Guia Guatemala, 2009

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Guatemala

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COMPRAS Artículos para el hogar, utensilios de cocina, va-sos de vidrio soplado o platos de cerámica. Como textil podemos encontrar cojines, cubrecamas, manteles, vestidos, pantalones, chalinas y güipi-les. Y como joyas: pulseras, anillos y collarines.

TRANSPORTE Existen varios tipos de autobuses colectivos en la ciudad de Guatemala. Los “gusanos” de modelo más recientes y los normales de ca-rrocerías de varias marcas y estilos. Existen aproximadamente 40 rutas diferentes para di-ferentes puntos. Desde la Terminal de Buses de Guatemala sa-len buses que van a otros puntos del país. Nor-malmente hacen seguidas paradas hasta lle-gar a su destino final. También hay servicio de taxis.

DOCUMENTACIÓN Para entrar al país, en el caso de los ciudada-nos de la U.E., es necesario el pasaporte en vi-gor con una validez mínima de 6 meses. En el caso de ciudadanos de otras nacionalidades, se ha de consultar con el consulado.

SEGURIDAD Rogamos presten atención siempre a sus per-tenencias, sobre todo en transporte público y lugares con aglomeración de gente. Aconse-jamos dejen en el hotel pasaporte y billetes aéreos.

INFORMACIONES IMPORTANTES Consulado honorario de Guatemala en Bar-celona:Sants, 273, 1º 2ª - 08028 BARCELONATel.: 93.422.63.81

Embajada de Guatemala en Madrid:Rafael Salgado, 3 - 28036 MADRIDTel.: 91.344.03.47

Embajada de España en Guatemala:6ª Calle 6 -48, Zona 9. Ciudad de Guatemala.Tel.: (00) (502) 379 35 30

OFICINA TRAVELPLAN EN GUATEMALAPTP Mundo Maya11 Calle 31-41, zona 14Residenciales DarueTel: (502) 367. 10. 90Fax: (502) 363. 35. 08

información práctica

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Guatemala, la cuna del quetzal. Es un país multiétnico, formado por 21 grupos sociolingüísticos del tronco maya; por ladinos (mestizos) poseedores de rasgos propios según sus lugares de pro-cedencia, y por negros, con una marcada cultura afrocaribeña.

Limita al norte y oeste en México, al este con el Mar Caribe (Océano Atlántico), las repúblicas de Honduras y El Salvador; y al sur con el Océano Pacífico. Para su división político-administrativa, la república está dividida en 22 departamentos y éstos en 331 municipios.

Destacamos como principales destinos turísticos: Tikal, Antigua Guatemala, Guatemala, Chichi-castenango y Lago Atitlán.

La impresionante ciudad de Tikal es un destino diferente ya que es considerado como el más grande de los centros ceremoniales mayas. Este principal atractivo de Guatemala está situado en medio de la selva. Sus orígenes se remontan al año 700 a.C., cuando los mayas deciden levantar las primeras construcciones. Gracias a su época de resplandor (230 d.C.- s.X) podemos visitar: la Casa de Baños, la Acrópolis Central, el Templo V, la Acrópolis Sur, la Plaza Mayor, entre otros.

A 45 minutos de la capital, se encuentra la Antigua Guatemala o la Ciudad de Santiago de los Caballeros. Es una de las más importantes en la época colonial de Guatemala. Destaca por sus importantes volcanes, fachadas de casas y monumentos, algunos derruidos por los sismos. Cabe destacar: el Palacio del Muy Noble Ayuntamiento, el Palacio de los Capitales, el Monasterio e Iglesia de La Merced, la Iglesia y Monasterio de San Francisco.

La ciudad de Guatemala es la aglomeración urbana más grande la América Central. Al ser capital del país, la ciudad enseña sus diferentes aspectos: comercial, administrativa, colonial, cosmopo-lita y moderna. Cabe destacar: el Palacio Nacional de la Cultura, la Catedral Metropolitana, la Ermita del Cerro del Carmen, el Mapa en Relieve, el Teatro Nacional, el Centro Cívico y el Centro Histórico.

A 2.30 metros se encuentra Chichicastenango, una ciudad rodeada de valles y montañas. Aunque esté aislada, posee un mercado importante. Los domingos se realizan procesiones alrededor de la Iglesia de Santo Tomás. Los nativos combinan los ritos tradicionales de Maya con el Catolicismo.

Los 1.600 metros de altura sobre el nivel del mar, los 15 grados de longitud norte (por debajo del Trópico de Cáncer) y el lago hacen que esta caldera volcánica tenga el microclima más agradable. Alrededor del Lago Atitlán se van situando las siguientes poblaciones indígenas: Panajachel, San-tiago de Atitlán, Santa Catarina Palopó, San Antonio Palopó, Sosolá, San Pedro de la Laguna...

Nombre oficial: República de Guatemala Superficie: 109.000 km² Población: 12.600.000 hab. Capital: Guatemala (2 millones hab.) Nacionalidades y etnias: 56% mestizos, 44% descendientes de mayas Idioma: español, garífuna y 21 lenguas mayas Religión: católica, de Pentecostés y fusión católico-maya

Guatemala introducción al país

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Guatemala se halla en la parte septentrional del istmo que une las dos Américas. Limita al Norte y al Oeste con México; al Noreste con Belice y el mar Caribe, al este con Honduras y El Salvador; y al Sur con el Océano Pacífico. Sus montañas per-tenecen en conjunto al sistema de la cordillera de los Andes. Las tierras altas de la zona occidental, de frecuente actividad sísmica, albergan más de treinta volcanes que rebasan los 3.800 m de al-tura y que proyectan un brillo rojizo al anochecer. La zona costera del Pacífico, muy explotada agrí-colamente, contiene vastas extensiones de pla-yas, en su mayoría, de arena volcánica. La escasa línea de costa caribeña carece de playas, pero es muy rica desde el punto de vista arqueológico. El interior del país está cubierto por la jungla de las tierras bajas de El Petén, donde se alternan plantaciones de plátano y yacimientos repletos de restos óseos de dinosaurios.El símbolo nacional guatemalteco es el quet-zal, un ave de plumaje verde y carmesí que se encuentra en vías de extinción, debido a la tala

de árboles que está arrasando la selva de Cen-troamérica y a la caza furtiva. Aunque difíciles de ver, sobreviven otras especies, como el puma; el jaguar; el ocelote, un pequeño felino de piel rayada; el jaguarundi, de gran parecido con la comadreja; el margái; el pecari, de aspecto si-milar al cerdo, pero que al asustarse exuda un fuerte almizcle de su glándula dorsal; el tapir, un mamífero que guarda muchas semejanzas con el rinoceronte; ciervos y un abultado surtido de pájaros.La zona costera del Pacífico posee un clima tropi-cal cálido, con temperaturas en torno a los 38ºC. La elevada humedad, aparentemente constante, disminuye durante la época seca. En las tierras altas, las noches son sumamente frías; durante la estación lluviosa, el clima es húmedo y fresco; y, en la estación seca (de octubre a mayo), templa-do y agradable, a diferencia del clima abrasador que soporta el resto del país de diciembre a abril. En El Petén, el clima torna de caluroso y húmedo a caluroso y seco.

