Jacinto alas

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”Tenía siete añitos cuando llega- ron los aviones, veía caer las bom- bas y lloraba”. Rosa Querol cum- plió 82 años el pasado día 17. Veci- na del Poble Sec, fue testigo de los tremendos bombardeos italianos sobre Barcelona durante la Gue- rra Civil. Pronuncia Rosa el nom- bre de Mussolini con el rencor acumulado todo este tiempo, así que puede imaginarse con qué contento acoge la noticia de la pro- puesta de ERC de que el Parla- ment reclame al Gobierno italia- no una disculpa al pueblo de Cata- luña por los ataques aéreos a la capital catalana. “Es lo mínimo que pueden hacer, pedir perdón”, opina; “hicieron mucho mal”. Y añade: “Que se recuerde”. Ella lo recuerda “como si fuera ahora, un espanto”: las bombas incendia- rias, el inmueble que se vino aba- jo en su calle, las carreras al refu- gio con la muñeca en la mano... Los bombardeos fascistas, en su inmensa mayoría llevados a ca- bo por los italianos de la Aviazio- ne Legionaria radicada en las Ba- leares, mataron en Barcelona a más de 2.700 personas y dejaron a unas 7.000 heridas. La ciudad tuvo el dudoso honor de adelan- tarse a las grandes urbes martiri- zadas desde el aire: Varsovia, Co- ventry, Londres, Dresde, Hambur- go, Hiroshima. El propio Chur- chill reconoció la preeminencia de Barcelona en el dolor y la resis- tencia al citar a sus ciudadanos como ejemplo para los británicos durante la batalla de Inglaterra. El primer ataque a la capital cata- lana con víctimas mortales tuvo lugar el 13 de febrero de 1937 y el último el 25 de enero de 1939. En total hubo 385 alarmas, se lanza- ron un millón de kilos de explosi- vos sobre la ciudad y se produje- ron 1.903 impactos de bombas. Resultaron afectados 1.808 edifi- cios civiles. La Barceloneta quedó devastada. Incluso murió la jirafa del zoo (los vecinos aprovecharon para comérsela). Los italianos disponían en su variada panoplia aérea de un aero- plano magnífico para la pionera actividad de machacar ciudades: el Savoia Marchetti S.79, una nove- dad decisiva para el tipo de gue- rra desde el cielo que preconiza- ba Mussolini, ese adelantado. A muchos kilómetros de dis- tancia del Poble Sec, en Marra- quesh, el escritor Juan Goytisolo valora también la noticia de la ini- ciativa parlamentaria. Como es sa- bido, la madre de los Goytisolo, Julia Gay, falleció a resultas de uno de los peores bombardeos ita- lianos, el 17 de marzo de 1938. Del 16 al 18 de marzo se desarrollaron (véase Perill de bombardeig, de Santiago y Elisenda Albertí, 2004) los llamados tres días sangrien- tos, el Adlertag del Blitz barcelo- nés, 12 aterradores bombardeos masivos seguidos que causaron 670 muertos, ¡el 15 % del total! “El bombardeo de Barcelona es el equivalente en Cataluña del de Gernika”, dice el escritor. Juan Go- ytisolo (1931) no guarda recuer- dos personales de los ataques. “Es- tábamos refugiados desde el 37 en Viladrau, mi madre bajaba a Barcelona a ver los parientes y ha- cer algunas compras y ese día, cuando caminaba por la Gran Via entre Balmes y el paseo de Gràcia, la alcanzó una de las explosio- nes”. A Goytisolo que se le pida a Italia que se disculpe le parece no un asunto sentimental, sino “una cuestión de justicia histórica”. La siguiente voz es del bando de los verdugos y llega de la leja- nía del tiempo. Es la del conde Ciano, yerno de Mussolini y minis- tro de Asuntos Exteriores italiano de 1936 a 1943. En sus Diarios (Crí- tica, 2004) escribe en la entrada del 20 de marzo, ante el espanto y la indignación provocados en Eu- ropa por los bombardeos de Bar- celona: “Mussolini no se ha preo- cupado demasiado, al contrario, se ha mostrado satisfecho por el hecho de que los italianos consi- gan suscitar el horror por su agre- sividad en vez de complacencia con sus mandolinas”. Al Duce le parece estupendo devastar Barce- lona: “A su modo de ver, hace que los alemanes nos tengan mayor consideración, puesto que gustan de la guerra total y despiadada”. Ciano confirma que los bombar- deos de Barcelona fueron ordena- dos directamente por Mussolini. “Franco no sabía nada y ayer me pidió que los suspendiera debido a complicaciones con el extranje- ro”, escribe de los tres días san- grientos de 1938. La acción se de- sencadenó con el telegrama envia- do al general Velardi el día 16: “Ini- ziare da stanotte azione violenta su Barcelona con martellamento diluido nel tempo”. Parece menti- ra que se pueda desencadenar tanta muerte y dolor con un len- guaje en el que resuenan Petrar- ca y Al Bano… La iniciativa de pedir una dis- culpa a Italia tiene una especial significación porque proviene ori- ginalmente de colectivos de italia- nos que residen en Barcelona. “Son gente mayormente de iz- quierda, la asociación Altra Italia, que querían hacer algo, que consi- deran los bombardeos un hecho vergonzoso en la memoria históri- ca de su país”, explica el diputado de ERC Oriol Amorós. La propues- ta parlamentaria de ERC ha pasa- do el plazo de presentación de en- miendas y podría entrar en comi- sión dentro de un mes. La discul- pa que se pide a Italia es de tipo moral. No incluye la reclamación de indemnización alguna. Rolando d’Alessandro, porta- voz de Altra Italia, recuerda que la idea de pasar cuentas a Italia por los bombardeos viene de lejos y ha revestido diversas formas. Ya hubo, apunta, una iniciativa simi- lar en el Parlament en 1999, que tuvo un final curioso: se aprobó en comisión, pero nunca se consu- mó, pues se adujo vicio de forma. Para los italianos de Altra Italia es fundamental recordar el fascismo y sus actos sanguinarios en una época de peligroso revisionismo. El historiador Ricard Vinyes considera la iniciativa “excelen- te”. ¿Se puede hacer que pida per- dón y pague la Italia democrática por lo que hizo la fascista? “Por supuesto, es la continuidad del Es- tado. El Gobierno alemán lo ha he- cho, se ha disculpado y ha concedi- do indemnizaciones por los actos nazis”. Vinyes subraya la atroci- dad de los bombardeos italianos. El historiador recuerda la imagen de la cabeza de mujer empalada en las rejas de la universidad por la violencia de las explosiones y la bárbara muerte de niños en Sant Felip Neri, donde aún puede apre- ciarse el impacto de la metralla, metralla italiana. Alas de horror, espoleta de disculpa Avanza la iniciativa de ERC para que el Parlament reclame a Italia que pida perdón por los brutales bombardeos aéreos de Barcelona en la Guerra Civil “Que pidan perdón”, reclama una testigo de los ataques, de 82 años 1.808 edificios fueron afectados y murió la jirafa del zoo Arriba, niños barceloneses muertos por los bombardeos en 1938. En medio, el aparato martirizador de la ciudad, el Savoia Marchetti S.70. Abajo, imagen aérea de un ataque sobre el Eixample. JACINTO ANTÓN Barcelona Los fascistas tenían un bombardero magnífico, el Savoia Marchetti S.79 Mussolini quería que se les asociase al horror y no a las mandolinas 10 EL PAÍS, domingo 29 de mayo de 2011 CATALUÑA

