Foroesther y nuestro mundo
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Transcript of Foroesther y nuestro mundo
INDICE DE CONTENIDOS
-Hoy presentamos… Las Ilustraciones de Mariza…………………………………............................pág. 3
-El Ateneu de Barcelona con el XVII Salón Del Manga………………………………………….…..pág. 4
-La Historia en Cómic de un Sentimiento……………………………………………………..………pág. 6
-Manualidades…………………………………………………………………………………...…….pág. 12
-La Biblioteca…………………………………………………………………………………………..pág. 14
-El Fin de Bruguera (y III)…………………………………………………………………..………..pág. 16
-Nocturna (cómic)……………………………………………………………………………………..pág. 34
-El Manga a veces me dice… …………………………………………………………………………pág. 54
-2º Salón del Cómic Social…………………………………………………………………….………pág. 55
-Cocina con Riesgo…………………………………………………………………………………..pág. 58
-Tres Grandes Genios de Bruguera…………………………………………………………………..pág. 60
-Blazing Combat, de Archie Goodwig……………………………………………………………..pág. 70
-Desde el Taburete del Wimpy……………………………………………………………………….pág. 72
-Pasatiempos…………………………………………………………………………………………..pág. 74
Hoy presentamos… las Ilustraciones de Mariza
A Marisa puede que no la conozcan en
España entera, pero los que la
conocemos, sabemos de su arte gracias a
su divertido blog:
(http://cajondesaztre.blogspot.com/),
y algunas muestras de su afición a
recrear recortables “a medida”. Según
ella misma, ya nació con un lápiz en la
mano, ya que desde bien pequeña el
dibujo ha sido su entretenimiento
favorito. Asegura que todos sus apuntes
los tiene llenitos de dibujos porque el
hecho de dibujar mientras se encuentra
en una reunión aburrida aburrida la
ayuda a concentrarse en lo que se está
diciendo. Otras veces, el dibujar le
proporciona la evasión de la rutina o de
los problemas que pueda tener.
Se considera autodidacta. “Lo poco que
sé lo he ido descubriendo poco a poco,
observando dibujos que me gustaban y
probando luego hasta llegar lo más
cerca posible a lo que buscaba”,
asegura. Y aunque ha probado con varios
materiales diferentes, es con los lápices
de colores con lo que se encuentra más
cómoda.
Donde se mueve como pez en el agua, es
en la confección de recortables, y entre
ellos abundan los que tienen como
modelo las muñecas que la han
acompañado durante la infancia o
aquellas que más le han llamado la
atención. También adora realizar
recortables-caricaturas o personajes
inventados.
En el mundo de la ilustración y el dibujo,
se siente cautivada por la fuerza de los
bocetos de Miguel Ángel o la perfección
de Leonardo. Como ilustradores admira a
Edmond Dulac o Benjamin Lacombe,
aunque no son los únicos. Si es del
cómic de lo que se habla, se queda
definitivamente con Purita Campos,
René Goscinny, Quino y con el genial
Ibáñez.
Nosotros, de momento, nos quedamos
con una breve muestra de su trabajo y
animamos a todos esos artistas ahí fuera
a que nos hagan llegar sus muestras si
desean verlas publicadas en esta revista.
Recordad que para ello tenemos el
siguiente email a vuestra disposición:
[email protected] y con
mucho gusto reproduciremos vuestros
trabajos en estas páginas.
EL ATENEU BARCELONÈS COLABORA CON EL
XVII SALÓN DEL MANGA
El XVII SALÓN DEL MANGA incorpora
como colaboradores al Ateneu Barcelonès y a
la Associació d’Art, Cultura i Ciència -AACC-,
participando con la organización de actividades
paralelas del Salón. En la sede del Ateneu se
están celebrando una serie de conferencias
relacionadas con la cultura y la sociedad japonesa,
que tratan el mundo del manga y su influencia.
El martes 18 de octubre, a las 19.30 h en la sala
Pompeu i Fabra del Ateneu Barcelonès (Canuda,
6, 08002 Barcelona) tendrá lugar la tertulia-cena:
Manga, el cómic que ha cambiado la manera de
explicar historias, a cargo de Santi Casas,
ilustrador y coordinador de Ikari Studio. Es
profesor de proyectos, ilustrador y coordinador de
cursos a la Escuela de Cómic Joso de Barcelona.
La tertulia quiere poner sobre la mesa cuáles son
los rasgos diferenciales que han llevado al manga
a salir de sus fronteras y convertirse en un
fenómeno global que ha llevado miles de nuevos
lectores al cómic, espectadores al cine y
aficionados a los videojuegos y muchas otras
formas de ocio que comparten el nexo común en
su influencia del cómic japonés.
A la semana siguiente, el miércoles 26 de
octubre y a las 19.30 h en la sala de Actos del
Ateneu Barcelonès se presentará la conferencia:
Tatsumi y Taniguchi. Reflexiones dibujadas de
la sociedad japonesa, a cargo del director del
Salón del Manga, Carles Santamaria. En esta
charla se hablará de trayectoria de dos maestros
del manga como Yoshihiro Tatsumi y Jiro
Taniguchi.
Estas actividades están incluidas en el ciclo
Interrelación de culturas y visiones del mundo.
Japón-Catalunya, miradas cruzadas, coordinado
por Toni Rodríguez Yuste, ponente de Artes
Plásticas del Ateneu Barcelonès, y socia
fundadora de la Associació d’Art, Cultura i
Ciència –AACC-. Este ciclo pretende mostrar una
visión de la realidad intercultural entre Japón y
Catalunya para promover el conocimiento entre
las diferentes culturas que tanto se influyen
mutuamente en su historia, la cultura y el arte.
El XVII SALÓN DEL MANGA, que se
celebrará del sábado 29 de octubre al martes 1 de
noviembre, repetirá los tres recintos de las últimas
ediciones. La Farga de L’Hospitalet acogerá a
las empresas expositoras además de los espacios
dedicados a videojuegos, talleres de juegos
tradicionales y de manga, sala de exposiciones,
clases de japonés, conferencias y mesas redondas.
En el Poliesportiu del Centre tendrán lugar los
concursos de karaoke, cosplay y World Cosplay
Summit, además de las actuaciones musicales. Y
en la Sala Barradas se podrán seguir las
proyecciones de películas y series. Estos tres
espacios, muy próximos entre sí, estarán
comunicados por un servicio gratuito de autobús.
Tomás Pardo
PRESENTACION DE BORRA
Queridos amigos,
Como muchos de vosotros ya sabéis, LuisD (Luis Domínguez y para los que vivimos con él, Luis a secas)
ha publicado recientemente su novela gráfica"borra" con Ediciones La Cúpula.
Quiero invitaros a la presentación del mismo a cargo del propio autor, así como de Hernán Migoya y J.M.
Berenguer.
CUANDO. 29 de septiembre, jueves
DÓNDE. Librería Pictográfics
C/ Bertrellans, 5.
Barcelona
LA HISTORIA EN CÓMIC DE UN
SENTIMIENTO
Por Geno Mesa
Desde que el cómic es cómic, allá por principios
del siglo XIX, ha tocado todas las temáticas
posibles e imaginables, e incluso alguna que
podría parecer inimaginable.
Cómo no, los deportes han formado parte de toda
clase de argumentos y destacando entre ellos, el
fútbol, no en vano llamado deporte rey. No solo
aparece como tema recurrente en multitud de
historietas con los más dispares jugadores sino
que también ha llegado a convertirse en tema
central de las más variopintas aventuras. No
olvidemos, por ejemplo, que uno de los
compañeros infatigables en las andanzas de los
gemelos Zipi y Zape era un balón de fútbol y que
a la mínima montaban unas porterías para jugar al
balompié, lo mismo daba solos que con sus
compañeros.
O, sin ir más lejos, en esta disciplina encontramos
la mayor pasión de Juanito, uno de los principales
protagonistas de las historias de Esther y su
mundo, que sueña con llegar a convertirse en una
gran estrella futbolística.
Y es tanto el impacto que el cómic tiene entre los
lectores que incluso clubes futboleros reales y de
renombre han trasladado su vida a páginas
plagadas de viñetas que recrean momentos
significativos de su historia. Entre dichos clubes
podemos nombrar al Atlético de Madrid, al F.C.
Barcelona e incluso a la Selección Española, hoy
en día Campeona del Mundo.
Un club un tanto más modesto que los nombrados
anteriormente es el Real Sporting de Gijón que
también ha llevado su historia al tebeo.
Tras un pequeño prólogo escrito por su presidente
Manuel Vega-Arango, en la primera viñeta nos
encontramos en los aledaños del Estadio de El
Molinón minutos antes de que el 16 de junio de
2008 se empezara a jugar contra el Eibar el
partido que devolvería al equipo a primera
división tras diez años en la categoría de plata.
Los jugadores saltan al campo, la grada grita
enfervorizada y con el pitido inicial las
ilustraciones nos trasladan al año 1901 en el que
un grupo de muchachos encabezado por Anselmo
López que le daban al balón en la arena de la
playa de San Lorenzo van sentando las bases de lo
que en 1905 llegaría a ser el primer equipo oficial
de fútbol de la ciudad.
Son muchos los obstáculos que deben afrontar:
grandes partidos y otros no tan grandes, la
habilitación de un estadio que casi los lleva a la
ruina, su posterior incendio y la llegada de la
Guerra Civil que todo lo paraliza.
En 1944 el Sporting llega a la máxima categoría y
es recibido en Gijón cual héroe. Y en el 2008 el
partido con el primer gol del equipo local, llega al
descanso.
