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Ideología, organización y estrategia. El Partido Comunista del Perú en el Valle del Alto Huallaga (1999-2012)

Ideology, organization and strategy. The Peruvian Communist Party in

Upper Huallaga’s Valley (1999-2012)

Miguel Jiménez Vigara*

Resumen: Desde 1999 existe en el Perú una guerrilla que presenta un desarrollo autónomo y diferencial: el Partido Comunista del Perú, Valle del Alto Huallaga (PCP-VAH). Esta remanente del grupo maoísta Sendero Luminoso ha presentado un nuevo rumbo en el siglo XXI. Por ello, el objetivo de este artículo es tratar aspectos esenciales como la ideología, organización y estrategia, con el motivo de señalar la especificidad propia de los guerrilleros peruanos en un contexto marcado por la regionalización y el debilitamiento de sus fuerzas. Además, de los cambios y continuidades con sus predecesores: Sendero Luminoso y Sendero Rojo Palabras clave: Maoísmo; Subversión; Sendero Luminoso; Terrorismo. Abstract: Since 1999, there is a Peruvian guerrilla that presents an autonomous and differential development: the Peruvian Communist Party, Valle del Alto Huallaga (PCP-VAH). These remains of Sendero Luminoso have presented a new direction in the 21st century. The aim of this paper is defining the new direction of the PCP-VAH, located in Huallaga Valley, as an independent organization. Therefore, we will discuss essential aspects of the PCP-VAH, as its ideology, organization and strategy, in order to emphasise the changes appeared because of the weakening of the guerrilla and the new regionalisation context. Besides, the changes and the continuities with its predecessors: the Shinning Path and Red Path. Key words: Maoism; Subversion; Shinning Path; Terrorism.

Recibido: 2 mayo 2021 Aceptado: 19 agosto 2021

* Español. Historiador y magíster en Estudios Latinoamericanos por la Universidad de Barcelona. En la actualidad, doctorando sobre el Partido Comunista del Perú, Sendero Luminoso, en la misma institución dentro del programa doctoral de Sociedad y cultura: Historia, Antropología, Artes, Patrimonio y Gestión cultural. Correo electrónico: migueljimenezvigara@gmail.com. Orcid: https://orcid.org/0000-0002-6213-7307.

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Introducción El Huallaga no cesa. Su cauce sigue después de la detención en 1999 de Óscar Ramírez Durand

(a) Feliciano, líder de Sendero Rojo1. Las tierras que cubren el río y sus alrededores están marcadas por el cultivo de la coca, el narcotráfico, la pobreza y la militarización del territorio. Esta convulsionada tierra, que tanto cautivó a Wérner Herzog2 en Conquista de lo inútil, sigue acarreando conflictos de forma permanente. El final del siglo XX e inicio del XXI , en el contexto de la insurgencia maoísta, está marcado por la división en dos de la remanente3 de SL surgida en 1992: la guerrilla del Valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (VRAEM), que también aglutina la zona central y sur central4 ,y la del Valle del Alto Huallaga5 (VAH). Estos últimos se han mantenido en el corazón de la selva, inmersos en un progresivo proceso de regionalización y debilitamiento.

Tal proceso abrió las puertas a un desarrollo independiente de la remanente del VAH, la cual mantendrá contactos y disputas contra los rápidos del río, es decir, contra el poder político, narco, militar y campesino. Es así, que debido a los múltiples elementos existentes, hemos planteado un objetivo general y cuatro de específicos.

El objetivo general de la investigación es analizar los cambios y continuidades producidos en el seno del PCP-VAH en su surgimiento y desarrollo. Objetivos específicos son, primero, estudiar los cambios ideológicos surgidos a raíz de la detención de Óscar Ramírez Durand (a) Feliciano, en julio de 1999. Segundo objetivo es dilucidar la administración organizativa y las estrategias utilizadas por la guerrilla6 de 1999 hasta la captura de Florindo Eleuterio Hala (a) Artemio, en 2012. Tercero, identificar

1A lo largo del artículo utilizaremos el término PCP-SL, SL, Sendero Luminoso o Sendero, para referirnos al Partido Comunista del Perú, por el Sendero Luminoso de José Carlos Mariátegui, tanto para el período de 1969-1992, como para referirnos a las posturas “acuerdistas” surgidas después de la captura de Abimael Guzmán. Para la escisión que surge a partir de la captura de Abimael Guzmán utilizaremos PCP-Proseguir, “Felicianistas” , Sendero Rojo o PCP-M-L-M. La terminología PCP-VAH se usará para la remanente senderista del Valle del Alto Huallaga (VAH), la cual inicia su separación con la captura de Feliciano en 1999. Finalmente, utilizaremos la abreviatura PCP-VRAEM para referirnos a la otra escisión de Sendero Rojo, ubicada en el Valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro. También se puede emplear M-PCP (Militarizado Partido Comunista del Perú). 2 Warner Herzog fue un director de cine alemán, conocido, sobre todo, por sus películas Aguirre y la cólera de Dios y Fitzcarraldo, ambas rodadas en el Perú. A esta última le dedicó un diario, publicado con el nombre de Conquista de lo inútil, en el que se exponen los peligros de la selva y el modo de vida de sus pobladores, con especial énfasis en lo que conlleva convivir con el río Huallaga. 3 Utilizaremos, de forma general, el término “remanente” y “rezago” para referirnos a los grupos guerrilleros del PCP-Proseguir, PCP-VAH y M-PCP y PCP-VRAEM. Esta terminología está ampliamente extendida por la historiografía sobre el PCP-SL después de 1992, la cual utiliza “remanente” y “rezago” para referirse a los “restos” de Sendero Luminoso que continúan en activo. 4 La región central corresponde al departamento de Pasco, Junín y Huancavelica (Huancavelica, Tayacaja y Churcampa) , y la región Sur Central es compuesta por los departamentos de Ayacucho, Apurímac (Andahuylas y Chincheros) y Huancavelica (Acobamba y Angares). 5 Se ha escogido analizar a la remanente ubicada, principalmente, en el Valle del Alto Huallaga (VAH) debido a la notoria escasez de estudios y análisis existentes sobre dicho grupo guerrillero. 6 Cuando hacemos mención al PCP-SL o a sus remanentes con el término “guerrilla” nos referimos a la práctica revolucionaria llevada a cabo por estas organizaciones, como también a como entendieron la confrontación con el Estado mediante de la Guerra Popular Prolongada (GPP): teoría maoísta donde la guerra de guerrillas tiene una importancia fundamental. Del mismo modo, entendemos al PCP-SL – y a sus remanentes- como un movimiento subversivo, puesto que llevó a cabo una lucha armada prolongada contra un Estado, ocasionando un conflicto armado interno. Características de los movimientos subversivos que cumple el PCP-SL y sus remanentes, son la movilización social continuada, la existencia de una identidad frente a otra, la propaganda, la asistenci social y el activismo social y político, véase: Javier Jordán, “Delimitación teórica de la insurgencia: concepto, fines y medios”, Análisis GESI, Nº 8, 2011, 1-5.

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la relación de la remanente con el narcotráfico. Finalmente, el cuarto objetivo, es comprender la influencia del contexto regional, en particular la zona cocalera del Valle del Alto Huallaga. Asimismo pretendemos, tal y como lo mostró Carlos Iván Degregori7 con el PCP-SL, politizar y ahondar en el recorrido ideológico y genealógico de la guerrilla maoísta, para así mejorar su comprensión.

El logro de tales objetivos se tratará de conseguir a partir de la hipótesis según la cual el foco guerrillero del Valle del Alto Huallaga , después de la captura de Feliciano sufrió un proceso de mutación ideológica, estratégica y organizativa en el cual se produjeron diversas escisiones que derivaron en una guerrilla de carácter foquista, resistencialista, paralelamente al abandono de los principios del maoísmo.

La presente investigación, tal y como expone el título de la misma, se rige por el estudio concreto de los aspectos relativos a la ideología, organización y estrategia del PCP-VAH. Para que estos tres elementos sean la base de análisis hacia el PCP-VAH, y nos permitan otorgar una cohesión interna al propio artículo, es necesario realizar una definición de los mismos.

El análisis y estudio de la ideología del PCP-VAH se ha basado en dotar a la “ideología” de un sentido político y social, en oposición a la concepción de Marx y Engels en la Ideología Alemana8, la cual hace mención a la “falsa conciencia” o a las “falsas ideas”. Ahora bien, es relevante rescatar y adoptar el sentido marxista que entiende a la ideología como una forma de conciencia de los conflictos9; tesis esta que permite sostener la noción ideológica gramsciana en que la ideología tiene una conexión con la realidad social y con las masas. Es así como, en consonancia con Antonio Gramsci, se ha entendido a la ideología como la organización de las masas humanas que forma el terreno en medio del cual se mueven los hombres y adquieren conciencia de su posición y luchan10. En otras palabras: el término ideología hace mención a la expresión de la vida social de un grupo o de unas masas concretas y su relación con un conflicto. Por ello, también constituye una síntesis entre la praxis y la conciencia, propuesta expuesta por Terry Eagleton, que reflexiona sobre que la idea de que la ideología contribuye a la construcción de intereses sociales, en vez de reflejar pasivamente posiciones dadas de antemano11. Dentro de ella tienen cabida, también, los deseos y las nostalgias12 que le son propias, ya que puede ser comprendida como un “proceso13”

Establecer un análisis de la “organización” de un grupo guerrillero como lo es el PCP-VAH, de carácter marxista, significa entender la “organización” como una estructura y un sistema de accionar. La organización atañe, pues, a elementos como lo son la base orgánica y el número de miembros que forman parte. Empero, no solamente se incluye a “la organización de los revolucionarios14” o al “núcleo dirigente” estrictamente, pues se enfoca, además, en dos características esenciales de cualquier organización guerrillera: el orden y la obediencia15 junto con sus relaciones con la masa y otras organizaciones16 . Así, y en similitud con lo expuesto líneas más arriba en relación con la ideología, el

7 Carlos Iván Degregori, Qué difícil es ser Dios, Lima, Instituto de Estudios Peruanos, 2013. 8 Karl Marx y Friedrich Engels, La ideología alemana, Barcelona, Grijalbo, 1970, 50. 9 Karl Marx, Contribución a la crítica de la economía política, México, Siglo XXI, 2008, 7. 10 Antonio Gramsci, Introducción a la filosofía de la praxis, Barcelona, Península, 1970, 41. 11 Terry Eagleton, Ideología. Una introducción, Barcelona, Paidós, 2005, 282. 12 Louis Althusser, Ideología y aparatos ideológicos del Estado, Buenos Aires, Ediciones Nueva visión, 1988. 13 Federico Engels, “Engels a Francisco Mehring”, Carlos Marx y Federico Engels, Obras escogidas, Tomo III. Moscú, Editorial progreso, 1981, 523. 14 Lenin, ¿Qué hacer?, Barcelona, Debarris, 2007, 183. 15 Carl Schmitt, Teoría del partisà, Barcelona, L’esfera dels llibres, 2004, 44. 16 Mao Tsé-Tung, “Algunas cuestiones sobre los métodos de dirección”, Mao Tsé-Tung, Obras escogidas de Mao Tsé-Tung, Tomo III, Disponible en: https://www.marxists.org/espanol/mao/escritos/QCML43s.html . Revisado 26 de junio de 2021.