Entorno y Medio Ambiente

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CIUDAD DE GUATEMALASe extiende por una altiplanicie con grandes barrancos, rodeada de valles. Como en todas las ciudades del país, se ha impuesto un estricto sistema cuadriculado en su trazado: las avenidas discurren de norte a sur; las calles, de este a oeste. La capital ha sido dividida en quince zonas, cada una con su propio sistema en damero.Son escasos los edificios coloniales que se conservan en ella y, más que un foco de atracción para el turismo, las visitas a la capital guatemalteca se deben principalmente a que es el centro administrativo y de transportes. La Zona 1, la plaza Mayor, ejemplo clásico del esquema arquetípico de ciudad colonial española, constituye el centro ceremonial de la ciudad y en ella se ubican los comercios. El mejor día para visitarla es el domingo, cuando se llena de miles de vecinos que acuden a pasear, a comer helado, a sentarse en los bancos a descansar o a escuchar salsa, y que hacen caso omiso de los vendedores de chucherías. Junto a la plaza se encuentra el palacio Nacional, que actualmente está siendo restaurado para alojar un museo de historia nacional, y la catedral Metropolitana, con sus torres gemelas. En 1976, un terremoto destruyó el edificio original del mercado adyacente a la plaza y, en la actualidad, se em-plaza en aquel lugar el desmesurado mercado Central, especializado en objetos turísticos.Al norte de la Zona 1, resalta el parque Minerva, tranquilo y sombreado, una curiosa excepción en el mapa nacional. La Zona 10 alberga importantes museos, como el Museo Popol Vuh, que contiene una colección privada de arte maya y arte colonial español, y el Museo Ixchel, que exhibe un muestrario de la riqueza de las artes y costumbres tradicionales de los pueblos de las tierras altas de Guatemala. En la Zona 13, se encuentran el Museo Nacional de Arqueología y Etnología, con una valiosa colección de objetos mayas, y el Museo Nacional de Arte Moderno, que dispone de una colección de arte guatemal-teco del siglo XX. A pocos kilómetros al oeste del centro, se pueden visitar las ruinas de Kaminaljuyú, un extenso emplazamiento maya de los períodos preclásico tardío y clásico temprano que ha sido cubierto en parte por la expansión urbana.

Ciudades de Interés

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ANTIGUAConsiderada una de las metrópolis más bellas de América, Antigua fue capital del país desde 1543 hasta 1776. Tras un terremoto devastador, se trasladó 45 km hacia el este, actual enclave de la ciudad de Guatemala. Edificada entre los tres grandes volcanes, Agua, Fuego y Acatenango, sus preciosos y todavía firmes edificios coloniales han resistido dieciséis terremotos y numerosas inundaciones e incendios. Durante la Semana Santa, Antigua se engalana; cubre sus calles con alfombras florales y decoraciones ejecutadas con serrín coloreado.Sus iglesias han perdido mucho de su esplendor barroco, debido a los continuos trabajos de restaura-ción que siguen a cada seísmo. A pesar de ello, siguen siendo imponentes, en especial la de La Merced, la de San Francisco y la de Las capuchinas (ahora museo). La Casa K’ojom contiene un museo de música, ceremonias mayas y objetos rituales. Los domingos, tanto oriundos como visitantes acuden al bullicioso mercado que se celebra en el parque Central, para hacer sus compras.

CHICHICASTENANGOA una altura de 2.030 m, situada en las tierras altas y envuelta en bruma, se encuentra la ciudad de Chichicastenango (Chichi), rodeada de valles y montañas. Pese a su aislamiento, ha logrado mantenerse como un importante enclave comercial. El mercado del domingo es de los más sugestivos, ya que las cofradías salen en procesión en ese día. Los naturales del lugar han sabido aunar los ritos religiosos tradicionales mayas con el cristianismo; para disfrutar de estos rituales, los emplazamientos más acon-sejables son los alrededores de la iglesia de Santo Tomás y el santuario de Pascual Abaj, levantado en honor al dios maya de la tierra. Durante estas procesiones ofrendan incienso, bebida y comida a los antepasados con el fin de asegurar la fertilidad de la tierra. El Museo Regional guarda cerámica anti-gua y estatuillas de barro, puntas de lanza de pedernal y de obsidiana, piedras para moler maíz y una exquisita colección de piezas de jade.

TikalEl monumental centro ceremonial maya de Tikal se extiende al noroeste de la ciudad de Flores, en el departamento de El Petén. El sugestivo entorno de Tikal confiere a sus ruinas aún mayor encanto. Pese a que las pirámides se mantienen limpias de maleza, estos restos de pasadas culturas se entremezclan con la palpitante vida de la jungla y sus sonidos: monos aulladores, loros de vistoso plumaje, el croar de millares de ranas. Los templos escalonados ascienden hasta una altura superior a los 44 m. Las ruinas incluyen plazas, pirámides, templos, una acrópolis y un museo.Hay constancia de que Tikal estuvo habitado desde el pre-clásico medio (900 a 600 a.C.), aunque tuvo su apogeo entre el 550 y el 950 d.C. La ciudad se encontraba en pleno centro del mundo maya entre la costa de Campeche y la de Belice, lo que puede explicar su espectacular desarrollo. Sus edificios son los más elevados que construyeron los mayas, sólo comparables con los emplazamientos del Mirador. Los monumentos principales se organizan alrededor de la gran plaza, aunque hay numerosos grupos de edificios dispersos por la selva unidos por senderos y amplias avenidas que coinciden con las calzadas mayas. La acrópolis norte de 100 x 80 m. soportaba ocho templos funerarios debajo de los cuales se han encontrado vestigios que datan del siglo III a.C. Merece la pena destacar la presencia de grupos de pirámides gemelas que comprenden dos pirámides con estelas, altares y palacios independientes que rodeaban la plaza y tenían carácter conmemorativo, esta circunstancia sólo se repite en las ruinas de Yaxhá.

LIVINGSTONAl minúsculo pueblo de Lívingston, un relajado escondite en medio de la selva, se accede desde el ca-ribeño Puerto Barrios. Está habitado por los garífunas, afroguatemaltecos de raza negra descendientes de los esclavos africanos llevados al Nuevo Mundo como esclavos, que lograron huir de su destino o

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que sobrevivieron a algún naufragio. Los matrimonios mixtos celebrados entre marineros de otras razas y los indígenas mayas ha originado una cultura y una lengua características, que incorpora elementos africanos, europeos y mayas. Lívingston es una excepción en Guatemala, con un estilo de vida más propio del vecino Belice, con cocoteros, casas de madera pintadas de colores y una economía basada en la pesca. Desde este pueblo es factible realizar cortas travesías en barco por el río Quehueche y el río Cocolí para darse un baño o hacer una merienda campestre, y acercarse a los cayos Sapodillas para practicar el buceo o la pesca.

LAGO ATITLÁNEs uno de los sitios naturales más hermosos de la nación. En sus orillas se han establecido multicolores pueblos indígenas que atraen la atención a los turistas que acuden al lago a disfrutar de la pesca o la natación en sus apacibles aguas, o escalar los volcanes que le rodean.Destacan Panajachel, centro turístico de la región, Santiago Atitlán, Santa Catarina Palopó y San Pedro La Laguna.

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BELICELa Ciudad de Belice tiene 300 años de haber sido fundada y funge como área comercial, conteniendo los principales puertos. Es la ciudad más grande del país, y es una mezcla de arquitectura colonial, de funcionales edificios de madera y de catedrales históricas. Los lugares de interés incluyen la catedral anglicana más vieja en América Latina, San Juan, y la Casa de Gobierno, la residencia en la Ciudad de Belice del gobernador británico, construida en 1814. Al sur, a alrededor de 32km de la ciudad se en-cuentra el Parque Zoológico de Belice por la carretera occidental, con más de 100 especies de animales de la región, incluyendo monos y jaguares. Belice tiene una rica geografía natural, desde bosques de selva, terrenos accidentados y zonas pan-tanosas hasta playas tropicales. Por lo tanto, el país está promoviendo el ecoturismo y existe un gran número de áreas protegidas, incluyendo reservas marinas y parques nacionales.

