La ANTROPOLOGÍA - La Doctrina Del Hombre

LA ANTROPOLOGÍA:

La Doctrina del Hombre

Curso Escrito Por: Roberto Locke

Evangelista

___________________________________________________________________________ LA ANTROPOLOGÍA – La Doctrina del Hombre, Notas por Roberto Locke

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LA ANTROPOLOGÍA: La Doctrina del Hombre Escrito Por Roberto Locke

Introducción: La ANTROPOLOGÍA es el estudio de la doctrina del hombre. Hoy en día, la palabra “antropología” es usada en dos sentidos:

El sentido TEOLÓGICO – la investigación del hombre en relación a Dios.

El sentido CIENTÍFICO – “…la ciencia del hombre, que trata sus características físicas, el origen y desarrollo de las razas, en conjunto con las culturas, costumbres, y creencias de la humanidad.” Diccionario World Book, p. 88

La especulación humana acerca del origen del hombre, y las ideas comunes acerca de su estado actual son muy distintas a las enseñanzas bíblicas. Nuestra autoridad final no es la especulación humana, sino la Palabra de Dios, la Biblia. Vamos a estudiar las Escrituras para ver qué dice Dios respecto al hombre – su creación, unidad, condición original, caída, y condición actual.

I. LA CREACIÓN DEL HOMBRE.

A. El Hecho de su Creación. (Génesis 1:26,27)

1. Las Presuposiciones Necesarias.

a. La Fe.

El escritor de Hebreos dice que “por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la palabra de Dios, de modo que lo que se ve fue hecho de lo que no se veía.” (Hebreos 11:3)

b. Los Hechos.

Aunque la Biblia no se presenta principalmente como un libro científico, la verdad de la creación sólo se presenta en ella. Los hechos presentados en la Biblia son dignos de confianza, incluyendo los primeros capítulos de Génesis. 2 Timoteo 3:16-17 16 Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, 17 a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.


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2. La Base Bíblica.

La única explicación satisfactoria del origen del hombre es que Dios lo creó, y la Biblia lo afirma explícitamente. (Génesis 1:26,27; 2:7) El verbo crear (Génesis 1:27) significa “dar existencia a una cosa, sacándola de la nada.” Diccionario Calleja En Isaías 43:7, vemos que Dios “creó” al hombre [lo produjo de la nada] (Génesis 1:27; 5:1,2; 6:7; Deuteronomio 4:32; 1 Corintios 11:7-9), lo “formó” [le dio un organismo físico] (Génesis 2:7,8; 1 Timoteo 2:13), y lo “hizo” [lo hizo un ser viviente] (Génesis 1:26; 2:22; 6:6,7; Salmo 100:3). “En armonía con está triple preparación del hombre para su vida y obra en la tierra, encontramos tres palabras hebreas que la describen. Un pasaje en Isaías 43:7 ilustra el significado de estos tres verbos. ‘Para gloria mía los he creado [Heb. BARA - es decir, producido de la nada] los formé [Heb. ASAH – es decir, hecho de una manera o forma determinada] y los hice [Heb. YATZAR – es decir, hechos los arreglos y disposiciones finales con respecto a El].” (Fundamentos de Teología Bíblica, Bancroft, p. 283)

3. La Teoría Humana.

a. La Evolución Naturalista (o Ateística)

La evolución es una teoría que dice que el hombre proviene “de más abajo, como un producto de las fuerzas o potenciales de vida del universo material.

(1) La teoría de la evolución representa al hombre surgiendo de un orden de seres más bajo, mientras que las Escrituras declaran que su origen se debe a la acción creadora directa de Dios.

(2) La teoría de la evolución representa al hombre como el resultado de una serie de cambios sucesivos en las formas materiales, debidos a fuerzas residentes dentro de ellas, mientras que las Escrituras declaran que el ser físico del hombre es el resultado de la acción de Dios en él desde afuera.

