Inteligencias Multiples

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Inteligencias Múltiples PÉREZ JIMÉNEZ (2001) INTRODUCCIÓN En la actualidad, la complejidad del mundo industrial y tecnológico en el que vivimos, hace necesario un adecuado uso de todas nuestras capacidades para lograr un efectivo desempeño, y además, ser capaces de establecer relaciones que nos ayuden a realizarnos como personas. Desafortunadamente en la mayoría de los casos, las herramientas que utilizamos para lograr dichos objetivos no son las adecuadas y sólo conducen a hundirnos en una frustración, ansiedad y estrés, que sólo lleva a comportarnos, de nueva cuenta, de manera inadecuada, creando un círculo vicioso que desgraciadamente enseñamos a nuestros hijos.

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Inteligencias MúltiplesPÉREZ JIMÉNEZ (2001)

INTRODUCCIÓN

En la actualidad, la complejidad del mundo industrial y tecnológico en el que vivimos, hace necesario un adecuado uso de todas nuestras capacidades para lograr un efectivo desempeño, y además, ser capaces de establecer relaciones que nos ayuden a realizarnos como personas.

Desafortunadamente en la mayoría de los casos, las herramientas que utilizamos para lograr dichos objetivos no son las adecuadas y sólo conducen a hundirnos en una frustración, ansiedad y estrés, que sólo lleva a comportarnos, de nueva cuenta, de manera inadecuada, creando un círculo vicioso que desgraciadamente enseñamos a nuestros hijos.

Muchos psicólogos infantiles se han percatado que una de las causas de este fenómeno, es la poca atención que los padres y educadores prestan a las emociones, y como éstas pueden ser “educadas”.

Es en este escenario que surge el concepto de inteligencia emocional, un intento esquemático y científico por reconciliar dos conceptos que se conciben desde origen separados: razón y emoción.

Comenzaremos el recorrido separando los términos inteligencia y emoción, presentado sus definiciones y teorías que pretenden explicarlas, para cerrar adentrándonos en el concepto en sí de inteligencia emocional, desgajándolo en sus partes para lograr una adecuada comprensión de sus potencialidades en muchos ámbitos de la vida moderna.

LA INTELIGENCIA

El uso del término inteligencia es muy común en nuestros días, sin embargo suele tener varias definiciones, dependiendo desde que rama epistemológica se le tome, por ejemplo, los educadores la consideran como la capacidad para aprender, los biólogos como la capacidad para adaptarse al entorno, los teóricos de la información como la capacidad para procesar información, y los psicólogos, como la capacidad para deducir las relaciones entre los objetos y eventos (Aiken, 1996). Spearman, uno de los primeros teóricos que trabajó con este constructo la definió como “la capacidad de crear información nueva a partir de la información que recibimos del exterior o que tenemos en nuestra memoria” (Pueyo, 1997).

Además, al estudiar la inteligencia se debe tener siempre en cuenta las diversas vertientes que este atributo psicológico posee. Desde sus estudios pioneros ya se podía observar una dicotomía que sería (y sigue siendo, en algunos casos) fuente de conflicto: la inteligencia tiene una estructura unitaria o una estructura múltiple (Pueyo,1997).

En 1996, un equipo de expertos coordinados por Ulric Neisser realizó un informe para la Asociación Americana de Psicología (APA, en sus siglas en inglés) en donde se clarificaron y homogeneizaron las distintas visiones que sobre la inteligencia se tenían, estas son algunas de sus conclusiones (Colom y Froufe, s.a.):

1)  Ante la polémica de que existe una única inteligencia general (factor g) o múltiples factores relativamente independientes, se concluyó que los modelos más convincentes son los factoriales de tipo jerárquico

2)  Las puntuaciones de los test de inteligencia predicen moderadamente bien el rendimiento académico, con las calificaciones medias y un poco más con el nivel de escolarización alcanzado.

3)  La inteligencia es producto conjunto de las circunstancias ambientales y la dotación genética de las personas.

4)  No se observan diferencias importantes entre los sexos en las puntuaciones generales de los test, pero si aparecen ciertas diferencias en algunas aptitudes específicas.

5)  Existe una insuficiencia de los test estandarizados disponibles, en cuanto que no exploran todas las formas existentes de inteligencia, como la creatividad, el sentido práctico o la competencia emocional. Este punto es importante ya que resalta dos aspectos significativos, el déficit de pruebas estandarizadas y la aprobación de una serie de formas distintas de inteligencia, como la competencia emocional.

A pesar de este informe avalado por la máxima autoridad en cuanto a Psicología se refiere, subsisten otra serie de teorías que defienden la existencia de inteligencias múltiples, como el modelo de Howard Gardner, en el cual, él clasifica siete tipos de inteligencias, que son independientes entre sí y subsisten en mayor o menor grado en los individuos.

TEORÍA DE LAS INTELIGENCIAS MÚLTIPLES

La investigación de Gardner busca “romper la ortodoxia de los modelos psicométricos de la inteligencia (aquellos basados en la investigación factorial) e iniciar una investigación nueva que reconsiderara los avances realizados por las ciencias cognitivas” (Pueyo, 1997). La motivación esencial de su propuesta ha sido el fracaso relativo que en el campo de la educación han tenido los modelos conductistas del aprendizaje y la medición psicométrica de la inteligencia, ya que este tipo de teorías considera al individuo como un “ente pasivo, que solamente recibe estímulos a los que responde de acuerdo con su historia anterior de aprendizajes (visión conductista) y que (...) la inteligencia es una capacidad que se encuentra en el interior de la cabeza en una cierta cantidad y que además es fija (visión psicométrica clásica)” (Gardner, 1994).

Gardner (1994) propone la siguiente definición de inteligencia: “es un potencial psicobiológico para resolver problemas o crear nuevos productos que tienen valor en su contexto cultural”.

Para Gardner existen siete inteligencias independientes y distintas que constituyen las formas como los individuos adquieren, retienen y manipulan la información del medio; las siete inteligencias son (Gardner, 1994; Pueyo, 1997):

1.  Inteligencia lingüística. Este tipo de inteligencia es la que se utiliza en la lectura de libros, en la escritura de textos y en la adecuada comprensión de las palabras, así como también en el uso del lenguaje cotidiano.

2.  Inteligencia lógico-matemática. Se utiliza en la resolución de problemas matemáticos y en las tareas que involucran la lógica inferencial.

3.  Inteligencia musical. Se utiliza al cantar una canción, componer o tocar instrumentos musicales, así como también al apreciar una pieza musical.

4.  Inteligencia espacial. Se aplica en la realización de desplazamientos por una ciudad o edificio, en el momento de comprender mapas y orientarse.