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EL PAÍS, domingo 29 de mayo de 2011 11

”Tenía siete añitos cuando llega-ron los aviones, veía caer las bom-bas y lloraba”. Rosa Querol cum-plió 82 años el pasado día 17. Veci-na del Poble Sec, fue testigo de lostremendos bombardeos italianossobre Barcelona durante la Gue-rra Civil. Pronuncia Rosa el nom-bre de Mussolini con el rencoracumulado todo este tiempo, asíque puede imaginarse con quécontento acoge la noticia de la pro-puesta de ERC de que el Parla-ment reclame al Gobierno italia-no una disculpa al pueblo de Cata-luña por los ataques aéreos a lacapital catalana. “Es lo mínimoque pueden hacer, pedir perdón”,opina; “hicieron mucho mal”. Yañade: “Que se recuerde”. Ella lorecuerda “como si fuera ahora,un espanto”: las bombas incendia-rias, el inmueble que se vino aba-jo en su calle, las carreras al refu-gio con la muñeca en la mano...

Los bombardeos fascistas, ensu inmensa mayoría llevados a ca-bo por los italianos de la Aviazio-ne Legionaria radicada en las Ba-leares, mataron en Barcelona amás de 2.700 personas y dejarona unas 7.000 heridas. La ciudadtuvo el dudoso honor de adelan-tarse a las grandes urbes martiri-zadas desde el aire: Varsovia, Co-ventry, Londres, Dresde, Hambur-go, Hiroshima. El propio Chur-chill reconoció la preeminencia

de Barcelona en el dolor y la resis-tencia al citar a sus ciudadanoscomo ejemplo para los británicosdurante la batalla de Inglaterra.El primer ataque a la capital cata-lana con víctimas mortales tuvolugar el 13 de febrero de 1937 y elúltimo el 25 de enero de 1939. Entotal hubo 385 alarmas, se lanza-ron un millón de kilos de explosi-vos sobre la ciudad y se produje-ron 1.903 impactos de bombas.Resultaron afectados 1.808 edifi-cios civiles. La Barceloneta quedódevastada. Incluso murió la jirafadel zoo (los vecinos aprovecharonpara comérsela).

Los italianos disponían en suvariada panoplia aérea de un aero-plano magnífico para la pioneraactividad de machacar ciudades:el Savoia Marchetti S.79, una nove-dad decisiva para el tipo de gue-rra desde el cielo que preconiza-ba Mussolini, ese adelantado.