(3) La teoría de la evolución representa al hombre como el clímax del desarrollo, ascendiendo a través de las formas más bajas de la vida animal, en tanto que la Biblia declara que pertenece al


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orden humano distintivo, cuya entrada a existencia fue inmediata y directa.” (Fundamentos de Teología Biblica, Bancroft, pp. 281,282)

La evolución no contesta algunas preguntas claves:

¿Cómo llegó a existir la materia original? ¿De dónde provienen las fuerzas de vida del universo

material?

Los evolucionistas dicen que el hombre empezó mal, pero por la evolución se va mejorando cada vez más y más; mientras la Biblia dice que el hombre empezó bien, pero por su caída en pecado, se va empeorando cada vez más y más.

b. La Evolución Teística.

“La evolución Teística mantiene que Dios dirigió, usó, y controló los procesos de la evolución naturalista para ‘crear’ al mundo, y todo lo que está en ello.” (Teología Básica, Ryrie, p. 172) Los evolucionistas teísticos intentan mezclar la evolución con una creencia en Dios, sugiriendo que Dios Mismo puso en marcha el proceso de la evolución, y que lo ha dejado para su propio auto-desarrollo. Esto es nada más que cubrir el veneno con azúcar, tratando de hacerlo palpable; es resultado es igual. “Las facultades y capacidades del ser humano son tan sublimes en comparación con las de los animales más inteligentes, que hacen imposible la creencia que hayan venido de éstos. El hombre es una creación de Dios, y no el resultado de la evolución.” (La Doctrina del Hombre, Instituto Bíblico Río Grande)

II. LA UNIDAD DEL HOMBRE.

Toda la raza humana ha descendido de una sola pareja. (Génesis 1:27,28; 2:7,22; 3:20; 9:19) De esa manera, todos somos de la misma familia, y hemos heredado la misma naturaleza. El Apóstol Pablo confirma está conclusión en sus escritos en el Nuevo Testamento. (Romanos 5:12, 19; 1 Corintios 15:21,22)

III. LA CONDICIÓN ORIGINAL DEL HOMBRE.

El hombre fue hecho a la “imagen” y “semejanza” de Dios. (Génesis 1:26)


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La palabra imagen quiere decir “la sombra o el perfil de una figura.” La palabra semejanza denota “la similitud entre una sombra y la figura.” Son términos prácticamente sinónimos. A. La Imagen y Semejanza de Dios.

1. La Imagen de Dios no denota una semejanza física.

Dios es Espíritu (Juan 4:24); no tiene cuerpo, ni miembros físicos. El hombre, no obstante, los posee. Por lo tanto, llegamos a la conclusión que la imagen de Dios no tiene nada que ver con la constitución física del hombre. “Aunque se trata solamente de la parte inmaterial del hombre cuando se dice fue hecho a la imagen de Dios y conforme a su semejanza, sin embargo, debemos notar que Dios ha coronado el cuerpo del hombre con honra, porque Cristo tomó el cuerpo humano cuando vino a este mundo, y también porque Dios tiene una consumación gloriosa para nuestro cuerpo en la resurrección. Romanos 8:29; Filipenses 3:21” (La Doctrine Del Hombre, Instituto Bíblico Río Grande)

2. La Imagen de Dios denota una semejanza natural (o sea, la personalidad).

a. La Personalidad.

El hombre posee todas las cualidades incluidas en la personalidad. ¿Cuáles son estás cualidades?

(1) El Intelecto.

Esta es la facultad de saber, aprender, y razonar. (Génesis 12:19,20) Con ella, el hombre discierne entre el bien y el mal, guiado por su conciencia.

(2) La Emoción.

Esta es la facultad de sentir – de percibir impresiones morales. (Diccionario Larousse)

(3) La Voluntad.

Esta es la facultad de escoger – tomar decisiones. El hombre “puede iniciar acciones y escoger entre varias cosas la que le parezca mejor, según la luz de la


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razón.” (La Doctrina del Hombre, Instituto Bíblico Río Grande)

b. La Conciencia.

