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GUIA INCONTINENCIA URINARIA:
DIAGNÓSTICO, TRATAMIENTO Y CUIDADO ENFERMERO
INDICE
1. INTRODUCCIÓN ………………………………………………………. pag 2
a) Justificación
b) Definición
c) Objetivos
2. POBLACIÓN DIANA…………………………………………………… pag 4
3. FISIOLOGÍA MICCIONAL…………………………………………… pag 5
a) Factores que alteran el mantenimiento de la continencia
b) Causas que subyacen en la fisiopatología de la incontinencia urinaria
4. CLASES DE INCONTINENCIA………………………………………. .. pag 6
a) Incontinencia urinaria de urgencia
b) Incontinencia urinaria por rebosamiento
c) Incontinencia urinaria de estrés
d) Incontinencia urinaria refleja
e) Incontinencia urinaria funcional
5. VALORACIÓN DIAGNÓSTICA………………………………………. pag 10
a) General
b) Específica
6. TRATAMIENTO……………………………………………………….. pag 11
a) Generalidades
b) Tratamiento de la incontinencia urinaria desde la enfermaría de A. P
c) Medidas generales
d) Técnicas modificación de conducta
e) Tratamiento farmacológico
f) Medidas paliativas
g) Evaluación y seguimiento de los tratamientos
7. ABSORBENTES……………………………………………………… pag 17
a) Composición
b) Requisitos legales
c) Clasificación
d) Criterios de selección de absorbentes
- Adaptabilidad. Absorción. Eficacia y tolerancia. Discreción. Comorbilidad
- Errores más frecuentes
- Educación sanitaria
8. INCONTINENCIA EN PEDIATRIA …en proceso……………
9. INCONTINENCIA FECAL …………en proceso……………………
10. CONSULTAS BIBLIOGRÁFICAS……………………………………
11. ANEXOS………………………………………………………………
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1. INTRODUCCIÓN (1, 2, 4, 6)
La incontinencia urinaria (IU) está considerada como uno de los grandes síndromes
geriátricos, alcanzando una prevalencia elevada entre la población anciana, y que puede generar
diversas repercusiones (físicas, psicológicas, sociales, económicas) que influyen negativamente
sobre la calidad de vida. Conviene recordar que esta condición patológica aparece cuando la
función básica de la continencia se altera, por patología del tracto urinario inferior o de algún
otro sistema que participe en el mantenimiento de la continencia urinaria (sistema nervioso,
aparato locomotor). En este sentido, el envejecimiento fisiológico genera una serie de
alteraciones en distintas estructuras del organismo (tracto urinario inferior, próstata, vagina,
suelo pélvico, sistema nervioso), las cuales condicionan una mayor vulnerabilidad para sufrir
incontinencia, sin poder aceptarse que el envejecimiento por sí mismo provoque la incontinencia
urinaria.
Así pues, la elevada prevalencia que la incontinencia tiene en los ancianos se relaciona
directamente con la comorbilidad (procesos neurológicos, patología urológica, patología
osteoarticular), el deterioro funcional (inmovilidad y/o demencia) y la polifarmacia
(especialmente diuréticos y psicofármacos). La opinión actual es que la incontinencia urinaria es
una función básica que en el anciano sano se debe mantener, independientemente de su edad, y
que la pérdida de la continencia debe ser interpretada como un síntoma de una disfunción; dicho
de otra manera, la incontinencia no es un fenómeno normal del envejecimiento.
Justificación:
El Instituto Carlos III en un estudio sobre la incontinencia urinaria concluye que el 14,5% de
los hombres y el 16,1% de las mujeres padecen incontinencia en nuestro país. De forma general,
y según diferentes estudios realizados en varios países, se considera que entre un 10 y un 15% de
las personas mayores de 65 años que viven en la comunidad sufren incontinencia, frente al 30-
40% en caso de hospitalización por un proceso agudo, alcanzando su máxima prevalencia, 60-
70%, en los ancianos institucionalizados. Según el Observatorio Nacional de la Incontinencia
(informe ONI-2009), en nuestro país, se puede estimar una prevalencia global para la mujer de
un 24%, aumentando al 30-40% en las mujeres de mediana edad y de hasta un 50% en las
mujeres ancianas.
Zunzunegui estudió una muestra de 1560 mayores de 65 años sobre la base poblacional de
los empadronados en Leganés y encontró una prevalencia del 14% (IC 95%, 11-17) en varones
y 30% (IC 95%, 26-34) en mujeres. Entre 16,1% y 68,8% (Cerruto et al., 2012). En otro estudio
realizado en cuatro países europeos, la prevalencia de IU en mujeres de 18 años o más fue del
35%, siendo la más baja la de España 23% (Hunskaar et al., 2004). Estudios realizados fuera
del ámbito europeo indican tendencias similares, en un estudio realizado en China (Zhu et al.,
2008) se indica que la prevalencia global de IU femenina fue del 38,5%, siendo el tipo más
frecuente la de esfuerzo (60%), seguida de la IU mixta (32%), la de urgencia (7%) y otros tipos
de IU (1%). También en este estudio se indicaba que la prevalencia de IU aumenta con la edad,
la prevalencia más baja se observó en el grupo de edad más joven (9,9% en las mujeres de 20-
29 años), la prevalencia más alta se observó en el grupo de mayor edad (71% entre las mujeres
de 90 años o más).
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No obstante, sorprende el bajo índice de consulta que genera este problema (se calcula que
sólo lo hace 1/3 de las personas incontinentes). Por ello, es fundamental investigar y recoger en
la historia, de forma sistemática, la existencia o no de incontinencia urinaria, con intención de
detectar lo antes posible la existencia de este síndrome geriátrico, y poner en marcha el proceso
diagnóstico y terapéutico mas adecuado para cada paciente.
La IU provoca un deterioro considerable en la calidad de vida en la persona que la padece,
equiparable a la artrosis de cadera, la diabetes, o la depresión; esto se debe al impacto
multidimensional tan negativo que genera la IU, abarcando aspectos de salud personal, como
familiares o sociales, y que no dependen de la severidad del cuadro, sino de diversos factores
individuales, así como del tipo clínico de incontinencia. Se estima que aproximadamente el 25%
de mayores con incontinencia urinaria precisan de una tercera persona para su higiene personal.
El manejo de la IU constituye una carga para los familiares de estos pacientes; de hecho, la
incontinencia es un factor decisivo a la hora de internar familiares mayores en residencias.
Dentro de las repercusiones sanitarias; la IU se relaciona con una serie de problemas como las
lesiones cutáneas, infecciones urinarias, trastornos del sueño, interferencia en las relaciones
sexuales, etc. Además hay que contemplar las consecuencias del diagnóstico a estos pacientes:
Consultas médicas y de enfermería, exploraciones complementarias, analíticas, ecografías,
estudios urodinámicos. También en su tratamiento: Absorbentes, catéteres, técnicas quirúrgicas,
y complicaciones que normalmente no se consideran (días hospitalización, infecciones urinarias,
caídas, fracturas por caídas)
En cifras, el coste económico (a finales de los 90) se considera que supone el 2% del
presupuesto sanitario en países desarrollados. El 90% del gasto se debe a los accesorios, el 2% al
diagnóstico y tratamiento y el 8% a estancias hospitalarias y cuidados rutinarios (En España, en
1996, el gasto supuso el 3,2 % de la prestación farmacéutica del SNS). Los costes reales de la
incontinencia urinaria no son del todo desconocidos, se ha calculado que una persona con
incontinencia gasta unos 550 euros anuales, (Málaga 2011, 3abs día 1€ + 1abs noc/supnoc 0,50€
= 1,50€ día) sólo en absorbentes, sin tener en cuenta otros productos necesarios para el cuidado
de la piel. En España en el año 2000 los absorbentes de incontinencia urinaria supusieron más
de 33.000 millones de pesetas (200 millones de euros), siendo, el 97,5% de todos los absorbentes
de incontinencia urinaria imputables al grupo de pensionistas. Actualmente, dada la reducción
del precio de los absorbentes a un 1/3 de su valor medio durante los últimos 10 años , el gasto
actualizado sería de 225 millones de euros si extrapolamos los gastos de 2010 (ya con los
nuevos precios actuales) que Andalucía supusieron 40 millones de € y alrededor de 850.000
unidades dispensadas.
Qué sabemos de la Comunidad Valeciana; según el nº 3 del boletín Farmacoterapéutica
(publicación de la Dirección General de Farmacia) en 2008, se gastaron más de 34 millones de
euros para 720.644 recetas; pero lo sorprendente es el reparto de las unidades consumidas… (día
el 52%, noche 12%, super-noche 36%) de día sólo se recetan el 52%, esto es comprensible
porque muchos pacientes sólo los utilizan por la noche, pero la razón entre noche (25%) y super-
noche (75%), es decir 1 a 3, no es explicable a la luz de los conocimientos actuales.
En nuestro departamento durante los años 2010-2013 se han utilizado 112.460 unidades,
por valor de 4.380.511 €, con un consumo medio anual de 28.115 unidades y un gasto medio
anual de 1.095.628; pero sigue sorprendiendo que aunque la relación día/noche se ha
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mantenido 55,8% a 44,2%, la razón noche/supernoche ha empeorado hasta el 16% y
84%, es decir ha pasado a 1/5.
Estamos procesando los datos por 1000, % por > de 75 años, estratificación por edad, etc
Definición:
La International Continent Society en su última definición de 2002 define la incontinencia
urinaria (IU) como una situación en que la perdida involuntaria de orina. La OMS sigue
considerando la IU como una perdida involuntaria de orina objetivamente demostrable y en
cantidad suficiente como para constituir un problema social y de higiene en quien la padece. La
IU representa una patología compleja y de difícil solución, que limita la libertad individual y
reduce la autoestima de las personas. El mecanismo de la continencia de orina se reduce
básicamente a un juego de presiones donde, si el sistema esfinteriano mantiene una presión
superior a la que en ese momento hay en la vejiga, no se produce emisión de orina; si esta
situación se invierte de forma consciente y voluntaria, la denominamos micción, y si es
involuntaria o inconsciente, se denomina incontinencia.
La persona tiene que poseer la capacidad física y psicológica de reconocer y responder
apropiadamente a la urgencia de orinar.
Objetivos:
Detección precoz de la IU.
Identificar Diagnóstico NANDA preciso.
Identificar criterios derivación.
Prevenir o disminuir los episodios de IU, mediante la aplicación de técnicas
conductuales.
Elección del tratamiento paliativo más adecuado. Protocolización en la elección
absorbentes (Realizar recomendaciones sobre el uso de AIU basados en la evidencia
disponible, homogeneizando los criterios de elección y disminuir la variabilidad de uso de
absorbentes)
Mejorar la calidad de vida del paciente al evitar la incomodidad, los problemas físicos de
la incontinencia, la disminución de la autoestima o el aislamiento.
2. POBLACION DIANA (7)
Pacientes de cualquier edad que utilicen absorbentes (prescritos en Abucasis), y que
presenten LESCAH (lesiones cutáneas por ambiente húmedo).
Pacientes con frecuentes episodios de infección del tracto urinario.
Mayores 75 años que den alterado patrón Eliminación en Abucasis, y menores que
presenten patologías de especial riesgo ( diabéticos > 50 años, prostáticos, limitaciones
físicas, visuales o cognitivas.
Pacientes diagnosticados de incontinencia urinaria con NANDA.
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3. FISIOLOGIA MICCIONAL (3 ,5, 8)
Los centros medulares que actúan sobre la micción son: el núcleo simpático (metámera D1O-L2), núcleo
parasimpático (metámera S2-S4) y núcleo somático (metámera S3-S4). La coordinación de los núcleos
medulares la realiza un centro superior, denominado núcleo pontino, auténtico eje de la micción.
