Forres, con unos pocos más, mepuse sospechoso y le dije : "Vá-yase nuevamente a bordo y siVarón trata de alzar el anchadel vapor y de fugarse impida-selo a todo trance, hasta por lafuerza".

"RECUERDO A 11 O R A QUEANTES DE IMPARTIR ESTASORDENES, COMO A LAS OCHODE LA MAÑANA RABIA ESTA-DO EN LA OFICINA DE MIBUEN AMIGO GENERAL NICA-NOR A. DE ()BARRIO A QUIENENCONTRE ENTUSIASMADO YFIRME. COMO ME PREGUNTA-RA SI SABIA LO DE LOS GE-NERALES Y LA TROPA DECOLON LE CONTESTE : SIVIEJITO, A LAS ONCE LLEGANESOS GENERALES QUE EN LAMADRUGADA ARRIBARON ACOLON. SE QUE TRAEN UNGRAN ESTADO MAYOR BASTANTE PERTRECHO, PERO SISE HACE NECESARIO LOS VOY A RECIBIR A BALA ".

"El General ele Obarrio me contó entonces, que también h-bia recibido un telegrama, donde le avisaban de la llegada del Ge-neralísimo Tovar, de su Estado Mayor y del "Batallón Tirado-res", con el Coronel Eliseo Torres a la cabeza, pero que podíagarantizarme que sólo vendrían a Panamá cl Generalísimo y suEstado Mayor, por lo que no estaba de acuerdo con la actitudque yo pensaba asumir y que era mejor esperar el desarrollode los acontecimientos" .

"A las 10 de la mañana, cumpliendo la orden de servicioimpartida por el Jefe del Estado Mayor, General Francisco dePaula Castro, salí con el "Batallón Colombia" para la Estacióndel Ferrocarril adonde llegarian los Generales . Cuando pasé porel Parque de la Catedral, observé a mucha gente reunida allíy que todos me saludaban. Al llegar a la plaza de Santa Ana,había mucho más gente y el comercio comenzaba a cerrar suspuertas. Ya en la Estación del Ferrocarril el "Batallón Colom-bia" recibió a los Generales y les hizo los honores militares delcaso, acompañándolos después hasta la Gobernación en donde

"Con ella dió las órdenes

en la Estación".

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se quedaron hospedados . Cuan-do regresábamos nos cogió unallovizna que me obligó a dar laorden de que se tocara "tropa"emprendiendo todos la carrerahasta llegar a nuestro Cuartel" .

"Eran las 11 :50 de la maña-nacuando se presentó al Cuartelde Chiriquí el Generalísimo JuanB . Tovar en compañía del Gober-nados del Departamento, señorJosé Domingo (le Obaldía, del Dr.Julio J . Fábrega, Secretario delGobernador, y de otros Genera-les. Después de los saludos deritual c de una corta conversa-ción, el Generalísimo Tovar, queera un militar valiente y ague-rrido, me pidió que le enseñan

,herr zdor del Estado de

pues quería examinarlo él mis-

1'cnunur, Hui run los Genera- 'no -, . todo el Cuartel . Lo hizo

u ui.cilar a huertas .

asr el Generalísimo Tovar, aquien no abandoné un momento,

y al.. tenninar su inspección, que fue muy minuciosa se retiró ala Gobernación con los Generales y demás funcionarios que loacompañaban".

"Pacas horas despees regresó el Generalísimo Tovar, nue-vara( nte al Cuartel, en compañia de los Generales Ramón G.Amaya . .fosé N, Tovar, Joaquin Caicedo Albán, Luis A . y AngelM . Tovar. En esta segunda visita — que ya me preocupó bas-tante t me puso sospechoso — el Generalísimo le pasó revistaa toda la tropa a la que le hizo muchas preguntas sobre todoen io referente al trato que le daban los Oficiales, recibiendopar respuesta : " Que eran muy bien atendidos y que no teníanquejas" . . Sin embargo, le informé al Generalísimo Tovar quetanta a la tropa corno a los Oficiales se les adeudaban muchosmeses (le paga y que la alimentación, por falta de recursos, noera buena ni adecuada, respondiéndome el Generalísimo en al-ta voz : "No tienen por qué preocuparse porque está para lle-gar un GRAN CONVOY". Después de esta respuesta, que no megustó mucho y me puso malicioso, me pidieron los Generalesver la "FLOTILLA DE GUERRA", por lo que los conduje alPaseo de Las Bóvedas, de donde podían observarla muy bien.

