FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

125
GOBIERNO DEL ESTADO DE HIDALGO SECRETARÍA DE EDUCACIÓN PÚBLICA DE HIDALGO UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA NACIONAL-HIDALGO UNIDAD UPN 131 PROCESOS SOCIALES QUE FAVORECEN LA ADQUISICIÓN DE LA LECTURA ANTES DE LA LLEGADA AL PREESCOLAR FREDY VILLEDA RESÉNDIZ TULA DE ALLENDE, HIDALGO DICIEMBRE, 2010

Transcript of FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

Page 1: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

GOBIERNO DEL ESTADO DE HIDALGO

SECRETARÍA DE EDUCACIÓN PÚBLICA DE HIDALGO

UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA NACIONAL-HIDALGO

UNIDAD UPN 131

PROCESOS SOCIALES QUE FAVORECEN LA ADQUISICIÓN DE

LA LECTURA ANTES DE LA LLEGADA AL PREESCOLAR

FREDY VILLEDA RESÉNDIZ

TULA DE ALLENDE, HIDALGO DICIEMBRE, 2010

Page 2: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 2 ~

GOBIERNO DEL ESTADO DE HIDALGO

SECRETARÍA DE EDUCACIÓN PÚBLICA DE HIDALGO

UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA NACIONAL-HIDALGO

UNIDAD UPN 131

LICENCIATURA EN INTERVENCIÓN EDUCATIVA

PROCESOS SOCIALES QUE FAVORECEN LA ADQUISICIÓN DE

LA LECTURA ANTES DE LA LLEGADA AL PREESCOLAR

TESINA MODALIDAD ENSAYO

QUE PRESENTA:

FREDY VILLEDA RESÉNDIZ

PARA OBTENER EL TÍTULO DE LICENCIADO EN INTERVENCIÓN EDUCATIVA

TULA DE ALLENDE, HIDALGO DICIEMBRE, 2010

Page 3: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 3 ~

Page 4: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 4 ~

AGRADECIMIENTOS

A mis padres por dejarme probar mi

fuerza, por estar siempre al pendiente

de mis logros y fracasos, por permitirme

ser yo mismo y por dejarme robar

tiempo, cariño y sonrisas de sus vidas,

porque nada sin ustedes seria lo que es,

ni yo lo que soy.

A quienes permanecen cerca de mí

aun estando lejos, porque no ha sido

necesaria su presencia a mi vista,

cuando serán inmortales en mi

memoria.

Y a quienes están junto a mí, porque

cuando la distancia nos separe, los

recuerdos nos unirán aun más.

Permaneceré de pie gracias a ustedes…

Page 5: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 5 ~

ÍNDICE

Portada Portadilla Dictamen Agradecimientos INTRODUCCIÓN

i ii iii iv

5

CAPÍTULO 1. PRESUNCIONES SOBRE EL APRENDIZAJE DE LA LECTURA EN LOS NIÑOS

13

1.1. ¿CÓMO SE LES HA ENSEÑADO A LEER PEDAGÓGICAMENTE A

LOS NIÑOS?

1.2. EL APRENDIZAJE POR INTERACCIÓN

21

44

1.3. LA INTERACCIÓN DE LOS SUJETOS EN EL CONTEXTO

58

CAPÍTULO 2. CONCEPTOS ACERCA DE LA LECTURA 70

CAPÍTULO 3. LA INFLUENCIA SOCIAL EN LA ADQUISICIÓN DE LA LECTURA

79

3.1. PRESENCIA DE UN AMBIENTE ALFABETIZADOR EN EL CONTEXTO

91

3.2. ELEMENTOS DE IMPORTANCIA PARA EL ACERCAMIENTO A LA LECTURA EN EL HOGAR DEL NIÑO

110

CONCLUSIONES 119

BIBLIOGRAFÍA 123

Page 6: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 6 ~

INTRODUCCIÓN

Los niños y las niñas por naturaleza poseen interés y curiosidad por

conocer su entorno, por obtener explicaciones de lo que les rodea, ellos imaginan

y tratan de encontrar respuestas a las dudas que les genera la interacción con el

ambiente y una prueba de ello son las innegables preguntas “por qué” dirigidas a

los adultos. En este sentido los adultos debemos de aprovechar esta curiosidad y

presentarles situaciones para que observen, y a la vez para que generen en ellos

nuevos aprendizajes, que en el caso de la lectura les permitan desarrollar

actitudes de interés y deseos de adquirirla, sin esperar a que estén en una

institución escolarizada.

Es pues justificante suficiente para revisión social, un par de situaciones

que en la vida diaria se viven, la curiosidad innata del humano y los textos visibles

que en el pasado o en el presente ha creado; y que manejadas adecuadamente

sirven para favorecer la lectura de una manera sencilla y sobretodo familiar a los

niños y a las cuales por desgracia se han dejado de lado por parte de las personas

que tienen algún tipo de instrucción sobre la lectura y que podrían apoyar a los

niños; ya que se piensa que este tipo de aprendizajes son exclusivos de las

instituciones. Se plantea en este trabajo que la responsabilidad sobre la

adquisición de la lectura no debería ser considerada un baúl a abrirse solamente

en las instituciones, sino que puede ser descubierto desde antes de los cuatro

años; con la adquisición del lenguaje oral, y que con un acompañamiento no

Page 7: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 7 ~

rígido, puede favorecer una identificación de palabras, tanto de forma verbal como

conceptual en los niños.

Ya que es fácil encontrar casi en cualquier parte, de los medios donde

cohabitamos, diferentes textos, palabras o letras que se contienen en gran

variedad de materiales o espacios y que sin querer o sin planearlo ofrecen algún

tipo de estimulo visual a los niños, que bien pueden ser aumentados a curiosidad

por parte de los adultos, con la finalidad de despertar el interés sobre que

esconden las palabras o que significados tienen, y en otros de los casos cuando a

los niños les interesen propiamente, pueden ser decodificados por parte de los

adultos para que dichos niños solucionen sus dudas con respecto a tales palabras

o textos.

Por lo anterior, se presenta esta tesina en su modalidad ensayo donde se

ha rescatado, mediante la investigación documental, de forma analítica y

específica la temática de los procesos sociales que favorecen la adquisición de la

lectura antes de la llegada al preescolar, suponiendo que los lectores logren

visualizar que no es necesario llegar a una institución educativa para conseguir

que los niños aprendan a leer, sino que, es más bien tarea de los adultos que les

rodeamos el apoyarles, utilizando por una parte nuestra experiencia y por la otra,

el contexto en el que nos encontramos y que ha sido por lo regular desdeñado en

la enseñanza de la lectura, siendo que éste no se escapa en ningún momento de

la presencia de las letras.

Page 8: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 8 ~

Con los planteamientos hipotéticos y teóricos que se citan, se discierne que,

mediante el uso del contexto que nos rodea y en el que están inmersas las

palabras es posible que los niños logren la lectura de algunas de ellas, así como

reconocer su estructura y conceptualización, es decir puedan indicar de que letras

se componen además de comprender que representación social tienen, esas

palabras que están leyendo.

El objetivo de este trabajo es identificar aquellos aspectos creados

socialmente y que son de uso cotidiano, que favorecen a partir del apoyo que los

adultos den a los niños la adquisición de la lectura, puesto que no basta decir que

hay elementos aprovechables en el contexto para favorecer la lectura en los niños,

sino que es necesario reconocer la necesidad de compromiso por parte de los

adultos; para apoyar y servir de decodificadores a los niños, cultivando su

potencial y ganas de adquirir cada día nuevos conocimientos.

Se expone a lo largo del escrito que los niños pueden identificar las

palabras así como letras del abecedario que las componen y que se presentan

cotidianamente, para lograr una lectura desde antes de su incursión al preescolar,

partiendo de la importancia que se le debería dar a la constante interacción social

que se tiene en la actualidad, con las palabras, así como al bombardeo de

información escrita en anuncios, productos, medios de comunicación, centros de

venta y otros aspectos que bien son reconocidos por Kalman, como una escritura

de vía pública.

En los contenidos abordados, en el primer capítulo de este trabajo, se

desarrollan algunas teorías del aprendizaje, con respecto a la lectura, que hacen

Page 9: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 9 ~

los niños antes de su incursión en el preescolar. En ellas se da aceptación a la

idea de que el aprendizaje, inicia en los niños, desde muy pequeños, es decir,

desde que nacen, pero se especifica cómo cada uno de los autores que han sido

revisados, las adecuan a ciertos esquemas, derivados bien del estudio de los

procesos de desarrollo cognitivos o en su caso de los procesos de socialización

que viven los niños.

Se plantea que, a partir de un ambiente alfabetizador socialmente creado,

en el que el infante tiene un acercamiento a la lectura puede derivar en una

manipulación de los textos desde muy pequeño, y en caso de una debida

aplicación y enfrentamiento a esa información, desde la familia en primera

instancia y posteriormente desde el resto de la sociedad, es que puede darse un

aprendizaje de importancia así como un avance en su lectura, aceptando que

esto dependerá del ímpetu con que se le esté apoyando en la interacción y

estimulación en tal ambiente, así como las capacidades que tenga para reconocer,

asimilar, así como de manipular la información que se le proporcione.

Asimismo, se reconoce en este trabajo que la lectura en la primera infancia

debería estar presente desde la aparición del lenguaje como el mismo hecho de la

comunicación y sus componentes, por un lado emisor y receptor y por otro el

mensaje. Solo que aquí se plantea que las funciones de los elementos de la

comunicación variarán de acuerdo a los fines de enseñanza lectora que se

persiguen, quedando entonces su organización, de la siguiente manera: receptor

(el niño), un mensaje (la palabra escrita) y un conductor (el decodificador

experimental) como escuetamente se interpreta a estos elementos.

Page 10: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 10 ~

El contenido que se aborda en el segundo capítulo alude principalmente a

las interpretaciones que diversos autores como Villacastin, Mialaret, Montessori y

Vilarrubies, entre otros, dan al acto de leer, se proporciona básicamente la relación

de dichos términos que se han asignado a la lectura, con respecto a la importancia

de propiciarla desde edades tempranas en los niños, dado que si se parte de un

ambiente social, no habrá mayor dificultad en que reconozcan las palabras o los

textos que por parte de los adultos en principio, son expresados para que los niños

los vayan conociendo en sus términos escritos.

Se indica que el acto de leer, no es la simple decodificación de letras, para

pronunciarlas cuando forman una palabra, es más que eso, refiere una ubicación

contextual y el previo conocimiento del objeto, sujeto o situación que es

mencionado, de hecho en el caso de que los adultos les lean a los niños palabras

extrañas a ellos, o que éstos las encuentren cuando apenas empiezan a leer, se

debe de rescatar, esta posibilidad de acrecentar en los niños sus conocimientos

acerca de las palabras, apoyándoles en el conocimiento de lo que representa el

término, recién encontrado.

Y se presenta de una forma más completa, que el resto de trabajos de

investigación, en este segundo capitulo, el método de Glenn Doman, que se ha

puesto en marcha con mayor éxito, y que representa un gran esfuerzo, puesto que

infiere las primeras palabras significativas en el niño, y posteriormente otra gran

cantidad de ellas, aunque éstas por ser generadas con el interés de esquematizar

el proceso de aprendizaje, deja en cierta manera fuera lo que es el uso del

contexto, pues se basa más que nada en crear tarjetas de lectura. Por lo que

desde la perspectiva que se manejará en este trabajo, no se le resta importancia

Page 11: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 11 ~

para la aplicación en los niños, pero si dista de integrar y aprovechar los textos de

la cotidianidad de los niños, en los diferentes contextos en los que se desarrollan.

En los párrafos del tercer capítulo se expresa que el acercamiento, a las

palabras del contexto, que tenga el niño desde antes de la llegada a una

institución, será parte de su formación social y dependerá en principio de su

familia, posteriormente de la sociedad que le rodee y se podrá revelar en el futuro

en medida de su aprovechamiento y avance cognitivo en las instituciones

educativas a las que ingresará alrededor de una edad de cuatro o cinco años.

Considerando desde las propuestas, tanto ya aplicadas, como las de

investigación que dan elementos para amparar la presente temática, se sustenta

que los niños que sean estimulados desde pequeños y a los cuales se les instaure

un amor por la lectura, sobrepasarán la generalidad, de aquellos a los cuales se

les enfrente al uso de las letras tanto en su escritura como en su lectura, hasta la

entrada al tercer grado de preescolar así como al primero de primaria.

También a lo largo del trabajo se toca de manera superficial, que uno de los

programas con mayor aceptación en el país, es el de educación inicial y que bien

por su contacto directo con padres de familia podría ofrecer, ciertos tipos de

capacitación o asesoramiento, para desarrollar actividades de lectura en casa, con

los niños pequeños, más a partir de este año (2010), que ha salido a relucir una

expectativa de lectura para cada grado escolar, a partir de la primaria y

secundaria, pero que sin embargo carece de un planteamiento de desarrollo y

aplicación para los grados inferiores a lo que compete la escolarización primaria.

Dejando en el aire la postura que habrá de tomar el preescolar y que a la fecha de

Page 12: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 12 ~

elaboración de este trabajo, se ha preocupado sólo por darles a los niños

situaciones de pre-lectura, pre-numeración y pre-escritura.

Si usamos como base del aprendizaje de la lectura la interacción que se

logra dentro de la familia, así como los textos y espacios visuales en los que son

utilizadas las palabras, que están presentes en la realidad de la mayoría de los

niños y que les estimulan sus conocimientos, prácticamente desde su llegada a la

vida, podremos fomentar en ellos una adquisición de la lectura, sin siquiera alterar

su desarrollo, ya que todos los elementos son algo de diaria interacción, que aún

no se han explotado en pro del desarrollo y mejora de la infancia, pero que se

podría hacer con un acompañamiento, por parte de todos aquellos que tienen

conocimientos sobre la lectura y que están alrededor de los niños que aún no han

ingresado al preescolar y que ya cuentan con un lenguaje verbalizado.

Al final se podrá entender cómo los procesos que se viven dentro del

contexto social que rodea a un niño, como lo son la interacción con familiares, uso

de la palabra, observación de situaciones y experimentación con diversidad de

textos, hasta los cuatro años, tienen una gran implicación en la formación de sus

conocimientos y que con la ayuda necesaria desde las perspectivas de los

adultos, puede lograrse en él una lectura de las palabras que en primer momento

se extraerán del mismo contexto y en segundo de los libros y demás textos

complejos y extensos, con los que pueda interactuar.

Page 13: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 13 ~

CAPÍTULO 1.

PRESUNCIONES SOBRE EL

APRENDIZAJE DE LA LECTURA EN

LOS NIÑOS

Referir en este capítulo las teorías de aprendizaje que se han desarrollado

en cuanto a la adquisición de la lectura, es un tanto crucial para la presentación de

los que le son subsecuentes, ya que no podrían dejarse a un lado las diversas

interpretaciones que autores como Bühler, Chomsky, Grace, Ferreiro, Teberosky,

Kalman, Doman, Vigotsky, Cohen, Bruner y otros, dan al aprendizaje humano,

que por misma lógica, como plantean la mayoría de ellos y con quienes se va de

acuerdo en este trabajo, se inicia desde el desarrollo intrauterino, pudiéndose

visualizar y comprobar después del nacimiento, cuando ya cada sujeto actúa por si

solo dentro de la sociedad respondiendo a los estímulos que tanto ésta, como el

ambiente le proporcionan; terminando evidentemente al llegar la muerte de cada

individuo.

Para sostener lo antes mencionado, no es raro escuchar, en las

conversaciones de las personas que se dedican a la educación de niños pequeños

o que tienen una profesión, o aquellas a las que les interesa la lectura, y que por

medio del acto de leer, de sus propias experiencias o de sus investigaciones y

estudios, casos en los que se trabaja o se ha trabajado con estimulación

Page 14: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 14 ~

intrauterina1, esperando iniciar, en el niño, desde los primeros meses de desarrollo

dentro del vientre de la madre, ciertos temperamentos o actitudes posteriores a su

nacimiento, entre estas actividades están las referidas al uso de diferentes tipos

de música, diferentes tipos de color de luz proyectados a través del vientre de la

madre, con los que desde esta edad, el niño tiene reacciones de movimiento. Otra

situación que se trabaja con madres embarazadas y que nadie habrá de negar, es

recomendada por los familiares más allegados a éstas, por los conocidos y por los

médicos que les llegan a atender, es el mantener comunicación con el niño2, es

decir que se le hable dulcemente y se le acaricie, haciéndole sentir querido y

deseado, para que al nacer y posterior a este momento, sea un niño con un buen

nivel de autoestima.

Después del nacimiento el niño manifiesta sus necesidades a través del

llanto cuando aún no tiene lenguaje, es comprensible reconocer que ya hay un uso

de la inteligencia, asimismo del aprendizaje, pues ha percibido que los adultos en

la mayoría de las veces preocupados por que él esté cómodo, tranquilo y seguro

acudirán a calmar sus malestares, mayormente cuando presente ansiedad o

llanto, así el niño poco a poco reconocerá que los demás están al pendiente de

sus actitudes y que a cada una de ellas responderán de diferente manera, por

ejemplo la variación del llanto influirá en la atención que se le de; arrullo para que

duerma o se apacigüe, leche o alimento para que satisfaga su hambre o bien

abrigo para calmar su frío, entre otros ejemplos más.

1 Revisado en: http://www.estimulacionprenatal.com.mx.html. 26 octubre 2009.

2Revisado en: http://www.guiainfantil.com/blog/71/hablar-con-el-bebe-durante-el-embarazo.html. 25

de febrero de 2010

Page 15: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 15 ~

En cuestión a la funcionalidad de las partes de su cuerpo las primeras

manifestaciones de inteligencia práctica se dan a los seis meses de vida y estas

están referidas a la propia manipulación que el niño da a sus miembros superiores

e inferiores contando ya con una intención según Charlotte Bühler,3 tal es el

ejemplo que se presenta cuando los niños al tener ya la mamila en sus manos

después de haber llorado por presentar hambre, la toman y retienen durante el

tiempo en el que están tomando la leche y al sentirse llenos la sueltan; además de

la manipulación corporal, a través de la visión pueden fijar objetivos, generando

de acciones ya intencionadas, aunque se interpreten como situaciones de

ansiedad, por los adultos. Este tipo de expresiones las hacen también cuando se

les presentan sonidos que activan su sistema auditivo pues al igual que cuando

ven algo, se expresan con movimientos repentinos y agitados.

Posteriormente comienzan a coordinar más sus actitudes alargando

progresivamente su atención, propiciando actividades cada vez más lógicas y

sociales, en el sentido de lograr un autocontrol de su conducta así como de su

cuerpo, estas actividades que son mas de interacción con los adultos o personas

que rodean al niño, aún otros niños mayores, pueden ser las de aparecer y

desaparecer, hacer ojitos (como dicen a la actividad de parpadear rápido) o gestos

y muecas con la cara. En su corta edad también comienzan a poner atención a

quien les habla, pudiéndose platicarles y ellos poner cierta atención a lo que se le

dice, sin tener por supuesto respuestas verbalizadas del niño, sino más bien

diversos movimientos de las extremidades del niño, o gestos de diversos tipos,

que se identifican en el rostro del niño (sonrisas, llanto, euforia, tranquilidad).

3 Revisado en http://www.upn081.edu.mx/antologias/antologias/lie/7s/ADDIT.pdf. 27 de octubre de

2009.

Page 16: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 16 ~

Así poco a poco, reconocen cuando se les pide realicen ciertas actividades,

como sonreír, taparse la cara con la mano, aparecer o desaparecer detrás de la

madre, y esta misma relación que se da con los adultos, les hace reconocer

progresivamente los nombres de sus prendas de vestir, ya que cuando se le cubre

del frio, se le dice que no se quite la gorra; y aunque de manera inconsciente se

emitan estas palabras, por el hecho de que el adulto que cuida del niño, o de

quienes le rodean, reconoce los nombres de los objetos y su uso, en el niño se

van haciendo cada vez mas familiares con respecto de los objetos que citan.

Este mismo desarrollo como parte del proceso de aprendizaje propiciará en

los niños el descubrimiento de que todos los objetos tienen un significado, que

pueden ser nombrados además de reconocidos al interiorizarse, permitiéndoles

dar cabida a sus funciones memorísticas. Es entonces entendible que en la edad

temprana mientras mayor información se presente al niño acerca de los objetos,

de sus usos, nombres, al igual que sus características, se podrá lograr en ellos un

grado mayor de conocimientos y de expresión oral, que le permitirá ir reforzando

su memoria, pues sabemos bien que en sus primeros años y después de la

aparición del lenguaje, este mismo le sirve para reforzar su sistema cognitivo.

En relación a la apariencia física Grace, señala que entre los dos y los seis

años, el cuerpo del niño va perdiendo el aspecto infantil a medida que cambian su

tamaño, sus proporciones y su forma, pero además que al mismo tiempo que

cambia su cuerpo, el rápido desarrollo del cerebro da origen a habilidades más

complejas y refinadas de aprendizaje, así como al perfeccionamiento de las

Page 17: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 17 ~

habilidades motoras gruesas y finas.,4 Es alrededor de estas edades cuando los

niños comienzan sus actividades exploratorias directas, en las que gracias a su

marcha o por lo menos a su desplazamiento de gateo, pueden ya acercarse a

revisar detenidamente objetos, visualizándolos desde lejos y persiguiéndolos con

la mirada en las ocasiones que éstos se mueven.

Las cuestiones de exploración que van teniendo los niños desde estas

primeras experiencias de desplazamiento, en definitiva se deben aprovechar para

que mas allá de el puro enfrentamiento a los objetos, logren una experimentación

corporal con los cuerpos inmediatos, pudiéndose presentárseles con una buena

manipulación e intervención de los adultos en formas palpables y atrayentes, que

es lo que en este tema resulta de interés, si se le quiere dar importancia desde

esta edad, a una interacción de los pequeños con los textos que le rodean y por

ende con las letras, que se pueden ofrecer en forma de artículos palpables y

manipulables, indispensables para lograr la lectura de los textos del contexto5 que

les rodean.

Si se estimula de forma simple, pero continua a los niños, al estar

enfrentándolos a las palabras y mostrándoles el objeto que representan,

identificando desde entonces la configuración de cada letra, al sentirla y reconocer

su forma, gracias a su vivencia, pueden identificarles en los diferentes lugares de

su entorno en los que son utilizadas ya con la simple representación, es decir

4 Revisado en:

http://licenciaturas.upnlapaz.edu.mx/Programasacademicos/LIE/LIEAntologias/03semestre/DESAR

ROLLOINFANTIL.PDF. 7 de octubre de 2009.

5 Paulo Freire y Donaldo Macedo (1989). Alfabetización, Lectura de la palabra y lectura de la realidad.

Barcelona, Ed. Paidos. pág. 63

Page 18: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 18 ~

pueden saber donde hay letras al observar los elementos que se imponen a su

paso en las calles y demás lugares donde transitan, bien en las placas y anuncios

que hay en las vías publicas, como los letreros y señalamientos o en las que

anuncian los productos que están en venta, por citar los más comunes.

A los cinco años, el cerebro del niño alcanzará casi el tamaño del cerebro

del adulto, por lo que su desarrollo le permite entonces aprender, resolver

problemas y utilizar el lenguaje en formas cada vez más complejas, el número

infinito de conexiones neuronales que se forman a lo largo de la vida constituyen

el fundamento físico del aprendizaje, la memoria y el conocimiento general.6 Esta

maduración del cerebro y del sistema nervioso central incluye la mielinización,7

que comienza durante la infancia temprana en las neuronas que producen los

reflejos así como la visión, posteriormente se sigue de las que realizan actividades

motoras complejas, luego, de las que controlan la coordinación entre ojos y

manos, el lapso de atención, la memoria y el autocontrol, la mielinización del

sistema nervioso central acompaña de cerca la adquisición de habilidades motoras

cognoscitivas durante el periodo preescolar.

De hecho a los cuatro años la mayoría de los niños han cerrado sus

procesos de desarrollo motor gruesos y de control corporal ya que estos en

adelante solo se reforzarán en su funcionalidad, es decir, solo irán

perfeccionándose al poder especializar cada vez, los movimientos de cada parte

6 Revisado en:

http://licenciaturas.upnlapaz.edu.mx/Programasacademicos/LIE/LIEAntologias/03semestre/DESAR

ROLLOINFANTIL.PDF. 17 de octubre de 2009.

7 Revisado en: http://www.upn081.edu.mx/antologias/antologias/lie/7s/ADDIT.pdf. 25 de octubre de

2009.