El orinar es un acto voluntario y consciente que se consigue gracias al control que ejercen los centros
superiores sobre el núcleo pontino que informa a la corteza cerebral del llenado vesical, y la necesidad de
micción se controla por inhibición del reflejo miccional, hasta que se pueda orinar en un lugar adecuado.
La interrupción del flujo miccional se consigue mediante la contracción del esfínter periuretral y la
inhibición de la contracción del detrusor.
El proceso de micción comprende dos fases,
llenado-almacenamiento y vaciado. Durante el
LLENADO la vejiga comienza a acumular la
orina proveniente de los riñones (promedio de
1-3 ml/mto) y se estira el ms detrusor (dominio
sist simpático que lo mantiene relajado) para
acomodarse a la creciente cantidad de orina,
pudiendo almacenar entre 300 y 600 cc.;
durante esta fase el esfínter interno de la uretra
(dominio simpático), y el esfínter externo
(estriado-SNC) están en contracción y evitan
que se produzcan escapes de orina.. El deseo de
vaciar la vejiga aparece cuando se almacenan
aprox unos 250 cc. El sistema nervioso sano
responde ante esa sensación de estiramiento, y
alerta a la persona sobre la necesidad de orinar
mientras la vejiga se sigue llenando; si hay
control voluntario (corteza cerebral), aunque
aparezca un deseo de orinar, el ms detrusor
sigue relajado y el esfínter uretral cerrado,
hasta que se encuentra en momento y lugar
adecuado para orinar, momento en el que se
iniciará la fase de vaciado.
En la fase de VACIADO (dominio de sistema parasimpático) es necesaria la capacidad del músculo
detrusor de contraerse adecuadamente para forzar la salida de la orina de la vejiga y, al mismo
tiempo, coordinar la apertura del esfínter interno, y relajar el esfínter uretral externo(control
voluntario SNC) para permitir la salida de la orina al exterior.
La diuresis normal es de 1,5 a 2 litros/día. La formación de orina sigue un ritmo que es menor
por la noche, excepto en la situaciones que existe polaquiuria/nicturia, que se altera el ritmo y pasa
LLENADO la presión uretral > presión vesical.
VACIADO la presión vesical > presión uretral.
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a ser mayor por la noche, y en pacientes con edemas importantes en los que el decúbito nocturno
mejora la hemodinámica renal y la consiguiente movilización del líquido de los edemas.
Desde una concepción integral, podemos considerar los siguientes requisitos como los necesarios
para mantener la continencia: Almacenamiento y vaciamiento adecuados, motivación suficiente
para ser continente, capacidad cognitiva suficiente para percibir el deseo e interpretarlo como tal,
movilidad y destreza suficiente para alcanzar el watter, no existencia de barreras u obstáculos
ambientales que limiten el acceso.
Factores que alteran el esquema fisiológico del mantenimiento de la continencia
Cambios fisiológicos ligados al envejecimiento que pueden influir en la dinámica miccional:
- Sistema nervioso central y autónomo
- Modificaciones anatómicas y funcionales en la vejiga,
- Hipoestrogenismo,
- Debilidad suelo pélvico,
- Modificaciones en la uretra y próstata.
Comorbilidad, procesos no urinarios implicados más frecuentemente en la IU:
- Patología neurológica como demencias, enfermedad cerebrovascular, Parkinson,
hidrocefalia, neuropatías autonómica y periférica.
- Deterioro de la movilidad como patología osteoarticular, fractura de cadera y sus secuelas,
deprivación visual, secuelas ictus, obesidad.
- Historia ginecológica en la mujer
Polifarmacia, fármacos relacionados relacionados con la incontinencia:
- Diuréticos (poliuria, polaquiuria, urgencia miccional)
- Hipnóticos, antipsicóticos, opiáceos, (sedación, inmovilidad, delirium)
- Anticolinérgicos (retención de orina, impactación fecal)
- Inhibidores acetilcolinesterasa (urgencia, polaquiuria)
- Calcioantagonistas (estreñimiento, retención de orina)
- IECAS (tos)
- Alfa-bloqueantes (disminución de la resistencia uretral
Conocer su existencia es fundamental para detectarlos lo antes posible, e incluso prevenir su
aparición cuando fuera posible, o retrasar su aparición, minimizando su impacto con diferentes
medidas de prevención/intervención. Las enfermeras deben estar vigilantes y adoptar conductas
proactivas tendentes a generar consultas en aquellos pacientes con factores de riesgo para
desarrollar incontinencia urinaria
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Causas que subyacen en la fisiopatología de la IU.
A diferencia de la IU en jóvenes; en la persona mayor, tanto la fisiología como la etiología son
multifactoriales, por lo que el abordaje debe ser multidimensional y preferiblemente
multidisciplinar:
- Neurológicas: Las lesiones corticales son la que con mayor frecuencia desencadenan la perdida
de continencia. El resultado de estas lesiones estructurales producirían un fallo en la inhibición de la
contractibilidad vesical, dando lugar a una condición patológica de “hiperactividad del detrusor”
con incontinencia de urgencia, polaquiuria, nicturia. Las lesiones de médula (neurona motora
superior), también pueden dar lugar a una hiperactividad del detrusor, pero con fallo en la
sincronización de la relajación uretral, con lo que estos pacientes también pueden padecer retención
urinaria. Las lesiones bajas (neurona motora baja) como las que se observan en la neuropatías
periféricas pueden dar lugar a una disminución de la contractibilidad vesical con episodios de
incontinencia y retención urinaria.
- Musculares: La capacidad funcional del musculo detrusor para contraerse adecuadamente
puede verse alterada por el envejecimiento fisiológico (atrofia, reducción de la inervación), así
como por procesos neurológicos y/o vasculares, por los traumatismos, y el consumo de fármacos. A
nivel microscópico se ha observado que las vejigas hiperactivas presentan un número anormal de
conexiones intracelulares alteradas, y el tejido de soporte tiene más elastina, colágeno y segmentos
de músculo denervado.
- Mecánicas: El adecuado soporte anatómico de la zona pélvica es fundamental para el
mantenimiento de la continencia. Este soporte está constituido por diferentes elementos que
conforman el suelo pélvico ( ligamentos puborrectales, pared vaginal anterior, fascia de la pelvis,
músculos elevadores del ano). En conjunto, este soporte proporciona un firme refuerzo contra el que
se apoya la uretra durante los aumentos de presión intraabdominal. El fallo de esta estructura se ve
agravado por efecto de la multiparidad, cirugía pélvica, obesidad, hipoestrogenismo; lo que
conlleva a que en situaciones de presión intraabdominal (tos, risa, esfuerzos) no se pueda
contrarrestar esta fuerza, y se produce hipermovilidad del cuello vesical y de la uretra proximal, que
descienden por debajo del pubis, y por ello la presión de cierre uretral será menor.
4. CLASES DE INCONTINENCIA URINARIA (1, 7, 9)
e
En la clínica médica pueden encontrarse multitud de clasificaciones sobre IU que varían su
nomenclatura según el autor, aunque en la generalidad de los casos se trata de variaciones de
nombre sobre un mismo o muy similar concepto. Desde el punto de vista clínico resulta muy
práctico clasificar la incontinencia en transitoria (aguda) y crónica. La Incontinencia transitoria
hace referencia a los casos de incontinencia de corta evolución (menos de 4 semanas), incluyendo
aquellas situaciones que se considera pérdida funcional. Suele aparecer en el 50% de los ancianos
hospitalizados que presentan incontinencia, ésta es de tipo reversible; también se considera que en
el 33% de los que viven en la comunidad tienen pérdidas urinarias transitorias. Las causas que
desencadenan la incontinencia transitoria son múltiples, pero las principales son: infecciones del
tracto urinario, delirio, vaginitis o uretritis atrófica, fármacos (sedantes, diuréticos, anticolinérgicos,
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antagonistas del calcio), disfunción psicológica, trastornos endocrinos (hiperglucemia e
hipercalcemia), inmovilidad e impactación fecal.
Según Verdejo podemos considerar tres tipos clínicos de incontinencia a partir de las
características en las que aparecen los escapes: urgencia (precedidos de una necesidad imperiosa de
orinar), esfuerzo (en relación con maniobras que aumentan la presión intravesical, y sin percepción
de deseo miccional (en relación con una vejiga sobredistendida, por obstrucción o por alteración
contráctil). En el caso de la incontinencia establecida o crónica ya se considera la existencia de
alteraciones estructurales dentro o fuera del tracto urinario y suele tener una duración superior a las
4 semanas debiéndose descubrir el mecanismo productor de la incontinencia (hiperactividad
vesical, estrés, sobredistensión-rebosamiento) para poder establecer el tratamiento más adecuado
La North American Nursing Diagnosis Association (NANDA) clasifica las incontinencias en la
actualidad mediante cinco etiquetas diagnósticas que pueden hacerse corresponder con
nomenclatura usada en la clínica médica, en este caso, sin embargo, el interés de la disciplina
enfermera no es la etiología sino la respuesta, en términos conductuales, que la pérdida de orina
involuntaria genera en los individuos.
Incontinencia de urgencia. También conocida como inestabilidad del detrusor, es el tipo de
incontinencia urinaria más frecuente (65% de los casos) entre las personas mayores. Esta
incontinencia se produce cuando las contracciones no inhibidas del detrusor superan la resistencia
de la uretra, lo que permite la pérdida de pequeñas cantidades de orina. Los ancianos presentan una
súbita urgencia de orinar, y un residuo posmiccional con frecuencia menor de 50 ml. Básicamente,
existen cuatro mecanismos responsables de este tipo de incontinencia: defectos en la regulación por
parte del SNC, obstrucción del tracto urinario inferior (como en las primeras fases del síndrome
prostático), afectación orgánica vesical e inestabilidad idiopática (forma más frecuente en mujeres).
La NANDA la llama Incontinencia urinaria de urgencia(00019): el estado en que una persona
experimenta una emisión de orina poco después de sentir una intensa sensación de urgencia de
orinar.
Incontinencia por rebosamiento. Ocurre cuando la presión de llenado vesical excede a la
uretral, pero sólo con grandes volúmenes de orina dentro de la vejiga sin que exista actividad del
detrusor. Suele corresponder a la etapa final de la obstrucción del tracto inferior urinario y se
caracteriza por un residuo posmiccional superior a 100 ml. Existen dos mecanismos de producción.
El primero, por obstrucción, al existir un obstáculo en el flujo miccional, las fibras musculares del
detrusor se hipertrofian, pero con el tiempo pierden su capacidad de contracción produciendo un
insuficiente vaciado de orina y el consiguiente residuo vesical. Puede aparecer en ambos sexos
aunque es más frecuente en el varón por la hipertrofia benigna de próstata. La otra causa son los
fármacos: antihipertensivos, antagonistas del calcio e inhibidores de prostaglandinas (AINEs), que
disminuyen la contractibilidad del detrusor. Por lo general estos pacientes tienen un imprevisible,
constante o frecuente goteo de orina, y nunca acaban de sentir que su vejiga se ha vaciado por
completo. La NANDA la llama Incontinencia urinaria por rebosamiento (00176): se define
como pérdida involuntaria de orina asociada a sobredistensión de la vejiga.