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término de “organización” hace referencia a aquellos elementos que, fruto de la movilización social continuada17 de un grupo y del accionar guerrillero, acaban interrelacionándose, produciendo un tipo de relación bidireccional. En síntesis: la organización es tanto lo que atañe a la estructura endógena del propio movimiento guerrillero -forma de dirección- como lo exógeno, lo encarnado fuera de él -las relaciones con la masa-.

El análisis de la concepción de la “estrategia” es primordial para el entendimiento de las acciones llevadas a cabo por una organización armada. El conjunto de las formas de desarrollar la lucha armada y su distinta y variada tipología son lo que definiríamos como estrategia. Esto incluye la forma de actuar, la táctica militar empleada y su ubicación y relación con el terreno. Podemos afirmar, siguiendo con la definición clásica de Clausewitz, que la estrategia es el uso de los combates para los fines de la guerra18. Por ello, en la estrategia se incluye el análisis de los combates y de las acciones y sus objetivo a lo largo de un periodo determinado. Del mismo modo, Ernesto Che Guevara entiende por estrategia el análisis de los objetivos a lograr, considerando una situación militar total y las formas globales de lograr esos objetivos19.

Estas concepciones –y la conformidad con ellas- nos hacen poner el foco en un elemento central, la táctica, entendida como el modo práctico de llevar a efecto los grandes objetivos estratégicos20. La táctica, en consecuencia, deviene un elemento concreto a estudiar en la presente investigación, en una forma característica: la guerra de guerrillas.

Para el desenvolvimiento práctico de los aspectos expuestos anteriormente, ha sido necesario realizar una metodología articuladora de los análisis y de la crítica de fuentes. Las fuentes utilizadas en el artículo son de tres tipos: periodísticas, estadísticas y documentales. Las periodísticas se han basado en las noticias y artículos de los diarios La República, El Comercio, El País, así como del semanario Caretas y del grupo de investigación IDL-Reporteros. Las fuentes estadísticas corresponden a aquellas que nos expresan información sobre las acciones de los grupos armados, como lo son las producidas por la Policía Nacional del Perú (PNP en adelante), la base de datos de la Comisión por la Verdad y la Reconciliación (CVR en adelante) y la base de datos del Centro de Estudios y Promoción del Desarrollo (DESCO en adelante). Por último, las fuentes documentales hacen referencia a los comunicados del PCP-VAH, la revista del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas (CC.FF.AA en adelante) junto con la información documental clasificada que se encuentra en WikiLeaks.

El uso de esta tipología de fuentes y su puesta en diálogo y contraste ha permitido realizar el estudio que aquí presentamos. En adición, un aspecto a tener en cuenta de la información consultada, de la misma forma que acontece de forma general para la historia contemporánea, es el peso e importancia que presenta la prensa periodística.

Es bien sabido que los medios de comunicación, o los “medios para la producción espiritual21”, corresponden a la clase dominante de un contexto determinado. Por ello las fuentes periodísticas constituyen un discurso propio y tienen una forma persuasiva de presentar la realidad22; del mismo modo, los expertos que opinan y conforman los mismos proceden de los mismos mass media y del

17 Javier Jordán, “Las nuevas insurgencias. Análisis de un fenómeno estratégico emergente”, Anuario de Derecho Internacional, 24, 2008, 273. 18 Carl Von Clausewitz, De la guerra, Madrid, La Esfera de los libros, 2005, 139. 19 Ernesto Guevara, La guerra de guerrillas, Nafarroa, Txalaparta, 2017, 21. 20 Idem 21 Karl Marx y Friedrich Engels, op.cit., 50. 22 Maria Dolores Saíz y Juan Francisco Fuentes, “La prensa como fuente histórica”, Miguel Artóla (ed.), Enciclopedia de historia de España, Madrid, Alianza, 1993, 533.

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Estado23. Estos son aspectos sociales e ideológicos que condicionan su presentación y representación de la realidad. Por este motivo, en la presente investigación, se ha desarrollado un análisis contrastivo con todas las fuentes, pero especialmente, con las periodísticas, debido a que son una parte incompleta de la realidad y, en suma, “ningún documento es inocente24”.

La contrastación de la información periodística también se ha producido mediante el dialogo de las ausencias documentales y, también, mediante su comparación con la bibliografía y con las fuentes estadísticas. Específicamente este análisis se ha dado para la totalidad del PCP-VAH, como en las comparaciones con el PCP-M-L-M. Con todo ello, se ha llevado a cabo una contrastación con la finalidad de arribar a la magnitud de la dimensión social y la naturaleza y magnitud del PCP-VAH.

Estado de la cuestión La producción bibliográfica sobre las remanentes o rezagos de SL es tímida si la comparamos

con los extensos trabajos y estudios sobre el conflicto armado interno. En el siglo XXI, los autores han centrado sobremanera su atención a aspectos socioeconómicos, como el narcotráfico y la producción ilegal de hoja de coca. Dentro de estos estudios se ha tendido a analizar -debido a su crecimiento en importancia- al VRAEM con mayor preponderancia que al VAH. El conjunto de los autores, exceptuando obras específicas como Taylor25 y Ríos y Sánchez26, han obviado el papel de las remanentes como organizaciones políticas y comunistas, elementos que han sido relegados a un segundo plano. A continuación expondremos los nuevos enfoques sobre el PCP-VAH así como de la región del Valle del Alto Huallaga.

Los estudios de García et al27, Soberón28, Arce29, Novak et al30 y Santillán31 que exponen superficialmente las actividades del PCP-VAH sostienen la participación directa del grupo en la cadena del narcotráfico, básicamente como protector de las actividades ilícitas32. En esta lógica, Santillán33, de forma más categórica, sostiene que el PCP-VAH, en similitud al PCP-VRAE-VRAEM, actúa como narcoterrorista, teniendo unas relaciones muy estrechas con toda la cadena de la producción de coca . Carlos Meléndez , por su parte, sostiene que las remanentes de Sendero Luminoso se ponen al servicio de los narcos como mecanismo para su propia supervivencia señalando así la normalización de una

23 Guy Debord, Comentarios sobre la sociedad del espectáculo. Barcelona, Anagrama, 2018, 29. 24 Jacques Le Goff, Pensar la historia, Barcelona, Paidós, 1991, 108. 25 Lewis Taylor, “Sendero Luminoso in the New Millennium: Comrades, Cocaine and Counter-Insurgency on the Peruvian Frontier”, Journal of Agrarian Change,1, 17, 2017, 106-121. 26 Jerónimo Ríos y Marté Sánchez, Breve historia de Sendero Luminoso, Barcelona, Catarata, 2018. 27 Jaime García et al, Lucha contra el narcotráfico en el Perú: Una estrategia para el gobierno 2011-2016, Lima, Pontificia Universidad Católica del Perú, 2011. 28 Ricardo Soberón, El Narcotráfico en el Perú; Las Políticas de Estado y uno de sus Actores, Lima, CIDHH, 2007; Ricardo Soberón, “Drogas y criminalidad organizada”, Politai, Lima, Pontificia Universidad Católica del Perú, 4, 3 , 2012, 57-65. 29 Gerardo Arce, “Los riesgos de militarizar la lucha contra el narcotráfico: algunos apuntes sobre el Plan VRAE”, Coyuntura, 17, marzo-abril 2008, 18-21. 30 Fabián Novak et al, Niños, Niñas y Adolescentes en las Zonas Cocaleras del VRAE y el Alto Huallaga, Lima, Pontificia Universidad Católica del Perú, 2011. 31 Patricia Santillán, ”Sendero Luminoso: evolución histórica y relevancia actual”, Instituto Español de Estudios Estratégicos (IEEE), Documento opinión, 34, 2017, 1-17. 32 García et al, op. cit., 55. 33 Santillán, op., cit., 9.

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conducta delincuencial34. El discurso utilizado hace hincapié en el oportunismo guerrillero, ya que intentan aprovecharse de la coca con fines políticos.

Ahora bien, también hallamos estudios más amplios sobre la temática en cuestión. Es así como Gorriti, mediante la entrevista y el análisis de caso, define en tres grandes rasgos la política del PCP-VAH: el no-uso de la violencia hacia la población autóctona del Huallaga; la animadversión ideológica con el PCP-VRAEM por su rechazo a Abimael Guzmán; y la capacidad de acción y movilidad peses a los problemas sufridos en el pasado35.

Jaime Antezana36 afirma que el PCP-VAH y el M-PCP mantienen una actividad similar que es la protección de las rutas de la droga, ataques contra sicarios y narcotraficantes y, sobre todo, en asesinatos selectivos. El autor, además, sostiene que los discursos políticos de las remanentes son una mera “fachada”, y que la guerrilla es similar a las F.A.R.C. .

El planteamiento de Manuel Moreno37 se inscribe en la línea argumental de Antezana, puesto que ambos dan por válida la tesis sobre el narcotráfico sostenida por la OFAC38 y afirman que Sendero aumentó sus nexos con el narcotráfico a partir del 2000, convirtiéndose en un cártel más en 200439. En el mismo sentido, pero con distinta calificación, Chamba Valencia et a40l expone existió una implicación directa y total, primero, del PCP-SL a partir de 1992, y , segundo, del PCP-VAH, con el narcotráfico, denominando al rezago senderista como “mafioso”. Páucar41 que se centra en un marco temporal y regional limitado en las regiones de Huánuco, San Martín, Ucayali y Loreto para el periodo comprendido de 2000 a 2006, actúan como mercenarios del narcotráfico.

Los trabajos de Taylor y Ríos y Sánchez , de reciente publicación, son lo que más se aproximan al estudio de los rezagos senderistas, especialmente del VAH; además de ser una excepción historiográfica ante un tema tan poco tratado por la literatura. Taylor, de forma sintética, pero precisa, abarca las distintas problemáticas que acarrean los guerrilleros del Huallaga, con especial énfasis en las actividades de contrainsurgencia del Estado peruano. Del mismo modo, se hace hincapié en los principales objetivos de las remanentes senderistas, a las cuales se les augura un futuro de decadencia y debilitamiento; eso sí, siempre que las fuerzas del orden cumplan su función y abandonen la corrupción42.

El trabajo de Ríos y Sánchez constituye el más completo y global de los estudios sobre las remanentes senderistas y de los estudios sobre el período posterior a la captura de Abimael Guzmán.