5.  Inteligencia cinestésico-corporal. Se utiliza en la ejecución de deportes, de bailes y en general en aquellas actividades en donde se necesite un adecuado manejo corporal.

6.  Inteligencia interpersonal. Se aplica en las relaciones con otras personas, para comprender sus motivos, deseos, emociones y comportamientos. Es la capacidad de entender y comprender los estados de ánimo de los otros.

7.  Inteligencia intrapersonal. Es la capacidad de acceder a los sentimientos propios, las emociones de uno mismo y utilizarlos para guiar el comportamiento y la conducta del mismo sujeto. Se refiere también, a la capacidad de cognitiva de comprender los estados de ánimo de uno mismo.

 

Son fundamentalmente estos dos últimos tipos de inteligencia los pioneros en la creación del concepto de inteligencia emocional, y fundamentan la competencia del control de las relaciones, que más adelante se explicará.

TEORIAS DE LA EMOCIÓN

Durante toda la vida del ser humano, las emociones ocupan un lugar primordial como principal fuente de experiencia y sensación en todas las actividades que éste realiza, brindándole un valor determinado a cada conducta en cada momento. Sin embargo, ¿sabemos lo que

realmente es una “emoción”?; cuando hablamos de este constructo debemos tomar en cuenta que nos referimos a un fenómeno multidimensional, es decir, a una respuesta biológica acompañada de reacciones fisiológicas que preparan al cuerpo para una acción adaptativa; también, a un estado afectivo subjetivo que aparece gracias a un proceso de cognición, además, la emoción es funcional, ya que posee un propósito determinado desde un punto de vista evolutivo, y por último, las emociones son fenómenos sociales que producen expresiones faciales y corporales características que suelen comunicar nuestra experiencia interna a los demás (Reeve, 1994; Jáuregui, 2000).

Es esta combinación de reacción fisiológica, subjetividad cognitiva, funcionalidad y aspectos expresivos, la que hace que la emoción sea tan difícil de definir (Goleman, 1995; Shapiro, 1997).

Debido a esto, han surgido una variedad de teorías que intentan explicar cómo surgen las emociones, desde las enteramente biologístas, hasta las que pretenden una coherencia entre cada una de las dimensiones que la componen, comencemos con aquellas relacionadas a la fisiología de la emoción.

Aspectos fisiológicos de la emoción

Desde un punto de vista fisiológico, la emoción es “una reacción principalmente biológica” (Reeve, 1994), moviliza al cuerpo hacia una acción específica, por ejemplo, con la ira, la sangre fluye hacia las manos y así resulta más fácil tomar un arma o golpear a un enemigo; el ritmo cardiaco se eleva y surge un aumento de adrenalina que genera energía para llevar a cabo una acción vigorosa; o con el miedo, aquí la sangre va hacia los músculos esqueléticos grandes, como las piernas, así resulta más fácil huir, y el rostro queda pálido debido a que la sangre deja de circular por él (Goleman, 1995; Shapiro, 1997; Reeve 1994).

Estos cambios fisiológicos ocurren gracias a la intervención del sistema límbico, área específica del cerebro compuesta por la amígdala y el hipocampo, entre otras estructuras, que son los encargados de brindarnos las respuestas emocionales (Acosta, 2002).

De esta concepción surge la teoría de James-Lange, primera teoría psicológica sobre la emoción.

Teoría de James-Lange

Esta teoría recibió su nombre gracias a los psicólogos William James y Carl Lange. Ambos propusieron que las experiencias emocionales son el resultado de la percepción de ciertos cambios corporales, esto es, al presentarse un estimulo que nos ocasiona cierta reacción fisiológica (como un aumento o disminución de ritmo cardiaco y presión sanguínea) aparecerá una emoción (Reeve, 1994). Sin embargo, esta teoría no es concluyente en especificar si la activación fisiológica es generadora o solo sigue a la emoción, ya que otros investigadores, como Walter Cannon y Ekman, realizaron estudios en donde manipularon cambios corporales de manera artificial mediante la ingesta de sustancias en busca de una emoción, y sus resultados arrojaron a personas que se daban cuenta de sus cambios corporales, pero esto no los llevaba a experimentar alguna emoción especifica (Rodríguez, 1999)

Actualmente, de acuerdo a Goleman (1995) los investigadores están de acuerdo en que la activación fisiológica acompaña, regula y establece el contexto de la emoción pero no la causa directamente, por lo tanto la atención se ha dirigido hacia aspectos cognitivos que complementen la visión biológica.

Aspectos cognitivos de la emoción

Para Magda Arnold (Jáuregui, 2000), la emoción no se puede presentar sin antes haberse producido una evaluación (cognición) del acontecimiento-estímulo, dicha evaluación colocaría una etiqueta de “bueno” o “malo” sobre éste fundamentada en la propia experiencia. De allí se desencadenará un cambio fisiológico en el cuerpo, que, anexándolo a la evaluación primaria ocasionará una emoción, misma que tenderá hacia la aproximación o evitación del acontecimiento-estímulo (Jáuregui, 2000).

Richard Lazarus amplió el concepto de Arnold proponiendo “que las personas no sólo evalúan un objeto del ambiento como malo (o bueno) sino que también lo evalúan como un cierto tipo de malo – como amenazante, repulsivo, frustrante, etcétera. Este tipo de evaluaciones más específicas producen emociones igualmente específicas” (Reeve, 1994).

Bernard Weiner agregó el principal postulado del enfoque atribucional al estudio de la emoción, ya que él afirmaba que las personas llevan a cabo dos y no sólo una evaluación – una antes de interactuar con el estímulo, y otra después del resultado que se produce en el ambiente (Jáuregui, 2000; Reeve, 1994). Esta teoría se considera cognitiva ya que las atribuciones son procesos mentales que median entre los resultados vitales y las reacciones emocionales, por lo tanto, para Weiner la atribución es la causa directa de la emoción.

Aspectos funcionales de la emoción

Se pueden clasificar dos tipos principales de función de las emociones: función adaptativa y función social. (Goleman, 1995; Shapiro, 1997)

En cuanto a la función adaptativa, Robert Plutchik planteó “ocho propósitos distintos: protección, destrucción, reproducción, reintegración, afiliación, rechazo, exploración y orientación” (Jáuregui, 2000), esto significa, que la función de la emoción es preparar al animal (en este caso, al ser humano) a dar una respuesta conductual apropiada a la situación, por lo tanto, desde este punto de vista funcional, no se puede hablar entonces, de emociones “buenas” o “malas”, sino que todas cumplen un propósito en especifico para la mejor adecuación del individuo a su medio ambiente.