Incontinencia de estrés .Conocida también como incontinencia de esfuerzo pura o genuina. Se
produce cuando el aumento de presión intraabdominal supera la resistencia uretral, permitiendo la
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expulsión de pequeñas cantidades de orina en ausencia de contracción del detrusor. Entre sus causas
se incluyen la deficiencia estrogénica, la debilidad de los músculos pelvianos, la debilidad del
esfínter uretral y la obesidad .Clínicamente existen pequeñas pérdidas de orina después de la tos o
de un acceso de risa o cualquier actividad física que aumente la presión abdominal. El residuo
posmiccional es mínimo. La NANDA la llama Incontinencia urinaria de esfuerzo (00017):
estado en que la persona experimenta una pérdida de orina de menos de 50 ml que se produce al
aumentar la presión abdominal.
Incontinencia refleja. Se produce emisión involuntaria de orina cuando se alcanza un
determinado volumen en la vejiga, no excesivo, y que puede ser calculado individualizadamente;
por ello las pérdidas de orina son bastante previsibles a intervalos de tiempo regulares. Está
relacionada con lesiones neurológicas (por encima del centro pontino de la micción y del centro
sacro) que impiden el paso de información sobre regulación del proceso de la micción. Por ello,
estos paciente no tienen percepciones sobre llenado, necesidad de orinar, sensación de urgencia.
Existe incapacidad absoluta de inhibir y/o iniciar voluntariamente la micción; cada cierto tiempo se
produce una contracción/espasmo de la vejiga por inhibición a intervalos regulares (determinados
por el volumen de orina acumulado). La NANDA la llama Incontinencia urinaria refleja
(00018): se define como perdida involuntaria de orina a intervalos previsibles cuando se alcanza un
volumen vesical específico
Incontinencia funcional. Este tipo de incontinencia tiene lugar cuando un anciano continente
con tracto urinario intacto no desea o es incapaz de alcanzar el retrete para orinar, Así pues esta IU
se produce en pacientes cuyo aparato urinario no tiene problema alguno, pero que debido a
transtornos físicos (movilidad reducida), cognitivos (demencias), psicológicos (depresión),
emocionales (hostilidad), barreras arquitectónicas asociadas estados de fragilidad (puertas,
escalones iluminación), o el uso de ciertos medicamentos que pueden agravar el exceso de diuresis
o la impactación fecal, no son capaces de llegar al baño a tiempo de orinar voluntariamente. La
NANDA la llama Incontinencia urinaria funcional (00020): incapacidad de una persona,
normalmente continente, de poder llegar al inodoro a tiempo para evitar la pérdida involuntaria de
orina.
La NANDA define la Incontinencia urinaria total (00021) como el estado en que una persona
experimenta una pérdida de orina continua e impredecible. Este tipo de IU no tiene correlación con
ninguna de las encontradas en la literatura médica aunque constituye una respuesta posible en
varias de ellas. (SE ANULÓ EN 2010, EN CIERTA MANERA ES COMPARABLE A LA
INCONTINENCIA POR REBOSAMIENTO, QUE SE ACEPTÓ EN 2006).
Es conveniente mencionar el diagnóstico médico de incontinencia neurógena asignado a ciertos
pacientes. La Incontinencia neurógena. Puede ser:
Hiperrefléxica. Por afectación de la primera motoneurona. Se define como hiperactividad
del detrusor y surge en traumatismos craneoencefálicos, ACV, tumores cerebrales, esclerosis
múltiples en fases iniciales, demencias, enfermedad de Parkinson, etc. Clínicamente se manifiesta
como una IU de urgencia.
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Arrefléxica. Por afectación de la segunda motoneurona. Se produce una ausencia de
contracciones del detrusor y aparece en tetraplejia, paraplejia, espina bífida y esclerosis múltiple en
fases avanzadas. Clínicamente se manifiesta como una IU por rebosamiento.
Alteraciones de la inervación pelviana. Se produce disfunción de los esfínteres a
consecuencia de lesiones traumáticas o quirúrgicas del nervio pudendo, pélvico o hipogástrico, o
por neuropatía autonómica (como en la diabetes).
5. VALORACIÓN DIAGNÓSTICA (1, 2, 3, 7)
GENERAL
Debido a que la etiología de la incontinencia puede ser multifactorial, será necesario efectuar una
valoración diagnóstica individualizada en función de las características de cada paciente, así como
de la repercusión que la incontinencia provoca en su calidad de vida.
Historia médica general: Antecedentes personales. Exploración física. Analítica de los últimos
6 meses. Consumo de fármacos.
Historia clínica dirigida: Valoración enfermera del patrón eliminación. Valoración ABVD
(Barthel y Pfeiffer). Valoración riesgo caídas.
ESPECÍFICA (anexos)
Elaboración del diario miccional (anexo)
Valoración movilidad (anexo)
ICIQ-SF (anexo)
Algoritmo para el dx de enfermería. (anexo)
Es importante resaltar que existe evidencia científica (nivel de recomendación grado B) que nos
permite afirmar que la evaluación básica mediante el análisis de los síntomas, la exploración física y
el diario miccional nos permite orientar el diagnóstico del tipo de IU. Su valor predictivo positivo
para conocer la causa de una IU es del 87%; si a esta evaluación básica añadimos los cuestionarios
de IU, este valor predictivo positivo es del 97%. Según una revisión de la Cochrane de 2008, no
existen diferencias significativas entre la realización o no de un estudio urodinámico en la calidad
del diagnóstico y tratamiento de la IU no complicada.
Desde la Atención Primaria es fundamental que conozcamos los efectos que la IU genera sobre
la calidad de vida, ya que en muchas ocasiones conduce al aislamiento, a la pérdida de autoestima y
a la ansiedad, por lo que no podemos evaluar simplemente la presencia o no de IU; es importante
que utilicemos instrumentos que nos midan la repercusión que tiene la IU en las personas. La
calidad de vida es el primer indicador de satisfacción terapéutica.
En un estudio realizado en España, se constata que las causas que más afectan a los pacientes
con IU y vejiga hiperactiva (VH), en comparación con la población general son: Las ITU,
infecciones de piel, trastornos del sueño, depresión, disfunción sexual.
En los pacientes con IU, la alteración en la calidad de vida es de las más elevadas, equivale a la
que se produce en los pacientes afectos de artrosis de cadera, artrosis de rodilla, depresión y dolor
de espalda.
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6. TRATAMIENTO (3, 7, 10, 11, 12)
Generalidades En Geriatría, a menudo el objetivo del tratamiento no es la cura del problema, sino que, la
mayoría de las veces es intentar mejorar los síntomas, prevenir las complicaciones y mejorar la
calidad de vida del paciente.
Para ello, el plan de tratamiento debe ser individualizado en su contexto social y familiar y
consensuado con el equipo interdisciplinar de atención geriátrica y con el paciente y su entorno,
estableciendo objetivos realistas y compartidos. Deberemos tener en cuenta la mayor vulnerabilidad
de los ancianos a la cirugía y a los secundarismos de la terapia farmacológica, debiendo buscar en
todos los casos el equilibrio entre el confort del paciente y los riesgos asumidos. Así, a menudo será
suficiente con disminuir los síntomas, mediante pequeñas intervenciones terapéuticas o en el
entorno para conseguir un tratamiento satisfactorio. Se estima que en más del 70-80 % de los
pacientes ambulatorios puede solucionarse en gran medida la IU, con un enfoque diagnostico-
terapéutico adecuado.
Antes que nada hay que intentar identificar y tratar, si es el caso, las posibles causas de
incontinencia reversible.
El tratamiento de la incontinencia urinaria debe englobar el propio tratamiento del trastorno y el
tratamiento de las áreas que éste pueda afectar (dependencia funcional, áreas emocional, social y
económica, etc.).
Como primer paso del tratamiento, deben instruirse una serie de medidas generales:
- Medidas higiénicas: mantener el cuidado de la piel de la zona y la frecuencia de los cambios
de absorbentes.
- Medidas dietéticas: marcar horarios de ingestión de bebidas para mantener la hidratación
correcta y la diuresis sin interferir en lo posible las horas de sueño o de actividad física. Limitar el
consumo de alcohol y cafeína.
- Revisión de los fármacos que el paciente tiene prescritos.
- Disminuir las barreras arquitectónicas que puedan entorpecer el acceso fácil del paciente al
baño, facilitar ayudas a la deambulación (andadores, bastones, etc.) y controlar los motivos sociales
que puedan retrasar el trayecto al baño (timidez, interrupciones, actividades excesivamente
prolongadas sin interrupción, etc.).
Añadido a las medidas generales, se puede establecer un tratamiento no-farmacológico de la
incontinencia urinaria, mediante terapias conductuales:
El primer tipo de estrategias precisan de un estado cognitivo adecuado en los pacientes y
comprenden los ejercicios de suelo pélvico, tratar de parar el chorro miccional y el reentrenamiento
de la vejiga.
Asimismo, los cuidadores pueden ser útiles en los pacientes con cierto deterioro cognitivo,
interrogando periódicamente sobre la necesidad de acudir al baño o acompañando proactivamente al
baño a los pacientes cada cierto intervalo.
El tratamiento específico de la incontinencia urinaria se basa en la suma de las medidas generales
con las conductuales y farmacológicas. Algunos fármacos pueden ser muy efectivos en algunos
tipos de incontinencia, pero los efectos indeseables pueden ser frecuentes o importantes.
Añadido al tratamiento conductual, farmacológico y a las medidas generales; el uso de
absorbentes, colectores, y otros dispositivos mecánicos será útil para disminuir las molestias y las
consecuencias derivadas de este síndrome y será considerado un tratamiento paliativo.
En algunas ocasiones estará indicado el tratamiento quirúrgico de la incontinencia urinaria, en
especial en los tipos de incontinencia por estrés y por rebosamiento.
12
Tratamiento de la incontinencia urinaria desde la enfermería de A Primaria
El tratamiento de la incontinencia urinaria del anciano está basado en diferentes aspectos, los
cuales no son excluyentes entre sí, sino al contrario, deben ser usados de forma complementaria
para lograrlos mejores resultados. Las diferentes opciones contemplan varios niveles de
intervención, y abarcan desde aspectos generales hasta aspectos muy sofisticados (estimulación
eléctrica, neuromodulación, esfínter artificial). Actualmente, las medidas conservadoras, entre las
que se encuentran las técnicas de rehabilitación, deben ser consideradas como de primera línea.
Es fundamental plantear los objetivos terapéuticos de una forma muy realista, tanto al paciente
como a nuestro equipo de trabajo, ya que en determinadas condiciones(demencia avanzada,
inmovilidad, enfermedades neurológicas en fases avanzadas, mala situación clínica), habría que
perseguir más la disminución de la intensidad de los síntomas y no tanto la recuperación de la
continencia, por lo que es imprescindible la individualización del esquema terapéutico, adaptándolo
a las características de cada paciente.
Medidas generales – primer escalón
* Medidas higiénicodietéticas, deben instaurarse en todos los pacientes e incluyen una serie de
recomendaciones (reducir consumo sustancias excitantes, modificar el patrón de ingesta líquida,
corrección del estreñimiento, mantener el máximo grado de movilidad y motivación, ropa con
sistemas de apertura y cierre sencillos, etc.).
* Reducción o cambio de fármacos que interfieran con la micción (diuréticos, psicofármacos,
bloqueadores alfa).
* Modificación del hábitat (evitar barreras arquitectónicas, mejorar iluminación, facilitar y
adaptar el acceso al water, o la utilización del orinal o cuña sanitaria, etc.).
Técnicas de modificación de conducta – segundo escalón
Consideradas muy eficaces en el manejo de la incontinencia, persiguen el restablecimiento de un
patrón normal de vaciamiento vesical. Se diferencian dos grupos de técnicas, bien efectuadas por el
propio paciente (reentrenamiento vesical, ejercicios del suelo pélvico, biofeedback) o por el
cuidador (entrenamiento hábito miccional, micciones programadas). Dependiendo del tipo de
incontinencia y de las características de cada paciente se empleará una u otra.