34 Carlos Meléndez, “Mediaciones y conflictos: las transformaciones de la intermediación política y los estallidos de violencia en el Perú actual”, Víctor Vich (ed.), El Estado está de vuelta: desigualdad, diversidad y democracia, Lima, Instituto de Estudios Peruanos, 2005, 172. 35 Gustavo Gorriti, Caretas, “Cielo Nublado en el VRAE”, 2009, Disponible en: http://www2.caretas.pe/Main.asp?T=3082&idE=858&idS=301#.W18uYNIzY2w. Revisado: 15 de mayo de 2018; Gustavo Gorriti, IDL-Reporteros, “Amenazas Reales e Imaginarias”, 15 de noviembre de 2012, Disponible en: https://idl-reporteros.pe/columna-de-reporteros-107/. Revisado: 15 de mayo de 2018. 36 Jaime Antezana, “La nueva guerra. La seguridad nacional amenazada””, Hugo Palma (ed.), Paz, seguridad y desarrollo en América Latina, Lima, Centro Peruano de Estudios Internacionales, 2012, 259-267. 37 José Manuel Moreno, “Sendero Luminoso, narcoterrorismo y seguridad en el Perú”, GESI, 3, 2016, Disponible en: http://www.seguridadinternacional.es/?q=es/content/sendero-luminoso narcoterrorismo-y-seguridad-en-el-perú. Revisado: 10 de enero de 2018. 38 La Office of Foreign Assets Control (OFAC) es un organismo de control financiero dependiente del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos. 39 Moreno, op. cit., 10. 40 Franco Valencia Chamba et al, “Coca et violence: le témoignage du Alto Huallaga au Pérou”, Aurepart, 26, 2003, 157-171. 41 Felipe Páucar, La Guerra Oculta en el Huallaga, Monzón y Aguaytía, Tingo María, Centro de Estudios y Promoción para el Desarrollo Agroindustrial (CEDAL), 2006. 42 Taylor, op. cit., 119.

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En lo referente al VAH, ambos autores aportan una síntesis de los distintos procesos vividos en la región, pero sobre todo, de los cambios que produjo la regionalización del movimiento subversivo y el progresivo proceso de cambio ideológico e insurgente. Esto, según los autores, desembocará en un nuevo actor político: el MOVADEF43.

Una vez hechas las consideraciones de los distintos autores sobre el PCP-VAH, es pertinente recapitular afirmando que la tendencia principal de la historiografía sobre el postconflicto y, concretamente sobre el PCP-VAH, es la caracterización de este grupo como una organización criminal debido a que se considera que sus acciones y nexos con el narcotráfico le otorgan dicho calificativo. Una de las ideas centrales de la realización del presente artículo es nadar a contracorriente de estas posiciones predominantes en la Academia y su tradición investigativa. La diferenciación con estas apreciaciones sería la siguiente tesis: el PCP-VAH tiene un carácter político.

En este sentido, hay autores como Ríos y Sánchez (2018) que han rehusado también la reducción simplista de las remanentes de Sendero Luminoso a una cuestión estrictamente relacionada con el narcotráfico44. En consonancia a este planteamiento, es relevante señalar los puntos de vista de Soberón (2013), Lajtman y Mendoza45 (2018), que sostienen que los vínculos con el narcotráfico no inhabilitan el accionar político de las remanentes, es decir, que no les convierte en un mero grupo criminal, lo que significa la imposibilidad de cualquier discusión política, sino represión y cárcel46.

Estas posturas, con las cuales presento conformidad, se extrae -y así se expone en el apartado “organización” del artículo- que el PCP-VAH sí mantiene vínculos con el narcotráfico y con las actividades ilícitas. Ejemplos de ello lo son sus nexos en la compra-venta de armamento, el apoyo logístico o el pago de “cupos”. Ahora bien, la mera relación y coexistencia con lo narco no convierte al PCP-VAH en narcotraficante; afirmar esto sería una postura esencialista. Esta situación es similar, como expuso Manrique (2002), en relación a la terminología de “terrorista” durante los años del conflicto armado interno (1980-2000). Para Manrique, caracterizar como “terrorista” a Sendero Luminoso, aunque utilizó el método del terrorismo en su accionar, más que explicar confundía, ya que había maneras más complejas de entender la naturaleza de un grupo armado47. En similitud, la caracterización del PCP-VAH como “narcoterrorista” u “organización criminal”, entre otras, produce una situación parecida al evadir la complejidad que constituye un grupo armado con tantas variadas especificidades como lo es el PCP-VAH. En conclusión, pues, pretendemos insertar el artículo en una línea interpretativa que aboga por tener en cuenta los factores sociales y la experiencia histórica con motivo de otorgar un carácter político a los guerrilleros del Valle del Alto Huallaga.

Ideología Presentar las ideas políticas del PCP-VAH pasa por exponer cuales fueron sus principios bajo el

liderazgo de Artemio, así como mostrar su diferenciación con el Sendero Rojo liderado por Feliciano y su posterior viraje hacia Abimael Guzmán. Estos cambios en el plano ideológico se coadyuvan con la

43 Ríos y Sánchez, op. cit., 149. 44 Ríos y Sánchez, op. cit., 140. 45 Tamara Lajtman y Marina Mendoza, “La utilización del estado de emergencia como herramienta represiva en el Perú contemporáneo: los casos del VRAEM y el Proyecto minero Conga”, e-l@tina.Revista electrónica de estudios latinoamericanos, 17, 67, abril-junio, 2019, 10. 46 Ricardo Soberón, “VRAEM: narcotráfico, terrorismo y militarización”. Werner Jungbluth (comp.), Perú hoy. El Perú subterráneo, Lima, DESCO, 2013, 135. 47 Nelson Manrique, El tiempo del miedo. La violencia política en el Perú, 1980-1996, Lima, Fondo Editorial del Congreso del Perú, 2002, 77.

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nueva práctica guerrillera foquista48, elemento este que otorga mayor sentido a la mutación de los guerrilleros del Huallaga.

Ahora bien, hay una serie de autores que niegan la existencia de una ideología propia del PCP-VAH, al considerar su estrecha relación con el narcotráfico y, por ende, su alejamiento de todo movimiento político e ideología49. Esta posición es compartida también por miembros de las fuerzas de seguridad del Estado, así lo expresó, claramente, un general de la PNP:

El grupo de narcosenderistas que está en el Huallaga es de naturaleza errante, integrado por

gente que no sabe qué es ideología. Los individuos que hemos capturado desconocen lo que es marxismo, leninismo, maoísmo. Solo saben aterrorizar, matar y obedecer al cabecilla “Artemio”. Las organizaciones terroristas, como era antes Sendero Luminoso, tienen una estructura que se maneja ideológicamente y responde a un comité central a nivel nacional, y este no funciona así50.

Los calificativos hacia los guerrilleros del VRAEM y del VAH son ambivalentes y variados. En

concreto, se les ha llegado a denominar “terroristas”, “terrorismo marxista-leninista”, “remanentes terroristas”, “narcoinsurgentes”, “delincuentes narcoterroristas”, “narcoterrorismo revolucionario” o “narcoterroristas51”. La reiteración de estos términos, y especialmente de este último, responde a la política exterior antiterrorista de los Estados Unidos; política esta que es seguida por el Perú. La finalidad de tales calificativos es la de despolitizar y homogeneizar todo sujeto o fenómeno político que vaya en contra del orden establecido, desideologizando toda oposición y unificando a todos los “enemigos del Estado”, ya sean guerrilleros o productores ilegales de coca, como es el caso del VAH y del VRAEM. Todo este conjunto de terminologías responde a la misma idea: la neutralización de todo significado político e ideológico de las reclamaciones políticas y de las protestas; eliminando la frontera entre el terrorista y el delincuente común, en tanto que ambos pasan a ser tratados como amenaza al sistema52.

Esta tendencia generalizada, también presente en parte de la Academia como hemos mencionado con anterioridad, tiende a reproducir los discursos del poder, hecho que solo logra oscurecer el fenómeno y bloquear su mejor comprensión53. Planteamiento que produce un discurso simplista sobre una organización donde una de sus principales características es su notoria especificidad. Así se debe ir más allá de su estudio y comprensión de los guerrilleros como simples miembros de una organización

48 Definimos “foquismo” como la estrategia revolucionaria caracterizada por: a) entender que el génesis del proceso revolucionario nace al establecer un “foco” revolucionario en un lugar concreto, especialmente ubicado en una zona geográfica de difícil acceso y que, con el desarrollo favorable de la actividad armada y del apoyo de las masas -especialmente las campesinas-, logre expandirse por todo el territorio nacional logrando la victoria; b) la composición de la guerrilla está basada por revolucionarios movidos por un fuerte voluntarismo, conformando estos la vanguardia armada; c) para alcanzar la revolución no hace falta la dirección de un Partido, únicamente es necesario un mando único, tanto en lo político como en lo militar. Cabe señalar que los postulados del Che fueron sistematizados por el revolucionario francés, Regis Debray, el cual dio lugar a la teoría “foquista”. 49 Autores con dicha postura son: Meléndez, op. cit.; Arce, op. cit.; Moreno, op. cit. 50 Luis Valencia en Elisabeth Prado, La República, “Hemos identificado a todos los que apoyan a Sendero en el Huallaga”, 10 de mayo de 2009, Disponible en: https://larepublica.pe/politica/397222-hemos-identificado-a-todos-los-que-apoyan-a-sendero-en-el-huallaga. Revisado: 12 de mayo de 2018. 51 Estas consideraciones se ubican en la revista del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas (CC.FF.AA). Hacemos mención específica al Nº2 de septiembre de 2008; a la edición especial del 2008; el Nº3 de diciembre de 2008; el Nº2 de diciembre de 2009; el Nº1 de abril de 2010; el Nº2 de agosto de 2010; el Nº3 de diciembre de 2010; y, por último, el Nº1 de mayo de 2011. 52 María José Rodríguez Rejas, La norteamericanización de la seguridad en América Latina, Madrid, Akal, 2017, 20. 53 Degregori, op. cit., 63.

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criminal; en consecuencia, señalar la ideología del PCP-VAH y sus cambios representa, por el contrario, politizar la historia del conflicto armado interno y del postconflicto. Plantear la politización del PCP-VAH también significa asumir su mutación ideológica, y esto pasa por afirmar la existencia de un cuerpo teórico y un plan político determinado.

La tarea política del PCP-VAH, y en similitud con el VRAEM, mantuvo una continuidad en su labor de politización y proselitismo en las poblaciones donde existió un contacto previo; dinámica que venía produciéndose desde el mismo inicio del proceso escisionista entre el PCP-SL y el PCP-Proseguir, y que se incrementó a finales de los años noventa54. De hecho, las fuerzas del orden también, aunque en muy menor medida, llegaron a afirmar la politización de las remanentes senderista, como es el caso del General Hurtado de la PNP, que sostuvo que “el único con ideología en el Huallaga fue Artemio55”. De la misma forma, el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas (CC.FF.AA), también afirmó que “ los remanentes en el Huallaga están haciendo trabajo político […] y no se meten con las poblaciones, solo contra las fuerzas del orden en defensa de los cultivos ilícitos de coca56”.