Honduras limita al sureste con Nicaragua, al oeste con Guatemala, y al suroeste con El Salvador. La costa norte del país está bañada por el mar Caribe y la del sur por el océano Pacífico. El clima es tropical, con temperaturas más templadas en las montañas. El sol calienta fuerte en la costa norte, aunque las brisas marinas moderan el calor, y además es una zona con lluvias durante todo el año. La estación seca es de noviembre a abril; y la húmeda va de mayo a octubre.

La Semana Santa es una de las festividades que mayor fervor despierta, en Guatemala, en la que destaca la procesión que se desarrolla en Antigua. El Rabin Ajau, de origen maya (qeqchi), se celebra del 21 al 26 de julio en la zona de Verapaces, y merece especial atención el espectáculo que se

ofrece en Cobán. Otras fiestas del calendario gua-temalteco son el Día de la Independencia, que se conmemora en septiembre con carácter nacional, el Día de Todos los Santos, 1 de Noviembre y la de Santo Tomás, del 13 al 21 de diciembre en Chichicastenango.

Fiestas y Celebraciones

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GuatemalaGuatemala es un país pequeño de apenas 100.000 Kms2. Su población, de 9.000.000 de habitantes, vive principalmente en las tierras altas del sur, en paralelo a la costa del Pacífico. Hacia el norte, y ocupando dos terceras partes del territorio nacional, se extiende la selva del Petén, escasamente poblada en la actualidad pero que esconde entre la vegetación los restos de las primeras ciudades que dieron luz a la cultura maya.

Si algo define a Guatemala es la presencia cons-tante de “lo indígena”. Más de veinte grupos étnicos de origen maya habitan el altiplano en pequeños pueblos y caseríos rurales. Esta po-blación autóctona constituye más del 50% de los habitantes del país, mientras la otra mitad la componen mestizos, blancos descendientes de los europeos que han llegado a Guatemala en los últimos cuatrocientos cincuenta años, negros afrocaribeños y otras varias mezclas racio-culturales que completan la compleja realidad guatemalteca.

La economía de Guatemala se basa en la agri-cultura rural de las zonas indígenas y en las grandes plantaciones de caña, café o algodón que poseen los grandes terratenientes en la costa del Pacífico. A lo largo de este siglo se ha desarrollado una incipiente pequeña industria manufacturera que exporta textiles y algunos insumos al mercado centroamericano. La mo-neda local es el Quetzal con una equiparación respecto al USD de 6 a 1 a principios de 1998. El voltaje eléctrico es 110 V.

YucatánLa región del Yucatán está situada al sudeste de México, ocupando cerca de 100.00 Km2 y bañado en su vertiente norte por el mar Caribe. Tiene unos dos millones de habitantes, en su mayoría de origen maya, y se divide políticamente entre los estados mexicanos de Yucatán y Quintana Roo. En México, la moneda local es el peso con una equiparación respecto al USD de 8 a 1 a principios de1998.Durante la última época de los mayas Yucatán disfrutó de un enorme desarrollo: grandes ciuda-des, vías de comunicación y gran flujo comercial. Con la conquista, se prohibió a los mayas comer-ciar y su población fue rápidamente diezmada por las enfermedades. Yucatán se convirtió entonces en un lugar inhóspito, sólo accesible para aventureros y piratas que llegaban a la cos-ta para esconderse. Unicamente en la segunda mitad de este siglo Yucatán se unió al resto de México por vías de comunicación adecuadas y un nuevo flujo poblacional que acudió a la cita propuesta por el turismo. Hay otras actividades económicas como las maquiladoras de tejidos, la pesca y la agricultura artesanal, pero no llegan a un desarrollo industrial. Cancún, Mérida, Chichén Itzá o cualquiera de las cientos de playas casi vírgenes que salpican las costas han abierto en Yucatán las puertas del futuro.

ChiapasSituado al sur de México, Chiapas pertenece políticamente a este país, aunque geográfica y

Conoce elMundo Mayay sus posiblesextensiones

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culturalmente forma parte de una misma unidad que compone junto a los altos de Guatemala. La población es mayoritariamente indígena de origen maya y en sus montañas, que alcanzan los 3.000 metros, hay multitud de pequeños pueblos y aldeas que viven según el uso tradicional. Sus 75.000 Km2 disfrutan, además de las zonas al-tas, de otros estadios ecológicos caracterizados por una franja costera tórrida, valles cálidos y junglas tropicales húmedas que esconden restos de antiguas ciudades mayas.

BeliceDurante muchos años, este país fue colonia británica. En 1981 consigue su independen-

cia, aunque permaneciendo como miembro de la Commonwealth. Con apenas 23.000 Km2, más decenas de pequeños islotes en el Caribe, Belice es el país más pequeño de Centroamérica. Su orografía es casi totalmente llana, excepto unas pequeñas elevaciones en el sur que no superan los 1.000 m. de altitud. La capital de Belice es Belmopán, un pequeño pueblo que no tenía hasta hace poco más de 6.000 habitantes. Durante la colonia, su economía dependía casi exclusivamente de la explotación del chicle. Cuando ese mercado decreció los beliceños supieron diversificar su economía y hoy día se exporta con éxito: cacao, fruta, tabaco y marisco, aunque es el turismo de pesca deportiva y submarinismo su principal fuente de ingresos. La lengua oficial es el inglés. Voltaje eléctrico 110 V.

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Los mayas desarrollaron en Mesoamérica una de las más altas civilizaciones de la América prehispánica. Desde comienzos de la era cristiana hasta el siglo XVI, y en un área que comprende el sureste de México, Yucatán y Guatemala, este pueblo enigmático e ima-ginativo dedicó su existencia a descifrar los secretos del tiempo. Para conseguirlo observó los astros, inventó calendarios, creó escrituras pictográficas y levantó edificios con técnicas

novedosas. Pero su arte y su ciencia no fue-ron una actividad profana sino la necesidad de satisfacer los deseos de los dioses. Sin embargo, y de forma aun incomprensible, las ciudades y los templos fueron abandonados. Hoy sólo quedan las piedras. Los herederos de esa cultura habitan los altiplanos de México y Guatemala pero el conocimiento que hizo posible aquella forma de arte y de ciencia se perdió para siempre.

Durante lo que se llama periodo formativo (200 a.C. a 300 d.C.) se establecieron en las selvas del sur de México, Yucatán y Guatemala poblaciones de economía agrícola y lengua maya. Estas poblaciones adquirieron unas características culturales muy evoluciona-das, que constituyeron el preludio de la gran civilización maya.Es en el periodo clásico (300 a 900 d.C.) cuan-do toma forma definitiva y vive su apogeo el pueblo maya. Las ciudades de las tierras bajas se enriquecieron con espléndidas construc-ciones: Tikal, Palenque, Copán, Yaxichilán, etc., se poblaron de templos y estelas con inscripciones calendáricas. Estas ciudades, aunque guardaban ciertas semejanzas cul-turales, lingüísticas e incluso políticas, tenían instituciones y costumbres distintas. Según Thompson, debieron de constituir federaciones de ciudades-estado, con un gobierno y una casta sacerdotal dominante. A partir del 750 d.C. dejaron de levantarse monumentos con-memorativos (los últimos son: una estela de Tikal fechado en el 869 d.C. y otro en San Lo-renzo del 928 d.C.) y comenzó una decadencia que terminó con el abandono de las ciudades. Son diversas las causas que se manejan: ago-

tamiento de la tierra, epidemias, revoluciones internas, influencias externas...