Con el inicio del segundo tiempo reanudamos la
historia con varios altibajos en la clasificación y
en la categoría hasta la llegada de Enrique
Castro “Quini”. La creación de la Escuela de
Mareo, una época de grandes resultados
ensombrecida por el secuestro de Quini aunque en
aquellos tiempos formara parte del Barça, son
eventos que nos acercan cada vez más al
centenario del Club.
Y llegamos a la temporada 1997-1998 en la que el
equipo desciende a la segunda división. Leyes
concursales, amenazas de desaparición,
entrenadores y jugadores que van y vienen…
hasta que llega el técnico Manolo Preciado con el
convencimiento de que el club ascendería, cosa
que sucede tras unos años de lucha.
El cómic pone punto y final, tras 48 páginas a
todo color, con el segundo gol del Sporting en
aquella tarde del 2008 y con la gran fiesta que se
desata después por toda la ciudad vestida de
rojiblanco, los colores del equipo.
El artífice de todo esto, tanto guión como dibujos,
es el Licenciado en Bellas Artes Isaac M. Del
Rivero, natural de Gijón y que actualmente ejerce
como profesor de dibujo en un instituto de
secundaria de la ciudad, actividad que compagina
con la de ilustrador y dibujante de cómics. Para
este proyecto en concreto ha contado con el
asesoramiento de José Luis Rubiera, jefe de
prensa del Sporting.
Sus creaciones se han publicado en periódicos
como La Voz de Asturias, El Comercio o Ya y ha
trabajado entre otras, para la revista Eureka de la
editorial italiana Como. También ha colaborado
con Marvel en publicaciones como The Punisher,
Planeta para la que dibuja un par de capítulos de
Conan y la serie Las guerras del purgatorio y la
adaptación de Carmilla para Dude.
Para la revista Tapón de la Caja de Ahorros de
Asturias crea las aventuras de El Magu Xuan
Tizón (El Mago Juan Tizón).
Hace unos años la Autoridad Portuaria de Gijón
reclama sus servicios y crea para ellos el cómic La
historia del Puerto de Gijón, El Musel 1907 y
diseña a Muselín, la mascota del Puerto. Para este
y otros proyectos ha contado con la colaboración
de sus hijas Lara y Elena Del Rivero Fernández,
ambas licenciadas en Bellas Artes y que además,
han realizado una exposición conjunta de dibujo y
fotografía titulada A flor de piel.
Del Rivero también ha hecho adaptaciones al
cómic como la de la novela La aldea perdida de
Armando Palacio Valdés por petición del
Ayuntamiento de Laviana o las ilustraciones del
libro The cup in the forest de Anne Collins.
También podemos tropezarnos con su trabajo en
publicidad, video-juegos, story boards o
televisión.
MANUALIDADES A TODO RIESGO
Por Susana Riesgo
MONEDERO RETRO
Materiales: Cinta de música, monedero de clic, tetrabrik de 250 ml., sierra de metal, alicates,
cinta aislante, destornillador de precisión, alicates y pegamento instantáneo.
Empezamos quitando los tornillos de la cinta de música. Una vez abierta le sacamos todo el
interior y con la ayuda de la sierra de metal, le cortamos todos los salientes que tienen en el
interior, de manera que la dejamos lo más plana posible. Desmontamos el monedero y
cortamos el cierre de manera que nos quede como en la foto.
Cortamos el tetrabrik a la mitad y seguimos trabajando con un trozo que mida unos dos
centímetros más que la cinta. Lo doblamos por los lados para que quede del ancho del cierre
del monedero y le recortamos la parte delantera para hacer una especie de tapeta. Doblamos
esta y la fijamos en esa posición con cinta aislante negra. Así obtenemos el bolsillo de
nuestro monedero retro. Con un poco de cinta aislante, forramos los laterales y ambas caras
para que el acabado sea mucho mejor.
Sujetamos una parte del cierre a cada una de las caras de la cinta. La fijaremos con la ayuda
de unos alicates y unas gotas de pegamento. Unimos el exterior al interior con la ayuda de las
pletinas del cierre y con otro poco de pegamento.
Por el lado opuesto al cierre le ponemos unos trozos de cinta aislante para "hacer" la bisagra
del monedero. Rematamos con otro trozo en el otro sentido para darle más resistencia y
perforamos la cinta con el destornillador para respetar sus característicos agujeros. Para
finalizar, empapamos un algodón en alcohol y quitamos los restos de la etiqueta de la cinta.
SUGERENCIA: Si no somos muy manitas, siempre se puede comprar un monedero plano,
rectangular y de un tamaño aproximado al cassette. Con la cinta desmontada, solamente
tendremos que pegar a cada cara del monedero, una de las mitades de la cinta.
LA BIBLIOTECA
Por Darthpitufina
Si buscas libros impredecibles, éste es tu
libro. Mientras lees 1Q84, las ideas
reinciden como gotas de lluvia calando
sobre tu juicio, pero nunca sabes lo que te
encontrarás en la página siguiente. En la
contraportada, nos explican que en
japonés, la letra q y el número 9 son
homófonos, los dos se pronuncian “kyu”,
de manera que 1Q84 es, sin serlo, 1984.
Al comienzo del libro nos presentan a
Aomame, una resuelta mujer en pleno
atasco que llega tarde a una cita. El taxista
que la lleva le sugiere que utilice unas
escaleras de emergencia de la autopista
metropolitana, (escaleras que no se utilizan
de forma habitual). Aomame, como Alicia
en la madriguera, decide utilizarlas. El
insólito chófer del taxi le indica, mientras
Aomame camina por la autopista para
dirigirse a las escaleras subterráneas, que
las apariencias engañan. Esta frase supone
un axioma a lo largo de todo el libro. A
partir de ahí, Aomame notará algunos
cambios en su mundo – algunos de poco
impacto en su vida, como por ejemplo,
notar que los uniformes policiales son
distintos (y que se modificaron hace años,
aunque ella no se ha dado cuenta antes) y
otros un poco más preocupantes, como
advertir dos lunas en el cielo. Llegará a
pensar que su vida no transcurre en el
mundo que ella conocía; parece que ese
mundo se ha desvanecido, y otro mundo
distinto lo sustituye. Ella decide que su
vida ahora no está transcurriendo en 1984
si no en un mundo paralelo, en 1Q84.
Entrelazado a la trama también tenemos a
un insignificante profesor de matemáticas,
Tengo, aspirante a novelista. Tengo se ve
infiltrado en un oscuro enredo editorial,
puesto que su editor le obliga a corregir
una obra, La crisálida de aire, a fin de
presentarlo en un concurso de prestigio
nacional. La autora del libro, Eriko
Fukaeri, es una extraña adolescente, que
apenas ha ido al colegio. Tengo termina
aceptando el encargo, y una vez que el
libro se convierte en un best seller, Fukaeri
desaparece, causando un revuelo
periodístico en contra de los intereses de
Tengo, que no desea que se sepa su
relación con la obra ni con la autora…
Habrá más alteraciones en la antes apacible
vida de Tengo; su amante (que está casada)
no se presenta a su cita habitual, y
posteriormente Tengo recibe una llamada
del marido, informándole de que no la va a
ver nunca más. Para más inri, una ignota
organización le plantea dotarle de una
jugosa subvención, aunque Tengo todavía
no ha publicado ninguna de sus novelas.
¿Acaso sabe la organización que él es
quien reescribió La crisálida de aire?
Al principio no parece que ninguno de los
dos personajes principales de 1Q84 tengan
algo en común, pero por supuesto, a
medida que avanza la trama,
encontraremos los lazos que ligan a ambos.
Sabremos que Tengo y Aomame se
conocían en su infancia. Una comuna
agrícola que se escinde en dos bandos, un
colectivo revolucionario violento y una
organización religiosa, es otro de los
vínculos comunes. También a lo largo de
ambas historias, nos preguntaremos
quiénes son y qué hacen la “Little People”.
El maltrato físico y psicológico, la
corrupción y los largos brazos del poder
son algunos de los temas que Haruki
Murakami desarrolla con brillantez a través
de esta novela absorbente, en la debemos
recordar que nada es lo que parece.
1Q84 es una novela de la que no separarás
tus ojos hasta que la termines. Escrita de
forma sencilla, nos invita sin embargo a
reflexionar sobre cuestiones
tremendamente actuales, con un soberbio
trasfondo cultural; Chéjov, Orwell,
Janácek, Dowland, Armstrong…
Haruki Murakami se hizo célebre en
España gracias a Kafka en la orilla, un
libro distinto a todo lo que nos tenía
acostumbrados el mundo editorial y
altamente recomendable. Al igual que en
1Q84, la narración no resulta obvia y de
forma surrealista y al mismo tiempo
cómica, nos introduce en una atmósfera en
la que el anhelo del amor y la soledad
queda reflejado de forma magistral. En
Japón muchos críticos eminentes le han
tachado de literato pop. Murakami también
es el autor de Tokio Blues, Crónica del
pájaro que da cuerda al mundo y After
Dark.
EL FIN DE BRUGUERA (y III)
Por Peúbe
En el último número de Foroesther
comentamos de pasada que
profundizaríamos en la difícil relación que
hubo entre Víctor Mora, creador del
Capitán Trueno, el Jabato, el Corsario de
Hierro, etc., y la editorial. Antes de entrar
en materia, haremos un breve repaso de
las trayectorias de estos tres personajes.
