El Valor Del Perdon

6
EL VALOR DEL PERDON El perdón es una decisión, no un sentimiento, porque cuando perdonamos no sentimos más la ofensa, no sentimos más rencor. Perdona, que perdonando tendrás en paz tu alma y la tendrá el que te ofendió. (1) Muchas veces, se nos hace difícil perdonar. Digo perdonar, no desde las palabras -un “te perdono” puede resultar hasta una fórmula hecha-, me refiero a perdonar desde lo más profundo de nuestro corazón. Cuando hemos sido ofendidos, defraudados, algo se quiebra dentro de nosotros. Entonces, tendemos a encerrarnos en nuestro dolor, como mecanismo de defensa, nos distanciamos de aquél que nos hirió, como si alejándonos, la angustia menguase. Sin embargo, pocos entendemos que, para sanear un corazón lastimado, el perdón genuino es la mejor opción, aun resultándonos difícil. Cuando uno perdona, desde lo más profundo de su alma, sana las heridas, quita el sabor amargo que ha quedado y deja vacío ese espacio que ocupaba el rencor o la ofensa para dar cabida a sentimientos y sensaciones más agradables. Por otro lado, perdonar implica entender al otro, su circunstancia, su situación y –desde ese entendimiento- construir un mejor lazo, un vínculo de mayor empatía. Cuando hemos sido defraudados o maltratados, no es fácil poner la otra mejilla, no somos Jesús, pero podemos tratar de imitarlo. A menudo, sentimos que hemos perdonado, así lo creemos, pero, a la hora de volver a arriesgarnos, el perdón se desdibuja. Si no volvemos a confiar, no hemos perdonado del todo. El perdón limpia, redime, eleva, nos hace más bondadosos y más grandes. El rencor pesa demasiado, no es una carga fácil de llevar en la vida. Nos roba energías para enfrentar la vida de una manera más positiva, aletarga nuestro paso y no nos conduce a buen destino.

Transcript of El Valor Del Perdon

Page 1: El Valor Del Perdon

EL VALOR DEL PERDON

El perdón es una decisión, no un sentimiento, porque cuando perdonamos no sentimos más la ofensa, no sentimos más rencor. Perdona, que perdonando tendrás en paz tu alma y la tendrá el que te ofendió. (1) Muchas veces, se nos hace difícil perdonar. Digo perdonar, no desde las palabras -un “te perdono” puede resultar hasta una fórmula hecha-, me refiero a perdonar desde lo más profundo de nuestro corazón. Cuando hemos sido ofendidos, defraudados, algo se quiebra dentro de nosotros. Entonces, tendemos a encerrarnos en nuestro dolor, como mecanismo de defensa, nos distanciamos de aquél que nos hirió, como si alejándonos, la angustia menguase. Sin embargo, pocos entendemos que, para sanear un corazón lastimado, el perdón genuino es la mejor opción, aun resultándonos difícil. Cuando uno perdona, desde lo más profundo de su alma, sana las heridas, quita el sabor amargo que ha quedado y deja vacío ese espacio que ocupaba el rencor o la ofensa para dar cabida a sentimientos y sensaciones más agradables. Por otro lado, perdonar implica entender al otro, su circunstancia, su situación y –desde ese entendimiento- construir un mejor lazo, un vínculo de mayor empatía. Cuando hemos sido defraudados o maltratados, no es fácil poner la otra mejilla, no somos Jesús, pero podemos tratar de imitarlo.   A menudo, sentimos que hemos perdonado, así lo creemos, pero, a la hora de volver a arriesgarnos, el perdón se desdibuja. Si no volvemos a confiar, no hemos perdonado del todo. El perdón limpia, redime, eleva, nos hace más bondadosos y más grandes. El rencor pesa demasiado, no es una carga fácil de llevar en la vida. Nos roba energías para enfrentar la vida de una manera más positiva, aletarga nuestro paso y no nos conduce a buen destino. Perdonar puede ser también un ejercicio. Hay muchas cosas en la vida a las que uno aspira, pero no consigue fácilmente, quizás el saber perdonar sea una de ellas. De todos modos, bien vale la pena intentarlo una y otra vez. ¿Cuál es el riesgo? ¿Qué seamos heridos nuevamente? ¿Qué nuestra confianza se vea de nuevo defraudada?  Es una de las posibilidades. ¿Cuáles son las otras? ¿Que nos sintamos en paz con nosotros mismos, que nos reencontremos con el otro desde otro lugar, que nos hayamos acercado un poquito más al Señor? Posibilidades todas que bien merecen tomar ese riesgo. 

Page 2: El Valor Del Perdon

El perdón nos ayuda a vivir en paz con nosotros mismos y con los demás, pero también ayuda a quien nos ha lastimado. Si aquél que obró mal siente que es realmente perdonado y que nuestro corazón le abre sus puertas nuevamente, sin dudas, no volverá a lastimarnos. El rencor aleja, endurece, contrae y nos empequeñece. El perdón nos da, ni más ni menos, la posibilidad de volver a empezar, de volver a creer. El perdón cae como lluvia suave desde el cielo a la tierra. Es dos veces bendito; bendice al que lo da y al que lo recibe.(2)

Page 3: El Valor Del Perdon

¿ME PERDONAS?

