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Haritu 30 3 euros tras la rev olución verde El incierto futuro persa Política, de la plaza pública a las redes sociales online «El viejo», Ion Orzaiz Galo Bilbao Alberdi, experto en educación para la paz Hasier Etxeberria & Harkaitz Cano Lokarri akordioaren eta kontsultaren aldeko herritarren Sarearen aldizkaria Revista de la Red ciudadana por el acuerdo y la consulta Lokarri

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En este número, Haritu incluye un reportaje sobre la situación de la república iraní tras las convulsas elecciones presidenciales celebradas el pasado junio; una entrevista conjunta a los escritores Hasier Etxeberria y Harkaitz Cano en torno a la relación entre el conflicto vasco y la literatura; un artículo de opinión de leducador Pedro Urquijo, además de las habituales secciones.

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Haritu 303 euros

tras la revolución verdeEl incierto futuro persa

Política, de la plaza pública a las redes sociales online

«El viejo», Ion OrzaizGalo Bilbao Alberdi, experto en educación para la paz

Hasier Etxeberria & Harkaitz Cano

Lokarri akordioaren eta kontsultaren aldeko herritarren Sarearen aldizkaria Revista de la Red ciudadana por el acuerdo y la consulta Lokarri

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Editorial Legitimación activa de los Derechos Humanos y diálogo

Pies de foto Hizki urratuak

Al hilo Política, de la plaza pública a las redes sociales online

Alegiak «El viejo», Ion Orzaiz

En primera persona Galo Bilbao Alberdi, experto en educación para la paz

A dos bandas «Gatazkaren hotsa euskal literaturan»

Hasier Etxeberria & Harkaitz Cano

Opinión «Poesía y paz», Pedro Urquijo

Kanpaina Nuevo weblog para dialogar sobre la paz y la convivencia

Munduari so El incierto futuro persa tras la revolución verde

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Haritu 30Sumario Aurkibidea

Zuzendaria: Maria Lizardi- Erredakzioa: Itziar Fernandez, Garazi Landa, Ana Elvira, Paul Rios, Miguel Sarratea eta Ruth Soria.

Ale honetako kolaboratzaileak: Jose Luis Salgado, Ion Orzaiz eta Irati Larunbe.

- Maketazio eta diseinua: Lokarriko diseinu taldea. Ilustrazioak: Srinavasa Ramanujan.

Inprimategia: Antza (industrialdea 2. pab. - 20160 Lasarte) - Lege gordailua: SS-1142/06 - ISSN: 1134-8038

Haritu no se responsabiliza de las opiniones emitidas por sus colaboradores.

Para la edición de esta revista se utilizan papeles libres de cloro. Aldizkari hau moldatzeko klororik gabeko papera erabiltzen da.

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Erakunde laguntzailea / Institución colaboradora:

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Legitimación activa de los Derechos Humanos y diálogo

Editorial

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Parece que los mensajes en torno a la paz, el rechazo a la violen-cia y la necesidad de diálogo se han instalado en la resignación. Trasel último atentado de ETA, el asesinato de Eduardo Puelles, se hantransmitido dos mensajes fundamentales. En primer lugar, que la so-ciedad vasca únicamente tiene un papel que cumplir deslegitiman-do la violencia. En segundo lugar, que es necesaria la unidad de lospartidos democráticos frente a la violencia. Ambas ideas encierranun llamamiento a la pasividad, no a contribuir de manera efectivapara que la paz, el diálogo y el acuerdo sean posibles.

La sociedad vasca ha mantenido durante los últimos años un po-sicionamiento claro y firme en contra de la violencia de ETA y a fa-vor de todos los Derechos Humanos de todas las personas. No hayun déficit en los pronunciamientos reclamando el fin de la violen-cia, aunque se haya podido leer y escuchar en los medios de comu-nicación que la sociedad vasca está enferma y que carece de un po-sicionamiento moral claro y contundente frente a ETA. Nada máslejos de la realidad. La sociedad vasca ha sido y es el principal acti-vo por la paz. Por mucho que desde las instituciones públicas y lospartidos políticos se hubiese impulsado la movilización frente aETA, sin la participación de la ciudadanía la contribución a la pazno hubiera dado resultado. Es más, en muchos momentos de nues-tra historia reciente la movilización ciudadana ha ido por delante delos propios representantes políticos.

Ahora bien, en los últimos años la movilización ciudadana contrala violencia ha venido acompañada también por la reivindicaciónactiva del diálogo como camino para buscar una solución comparti-

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Derechos Humanos y diálogo

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da a los problemas que afectan a la sociedad vasca. En este sentido,se percibe que desde las instituciones públicas, principalmente elGobierno Vasco, se hacen llamamientos a dialogar poco concretos,principalmente centrados en buscar acuerdos entre los partidos pa-ra combatir el terrorismo, dejando a un lado el diálogo sobre cues-tiones políticas y condicionándolo al final de la violencia. Este diá-logo ofrece una contribución muy limitada a los esfuerzos por la pazy la mejora de la convivencia.

Las instituciones públicas, el Gobierno Vasco y los partidos polí-ticos tienen que asumir su papel de impulsores activos de la paz y laconvivencia. Una posición de resistencia pasiva frente a la violen-cia es muy limitada y ofrece escasos resultados. Debe ir acompaña-da de una política activa de legitimación de todos los Derechos Hu-manos y de un trabajo de diálogo que permita ir afrontando la bús-queda de consensos más amplios sobre el marco de convivencia.Respecto a la primera cuestión, denunciar situaciones en las que seencuentran vulnerados Derechos Humanos fundamentales no ali-menta a ETA, como algunos pretenden afirmar, sino que demuestrala fortaleza de toda una sociedad por construir un espacio de respe-to a unas bases éticas de convivencia. En cuanto al diálogo, aunsiendo conscientes de las dificultades que plantea la violencia deETA para alcanzar acuerdos amplios, eso no impide que se vayanconstruyendo las bases para fortalecer ese diálogo y convertirlo enresolutivo cuando se den las condiciones necesarias.

La violencia de ETA es absolutamente rechazable. En cambio, noes justificable que se utilice como condicionante para denunciar

otras vulneraciones de Derechos Humanos o bloquear permanente-mente el diálogo sobre el marco de convivencia. Tampoco puede serutilizada como baza para reforzar las posiciones propias, generandouna esperanza que no termina nunca de concretarse. La Izquierdaabertzale tiene una importante responsabilidad que cumplir. Un lla-mamiento claro y nítido a ETA reclamando el final de la violenciay una apuesta por las vías exclusivamente pacíficas y democráticasdesbloquearía la situación actual y, previsiblemente, impulsaría demanera definitiva un proceso de pacificación que también puedeayudar a promover un diálogo resolutivo que culminase con unacuerdo amplio para la convivencia.

Una conclusión. La situación que vive la sociedad vasca no es in-evitable. Hay que mantener una posición clara respecto a ETA, ex-presando que la sociedad vasca, el sujeto principal del «conflicto» alque siempre aluden para justificar la violencia, quiere gestionar susproblemas de manera pacífica y democrática. Tampoco hay que caeren la autoflagelación continua por no ser suficientemente contun-dentes al deslegitimar la violencia, porque ya se ha expresado níti-damente el rechazo a la misma. El gran reto que tenemos como so-ciedad es fomentar el respeto a los Derechos Humanos y contribuira la convivencia por medio del diálogo y el acuerdo. Este objetivorequiere algo más que movilizaciones. La participación ciudadanapuede ser una buena herramienta para que la voz de la sociedad seaescuchada y respetada.

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Hizki urratuak

2008/07/03, Donostia

Begi bat zabaldu eta hortxe ikusi dut eguneroko kafe belt-za, beroa. Amak notxemesillan utzi berria. Barne-barnerainosartu zait hain gogoko dudan udaina. Egun berri bat hastearda. Ekaina da, uda. Leihotik sartzen den haize epelak laztant-zen dit bisaia, ohean etzanda. Sentsazio gozoa. Irratia piztueta egunak zer berri dakartzan entzuteari ekin diot. «... berekotxe azpian ezarritako lehergailua eztandarazi eta gero hilda...». Arnasa sakon hartu eta adi erraparatu diot esatariarenahots irmoari. «Arrigorriagako Santa Isabel karrikan jazo daatentatua». Pertsona bat hil dute beste behin ere gure herritxiki honetan.

«Hilketarik ez» ozenki aldarrikatu dute eta aldarrikatzenjarraitzen dute hizki larriz gure karriketan barna afitxa etakartel ugarik. Berdin dio, urra daitezkeen hitzak dira bat-zuentzat. «Iragarkirik ez» dio kartelak. Berdin dio, urra daite-keen esparrua da batzuentzat, bortxa daitezkeen hitzak.

Miguel Sarratea

Pies de foto

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Al hilo

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Conscientes de la influencia de Internet en la formación de la opinión de la ciudadaníaen un contexto en el que los medios de comunicación tradicionales y las campañas de co-municación masiva pierden credibilidad, cada vez son más los políticos que dirigen la mi-rada hacia las tecnologías 2.0 y se adentran en las redes sociales. Así, con las elecciones ala vuelta de la esquina hemos visto cómo en campaña los mensajes de los candidatos po-líticos brotan como setas en Facebook; hacen uso de su canal en YouTube con bonitos vi-deos institucionales serios y chistosos; sus fotos inundan Flikcr y sus palabras irrumpen enTwitter para mover a la ciudadanía en su favor y atraer el voto.

En este sentido, los cibernegativos argumentan que las redes sociales sólo son un recur-so más con el que los líderes cuentan en la planificación de sus campañas -márketing-. Losciberpositivos, sin embargo, están convencidos de que estas herramientas ayudarán al es-tablecimiento de una conversación entre líderes y ciudadanos, consiguiéndose al fin unaauténtica democracia.

Obama, un antes y un despuésEn 2004 las campañas presidenciales de EEUU descubrieron el potencial de Internet, la

efectividad del uso de las diferentes webs y del boom de los blogs como una potente herra-

La evolución de Internet está transformando nuestromodo de comunicarnos. Los ciudadanos, los usuarios, losclientes, ya no nos conformamos con consumir la infor-mación que otros nos ofrecen. Queremos opinar y parti-cipar. Esta transformación, que afecta a todos los camposde la comunicación, influye también en la relación quese establece entre la ciudadanía y la política. Es la polí-tica 2.0.

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Irati Larunbe Texto

de la plaza pública a lasredes sociales online

Política

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mienta. Se lograron recaudaciones récord y movilizaciones espectacula-res de las bases y de los simpatizantes. Cuatro años más tarde y con un ro-daje intenso de las nuevas tecnologías 2.0, los políticos fueron más alláde la movilización, haciendo de sus ideas y proclamas su valor esencial.Su imagen de líder cercano se convirtió en el producto a vender por loscandidatos a la presidencia estadounidense y desplegaron sus estrategiasonline con nuevos formatos. Llegaba el momento de los vídeoblogs y delas redes sociales que les obligaban a experimentar nuevas estrategias.

Al ex senador y ex candidato a la Vicepresidencia John Edwards se lebautizó como el «candidato electrónico». Edwards lanzó su pre-candida-tura para las elecciones presidenciales de 2008 un día antes de lo previs-to, en el portal YouTube. Lo que no es tan conocido es que el éxito me-diático de la iniciativa fue fruto de un error involuntario de sus colabo-radores mientras realizaban unas pruebas en la Red. Sea como fuera, Ed-wards protagonizaba un paso muy importante para la nueva política 2.0y utilizaba con mucha eficacia los recursos de la web 2.0: fotos, audios,vídeos, podcast…

Hillary Clinton anunciaba también en primicia con un vídeo colgadoen su página web, y que más tarde se presentó en YouTube, su precandi-datura en la carrera presidencial estadounidense. Todo un cambio de ac-titud y un guiño al mismo ciberactivismo al que unos meses antes habíadecidido no hacer caso siguiendo un mal consejo de uno de los princi-pales asesores de Bill Clinton en 1996, Mark Penn, quien le asesoró queignorara la blogosfera por «irrelevante». Este hecho desató las iras de losblogs radicales demócratas y se temió que fuera a ser un serio problemapara las primarias demócratas de 2008 si no conseguía ganar el apoyo dela ciber-base.

Sin embargo, el mayor beneficiario de la política 2.0 ha sido, sin du-da, Barack Obama. Varios analistas y periodistas llegan a la conclusiónque su estrategia digital ha sido un elemento clave para lograr la victo-ria. El márketing viral y el uso de sitios como YouTube marcó de mane-ra espectacular la pasada campaña del candidato de los demócratas. Elvídeo de lanzamiento de su candidatura logró ser visto por más de die-cisiete millones de internautas pocos días después de su publicación.Obama logró obtener mayores ingresos gracias a la Red. En total recau-dó más de 600 millones de dólares. Por otro lado, el haber sabido diri-

girse a los jóvenes mediante redes sociales, tales como Facebook o Twi-tter... contribuyó también a que la campaña de Obama fuera efectiva. Ellíder afroamericano entusiasmó a las masas con un programa abierto yparticipativo y con ideales compartidos.