El Capitán Trueno surgió durante la
década de los 50, momento en el que el
formato de cuadernillo de aventuras era un
área que Bruguera todavía no dominaba a
pesar de haber conseguido notables éxitos
con Inspector Dan (1951-1954) y El
Cachorro (1951-1959). Según el jefe de
producción de la editorial, Guillem
Molinas, la idea del nuevo personaje surgió
de Rafael González (director editorial) y
Francisco Bruguera (editor) para
competir con el Caballero del Antifaz,
tras lo que decidieron encargárselo a
Víctor Mora. El escritor sin embargo
asegura que él presentó una sinopsis de dos
páginas y el nombre, que fueron aceptados.
El magnífico dibujante Ambrós se encargó
de ilustrar el primer cuadernillo, con guión
de Mora pero firmado como Víctor
Alcázar, puesto a la venta en 1956.
En cualquier caso la serie se convirtió en
un tremendo éxito llegando a vender en
poco tiempo unos 350.000 ejemplares por
número. La serie pasó inmediatamente de
quincenal a semanal (en el número 22) con
lo que Ambrós se vio obligado a contar
con Beaumont como entintador durante
los siguientes 130 cuadernillos (de las 618
entregas que llegó a tener la colección).
Pronto el personaje pasó a protagonizar la
doble página central de Pulgarcito desde
el número 1317 hasta el 1600 (1956-1962),
mientras que al año siguiente se inició la
reedición de los primeros números con un
aumento de precio (de 1,25 Ptas. a 1,50
Ptas.). El éxito de la serie continuó
imparable y llevó a Bruguera a crear en
1960 la revista semanal Capitán Trueno
Extra (427 números, sin contar
extraordinarios, hasta 1968), y en 1964 a
publicar la revista mensual Álbum
Gigante Capitán Trueno donde se
retocaron y censuraron los cuadernillos
originales. La estrella del Capitán Trueno
acabó en 1968, tras doce años de continuo
fenómeno editorial (con sus más y sus
menos de censura, las "cabezas
recortadas", etc.)
En las imágenes de la página anterior lo que Víctor Mora
tiene en común con Jack Kirby: los dos copiaban del
Príncipe
Valiente de Harold Foster. El primer encuentro entre el
Capitán Trueno y Goliath
recuerda inevitablemente al encuentro entre Val y Arn.
Hay bastantes más escenas
similares entre ambas historietas (Que me perdonen los
integristas de las buenas
ediciones por estos escaneados)
En 1958 se decidió imitar este primer éxito
con una colección similar, El Jabato,
escrita por Víctor Mora de nuevo, esta vez
con el seudónimo de R. Martín, y
contando con los dibujos de Francisco
Darnís. La colección tuvo un éxito
parecido pero inferior (381 cuadernillos),
llegando a publicarse sus aventuras en
otras revistas como Ven y Ven, El
Campeón, Suplemento de Historietas de
El DDT, El Jabato Extra, etc. hasta dar
por terminadas sus aventuras en 1966,
poco antes de la muerte de su creador
gráfico.
En 1970, Mora y Ambrós, pese a sus
diferencias con Bruguera (consideraban
que sus antiguas series daban unas
ganancias a la editorial que no revertían en
sus propios bolsillos), decidieron volver a
unirse para intentar repetir el éxito del
Capitán Trueno creando un personaje para
la nueva revista semanal Mortadelo: El
Corsario de Hierro. Aunque su difusión
no fue comparable a la de los dos
anteriores personajes (la variedad de ocio
no era la misma que en los años 50) el
personaje caló entre los lectores. En 1979,
en el número 463 de Mortadelo, Mora
decidió dejar de escribir al personaje,
seguramente al descubrir que la editorial
está hablando sobre adaptar al cine al
Capitán Trueno… sin contar con él.
Primer recopilatorio de la colección
Resulta que en 1979 el director de cine
valenciano Juan Piquer Simón
(Supersonicman, 1979) estuvo hablando
con productoras americanas para llevar a
cabo una adaptación al cine del Capitán
Trueno. Con un guión terminado y con el
actor protagonista elegido (Michael Paré),
el proyecto acabó en nada por culpa de su
elevado presupuesto. Mientras Bruguera
mantenía las negociaciones sobre la
película, tanto Mora como cualquier
dibujante fueron apartados del proyecto, lo
que enfureció al escritor.
Michael Paré en Calles de Fuego (1984)
En todos los temas de derechos de autor
que busquemos siempre comprobamos que
la relación entre el autor de cómics que
reivindica su autoría y las adaptaciones al
cine es muy estrecha. Al año siguiente,
Víctor Mora demandó a la editorial
solicitando el reconocimiento de creador
por los personajes que ideó para la editorial
y 5 millones de pesetas por el impago de
sus derechos de autor. Según comentó
Mora, mientras se encontraba exiliado en
París recibió sólo un 0,05% de los
ingresos, mientras que después de
oponerse al intento frustrado de película
llegó a cobrar incluso menos. Bruguera no
se presentó al acto de conciliación previo a
la demanda.
La vista oral tuvo lugar en diciembre de
1981. Mora reclamó la autoría de sus
guiones mostrando como pruebas diversas
publicaciones especializadas españolas y
extranjeras en las que se afirmaba que él
era el creador de las series y a las cuáles
Bruguera nunca corrigió esas afirmaciones.
Entre otras pruebas presentó la
Enciclopedia Mundial del Cómic editada
en Nueva York, la Gran Enciclopedia
Catalana y la Enciclopedia de la
Literatura Catalana, así como la revista
interna de Bruguera, Nosotros, donde su
nombre aparece como el autor de los textos
que ahora reivindicaba.
Por su parte, la defensa de la editorial
consistió en negar la autoría de Víctor
Mora, pero sin proponer a otro escritor
alternativo como autor de esos guiones.
El creador gráfico del personaje, Ambrós,
envió una carta en la que compartió su
extrañeza de que se dudase de la autoría de
Mora, sentimiento que compartían el PEN
Club catalán y la Asociación de
Escritores en Lengua Catalana.
Víctor Mora en 1986, en una entrevista del primer número de Aventuras Bizarras
En octubre de 1982, sin que hubiese
terminado el juicio anterior, Mora vuelve a
demandar a Bruguera por reeditar obras
suyas, en esta ocasión el Corsario de
Hierro, sin su permiso y sin pagarle
ninguna compensación económica. Si antes
recibía un miserable 0,05%, a partir del
juicio de 1980 Bruguera decidió no darle
ninguna cantidad. Es más, a modo de
revancha, en 1981 la editorial había
decidido sin ningún motivo dejar de
publicar más historias del Corsario de
Hierro en la revista Mortadelo.
En medio de esta situación de
desencuentros, Mora y Ambrós realizaron
la conocida historia corta "El adivino de
los ojos muertos" para el Historia de los
Cómics #18 de Toutain en 1983, en la que
por primera vez aparecen el Capitán y
Sigrid compartiendo lecho conyugal. La
historieta es excepcional también por ser el
último cómic dibujado por Ambrós, que en
1981 había decidido jubilarse por
problemas de salud.
Una de las ocho páginas de "El adivino de los ojos
muertos"
Se empezó a hablar de nuevo sobre una
película del Capitán Trueno en 1984, esta
vez con el apoyo y un guión de Víctor
Mora… en el caso de que la editorial y el
autor llegasen a un acuerdo sobre los
derechos de autor del escritor. Atentos al
actor que proponía Mora para interpretar a
Goliath: Bud Spencer.
Guión de Víctor Mora. El Capitán Trueno se enfrenta a un
extraterrestre llamado King Terror
En 1985 Víctor Mora denunció en una
carta a El País que se estaban vendiendo
en las librerías reediciones ilegales del
Capitán Trueno y el Jabato, sin pie de
imprenta, número de registro legal ni
copyright. ¿Quién se encargó de editarlas,
Bruguera?
Por fin en 1985 Bruguera reconoce la
autoría de Víctor Mora y abre en 1986 una
colección que duraría sólo 13 números, El
Capitán Trueno, con nuevas aventuras
escritas por Mora y dibujadas por Jesús
Blasco con portadas de Luis Bermejo.
Con la quiebra de la editorial Mora firmó
un acuerdo con la editorial Planeta para
seguir publicando el personaje en esa
empresa en 1987, continuando las nuevas
aventuras empezadas en la anterior
colección. Estamos hablando de
Aventuras Bizarras Serie Roja, con un
gran rótulo de Capitán Trueno en portada.
El grupo Zeta, que acababa de comprar el
fondo editorial de Bruguera, sacó deprisa y
corriendo una reedición, El Capitán
Trueno Edición Histórica, para competir
con estas nuevas aventuras. Mientras que
el autor defendía poseer la autoría y la
propiedad intelectual del personaje, la
editorial se escudaba en que ella poseía la
marca industrial. Queda realmente feo
añadir que en la reedición de Ediciones B
no se mencionaban en ningún momento los
nombres de Mora ni Ambrós, sino que en
su lugar aparecía el texto “propiedad y
derechos reservados a favor de la
editorial”.
Sobre esta patética situación Víctor Mora
declaró: "No he autorizado la reedición de
las primeras aventuras de El capitán
Trueno, estoy en contra de ella y, desde
luego, me parece escandaloso que lo
publiquen sin poner el nombre de los
autores. Cuando Bruguera quebró yo tenía
nueve contratos firmados por la editorial y
rubricados por su abogado, según los
cuales, en el caso de que hubiera
incumplimiento de contrato, yo soy muy
libre de ir con mis personajes donde
quiera. Estos contratos, pues, defienden mi
propiedad comercial e intelectual. Lo que
tenía Bruguera y ahora tiene Zeta es la
marca industrial de El capitán Trueno y
creen que pueden editarlo así, pero es
inadmisible que no se citen los nombres de
Ambrós ni el mío; una cosa es que
Ediciones B haya heredado los fondos de
Bruguera y otra es que herede sus
procedimientos”.