La conciencia no es una facultad separada, como las primeras tres mencionadas aquí. La conciencia obra en conjunto con las otras tres facultades, juzgando ciertos actos o condiciones respecto a su carácter moral (bien o mal), declarando su decisión a la mente. Luego, la conciencia actúa en forma impulsiva, insistiendo en su conclusión. El resultado es un sentimiento que dice, “Debo hacer esto…” o “No debo hacer esto.” Es importante observar que la conciencia es FALIBLE. Si no es guiado por la Palabra de Dios, puede llegar a conclusiones erróneas. Además, nos puede engañar. Los dictados de la conciencia nunca deben ser substituidos por la Palabra de Dios o el ministerio del Espíritu Santo.

3. La Imagen de Dios denota una semejanza moral.

La imagen de Dios consiste en “justicia y santidad de la verdad”. No hay pecado en El. (Efesios 4:24) No había pecado en el hombre cuando Dios lo formó. Era inocente, puro, y santo. “Como la santidad es una cualidad muy prominente en Dios, tiene que aparecer en el hombre hecho a Su imagen, aunque naturalmente no en el mismo grado, ni en el sentido absoluto en que Dios la posee. En el hombre era mas bien una inclinación hacia la santidad, o una disposición de la voluntad para ella, pero con la libertad de escoger lo contrario.” (La Doctrina del Hombre, Instituto Bíblico Río Grande)

4. Los resultados de ser hecho a la imagen de Dios.

a. La Comunión con Dios.

Adán y Eva gozaron de la divina presencia y la comunión íntima de Dios. (Génesis 2:16) Dios les instruyó personalmente respecto a sus deberes y las prohibiciones en el Huerto de Edén. (Génesis 2:16,17) Ellos escucharon la voz de Dios. Cuando Adán y Eva pecaron, y Dios se les presentó en el huerto para hablarles, ellos se escondieron de El. El pecado siempre impide la comunión del hombre con su Dios. (Génesis 3:8)


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b. El Dominio sobre los animales.

Dios puso al hombre sobre todos los animales del huerto. (Génesis 1:26) Todos llegaron a El, y les dio nombres a todos. Esto demuestra la inteligencia del hombre.

B. Creencias respecto a cómo el hombre llegó a ser un Ser Viviente.

1. La Pre-existencia.

“Este concepto dice que en el principio Dios creó a todas las almas, las cuales fueron encarceladas en cuerpos físicos como castigo. Estas almas pasan por varias encarnaciones a través de la historia, y en el proceso llegan a ser pecaminosas.” (Teología Básica, Ryrie, p 193) Plato y los griegos enseñaron la “trasmigración de almas”. Esta creencia sigue siendo promulgada hoy en día por la Teosofía y el Hinduismo. a. No hay base bíblica para apoyar este concepto.

b. La reencarnación del alma contradice toda la enseñanza bíblica

respecto a la vida eterna o la condenación eterna de cada persona nacida en este mundo.

c. La reencarnación contradice la clara declaración de la Biblia que el

hombre muere una sola vez, y después de esto, el juicio. (Hebreos 9:27)

2. El Creacionismo.

“Este concepto enseña que Dios crea el alma en el momento de concepción, o del nacimiento, e inmediatamente lo une con el cuerpo. El alma es pecaminoso, no porque su creación de alguna manera es defectuosa, sino por su contacto con la culpa heredada a través del cuerpo… La Iglesia Católica, y muchos Teólogos Reformados prefieren el creacionismo.” (Teología Básica, Ryrie, p. 193)

3. El Traducianismo.

Este concepto mantiene que la raza humana fue creada potencial e inmediatamente en Adán, y respecto al cuerpo y al alma, son


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propagados en él a través del proceso de la generación natural. Esta es la posición del autor de este material. Salmo 51:5 dice, “en pecado me concibió mi madre…”. Esto sólo puede significar que David heredó una naturaleza depravada cuando fue concebido en el vientre de su madre. La naturaleza pecaminosa pasa de generación a generación a través del padre a sus hijos. (Romanos 5:12)

C. La Constitución del Hombre.

El hombre posee una naturaleza material (el cuerpo), pero también una parte inmaterial (el alma y el espíritu).

1. El Cuerpo.

a. Su Creación.