Además de facilitar la adaptación de la persona a su entorno físico, la emoción también facilita la adaptación del individuo a su entorno social. Izard realizó una lista de cuatro funciones sociales de la emoción (Elias, 2002):

1)  Las emociones facilitan la comunicación de los estados afectivos a otras personas.

2)  Las emociones regulan la manera en que los otros reaccionan ante nosotros.

3)  Las emociones facilitan las interacciones sociales.

4)  Las emociones promueven la conducta prosocial.

Tomando esta perspectiva funcional de las emociones y anexando el componente que Gardner (1994) llamó inteligencias personales (interpersonal e intrapersonal), podemos crear el espacio en donde embona la teoría de la inteligencia emocional.

LA INTELIGENCIA EMOCIONAL

Los estudios realizados acerca del cerebro humano en la última década han puesto de manifiesto que poseemos “dos cerebros”, o en otras palabras, dos hemisferios cerebrales, y cada uno de ellos suele estar destinado a actividades específicas, que actúan de manera

propia, distinta y diferenciada, dando como consecuencia dos tipos de inteligencia: la inteligencia racional y la inteligencia emocional (Shapiro, 1997).

La influencia del hemisferio derecho nos lleva a conducirnos, o a ser dirigidos de una manera emocional; si, por el contrario, mostramos en nuestros actos una conducta racional, seguramente nuestro hemisferio cerebral predominante es el izquierdo. Por lo tanto, cuanto mayor sea el grado de influencia de un determinado hemisferio cerebral seremos tanto más racionales o más emocionales (Goleman, 1995; Jáuregui, 2000).

Ante esta explicación, la mayoría de las personas se puede preguntar: ¿existe una oposición entre razón y sentimientos?, y la posible respuesta es NO, ya que sabemos que “estas dos formas fundamentales de conocimiento interactúan para construir nuestra vida mental” (Goleman, 1995). Ambas mentes tienen que ser atendidas en toda situación de la vida que se trate de educar, esto es, no debe haber predominio ni oposición, en todo momento se debe buscar el equilibrio, ya que “los sentimientos son indispensables para la toma racional de decisiones, por que nos orientan en la dirección adecuada para sacar el mejor provecho a las posibilidades que nos ofrece la fría lógica” (Colom y Froufe, s.a.), por lo tanto, ambos componentes de la mente aportan recursos sinérgicos: el uno si el otro resultan incompletos e ineficaces.

Definición de inteligencia emocional

El concepto de inteligencia emocional fue mencionado por primera vez a principios de los 90’s, por Peter Salovey y John Mayer, estos la describen como “un tipo de inteligencia social consistente en la aptitud para controlar las emociones propias y de los demás, discriminar entre ellas y emplear esta información para guiar nuestro pensamiento y acción” (Goleman, 1995). Según estos autores, la inteligencia emocional posee las siguientes competencias (Goleman, 1995; Shapiro; 1997; Pueyo, 1997; Colom y Froufe, s.a.):

1. Conocimiento de las emociones propias.

2. Capacidad de controlar las emociones.

3. Canalización de los impulsos.

4. Reconocimiento de las emociones ajenas.

5. Control de las relaciones.

A continuación se explicará cada una de ellas.

Conocimiento de las propias emociones

Esta competencia se puede resumir con la antigua frase de Sócrates: “conócete a ti mismo”. Goleman (1995), utiliza la expresión conciencia de uno mismo (self-awareness), en el sentido de una atención progresiva a los propios estados internos, es decir, en esta conciencia autoreflexiva la mente observa e investiga la experiencia misma, incluida las emociones.

Esta conciencia de uno mismo parece exigir una actividad en la corteza cerebral, sobretodo en las zonas del lenguaje para identificar y nombrar las emociones que surgen, por lo tanto esta actividad mental hace que los circuitos neocorticales controlen de manera activa la emoción, lo que sería un primer paso para alcanzar cierto control, mismo que es la base fundamental sobre la que se construyen las demás competencias (Shapiro, 1997; Goleman, 1995).

Según Goleman (1995), John Mayer realizó una clasificación de los estilos característicos que la gente suele adoptar para responder y enfrentarse a sus emociones:

· Consciente de sí mismo. Estas personas poseen cierto control con respecto a su vida emocional. Son independientes y están seguras de sus propios límites. Cuando se ponen de mal humor, no se obsesionan al respecto y son capaces de superarlo enseguida.

· Sumergido. Son personas que a menudo se hunden en sus propias emociones y son incapaces de librarse de ellas. Son volubles y no muy conscientes de sus sentimientos, por consiguiente, hacen poco por librarse del mal humor y sienten que no controlan su vida emocional.

· Aceptador. Estas personas suelen ser claras con respecto a lo que sienten, también tienen tendencia a aceptar sus humores y no tratan de cambiarlos; en este tipo se encuentran las personas depresivas que están resignadas a su desesperación.

Capacidad de controlar las emociones

La idea fundamental de esta competencia no es reprimir las emociones, si no lograr lo que ya Aristóteles señalara en su Ética a Nicómaco: “Cualquiera puede ponerse furioso...eso es fácil. Pero estar furioso con la persona correcta, en la intensidad correcta, en el momento correcto, por el motivo correcto, y de la forma correcta...eso no es fácil” (Shapiro, 1997), es decir, un equilibrio o templanza; ya que cuando las emociones son demasiado apagadas crean aburrimiento y distancia, cuando están fuera de control y son demasiado extremas y persistentes se vuelven patológicas, como en la depresión inmovilizante, la ansiedad abrumadora, la furia ardiente y la agitación maníaca.

Canalización de los impulsos

Un requisito fundamental de logro dentro de la inteligencia emocional, es la capacidad de diferir la gratificación y controlar el impulso. Esto queda reflejado en un experimento que Shapiro (1997) nos describe, llevado a cabo por el psicólogo Walter Mischel dentro de un jardín de infantes, con niños de cuatro años.

Se colocaba a un niño dentro de una habitación y se le presentaba un bombón, el investigador le aclaraba al niño que tenía que salir por unos minutos a realizar otras tareas, y se le decía al niño que podía comer el dulce, pero que si él deseaba esperaba su regreso sin haberlo devorado, se le compensaría con dos bombones. La elección que hizo el niño constituyó una prueba reveladora, ya que se mantuvo un seguimiento de ellos hasta la escuela secundaria y se observó que los que habían resistido la tentación y controlado su impulso natural a los cuatro años, como adolescentes eran más competentes en el plano social, más capaces de enfrentarse a las frustraciones de la vida; sin embargo, aproximadamente la tercera parte de los chicos que se quedaron con el bombón compartían rasgos psicológicos más conflictivos durante la adolescencia, tendían a ser tercos e indecisos, y aun después de todos esos años, seguían siendo incapaces de postergar la gratificación.