Sin embargo, Mora esperaba una solución
pacífica al conflicto: "Por un lado", dijo,
"nosotros hemos interpuesto una demanda
para que la marca industrial revierta a
Ambrós y a mí, pero espero que haya una
solución pactada por la cual se citen
nuestros nombres en la reedición y se nos
paguen -a Ambrós y a mí- los derechos
debidos". A nivel editorial, Ediciones B no
quiso hacer declaraciones y Planeta-
Agostini se lavó las manos y esperó que
Mora solucionase sus problemas con la
editorial, aunque la colección Aventuras
Bizarras fue pronto cancelada a los 10
números.
En 1990 por fin editorial y autores llegaron
finalmente a un acuerdo que satisfizo a
ambas partes y Mora pudo volver a escribir
historias del personaje, en esta ocasión las
últimas, con dibujo del británico John M.
Burns: La reina bruja de Anubis (1991) y
El maleficio de las islas de viento (1993).
Apenas dos años después de recuperar
definitivamente estos derechos de autor,
Ambrós falleció a los 79 años después de
una larga enfermedad.
Una característica básica del Capitán Trueno es su ateísmo (dentro de los límites del franquismo):
ninguna fantasía mágica está permitida, todos los hechiceros son realmente charlatanes que se
aprovechan de la estupidez de los ignorantes. En sus últimos guiones, desde 1984, Víctor Mora
altera la naturaleza de la serie al añadir extraterrestres y personajes con poderes mágicos de
verdad, como en la historia recogida en este tomo
El año 1987 empezó tenso. Por un lado,
Víctor Mora publicaba las nuevas
aventuras del Capitán Trueno en la
editorial Planeta bajo el sello de Comics
Forum en la revista Aventuras Bizarras,
mientras que Ediciones B contraatacó
publicando El Capitán Trueno Edición
Histórica, una reedición semanal de
Trueno Color no autorizada por el
guionista en la que no se citaban los
nombres de Víctor Mora o Ambrós (en su
lugar venía “propiedad y derechos
reservados a favor de la editorial”). Los
contratos que Mora tenía con Bruguera
avalaban que él podía hacer lo que quisiese
con el personaje en el caso de que
Bruguera no los cumpliese, pero el grupo
Zeta había comprado la propiedad de la
cabecera y del fondo editorial. Mora
interpuso inmediatamente una demanda
contra Ediciones B para que la marca legal
regrese a Ambrós y él mismo.
Por otra parte, Ibáñez comenzó para
Grijalbo una nueva historieta de
Mortadelo y Filemón (“¡Terroristas!”) en
la revista Yo y Yo, mientras Ediciones B
publicaba en las recién estrenadas nuevas
cabeceras de Mortadelo, Mortadelo
Extra y Súper Mortadelo más historietas
de este personaje realizadas por un equipo
apócrifo. El grupo Zeta intentó contratar a
Ibáñez, pero éste rechazó la oferta ya que
se trataba del mismo trato que tenía en
Bruguera… y además le exigían que
retirase el juicio para la recuperación de la
propiedad de sus personajes. Ibáñez
declaró que se decidió a volver a dibujar a
sus detectives porque B “empezó a lanzar
nuevas historias de Mortadelo, dibujadas
por diversos chicos jóvenes, cuyo resultado
ya no tenía nada que ver con lo que yo
hacía. Por eso me decidí a volver a
dibujarlo, ya que el personaje me
pertenece”.
Ojito: el terrorista lleva una Z (grupo Z) bien visible en la frente.
Ibáñez en 1987 (La Vanguardia, 12/7/1987)
Así presentó Ibáñez la nueva revista. Volvemos a ver letras
Z (insistimos, grupo Z)
en el nazi del fondo. Parece difícil que Ediciones B reedite
estas imagines
Al mismo tiempo Ibáñez anunció dos
pleitos más: uno contra Ediciones B por
publicar antiguas historietas de Mortadelo
sin pagarle derechos de autor, y contra
Juan Bruguera por no pagarle los
royalties de las ventas de sus personajes en
Alemania.
Yo y Yo consistió en otra nueva revista
donde los “yo” a los que se refiere el título
eran evidentemente Mortadelo y Filemón.
El nombre de la cabecera era propiedad
legal del grupo Zeta, por lo que se optó
mejor por este otro título menos
conflictivo. La revista tenía como material
nacional únicamente las páginas de
Mortadelo de Ibáñez y las de Mirlowe de
Raf. Se canceló después de su número 6,
dejando inconclusa ¡Terroristas! en el
caso de Mortadelo, y Los soplagaitas para
Mirlowe. Por cierto, que Raf en Yo y Yo
no se cortaría un pelo al enfrentar a
Mirlowe y Violeta contra unos trasuntos
escoceses de sus personajes más famosos,
Sir Tim Mac Theo y Mac Patson.
Por su parte, en Ediciones B, los
colaboradores (guionistas, dibujantes, etc.)
por fin recuperaron todos sus pagos
atrasados durante los últimos años en
Bruguera. Sin embargo, al comienzo de la
nueva etapa todos ellos (excepto dos cuya
identidad es desconocida) se pusieron en
huelga durante dos semanas animados
posiblemente por Alfons López. Exigieron
el copyright de sus personajes, royalties y
un contrato de freelance, y ante la
necesidad de sacar varias revistas cada
semana la editorial finalmente acabó
cediendo a las peticiones.
Jan vuelve a dibujar a Superlópez dentro de Ediciones B
en su propia revista en 1987
Jan no da una puntada sin hilo: el comienzo de Al centro
de
la Tierra recuerda a la situación de Bruguera el año
anterior.
Una seta es el emblema de la nueva singladura: el grupo
Seta
B de Ediciones B, claro
En marzo de 1988 Ibáñez llegó por fin a
un acuerdo y empezó a dibujar a Mortadelo
y Filemón bajo el paraguas de Ediciones B
en el número 49 de la revista Mortadelo,
iniciando la historieta El huerto siniestro.
Víctor Mora tardaría algo más en
conseguir un trato aceptable con la nueva
editorial en 1990.
Entre los dibujantes más relevantes de esta
última etapa destacaron principalmente
Joaquín Cera, Juan Carlos Ramis y José
Luis Marco. Cera destacó con Pafman
(inicialmente una parodia de Batman) y el
Profesor Pacostein (una versión del
Doctor Slump de Akira Toriyama). Ramis
era sin duda el más prolífico de los tres, y
destacó por Estrellito Castro (un
astronauta con una pistola especial que
podía disparar cualquier objeto sujeto a un
muelle), Alfalfo Romeo (una maravillosa
historieta narrada sólo con rimas de cuatro
versos sobre los intentos del protagonista
de acabar junto a Julieta), Sporty (en un
principio un chaval obsesionado con el
deporte) y numerosas secciones de chistes
temáticos. Estos dos juntos crearon a los
Xunguis, unos extraterrestres de colores
que han servido para dos álbumes de
historietas y muchísimos libros del tipo
“¿Dónde está Wally?”. Por su parte,
Marco empezó en Garibolo con Torpón
de los monos y luego en Ediciones B se
encargaría de Jarry Jarrón (¿un
precedente de Blacksad?), Porrambo (una
divertidísima parodia de Rambo) y Radio
Guai! F. M. para la revista Guai!
Entre estos tres dibujantes y otros más
nuevos, junto a los clásicos de la casa
como Ibáñez, Jan, Escobar, Gosset,
Miguel, March, Jaume Rovira, Segura,
Martz-Schmidt, Esegé, Nené Estivill, etc.
(y alguna página aislada de dibujantes
como Bernardo Vergara o Gallego y
Rey), se repartieron revistas como
Mortadelo, Mortadelo Extra, Súper
Mortadelo, Zipi y Zape, Zipi y Zape Extra,
Super Zipi y Zape, Superlópez, Pulgarcito,
TBO, Guai! y Yo y Yo. Las revistas
semanales (Mortadelo y Zipi y Zape) se
cerraron en 1991, y desde entonces poco a
poco el resto de revistas comenzaron a
caer.
Ibáñez entra en Ediciones B anunciado a bombo y platillo en el número 49 de Mortadelo.
Tanto Mortadelo como Súper Mortadelo recuperan sus cabeceras clásicas con la llegada
del dibujante (en el nº24 en el caso de Súper Mortadelo)
Anuncio de Mortadelo nº200 (1991) en el que se
explica que Ediciones B cancela las revistas semanales
En diciembre de 1987 Ediciones B había
adquirido la cabecera de Guai! y la
continuó editando desde el número 82 al
175. En 1988 inició una nueva etapa de
TBO, dirigida por Víctor Mora (que
consistía en una recopilación de material
nacional, francobelga, tiras de prensa
americana y reediciones de historietas del
clásico TBO) que a partir de 1996 perdió
su periodicidad mensual hasta ser
finalmente cancelada en el número 105 en
1998. Se reactivó la cabecera Yo y Yo en
1990 (en la que se serializaron algunos
álbumes de Superlópez nada más
cancelarse su propia revista), pero se cerró
después de 28 números. En 1993 y 1994 se
iniciaron las revistas ¡¡Al ataque!! y El
chou, siguiendo el humor de los programas
de televisión de Alfonso Arús, pero fueron
canceladas a las 23 y 8 entregas
respectivamente.