1)urr Jose de Obaldía,

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"Estaban en esos momentos an-clados en la Bahía los vapores"BOGOTA", "PADILLA", "ElCBUCUgTO" v unos veleros. El"CHUtL'ITO" como se sabe era elvapwcilo arlillado en que habíabeche yo mi campaña de mar, co-mo su Comandante, con el gradode Coronel . Mientras conversába-mos en el Paseo de Las Bóvedasllegó un mensajero y le entregóuna carta al Generalísimo Tovar,plan una vez que la hubo leído,se la pasó a los demás Generalesnotando entonces que todos, des-pués de su lectura, se me queda-ron mirando fijamente, con ungesto que interpreté de amenaza.Como mi situación en esos instan-tes era sumamente grave v meencontraba desarmado, en mediode un grupo (le militares de estaclase, sin perder la calma y comouna medida de salvación opté por

invitarlos a que bajáramos de Las Bóvedas y regresáramos alCuartel . Así lo hicimos y va en la Guardia de Prevención, elGeneralísiuno en forma nluv amigable y cortés me invitó a libaruna copa de champagne en el Gran lintel Central, pero yo nole acepté su invitación diciéndole : "que no me encontraba entraje aparente de salida, pero que en la noche iria a buscarlopara que nos la tomáramos". "No importa, General inc-replicóTovar— nosotros 10 esperamos hasta que se ponga su unifor-me de salida". Yo le respondí : "Es que me siento cansado ytengo que atender algunos asuntos del Cuartel, a la noche nosla beberemos . mi General" .

"Me informaron después que la invitación tenía por objetoalejarme de mis Oficiales v (le mis tropas para reducirme aprisión y después destituirme . También supe, que al pasar rosGenerales por el Parque de Catedral, de regreso del Cuartel ha-cia la Gobernación, al ver los frondosos árboles de acacia queallí habían el General Ramón G . Amaya exclamó : "Qué her-mosos árboles, se pueden colgar bastantes cabezas" . Y señalan-do cl más grande de los acacias dijo : "Este está bueno para lade hiedas" .

General Esteban Huertas,

"así era, cuando dióel golpe" .

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" Con respecto a la carta que le llevó el mensajero al Gene-ralísimo Tovar, mientras nos en-contrábamos en el Paseo de lasBóvedas. elías después comprobéque le fue enviada por un delatornacido en el Istmo y quien lucróhasta morir de los beneficios dela nueva República . En esa cartase denunciaba el movimiento se-paralista al Generalísimo y se leindicaba la conveniencia (le quese me asesinara para lograr asíel fracaso absoluto (le la Indepen-dencia del Istmo. Por piedad,callo su nombre

"Mientras los Generales meestaban haciendo esta visita, sepresentó el Dr, Manuel AmadorGuerrero, que era el médico del"Batallón Colombia" , a la Sala deBanderas y preguntó al Oficialde Guardia, Clodomiro Alfonso,"que dónde estaba Huertas " . Cm