Page 19: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 19 ~

del cuerpo. Por ejemplo, antes de los cuatro años los niños demuestran una

excelente capacidad de agarre y prensión con las manos, pero aún no tienen la

especialización en la pinza y la manipulación de su dedo pulgar frente a los otros

como elementos funcionales, para tomar con delicadeza objetos muy pequeños,

además de lápices o colores que son básicos en la escritura, pero que por el

hecho de no requerir para la lectura este tipo de materiales, no se maneja como

parte a discutir en este trabajo el que el niño, tenga trazos controlados, cuando

tiene ya una conceptualización de los que son ciertos elementos y además su voz

para reproducir y explicar lo que ve, hace e intenta plasmar o descubrir; en el

sentido de las palabras o letras.

Como se decía, antes de los cuatro años hay una excelente presencia del

habla en la mayoría de los niños, lo cual les permite comunicar, describir y

responder en un cuestionamiento o interactuar en una conversación, a estas

edades después de que ya han vivido entre objetos manipulables que representan

a las letras, bien puede cuestionárseles sobre los nombres de ellas, de igual

manera que describan como están formadas, en cuestión a las líneas verticales o

las líneas curvas que en la mayoría de ellas se usan, de hecho se podría hasta

comenzar a jugar con ellos con diferentes materiales para ir formando letras, no es

descabellado pensar en que se pueda hacer la comparación de una letra “t” con el

martillo de papá, la llave de cruz o el zapapico, o que se pueda indicar que una

herradura de caballo es ya la letra “c” y que si se le agrega una varilla en forma

vertical al lado derecho y hacia arriba se forma una “d”, o con la misma varilla y

hacia abajo se forma una “q”, entre otras tantas combinaciones de materiales

diversos.

Page 20: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 20 ~

Es un sinnúmero de actividades que centradas en el juego del niño,

pueden hacer participes a las letras y las palabras que con ellas se puedan formar,

sin siquiera usar una metodología pedagógica establecida o diseñada para edades

tempranas, en especifico, sino más bien de interacción o de forma global, en el

sentido de que se estará requiriendo y apoyándose de todas las situaciones y

espacios en los que se localicen letras o textos o aquellas en las que se les pueda

formar, así se estaría logrando que el niño formase palabras, sin usar los trazos

con elementos convencionales como los lápices, crayones o colores, siendo

apoyado de un adulto al indicarle que letras colocar; o reproduciendo las palabras

de etiquetas de productos o bien de cualquier lugar donde las haya, rescatando la

pura forma de la letra, conociéndola ya por su sonido y nombre, si es que se han

interiorizado estos en su mente; y posteriormente pronunciando la palabra sobre la

cual se ha trabajado, la variante de materiales moldeables o que se ajustan a la

formación de letras y palabras dependerá de la imaginación que tanto el adulto

como el niño tengan, además del mismo deseo de comparación que den a los

elementos que les rodean.

Page 21: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 21 ~

CAPÍTULO 1.1

¿CÓMO SE LES A ENSEÑADO

PEDAGÓGICAMENTE A LEER A LOS

NIÑOS?

La ansiedad por enseñar a los niños a leer desde la incursión en el ámbito

escolar ha tenido variables exitosas, algunas de las que trataremos en los textos

siguientes y que demuestran que los experimentos aplicados en países como

Estados Unidos y Europa, han tenido un excelente resultado en el alcance de la

lectura, aunque la realidad es que la mayoría de los métodos pedagógicos y las

instituciones que los aplican, no solo en estos países donde ya se han puesto en

marcha proyectos de lectura, sino en casi todo el mundo, se niegan a ofrecer al

niño la posibilidad de acceder a la lectura, reforzándole sólo en las áreas afectiva,

social, sensorio motriz, manipulativa y proponiéndole actividades de pre-escritura,

pre-lectura y pre-numeración, que bien podrían acompañarse con una lecto-

escritura mayormente especializada.

Aún con las propuestas del desarrollo de una lectura a temprana edad,

como las que se presentaran a continuación, la negativa de la mayoría de la

población, a ofrecer una estimulación por la lectura a los niños antes de

incursionar en la primaria o el preescolar, es enorme, y los exime de la posibilidad

de lograr un futuro, más exitoso. Y aunque apenas en este mismo año (2010), en

México se propone un cierto nivel de lectura a nivel primaria, no se explica, como

habrá de lograrse claramente, o que método aplicar para ello, sino que solo se

Page 22: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 22 ~

maneja el de el ejemplo y el acompañamiento por parte de los padres, cosa que

sin duda es un avance, pero donde queda entonces una propuesta de iniciación

en el ámbito preescolar, y con ello de un método que sea aplicable dentro de las

aulas.

Verdaderamente las sugerencias deberían de permitirse también, ir más

allá y ofrecer lineamientos aplicables tal vez desde antes de que entren a

cualquier institución, no solo preescolar o primaria. A esto se puede indicar que

mientras más temprano se inicie con un acercamiento a la lectura en los niños,

mejores serán sus niveles de aprovechamiento en su desarrollo escolar; y uno de

los programas que cubre nuestro territorio nacional y que tiene cabida y

aceptación entre las poblaciones, mayormente con el sector de los padres de

familia, es el programa de Educación Inicial, manejado por el Consejo Nacional de

Fomento Educativo, que propone estrategias de interacción con los hijos, así

como capacitaciones a los padres para que conozcan el desarrollo de sus

pequeños y de que forma apoyarles.

Pero aquí podría darse cabida a un encaminamiento para la aplicación de

métodos de lectura como los que se presentaran a continuación, ya que las

promotoras de estos programas, podrían recibir entre sus capacitaciones

información que ofreciera formas de enseñanza a niños que estén accediendo al

lenguaje hablado y a la conceptualización de objetos y situaciones; sin que esto

implicara la obligación de ellas o los padres, para que los niños lean lo más pronto

posible. Pero sí, se estaría estimulando ya una responsabilidad y hasta una

aspiración de los padres por lograr que sus hijos tengan un acceso a la lectura,

respetando el nivel progresivo que tengan los niños, con respecto al

reconocimiento de las letras y algunas palabras que se formen con ellas.

Page 23: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 23 ~

Para iniciar con los diversos métodos desarrollados en pro de un acceso a

la lectura, se expone que estos no manejan una esquematización regida por el uso

de los lápices y cuadernos, como lo vemos en las aulas a donde van los

pequeños, sino que dejan estos materiales un poco de lado y se inclinan más por

rescatar el deseo de aprender de los niños y el hacerles sentir sobre lo productivo

de esta actividad, así como de la importancia que tiene para el desarrollo en la

vida de cada uno de ellos.

En la década de los sesentas, Moore, Bereiter y Engelman indican el

aparecer en Estados Unidos y en diversos países europeos de formas de

intervención a nivel de preescolar en los niños entre 2 a 5 años llamados

desfavorecidos8 social, económica, cultural y lingüísticamente como una

educación compensatoria, para aquellos que presentan un mínimo de

motivaciones del medio que les rodea, planteando como objetivo el preservar y

favorecer todas las capacidades de creatividad de los niños a nivel de preescolar

desarrollando así una familiaridad y aprecio en sus propias capacidades. En este

sentido no se esperaba claramente que los niños participaran diariamente en el

programa, puesto que se sabe este tipo de programas no son de carácter

obligatorio, sin embargo al rescatar la autoestima de los niños, indicándoseles que

podían hacer bien las cosas o mejor dicho leer si se lo proponían, se daba un paso

más adelante, puesto que se deja de lado la importancia sobre lo que los

educadores saben, y se pone en primer lugar ya las capacidades de los niños.

8 Ana María Corral Villacastín (1997). El aprendizaje de la lectura y escritura en la escuela infantil.

Universidad Complutense de Madrid. pág. 79

Page 24: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 24 ~

En este sentido debemos reconocer que cuando se enfrenta a los niños a

situaciones que les representan un reto, ellos se sienten incitados a buscar la

forma de salir vencedores, por así decirlo, y comprobar a los adultos sus

capacidades, así, si ponemos a un niño pequeño a armar torres de bloques,

cuando se pretende como objetivo la seriación o la agrupación por características

de tales bloques, el simple hecho de ser para ellos un juego en el que la

construcción y destrucción de lo que manipulan, les motiva. Y representa para el

adulto una actividad que podrá o no especializase de acuerdo a los estímulos y

nuevos retos que ponga al niño, en el sentido de conducirle para que posterior a la

formación al azar de los bloques, lo haga por colores, tamaños o formas. Y en este

mismo sentido podrán inferirse actividades que apoyen la formación de palabras

y/o letras, así como su identificación, en el mismo ejemplo que se ha hecho con la

formación de las torres de bloques.

En la investigación de Moore y sus colaboradores se planteaba que los

profesores, fueran también del mismo medio que los niños y no estaban

preparados como educadores por lo que fomentaban solamente la autonomía del

alumno permitiéndosele elegir el tipo de actividad que quería realizar, el tiempo

dedicado y la corrección de esas actividades en un ambiente alegre y sin

tensiones, y sin ser forzado a trabajar en el que se considera que el hecho de no

hacer nada especialmente ya era una situación propia de aprender. Así se puede

rescatar para la actualidad, que el aprendizaje de los niños se de en base a sus

necesidades, intereses y capacidades y a la vez el educador sea un apoyo que

medie al niño entre lo que puede mejorar de sus actividades y le interrogue en

cuestión a lo que está presentando, de tal manera los niños lograrían trabajar en

un ambiente de confianza que les haga participes de los conocimientos y no

solamente receptores pasivos, en los que los educadores descargan sus

conocimientos.

Page 25: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 25 ~

En este proyecto los niños podían trabajar con el conocido invento de

Moore, la máquina de escribir parlante, que era como un ordenador que enseñaba

a los niños a leer. Diciéndoles la palabra que habían escrito en el teclado,

deletreando las letras, dibujando el concepto de la palabra escrita, etc.9 Así que,

con la máquina de Moore, se podía combinar la lectura y la escritura cuando los

niños tenían la oportunidad de experimentar el uso de la máquina, en cuestión a la

lógica matemática este proyecto propiciaba en el rincón de los juegos de

probabilidades. Y en grandes pizarras los niños podían escribir o hacer dibujos

libres que explicaban o no a los profesores; por ello, Moore comprobó tras unos

años, que esta experiencia había resultado muy satisfactoria para todos aquellos

que se habían visto implicados.

Aquí podemos constatar que no es tan necesaria la presencia de una

persona de carácter rígido, o que siempre pida evidencias de trabajo a los niños,

para comprobar que están teniendo aprovechamiento del tiempo y actividades en

las que participan, y que si bien tendrá cierta capacitación, para mostrarse como

un sujeto que acompañe el aprendizaje de los niños, le será de más utilidad el

comprender el contexto en el que se desarrollan, sus necesidades y tal vez hasta

las aspiraciones que puedan tener, ya que básicamente los profesores que

pueden ofrecerse en las instituciones y que vienen de contextos diferentes a los

de los niños se preocupan más por presentar evidencias de su trabajo, que por

rescatar el verdadero potencial de sus alumnos, encajonándoles a seguir un

sistema homogéneo de aprendizaje.

9 Ana María Corral Villacastín. Op. cit. pág. 79.

Page 26: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 26 ~

Posteriormente se impulso el método de Moore en una escuela pública,

teniendo resultados igualmente satisfactorios en habilidades de comunicación,

matemáticas y ortografía.

Con semejanza a lo que pudo ser la máquina de Moore, actualmente se

venden y anuncian juguetes interactivos, en los que los niños solo tienen que

presionar igualmente botones y van comprendiendo el sonido de las letras, tal vez

de los más conocidos puedan estar aquellos parecidos a las computadoras y que

se prescriben para niños de tres a cinco años, en los que como punto máximo de

aprovechamiento se logran construir palabras, a las que los niños reconocen,

cuando la máquina las pronuncia y deletrea.

No es de desdeñar que este tipo de juguetes tienen funciones numéricas y

relacionadas a la lectura, que por un lado pueden ser descifradas por la misma

computadora cuando el niño las manipula o bien, el aparato hace las sugerencias

y el niño, debe presionar las teclas para formar la palabra que describe a la

imagen y es a la vez felicitado o no por el cerebro electrónico, con que interactúa,

hay además de este aparato otros, que ya se pueden conectar hasta al televisor y

que con movimientos de pedaleo en una bicicleta, se pueden ir descubriendo tanto

paisajes como números, cantidades, letras o palabras, conforme se avanza o se

toman diferentes rutas. Así como los anteriores hay otros que incluyen juegos,

efectos de sonido, animaciones y que usan baterías al igual que los llamados

cuadernos parlantes, que se venden y podrían estar al alcance del bolsillo de

quien se proponga adquirirlos, en apoyo al aprendizaje de sus hijos; lo importante

de esto sería que se diera el seguimiento al interés del niño por encausarse en el

mundo de las letras,

Page 27: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 27 ~

En la década de los setentas C. Bereiter Y S. Engelmann, también elaboran

un programa para alumnos de 2 a 5 años de medios sociales, de la misma manera

desfavorecidos, preocupándose por la felicidad de estos alumnos y por recuperar

el ritmo normal de progreso o, incluso, superarlo. Su objetivo primordial es

fomentar la capacidad lingüística del niño porque con ella se mejora el

pensamiento10 y, por lo tanto, los aprendizajes. Consideran a la lectura como un

instrumento indispensable en los aprendizajes posteriores, por ello propone al

educador una serie de reglas para conseguir un clima de desarrollo lo más

favorable posible, planteando partir de unos aprendizajes de base, reconocer los

efectos nocivos de la fatiga en el aprendizaje y ofreciendo consejos sobre dar

confianza al niño y enseñarle a utilizar el tiempo libre. Concluyendo que mientras

más precoces son los aprendizajes, más eficaces resultan, puesto que en niños

que comenzaron más tarde el programa, aunque conseguían adelantos,

mantenían lagunas de ortografía y comprensión del lenguaje escrito; en este

sentido apoyan que cuanto más pequeño el niño, menor desajuste causa la

enseñanza de situaciones, puesto que tiene el tiempo para aceptarlas, debido a la

misma convivencia que tiene con dichas situaciones.

Al hacer la aseveración de que la convivencia es un factor decisivo en el

aprendizaje C. Bereiter Y S. Engelmann, confirman una vez más que el tiempo de

interacción con objetos y sujetos, propicia en los niños un mayor grado de

aceptación de los aprendizajes, en este entendido, se puede reconsiderar una vez

más que de la interacción que los infantes logrona con respecto a situaciones de

lectura dependerá su comprensión de las palabras, con las que se enfrenta;

además de ellos se debe reconocer que lo básico es despertar en ellos una buena

autoestima, y el poder de creer en si mismos y de esto deberán de ser

10

Ana María Corral Villacastín. Op. cit. pág. 80

Page 28: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 28 ~

responsables más que nadie los adultos, que interactúan directamente con ellos,

además de otros niños mayores, que podrían facilitarles el acceso a la lectura de

palabras, si ya tuvieran esas experiencias ellos.

El seguimiento de la investigación de C. Bereiter Y S. Engelmann, indicó

que cuando los niños que la recibieron pasaron a educación primaria, los que

aprendieron a leer en preescolar11 y se les continúo aplicando el mismo tipo de

método, tuvieron excelentes resultados en cuanto a su desarrollo, más no así en

los que se aplicaron las clases tradicionales. Con esto se defiende que mientras

más pequeños, los niños, mayormente se pueden encauzar a ciertos aprendizajes,

así más allá de sus intereses por el juego o el desasosiego se les puede formar un

régimen de vida en el que actividades de interacción con las letras se hagan

cotidianas y fáciles de realizar.

Y es que es mediante el seguimiento a los resultados de dichos

aprendizajes que se comprueba que no existe ningún efecto perjudicial, y se

demuestra que un aprendizaje temprano de lectura es viable en un sistema

escolarizado de educación, por supuesto respetando la misma característica de

aprendizaje que los niños tengan, en tanto no se interfiera con palabras diferentes

o irrelevantes a su contexto.

Ana María Corral Víllacastín en su libro titulado “El aprendizaje de la lectura

y la escritura en la escuela infantil”, propone que la enseñanza de la lectura en

pequeños de hasta cuatro años dentro de las instituciones escolarizadas es

11

Ana María Corral Villacastín. Op. cit. págs. 81-82

Page 29: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 29 ~

operable y no le afecta posteriormente si se sabe retomar el sistema educativo

que es utilizado en la enseñanza del niño, desde un inicio, por ello indica que:

1. El niño a los 2, 3 y 4 años tiene sed de conocimientos que se manifiesta en una gran

hiperactividad, con lo cual, si le damos esa oportunidad de saciar su sed, se sentirá más

tranquilo y disminuirá la inquietud.

2. Su gran capacidad y actitud para el aprendizaje, le ayuda durante los primeros meses

cuando más fácilmente se pueden aprender varias lenguas simultáneamente sin esfuerzo

adicional.

3. Tiene mayor capacidad para adquirir habilidades lectoras, en la edad temprana que en

edades posteriores.

4. No le temen a nada y no consideran la lectura como una asignatura obligatoria sino

como un mundo lleno de cosas que aprenden.

5. El niño es capaz de oír y transformar ondas sonoras en impulsos nerviosos que son

comprendidos por el cerebro, así también podrá si le dan las condiciones adecuadas,

realizar el mismo proceso con las señales visuales.

6. El proceso cerebral comienza en el mismo momento de la concepción. A los 12 días ya

se puede distinguir el cerebro del feto. Y desde entonces está funcionando y creciendo en

conexiones neuronales de forma sorprendente hasta aproximadamente los 8 años que

decrece el crecimiento. Hay que aprovechar ese ritmo vital, esa plasticidad cerebral.

Page 30: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 30 ~

7. Al niño le divierte leer. Y a nosotros los adultos también pueden enriquecernos mucho

este proceso.12

Con su planteamientos, Villacastin, pone una disyuntiva entre el sistema

educativo que ya conocemos y la enseñanza prematura de la lectura, pues al

plantear la situación por la que los más de los niños menores de cinco años

atraviesan en cuestión a su sistema neuronal, su misma vivacidad así como sus

ansias de conocer el mundo, de enfrentarlo y su necesidad de apoyo exterior para

constituir sus aprendizajes da las pautas básicas sobre las cuales se puede llegar

a un conocimiento realmente relevante sin que éste sea explícitamente forzado,

para que el niño se apropie de conocimientos nuevos, sino que este aprendizaje

estaría surgiendo precisamente de la naturaleza social, es decir de lo que ya esta

construido, y que por supuesto no costará al niño inventar para poder interactuar

con él, a lo más, tendrá que vivenciarlo y experimentarlo, en distintas formas,

nunca así, crearlo desde si mismo.

La propia autora menciona tres aseveraciones que aconseja al educador

que este a cargo de un grupo de niños, y que en realidad desee influenciar el

proceso de aprendizaje con la lectura, en ellas hace ver que más que la cantidad

de tiempo que se esté con el niño, dependerá de la calidad que se le esté

proporcionando, ya que aunque menciona será poco el tiempo en que educador y

niño interactúen, la situación que se planteará será de verdadero aprendizaje, en

el que se cuestione al niño, se le resuelvan sus dudas y se le vayan creando otras

que sea capaz de resolver por si solo, o con un poco de ayuda del adulto que esté

a cargo de él, señalando que:

12

Ana María Corral Villacastín. Op. cit. págs. 82-83

Page 31: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 31 ~

1. Cuando a un niño de 2, 3 o 4 años se le enseña a leer, prestará atención al libro durante

un periodo de tiempo, estará relajado, tranquilo; pero no hay que olvidar que sigue siendo

un niño y que siguen pareciéndole muy interesantes casi todos los juguetes.

2. El descubrimiento del lenguaje escrito debe ser una «aventura feliz» para el niño y para

el educador Si el profesor o los padres consideran este trabajo como una carga o sin fe de

éxito, es mejor que se abstengan de intentarlo porque no conseguirán manifestar a los

niños esa alegría y entusiasmo necesario.

3. Hay un importante problema de métodos. ¿Cómo vamos a aplicar a los niños pequeños

las mismas técnicas empleadas con los de 6 años? Lógicamente, un profesor o un padre

que se empeñe en preguntar a los alumnos de esta edad «la E y la A, ¿qué forman?», dirá

ante el silencio de los niños, que antes de los 6 años no está maduro para la lectura.

Es entonces desde la aplicación de los autocuestionamientos entre los

niños que se puede fomentar un deseo mayor por el aprendizaje de la lectura,

aunando esto a la situación de acompañamiento, la actitud de poder lograr las

cosas y la interacción con cada vez más palabras o textos que se iría formando un

contexto dinámico y motivante en el que los aprendizajes sobre la lectura estarían

relacionados a lo que los niños ya conocen o intentan descubrir o bien desde lo

que se les presenta para motivarlos. Y considerando que a su corta edad no

hacen preguntas más allá de la lógica o la cotidianidad, estas podrán ser

respondidas por los mismos padres o familiares que tienen conocimientos sobre

las situaciones de las que los pequeños quisieran enterarse.

Page 32: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 32 ~

Gleen Doman13, no conforme con plantear que la enseñanza de la lectura

en los niños menores de cinco años, desarrolla un método que manifiesta la

interacción del niño con el material de aprendizaje, y que realmente parece ser

algo tan simple como el que el niño interactué con los objetos sin tener que

conocerlos por partes, esto es, que el niño por ejemplo no conoce un carrito por

sus llantas, luego por su estructura y después por su utilidad, sino desde todo el

complejo que representa (llantas, toldo, caja, volante, etc.), así ella refiere un

método global de aprendizaje que se basa en sesiones de aproximadamente cinco

minutos, en el que presenta a los niños palabras completas, escritas en una

cartulina pequeña; de hecho la misma Doman, hace la descripción del sistema de

trabajo y de la forma en que debería de ser aplicado en el niño, en función de sus

capacidades:

1) Es necesario que enfoquen este aprendizaje como un juego, que le sirva al niño de

recompensa, no de castigo. El tiempo que pasarán «jugando a leer» debe ser corto,

cada sesión de unos minutos y nunca más de 5 veces al día. Deben iniciarse al

pensamiento del niño y acabar la sesión antes de que él lo desee.

2) Características del material:

Se ha concebido de completo acuerdo con el hecho de que leer es una función cerebral. El

material que tiene en cuenta las capacidades y limitaciones del aparato visual del niño, y

trata de solventar todas sus necesidades, desde la máxima a la mínima agudeza visual».

13

Ana María Corral Villacastín. Op. cit. págs. 84

Page 33: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 33 ~

Aunque Doman propone en su metodología, que sean los padres quienes enseñen a leer a

sus hijos, debemos entender que en la figura de los padres se incluye al maestro en

educación infantil.

Las características básicas son:

— Trabajar con cartulina blanca.

— Trazar las palabras con tinta china (rotulador) rojo o negro.

— Trazos limpios y claros, con estilo sencillo y homogéneo.

— Margen mínimo de 1,25 cm. entre letras y el borde de la cartulina.

El tamaño de las letras oscilará según las diversas etapas que componen la experiencia.

Este aspecto lo consideró primordial porque refleja la adaptación y respuesta a las

necesidades y limitaciones del niño pequeño es decir es el único indicio de madurez. Y no

es un problema tan traumático porque vemos como Doman ha sabido darle respuesta. El

tipo de letra que utiliza es letra script.

Son siete las etapas que componen este programa:

1. Las palabras papá y mamá se escribirán cada una en una cartulina de 15cm. de alto por

60cm. de largo, y medirán de forma invariable 12,5 cm. por l0 cm. separadas por 1,25 cm.

aproximadamente. Deben estar escritas con letra minúscula y, además, con tinta roja. El

objetivo de estos primeros momentos de la experiencia consiste en el reconocimiento, por

parte del niño, de ambas palabras por separado, una tras otra, para, posteriormente, poder

hacerlo de forma simultánea. Para ello, hay un número determinado de breves sesiones de

5 minutos, en que estas palabras son presentadas al niño y le son leídas. Al cabo de tres

días, el niño puede estar en condiciones de conocer la palabra y, por tanto, leerla. Con ello,

Page 34: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 34 ~

habremos conseguido preparar el camino visual y el cerebro del niño para diferenciar

símbolos y podremos avanzar en la experiencia.

2. Consta de 20 palabras relativas al cuerpo humano, escritas en cartulinas blancas de 12,

5 cm. de alto y 60 cm. de largo, de 10 cm. De altura y escritas en minúsculas y color rojo.

La presentación será también sucesiva a la vez que se procurará remarcar cada palabra

mediante refuerzos visuales, auditivos y táctiles. De este modo, la presentación de una

palabra como «mano» irá acompañada de la visión y del tacto de tal parte del cuerpo. De

esta forma, a través de la conjunción de sensación visual, táctil y auditiva, la palabra

experimenta fuerza.