La existencia de un pensamiento propio e independiente del PCP-VAH respecto de los felicianistas y que, por ende, dio inicio a la mutación ideológica, empezó a acontecer en 1998, antes de la detención de Feliciano. En este periodo el PCP-M-L-M – partido del que surge el PCP-VAH- estuvo sumido en un proceso de lucha de dos líneas: proseguir la guerra o llegar a un acuerdo de paz con el gobierno. La principal diferenciación residió en que Sendero Rojo pretendió distinguirse como el adalid de la continuación de la lucha armada en el Perú. Los senderistas rojos siguieron planteando que en el Perú se daban las condiciones materiales para la lucha armada, pese a la captura de su líder, el presidente Gonzalo. En relación a ello, es destacable como Sendero Rojo, desde su escisión57del PCP-SL, propugnó una mayor belicosidad en sus acciones y en su retórica58; hecho que contradice con la deriva “reformista” y “acuerdista” del PCP-VAH, y la sujeción ideológica hacia el PCP-SL. Empero, es necesario remarcar un elemento que continuó perenne tanto en Sendero Rojo como con el PCP-VAH: el Pensamiento Gonzalo. Ambas organizaciones reconocieron59 la labor de Abimael Guzmán en adaptar el marxismo-leninismo a las condiciones propias del Perú.

En consecuencia, el camarada Marcelo, a espaldas de Sendero Rojo, leyó una proclama donde declaró su posición a favor de Abimael Guzmán. La declaración, grosso modo, repetía la posición ideológica de la cúpula del PCP-SL y del PCP-VAH:

(1) la solución política de los "problemas derivados de la guerra" interna (tratamiento

especial para los presos, requisitoriados, expatriados, desplazados y familiares de los desaparecidos;

54 Miguel Jiménez Vigara, “Sendero Rojo o el Partido Comunista del Perú Marxista-Leninista-Maoísta (1992-1999), Ideología, organización y estrategia”, Americanía: Revista de Estudios Latinoamericanos, 10, 172-201; Ríos y Sánchez, op. cit. 55 Darío Hurtado en María Helena Hidalgo, La República, “Jefe terrorista del Vrae planea desplazar a su gente al Huallaga”,19 de febrero de 2012, Disponible en: https://larepublica.pe/politica/611845-jefe-terrorista-del-vrae-planea-desplazar-a-su-gente-al-huallaga. Revisado: 12 de mayo de 2018. 56 Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas (CC.FF.AA), Revista del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, 2, edición especial, 2008a, Disponible en: https://issuu.com/revista-del-ccffaa/docs/revista2008_ee. Revisado: 3 de enero de 2018. 57 Después de la captura de Abimael Guzmán el 12 de septiembre de 1992, y del proceso de negociación de la cúpula de SL con Fujimori, en 1993, parte del Partido entendió que la negociación no era real. El desconocimiento y la falta de información sobre Guzmán provocó que sectores del PCP-SL entendiesen la situación como una “patraña” y manipulación por parte del gobierno. La consecuencia fue que dentro de Sendero se produjo una escisión, primero denominada como línea “Proseguir” y, segundo, ya como partido, se hizo llamar “Sendero Rojo”, a partir de 1995. 58 Jiménez Vigara, op.cit., 180. 59 Jiménez Vigara, op.cit., 183.

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(2) amnistía general en busca de la reconciliación nacional; (3) democratizar la sociedad peruana; (4) más empleo para los sectores populares; (5) clausura de la prisión de la Base Naval del Callao60.

La modificación de postura del PCP-VAH en el siglo XXI también se debe a la pérdida de fuerzas a

la que se estaba enfrentando Sendero Rojo desde 199661 y a las discrepancias entre Feliciano y Artemio, como también entre Feliciano y Raúl62 - jefe militar del VRAEM- , claro indicador de la escasa unidad al interior del partido, factor que facilitó la escisión ulterior de ambas remanentes.

En esta línea, Artemio, sucesor de Feliciano en el VAH, expresó mediante una carta el nuevo planteamiento ideológico de la remanente en base a la existencia de unas nuevas condiciones históricas en el Perú y en la lucha armada. El dirigente guerrillero creía que el problema que atravesaba al PCP-VAH residía en “la falta de una Dirección proletaria justa y correcta63, es decir, asumía que el partido no tenía un liderazgo político, ideológico y militar. Por este motivo, Artemio, tomó como solución a la situación en el Huallaga incorporarse a Guzmán:

En primer lugar, parto de elevar mi saludo y reafirmación, hoy más que ayer, con cabal

sujeción a nuestra Jefatura, el presidente Gonzalo, la Dirección Central, me reafirmo en y por defender el PCP; mi reafirmación y defensa del M-L-M, Pensamiento Gonzalo, mi reafirmación en la lucha de dos líneas como fuerza impulsora del desarrollo partidario; luchar contra la ofensiva general del imperialismo, principalmente yanqui, superpotencia hegemónica única en el mundo. […] Lo central de nuestra propuesta consistía en unirnos en torno a nuestra Jefatura, no seguir antagonizando la lucha interna, sino concentrar esfuerzos en desenvolver campaña a favor de nuestra Jefatura y el Partido64.

El acercamiento entre Guzmán y Artemio, no solo puede entenderse dentro del propio

desarrollo ideológico del partido, sino que también intervinieron otros factores; en este caso, coyunturales. La coyuntura fue la negociación existente entre la cúpula del PCP-SL y el gobierno, liderado por Montesinos. En tales negociaciones se pretendió controlar a las remanentes que aún seguían en activo para así propiciar la “pacificación” del territorio como elemento indispensable para el triunfo de las negociaciones de paz65. Esto desembocó en que Artemio, por aquel entonces, secretario del Comité Regional del Huallaga, viajó a la Base Naval del Callao para entrevistarse con Gonzalo y Miriam, con el motivo de confirmar la veracidad de las posturas sobre la “Nueva Gran Decisión y definición del PCP-SL66”, es decir, de apoyar el abandono de la Guerra Popular Prolongada (GPP).

La sujeción al presidente Gonzalo se consolidó a medida que avanzó la década. Así lo han demostrado las continuas muestras de apoyo a través de panfletos y propaganda en las localidades de

60Florentino Cerrón en Ángel Páez, La República, “Cerrón es fundador y líder histórico de Sendero Luminoso”, 6 de junio de 2003, Disponible en: https://larepublica.pe/economia/358098-cerron-es-fundador-y-lider-historico-de-sendero-luminoso/. Revisado: 12 de mayo de 2018. 61 José Luis Rénique, La voluntad encarcelada. Las 'luminosas trincheras de combate' de Sendero Luminoso del Perú, Lima, Instituto de Estudios Peruanos, 2003. 62 Taylor, op.cit. 63 Partido Comunista del Perú, Valle del Alto Huallaga (PCP-VAH), Carta de Artemio, 2000, Disponible en: http://www.cedema.org/ver.php?id=729 . Revisado: 10 de enero de 2018. 64Idem. 65 Jo Marie Burt, Violencia y Autoritarisimo en el Perú, Lima, Instituto de Estudios Peruanos, 2011, 263; Jo-Marie Burt y José López Ricci, "Peru: Shining Path after Guzmán", NACLA Report on theAmericas, 28, 3, 1994, 6-9. 66 Rénique, op. cit., 121-122.

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Tocache y Huánuco67. En este sentido, a lo largo de la carta se hace una autocrítica y, sobre todo, se asumió la derrota en todos los ámbitos de la guerra popular prolongada de 1980 a 2000. La dinámica general de la carta es de balance y sumisión al PCP-SL, lo que denota el agotamiento político y militar que estaba sufriendo Sendero Rojo. Esta posición no era pasajera, pues, como 12 años después el mismo Artemio sostuvo que la Guerra Popular Prolongada en el Perú terminó en derrota para el PCP-SL, como para las remanentes68.

La dependencia hacia Guzmán supone una mutación respecto del pensamiento continuista y beligerante del PCP-M-L-M; así como también del propio pensamiento Gonzalo (previo a las negociaciones de 1993) y del Marxismo-Leninismo-Maoísmo como ideología. La diferenciación y el cuerpo ideológico propio del PCP-VAH – su especificidad y mutación- reside en que no actúa bajo una propia voluntad política en lo ideológico al depender de los postulados de Guzmán. Empero, esto también significa su especificidad: la no elaboración de ideología independiente y propia, y su caída en el resistencialismo69 y pragmatismo. Esto se traduce en una postura política que reniega de la lucha armada en el sentido maoísta, y entiende la “democracia” como un fin y no como un medio70.Así pues, la “mutación ideológica” del PCP-VAH se destaca por la permanencia de una ideología propia, pero no de una “independencia ideológica” respecto a las demás organizaciones. Su corpus ideológico y la “conciencia espiritual de su propio valer71” residieron bajo la figura de Abimael Guzmán y los nuevos posicionamientos políticos del PCP-SL surgidos en 1992. En síntesis: Abimael Guzmán para el PCP-VAH fue un pasado cargado de presente; es más, fue un pasado vivo y continuo, de ahí que se aferrasen a él en un contexto de debilitamiento generalizado.