La capacidad de controlar el impulso es clave cuando una persona se propone un objetivo a largo plazo.

Reconocimiento de las emociones ajenas

Las emociones de la gente rara vez se expresan en palabras; con mucha mayor frecuencia se manifiestan a través de otras señales. La clave para intuir los sentimientos de otro está en la habilidad para interpretar los canales no verbales: el tono de voz, los ademanes y la expresión facial (Shapiro, 1997; Elias, 2002). A esta capacidad se le conoce como empatía, y se

construye sobre la conciencia de uno mismo; cuanto más abierto estamos a nuestras propias emociones, más hábiles seremos para interpretar los sentimientos (Elias, 2002).

Los psicólogos del desarrollo han descubierto que la empatía inicia de una manera tácita en los niños, incluso antes de darse cuenta de que existen como seres separados de los demás (Goleman, 1995), y se ve reforzada cundo la disciplina de los padres incluyes notorias llamadas de atención sobre la aflicción que su mala conducta provocaba en alguna otra persona (Elias, 2002; Colom y Froufe, s.a.).

De esta manera, la empatía potencia el altruismo y la ética, ya que la persona que la maneja es capaz de ponerse en sintonía con alguien que sufre un dolor, un peligro o una privación y su aflicción mueve a la gente a actuar para ayudar (Goleman, 1995).

Control de las relaciones

El arte de las relaciones sociales se basa, en buena medida, en la competencia para expresar los sentimientos propios y empatizar con los ajenos (Colom y Froufe, s.a.).

En esta competencia resalta la inteligencia interpersonal que Gardner mencionaba en su teoría de las inteligencias múltiples. Así como también, este autor señaló cuatro capacidades que conforman dicha inteligencia (Goleman, 1995).

Organización de grupos: esencial en un líder, esta habilidad incluye esfuerzos iniciadores y coordinadores de un grupo de personas.

Negociación de soluciones: es el talento del mediador, que previene conflictos o resuelve aquellos que han estallado.

Conexión personal: es el talento de la empatía y la conexión. Hace que resulte fácil participar en un evento o reconocer y responder adecuadamente los sentimientos y las preocupaciones de la gente.

Análisis social: supone ser capaz de detectar y mostrar comprensión con respecto a los sentimientos, los motivos y las preocupaciones de la gente.

Tomadas en conjunto, estas habilidades son la materia del refinamiento interpersonal, son los ingredientes necesarios que hacen ser a una persona encantadora, carismática.

Inteligencia emocional en la escuela

En su libro, Goleman (1995), menciona una frase que bien podría justificar este apartado: “¿Quién no recuerda la escuela, al menos en parte, como un interminable desfile de horas de aburrimiento puntuadas por momentos de gran ansiedad?”. Esta percepción sugiere la implementación inmediata de técnicas que sirvan para contrarrestar la sensación de aburrimiento, misma que de ninguna manera facilita los procesos educativos dentro del salón de clases.

Una de éstas técnicas es agregar experiencias emocionales y vívidas que logren favorecer una educación completa, es por eso que la inteligencia emocional no puede seguir alejada de los centros de enseñanza (Elias, 2002).

Una de las premisas necesarias para promover que los alumnos desarrollen su inteligencia emocional, es que el docente desarrolle también su propia inteligencia emocional, esto es congruente, ya que no se puede enseñar lo que no se sabe.

La inteligencia emocional del profesor constituye una de las variables que mejor explican la creación de un aula emocionalmente inteligente. El profesor no debería negar sus emociones, sino ser capaz de expresarlas de un modo saludable dentro de la comunidad que construye con sus alumnos (Rodríguez, 1999), ya que se tiene que recordar que los niños son “esponjas emocionales”, también se le debe proporcionar al alumno un vocabulario preciso mediante el qué expresarse, especialmente en lo relativo a las sensaciones negativas que, por alguna razón, suelen ser más difíciles de comunicar de un modo respetuoso (Shapiro, 1997).

Si el profesor enseña usando su razón, con respeto y empatía, eso es lo que el alumno aprenderá a valorar con mayor probabilidad. Profesores y alumnos deben (Goleman, 1995):

1.  Aprender a etiquetar las sensaciones, no a las personas o las situaciones.

2.  Analizar sus propias sensaciones, en lugar de las acciones o los motivos de los demás.

3.  Acostumbrarse a preguntar a los demás cómo se sienten.

4.  Tomarse tiempo para reflexionar sobre las propias sensaciones.

5.  Identificar los deseos y temores.

6.  Identificar los deseos emocionales.

7.  No hay que esperar que los demás le hagan a uno feliz.

8.  Ser responsable de sus emociones y de su felicidad.

En este sentido, desarrollar la inteligencia emocional de los alumnos no es igual a enseñarles a multiplicar, ya que esta actividad exige emplear unas aptitudes y adquirir unos determinados conocimientos, pero la aptitud para gestionar inteligentemente las emociones supone algo sustancialmente distinto a las operaciones implicadas en la multiplicación (Elias, 2002). Esta dificultad quizá sea una de las razones por las que los profesionales de la educación pocas veces se han puesto a trabajar en programas de investigación masivos dirigidos a estudiar las variables implicadas en la inteligencia emocional. Con todo han existido excepciones a esta tendencia, como se menciona a continuación.

Medición objetiva la inteligencia emocional

Tal vez el punto más frágil de la teoría de la inteligencia emocional es su poca capacidad de ser evaluada de una forma objetiva y que resista el rigor científico, ya que la mayoría de los rasgos sociales y de personalidad, tales como la amabilidad, la confianza en si mismo o el respeto por los demás son totalmente subjetivos y experimentados de manera muy personal e individual (Jáuregui, 2000).

A pesar de esto, han existido intentos por realizar dicho propósito, como la investigación que llevaron a cabo Chiriboga y Franco (s.a.), quienes crearon un test para medir el nivel de inteligencia emocional en niños de 10 años. Los resultados que obtuvieron fueron alentadores, ya que de su muestra, el 75% de los niños resultaron con valores normales y el resto mostró un déficit en su inteligencia emocional. Sin embargo, estos autores remarcaron en sus conclusiones, el hecho de que su prueba era incapaz de especificar en cual área era necesaria una estimulación.

Otros investigadores que se han interesado en la medición de este constructo por medio de una prueba escrita fueron Mestre y sus colaboradores (s.a.), ellos utilizaron como referencia la teoría de Salovey y Mayer sobre inteligencia emocional y sus competencias, así como también la teoría de Gardner acerca de las inteligencias múltiples. Desafortunadamente, sus resultados no alcanzaron los rangos de validez necesarios; sin embargo, eso sólo significó que la inteligencia emocional no puede medirse mediante pruebas escritas.