Obama personificó un modelo 2.0 no sólo por utilizar Facebook yTwitter, entre otros, sino por abrir el campo en una multiplicidad de ac-ciones políticas que encarnan el concepto 2.0 en sí mismo y que modi-fican las maneras de hacer política, transformando a ésta en un ejerci-cio en conjunto con la ciudadanía. La Web 2.0 significa comunidad, yen ella se genera un feedback entre usuarios que posibilita compartirideas, intercambiar pensamientos pero también impulsa valores paraaprender a escuchar lo que el otro tiene para decir. Este acto de escucharpermite, consecuentemente, que múltiples voces puedan expresarse,dando a conocer su punto de vista sobre algún tema. Indudablemente laWeb 2.0 mostró que muchas personas tenían algo para decir y permitióvisualizar una amplia paleta de opiniones.

Barack Obama abrió el camino para que la política recupere ciertoprotagonismo entre una sociedad desmovilizada y desencantada con «lacosa pública», hasta el punto de que se ha puesto de moda el conceptode Política 2.0. Con todo lo que eso conlleva: políticos que abren perfi-les en redes sociales, empresarios que tratan de sumarse al carro y mul-titud de artículos en prensa convencional sobre el tema.

Y es que más allá de una tendencia pasajera, la política 2.0 debe serentendida como una actitud, como una disposición constante, una vo-luntad firme hacia una manera de entender la relación entre políticos yciudadanos, entre representantes y representados, entre instituciones ysociedad… Lejos de considerarse una mera técnica de márketing debeser asumida por unos y otros como una garantía de diálogo permanenteque entronca con el significado de la democracia real, participativa, enla que la ciudadanía, verdadera protagonista de la política, no es escu-chada sólo cada cuatro años o el tiempo que transcurre entre unas elec-ciones y otras. En un entorno 2.0 la ciudadanía participativa se convier-te en el eje central de la política, con capacidad para opinar, sugerir, in-fluir sobre las decisiones de manera instantánea.

Todo indica que en política no estar en la Red ya no es una opción.El tener espacios de participación como organización política es una

Al hilo

Lejos de considerarse una mera técnica de márketing, la política2.0 debe ser asumida como una garantía de diálogo permanenenteque entronca con la democracia real, participativa.

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oportunidad que no hay que desaprovechar: las redes sociales son losnuevos espacios de convivencia. Es una nueva dimensión interactiva yrelacional donde la participación de los militantes y de la ciudadanía seproduce desde otra perspectiva. En palabras de María González Vera-cruz, Secretaria de Innovación y Nuevas Tecnologías de la ComisiónEjecutiva Federal del PSOE, «no es la capacidad tecnológica, sino quela diferencia está en la participación de la gente. La Red permite las re-laciones horizontales». González Veracruz destaca que hay que intentartener organizaciones más permeables, más abiertas donde se transmitanlos valores que se tiene como partido, teniendo que mejorar la comuni-cación interna, la gestión de los equipos y de los simpatizantes.

Parlamento pioneroEl Parlament de Catalunya se ha convertido en la primera institu-

ción del Estado que entra de lleno en las redes sociales para difundir sutarea al inaugurar la pasada primavera su portal Parlament 2.0, un nue-vo espacio legislativo más participativo, abierto y dinámico. Parlament2.0 es un catálogo de herramientas e iniciativas que permiten favorecerel diálogo entre ciudadanía y políticos, entre el Parlament y los desti-natarios de las tareas parlamentarias.

Políticos y ciudadanos tienen así la oportunidad de construir un nue-vo espacio de relación, aparte del de los medios de comunicación y lle-gar a convertirse en un nuevo periodismo 3.0 (a caballo entre el «pe-

riodismo ciudadano» y el «periodismo colaborativo») donde el uso ge-neralizado de blogs de ciudadanos y políticos pueden exponer su ideasacerca de la economía, el deporte, lo social, lo cultural y la política fo-mentando la participación democrática deliberativa.

Este espacio del Parlament de Catalunya actualizado en su web inte-gra canal de vídeo en YouTube, Parlament en Facebook y su portal enNetvibes, entre otras cosas. También tiene perfil propio en Twitterdonde se pueden recibir las actualizaciones en la propia web, en el mó-vil, en el Messenger o en el mismo Twitter. Hay un espacio para que losciudadanos hagan preguntas al presidente y éste las reponda. Esto se es-tá extendiendo a los parlamentarios para que sean también ellos quie-nes den respuesta a la ciudadanía.

«La nuevas formas de hacer política pasan por escuchar a la ciuda-danía, por aprovechar el conocimiento de la gente. Hay que tener encuenta que estas soluciones no son inmediatas, se producen en eltiempo, y debemos ser conscientes de que el ciudadano deja de ser unciudadano pasivo limitado a recibir información, para pasar a uno ac-tivo que opina y participa», explicaba Ernest Benach, presidente delParlament de Catalunya, al referirse al nuevo espacio institucional.Benach incide en que «tenemos las herramientas, pero éstas no sir-ven de nada si no se hace un cambio de conciencia. Hacer políticatradicional con herramientas 2.0 sería un gran fracaso y sería lo quela ciudadanía no espera. En los partidos políticos, hay una gran lucha

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entre los que defienden las campañas clásicas y los que quieren usarlas nuevas tecnologías».

Recorrido por la esfera vascaLos comicios del pasado 1 de marzo fueron las primeras elecciones

vascas plenamente 2.0, un fenómeno ya vivido en las últimas generales,pero que en Euskadi se desarrolló con gran intensidad incluso semanasantes de que comenzara la campaña. La blogosfera vasca echó humo, ydía sí día también algunos partidos rediseñaban su web o sus blogs y lan-zaban un video o un viral.

En lo que se refiere a los partidos, el PSE encabeza el fervor 2.0 conel blog de Patxi López, que ha sido premiado, a lo que se suma su Fa-cebook, Twitter y Tuenti, más un canal en YouTube y sus cuentas enFlickr y last.fm. El nuevo Lehendakari cuenta también con un pod-cast, un archivo de audio. La iniciativa más novedosa de los socialis-tas durante la campaña fue una web no integrada en la página del PSEque buscaba recabar apoyos de personas independientes en favor de lacandidatura de Patxi López. De construcción sencilla, incluía un for-mulario para adscribirse a la «red para el cambio», un foro de discusióny material multimedia. Además, López ofrecía una entrevista a travésde Twitter con los ciudadanos.

En el Consejo Político de Euskadi (máximo órgano de dirección deEzker Batua Berdeak entre Asambleas) se pronunciaban el pasado abrilpor primera vez desde la tribuna palabras como blog, wiki,meneame.com, digg, edición colaborativa... que anunciaban una apues-ta firme por 2.0. Ezker Batua (IU) ha hecho sus pinitos y tiene una webcuidada y links a su canal de YouTube. Durante la campaña a las elec-ciones autonómicas presentaba un link a Facebook de su candidato. Sinembargo, su candidato se presentaba en un texto escrito en tercera per-sona y no se ofrecía foro ni forma alguna de dejar una opinión. EB des-tacó, no obastante, por la creación de una herramienta similar adigg/menéame basada en la participación colectiva, cuya finalidad eraser una fuente de propuestas para la elaboración del programa electoral.Cualquier persona podía enviar su propuesta para que los demás miem-bros de la comunidad la valoraran con un simple clic.

El PP vasco, en su web, dedica un apartado a las redes sociales des-de donde se accede al Flickr, Facebook y Tuenti de su presidenteAntonio Basagoiti. Además, cuenta con canal propio en Youtube.

Por su parte, el líder popular vasco dispone de Basagoiti 2.0, una pá-gina en la que centraliza su diario personal, vídeos y acciones en re-des sociales.

Si al principio el PNV suspendía en 2.0, pocas semanas antes de lasautonómicas vascas se puso las pilas transformado su web e incluyen-do mucho más material multimedia y más contenido bloguero. El par-tido jeltzale destacó, además, con dos muy buenas webs paralelas. Laprimera es www.ibarretxe.com, donde, entre otras cosas, el candidatonacionalista respondía, en video, a preguntas de sus ciberlectores. Lasegunda era www.hemenibarretxe.com, nacida a la sombra de la socia-lista www.redparaelcambio.org. Tanto una como otra buscaban idénti-co objetivo: generar una red de ciudadanos independientes que apoya-ran públicamente dichos partidos, en el caso socialista «para el cam-bio» y, en el caso nacionalista «para que no cambiara». El candidatoIbarretxe no disponía de blog, pero sí una página oficial del cargo don-de se fue colgando el material de prensa emitido por el Gobierno Vas-co. Su escasa actividad contrasta con el blog de Iñigo Urkullu, actualpresidente del PNV.

Eusko Alkartasuna, que cuenta con una Asamblea y una ejecutiva pa-ra temas de Internet desde hace más de diez años, tiene presencia enprácticamente todas las redes sociales que existen. Su web principal esmuy ordenada y muy participativa.

Aralar, por su parte, apuesta por una web muy clarita, con más textoque multimedia. Durante la campaña y también posteriormente, el par-tido no ha caído en la fiebre 2.0, salvo en lo que respecta a los blogs.

UPyD creó una web, una sección dentro de la web nacional, para laselecciones vascas. Además de sus canales en redes sociales (YouTube,por ejemplo), publicó gran cantidad de blogs, videos, un montón de fo-tos y recortes de prensa. La red fue su principal soporte de difusión.

Y en mitad de este escaparate 2.0-cerista está Politika 2.0, un grupode personas que intenta «promover cambios en lo que se define políticahacia modelos más participativos y cercanos a una ciudadanía activa».Reune políticos, blogeros, políticos blogeros y ciudadanía en general in-teresada en aquello de la «cosa pública» y que blogean asiduamente des-de el País Vasco. Politika 2.0 surgió a raíz de la iniciativa para promoverun encuentro en el Parlamento Vasco entre bloguers y personas de la po-lítica. Este grupo ha mantenido encuentros con el Parlamento Vasco ysigue en contacto.

«Hacer política tradicional con herramientas 2.0sería un gran fracaso»

Ernest Benach, presidente del Parlament de Catalunya

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La lógica nos dice que los dos sexos deben mantener una partici-pación razonable en las actividades de la vida cotidiana. Las pro-porciones variarán según diversos factores. Pero hoy todavía hay lu-ces rojas encendidas sobre desigualdades evidentes. Una de ellas esla que tiene que ver con la tecnología en su más amplio sentido. Yse puede particularizar, no cabe duda, en las tecnologías de infor-mación y comunicación.

Es por ello que resultan de especial interés las iniciativas que in-dagan en aportar luz sobre la participación de la mujer en estos ám-bitos. Un ejemplo es la jornada que el pasado mes de junio se des-arrollaba en Bilbao bajo el título Politika2.0 + mujeres. Ciudadaníaactiva y participación en política (se puede acceder a parte de su con-tenido en el canal de streaming http://www.ustream.tv/channel/...).Enmarcada dentro del Foro para la igualdad 2009 de Emakunde-Ins-tituto Vasco de la Mujer y organizada principalmente por la partici-pante de Politika 2.0 Silvia Muriel, con la ayuda de otros miembrosdel grupo, la jornada giró en torno a la participación de las mujeresen política y a los beneficios y aportaciones que éstas pueden recibira través de las nuevas tecnologías. Para ello se contó con la presen-cia de mujeres vinculadas al mundo de la política que expusieron suexperiencia en el uso de la web social ó 2.0, la orientación que supartido le está dando al asunto o actuaciones a futuro facilitadorasde comunicación con ciudadanía.

Se habló de algunos proyectos en marcha liderados por mujeres,

como es el caso de EnclaveDeCiudadanasPorGetxo, una platafor-ma de vecinas del municipio que desde 2007 trabajan para partici-par en las políticas del ayuntamiento en temas de igualdad. Tam-bién se presentó el proyecto Neskateka como ejemplo local de pro-yecto de participación ciudadana, de igualdad y sobre todo de pro-yecto 2.0 innovador. Noemí Pastor, del colectivo NosotrasIguales,explicó que se trata de una iniciativa para incluir la perspectiva dela mujer en el diseño urbanístico de Laudio, sobre todo en temas deseguridad y accesibilidad. También participó en el encuentro Mai-te Martínez, del espacio de innovación y desarrollo social en áreasrurales LivingLab Río Nacimiento de Abla (Almería), quien víaSkype explicó el trabajo que llevan a cabo dentro del proyecto Cui-dadoras.net, una red de apoyo e intercambio de conocimientos en-tre cuidadoras familiares a través de internet.

Aunque con las generaciones digitales la brecha entre hombres ymujeres en el uso de internet probablemente vaya desapareciendo,dentro de la población que ha tenido que adaptarse a las nuevastecnologías sigue habiendo más presencia masculina que femeninaen la red. Las plataformas web 2.0, en forma de blogs, wikis y redessociales son una herramienta muy útil para la participación ciuda-dana en el diseño de las políticas, y, tal y como afirmaba NoemíPastor, «es una oportunidad que las mujeres no deben dejar pasarpara incorporarse al ágora».

Desde la perspectiva de género

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No conocí a mi abuelo. Murió antes de que yo naciera. Nunca ju-gué con él, ni me dio dinero por mi cumpleaños, y nunca me aburrie-ron sus historias sobre la guerra. No conocí a mi abuelo, pero eso nome impidió quererle.

Desde niña, yo ya me había hecho una idea muy clara sobre él, ba-sándome en lo que mi abuela y mi madre me contaban. Habría sido,sin duda, un hombre alto y fuerte, de ojos claros -como yo- y sonrisafranca. Había visto un par de fotos suyas, en el pueblo, guardadas enla mesilla de noche de mi abuela, dentro la caja de costura. Salía bas-tante guapo, aunque no se le veía muy bien la cara. Eran precisamen-te esas imágenes borrosas las que me permitían imaginarme el resto.Lo que faltaba en las fotos lo ponía yo.