Esta idiosincrasia fue asumida por Artemio de forma deliberada al declarar que estaría dispuesto a participar en las elecciones peruanas porque “eso es nuestro legítimo derecho, no hay nada subversivo allí, no hay que atente contra el Estado o contra la democracia burguesa72”. En similitud, y a modo de síntesis de la práctica general del PCP-VAH, Artemio definió el accionar del grupo como “nosotros planteamos acciones armadas a fin de exigir soluciones políticas73. Esto significa que el PCP-VAH pasó a convertirse en una prolongación no oficial del PCP-SL. El apoyo deviene no oficial en base a que la declaración de intenciones de Artemio hacia el PCP-SL es solo entendida por una parte, es decir: no

67 Gustavo Gorriti, IDL-Reporteros, “Sendero en el Huallaga”, 23 de junio de 2010, Disponible en: https://idl-reporteros.pe/sendero-en-el-huallaga/. Revisado: 10 de enero de 2018. 68 Gustavo Gorriti y Romina Mella, IDL-Reporteros, “ La última entrevista”, 7 de junio de 2013, Disponible en: https://www.idl-reporteros.pe/entrevista-a-artemio-en-el-huallaga/. Revisado: 3 de mayo de 2018. 69 El Che Guevara hacia una distinción entre las 3 fases de la lucha guerrillera. La primera es la “defensiva estratégica”, fase donde la pequeña fuerza guerrillera huye del enemigo y mantiene ataques limitados; la segunda concierne al “equilibrio”, momento en el cual se estabilizan las posibilidades acción del enemigo y de la guerrilla; y, por último, se produce la fase de “desborde” del ejército represivo que llevará a la toma del poder. Si comparamos la situación de los guerrilleros del Huallaga con el modelo guevarista, podemos sostener que el PCP-VAH no solo se encontraba en la primera fase acabada de mencionar, sino que se ubicaba estancado, debilitado y sin iniciativa; de ahí que pueda ser definido como “guerrilla resistencialista”. Esto se relaciona, incluso, con la teoría de Karl Kautsky sobre la idea de conseguir objetivos políticos mediante el “desgaste” estatal de forma constante, pero sin sobrepasarlo o colapsarlo. Véase: Ernesto Guevara, Guerrilla Warfare: A method, Disponible en: https://www.marxists.org/archive/guevara/1963/09/guerrilla-warfare.htm. Revisado: 25 de junio de 2021; Karl Kautsky, Una nueva estrategia, Disponible en: https://www.marxists.org/espanol/kautsky/1909/1909-1910-nuevaestrategia-kautsky.pdf . Revisado: 25 de junio de 2021. 70 Mao Tse-Tung, Sobre la práctica y la contradicción, Madrid, Akal, 2013, 193. 71 Karl Marx, Crítica de la filosofía del derecho de Hegel, Buenos Aires, Ediciones Nuevas, 1965, 39. 72 Artemio en Gorriti y Mella, op.cit. 73Artemio en La República, “Entrevista a Artemio”, 28 de agosto de 2005, Centro de Documentación de los Movimientos Armados. (CEDEMA), Disponible en: http://www.cedema.org/ver.php?id=845. Revisado: 11 de enero de 2018.

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hay bidireccionalidad teórica ni pragmática entre Guzmán y Artemio. Es más, Alfredo Crespo, abogado de Guzmán, llegó a afirmar que:

Abimael ha dicho que es un grupo de mercenarios. Que están movidos por el interés

personal y sus acciones no sirven al pueblo, más bien lo perjudican. Su existencia y su accionar sirven para justificar a persecución contra los comunistas, para justificar las medidas represivas y criminalizar la propuesta popular74.

Esto nos lleva aún más a señalar porqué el PCP-VAH devino una prolongación no-oficial del

PCP-SL, y actuó bajo una misma línea ideológica pero no de manera conjunta; en otras palabras: la remanente del Huallaga depende de Guzmán para salvaguardar su futuro político inmediato debido a la desfavorable correlación de fuerzas existente entre el PCP-VAH y el PCP-SL, y entre estos y el Estado peruano. En consecuencia varió su línea política y militar, ya que renunció al principio maoísta de la guerra de guerrillas para convertirse en el sindicato armado del PCP-SL. Esta nueva línea provocó una actuación resistencialista al reclamar mejoras, mediante la violencia armada, para el PCP-SL, en particular de los “prisioneros políticos, prisioneros de guerra, requisitoriados, desaparecidos, desplazados y expatriados 75”.

Con este nuevo planteamiento, el PCP-VAH renunció a la destrucción de lo “viejo” al reclamar únicamente mejoras parciales al Estado. Por ello, sostenemos que se convirtió en un partido que actuaba a la defensiva y de forma resistencialista. Dentro de la lógica comunista, este comportamiento es similar al de los sindicatos, los cuales son totalmente incapaces de transformar el modo capitalista de producción76. También podemos entender esta violencia armada reformista como un intento de incorporación – y reforma- del Estado para los miembros o exmiembros del PCP-SL y PCP-VAH con el motivo de poder participar en la política parlamentaria. Estas nuevas características nos permiten calificar al PCP-VAH de reformismo armado. La postura de mantener las armas paralelamente a la propuesta de una solución política, es consecuencia de la negativa del Estado a negociar cualquier tema relacionado con la paz77 . El mismo Artemio señaló que estaría dispuesto a “ponerse a derecho. Yo estoy dispuesto. Si debo inmolarme en aras de salvaguardar los derechos fundamentales de mis camaradas (…), lo haría. Pero tienen que haber las garantías necesarias para eso78”.

En consecuencia, el PCP-VAH planteó un proceso de paz y negociación similar al que se dio en lugares como Irlanda del Norte y Colombia. A este planteamiento político, de forma paradójica, se le sumaba Feliciano, que a partir de su detención se mostró arrepentido y, en 2006, pidió al gobierno iniciar un diálogo que permitiese desarmar a las remanentes de Sendero Luminoso en el Huallaga79. Feliciano, en este aspecto, bajo su condición de preso, reflejaba la estrategia que lleva a cabo el PCP-VAH y el PCP-SL. La rendición ideológica de ambos partidos se comprehende por la constitución de un nuevo sujeto político y por las mejoras penitenciarias. Es así como los presos y expresos senderistas

74 Alfredo Crespo en Dan Lerner y Jonathan Diez, “ Otros Senderos”, QueHacer, 1 de octubre de 2012, 52, Disponible en: https://www.desco.org.pe/recursos/sites/indice/831/2468.pdf. Revisado: 10 de junio de 2018. 75 Partido Comunista del Perú, Valle del Alto Huallaga (PCP-VAH), op. cit. 76 Rosa Luxemburgo, Reforma o Revolución, Madrid, Akal, 2015, 69. 77El Comercio, El Comercio, “Con 'Artemio' no cabe ninguna tregua, coinciden desde el Congreso”, 7 de septiembre de 2011, Disponible en: http://archivo.elcomercio.pe/politica/gobierno/artemio-no-cabe-ninguna-tregua-coinciden-desde-congreso-noticia-1344805. Revisado: 1 de junio de 2018. 78 Artemio en Gorriti y Mella, op. cit. 79 La República, La República, “Se reactivan antiguos lazos de Sendero Luminoso y el narcotráfico”, 3 de mayo de 2003, Disponible en: https://larepublica.pe/politica/358879-se-reactivan-antiguos-lazos-de-sendero-luminoso-y-el-narcotrafico. Revisado: 12 de mayo de 2018.

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tienen un papel muy relevante. El embajador estadounidense en Lima lo expresaba de la siguiente manera:

The current ranks of "Acuerdistas" have been fed largely by prison releases. Hundreds of

Sendero's former core members, after completing their sentences, were freed between 2001 and 2007. According to sensitive sources, Guzman, from his prison cell, retains a significant measure of control and influence over this "Acuerdista" coterie, whose principal objective is to negotiate and secure Guzman's eventual release. […] While observers acknowledge that most former Senderistas released from prison have sought to integrate themselves as ordinary citizens into Peruvian society, they also estimate that several hundred retain their ideological commitments and that 50 or more have the political and organizational experience to fill leadership roles in the movement80.

La reiteración y preponderancia de las posturas basadas en la “amnistía general”, propugnadas

por el PCP-SL de forma oficial, como por el PCP-VAH mediante la violencia armada, ocasionaron el surgimiento de nuevas organizaciones políticas en el comunismo peruano más afín ideológicamente a Sendero Luminoso, las cuales tienen como propósito la solución de los problemas del conflicto armado peruano. Estas organizaciones y órganos de expresión, como lo son El Movimiento por la Amnistía y Derechos Fundamentales (MOVADEF), el Sindicato Unitario de Trabajadores en la Educación del Perú (SUTEP) con la facción del Comité Nacional de Reorientación y Reconstrucción (CONARE81), y la revista Vórtice y Amnistía General de 1º de Mayo, nacen de la aspiración de erigirse como un nuevo sujeto político para participar en la democracia peruana. El apoyo de Artemio fue notorio en 2011, donde los denominó “organismo colindantes” y dio su apoyo de forma abierta, puesto que el grupo del VAH se vería beneficiado de una hipotética amnistía general82. Desde la óptica marxista-leninista-maoísta, estas aspiraciones constituirían un planteamiento reformista. Esto conforma una muestra de la mutación ideológica del maoísmo peruano: la aceptación del sistema parlamentario de la República del Perú.

Por último, debemos señalar la lucha ideológica existente entre el PCP-VAH y la escisión del VRAE-VRAEM, que surgió por el acercamiento de Artemio hacia las posturas de Guzmán. Esto ha ocasionado un debate ideológico -en ocasiones armado- entre ambos rezagos senderistas, ya que el PCP-VAH considera al M-PCP como narcotraficante, mercenario y anti PCP-SL83”. En este sentido, la ideología del PCP-VAH se basó en el pragmatismo – también podríamos llamarlo oportunismo- al adaptar su discurso según el ritmo de los acontecimientos, y no desde una posición ideológica consciente y plenamente autónoma.

Organización La escisión entre el PCP-VAH y el PCP-VRAEM trajo consigo un nuevo rumbo en la

organización. El partido quedó bajo el liderazgo de Artemio y Marcelo, los cuales acordaron dirigir el partido bajo una dualidad. Estos se encargaron de crear, como sucedió en 1992 con el “Comité Central de Emergencia”, un organismo provisional ante la captura de Feliciano. Así surgió el Comité Central

80 McKinley en WikiLeaks, WikiLeaks, "’Shining path’: what does it mean today?”, 1 de febrero de 2008, Disponible en: https://wikileaks.org/plusd/cables/08LIMA196_a.html. Revisado: 3 de mayo de 2018. 81 En la actualidad se denominan Federación Nacional de Sindicatos Unificados de Trabajadores en la Educación del Perú (FENASUTEP). 82 Artemio en Gorriti y Mella, op.cit. 83 Gorriti, op.cit., 2010.

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Transitorio (CCT), con la finalidad de reorganizar el partido84. Florentino Cerrón Cardozo (a) Marcelo, dirigió el aparato ideológico y Florindo Eleuterio Hala (a) Artemio, el militar. Esta inusual dualidad, alejada del funcionamiento del PCP-SL, se mantuvo hasta la detención de Marcelo en 2003 cuando las competencias de este pasaron a Artemio quien se convirtió en el máximo dirigente del Comité Regional del Huallaga; dado que él era el último senderista miembro del Comité Central en libertad, era también el más destacado guerrillero85. Estos elementos hicieron que su figura alcanzase una gran reputación, ejerciendo como jefe. Sus atribuciones eran las mismas que las de un líder foquista, puesto que dada la ausencia de Buró Político, en él recaían todos los elementos ideológicos y militares; práctica similar a como ejerció el poder Feliciano mediante “directrices” en el PCP-M-L-M86.

Artemio tenía potestad para gobernar su territorio de acción, para nombrar comandantes de columna, y los demás grados inferiores, planteamiento similar al guevarista en el modo de dirección87. Sin embargo, el foco dirigido por Artemio era estático, con una base de operaciones fuerte alrededor del departamento de Huánuco. Desde esta base se dirigieron las acciones, dado que es donde el PCP-SL y el PCP-P mantenían sus principales efectivos, y, sobre todo, porque en este departamento se concentraban la mayoría de las acciones perpetradas por el PCP-VAH88. En realidad las actividades, en similitud con lo sucedido a finales de los noventa89 , se replegaron a Tingo María y Tocache.