El periodo post-clásico (900 a 1697) coincide con el abandono del eje Río Usumacinta-selva del Petén y el renacimiento de las ciudades del Yucatán tras la penetración en la zona de los Itzaes, fuertemente influidos por los toltecas del centro de México. Chichén Itzá, Uxmal, Mayapán y otras ciudades de la zona sufrieron esta influencia que, junto con el culto a otros dioses como Quetzalcoalt o los Tloques, aportaron un espíritu más materialista y guerrero. La cultura decayó rápidamente: la arquitectura religiosa perdió su esplendor, dejaron de construirse calzadas y juegos de pelota, los templos fueron realizados de paja y barro y se generalizó la guerra entre las ciu-dades. En los altos de Guatemala, los quichés, que representaban la influencia tolteca en esta región, dominaron a sus vecinos cakchiqueles, zutuhiles y mames hasta la llegada de los conquistadores españoles en 1525. Sólo en un remoto lugar, a orillas del lago Petén Itzá, permaneció un pequeño reducto donde los últimos Itzaes, huidos de Yucatán, se man-tuvieron independientes hasta 1697.

Formación, apogeo y declive de los mayas

Los Mayas Clásicos

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Organización sociopolíticaEl monarca de las ciudades-estado mayas se llamaba halach huinic, con poderes de carác-ter civil y religioso. El nombraba, de entre la aristocracia de carácter hereditario, a los jefes de las aldeas, al jefe supremo de la guerra y a los consejeros o ministros.

La clase sacerdotal, al igual que la nobleza, era hereditaria. A la cabeza estaba el ahuacán

o señor serpiente. Luego venían los adivinos y los encargados de realizar los sacrificios humanos.El pueblo, formado por artesanos y agriculto-res pagaba tributos tanto a la clase política como a la sacerdotal. Los esclavos, que podían serlo por nacimiento o por haber sido hecho prisioneros, constituían el grupo que surtía los sacrificios.

El mundo es como una inmensa Ceiba (árbol gigante, sagrado para los mayas) cuyas hojas y ramas son el cielo, el tronco la tierra y las ramas el inframundo. También se representa como una cruz que señala los cuatro puntos cardinales. Todo ello fue creado por Hunab Ku, o dios único a partir del cual los mayas elaboraron un complejo panteón de dioses maléficos o benevolentes, interrelacionados entre ellos y a los que habían que satisfacer con ofrendas y sacrificios para conseguir sus favores o evitar sus castigos.

Itzamná es una especie de Júpiter maya, jefe de todos los demás dioses, inventor de la es-critura y emparentado con el resto de dioses del cielo: Kinch Ahau, dios del sol. Ixchel, diosa de la luna. Chac, dios de la lluvia. Yum Kax, dios del maíz. Además de los dioses princi-pales había otros relacionados con la guerra,

la muerte, los números, los meses...

Calendario, numeración y astrologíaPoseían dos tipos de calendario: el ritual, compuesto por 13 meses de 20 días, y el solar con 18 meses de 20 días mas 5 días nefastos. Ambos calendarios coincidían cada 52 años, cerrando así un ciclo.El sistema métrico era de carácter vigesimal, siendo conocido y utilizado el número cero. Los números del 1 al 4 se representaban con puntos, el 5 con una barra horizontal y del 6 al 19 por medio de puntos y barras.

Como base de todo el sistema matemático y calendárico los mayas poseían un cono-cimiento astrológico superior al europeo de esa época. Su conocimiento astronómico se extendía igualmente a la cuenta de los pe-riodos lunares, venusinos, etc.

Religión y visión del mundo

Los mayas alcanzaron en las artes plásticas un grado de desarrollo pocas veces igualado por otra civilización americana. La arquitectura, tanto en la etapa clásica, como en la Puuc o en la tolteca es de una variedad extraordi-naria. Ciudades como Palenque, Tikal, Copán, Quiriguá, Yaxichilán, Uxmal y Chichén Itzá se enriquecieron con espléndidos monumentos:

templos escalonados, juegos de pelota, pala-cios, patios con columnas, torres, acueduc-tos, puentes, arcos de triunfo... Las estelas conmemorativas decoradas con bellísimos relieves adornaron plazas y templos. Pero el gran hallazgo de la arquitectura maya fue la utilización de la falsa bóveda con la cual cubrieron espacios alargados y estrechos.

Arquitectura

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Pueblos como Chichicastenango, Santiago Ati-tlán o San Juan Chamula son claros ejemplos de como vive el indio maya de finales del siglo XX y principios del XXI. El centro de la vida social es la plaza del pueblo presidida por la iglesia y los edificios de las autoridades. La población vive tanto en el pueblo como en caseríos dispersos por los alrededores. A las afueras están las tierras de labor: pequeños terrenos en que se planta maíz, frijol, papa, calabaza... El mundo que rodea al pueblo tiene

connotaciones sagradas ya que el indio sa-craliza los espacios naturales. Algunos montes cercanos, los ríos y las cuevas son lugares de culto. El indio vive combinando el trabajo en su pequeña parcela de terreno y trabajando como bracero para los terratenientes loca-les. Los días de mercado acude a la plaza a vender, comprar y relacionarse con los suyos. Estos días y los de las fiestas aprovecha para emborracharse y olvidarse por unas horas de su dura realidad diaria.

Los pueblos Indígenas

Los indígenas mayas que habitan en la actua-lidad las llanuras de Yucatán y las tierras altas de Chiapas y Guatemala son los herederos de una cultura milenaria, y a la vez, el resultado de casi cinco siglo de encuentros y desencuen-tros con el colonizador europeo. Con la llegada de este, el indio fue obligado a abandonar su patrón de asentamiento disperso para congre-

garse en torno a los pueblos. Fueron obligados también a abandonar sus dioses y cambiarlos por la religión de los conquistadores. Ni una cosa ni otra se lograron totalmente, pero tanto la ocupación del espacio como la visión del mundo actual son el producto del sincretismo entre la cultura de los colonizadores y sus ancestrales valores prehispánicos.

Con el fin de erradicar el culto pagano los clérigos españoles importaron de Europa una organización socio religiosa llamada la cofradía que pretendía congregar a los indios en torno a la figura de un santo para venerarlo. Se trata de una organización piramidal de cargos que pre-mia la solidaridad y favorece el reconocimiento social. Sin saberlo, la iglesia estaba implantando un sistema muy similar al que ya tenían los indios antes de su llegada, sólo que antes en vez de santos veneraban a sus dioses. Los indios

aceptaron este sistema y le dieron a los santos la antigua personalidad de sus dioses. Toda la liturgia católica tampoco consiguió eliminar la figura del curandero o sacerdote maya, portador del conocimiento, conocedor del calendario ritual que le permite interceder ante los dioses, santos y fuerzas naturales que rodean el mundo de los mayas. Hoy, los indios sacan a los santos en procesión y van a los cerros, a las cuevas y a los ríos para sacrificar animales sin aparente contradicción.

