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IMPLEMENTACIÓN EN EL AULA DEL PROCESO DE ENSEÑANZA APRENDIZAJE AMBIENTE PROPICIO PARA EL APRENDIZAJE

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Ambiente propicio

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IMPLEMENTACIÓN EN EL AULA DEL PROCESO DE ENSEÑANZA APRENDIZAJE

AMBIENTE PROPICIO PARA EL APRENDIZAJE

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Ambiente propicio para el aprendizaje.

La faceta B de los estándares de desempeño para la formación inicial docente, establece que el logro del rendimiento escolar se debe en gran parte a los componentes sociales y afectivos del aprendizaje. Es por esto que el ambiente que se logra en el aula es de gran importancia. Un ambiente propicio para el aprendizaje considera las interacciones humanas que se desarrollan en el aula, entre el docente y los estudiantes y de los estudiantes entre sí. Estas se deben desarrollar en un clima de confianza, equidad, respeto, tolerancia y valoración, donde las normas de comportamiento sean consensuadas, de tal forma que permitan la auto regulación. La imparcialidad del docente frente a situaciones conflictivas dentro del aula, es también un elemento que favorece un buen clima para el aprendizaje.

Otro de los aspectos que determinan en gran medida el logro de una ambiente que favorece el aprendizaje, es el conocimiento que el docente tiene de sus estudiantes, puesto que le permite interpretar adecuadamente sus comportamientos y responder a estos de mejor manera.

Junto con indicar los aspectos más relevantes que se deben considerar para el logro de un ambiente favorable para el aprendizaje, la faceta B de los Estándares de Desempeño para Formación Inicial Docente, plantean criterios que los docentes en formación deben tener en cuenta al momento de realizar la práctica pedagógica.

Dado lo anterior, a continuación se presentan las evidencias de mi práctica pedagógica teniendo como base los criterios establecidos en la faceta B de los Estándares de Desempeño para la Formación Inicial docente.

1.-EQUIDAD EN EL AULA

La profesora o profesor propicia un clima de equidad, confianza, libertad y respeto en su interacción con los estudiantes y de ellos entre sí.

Propiciar un clima de equidad en el aula se ve reflejado también cuando el profesor/a proporciona oportunidades de aprendizaje a todos sus estudiantes. Un ejemplo de ello se observa en la imagen en donde me encuentro apoyando a Bastián para que supere el temor de leer en público, de esta manera no queda relegado de la actividad de lectura que propusieron sus compañeros y en la que muchos participaron.

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Estas estudiantes están escribiendo la carta que le harían llegar a la directora. Ellas fueron las únicas que manifestaron interés en hacer la carta en el computador.

Un ambiente de equidad es posible evidenciarlo de esta manera, ya que no se niega el interés que los estudiantes tienen por el aprendizaje y se les brinda la oportunidad.

Vicente es un estudiante diagnosticado con déficit atencional severo, por lo general es retirado de la sala de clases cuando hay que realizar actividades que ameritan concentración, dado que el no la logra.

En esta secuencia de imágenes se puede observar que el estudiante realizó muy bien la actividad, pudiendo concluirla en el tiempo destinado para ello.

Para lograrlo fue necesario respetar la manera que él tiene para trabajar (solo), conversar con los demás compañeros y hacerles ver que Vicente merece las mismas oportunidades que ellos para aprender y que no debían desconcéntralo en su labor.

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En esta imagen se puede observar que los estudiantes realizan la actividad grupal en un clima de armonía y tranquilidad.

Esta imagen corresponde a la clase en donde los estudiantes visitaron el cerro Ñielol, en ella es posible observar que se está aprovechando la oportunidad que nos ofreció este espacio geográfico, para retroalimentar las dudas que el estudiante tenía respecto de los helechos y su forma de reproducción.

Generar oportunidades de aprendizaje como estas y valorar los intereses de los estudiantes frente a ellas creó vínculos de confianza entre los estudiantes y yo.

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2.-DOMINIO DEL GRUPO CURSO

Establece y mantiene normas consistentes y consensuadas de disciplina en el aula.

Estas imágenes corresponden a la realización de la feria científica. Es posible observar que los estudiantes están en sus asientos esperando la visita de los niños de otros cursos.

El orden que se puede evidenciar responde a la conversación inicial en la que se les explicó que la feria científica es una instancia en la que ellos podrían enseñar sus conocimientos a estudiantes menores, pero para que ello fuera posible debían estar concentrados y prepararse mentalmente. Además debían recordar que son un ejemplo para los más pequeños del colegio, por tanto debían comportarse correctamente.

De esta manera y sin la necesidad de ser enérgica, logré que los estudiantes se auto regularan y mantuvieran el orden requerido para la ocasión.

