Flores para los Clutter.pdf

download Flores para los Clutter.pdf

of 3

Transcript of Flores para los Clutter.pdf

  • 06/03/13 Flores para los Clutter | Edicin impresa | EL PAS

    elpais.com/diario/2009/11/15/domingo/1258260758_850215.html 1/3

    VERNICA CALDERN 15 NOV 2009

    "Nancy Clutter era una

    chica muy especial",

    recuerda Robert Rupp,

    entonces novio de una de las

    vctimas

    En el pueblo se miraba con

    recelo al excntrico escritor

    y con menos simpata an

    su investigacin

    "Esas cosas no pasaban

    aqu. Nunca ha ocurrido

    algo similar, ni antes ni

    despus", comenta una de

    las vecinas

    Unos 700 kilmetros

    separan la tumba donde

    est enterrada la familia

    Clutter de las de sus

    REPORTAJE:A SANGRE FRA

    Flores para los ClutterHace 50 aos que Holcomb fue testigo del crimen que inspir al escritor Truman Capote para su obra

    maestra, 'A sangre fra'. El pueblo, enclavado en el corazn de EE UU, mantiene intacto el recuerdo

    de esa noche de 1959, en que cuatro disparos acabaron con seis vidas

    Archivado en: Truman CapoteTruman Capote Estados UnidosEstados Unidos AsesinatosAsesinatos DelitosDelitos SociedadSociedad JusticiaJusticia

    A Robert Rupp le tiembla un poco la voz cuando habla de Nancy Clutter. "Era una chica muy

    especial... muy bonita, sabe?", recuerda. Fueron novios cuando l tena 17 aos, y ella, 16.

    "Estbamos juntos todo el tiempo", relata por telfono desde su hogar en Holcomb, Kansas

    (Estados Unidos). Hoy tiene 68 aos, y an transmite la ilusin juvenil que le uni a ella. La que

    rompieron dos convictos en libertad condicional la noche de noviembre de 1959 en que cuatro

    disparos acabaron con seis vidas. Perry Smith y Richard Hickock la mataron a ella, a sus

    padres, Herbert y Bonnie, y a su hermano menor, Kenyon. Robert fue el ltimo que los vio con

    vida. Los asesinatos inspiraron a Truman Capote para escribir su obra maestra, A sangre fra.

    Pero Robert -Bobby para Capote- no ha ledo el libro. No le interesa, comenta. "Pasaron aos

    en que slo pensaba en ellos, todo el tiempo, todos los das", recuerda. Sus cadveres fueron

    hallados la maana del 15 de noviembre de 1959. Hoy hace 50 aos. Tambin era un

    domingo.

    Desde su publicacin en 1965, A sangre fra se convirti en un xito.

    La novela ha sido traducida a decenas de idiomas y es considerada

    como una pionera en el gnero de no ficcin. El escenario de la

    tragedia descrita por Capote no poda ser ms emblemtico del

    american way of life. Los campos dorados de Kansas son uno de

    sus estereotipos, y no es exagerado decir que es "el corazn de

    Estados Unidos", como dice su lema. El hogar de Dorothy, la herona

    de El mago de Oz, se enclava justo en el centro del pas

    norteamericano. Unos 2.600 kilmetros le separan tanto del ocano

    Atlntico como del Pacfico.

    Hasta 1959, Holcomb era un pueblo annimo. Pese a la posterior

    fama derivada de la novela de Capote, los crmenes apenas se

    asomaron en los titulares en su momento. El relato ocup una

    anodina columna en la pgina 39 de The New York Times del da

    siguiente. "Asesinados un granjero adinerado y tres miembros de su

    familia", reza el titular. "Fueron muertos a tiros de escopeta". "Las

    lneas de telfono estaban cortadas". "Los cuerpos fueron hallados

    por dos amigas de la hija". 283 palabras que describen, escuetas, la

    tragedia que cambi al pueblo para siempre.