- Entrenamiento vesical: Consiste en incorporar progresivamente incrementos de tiempo a
intervalos entre micciones, para que el paciente aprenda a resistir la urgencia de orinar y de este
modo retrasar la micción hasta una hora determinada.
Nic 0570. Su aplicación se basa en programar las micciones según la información que nos aporta
el paciente y datos del diario miccional. El objetivo del entrenamiento vesical es reducir las
micciones de pequeño volumen y conseguir una función vesical normal. El paciente debe orinar
antes de que aparezca el deseo miccional. En principio se establecen intervalos muy cercanos y
luego se ajusta el aporte de líquido, poco a poco van espaciándose las micciones (20 minutos a la
semana) hasta que los tiempos transcurridos entre ellas de asemejen a un ciclo normal (cada 3 h).
Esta técnica en muy útil en pacientes ancianos y con IU de urgencia y IU mixta. Esta terapia
conductual permite una disminución de la frecuencia de los escapes y en la severidad de la IU en
alrededor de la mitad de los pacientes, y, en menor medida, puede incluso recuperarse la
continencia. En pacientes no capacitados transitoriamente, debe ser el cuidador el que efectúe el
control, e incite/acompañe a ir al baño (en la primeras fases del entrenamiento).
13
- Ejercicios para fortalecer la musculatura pelviana. Consiste en contraer los músculos
perivaginales y el esfínter anal como si controlaran la micción y la defecación.
Nic 0560. Rehabilitación del suelo pélvico: a) Ejercicios de Kegel (identificar los músculos a
contraer durante el ejercicio, realizar unas 50 contracciones diarias, duración 10 segundos;
relajación de 10 segundos tras cada contracción, coordinar inspiración-relajación y espiración-
contracción, valoración a los 2 meses. Están indicados en mujeres con grado leve o moderado de
IU de esfuerzo, en mayores de 60 años con IU mixta o de urgencia, y en varones post
prostatectomia.. b) Otra opción para fortalecer el suelo pélvico en mujeres es utilizar cono
vaginales; son 5 conos de pesos entre 20 y 100 gramos que introducidos en la vagina, obligan a su
contracción para que no se salgan, El simple hecho de retenerlo refuerza los músculos del suelo
pélvico se van utilizando cada vez conos de mayor peso, y se usan manteniéndolo en la vagina
como un pequeño tampón durante dos sesiones de 15 minutos al día, de pie o caminando, su efecto
se consigue por feedback. En mujeres con un tono perineal muy bajo, en las que no se obtiene
beneficio de los ejercicios anteriores, deben derivarse a Atención Especializada para valorar si son
edecuadas técnicas de electroestimulacion muscular.
Nic 0600. Terapia beofeedback ; se utilizan instrumentos electrónicos o mecánicos para revelar a
los pacientes información neuromuscular evidenciada mediante sonidos o gráficos visuales, con ello
se consigue que los pacientes tomen conciencia y practica de la contracción muscular pélvica, y se
suele utilizar como complementos a los ejercicios de entrenamiento de suelo pélvico
Pacientes con capacidad de movilidad y cognitiva deterioradas.
- Entrenamiento de los hábitos. (Anticipación de la micción- “prompted voiding”- Vaciamiento
motivado). El paciente orina según un horario previamente establecido. El horario se establece
según sus hábitos urinarios y la finalidad es que permanezca seco; el objetivo de esta técnica es
estimular al paciente para ser continente a través de valoraciones periódicas, utilizando sistemas de
refuerzo positivo, para lograr la micción antes de que pueda sufrir el escape. Mientras que el
entrenamiento vesical intenta que el paciente retrase o resista la micción, en el entrenamiento de los
hábitos el personal cuidador es el que deberá tomar la iniciativa para hacer orinar al paciente y
motivarlo para que solicite ayuda, para anticiparse al escape. Esta técnica se ha demostrado
altamente útil en la IU de urgencia y funcional.
- Micciones programadas: En esta técnica el esquema de vaciamiento vesical es fijo, intentando
conseguir las micciones mediante refuerzos positivos. Habitualmente se ofrece una frecuencia
miccional cada 2 horas; se usa con frecuencia en pacientes institucionalizados y severamente
incapacitados.
Tratamiento farmacológico - 3er escalón
A nivel conceptual, podemos diferenciar dos grupos de fármacos útiles en el tratamiento de la
incontinencia:
Fármacos que disminuyen la actividad del detrusor (anticolinérgicos)
Fármacos que aumentan la resistencia uretral (alfa-estimulantes)
Así pues, la utilización de fármacos para tratar la IU dependerá de tipo de incontinencia.
En mujeres con IU de estrés de grado moderado-severo el único fármaco aceptado por la
Agencia Europea de Medicamentos es la duloxetina; se trata de un fármaco inhibidor de la
recaptación de serotonina y noradrenalina, lo que provoca que haya un aumento de los niveles de
estas en la médula espinal sacra, mejorando la actividad del nervio pudendo, que a su vez conduce a
14
una mayor contracción de los esfínteres uretrales durante la fase de llenado de la vejiga. La
duloxetina se puede utilizar en hombres y mujeres. Las dosis terapéuticas (60-80 mg/día) necesarias
para tratar la IUE, no están disponible todavía en España; sus indicaciones en nuestro país es el
tratamiento de la depresión, el dolor neuropático generalizado, y la ansiedad generalizada.
Los estrógenos por vía oral no aportan ningún beneficio en el tratamiento de la IU, incluso existe
controversia sobre su indicación. La utilización de óvulos o cremas vaginales de estrógenos tópicos
puede mejorar la sintomatología asociada, sobre todo las infecciones.
En pacientes de ambos sexos afectos de IU de urgencia el único tratamiento farmacológico que
aporta beneficios son los anticolinérgicos. La acetilcolina es el neurotransmisor periférico
dominante y responsable de la contracción vesical. Los anticolinérgicos son los fármacos más
empleados, y con su utilización se puede esperar que se produzca una mejora significativa de los
síntomas en el 50% de los pacientes y que elimine la IU en el 20-30% de los casos. Existen diversos
fármacos anticolinérgicos ( Oxibutinina, Tolterodina, Solifenacina, Cloruro de trospio y
Fesoterodina). Cabe destacar los siguientes efectos secundarios (sequedad de boca, visión borrosa,
esteñimiento, retención de orina), la sequedad de mucosas es el que más influye en el abandono del
tratamiento. La oxibotunina es el anticolinérgico más potetente (acción mixta anticolinérgica y
relajante muscular), aunque debido a la presencia de más efectos secundarios y que atraviesa la
barrera hemotoencefálica, puede generar deterioro cognitivo en pacientes mayores de 65 años.
También la tolterodina ha demostrado buena efectividad (antimuscarínico selectivo de los
receptores vesicales), teniendo mejor perfil de seguridad y tolerancia. Se debe evitar el uso de
cualquiera de los fármacos citados en pacientes que presenten retención urinaria, glaucoma,
miastenia gravis, retención gástrica y diarrea severa.
Los siguientes fármacos tiene menos efectividad, podemos nombrar, la imipramina
(antidepresivo tricíclico con acción agonista alfa-adrenérgico y anticolinérgico), el cloruro de
trospio (anticolinérgico), el flavoxato (telajante muscular), y la doxepina (antidepresivo mixto, con
acción anticolinérgica).
Medidas paliativas - 4to escalón.
En pacientes con deterioro funcional grave (físico o cognitivo), se pueden utilizar de forma
adicional, o exclusiva, una serie de medidas dirigidas a ofrecer confort al anciano, sin perseguir la
recuperación de la continencia. Las medidas más comunes son los absorbentes, los colectores (en
hombres sin obstrucción al tracto de salida), las pinzas peneanas (en hombres con incontinencia de
estrés), y las sondas vesicales. Los absorbentes son el producto más utilizado, por ello se amplía en
el siguiente capítulo.
- Colectores externos de orina, comúnmente llamado “pitochin”; están elaborados con material
plastificado impermeable a la orina, pero a la vez poroso para asegurar la transpiración de la piel. Se
distinguen dos tipos de colectores: De 2 piezas, provistos de una tira adhesiva de Curagard, que
asegura una fijación hermética entre el colector y el pene, a la vez que protege la piel de irritaciones
cutáneas. De 1 pieza o colector autoadhesivo, sistema que requiere un minuciosa higiene, puesto
que su dispositivo de sujeción a la piel es a través de un material adhesivo; incluye un aplicador y
una lengüeta que permite su aplicación con guantes. Este tipo de dispositivo, está especialmente
recomendado durante el día, para varones con importantes pérdidas, como podría ser en
incontinencias ante mínimos esfuerzos o inestabilidad vesical (anexos).
- Pinzas peneanas. El oris es un dispositivo de plástico que como una pinza con forma
anatómica se coloca alrededor de la base del pene de manera que presiona la uretra ayudándose de
15
un velcro. Se retira cuando el paciente va a orinar y puede reutilizarse mientras el velcro este en
buen estado. La tolerancia del paciente es fundamental en este método. Debe procederse a liberar el
pene para la micción cada 4 horas o menos en ancianos, por lo que exige un compromiso de
vaciamiento programado por parte del usuario o cuidador del mismo. Es discreto pues no abulta
bajo la ropa ni requiere llevar bolsa. (anexos)
- Autosondaje. Consiste en la introducción de un catéter a través de la uretra para vaciar la orina
acumulada en la vejiga; es una maniobra simple y fácil que puede realizar el propio paciente.
- Sondaje vesical permanente, debe ser el último recurso para el tratamiento de la IU, y con
indicaciones muy específicas.
Evaluación y seguimiento de los tratamientos
1.- La periodicidad de la valoración dependerá del tratamiento empleado:
- Programa entrenamiento vesical: 4 semanas durante los 2 primeros meses; después control
anual.
- Ejercicios de fortalecimiento del suelo pélvico: cada 3 semanas durante las 3 primeros
meses; después control anual.
- Tratamientos farmacológicos: dependen del fármaco utilizado (estrógenos 3 meses,
anticolinérgicos 1 mes).
2.- En el seguimiento de los pacientes afectos de IU es muy importante la participación del
personal enfermero, siendo fundamentales los siguientes aspectos:
- Facilitar a los pacientes, cuidadores y familiares información y consejos sobre la IU.
- Informar sobre medidas higiénico-sanitarias sobre IU y estreñimiento.
- Educar sobre la ingesta adecuada de líquidos.
- Informar sobre sustancias y fármacos que puedan aumentar la diuresis.
- Fomentar el autocuidado, actividad física, y alimentación adecuados.
- Asesorar sobre la higiene y cuidados de la piel perineal.
- Participar en la elección y utilización más adecuada de los distintos tipos de absorbentes.
3.- Prevención de las complicaciones de la IU:
- Secundarias a la utilización de absorbentes:
- Dermatitis de pañal. Dermatitis asociadas a la incontinencia (DAI)
- Úlceras por humedad (LESCAH)
- Infección fúngica y bacteriana
- Secundarias a los colectores peneanos:
- Maceración
- UPP en glande
- Infección por hongos
- Secundarias al sondaje vesical:
- Infección urinaria
- Traumatismos mucosa, manipulación, o accidente del paciente
16
7. ABSORBENTES (3, 7, 10, 11, 12)
ABSORBENTES PARA INCONTINENCIA URINARIA
Los absorbentes de incontinencia son uno de los distintos dispositivos que pueden emplearse en
pacientes incontinentes. Suponen una indudable mejora en la calidad de vida de los pacientes
incontinentes, ayudando al desarrollo de una vida normal a quien tenga capacidad de deambulación
y facilitando los cuidados del paciente encamado. Constituyen el grupo de efectos y accesorios más
utilizados en Atención Primaria.
