto, resucitar.57 Lo anunci al menos en tres ocasiones. Los soldados informaron de lo sucedido y las autoridades judas le dieron a dichos soldados dinero para que callaran sobre la Resurreccin y expresaran que mientras vigilaban vieron a la madre y a sus discpulos sacar el cuerpo de Jess. El Cristo resucitado se le apareci primero a Mara Magdalena y sta corri a avisrselo a los compa-

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Marcos, 16, 42-47. Marcos, 9.30.

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eros de Jess, pero no le creyeron. Despus se apareci a dos de ellos, bajo otra figura y por ltimo se apareci a los once discpulos que estaban comiendo. Los reprendi por su poca fe en no creerle quienes lo haban visto y les pidi que fueran a todo el mundo a anunciar la buena nueva y ofreci la salvacin al que creyera y condena al que se resistiera a creer y les concedi ciertos poderes. Jess apareci en diferentes lugares y a varias personas: en un cerro, en un pueblo, cuando estaban cenando los apstoles; apareci a Mara Magdalena, a Mara madre de Santiago el menor y a los apstoles. En Corintio 15,3 se expresa que se le apareci a Pedro, luego a los apstoles y a ms de quinientos hermanos a la vez. La Resurreccin no pudo ser vista, pero su realizacin se apoya en la desaparicin del cuerpo de Jess y en sus diferentes apariciones posteriores. La ejecucin de la injusta sentencia de muerte fue frustrada porque Jess no muri, su cuerpo intacto y su alma subieron al cielo y se sent a la derecha de su Padre. No tenemos su presencia fsica porque subi al cielo una vez cumplida su misin.58 Todos los fines y funciones de la pena de muerte fueron frustrados.59 Sus discpulos y sucesores al cabo de tres siglos catequizaron todo el imperio romano.

58 En cambio Lzaro que tambin resucit despus de muerto, se qued en la Tierra. 59 Cfr. Ivn Escobar Fornos. Los Derechos Humanos y su Defensa. Editorial Hispamer. Managua, 2003, pgs. 74 y sigts.


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El mensaje de Jess sigue siendo un ejemplo para la humanidad, principalmente en esta poca de la modernidad, donde la tecnologa y la ciencia han avanzado tanto, pero el egosmo, la envidia, el afn del triunfo y el hedonismo persisten, olvidando el amor al prjimo, la solidaridad social, frente a un mundo donde todava la mitad de la poblacin vive en la pobreza y existen veintisiete millones de personas que sufren bajo la esclavitud y cada da es ms amplia la brecha entre pobres y ricos, pocos ricos y el resto pobres. No seguir a Jess es olvidarse del amor al prjimo y provocar la ingobernabilidad y la injusticia. Jess es la cabeza, el Jefe de la Iglesia. El cristianismo es una de las principales religiones monotestas y elemento fundamental de la civilizacin occidental.

VI. No existi el debido procesoNo se cumplieron las bases fundamentales de debido proceso por lo que la sentencia contra Cristo no tena ningn valor: A. El derecho a un proceso pblico B. El derecho a probar C. Derecho a un juez imparcial D. Los judos lo condenaron a una pena que no exista en su Derecho (crucifixin), si se sigue la tesis de Jos Palls e Ignacio Burgoa. Por el contrario, los romanos lo condenaron a una pena que no exista en el Derecho hebreo. E. Fue condenado a la crucifixin por un delito que no cometi (sedicin).

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F. En el Derecho Romano no se aplicaba la crucifixin para delitos religiosos y tampoco contemplaba la blasfemia. En conclusin se puede decir que es una de las ms grandes injusticias y violacin de la ley. Fue un asesinato judicial.

VII. Destino de Judas y Pilato1. Judas se ahorcLos Evangelios expresan que Judas, al darse cuenta que Jess haba sido condenado, se llen de remordimiento y devolvi las treinta monedas de plata60 a los jefes de los sacerdotes, expresndole que haba pecado entregando a la muerte a un inocente. Los sacerdotes recogieron el dinero, pero consideraron que era el precio de la sangre por lo que no ingres a la caja del Templo y compraron con ese dinero el Campo del Alfarero, destinado para cementerio de extranjeros, llamndolo Campo de Sangre. El traidor merece el desprecio de todos. Judas se ahorc de las ramas de un rbol que creca en un hoyo, en un lugar inmundo y lleno de escombros.

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Las treinta monedas tienen un significado simblico de desprecio pues con esa cantidad se poda vender o comprar un esclavo o rescatar una mujer. (Cfr. Andres-Marie Gerard. Diccionario Bblico. cit, pg. 786). En los Evangelios Apcrifos se expresa que la turba quera quemar a la hija de Caifs por haberse perdido los Libros de la Ley, pues no saban como celebrar la Pascua. Ans y Caifs le dieron a Judas treinta monedas de oro para que le dijera al pueblo que los haba sustraido Cristo y despus lo entreg para ser crucificado.