Al igual que en la etapa anterior, cada palabra debe ser introducida según su grado de

dificultad, considerando el número de letras que la compongan, evitando mostrar de forma

consecutiva palabras que empiecen por la misma letra y asegurándose de que cada

palabra ha sido totalmente aprendida y asimilada. Según la teoría de Doman, el niño,

mediante este sistema puede aprender hasta una palabra diaria.

3. Se introducen palabras referidas al mundo inmediato del niño — objetos, acciones, útiles

de su propiedad—. En esta etapa se observa una nueva disminución del tamaño de las

letras, que ahora pasan a medir 5 cm. escritas igualmente en minúsculas y en tinta roja, en

cartulinas blancas de 7,5 cm. de alto. La metodología es la misma aunque han sido

introducidas acciones verbales, lo que en cierto modo, está ya permitiendo la lectura de

composiciones más complejas. Las listas que en esta fase se elaboren pueden oscilar

entre 10 y 50 palabras.

4 y 5. Estas etapas introducen una variante: no se trata ahora de presentar una lista de

palabras (sustantivos o acciones) con un determinado grado de conexión entre ellas.

Paralelamente al proceso de adquisición del lenguaje hablado, se introducen palabras con

funciones gramaticales o relacionantes como adverbio y conjunciones conexivas. Con

estos elementos el niño puede jugar, enlazar palabras conocidas y construir así frases o

Page 35: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 35 ~

párrafos. En estas etapas las letras han pasado de 5 cm. (4ta. etapa) a 2,5 cm. (5ta.

etapa) y el color de la tinta es ahora negra. Estas dos fases están pensadas en función de

la elección previa de un pequeño «libro», que será el primero para el niño.

6. Este libro ha de cumplir determinadas características: — presentar no más de 150

palabras diferentes.

— 15 o 20 palabras por página. — Nunca un tamaño inferior a 0,5 cm. y con dibujos a un

lado de la página, no mezclados con las letras. Este será el libro que procure en estos

momentos las palabras que el niño tiene que aprender, de modo que al final será capaz de

comprender el texto elegido en su totalidad.

7. Finalmente, será posible facilitar al niño el alfabeto en cartulinas cuadradas de 10cm-de

lado, con letras mayúsculas y minúsculas en color negro y de 7,5 cm., de altura.14

Se entiende la sugerencia de Doman, que como apoyo a su proyecto que

los elementos descritos en su método, no habrán de ser alterados y mucho menos

faltarán en el aprendizaje que se pretende reforzar en el infante, pues de hacerlo

se estará alterando el proceso y podrán faltar elementos para el buen desarrollo

de la cognición del niño. Sin embargo si se promueve una lectura del contexto es

requerible mencionar palabras acordes al medio en el que vive el niño, ya que no

son las mismas formas en las que se llaman ciertos objetos o elementos en las

diferentes regiones donde se puede desarrollar un niño.

14

Ana María Corral Villacastín. Op. cit. págs. 84-86

Page 36: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 36 ~

Ya con estos métodos se hace claro que lo que en el niño se busca en

principio, no es tanto llegar a una lectura de enunciados cortos o libros, ya que por

su corta edad, esto en pocos de ellos acontecerá, sin embargo, también se hace

claro que en base al tipo de estimulación, experimentación y acompañamiento que

se le de con respecto al enfrentamiento a situaciones de lectura, será el avance

que logre.

Si bien Doman hace mención de que su método de enseñanza es de tipo,

global, por la forma en que se presentan las palabras a los niños, en comparación

con Moore o C. Bereiter Y S. Engelmann, que manifiestan las palabras por sus

partes, en dichos sistemas de trabajo se llega siempre a la palabra y como bien

dice Villacastin, la interacción que logre el niño con las palabras y el tiempo que

tenga para asimilarlas serán factores que le permitan el reorganizar las fallas que

se encuentren en el camino, con respecto de cómo leer y entender, o bien dará

tiempo para aceptar otros métodos de enseñanza, bien de forma gradual o de

forma arbitraria y sin un orden aparente.

Queda de cierto, pues, que con los adelantos que la actualidad ofrece y

refuerza en cada esquina de las calles, en cada placa de los autos y hasta en la

televisión, se puede aumentar la cantidad de tarjetas que se pueden presentar a

los niños, aumentando por tanto las situaciones de interacción con los nombres de

los elementos que le rodean, y que a partir de la actitud de los padres, su enfoque

de enseñanza y las características del material que presenten, el desarrollo que

alcanzaran los niños, será menos limitado y cubrirá mayor cantidad de

necesidades visuales.

Page 37: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 37 ~

Si en el ámbito educativo, se considerara toda la riqueza en pro del

aprendizaje que se está creando minuto a minuto, en los espacios sociales que

van apoyando la lectura mediante las palabras que se plasman, se reconocería

que las escrituras de tipo alfabético (tanto como las escrituras silábicas) parecen

poder caracterizarse como sistemas de representación cuya intención primera –o

primordial- es representar las diferencias entre los significantes.15 Es decir

permiten establecer supuestos de relación y familiaridad entre diferentes palabras

pero al igual que la escritura de los nombres propios, se deben considerar sus

diferencias tanto en representación de los objetos o sujetos como en uso de las

letras, con lo cual se podría permitir a los niños logren una lectura de diferentes

palabras a partir de su interacción escolar pero usando la riqueza social

alfabetizadora en la que vivan.

Dentro de las instituciones educativas es conocido que al tiempo que se

plantea el aprendizaje de la lecto-escritura y otros aprendizajes suele intentarse –

simultáneamente controlar a los padres en términos de prohibiciones, con

autorización expresa de hacer solamente lo mismo que se hace en la escuela para

no introducir conflictos en el aprendizaje,16 y esto por supuesto hace deficiente la

riqueza de actividades y materiales que podrían emplearse como apoyo en la

enseñanza de los niños, así por ejemplo es muy conocido que para que el niño

aprenda en principio a leer se le deja, cuando ya sabe manipular el lápiz, por lo

menos la escritura de tres veces la misma palabra, que intentará aprender, o si no

en otros de los casos puede que se le deje que escriba sílabas y las memorice,

disminuyendo en exceso la calidad de otros materiales que le representaran

menor esfuerzo en su aprendizaje, es decir no tendría que repasarlos tanto, si se

15

Emilia Ferreiro (2002). Alfabetización teoría y práctica. México .Ed. Siglo XXI. págs. 15-16

16 Ibídem. pág. 26

Page 38: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 38 ~

le apoyara en identificar poco a poco las letras componentes de cada texto y de

igual manera ir identificando las palabras que le rodean, y que le son fáciles de

identificar, tanto por su constante uso (en productos, alimentos o utensilios) como

por su encuentro en diversas situaciones.

En este sentido es reconocible que se puede controlar a los padres, pero es

ilusorio pretender controlar la conducta de todos los informantes potenciales

(hermanos, amigos, tíos, abuelos…), y es totalmente imposible controlar la

presencia del material escrito en el ambiente urbano,17 que si bien no es

debidamente usado o aprovechado, está tan presente retando a las instituciones,

como lo podría ser la corrupción a las leyes, en el más estricto de los casos. En

este sentido encerrar a los niños dentro de un aula y decirles que sólo las palabras

que ahí se encuentran, así como las que pertenecen a los libros y textos que se

logren producir, son las útiles, es denegar la importancia de todas las que se

encuentran fuera de ese contexto, siendo que realmente esas palabras son las

que podían aprovecharse en mayor medida, si la educación no fuese tan

restringida a las aulas y los pupitres, puesto que es ahí donde la interacción del

niño se hace presente.

Lo antepuesto, los educadores lo pueden sustentar en situaciones tan

ciertas como el mismo hecho del aprendizaje, pues dentro de las aulas, los niños

no dedican sus esfuerzos intelectuales a inventar letras nuevas, sino que la forma

de las letras las reciben de la sociedad y las adoptan tal cual,18 entonces en este

entendido es aceptable darle importancia al espacio circundante en el que

17

Emilia Ferreiro. Op. cit. pág. 26

18 Ibídem. 19

Page 39: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 39 ~

cohabitan los niños, en el que hasta la misma ropa que se llegan a poner, por no

decir que toda, contiene por lo menos una letra, que podría utilizarse en apoyo a la

enseñanza de la lectura que habrán de alcanzar.

Los estudios que J. Hunt realizó, proponen nuevas perspectivas de la

educación preescolar pues opina que sería más posible acrecentar el desarrollo

mental de los niños entre 0-4 años, puesto que sus posibilidades de aprendizaje

son superiores a las imaginadas por nosotros. Su idea se establece al considerar

que el hecho de que no se fuerza al alumno, no implica peligro en la promoción de

un desarrollo intelectual, 19 y propone una organización de la vida del niño en la

que da a entender que mientras que el desarrollo se respete en cuanto a la

alegría que debe de tener el niño en todos los sentidos, también habrá de

entrometerse un tipo de educación no restringente ni basada en horarios para que

parezca más espontánea y sobre todo tan natural como el mismo desarrollo,

crecimiento y alimentación del niño, es decir habrá de plantearse como un sistema

dosificado.

Se puede entender, que dicho sistema encuentra apoyo en lo que es el

método que ya Doman ha referido, y que a partir de situaciones tan sencillas como

el tarjetero puede confrontarse al niño con la lectura, cosa que como da a

entender Hunt puede formar parte de las posibilidades de aprendizaje del niño y

que por supuesto si se reinventan a partir de lo que ya está escrito en el contexto

aunque no se tengan diariamente a la mano, representaran en el niño una

excelente situación de aprendizaje.

19

Ana María Corral Villacastín. Op. cit. pág. 78

Page 40: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 40 ~

También es claro que en contraposición a algunos métodos de enseñanza

escolar en los que se inicia a los niños haciendo que aprendan letra por letra se

les desinteresa de tal manera, que al paso del tiempo sólo realizan las actividades

mecánicamente, en el sentido que pueden decir “me se las letras” y en efecto

repetirlas como canción, pero no logran diferenciarlas a la hora de escribirlas,

comprobando entonces que mediante esta mecanización no se dan cuenta de que

si lo escrito tiene ―todo el tiempo la misma‖ letra no se puede leer, o sea no es

interpretable,20 ya que en principio escribirán todo el tiempo la mayoría de las

palabras con las letras que les son más fáciles de elaborar. Se puede notar en

casi todos los niños que empiezan a conocer las letras que presumen de saber

leer y hasta escribir, pero que lo hacen usando al inicio las mismas letras, aun

cuando todavía no las conocen todas, lo preocupante de este asunto, es que

cuando se supone se les han enseñado todas las letras del alfabeto, es que

siguen usando las mismas pocas letras o representaciones graficas y dándoles la

función de otras que no escriben.

Por su parte Rachel Cohen propone un método educativo para preescolar

sustentado en el método Doman, indicando que la lectura para los niños habrá de

ser un espacio de aprendizaje que ofrezca la oportunidad de maniobrar y sentir las

letras en formas manipulables y constructivas es decir de formas dispersas donde

el niño lograse utilizar las letras construyendo y reconstruyendo diferentes

palabras, de forma práctica, y en el caso de no ser palabras formales como tal,

aun así se puede conducir al niño por el camino de los sonidos onomatopéyicos

que logran formarse, ya que bien menciona que el educador debe de dar rienda

suelta a la creatividad y a la capacidad de construcción del niño, pues si bien no

define palabras aún, se le puede hacer mención de que en ciertos modos se logra

20

Emilia Ferreiro. Op. cit. pág. 19

Page 41: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 41 ~

concebir gran cantidad de sonidos comparados con los que se escuchan de los

animales y/o los elementos del contexto.

Cohen manifiesta también y aún aceptando que se apoya del método

singular de Doman, que no existe un método único a aplicar, en el desarrollo

cognitivo de los niños, sino que existen principios, y hay que confiar en los

potenciales de los niños, sin colocar fronteras a sus capacidades; más bien

debemos ofrecerles un entorno estimulante.21 Esto entendido como una situación

de latente riqueza natural en los niños, la cual se puede explotar conforme vayan

dando pauta a la entrada de nuevos conocimientos y enseñanzas por parte de los

adultos que les rodean.

Así se puede entender que teniendo las bases de lo que sería por un lado el

método desarrollado de Doman, se puede intercalar gran cantidad de situaciones

de aprendizaje que pueden llevar a los niños al conocimiento de las palabras y de

las letras que las conforman; por supuesto estas palabras no deberán de ser

rebuscadas ni mucho menos especializadas, ni de situaciones científicas, ya que

no causarán ningún tipo de asociación entre el niño y su contexto y por ende no le

serán significantes.

Además de esto, pueden desestructurarse todas las palabras que se vayan

conociendo, por un lado con letras individuales que sean acomodables, es decir

usadas como tarjetas individuales, o bien haciendo comparaciones y

entresacándolas de otras palabras que ya se hayan formado o conocido, para que,

21

Ana María Corral Villacastín. Op. cit. pág. 68

Page 42: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 42 ~

como se mencionara anteriormente el niño reconozca que no todas las palabras

llevan la misma letra, ni mucho menos todas las letras tienen la misma función o

nombre. Para esto el acompañamiento de los adultos encargados de la educación

del niño, será radical en consideración a que en cualquier momento podrán tanto

cuestionarlos, sobre cómo dice cierta palabra y cuáles de sus letras se parecen a

las de otra.

Como producto de la mecanización escolar y de los métodos que los

docentes o educadores emplean en sus enseñanzas Ferreiro considera que: hay

prácticas que llevan a que el sujeto (el niño en este caso) quede ―fuera‖ del

reconocimiento, como espectador pasivo o receptor mecánico, sin encontrar

nunca respuestas a los ―por qué‖ y a los ―para qué‖ que ya ni siquiera se atreve a

formular en voz alta,22 esto como un severo encadenamiento a lo que los demás

dicen, y como una sumisión a la autoridad de los adultos que se hacen sentir

sobre los alumnos como los expertos e inequivocables, a los que habrá de creer

todo lo que digan.

Si reconocemos que los niños tienen la capacidad de adquirir, interactuar y

cuestionar lo que les rodea, bien podría aceptarse que los encargados de su

educación dentro de las instituciones cargasen esa responsabilidad de apoyarles

en la apropiación de las palabras que están en su contexto.

Si se aceptara que lo ―fácil‖ y lo ―difícil‖ no pueden definirse desde la

perspectiva del adulto sino desde la perspectiva de quien aprende; admitiendo que

22

Emilia Ferreiro. Op. cit. pág. 22

Page 43: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 43 ~

cualquier información debe ser asimilada (y por lo tanto transformada) para ser

operante, considerando que los métodos (como secuencia de pasos ordenados

para acceder a un fin) no ofrecen más que sugerencias, incitaciones, cuando no

prácticas rituales o conjunto de prohibiciones,23 que por sí solos, no sugieren la

creación de conocimientos, sino más bien la manipulación de factores que no en

todos los casos son los más indicados para el trato que debería darse a los niños,

tanto por la función ritual con la que se hace ver el acto de asistir a la escuela,

como la figura de poder que representa el educador ante los niños, podríamos

entender que la situación de interacción de los pequeños con los adultos que les

rodean puede ser aprovechada, como algo cotidiano y poco forzado, como es el

caso de lo que se vive en la institución escolarizada.

23

Emilia Ferreiro. Op. cit. pág. 21

Page 44: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 44 ~

CAPÍTULO 1.2

EL APRENDIZAJE POR

INTERACCIÓN

Comencemos, este apartado, por citar al lenguaje desde la teoría

vigotskiana que indica éste no sólo acompaña la actividad práctica, sino que

también desempeña un papel específico en su realización, lo cual se traduce en

que, para el niño, el hablar es tan importante como el actuar para conseguir una

meta y para dar solución a los problemas.24 Por lo que confiriendo la importancia

del lenguaje de los niños, sobre cualquier actividad, constituiría enlazar la

planeación y vinculación que dan éstos a las actividades que se reflejan al mundo

externo, bien en su forma más cotidiana y económica a través de la oralidad y en

su forma más elevada en la lectura; que desde un primer plano se expone en este

trabajo será abordada antes que escribir.

Al ya discernir entre una letra y otra y su aplicación primero en las

palabras, después en las oraciones y en los textos, el niño haciendo uso de su

lenguaje verbal podrá expresar a los adultos que le rodean que letras están

contenidas en una palabra, o bien decir directamente la palabra; por un lado el

apoyo que den los adultos al niño para que conozca su realidad y su contexto, le

24 Milagros Damián Díaz (2007). Desarrollo del lenguaje y la comunicación en la primera

infancia. Editorial trillas, S.A. de C.V. pág. 108.

Page 45: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 45 ~

serán de gran utilidad para que se desarrolle como parte de éste, además de que,

el dominio sobre el mismo contexto que el infante logre, dependerá de las

maneras en que se le ofrezca y se le pueda explicar, por ello la apreciación que el

niño tenga de su realidad, la manera de describirla verbalmente serán, casi una

responsabilidad de los adultos que le rodeen, en parte por ser sus cuidadores o

compañías directas y por otra porque al dar el ejemplo a los pequeños, de la

utilidad que dan los textos a las personas, podrán formarse más socialmente, dado

que a últimas fechas las libertades y democracias del individuo son coartadas,

debido a su poca crítica de la realidad y hasta a su falta de interés por la lectura.

En los experimentos que realizo Stern ―el niño de dos años que según él se

hallaba todavía en el estudio del objeto separado, percibió las figuras dinámicas

del dibujo y las reprodujo fácilmente utilizando la pantomima… Lo que Stern

consideró como una característica de las habilidades perceptivas del niño resultó

ser producto de las limitaciones de su desarrollo lingüístico o, en otras palabras,

un rasgo de su percepción verbalizada‖.25 Esta es una más de las situaciones que

sustenta que cuando el niño logra tener un acceso al lenguaje, por muy limitado

que sea al principio, le permite expresar características objétales, y si esto se logra

reafirmar en él, cada vez con mayor número de objetos, en diversas

presentaciones con el debido parecido, logra hacer las interpretaciones y

relaciones existentes entre unos y otros.

Por ello, si se le dan a conocer diversas presentaciones de un solo objeto

se le estará estimulando a reconocer un sinfín de características superficiales, que

por supuesto le apoyan en el desarrollo de su conocimiento, pero que más aún le

25

Lev. S. Vigotsky (1988). El desarrollo de los procesos Psicológicos superiores. Ed. Grijalbo, pág. 59

Page 46: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 46 ~

hacen ver que la generalidad o base objetal, en este caso las formas de las letras

se siguen conservando, de hecho la misma interacción que logre con los

diferentes objetos que se le presenten le permitirán realizar comparaciones y

hasta agrupaciones de aquellos que cuenten con similitudes. Al cuestionarle el

¿Por qué? de dichas agrupaciones, será casi seguro que, el niño explicará sus

razones, y podrá encontrar mientras mayor cuestionamiento, mayor cantidad de

respuestas y a la vez nuevas similitudes y comparaciones.

Por lo tanto, el lenguaje como parte de la identificación de las letras dentro

del ambiente alfabetizador social, permitirá hacer por una parte la proyección de

los símbolos gráficos así como sus sonidos en el sistema cognitivo de los niños,

con la intervención de los adultos cercanos a éstos, y por la otra la identificación

de si el niño está comprendiéndolos y expresándolos correctamente a lo largo de

su interacción con ellos.

Aunque el niño desde que nace puede expresarse mediante el llanto, los

gestos y movimientos propios de su desarrollo, podemos registrar antes de su

primer semestre de edad ya algunos sonidos guturales que podemos identificar en

cuanto a su estado de ánimo y que cerca de los diez meses son intercambiados

por algunas monosílabas o palabras cortas y que posteriormente evolucionarán,

por ello durante este despliegue el lenguaje contempla tres aspectos: el

semántico, relacionado con el significado de las palabras; el sintáctico, vinculado

con estructura y ordenamiento de las oraciones que contienen las palabras; y el

fonético, relacionado con la elevación y descenso del tono de la oración,26 esto en

definitiva refiere que la experiencia del niño, si es apoyada, en cuanto a la

26

Milagros Damián Díaz. Óp. cit. pág.123

Page 47: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 47 ~

interacción que logre, en el ambiente en que se relacione, podrá facilitar su

desarrollo cognitivo, con respecto a la apropiación de su entorno; de los elementos

que lo configuran y los significados que tienen.

Referente a lo antepuesto Vigotsky señala que dentro de la interacción

social y la configuración de significados asignados a los objetos a través de su

enunciación en palabras ―la palabra no se refiere a un solo objeto, sino a un grupo

o a una clase de objetos, y cada una de ellas es, por lo tanto, también, una

generalización. Esta última constituye un acto verbal del pensamiento y refleja la

realidad en un sentido bastante distinto del que la reflejan la sensación y la

percepción; tal diferencia cualitativa está implicada en la proposición de que existe

un salto dialéctico no sólo entre la ausencia total de conciencia (en la materia

inanimada) y la sensación, sino también entre sensación y pensamiento. Hay

diversas razones que nos hacen suponer que la distinción cualitativa entre

sensación y pensamiento es la presencia, en el último, de un reflejo generalizado

de la realidad, el cual constituye también la esencia del significado.‖27

Dada la situación que expone Vigotsky, será de gran importancia que

durante la enseñanza de la lectura de palabras a través de las letras se infiera si el

niño tiene, ya en su complejo conocimiento, la significación efectiva de una

palabra y no solamente está utilizando su identificación para pronunciarla, sin

saber a qué se refiere, a qué grupo pertenece y sobre todo que significa. Esto se

logrará solamente encaminando al niño mediante la enseñanza social que le

brinde su contexto inmediato a través de los individuos con los cuales conviva y

que de cierta manera tienen ya dentro de sus saberes experiencias referentes al

27

Lev S. Vygotsky. Op. cit. págs. 20-21

Page 48: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 48 ~

significado de las palabras que el infante menor de cuatro años, podrá utilizar,

además de que le pueden apoyar indicándole, cuales son las palabras que les

rodean, y en el caso de que el niño presente dudas, claramente los adultos se las

pueden resolver, en cuanto a responder como dicen ciertos textos o palabras, que

a los niños les parecen interesantes.

Lo anterior no es raro de encontrar en nuestra actualidad, pues la mayoría

de los niños, alrededor de los cuatro años, en lo que se conoce como la etapa de

los ¿porqué? exponen sus dudas, cuando van por la calle, cuando están en la

tienda o cerca de algún texto, haciendo la petición de que se les lea y preguntando

además por qué esta ahí.

Cuando se plantea que es posible enseñar a leer desde antes de la llegada

a una institución educativa, gracias al ambiente alfabetizador social, no se hace

referencia a la forma actual de enseñar, que implica, básicamente sentar al niño

en una silla frente a una mesa y darle material didáctico para que trabaje y aborde

las letras como tales, haciendo ejercicios de su uso directo o de reconocimiento y

escritura, por pasos, sea haciendo primero ejercicios de motricidad, escritura de

una sola letra o de las palabras directamente, sino que en este trabajo se sugiere

el uso de la interacción social que permita al niño la lectura de cualquier palabra,

aún las desconocidas, al incluir en su interacción diaria las letras, sus sonidos y

nombre, sí, pero desde algo que no incluya en principio el encasillamiento a

horarios, materiales y mesas de trabajo, por el contrario, éstas letras palabras y

textos planteados como algo común para toda su familia, como lo es para toda la

sociedad, desde el mero uso práctico, y localización en todos sitios que rodean a

las personas.

Page 49: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 49 ~

Ya que al descubrir esa lógica desde pequeño, al entrar a las instituciones,

el niño, no tendrá que enfrentarse a algo nuevo y desconocido, por ello se expone

que como parte de sociedad, se acepta en este trabajo que la familia y la escuela,

son tradicionalmente entendidos como los principales espacios de socialización

(los pares y los medios de comunicación son otros)‖28y que la responsabilidad que

se proyecta o se obtiene de ellos, viene siendo de tipo informal pues representa la

educación que todos recibimos por ósmosis al vivir en una sociedad en la que

cada momento de la vida nos enseña algo29, pudiéndose aprovechar

precisamente para enseñar, en parte con el ejemplo, que la lectura es algo

placentero e importante y por el otro que considerando que los niños tal vez no

logren una lectura de textos largos, si seria básico comenzar con hacerles sentir la

importancia del reconocimiento de las letras como parte de las palabras que están

escritas en los textos que inundan el entorno.

Podemos entonces aceptar que la capacidad de aprendizaje de los niños es

muy grande y más aún si la influencia externa, que tiene más allá de su curiosidad

o deseo de exploración les es interesante, atractiva, funcional y divertida por ello

en su infancia temprana es posible desarrollar una gran cantidad de

conocimientos, ya que es en esta época cuando el niño tiene una mayor conexión

neurológica que le permite asociar todos los estímulos que se les presentan, más

aún si pueden hacer gala de su manipulación, experimentación y uso.