A muchos kilómetros de dis-tancia del Poble Sec, en Marra-quesh, el escritor Juan Goytisolovalora también la noticia de la ini-ciativa parlamentaria. Como es sa-

bido, la madre de los Goytisolo,Julia Gay, falleció a resultas deuno de los peores bombardeos ita-lianos, el 17 de marzo de 1938. Del16 al 18 de marzo se desarrollaron(véase Perill de bombardeig, deSantiago y Elisenda Albertí, 2004)los llamados tres días sangrien-tos, el Adlertag del Blitz barcelo-nés, 12 aterradores bombardeosmasivos seguidos que causaron670 muertos, ¡el 15 % del total! “Elbombardeo de Barcelona es el

equivalente en Cataluña del deGernika”, dice el escritor. Juan Go-ytisolo (1931) no guarda recuer-dos personales de los ataques. “Es-tábamos refugiados desde el 37en Viladrau, mi madre bajaba aBarcelona a ver los parientes y ha-cer algunas compras y ese día,cuando caminaba por la Gran Viaentre Balmes y el paseo de Gràcia,la alcanzó una de las explosio-nes”. A Goytisolo que se le pida aItalia que se disculpe le parece no

un asunto sentimental, sino “unacuestión de justicia histórica”.

La siguiente voz es del bandode los verdugos y llega de la leja-nía del tiempo. Es la del condeCiano, yerno de Mussolini y minis-tro de Asuntos Exteriores italianode 1936 a 1943. En sus Diarios (Crí-tica, 2004) escribe en la entradadel 20 de marzo, ante el espanto yla indignación provocados en Eu-ropa por los bombardeos de Bar-celona: “Mussolini no se ha preo-

cupado demasiado, al contrario,se ha mostrado satisfecho por elhecho de que los italianos consi-gan suscitar el horror por su agre-sividad en vez de complacenciacon sus mandolinas”. Al Duce leparece estupendo devastar Barce-lona: “A su modo de ver, hace quelos alemanes nos tengan mayorconsideración, puesto que gustande la guerra total y despiadada”.Ciano confirma que los bombar-deos de Barcelona fueron ordena-dos directamente por Mussolini.“Franco no sabía nada y ayer mepidió que los suspendiera debidoa complicaciones con el extranje-ro”, escribe de los tres días san-grientos de 1938. La acción se de-sencadenó con el telegrama envia-do al general Velardi el día 16: “Ini-ziare da stanotte azione violentasu Barcelona con martellamentodiluido nel tempo”. Parece menti-ra que se pueda desencadenartanta muerte y dolor con un len-guaje en el que resuenan Petrar-ca y Al Bano…

La iniciativa de pedir una dis-culpa a Italia tiene una especialsignificación porque proviene ori-ginalmente de colectivos de italia-nos que residen en Barcelona.“Son gente mayormente de iz-quierda, la asociación Altra Italia,que querían hacer algo, que consi-deran los bombardeos un hechovergonzoso en la memoria históri-ca de su país”, explica el diputadode ERC Oriol Amorós. La propues-ta parlamentaria de ERC ha pasa-do el plazo de presentación de en-miendas y podría entrar en comi-

sión dentro de un mes. La discul-pa que se pide a Italia es de tipomoral. No incluye la reclamaciónde indemnización alguna.

Rolando d’Alessandro, porta-voz de Altra Italia, recuerda quela idea de pasar cuentas a Italiapor los bombardeos viene de lejosy ha revestido diversas formas. Yahubo, apunta, una iniciativa simi-lar en el Parlament en 1999, quetuvo un final curioso: se aprobóen comisión, pero nunca se consu-mó, pues se adujo vicio de forma.Para los italianos de Altra Italia esfundamental recordar el fascismoy sus actos sanguinarios en unaépoca de peligroso revisionismo.

El historiador Ricard Vinyesconsidera la iniciativa “excelen-te”. ¿Se puede hacer que pida per-dón y pague la Italia democráticapor lo que hizo la fascista? “Porsupuesto, es la continuidad del Es-tado. El Gobierno alemán lo ha he-cho, se ha disculpado y ha concedi-do indemnizaciones por los actosnazis”. Vinyes subraya la atroci-dad de los bombardeos italianos.El historiador recuerda la imagende la cabeza de mujer empaladaen las rejas de la universidad porla violencia de las explosiones y labárbara muerte de niños en SantFelip Neri, donde aún puede apre-ciarse el impacto de la metralla,metralla italiana.

Alas de horror, espoleta de disculpaAvanza la iniciativa de ERC para que el Parlament reclame a Italia que pidaperdón por los brutales bombardeos aéreos de Barcelona en la Guerra Civil

“Que pidanperdón”, reclamauna testigo de losataques, de 82 años

1.808 edificiosfueron afectadosy murió la jirafadel zoo

Arriba, niños barceloneses muertos por los bombardeos en 1938. En medio, el aparato martirizador de la ciudad,el Savoia Marchetti S.70. Abajo, imagen aérea de un ataque sobre el Eixample.

JACINTO ANTÓNBarcelona

Los fascistas teníanun bombarderomagnífico, el SavoiaMarchetti S.79

Mussolini queríaque se les asociaseal horror y noa las mandolinas

10 EL PAÍS, domingo 29 de mayo de 2011

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