Estas imágenes corresponden a la clase en la que los estudiantes tenían como actividad elaborar una carta formal. Es posible observar que están trabajando ordenadamente, cada uno en su puesto. Para esta clase estaba planificado que trabajaran en grupo, sin embargo no fue posible debido a que estaban muy inquietos, por lo tanto y como medida para garantizar el orden y un trabajo beneficioso, fue necesario llegar a un acuerdo con ellos y establecer que la mejor manera de trabajar aquel día sería cada uno en su puesto y que solo podían compartir sus ideas con el compañero del lado en voz baja para no desconcentrar a los demás.

Sin duda en algún momento algunos estudiantes

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olvidaron el acuerdo tomado, pero bastó solo un recordatorio para que volvieran a realizar la tarea.

Como resultado del clima que se generó en el aula, algunas estudiantes manifestaron el interés de leer sus cartas a todo el curso, situación que no estaba planificada, pero que nos condujo a una clase más dinámica en donde los estudiantes fueron los protagonistas.

En esta imagen se puede apreciar la carta de compromiso que firmaron los estudiantes antes de ir a la universidad Católica de Temuco. En ella se establecieron las normas de comportamiento que debían seguir dentro del laboratorio y durante el traslado de la escuela hacia él y viceversa.

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3.-ORGANIZACIÓN DEL AULA

El profesor procura que el ambiente físico sea seguro y propicio para el aprendizaje

En estas imágenes se puede observar la distribución que se realizó de los muebles. En ella es posible ver que se dispusieron de acuerdo a la actividad de aprendizaje que se llevaría a cabo (grupal e individual).

Las mesas se ubicaron de tal forma que permitieron el libre tránsito entre ellas y que además no obstruyeron la salida de la sala.

En el caso de la última imagen, esta corresponde al día de la feria científica, en donde se ubicaron los muebles pensando en el fácil desplazamiento de los visitantes y la comodidad de los expositores.

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La preocupación por la seguridad no solo se estableció en el aula, sino también en la visita que se realizó al cerro Ñielol.

Para garantizar a los estudiantes su seguridad y minimizar al máximo los riesgos de caídas, se procuró seguir por un sendero amplio que les fuera fácil de subir, y que además permitiera realizar las observaciones en grupo.

En estas imágenes se puede observar que se destinó en el aula un espacio para que los estudiantes pudieran exhibir los trabajos realizados, situación que genera en ellos un sentimiento de valoración por lo que hacen.

Destinar los espacios físicos disponibles para exhibir las creaciones de los estudiantes contribuyó al aprendizaje dado que resulta ser un material de carácter visual que contiene la información del contenido que estábamos trabajando.

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4.- Reflexión

Dentro de la implementación del proyecto de aula, la creación de una ambiente favorable para el aprendizaje, fue lo más complejo. Si bien los estudiantes son niños que se comportan de acuerdo a sus edad, y que realizan acciones que son absolutamente esperadas, lo más complejo es realizar una clase teniendo como estudiantes niños con déficit atencional y con hiper-impulsividad. Esto porque en todo momento hay que estar pendiente de las reacciones que estos estudiantes pueden tener y sobre todo saber enfrentarlas, situación que en ocasiones pone muy tensa la clase. Es lamentable no contar con las herramientas para enfrentar situaciones críticas que provocan un quiebre en el proceso que se lleva a cabo dentro del aula. Sin embargo, pese a esa debilidad, me vi obligada a reaccionar en momentos en los que la ira de uno de estos dos estudiantes lo hacía enfrentarse a puñetazos con sus compañeros interrumpiendo la clase.

Situaciones como las antes mencionadas, lleva a pensar en la labor que el docente realiza en la sociedad. Una labor que no solo se centra en la concreción del currículo prescrito, sino que muchas veces, sobre todo en establecimientos que atienden a niños en vulnerabilidad social, se transforma en la labor propia de un psicólogo, o por qué no decirlo, se lleva consigo la labor que debe tener la familia en la crianza de los niños y la formación de valores. Frente a esto, se produce el dilema, de qué hacer, centrar la atención en aquellos estudiantes que necesitan apoyo extra, o centrar la atención en el objetivo de la clase y en los demás estudiantes.

No es fácil tomar la decisión cuando se tiene poca práctica, y peor aún, cuando no se cuenta con las herramientas para enfrentar situaciones de conflicto en el aula.

Asunto que no es menor si pensamos que los estudiantes están cada vez más agresivos en las escuelas, y que las políticas están más bien enfocadas en la sanción a este tipo de conductas y no en la prevención, dejando en el más absoluto desamparo a los profesores.