Generoso ele Obaldía.mo el Oficial le informara que

"Inicia un aaunimiento parayo me encontraba en el Paseo de apresara los Generales co-Las Bóvedas con los Generales . lambianos . cuando eslnvie_el Dr. Amador se retiró apre- r<at uRnorcuado en la casasuradamente, v se metió en la

de la familia imané".casa de "Chale" Zachrisson, don_de permaneció hasta que los Generales abandonaron el Cuartely se fueron nuevamente para la Gobernación . Yo me imagino queel Dr . Amador Guerrero, a quien copio se sabe, habian abando-nado sus compañeros de conspiración, vino a dónde mi, con elfin de saber cuál era mi última resolución . Unos minutos des-pués (le haber salido del Cuartel los Generales, se presentaronmis amigos Ossita y Antonio Alberto Valdés, diciéndome quehabía mucho miedo en toda la ciudad, que todo el comercio es-taba cerrando, pero que habían visto al General Domingo Díazy a su hermano don Pedro, en movimiento y que ellos veníaiscon el fin de que los ampara, porque querían estar listos, si sepresentaba la hora . Les di las gracias y les (lije que se retira-ran, pero que procuraran yerme un poco más ta rde" .

"Cuando así lo hicieron y va solo . inc dirigí a las murallasde Las Bóvedas v únicamente con mi conciencia por testigo . me

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puse a reflexionar. Comprendi que el pueblo panameño teniala razón y motivos de sobra para su libertad y su independen-cia. Recordé que aquí tenia mi hogar, tenía nti hijo, tenía mismejores amigos y que a esta tierra había llegado siendo aún muyjoven . Me acordé también de que todos los panameños sin dis-tingos sociales ni de partidos, me habían demostrado sincerocariño desde el momento en que pisé las tierras islmcitas . Yllegué a la conclusión de que nimi espada de mili bu. ni mis sol-dados, podían mancharse con lasangre de un pueblo generoso queinc ¡rabia (lado su amistad y queahora pedía mi contribución paraalcanzar su largamente anheladalibertad . FM:, por lodo ésto que,cuando bajé de Las Bóvedas yahabía planeado 10 que !arría, máso menos una llora más larde" .

"Cuando regresaba al Cuartel,con mi decisión y con mis pla-nes en la mente, me esperaban unpoco afuera, los jóvenes AntonioAlberto Valdés v "Chale" Za-chrisson . Entonces se me acercóValdés v me dijo : "General, éslose está poniendo muy grave, dí-game qué es lo que pasa . Dudoya que se haga la independencia,

u'e!

po de Generososi usted no nos acompaña" . A lo

de Obaldía.que le respondí : "Estos dispuestoa volar el Cuartel si se hace ne-cesario" .

` ;Mientras se despedían de mi, pude darme cuenta de queel Dr. Amador Guerrero, salía de la casa de "Chale " en donde,como queda dicho, había permanecido desde que salió de laSala de Banderas, después (le haberle preguntado por mi alOficial (le Guardia Clodomiro Alfonso v de informarle ésteque yo me encontraba en los altos del Cuartel, con los Ge-nerales que habían venido de Colombim. Al ver al Dr. Amadorsali a su encuentr o y le pregunté "qué había de nuevo " a lo queme respondió : "General estamos perdidos, todo ha fracasado, sin-embargo voy al Central a ver si por casualidad encuentro a misdemás compañeros para hablar con ellos . Dentro de 20 minu-tos le informaré" "Chale" que se habla parado a cierta distan-cia siguió con el Dr. Amador para el Gran Hotel Centrad . Mien-tras yo esperaba dichos informes o algún recado siquiera del

Gil F. Sánchez,

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Dr. Amador, llegó mi compadre Pastor Jiménez y me dijo quecomo a las 12 :55 del día se había realizado en la residencia de

don Pedro A. Diaz una reunión,casi toda de jóvenes los que ha•pian resuelto apresar a los Gene.ralea cuando estuvieran a la un:de la larde almorzando en la Basa"de las .lované", pero que no sa-bía, por qué no lo habían hechaDespués me informó el joven Antonio Alberto Valdés, que era verdad lo de dicha reunión á iniciativ a del joven Generoso de Obaldíapero que la decisión de tomapresos a los Generales, como sehabía acordado, no se llevó a ca-bo porque mientras estaban reu-nidos se presentó el Dr . AmadorGuerrero y les (lijo : "no, no, esoes un disparate, una locura, tene-mos primero que hablar y poner-nos de acuerdo con Huertas . Yovov a lenta' . de hacerlo" . A esareunión, según informes del pro-pio Valdés, asistieron además desu iniciador Generoso de Obal-día, v él, los jóvenes Ricardo dela Ossa, Rito L . Paniza, Domingo