Así pues los podemos definir como productos sanitarios de un solo uso, que se ajustan al cuerpo
para absorber y retener la orina en su interior con el fin de mantener la piel seca y sin humedad;
están indicados en personas con incontinencia media, moderada o severa, que padecen pérdidas
urinarias cuando sean indicados por falta o posibilidad de otros tratamientos, pueden ser utilizados
como tratamiento único y como complementario a otras terapias conductuales o farmacológicas.
Composición
Capa superior: está en contacto con la piel. Está formada por tejido sin tejer (celulosa,
viscosa o rayón) que debe caracterizarse por permitir el paso rápido de la orina al interior, para
mantener la piel seca y confortable. Nos indica la tolerancia al producto (algunas marcas llevan
incluido en este tejido una crema protectora).
Capa media (núcleo absorbente): Compuesto por pulpa de celulosa, generalmente
combinado con material super absorbente, en el que queda atapada la orina, este material suele ser
de partículas de poliacrilato que convierten la orina en un gel compacto, favoreciendo la retención
de orina y evitando malos olores al neutralizar la formación de amoniaco; la capacidad mínima de
absorción será de 10 gramos de agua por gramo. Es deseable que la distribución en espesor de la
celulosa no sea uniforme, pero sí que la distribución del material súper absorbente con relación a la
celulosa sea homogénea. La mayor cantidad de material de celulosa deberá encontrarse en las
zonas donde se requiera una mayor absorción, es decir, en la parte central (entre las piernas) y zona
posterior del absorbente. Su distribución no debe producir encharcamiento ni roturas en la celulosa.
El núcleo de absorción de algunos pañales lleva incorporado un núcleo de absorción rápida, que
favorece la retención de las pérdidas urinarias de volumen importante.
Capa externa (impermeable): Es la capa externa y tiene como finalidad evitar la salida de
humedad al exterior, asegurando la impermeabilidad e impidiendo que se deslice. Está constituida
por materiales plásticos (polietileno) que deben ser discretos (no ruidosos); es responsable de
asegurar la impermeabilidad y evitar deslizamientos.
Algunos fabricantes incorporan en los bordes en contacto con la piel material no plástico, lo que
favorece la tolerancia del producto.
Debe llevar incluido un indicador de humedad (unas bandas que cambian de color en contacto
con la humedad), para su control exterior que indica cuando el pañal alcanza el nivel máximo de
saturación. Es importante que el indicador de humedad sea suficientemente visible, tanto para el
usuario como para el cuidador, ya que de este elemento dependerá en gran medida el excelente uso
de los absorbentes, al indicar el momento adecuado de cambio.
17
Requisitos legales
Todos los absorbentes deben contar con el código nacional identificativo del producto
correspondiente que figure en el nomenclátor oficial de medicamentos, efectos y accesorios del
Sistema Nacional de Salud Español y con el marcado CE, según establece el Real decreto 414/1996,
por el que se regulan los productos sanitarios. Ver RDL 16/2012
Métodos de evaluación de las características de producto de los absorbentes de incontinencia
Ensayos de control de calidad del producto: • Dimensionales: las dimensiones no afectan a la funcionalidad si la distribución del núcleo es
la correcta, por lo que no deberían incluirse limitaciones en ellas.
• Ensayos de masa total y del núcleo absorbente: la distribución del material absorbente en el
núcleo debe ser la correcta, por lo que no deberían incluirse limitaciones de pesos totales y del
núcleo
• Sistemas de fijación del núcleo absorbente: se trata de comprobar que la celulosa, una vez
mojada, no se desplace dentro del absorbente y conserve su integridad. Se debería valorar
mediante el test de uso.
• Distribución del superabsorbente dentro del núcleo: su distribución en el núcleo absorbente,
así como su proporción dentro de este, proporcionan avances en la absorción y retención de fluidos.
Para valorar de forma objetiva esta distribución, habría que determinar un ensayo de absorción y
retención por zonas del producto.
Ensayos de prestaciones del producto: • Test de uso (adaptación de la norma ISO/CD 16021:1998): sistema discriminatorio y fiable
de evaluación de las prestaciones del producto en uso.
• Ensayo de capacidad de absorción: se determinará mediante la norma ISO/CD 11948-1. Este
ensayo es el único validado para determinar la capacidad de absorción total del producto, pero no
reproduce las condiciones reales de absorción del producto en uso, así que se combina con el test
de uso.
• Velocidad de absorción: proporciona una idea de la rapidez con la que el núcleo es capaz de
absorber la orina. Existe un método para determinar conjuntamente la velocidad de absorción y el
retorno de la humedad.
• Retorno de la humedad: proporciona una idea del grado de sequedad del absorbente en
contacto con la piel.
CLASIFICACION DE LOS ABSORBENTES DE INCONTINENCIA
Como consecuencia de la diversidad de nombres comerciales que no permiten identificar
claramente al profesional sanitario el tipo de pañal que se desea utilizar, es conveniente conocer que
las diferencias entre los distintos absorbentes se establecen en función de su capacidad de
absorción, tipo o forma y talla.
Por su capacidad de absorción:
ABSORBENTES
DE GOTEO
ABSOSRBENTES
DIA
ABSORBENTES
NOCHE
ABSORBENTE
SUPERNOCHE
< 300 ml 600 – 900 ml 900 – 1200 ml > 1200 ml
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Por su tipo y forma:
ABSORBENTES
DE GOTEO RECTANGULAR ANATÓMICO
ANATÓMICO
ELÁSTICO
Compresas
femeninas y
absorbentes
masculinos
Compresas
rectangulares
Compresas
anatómicas con
escotaduras
adaptadas zona
inguinal
Braga-pañal
Por su sistema de sujeción:
ABSORBENTES
DE GOTEO RECTANGULAR ANATÓMICO
ANATÓMICO
ELÁSTICO
Mediante adhesivos Mediante mallas
elásticas
Mediante mallas
elásticas
Mediante tiras
adhesivas
(autoportantes) o
cinturón de velcro
Los absorbentes rectangular y anatómico se sujetan mediante malla slip elástica que permite una
mejor adaptación al cuerpo del paciente.
Los absorbentes elásticos autoportantes (sujeción y empapador están incluidas en la misma
pieza),se sujetan mediante etiquetas autoadhesivas reposicionables o no, que permiten efectuar
comprobaciones con facilidad y colocar de nuevo el absorbente si este se mantiene en condiciones
excelentes; o bien, mediante un cinturón autoadhesivo y sistema de ajuste con velcro que permite
pegar y despegar el absorbente las veces que sea necesario sin perder la sujeción. Este sistema
permite efectuar comprobaciones y curas con facilidad, conservando el absorbente las condiciones
excelentes y permitiendo una gran facilidad en el cambio de absorbente
Por su talla:
PEQUEÑA MEDIANA GRANDE SUPERGRANDE
Cintura: 50-80 cm
Cadera: 60-90 cm Cintura: 80-125 cm
Cadera: 90-135 cm Cintura: 100-140 cm
Cadera: 110-150 cm Cintura: 110-170 cm
Cadera: 120-180 cm
19
Resumen clasificación de los absorbentes
CAPACIDAD
DE
ABSORCIÓN
TIPO DE SUJECIÓN TALLA
DIA 600- 900 ml
RECTANGULAR
Única
ANATÓMICO
Única
ANATÓMICO CON ELASTICOS
Extrapequeña (40-60cm)
Pequeña (50-80 cm)
Mediana (70-125 cm)
Grande (100-150 cm)
NOCHE 900-1200 ml
RECTANGULAR
Única
ANATÓMICO
Única
ANATÓMICO CON ELÁSTICOS
Pequeña (50-80 cm)
Mediana (80-125 cm)
Grande (110-140 cm)
SUPERNOCHE > 1200 ml
RECTANGULAR
Única
ANATÓMICO
Única
ANATÓMICO CON ELÁSTICOS
Pequeña (50-80 cm)
Mediana (80-125 cm)
Grande (110-140 cm)
Supergrande (110-170cm)
20
CRITERIOS DE SELECCIÓN DE UN ABSORBENTE
1. Adaptabilidad al cuerpo del paciente para facilitar movimientos, evitar rozaduras y derrames
de orina, y ajuste de acuerdo a la complexión física del paciente.
Para conseguir la adaptabilidad y ajuste adecuado hay que fijarse en la forma y sistema de
sujeción del absorbente: rectangular, anatómico o anatómico elástico y si es un elástico en la
talla del mismo: pequeña, mediana o grande. El anatómico se adapta mejor gracias a la escotadura
inguinal y, junto con el rectangular se ajustan mediante mallas. Por su parte, el anatómico elástico
se adapta correctamente gracias a los elásticos de la entrepierna y en la zona central posterior
(algunos también en la anterior) y se ajusta mediante las tiras autoadhesivas (braga pañal). Tanto
anatómico como anatómico elástico llevan a lo largo del pañal varias barreras laterales para evitar
fugas de orina y heces por la entrepierna. En los tipos rectangular y anatómico es muy importante
hacer uso de las mallas para garantizar este ajuste y evitar escapes de orina. Por su parte, en el tipo
anatómico elástico es fundamental utilizar la talla adecuada para evitar también dichos escapes de
orina. De hecho, es motivo frecuente el solicitar por parte del paciente y/o familia un absorbente de
tipo supernoche pensando erróneamente que el problema es de insuficiente absorción del pañal
cuando lo que está ocurriendo en estos casos es un mal ajuste del mismo por utilizar una talla
excesiva.
La indicación de los AIU rectangular, anatómico o anatómico elástico estará en función de:
- el grado de movilidad, y
- el estado cognitivo y nivel de colaboración del paciente.
En función de estos datos se seleccionará el absorbente que garantice mejor la sujeción y
adaptación del mismo, manteniendo a la vez la discreción (cuando por circunstancias del paciente
esto sea prioritario) y evitando derrames.
Consideraciones:
Los pacientes incontinentes deberán utilizar el absorbente adecuado tanto para el día como
para la noche. Podemos disponer de un patrón basándonos en un paciente tipo que presenta
incontinencia, tiene un deterioro de movilidad física grado 3 de la NANDA y dispone de un
cuidador capacitado y colaborador que precisaría 1 pañal supernoche y 3 noche (o 2 noche y 1
día). Partiendo de este estándar, sería preciso tener en cuenta el grado de movilidad, la necesidad
de usar pañales todo el día o sólo durante la noche y la presencia de un cuidador capacitado y
colaborador entre otras circunstancias. El grado de movilidad facilita el uso de técnicas de
vaciamiento programado y contribuye a un menor uso de pañales, al menos durante el día. Por otro
lado, para la práctica de esta técnica resulta más cómodo el uso de pañales anatómicos. No es
infrecuente en estos pacientes que los escapes durante el día sean pequeños con lo que el uso de
pañales rectangulares o compresas puede ser suficiente. En los varones, incluso puede plantearse el
uso de colectores u Oris al menos durante el día. Para personas ambulantes con incontinencia
moderada o leve, el producto más indicado es un absorbente rectangular que garantice la
absorción y contención de líquidos. Existen algunos con una capacidad de hasta 830 ml. Estos se
sujetan mediante una malla slip elástica lavable que permite una adaptación idónea al cuerpo del
sujeto, proporcionando una buena transpiración y libertad de movimientos. Para pacientes
ambulantes con incontinencia severa se precisa un absorbente que garantice mayor contenido de
orina, en ocasiones de hasta 1.400 ml., manteniendo las características de adaptación, vestibilidad
y discreción
21
ELECCIÓN SEGÚN FORMA Y SISTEMA DE SUJECIÓN
RECTANGULAR
Pacientes que deambulen
ANATÓMICO
Pacientes deambulantes (mayor comodidad y discreción)
Pacientes buen estado cognitivo (mayor aceptación por
paciente)
ANATÓMICO
ELÁSTICO
Pacientes encamados o movilidad reducida (cama-sillón)
Durante descanso nocturno
Pacientes con Nicturia y/o incontinencia fecal asociada
2. Absorción según el grado de incontinencia urinaria para conseguir mantener la piel seca y
evitar que la orina se desborde. Para ello, seleccionar adecuadamente el AIU según su capacidad
de absorción: DÍA, NOCHE o SUPERNOCHE. Así, indicaremos los AIU en función de:
- La cantidad de diuresis, y
- El momento del día en que se usen.