28

Tomado de: www.fundacionpobreza.cl/ herramientas/educacionnoformal.pdf. 2 de diciembre de

2009.

29 Revisado en: http://www.upn081.edu.mx/antologias/antologias/lie/8s/2.pdf. 25 de enero del 2010.

Page 50: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 50 ~

Podemos considerar entonces que si presentamos las letras a los niños

como una información simple al igual que otra cantidad de objetos y su uso, más

que algo cargado de un contenido de responsabilidad y obligación, y lo dejamos a

su libre exploración en el transcurso de su primera infancia, y permitimos que su

uso sea cotidiano sin obligarle a escribirlo de tajo, sino permitiendo que lo exprese

como cualquier otro dibujo y con el tiempo lo acentué en lo referido a la grafía,

pero ya sabiendo cómo se llama y suena cada una, incluso al estar junto a otra o

formando una palabra. Podría ser como pedirle que dibuje, al inicio de sus

capacidades de representación, una casa, un martillo o su propio cuerpo, lo cual

será en principio y por lógica, muy distorsionado, aun conociéndolos e indicando

como son estos, pero que con el paso del tiempo podrá proyectar a la perfección.

Lo expresado no se debe pasar por alto, que ya los sondeos realizados por

Ferreiro y Teberosky, indican que hacia los 4 años los niños hacen

espontáneamente preguntas del tipo ¿Cómo se escribe?, o ¿Qué dice?, al mismo

tiempo que solicitan del adulto la lectura de cuentos o revistas… esta

preocupación es posible que exista mucho antes, solo que por razones prácticas

ellas presentan esta edad como punto de partida,30 en todo caso se debe de

aceptar que mientras los niños tengan la necesidad o el deseo de informarse de

los que hay a su alrededor se les debe permitir conocerlo sin esperar a que esto

se los enseñen como parte de una obligación en las instituciones.

Y es que no se debe de olvidar que una influencia plena del contexto en el

que se inmiscuyan la lectura y las letras como tales, le estarán permitiendo al niño,

desde temprana edad, el saber el uso de estas, y diferenciarlas dentro del resto de

30

Emilia Ferreiro y Ana Teberosky (1989). Los sistemas de escritura en el desarrollo del niño. México.

Ed. Siglo XXI. pág. 44

Page 51: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 51 ~

los objetos, como partes funcionales de la comunicación con las cuales logrará

comprender que el lenguaje escrito, al igual que el lenguaje oral, sirve para

comunicar ideas y pensamientos, transmite significados y es funcional. Mediante

actividades auténticas de lenguaje descubrirá ―...que puede escribir lo que dice,

leer lo que escribe y puede ser el autor de su propio libro‖. 31 Que por supuesto no

será en principio un completo compendio de textos, sino más bien un álbum de

referencias con dibujos y la palabra que los describen o nombran, por ejemplo o

bien desde el mero uso cotidiano, pero esto estará dando ya cabida al uso de la

palabra, tanto leída como escrita, si es que ya se tiene una coordinación motriz

fina que permita la manipulación de lápices de colores o de carbón, crayones, con

los que realice la proyección de letras o pseudoletras reconocibles y comparables

con otras y que posteriormente se podrán utilizar también para la lectura, aún a

pesar de sus variantes en forma a las letras convencionales o de los textos que se

encuentran en el contexto.

Sin embargo por el mismo hecho de estar siendo estas letras, ya

creaciones de los niños no habrán de tomarse a la ligera, sino que el adulto o

quien acompañe el proceso lector del alumno, habrá de festejarle y motivarle a

proyectarlas con mayor refinamiento, si como se expresa en este texto, la

capacidad de manipulación del niño lo permite.

31

Revisado en:

http://webcache.googleusercontent.com/search?q=cache:IQ_2CknIshwJ:www.educacion.objectis.n

et/primer-ciclo/produccion-academica/lenguaje/acercamiento-a-la-lectura-y-la-escritura/

doc+aproximaci%C3%B3n+a+la+lecturay+la+escritura+en+el+primer+ciclo&cd=8&hl=es&ct=clnk&

gl=mx&client=firefox-a. Revisado el 13 de octubre de 2009.

Page 52: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 52 ~

En el caso de las situaciones que se manejen desde la perspectiva de lo

socialmente creado, es posible aprovechar todos aquellos textos cortos, y los que

constan de una sola palabra, por ejemplo en estos últimos pueden considerarse,

los nombres de productos, sus etiquetas, los nombres de establecimientos, en los

que hay frases, pueden encontrarse los señalamientos, anuncios de bailes, ferias

o ventas de comidas, antojitos o golosinas. Y son precisamente esos textos los

que podrían apoyar la manipulación directa de materiales que a los adultos ya no

costaría crear, puesto que solo bastará que se enfrente repetidas veces al niño a

dichas palabras para comprobar como las va asimilando, y de hecho puede hacer

las comparaciones en casa, sobre la forma de las letras, en este caso puede usar

diferentes objetos para recrearlas a manera de juego y de ser posible,

reestructurar la palabra o las palabras a las que se le ha enfrentado.

Cirianni y Peregrina en su libro titulado Rumbo a la Lectura, al igual que

Cohen, hacen acertadas indicaciones en cuanto a los métodos de enseñanza que

son muy rígidos y refieren que “cuando la palabra propia debe someterse a una

única versión del texto, la alegría se pierde en pocos años‖,32 es decir cuando se

trata de implementar a edades muy tempranas un protocolo por así decirlo de

formación y que se base en la disciplina, dicho elemento del método, hace que el

niño se vuelva temeroso, y hasta enemigo de la educación y la lectura, pues más

bien a estas edades la disciplina podría referirse a actividades en las que el niño

estuviera inmerso en el juego y la interacción con los textos tanto pequeños como

extensos, tal vez recostados un rato en el piso, tal vez otras caminado por las

calles o buscando entre libros y revistas que para otros representen sólo

desperdicio de papel y no tanto relacionadas a las sillas y las mesas de trabajo,

acompañadas de libros gruesos y textos nada propios a su edad.

32

Gerardo Cirianni y Luz María Peregrina (2007). Rumbo a la lectura. México. Ed. IBBY. pág. 40

Page 53: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 53 ~

Anteriormente se mencionaba que el enfrentar al niño a las palabras que

encuentra en la calle y recrearlas en casa con diferentes objetos, rompe los

esquemas de las instituciones, por lo que también podrían hacerse otras

actividades en las que se deje al niño explorar diversos materiales como las

pastas, masa, plastilina, arcilla o barro con los que se pueden modelar las letras y

reacomodar las palabras, incluso es posible, si se tiene realmente la atención, que

se usen baritas y el mismo suelo o piso, como espacios de trabajo, en los que los

niños, hagan y deshagan letras y palabras.

Pueden presentárseles, por ejemplo, etiquetas o palabras como modelos y

permitirles que les encimen en los materiales que tengan a su alcance con la

finalidad de reconstruir los textos, posteriormente se reacomodarían nuevos

materiales en la misma posición que los que están sobre las etiquetas y se pide al

niño pronunciar la palabra, de esta manera se rescata en el ejercicio de lectura, la

manipulación, la experimentación, el uso del lenguaje y las funciones sensoriales,

además de hacerlo de manera lúdica para el niño.

Bien se puede decir que existe una enorme diversidad de actividades, con

materiales que pocas veces son tomadas en cuenta en las instituciones, para lo

que es la lectura y que se dejan para exploración o decoración solamente, por otro

lado pueden surgir dependiendo de la habilidad que tenga el adulto para

relacionarlas a la lectura, de hecho hasta sin materiales se podría lograr el

acercamiento a las letras, cuando con las partes del cuerpo se pueden dar a

entender sus formas, por ejemplo, la “a” se representaría con una palma en forma

de “c” y la otra en forma de “l”, y de hecho así ya estamos formando por separado

dos letras (c, l), la “z” se formaría con un dedo índice de la mano izquierda y una

abertura en “v” entre el índice y el medio de la derecha, solo haría falta explicar al

Page 54: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 54 ~

niño a partir de donde se hace la comparación de las posiciones de las manos o

de otras partes del cuerpo con respecto de las letras.

Como las anteriores, hay variedad de actividades que pueden librar a las

que se plantean como perfeccionistas, en este caso, en vez de colocar libros como

tal, a los niños se les pueden ofrecer otros materiales que puedan manipularse,

rescatando el fin propio de la interacción con las letras, por citar un ejemplo una

simple papeleta de dulce o una envoltura de galletas, de la cual los niños rescaten

la marca, el sabor y hasta el color, en un conjunto pequeño de grafías, que

claramente no son escritos proyectados en un pizarrón, sino tan corrientes, como

el mismo hecho de visualizar el letrero de la parada de autobuses en la calle.

De la forma anterior estaremos ofreciendo a los niños una versión pura y

sencilla de lectura en principio, y que al paso del tiempo permitirá, por supuesto

con la interacción de muchas otras palabras el reacomodo y la interpretación de

las oraciones y hasta de los textos, pues si bien conocen en sus primeras

interacciones los objetos y situaciones que van representando las palabras,

posteriormente podrán inferir el significado de las oraciones, aceptando en este

sentido lo que Cirianni comenta al indicar que “las nociones que se inculcan a los

niños respecto a la lectura y la escritura suelen ser meramente instrumentales‖33

pues es poco conocido algún método o intento de enseñanza de lectura en los

niños que haya partido de cosas tan simples como las que se comentan en este

trabajo.

33

Gerardo Cirianni y Luz María Peregrina. Op. cit. pág. 40

Page 55: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 55 ~

Se manifiesta por lo explicado en los párrafos que anteceden a este, que si

bien la lectura se aprende poco a poco, es así como debe de abordarse, en los

primeros años de los pequeños, para que de dicha forma, accedan sin

alteraciones al conocimiento de las palabras y su significado ya que de la misma

manera “la invención de la escritura fue un proceso histórico de construcción de un

sistema de representación, y no un proceso de codificación ya completado que,

una vez construido fue aprendido, por los usuarios como un sistema de

codificación‖,34 es decir tanto la escritura como la lectura en la primera infancia

deberán de propiciarse y adquirirse poco a poco.

En cuanto a otros investigadores que apoyan la adquisición de

conocimientos a partir de la interacción social, podemos encontrar a Bruner que ya

probo con sus sondeos, el poder de aprendizaje, análisis y comprensión que los

niños tienen desde sus edades más tempranas, y establece que “cualquier tema

puede ser enseñado de una forma adecuada a cualquier niño‖.35 Lo dicho,

básicamente parte de la idea del potencial de aprendizaje de los niños.

Se indica además, que a esta capacidad quien debe de propiciar su

estimulación y con ello desarrollarla, es quien tiene a su cargo la educación de los

niños, no importa donde ni cuando, lo que importa en este caso es el cómo, ya

que sitúa como punto máximo de referencia la facilidad con la que los niños

aprehenden de su contexto, entonces se establece que el aprendizaje habrá de

logarse en cualquier edad, teniendo como condición que sea de acuerdo al nivel

de desarrollo del niño, la cantidad de experiencias que tenga y la forma en que se

34

Emilia Ferreiro. Óp. cit. pág. 15

35 Ana María Corral Villacastín. Op. cit. pág. 78

Page 56: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 56 ~

propicie ese acercamiento a ellas, ya que “cada persona posee unos rasgos de

personalidad específicos que determinan su forma de relacionarse con los

demás,‖36 y con ello aptitudes y habilidades especificas de aprendizaje.

La presencia del lenguaje, constituye entonces, el enlace entre las

actividades que realizan los niños, sus objetivos propios y el reflejó del mundo

externo, permitiéndoles expresar características de los objetos, establecer

relaciones, familiaridades y comparaciones que se basan en la experiencia que

adquieren y que se desprende de la interacción que ha tenido con su contexto,

siendo considerada ésta en medida de los enlaces que tenga con todos los

elementos que le rodean, y que le van proporcionando conceptualizaciones

mentales de los objetos. Las cuales logran, cuando resuelven sus dudas sobre

aquello que esta presente en su alrededor, pero que en cierta época les causa

duda.

Así el aprendizaje que se logra por la socialización, en las edades más

tempranas, parte de un dinamismo innato en el que no encuentra cabida la espera

o las ceremonias en las que se explica con todo detalle alguna situación a los

niños, sino que resuelve dudas en el momento en el que al niño se presentan y no

se prescribe un momento para ello, mucho menos se habrá de esperar a que el

niño se aquiete para recibir instrucciones, sino que habrá de adaptarse a sus

expectativas y requerimientos en cuanto a atención, ya que con ello se le estará

proporcionando un ambiente en el que al dársele importancia a las situaciones que

a él mismo le interesan sobre su contexto, se le estarán dando herramientas de

conocimiento con respecto de todo lo que le rodea.

36

Tomado de: http://www.cnice.mec.es/recursos/rec-fp.htm. 3 de noviembre de 2009.

Page 57: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 57 ~

Y si a lo anterior se le atribuye el manejo de actividades variadas en las que

se motive al niño de formas interactivas, rescatando la importancia de letras,

palabras y textos, el conocimiento que logren será aún mayor, en suposición de

que se formara un interés por redescubrir cada vez más palabras y su significado,

y con el continuo cuestionamiento (no rígido), por parte de adultos o personas

mayores a las edad del niño, irán teniendo un significado para los niños, que

además podrán reconocerles en cuestión a su acomodo de letras.

Page 58: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 58 ~

CAPÍTULO 1.3

LA INTERACCIÓN DE LOS SUJETOS

EN EL CONTEXTO

Varias de las investigaciones que se citan a continuación, en los siguientes

párrafos afirman que la convivencia y experimentación con el ambiente además de

los elementos que lo constituyen son aprovechados inconscientemente por el ser

humano, por un lado para apoyarse en sus actividades diarias y por otro para

alcanzar a conocer y aprehender a la cultura en la que conviven. Y si en todos los

casos de desarrollo humano en un inicio no está presente la voz, con la cual el

niño pueda expresarse directamente sobre los objetos o en su caso sobre sus

sentires, también es cierto que en cuanto tiene el poder de la palabra ya expresa

conocimientos adquiridos por mera relación social, es decir expresa el nombre de

objetos y sujetos; que le fueron enseñados de forma tanto directa como indirecta

en el tiempo de convivencia social que ha tenido.

Stern logró percibir que aproximadamente a los dos años, las dos curvas de

desarrollo: la del pensamiento y la del lenguaje, hasta entonces separadas en la

comunicación del niño, se encuentran y se unen para iniciar una nueva forma de

comportamiento... Muestra cómo el deseo de conquistar el lenguaje sigue a la

primera realización confusa del intento de hablar; esto sucede cuando el niño

"hace el gran descubrimiento de su vida, se encuentra con que cada cosa tiene su

Page 59: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 59 ~

nombre".37 Puede entonces comprenderse que después o alrededor de los dos

años de edad y en adelante es básico hacer preguntas recurrentes al niño acerca

del nombre de los objetos y de su uso para que vaya reforzando lo que en sí nos

interesa, que es el reconocimiento de las letras y por supuesto de las palabras que

se forman con ellas.

Este instante crucial en que el lenguaje comienza a servir al intelecto, y los

pensamientos empiezan a ser expresados, está señalado por dos síntomas

objetivos inconfundibles que es la repentina y activa curiosidad del niño acerca de

las palabras, su pregunta sobre cada cosa nueva y los rápidos y cada vez más

amplios aumentos resultantes de su vocabulario. Esto se puede confirmar al

observar el desarrollo de cualquier niño, que en base a su desarrollo van

propiciando el manejo de las palabras y acercándose cada vez más a la

interacción por medio de la palabra con quienes le rodean.

Antes de llegar al punto decisivo el niño reconoce un reducido número de

palabras que sustituye, como en un condicionamiento, por objetos, personas,

estados de ánimo o deseos. En esa edad conoce solamente las palabras que los

otros le suministran, pero después la situación cambia, cuando el niño siente la

necesidad de palabras, tratando activamente a través de sus preguntas de

aprender los signos vinculados a los objetos. Y el habla que en su primer

momento era solo por efecto de las necesidades que debe expresar o de la misma

ejercitación por dominarla, actualmente se utiliza casi a la perfección en la

expresión de las situaciones, la cita de objetos y de sus acciones.

37

W. Stern, “Psychoilogie der fruehen Kindheit”. En Lev S. Vygotsky (2008). Pensamiento y lenguaje.

México D.F. Editorial Quinto Sol. Pág. 60

Page 60: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 60 ~

En consideración a la expresión por necesidades, los niños pronuncian

palabras como “aba” al pedir agua, “tan” al solicitar alimentos, u otras que son

interpretadas por los padres o los cuidadores; con ellas los infantes se acercan

poco a poco a la comunicación verbal, después de ello, ya comienzan a expresar

más y más palabras, al grado de alcanzar a sostener conversaciones cortas

alrededor de los tres años, a veces más tarde o antes de esta edad. Ya entrados

en la socialización, cuando tienen un buen vocabulario, pueden incluso hacer

interpretaciones de situaciones de tiempo, espacio, distancias, cantidades, y otras

situaciones que basadas precisamente en las correcciones que los adultos les

hacen, así como las interacciones que van teniendo con los objetos, les permiten

hacerse entender.

Aunque desde las visiones de Piaget se establece que "el niño nunca se

pone real y verdaderamente en contacto con las cosas porque no trabaja. Juega

con ellas, o las da por sentadas‖.38 Como bien dice Stern estas similitudes en el

desarrollo de los niños se valen solamente a un medio o actividad dados, bajo las

circunstancias de su disertación; más no serían aplicables en la generalidad de los

grupos de niños,39 ya que aunque el estudio ofrecido por Piaget tenga un alto valor

otorgado por la misma sociedad, difiere en consecuencia y apoyando a Stern, de

cualquier actividad lúdica que pueda desarrollar cualquier niño con los objetos, ya

que siendo ésta de tipo significativo o no, para las personas que le rodean, sin

equivocación para él, tendrá un significado de valor experiencial cognitivo, de

práctica hacia algún rol o por lo menos de ejercitación física, que le otorgara la

experiencia del aprendizaje que en este texto se defiende y que no inicia cuando

se encasilla al niño a cuatro paredes para decir que está aprendiendo en serio,

38

Jean, Piaget. “Le jugement et le raisonnement chez l'enfant”. En Lev S. Vygotsky (2008).

Pensamiento y lenguaje. México D.F. Editorial Quinto Sol. pág. 40

39 Ídem.

Page 61: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 61 ~

sino que se le da la importancia que realmente tiene cualquier tipo de experiencia

que el niño obtenga de su contexto, siendo ésta creada intencionalmente o no.

Por ello mismo, Piaget también ha sido criticado por el mismo Stern por no

tomar suficientemente en cuenta la importancia de la situación social y el medio

ambiente. Que la conversación del niño sea más egocéntrica o más social

depende no sólo de su edad, sino también de las condiciones circundantes.40 Es

aquí precisamente donde entra en juego la postura y la función social, en la

cantidad de objetos y de palabras para nombrarlos, como parte de un ambiente

alfabetizador socialmente creado, que estará ofreciendo al niño un bombardeo

absoluto de información, que le otorgarán el sustento de su conocimiento,

reconocimiento y expresión verbal en forma dinámica pudiendo presentar

resultados reales y significativos.

De acuerdo a Vigotsky ―la naturaleza misma del desarrollo cambia de lo

biológico a lo socio-cultural. El pensamiento verbal no es una forma innata, natural

de la conducta pero está determinado por un proceso histórico-cultural y tiene

propiedades específicas y leyes que no pueden ser halladas en las formas

naturales del pensamiento y la palabra…”41 de dicha manera queda de cierto que

la formación de los significados de las palabras que se le enseñen a los niños

podrán acarrearle una buena cantidad de conocimiento en función de las

atribuciones que se les den, es decir, mientras mayor número de palabras se le

den al niño para nombrar las cosas correctamente o en su caso mientras más se

le digan al niño el nombre de los objetos que le rodean, así mismo el nombre y

pronunciación de las letras, este mismo niño estará obteniendo un mayor número

40

Lev S.Vygotsky. Op. Cit. pág. 40

41 Íbidem. págs. 68-69

Page 62: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 62 ~

de referencias para poder expresarse sobre dichos objetos, en diferentes

circunstancias de manera correcta.

Sabiendo de antemano que las actividades que mayormente favorecen la

formación de conocimientos es la interacción social, la estimulación sensorio

motriz, el leguaje y la adquisición de experiencias nuevas así como la

experimentación y comprendiendo que nuestro objetivo al tener un niño en casa

no es simplemente dejarlo que haga lo que quiera o solamente brindarle

alimentación, cobijo, salud y un poco de tiempo, en lo que se va a la escuela, la

cual ―no es ni la panacea educativa ni el medio siempre idóneo para atender a

cualquier necesidad de instrucción o formación,”42 la familia podría, retomando el

asunto de las asesorías que Educación Inicial diese y que fueran afines a los

planteamientos de este trabajo, darle también herramientas que lo pongan un

paso más adelante de lo que está a punto de enfrentar, deben entonces

generarse las actividades relacionadas al acercamiento de nuevas situaciones que

configuren su conocimiento, a partir de su estimulación sensorio motriz, de

lenguaje y experimentación que bien pueden estimularse individualmente llevando

estrecha relación, ya que al ser parte de la integridad de una persona resultarán

en ocasiones también ellas indivisibles, por citar un ejemplo: si se pone a jugar a

un bebé con una sonaja se estimula la visión, el oído, la percepción y hasta el

lenguaje cuando se le pide su atención al decirle “mira qué bonita sonaja” (cosa

que en principio, se cree, no entiende).

Ya en el caso de que se fomente, como se ha iniciado actualmente, en la

población, la motivación y participación, para probar los alcances que puede tener

42

Tomado de: http://www.angelfire.com/space2/sisedform/ESCRITO_PAGINA_WEB_OK.htm. 2 de diciembre de 2009.

Page 63: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 63 ~

un niño, sea desde los programas comunitarios, o con a pura participación de los

adultos y personas con conocimientos de lectura se consideraría un avance en el

niño, pues sabiendo que no esta del todo solo en un contexto en el que las letras

son elementos de primer orden para la comunicación de las personas, se

consideraría también una iniciación en su proceso de lectura.

Posteriormente con el aumento de edad del niño, y al lograr su atención y

de ser posible su lenguaje oral se le pueden dar para jugar objetos con forma de

letra, los cuales por supuesto ya deberán de mencionárseles por el nombre que

reciben, bien sea la a, b, c, o d, entre otras, posteriormente podrá pedírseles que

identifiquen dichas letras, lo cual por producto de la interacción y la familiarización,

resultara efectivo, al entregar o señalar correctamente, la letra que se le pide; con

el paso de sus edad y el acercamiento a un lenguaje más completo, puede

enfrentárseles a las palabras y los textos de su contexto, como anteriormente se

mencionará, es decir indicando nombres de productos, lugares y direcciones,

entre otros más y de los que se puede pedir al niño recuerde, identifique y

compare, a la hora de expresar como dicen, o de recibir por parte del algún adulto,

la información que ofrecen dichas palabras.

Es incuestionable, que en inicio la comunicación limitada que los niños

tienen para con sus cuidadores y mucho más aún con quienes no conocen,

pareciera no aportar ningún elemento en el que se diga que responden a los

estímulos de enseñanza que se les aportan, pero esto se puede considerar como

parte normal de su desarrollo así como de su propia personalidad, no es nada

raro, encontrar sujetos más expresivos que otros, por ello “la perspectiva

sociocultural aporta elementos para comprender la relación entre la actividad

humana en el mundo social y los procesos de apropiación de las prácticas

Page 64: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 64 ~

sociales‖.43 En este caso se hace comprensivo que los niños mientras más

experimentan al convivir con sus iguales, más comprenderán su contexto y las

relaciones que se dan entre los elementos que en éste imperan.

En el caso de las palabras creadas en las situaciones sociales y su

publicación, el niño tiene la oportunidad de acceder a ellas de forma natural sin

que represente un desajuste de su desarrollo, mucho menos cuando la

convivencia con éstas es natural y no planeada por sus cuidadores, puesto que

debe de aceptarse que los textos ya existen desde antes de que el infante nazca y

ese uso que no se ha aprovechado, puede retomarse a partir de las edades en las

que el niño centra su atención aunque sea por periodos cortos en los objetos que

se le presentan.