Jiménez I' . . Gil F. Sánchez, José :Manuel López, José Sánchez,Alcides (le la Espriella, Samuel Pérez, Carlos Clément, Lino Cle-mente Herrera y Azael Thatcher, barbero este último, a quiencuando fueron a citar lo encontraron en su barberia, rasurandoa un dienta Corto mi compadre Pastor Jiménez se habla que-dado conversando conmigo, le pedí que fuera a casa del Gene-ral Domingo Díaz y le dijera : "que se acordara (le nuestrasconsignas, porque los aconteeinrienlos se estaban precipitandoy podían desarrollarse de un momento a otro".

"Al salir nri compadre a cutuplir esta misión, llegó donCarlos Constantino Arosemena, otro patriota que acogió el mo-vimiento separatista con decisión y entusiasmo y me preguntópor el Dr. Amador Guerrero, informándole yo que había salidopara el Gran Hotel Central y que estaba esperando un mensajeque él me bahía prometido".

Azud THatcher,"dispuesto a apresar a

los Generales".

5t

"Como no me llegaban los mencionados informes del Dr.Amador y observara que eran ya las 2 :15 de la tarde reuní, atodos los oficiales en la Comandancia del Cuartel y les hablé enesta forma : "NO SOLO SE TRATA DE MI DEFENSA PERSO-NAL. SINO TAMBIEN DE LA DEUSTEDES. HOY LOS GENEI:A-LES EN LA SEGUNDA VISITAQUE ME HICIERON .17E MANI-FESTARON SUS DESEOS DEMUDARSE PARA LA P I E Z AQUE YO OCUPO EN EL CUAR-TEL Y CREO QUE SE TRATADE ASESINARME . ¿ESTAN UDS.DISPUESTOS A ACOMPAÑAR-ME ? ¿ESTAN UDS. DISPUES-TOS A SEGUIRME Y A CUM-PLIR MIS ORDENES, A PESARDE TODOS LOS SACRIFICIOSQUE HAYA QUE HACER? .17ECONTESTARON : "QUE SI" .SINEMBARGO, PARA ESTARMAS SEGURO LES ORDENE:"EL QUE DE U S T E D E S NO "También con de Obaldía'".QUIERA ACOMPAÑARME O NOESTE DE ACUERDO, QUE SE PONGA DE I'IES . Todos per-manecieron sentados dentro del más profundo silencio . " Váyan-se entonces a almorzar — les dije -- porque ya es tarde, peroeso si. regresen pronto porque pueden presentarse serios acon-tecimientos . Les pido la mayor reserva y no conversen nada deésto, ni con sus familias".

"A las 3 :45 de la tarde se presentó el joven "Chale" Zachri-sson con el mensaje del Doctor Amador, quien nie mandaba adecir lo siguiente : "HUERTAS NO HAY MOVIMIENTO, ES-TAMOS PERDIDOS . SI NOS QUITAN LAS CABEZAS QUENOS LAS QUITEN A LOS DOS, PERO NO CONDENEMOS ALOS DEMyS" . Aunque había un gran gesto (le nobleza en lasúltimas palabras del Dr . Amador Guerrero comprendí que lohablan dejado solo y que sus gestiones con los amigos de cons-piración en cl Gran Hotel no habían resultado . Entonces diri-giéndome a "Chale" le (lije : "Dile al Dr. Amador que compren-do su situación, que lo considero, pero que estoy dispuesto adarle no solo al Ejército colombiano, sino también a él, si fue-re necesario y a los acobardados que ya deben estar escondidos "

