UNA LUCHA IDEOLÓGICA

Hitler ha sido probablemente uno de los personajes más emblemáticos a nivel histórico en

todo el mundo, su trascendencia en la guerra se relaciona con una multiplicidad de vertientes

multifactoriales que generaron numerosos cambios a nivel estamentario y social dentro de

la consolidación de Alemania como nación. Detrás de las batallas, guerras y paralelajes

ideológicos, existe una filosofía ciertamente mítica que se resguarda en los resquicios más

inhóspitos de la cognición del Führer.

Entonces ¿de qué va el texto “Mi Lucha” y por qué es relevante para nuestro estudio?, al

adentrarse en la narrativa del dictador ideológico, es sumamente importante tomar en

consideración el contexto, el proceso de socialización que tuvo con el periodo en Viena y

sobre todo la filosofía que existe en el marco de la “pureza” y el carácter emancipatorio

derivado de leyendas que anteceden los bastimentos nazis en aquellos tiempos.

Mi Lucha de Hitler es un texto importante porque determina los patrones de conducta y de

acción de su orden dictatorial que se asocian de sus vivencias cuando era niño en Viena;

varios de los pasajes de vida que relata Hitler se remontan a la hambruna terrible que ocurría

en sus tiempos de joven, inmerso en el oficio del arte pictórico que le dejaba una miseria de

ganancia.

Entre otras cosas, Hitler comenzó a observar los distintos patrones sociales que eran

consolidados por los grupos de poder en Viena y también con respecto a la prensa, en donde

percibía que la vida en el entorno giraba en torno a falacias por parte de los medios y un

claro maltrato de parte de los judíos durante su desarrollo:

“Durante mi lucha por la existencia, en Viena, me di cuenta de que la obra de acción

social jamás puede consistir en un ridículo e inútil lirismo de beneficencia, sino en la

eliminación de aquellas deficiencias que son fundamentales en la estructura

económico-cultural de nuestra vida y que constituyen el origen de la degeneración del

individuo o por lo menos de su mala inclinación.1

1 Adolf Hitler, Mein Kampf, s/editorial, 2013, p.16

Fecha: 15/05/2015 Tema: Reporte de lectura

Hitler hace hincapié en que estos “parásitos” o males en la sociedad son todos aquellos

individuos que cubren un papel de aprovechamiento de los recursos ajenos; sin embargo, el

principal objetivo eran claramente los judíos por su supuesta tendencia a adquirir el goce

pleno de los derechos de la ciudadanía. La argumentación se deriva de la forma de

pensamiento, las costumbres y principalmente el aspecto de la clase social de los judíos con

respecto a los de raza “pura” que eran muy pobres.

Por otro lado, Hitler menciona que ante todo debe existir un determinante al momento de

lograr un objetivo, esto es, ser fiel a los ideales y lograr consolidar un Estado que pueda

limpiar las impurezas de una sociedad determinada por distintos grupos de poder

desestabilizador; en este sentido, surgen políticas por parte del nacional socialismo que

justamente pretenden erradicar estos grupos, con el objeto de permear la condición

existencial de la raza pura como una forma de poder salvar la condición deplorable de

humillación en Alemania.

“El sentimiento de justicia social que en alguna forma existe latente en todo ario, sabe

el judío aleccionarlo, de modo infinitamente hábil, hacia el odio contra los mejor

situados, dándole así un sello ideológico absolutamente definido hacia la lucha contra

los males sociales. Así funda el judío la doctrina marxista. Presentando esta doctrina

como íntimamente ligada a una serie de justas exigencias sociales, favorece la

propagación de éstas y provoca, por el contrario, la resistencia de los bien

intencionados contra la realización de exigencias proclamadas en una forma y con

características tales, que ya desde un principio aparecen injustas y hasta imposibles

de ser cumplidas.”2

Fuente: Hitler, Adolf, Mein Kampf, s/editorial, 2013, pp.3-202

2 Ibid, p.93