La organización senderista, en el período comprendido entre 1992 y 1999, contaba con una fuerza aproximada de 400 hombres, si somos fieles a los datos encontrados en el ordenador de Abimael Guzmán, donde cada columna era integrada por 100 miembros aproximadamente90. Sin embargo, Sendero Rojo, ya contaba con columnas por debajo de dicha cifra. Las columnas albergaban entre 20 u 80 efectivos por departamento91. El PCP-VAH tenía presencia en cinco departamentos, pero concentraba sus efectivos en Huánuco, La Libertad y San Martín. Departamentos como Ancash y Ucayali eran muy minoritarios, dado que durante el período comprendido entre 2000 y 2012 sólo se realizaron 20 acciones armadas92. Esta situación nos indica que el PCP-VAH era el único que mantenía efectivos de forma constante en Huánuco, La Libertad y San Martín.

El estudio realizado sobre las fuentes periodísticas, en distintos lapsos de tiempo, nos indica que, desde 2000 hasta la captura de Artemio, las columnas senderistas oscilaron entre 20 y 35 miembros93

84 Ángel Páez, op.cit. 85 El recorrido militar y la reputación de Artemio se remonta en los años ochenta, donde erigió exitosos logros en el distrito de Uchiza, zona caracterizada por el tráfico de droga. 86 Benedicto Jiménez, Inicio, desarrollo y ocaso del terrorismo en el Perú. Volúmen II, Lima, Sanki, 2000b. 87 Ernesto Guevara, op.cit., 133. 88 Policía Nacional del Perú (PNP) (2000-2012), Anuarios estadísticos, 2000 a 2012, Disponible en: https://www.policia.gob.pe/anuario_estadistico/anuario_policial.html. Revisado: 10 de enero de 2018. 89 Jean Bourllaud, Olivier Dolfus y Pierre Gondard, “Pérou: Le Haut Huallaga de la coca à l’abandon”, Problemes d’Amerique Latine, 28, 1998, 122. 90 Caretas, Caretas, “El disco duro de Abimael”, 3 de abril de 1996, Disponible en: http://www2.caretas.pe/1999/1577/feliciano/feliciano.htm. Revisado: 10 de enero de 2018. 91 Idem. 92 Policía Nacional del Perú (PNP), op .cit. 93Jacqueline Fowks, El País, “Cadena perpetua para ‘Artemio’, el último líder de Sendero Luminoso en caer “, 8 de junio de 2013, Disponible en: https://elpais.com/internacional/2013/06/08/actualidad/1370666114_358936.html. Revisado: 18 de mayo de 2018; La República, La República, “Caen tres mandos terroristas de ‘Artemio’en el Alto Huallaga”, 27 de noviembre de 2007, Disponible en: https://larepublica.pe/politica/235865-caen-tres-mandos-terroristas-de-artemio-en-el-alto-huallaga. Revisado: 12 de mayo de 2018; La República, La República, “Nuevos proyectos de desarrollo buscan suplantar cocales en el Alto Huallaga”, 2 de octubre de 2008, Disponible en: https://larepublica.pe/politica/372901-nuevos-proyectos-de-desarrollo-buscan-suplantar-cocales-en-el-alto-huallaga. Revisado: 12 de mayo de 2008; La República, La República, “Atrapan a terroristas

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demostrando una disminución respecto al PCP-Proseguir y evidenciando el resquebrajamiento de las fuerzas guerrilleras.

Si nos referimos al cómputo general de fuerzas, existen diferencias entre las fuentes halladas. Las fuerzas de inteligencia de la PNP, según un informe enviado al embajador de Estados Unidos relativo a los efectivos de la organización:

The security chief said SL used this method to grow from around 50 active fighters to

around 200 or 225, divided into five commands, plus an unknown number of logistical supporters living in area communities. A team of PNP intelligence analysts in the UHV reported a similar process of recruitment since 2008, but argued that SL had grown no larger than 75 active fighters and said the 200 figure was overblown. Most police and analyst observers put the total number of

fighters somewhere between these two figures94 . En contraposición, en el diario El País, en 2013, después de la captura de Artemio, se afirmaba

que el PCP-VAH “cuenta con varios cientos de hombres en armas, entre 200 y 500, hasta un total de 2000 camuflados95. Pese a estas informaciones contrapuestas, otorgar al PCP-VAH una fuerza superior a los 200 hombres es magnificar su impacto sobre el territorio, puesto que fue mucho menor a la fuerza que ejercían los “felicianistas” con 400 individuos y con un accionar similar. Por esto afirmamos que el PCP-VAH mantuvo entre 100 y 200 efectivos, teniendo en cuenta el escaso número de columnas, y su actividad armada dedicada casi exclusivamente a la incursión armada – práctica donde se necesitan pocos hombres-, es plausible.

En las fuentes periodísticas consultadas, hemos observado el uso de términos como “camuflados” y “logistical supporters”. En esta red de colaboradores distinguimos tres tipologías: políticos y económicos, colaboradores logísticos y la población civil.

Las colaboraciones políticas y económicas responden a la lógica de intereses mutuos entre el PCP-VAH y personalidades públicas y privadas que trabajan en actividades lícitas e ilícitas. El máximo representante de esta dinámica es David Bazán Arévalo, exalcalde de Tocache. Bazán, que se encuentra en prisión preventiva, está acusado por la policía Antidrogas y por la Fiscalía por financiar a Artemio, ser el representante de su primo “Eteco96” y, especialmente, por estar involucrado en el asesinato de un fiscal y tres policías en una emboscada en 2008, en la localidad de Tocache, en el departamento de San Martín97. Otros colaboradores son los empresarios de la madera y otros comerciantes que “colaboraron” con la remanente a cambio de “cupos”98. Del mismo modo, incluiríamos a los narcotraficantes, a los cuales también se les cobraba “cupos” para que pudiesen circular y operar a lo largo del territorio. Este escenario permite establecer un paralelismo similar a la de los años noventa99,

en el Huallaga”, 9 de agosto de 2010, Disponible en: https://larepublica.pe/archivo/478805-atrapan-a-terroristas-en-el-huallaga. Revisado: 12 de mayo de 2018. 94 McKinley en WikiLeaks, op. cit. 95 Jacqueline Fowks, op. cit. 96 Alias de Miguel Arévalo Ramírez, empresario peruano acusado de narcotráfico internacional. 97 Óscar Castilla, Ojopúblico, “Detienen a alcalde de Tocache acusado de financiar a 'Artemio’ y traficar con 'Eteco'”, 26 de julio de 2017, Disponible en: https://narcomapa.ojo-publico.com/articulo/El-alcalde-acusado-de-financiar-a-Artemio-y-traficar-con-Eteco/ . Revisado: 5 de junio de 2018; 98 En este caso, los “cupos” son pagos que realizan los empresarios a la guerrilla o a narcotraficantes con motivo de poder llevar sus actividades en una zona bajo control de éstos. También, podemos identificar a “cupos” la serie de pagos que realizan los narcotraficantes con motivo de paso o derecho a aterrizar o despegar sus aeronaves por territorio dominado por la guerrilla. 99 Julio Cotler, Drogas y política en el Perú. La conexión Norteamericana, Lima, Instituto de Estudios Peruanos, 1999, 207.

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donde el aislamiento guerrillero ha hecho realzar a los narcotraficantes, provocando un cambio en la correlación de fuerzas existente.

Los colaboradores que se dedican a abastecer de logística al remanente de SL constituyen el segundo grupo. Estos se dedicaban al tráfico de armamento y tal y como señala la PNP e IDL-Reporteros, el PCP-VAH tiene armamento similar al utilizado por las fuerzas armadas, situación muy diferente a la precaria capacidad real de fuego que tuvo en el pasado el PCP-SL. Este hecho plantea la existencia de una alta implicación del PCP-VAH en el contrabando y, efectivamente, existieron lazos entre los guerrilleros, los contrabandistas y las organizaciones criminales. Un ejemplo de esta dinámica fue la colaboración del ex sargento del ejército, José Santiesteban Heredia, en la venta de armamento militar, y también robado, al PCP-VAH100 . Este suceso no es un hecho aislado, visto que desde los años ochenta se venían produciendo actividades de contrabando de la misma índole, y como remarca Lewis Taylor, las fuerzas del orden tienen un papel destacado en las actividades ilícitas, de contrabando y narcotráfico101. Según la PNP, el tráfico de armas de guerra ha ido disminuyendo con el tiempo, pero la tenencia ilegal de armas que no sean de guerra va en aumento en toda la geografía peruana102. La implicación del PCP-VAH en actividades de contrabando también es constatable por la diminución de las acciones destinadas a robar armamento a la policía o al ejército103.

El último grupo “colaboracionistas” es el de la población civil tanto en el ámbito urbano como el rural. En el primero, específicamente en Tingo María, surgieron comités y grupos de apoyo y colaboración con las columnas de Artemio. Los miembros que conforman estas organizaciones estaban destinados a dar apoyo logístico y, sobre todo, sanitario a los heridos104. La existencia de este apoyo logístico también ha sido remarcada por las fuerzas del orden peruanas. El apoyo y ayuda de población civil hacia la remanente del Huallaga responde a la existencia de una base social de donde obtienen colaboración y apoyo del narcotráfico, puesto que éste mueve a un gran número de familias y de población, dando lugar a una red asistencial y colaborativa debido al débil liderazgo de las autoridades estatales105.

En el ámbito rural el apoyo básico del PCP-VAH fueron los cocaleros derivado del apoyo de los senderistas en la negociación del precio de la coca, la lucha contra los programas estatales para la erradicación del cultivo (CORAH106 y DEVIDA107) y la ayuda económica recibida por el campesinado108. Esta alianza con los campesinos creemos que no tiene una implicación ideológica directa, puesto que el PCP-VAH actúa como defensor de los campesinos únicamente a través de la Central Nacional Agropecuaria Cocalera del Perú109 (CENACOP). La organización campesina depende

100 Doris Aguirre, La República, “Detenido el proveedor de armas a terroristas del Alto Huallaga”, 30 de agosto de 2011, Disponible en: https://larepublica.pe/politica/568841-detenido-el-proveedor-de-armas-a-terroristas-del-alto-huallaga. Revisado: 12 de mayo de 2018. 101 Taylor, op.cit., 117. 102 Policía Nacional del Perú (PNP), op.cit. 103 Idem. 104 Aguirre, op.cit. 105 Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas (CC.FF.AA), Revista del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, 2,1, 2008b, Disponible en: https://issuu.com/revista-del-ccffaa/docs/revista2008_1. Revisado: 10 de enero de 2018; Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas (CC.FF.AA), op.cit., 2008a. 106 Proyecto Especial de Control y Reducción de Cultivos Ilegales en el Alto Huallaga. 107 Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas. 108 Juan Jesús Aznárez, El País, “Perú pide ayuda a EE UU ante el rebrote de Sendero Luminoso”, Disponible en: https://elpais.com/internacional/2010/12/12/actualidad/1292108410_850215.html. Revisado: 30 de marzo de 2018. 109 Caretas, Caretas, “Guerra avisada”, 19 de abril de 2007, Disponible en: http://www2.caretas.pe/Main.asp?T=3082&id=12&idE=720&idA=25761#.W18PjtIzY2w. Revisado: 8 de mayo de 2018.