INTELIGENCIAS MÚLTIPLES

A finales de la década del 80 se presentó una teoría científica que sostiene que existen diversos tipos de inteligencia. Howard Gardner, creador de la teoría de las inteligencias múltiples, distingue entre ocho tipos diferentes de inteligencia, distintas e independientes pero relacionadas entre si.

En los diccionarios se pueden encontrar los siguientes significados para la palabra inteligencia:

Facultad de comprender, capacidad mayor o menor de saber o aprender. Conjunto de todas las funciones que tienen por objeto el conocimiento (sensación,

asociación, memoria, imaginación, entendimiento, razón, conciencia).Para Gardner, en cambio, la inteligencia es la capacidad de resolver problemas o elaborar productos que sean valiosos para  una o más culturas. La inteligencia no se mide solo por el éxito o la excelencia académica, ya que alguien puede ser brillante como científico genetista y no saber desenvolverse socialmente y relacionarse con las personas.

Por otro lado, esta teoría entiende a la inteligencia como una capacidad que se puede desarrollar, y no como algo innato e inamovible.

La teoría de las inteligencias múltiples distingue entre estos tipos de inteligencia:

La teoría de las Inteligencias múltiples cuestiona abiertamente la visión estrecha y convencional de aquellos que postulaban una posición eminentemente cognitivista sobre las maneras en que los individuos aprenden.

Es Howard Gardner (1993) y sus colaboradores del proyecto Zero de la Escuela Superior de Educación de Harvard, quienes dejan atrás la concepción casi única de la inteligencia global. Proponen que la inteligencia esta compuesta por la suma de varias habilidades distintas, cada una de ellas relativamente independiente de las otras .Plantean que es difícil delinear una frontera entre una y otra inteligencia o determinar con exactitud cuántas de ellas existen, pero mencionan que podríamos considerar la presencia de por lo menos ocho tipos de inteligencias.

Gardner menciona la inteligencia matemática, lingüística, espacial, musical, cinestésica corporal, interpersonal, intrapersonal y naturalista o ecológica. (1993)

Su propuesta considera aspectos importantes dentro de los procesos mentales como la personalidad, estados emocionales, entorno cultural .Lo más trascendente del enfoque planteado por Gardner es que enfatiza las habilidades únicas que poseen los individuos.

La inteligencia es definida por Gardner como la capacidad de resolver problemas o elaborar productos que sean valiosos en una o más culturas. (LA PALMA, 2008)

La definición que plantea Gardner es importante porque amplía la visión de lo que es la inteligencia y acepta abiertamente que los individuos no solo son inteligentes cuando son habilidosos para las matemáticas o las letras.

Triunfar en otras áreas como el deporte, la música, la pintura, el baile o en el manejo de las relaciones interpersonales y de los estados anímicos requiere también del uso de la inteligencia

Gardner al definir que la inteligencia es una capacidad la convierte en una destreza y como tal establece los precedentes de que esta se podrá desarrollar.

El estudioso afirma y cree que la educación debe diseñarse y adecuarse por lo tanto al perfil de habilidades que demuestre cada individuo, razón por la cual se infiere que nos plantea la educación personalizada.

“El enfoque escolar ha imperado en nuestras ideas acerca del aprendizaje y ha llegado a ejercer un dominio absoluto sobre las actividades que caracterizan a la escuela. Sin embargo, los individuos también pueden formar sus inteligencias mediante regímenes de formación no escolares o de carácter más informal. Aprendizaje en casa” Howard Gardner 1993

LA TEORÍA DE LAS INTELIGENCIAS MÚLTIPLES DE GARDNER

La teoría de las inteligencias múltiples de Gardner es una visión amplia y pluralista sobre la mente de los individuos, en ella hace referencia a las múltiples maneras en que estos logran percibir, conocer, procesar, representar y comunicar la información: a través de imágenes, palabras, números, con el cuerpo en movimiento, el ritmo y la música, en sintonía consigo mismo, con los demás y con la naturaleza.

Actualmente, el autor de la teoría, Howard Gardner, diferencia nueve tipos de inteligencia

1. Lingüística o Verbal:

Capacidad de entender y utilizar el propio idioma. La tienen desarrollada los escritores, poetas, redactores etc. Es la capacidad para usar palabras de manera efectiva, en forma oral o escrita. Incluye la habilidad para manipular la sintaxis o significados del lenguaje. Algunos usos incluyen la retórica (usar el lenguaje para convencer a otros de tomar un determinado curso de acción), la mnemónica (usar el lenguaje para poder recordar información), la explicación (usar el lenguaje con el fin de informar) y el metalenguaje

Se puede evaluar la inteligencia lingüística o verbal pidiéndole al evaluado que nos relate una historia. Si se trata de niños pequeños podemos pedirles que nos cuenten un cuento. Gardner observa que si se estimula la imaginación en aquellos individuos que solo logran contar cosas rutinarias estos podrán desarrollar con el tiempo esta área con óptimos resultados.

La Inteligencia lingüística o verbal, Es la capacidad de pensar en palabras y de utilizar el lenguaje para comprender, expresar y apreciar significados complejos. Esta relacionada con la lectura, la escritura, el razonamiento abstracto y el habla simbólica. Esta capacidad para utilizar eficazmente las palabras, ya sean en el habla, la lectura o la escritura, esta más desarrollada por lo general en periodistas, abogados, docentes, escritores y políticos entre otros.

Ellos creen en las palabras en lugar de imágenes.

Sus habilidades incluyen:

Escuchar, hablar, escribir, contar historias, explicar, enseñar, utilizando el humor, la comprensión de la sintaxis y el significado de las palabras, para recordar la información, convencer a alguien de su punto de vista, analizando el uso del lenguaje.

Posibles intereses profesionales:

Poeta, periodista, escritor, profesor, abogado, político, traductor

Actividades Sugeridas:

Juegos de palabras

Concursos de oratoria

Escritura de cuentos, poesías y ensayos

Desarrollo de publicaciones

Debates verbales

Club de lectura

Discusiones de temas específicos

Escribir diarios

Concurso de chistes

2. Lógico–matemática:

Capacidad para entender las relaciones abstractas. Es la que se utiliza para resolver problemas de lógica y matemáticas. Es la inteligencia que poseen los científicos. Se corresponde con lo que la cultura occidental ha considerado desde siempre como la única inteligencia. Es la capacidad para usar los números de manera efectiva y razonar adecuadamente. Esta inteligencia incluye sensibilidad a los esquemas, relaciones lógicas, afirmaciones,

proposiciones (si-entonces, causa-efecto), funciones, abstracciones. Tipos de procesos que se usan al servicio de esta inteligencia incluyen: categorización, clasificación, inferencia, generalización, cálculo y demostración de hipótesis

Gardner manifiesta que podemos evaluar esta capacidad cuando le damos la oportunidad al estudiante de probar hipótesis, en unas primeras etapas estas serán planteamientos sencillos y luego podremos ir elaborando problemas de mayor complejidad

Otro elemento importante es determinar si el individuo posee o no una capacidad intuitiva para los números a esto él lo denomina habilidad numérica.