Consideraciones:
Generalmente, los pacientes (y muchos profesionales arrastrados por ellos) justifican la petición
reiterada de absorbentes de tipo supernoche para uso diurno por pérdidas abundantes.
Con respecto a éstas, recordar que: la diuresis normal es de 1,5-2 litros/día. La formación de
orina sigue un ritmo tal que es menor por la noche, excepto en aquéllas situaciones de poliuria
(hasta 3,5 litros/día) en las que se pierde el ritmo normal de secreción y pasa a ser mayor por la
noche (nicturia) y en los pacientes con edemas en los que el decúbito nocturno moviliza los líquidos
de los edemas. Las causas más frecuentes de poliuria (2-3 litros/día) son la diabetes mellitus con
deficiente control metabólico (diuresis osmótica), el uso de diuréticos y la diuresis psicógena o
yatrogénica. Sólo la diabetes insípida puede conllevar volúmenes de orina superiores a 3,5 litros de
orina/día. Según la capacidad de absorción de los AIU NOCHE (900-1.200 cc) y SUPERNOCHE
(más de 1.200 cc) será suficiente con las 3 unidades que del tipo NOCHE (se recomienda utilizar
durante el día en estas situaciones de poliuria) y 1 unidad del tipo SUPERNOCHE durante el
período nocturno.
Cuantificación de las pérdidas
Varela propone medir la intensidad de la incontinencia usando como referencia, el número de veces por
día que el paciente precisará cambiarse de ropa interior o compresa para mantenerse seco y poder hacer su
vida normal. Así, se puede clasificar en leve (no más de tres veces por día), moderada (de tres a seis veces
por día), y severa (más de seis veces por día).
También cabe clasificarla según la forma de presentación de la incontinencia en: incontinencia
manifiesta en decúbito supino, mínima incontinencia en decúbito supino, incontinencia ante mínimos
esfuerzos, e incontinencia ante grandes esfuerzos.
22
Sandvik et al., 1993; Hanley, Capewell, & Hagen, 2001 proponen dos pequeños test cuyas puntuaciones
se multiplican para obtener un índice de severidad:
Preguntar
¿Cuántas veces experimenta escapes de orina? 0 = nunca
1 = menos de una vez al mes
2 = una o varias veces al mes
3 = una o varias veces a la semana
4 = diario y/o noche
¿Cuánta orina pierde cada vez? 1 = gotas o poco más
2 = más
La severidad es descrita por el resultado del producto de la puntuación obtenida en la primera pregunta
multiplicada por puntuación obtenida en la segunda pregunta, de modo que:
0 = no incontinente
1-2 = incontinencia leve
3-4 = incontinencia moderada
6-8 = incontinencia severa
Contemplar simultáneamente la presencia de cuidador capacitado y colaborador que puede
paliar en buena medida la falta de movilidad del paciente acompañándolo al retrete o realizando
más o menos cambios de absorbente, por ejemplo, un cuidador con graves dificultades para realizar
4 cambios de pañal al paciente puede agradecer la prescripción de pañales más absorbentes (más
tiempo entre cambios) aunque precisará de menor número
ELECCIÓN SEGÚN CAPACIDAD DE ABSORCIÓN
DIA
Pérdidas leves y moderadas durante el periodo diurno
NOCHE Pérdidas abundantes durante el periodo diurno
Pérdidas leves y moderadas durante el periodo nocturno
SUPER-
NOCHE
Pérdidas abundantes durante periodo nocturno
Pacientes con Nicturia y/o incontinencia fecal asociada
3. Eficacia y tolerancia en recibir y contener la orina evitando escapes de orina así como en
mantener la piel seca evitando irritaciones, úlceras o infecciones por hongos. Prácticamente todos
los absorbentes comercializados tiene sistemas que permiten el paso rápido de orina de la capa
interna en contacto con la piel a la capa intermedia o absorbente permitiendo que el paciente se
sienta seco y evitando lesiones de la piel.
Producto óptimo para el paciente individual. El objetivo es mantener al paciente seco el
mayor tiempo posible, con la mayor comodidad para él y su cuidador y con un coste razonable en
términos económicos y de esfuerzos. Debemos contemplar el absorbente como una parte del arsenal
en el tratamiento de la incontinencia.
23
Integridad superficial. La integridad de la piel debe preservarse en todo momento, ya se ha
comentado como la aparición de ulceras de presión grado III-IV en zona perineal debe hacernos
valorar la pertinencia de usar técnicas conductivas. En todo caso, es preciso extremar las medidas
para que el paciente permanezca seco en estos casos por lo que un eventual mayor consumo de
absorbentes puede ser necesario si no se realiza sondaje. Debe contemplarse la posibilidad de
problemas alérgicos que generen deterioro de la integridad cutánea.
4. Discreción de manera que sean poco voluminosos y poco ruidosos sin perder la capacidad de
absorción. Esto lo consiguen con el material super-absorbente contenido en la capa intermedia y
con la incorporación de materiales plásticos poco ruidosos en la capa externa. Este punto es
especialmente relevante en pacientes deambulantes o con movilidad reducida y buen estado
cognitivo (en general colaboradores). En cualquier caso, garantiza mayor discreción un
ANATÓMICO que un ANATÓMICO ELÁSTICO.
Preferencia del paciente. Debemos contemplar en la medida de lo posible las preferencias del
paciente ofertándole toda la gama de técnicas y dispositivos disponibles para su incontinencia.
Cuando de la selección del absorbente se trata, debe contemplarse la talla que le resulta más
cómoda y el tipo de pañal: rectangular, anatómico o elástico. Otros factores como la sudación o la
comodidad de manejo según sus habilidades personales o las del cuidador deben tenerse en cuenta.
5. Comorbilidad
Algunas situaciones pueden requerir de un aumento de la capacidad de absorción o del número
de pañales:
- Demencia senil avanzada
- Tetraplejia o paraplejia
- Espina bífida
- Parálisis cerebral
- Síndrome de Down
- Niños con retraso psicomotor
- Procesos diarreicos (mientras se mantengan)
- Heridas muy supuradas
- Diuréticos
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TABLA RESUMEN SELECCIÓN ADECUADA DEL AIU
En negrita las opciones que se consideran preferentes
PACIENTES DEAMBULANTES
DE DIA DE NOCHE
PERDIDAS GOTEO
(no financiados) ** Absorbentes
Compresas femeninas
Absorbentes
Compresas femeninas
PERDIDAS LEVES Rectangular día
Anatómico día Anatómico día / noche
PERDIDAS
MODERADAS Anatómico día / noche
A. Elástico día / noche
A. Elástico noche / supernoche
Anatómico noche / supernoche
PERDIDAS
ABUNDANTES Anatómico día / noche
A. Elástico día / noche
A. Elástico noche / supernoche
Anatómico noche / supernoche
CON MOVILIDAD REDUCIDA
DE DIA DE NOCHE
PERDIDAS LEVES Anatómico día*
A. Elástico día / noche
Anatómico noche*
A. Elástico día / noche
PERDIDAS
MODERADAS Anatómico(día/noche)*
A. Elástico día / noche
Anatómico (noche / supernoche)*
A. Elástico noche / supernoche
PERDIDAS
ABUNDANTES Anatómico (día/noche)*
A. Elástico día / noche A. Elástico noche / supernoche
PACIENTES ENCAMADOS
DE DIA DE NOCHE
PERDIDAS LEVES Anatómico día/noche)*
A. Elástico día/noche
Anatómico noche*
A. Elástico día / noche
PERDIDAS
MODERADAS Anatómico (día / noche)*
A. Elásticos día / noche
Anatómico (noche/supernoche)*
A. Elásticos noche / supernoche
PERDIDAS
ABUNDANTES Anatómico noche*
A. Elástico día/noche A. Elástico noche / supernoche
* Si el paciente colabora o el estado cognitivo es bueno
** Las pérdidas por goteo pueden darse en todos los tipos de movilidad, no obstante estos absorbentes y compresas
femeninas no están financiadas en ningún caso.
25
6. Errores más frecuentes:
- Utilizar absorbentes de talla excesiva, con el fin de lograr una mayor absorción, ya que no
existe relación entre ambas; la absorción es la misma en todas las tallas. Se indica la talla
inadecuada, mayoritariamente, pensando que el más grande es el más absorbente,
independientemente de la constitución del paciente (como por ejemplo, la utilización en numerosos
casos del supernoche durante el día), lo que da lugar a escapes de orina.
- Utilizar dos absorbentes superpuestos (generalmente uno de tipo rectangular dentro de un
anatómico), con la creencia de que esto proporciona una mejor protección y que se tendrán que
hacer menos cambios, desconociendo que el pañal que está en contacto con el paciente tiene un
sistema barrera que impide que la orina pase al segundo, lo que hace que esta medida resulte inútil.
- Utilizar absorbentes supernoche durante el día para evitar cambios.
- Utilizar absorbentes supernoche cuando hay incontinencia fecal y urinaria, en cuyo caso no es
necesaria una mayor absorción, sino aumentar la frecuencia de cambios.
- Utilizar absorbentes tipo supernoche cuando el paciente tiene movilidad. Deben quedar
reservados para una incontinencia grave y poca movilidad nocturna.
- Se da siempre el máximo permitido por el protocolo de atención primaria, lo que hace que haya
pacientes a los que les sobren absorbentes y otros a los que les faltan.
7. Educación sanitaria:
Para conseguir el mejor uso posible de los absorbentes, hay que elegirlos según se ha descrito, y
enseñar las siguientes pautas a los usuarios y cuidadores:
- Revisarlos con frecuencia.
-Vigilar cambios en color y olor de la orina, así como si hay disminución o aumento del volumen
habitual; si nota cambios debe consultar con su personal sanitario.
- Cambiar el absorbente cuando sea preciso, para ello están dotados de indicador de humedad en
la parte externa, que va cambiando a tono oscuro cuando están saturados.
- Comprobar en cada cambio el estado de la piel, vigilando que no haya enrojecimiento o
irritación; en cuyo caso debe informar al personal sanitario.
- Prevenir la formación de úlceras (presión o humedad) en el sacro, nalgas, genitales e ingles.
Para ello, después de la higiene, se debe hidratar la piel, mediante cremas protectoras y con un buen
aporte de líquidos para que la persona esté hidratada.
- Usar vestuario cómodo que sea fácil de abrir y manejar.
- Controlar la eliminación de heces, sobre todo si hay incontinencia fecal. Vigilar con mayor
frecuencia si aparecen deposiciones blandas o líquidas, utilizando pañales con menor absorción
pero realizando cambios más frecuentes.
- Evitar largos periodos de inmovilidad, realizando cambios posturales, levantándose del sillón.
- Adquirir los absorbentes en farmacias.
- Antes y después del cambio o comprobación del absorbente debemos lavarnos las manos.