Una anécdota: Vázquez fue despedido de
Ediciones B por culpa del suceso del
mechero. En la misma época en la que
también dibujaba para Makoki se le
ocurrió decorar un mecherito con el dibujo
de un pastor intimando apasionadamente
con una oveja. El animal gritaba “Beeee”,
mientras que debajo venía escrito “Grupo
Z”.
Desde 1988 Ediciones B alternó las
revistas con una remesa de álbumes de
diferentes procedencias que incluyeron
series como La jungla loca, Hans,
Cédric, Los Pitufos, Cabelloloco, Hugo,
Lucien, ¡Salud África!, Jack Pelman,
Las aventuras de los Peques, El pequeño
Spirou, Akira, Dylan Dog, Tarzán, El
Hombre Enmascarado, Príncipe
Valiente… en algunos casos, en dos
ediciones diferentes (castellano y catalán).
Sin embargo, debieron de resultar un
fracaso, porque muchas de esas
colecciones terminaron al publicarse sólo
unas pocas entregas.
Finalmente en 1996, Ediciones B modificó
totalmente su rumbo editorial cerrando
todas las revistas de historietas. La editora
Blanca Rosa Roca, sobrina de Antonio
Asensio (fundador del Grupo Zeta), estaba
más interesada en publicaciones que diesen
prestigio a la editorial que en el catálogo
de Bruguera y los antiguos trabajadores de
esa empresa, por lo que los eliminó a
ambos.
Al mismo tiempo compró los derechos
para publicar los cómics de los Simpson y
Disney, y sustituyó los antiguos tebeos por
revistas para adolescentes con alguna que
otra historieta suelta (Top Disney entre
1996 y 1999, y Mega Top y Super Mini
desde 1999). Ibáñez comenzó a publicar
Mortadelo directamente en álbumes con
“¡Desastre!” y Jan hizo lo mismo con
Superlópez y “El infierno”.
Poco después, Blanca Rosa fue despedida
de Ediciones B tras un pleito y diversos
problemas, tras lo que fundó Roca
Editorial, con antiguos cargos de
Ediciones B, en la que llegó a publicar
"novelas gráficas" (como Coraline, de Neil
Gaiman).
Y, finalmente, desaparecieron las revistas
de historietas juveniles de los quioscos.
Ibáñez: “La decadencia de Bruguera no
vino por las revistas, por los colaboradores
y todo eso, ¿eh? La decadencia de
Bruguera fue administrativa.”(Fuente:
http://seronoser.free.fr/bruguera/entrevistai
banezu.htm).
Ibáñez: “[El cómic] está muerto, eso es
indudable. Lo que pasa es que no está
muerto del todo. Está medio muerto.
Aguanta un poco. Está medio muerto y no
se muere nunca. Esto puede durar todavía.
Puede durar años. Ahora, ¿cuántos? No lo
sé. ¿Hasta que se muera del todo? Siempre
puede quedar algo. Siempre habrá cuatro
aficionados. Siempre habrá aficionados.
Ahora, lo que fue… vamos, es que no hace
falta que yo lo diga, coño. No hay más que
ir por la calle y parar por los quioscos y ya
lo veis. El que tiene 60 años como yo ha
visto la subida, subida, subida y luego ha
visto la bajada, bajada, bajada hasta quedar
en nada. Los quioscos de la calle antes eran
casi todo tebeos y unas cuantas revistas.
Ahora son casi todo revistas y algún
tebeíto por ahí del Mortadelo o del Zipi y
Zape y para ya de contar.”
Ibáñez: No entiendo por qué allí [Francia]
las revistas han caído también. ¿Por qué?
Esto, que para mí era el súmmum, el no va
más, también ha caído por los suelos. ¿Esto
cómo te lo explicas? Y es por eso,
sencillamente porque la gente se ha ido
apartando. Cualquier publicación
francobelga era muy superior a cualquiera
de las nuestras, me refiero a las semanales.
Superiores pero a años luz. Todas han
caído.
Vázquez: “Creo que mientras exista un
lector puede [haber futuro para el cómic].
Ahora está muy jodido, hay muchas cosas,
por los gastos de impresión, precios,
porque el vídeo y la TV lo han matado
mucho. Pero algo debe quedar. Lo que
pasa también es que hay mucha basura.
Hay publicaciones que ¿qué tienen de
calidad? Te coges publicaciones antiguas,
de hace 20 años, tenías 60 págs., casi todo
era bueno. Ahora, todo de relleno. Esto
sale muy caro, pues a poner material
extranjero, material publicado otra vez, y
el público no es tonto.”
Jan: "Puede que el tebeo desaparezca, pero
no va a hundirse el mundo por eso. [...]
Tendríamos que reciclarnos y asimilar las
nuevas tecnologías del ocio.”
Ramis: “Si una cosa no gusta o no se
vende, ¡¡adiós muy buenas y a buscarte las
habichuelas!! Me joroba que mucha gente
no comprenda esto.”
Escobar: “Mira nen, en este mundo
siempre habrá niños, y los niños siempre
leerán tebeos, así que este trabajo es un
trabajo para siempre.”
Entre octubre de 2004 y diciembre de 2006 El Jueves
intentó
recuperar el mercado de las historietas juveniles. Duró 55
números
EL MANGA A VECES ME DICE... GANA EL
CONCURSO DEL SALÓN
Tomás Pardo
Taki, una joven dibujante residente en
Segovia de 18 años, es la ganadora del
Concurso Manga de 2011 con la obra A
veces me dice.... Este concurso está abierto
a jóvenes de entre 14 y 25 años y tiene
como objetivo descubrir nuevos talentos
del manga en España. El jurado, integrado
por Josep María Polls de la Escuela de
Cómic Joso, Santi Casas de Ikari Studio y
José Luis Puertas de FICOMIC,
seleccionaron la obra ganadora, entre un
total de 46 obras a concurso, debido a la
calidad gráfica y narrativa de la obra
ganadora. La obra ha sido premiada con
400 Euros, además de un lote de mangas y
DVD de anime.
Taki admite que “Me gustan las historias
algo oscurillas. En este caso pensé que en
sólo cuatro páginas tenía que sorprender
al lector, y me pareció que un problema
como el que tiene la protagonista podía ser
interesante de retratar”. La joven autora se
declara fan de Katsura Hoshino, la autora
de D.Gray-man, su manga favorito.
También admira Oh Great! creador de Air
Gear y Ai Yazawa, responsable de Nana.
Por otro lado, no descarta dedicarse
profesionalmente al dibujo “Mi sueño
siempre ha sido poder publicar mis
mangas. Estoy decidida a dedicarme
profesionalmente a dibujar historias,
aunque aún me veo un poco verde”, admite
esta estudiante de segundo de Ilustración
en la escuela de arte de Segovia.
2º SALÓN DEL CÓMIC SOCIAL
Tema de la edición 2011:
CÓMIC, CRISIS Y RESISTENCIAS
El 2º Salón del cómic social llega a Sta.
Coloma de Gramenet los días 6, 7, 8 y 9 de
octubre.
Se trata, por varias razones, de un evento
único en el panorama cultural actual:
Es el único salón dedicado
exclusivamente a comics de
contenido social e histórico.
En él se producirán encuentros entre
la gente del mundo del cómic y
activistas de los movimientos
sociales.
Es un evento totalmente gratuito.
¿Cómo nace este Salón?
En el año 2009, un grupo de autores y de
ciudadanos se lanzaron con el proyecto al
pensar que el cómic podía desempeñar un
útil y relevante papel tanto en la
descripción crítica de la realidad cotidiana,
como en los debates colectivos actuales.
Porque el Cómic puede ser más que un
« cómic », pensaron que para ayudar a
construir otro mundo posible, era preciso
contar con el talento y la energía creativa
de los lápices y los pinceles.
En la edición 2010 estuvieron presentes
Jaime Martin, Carlos Giménez, Carlos
Azagra, Aníbal Mendoza, Martin Tognola,
Hernán Migoya, Joan Marin, Ricardo
Hermida, Mario Torrecillas, Tyto Alba,
Cristina Duran, Miguel A. Giner Bou,
entre otros.
¿Por qué esta edición 2011 será tan
importante?
Nunca hubo tantos autores de comics que
quisieran, como este año, comprometerse,
y tratar en sus páginas la realidad
cotidiana, dibujar las cóleras y las
indignaciones colectivas.
Muchos de ellos estarán presentes en el
Salón del cómic social. Invitados a charlar,
a intercambiar y a construir otras utopías
gráficas y humanas.
Los momentos fuertes del Salón.
Dos exposiciones reunirán a muchos de los
autores comprometidos con los
movimientos sociales actuales y sus
causas.
« Comics, crisis y resistencias » se podrá
ver en la Biblioteca Central de Sta.
Coloma. Recoge varias ilustraciones y
comics del año 2011 sobre el movimiento
del 15 M y la ola de protestas vivida en las
calles y plazas.
Junto a otros autores que han ido ilustrando
lo que ha sucedido desde los medios de
información contaremos con dibujos de los
autores de dos comics recientemente
publicados: "Yes, we camp !" (Dibbucks)
y "Revolution Complex (Norma).
« La gran estafa », se podrá ver en el CRJ
Mas Fonollar de Santa Coloma. Se trata en
este caso de una muestra de las obras más
originales del famoso sitio de internet
(http://elestafador.com/ ), que reúne ya
varios centenares de dibujos cargados de
rebeldía.
Cuatro debates donde se espera una
participación activa del público.
"Cuando la calle te atrapa". Jueves
6.