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en buena parte de sus alianzas con los subversivos del Huallaga; empero, también han sido movilizados por otros actores políticos, como empresarios cocaleros o de las mismas autoridades regionales110. Es por esta situación que el PCP-VAH mantiene una actitud más “laxa” con la población del Huallaga que otros grupos como el PCP-SL o el PCP-P, hecho que no esconde que la mayoría de víctimas de este grupo hayan sido civiles.

El crecimiento de los colaboradores con los subversivos produjo una contrapartida, la vulnerabilidad derivada de mayores vías de acceso al partido; igualmente el estatismo guerrillero en el departamento de Huánuco, provocó una menor capacidad de movimiento derivada de la mayor exposición ante los potenciales enemigos. En esta situación la organización guerrillera experimentó una nueva problemática respecto a periodos anteriores: los infiltrados. Son numerosos los casos en que se han reportado miembros del SIN y “traidores” en las filas de Artemio. La respuesta guerrillera fueron las campañas de agitación, propaganda y asesinato contra “soplones” y “traidores111”. Para entender la magnitud del problema debemos exponer que cuando capturaron a Artemio, en una de sus libretas se hallaron 147 nombres de posibles “arrepentidos, traidores y soplones” que debían ser eliminados112.

Como hemos podido observar, la organización del PCP-VAH, y concretamente el foco central de la guerrilla, estaba basado en una mayor exposición de sus cuadros debido al estancamiento de sus fuerzas, la desigualdad respecto al narco y al Estado peruano. Esta situación tiene una relación directa, en forma de cambios y continuidades, con la forma como se organizó Sendero Luminoso y Sendero Rojo.

De 1984 a 1993 el PCP-SL estableció un gran control en la zona del VAH, y tardó pocos años en consagrarse como una autoridad por encima de las firmas del narcotráfico113; de hecho, reguló las relaciones sociales que se aglutinaban alrededor del narcotráfico, mediando con los narcos y estableciendo una administración propia114. La administración que ejerció Sendero en el VAH fue perenne y ocupó un vació de poder, y lo ejerció, llegando a controlar parte de la producción de hoja de coca y la regulación de su precio, con la intención de defender los intereses campesinos. La organización se basaba en la presencia constante de comités (militares, políticos y logísticos) que establecieron una red de informantes y aplicaron medidas de fuerte carácter “moral” entre la población115. En síntesis: existió un poder “popular” paralelo en el VAH controlado por SL hasta 1993. La continuidad fue sinónimo de un control territorial constante en el tiempo y de una impermeabilidad respecto a las células y sus cuadros.

Es a partir de 1993 y 1994 con el inicio de la Operación Aries, caracterizados por la vulneración flagrante de los derechos humanos116, sumado con otros factores como la bajada de los precios internacionales de la coca y la detención de Guzmán en 1992, produjeron el retroceso paulatino de los senderistas. La situación en 1993, ya controlada por Sendero Rojo, se dirigió a una reorganización

110 Meléndez, op.cit., 173. 111 IDL- Reporteros, IDL- Reporteros, “Lo que revela el vídeo”, 18 de diciembre de 2010, Disponible en: https://idl-reporteros.pe/artemio-lo-que-revela-el-video/. Revisado: 10 de enero de 2018. 112 Artemio en Doris Aguirre, La República, “Artemio’ escribía su ‘libro de memorias’ cuando lo capturaron”, 4 de marzo de 2015, Disponible en: https://larepublica.pe/politica/614878-artemio-escribia-su-libro-de-memorias-cuando-lo-capturaron. Revisado: 12 de mayo de 2018. 113 Comisión por la Verdad y la Reconciliación (CVR), Informe Final, Lima, Comisión por la Verdad y la Reconciliación ,2003, 745. 114 Comisión por la Verdad y la Reconciliación (CVR), op. cit., 748-769. 115 Idem 116 Ríos y Sánchez, op. cit., 116,

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interna117, además de llevar a cabo una progresiva consolidación de la dirección única en Feliciano pese a la existencia de la división entre un mando político, militar y logístico. A partir de 1994 y 1995 Sendero Rojo entró en una proceso de regionalización de la dirección118, lo que produjo una tropa fiel y estable, compuesta casi exclusivamente por cuadros politizados.

Consecuencia directa de ello, pues, y que mantiene continuidades con el PCP-VAH, es la existencia de una organización centralizada en base a su líder. Así como del contacto más puntual con las comunidades, especialmente a partir de 1995, ya que los comités desaparecieron progresivamente, siendo en 1995 el Comité de Tocache el último en existir119. La explicación viene dada por el debilitamiento y regionalización que sufrió Sendero Rojo a partir de los operativos militares de 1994, produciendo una situación de “inferioridad” respecto a los demás actores, como ocurre con el PCP-VAH en el siglo XXI. Tanto Sendero Rojo como el PCP-VAH no pudieron erigirse como una autoridad, sino como un actor más en el Huallaga. El debilitamiento, pues, constituye una continuidad entre los años finales de Sendero Rojo y del PCP-VAH.

Si en la organización partidaria hubo diferenciaciones, en la forma de colaborar con el narco no se presentaron diferencias notorias, especialmente en la forma de relacionarse y colaborar logísticamente. El accionar de SL, Sendero Rojo y el PCP-VAH, estuvo basado en la cobra de “cupos”, protección de rutas y en el control de los precios de la hoja de coca. El beneficio por estos nexos con el narcotráfico es el mismo desde 1980 a 2012: el aprovisionamiento de armas y la obtención de dinero. Empero, el PCP-SL llegó a regular todas las relaciones derivadas de la producción de hoja de coca120, siendo este el factor diferencial principal entre las distintas organizaciones.

Estrategia Las informaciones recogidas en la prensa cada vez que se capturaba a un miembro del PCP-

VAH señalaban la disminución de su potencial y la próxima desaparición del grupo. El País, El Comercio, La República, IDL-Reporteros, entre otros, consideran cada captura de un miembro guerrillero como “el golpe definitivo”, y llegan a afirmar que Sendero está “desorganizado y “que han detenido a dirigentes sumamente relevantes”. Empero, si analizamos los datos ofrecidos por la PNP, observamos que si bien entre 2000 y 2011 se produjo una disminución de acciones en departamentos como La Libertad y Ancash; en cambio, en Huánuco y San Martín mantuvieron la misma actividad, no obstante los “golpes” mencionados por la prensa. El descenso de las acciones armadas y la desarticulación del grupo solo se producirá tras la captura de Artemio, en febrero de 2012.

Ya se ha dicho que el PCP-VAH mantuvo su operatividad si atendemos tanto al número de víctimas como a la tipología de las acciones. Los focos guerrilleros que se mantuvieron estables fueron los de Huánuco y San Martín. Ambos núcleos son los que presentaron mayor número de muertos civiles (66 en Huánuco y 3 en San Martín , como también de miembros de las fuerzas del orden (18 en Huánuco y 4 en San Martín)121. El hecho que sean estos los únicos departamentos en los que hubo muertos civiles, permite señalar que fue ahí donde el contacto con los pobladores fue más intenso. Junto a víctimas civiles también se produjo la muerte de miembros del poder judicial en el distrito de San Martín, hecho que denota una regionalización de los crímenes; como vemos en el Ucayali, único

117 Jiménez, Benedicto, Inicio, desarrollo y ocaso del terrorismo en el Perú. Volúmen I, Lima, Sanki, 2000a, 226. 118 Jiménez Vigara, op. cit., 183. 119 Comisión por la Verdad y la Reconciliación (CVR), op. cit., 753. 120 Idem 121 Policía Nacional del Perú (PNP), op.cit.

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departamento donde se hallan “asesinatos” y Lambayeque con el homicidio de 8 ronderos122. En general, los objetivos del PCP-VAH residen en las fuerzas del orden, pero dependiendo de cada departamento se modifica el objetivo estratégico. Los únicos departamentos en los que se cumple el objetivo general son San Martín y Huánuco.

La tipología de acción más utilizada por el PCP-VAH fue la incursión armada, seguido del ataque a las fuerzas del orden y las embocadas123. La práctica de estas tipologías estratégicas, aparentemente, nos indican una continuidad histórica entre el PCP-SL, Sendero Rojo y el PCP-VAH. Tales organizaciones tuvieron como accionar mayoritario la incursión armada como método principal. Esta acción para el PCP-SL, entre los años 1984 y 1986 en la zona centro, norte, sur y Huallaga, correspondió a un 36,2 % del total de las acciones124. Del mismo modo, Sendero Rojo, tuvo la incursión armada como principal acción125. Esto nos indica que la entrada de columnas guerrilleras en las comunidades y poblados fue una constante durante el conflicto y postconflicto. Las siguientes acciones más realizadas por los grupos fueron los sabotajes, los enfrentamientos armados, los ataques a las fuerzas del orden, los hostigamientos y embocadas126. Este escenario plantea la tesis de que pervivió la misma forma de acción -exceptuando los sabotajes-, pero la diferencia residió en la táctica concreta de cada grupo en la forma de llevar a cabo la acción.

El PCP-SL y el PCP-M-L-M (hasta 1996) compartieron una estrategia similar hacia las comunidades, basada en el punitivismo, ya que la mayoría de víctimas de estos grupos, con diferencia, fueron civiles127. Como víctimas, después de los civiles, irían los policías, militares y las autoridades locales. Incluso, como especificidad, para la zona del Huallaga, las víctimas por aniquilamiento selectivo constituyen un 9,2% , siendo la media general del PCP-SL un 8,2%128.

Los cambios, pues, se sitúan en que el PCP-VAH mantiene un accionar menos coercitivo con la población civil en comparación con sus antecesores partidarios. De hecho, tanto por este grupo como el M-PCP entre 2009 y 2019, la mayoría de víctimas fueron militares129. Esto es debido a que la estrategia de Sendero Luminoso en la zona del VAH implicó un mayor y más directo contacto; situación que significaba un trato estable y permanente con las comunidades130. En similitud, y hasta 1996, y así lo muestran los casos reportados a la CVR, Sendero Rojo se caracterizó por el asesinato de autoridades locales, pero especialmente por los civiles de forma sistemática131.