Lo anterior, puede comprenderse cuando aceptamos que la mayoría de los

aprendizajes que tenemos han sido encaminados por otros y no necesariamente

creados por nuestra individualidad, ya que ésta por sí sola, como establecen las

teorías clásicas, no logra dominar los procesos de razonamiento, a través de la

internalización y la manipulación de estructuras, sino que como menciona ―la

teoría sociocultural ubica los procesos de aprendizaje en el contexto de la

participación en actividades sociales, poniendo atención en la construcción del

conocimiento mediado por diferentes perspectivas, saberes, y habilidades

aportadas por los participantes en los eventos de interacción‖,44 cosa tan clara

como la interacción dada en el juego, que posteriormente apoya al niño en la

aceptación de reglas sociales y el uso de instrumentos que permiten su desarrollo.

43 Judith Kalman (2004). Saber lo que es la letra, una experiencia de lectoescritura con mujeres de

Mixquic. México D.F. Ed. Siglo XXI. pág. 41 44

Judith Kalman. Ibídem. pág. 41

Page 65: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 65 ~

Si consideramos entonces que la interacción da a los sujetos la parte de

apropiación social que les es tan necesaria para acceder tanto a las costumbres

culturales como a las actividades propias de los demás sujetos que les rodean,

entre ellas las lecturas, podemos inferir que todos los actos comunicativos entre

ellos están dirigidos a la convivencia y predominio de la generación humana por lo

que “los eventos de lectura y escritura que surgen en la vida cotidiana… son

importantes contextos para la apropiación de los diversos usos de la cultura

escrita. Siendo precisamente a través de la participación en este tipo de eventos

donde el individuo aprende los usos no escolares de la lectura y la escritura‖,45

usos que como se ha ido comentando a lo largo de este trabajo son parte de la

naturaleza misma de la sociedad, se encuentran comprobados en los

innumerables productos y marcas de la tienda de abarrotes, en la etiqueta de las

prendas de vestir, en las credenciales de elector, trabajo y escolares, en los autos,

en los anuncios de ferias; lo cierto es que por más que en el presente quisiéramos

escaparnos de las letras e ir a encontrarlas con los más pequeños hasta el

preescolar, estaríamos negando que la comunicación escrita existe, de forma

equivoca, cuando hasta en la suela de nuestros zapatos esta impregnada, bien

sea en el número o la marca de estos, ofreciendo la oportunidad de ser retomados

para aprovecharse en la lectura guiada por los adultos, y aprovechada también

para la confirmación de que los niños pueden introducirse desde estas situaciones

en la lectura.

Si esta interacción con las situaciones escritas se aprovechara, sería básico

como mencionan Vigotsky y sus seguidores, Doman o Cohen, que la interacción

que se da con los adultos, sirve a los niños para lograr un acceso a la lectura de

forma natural y real a la vez, esto porque no se necesitaría inventar historias o

45

Judith Kalman. Ôp. cit. págs. 42-43

Page 66: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 66 ~

palabras tan fantásticas para interesar de nuevo al niño en esta actividad, como

generalmente se hace en los preescolares y en las primarias, sino que usando los

textos cotidianos y que a los niños en verdad les son familiares, se puede lograr

un acercamiento propio de las “situaciones colectivas, en las que varios

participantes aportan conocimientos, saberes, usan herramientas culturales

materiales y mentales y colaboran, de una manera u otra, para lograr un fin

comunicativo donde la lengua escrita tiene un papel central‖, 46 y que no es otro

más que mantener en el mismo dominio de los signos a todo un grupo y a sus

integrantes, al compartir todos la relación de significado que mantiene el texto o

palabra que se está leyendo.

Con la defensa del aprendizaje social, antes que buscar el cambio de los

sistemas educativos escolarizados, ya establecidos, se trata de informar a la

población que el acceso a la lectura es posible, en medida que se acepta que los

niños a estas edades son capaces de manipular la información que les rodea y

que a partir de las explicaciones que les dan quienes tienen mayor experiencia

sobre el uso y significados de ésta, es que la van entendiendo, así ―la participación

en actividades sociales media el desarrollo del conocimiento y es en el contexto

de la interacción que se construye el acceso a la cultura escrita y se hace posible

la apropiación‖, 47 a través de su lectura, y por ende de un aprendizaje no tan

cuadrado que pretende enseñar al niño con métodos delimitados, en edades

preestablecidas como las más adecuadas, cuando se deja a un lado el verdadero

potencial de los niños al presentar desde antes más necesidad de conocimiento.

46

Judith Kalman. Ôp. cit. pág. 43

47 Ibídem. pág. 44

Page 67: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 67 ~

Por tanto se puede proyectar un aprendizaje o acompañamiento global y

libre, si así se le quisiera decir, puesto que en consideración a que cada niño tiene

diferentes tipos de intereses, por este mismo hecho habrán de buscarse las

actividades que más le agraden y que mejores beneficios le den, para que con ello

no se le alteren desmedidamente, ni su proceso de aprendizaje, ni su naturaleza

de niño, que en principio encierra la mayoría de horas de juego y exploración y

solo unos cuantos minutos de atención directa a los adultos o a las mismas

actividades que realiza.

Los objetos que contienen textos o por lo menos palabras son tan variados

o más que las mismas combinaciones de colores, o alimentos con los que se

puede interactuar y son estos mismos contextos los que permiten a los ―lectores

manipulen ciertos documentos, de tal manera que el orden social no entre en

conflicto y que, en cierta medida, influyen en el desarrollo de algunas habilidades

de lectura‖,48 cuando por supuesto se logra acercar a los niños a su dominio, sin

hacerles ver que esto sea un acto difícil y mucho menos imposible para su edad,

ya que como se ha planteado, en la mayoría de los casos el pretexto para evitar

dar a conocer a los niños el significado de letras o palabras es que aún están

pequeños para saber ciertas cosas (en este caso las palabras).

Ya en este caso quienes ocuparían el rol de enseñantes, aún recibiendo

capacitación o no serian en principio los padres, puesto que es con quienes

conviven más tiempo los niños, sin embargo después de ellos, el resto de la

familia también podría apoyar en el acompañamiento al aprendizaje del niño, con

48

María Alicia Peredo Merlo (2003). Revista Mexicana de Investigación Educativa. Selección Temática:

Lectura. Vol. VIII, núm. 17, enero-abril. pág. 16

Page 68: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 68 ~

la única condición de que para hacerlo, deben de saber leer ellos también. Así la

metodología a seguir variaría, tanto desde las aplicaciones como por los modos de

entender del niño, es decir, se considerará que con algunas personas tiene mayor

libertad de expresión que con otras, y que aún así algunas son más pacientes con

el, y será desde ahí donde el niño reconozca, como deberían de hacerlo los

adultos que las formas de aprendizaje y acompañamiento son muy diversas, que

en todas ellas se puede incluir un individuo, pero que de unas obtendrá mejores

frutos que de otras.

Es precisamente en la idea de actualidad, que se le ha vendido a la

sociedad, de que es hasta el ámbito escolar donde deberá de enseñársele a los

niños a leer y no antes el que la mayoría de las familias dejan de participar en este

logro tan importante para los nuevos miembros de la sociedad, y de hecho

esperan a que sean las escuelas y los programas educativos quienes les indiquen

cuándo, cómo y qué, es bueno enseñar a los niños. Si de los diversos programas

que se han planteado y se ha obtenido buenos resultados se pudieran rescatar los

aspectos más simples del camino de la enseñanza y a la vez se pudieran utilizar

aplicando ideas acerca de los nombres, usos y características de los objetos, la

brecha entre la educación lectora y la comprensión se reduciría doblemente, sí,

por un lado considerando que el proceso de aprendizaje del niño sería más

temprano, además de que la participación y compromiso de los padres para

apoyar a sus hijos se vería más reforzada, propiciando mayor grado de unidad

entre los integrantes de la familia y por otra parte al lograr esa vinculación entre

palabras su significado para con los objetos, se adquiriría una excelente

comprensión de lo que se nombra a la vez que se lee.

Page 69: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 69 ~

Bien menciona Peredo Merlo, acerca de que “cada cultura y probablemente

cada contexto tiene diferentes prácticas de lectura e incluso conforman un

catálogo de textos que paulatinamente, se generaliza y estandariza, lo que

posibilita una economía de esfuerzo y tiempo‖,49 este hecho es innegable, como

también innegable es la necesidad en la actualidad de vincular más a los niños a

conocimientos tan prácticos como las lecturas, si no de textos completos, sí, por lo

menos de palabras cortas, que en cualquier parte habrán de hallarse, para que se

vea realmente el avance educativo en los países, sobre todo en los de tercer

mundo que prácticamente refieren alcances nulos (según pruebas como PISA) en

cuanto a la comprensión lectora de sus ciudadanos.

En tal sentido en cuanto a la experiencia que pueda lograrse transmitir a los

niños desde el contexto familiar al igual que el social, antes de caer en el escolar,

estar interviniendo de manera importante en la calidad de uso que tengan con

respecto a las letras y su unión en las palabras, es crucial ya que de manera

semejante a la que sucede en cuanto a los ámbitos laborales, los niños igual que

los adultos en medida de la acumulación de experiencias lectoras a las que tengan

oportunidad, “desarrollan algunas habilidades para hacer una lectura eficiente‖,50

por ello mismo Kalman sostiene que el “acceder a las prácticas sociales depende,

en gran medida, de la posibilidad de participar en su uso con personas que las

conocen y utilizan‖,51 y por tanto de esa misma participación se pueden obtener

conocimientos, en este caso acerca de la lectura, en principio de palabras y

posteriormente de textos más complejos, considerando la edad y el nivel cognitivo

que tenga por supuesto el niño.

49

María Alicia Peredo Merlo. Op. cit. pág. 31

50 Ídem

51 Judith Kalman. Op. Cit. pág. 39

Page 70: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 70 ~

CAPÍTULO 2.

CONCEPTOS ACERCA DE LA

LECTURA

Con respecto a las conceptualizaciones que se tienen de la lectura,

las hay tan diversas, como los modos de comprender este acto de comunicación,

y al igual que los niveles de comprensión y de expresión que las personas

tenemos, varían en su grado de aceptación, así por decir, en comparación con las

variantes que tenemos en nuestras expresiones en los diversos ámbitos sociales,

también en la aceptación de la lectura hay diversidad, hay autores que la

consideran como el mero hecho de pronunciar las palabras que están escritas en

determinados espacios, sin ver o dar la importancia al acto de comprensión que

debieran de asignarles, en tanto que los más exigentes investigadores de la

lectura, la hacen ver como un acto tan difícil de alcanzar que si no se pasa por un

excéntrico proceso, no podrá llamarse lectura.

En éste capítulo se retoman las ideas más aceptables acerca del hecho de

leer, por supuesto no son tan simples ni tan complejas, son entendibles y esto

basta, así como debiera bastar el reconocer que la lectura en la primera infancia

debería estar presente desde la aparición del lenguaje como el mismo hecho de la

comunicación y sus componentes, por un lado emisor y receptor y por otro el

mensaje; a la hora de hablar de inserción en la lectura, estaríamos planteando un

Page 71: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 71 ~

receptor (el niño), un mensaje (la palabra escrita) y un conductor (el decodificador

experimental) como se descubren estos elementos a partir de la interacción que

se tiene entre adultos, niños y textos en un ambiente.

Corral Villacastin denuncia que “saber leer es reconocer una palabra o una

frase. ya sea de forma global o segmentando sus componentes, relacionarla con

su significado para lo que se necesita no sólo tener la palabra en nuestro

vocabulario, sino también buscar o comprender la conexión con los demás

componentes de la oración, y extraer, por último, el mensaje para integrarlo en

nuestros conocimientos previos‖52. Con la descripción de lo que resulta ser la

lectura para la autora, se retomará para la edad que nos interesa abarcar en este

trabajo, la parte que refiere a saber el significado de la palabra y no solo tenerla en

el vocabulario, es decir, si se hace reconocer al niño en principio de que es de lo

que se le está hablando, podrá ser posible como lo menciona ya Vigotsky a partir

de la interacción con el ambiente y de la experiencia complementada por sus

congéneres adultos, que el niño haga una conexión entre el significado del objeto

que se le presenta y de la misma manera la asociación con las letras que ve

unidas, y que por obvias razones forman la palabra que esta escuchando o que

puede leer.

Así al asistir con papá, a comprar alguna herramienta o material para y

trabajar en casa, por ejemplo el niño escucha cuando se pide en la ferretería o

tienda de materiales, luego lo identifica al tenerlo frente a sus ojos y lo lee al hacer

en compañía de papá, la revisión de la nota de adquisición del producto.

52

Ana María Corral Villacastín. Op. cit. pág. 68

Page 72: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 72 ~

Gastón Mialaret por su parte indica que “Saber leer…Es comprender el

contenido de un mensaje escrito; es ser capaz de juzgar y apreciar el valor

estético53 comprendiendo por supuesto en principio los signos, posteriormente lo

que se descifra (relacionándolo claramente a lo que significa la palabra en sí) y por

último reflexionándolo, en este sentido Mialaret, permite que la relación del

pequeño en el ambiente social le permita identificar en principio los significados

de cada una de las palabras de forma simple e interactiva y acompañado con el

uso de estas, comprender lo que se nombra al pronunciarlas en conjunto, y por

último poder dar la explicación y hasta en ocasiones la descripción del objeto,

situación o persona citados.

Un ejemplo, de lo anterior seria, cuando el niño identifica ya que diario

consume una bebida con lacto-bacilos de marca reconocida, después de varias

sesiones en las que puede jugar haciendo comparaciones entre lo que consume y

el nombre de otros productos, podrá identificar cuales son las letras que forman

dicho nombre del producto y entregarlo cuando se le solicite, además al solo

nombrar la bebida de lacto-bacilos podrá recordarla, tal vez, describir el sabor y la

figura del envase donde se contiene; esto claramente puede verificarse con otros

productos, como lo son las papas fritas de marcas reconocidas, las frituras,

galletas y demás pastelitos y golosinas, que los niños llegan a consumir.

María Montessori, dice: ―Para mí, leer es interpretar una idea a través de

signos gráficos. Mientras las palabras escritas no transmiten ideas al niño, no se

puede decir que el niño sabe leer‖.54 En este sentido Montessori, hace referencia a

53

Ana María Corral Villacastín. Op. cit. pág 68

54 María Montessori. “La descoberta de l'infant”. En Sebastián Gertrúdix (1992), Vamos a leer y

escribir, cuadernos Aula Libre, núm. 1. Fraga. Imprenta Coso. pág. 7

Page 73: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 73 ~

que a los niños deben de mostrárseles palabras que representen algo, que en si

conozcan, para que el traerlas a su mente, surtan un efecto de espejo, es decir

mientras se menciona por ejemplo un objeto, los niños lo traerán a sus recuerdos,

propiciando de dicha manera que les sean significativas las palabras que usan.

En este sentido dentro de las ideas que se manejan en esta tesina, no se

olvida nunca que en principio todas las palabras con las que convive el niño están

expresadas por un contexto de uso común, y que por ende es entendible, así si en

un anuncio de feria se hace referencia a un pueblo, todos los que lo leen, indican

que pueblo es y reconocen las palabras y las letras que la forman, al mencionarlo.

La pedagoga catalana Pía Vilarrúbies, nos define la lectura de la siguiente

manera ―Leer no es solamente saber dar el sonido correcto a unos grafismos, ni

hacer una correspondencia entre sonidos y grafías; leer es, sobre todo, adquirir un

conocimiento, es entender, comprender, interpretar el significado de un escrito‖. 55

En ello se rescata para este trabajo que aquel niño, que se diga lector, sea de

palabras o textos, deberá explicar a que representa cada palabra cuando se le

cuestione, ya que por un lado si se habla de los tomates del mercado, será claro

que el niño los reconoce y explica como son y para qué sirven, no solo se queda

con la palabra tomate, sino que además lo conoce y lo recuerda cuando escucha o

habla de él.

Georges Piaton, autor de un extenso estudio sobre la pedagogía de

Célestin Freinet, también nos da su opinión ―… se define sumariamente la acción

55

Sebastián Gertrúdix. Op. Cit. pág. 7

Page 74: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 74 ~

de leer como el hecho de conocer y saber combinar las letras. Esta definición,

aunque muy simple, no resulta satisfactoria, puesto que reduce la lectura a una

trivial composición de un todo a partir de los elementos que lo constituyen; en este

caso, la construcción de una palabra o de una serie de palabras a partir de las

letras que las componen. Pues bien, leer es mucho más que eso, y la actividad

relacionada con la lectura, llamada léxica, resulta inevitablemente compleja, ya

que conduce a asociar, íntimamente, un sonido y un significado a un signo gráfico.

Así, la palabra pájaro, por ejemplo, no será verdaderamente leída hasta que,

habiendo sido reconocido su dibujo, el niño sepa simultáneamente pronunciarla y

sobre todo darle una significación‖. 56 En cuestión a lo que se plantea en la

presente tesina, se va de acuerdo en que, leer significa más que descifrar los

signos gráficos o letras para reproducirlos en el sonido de una palabra, sino que

significa la traspolación de un objeto, situación o sujeto a la voz, entendiendo

claramente a qué se refiere, cuando es pronunciada dicha palabra.

Por lo que si reconocemos que el contexto nos ofrece en diversas

oportunidades y escenarios, palabras con significados concretos, su uso puede

apoyar a los niños en el manejo de significados valiosos para ellos. No habrá de

ser necesario enseñar primero que es lo que dicen las palabras, sino más bien

obtenerlas de sus mismos elementos de representación para darles uso, por

ejemplo, abordemos lo que son los pastelitos de chocolate, mejor conocidos con el

nombre de una ave acuática perteneciente a la misma familia que los patos y los

cisnes, así si el niño los conoce como tal y acostumbra a consumirlo, solo será

necesario que comience a reconocer la palabra y la constitución de ésta, para que

pueda referirlo o en su caso recordarlo al mencionársele, o bien buscarlo por su

56

André Dehant y Arthur Gille. “El niño aprende a leer”. En Sebastián Gertrúdix (1992). Vamos a leer

y escribir, cuadernos Aula Libre, núm. 1. Fraga. Imprenta Coso. pág. 8

Page 75: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 75 ~

nombre en una lista de productos, cuando ya reconoce las letras que conforman la

palabra.

Jean Foucambert pedagogo francés expone que: ―La lectura es

necesariamente una actividad estrechamente vinculada a la totalidad del individuo,

a lo que es, a lo que vive, a su proyecto actual. Leer es haber escogido buscar

algo; amputada de esta intención, la lectura no existe. Puesto que leer es

encontrar la información que uno escoge, la lectura es, por naturaleza, flexible,

multiforme, adaptada siempre a la búsqueda. No existen grados de lectura,

lecturas que sean mejores que otras; saber leer es poderlo hacer todo cuando uno

lo desea y el texto lo permite... Aprender a leer es, pues, aprender a explorar un

texto, lentamente cuando se desea, muy deprisa cuando se desea así: es

aprender a adaptar la propia búsqueda al propio proyecto. Esto no es un lujo que

se adquiere al saber leer, ya que es la lectura en sí misma”. En este sentido los

niños que no han sido escolarizados, pueden acceder a una lectura rápida a partir

de la vinculación nombre- objeto, cuando no han aprendido aún a identificar las

letras de un texto, por ejemplo si dentro de un mercado se le pide a un niño de tres

años, indique los nombres de los productos que ahí hay, se remitirá a verlos y

pronunciar sus nombres, la cuestión será correcta, y deberá de reforzarse

entonces, señalando, donde es que esta el nombre de dichos productos, para que

el niño lo identifique y lo observe con detenimiento por un momento, para que

después aún no estando el producto donde debe de estar (junto a su letrero), el

niño indique lo que dice el letrero.

Kenneth S. Goodman dice al respecto ―Aprender a leer implica el desarrollo

de estrategias para obtener el sentido del texto. Implica el desarrollo de esquemas

acerca de la información que es representada en los textos. Esto solamente puede

Page 76: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 76 ~

ocurrir si los lectores principiantes estén respondiendo a textos significativos que

son interesantes y tienen sentido para ellos‖.57 En definitiva, no habrá de

propiciarse una lectura de textos que ofrezcan más que palabras sin relación a lo

que vive el niño, por ello, habrá de hacérsele notar que todas aquellas palabras a

las que se le enfrenta tienen diferentes organización con respecto al acomodo de

las letras, pero además hace alusión a diferentes objetos, sujetos o actividades,

que en realidad ellos ya conocen. De esta manera las palabras guardarán un

significado para los lectores.

Antonio Blay, que ha escrito sobre el aprendizaje rápido de la lectura para

adultos, nos dice lo siguiente: ―No leemos las letras ni las sílabas: lo que leemos

son las palabras directamente, consideradas como un conjunto total. Por eso, los

más recientes métodos de enseñanza de la lectura para los niños, en vez de

comenzar por el aprendizaje de las letras y sílabas, presentan directamente al

alumno palabras enteras, acompañadas de su imagen o dibujo correspondiente.

Desde el punto de vista lógico parece que el orden a seguir debería ser: letras,

sílabas y palabras. Pero si tenemos en cuenta el funcionamiento psicológico de la

percepción, el orden correcto es el inverso: primero las palabras como algo que

tiene en sí un sentido completo, y sólo después es cuando podemos comprender

el por qué y el para qué de las letras‖.58 Esto por supuesto apoya lo que en la

tesina se expresa, ya que ciertamente, se pretende manejar una lectura de las

palabras y textos del contexto, como tales y no letra por letra, aunque se acepta

que el reconocimiento de estas unidades habrá de partir de una identificación que

habrá sido el resultado de una constante interacción, con objetos parecidos a

57

Emilia Ferreiro y Margarita Gómez Palacio. “Nuevas perspectivas sobre los procesos de lectura y escritura”. En: Sebastián Gertrúdix (1992), Vamos a leer y escribir, cuadernos Aula Libre, núm. 1.

Fraga. Imprenta Coso. pág. 10 58

Antonio Blay.” Lectura rápida”. En Sebastián Gertrúdix (1992). Vamos a leer y escribir, cuadernos

Aula Libre, núm. 1. Fraga. Imprenta Coso. pág. 8

Page 77: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 77 ~

dichas letras, pero que no forzosamente implicaron, años u horas de estar

sentados aprendiendo sino más bien, serán el resultado de la convivencia natural,

que los adultos hayan propiciado o no, y utilizado a la vez.

Y es que es un hecho, el ambiente de letras que la sociedad ha creado le

esta ganando en riqueza de usos a los ámbitos escolares, por lo que deben de

rescatarse las ideas de los autores que comprenden la lectura como un acto de

vinculación con situaciones, objetos y sujetos que son conocidos por los niños, y

este acto no posponerlo hasta la escolarización, sino darle entrada desde el

mismo seno familiar y ambiente social ya que en la actualidad “la cultura escrita se

vincula con la naturaleza del hombre; y precisamente, a la naturalidad, tenemos

que apelar cuando pensamos en estrategias y actividades para la formación de

lectores‖.59 Situación que sería algo tan fácil si se le diera el seguimiento necesario

y coordinado en los primeros años de vida de los pequeños.

Si comprendemos que el apoyo que pueden dar los adultos a los niños

desde su experiencia, indicándoles cuales letras compone una palabra o en suma

expresando que dice dicha palabra y a la vez los hacen recordar el objeto al que

se refieren, comprenderemos en conjunto que “la lectura es un acto de

reconstrucción‖.60 Tanto de significados como de situaciones que se viven

cotidianamente en los contextos donde cohabitan los individuos.

59 Gerardo Cirianni y Luz María Peregrina. Op. Cit. pág. 20 60

Ibídem. págs. 20-21

Page 78: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 78 ~

Al considerar, pues, las diversas posturas con respecto a la lectura que se

han abordado, puede reconstruirse el siguiente concepto: la lectura es un proceso

de evocación de objetos, sujetos o acciones en el que interviene el lenguaje oral y

el pensamiento así como una contextualización de los elementos que se han

citado. Para hacerlo más entendible la evocación se refiere al reconocimiento de lo

que expresa una palabra que se pronuncia sea objeto, sujeto o acción; por ello no

se deja a solas el que se use la voz en su pronunciación, puesto que esto

representaría una debilidad, ya que si no hay una comprensión mental, así como

una ubicación de lo que se lee, difícilmente puede entenderse una palabra, frase o

texto.

El apoyo, que los adultos den a los niños, en lo que es la adquisición de la

lectura deberá partir del enfrentamiento a palabras reales, que podrán

desmenuzarse de acuerdo a las letras que las forman y además podrán refutarse

cuantas veces sea necesario, para asegurar una comprensión de éstas en el niño

Page 79: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 79 ~

CAPÍTULO 3.