- Colocar los absorbentes de forma correcta, evitando dobleces y desplazamientos. Para ello hay
que preparar el absorbentes buenas condiciones (desplegarlo completamente evitando sacudidas
que pueden causar deformidades, y levantar suavemente las barreras laterales para evitar fugas). La
forma de cambiar los absorbentes dependen de la postura de la persona y del sistema de sujeción, y
deben seguirse las instrucciones del fabricante, y las del personal sanitario.
26
8. INCONTINENCIA INFANTIL
9. INCONTINENCIA FECAL
10. CONSULTAS BIBLIOGRÁFICAS Referencias bibliográficas
1. Verdejo C, Incontinencia urinaria como un gran síndrome geriátrico. Curso de la sociedad
española de Geriatría y Gerontología, 2014.
2. Delgado Mª L; “La interrelación entre calidad de vida e incontinencia urinaria”. Curso de la
sociedad española de Geriatría y Gerontología, 2014.
3. Brenes F; Blázquez P; González M; “Papel de los diferentes profesionales en la atención de los
ancianos con incontinencia urinaria”. Curso de la sociedad española de Geriatría y Gerontología,
2014.
4. Fuentelsaz-Gallego C; Tesis . Universidad Rey Juan Carlos.
5. Arrue M. “Evaluación de la incontinencia de esfuerzo”Tesis. Universidad País Vasco. 2011
6. Marmol M et alt “Tratamiento y prevención desde atención primaria” Boletín
Farmacoterapeútica 03. Generalitat Valenciana. 2008.
7. Morilla JC; “Guía de atención a pacientes con incontinencia urinaria” ASANEC, 3ª edición.
Málaga. 2007.
8. Such T; “Incontinencia urinaria. Fisiología de la micción”. Guía de buena practica clínica en
incontinencia urinaria. Organización medica Colegial. 2007.
9. Documento técnico nº 10, “Incontinencia y úlceras por presión” GNEAUPP 2006
10.Blazquez P, García A, Solas B; “Papel de la enfermería en la atención al anciano con
incontinencia urinaria. Curso de la sociedad española de Geriatría y Gerontología, 2014.
11. “Guía de buen uso de absorbentes de incontinencia urinaria”. Consejería de Sanidad. Xunta de
Galicia. 2007
12. “Absorbentes de incontinencia urinaria” Boletín canario de uso racional del medicamento del
SCS. Vol 1 nº 3. Consejeria de Sanidad. Gobierno Canario . 2009
27
11. ANEXOS
a) DIARIO MICCIONAL
Nombre _______________________________________ Fecha __________
MICCON
POCO
MICCÓN
NORMAL
MICCIÓN
MUCHO
BEBIDA Y
CANTIDAD
CAMBIO
PROTECCION
ESCAPE
ACTIVIDAD
Horas
00- 02 02-04 04-06 06-08 08-10 10-12 12-14 14-16 16-18 18-20 20-22 22-24
El diario miccional es un registro de la actividad miccional de la paciente. En este diario la
paciente debe anotar todos los eventos miccionales durante un determinado periodo que suele ser
de 3 días. Es un estudio simple, de bajo costo y no invasivo, recomendable para estudiar pacientes
con incontinencia antes de otras pruebas más invasivas, como el estudio urodinámico.
Validación DM3D. validado en 77 congreso de la AEU junio de 2012
http://www.aeu.es/aeu_webs/aeu2012/resumenGR.aspx?Sesion=33&Numero=C-116
Entre las ventajas del Diario Miccional de 3 Días (DM3D) destacan:
La paciente registra los datos en su casa.
No es necesario el uso de aparatos especiales.
Supone una prueba de bajo coste.
Involucra a la paciente en el proceso diagnóstico.
Pone de manifiesto datos no revelados en consulta.
Permite medir la frecuencia y severidad de los síntomas.
Puede ser utilizado para monitorizar la respuesta al tratamiento
28
b) ICIQ-SF
Cuestionario de incontinencia urinaria ICIQ-SF 1. Escriba su fecha de nacimiento
……/……………………./……………
2. Señale, usted es:
Mujer ……. Varón ……….
3. ¿Con qué frecuencia pierde orina? (Marque sólo una respuesta)
A Nunca 0 PUNTOS
B Una vez a la semana 1
C 2-3 veces / semana 2
D Una vez al día 3
E Varias veces al día 4
F Continuamente 5
4. Indique su opinión acerca de la cantidad de orina que usted cree que se le escapa, es
decir, la cantidad de orina que pierde habitualmente (tanto si lleva protección como si no).
Marque sólo una respuesta.
A No se me escapa nada 0 PUNTOS
B Muy poca cantidad 2
C Una cantidad moderada 4
D Mucha cantidad 6
5. ¿En qué medida estos escapes de orina que tiene han afectado su vida diaria?
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
Nada Mucho
6. ¿Cuándo pierde orina? Señale todo lo que le pase a Ud.
A Nunca
B Antes de llegar al servicio
C Al toser o estornudar
D Mientras duerme
E Al realizar esfuerzos físicos / ejercicio
F Cuando termina de orinar y ya se ha vestido
G Sin motivo evidente
H De forma continua
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“Cuestionario internacional de consulta sobre incontinencia” (international consultation on
incontinence Questionnaire – ICIQ)
El ICQC es un cuestionario breve autoadministrado que identifica a las personas con
incontinencia de orina y cuantifica el impacto en su CdV. Es válido para hombres y mujeres de
cualquier edad, utilizándose habitualmente el formato corto (ICIQ-SF)
En su forma abreviada, el ICIQ-SF consta de 6 preguntas, las dos primeras sobre fecha
nacimiento y género, las tres siguientes relacionadas con la IU (frecuencia de las pérdidas, cantidad
de las pérdidas, efectación de su vida diaria por estas pérdidas), y la última pregunta referida a
cuándo es el momento que pierde orina (pudiendo señalar varias opciones de respuestas posibles, y
que nos encamina al diagnóstico del tipo de incontinencia). Se considera que existe incontinencia
urinaria cualquier valor superior a cero en la suma de las preguntas 3, 4, y 5.
Es el más usado internacionalmente, en España, desde 2004, está validado en castellano por la
ginecóloga Monserrat Espuña (Htal Clinic Barcelona). Med Clin (Barc). 2004;122(8):288-92.
c) GET UP & GO/ TIMED UP & GO El test “Get up and go” fue diseñado como una herramienta de cribado (screening) para detectar
problemas de equilibrio en la población, en la que el sujeto debía levantarse de una silla con
reposabrazos, caminar tres metros, girar sobre sí mismo, retroceder los tres metros y volver a
sentarse. Para obviar su subjetividad, Podsialo desarrolló el test “Timed Up and Go”, en el que el
sujeto realiza las mismas tareas que el “Get up and go”, mientras el examinador cronometra el
tiempo que precisa para realizar la prueba.
Los adultos sin enfermedad neurológica que son independientes en tareas de equilibrio y
movilidad habitualmente son capaces de realizar este test en menos de 10 segundos. Sin embargo,
los adultos que necesitan más de 15 segundos para completarlo tienen un riesgo elevado de sufrir
caídas. La mayoría realizan el test en 10 segundos, los frágiles entre 11 y 20 seg. Los pacientes con
un tiempo superior a 20 seg se les debe realizar una valoración más.
d) DESARROLLO Y APLICACIÓN
PATRON ELIMINACIÓN en abucasis
TEST: DIARIO MICCIONAL, ICIQ-SF, TIMED UP & GO
DX NANDA
RECOMENDACIONES Y ALTERNATIVAS DE TRATAMIENTO:
- 1er NIVEL
- 2do NIVEL
DERIVACIÓN
TRATAMIENTOS PALIATIVOS
SEGUIMIENTO Y VALORACIÓN (1/2 MESES)
e) INDICADORES Tasa valoración Patrón eliminación de Abucasis en mayores 65 años
Tasa test ICIQ
Dx NANDA en > 75 años con eliminación alterada
Tasa informes IU: pinzas, colectores, absorbentes
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f) DIAGNÓSTICOS E INTERVENCIONES DE ENFERMERIA: SELECCIÓN DE INTERVENCIONES
IU Refleja y IU Rebosamiento:
o Adiestrar en sondaje vesical intermitente
o Cuidados en sondaje vesical permanente
o Uso de colectores
o Uso de oris
o Absorbentes
IU Urgencia:
o Reentrenamiento vesical
o Entrenamiento del hábito
o Vaciamiento programado
o Doble vaciamiento
o Uso de colectores
o Control de medio ambiente
o Absorbentes
IU Funcional:
o Vaciamiento programado
o Doble vaciamiento
o Control de medio ambiente
o Uso de colectores
o Absorbentes
IU Esfuerzo:
o Información factores relacionados: Obesidad. Uso de faja. Debilidad del suelo
pélvico. Malos hábitos miccionales.
o Ofrecimiento de derivación a tratamiento grupal en ejercicios de suelo pélvico
o Instrucción en el uso de técnicas conductuales, educacionales y/o rehabilitación
o Absorbentes
31
g) INFORME DE VALORACION ENFERMERA PARA EL USO DE
DISPOSITIVOS Y/O ABSORBENTES DE INCONTINENCIA
PACIENTE_________________________________________________________________
SIP_____________________ HOMBRE MUJER
EDAD_________ PESO___________ CINTURA (cm) ________________
DIAGNÓSTICO NANDA CÓDIGO ___________ _____________
ESFUERZO URGENCIA REBOSAMIENTO
REFLEJA FUNCIONAL FECAL
ESTADO DEL PACIENTE: CAMA CAMA/SILLÓN DEAMBULA
TEST PFEIFFER PRESENCIA UPP
AUTONOMIA CUIDADOR/A: INFORMAL FORMAL
TABLA PARA INDICACIÓN DE ABSORBENTES (marcar X)
DENOMINACIÓN TIPO/MODELO TALLA
DIA
RECTANGULAR
UNICA
EXTRA PEQUEÑA
NOCHE
ANATÓMICO
PEQUEÑA
MEDIANA
SUPERNOCHE
ANAT. ELÁSTICO
GRANDE
EXTRA GRANDE
FECHA ___________________
PROFESIONAL ________________________________________________________________
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h) DIAGNÓSTICOS DE ENFERMERÍA, INTERVENCIONES Y
RESULTADOS RELACIONADOS CON LA NECESIDAD DE USO
DE ABSORBENTES
Nanda: incontinencia urinaria refleja Definición: pérdida involuntaria de orina a intervalos previsibles cuando se alcanza un volumen vesical específico.
Intervenciones de enfermería (NIC): 0610 Cuidados de la incontinencia urinaria
0620 Cuidados de la retención urinaria
0570 Entrenamiento de la vejiga urinaria
0590 Manejo de la eliminación urinaria
1790 Cuidados perineales
Resultados de enfermería (Noc): 0502 Continencia urinaria
1101 Integridad tisular: piel y membranas mucosas
2205 Rendimiento del cuidador familiar, cuidados
directos
0503 Eliminación urinaria
Nanda: incontinencia urinaria de urgencia Definición: emisión involuntaria de orina poco después de sentir una intensa sensación de urgencia de orinar.
Intervenciones de enfermería (Nic): 4120 Manejo de líquidos
0610 Cuidados de la incontinencia urinaria
0570 Entrenamiento de vejiga urinaria
2380 Manejo de medicación
6480 Manejo ambiental
0590 Manejo de la eliminación urinaria
1750 Cuidados perineales
Resultados de enfermería (Noc): 0502 Continencia urinaria
0503 Eliminación urinaria
0305 Autocuidados: uso del inodoro
1101 Integridad tisular: piel y membranas mucosas
0310 Autocuidados: uso inodoro
Nanda: incontinencia urinaria funcional Definición: incapacidad de una persona, normalmente continente, de poder llegar al inodoro a tiempo para evitar la pérdida
involuntaria de orina.