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De los Hechos de los Apstoles (1.18, 1.19), se ha desprendido la versin de que Judas no sinti remordimiento, ni se suicid y el dinero lo convirti en terrateniente y muri de alguna especie de ataque. La propiedad que adquiri se conoci como Campo de Sangre. Existen otras dos versiones que tambin sostienen que no muri ahorcado, pero vivi de la manera siguiente: a) Se le hinch todo el cuerpo incluyendo los parpados por los que no poda ver y anduvo por el mundo como terrible ejemplo de impiedad. b) Sus partes vergonzosas eran repugnantes y mayores que cuanto hay de indecorosos y por ellas echaba pus y gusanos. Muri despus de muchos tormentos y castigos, en un lugar que queda desierto y despoblado hasta el presente a causa del mal olor de su carne que llen de putrefaccin a la tierra. Recientemente apareci en los medios de informacin y despus comentado traducido al espaol, el Evangelio segn Judas. Es una copia de los siglos III y IV de un original del siglo II. Informa ms sobres los gnticos, cuyas creencias se difundieron en los primeros aos de la cristianidad, las cuales posteriormente desaparecieron. Este texto permaneci perdido durante 1.700 aos y de l se deduce que Judas fue el mejor y ms fiel de los discpulos de Jess, el que entendi a Jess. Estuvo oculto durante siglos en el desierto de Egipto y descubierto antes del fin del siglo XX. Pasa por las manos de varios comerciantes y uno de ellos lo tuvo en una caja de seguridad durante 16 aos en un banco en Hicksville, Nueva York Luego fue entregado a la Foundation for Ancient Art., donde

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fue restaurado y traducido, en la que intervino Rodolfo Kasser. Cuando lleg a manos del profesor Kasser, experto en lengua copta, en la que estaba escrito el evangelio, casi destruido, lo ley y coloc en una mesa, luego manifest algunos comentarios: En este pasaje Jess les explica a sus discpulos que van por el camino equivocado. Cristo le expresa a Judas: Superars a todos, ya que sacrificars la carne que me cubre. Judas ha sido el ms odiado durante 2000 aos, considerado como el smbolo de la traicin. Algunos estiman que los pasajes bblicos donde aparece Judas como traidor tiene un trasfondo un tanto siniestro, originado por el alejamiento del cristianismo como secta juda, por lo que los cristianos encontraron conveniente culpar al pueblo judo por el arresto y ejecucin de Cristo y representar a Judas como el judo arquetipo. Si en el Nuevo Testamento Judas traiciona a Jess, en el Evangelio Segn Judas, aparece como un hroe. Jess le pidi que lo entregara para liberar el alma de su cuerpo, concepto agnstico. Cuando lo entrega est cumpliendo con las indicaciones que le dio Jess. El Evangelio Segn Judas sigue la idea central de los gnsticos cainistas de convertir en hroes algunos villanos que figuran en la Biblia: los ofitas rindieron culto a la serpiente, smbolo del mal y la tentacin; los sodomitas, crean que Sodoma y Gomorra fueron lugares privilegiados por el Dios de este mundo, donde se concentraba la generacin de los perfectos, que recibieron la enseanza universal verdadera; los cainistas, no justificaban la conducta del Dios creador de arrojar del paraso a Adn y Eva despus de la falta y su aprobacin a Abel y la censura a Can. Ensalzan a


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Can, concebido por una potencia superior, sealaban a Abel como inferior concebido por una potencia inferior. Este Dios se pronunciaba a favor del dbil y en contra del fuerte. Su justicia se aplicaba con ignorancia, por lo que deba existir otra divinidad realmente sabia y amorosa, superior al Dios de la creacin. Existan, pues, dos Dioses. Los gnsticos crean que los humanos podan estar conectados directamente con Dios, pues tienen una chispa del poder divino, detenida por el mundo material que los rodea, obra del Dios inferior. Para lograr esa conexin requeran de un maestro el cual fue Cristo, por lo que quienes entendan su mensaje podan convertirse tan divinos como Jess, lo cual haca innecesario el sacerdocio. Estas concepciones gnticas han sido censuradas por la Iglesia Catlica. Es un evangelio que no puede ser objeto de confianza ni histrica ni religiosa. A l se refiere Irineo, Obispo de Lyon, cuando en el ao 180 d. C. escribi un tratado denominado en Contra de las Herejas. De aceptarse, podra cambiar la vida y muerte de Cristo y pondra en duda los Evangelios Biblicos. A finales del siglo II se acept por la Iglesia la opinin de Irineo de reconocer slo los cuatro evangelios segn Mateo, Marcos, Lucas y Juan, relatos sobre la vida, doctrina, obras y milagros, pasin, muerte y resurreccin de Cristo. Por supuesto, el Evangelio de Judas fue rechazado y con razn.

2. Condena de PilatoEn los Evangelios Apcrifos existen dos cartas que dan cuenta del destino de Pilato: una de Pilato a Tiberio y otra de ste a Pilato, junto a una sentencia.