LA INFLUENCIA SOCIAL EN LA

ADQUISICIÓN DE LA LECTURA

La existencia de un medio social resulta indispensable para el desarrollo de

un ser que es tan frágil cuando llega al mundo, debido a que no podría sobrevivir

sin que otros le prestaran una continua atención durante muchos años, estas

acciones están siempre mediadas por la cultura, de tal manera que la actividad del

hombre es siempre un complejo entramado de interacciones entre la naturaleza y

la cultura que con ella han creado, “así pues las propias formas de cuidar a los

niños y de impulsar su desarrollo son el resultado de su historia‖.61

El perfeccionamiento que cualquier ser humano presenta en un conjunto

cultural determinado, se ha inferido como un complejo sistema de socialización

que designan precisamente al ―proceso por el cual el individuo adquiere las

conductas, creencias, normas y motivos apreciados por su familia y por el grupo

cultural al que pertenecen‖,62 y que le admitirán en todas las formas desarrollarse

posteriormente dentro de esa sociedad a la que corresponde y seguir

reproduciéndola, de tal suerte que aunque cambie de ubicación contextual y

61

Juan Delval (2000). El desarrollo Humano. Mèx. Ed., Siglo XXI. pág. 23.

62 Revisado en: http://www.upn081.edu.mx/antologias/antologias/lie/7s/CSMFP.pdf. 19 de marzo

del 2010.

Page 80: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 80 ~

adquiera otras normas, valores y costumbres, seguirá conservando las más

arraigadas de su contexto primero, entre ellas las formas de expresión, algunas

conductas, sentires y vínculos afectivos.

Con lo anterior el niño al interactuar con sus iguales y con personas más

experimentadas que él, se empapa de la ―diversidad de vocabulario, la

complejidad sintáctica y la riqueza semántica que se aprenden y que están en

gran parte condicionados por el lenguaje que se habla en su entorno,63 por ello no

cabe mayor duda de que todo ese complejo aprendizaje que puede alcanzar el

niño, tendrá su base en la interacción que logre con sus familiares más allegados

en un principio.

Al considerar que la sociedad actual se preocupa cada vez más por dar a

sus hijos una educación de calidad y de excelentes resultados, buscando en

ocasiones las mejores instituciones, pensando que ahí encontrarán todos los

conocimientos y con ello podrán tener también los mejores hijos. No se reconoce

previamente que desde el contexto social se podría dar a los infantes la mejor de

las educaciones, desde una perspectiva basada principalmente en la interacción

con el contexto, guiada básicamente por los adultos; que podrían recibir una

capacitación en programas de tipo comunitario y que abarcan la mayor parte del

territorio nacional, que les rodean en sus primeros años, y que por naturaleza

forman parte del complejo sistema en el que como seres humanos nos

desarrollamos y vamos reafirmando durante nuestro proceso de vida.

63

Revisado en: http://www.upn081.edu.mx/antologias/antologias/lie/7s/CSMFP.pdf. 8 de mayo de

2010.

Page 81: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 81 ~

Esto sería parte de el mismo sistema de vida que se fuese formando en el

niño, puesto que al recibir influencias de lectura de quienes le rodean, en el

sentido de ver como algo, natural y cotidiano, la lectura de palabras, el

cuestionamiento de lo que dicen y representan para él, así como de las palabras

que las forman, le resultaría algo natural, y que como se menciona a los adultos y

niños que estén escolarizados y conozcan de lectura, no les seria difícil decodificar

las palabras y resolver las dudas que al niño le surgiesen, durante su interacción

con estas.

Además, se sostiene que los efectos del aprendizaje social, en lo que

respecta al sistema de lectura, podrían recoger sus frutos al llegar

aproximadamente a los cuatro años, para obtener de los pequeños los resultados

que cada padre sueña con tener, sin pensar inclusive que es hasta el arribo a las

escuelas donde se dará todo el conocimiento a los hijos y que a veces se quiere

que, sea ahí donde también, se formen los valores.

La ambición por tener los hijos más astutos e inteligentes seguro que está

en cada uno de los padres de nuestra sociedad, lo verdaderamente equívoco del

asunto es que la atracción por tener lo mejor del mundo sin hacer el mínimo

esfuerzo, está también en ellos, esperando sentados que sus vástagos sean y

crezcan siempre como unos triunfadores, sin preocuparse por salir a jugar,

caminar o simplemente ver qué ocurre fuera de su casa, para poder explicárselo y

con ello integrar un granito de arena en el inmenso mar de conocimientos que tal

niño podrá surcar.

Page 82: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 82 ~

Dentro de las situaciones que la sociedad tiene en la actualidad tal vez la

más problemática, complicada y hasta preocupante sea que dentro de las familias

que la conforman, el niño avance en las instituciones con un buen desempeño. Y

esto definitivamente tiene arreglo, incluso desde antes de la llegada a ellas, por lo

que al plantearse desde la perspectiva de aprendizaje social que un niño puede

aprender a leer, palabras e incluso textos, apoyándose en un ambiente lleno de

textos, así como de adultos y demás lectores que le rodean, pues le servirán de

decodificadores y de acompañantes, desde antes de los cuatro años, varios

padres comenzarán a pensar sobre la factibilidad de la situación, o en su caso por

lo menos lo arriesgado de la defensa a este asunto; que a varios más ha movido

ya anteriormente, entre ellos Bruner, Hunt, Bloom y otros psicólogos cognitivos

quienes expresan que ―el principal beneficio de la lectura precoz reside en el

desarrollo de los procesos lógicos implicados, que al ser activados, estimulan la

inteligencia del niño‖,64 de ahí que se mantenga la afirmación de los beneficios

que traería la lectura o su estimulación desde antes de la llegada a las

instituciones educativas, aprovechando el tiempo que el niño convive con adultos y

a la vez las relaciones de socialización y comunicación que se dan entre ellos.

Estableciéndose durante el contacto social el conocimiento de las reglas de

decodificación y el reconocimiento real de las letras y su despliegue en las

palabras, manejando entonces los símbolos que se dejan hasta la entrada al

preescolar, pudiendo elevar su reflexión, en razón a que el apoyo para la

identificación de estos símbolos que podrían ofrecer los padres le permitiría al niño

vincular todo el contacto con su medio, al uso del lenguaje escrito, y por ende, de

su verbalización, puesto que el mismo interés que tanto los pequeños como los

adultos presenten, para dar un uso a los textos que se tienen en la cotidianeidad,

64

Revisado en: http://www.todosleen.com.ar/lectprecoz/esposible.htm. 30 de noviembre de 2010.

Page 83: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 83 ~

serán los disparadores de actividades relacionadas a la lectura, tales como la

identificación, de las palabras de un anuncio político, o de el letrero de la tienda a

la que más se asiste a comprar productos básicos y que continúan teniendo letras,

precisamente para leer.

En estudios de psicología se ha identificado que “Los aprendizajes técnicos

comienzan con el uso de los instrumentos más antiguos de la civilización:

recipientes, vestidos, cuerdas y bastones, juegos de encajar, de amontonar,

ruedas, etc. desde los 15 meses, después de esta edad, la imagen provoca

reacciones de reconocimiento65‖ es entonces entendible que una vasta

información provocada por los familiares así como las personas que rodean al

niño, lo pueden hacer un ente más despierto y activo, al cual con el debido

enriquecimiento ambiental y más aún con el interés que se logre propiciar en

actividades cotidianas de reconocimiento para lograr poco a poco la identificación

de elementos necesarios en la lectura y la escritura como lo son las letras del

abecedario. De igual manera las relaciones que se le propongan desde el mismo

contexto familiar le apoyarán en la identificación de sus fonemas.

Posteriormente se indica que “Las construcciones, gracias a las cuales el

niño puede reproducir simbólicamente ciertas obras humanas, comienzan después

de los 18 meses: se insertan en juegos de ficción y, sometiéndose a reglas, las

más de las veces establecidas por el adulto‖66, en este caso uno o ambos padres,

familiares o personas con las que interactúe, cuestionándole acerca de los

65

Revisado en: http://www.upn081.edu.mx/antologias/antologias/lie/7s/CSMFP.pdf. 23 de mayo de

2010.

66 Ibídem.

Page 84: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 84 ~

nombres de las letras, de sus sonidos y las más de las veces invitándole a hacer

comparaciones que hagan referencia a las formas ambientales y su similitud con

algunas letras.

Así la enseñanza que en las familias y en la sociedad se podría ofrecer a

los niños, evitaría luego fracasos escolares y sobre todo pérdida de tiempo en la

enseñanza de la lecto-escritura durante los tres años que abarcan, 2° y 3° de

Preescolar así como el primer año de Primaria, cuando no hasta el segundo grado

de esta. Pues es bien sabido que en la actualidad pocos niños alcanzan las metas

propias de su edad, lo cual los limita para alcanzar una enseñanza más amplia.

Sería de vital importancia aprovechar el rico potencial y la plasticidad del niño

antes de los cuatro años, que aprende de su contexto casi sin darse cuenta. Es

decir, las metas que de por si son irregulares, tanto por lo que plantean los

programas de preescolar y que no son tomadas en cuenta en la primaria, cuando

en el primero sólo se trabaja una pre-lectura y en la segunda los libros de texto

vienen con temas de lectura y escritura, atroces en comparación con lo que el niño

hacia en preescolar. Pero éstos se podrían tomar como algo simple, al ya tener el

niño un acercamiento desde el contexto social a la lectura, pudiendo incluso

pensarse, que en el caso de no existir educación preescolar, en donde se

desarrolle, ingrese a la primaria ya con nociones de lectura de textos, gracias a los

logros alcanzados, con el apoyo de los adultos que le rodean.

Es innegable que la influencia de las variables culturales en el desarrollo de

la personalidad también se puede considerar indirecta en el sentido de que,

especialmente en sus primeros años de formación, la exposición del niño a su

Page 85: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 85 ~

cultura se ve obstruida en gran medida por la acción del grupo familiar,67 pero esto

lejos de afectar el desarrollo cognitivo del niño le refuerza más ya que el sistema o

modelo familiar de aprendizaje no estaría tan elaborado en principio y no sería tan

difícil de entender para éste, como en el caso de que pudiera tener una enorme

influencia social y verbal que le cuestionase o que le invitase a actividades

diferentes como las que se desarrollarían dentro de su contexto familiar.

Como bien menciona Corral Villacastin, la mayoría de los niños, si no es

que todos “diariamente, se están enfrentando al lenguaje escrito sin que los

adultos seamos conscientes de ello. Somos asaltados por la publicidad en

televisión, por las vallas publicitarias en las calles, autobuses, metros, en las

etiquetas de los productos de consumo... Con sus palabras claras, impactantes y

letras grandes, acompañadas de una pronunciación clara y en voz bastante alta,

los niños, querámoslo o no, de forma inconsciente, están empezando a leer68.

Cosa que se ha hecho tan normal, dentro de la cotidianeidad que ninguno o muy

pocos de los adultos se interesa por aprovechar esta situación para dar un realce,

en la situación de aprendizaje de los niños.

La propuesta que se a abordado como eje central de discusión y análisis

en este trabajo es entonces fácil de entender ya que se plantea el que “los niños

aprendan a identificar palabras y reproducirlas verbal y conceptualmente, además

de sus unidades de formación que son las letras y que se lograran reconocer por

nombre, sonido y forma cada una, al interactuar con ellas como lo podrían hacer

67

Revisado en: http://www.upn081.edu.mx/antologias/antologias/lie/7s/CSMFP.pdf. 27 de mayo de

2010.

68 Ana María Corral Villacastín. Óp. cit. págs. 74-75

Page 86: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 86 ~

con cualquier otro objeto, antes de los cuatro años”, para que junto con el proceso

de enfrentamiento a los textos, accedan a la lectura y porque no decirlo a la

escritura si sus habilidades motrices lo permiten. Esto por supuesto con la

intervención de la sociedad y de la familia encargada del niño, incluyendo como

objetos de interacción, en su contexto, las letras del abecedario (por supuesto de

formas interesantes y lúdicas), como si fueran cualquier otro juguete, utensilio de

cocina o herramienta de trabajo; ya que éstos son objetos que en un inicio para los

niños significan nada y que con sólo interactuar con ellos o ver el uso que les dan

sus padres, aprenden sus nombres, características y uso.

Y es que el razonamiento en el que se basa la hipótesis del reconocimiento

previo de las letras, es que: puesto que las palabras están formadas por un

pequeño conjunto de elementos visuales o grafemas, es natural considerar que el

reconocimiento de las palabras esta dado en la identificación preliminar de las

letras, una ventaja obvia de este supuesto es la económica, ya que basta con

disponer de los 28 grafemas en nuestra memoria para reconocer cualquier

palabra, 69 y es por ello que desde los planteamientos de este trabajo se

establece que el primer paso a dar en el acercamiento a la lectura será hacer que

dentro del contexto social se otorgue al niño la posibilidad de hacer una

separación de palabras en letras y darles un lugar especial, para así lograr su

reconocimiento y diferenciación dentro de las mismas palabras que se encuentren

en el contexto social.

Considerando pues que los niños establecen y describen diferencias entre

objetos cuando pueden hacer uso del lenguaje, en sí no se trata de enseñar a los

69

Fernando Cuetos Vega (2005). Psicología de la lectura. España. Ed. Praxis. pág. 28

Page 87: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 87 ~

niños a hacer una distinción, sino de hacerles tomar conciencia de una distinción

que ya saben hacer. Dicho en otros términos: no se trata de transmitir un

conocimiento que no tendrían fuera de este acto de transmisión, sino de hacerles

cobrar conciencia de un conocimiento que poseen, pero sin ser conscientes de

poseerlo,70 es decir, el acto de lograr que el niño reconozca cada una de las letras

dentro del ambiente social, se propiciaría al integrar las letras del abecedario como

parte de sus objetos de interacción, para poder distinguir su configuración; darse

cuenta de las diferencias que tienen una con otras, comprendiendo hacia donde

están las líneas curvas (derecha, izquierda, arriba o abajo), hasta donde se

encuentran las líneas verticales (derecha o izquierda, hacia arriba o hacia abajo).

Lo anterior sólo tendrá que reforzarse desde la pronunciación de los adultos

que rodeen al niño, haciéndole la indicación de qué letra es y cuál es el sonido que

la representa en las palabras, ya que el grafema estará siendo descubierto

directamente por el niño al lograr la identificación de las características de cada

una de dichas letras.

Es así como se puede entender que la interrelación que se manifiesta con

cualquier objeto y que queda de manera implícita en los conocimientos de los

niños, podría adecuarse ya no de manera convencional, a la situación del

abecedario, sus grafías, sus fonemas, uso en la lectura y hasta su escritura, sin

embargo el tipo de interacción que se propicie en la vida de los niños desde su

primera infancia, no sólo tendrá relevancia con su sentido a la lecto-escritura, sino

de igual manera al conocimiento del mundo y su actividad. Esta referirá un gusto o

aborrecimiento por la lectura si se trata de incluir en el desarrollo de los niños, bien

sea en forma divertida y que no parezca afectar ni distraerse de los intereses

70

Emilia Ferreiro y Ana Teberosky. Op. cit. pág. 26

Page 88: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 88 ~

propios de su edad, como lo es la investigación y experimentación a campo

abierto, o por el contrario si se trata de encasillar al niño, a una mesa, una silla y

material didáctico, como los lápices y los cuadernos.

Habrá de ser crucial entender que la postura filosófica de la personalidad

humana, es retomada desde el aspecto de la socialización que bien propone

Vigotsky, quien indica que el ser humano es un ser social por naturaleza y que al

interactuar con sus homólogos, quienes cuentan ya con experiencias dadas por su

relación previa con otros que llegaron a la vida antes que ellos, se forma a la

manera que éstos y a su vez podrá formar a los que le sucedan.

Como propone Vigotsky: “debemos abrir un puente entre ambos lenguajes,

el gráfico y el convencional‖,71 es decir se debe permitir al niño que por un lado

interactué desde pequeño con las grafías que hasta el ingreso a las instituciones

se ven de manera convencional planteando que lo convencional se refiere a lo

cotidiano, lo no relevante, lo que en todas partes existe, y lo que no es

específicamente elaborado para ser un ambiente usado para la pre lectura, para

que el niño acceda naturalmente a la comprensión del símbolo, puesto que este

puede ser reconocido desde antes de pisar una institución, en los espacios

públicos.

Por lo anterior la sociedad en la que se desarrolla cualquier niño, de forma

natural y cotidiana, puede dar uso a los elementos alfabetizadores, que incluyan

71

Tomado de http:www.todosleen.com.ar/lectprecoz/esposible.consultado el día 11 de septiembre

del 2009.

Page 89: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 89 ~

letras o elementos provechosos, siempre y cuando se lo proponga haciendo los

acercamientos al abecedario, su utilidad y propiciando que el niño encuentre la

relación entre su configuración individual y su uso variante al formar las palabras.

Al tener en cuenta que el conocimiento se construye con la experiencia,

habrá que entender de igual manera que el aprendizaje de la lectura se lograría

con la interacción y sin tener que conflictuar al niño hasta la llegada a las

instituciones donde más que ser para él algo interesante, se convierte en algo

atemorizante, pues si no lo aprenden son etiquetados hasta cierto punto como

irresponsables, ya que al llegar a la primaria o a cualquier institución, su único

compromiso es “estudiar” y esta consigna la respaldan los padres, tal vez por falta

de una capacitación o de interés por darles a sus hijos lo que en dichas

instituciones encontrarían; esto bajo el pretexto de que: para eso son las escuelas.

Por ello no se deberá de olvidar que el lenguaje del medio ambiente, con

sus significados estables y permanentes señala la dirección que seguirá la

generalización del niño. Pero, constreñido como está, su pensamiento avanza a lo

largo de un camino pre ordenado de un modo peculiar que corresponde a su nivel

de desarrollo intelectual. En donde el adulto no puede transmitir al niño su modo

de pensar, sólo puede suministrarle el significado ya hecho de una palabra,

alrededor de la cual éste forma un complejo, con todas las peculiaridades

estructurales, funcionales y genéticas del pensamiento de este tipo, aún cuando

su producto, de hecho idéntico en su contenido a una generalización, podría haber

sido formado por el pensamiento conceptual.72 Entonces, el niño de acuerdo al

avance de su lenguaje oral, psicológico y social, podrá interpretar las

72

Lev S. Vygotsky. Op. cit. pág. 87.

Page 90: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 90 ~

circunstancias de lectura a la que se le enfrenta, sea por un lado con la interacción

en las palabras y sus letras y posteriormente los textos, que en principio

lógicamente serán de pocas palabras; y que aumentaran conforme a la edad y

desarrollo lector que el niño vaya logrando.

Es así como, resulta determinante y necesario si realmente se persigue que

el niño avance en cuanto a su lectura, que en las palabras de su contexto, se

rescate también, el concepto que determina el nombre de cada una de las letras

gradualmente, haciéndole preguntas de reafirmación sobre estas, continuamente

durante horas diversas del día, para que aún a pesar de que el niño las integre en

principio dentro de un grupo de complejos, por las características similares que

presentan, posteriormente pueda acentuar las diferencias que en ellas encuentra y

expresarlas, tanto al preguntarle cuál es una y cuál es otra, así como al incitarle a

las comparaciones de dos o más.

Page 91: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 91 ~

CAPÍTULO 3.1

PRESENCIA DE UN AMBIENTE

ALFABETIZADOR EN EL CONTEXTO

Aunque se reconoce a la escuela como el lugar privilegiado para el

acceso a la lectura y la escritura, no se le identifica como el único… se tiene

acceso a la lengua escrita en situaciones de uso cotidiano. Ya que en toda

comunidad existen espacios donde la lectura y la escritura son prácticas

funcionales y engarzadas en el entramado de las prácticas sociales cotidianas,73

menciona Kalman; y esto en definitiva es cierto y es la parte central sobre la que

gira el planteamiento de este trabajo de investigación, en el que se expone que a

partir de la utilización de esa existencia de los espacios de lectura, se puede lograr

un acercamiento a ésta, considerando el apoyo de los adultos hacia los niños,

desde edades inferiores a los cuatro años, los infantes podrán lograr una lectura y

su comprensión por lo menos hasta la magnitud de la oración corta (tres palabras),

ya que se reconoce que la implicación de textos extensos podría ser demasiado

para niños de esta edad.

Y es que, efectivamente las situaciones de lectura y escritura pueden ocurrir

en distintos lugares o coincidir en uno solo, pues la noción de espacio se refiere

más a una situación interactiva que a un lugar geográfico o institución particular.74

73

Judith Kalman. Op. cit. pág. 48

74

Ibídem. pág. 50

Page 92: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 92 ~

Es decir no se plantea que la lectura pueda ser solamente con libro o papel de

texto en mano, sino que se puede localizar en todas partes recordando que hay

lectura de imágenes, textos, gestos y hasta movimientos, pero considerando que

lo que nos interesa es dar importancia a la lectura de palabras escritas, éstas las

podemos hallar si recorremos con la mirada nuestro entorno; en la placa de un

auto, en el letrero de la tiendita donde vamos casi a diario a comprar, en los

letreros de destino de los autobuses y taxis, en los comérciales de televisión, al

dar uso de los teléfonos móviles, y en infinidad de situaciones más.

La llegada de servicios públicos como la escuela, el correo y la biblioteca; el

uso de textos públicos, sobre todo en bardas y postes; la introducción y la

expansión de la venta de materiales impresos y el surgimiento de publicaciones

locales han cambiado el entorno geográfico de las poblaciones y los espacios para

la cultura escrita,75 debemos mostrarnos de acuerdo, en que se tiene por tanto

inmersos a los pequeños desde su nacimiento y en adelante en un contexto

educativo, que no es aprovechado aún por quienes estamos a su alrededor y que

dejamos que concurra hasta la incursión a las instituciones educativas, sean

preescolar o primaria, cuando no se tiene acceso al primero, que sea donde se

inicie una educación lecto- escritora, que bien podríamos promover desde que el

niño inicia a tener representaciones de los objetos que le rodean y de las palabras

que se le dicen o que escucha.

Como adultos tendríamos que reconocer que los nombres y los anuncios de

los establecimientos comerciales, y una considerable cantidad de letreros y avisos

comunitarios, adornan las calles. Estos grandes letreros (a veces casi murales)

75

Judith Kalman. Op. cit. pág. 51

Page 93: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 93 ~

que cubren las bardas de las principales calles son uno de los medios más

importantes para informar sobre fiestas comunitarias, bailes y peregrinaciones

religiosas, o para hacer propaganda partidista y promover productos comerciales y

servicios públicos. Pero estas bardas son también lugar para la expresión y la

comunicación de ideas alternas a las socialmente permitidas, pintas y graffiti con

contenido político e ideológico cubren algunas bardas, incluso tapando los textos

permitidos.76

Y que se les puede aprovechar para que se propicie en el niño la

identificación de cada uno de esos grafemas que se emplean para elaborarlos, se

estará incitando y favoreciendo el inicio a una lectura, si es que además de

explicarle lo que dicen o tratan de dar a conocer, se estimula en la misma medida

a que él haga ese análisis de las palabras y trate de reconocer tal vez su similitud

entre unas y otras, entendiendo que no siempre se usan las mismas letras para

escribir las palabras que se exponen en los textos, anuncios o letreros y que

además no se usan tampoco las mismas palabras en ellos, debido a que debe

haber una variabilidad de éstas para poder expresar una idea concreta.

Al no olvidar que en el aprendizaje de la lectura, interviene en gran medida

el contexto sociocultural que rodea al niño y a la niña, es necesario partir de su

cultura, de lo más significativo y cercano a su vida, 77 y de hecho para ello, se

76

Judith Kalman. Op. cit. pág. 52

77Revisado en:

http://webcache.googleusercontent.com/search?q=cache:IQ_2CknIshwJ:www.educacion.objectis.n

et/primer-ciclo/produccion-academica/lenguaje/acercamiento-a-la-lectura-y-la-

escritura/doc+aproximaci%C3%B3n+a+la+lectura+y+la+escritura+en+el+primer+ciclo&cd=8&hl=es

&ct=clnk&gl=mx&client=firefox-a. 13 de octubre de 2009

Page 94: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 94 ~

podrá iniciar entonces con la revisión del entorno que lo rodea y al cual pertenece,

implicando, además de la presencia física de los materiales impresos, la

oportunidad para usarlos, la oportunidad de interactuar con otros lectores y

escritores, la posibilidad de construir una identidad lecto-escritora y ser

considerados por otros como una persona capaz de leer y escribir,78 para que

sientan la seguridad de poder interpretar las palabras que encuentra en su entorno

y con ello las letras que las componen, este hecho permitirá al niño hacer una

asociación correcta de las palabras con su significado, ya que el conocimiento de

su contexto podrá permitir el reconocimiento de los elementos de éste, que se

citen.