«El abuelo murió en la guerra», solía decirme mi madre. Era comosi lo viera, corriendo entre trincheras y granadas que explotaban a supaso, y con una ametralladora, como en las películas. Era ingénuo, yalo sé, pero como todo lo que había conocido hasta entonces graciasa la televisión: películas de indios y vaqueros, de nazis y aliados, demarcianos y terrícolas... de buenos y malos. Y mi abuelo era de losbuenos. Había sido de los buenos. Y lo habían matado por ello. Por-que los malos, que suelen ser tuertos y calvos, y dan miedo cuando rí-en, no querían que mi abuelo estropeara sus planes de conquistar elmundo... o algo así.

Luego crecí, y aunque ya no pensaba como una niña, seguía guar-dando dentro de mí esa imagen idealizada de mi abuelo. Aunque noquisiera, siempre lo vería como el héroe de guerra que se parecía unpoco a Paul Newman de joven. Luego llegó la carta, y todo cambió.

No sé si fue por la mañana o por la tarde, si hacía sol o si llovía.Sólo sé que mi madre llamó, y me dijo que fuera a verla. Estaballorando.

Cuando llegué, me enseñó una carta certificada. Era del gobierno.«Por la presente, tengo el deber de informarle de que...».

–¿Qué dice?–, le pregunté a mi madre. No tenía tiempo ni ganas deponerme a leer.

–Por lo visto han encontrado a tu abuelo. Han desenterrado unosrestos, y había algunos documentos... Aparece su nombre, y...– No di-jo nada más. Se echó a llorar. Cogí de nuevo la carta. Venía junto auna fotocopia de los documentos desenterrados. La letra estaba muyborrosa, y faltaba algún trozo de papel, pero todavía podía leerse.

Preso nº53.Martin Goñi Merino falleció en este establecimiento el día de la fecha,

ejecutado por el pelotón de fusilamiento de la Compañía 8 del Fuerte Al-fonso XII. Tenía 23 años de edad, casado y con una hija, labriego de pro-fesión. Natural de Echarri-Aranaz (Navarra). Hijo de Lorenzo y Lucía.Este penado fue condenado a la pena de 30 años por un consejo de guerracelebrado en Pamplona por el delito de adhesión a la Rebelión. Posterior-

El viejo

Alegiak

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mente, fue condenado a muerte por el delito de intento de fuga.

En Pamplona, a 26 de mayo de 1938,Firmado: Teniente Coronel F. Espinosa Portillo.

Martín Goñi Merino. Mi abuelo. Repetí aquel nombre en mi cabe-za hasta que perdió todo su sentido. Martín Goñi Merino. No, aquélno era mi abuelo. Mi abuelo no podía haber muerto en una zanja. Eraimposible. Un error, sí, eso, un error. Se habían confundido de perso-na. Pero el nombre estaba bien, y las fechas coincidían. Era él. Lo ha-bían matado como a un perro. Sacrificado, y luego arrojado a una zan-ja. Fue en ese momento cuando decidí vengarme de quienes lo mata-ron. «Teniente Coronel F. Espinosa Portillo». Sí, ése era. En él des-cargaría mi dolor y mi rabia. No sólo por haber asesinado a mi abue-lo, sino por haberme arrebatado sus recuerdos, incluso aquellos que yomisma había creado.

Cogí el papel y me lo guardé en el bolsillo. No volví a leerlo hastahace una semana, en una cafetería de la Gran Vía de Madrid. Trasmeses de llamadas, búsquedas infructuosas y lágrimas sobre el tecladodel ordenador, había encontrado a un tal Federico Espinosa Portillo.Vivía con su hijo y su nuera en Madrid. Tenía 87 años. Hablé con sunuera por teléfono y, para mi sorpresa, accedió a que nos viéramos an-tes incluso de que le explicara qué quería.

Cuando abrió la puerta, me recibió con una amplia sonrisa. «Pa-sa, siéntate».

–¿Eres de la agencia, verdad?No sabía de qué estaba hablando. Sin duda, me había confundido

con otra persona, pero eso ya daba igual. Para cuando quise pensarlocon calma, el «sí» ya había salido de entre mis labios.

–Bueno, no tienes de qué preocuparte. Es muy tranquilo. Casi nun-ca se despierta, y si lo hace, basta con ponerle la televisión para quevuelva a dormirse. Sus pastillas están en el primer cajón de la mesi-lla... ¡Ah! Y si pide algo de comer, no le des nada sólido, que tieneproblemas para tragar. Hay botes de puré en la despensa. Éste es mimóvil, si tienes cualquier problema, llámame.

Todavía me estaba preguntando a mí misma por qué había menti-do a aquella mujer, cuando cogió su bolso y se marchó, dejándome so-la en aquella casa...

Bueno, en realidad no estaba sola. Él también estaba allí.Exploré la casa hasta que llegué a la habitación del fondo. El viejo

estaba tumbado en la cama. Cogí una silla y la acerqué hasta la cabe-cera. Reí. Nunca pensé que podría tener tanta suerte. Estaba sola, te-nía a mi objetivo a unos veinte centímetros, dormido... y llevaba unapistola en la mochila.

Desperté al viejo dándole unos golpecitos en la cara. Miró haciaambos lados, asustado y desorientado. No sabía quién era yo, ni de

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dónde había salido. No parecía recordar dónde estaba. Se acercó lamanta a la cara, como hacen los niños pequeños cuando tienen mie-do. Unos de sus ojos era totalmente blanco, como los de las lubinascuando salen del horno.

–Martín Goñi Merino–, le dije. El viejo no pareció reaccionar.Aquel ojo blanco seguía mirándome con una mezcla de extrañeza ytemor. Saqué la pistola de la mochila y le apunté directamente.

–Martín Goñi Merino–, repetí. –Pamplona, en 1938. Vamos, séque te acuerdas.

Pero no se acordaba. No se acordaba ni de lo que había cenado eldía anterior. Me miró y sonrió. Su saliva se deslizó desde la comisurade sus labios hasta la sábana.

–No me importa que no te acuerdes–, le dije. –Te voy a ma-tar igual.

Amartillé el arma y puse el dedo sobre el gatillo. El viejo dejó desonreir y miró hacia los lados, confuso.

Pensé en las películas de mi niñez. El malo de esta película tambiénera tuerto y calvo. Pero no daba miedo cuando reía. El temible Te-niente Coronel Federico Espinosa no era más que un viejo indefen-so. Si alguna vez había habido un asesino en aquel cuerpo hacíatiempo que había abandonado aquella prisión de arrugas ypieles marchitas. Pensé que, si mi abuelo siguiera vivo, talvez hoy no sería muy diferente de aquel ser decadente ytriste.

Bajé la pistola y volví a guardarla en la mochila.Cuando salí de aquella casa, el anciano había en-cendido la televisión. Estaban poniendo una pe-lícula de indios y vaqueros.

Ion Orzaiz Escritor

Ramanujan Ilustraciones

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Galo Bilbao AlberdiExperto en educación para la paz

¿Cuáles son las posibilidades futuras de una reconciliación en el País Vasco?,¿qué pasos son necesarios? A estas y otras preguntas responde a través de estaentrevista Galo Bilbao Alberdi, profesor de Ética en la Universidad de Deus-to y experto en educación para la paz, especialmente en la cuestión de la re-conciliación, ese escenario de palcos donde las discrepancias y voluntadesopuestas pueden sentarse serenamente frente a frente con ánimo de entendi-miento mutuo.

Haritu: ¿Es posible la reconciliación en elPaís Vasco?

Galo Bilbao: la sociedad vasca está necesi-tada de reconciliación. Sus dos grandesconflictos (el violento y el identitario)amenazan con provocar -si no lo han hechoya- fracturas irreparables. Sobre todo laexistencia del terrorismo, pero también laausencia de acuerdos políticos básicos com-partidos, tienden a exacerbar las inevitablestensiones sociales que vive nuestro país yque son homologables a las de otras comu-nidades humanas de su entorno. Es precisa-mente este hecho, el de reconocer que losconflictos que se viven son comparables alos que se ha vivido en otras latitudes don-de han sido felizmente superados (o que sino han desaparecido, al menos han sido ca-nalizados en unas condiciones de humani-dad y ausencia de violencia de motivaciónpolítica que permiten afrontarlos adecuada-mente) lo que nos permite mantener unarazonable esperanza, no exenta de una serieexigencia de responsabilidad y necesidad decompromiso, de que la reconcilación no só-lo es necesaria, sino posible entre nosotros.

Haritu: ¿Podemos hablar de reconciliaciónen un horizonte cercano?

Galo Bilbao: a día de hoy, un análisis delos distintos aspectos que configuran la re-conciliación no permite decir que el proce-so de reconciliación esté en marcha ni queexistan condiciones adecuadas para el mis-mo, aunque se identifican elementos valio-sos que pueden posibilitarlo. Junto con to-do esto, hay que constatar aspectos negati-vos que nos mantienen aún lejos de la re-conciliación: por encima de cualquier otro,la persistencia de la violencia terrorista deETA y otras manifestaciones de violenciade intencionalidad política; una confronta-ción política exacerbada, con un papel re-levante de los medios de comunicación so-cial, que dificulta marcos de convivenciaintegradores; serias dificultades, cuando norechazo explícito, para reconocer como ne-cesario punto de partida los consensos rea-les logrados (Estatuto y Amejoramiento);permanente vinculación determinante (enun sentido u otro) entre el debate sobre elfuturo político del País Vasco y la violen-cia; la absolutización, la «sacralización» de

las propuestas políticas dificultan el diálo-go, el debate y la búsqueda de acuerdos; elvictimismo y la irresponsabilización per-manentes: culpabilizar a los demás de todosnuestros males, vernos y presentarnos co-mo víctimas sin serlo. Un permanente, y aveces creciente, clima de excepcionalidadjurídico-legal, que cuestiona la calidad de-mocrática y es fuente de abusos legales, ydificultades, particularmente en el discursopolítico para reconocer y aceptar el plura-lismo de las sociedades del País Vasco y deNavarra.

Haritu: ¿Cuáles son las condiciones ne-cesarias y los medios más adecuados pa-ra lograrla? ¿En qué modo están presen-tes actualmente en la realidad vasca?

Galo Bilbao: podemos entender la reconci-liación como aquel proceso que, englobandolos aspectos de verdad, justicia, memoria,perdón y acuerdo, restaura donde lo había -o crea donde no existía- un marco de convi-vencia o al menos unas condiciones huma-nas de desenvolvimiento de la vida social ysus conflictividades, especialmente para las

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Garazi Landa Texto

Manu Vilabrille Fotos

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«A pesar de no producirse la condiciones concretas para que lareconciliación sea ahora posible, parece que pueden identificar-se algunos rasgos de una sociedad vasca futura reconciliada»

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víctimas supervivientes. Analicemos breve-mente cómo estos aspectos del concepto de re-conciliación están presentes en la realidadvasca: a) Verdad: todavía hay demasiadas zo-nas oscuras en la historia reciente del conflic-to violento del País Vasco: desapariciones, in-vestigaciones policiales y judiciales que se handetenido o cerrado de modo precipitado (espe-cialmente las que se refieren a la llamada«guerra sucia»), sospechas y denuncias de tor-turas y malos tratos a detenidos y presos. Que-da incluso por conocer públicamente muchomejor la vida interna de la organización terro-rista y muchas de sus actividades delictivas(violencia de persecución, kale borroka o elllamado «impuesto revolucionario»). b) Justi-cia: se está avanzando significativamente eneste terreno. La eficacia policial permite quemuchos victimarios sean sometidos a juicio ycumplan sus condenas; las víctimas reciben re-paración, reconocimiento y asistencia en susnecesidades... Sin embargo, queda todavía ca-mino por recorrer. Y también es necesario sub-sanar las injusticias que se cometan en el siste-ma penitenciario, además de corregir las legis-laciones que puedan suponer abusos del podero den pie a ello. c) Memoria: recordar lo ocu-rrido, para que no vuelva a ocurrir y como ges-to de aceptación de las víctimas y reconoci-miento de los propios errores, es una necesidaden nuestra sociedad. Las víctimas han de tenerla oportunidad de incorporar a la memoria co-lectiva el relato de su experiencia. Esta memo-ria no está suficientemente presente en la ca-lle, en las aulas, en las instituciones públicas,en la conciencia social. Y hay que reconocerque la memoria es, en sí misma, todavía hoy,motivo de conflicto. d) Perdón: se ha dado,desde las víctimas, en personas individuales,de manera privada y pública. No consta que sehaya solicitado pública y explícitamente porparte de los victimarios ni en su conjunto niindividualmente, ni siquiera por parte de quie-nes renunciaron expresamente a la violencia yse reinsertaron socialmente. Hay que recono-cer las dificultades del arrepentimiento ennuestro contexto. Por otro lado, no se han ge-nerado encuentros entre víctimas y victima-rios que den lugar a la dinámica del perdón. e)Acuerdo de convivencia y proyecto compar-tido: hay uno vigente, que se considera ya ca-

En primera persona

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duco por la mayoría (al menos política, nomuy claro si social). Hay otro planteado,con diversas fórmulas, que se ve por algunoscomo reconocimiento de la razón de los vic-timarios. No hay acuerdo básico, de fondo,ni sobre el orden jurídico-político funda-mental ni siquiera sobre la realidad sociopo-lítica del país.

Haritu: ¿Quiénes deben ser los protagonis-tas, sujetos agentes y pacientes de un pro-ceso de reconciliación?