Miguel Fuster nos cuenta su camino
personal para escapar de ella y qué le llevó
a dibujar su propia historia en los comics
"15 años en la calle" y "Llorarás donde
nadie te vea" (Glenat).
También estarán presentes Juan Lemus y
Paco Gea de la Fundación Arrels,
educadores de la asociación AUPA´M y
trabajadores y usuarios del comedor social
de Sta. Coloma que nos explicarán de
primera mano su trabajo y sus experiencias
cuando te atrapa la calle.
"¿Por qué nos quitan el trabajo y los
servicios públicos?" Viernes 7.
Autores de comics, ilustradores de prensa,
empleados, sindicalistas y economistas
compartirán sus miradas y sus maneras de
explicar y denunciar la crisis y a sus
responsables. También se hablará de cómo
defender un trabajo digno y los servicios
públicos.
Invitados: Alejandro Torres, Manel
Fontdevila, Oriol Hernández, Pierre
Coutaz, Juan García Saez, Josep Bel,
Vicente López, Albert Drandov.
“Generación no-no!! : Juventud y
resistencias.” Sábado 8.
El año 2011 fue el año de la juventud y de
las resistencias a las políticas dominantes,
con sus discursos y consecuencias. En el
debate tomarán la palabra algunos de los
autores que estuvieron en las calles para
posteriormente plasmar esa realidad. Junto
a ellos, referentes de importantes luchas
sociales hablarán de alternativas para
construir otro mundo posible.
Invitados: Pere Mejan, Tomeu Pinya,
Sagar Fornies, Marcos Prior, Carlos
Samprieto, Esther Vivas, Enric Duran.
"Dibujo de prensa: ¿qué libertad nos
queda?" Domingo 9.
Nunca los poderosos tuvieron tanto control
sobre los medios de comunicación.
Algunos de los ilustradores de prensa más
combativos del panorama actual, nos
cuentan qué libertad les queda para hablar
de la realidad en los medios de prensa y
digitales desde los que trabajan. ¿Está el
futuro del dibujo libre en internet?
El historiador del cómic y de la prensa
Antonio Martín nos contará si hubo una
"edad de oro" del dibujo de prensa.
Invitados: Antonio Martín, Carlos Azagra,
Javi Royo, Kap, Sr Plástiko.
Además:
Concierto ilustrado. Sábado 8.
Se podrá disfrutar en directo de la música
del grupo de rock “ Chatarra “ y de los
dibujos, también en vivo, de varios
ilustradores que acompañarán a los
músicos en el escenario. Música y dibujos
unidos por una causa común en un
concierto original y diferente,
Una cita original. Sábado 8.
Todos los autores de comics que participan
en el Salón y los movimientos sociales
serán invitados a “un brindis por la
indignación”.
Y también…
Encuentros entre alumnos de Sta. Coloma
y autores de cómic social (Mario
Torrecillas/Sr Plástiko).
Una librería,“Comix box”, con
exclusivamente comics sociales e
históricos.
Una Biblioteca Central muy activa,
espacios de lecturas, producción de una
guía del cómic social…
Puedes seguir nuestras novedades en el
blog del Salón:
http://saloncomicsocial.blogspot.com/
Susana Sánchez
Cocina con Riesgo
Por Remi Riesgo
Horchata de arroz
Ingredientes para un litro aprox.:
1,5 litros de leche
50 grs. de arroz
Canela en rama
150 grs. de azúcar
Elaboración:
En un recipiente adecuado ponernos el arroz y con un robot de cocina o picadora lo
trituramos.
A continuación, ponemos el arroz, la leche, el azúcar y un palito de canela en rama en una
olla y ponemos al fuego. No tiene que llegar a hervir, así que no es necesario ponerlo a fuego
fuerte. Hay que removerlo de vez en cuando.
Pasados 20 minutos apartamos del fuego y colamos la horchata con un colador fino.
Ponemos en una jarra y dejamos enfriar.
Cuando esté fría, metemos en el frigorífico.
Se debe de servir bien fría y adornada con un toque de canela.
Tiempo de elaboración: 25 minutos + tiempo de enfriado
Dificultad: fácil
Calorías aprox. por vaso: 150 Kcal.
Sugerencias:
Receta basada en una típica bebida de México (allí suele estar hecha con agua y llevar
coco), es una forma estupenda de que los peques tomen leche sin notarlo. Refrescante
en verano y muy agradable al paladar en invierno, calentita.
Se le puede añadir un toque de vainilla, añadiendo en la cocción una cucharadita de
azúcar avainillado. También se puede tomar con almendras o nueces picadas, según el
gusto personal.
Si es necesario, sobre todo si es para niños, se puede aumentar su valor nutritivo
añadiéndole una cucharadita de leche condensada antes de poner a enfriar.
TRES GRANDES GENIOS DE BRUGUERA
Por Chema Sánchez
La extinta editorial Bruguera ha dado
innumerables dibujantes y guionistas de
gran talento. Pero he de reconocer que, en
el ámbito del cómic de humor, para mí ha
habido tres grandes maestros: José
Escobar, Manuel Vázquez y Francisco
Ibáñez, por orden de aparición en la escena
del tebeo español.
Durante la década de los años 80 -época en
la que transcurrió la infancia o
adolescencia de muchos de nosotros-, los
personajes de Ibáñez y de Escobar eran los
más expuestos y visibles.
La colección Olé se había centrado años
atrás en las dos series más populares de
Bruguera, Mortadelo y Filemón y Zipi y
Zape. De los números antiguos de esta
colección, sólo se reeditaban algunos.
Aparte de los de Mortadelo y Filemón y
Zipi y Zape, también se reeditaron los de
otras series de Ibáñez, como El Botones
Sacarino, Pepe Gotera y Otilio,
Rompetechos y 13 Rue del Percebe. En
cuanto a otras series de Escobar, había tan
sólo dos Olés de Carpanta, pero estaban
disponibles al público. Y además, muchos
de los Olés de Zipi y Zape contenían varias
páginas de personajes del mismo autor,
como el citado Carpanta, o también Petra,
criada para todo, o Toby.
Sólo algunos números de la colección Olé
de personajes que no eran de Ibáñez ni de
Escobar se reeditaron. Entre ellos, uno de
La Familia Cebolleta y otro de Las
Hermanas Gilda, ambas series de
Vázquez. Estos dos álbumes de la
colección Olé fueron los que despertaron
mi admiración por el gran genio que era
Vázquez. Y con el mérito adicional de que
las historias de sus personajes no
abundaban tanto en el mercado como las
de sus compañeros Ibáñez y Escobar, lo
que hacía más difícil que el público
descubriera su talento.
Como dije al principio, personalmente
siempre he considerado a Ibáñez, Vázquez
y Escobar como „los tres grandes‟ del
cómic de humor de Bruguera. De ellos, por
cierto, sólo Ibáñez sigue entre nosotros, lo
que le convierte en una leyenda viva.
Estos tres autores han tenido un estilo muy
característico, tanto en los dibujos como en
los guiones -con su lógica evolución
temporal-, lo cual puede considerarse un
reflejo de sus vivencias personales, que
han sido muy diferentes para cada uno de
ellos.
Escobar trabajó durante la Guerra Civil
para revistas afines al bando republicano.
Cuando finalizó el conflicto que dividió a
España, fue encarcelado por el régimen
franquista. Pasó seis años en prisión, donde
continuó dibujando. Una experiencia dura,
sin duda, que probablemente contribuyó a
hacerle más fuerte como persona y a
enriquecer su obra artística.
A Escobar se le puede ver como un
humorista comedido, que dibujaba unas
historias algo infantiles que nunca
incurrían en la incorrección política.
Podemos adelantar que esto no es así, pero
vayamos por partes.
A finales de la década de los 40, Escobar
ya había creado a sus personajes más
populares, Zipi y Zape, Carpanta y Petra,
para la revista Pulgarcito. Las historietas
de la primera época de estos personajes
podrían sorprender a más de uno, ya que en
ellas campaba a sus anchas un humor
absolutamente transgresor, surrealista y
esperpéntico. Nada que ver con las
historietas de Escobar de épocas
posteriores, que son las que la mayoría de
la gente más joven conoce.
A mediados de la década de los 50 entró en
vigor una ley que obligaba a las
publicaciones infantiles y juveniles a evitar
contenidos violentos, o que dejaran en mal
lugar la autoridad de los mayores, o que
hicieran apología de conductas inmorales...
En la práctica, fue en los años 60 cuando
comenzó a apreciarse su efecto sobre los
cómics de Bruguera.
En el caso de las historietas de Escobar, los
castigos desproporcionados y surrealistas
que Don Pantuflo infligía a sus hijos Zipi y
Zape fueron sustituidos por otros menos
violentos, como el cuarto de los ratones.
Otro ejemplo notable fue la cancelación de
Dona Tula, suegra. Esta serie atentaba
supuestamente contra la unidad familiar, y
se propuso a Escobar suavizarla hasta tal
punto que perdía su esencia, y por ello
decidió no volver a dibujarla.
A partir de los años 60, y en adelante, las
historias de Escobar se caracterizaron por
un humor „blanco‟... aparentemente. Y es
que seguían conservando mucha ironía y
espíritu crítico, más perceptibles para un
lector adulto que para un niño.
Escobar continuó dibujando sus series más
populares, con mayor o menor frecuencia.