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En la de Pilato a Tiberio, el primero le informa a ste que entreg a Jess a un duro suplicio por presin de los judos y por temor. Era un piadoso y austero como no existe ni existir otro jams. Si no hubiera sido pues por el temor a la sedicin y su lealtad para con l, vivira el insigne varn, el cual era inocente. En la carta de Tiberio, ste crtica duramente a Pilato porque condena a muerte a Jess de manera violenta y le expresa que as como conden injustamente a Jess y lo mand a matar, de la misma manera lo va a ajusticiar con todo derecho, como a sus consejeros y cmplices, de quienes recibi el soborno de la muerte. Esta carta se la entreg al mensajero Raab, junto con una sentencia firmada de su puo y letra, en la que ordenaba pasar por el filo de la espada a todo el pueblo judo y apresar como reos y llevar a Roma a Pilato lo mismo que a Arquelao (hijo de Herodes), a Filipo, a Caifs y Ans y a todos los principales judos. Acompaado de dos mil soldados llev a Roma a todos estos presos y encadenados. Caifs, en el viaje a Roma, de una manera violenta y miserable, perdi la vida en la Isla de Creta. La tierra se negaba a recibir en su seno el cadver de Caifs y lo arrojaba fuera. Un grupo de personas lo apedrearon, dejndolo as sepultado. Ans fue envuelto en una piel de buey. Al secarse el cuero qued oprimido y se le salieron las entraas por la boca, perdiendo as la vida. Existi la costumbre romana que si el condenado a muerte contemplaba el rostro del rey quedaba libre. Por tal razn el Csar evada a Pilato. Metieron en una caverna a Pilato. El Csar un da sali de caza y la


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gacela que persegua se par frente a la entrada de la Caverna. Pilato quiso ver el rostro de el Csar, pero la gacela se puso frente a Pilato y no lo pudo ver. Csar dispar la flecha, para matar a la gacela, pero la flecha mat a Pilato. El hijo de Herodes y su cmplice Filipo fueron empalados. Los restantes murieron por el filo de la espada. En otra versin de los Evangelios Apcrifos, Tiberio61 conden a muerte ignominiosa a Pilato y ste al conocer la noticia prefiri suicidarse. Ataron su cadver a una mole y lo arrojaron a lo profundo del Tiber, despus lo sacaron de all porque provocaba tempestades, truenos, granizos, etc., para llevrselo lejos a otros lugares y por ltimo lo echaron en un pozo, pero en todos estos lugares tambin causaba problemas.62

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Segn Eusebio de Cesrea, Pilato le informa a Tiberio de los rumores que corran por toda Palestina de que Jess haba resucitado de entre los muertos y de que era Dios. Impresionado Tiberio lo expres al Senado pero lo rechaz porque de acuerdo con la ley no se someti a prueba su divinizacin para que lo aprobara dicho Senado. Tiberio mantuvo firme su decisin y no ide en contra de las enseanzas de Cristo (Editorial Clie. Traduccin directa del griego por George Grayling. Barcelona, Espaa. 1988. pg. 80). Existen otras versiones sobre la suerte de Pilatos. El texto apcrifo Mors Pilati, expresa que fue exiliado a la Galia, en Viena, donde se suicid. Segn otro texto apcrifo La tradicin de Pilato, lo ejecut Tiberio y muri como un cristiano arrepentido. Tambin la historia registra la versin de que fue condenado a muerte por Nern.

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VIII. Destino de los apstolesDe los doce apstoles que acompaaron a Jess y posteriormente predicaron sus enseanzas, once de ellos murieron como mrtires. Todos ellos fueron torturados, flagelados por los mtodos ms crueles. Excepto San Juan, que muri de muerte natural, Mateo y Santiago (Jacobo), hijo de Zebedeo, murieron al filo de la espada, Tadeo fue asesinado por la flecha de los enemigos, Santiago (hermano de Jess) apedreado, Toms con una lanza, y crucificados: Pedro, Andrs, Santiago (hijo de Alfeo), Felipe, Simn y Bartolom.63 Los apstoles fueron fieles a Jess, pero se deja ver por algunos autores que al comprobar que no era el Mesas que iba a liberar polticamente a los judos y que su final era la crucifixin, manifestaron cierto desnimo; ejemplo de ello es la negacin de Pedro y el abandono de los apstoles despus del arresto, pero su fe en el Salvador aument y se reafirm con la Resurreccin y su aparicin a los apstoles y a otras personas.

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Doce eran los apstoles con Judas Iscariote, pero despus de su traicin fue sustituido por Matas (mt. 10:2-24. Hechos 1-15266; 1:21,22). S. Pablo no fue elegido apstol junto con los otros, pero fue instituido por Cristo como apstol especial para los gentiles. (Hechos 9:1-31; Co 9:11). Pablo acredita su ttulo de apstol por haber visto a Cristo resucitado (G. 1:12; 1 Co. 15).

El Proceso de Cristo

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