Precisamente la confianza que el niño desarrolle, tanto para poder expresar

lo que sabe, acerca de las palabras o los textos, como para tratar de informarse,

de aquellas que no conoce, partirá de la motivación que tenga de los adultos, ya

que estos son el principal motivo de expresión y represión que puede tener. Por un

lado quien le felicite por esforzarse y conocer más acerca de la lectura, le creará

un gusto por ésta, más no así quien le reprenda diciéndole que aún es muy chico

para saber eso, o que esta equivocado al tratar de indicar como dice una palabra,

sin ni siquiera corregirle.

Cuando se habla de la interacción con otros lectores y escritores, se hace

referencia a los hermanos que van a la escuela y hacen las tareas de lectura y

escritura, además de los padres que en ocasiones leen el periódico, libros o textos

informativos, de los cuales pueden compartir a los hijos el contenido. Al hablar de

la escritura, claro es que en la mayoría de los niños menores de cuatro años su

78

Judith Kalman. Op. cit. pág. 51

Page 95: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 95 ~

capacidad de manipulación de objetos como los lápices es aun deficiente, sin

embargo si se puede considerar que no por ello, no tienen la intención de escribir

o en su caso de representar letras de las que se han apropiado con su constante

interacción. De no ser así pueden acomodarlas, como ya se indicara, con

elementos de juego o material disponible del entorno, argollas, clavos y otros, con

los que al dar la forma de una letra, bien puede llamársele al niño, escritor,

considerando que la proyección de un texto o palabra, puede diferenciarse a partir

del autor de estas.

No es nada raro encontrar una puerta, que tenga algún apellido formado

con varillas y soldadura, un distintivo de alguna familia, hecha bien en metal o

barro, el nombre de algún cerro proyectado con piedras formadas y pintadas con

cal, el nombre de una persona, escrito en un pastel con crema o chantillí. Y son

cosas como éstas donde podemos encontrar las palabras, que se ofrecen a los

niños sin siquiera planearlo, además de aquellas que representan productos de

venta, exhibición o de uso cotidiano, sin olvidar los libros, cuadernos, documentos

y carteles que nos rodean, puesto que la exigencia de su uso en los anteriores

eventos, no propone ya el uso de dichas palabras para edades o personas en

especifico.

Y si bien, a la escritura dentro de este documento, no se plantea como la

meta, sí se reconoce que dependerá del niño y de sus capacidades manipulativas

en cuestión a la coordinación motriz fina, el manejo de su espacio y de su

ubicación temporal, para que pueda realizar la grafía como tal en cuadernos y

demás materiales donde se pueda escribir; más lo interesante de la presente

tesina es que se infiere que a partir de el conocimiento y uso práctico de las letras

en la lectura de palabras, será más fácil el lograr una escritura, pues bien ya se

Page 96: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 96 ~

conocerán las similitudes y diferencias de cada una de las letras que son usadas

en la comunicación.

No debemos olvidar, que antes de este re planteamiento, sobre el acceso a

la lectura a partir de los dos años, hay estudios como los de Moore, Doman,

Cohen, Corral y otros ya citados, que indican la posibilidad de aprender a leer en

los niños menores de cinco años y en los que en cierta manera se hace presente

la importancia de trabajar con ellos situaciones claras de su contexto, es decir, sin

alterarles con palabras que ellos aún no conocen, se les encausa su lectura (y

escritura) con palabras realmente importantes para ellos como lo son: mamá o

papá u otras que les sean familiares y que son parte de un escenario social,

económico y político donde se lee y escribe, y en el que ocurren los procesos que

dan lugar a la diseminación y al arraigo de la lengua escrita.79 Lo cual desde los

motivos que se plantean con este trabajo, se podrá hacer todavía más fácil que lo

que se ha logrado en los estudios y proyectos presentados, puesto que se abarca

un espacio social lleno de palabras que lógicamente reconocerían los niños en su

contexto desde sus primeros años, si la presencia de sus padres y demás

miembros de la sociedad les conducen en el conocimiento e identificación de tales

palabras que les rodean.

Puesto que como se ha venido indicando, en todo el escrito, no es raro

encontrar palabras en los lugares en los que los niños se desarrollan, y son estas

las que se deben de aprovechar, por ejemplo el que el niño reconozca su calle,

comunidad o numero de casa (en caso de tenerlo), puede ser de importancia y las

palabras que indican esto, pocas veces son cambiadas de lugar, es decir, el

79

Judith Kalman. Op. cit. pág. 29

Page 97: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 97 ~

nombre de la calle se ubica siempre en alguna de las esquinas donde termina la

cuadra que recorre dicha calle, y el nombre de la comunidad, aparece siempre en

una placa, sea como señalamiento o como simple indicación del lugar donde se

está. Con respecto a los letreros que podríamos encontrar en los mercados, no es

nada raro identificar los nombres de las frutas o legumbres en los banderines de

cada puesto. Así es como la realidad, proporciona las palabras, ya solo depende

de los adultos el explicarlas a los niños y el pedirles las recuerden o asocien al

preguntarles que es lo que dicen.

Si sabemos que un niño de dos años suele limitar su descripción a los

objetos que figuran en su ambiente, en cambio los niños de mayores edades

describen las acciones e indican las relaciones complejas entre los objetos

separados que aparecen en su ambiente80 es en estas edades cuando habrá de

explotársele para que en principio logren la identificación de las palabras y letras

que las componen, tanto dentro de forma inducida dentro del contexto familiar,

como de forma natural al vincularlas a cualquier construcción o elemento del

entorno del que se rodea el niño, más aún de las palabras que están presentes en

los anuncios de las tiendas, placas de carros, nombres de productos que casi

diariamente se consumen, otras tantas situaciones en las que se pueden

encontrar las letras del abecedario.

80

Revisado en

http://licenciaturas.upnlapaz.edu.mx/Programasacademicos/LIE/LIEAntologias/03semestre/DESAR

ROLLOINFANTIL.PDF. 14 de marzo de 2010.

Page 98: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 98 ~

Otra característica y ventaja que se puede encontrar en el contexto que

rodea al niño es que: la escritura de vía pública por así llamarla, no solo es

privilegiada por el lugar estratégico que ocupa su principal portador (las bardas y

los postes de la calle, lugar por donde diario transitan sus lectores potenciales, ya

sean expertos principiantes o legos en asuntos de lectura) al permitirle ser leída

sin ser buscada intencionalmente; también es privilegiada porque su condición

pública y comunitaria le da la posibilidad de ser una escritura que transita por la

oralidad de los habitantes; una escritura que es comentada y platicada por los

miembros de la comunidad a la que está dirigida,81 por ello con mayor razón

resultará un acto poco difícil el que el niño logre comprender la situación de la que

se le hace partícipe al explicarle o leerle cada una de las palabras o textos que él

se interesa por identificar o por captar desde la traducción del adulto.

Al proyectar el conocimiento de los niños acerca de algunas palabras

acertadas o familiarizadas a algún producto de los que les rodean y de los cuales

consumen, no es nada difícil preguntar a un niño acerca de qué come, utiliza o

reconoce por ejemplo de los productos enlatados, bien sabrá que marca comercial

son, pues como estudios prácticos han demostrado, ya saben mucho de la lectura

cuando a solas miran algún libro o revista, cuando al ver letreros por la calle nos

informan: ―ahí dice Tome Coca-Cola‖,82 y la mayoría de las veces aciertan,

coincidiendo entonces, el presente tema con la idea de que es posible lograr un

acceso a la lectura, sin siquiera tener una escolarización, solo partiendo del

contexto, se sigue reforzando el que los niños logran reconocer algunas

situaciones de los textos, que si se les apoya debidamente, provocaran una

revolución en su cognición y al interrogarles por un lado, que es lo que dicen cada

81

Judith Kalman. Op. cit. pág. 52

82 Gerardo Cirianni y Luz María Peregrina. Op. cit. pág. 25

Page 99: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 99 ~

vez mayor número de textos, ellos podrán ir afianzando mayor número de

palabras y reconociendo entre ellas las letras que las forman, haciendo un

entramado de letras con las que se escribe una mayor cantidad de palabras que

pueden o no ser conocidas por los niños, pero que se podrán consultar con los

adultos que los acompañan en el mismo momento de sus dudas.

Dentro de la riqueza de textos que podrán encontrar en casi todos lados los

niños identificarán que las mismas letras en forma alterada pueden formar nuevas

palabras y que de hecho no por existir las mismas letras en diferentes palabras el

significado de tales no será el mismo, por ejemplo saco y caso, y esto solo lo

lograran identificar con la experiencia que quienes les rodean (sean sus padres,

tíos, abuelos o hermanos), les ayuden a tener, tanto en la observación del

acomodo de las letras como de las situaciones en las que se manejan pues es

bien sabido y sobre todo comprobado hasta sin investigaciones exhaustivas que

los niños pequeños no solo son capaces de mirar imágenes, sino de registrar y

disfrutar la forma y el tamaño de las letras, así como de la distribución y la

organización del texto en la página y de las relaciones entre las imágenes y los

textos,83 con lo cual queda claro que en un texto, sus formas y variaciones en el

acomodo de las letras, propician en el niño diferentes perspectivas, que le apoyan

para reconocer e interpretar el significado de la o las palabras que está leyendo.

El apoyo que se pueda dar a los niños en este sentido por parte de los

adultos les hace sentir la seguridad para preguntar el significado de las palabras

que les interesan, sea por sus colores, formas o por las imágenes que se

encuentren cerca de ellas y es que “en nuestra sociedad, los niños esperan con

83

Gerardo Cirianni y Luz María Peregrina. Op. cit. pág. 30

Page 100: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 100 ~

alegría la llegada del aprendizaje de la lectura y la escritura. Estos conocimientos

simbolizan, para ellos, el ingreso al mundo de los adultos,84 mundo que les puede

ser tan motivante cuando no se le niega el derecho de solucionar sus dudas en

cuanto a los textos o palabras que les interesan, o que en otro de los sentidos

pueden representar la posibilidad de sentirse en términos de igualdad, por saber

que comparten con las adultos una cultura escrita de la que pueden participar, tal

vez en sus formas más simples, pero que sin duda resulta un avance en cuestión

a los conocimientos que habrá de enfrentarse, ya en el ámbito educativo.

Cuando el adulto pone el ejemplo al niño acerca de la importancia de la

lectura en determinadas palabras, como pueden ser el nombre de los productos

alimenticios y que son de consumo diario, así como otras que representan el

destino a seguir tanto por las mañanas con rumbo a la escuela y el trabajo, como

por las tardes en el regreso a casa y lo hacen mencionando o decodificando en

voz alta las letras que conforman cada palabra, les están transmitiendo el sentido

real de las palabras ya que leer con la idea de escucha y habla vincula a este acto

con el concepto original de lectura e implica dinamismo entre la palabra de quien

pretende fijar el concepto y el que lo levanta,85 situando en esta realidad, que

quien fija el concepto es el adulto y que quien lo levanta es el niño, es decir se

hace referencia a los tres elementos de la comunicación o mejor dicho

transmisión de la experiencia lectora, que se configuran en la presente

investigación teórica: conductor (decodificador), mensaje (palabra), y receptor

(niño).

84

Ibídem. Pág. 39

85 Gerardo Cirianni y Luz María Peregrina. Op. cit. pág. 87

Page 101: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 101 ~

Puesto que, el adulto que es quien puede realizar la lectura directa de las

palabras, funciona como el decodificador, y al estarlas pronunciando genera lo que

sería el mensaje, hacia el receptor de dicha palabra, al cual representa el niño,

haciendo una triada de interacción entre lo que es experiencia (del adulto),

contexto (palabras) y lector iniciado (el niño no escolarizado).

Siguiendo la discusión de los elementos, de la transmisión del significado

de las palabras se puede detectar la importancia de la transmisión del sentido real

de éstas y se hace la consideración de que el niño ―les da crédito no sólo por

quien las dice, sino por el espacio en el que se escriben,‖86 es decir toma el

sentido e importancia a una palabra, cuando reconoce claramente de que objeto,

sujeto o situación trata y más aún en que espacio temporal se está planteando,

por un lado, reconocerá claramente cuando se trata de un personaje de cuento, de

un producto de consumo, de un juguete o de un letrero con el nombre de alguna

calle y por el otro, comprenderá a través de la voz del conductor de su aprendizaje

de la lectura, tanto la forma en que habrá de pronunciarse la citada palabra, así

como la importancia que representa tanto para la sociedad como para él mismo.

Comprendiendo lo antepuesto, reconoceremos que una palabra tiene para

el mismo grupo social un mismo significado y que su uso así como representación

a través de las letras es el mismo ya que “la lengua escrita es un objeto de uso

social, con una existencia social,‖87 pues bien se reconoce que si el pequeño de

dos años acompaña a su madre a comprar lechugas al mercado, por ejemplo, no

sólo ella pedirá lechugas al dueño del puesto de verduras, sino que todas las

86

Gerardo Cirianni y Luz María Peregrina. Op. cit. pág. 102

87 Emilia Ferreiro. Op. cit. pág. 24

Page 102: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 102 ~

personas que empleen tal vegetal para hacer ensaladas, lo pedirá pronunciando el

mismo nombre y de hecho el punto será que este nombre estará escrito en el

letrero donde además habrá un precio, que referirá también algunos números que

ya pueden irse identificando desde este momento.

Con el apoyo, que en la situación citada, la madre ofrezca al niño para que

vaya logrando la identificación de las letras (y los números), así como el grado de

inferencias posteriores que pueda lograr a partir del mismo letrero cuando conozca

las letras que lo conforman se hace explicita la condición de la presencia de las

palabras en cada palmo de lo que el hombre ha creado y que es por tanto una

construcción social, además se confirma como ―el niño ve más letras fuera que

dentro de la escuela; el niño puede tratar de interpretar los textos que ve fuera y

dentro de la escuela.‖88 Por lo que se presenta otro motivo, para expresar que no

es necesario esperar a que el niño llegue a un contexto escolarizado, para

acceder a la lectura, puesto que es afuera donde las palabras y letras están

presentes, de tan diversas formas, que este mismo hecho les permitirá a los niños

reconocer desde ahí sus variantes usos y de la misma manera su diversidad, y

que en realidad cambian en algunas situaciones el sentido y significado de las

palabras, pero que al conocer bien el uso de dicha palabra, en el ámbito social, no

crea dudas en el niño.

En el conocimiento de que por supuesto no todo los ámbitos sociales son

iguales podemos considerar estas diferencias, para lo que nos interesa, solamente

en un par: riqueza o pobreza de palabras en el contexto; es decir ambientes

tapizados por doquier de situaciones escritas como lo son las zonas urbanizadas y

88

Emilia Ferreiro. Op. cit. pág. 26

Page 103: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 103 ~

en contraparte zonas rurales que ofrecen poca combinación y presencia de textos,

pero que no por ello dejan de ser significativos los que ahí se encuentran, aún

siendo por lo general más permanentes el nombre del candidato de algún partido

político o del baile de feria anual, estos ya presentan diversidad de formas y

agrupación de las letras.

En este caso no es nada raro que el nombre propio que se usa en el

representante del partido político, sea similar al de algún miembro de la

comunidad y que es conocido por el niño, por lo que se puede hacer la indicación

de la persona a la que podría referirse el nombre escrito, de la misma manera el

apellido; en la situación de los anuncios de feria, por lo común los grupos

musicales pueden tomar el nombre de animales salvajes (alacranes, palomo,

coyote, potranca, toro, tigre, etc.), adjetivos calificativos (poder, macizo, norteño,

dorado, etc.), u otras situaciones, y estas por supuesto que pueden ser

aprovechadas por los adultos para indicar a los niños que es lo que esta escrito.

En el mejor de los casos y donde las posibilidades de acceso a la lectura

podrían ser excepcionales , el tiempo de los adultos es muy reducido, sin embargo

es de aceptarse que “cuando los niños habitan un ambiente urbano, encuentra

escrituras por todas partes (letreros en la calle, envases comerciales,

propagandas, carteles en la TV, etc.),89 lo cual acompañado de una buena

conducción del aprendizaje permitiría en los niños ese descubrimiento y uso de las

palabras que están presentes en su contexto y que significan para la sociedad y

hasta para ellos un estilo de vida, un encuentro con otras personas que han

tratado de expresar sus sentires, necesidades o solamente sus ideas, ya que

89

Emilia Ferreiro. Op. cit. pág. 25

Page 104: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 104 ~

dentro de tanto texto, ubicado por doquier, localizaremos objetos en venta,

solicitudes de compra y otras de pura expresión de nombres, que podrán

explicarse claramente a los pequeños.

Lo contrario a la presencia de tantos y tantos textos sería un mundo de

comunicación hablada, mímica, pictórica, pero en el mejor de los casos sólo esta

última podría permanecer en el tiempo para satisfacción de diversos lectores y de

quienes produjeran las imágenes, pero al aceptar que las palabras existen “nadie

puede impedir que el niño vea las letras y que se ocupe de ellas. Como tampoco

nadie puede honestamente pedir al niño que solamente a su manera pida

información a su maestra, sin solicitar jamás información a otras personas

alfabetizadas que pueda haber en su entorno (hermanos, amigos, tíos…),90

mostrándose de tal manera la real necesidad de permitir a la sociedad guiar el

aprendizaje de la lectura a los niños desde su edad más temprana, como algo tan

natural como la mismísima palabra que se pronuncia cotidianamente.

Entre ese contexto natural de lectores es de reconocer que tanto los niños

como los adultos tienen un ambiente que compartir, en el cual la presencia de las

palabras escritas no puede opacarse, por ello mismo la energía, gusto y hasta

ritmo que cada adulto suministre a las palabras que lee, para que le escuchen los

niños, les dará la seguridad de pronunciarlas cuando las conozcan bien y hasta les

propiciaran el deseo de buscar la forma de reinterpretarles y expresarlas ya que

“para fijar el concepto del escritor y que el lector lo levante es necesario vincular

la acción de leer con la de escuchar y la de hablar.‖91 En este caso el niño

90

Emilia Ferreiro. Op. cit. págs. 25-26

91 Gerardo Cirianni y Luz María Peregrina. Op. cit. pág. 48

Page 105: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 105 ~

comprenderá a los adultos y sus expresiones desde la perspectiva de los

creadores de las palabras, puesto que si lo hacen con buena entonación y

emoción, causaran en el niño la representación del verdadero significado que el

autor quiso proyectar para los lectores.

En el caso de querer convivir con mayor número de textos y de acercar a

los pequeños a la lectura, sin ser necesario de caer en el acercamiento a las

instituciones escolarizadas, usando un elemento del contexto que rara vez se

visita por gusto, se puede llevar a los pequeños a consultar en la biblioteca, lugar

donde podrán encontrar temas tan diversos y sin invertir económicamente en

ellos, a menos que los textos de las obras que ahí se encuentren sean

emocionantes para los niños, que los quieran tener en casa por siempre. El hecho

de que estos espacios públicos, no sean tan comunes en las localidades es

seriamente preocupante pues éstas al igual que las ―bibliotecas escolares en

ocasiones son, dotadas de cientos y, a veces, miles de volúmenes cuya existencia

real es ignorada por la mayoría de los miembros de la comunidad,92 dado que el

poco interés por la lectura se hace cada vez más evidente.

Al provocar en los niños ese deseo de asistir a investigar tanto en las

bibliotecas públicas como en el entorno que les rodea, la inmensidad de palabras

y de usos que la sociedad les da; los adultos estarán apoyando una cultura de

lectores que generará niños mayormente convencidos de que la lectura se puede

adquirir de forma tan simple como cualquier conocimiento sobre otras actividades,

considerando entonces que: esta diversidad de materiales y de contactos con ellos

muestra que el sentido de la lectura es abrirse a los otros, que se lee para

92

Gerardo Cirianni y Luz María Peregrina. Op. cit. pág. 49

Page 106: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 106 ~

reconstruir las ideas que uno tiene de las cosas apoyándose en lo que se puede

conocer de las otras realidades,93 por lo que si la lectura se visualiza en la

diversidad de espacios del contexto, es también posible reconocer que la misma

tiene un sentido real, tanto para los niños como para los adultos que conviven en

una misma sociedad.

Con toda la experiencia que los adultos tienen sobre eventos de lectura, se

hace claro que solo ellos (aún en el papel de educadores) serán quienes puedan

propiciar en los niños tanto los deseos de aprender a través de la lectura, así

como de descubrir nuevos significados y nuevas palabras que podrán emplear

posteriormente considerando la experiencia que ya tienen sobre la relación que

ésta pueda establecer con respecto a sujetos, objetos u acciones, es así como se

hace importante precisar que “los tiempos de relación directa con los materiales

escritos, sin mediación, sin sugerencia alguna por parte de quienes se suponen

tienen más experiencia respecto de los actos de lectura son más que deseables,

son indispensables para los que están descubriendo las posibilidades, las

oportunidades y la eficacia de la palabra escrita para la recreación de la

experiencia personal,‖94 y por supuesto para acceder a un mundo de

comunicación que no debiera esperar hasta la llegada a la escuela, retrasándose

dos años o más a los que a los que se plantean como efectivos para el acceso a

una lectura comprensiva, aún en la decodificación de meras palabras en principio.

93

Gerardo Cirianni y Luz María Peregrina. Op. cit. pág. 53

94 Ibídem. pág. 56

Page 107: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 107 ~

Con todo lo expuesto en este capítulo se establece que, dentro del contexto

que rodea al niño menor de cuatro años y que se supone no tienen experiencia

para lograr una adquisición a la lectura, hay todos los elementos que le podrían

permitir un acceso al dominio de diferentes palabras y su pronunciación por

unidades también llamadas letras, teniendo además la capacidad de reconocer de

que elementos se esta refiriendo cada una al reconocerlos ya, por la misma

experiencia que las personas mayores de su cultura les han apoyado a conocer,

pues es bien cierto que hacia los cuatro o cinco años, ya somos sujetos en plena

construcción cultural, y ya es posible encontrar diferencias notables de una

persona a otra en organización y en jerarquías de múltiples conocimientos. El

lenguaje, desde luego, no es la excepción.95

Por lo tanto, todo aquel niño que pueda manifestar sus sentires y dudas, y

al mismo tiempo recordar que significado tienen las palabras que reproduce o

recuerda esta en la posibilidad de dar un uso adecuado a la lectura que pueda

desarrollar a partir del apoyo que le dedicará su contexto considerando por un lado

las palabras que por doquier se encuentran y por el otro, las personas que pueden

apoyar al niño en la decodificación de estas palabras.

Es necesario, al igual que el reconocer la importancia del proceso de

socialización y de su influencia en los niños para favorecer su expresión oral que

“hacia los cuatro o cinco, las diferencias en relación con la recepción y ejecución

lingüística como uno más de los conocimientos socialmente adquiridos son

notables de comunidad a comunidad, de grupo a grupo, de sujeto a sujeto.‖96 ya

que en gran parte las habilidades que adquiera un niño con respecto a su

verbalización dependen, del grado de actividad comunicativa que se de en su

95

Gerardo Cirianni y Luz María Peregrina. Op. cit .pàg. 65.

96 Ídem.

Page 108: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 108 ~

contexto y además del bombardeo que den los diferentes textos insertos en dicho

ambiente, pues es bien cierto que en cuanto a las comunidades de orden rural, el

manejo de situaciones escritas y de comentarios de las personas puede ser bajo,

aunque no por ello nulo, en comparación con el contexto urbano, que se podría

decir esta inundado de información escrita así como de la verbal, tanto en los

medios de comunicación existentes como entre las personas que conviven en

tales zonas.

Considerando entonces dichos espacios tanto el urbano como el rural, no

se debe inferir que estos están desconectados de las oportunidades de lectura, ya

que aunque sea en mínimas situaciones habrá por lo menos un texto fuera de las

instituciones, y dentro de estas será evidente sus presencia, es decir “si en el

espacio escolar y en los ambientes sociales donde los niños y jóvenes desarrollan

su vida cotidiana se promueve el uso total de la palabra para todos- esto es el

lenguaje en todas sus manifestaciones, sin desprecios ni prohibiciones-, es

probable que se puedan percibir muchas formas de encuentros posibles entre las

palabras escuchadas, dichas, leídas o escritas.‖97 Estos encuentros posibles se

darán dentro del contexto social y por supuesto en el contexto familiar, con ello

nadie habrá de negar que los adultos son responsables de la educación de los

pequeños, así como también son los proyectores de los ejemplos que habrán de

seguir y posteriormente repetir para las generaciones que les reemplazaran.

