Factores de Virulencia y Toxinas

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Factores de Virulencia y Toxinas Existen ciertas proteínas extracelulares producidas por patógenos que contribuyen al establecimiento y mantenimiento de la enfermedad. Estas proteínas, en su mayoría enzimas, se llaman factores de virulencia. La producción de esta enzima permite que estos organismos se diseminen a partir del foco primitivo. Dentro de las diferentes toxinas que pueden atacar el sistema inmunológico de un hospedador podemos encontrar las exotoxinas, que tiene la capacidad de viajar desde un foco infectivo a zonas alejadas del cuerpo y producir daños. La mayoría de las exotoxinas se encuentran en tres categorías: toxinas Citolíticas, toxina diftérica y toxinas del tétano y del botulismo. Por otra parte, también se encuentran las enterotoxinas, que no son más que exotoxinas que actúan sobre el intestino delgado causando habitualmente grandes secreciones masivas de líquidos en la luz intestinal provocando vómitos y diarrea. Por último tenemos las endotoxinas, en el caso de estas toxinas su síntoma universal es la fiebre puesto que la endotoxina estimula en la célula del hospedador la liberación de proteínas llamadas pirógenas endógenas, que afectan al centro termo regulador del cerebro.

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Factores de Virulencia y Toxinas

Existen ciertas proteínas extracelulares producidas por patógenos que

contribuyen al establecimiento y mantenimiento de la enfermedad. Estas

proteínas, en su mayoría enzimas, se llaman factores de virulencia. La producción

de esta enzima permite que estos organismos se diseminen a partir del foco

primitivo.

Dentro de las diferentes toxinas que pueden atacar el sistema inmunológico de un

hospedador podemos encontrar las exotoxinas, que tiene la capacidad de viajar

desde un foco infectivo a zonas alejadas del cuerpo y producir daños. La mayoría

de las exotoxinas se encuentran en tres categorías: toxinas Citolíticas, toxina

diftérica y toxinas del tétano y del botulismo.

Por otra parte, también se encuentran las enterotoxinas, que no son más que

exotoxinas que actúan sobre el intestino delgado causando habitualmente grandes

secreciones masivas de líquidos en la luz intestinal provocando vómitos y diarrea.

Por último tenemos las endotoxinas, en el caso de estas toxinas su síntoma

universal es la fiebre puesto que la endotoxina estimula en la célula del

hospedador la liberación de proteínas llamadas pirógenas endógenas, que afectan

al centro termo regulador del cerebro.