Galo Bilbao: el proceso de reconciliacióntiene también unos sujetos agentes y pa-cientes a la vez del mismo, identifiquémos-los y veamos su modo de contribución posi-ble a la consecución de la sociedad reconci-liada en el País Vasco. En primer lugar, lasvíctimas: por una parte están los muertosque, a pesar de su situación, tienen una grancapacidad de movilización del proceso;también están las víctimas vivas, sumidasen su proceso de victimización y, conse-cuentemente, dificultadas para ser sujetosactivos en el proceso de reconciliación; porúltimo, están los supervivientes, aquellasvíctimas que han superado su proceso devictimización, que se encuentran ellas mis-mas ya reconciliadas y, como tales, son suje-tos activos de la reconciliación social. Ensegundo lugar, los victimarios o agresores.Les interesa zanjar con rapidez el proceso yque les afecte lo menos posible. Manifiestanun enorme interés por la amnistía. Boicote-arán pasos en el proceso que les pongan enevidencia o les castiguen. Entre ellos hayque distinguir la problemática figura de losvictimarios que a su vez son también vícti-mas y también merece una referencia explí-cita el colectivo de presos de ETA, cuanti-tativamente significativo y cualitativamen-te muy relevante. En tercer lugar, los cir-cunstantes: no directamente implicados enlos actos de violencia ni sufrientes de lamisma. Mayoritariamente indiferentes opasivos, desean un fin rápido, que manten-ga, si no mejore, su posición. Es entre estoscircunstantes donde encontraremos unamasa crítica significativa para posibilitaruna reconciliación social lo más amplia po-

sible. Un sujeto muy peculiar entre los cir-cunstantes es el Estado, tomado en su con-junto. Él tiene la posibilidad de modular lasdistintas medidas tendentes a erradicar elterrorismo, establecer las condiciones y asu-mir la responsabilidad en el polémico as-pecto del diálogo y la negociación y concre-tar las medidas que política y jurídicamenteayuden al buen desarrollo y éxito final detodo el proceso.

Haritu: ¿Cuál debería ser el espacio parahablar de reconciliación?

Galo Bilbao: para responder adecuadamen-te al espacio en el que hablar de reconcilia-ción habría que constatar previamente queen ésta es posible hacer varias distincionesque resultan significativas. Podemos consta-tar brevemente dos: por un lado, la posibili-dad de establecer una dimensión propia-mente personal de la reconciliación juntocon la explícitamente social; por otro, eldescubrimiento de distintas perspectivas dela reconciliación. Así, podemos decir queexisten, entre otras, unas perspectivas reli-giosa, ética, política y jurídica de la reconci-liación. Cada una de estas distinciones de-manda consecuentemente un lugar o espa-cio distinto de abordaje: no es lo mismo eldiálogo interpersonal privado entre víctimay victimario, donde se otorga, se ofrece o sesolicita el perdón, que el ámbito parlamen-tario de representación de la ciudadaníadonde se debaten los marcos políticos y le-gales de la convivencia democrática en paz.En cualquiera de los casos, creo que en nues-tra realidad es importante destacar la ideade que la reconciliación que se predica habi-tualmente presupone de forma clara un es-quema subyacente de igualdad, de simetríaentre los sujetos: dos partes enfrentadas, alas que les asisten razones innegables junto aresponsabilidades por la generación de in-justicias flagrantes, que comparten inclusoen muchos casos la condición bifronte devíctimas y victimarios al mismo tiempo.Personalmente creo que el esquema basadoen la simetría no es adecuado para el con-flicto de violencia terrorista que padece elPaís Vasco desde hace cuatro décadas y que,

consecuentemente, es necesario formularteóricamente y avanzar prácticamente haciaun concepto de reconciliación que resulteasimétrico, por considerarlo más justo mo-ralmente e incluso más eficaz políticamente,en términos cívico-democráticos. Además,esta asimetría puede concretarse y expresar-se en la asunción de la perspectiva de lasvíctimas del terrorismo y en la prioridad delas mismas como sujeto referencial del pro-ceso de reconciliación.

Haritu: ¿Cómo imagina un escenario finalpositivo para nuestro país?

Galo Bilbao: a pesar de no producirse lascondiciones concretas para que la reconci-liación sea ahora posible, sin embargo, pa-rece que pueden apuntarse en nuestra reali-dad, sin utopismos ni ingenuidades, algunosrasgos de una sociedad vasca futura reconci-liada. Y desde ella, es posible formular pornuestra parte algunos pasos necesarios parael camino de su consecución: abandono dela violencia por parte de ETA; aplicaciónde la justicia sobre los responsables de todoacto terrorista; intensificación de las inicia-tivas de reconocimiento y reparación hacialas víctimas; supresión de legislaciones es-peciales (antiterrorista, de partidos, régi-men de dispersión...) y vigilancia del respe-to de los derechos humanos y ciudadanospor parte del Estado; realización de iniciati-vas de encuentro interpersonal entre vícti-mas y victimarios; establecimiento de medi-das activas de reinserción social de los con-denados (entre ellas indultos, nunca amnis-tías); fomento de la participación social yciudadana en la vida política; promoción dela cultura y la educación por la paz y la to-lerancia; defensa activa de la realidad depluralidad cultural, política e identitaria dela sociedad; debate político sobre cambiosde marco jurídico desde el respeto al actual-mente vigente y a los procedimientos por élestablecidos. Este es el reto y la tarea quetenemos planteados. Tenemos que ser capa-ces de lograrlos. Darán lugar, no a una re-conciliación plena y perfecta, imposible pordefinición, pero sí a una situación de socie-dad habitable y compartida por todos.

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El pasado 19 de junio amanecía oscuro en la localidad vizcaína deArrigorriaga. ETA reaparecía haciendo estallar un coche-bomba quesesgó la vida de Eduardo Antonio Puelles García, de 49 años y naturalde Barakaldo. Casado y con dos hijos, Puelles era jefe del Grupo de Vi-gilancias Especiales de la Brigada de Información de Bilbao, encargadade la lucha contra ETA. El asesinato del agente de policía es el primeratentado mortal de ETA en el mandato de Patxi López, quien se encon-traba en la sesión plenaria del Parlamento vasco en el momento delatentado. El pleno quedaba suspendido y el lehandakari se personabaen el lugar de la explosión, al igual que lo hacían la mayoría de los re-presentantes de las distintas formaciones y del Gobierno vasco, mos-trando su dolor y consternación. López mostraba su rechazo más con-tundente al atentado añadiendo en relación a ETA que «ellos nos en-señan el camino del dolor y nosotros le vamos a enseñanar el caminode la cárcel». La Cámara Vasca realizaba una condena unánime. El cla-mor social tampoco se hacía esperar y miles de vascos se concentrabanen silencio en pueblos y capitales de todo el Estado exigiendo a ETAque abandone las armas. El asesinato del inspector Puelles es el prime-ro que comete ETA en 2009, desde que en diciembre de 2008 mataseal empresario guipuzcoano Inaxio Uria. El anterior atentado mortalcontra agentes del Cuerpo Nacional de Policía fue en mayo de 2003 enSangüesa (Navarra), cuando fueron asesinados Bonifacio Martín Her-nando y Julián Envit Luna. Con el último asesinato de Uria, son ocholas personas han muerto por los atentados de ETA desde que el 30 dediciembre del 2006 un coche bomba con más de 200 kilos de explosi-vos estalló en el aparcamiento de la Terminal 4 del Aeropuerto madri-leño y causó la muerte de dos ciudadanos ecuatorianos, heridas a otrasdiecinueve personas y enormes daños materiales.

«Ez dira garai onak Euskal Herriarentzat Estatuko alderdiek euskalafera Estatukoa bailitzan hartzen baitute eta Euskadi ez den beste edo-zein lekutan naturaren kontrakoak liratekeen akordioetara iristeko or-duan ez dute inolako erreparorik erakusten hemen». Hitz horiek esa-nez estreinatu zuen Pello Urizarrek EA alderdiko idazkari nagusiarenbere kargu berria iragan hilabetean alderdi abertzaleak Gasteizen egin-dako ez ohiko kongresuan. Indar abertzaleen arteko metaketa indart-zearen aldeko mezua helarazi zuen Urizarrek Euskal Herriak bakeareneta burujabetzaren alde aurrera egiteko, betiere giza eskubideen eta de-mokraziaren defentsan oinarrituta. Kongresua izan eta ondorengo egu-nean Urizarrek adierazi zuen amaitutzat dituela alderdi barruko liska-rrak, eta kongresuan ikusitako jarrerak lasaitu egin zuela: «orain argiutzi behar da mezu bakarra dagoela eta bukatu direla barne borrokak».EAko buruzagitza kargua hartu berri duenean, alderdia aurrera aterat-zeko gogotsu dago. 41 urteko ingeniari teknikoa, 1986az geroztik da al-derdiko afiliatua Uriza, EAren sorreratik bertatik, eta 1996 eta 1998bitartean Gazte Abertzaleen idazkari nagusia izan zen. Egun, Arrasate-ko udaleko zinegotzia da, baita Gipuzkoako zuzendaritzako kidea ere.EA sortu zenetik bosgarren burua izango da Manuel Ibarrondo, CarlosGaraikoetxea, Begoña Errazti eta Unai Ziarretaren ostean. Azken ho-nek kargua utzi zuen, martxoaren 1eko hauteskundeetan izandakoemaitza txarren ondorioz. Idazkaritza nagusia, alderdiko kargu nagusiada presidentearen figura desagertu zenetik. Aurkeztu den hautagai ba-karra izan da Uriza eta alderdiko konpromisarioek aho batez hautatuzuten.

Pello Urizar, EAko buru berria ETA tiñe de rojo Arrigorriaga

Hilvanando

Hari-muturrak...

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Europako Legebiltzarrak hartu duen joera eskuindarraz gain, Euro-pako hauteskundeek beste datu aipagarri bat utzi zuten iragan ekai-nean: partaidetza baxua. Bozkatzeko eskubidea zutenen %43a bainoez baitzen hauteslekuetara gerturatu. EAJ izan zen garaile Euskal Au-tonomia Erkidegoan, PSEri alde txikia aterata, eta PP Nafarroan. Es-painian, PPk PSOEk baino milioi erdi bozka gehiago lortu zituen.77.000 boto jasota, 140.000 Hego Euskal Herrian eta besteak Espai-niako Estatuan, Iniziatiba Internazionalistak ez zuen europarlamen-tariorik lortu; «iruzurragatik», bere ustez. Izan ere, Europako bozenaurkako inpugnazio orokorra sartu du alderdiak, «iruzurra egon zela-ko eta oinarrizko berme demokratikorik gabe egin zirelako bozak».Espainiako Auzitegi Gorenean sartu du helegitea, eta adireazi duprest dagoela Europako auzitegira ere jotzeko. Espainiako Estatukolurralde batzuetan sartuak zituen helegiteak, baina atzera botatzn ziz-kiotela ikusita, erabaki du Iniziatiba Internazionalistak inpugnazioorokorra sartzea. Boto kontaketaren eta hauteskunde prozesuarenaurka egin du. Haren arabera, batetik, bere kodea manipulatu eginzuten eta, bestetik, baliogabe jotako milaka boto ez dituzte kontatu.Europako 2004ko hauteskundeetatik boto baliogabeek 57.000ko etatxurizkoek 125.000ko hazkunde «susmagarria» izan dutela dio hauta-gaitzak. Bien bitartean, Manos Limpias muturreko eskuineko sindi-katuak salaketa aurkeztu zuen Estatuko Fiskaltza Nagusian IniciativaInternacionalistako zerrendaburu Alfonso Sastrere aurka, mehatxuegitea eta ETArekin kolaboratzea egotzita, Gara egunkarian publika-tutako iritzi artikulu baten harira.Testuan, ETArekin negoziaziatuezean «oinaze handiko garaiak» etorriko direla adierazi zuen.

Abstentzioa eta iruzur salaketak

...hilos sueltos

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Ezustekorik ez eta Eusko Legebiltzarrak Alberto Surio kazetari donos-tiarra Euskal Irrati Telebistako (EITB) zuzendari nagusi izendatu zuenekainaren 18an, sozialistek eta Alderdi Popularrekoek adostutako akor-dioaren ondorioz. Suriok gehiengo osoa lortu zuen PSE-EEren, PPren etaUPyDren 39 legebiltzarkideen babesarekin. EAJ, EA eta EBko legebilt-zarkideak abstenitu ziren, eta Aralarkoek kontra bozkatu zuten. Suriorenhautagaitza erabakitzeko eztabaidan, Joseba Egibar EAJko legebiltzarki-deak«bakarrik PPren laguntza jasotzeko» Eusko Jaurlaritzaren jarrera sa-latu zuen. Bestetik, Jose Antonio Pastor PSEko legebiltzarkideak «ahotskritiko eta espiritu zabalarekin» aritzeko eskatu zion Suriori eta AntonioBasagoiti PPko presidenteak bere alderdiaren laguntza «normaltasun-adierazgarri» zela esan zuen. Mikel Arana EBko legebiltzarkidearen ara-bera, «zehaztasunari eta informazio aniztasunari dagokionez, EITBk bes-te hedabide publiko batzuk gorriaraz ditzake». UPyDtik Gorka Maneirok«egiatasuna eta inpartzialtasuna» eskatu zizkion EITB berriari. EITBk1982. urtetik hona izan ditu zuzendari nagusiak, eta denak EAJri lotuta-ko lagunak izan dira. Hori ez da beteko zuzendari berriarekin. Surio ez dainoiz alderdi politiko batean afiliatua egon. EITBk dituen hainbat erron-kari heldu beharko die Suriok; besteak beste, itzalaldi analogikoaren ha-sierari, ETB4 LTDko katearen sorrerari -2009ko amaierarako-, eta Mira-mongo egoitzaren birmoldaketari. Gainera, EITBko arduradunak hauta-tu beharko ditu. Zuzendari berriak ez daki euskaraz, eta El Diario Vascoegunkarian egin du lan azkeneko hogei urteetan, Politika saileko kazeta-ri eta analista gisa. Punto Radio irratian, Radio Euskadin, ETBn, TVEn,Cuatron eta Teledonostin kolaborazioak egin ditu tertuliakide gisa.