El Perdón es una ley de amor, es una ley para este plano donde hemos creado el karma; cuando no perdonas es porque no hay amor en tu corazón y te llenas de emociones y sentimientos turbios como la ira, resentimiento, odio, rencor. Y todo eso daña tu vida, porque eso es energía negativa que te ancla al pasado. Y mientras vives en ese pasado, te estás perdiendo de la dicha del  Ahora.

Hay versiones interesantes sobre este tema…incluso hay muchas técnicas para practicar el Perdón, todas muy buenas. Muy bien, pero por experiencia propia sé que no es fácil perdonar, y seguramente también ustedes que leen este articulo lo han experimentado, no es fácil perdonar.

Cuando alguien ha hecho algo que nos hirió en lo profundo, es difícil perdonar porque eso se quedo bien adentro. Así lo sabemos todos. Y muchas veces hemos practicado el perdón a alguien que nos hizo “daño” y, al tiempo esa situación vuelve a la mente con recuerdos que de nuevo nos producen rabia o dolor.

Esto quiere decir: "que aún no hemos perdonado", creíamos que lo habíamos logrado pero no fue así. Lo que nos indica que perdonar es un poco complejo, no basta solo aplicar la técnica recomendada, pareciera que con solo la intención, no se logra. Y qué raro porque la intención es una energía, pero a veces en estos casos de perdonar, no nos ayuda. Por qué? Veamos,. Quizás hay que analizar esto muy a fondo.

Primero, que cosa es el perdón? Y luego porque yo debo perdonar? Entonces, reflexionemos, el perdón es algo que nos enseñaron desde pequeños que debíamos practicar, siempre escuchamos hablar del perdón, todos dicen que hay que perdonar, hasta los mensajes que llegan de maestros y otros seres de luz que nos están ayudando en esta fase, hablan de perdonar.

Pero hay algo interesante, la práctica del perdón en general se hace mentalmente, porque analizamos una situación y determinamos que hay que aplicar el perdón, aplicamos la lógica, pero se aplica como una técnica, y nada más, lo hacemos siempre usando amor, al menos eso creemos. Pero resulta que seguramente no es así, lo estamos haciendo con la mente solamente.

Y resulta que también mentalmente decidimos que lo mejor es perdonar para poder sentirnos bien con nosotros mismos, también bueno, para no seguir creando más karma, y.......para no hacernos más dano a nosotros mismos, porque finalmente nos damos cuenta que nos afecta.

Pero como poder perdonar entonces?

Primero que todo hay que hacer un análisis de tu tiempo, si andas en rencores y remordimientos es porque vives mucho en el pasado, y debes de buscar rápidamente de meterte en el eterno presente, en el Aquí y Ahora, eso es súper importante.

Page 4: El Valor Del Perdon

Curiosamente, siempre que hablamos del perdon, nos referimos a perdonar a alguien, pero tambien hay el perdon a nosotros mismos. Y ese es el punto mas algido de este tema, pues para poder perdonar a los demas, primero se debe practicar el perdon en nosotros mismos. Eso es dificil tambien, siempre andamos por ahi con arrepentimientos por cosas que no llegamos hacer, que no dijimos, etc...bueno todo eso hay que perdonarlo. Hay que practicar ese perdon primero que todo. Hasta que no te perdones a ti mismo no podras perdonar a nadie mas.

El perdón es una energía, lleva una fuerza con un pensamiento, lleva una vibración, por lo que es también una determinada frecuencia. Pero es una frecuencia de AMOR, y esa frecuencia sale solo del corazón, no sale de la mente, esa frecuencia es emitida por un corazón lleno del más puro e incondicional AMOR.

Esto nos indica que si no hay amor verdadero no hay perdón, se perdona en el corazón no en la mente.  A este punto estamos de acuerdo, se requiere de un amor inmenso y auténtico para perdonar. Ahora bien, analizando más, si somos todos UNO, si ya sabemos que aquí estamos en un juego de la Dualidad que aceptamos venir a jugar para experimentar, y que no hay bueno ni malo, porque todo es UNO, y todo es de la creación.

Qué cosa tenemos que perdonar entonces??

Acaso al decir que perdonamos no nos estamos colocando en una posición elevada? Pues sí, parece que es el Ego el que se encarga de esa parte de los perdones..pero es porque el perdón esta en el juego que vinimos a jugar, el perdón es parte de esta 3D, hace parte del juego del Karma.

Por eso es que no se logra perdonar así nomas, porque mientras esta el Ego a cargo, el perdón no entra a jugar, el Ego no lo permite porque la culpa, remordimiento, rabia, odio y todo lo que conforma las consecuencias de no perdonar, es parte de su juego y con eso te controla.

Para llegar a perdonar de verdad, hay que trabajar el Ego, para poder llegar al corazón, y después desde allí ya no necesitas el perdón porque al estar en tu corazón, allí ya no existe eso….así que es un buen trabajo este del perdón. El perdón es amor, eso es todo. Y cuando estás en amor, eres perdón, pero ya la palabra no es necesaria como tal.

En consecuencia, si el perdón es de esta dimensión, no existirá cuando nos vayamos a la 5ta, porque allí ya no habrá nada que perdonar, porque estaremos en armonía, amor y paz……en el Hogar que es el corazón!!

Podremos resumir entonces, que lo primero que hay que hacer para perdonar es centrarte en el corazon, en el amor incondicional,  y  al estar alli centrado, ya vives en el Aqui y Ahora; eso significara que ya te amaras lo suficiente como para poder amar a los demas, y el perdón se dara por añadidura. .

Los Amo desde mi corazon UNO!