Dichas series conservaban ciertos rasgos
que hacían de ellas un „caramelo
envenenado‟, por su trasfondo crítico
camuflado con argumentos dirigidos
teóricamente al público infantil. Por
ejemplo, Zipi y Zape no eran unos santos,
pero su padre Don Pantuflo se comportaba
a menudo como un hombre autoritario,
machista, caprichoso y muchas veces
injusto con sus hijos. También tenía cosas
buenas, pero los rasgos citados no dejaban
en muy buen lugar la autoridad paterna. En
el caso de Carpanta, la propia esencia del
personaje lo decía todo: se trataba de un
vagabundo que vivía bajo un puente, y
cuyo único objetivo era conseguir algo que
comer, casi siempre sin éxito.
Así pues, como conclusión, podríamos
decir que las historias de Escobar
traslucían una crítica y un sarcasmo hacia
ciertos aspectos de la sociedad que
presumiblemente al autor no le gustaban.
Más descaradamente al principio y más
sutilmente después, cuando la censura le
obligó a ello.
Pasamos ahora al gran Vázquez, como
muy acertadamente se le llama en la
película sobre su vida que se realizó el
pasado año.
Al igual que Escobar, Vázquez también
vivió una juventud dura. Nació en Madrid,
y desde pequeño tuvo que asumir
responsabilidades en el seno de su familia.
Desde muy joven sintió la vocación por el
mundo de la historieta, y a los diecisiete
años se trasladó a Barcelona.
En mi opinión, Vázquez es el dibujante
con el sentido del humor más ácido que ha
dado el cómic español. Sus historias fueron
desde el principio de una incorrección
política absoluta. En sus comienzos, Las
Hermanas Gilda eran dos solteras que se
llevaban fatal y en ocasiones se peleaban
llegando a la violencia física. En el caso de
La Familia Cebolleta, el padre de familia,
que en su trabajo era sumiso y servil a su
jefe, en su hogar trataba de ser autoritario,
y o bien no lo conseguía, o bien salía mal
parado por ello. Y, ¿qué decir del abuelo
Cebolleta? Se ha convertido en un icono
cultural, y simboliza a todas las personas
mayores que se afanan en contar con todo
detalle sus experiencias pasadas -sus
“batallitas”- a la primera persona que se
encuentren y que no huya de ellos. En fin,
como vemos, Vázquez no tenía un
concepto muy elevado de la unidad
familiar.
Las duras experiencias de este dibujante en
su juventud hicieron de él una persona
bohemia que no se sujetaba a ninguna
disciplina. Su manera de vivir carente de
esquemas rígidos, en la que primaba el
„carpe diem‟, hizo que pasara apuros
económicos. Para salir de ellos pedía
préstamos a sus amigos y conocidos,
recurriendo a contar historias dramáticas
para convencerles de su necesidad. Esos
préstamos no los devolvía, lo que le llevó a
ganarse una fama de moroso que él era el
primero en reconocer. En la serie Los
cuentos de Tío Vázquez, él era su propio
personaje, y en ella se parodiaba su faceta
de no pagar a nadie lo que debía.
La censura también obligó a Vázquez a
suavizar su humor. Como él mismo ha
explicado en alguna ocasión, en el caso de
Las Hermanas Gilda recurría a mandar a la
pequeña Hermenegilda al campo, para
evitar las peleas domésticas entre las dos
hermanas. Otro ejemplo notable es el de la
serie Angelito.
Se trataba de un bebé abandonado en su
canastilla que, en sus primeras historietas,
hacía el mal allá donde iba.
Posteriormente, para ser visto con buenos
ojos por la censura, sólo serían víctimas de
sus actos delincuentes o vándalos a punto
de cometer alguna fechoría, triunfando así
el bien sobre el mal. Al final, las historietas
de Angelito eran prácticamente mudas y
tenían lugar en el campo -como las de Las
Hermanas Gilda-. Tenían una atmósfera
fantasiosa y onírica. Esta faceta más
infantil en la obra de Vázquez, un
dibujante tan transgresor, se podría
explicar como una manera de sacar la
niñez que el propio autor afirmó no haber
tenido.
Anacleto, Agente Secreto fue una de las
series más populares de Vázquez, y de las
últimas que creó para Bruguera. Anacleto,
que a veces era inteligente y astuto pero
otras veces parecía tonto, desidealizaba a
los agentes secretos de las películas.
Lástima que las prolongadas ausencias de
Vázquez obligaran a sustituir las historietas
dibujadas por él por otras apócrifas. Así
fue con todos sus personajes, de todos ellos
hay páginas apócrifas, pero con Anacleto
esto ocurrió en mayor medida.
Durante los últimos años de su vida,
Vázquez dibujó todo tipo de historias y
secciones para diversas revistas, algunas de
ellas dirigidas al público adulto. Todas
ellas se recogen en el libro “Lo peor de
Vázquez”, publicado por la editorial
Glénat.
En esas páginas, el humor de Vázquez era
más sarcástico que nunca. Se burlaba con
saña de ciertas tipologías de personas con
las que intuyo que tal vez tuvo malas
experiencias. Y no hablemos de las
historietas de contenido erótico. Creo que
no se ganaría la simpatía de las mujeres
que las leyeran. Claro que el protagonista
de esas historias era él mismo, y tampoco
salía muy bien parado, ya que se
autoparodiaba sin reservas. Una cosa que
hay que reconocerle a Vázquez es que
sabía reírse de sí mismo.
En definitiva, Vázquez merece ser
considerado un genio de la historieta. Y el
hecho de que su falta de disciplina impidió
que publicara más material, y que además
este material durante muchos años no se
haya reeditado, hace que se aprecie más
aún, como un bien escaso.
Falta por hablar de Ibáñez, que como
dijimos, de estos tres dibujantes es el único
que aún vive, y además sigue en activo.
En sus comienzos, Ibáñez tuvo una gran
influencia de Vázquez. Posteriormente fue
creando su propio estilo. En Ibáñez se
aprecia un humor muy „gamberro‟ en el
que se hace burla de todo, pero que quizá
no tiene ese trasfondo de rabia y de reflejo
de la realidad con toda su crudeza que
tenían las historias de Escobar y de
Vázquez.
La etapa de Mortadelo y Filemón en la que
éstos eran detectives privados -el título de
la serie iba seguido de la coletilla Agencia
de Información- puede parecer muy
inofensiva e infantil hoy en día. Sobre todo
si se compara con la etapa más larga y que
ha hecho más famosos a Mortadelo y
Filemón, en la que se convirtieron en
agentes de la T.I.A. y se incorporaron
personajes secundarios como el “Súper”, el
profesor Bacterio y, más tarde, la secretaria
Ofelia. El humor de las historias de
Mortadelo y Filemón ha sido cada vez más
transgresor y, por otro lado, sus
argumentos cada vez se han basado más en
temas de actualidad.
Algunas series que Ibáñez dibujó durante
los años 60 y 70 no han perdido frescura.
En El Botones Sacarino, el simpático
botones que protagonizaba la serie creaba
el caos en la oficina sin proponérselo,
especialmente entre los más altos jerarcas.
Siempre salía mal parado el director,
personaje que caía antipático por su
servilismo con su superior, el presidente, y
su despotismo con los empleados.
Por citar otro ejemplo, 13 Rue del Percebe
-que recientemente recuperó cierta
popularidad gracias al anuncio de La
Casera- tenía un humor surrealista muy
logrado. Personalmente me gustan las
páginas en las que un accidente o una
situación climática extrema dan una unidad
temática a los chistes de todos los pisos.
He de reconocer que las historietas de Pepe
Gotera y Otilio se me hacen algo
repetitivas, al estar demasiado basadas en
los golpes y estropicios causados por estos
versátiles mecánicos. En cuanto a
Rompetechos, es el único personaje al que
Ibáñez ha dibujado en los últimos años,
aparte de Mortadelo y Filemón, claro está.
Sus nuevas historias son mucho más
transgresoras y políticamente incorrectas
que las antiguas. Sin embargo, las antiguas
siguen resultando graciosas, sobre todo si
uno las lee dándose cuenta de lo absurdo y
surrealista de las situaciones provocadas
por la falta de visión del protagonista.
Ibáñez ha llegado a convertirse en una
leyenda del cómic español, en parte debido
a su gran capacidad de trabajo. Durante los
años 60 y 70 dibujaba todas las semanas
páginas de varias de sus series. Más tarde,
la gran popularidad de Mortadelo y
Filemón le obligó a centrarse en estos
personajes y dejar el resto en manos de
dibujantes apócrifos.
Gran parte de la vida de Ibáñez, como
decimos, ha estado dedicada a la historieta.
Eso, unido a la ausencia de grandes
acontecimientos en su vida -que se sepa-,
hace que el propio Ibáñez haya afirmado
en más de una ocasión que su biografía
sería muy breve: “un tío que no hizo más
que trabajar, trabajar y trabajar”.
Intuyo que Ibáñez ha sido siempre un
hombre muy normal, en contacto directo
con la realidad y absorbiendo toda la
información que ésta le proporciona...
¿Para qué? Para encontrar situaciones a las
que sacarles punta cómica y utilizarlas en
sus historietas. Quienes hemos tenido la
oportunidad de verle en persona o de
escucharle en alguna entrevista, sabemos
que se ríe hasta de su sombra, y para ser
historietista ésa es una gran cualidad.
Hasta aquí ha llegado este pequeño
“estudio comparativo” de tres grandes
genios de la historieta española. Me
gustaría hacer una última reflexión, para
terminar. Los dibujantes de cómics no
suelen ser muy mediáticos, y
probablemente lleven una vida muy
normal, lejos de las frivolidades y
excentricidades de otras estrellas. Ellos
tienen las mismas vivencias que cualquiera
de nosotros y las sienten de la misma
manera. La diferencia es que tienen el don
de escribir y dibujar historietas que podrán
ser más reales o más fantásticas, pero
siempre tendrán algo de sí mismos. A
través de un cómic se pueden intuir
muchas cosas sobre su autor: su estado de
ánimo, sus fobias, sus filias, sus fijaciones,
sus sueños... Son cosas que se van
descubriendo a cada nueva lectura.