La Inteligencia lógica-matemática: Es la capacidad de razonamiento lógico, que se utiliza para resolver problemas de lógica y matemáticas. Esta asociada a las habilidades de comprender y resolver cálculos numéricos, problemas de lógica y conceptos abstractos. Es la inteligencia desarrollada en todas las disciplinas científicas.

Sus habilidades incluyen:

resolución de problemas, clasificación y categorización de la información, trabajar con conceptos abstractos para determinar la relación de cada uno para el otro, largas cadenas de manipulación de la razón para hacer progresiones locales, haciendo experimentos controlados, cuestionando y preguntando acerca de los fenómenos naturales, la realización de complejos cálculos matemáticos, de trabajo con formas geométricas

Posibles trayectorias profesionales:

Científicos, ingenieros, programadores, investigadores, contables, matemáticos

Actividades Sugeridas:

Rompecabezas

Ejercicios de solución de problemas

Experimentos

Preparar organizadores gráficos

Juegos matemáticos

Ejercicios de lógica

3. Racionamiento Espacial:

Capacidad de percibir la colocación de los cuerpos en el espacio y de orientarse. Consiste en formar un modelo mental del mundo en tres dimensiones; Esta capacidad tiene relación directa y temprana con la habilidad de los sujetos para construir con bloques, la capacidad de poder imaginar objetos en el espacio, sombras, proyecciones, ángulos, armar y desarmar objetos mecánicos, orientarse en un camino etc. Es la inteligencia que tienen

La Inteligencia espacial: Esta relacionada con lo visual, con la percepción de las cosas, y  consiste en la habilidad de formar modelos mentales en tres dimensiones. Esta asociada a las habilidades de reconocer y elaborar imágenes visuales, crear imágenes mentales, razonar acerca del espacio y sus dimensiones, etc. Es la inteligencia desarrollada por los ingenieros, arquitectos, escultores, fotógrafos, marineros, pilotos, cirujanos, pintores, decoradores, etc. etc.

Sus habilidades incluyen:

Rompecabezas de la construcción, la lectura, la escritura, la comprensión de los cuadros y gráficos, un buen sentido de orientación, dibujo, pintura, la creación de metáforas y analogías visuales (quizás a través de las artes visuales), la manipulación de imágenes, la construcción, por el que se fijan, el diseño de objetos prácticos, la interpretación de imágenes visuales.

Posibles intereses profesionales:

Navegantes, escultores, artistas visuales, los inventores, arquitectos, diseñadores de interiores, mecánicos, ingenieros

Actividades Sugeridas:

Proyectos de artes visuales (pintar, dibujar, esculpir)

Preparar mapas conceptuales

Fotografías, videos

Utilizar recursos audiovisuales

Hacer gráficas, diagramas

Diseñar escenografías

Diseño comercial

Ilustrar cuentos y poemas

Hacer tirillas cómicas

Hacer esculturas

Dibujar mapas para llegar a lugares

Diseñar interiores y exteriores de casas

Certámenes artísticos

4. Cinética - corporal o de movimiento:

Capacidad de percibir y reproducir el movimiento, de utilizar el propio cuerpo para realizar actividades o resolver problemas. Es la facilidad en el uso de las manos para producir o transformar cosas. Es la inteligencia de los deportistas, artesanos, cirujanos, bailarines, actores, escultores, mecánicos, ceramistas, etc. Esta inteligencia incluye habilidades físicas como coordinación, equilibrio, destreza, fuerza, flexibilidad, velocidad así como capacidades auto perceptivo, táctil y la percepción de medidas y volúmenes.

Gardner afirma que la mayoría de niños muestran sus destrezas en estas áreas cuando juegan con una pelota, hacen ejercicios o realizan trabajos de tallado.

La Inteligencia corporal-cenestésica: Es la capacidad de utilizar el propio cuerpo controlando sus movimientos. Involucra la destreza psicomotriz, uniendo el cuerpo y la mente para lograr el perfeccionamiento del desempeño físico. Incluye habilidades físicas específicas como la coordinación, la destreza, la fuerza, la flexibilidad, el equilibrio y la velocidad.

Sus habilidades incluyen:

el baile, la coordinación física, el deporte, las manos en la experimentación, utilizando el lenguaje corporal, la artesanía, la actuación, mímica, usando sus manos para crear o construir, expresar las emociones a través del cuerpo

Posibles trayectorias profesionales:

Deportistas, profesores de educación física, bailarines, actores, bomberos, artesanos

Actividades Sugeridas:

Movimientos creativos

Deportes

Ejercicios de relajación

Pantomima

Presentaciones de obras de teatro

Concursos de baile moderno o folklórico

Modelaje de ropa

5. Musical:

Capacidad de percibir y reproducir la música. Es aquella que permite desenvolverse adecuadamente a cantantes, compositores, músicos, bailarines. , críticos musicales. Esta inteligencia incluye la sensibilidad al ritmo, el tono, la melodía, el timbre o el color tonal de una pieza musical.

La mayoría de investigadores en el área coinciden que es importante el contacto de los individuos desde la niñez con la música y que este no solo se limite este a la televisión o la radio como sucede en la mayoría de los hogares.

Dice Gardner: “Jugar con campanas permite a los niños explorar el mundo del sonido, reconocer las alturas de los sonidos: más agudos, más graves, igual o diferente .Lo que asusta y lo que entusiasma. Y luego ver si pueden realmente crear pequeñas canciones propias”.

“El hombre debería de tomar conciencia que no solo se forman buenos seres humanos en las escuelas, sino también en las salas de concierto en donde se les da la oportunidad de edificarse por medio de la música, cuando esto suceda quizás se rendirá culto a la música como la cosa más grande que existe en la vida.”

La Inteligencia musical: Es la capacidad que permite expresarse mediante formas musicales, ya sea dirigiendo, componiendo o ejecutando un instrumento, incluida por supuesto la voz humana. Este tipo de inteligencia esta desarrollada en músicos, compositores, cantantes y bailarines.