    "Esas cosas no pasaban aqu, no en Holcomb", recuerda Dolores

    Hope, que trabajaba en el peridico de la comunidad, The Garden

    City Telegram, en el momento de los asesinatos. "Nunca ha ocurrido

    algo similar, ni antes ni despus", comenta por telfono. "Herbert era

    un lder en nuestra comunidad, su muerte y la de su familia causaron

    DOMINGO, 15 de noviembre de 2009

    ARCHIVOEDICIN

    IMPRESA

  • 06/03/13 Flores para los Clutter | Edicin impresa | EL PAS

    elpais.com/diario/2009/11/15/domingo/1258260758_850215.html 2/3

    asesinos una herida muy profunda". El presidente Dwight Eisenhower habanombrado al jefe de la familia Clutter miembro del Fondo Federal de

    Crditos Agrcolas (Federal Farm Credit Board), aunque nunca vivi

    en Washington. "Era un seor respetable... era una muy buena familia", comenta Dolores. Ella y

    su esposo, Clifford, fueron anfitriones de varias cenas con Capote y su compaera de viaje,

    Harper Lee, durante la investigacin de lo que inicialmente era una serie de reportajes para la

    revista New Yorker. "Eran amigos de la infancia y formaban una pareja rara... muy rara, pero

    muy simptica", relata. Los Hope, segn cuenta Dolores, guardan un recuerdo entraable de

    Capote: "Era un excelente conversador, muy gracioso". Eso s, Hope destaca que fue Harper

    Lee la que ayud a romper el hielo. Dos intelectuales neoyorquinos no eran precisamente los

    invitados habituales de las familias conservadoras de la rural Kansas. Dolores se deshace en

    elogios para Lee. "Es encantadora, se hizo amiga de todas las esposas del pueblo". Lee y

    Capote fueron invitados a la cena de Navidad del matrimonio Hope. Y algo de aquella amistad

    ha subsistido hasta el da de hoy. Dolores afirma que an mantiene contacto con la autora de

    Matar a un ruiseor.

    Aun as, en Holcomb se miraba con recelo al excntrico escritor y con todava menos simpata

    a su investigacin. "Algunas personas estaban en contra de que escribiera sobre los crmenes,

    les pareca que faltaba al respeto de los muertos", comenta. Tampoco ayud el hecho de que

    el relato se concentrara en los asesinos y no en la familia Clutter. "Muchos en Holcomb

    pensaron que se haba aprovechado de su dolor", explica. Capote, segn un artculo de The

    New York Times fechado en 1965, cobr unos dos millones de dlares por la publicacin.

    La tragedia dej un profundo rastro de dolor en el pequeo pueblo. Tan honda era la herida

    que durante dcadas no existi un solo recuerdo dedicado a la familia, pese a que mantena

    una notable participacin en su comunidad y en actividades benficas. No hace ni dos meses

    que fue inaugurada una placa en su memoria en el parque del pueblo. La idea vino de Robert;

    su esposa, Colleen, y otros amigos de la familia. "No tiene nada que ver con el libro", subraya

    Rupp. Las dos hermanas supervivientes, Beverly y Eveanna, ahora rozan los 70 aos y evitan a

    los medios de comunicacin. Se sabe muy poco de ellas. Eveanna, que ya estaba casada en

    el momento de los asesinatos, vive en Illinois. Beverly, entonces una estudiante en la

    Universidad de Kansas, se cas con Vere English apenas unas semanas despus del funeral

    de su familia y actualmente vive en Newton, a unos 340 kilmetros de Holcomb. "Ellas piensan

    que Capote no hizo justicia a su familia", explica Jerry Roth, miembro del comit que organiz

    el homenaje a la familia Clutter y amigo de Nancy y Kenyon. "Ojal nunca lo hubiera escrito",

    declar a Associated Press la nuera de uno de los hermanos de Herbert Clutter, Shirley, uno

    de los contados miembros de la familia que ha accedido a conversar con la prensa.