Abian aldaketak

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Hemeroteka

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Umorea

MontxoBerria, ekainak 10

VergaraPúblico, 6 de junio

PauDiario de Mallorca, 9 de junio

RicardoEl Mundo, 8 de junio

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Esandakoak

Francisca Hernández, viuda de EduardoPuelles, asesinado por ETA el pasado 19de junio.

Arantza Quiroga, presidenta del Parla-mento Vasco.

Jesús María Larrazabal, parlamentario deEA en la Cámara vasca.

Mikel Arana, coordinador de Ezker BatuaBerdeak.

Aintzane Ezenarro, parlamentaria deAralar.

Patxi López, lehendakari.

Alfonso Sastre, cabeza de Iniciativa In-ternacionalista (II).

«Sólo han conseguido dejar dos huérfanos y una viuda».

«En estos momentos tan duros, cuando me tengo que enfrentar a miprimer atentado como presidenta del Parlamento, me queda la esperan-za de ver a los partidos unidos, algo que es muy importante en los tiem-pos que corren».

«La ciudadanía debe decir lo que piensa y lo que siente mayoritaria-mente ante este asesinato (...). Debemos buscar fórmulas para construirla paz y para que este país logre formas normales políticas que todavía noha conseguido».

«El atentado es la respuesta de ETA al período de reflexión de la izquier-da abertzale, que o planta cara a ETA o está condenada al ostracismo po-lítico sine die».

«Todas las personas que se consideran abertzales deben romper su si-lencio ante este tipo de atrocidades, que van en contra de los derechoshumanos. Se dice que se hace en nuestro nombre y tenemos que ser nos-otros los que digamos más alto que nadie que éste no es el camino. Que-remos construir un proyecto de izquierdas y abertzale, pero desde la ex-clusividad de la política, sin vulnerar los derechos de otros».

«Además de la condena y el rechazo voy a lanzar un aviso claro a ETA:vamos a acabar con ellos, vamos a aplicar toda la fuerza del Estado de De-recho y todos los recursos de la Ley para no dar un minuto de respiro a losviolentos».

«O se abre una negociación o se aproximarán tiempos de dolor».

«La paz se trabaja, no sirve con reite-rar la demanda de la desaparición de

ETA, sino que debemos desarmarla (...)Para hacerlo, debemos elevar el listónético y democrático ante la violencia,

trabajar por la deslegitimación social dela justificación del terrorismo y avanzar

en la cercanía y acompañamiento aquienes la sufren».

Iñigo Urkullu, presidente del EuskadiBuru Batzar del PNV.

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Haritu: maiz esan da euskal literatuak ezduela islatu euskal gatazka. Bat zatozteideia horrekin?

Harkaitz Cano: ni ez nago ados horrekin.Denbora errealei buruz gertatzen diren gauzeiburuz idaztea beti da konplikatuagoa eta, aregehiago, tartean kontu mingarri bat edo zau-ri ireki bat badago, gurean bezala. Hori kon-tuan hartuta, euskal gatazkaren inguruan de-xente idatzi dela uste dut. Beharbada ikus-puntuak falta dira eta beste hainbat gauza erebai, baina konpara dezagun nola dagoen kon-tatua literaturan Espainiako trantsizioa. 80-

90eko hamarkadetan kokatutako zenbat li-buru daude trantsizioari buruz? Edo ekar de-zagun gogora Gerra Zibila. Bai, badira gai ho-rri buruzko liburuak baina azken urte haue-tan idatzitakoak dira, eta lekutan dago GerraZibila. Aldiz, kontuan hartuta zauri bat ireki-ta daukagula, denbora errealean gertatzen aridenari buruz ari garela... bada, nik uste dutegin dela. Beti jartzen dut adibide bezalaMargarite Durasen «La douleur» («Mina»).Bigarren Mundu Gerra bitartean, okupaziogaraiko urteetan idatzi zuen eleberria, nonRobert, senarra, kontzentrazio-eremuetatikitzuli zenekoa kontatzen duen. Denbora erre-

alean izkiriatu zuen, zauriari zornea zeriola.Arnasa bere kabuz hartzen duen liburua da.Orain, hori lortzea oso zaila da. Gainera, gau-za bat da idaztea eta beste zerbait da denboraerrealean argitaratzea. Nik badakit gureanbadaudela hainbat gauza idatzita ezin direnakoraindik argitaratu. Denbora behar da. Honiguztiari erreparatuta, ez zait iruditzen berezi-ki gaizki edo pobre dagoenik gatazkaren pre-sentzia gure literaturan.

Hasier Etxeberria: nire iritzian, topiko batda esatea euskal literaturak ez duela islatu.Nik neuk, esate baterako, lauzpabost nobela

euskal literaturanGatazkaren hotsa

Hasier Etxeberria & Harkaitz CanoMaiz leporatu izan zaio euskal literaturari euskal gatazka deitu ohi dena ezislatu izana, baina iritzi horrekin ez datoz bat Hasier Etxeberria eta HarkaitzCano. Literatura egitea gatazkarik ez balego bezala ezinezkoa da bi idazleenustez. Gai ekidiezina da, eta denboran bilakaera izan duena. «Kanpoan ego-tetik personaien barnean egotera pasa da», bien hitzetan.

A dos bandas

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María Lizardi Testua Manu Vilabrille Argazkiak

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ditut idatzita eta horietako lehendabizikoa,«Mugetan», gatazkaren ingurukoa da. Halaere, «Mugetan» idatzi eta handikan urteeta-ra ere entzuten nuen ez dela gatazkaren lite-raturarik egin. Eta ordurako ez nik bakarrik,beste askok ere erabilia zuten gaia. Bestegauza da agian ez direla jaso ikuspegi guztiaketa ez dagoela liburu bat formalki edo osota-sunean gatazka azaltzera eskainita dagoena.Dena den, hori saiakera litzateke. Edo zer

dakit nik, agian historia liburu batek azaldu-ko du noizbait. Baina literaturan gai bezalabadago. Areago, ez da bakarrik presente da-goela, baizik eta ekidiezina dela. Idazle guz-tiok geure ibaiko uretik edaten dugunarekinidazten dugu eta ibaiko urak berarekin dakargatazka. Ur horren zati da. Ezinezkoa litzate-ke literatura egitea gatazka ez balego bezala.Beraz, uste dut islatu ez dela esaten dutenekez dutela ezagutzen euskal literatura. Obrak

ere aipa ditzakegu: «Soinujolearen semea»,«Gizona bere bakardadean», «Mugetan»,Xabier Mendigurenen «Berriro igo nauzu»,«Ehun metro»... Bost elkarrizketa egin ni-tuen duela denbora bat bost idazlerekin etaoso agerian geratu zen euskal idazleenganizugarrizko pisua daukala gatazkak, ezin bai-ta bereizi gure bizitzatik. Berriz diot bestekontu bat dela inork ez duela hartu helburuhori bere osotasunean landu eta ez dela azal-

A dos bandas

Harkaitz Cano

«Kanpora zoazenean poema irakurketa bat egitera, beti bukatu behar duzu azalpenak ematen gatazkari buruz eta pedagogia egiten»

26 Haritu

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Hasier Etxeberria

«Idazle guztiok geure ibaiko uretik edaten dugunarekin idaztendugu eta ibaiko urak berarekin dakar gatazka»

du euskal gatazka saiakera bat balitz bezala.Beno, egin dira ahalegin partzial batzuk.

Harkaitz Cano: bada beste zerbait ere: bat-zuetan ematen du horrek kondena izan beharduen euskal idazlearentzat. Hau da, norainoguk idazten dugunak ia beti izan behar duengatazkari buruz. Ni ez nator bat horrekin.Bestetik, kanpora joaten zarenean poemaerrezitaldi batera, Kordobara adibidez, zureintrebentzioa hamar minutukoa bada, zazpiminutu eta erdi eman behar dituzu azalpenakematen, azaltzen zertan den gure herri honenarazoa. Beti bukatu behar duzu pedagogia egi-ten. Eta ni jada ez nago horretarako. Irudi-tzan zait ez dela nire betekizuna. Energia-xa-hutze handia da. Bizkar gainean harri bat ba-generama bezala. Testuinguru zehatz bateanakaso bai, jardun naiteke azalpenak ematen,baina poema irakurketa bat berak ez dut ustezertan gorde behar duen halako proportzioga-betasuna. Esan nahi baitut nire interben-tzioak ez diola halako denbora eskaini behargatazka kontzeptuari.

Haritu: molestatu egiten dizue?

Harkaitz Cano: molestatu baino, nekatu.

Hasier Etxeberria: azkenerako, aspergarriada. Lagunak etortzen zaizkizu kanpotik bisitaegitera zure etxera, arratsalde goxo bat pasa-tzera, eta bukaeran edo jada hasieratik betigauza beraren esplikazioa. Denek galdera be-ra egiten dizute: «esan didate euskal literatu-ran ez dagoela gaia. Horrela da?». Atxagakdioena egia da; alegia, pasatzen dugu, galtzendugu denbora asko esplikatzen gure gatazka.Eta hori ez denean, galtzen dugu denbora as-ko gure hizkuntzaren gainekoak azaltzen.Hizkuntza txikia dela, zaharra, unibertso pro-pioa daukala, bai eta literatura estandarraere, normalizatua, Finlandiakoarekin konpa-ragarria... Azken buruan, Jaurlaritzak egin be-harko lukeen lan bat gauzatzen ari gara, en-baxadoreen lana. Eta tira, nik ez diot uko egi-

ten enbaxadore lan pixka bat egiteari, idazle-on zati txiki bat izan daitekeelako, baina zo-ritxarrez, oraindik ere, eta ez gara kexatzengaren lehendabizikoak, ardura hori ia bete-betean egokitzen digute. Bernardo Atxagakberak behin baino gehiagotan esana da kriti-koen garrantziaren zatietako bat hori dela.Esate baterako, Polonian eman behar baduHarkaitzek edo dena delako idazleak bere la-nari buruzko hitzaldi bat, ongi legoeke bereaurretik beste norbait joatea bidea zabaltzeraaudientzia prest egon dadin. Gainera, gureiritzia ez da ondokoarena baino balioxeagoa.Herritar normalak gara, jende normala garaidazten dugunak eta, horrenbestez, ez dut us-te gure iritzia historialariena edo filosofarienabaino inportanteagoa denik. Aitzitik, guriegokitzen zaigu egitea. Nik aholkatuko nukeerakundeetan brigada bat antolatzea, Katalu-nian giten duten bezala, eta New Yorken, Pe-kinen, munduan zehar barreia dezatela me-zua, azalpena. Konta dezatela nor garen. Ge-ro, gu joaten garenean, ez gaitezen behartutaegon guztia kontatzera.

Harkaitz Cano: hori zinea falta zaigulakoizango da. Islandesei ez zaie halakorik gerta-tzen.

Hasier Etxeberria: bai, hori ere izan daiteke.

Hasier Etxeberria: zinea egiteko moduan ezgaude, bada (kar, kar, kar!).

Harkaitz Cano: jendeak esan nahi duena daez dagoela liburu hori, giltzarria den liburua.

Hasier Etxeberria: hori da, konponbideaizan behar duena. Baina hori ez da idazlearenlana.

Harkaitz Cano: ez dakit. Nik uste dut bade-la neurri batean behintzat. Izan ere, historialiburuek ez baitute azalduko euskal gatazka.Literaturak lehenago eta hobeto azalduko du.Era efektiboago batean.

Hasier Etxeberria: beno, neurri batean bai.Saizarbitoriak esaten duen moduan, norkkontatuko dizu hobe XVIII. mendea: histo-rialari batek ala garai hartako idazle batek?Alde horretatik ados nago zurekin, bai da gu-re lana, baina formulazio orokor eta nagusibezala ikusita ez. Hots, «hau gertatzen da eta,beraz, nire eginkizuna hau egieta izango da».Hori ez. Azkenean, gaia pertsonaietan doa,kontatzen den gauzetan, gauza txikietan...

Haritu: zein zentzutan da zuen zeregina?