Lino (demente [terrera,

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"Como se ve claramente, mi suerte cataba echadal . Me en-contraba solo, puede decirse, en peligro de muerte y ante esta

situación tenía dos esperanzas : ladel "Batallón Colombia" con susoficiales y soldados y la promesasolemne que me había hecho elGeneral Domingo Díaz de acom-pañarme con el pueblo aunque lecostara su vida. Estaba reflexio-nando así cuando divise que seacercaba Ossita (Enrique de laGasa), quien un poco intranquilome (lijo : "General, el pueblo seestá reuniendo en Santa Ana ; allíbe visto a don Domingo en su ca-ballo, a su hermano don Pedro,a ltarmodio Arosemena, Pedro J.de Icaza, Archibaldo E . Boyd,Carlos A . Mendoza, Carlos Cons-tantino Arosemena, Carlos Cle-

. . . . otro del grupo . . . .

ment y otros . Yo creo que se tratadel movimiento cíe la Indepen-

dencia y vengo a ponerme a sus órdenes ". Le agradeci a Ossitasu ofrecimiento y le ordené que procurara estar con el pueblopara poder encontrarlo fácilmente cuando lo necesitan".

"Serían las -l :10 minutos de la tarde cuando volvió al Cuata-fi 1 el joven Antonio Alberto Valdés y me previno de que ya elpacido estaba reunido en Santa Ana con el General Domingo1)iaz a la cabeza, que habla mucha gente pero que pudo darsecuenta que don Pedro A . Díaz y el capitán Pedro J. de Icaza, es-taban tratando de culinario a fin de que no se cometiera ningu-na imprudencia . Me informó también que había visto al Gene-ral Nicanor A, de Obarrio en compañia del General LeonidasPrelelt, Jefe de la Flotilla del Pacifico, por la calle de LaCalzada y que éste, separándose de Pretell, le había dicho : "Dilea Huertitas que se amarre los pantalones como yo tengo tosmíos, porque a muchos se les están cayendo y ya los tienen mo-jados. Que no se preocupe por Leonidas porque yo lo acompa-ño sin dejarlo un instante y estoy preparado para cualquierareacción de su parte".

Rito L. Poni:a,

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"ES JUSTO QUE SE SEPA, QUE EL GENERAL DE OBARRIO DESPUES DE HABER RE-

('.IBIDO EL DIA 3 DE NOVIEM-

BRE DE 1903 A LAS SEIS DE LA

MAÑANA AQUEL TELEGRAMA

DE COLON, DONDE LE ANUN-CIABAN QUE YA IIABIAN LLE-GADO LOS GENERALES Y "EI.BAI'ALLON TIRADORES ", SE.VISTIO INMEDIATAMENTE. YSE FUE A LA CASA DEL SEÑOR1IERRER'I' PRESCOTT, QUIENERA El, SUPERINTENDENTE

FERROCARRIL. EN LAIUDAD DE I'_ANAMA, Y DES-

1)E El, TELEFONO DE ESTEIABLO CON EL CORONEL SIIE-

1)on Archibaldo E . Boyd, LEER, QUE TENIA LAS MIS-MAS FUNCIONES DE PRES-

"De los primeros en el par- COTT EN COLON, N ESTE LEque de Santa Ana . . . paramarchar hacia el cuartel d< CONFIRMO LA NOTICIA . NO

Chiriquí . . . "

CONTEN'T'O CON ESTO El . GE-NERAL DE OBARRIO SALLO

APRESURADAMENTE PARA LA RESIDENCIA DEL DR . AMA-DOR GUERRERO, QUIEN YA ESTABA EN EL ZAGUAN DEVIAJP; PARA EL HOSPITAL SANTO TOMAS, DEI . CUAL ERASU SUPERINTENDENTE Y QUE YA TAMBIEN SABIA LA NO-TEClA".

"Juntos salieron para la casa de Prescott, consiguiendo des-pués de mucha insistencia con el Coronel Sheller QUE SOLOHUBIERA TREN PARA VENIR A LA CIUDAD DE PANAMAPARA EL GENE11LISIMO TOVAR Y SU ESTADO MAYOR.

"Por eso fue precisamente que al visitarlo a la ligera cornoa las 8 de la mañana de ese mismo día, el General de Obarriome garantizara lo anterior " .

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