Sus habilidades incluyen:

Cantar, silbar, tocar instrumentos musicales, reconocimiento de patrones tonales, componer música, recordar melodías, la comprensión de la estructura y el ritmo de la música

Posibles trayectorias profesionales:

Músico, disc jockey, cantante, compositor

Actividades Sugeridas:

Cantar

Utilizar ritmos

Crear melodías y canciones

Tocar instrumentos

Desarrollar una rutina de baile

Identificar géneros musicales

6. Intrapersonal:

El conocimiento de sí mismo y la habilidad para adaptar las propias maneras de actuar a partir de ese conocimiento. No está asociada a ninguna actividad concreta.

Esta inteligencia incluye tener una imagen precisa de uno mismo (debilidades, fortalezas), tener conciencia de los estados de ánimo interiores, intenciones, motivaciones, temperamentos, deseos, capacidad para la autodisciplina, auto comprensión, autoestima, autoconfianza, control emocional.

No se puede aprender a ser inteligente a nivel intrapersonal de forma mágica, requiere de un proceso largo y minucioso. Aprender a descubrirnos y a descubrir nuevos caminos para conocerse a uno mismo nunca será fácil, se requiere de un intenso trabajo personal y del apoyo de un gestor.

Esta inteligencia se demuestra a través del sentido común, la autodisciplina, la habilidad de ser perseverante. El autoconocimiento se mejora y profundiza a lo largo de nuestra existencia. Cabe resaltar que de individuo a individuo las diferencias pueden resultar verdaderamente abismales.

Gardner afirma que esta inteligencia es invisible y trata de lograr conocerse a si mismo profundamente y que dicho conocimiento resulte productivo.

La Inteligencia intrapersonal: Es el tipo de inteligencia que refiere a la auto comprensión, a entenderse a sí mismo. Esta relacionada a emociones y sentimientos como la motivación, la capacidad de decisión, la ética personal, la integridad, la empatía y el altruismo.

Sus habilidades incluyen:

Reconocer sus propias fortalezas y debilidades, lo que refleja el análisis y sí, la conciencia de sus sentimientos, deseos y sueños, la evaluación de sus patrones de pensamiento, razonamiento con ellos mismos, la comprensión de su papel en relación a otros

Posibles trayectorias profesionales:

Investigadores, teóricos, los filósofos

Actividades Sugeridas:

Descubrir cuáles son nuestros valores

Analizar las creencias que nos hemos formado alrededor de esos valores

Definir creencias limitadoras o potenciadoras,

Determinar estilo de personalidad•

Estudio individual•

Escribir reflexiones

Desarrollar actividades para fomentar la autoestima

Escribir diarios reflexivos

hacer grupos de apoyo

7. Interpersonal:

Capacidad de ponerse en el lugar del otro y saber tratarlo. Nos sirve para mejorar la relación con los otros (habilidades sociales y la llamada capacidad empatía). Se la suele encontrar esta inteligencia en los buenos vendedores, políticos, profesores, terapeutas. Facilita percibir y establecer distinciones en los estados de ánimo, intenciones, motivaciones, y sentimientos de otras personas. Puede incluir la sensibilidad a las expresiones faciales, la voz y los gestos, la capacidad para discriminar entre diferentes clases de señales interpersonales y la habilidad para responder de manera efectiva a estas señales en la práctica. Aquí podríamos decir que se ubican los sujetos de comportamiento socialmente asertivos.

Gardner 1993 dice que: “Las pruebas de inteligencia tradicionales ignoran este conocimiento de otras personas, quizás porque los académicos que las diseñaron tendían a ser pensadores solitarios. Pero si las pruebas de inteligencia hubieran sido inventadas por políticos o gentes de negocios, esta forma de inteligencia encabezaría la lista “.

Goleman (2000) dice que: “Este tipo de don creativo puede poner en marcha vastos movimientos sociales “.

La Inteligencia interpersonal: Es la que permite entender y comprender a los demás y comunicarse con ellos. Para desarrollar relaciones satisfactorias es necesario tener en cuenta el temperamento, los objetivos, las motivaciones y las habilidades del otro. Comprender estas características, poder verlas y manejarlas permite establecer y mantener relaciones sociales y asumir diversos roles dentro de los grupos.

Sus habilidades incluyen:

Ver las cosas desde otras perspectivas (doble perspectiva), la escucha, utilizando la empatía, la comprensión de otras personas estados de ánimo y los sentimientos, el asesoramiento, la cooperación con grupos, notando las personas estados de ánimo, motivaciones e intenciones,

tanto la comunicación verbal y no verbal, el fomento de la confianza, la resolución pacífica de conflictos, el establecimiento de relaciones positivas con otras personas.

Posibles trayectorias profesionales:

Consejero, vendedor, político, empresario

Actividades Sugeridas:

Trabajo cooperativo

Solución de conflictos

Trabajo en la comunidad

Tutorías

club de asistentes de orientadores

Visitas a hospitales y hogares de ancianos

Participación en “chats”

8. Natural o ecológica:

Capacidad para desenvolverse en la naturaleza., se utiliza al observarla y estudiarla, con el objetivo de saber organizar, clasificar y ordenar. Es la que demuestran los biólogos, herbolarios, etc.

La Inteligencia naturalista: Es la utilizada para observar y estudiar la naturaleza, reconociendo distinciones y semejanzas entre grupos. Abarca las habilidades para observar, identificar y clasificar miembros de un grupo o especie, reconocer secuencias y formular hipótesis.

Actividades Sugeridas:

Proyectos sobre el ambiente

Reciclaje de papel, plásticos y otros

Cuidado de los animales

Dibujar o fotografiar objetos del ambiente

Visitas al zoológico

9.Existencial o espiritual

Capacidad para plantearse preguntas fundamentales sobre el ser humano, la existencia y sobre Dios. (2008) Pero como aún no tiene evidencia desde el punto de vista neurológico de que poseemos este tipo de inteligencia, Gardner la llama “media inteligencia”.

La inteligencia existencial o espiritual es la forma como se cultiva o desarrolla la “energía vita”l esa parte denominada “no física”, incluidos el carácter y las emociones. El concepto espíritu procede de la palabra latina “spiritus” cuyo significado es “aliento” y tiene relación con la energía vital, la determinación, el coraje y el entusiasmo.

Actividades Sugeridas:

Proyectos creativos en grupo

Ejercicios de solución de problemas

Personificación (“role play”)

Reflexiones

Tormenta de ideas (“brainstorming”)

Participación en el establecimiento de reglas de conducta y otras

Tutorías o ayuda del coetáneo.