Harkaitz Cano: zereginetako bat da. Nik eznuke esango zeregin bakarra eta ezta gureadenik ere. Bestalde, kontrakoa ere pasatzenda. Hots, badago tematuta dagoena idaztenduzun guztia gatazka klabean irakurtzera. Bi-garren Mundu Gerrari buruz idatzi eta aska-tasun egarriaz ari zarela uste dute batzuek.Irakurketa psikoanalitikoak barregarri xamardira. Batzuetan obsesioa ez dago gugan, bai-zik eta irakurlearengan. Idatzi nuen aurrene-ko eleberriaren protagonista jazzeko tronpe-tista beltz bat zen eta, hara non, jaso nuenkomentarioetako bat izan zen: «horrekinihes egiten diozu zure munduari, gatazkari».Ez nator bat gauza ikusteko modu horrekin.Zure mundua zure esparru geografiko-fisikoramugatzen dizute. Izan ere, nik izan dezaketharreman handiagoa Julio Cortazar batekin,hildako idazle batekin, edo kanta batekin...Eta hori ez da nirea? Nire iritzian, hori ere zi-legi da. Hitz egin dezaket jazz giroari buru?Bai, jakina. Zergatik ez? Demagun harremanhandiagoa dudala John Coltranekin behekopisuan bizi den okinarekin baino. Orduan,zergatik ez dut idatziko lehendabizikoa har-tuta inspirazio-iturri? Aitortu beharra dutnire bigarren eleberria, «Pasaia blues», eginzidaten kritika horren, zirikatze ahalegin ho-rren ondorioz etorri zela, neurri batean. Ja-kin nahi duzue zer pentsatzen dudan? Tori,bada. Nik ez dakit esaten zehazki liburu horiidatziko nuen jaso izan ez banitu zenbaitiruzkin. Akaso ez.

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Hasier Etxeberria: uste dut nobela bat sor-tzen ari denean uholdeak dakarren materialorok eragin dezakeela idazlea. Eta materialoro diodanean, izan daiteke jazza, izan dai-teke beheko okina ez ezagutzea... Esate ba-terako, nik «Mugetan» liburua beldurratiksendatzeko idatzi nuen. Beldurrarekin gai-xotuta nengoen. Indautxun komisaldegianiragandako gau ikaragarri batek beldurrahezurretaraino barneratu zidan. Gauez hotsbat entzun eta izututa esnatzen nintzen, ika-rak jota bizi nintzen. Horri aurre egitekoidatzi nuen, baina liburuan ez nuen konta-tzen gertatu zitzaidana. Motibazioak azkene-an biografikoak dira. Literatura sendabideizan daitekeen egiaztatu nahi nuen. Besteeleberri batzuetan gertatu izan zait gatazkaagertzeko inolako asmorik ez izatea bainakontakizuna eraiki ahala istorioaren parteizatera pasatzea. «Eulien bazka» datorkitburura. Arazo etiko-moral baten plantea-mendua aurkeztu nuen eleberri horretan,eta arazo horrekin lotuta bi iheslari. Nireasmoa ez zen halakorik egitea, ez zen gataz-kaz hitz egitea, baizik eta liburuko per-tsonaia bat arazo etiko baten testuinguruankokatzea eta, azkenean, azaldu egi zen. Gu-re materialetako bat hori da.

Harkaitz Cano: egia da gaur eta hemen ida-tzitako istorio bat kontatzen hasten zarenmomentutik, lehenago edo beranduago, sai-hetsetik edo aurrez aurre, gaia topatu egitenduzula. Bestela bukatuko genuke Goenkale-nliteratura egiten. Hau da, herri bat non ga-tazkak, hilketak badauden, baina dena da ha-lako mafia errusiar-marbelliar batekin lotua,isolatua, dena zorro baten barruan bezala.Nire kasu partikularrean, jabetzen naiz den-borak aurrera egin ahala nire interesa etamotibazioa dela idaztea gaur eta hemen ko-katutako istorioak.

A dos bandas

Harkaitz Cano

«Politikariak oso urrun daude idazleen azterketa gaitasunetik. Areago, beldurra ematen die eta diskurtso manikeoaz baliatzen dira»

28 Haritu

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Hasier Etxeberria: norbait atxilotuko duteedo tiro bat entzungo da edo kontenedorebat erreko dute edo... Ekidiezina da. Taldebakezaleak izango dira. Agian protagonista-ren maitalea talde bakezale batekoa izangoda. Ezinezkoa da ekiditea.

Harkaitz Cano: eta ezta ere gatazkaren aldeepikoaz ulertzen denaz. Nire ustez, eta esatendenaren kontra, gatazka ez da bakarrik zuze-nean ekintzarekin lotuta dauden personaienhistoria. Hau da, ez da polizia bat, komandobat, preso bat... Gero eta gehiago da horrenalde psikologikoa. Eta ikuspegi hori ez da be-rria, aspalditik dator. «Maldetan sagarrak» li-buruan horretaz hitz egiten da. Laster psikoa-nalista mordoa beharko da (kar, kar!). Ikus-ten da alde psikologiakoak askoz ere garrant-zi handiagoa duela. Literaturak hori ustiatudu eta gero eta finago ustiatzen ari da. JokinMuñozen liburuan, adibidez, beren semeanon dagoen ez dakiten gurasoen atsekabea,larritasuna da aztergai. Niretzat alderdi horierakargarriagoa da. Erakargarria izateaz gai-nera, gauza gehiago esplikatzen ditu. Politi-kak edo eguneroko diskurtsoek baino askozgehiago. Ausartuko naiz esatera hor dagoelafiloia.

Haritu: bilakaera ikusten duzue alde ho-rretatik?

Harkaitz Cano: bai.

Hasier Etxeberria: bai, bai. Baina ez soilikgatazkaren inguruan idatzitako liburuetan.Oro har da. Garapen oso bat egon da litera-turan. Lehen modu eskematikoagoan idaze-ten zen, gauza agerikoagoak eramaten zirenorrietara. «Ehun metro» eleberrian, esate ba-terako, ageri dira tiroak, polizia... eta bai, ba-zegoen barne mundua ere bai, eta oso ondoegina, baina «Soinujolearen semea»-ra arte

jauzi egin eta ikusten dugu bilakera bat gerta-tu dela. Atxagaren idazlanean traizioa dugunagusi. Nolabait, literaturan gatazka igaro dakanpoan egotetik barnean egotera, pertso-nen barnean egotera. Nik ere ez dut zalantza-rik esatean hori Operación ogro nola izan zenkontatzea baino interesgarriagoa dela ikuspe-gi hori.

Haritu: zer dela eta bilakaera hori?

Harkaitz Cano: ez dakit zergatik, baina ku-rioski politikan eta egunero politikarien hiz-keran ez da inoiz ikusi halako azterketa laniketa ez da ikusiko ere, are gehiago, saihetsiegiten da. Hau da, politikarien diskurtsoa osomanikeoa da. Ez da bakarrik ez direla iristenhitz egiteko era sakonago horretara, baiziketa beldurra ematen diela ere bai. Munstroaketa biktimak baino ez daude beraientzat. Sin-plikazio horretatik ateratzeko modua barnegatazkan murgiltzea da. Eta barne gatazkahori literaturaren lehengaia da, baina ez ba-karrik hemen, baita Parisen eta Hegoaferi-kan eta... Iruditzen zait idazleak betekizunhori gara dezakeela, eguneroko egunkarietanagertzen ez dena helaraztea. Izan ere, diskurt-so hori gero eta epidermikoagoa da, edo be-hintzat beti bezain epidermikoa. Hizkera ma-nikeo, sinplista, tendentziosoa eta ez zehatzada. Calvinok esaten zuen bere testu bat har-tu eta zehatza ez zela ikustea gorroto izugarriaematen ziola. Eguneroko diskurtsoan zehaz-tasun hori milaka kilometrotara dago. Hitzakgero eta narratsago erabiltzen dira eta ustedut idazleari bai badagokiola narraskeria ho-ri bere neurrira ekartzea. Hitzak garbitzea,bere benetako esanahira ekartzea. Hitzak etasentimenduak eta afektuak.

Hasier Etxeberria: hasi garenez politikariakastintzen, jarrai dezagun. Politikariak osourrun daude idazlearen azterketa gaitasune-

tik. Idazleak, egiantzekotasun bilatu nahi ba-du, nolabait pertsonaia sentitu egin behar du.Alde horretatik, Europarako Legebiltzarrera-ko azken hauteskundeetan, esate baterako,garbi ikusi dugu politikariak oso urruti dau-dela populuarengandik. Badago esaldi bat as-ko maite dudana eta horrela dio: segi zaitza-ten nahi baduzu, aurretik joan behar duzu.Politikariek aurretik joan beharko lukete,baina irudipena daukat atzetik doazela, etahorrek ikaragarri baldintzatzen du gure poli-tika. Gure politikariak, profesionalak, kudea-keta interesatu batean dabiltza eta ez daudeadi populuaren beharrei. Eta lehendabizikobeharra bakebidea da. Atzo bertako notiziada hainbat herritar demokraziatik kanpo gel-ditu direla, eta ez dakit zer eta badakit zer.Perbertsio izugarria dago terninoetan. Denakonponduko litzateke demokraziarekin. Hordago arazoa. Gertatzen dena da politikariprofesionalek pentsatzen dutela demokraziaeuren ikuspegia dela eta, gainera, modernoa,aurrerakoia irizten diote. Oso sinplea da de-mokrazia egitea: galdetzea denoi zer nahi du-gun. Eta behin hori galdetuta, ikusiko genu-ke gero nork zer errespetatzen duen eta zer ez,baina behintzat ez daitezela mintza demokra-ziaren izenean egiten ez den bitartean. Horifuntsezkoa da. Gainera, denok dakigu kon-ponketa non dagoen, baita ukatu egiten du-tenek ere. Badakigu elkarrizketak ekarrikoduela konponbidea. Demokrazian areagotze-ak bakarrik konpon dezake arazoa eta ez dutuste ez gaur eta ez atzoko politikariak horre-tan dabiltzanik. Ari dira euren interesen etaikuspegien kudeaketan. Politikari profesionaloro, salbuespenak salbuespen denek ez deza-ten beren burua intsultatua sentitu, ari dirahorrela.

Harkaitz Cano: badago jendea sailkatzekoera bat zenbakiak jarriz. Modurik erradikale-na da. Bestea da letrak jartzea, hau da, siglak

Hasier Etxeberria

«Politikari profesionalak kudeaketa interesatu batean dabiltza eta ez daude adi populuaren beharrei. Bakebidea lehen beharra da»

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A dos bandas

ipintzea, alderdi politikoen siglak. Kontura-tuta nago herri honetan zenbakien sailkapenhori gaindituta daukagula mentalki, baina si-glena ez. Beti bere alderdiaren iritziarekinbat ez datorren jendearen gabezia igartzendut, eta hori arrazoitzen dakiena, ezer gerta-tzen ez delarik. Araudi zorrotza daukagu he-men, zigorlea. Desadostasuna agertzen badu-zu, etsai izatera igarotzen zara. Gauzak mutu-rrera eramaten dira. «Bat ez gatozenez, buka-tutzat emango dugu geure artekoa, bereiziegingo gara». Hots, iragarkiak zioen bezala:«me llevo el excatérgoris». Egin dadila nikesandakoa, bestela banoa. Eta jokoa nireadenez, nirekin eramango dut. Ez dago ezta-baidarik, siglen sailkapen etengabea baizik.Zenbat letra dituzte Euskal Herriko alderdipolitikoetako siglek? Zenbat hizki ditu alfa-betoak? Erabil ditzagun guztiak. Iruditzen zaiteguneroko hizkeran siglak erabiltzen direla,hizkuntzaren beste zati guztia, hau da, alfabe-toko hemezortzi letrak, berriz, ez. Eta nik al-fabetoko letra horien gabezia sumatzen dut.Hitzarmen bat sozialistekin sinatzeagatikjende batek trazidoretzat hartu du kargudunbat. Harrituta nauka horrek. Denak zaku be-ran sartzkeo joera dago. Hori da ulertzen ezdudana. Ez da sanoa disidentzia hori ez sus-tatzea. Idazleak, aldiz, badaki hori egiten. Be-ti egin du.

Hasier Etxeberria: azkenean, dialektikakontu bat da.

Haritu: nola dakusazue gizartea horrenguztiaren erdian?

Hasier Etxeberria: zein gizarte? Ni Ipar Eus-kal Herrian bizi naiz. Han ez dakite Gerni-kan arbola bat dagoenik ere. Zein gizarte?Orokortzea arazo bat da. Iragan astean egonnintzen San Joan su bat ikusten, inguruanoso ospetsua. Jende pilo bat zegoen eta haie-tako batzuk etorkinak ziren. Egiten zutenumorea, barrea eta ez zuten ideiarik ere erri-

tuaz. Ez nuke jakingo esaten guztiontzat baliodezakeeen zerbait. Mosaiko handia marraz-ten ari da gure herrian. Lastima kulturalki ezdugun beste kultura batzuek duten potentzia,benetan arrisku ekologikoa bizi baitu gurekulturak. Oso kezkatuta nauen arriskua da,eta ez du zerikusirik arrazakeriarekin. Dexen-te kezkatzen nau ekologia kulturalak. Ez garauholde horri aurre egiteko adina eta nire ka-su partikularrean, arazo horri aurre egiteazentrala da nire bizitzan, ideologian. Haatik,badakit txikikeria dela orain gutxi amona xa-har baten gurdia bultzatzen ikusi dudan ema-kume perutar horrentzat, sei ume dituelako,jatera eman behar dielako eta ez dakit zer etabadakit zer. Beraz, ez dira pisu bereko arazo-ak.