Intervenciones de enfermería (Nic): 0610 Cuidados de la incontinencia urinaria
6480 Manejo ambiental
0590 Manejo de la eliminación urinaria
0640 Evacuación inmediata
1750 Cuidados perineales
Resultados de enfermería (Noc): 0502 Continencia urinaria
0503 Eliminación urinaria
1101 Integridad tisular: piel y membranas mucosas
Nanda: incontinencia urinaria por rebosamiento Definición: pérdida de orina continua e imprevisible
Intervenciones de enfermería (Nic): 0610 Cuidados de la incontinencia urinaria
1750 Cuidados perineales
6480 Manejo ambiental
4120 Manejo de líquidos
0590 Manejo eliminación urinaria
Resultados de enfermería (Noc): 0502 Continencia urinaria
1101 Integridad tisular: piel y membranas y mucosas
0503 Eliminación urinaria
2205 Rendimiento del cuidador principal: cuidados
directos.
Nanda: trastorno de la imagen corporal Definición: confusión de la imagen mental del yo físico
Intervenciones de enfermería (Nic): 0610 Cuidados de la incontinencia urinaria
5220 Potenciación imagen corporal
5270 Apoyo emocional
5230 Aumentar el afrontamiento
Resultados de enfermería (Noc): 1320 Afrontamiento del problema
1308 Adaptación de la discapacidad física
1200 Imagen corporal
2000 Calidad de vida
Nanda: riesgo de infección Definición: aumento del riesgo de ser invadido por microorganismos patógenos.
Intervenciones de enfermería (Nic): 1750 Cuidados perianales
6480 Manejo ambiental
1100 Manejo alimentación
3590 Vigilancia de la piel
0610 Cuidados de la incontinencia urinaria
0410 Cuidados de la incontinencia fecal
Resultados de enfermería (Noc): 1004 Estado nutricional
1101 Integridad tisular: piel y membranas mucosas
1902 Control del riesgo
0204 Consecuencias de la inmovilidad fisiológicas
0305 Autocuidados: higiene.
33
MATERIALES
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4……………………….
pinzas oris
DISPOSITIVO EXTERNO OCLUSOR URETRAL CON DOBLE ZONA DE ACCIÓN.
Características: Oris es un sencillo dispositivo médico que se coloca alrededor del pene
evitando las pérdidas de orina, de una manera cómoda, discreta e higiénica. Está fabricado
en plástico semi-rígido de alta calidad, con protección interna de espuma.
Indicaciones
Oris está indicado en varones con incontinencia urinaria esfinteriana leve o moderada.
Utilización
Se adapta discretamente alrededor del pene gracias a su sistema velcro.
Seguridad
Por su especial diseño, con doble zona oclusora, únicamente incide sobre la uretra impidiendo la
pérdida involuntaria de orina. La facilidad en su utilización garantiza la COMODIDAD,
DISCRECION y LIBERTAD DE MOVIMIENTO del paciente. Debe abrirse el ORIS una vez
34
cada 4 horas y orinar.
Duración
Oris incluye dos dispositivos médicos, desechables, para los cuales está prevista una duración
promedio de 7 días, por lo tanto permite un tratamiento de dos semanas.
Probado Científ icamente
ORIS ha sido analizado científicamente según el R.D. 2216/85 sobre Valoración de sustancias
químicas.
Financiado por la Seguridad Social. No se necesita firma del inspector para su prescripción.
UNA NUEVA SOLUCION COMODA Y DISCRETA PARA CONTROLAR LA
INCONTINENCIA MASCULINA
Evaluación médica
La Unidad de Urodinámica del Hospital Universitario del Vall d´Hebrón de Barcelona ha
evaluado el dispositivo mediante un estudio con resultados satisfactorios.
Metodología:
- Muestra: 22 pacientes varones
- Edad media: 34 años (pacientes entre 21 y 66 años)
- Duración del estudio: 3 meses
- Objetivos: Valorar la eficacia, tolerancia, duración y facilidad de manejo.
Resultados:
- Tolerancia: Ningún paciente sintió problemas con ORIS. No se observaron irritaciones,
ulceraciones, escoriaciones, ni alergias.
- Eficacia: Tras un periodo de adiestramiento la eficacia fue del 100%
- Duración: Cada dispositivo tiene un periodo medio de utilización de una semana.
- Facilidad de manejo: Tras el periodo de adiestramiento y adaptación, los pacientes
confirmaron su facilidad en el manejo y uso.
Evaluación económica:
El uso de Oris supone un ahorro económico muy considerable en los pacientes incontinentes
frente a absorbentes y colectores.
DISPOSITIVO EXTERNO OCLUSOR URETRAL CON DOBLE ZONA DE ACCIÓN
Instrucciones de uso:
ORIS es muy fácil de utilizar. Una vez colocado permite una absoluta libertad de movimientos
con total discreción, comodidad y seguridad. Su duración es aproximadamente de 7 días; debe
luego ser desechado, lo que garantiza una máxima higiene.
1. Abrir ORIS.
2. Aplicar ORIS alrededor del pene con la espuma interior en contacto con la piel.
3. Colocar el brazo inferior de ORIS en la parte inferior del pene, de manera que los dos
oclusores estén en contacto con la uretra, en su línea media.
4. Colocar la parte superior a lo largo del pene cerrando así el dispositivo.
5. Cerrar con el velcro dando la vuelta en torno al pene y fijándolo. Procurar no atrapar la piel.
La presión debe hacer traducirse en comodidad, de tal manera que al cabo de un tiempo el
paciente ya no sienta el dispositivo.
6. Para orinar o retirar ORIS se debe aflojar siempre primero el velcro. Esta operación debe
realizarse cada 4 horas.
35
colectores
Protocolo de colocación y uso del Colector Urinario.
Sistema de recogida de la orina que evita fugas y olores y mejora la aceptación social del
paciente.
Material necesario para el cambio del colector:
- Colector con las medidas adecuadas a las características del paciente: Existe un medidor “ad
hoc”. Hay colectores fabricados en diferentes materiales por cuestiones de tolerancia o
alergias.
- Material de limpieza y rasurado, si procede.
- Bolsa de orina de pierna o de cama.
Procedimiento:
- Retirada del colector del día anterior.
- En este momento se procederá a realizar una correcta y extensiva limpieza del pene,
recordando que se debe retraer y limpiar el esmegma que suele tener.
- Seguidamente se realizará una inspección visual de posibles lesiones tanto en el propio pene
como en las zonas cercanas.
- Si es necesario, se hará un repaso del rasurado para mejorar su adherencia.
- Se procederá a la colocación del nuevo colector.
- Consideraciones:
o La piel debe estar bien seca y desengrasada.
o Debe quedar un espacio de al menos 2 cm. entre el glande y el final del colector.
o El área correspondiente al adhesivo es de 2-3 cm. por detrás del glande.
o Si el colector es demasiado largo, deberá recortarse el material sobrante a nivel de la
base del pene para que no quede anillado, ya que podría causar lesiones por presión
en el ángulo penoescrotal.
o Si se utiliza adhesivo de pasta o spray, deberán retirarse previamente los restos con
un disolvente adecuado.
Ampliar información en:
http://scielo.isciii.es/scielo.php?pid=S0004-06142009001000014&script=sci_arttext#f10
37
INFORMACIÓN ADICIONAL
Diarios miccionales El diario miccional (o las tablas de volumen frecuencia en su forma más simple) es un
instrumento diagnóstico que hoy se considera de uso indispensable en la evaluación de los
síntomas urinarios tanto en adultos como en niño, en los que se ha utilizado sin dificultad . Es un
instrumento de registro “objetivo” que permite obtener valiosa información clínica, imposible de
conseguir mediante la entrevista. Consiste en registrar durante todo el día (el propio adulto, los
cuidadores, padres o el niño, en función de la edad y capacidades) las micciones que tienen lugar
en las condiciones habituales de sus actividades diarias. Se registran las horas de micción y los
volúmenes miccionales (medidos orinando en una jarra graduada), también pueden registrarse
otros datos como la existencia de escapes de orina, urgencia miccional, situación de aguantar
hasta el límite por estar absorto por la televisión, ordenador, juego... observados por los padres en
el momento en que ocurren. En el caso de la enuresis nocturna en los niños, el registro del diario es
especialmente necesario ya que es el método de evaluación de varios Introducción Estimación de la
capacidad vesical de la población pediátrica parámetros que nos ayudarán a realizar un
diagnóstico de enuresis “monosintomática” con precisión y a valorar factores pronósticos como el
VMMD, que nos guiarán en nuestras decisiones: tipo de tratamiento a seguir o remitir a otros
especialistas7. Se recomienda su realización durante al menos 3 días no lectivos, generalmente en
dos fines de semana 7. Cuando se considera al niño capaz de realizarlo, se le presenta indicándole
que él va a ser el “detective de su vejiga” durante 3 días. Se le insiste en que sólo es válido si
representa la conducta normal y habitual de su vejiga y que no hay valores correctos o incorrectos.
Los padres deben supervisar y completar las anotaciones. Durante la visita siguiente se discute la
38
tabla con el niño y la familia para aclarar o anotar cualquier valor confuso u omitido. Si es preciso
se repite y no se debe instaurar un tratamiento a ningún niño sin un diario interpretable.
Efectos no deseados producidos por la humedad
El contacto de la piel con la humedad procedente de la orina, de las heces, del sudor o incluso
del exudado de las heridas genera modificaciones en la estructura y en las funciones que la
definen, alterando la barrera cutánea y provocando su rotura.
Entre las repercusiones que podemos enunciar están:
• La irritación química por la orina y por los jabones utilizados
• La irritación cutánea por la acción de las lipasas y proteasas fecales
• La maceración por exceso de humedad
• Las dermatitis por hidratación
• La formación de grietas por el aumento del coeficiente de fricción
• La denudación por el lavado y secado frecuente y por arrastre
• Las colonizaciones bacterianas y fúngica
LISTADO DE DESCRIPCIÓN GENERAL Y PRECIOS DE REFERENCIA
€ / 80 U €/ abs
ABSORBENTE INC ORINA DIA ANAT INICIA
ABSORBENTE INC ORINA DIA RECT ..................................................25.95 (0.32)
ABSORBENTE INC ORINA DIA ANAT.....................................................31.14 (0.39)
ABSORBENTE INC ORINA DIA ELAST- ANAT.......................................31.14
ABSORBENTE INC ORINA LIGERA FEMENINO
ABSORBENTE INC ORINA LIGERA MASCULINO
ABSORBENTE INC ORINA NOCHE RECT ...........................................29.66 (0.37)
ABSORBENTE INC ORINA NOCHE ANAT ............................................43.91 (0.55)
ABSORBENTE INC ORINA NOCHE ELAST- ANAT ..............................43.91
ABSORBENTE INC ORINA SUP-NOC RECT ..........................................38.2 (0.47)
ABSORBENTE INC ORINA SUP-NOC ANAT ..........................................52.7 (0.66)
ABSORBENTE INC ORINA SUP-NOC ELAST- ANAT ............................52.7
COLECTOR ORINA AUTOADHESIVO ..................................................49.91 ---30u (1.6€)
COLECTOR ORINA CON APOSITO ........................................................49.71 ---30 u
COLECTOR ORINA CON TIRA ................................................................21.28€--30 u (0.71)
OBTURADOR ANAL (nº 12 y 13) ..............................................................34.29
SIST.INC.ORINA OCLUSIVO HOMBRE- PINZA PENEANA (nº 1-2-3) 2u/14€ (1/7.4)
TOALLITA INCONTINENCIA URINARIA