Cofradías, curanderos y fi estas religiosas

Los Mayasde Hoy

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Centros ArqueológicosChichen ItzaCentro arqueológico situado al norte del estado de Yucatán perteneciente al clásico tardío y cuyo periodo de esplendor coincide con la llegada desde el centro de México de guerreros tolte-cas. Su arquitectura muestra esta influencia en un estilo más duro y sobrio que el maya-puuc predominante en la zona. Fue un importante lugar de peregrinación y en el cenote sagra-do se han encontrado numerosas ofrendas y restos humanos provenientes de los sacrificios que pedían los dioses. Entre las construcciones más emblemáticas de la ciudad destaca la gran pirámide denominada El Castillo con 91 escalones por cada uno de sus cuatro lados más un escalón suplementario, lo que suman 365 escalones, tantos como días tiene el calendario solar. Otros edificios que completan el centro ceremonial son: el juego de pelota, el más gran-de de Mesoamérica; el templo del jaguar, con bajorrelieves de este animal; el observatorio, que servía para estudiar ciertas estrellas con-

cretas; la tumba del gran sacerdote, la estatua de Chac-mol, la plataforma de Venus, el muro de los cráneos…

UxmalCentro arqueológico del clásico tardío (600-900 d.C.), situado en la península de Yucatán. Sus ruinas se extienden sobre un vasto formados por pequeñas colinas que fueron aprovechadas por los constructores para tener una espléndida visión de los alrededores. El estilo arquitectónico de la zona es conocido como Puuc, en el que predomina la línea horizontal y la exquisita decoración geométrica formando mosaicos de piedra tallada. Destacan los espléndidos palacios cuyas habitaciones se abren a amplios y armo-niosos patios interiores (casa de las monjas), o vastas plazas a las que se desciende por anchas escalinatas (palacio del gobernador). Hay tam-bién pequeños templos plenos de ritmo como el de las tortugas y enormes pirámides como la del adivino.

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PalenquePalenque es un típico centro ceremonial del periodo clásico. Aunque hay vestigios que de-muestran que estuvo habitado desde el siglo I a.C. no es hasta el siglo VII que vive su época de apogeo que termina en el siglo IX. Además de su importancia estratégica y arquitectónica, este lugar está enclavado en lugar con una magia especial. De entre la vegetación surgen unas formas casi místicas que invitan al viajero a soñar con el tiempo en que la ciudad estuvo habitada. En la pirámide de las inscripciones se encuentra la tumba de Pacal, primer gran rey de Palenque cuyo sarcófago estaba cubierto por una gran lápida esculpida que muestra al monarca cayendo en las fauces de un gran monstruo terrestre pero cuya apariencia es la de estar pilotando una nave espacial, lo que dio pie a la denominación del astronauta.

YaxchilanCiudad arqueológica situada en el estado de Chia-pas, a orillas del río Usumacinta. Sus construcciones se levantan sobre una colina y cubiertas por una espesa vegetación. A medio camino entre Tikal y Palenque, fue un punto de encuentro de las influencias de ambas ciudades, lo que se traduce en una gran diversidad de detalles arquitectónicos. El apogeo de Yaxichilán se sitúa entre los siglos VI y IX . La arquitectura comprende sobre todo edificios rectangulares alargados, de una o dos filas de habitaciones, y con tres puertas en la fachada. La parte superior de las fachadas está a menudo muy trabajada en mosaico de piedra con añadido de esculturas de bulto y motivos modelados en estuco. El estilo de la arquitectura del Usumacinta, y en concreto el de Yaxichilán, es muy famoso por su libertad de expresión.

BonampacEn Bonampak, situada a unos kilómetros de Yaxichilán, se ha conservado el conjunto más

completo de toda la pintura monumental maya. El lugar es una acrópolis con templetes situados sobre varias colinas frente a una plaza rodeada por tres edificios. En la estructura 1 se han con-servado casi intactas sus pinturas originales con dibujos que relatan las diferentes fases de una batalla. En la primera parte se representa una danza mágica anterior a la batalla, en la segunda los guerreros de Bonampak triunfan sobre sus adversarios y en la tercera se ve a los prisioneros siendo juzgados y ajusticiados.

TulúmEl centro arqueológico de Tulum en la costa caribeña mexicana. Las ruinas corresponden a los siglos XII al XVI, aunque la fundación data, al menos, del siglo VI. Tulum supone una rareza de entre las ciudades mesoamericanas, ya que se encontraba completamente amurallada . La construcción más importante del centro es El Castillo, formada por varias terrazas, escalinatas y templetes armoniosamente dispuestos, que conserva parte de la deco-ración de estuco. En sus alrededores existen más de 50 edificios como el gran palacio o el templo de los frescos; este último conserva pinturas que combinan temas y formas de los manuscritos mayas.

CeibalLa región del río Pasión, poco importante en el clásico, tuvo su apogeo a partir del 800 y Ceibal fue su centro más importante. Punto intermedio entre las zonas altas y las ciudades del Yucatán, Ceibal se convirtió en un encuentro estratégico de las rutas comerciales entre las tierras alta y las bajas. El lugar fue abandonado misteriosamente después del 900 y quedaron como vestigios un juego de pelota, varias plazas y edificios cere-moniales y numerosas estelas que hablan de la penetración en el área de algunos rasgos culturales mexicanos.

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UaxactunCiudad arqueológica situada en Guatemala a 18 Kms al norte de Tikal. Las excavaciones realizadas por el Instituto Carnegie de Washington (1926-1937) han demostrado que la ciudad ya estaba habitada en el 1500 a.C. Sus monumentos más importantes son las enormes estelas de piedra con magníficos bajorrelieves, erigidas entre el 328 y 889 d.C. En total se han encontrado 49 estelas, 26 de las cuales llevan las fechas de su ejecución.

YaxhaA mitad de camino entre Flores y Belice, una pista conduce al lago Yaxhá. Muy cerca del lago están las ruinas de una ciudad maya con nueve acrópolis y quinientas estructuras. Desde el templo 216 de la plaza B se disfruta una vista espectacular del lago, de la isla Topoxté y de toda la selva circundante. Una particularidad diferencia a Yaxhá respecto de los demás centros mayas: la intrincada disposición de calles y callejuelas que se asemejan a una dis-tribución clásica de ciudad europea.

AguatecaSituada en un acantilado que domina el río Pe-texbatún, en el Petén guatemalteco, Aguateca fue una ciudad fortificada de la cual sólo se conservan algunas estelas que hablan de reyes divinizados a cuya protección se dedicaban todos los habitantes del lugar. En una de ellas el rey escudo-tortuga figura en una escultura fechada en el 640, en otra se ve al soberano con manos y pies de jaguar. Como todo el suroeste del Petén, la ciudad fue invadida a comienzos del siglo X.

Dos PilasSituada en el Petén guatemalteco, dominó un vasto territorio debido a su estratégica posición

en el codo del río Pasión y el río Salinas. La ciudad fue fundada por un descendiente de un linaje real de Tikal hacia el 600. Todos sus sucesores se dedicaron a consolidar una supremacía mi-litar sobre la zona que se vio derrumbada por la derrota sufrida frente a la ciudad satélite de Tamarindito en el 760. Las dos murallas con-céntricas construidas alrededor de los palacios no pudieron evitar esta caída. Es posible ver en la actualidad una escalera jeroglífica inacaba-da, interrumpida en el 700, así como recintos funerarios que contenían los restos del segundo soberano y otros funcionarios reales.

