POR MIGDALIA TORRES NAZARIO

INCERTIDUMBRE

El torbellino se aproxima…

Y mi voz se confunde al temblor de mis manos

Sólo se oye el eco que repercute

Y destroza en un profundo caos.

Necesito algo de que aferrarme…

No vaya a ser que al río me arrastre

Y con duros golpes sobre mi cuerpo

Vuelva a ser prisionera como antes…

No hay escapatoria posible

Y aquí sólo se oye la voz martirizante

Quisiera romper las cadenas que me atan

Pero dondequiera que vaya logras alcanzarme

Mi fiel compañero doloroso

Quien atado a mi estás por la vida

Cual puñal hiriente y receloso

Quitándome el aliento y la vida

Se derrumba la fortaleza en mi creada

Y sólo mi silencio está a mi lado

Mientras que la voz continua gritando

¡ Te Amo! ¡ Te Amo!