122 Idem. 123 Idem. 124 Marté Sánchez, “Sendero Luminoso (SL)”, Jerónimo Ríos y José Manuel Azcona (coords.), Historia de las guerrillas en América Latina, Madrid, Catarata, 2019, 151. 125 Policía Nacional del Perú (PNP), Perú: Estadísticas de violencia y seguridad. 1998-1999, Disponible en: http://proyectos.inei.gob.pe/web/biblioineipub/bancopub/Est/Lib0061/1-1-30.html. Revisado: 10 de enero de 2018. 126 Idem; DESCO, Violencia política en el Perú, 1980-1988, Tomo I. Lima, Centro de Estudios y Promoción del Desarrollo, 1989, 33. 127 DESCO, op.cit., 34. 128 Sánchez, op.cit., 151. 129 Ministerio del Interior (MININTER). Dirección General de Inteligencia. Muertes producidas por acciones terroristas según clasificación de víctimas, 2009-2019. Disponible en: http://m.inei.gob.pe/estadisticas/indice-tematico/subversive-actions/. Revisado: 27 de junio de 2021. 130 Comisión por la Verdad y la Reconciliación (CVR), op. cit., 744. 131 Ejemplos de este proceder son: Comisión por la Verdad y la Reconciliación (CVR), “Caso Nº1008721. Caso Nº1000386. Caso Nº1000195. Anexo 4. Tomo XV. Casos del departamento de Huánuco reportados a la CVR”, Base de datos de la CVR, Disponible en:http://www.cverdad.org.pe/ifinal/pdf/Tomo%20%20ANEXOS/PDFSAnexo4/HUANUCO.pdf.Revisado: 30 de junio de 2021; Comisión por la Verdad y la Reconciliación (CVR). op.cit., “Caso Nº1003711. Anexo 4. Tomo XVII. Casos del departamento de La Libertad reportados a la CVR”, Disponible en:

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En oposición, la estrategia del PCP-VAH, estuvo más centrada en la propaganda y la defensa de los campesinos cocaleros. Los contactos con la población fueron puntuales, no directos y persistentes, como en sus predecesores. Es así como podríamos afirmar que la estrategia del PCP-VAH responde a un proceso de agudización de la dinámica de Sendero Rojo, es decir: del enfoque progresivo de la estrategia hacia los blancos militares y el abandono progresivo de la población civil como destinataria de la violencia. Esta situación nos indica que el PCP-VAH presentó una capacidad de fuego menor debido a que focaliza sus ataques a objetivos concretos y selectos. Por lo tanto, las huestes de Artemio tuvieron como premisa general la efectividad, la seguridad y la propaganda al no poder enfrentarse directamente con las FF.AAA.

La modificación de su estrategia implicó un retroceso en el esquema de la guerra de guerrillas practicado en la primera etapa del desarrollo guerrillero132. El movimiento subversivo también empezó a transformarse básicamente en un movimiento únicamente de vanguardia armada, con la única complicidad de los campesinos cocaleros. Por esta razón sostenemos que la organización guerrillera adaptó su accionar hacia elementos más concretos y precisos. Esto produjo un problema común en las guerrillas de carácter foquista, y es que un movimiento revolucionario, para su expansión y subsistencia, debe ser más que la suma de sus componentes locales133. No obstante, el PCP-VAH era consciente de su situación militar al no haber caído en ninguna derrota militar clara, puesto que evitó los enfrentamientos directos lo que tiene que ver, probablemente, con el gran conocimiento del territorio que tenía Artemio.

En 2011 las acciones del PCP-VAH, en comparación con el resto de los años, estaban decreciendo. Tras la captura de Artemio en 2012 las acciones fueron 12, a diferencia de 2011 cuando se realizaron 36 y de 2010 cuando las acciones fueron 51134. Como sucedió tanto en 1992 como 1999, la captura del líder ya como líder político, ya como jefe guerrillero, los problemas derivados de la jerarquización inherente a la lógica senderista han perdurado y perjudicado a Sendero y a todas sus escisiones notablemente. En suma, la caída de Artemio para el PCP-VAH, parece significar su particular Teoponte135 peruano.

Conclusiones Creemos haber demostrado que tras la captura de Feliciano, en 1999, Sendero Rojo, en similitud

con lo acaecido en 1992 con la captura de Abimael Guzmán, sufrió una mutación ideológica, organizativa y estratégica. La captura del dirigente maoísta produjo un proceso escisionista en el seno de los “felicianistas”, que acabó consumándose con la separación de la facción del VAH y del VRAEM. Estos cambios se produjeron por el debate interno entre los partidarios de abandonar la lucha armada y unirse así a la cúpula del PCP-SL y los que querían mantener la lucha armada. Esta situación se tradujo,

http://www.cverdad.org.pe/ifinal/pdf/Tomo%20-%20ANEXOS/PDFSAnexo4/LALIBERTAD.pdf. Revisado: 30 de junio de 2021 Comisión por la Verdad y la Reconciliación (CVR), op.cit., “Caso Nº1003826. Anexo 4. Tomo XVII. Casos del de-partamento de Ucayali reportados a la CVR”. Disponible en: http://www.cverdad.org.pe/ifinal/pdf/Tomo%20-%20ANEXOS/PDFSAnexo4/UCAYALI.pdf. Revisado: 30 de junio de 2021. 132 Tanto Mao Zedong como el Che Guevara tienen una consideración etapista y gradual de la guerra de guerrillas. 133 Eric Hobsbawn, ¡Viva la Revolución!, Barcelona, Crítica, 2018, 306. 134 Policía Nacional del Perú (PNP), op.cit. 135 Teoponte es el nombre de un pueblo boliviano situado en la provincia de Larecaja, en el departamento de La Paz, Bolivia. Alrededor de Teoponte, en 1970, después de la caída del Che en 1967, se erigió un movimiento foquista, el Ejército de Liberación Nacional (ELN). El movimiento estuvo liderado por estudiantes, los cuales fueron barridos, en pocos días, por el ejército boliviano. La derrota de Teoponte es un claro ejemplo del fracaso de la guerrilla de carácter foquista.

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a partir del liderazgo de Artemio y Marcelo, en 1999, en que el PCP-VAH se conformó en una organización alejada de la guerra popular prolongada y del maoísmo en pro del foquismo y del resistencialismo. Esta evolución se produjo como consecuencia de la regionalización progresiva del movimiento guerrillero derivada de su debilitamiento por las acciones de las fuerzas del orden.

Hemos observado también que el PCP-VAH estuvo en un constante proceso de cambio; hemos vistos en qué medida el contexto histórico y el debate interno afectó en la ideología, la organización y la estrategia; elementos que son esenciales para entender la evolución dialéctica de la remanente senderista.

Hechas estas consideraciones vamos a señalar los que consideramos principales aportes de nuestra investigación sobre PCP-VAH. El primero, referido a la ideología, es que hemos constatado que la ideología maoísta no presenta un desarrollo estático pues a partir de la detención de Guzmán, se producen debates alrededor de como ejercer la teoría y la práctica. Específicamente, estos debates se producen con la captura de los líderes (Guzmán, Feliciano y Artemio), pero también hemos mostrado que antes de las capturas había desconfianzas y enfrentamientos al interior de los partidos, indicador de una ideología en constante cambio. Igualmente hemos demostrado que el PCP-VAH reprodujo las mismas dinámicas verticales del PCP-SL y del PCP-Proseguir, pero bajo características foquistas, donde el “jefe” o “líder” guerrillero albergaba el control político y militar sobre el terreno. Por tanto, la ideología no fue algo estático ni monolítico, sino que más bien fue un elemento inestable y ambivalente, como demuestra el viraje pro-Abimael Guzmán del PCP-VAH bajo la dirección de Artemio.

El segundo de los aportes es el referido a la organización y estrategia. Creemos haber demostrado que el PCP-VAH mantuvieron su organización y estrategia bajo parámetros similares al PCP-SL, pero que adaptaron sus formas de actuación y organización a la nueva situación. Esta nueva situación fue la regionalización y el debilitamiento de los partidos. La remanente tuvo que adaptarse a los reveses del Estado peruano, por ello adoptaron la regionalización y el foquismo como estrategia de subsistencia y resistencialismo por su total inferioridad. Del mismo modo, sostenemos que, pese al debilitamiento de las remanente, mantuvieron cierta efectividad y actividad guerrillera que hizo cuestionar, en más de una ocasión, las estrategias antiterroristas de los distintos gobiernos.

El tercer aporte es el referido al papel del narcotráfico. Hemos mostrado también que PCP-VAH mantuvo nexos con las distintas organizaciones criminales del VAH. Pero esta relación fue puramente de subsistencia y no devino una actividad propia ni principal de los guerrilleros. Únicamente su relación con los narcos fue el del pago de “cupos” por el pase de sus zonas y la colaboración en aspectos logísticos. La documentación consultada nos lleva a cuestionar que la remanente de SL actuara como una organización criminal, puesto que su debilitamiento hubiese sido mucho menor.

El cuarto aporte se inserta dentro del contexto regional, específicamente del cocalero. Se ha podido mostrar que el PCP-VAH modificó sus relaciones con la población, en particular con el campesinado. Las nuevas relaciones se vincularon a la mejora de las condiciones laborales y del precio de la coca, donde el rezago Senderista interviene a favor de los campesinos, así lo demuestran los lazos con la organización CENACOP. Sin embargo, los contactos remanente-campesino nunca han dejado de ser conflictivos, puesto que la mayoría de las víctimas fueron y siguen siendo civiles. Por lo tanto, únicamente en algunas zonas en las que hubo más presencia y dominio del PCP-P y PCP-VAH, las relaciones pudieron ser menos tensas que durante el conflicto armado.

En suma, tras la escisión del PCP-SL se produjo una mutación ideológica y estratégica del partido que derivó en el desarrollo de una guerrilla de carácter foquista, resistencialista, paralelamente al abandono de los principios del maoísmo. Las estrategias llevadas a cabo para solucionar el conflicto -sociales o militares- no han resuelto la problemática de la violencia. El problema de las remanentes

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Senderistas, como lo fue del PCP-SL, es un asunto de índole política y social que no ha sido resuelto por la ineficacia de las políticas dirigidas hacia las desigualdades estructurales que existen en el Estado peruano. Así pues, el problema de las remanentes del VAH, como también del VRAEM, tiene como trasfondo la misma causa que movió al PCP-SL a la lucha armada. Ahora bien, ello se produce en un contexto muy diferente más relacionado con la problemática cocalera que, hasta día de hoy, es hoy un problema nacional e internacional. Fuentes impresas Althusser, Louis, Ideología y aparatos ideológicos del Estado, Buenos Aires, Ediciones Nueva visión, 1988. Antezana, Jaime, “La nueva guerra. La seguridad nacional amenazada””, Hugo Palma (ed.), Paz,

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