El MiradorEste centro data del preclásico reciente. Sus construcciones son muy anteriores a las más antiguas de Tikal y Uaxactún. Puede decirse que El Mirador representa la primera manifes-tación de la cultura maya con los elementos que la han hecho universalmente reconocida. Algunos edificios alcanzaron tamaños sorpren-dentes para tan temprana etapa, llegando, como es el caso de la pirámide del Tigre, a más de 60 m. de altura. Es aquí donde por primera vez se observa la magnificencia que los mayas quisieron otorgar a sus construc-ciones teniendo como fin reconocer a las divinidades y conmemorar las efemérides de sus reyes. La llegada hasta el lugar requiere un gran esfuerzo que compensa a quienes saben apreciar el valor de un lugar que nos habla de los orígenes. La visión de los restos arqueológicos no es tan espectacular como en Tikal, ni tan poética como en Palenque. Sus ruinas no han sido restauradas y la vegetación apenas deja intuir más que formas inciertas entre la espesura, pero esa es la magia de El Mirador: hay que echar a volar la imaginación y dejarse envolver por el misterio.

CopanUna de las más importantes ciudades mayas de la época clásica. El cuerpo principal de las ruinas está constituido por cinco grandes plazas y la acrópo-lis, en las que destacan los dos templos mayores, erigido uno para conmemorar un descubrimiento astronómico y el otro dedicado a Venus. En la plaza contigua a la acrópolis hay estelas y varios altares y magníficos relieves. Otros monumentos importantes de Copán son: el patio de la escalera jeroglífica, notable por tener una escalinata con glifos que constituyen la mayor de las inscripciones mayas, la escalera de los jaguares, el juego de pelota y el anfiteatro. Copán constituyó uno de los más notables emporios de la cultura maya especializado en los estudios astronómicos, según se deduce de

los numerosos monolitos y estelas dispuestos para la observación del movimiento de los astros.

Altun HaCentro arqueológico situado en Belice y habi-tado desde el principio del periodo clásico. Se erigen en ese lugar varios edificios ceremonia-les y palacios. Sobre trescientas o cuatrocientas plataformas que rodean al centro se levantaron las viviendas y otros tantos montículos ocultan edificios funerarios y tumbas en cuyo interior se ha encontrado un suntuoso ajuar. Sobre el siglo VIII la ciudad fue abandonada para ser rehabilitada en el periodo post-clásico (950-1500 d.C)

XunantunichXunantunich se encuentra en Belice, muy cerca de la carretera que une Flores con Be-lice ciudad. Es un recinto típico del periodo clásico con una plaza central y una pirámide 45 m. En el clásico tardío un temblor destruyó en parte la ciudad aunque son numerosos los restos que, esparcidos por el área, permane-cen a la vista del visitante. Desde la pirámide principal se disfruta una excelente vista de la selva circundante.

IximcheAntigua capital de los Cakchiqueles con los que Pedro de Alvarado se alió para derrotar a los ejércitos Quiché en su incursión de conquista a Guatemala. Los restos que hoy se visitan co-rresponden al centro ceremonial de lo que fue una ciudad del postclásico. Hay evidencias de haberse realizado sacrificios humanos ya que se conserva una piedra de sacrificios sobre la que se arrancaba el corazón a las víctimas. En este lugar levantó Alvarado su primer asentamiento estable en Guatemala, después de traicionar a sus aliados Cakchiqueles. Por razones de seguridad no tardó en trasladarse a las faldas del volcán Agua, muy cerca de la actual Antigua Guatemala.

QuiriguáAunque se trata de un lugar pequeño, esconde algunas de las estelas más impactantes del Mundo Maya. Está en territorio guatemalte-co, aunque muy cerca de Copán. Su etapa de apogeo se sitúa en los primeros momentos del periodo clásico. La llamada estela E, erigida en el 771, es el mayor monumento de este tipo con 10.66 m. En ella, el soberano está representado de frente y de pie sobre una máscara de monstruo o de jaguar.

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Comunidades indígenas

Pueblo Tzutuhil de Santiago AtitlánEl término Tzutuhil significa “la flor de las na-ciones”. La capital de esta “nación” es Santiago Atitlán, un pequeño pueblo que ha sido, y es, uno de los centros de la resistencia indígena contra la dominación blanca. Es, un importantísimo lugar de culto religioso en el que es posible encontrar en todo su dimensión las diversas creencias religiosas de Guatemala: católica, evangélica y costumbrista. Uno de los exponentes más fuertes de la religión indígena o costumbrista, que es un acusado sincretismo maya-católico, es Maximón una divinidad sin-crética cuya cofradía está en Santiago Atitlán. Cuentan los viejos del lugar que Maximón, nom-bre que mezcla al Dios maya Mam y al santo San Simón, vivió en el pueblo hace mucho tiempo y se quedaba cuidando de las mujeres mientras los hombres trabajaban. Misteriosamente algunas mujeres quedaron embarazadas sin estar sus maridos presentes por lo que este personaje fue acusado y sometido a torturas, entre ellas cortarle los pies. A su muerte se convirtió en ser venerado con fama de adultero y pendenciero.

Hoy en día acuden de toda Guatemala para hacerle peticiones relacionados con el sexo, el dinero o el alcohol. El viajero que lo visite deberá ofrendarle cigarrillos, dinero y alcohol que los mismos cofrades venden en su capilla itinerante.

Los QuichéDurante los años inmediatamente anteriores a la llegada de los conquistadores españoles, el pueblo quiché dominaba, política y militar-mente, el área que conocemos como altos de Guatemala. Otros pueblo como los Cakchiqueles o los Mam les disputaban ese privilegio pero ellos, sin duda, eran los más fuertes. Su capital Utatlán, cons-truida sobre un promontorio, se encuentra muy cerca del pueblo de Santa Cruz del Quiché. Hoy en día los Quichés ocupan un territorio similar pero su fuerza se ha debilitado y cultura sin-cretizado, sobre todo en lo relativo a modos de producción, religión y relaciones sociales. Pero en el fondo, aunque numerosos elementos externos pudieran demostrar lo contrario, los quiché, como el resto de pueblos mayas, siguen sujetos a su subconsciente prehispánico. Es ha-bitual encontrarlos al amanecer haciendo sus

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ritos ancestrales en los escalones de la iglesia de Chichicastenango o en el cerro Tuscaj donde realizan ofrendas al Pascual Abaj.

Los MamAntes de la llegada de los españoles el Mam fue un pueblo poderoso que dominó toda la zona ocupada por el macizo de los altos Cuchuma-tanes. Su capital, Zaculeu, está en una meseta rodeada de barrancos, cerca de la actual capital del departamento Huehuetenango. Durante la colonia se fueron replegando hacia los valles más escondidos y hoy habitan principalmente en los alrededores de dos poblaciones como son: San Juan Atitlán y Todos Santo Cuchumatán. Sus vidas no se diferencian mucho de las del resto de indígenas guatemaltecos, pero ellos, por su aislamiento, han conseguido conservar mejor algunos elementos culturales inequívocamente prehispánicos.

San Juan Chamula y ZinacatanEstos pueblos Tzotziles están muy cerca de San Cristóbal de las Casas y son los más visitados por los turistas, lo que ha llevado a las autoridades a regular, mediante pago este ingreso. Las conflictivas relaciones entre los indígenas y los colonos chia-panecos han tenido siempre en estos pueblos uno de sus focos principales. Son el centro neurálgico de la resistencia indígena. Todo lo que represente una agresión hacia sus modos de vida es motivo de conflicto. Aquí surgieron las grandes rebeliones indias contra el intento de la iglesia en el siglo XVIII de eliminar la idolatría. Aun hoy las luchas entre católicos costumbristas y evangélicos suelen acabar con violentos enfrentamientos. Aquel visitante que se acerca y penetra en las iglesias ha de guardar un profundo respeto a las reglas locales si no desea tener problemas.