Harcaitza Cano: gizartea oso aparte dagodiskurtso horietatik. Euskaldun ezkertiartzatbaldin badaukazu zeure burua, termino zaha-rrak erabiliz, eta mosaiko horri erreparatuta,azkenean ikusten duzu zeure burua kondena-tua hemendik urte batzuetara kontserbadoreeretxin bat izatera. Zeurea mantendu nahian.Eta zeure etxean. Kanpoko ereduekin aldera-tu eta Le Pen bat izateko bidean aurreikustenduzu zeure burua. Eta ez duzu hala izateriknahi, jakina. Bestela, era apokaliptiko bateanhar dezakegu. Asisko Urmenetaren txiste ba-tean galdetzen zen: zergatik ez dago StarWordsen euskaldunik? Eta erantzuna zen:Star Word etorkizunean delako. Hori da ego-era gordina. Egia da gure artean badagoela el-karteetarako, kutlurarako eta gauzak egitekoegundoko indarra, jende aktiboa. Urteetanegon da eta oraindik ere badago, auzolanederra da, indar handia. Tamalez, daukagunenergia zulo beltz horretatik nola xurgatzenari den ikusteak amorru handia ematen dubatzuetan. Hortik kanpo egoteko gogoa da-torkizu, lagunekin bazkaritxoak eginez adibi-dez. Friboloa da hori? Ba akaso bai. Ez dakit,fribolidadearen dosia ere aztertu beharrekokontua da. Beti ibili behar al dugu monje tor-

turatuak bezala klaustro berari bueltaka? Nikez nuke nahi.

Hasier Etxeberria: gure historia egunero be-rrasmatu beharra dago. Eta hobe dugu irmo-tasun ideologikotik aldentzea, edozein mo-mentutan pitzatzen baitizu errealitateak.Malguagoak izan behar dugu. Zaila da gurebaldintzetan erakargarri bihurtzea, kulturalkidiot. Baina bisibilitatea behar da, ikusi eginbehar da. Ni oso kritikoa naiz euskara irakas-le askorekin. Eta adibide bat jarriko dutazaltzeko. Euskara ikasteko orduan, ez dut us-te hamabost edo hamasei urteko gazte ba-tentzat Pastorala gai erakargarria denik. Nirigustatzen zaizkit Pastoralak, baina ulertzendut egungo gazte bati aspergarri gerta dakiz-kiokeela. Harkaitz, zuk esandako klaustroa-ren irudiarekin bat dator hau. Beti ibili behardugu gurdi berari tiraka eta horrek askoirensten du. Ni neu mugimendu sozio-zibikobakezaleetan ibili naiz azken urteotan etaikusi ahal izan dut azkenean gurea deskalabrutamalgarria dela. Ez dugu asmatzen elkarmaitatzen. Eta arrazoi duzu siglena aipatzenduzunean. Gaur egun, zure koinatua ezagutubaino lehen jakin nahi duzu PNVkoa den,HBkoa... Hots, maite behar duzun edo ez ja-kiteko lehendabizi afiliazioa jakin behar du-zu. Eta hori oso perbertsio larria da. Hortikateratzeko psikoanalita autobuskadak behar-ko dira, edo jaiak edo batek daki (kar, kar!).

Harkaitz Cano

«Pertsona bat maite behar duzun edo ez jakiteko, gaur egun bere afiliazioa jakin behar duzu. Oso perbetsio larria da hori»

30 Haritu

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Hasier Etxeberria

«Hay que investigar en profundidad qué ocurre en las comisarías, porque es donde más se vulneran los derechos»

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Quiero referirme aquí a un momento importante en su trayec-toria política y en la de nuestro país: el acto de su toma de pose-sión y jura del cargo de lehendakari bajo el árbol de Gernika elpasado 7 de mayo. Me sorprendió. En una ocasión en la que, noya el protocolo, sino las convenciones sociales imperantes ennuestro mundo indican la oportunidad de dirigir un discurso, sise quiere breve, a la ciudadanía, usted optó por la poesía. Renun-ció a hablar con voz propia y eligió poner en su boca palabras depoetas. ¿Por qué? Imagino que fue un signo de reconciliación.Entiendo que quiso inagurar su mandato lanzando una señal depacificación a todos aquellos que no están en paz ni consigo mis-mos, pero… ¿por qué estoy usando impúdicamente la tercerapersona? No, la decencia, la honestidad, obliga a decirlo en pri-mera persona: a los que no estamos en paz ni con nosotros mis-mos, ni con los demás. «No he venido a traer la paz, sino la espa-da» (Mt. 10, 34) Misión cumplida. Han pasado ya más de dos milaños desde que lo dijo. Ahora toca implantar la paz. ¿Sabe ustedcómo, señor lehendakari? Yo sí, y se lo voy a decir. Pero todavíano. Antes quiero hacer unas reflexiones en torno a la poesía, noa una de las que usted leyó, tampoco acerca de los versos que noleyó, sino sobre la poesía como… digamos, género literario, paraevitar ponernos demasiado místicos.

La poesía, tal como yo la entiendo, otorga a los nombres unaluz nueva, rescata al adjetivo de su insignificancia y le da al ver-bo fuerza y coraje. Otras veces es al revés: atenúa los contornos,

Poesía y paz (carta abierta a Pátxi López)

Opinión

32 Haritu

Señor lehendakari, usted es digno del respeto de todos los vas-cos porque ocupa un puesto de legítima y honorable autoridad.Desde esa posición, también usted se presenta con una actitud derespeto cuando declara que va a ser el lehendakari de todos losvascos. Bueno, discúlpeme una observación obvia, pero pese a subuena voluntad, no puede serlo de todos los vascos, porque en elpueblo donde vivo, por ejemplo, que está un poco más al esteque el puente de Behobia, hay unos cuantos vascos fuera de la ju-risdicción del Eusko Jaurlaritza, y lo mismo les ocurre a los vas-cos que uno se encuentra en cuanto cruza el puente de Endarla-za. Pero le confieso que a mí particularmente eso no me preocu-pa mucho. No me parece tan grave que el mapa de nuestro terri-torio siga dividido por líneas fronterizas. Eso me inquieta tanto otan poco como, qué le voy a decir… el límite entre el Atlánticoy el Pacífico, allá por la Patagonia, pongamos por caso. No, loque me preocupa es lo que me da miedo. Y lo que me da miedoes que en el país de los vascos sigamos todavía ahogados por elmiedo. Usted, lo sabe de sobra, tiene ante sí una sociedad en quela cautela desemboca en el silencio, el silencio de las bocas ce-rradas por si acaso. La libertad de pensamiento, que no necesitaser defendida porque quien no la ejerce es porque no quiere, noconduce entre nosotros a la libertad de expresión, que sí se sue-le ver constreñida, aunque no del todo impedida, pues uno cier-tamente siempre es libre de decirles lo que piensa a las piedrasdel desierto.

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difumina el significado y hace languidecer la mecánica implaca-ble del lenguaje corriente. Con la poesía dices y no dices; entrascuando sales y lo dejas todo como en suspenso, «entre las azuce-nas olvidado». Cuando uno busca reconciliarse con alguien hacebien en hacerse preceder de unos versos, porque el lenguaje con-vencional suele llevar una pesada carga de implicaciones semán-ticas que lo refieren demasiado a menudo a unos contextos repe-titivos, y vuelta a empezar. Si decimos, por ejemplo, «indepen-dencia», «derecho a decidir», «libertad», «territorialidad», «con-dena», «terrorismo», «negociación», «identidad», etc., un tropelde ideas asociadas, tópicos recurrentes y situaciones archiconoci-das acuden a nuestra mente como una jauría de vacas en estam-pida (sí, ya sé que se dice «jauría de perros»). Si en aquel acto hu-biera usted añadido un discurso más a la larga serie de discursosya pronunciados y por pronunciar en referencia al «problemavasco», éste, como una piedra más, habría hecho las mismas hon-das de siempre sobre la superficie del agua y habría terminadohundido en el fondo de la vieja laguna. Por eso hizo bien, lo ad-mito, en recurrir a la poesía. Porque usted en aquel acto no qui-so hacer uso de su libertad de expresión, sino de su libertad deelección. En alguien que detenta la presidencia de un gobierno,libertad en su dimensión política es sinónimo de poder.

Bien, ya tiene usted el poder, no un poder absoluto, pero bas-tante más del que tenía antes del 7 de mayo. ¿Qué va a hacer us-ted? No lo sabemos, pero le voy a decir ahora lo que sí sé sobre la

Pedro UrquijoEducador

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paz y cómo alcanzarla: no haga nada, señor López, porque lapaz llegará inevitablemente, aunque usted no se lo proponga.Es el mismo consejo que le daría si fuese usted a ligar a un bai-le. La paz es una señorita que huye de los que la persiguen.Mejor siéntese al fondo de la pista y, con el conveniente aplo-mo, déjese usted querer. La paz forma parte del plan, y sólo losfrustados moscones que no se comen una rosca siguen empe-ñados en que la paz es muy difícil y que hacen falta complica-das estrategias para conseguirla. Bobadas. La paz es cuestiónde quererla y hacerse digno de que a uno lo quiera. Quien amala paz ya la tiene, no tiene que ir a buscarla a ningún sitio, quees como decir que si tienes con quien hacer el amor de verdadprefieres quedarte en la cama que ir a desfilar. Señor López,entiéndame lo que le voy a decir, porque se lo digo con respe-to y afecto: usted es de esos maquetos que merodeaban por losbailes populares del País Vasco a finales del siglo XIX. No loniegue y métase en el papel. Tiene usted muchas más posibi-lidades de ligar que nosotros. Y lo mejor es que si usted liga,ligamos todos o, al menos, los que preferimos vivir a morirnosde miedo.

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Funcional, dinámica y capaz de integrar las herramientasde participación 2.0. Con esas palabras se puede definir laweb que estrena Lokarri. En edición bilingüe (euskara-cas-tellano) www.procesodepaz.org o www.bakeprozesua.org, elweblog comienza su andadura para ofrecer un espacio a to-das las personas interesadas en la paz y la normalización.

Kanpaina

34 Haritu

para dialogar sobre la paz y la convivencia

Nuevo weblog

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Ante la necesidad de adaptarse a los nue-vos retos que plantea la ponencia aprobadael pasado enero por la Asamblea General Ex-traordinaria Lokarri, basados en un funcio-namiento transparente y participativo, laRed ciudadana por el Acuerdo y la Consultase propuso crear una nueva página web diri-gida a a ganar en dinamismo y ser capaz deintegrar las herramientas de participación2.0. Bajo el título Proceso de paz o Bake-pro-zesua (se ha elaborado en edición bilingüeeuskara-castellano), el nuevo weblog ya estáen marcha (faltan por cargar algunas funcio-nes) dispuesto a ofrecer un espacio de parti-cipación para todas las personas interesadasen la paz y la normalización y buscando sem-brar información sobre el proceso de paz y laactividad de Lokarri que pueda transformar-se en implicación en las campañas, activida-des y formas de organización.

Como principal novedad se puede desta-car que la web contiene un espacio blog enel que participarán referentes sociales y po-líticos aportando sus impresiones sobre lapaz y la normalización. El proceso de paz pre-tende ser una «plaza pública» para la con-versación sobre los temas señalados, un es-pacio plural, donde tengan cabida todos lospuntos de vista.

En una firme apuesta por las tecnologías2.0, Proceso de paz incorpora herramientascomo Facebook Youtube, Twitter o Flickrpara ampliar sus posibilidades de comunica-ción e interactividad con la ciudadanía. Laparticipación 2.0 es la concreción en inter-net de muchos de los principios por los queha venido trabajando Lokarri, ya que impli-ca: 1) escuchar lo que la ciudadanía está di-ciendo en la red, 2) dialogar con todas laspersonas que también están aportando opi-

niones e ideas sobre la paz y la normalizacióny 3) sumarse a las redes existentes y generarnuevas con las personas que mantienen opueden mantener una posición activa por lapaz y la normalización.

Entre otros apartados, podemos encontrarel dedicado a las publicaciones de Lokarri, asus campañas, al Observatorio Social, a surevista y otro en el que se ofrece la posibili-dad de asociarse o/y colaborar con la Red.

Con un bánner animado en la parte supe-rior, el sitio presenta un diseño gráfico mini-malista. Además, la web está optimizada pa-ra conseguir un buen posicionamiento enbuscadores.

Más iniciativas a la vistaDesde que enero se celebrara la Asamblea

General de Lokarri y se marcaran nuevos re-tos para este curso, la Red ha desarrollado

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una intensa actividad. Entre otras activida-des, se ha sumado al carro de las nuevastecnologías 2.0; se ha encerrado en Bilbao,Gasteiz e Iruña para debatir, reflexionar yllegar a consensos sobre cuestiones relacio-nadas con la pacificación y la normaliza-ción política; ha puesto en marcha el Ob-

servatorio Social del proceso de paz y ha or-ganizado Observatorios Locales en variaslocalidades obteniendo un respuesta satis-factoria; y ha editado la publicación «Com-partiendo experiencias, tejiendo redes», enla que la Red ofrecerá su experiencia o ser-vicios en la dinamización de iniciativas de

participación a todas las personas, asocia-ciones y entidades que quieran iniciar pro-cesos participativos.

La labor de Lokarri por abrir caminos pa-ra lograr la paz no cesa y la bandeja de sali-da de nuevas iniciativas no dejar de estarocupada. El primer informe del nuevo Ob-

Kanpaina

Encerrado/as por la reconciliación

El pasado 13 de junio, Lokarri se volvió aencerrar para hablar sobre temas relaciona-dos con la pacificación y la normalizaciónpolítica. En esta ocasión el Encierro tuvo lu-gar en Pamplona y durante diez horas, mediocentenar de personas, y otras 40 por Inter-net, debatieron y reflexionaron sobre posi-bles fórmulas que faciliten la reconciliaciónde la sociedad.