    Incluso algunos no entienden el inters mundial por los crmenes y la novela. "Es slo un libro

    sobre un asesinato en un pueblo pequeo", recuerda el abogado Duane West, el fiscal del

    juicio contra los dos asesinos, que termin por condenarles a muerte. El hotel Wheat Land, en

    la cercana localidad de Garden City (a 10 kilmetros de Holcomb), apenas dedica una mencin

    a que fue ah donde Capote se hosped durante su investigacin. Un editorial publicado en

    The Garden City Telegram en 1960, al inicio del proceso contra Smith y Hickock, alega:

    "Desde el asesinato de la familia Clutter han ocurrido muchos crmenes similares en todo el

    pas. Este juicio no es ms que uno de tantos que la gente lee y se olvida". Muchos en

    Holcomb an comparten esa idea. Llama ms la atencin recibir una llamada tan lejana que el

    relato de las muertes en s. "Ah... sobre los Clutter... a la gente no le gusta hablar mucho del

    tema", explica Robin, una secretaria de la oficina del Ayuntamiento. El alcalde, Greg Cox,

    aade que "hay muchas personas que conocan a los Clutter personalmente. Para ellos no es

    una novela, es una tragedia que marc sus vidas". La pequea biblioteca de Holcomb guarda

    ocho copias de A sangre fra, pero son pocos los que en el pueblo han ledo el libro. Durante

    muchos aos, la novela era sealada como la culpable de que no cerraran las heridas y la

    causa de la no siempre bienvenida visita de turistas, explica Cox. No obstante, hay quienes

    defienden el trabajo del autor. "Un escritor decide qu es lo que necesita su relato", comenta

    Clifford Hope, esposo de Dolores y abogado de la familia asesinada. "Creo que l [Capote]

    hizo un retrato justo de los Clutter". Su esposa coincide: "Es un libro estupendo". Aun as,

  • 06/03/13 Flores para los Clutter | Edicin impresa | EL PAS

    elpais.com/diario/2009/11/15/domingo/1258260758_850215.html 3/3

    Capote no es un personaje popular en el pueblo. El autor nunca se libr de las acusaciones de

    que simpatizaba con los asesinos y que incluso mantuvo una relacin personal con uno de

    ellos, Perry Smith.

    El diario Wichita Eagle realiz un sondeo en todo el Estado para medir el impacto de los

    crmenes. "Fue un momento crucial para la gente de Kansas. Fue a partir de ah cuando se

    comenz a echar la cerradura y a sospechar de cualquier extrao", describe la periodista

    Beccy Tanner. Holcomb no es el mismo pueblo que Capote conoci, aade su alcalde.

    Apenas sumaba unos 260 habitantes en 1960 y ahora roza los 2.000. Adems, Kansas es

    considerado uno de los Estados con mayor diversidad tnica. Una cuarta parte de su poblacin

    es de origen latinoamericano. Y el escenario del crimen, la finca de los Clutter, es el hogar de

    Leonard y Donna Malder. Los Malder compraron la propiedad en 1990 para contar con un sitio

    grande en el que recibir a sus seis hijos y sus cerca de 20 nietos.

    Pero el recuerdo de esa noche aciaga no se apaga. Los protagonistas de la historia descansan

    entre el paisaje rural que Capote describi con tanta meticulosidad y que haca parecer tan

    extrao que un crimen tan horrendo hubiese ocurrido ah. Los Clutter fueron enterrados en el

    cementerio Valley View, en Garden City. Robert Rupp cuenta que acude cada ao para llevar

    un ramo de flores. "Lo har hasta que muera", relata. Su tono es dulce cuando recuerda a

    Nancy y su familia, y rehsa dedicar una sola palabra a los asesinos. "Nunca quise tener nada

    que ver con eso", afirma. Unos 700 kilmetros separan la tumba de los Clutter de las de sus

    verdugos. Despus de morir ejecutados en la horca en abril de 1965, Perry Smith y Richard

    Hickock fueron enterrados en el cementerio Mount Muncie, en Lansing (Kansas). Las

    autoridades penitenciarias afirman que entre 10 y 15 personas visitan sus tumbas cada da. Y

    que tambin ha habido das en que alguien les ha llevado alguna flor.

    EDICIONES EL PAS, S.L.