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Ciudades coloniales y centros urbanos

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La AntiguaA 1.530 metros de altitud y rodeada por los volcanes Agua (3.750 m.), Acatenango (3.960 m.) y Fuego (3.800 m.), la antigua capital de la capitanía general de Guatemala, es una joya colonial, declarada por la UNESCO patrimonio de la humanidad.Fundada en 1543 por Don Pedro de Alvarado, fue construida y reconstruida numerosas veces a causa de los terremotos que azotan regu-larmente el valle sobre el que se asienta. Ese proceso de reconstrucciones ha ido dejando en la ciudad un estilo arquitectónico variado pero cuya cronología se detiene en 1773, fecha en que se traslada la capital a otro emplazamiento. A partir de entonces no vuelve a construirse en la ciudad y esta queda como un museo de piedras vivas que no oculta su deseo nostálgico de vivir por siempre en el pasado. Decenas de edificios coloniales han quedado como muestra de ese pasado glorioso. Desde la plaza Mayor, el arquitecto italiano Antonelli creó en 1543 el trazado en damero de la ciudad. En esta

plaza está la alcaldía, inaugurada oficialmente en 1743, el palacio Arzobispal, la Catedral, consagrada hacia 1565, y el palacio de los Capitanes Generales, residencia y oficina del capitán general. Por toda la ciudad se levantan conventos, iglesias o palacios que muestran la sutileza de la arquitectura colonial. El convento de Santa Catalina, inaugurado en 1613, era el más pequeño de los once conventos existentes en esas fechas, y no se terminó hasta 1647. La iglesia de La Merced es obra de los hermanos mercedarios, que fueron los primeros en insta-larse allí tras la conquista. El convento de las Capuchinas es el último convento construido en Antigua y ocupado únicamente por veintiocho profesas. Además de estos, otros mucho edi-ficios y adornos coloniales de relieve dan a la ciudad ese ambiente antiguo que hace creer al viajero que de un momento a otro aparecerá por cualquier esquina un espadachín justiciero: el convento de la Recolección, el de San Agustín, la iglesia del Carmen, la universidad de San Carlos Borromeo, la casa de los leones, los faroles de metal labrado, las calles empedradas… todo ello nos recuerda una España que ya no existe.

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Guatemala CiudadFundada oficialmente el 2 de Enero de 1776, se construyó como alternativa a los problemas de seísmos que sufría la antigua capital de la capitanía. Fue levantada originalmente en estilo colonial pero poco a poco se impuso un neoclasicismo heredado de Europa y más particularmente de Francia. Los terremotos destruyeron también la ciudad en diversas ocasiones y hoy en día es un ejemplo más del anárquico crecimiento que han sufrido la mayoría de las capitales latinoamericanas. Se podrían nombrar, en un generoso intento por destacar algunas construcciones, el Palacio nacional, sede del gobierno de la nación. La Catedral, construida entre 1782 y 1865, está situada junto al palacio, en la plaza central. En toda el área central, también llamada zona 1, se vive un bullicioso ambiente callejero con cientos de tiendas de objetos baratos y puestecillos ambulantes. En la zona 2 es posible observar un mapa en relieve del país con 1.800 m2. Las zonas 9 y 10 son llamadas: “zona viva”, ya que es aquí donde se pueden encontrar los mejores restaurantes, bares, tiendas y hoteles de lujo.

QuetzaltenangoTambién se la conoce como Xelajú, nombre en Quiché de la ciudad. Es la segunda pobla-ción en número de habitantes. Fue fundada en 1524 por Don Pedro de Alvarado. Durante los años de apogeo cafetalero (finales del siglo XIX), Quetzaltenango, experimentó un crecimiento espectacular y pasó de ser un pueblo más a una de las más importante ciudades centroamericanas. Producto de ese auge se construyeron imponentes casonas de piedra que aun hoy conservan el señorío de entonces y que contrastan con las modestas casas rurales que se levantan alrededor. El parque de Centroamérica está flanqueado por edificios neoclásicos de piedra de lava, como la catedral, la alcaldía y la casa de cultura. Quetzaltenango es una ciudad provinciana y tranquila que conserva ciertas ínfulas de grandeza.

CobanFundada por los dominicos, Cobán recibió de Carlos V el título de ciudad imperial y su escudo en 1558. A finales del siglo XIX recibió una importante inmigración germana que ex-plotó tierras de cafetales y que han dejado una profunda huella, no sólo cultural sino también poblacional, ya que no es difícil encontrar coba-neros rubios de metro ochenta. Pero el aspecto

más destacable en la actualidad es que se trata de la última gran población del altiplano antes de comenzar los descensos hacia la selva del Petén. Es, podría decirse, el final del altiplano y el principio de la selva guatemalteca.

ChichicastenangoChichicastenango es conocido por su famoso mercado indígena que se celebra cada Jueves y Domingo, sin embargo, el visitante queda sorprendido de encontrar, más allá del bullicio mercantil un pueblo de atractivo sabor colonial. Ambos elementos definen la personalidad de esta villa: las sobrias construcciones coloniales y el colorido de sus pobladores. En el centro, en un extremo de la plaza, se levanta la iglesia de Santo Tomás, en la que el padre Ximenez encontró el manuscrito del Popol Vuh o Biblia de los Maya-Quiché. La gran escalera de acceso a la iglesia está construida sobre un antiguo lugar de culto, y aun hoy los sacerdotes mayas realizan sobre ella algunos de sus ritos de purificación. A unos cientos de metros a las afueras de Chichicaste-nango comienza la subida al cerro Tuscaj donde está la piedra dedicada a Pascual Abaj o Dios Mundo que es venerado en toda la región. Hasta allá arriba suben también los sacerdotes para completar las peticiones y realizar las ofrendas pertinentes. A cualquier hora del día, el viajero puede observar estos ritos, en los que suele ser bienvenido si se acerca con respeto.

CancúnEn los años setenta se decidió en México crear una alternativa turística a Acapulco, ya en de-cadencia por su saturación. De esa idea nació Cancún, que en ese momento no era más que una isla desierta de 24 kilómetros en forma de L y separada de la costa por dos estrechos canales que dejaban una laguna en medio. En unos años se unió la isla a la tierra, se cons-truyeron carreteras, hoteles, un aeropuerto y todos los servicios necesarios para convertir esa tierra virgen en un emporio de lujo con todas las comodidades. Sus playas, en cambio no perdieron nada de el encanto que las hacen un paraíso tropical. En la actualidad Cancún dispone de más de veinte mil camas hoteleras, cientos de restaurantes, tiendas, bares y todo lo necesario para atender al turismo de playa y entretenimiento.

MéridaMérida, una de las más atractivas ciudades co-loniales de América fue fundada por Francisco de Montejo el 6 de Enero de 1542 y le puso ese nombre porque las ruinas mayas sobre las que

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construyó su ciudad le recordaban a las ruinas de la Mérida romana. Su trazado reproduce el de todas las ciudades coloniales, que trataban de imitar a las poblaciones españolas de la época, con una plaza central como eje y sus calles distribuidas en ángulo recto. En la plaza de Mérida puede verse la antigua casa de los Montejo, el palacio de gobierno y la Catedral construida entre 1562 y 1598 siendo así la pri-mera terminada en el continente americano. Numerosos conventos como el de San Francis-co o iglesias como la de Santa Isabel le dan a la ciudad ese aspecto antiguo que tienen las ciudades coloniales. A principios de este siglo la ciudad se extendió con construcciones que imitaban estilos franceses, neoclásicos y más tarde también neomayas. Ejemplo de ello es el paseo Montejo o la avenida Itzá.