La jornada empezó con una mesa redondasobre el tema a cargo de Miguel Izu, miem-bro del Foro por la Reconciliación, y CarlosMartín Beristain, especialista en cuestionessobre víctimas y reconciliación. «Para unproceso de reconciliación es imprescindibleun contexto favorable, y que haya un deseo

real de reconciliación», explicó Beristain,que remarcó la importancia de reconocer elsufrimiento «de los otros» para romper blo-queos y las fronteras que todavía existen en-tre las partes enfrentadas. Por su parte, Izuincidió en su experiencia como miembro delForo para la Reconciliación, que todavía dasus primeros pasos. «La reconciliación esfundamental para que no queden cuestionespendientes como ha ocurrido con la GuerraCivil y el franquismo. Entonces no huboproceso de reconciliación, y ahora pagamoslas consecuencias», subrayó.

Posteriormente se dio inicio a una dinámi-ca de trabajo en grupos creada para este en-cuentro y basada en otras como el «rol pla-

ying» o «la lluvia de ideas», que consistía enque los participipantes se acercaran a dife-rentes realidades, poniéndose en la piel deotras personas y desde ahí responder a las si-guientes dos preguntas: ¿Qué puedes aportarpara contribuir a un proceso de reconcilia-ción?, ¿qué esperas recibir de un proceso dereconciliación? Lokarri propuso a los partici-pantes que asumirán cinco roles diferentes(ETA, Gobierno de España, víctimas del te-rrorismo, otras víctimas de motivación polí-tica,y profesores de instituto como promoto-res de la cultura de la paz) en busca de situa-ciones de empatía que ayuden a encontrarpuntos de encuentro.

Por la tarde se consensuaron las propuestas

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servatorio Social del proceso de paz, una pu-blicación sobre el tema de la reconciliacióny otra con las conclusiones de los encierrosde Pamplona, Vitoria y Bilbao son algunosde los proyectos ya en marcha. Además, pa-ra después de verano se han previsto charlas,una acto intergeneracional de compromiso

con la paz y más ingredientes para ir compo-niendo la receta que permita resolver losproblemas que padece nuestra sociedad deuna manera pacífica y democrática.

Pero hasta entonces hora de que todasaquellas personas que han colaborado conLokarri nos tomemos un merecido descan-

so que nos permitirá afrontar con más fuer-za el regreso a la actividad en septiembre.

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o aportaciones más interesantes escuchadaspor la mañana, teniendo en cuenta quiéneslas habían realizado. Así pues, se fueron ana-lizando las propuestas rol por rol. Durante lajornada se destacó la necesidad de asentarunas bases en torno al fin de todo sufrimien-to como paso previo al proceso de reconci-liación.

Las conclusiones definitivas del trabajo re-alizado fueron redactadas y publicadas en laweb de Lokarri (www.lokarri.org), donde sesuscitó un interesante debate y se recibieronnumerosas aportaciones -están disponiblesen la web- en torno a las mismas.

Lokarri recogerá en un documento lasconclusiones de los encierros de Pamplona,

Vitoria y Bilbao, que será remitido a partidospolíticos, instituciones y movimientos socia-les. La red volverá a llevar el debate a la so-ciedad el próximo otoño con nuevas refle-xiones entorno a la pacificación.

El Encierro cleebrado en Pamplona fue eltercero de los organizados por Lokarri, en losque la participación social ha sido el motorprincipal de la reflexión. «Ha sido un labo-ratorio social de participación ciudadana»,resumía Paul Ríos, tras el encuentro cele-brado en la capital navarra. «Oír opinionesdistintas es aire fresco, y genera nuevas ide-as y nuevas propuestas», subrayó Ríos.

Tras dialogar sobre el final de la violenciaen Bilbao, y después de tratar en Vitoria el

respeto de los derechos humanos de los pre-sos, en Pamplona Lokarri abordó el tema dereconciliación social, al considerarlo uno delos grandes retos que deberá afrontar la so-ciedad vasca una vez logrado el final de laviolencia. «Aunque ahora no se dan las con-diciones para comenzar un proceso de recon-ciliación debido a la persistencia de la vio-lencia, como sociedad debemos ir preparan-do el camino para poder desarrollarlo y cul-minarlo en el futuro», sostiene Lokarri, quecomo primer paso considera fundamentaldecidir qué entendemos por reconciliación ydefinir los contenidos de este proceso.

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Irán se está viendo azotada por continuas jornadas

de protestas y violencia desde que el pasado mes se

celebraran una polémicas elecciones presidenciales,

cuyo resultado la oposición ha denunciado como

fraudulento.

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tras la revolución verdeEl incierto futuro persa

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José Luis Salgado, periodista.

El día 12 de junio se celebraron las elecciones presidencialesen Irán, elecciones que a la postre iban a sacudir los cimientosde esta República Islámica y que iban a provocar una reacciónsocial sin precedentes en el actual régimen iraní desde su naci-miento en 1979, cuando revueltas populares de carácter similaracabaron con la dictadura del Sha Mohammad Reza Pahlevi.Mientras las autoridades se apresuraban a dar la victoria en loscomicios al presidente «saliente» Mahmud Ahmadineyad, unagran parte de la sociedad percibía que se habían alterado los re-sultados para evitar que llegase al poder el candidato modera-do Mir Husein Musaví. La consecuencia es que muchos de lospartidarios de Musaví se echaron a la calle para solicitar el es-clarecimiento del recuento electoral. El régimen de los ayato-lás ha respondido con dureza a estas protestas, como hemos po-dido seguir en los medios de comunicación los pasados días.

Irán en 2009La celebración de estas elecciones podría darnos a entender

que Irán es una democracia. Nada está más lejos de la realidad.El sistema político que se constituyó tras el exilio del Sha estáfundamentado en la ley islámica y férreamente dirigido por losmáximos dirigentes de la doctrina chií. La autoridad máximadel país es el Guía Supremo, actualmente Sayed Alí Jamenéi,

que detenta en su persona el poder sobre el estamento militar ypolicial, los medios de comunicación y la judicatura. Además,se encarga de nombrar a 6 teólogos que, junto a 6 juristas, for-man el llamado Consejo de Guardianes, que a su vez elige a loscandidatos a la presidencia. El Presidente es, por tanto, un me-ro ejecutor de las directrices de instancias superiores absoluta-mente controladas por la jerarquía religiosa chií.

Este sistema político se ve reflejado en una realidad socialopresiva. Según el Informe 2009 de Amnistía Internacional, elnúmero de ejecuciones el pasado año ha sido de 346 reconoci-das, hay 133 personas condenadas a muerte, la tortura y los ma-los tratos son prácticas habituales, se imponen a menudo penastan crueles como flagelación y amputación, se discrimina gra-vemente a mujeres, gays, lesbianas y a las minorías étnicas y re-ligiosas. Las libertades de expresión y de asociación están férre-amente controladas. Los 72 millones de habitantes que hoy endía viven en Irán tienen seriamente coartados la mayoría de susderechos fundamentales. Incluso se imponen directrices encuanto a la forma de vestir, sobre todo a las mujeres, y se les li-mita el uso del maquillaje, los pantalones ajustados e, incluso,las gafas de sol.

Esta sociedad con derechos limitados se ha visto afectada enlos últimos años por una creciente crisis económica, debida so-

verdepersa

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bre todo a la caída de los precios del petróleo y a la probableasignación de grandes partidas de dinero público a proyectos«ocultos». El periodista y experto en economía iraní BahmanAhmadi Amouee, cree que la administración de Ahmadineyadha gastado unos 238.000 millones de dólares desde 2005 enproyectos relacionados con el desarrollo nuclear y la industriamilitar. La combinación de estos factores ha supuesto que la in-flación suba hasta el 30 por ciento y el desempleo hasta el 10por ciento, creando un descontento social, sobre todo entre lasclases medias urbanas. La respuesta de Ahmadineyad ante estedescontento ha sido tomar medidas de tan dudosa efectividadcomo el reparto de patatas entre la población o ayudas econó-micas directas a las familias, en lugar de dedicar ese dinero acrear empleo y dinamizar así la maltrecha economía iraní.

Las elecciones presidencialesEn este marco social se convocaron las elecciones presiden-

ciales del 12 de Junio, elecciones en las que concurrían loscandidatos que habían superado el filtro previo del Consejode Guardianes de la Revolución, el órgano que garantiza la

adhesión de los presidenciables a los principios fundamentalesdel régimen teocrático. Como ya sucedió en 2005, la elecciónse iba a dirimir entre dos corrientes: la más conservadora, en-carnada en el presidente Ahmadineyad, que representa lacontinuidad de la ortodoxia del régimen de los ayatolás, y unalínea más reformista, que defiende una mayor apertura del sis-tema político iraní. Esta línea reformista que lidera en 2009Mir Hosein Musaví, es la continuadora de la candidatura de-rrotada en 2005, cuando el actual presidente Ahmadineyad seimpuso (también en circunstancias poco claras) al clérigo re-formista Mohamed Jatamí, que había presidido el país desde1997. Hay que tener en cuenta que esta línea reformista no vacontra la naturaleza del régimen islámico, sino que aboga porcambios económicos y sociales, acordes con el sentir de esaclase media que se ha visto perjudicada por la crisis económi-ca y el desempleo, pero que no afectan a la estructura del ac-tual sistema político.

El día de las elecciones, las ilusiones de esa gran parte de laciudadanía se vieron truncadas de raíz. Y no porque Ahmadi-neyad ganase las elecciones limpiamente, sino porque el régi-

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men manipuló los resultados de forma burda y descarada parafavorecer al candidato continuista. Las pruebas que han ido sa-liendo a la luz son abrumadoras: localidades en las que el nú-mero de votantes por Ahmadineyad superan el número de elec-tores censados, videos en los que se aprecian cómo miembrosdel Ejército llenan las urnas con votos a favor del presidente ocolegios electorales que cerraron dejando a miles de electoressin la posibilidad de ejercer su derecho. Ese mismo día, miles depersonas se echan ya a la calle para denunciar este fraude y secomienza a solicitar al Consejo de Guardianes la repetición delos comicios.

¿Dónde está mi voto?A partir de la proclamación de la victoria aplastante del can-

didato preferido por la cúpula del régimen, las protestas se ha-cen cada vez más intensas y aglutinan a cada vez mayor núme-ro de personas. Este sector reformista de la sociedad iraní, for-mado principalmente por jóvenes urbanitas y personas pertene-cientes a una clase media venida a menos a causa de la crisis yque se había movilizado masivamente a favor de Musaví duran-

te la campaña electoral, empieza a preguntarse y a preguntar alas autoridades: ¿Dónde está mi voto? Cabe destacar el papelque han jugado en estas protestas las nuevas tecnologías. Noshan mostrado a una generación que se mueve con fluidez porlas redes sociales como Twitter o Facebook, que suben videos aYouTube o imágenes a Flick desde sus teléfonos móviles y quese organizan mediante SMS.

Las autoridades reaccionan y comienzan a reprimir las mani-festaciones mediante la violencia ejercida tanto por los cuerpospoliciales como por milicianos afectos al régimen. Las víctimasmortales ascienden ya a trece personas y las detenciones afec-tan ya a 627 personas, de muchas de las cuales se desconoce suparadero actual. Un centenar de estos detenidos son figuras po-líticas ligadas al movimiento reformista. El régimen ha inten-tado impedir que el mundo conozca las protestas y ha expulsa-do a periodistas, ha perseguido a blogueros y ha reducido el an-cho de banda de las conexiones a Internet para evitar que sesuban fotos y videos a la red.

La actitud del líder reformista Musaví durante estas protestasha sido la de mantener el pulso frente al golpe de estado «de

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facto» que ha supuesto la proclamación de la victoria de Ah-madineyad. Ha sabido mantenerse en un discreto segundo pla-no, pero se ha sumado al luto por las víctimas mortales, ha pe-dido que la población se declare en huelga en caso de que lasautoridades ordenen su detención e incluso ha declarado queestá listo para el martirio». A pesar de ser un candidato del ré-gimen, como todos ellos, y de no cuestionar los principios bá-sicos en los que se sustenta el régimen, ha sabido catalizar entorno a su figura el descontento de amplios sectores de la socie-dad iraní. De momento, su futuro es más bien incierto al igualque el impacto que tendrán las protestas en la continuidad deAhmadineyad como presidente, aunque todo hace presagiarque la continuidad del régimen está asegurada.

Reacción internacionalEsta desestabilización interna de uno de los grandes países

productores de petróleo no podía pasar desapercibida para los

gobiernos occidentales, que se han apresurado a pedir a las au-toridades iranís que aclaren el presunto fraude electoral. La re-acción del gobierno iraní ha sido acusar a Estados Unidos, Rei-no Unido, Francia y Alemania de instigar las revueltas para in-tentar derrocar al régimen y favorecer a Israel. Incluso hayquien ha hablado de conspiración de los servicios secretos oc-cidentales para desestabilizar el país fomentando las revueltaspara así tener una excusa para intervenir militarmente, comose ha hecho ya en Irak o Afganistán. Parece claro que el inter-vencionismo en la zona se va a incrementar cada vez más enfunción de que disminuyan las reservas mundiales de petróleo.La tarta se va a ir reduciendo y hay grandes intereses en con-servar su porción intacta. Mientras la prosperidad de nuestrassociedades siga basándose en el uso de combustibles fósiles, vaa resultar muy difícil que los habitantes de esa zona que cono-cemos como Oriente Próximo pueda vivir en paz y disfrutar dederechos humanos reales.

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