El valor de la comunicación que se de entre los adultos y los niños, sean

estos de ambientes rurales o urbanos, sea bien sin pisar siquiera la escuela o ya

dentro de ella “puede darse sin violencia si prestamos a la oralidad la misma

97

Gerardo Cirianni y Luz María Peregrina. Op. cit. pág. 68

Page 109: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 109 ~

atención que a la escritura, y si hacemos del uso total de la palabra para todos, un

acontecimiento cotidiano.‖98 Al interesar a los niños en el desarrollo de sus

lecturas, desde la simple vinculación de las actividades diarias, con el acto de leer,

el proceso de enseñanza surgirá como algo normal, y que no alterara los procesos

del niño, puesto que ya desde sus más tiernos tiempos, se le estarán dando

ejemplos de lo que se puede hacer con las letras, las palabras y los textos, desde

entonces el niño ya adquiere la noción de la comunicación escrita y reconoce la

necesidad de poder interpretar palabras y textos más grandes.

.

98

Ibídem. pág. 70

Page 110: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 110 ~

CAPÍTULO 3.2

ELEMENTOS DE IMPORTANCIA

PARA EL ACERCAMIENTO A LA

LECTURA EN EL HOGAR DEL NIÑO

Ya teniendo identificados en las calles los elementos que apoyan en el uso

del lenguaje escrito y su manipulación, en la formación y entrenamiento hacia la

lectura al niño, se habrá de reconocer que dentro del propio hogar también los hay

y éstos, que en su mayoría son documentos que pueden ser clasificados en

función del ámbito de la esfera familiar al que se refieren: cívicos, administrativos,

escolares, religiosos y de salud. Todos ellos están ligados a actividades sociales

en que los espacios generadores de lectura y escritura se hacen presentes,

involucrando a uno o más miembros de la familia.99

En este caso, al pequeño menor de cuatro años, ya que es quien pasa la

mayor parte del tiempo dentro del hogar intentando hacer descubrimientos nuevos

o reflexiones sobre lo que le rodea. Por lo que es de importancia otorgar unos

minutos a la presencia de la lectura, al principio, 3 veces al día, empezando a una

hora del día en que el niño esté descansado y de buen humor y evitando

distracciones. Se podrá presentar entonces la letra o palabra y decirle: " aquí

dice, o esta letra es…" sólo durante unos 10 segundos; se le permitirá jugar de

99

Judith Kalman. Op. cit. pág. 82

Page 111: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 111 ~

nuevo durante unos minutos a otra cosa y se la volveremos a presentar,100

haciendo entonces uso el mismo de su capacidad de memoria.

Otro elemento que se puede hallar en el interior de la casa es el instructivo

que como texto de utilidad práctica cotidiana, es asombrosamente frecuente,

aunque su uso sea muy puntual,101 sin embargo para cuando el niño se ha

interesado en todos los aspectos que contiene letras puede rebuscarse y

propiciarse su uso, por ejemplo en las indicaciones de armado de un juguete, en la

preparación de un postre, entre otros, aunque se deberá de entender que no se

usará en su totalidad, ya que esto aburriría al pequeño, sino que solo se usarán

algunas palabras que puedan ser significativas en la vida cotidiana. Por ejemplo

de los documentos como actas y boletas, puede rescatarse en principio solo el

nombre de las personas o de los lugares; en el caso de los instructivos, los

nombres de las piezas que mencionan y en cuanto a las recetas pues los

ingredientes que se usan, y que a están representando para el niño un elemento,

no solamente la palabra.

Los calendarios, proyectan en su mayoría los números entre uno y treinta y

uno, pero no dejen atrás las letras, que se ubican en los días de la semana y los

nombres de los meses, sin olvidar que algunos tienen además nombres de santos

y las conmemoraciones de los días festivos, algunas personas acostumbran

colocar cuadros con frases, poemas u oraciones, en los que hay palabras que

pueden irse leyendo para los niños.

100 Revisado en: http://mariadelosan.espacioblog.com/categoria/informaciain-padres-y-maestros. 24 de mayo de 2010.

101

Judith Kalman. Op. cit. pág. 86

Page 112: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 112 ~

Las oportunidades para leer y escribir también son espacios generadores

para la lengua escrita y se clasifican en tres tipos, en situaciones demandantes,

situaciones de andamiaje y situaciones voluntarias. Las primeras cuando alguien

requiere hacer un escrito largo o corto, por necesidad, la segunda se presenta

cuando un hermano ayuda a otro y la tercera se presenta cuando una persona lee

voluntariamente, una revista, un anuncio o un periódico, sin tener que moverlo o

llevarlo a casa.102 Entonces debemos de entender que el uso de la lectura en los

niños menores de cuatro años partirá del hogar, pues no se le habrá de forzar

durante tiempos extremos a tener una práctica de lectura y mucho menos de

escritura.

La motivación que se les de en casa permitirá que los niños lleguen a tomar

la iniciativa en algunas situaciones, de lectura simple (es decir en algunas

palabras) o por lo menos de interpretación, con tendencia a la familiarización, o se

atreverán a solicitar a los adultos que les rodean les lean algunos textos de su

agrado o por lo menos algunas palabras, ya que cuando se sienten seguros “ellos

deciden cuando quieren compartir cada una de esas acciones y son explícitos al

pedirlas,103 por tales razones es necesario darle la importancia real que tienen los

elementos de escritura que hay en el ambiente, para que en el momento en el que

los niños pidan, les sean decodificados, descritos y explicados para favorecer su

comprensión en ellos.

En suma, podremos ir arraigando ese hábito de lectura que se hace tan

necesario para el futuro de las sociedades, al mismo tiempo que influimos en que

102

Judith Kalman. Op. cit. pág. 96

103 Gerardo Cirianni y Luz María Peregrina. Op. cit. pág. 16

Page 113: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 113 ~

los niños pequeños logren crearse un familiarización con las letras, las palabras y

sus significados, de dicha manera, sin importar los tipos de palabras que

encuentren en su camino cuando comiencen a leer, no habrá impedimento en su

comprensión, puesto que ya el cúmulo de experiencias que los adultos, que les

rodean o cuidan, les logren transferir y crear con sus explicaciones,

acompañamiento así como motivación les darán las herramientas para

comprender su realidad, es esta una razón para que como adultos “mostremos

libros y narremos a partir de imágenes que ellos ofrezcan. Contemos o leamos la

historia original y, después, recreémosla abreviándola o extendiéndola con

absoluta libertad, sin ninguna preocupación si se altera el sentido original del

material,104 al igual que podemos hacerlo con las palabras sencillas y solitarias

que hay en los espacios sociales de lectura que han sido creados tal vez con el

objetivo de ser usados sólo por adultos, pero que como en párrafos anteriores

citara no se pueden negar a la vista y realidad de los más pequeños.

La motivación que los adultos empleen en sus lecturas, así como el gusto

con que lo hagan, permitirá que los niños intenten leer algunas palabras, o se

interesen por buscar estrategias de lectura, como lo son la repetición memorística

de los cuentos o de algunas historias que les son contadas por un adulto y que

les gustan, las palabras cortas en su caso también habrán de pronunciarse por

parte de los lectores decodificadores de forma dinámica y de acuerdo al texto y el

motivo en que se usa, por ejemplo al hablar de los nombres de las frutas o

verduras que serían cosas de las más comunes en los mercados puede leer:

¡jitomates¡ para la sopa que comerás, ¡mira tiene la letra “j” al inicio, la “i”, y la “t”

que parece una cruz¡, entre otras.

104

Gerardo Cirianni y Luz María Peregrina. Op. cit. pág. 22

Page 114: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 114 ~

Con lo antepuesto los niños podrán ir haciendo asociaciones tanto con el

uso del elemento que la palabra representa, así como con las letras y sus

características, que componen a la misma palabra de ahí que se mencione que

“los niños aprenden a leer cuando miran que la madre, en la cocina, fija la vista

repetidas veces en un papel y, a partir de eso, mezcla ingredientes, los cocinan y

sirve la comida. Siguen aprendiendo a leer cuando el padre, el abuelo o el tío les

leen cuentos antes de dormir. Las lecciones de lectura continúan cuando ven a

sus hermanos que hacen la tarea escolar o que repasan la lección, porque, al día

siguiente, tendrán que rendirla a sus maestros‖,105 es decir, para los niños podrán

existir muchos ejemplos de lectura que podrán ser utilizados en su beneficio, de la

misma manera que lo hacen los adultos al entrar por ejemplo a ejercer un oficio

que aún no conocían; con el simple hecho de observar, atender las explicaciones

así como la misma práctica, el adulto adquiere las habilidades para desempeñar

las nuevas funciones de su oficio.

Siguiendo en el sentido de los ejemplos, al igual que de sus beneficios para

con los niños, si reconocemos que en el primer día de trabajo del adulto en el

oficio que él no conocía, puede identificar algunas de las herramientas que

empleara, aunque no retenga por el momento sus nombres, asimismo el niño

comprende que ―en los textos escritos, se dicen cosas y que, cada vez que sean

leídas en voz alta, serán dichas las mismas palabras; pero quizá no con la misma

emoción, ni con el mismo volumen, ni con el mismo tono,‖106 así con esa

experiencia, podrá acceder poco a poco a situaciones de reconocimiento de letras

y palabras que se usan en la lengua escrita, al igual que lo fue haciendo el adulto

con respecto a reconocer cada una de las herramientas que utiliza en su trabajo.

105

Gerardo Cirianni y Luz María Peregrina. Op. cit. pág. 25

106 Ídem.

Page 115: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 115 ~

En este sentido es de asegurar que mientras más práctica haya, en los dos casos,

mayor será el acceso a las habilidades que cada uno de ellos plantean, y si como

menciona el refrán: si se aprende bien, no tendrá por que ser olvidado.

Si ponemos de manifiesto que por supuesto no a todas las personas nos

agradan las mismas actividades, las mismas modas o hasta las mismas comidas,

comprenderemos sin discusión que a los niños tampoco les agradaran los mismos

textos, sin embargo si queremos comenzar de lo más fácil en cuanto a lectura,

tendremos que encontrar aquellas palabras que les causa más placer leer, o que

les interesa identificar para poder hacer la indicación de, a qué objetos de su

entorno se refieren, además, de que éstas les serán de inmediato familiares,

considerando que sólo se agregaran como etiqueta a los objetos que citan en su

pronunciación y escritura (aunque esto no suceda de manera explicita), de hecho

“antes de su alfabetización, los niños saben que, cuando escuchan un texto

piensan, imaginan y se emocionan; y que eso que les pasa por la cabeza a veces

lo dicen y otras, no; y que, cuando lo expresan, se sienten muy satisfechos,‖107 por

lo que el explicar las situaciones de lectura con que se puede relacionar todo lo

que nos rodea, incluso lo místico, para los niños habrá de ser de gran importancia,

pues si bien no todas las veces o todo el tiempo citaremos actos de lectura, no

podemos negar que todo lo podemos relacionar a ella.

El hecho de comprender que todo se puede relacionar a la lectura nos hace

notar que para los pequeños que queremos iniciar en la lectura desde casa, será

importante variar los tipos de texto que puedan manipular y revisar; interactuarán

con libros que sólo tengan imágenes y no por ello se perderá el ejercicio de lectura

107

Gerardo Cirianni y Luz María Peregrina. Op. cit. pág. 27

Page 116: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 116 ~

ya que si bien no es de palabras, lo es pictórica, cosa que abrirá una posibilidad

más, para que se motive al niño a identificar las palabras con las que por lo menos

podrá describir o citar los elementos de las ilustraciones que revisa. Además

también encontrará las más de las veces libros con imágenes y texto con variantes

en sus escrituras, lo cual propiciará la comparación entre diversas formas de

escribir y desde estas edades identificar diferencias y similitudes entre las letras

que forman cada una de las palabras, “estas diferencias les facilitarán ingresar en

el aprendizaje de la lectura‖.108

Con el acto de comprender que los dibujos se pueden interpretar pero no

leer al igual que un texto, los niños podrán “establecer distinciones entre el sentido

de las imágenes y el sentido de la escritura, de lo que intensifica y concientiza la

fantasía de saber leer y escribir,109 por ello mismo se plantea que habrá de existir

diversidad de materiales que puedan ser explicados en los hogares, además de

los que se hallan en el entorno y de los cuales se podría tomar aún mucha mayor

ventaja, ya que por ofrecer textos tan cortos, no se invertirían tantos minutos en

las aplicaciones de los actos constructores de la lectura en los niños, sino que

serían instantes, en los que se darían explicaciones cortas sobre la palabras y las

letras que las componen, de su significado y de sus características y no tendrían

por que extenderse esas explicaciones a cátedras completas de enseñanza.

Si consideramos que en su mayoría los niños son muy vivaces y que en las

cosas que realmente les interesan no pierden detalle, además de señalar todo lo

que a ellos les parece dudoso, acertaremos en demostrar que “la capacidad de

108

Gerardo Cirianni y Luz María Peregrina. Op. cit. pág. 28

109 Ibídem. pág. 29

Page 117: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 117 ~

observación de los niños les permitirá ir distinguiendo los rasgos de las letras y su

distribución en la página. También suelen hacer asociaciones simpáticas de las

líneas escritas al decir: parecen filas de hormigas o elefantitos enlazados por sus

trompas y sus colas‖,110 o sin ser ten exigentes y pedir que al instante logren

reconocer las diferencias en los textos extensos, lo hagan desde las palabras

solas, que será más facial para la edad que se maneja en este trabajo.

El tiempo que sea dedicado a los niños para la explicación de sus dudas,

para la motivación, ejemplo de lectura, además de la creación de conflictos para

que identifiquen diferencias tanto en las letras como en las palabras, favorecerá

que también comprendan “la dirección de la escritura y, desde luego, esto, como

los descubrimientos anteriores, ocurre a partir de la experiencia social de la lectura

y la escritura,‖111 situación que como se ha venido señalando a lo largo de éste

trabajo, no tendría por que postergarse, hasta que los niños llegan a las

instituciones educativas, donde son aplicados métodos de lectura que no son nada

naturales ni medianamente progresivos en su desarrollo, ya que desde que

presentan las letras a los niños tratan de que éste las memorice, de formas que

alteran su tenue desarrollo, o por lo menos aceleran al proceso de enseñanza

aprendizaje, pudiendo ser éste más sutil y mayormente productivo con la

enseñanza social de la lectura.

Para dicha enseñanza, sólo tendremos que recordar, todos los sujetos

capaces de decodificar las letras de las palabras que ―las prácticas y habilidades

de la lectura de los adultos con los que el niño convive no solo motivan a los niños

110

Gerardo Cirianni y Luz María Peregrina. Op. cit. pág. 29

111 Ídem.

Page 118: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 118 ~

a la lectura, sino que enseñan de manera natural cómo y para qué lee‖.112 Si tan

solo nos preocupamos por motivar con nuestro ejemplo a los pequeños para que

adquieran el habito de la lectura, pero más aún en las edades entre los dos y

cuatro años por comprender la formación de las palabras, su interpretación y su

pronunciación, la situación ahora expuesta, se podrá hacer realidad, los niños

interactuarán libremente en un contexto lleno de palabras que ya serán

comprendidas a partir de su lectura y que no tendrán por que esperar ser

descubiertas en las instituciones escolarizadas, cuando sabemos que el

aprendizaje de la lectura parte de la identificación de las letras que componen las

palabras y no es cosa tan complicada, como los experimentos que tienen que ser

supervisados por los adultos que han cursado una educación profesional.

112

Gerardo Cirianni y Luz María Peregrina. Op. cit. pág. 30

Page 119: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 119 ~

CONCLUSIONES

Los desajustes que sufre el niño, con respecto a la lectura, alterada por una

memorización de letras solas, al llegar al preescolar, indican que hay una enorme

distancia por recorrer entre los dos y los cuatro o cinco años de edad en la

adquisición de los procesos de pensamiento indispensables para la instrucción

formal. Ya que en la actualidad no se ha aceptado que los niños menores de

cuatro años se convierten poco a poco en personas realistas que forman

conceptos y muestran un excelente desarrollo de la oralidad, que se podría

aprovechar, junto con sus ganas de saber más, del mundo que les rodea, para

inculcarles el habito de lectura.

Lo dicho, por supuesto no requerirá de horarios de trabajo o de materiales

concretos como lo serian libros, lápices o cuadernos; sino que es preciso,

solamente de unos cuantos minutos de atención por parte del adulto, un vistazo al

entorno donde haya escrita alguna palabra y como elemento básico, una

comunicación oral, en la que el adulto informe al pequeño, sobre lo que dice, tal o

cuál palabra, cuestionándole posteriormente, sobre esa información dada, ¿Dónde

fue encontrada?, ¿Qué decía?, ¿a cuál se parece?, para que, de esta manera se

fomente un análisis de palabras.

La interacción que se lleva en casa entre los familiares más cercanos y el

niño es prácticamente directa y de uno a uno, lo cual no sucede en la escuela, en

donde el maestro tiene un alto número de alumnos con los que ha de

Page 120: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 120 ~

comunicarse casi al mismo tiempo. Por ello la vinculación que en el hogar se

pueda dar al niño, así como la educación con respecto a la lectura le estará siendo

de gran importancia, ya que al llegar al preescolar podrá haber entendido de una

representación más personalizada la función, uso y más aún, la forma de las letras

así como la lectura de algunas palabras, y esto, hasta representaría para el

profesor un avance en cuestión a las actividades de aprendizaje grupal que realiza

con sus alumnos.

Ya estando cerca de la llegada a la institución educativa donde se pretende

insertar al niño para que curse su educación a partir del segundo grado de

preescolar, es decir a los cuatro años, podrá entonces comenzarse a pedir al niño

a escribir las palabras formadas por letras, si ya cuenta con la manipulación

motriz necesaria y por supuesto los conocimientos sobre estas, sus fonemas y

grafías, y se tendrá de recordar que antes se habrán practicado con él, se le

habrá permitido la manipulación de colores, lápices y otros elementos con los que

el niño haya desarrollado la pinza fina y su expresión grafo motora.

El adelantarnos entonces con la adquisición de la lectura apoyándose del

ambiente que rodea al niño, así como de sus construcciones sociales en las que

figuran las palabras, será algo que le permitiría, evitarse problemáticas referidas a

la presión de tiempo para aprender a leer o a escribir bien, cuando estas son

desencadenadas básicamente por la poca intención de los padres o cuidadores de

brindar un tiempo para que el niño interactué con las palabras y letras que las

forman, esperando que esta función la cumplan los educadores que laboran en las

instituciones.

Page 121: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 121 ~

Lo anterior con una buena estimulación por parte de la sociedad y el

ambiente en el que se desarrolla el infante, hasta antes de ingresar a la institución

de preescolar, acelerará el proceso de lectura y se encarnará en el niño, sin tener

alteraciones excedentes en su desarrollo y mucho menos le creará conflictos de

personalidad e inseguridad, puesto que lo que él aprenda con respecto a las

palabras e incluso a los textos, formará parte de su diario vivir, ya que estará

siendo una lectura comprensiva, basada en el reconocimiento de elementos reales

que el niño percibe y conoce, por lo que al configurar un texto o frase, podrá

comprender su contenido y las relaciones que se establecen entre las palabras

que lee.

Es así como este trabajo logra cubrir sus objetivos puesto que por una parte

reproyecta diversas investigaciones de hace más de cuatro décadas, en las que

el aprendizaje de la lectura antes de los cuatro o cinco años había sido ya

defendido y se venía convirtiendo desde entonces en un asunto de discusión que

pocos se atreven a defender. Y por otra parte, hace la confrontación de los datos

que aportan los investigadores con la realidad contemporánea y cotidiana,

logrando sostener que la iniciación de la lectura en los niños que aún no ingresan

a las instituciones puede generarse desde los procesos de desarrollo social y

cognitivo, que va teniendo a partir de su nacimiento, mayormente con la aparición

del lenguaje hablado; que se entrelazan con el contexto en el que las palabras y

las letras aparecen de manera desintencionada, así como con las personas que le

rodean y que obviamente tienen conocimientos de algún tipo sobre las palabras y

las letras que las conforman, pudiendo decodificarlas a los niños que aún no leen.

Page 122: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 122 ~

Por lo anterior, se debería reconocer la importancia de los elementos del

contexto que contienen palabras o letras, para qué, al compartirlos con los niños

se propicie un adelanto cognitivo referido a la lectura, y que en ningún momento

alterara negativamente sus condiciones, puesto que las letras se hallan en todas

partes, aunque en la mayoría de las veces, se espere a que los niños ingresen a

las instituciones escolarizadas para que sea ahí donde se les ofrezca conocer sus

nombres y usos en primera y posteriormente su lectura ya en las palabras.

Page 123: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 123 ~

BIBLIOGRAFÍA

FUENTES PRIMARIAS

CIRIANNI, Gerardo y Peregrina, Luz María (2007). Rumbo a la lectura. Quinta

Reimpresión. México. Ed. IBBY.

CORRAL Villacastín, Ana María (1997). El aprendizaje de la lectura y escritura en la

escuela infantil. Madrid. Servicio de Publicaciones Universidad Complutense de

Madrid (UCM).

CUETOS Vega, Fernando. (2005), Psicología de la lectura. Cuarta edición. España.

Editorial Praxis.

DAMIÁN Díaz, Milagros. (2007), Desarrollo del lenguaje y la comunicación en la

primera infancia. México D.F. Editorial Trillas, S.A. de C.V.

DELVAL, Juan (2006). El desarrollo Humano. Duodécima reimpresión. Mèx. Ed.,

Siglo XXI.

FERREIRO, Emilia y Teberosky, Ana. (1989). Los sistemas de escritura en el

desarrollo del niño. Decimo primera edición. México. Editorial Siglo XXI.

FERREIRO, Emilia. (2002). Alfabetización teoría y práctica. Quinta Edición. México

.Ed. Siglo XXI.

FREIRE, Paulo y Macedo, Donaldo (1989). Alfabetización, Lectura de la palabra y

lectura de la realidad. Primera edición. Barcelona. Ed. Paidos.

Page 124: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 124 ~

GERTRÚDIX, Sebastián (1992). Vamos a leer y escribir, cuadernos Aula Libre. Fraga.

Imprenta Coso. núm. 1.

KALMAN, Judith. (2004), Saber lo que es la letra, una experiencia de lectoescritura con

mujeres de Mixquic. Primera edición. México D.F. Editorial Siglo XXI.

PEREDO Merlo, María Alicia (2003). Revista Mexicana de Investigación Educativa.

Selección Temática: Lectura. Vol. VIII, núm. 17, enero-abril. México.

VIGOTSKY , Lev. S (1988). El desarrollo de los procesos Psicológicos superiores.

Barcelona. Ed. Grijalbo.

VYGOTSKY, Lev S. (2008). Pensamiento y lenguaje. Decima edición. México D.F.

Editorial Quinto Sol.

FUENTES SECUNDARIAS

http://licenciaturas.upnlapaz.edu.mx/Programasacademicos/LIE/LIEAntologias/03s

emestre/DESARROLLOINFANTIL.PDF.

http://licenciaturas.upnlapaz.edu.mx/Programasacademicos/LIE/LIEAntologias/03s

emestre/DESARROLLOINFANTIL.PDF.

http://mariadelosan.espacioblog.com/categoria/informaciain-padres-y-maestros.

http://webcache.googleusercontent.com/search?q=cache:IQ_2CknIshwJ:www.edu

cacion.objectis.net/primer-ciclo/produccion-academica/lenguaje/acercamiento-a-la-

lectura-y-la-

escritura/APROXIMACION%2520A%2520LA%2520LECTURA%2520Y%2520LA%

Page 125: FREDY VILLEDA RESÉNDIZ - 200.23.113.51

~ 125 ~

2520ESCRITURA%2520EN%2520EL%2520PRIMER%2520CICLO.doc+aproxima

ci%C3%B3n+a+la+lectura+y+la+escritura+en+el+primer+ciclo&cd=8&hl=es&ct=cl

nk&gl=mx&client=firefox-a.

http://www.angelfire.com/space2/sisedform/ESCRITO_PAGINA_WEB_OK.htm

http://www.cnice.mec.es/recursos/rec-fp.htm.

http://www.estimulacionprenatal.com.mx.html

http://www.guiainfantil.com/blog/71/hablar-con-el-bebe-durante-el-embarazo.html.

http://www.todosleen.com.ar/lectprecoz/esposible.htm.

http://www.upn081.edu.mx/antologias/antologias/lie/7s/ADDIT.pdf.

http://www.upn081.edu.mx/antologias/antologias/lie/7s/CSMFP.pdf.

http://www.upn081.edu.mx/antologias/antologias/lie/8s/2.pdf.

http:www.todosleen.com.ar/lectprecoz/esposible.

www.fundacionpobreza.cl/ herramientas/educacionnoformal.pdf.