GOLEMAN, 2000 sobre el Espíritu Creativo y las inteligencias múltiples escribe: “Para Gardner, una manera fructífera de analizarlo es teniendo en cuenta las muchas clases de “inteligencias”. La inteligencia provee la base de la creatividad, un niño será más creativo en los campos en que posee mayores fortalezas.”

CUADRO DE LAS INTELIGENCIAS MÚLTIPLES

Tipo de IM Destaca en Le gusta Aprende mejorLingüística Lectura, escritura, narración

de historias, memorización de fechas, piensa en palabras

Leer, escribir, contar historias, Contar cuentos, jugar juegos con palabras, armar rompecabezas, etc.

Leyendo, escuchando, viendo palabras, hablando, escribiendo, discutiendo y debatiendo.

Lógico-matemática

Matemáticas, razonamiento, lógica, resolución de problemas, pautas.

Experimentar, Cuestionar, Trabajar con números, calcular, resolver problemas, etc.

Cosas para explorar y pensar, usar pautas y relaciones, clasificar y trabajar con lo abstracto.

Espacial Lectura de mapas, gráficos, dibujando, laberintos, rompecabezas, imaginando cosas, visualizando.

Diseñar, dibujar, crear, soñar despierto, mirar dibujos

Trabajando con dibujos y colores, visualizando, usando su ojo mental.

Corporal-cinética

Atletismo, danza, arte dramático, trabajos manuales, utilización de herramientas

Moverse, tocar y hablar, lenguaje corporal.

Tocando, moviéndose, procesando información a través de sensaciones corporales.

Musical Cantar, reconocer sonidos, recordar melodías, ritmos.

Cantar, tararear, tocar un instrumento, escuchar música.

Ritmo, melodía, cantar, escuchando música y melodías.

Interpersonal Entendiendo a la gente, liderando, organizando, comunicando, resolviendo conflictos, viendo.

Tener amigos, hablar con la gente, juntarse con la gente.

Compartiendo, comparando, relacionando, entrevistando, cooperando.

Intrapersonal Entendiéndose a si mismo, reconociendo sus puntos fuertes y sus debilidades, estableciendo objetos.

Trabajar solo, reflexionar, seguir sus intereses.

Trabajando solo, haciendo proyectos a su propio ritmo, teniendo espacio, reflexionando.

Naturalista Entendiendo la naturaleza, haciendo distinciones, identificando la flora y la fauna

Participar en naturaleza, hacer distinciones.

Trabajar en el medio natural, explorar los seres vivientes, aprender acerca de plantas y temas relacionados con la naturaleza.

GLOSARIO

1.- HABILIDAD.- f. Capacidad para una cosa. Sinónimo. Destreza. Diccionario Pequeño Larousse Ilustrado 2000.

Existen diferentes definiciones que intentan englobar el concepto de habilidad:

Es el grado de competencia de un sujeto concreto frente a un objetivo determinado. Es decir, en el momento en el que se alcanza el objetivo propuesto en la habilidad.

Se considera como a una aptitud innata o desarrollada o varias de estas, y al grado de mejora que se consiga a esta/s mediante la práctica, se le denomina talento.

Es la destreza para ejecutar una cosa o capacidad y disposición para negociar y conseguir los objetivos a través de unos hechos en relación con las personas, bien a título individual o bien en grupo.

2.- CAPACIDAD.- f. Contenido: La capacidad de un vaso. (Sinón. V. volumen.) ll espacio de un sitio o local. (Sinón. Cabida y espacio.) ll Fig. Inteligencia, talento: persona de gran capacidad. ll aptitud o suficiencia.

3.- HABILIDADES DEL PENSAMIENTO.- Razonamiento, creatividad, resolución de problemas.

Son patrones de conducta ya aprendidos que con su entrenamiento pueden aumentar el propio repertorio de patrones de desempeño intelectual precodificados para que funcionen de un modo relativamente automático en los contextos apropiados.

4.-HABILIDADES DE LA COMUNICACIÓN.- Ver, oír, hablar, escribir.

Son aquellas habilidades del pensamiento que se utilizan en los procesos de comunicación y en cualquier asignatura como apoyo para el aprendizaje.

Reciben otros nombres según los autores: destrezas, capacidades comunicativas.

5.-PROCESOS.- Serie de fases de un fenómeno Diccionario Pequeño Larousse Ilustrado 2000.

6.-NEGOCIACIÓN DE SIGNIFICADOS.- Acto natural del niño, una interacción que lleva a éste a interpretar su cultura, una forma natural y necesaria para encontrar el sentido de su mundo. Jerome S. Brunner.

7.-FASES DEL DESARROLLO COGNITIVO.- La percepción en la que el niño atiende los aspectos particulares de la experiencia; la ideación en la que el niño reflexiona sobre la experiencia y la presentación en la que el conocimiento es expresado de alguna manera. En este sentido hasta que una idea ha sido presentada, el aprendizaje es completo. Goodman Ken.

8. - INTELIGENCIAS MÚLTIPLES (ANEXO 4 ).- Lingüística o verbal, espacial, lógico- matemática, musical, corporal,cinestésica, intrapersonal, interpersonal, naturalista.

9. - INTELIGENCIA. - Capacidad de resolver problemas o elaborar productos que sean valioso para una o más culturas.

Del latín intellegentĭa) es la capacidad de entender, asimilar, elaborar información y utilizarla adecuadamente. Es la capacidad de procesar información y está íntimamente ligada a otras funciones mentales como la percepción o capacidad de recibir dicha información, y la memoria, o capacidad de almacenarla.

10.- ESTILOS DE APRENDIZAJE (ANEXO 5).- Visual, auditivo, kinestésico. Son los rasgos cognitivos, afectivos y fisiológicos que sirven como indicadores relativamente estables, de cómo los alumnos perciben interacciones y responden a sus ambientes de aprendizaje

11.-LA SOLUCIÓN DE PROBLEMAS.- Implica la aplicación de procedimientos de un modo intencional y deliberado en una tarea, implica desarrollar detalladamente una idea y un procedimiento que favorece el trabajo con habilidades del pensamiento.

12.-LA ENSEÑANZA COMO RESOLUCIÓN DE PROBLEMAS.-Es trabajar en el aula para desarrollar habilidades del pensamiento. Partir de la resolución de problemas como proceso básico de diferentes aprendizajes, es diseñar procedimientos para buscar soluciones, en las cuales es fundamental la participación del alumno.

13.-PROBLEMA.- (ANEXO 10). “ Una situación que un individuo o un grupo quiere o necesita resolver y para la cual no dispone de un camino rápido y directo que le lleve a la solución”…requiere de algún modo un proceso de reflexión o toma de decisiones sobre la secuencia de pasos a seguir.