Blazing Combat, de Archie Goodwin
Por Javier Mesón
Una de las joyas que se han editado en
nuestro país en los últimos meses habla de
la guerra, la muerte y la tragedia del ser
humano que la padece, estoy hablando de
“Blazing Combat”. Uno de los míticos
títulos que la editorial Fantagraphics
recuperó hace un par de años, y que Norma
Editorial ha editado en nuestro país, en una
cuidada edición para los lectores más
exigentes. Afortunadamente, las pruebas
de imprenta de la revista norteamericana se
han conservado en muy buen estado para
esta recopilación, y es toda una suerte,
poder comprobar el talento de artistas
como Gene Colan, Alex Toth, Joe
Orlando, Wally Wood, Red Crandal,
Gray Morrow, All Willianson, John
Severin o Russ Heath, entre otros.
“Blazing Combat” narra las diferentes
guerras por las que han pasado los
norteamericanos, con especial énfasis en la
de Vietnam; en un momento en el que el
conflicto bélico estaba comenzando en
aquel país asiático. Historias que hicieron
dudar al ejército, sus veteranos, y los
distribuidores, de sus verdaderas
intenciones, haciéndola un boicot para su
venta por los canales tradicionales. Fruto
de ello, lamentablemente la revista tuvo
que cerrar en su cuarto número, algo de lo
que Jim Warren (editor de revistas como
Creepy o Eerie), no se arrepentiría, aunque
le costará el dinero de todo un año de sus
beneficios, con tal de dar a conocer su
visión de la guerra. Junto a él, su editor y
guionista Archie Goodwin, un hombre
todoterreno, que insufló vida a historias
que hablaban de lo que realmente sucedía
en las guerras y sus soldados: la crueldad,
el pillaje, la soledad., el miedo, el hambre,
la locura, la camaradería, la bondad, y las
hazañas de aquellos hombres que dieron su
vida por su país. Entre las guerras que
salen en el tomo, se dan cita, la I y la II
Guerra Mundial, la Guerra de Secesión,
Corea y la anteriormente citada de
Vietnam.
Realmente, “Blazing Combat” está
inspirada en aquellas historias que la EC
Comics creara en los años cincuenta en
“Frontline Combat” y “Two-Fisted
Tales", que tanto admiraba Jim Warren,
al igual que la labor de unos de los artistas
más importantes de aquella época, el
creador de la revista Mad, Harvey
Kurtzman. Gracias a esas publicaciones
Warren lanzo en octubre de 1965 su
propia revista de guerra, aventura que
terminaría en julio del año siguiente, 1966.
Si hablamos de los guiones de la revista,
todos fueron escritos por Archie
Goodwin, a excepción de “La batalla de
Inglaterra”, de Wally Wood; algunos de
ellos fueron realizados en colaboración con
los dibujantes encargados de ilustrarlos. De
entre las 29 las historias que aparecen,
destacaría títulos como: “Cantigny”, “Mad
Anthony”, “Enemigo”, “Paisaje”, “Cara
a cara”, “Souvenirs”, “Conflicto”,
“Cómo empezó”, “Tira y afloja” o
“Termópilas”. Y, ¿qué puedo decir de sus
dibujantes? Todos ellos grandes
profesionales, que dieron lo mejor de sí
mismo, en algunas historias realmente
memorables. Revistas, que además
contaron con toda una leyenda en sus
portadas, la de Frank Frazetta. Las
historias vienen complementadas con
varios “Combat Quiz”, sobre batallas o
armamento de diferentes contiendas, y
entrevistas a Jim Warren y Archie
Goodwin.
“Blazing Combat” en mi modesta
opinión, me parece un tebeo con
mayúsculas, que nos muestra sin tapujos,
el sufrimiento y la estupidez de toda
contienda.
“Blazing Combat”
Guión: Archie Goodwin
Dibujos: Varios Autores
Editorial: Norma Editorial
Formato: cartoné con sobrecubierta, 224 páginas,
20 x 25cm, b/n y color
Edición original: Blazing Combat, Fantagraphics
PVP: 24 €
Desde el Taburete del Wimpy
Por Doreen Snyder
Queridos todos, fanes y detractores: permitidme,
ante todo que lo deje escapar para quedarme
tranquila: JA… JA… y JA!!! ¿Qué de qué me río?
(y léanse esos jases en tono sarcástico,
naturalmente… Pues me río de esto:
Sí, ya sé que no os lo creéis ni hartas de vino
barato en cartón… pero es que yo soy la única que
conoce la historia… la que pasó de verdad, claro
está, junto a Juanito y Esther.
¿Por qué no os pensaríais que esa pavisosa iba a
conquistar a Juanito así na más bajarse de un tren,
verdad? ¡Claro que no!
Lo que sucedió es que yo había seguido a Juanito.
Me lo había encontrado el día antes camino a casa
y me había comentado que Jazmín, esa japonesita
con cara de barriguitas anoréxica, se volvía a
casita porque las cosas no habían funcionado entre
ellos. ¿Cómo iban a funcionar si él se pasaba
todos los días en el estadio entrenando y ella no
había hecho esfuerzo alguno por integrarse? ¡Qué
miraditas me echaba la muy mamo… la muy… la
muy… ¡lo que sea!
No estaba preparada para ser una WAG (Wifes
and Girlfriends), porlamordedió… ¡Yo sí que lo
estoy! ¿Y os pensáis que Esther pueda estar
preparada? ¡Naturalmente que no! Se me
derrumba viva cuando vea el primer par de
calcetines sucios en necesidad de un buen
remiendo…
En fin, el caso es que así como de pasada, me
enteré de la hora a la que salía el tren de la nipona
y me acerqué a la estación a consolar a Juanito en
caso de necesidad (o sin necesidad, vamos). Pero..
¿quién me iba a decir a mí que esa pretenciosa
llegaba del medio del campo? ¿Desde cuándo hay
estaciones de tren en el campo…?
Me quedé escondida, no demasiado lejos (detrás
de una columna a pocos metros de ellos), y me
hirvió la sangre cuando oí las palabras de Juanito.
Aunque naturalmente, sé que podría hacerle
cambiar de opinión y convencerle de que él, como
futbolista, necesita alguien de mi posición a su
lado, con toda mi elegancia, con mis ropas caras
que harían juego con sus Armanis que yo le
compraría, por supuesto, y mis influencias. La
reacción de Esther, como era de esperar, fue de lo
más sosa. La chica, después de llorar por todos los
rincones del planeta por su supuesto amor, se
queda sin habla y le dice… sí, no os lo vais a
creer… ¡le dice que tiene que ir a casa a lavarse la
cabeza!
Naturalmente Juanito quedó un tanto
descontrolado, con una cara de pasmo allí en
medio del andén, así que… tachaaannnn!!!
Doreen entra en escena.
Me hice la tonta, como el que no quiere la cosa…
fingí mirar los horarios del os trenes. Juanito me
vio y vino a saludarme y a preguntarme qué hacía
allí.
-Parece que todas las mujeres importantes de mi
vida aparecen hoy en esta estación –me dijo.
Nos fuimos a tomar un café y me contó sus dudas.
Dijo que esa noche había estado pensando sobre la
partida inminente de Jazmín y Esther no cesaba de
aparecer en su mente, y que aunque siempre la
había considerado una buena amiga y casi una
hermana, se estaba preguntando si algo se le había
escapado y no sería oportuno averiguar si su
relación iba a funcionar… y que eso mismo le
había pedido a Esther.
Le quité la idea de la cabeza. ¡Si no hacen para
nada buena pareja! ¿A quién quiere engañar
Juanito? ¡Por supuesto que Esther es como una
hermana! Llamadme pérfida, si queréis, pero le
conté “cosas” de Esther que él no sabía. Ni él ni
nadie, por supuesto, porque me las inventé todas.
Y aún con esas, no logré hacerle cambiar de
opinión, me dijo que la llamaría por la mañana
(después de entrenar, imagino), y que aclararía
mucho más el tema con ella. Que tampoco es que
le hubiera pedido que se casara con ella o algo por
el estilo… pero que quería comenzar una relación
como no la habían tenido antes… ¡Mi gozo en un
pozo! ¿Es que no iba a haber manera de quitarle
esa absurda idea de la cabeza? ¿De que se diera
cuenta de que YO y solamente YO soy la
verdadera mujer de su vida?? ¡Hombres! Delante
de sus narices y no lo sabe ver…
Se me iba a agotar el tiempo, pero yo soy más
lista… A la mañana siguiente me levanté bien
temprano y me acerqué a casa de los Lucas. Si mi
instinto no me fallaba, Esther no iba a hacer
ningún movimiento más que el de sus manos al
lavarse la cabeza, así que corté el cable
telefónico… ¡Ups! Ya puede llamar Juanito, ya…
y cómo no, ella se pasaría la mañana sentada junto
al teléfono, sin tener los arrestos necesarios para ir
en su busca… y Juanito, más enfadado por
momentos, se dio cuenta de que su “pecosa” no
tenía ningún interés en su persona. El venga a
llamar y el teléfono comunicando… ¿Y lo llamó
ella? ¡Claro que no! Por fortuna mi tío le ofreció
una beca en un club… y el resto es historia.
Ta da!!