San Cristóbal del Las CasasSan Cristóbal es para muchos la más agradable de las ciudades coloniales del área maya. Sus construcciones barrocas, el aire de las monta-ñas y una población, esencialmente indígena, le dan un sabor muy especial. No tiene más de 100.000 habitantes pero el recogimiento de las calles le hace parecer una ciudad bu-lliciosa. En el Zócalo o plaza central destaca sobre el resto del conjunto arquitectónico la Catedral de color ocre y los portales debajo de los cuales se venden mercancías diversas en puestecillos improvisados. Otras iglesias como la de Santo Domingo o la del Carmen componen un conjunto arquitectónico que completan las casas señoriales y los barrios de indios.

San Andrés XeculEn San Andrés Xecul, un pequeño pueblo indíge-na cercano a Quetzaltenango, pueden observarse las tradicionales casitas de adobe con techos de teja. Sin embargo, su principal atractivo es la fachada de la iglesia, de estilo naif y cuya colorista decoración parece diseñada por los niños de la escuela del pueblo.

FloresCapital del departamento del Petén guatemal-teco, la población de Flores, se levanta sobre un pequeño islote de la laguna de Petén Itzá. En ella están las oficinas departamentales así como numerosas organizaciones nacionales e internacionales para la protección del medio ambiente. El lago, cuyas crecidas son impre-decibles, es una amenaza constante para la supervivencia de la población.

LivingstonLivingston es una pequeña población asentada en la desembocadura del Río Dulce, en el Caribe guatemalteco. Aunque está en tierra firme, sólo es accesible por vía acuática ya que no hay ca-rretera que atraviese la selva que la circunda. Sus habitantes son de raza negra y hablan un idioma al que llaman Garífuna y que es una mezcla de criollo, inglés y Kekchí. En la sociedad garífuna las mujeres tienen un papel fundamental, como no puede ser menos debido a su origen africano. Ellas son las herederas de la tradición y las que esperan a los hombres que, en la actualidad, emigran a EEUU en busca de fortuna. Durante el día se pesca o se descansa, en la noche se baila reggae y calipso en cualquiera de los numerosos bares que hay a la orilla de la playa.

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Parajes naturalesLago AtitlánAfirman los geólogos que su formación se debe a la gran explosión de un volcán hace millones de años. De ser así, los tres volcanes que lo rodean habrían surgido del fondo de las aguas que llenaron el cráter de aquel volcán. Sea como fuera, este accidente geológico es uno de los más bellos experimentos que la naturaleza ha realizado consigo misma. Aun no se ha encontrado el fondo, aunque las últimas mediciones hablan de 600 metros y de una más que probable conexión subterránea entre el lago y el océano Pacífico. En sus orillas viven, desde hace cientos de años, diversos grupos indígenas de origen maya, cuya relación con el lago es de absoluta complicidad. Dos grupos principalmente son quienes lo comparten: tzutuhiles y cakchi-queles, que se dividen en numerosos pueblecitos. Panajachel, el más grande de estos, ha sido ya tomado por los hoteles y restaurantes turísticos, aunque aun conserva parte de su sabor original. Otros como: San Pedro, San Antonio o Santiago conservan la vida tradicional. La aparente docilidad de las aguas del lago no es más que eso, apariencia. En las tardes, un viento llamado Xocomil, sopla del sudeste formando remolinos y olas hasta de dos metros que son muy temidas por los pescadores. Cuenta una leyenda local que el viento es pro-vocado por un gigante que, una vez vencido por los lugareños, fue decapitado, siendo su cabeza

lanzada al agua. Para vengarse, sopla con fuerza en las tardes provocando la zozobra de la débiles embarcaciones.

Altos CuchumatanesPoderosas fuerzas geológicas hicieron surgir del fondo de los mares este macizo que culmi-na en el pico Xemal, a 3.900 m de altura. Los relieves abruptos, los valles, las laderas lisas, las mesetas y las cimas de las rocas han dado a esta meseta calcárea cárstica la denominación de “cordillera de pisos”. Las especies resinosas que la cubrían antaño han sido sustituidas por una vegetación escasa de cardos e hierba seca, aunque sobreviven, bajo el vuelo de las aves de presa, los coyotes, pumas y jaguares que con-fieren a la zona un aspecto salvaje. Las aldeas de los Mam, habitantes naturales del lugar, se han instalado en los valles laterales, menos fríos pero más húmedos.

Agua AzulEntre Palenque y San Cristóbal de las Casas hay un pequeño río cuyos bruscos cambios de nivel forma deliciosas bañeras en las que el agua se torna color turquesa, formando en su caída, cascadas y pequeñas piscinas naturales que hacen las delicias del bañista. A este lugar le llaman Agua Azul.

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Cayos de BeliceDicen los expertos que los cayos de Belice forman parte de la segunda barrera coralina más im-portante del mundo, después de la de Australia. Esta singularidad permite a los cientos de islotes que corren paralelos a la costa de Belice ser un lugar privilegiado para el disfrute de los deportes náuticos y especialmente el submarinismo.

Río DulceEl llamado río Dulce es una boca de agua que une el lago Izabal con el Caribe guatemalteco. Tiene 38 Km de longitud entre el puente y Livingston. La última parte, ya cerca del océano, transcurre formando estrechos meandros y encerrado entre dos paredes con abruptos barrancos cubierto de una densa vegetación. En sus orillas se levantan numerosas casas de paja y caña propiedad de indios Kekchí y mestizos emigrados del altiplano que viven de la pesca y el comercio por el río.

Petén ItzaEl lago Petén Itzá ofrece una visión idílica de la selva del Petén. Recorrerlo en lancha al atardecer es un placer para los sentidos que se regalan con la observación de los animales que salen a co-mer. Pero además de un lugar paradisiaco para el visitante, este lugar fue el hábitat para el último reducto de los mayas clásicos antes de su conquista definitiva. Los Itzaes, huidos del Yucatán, se escondieron aquí y aguantaron los ataques europeos hasta bien entrado el siglo XVII. Hoy, sus habitantes luchan con las imprevisibles crecidas del lago al que tampoco pueden dominar.

Isla MujeresIsla Mujeres está situada a tan sólo unos kilómetros al norte de Cancún y mide 7 Km. de largo y entre 300 y 800 de ancho. Su nombre se lo puso el conquistador español Francisco Hernández de Córdoba que observó allí diversos ídolos femeninos a los que veneraban los habitantes de la isla. El principal atractivo de la isla son sus playas de aguas turquesa y finas arenas blancas que son un paraíso también para los submarinistas que tienen en la fauna submarina de la zona un auténtico tesoro. Durante siglos la isla fue también un escondite de piratas como Pierre Lafitte que fue herido y muerto allí por los españoles.

Laguna de PetexbatunAl Oeste de Sayaxché, en el Petén guatemalteco, y siguiendo el río Pasión, se llega a la laguna de Petexbatún. Esta laguna y sus pequeños ríos tributarios fueron en la antigüedad una vía de comu-nicación vital en las relaciones comerciales entre las ciudades mayas. Hoy, y también entonces, es un paraíso tropical en el que el viajero puede disfrutar con la observación de aves y todo tipo de fauna selvática. En sus orillas y en las de los ríos tributarios, están escondidas entre la jungla al-gunas de la ciudades mayas, como Aguateca y Dos Pilas, que dieron esplendor a esta civilización.

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INFORMACIÓN DE SALIDADIA DE SALIDA .....................................................................................................................................................................................................................................................................

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