Dios formó el cuerpo del hombre del polvo de la tierra. La palabra traducida “tierra” en hebreo es ADAMAH. El polvo de la tierra contiene 16 minerales y elementos químicos encontrados en el cuerpo humano – calcio, carbono, cloro, flúor, hidrógeno, yodo, hierro, magnesio, manganeso, nitrógeno, oxígeno, fósforo, potasio, sodio, y azufre.

b. Su Naturaleza.

(1) El cuerpo material (SOMA) tiene que ser distinguido de la carne (SARX). La carne, en su sentido ético o moral se refiere al hombre entero no regenerado – cuerpo, alma y espíritu – el cual es egocéntrico.

(2) El cuerpo fue herido gravemente por la caída del hombre, y

está en un proceso de deterioración que lo llevará eventualmente a la muerte.

c. Su Destino.

(1) El Cuerpo del Creyente.

En el arrebatamiento de la Iglesia, el cuerpo del creyente será transformado a un cuerpo semejante al cuerpo glorioso de Cristo Jesús después de su resurrección. (1 Corintios 15:44,53; Filipenses 3:21)

(2) El Cuerpo del incrédulo.


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En el último juicio, el Gran Trono Blanco, el cuerpo del incrédulo será resucitado junto con su alma y espíritu, para ser juzgado y lanzado al lago de fuego. La Biblia no habla detalladamente de la naturaleza de ese cuerpo, pero sabemos por lo menos que es físico y eterno, porque permanecerá en sufrimiento para siempre en el lugar de juicio. (Apocalipsis 20:11-15)

2. El Alma y el Espíritu.

En ciertas ocasiones en la Biblia, es difícil distinguir entre el alma y el espíritu. Sin embargo, hay otras cuando el relato bíblico es bastante claro en su distinción. “Muchos piensan que (estás dos palabras) significan la misma cosa. Hay que admitir que no es siempre fácil discernir la deferencia de significado de estos términos en algunos pasajes bíblicos; pero hay otros que muestran una clara distinción entre espíritu y alma. Por ejemplo: 1 Tesalonicenses 5:23 – “que vuestro espíritu y alma y cuerpo sea guardado…”; Hebreos 4:12 – “que alcanza hasta partir el alma y el espíritu...” (La Doctrina del Hombre, Instituto Bíblico Río Grande) Hay dos puntos de vista principales: a. La Dicotomía.

Este punto de vista dice que el alma y el espíritu son la misma cosa, y por lo tanto, el hombre consiste de sólo dos partes – cuerpo y alma. Sus argumentos:

(1) Las mismas funciones generales son atribuidas al alma y al espíritu. (Marcos 8:12; Juan 11:33; 13:21; Compare con Mateo 26:38; Juan 12:27)

(2) Los que han pasado de este mundo a veces son llamados almas

y a veces espíritus. (Hechos 2:27; Apocalipsis 6:9; Compare con Hechos 7:59; hebreos 12:23)

(3) Dios es revelado en las Escrituras como Espíritu y Alma, como

si las palabras fueran intercambiables. (Isaías 42:1; Jeremías 9:9; Mateo 12:18; Juan 4:24; Hebreos 10:38)

b. La Tricotomía.


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Este punto de vista dice que el hombre consiste de tres partes – cuerpo, alma y espíritu – el alma y el espíritu siendo distintos. “Las palabras ‘cuerpo’ (SOMA) y ‘carne’ (SARX) pueden ser usadas intercambiablemente cuando se refieren al aspecto material del hombre, pero como términos técnicos, tienen una gran diferencia en su significado. De la misma manera, las palabras ‘alma’ (PSUCHE) y ‘espíritu’ (PNEUMA) son utilizadas sinónimamente en las Escrituras para referirse a la parte inmaterial del hombre, pero como términos técnicos no tienen el mismo sentir. Cuando no hay necesidad de hacer una distinción entre ‘cuerpo’ y ‘carne’, pueden ser usados intercambiablemente; sin embargo, la palabra ‘carne’ muchas veces tiene un significado moral o ético que abarca al hombre entero. Igualmente, cuando no hay necesidad de hacer una distinción entre ‘alma’ y ‘espíritu’, estos términos pueden ser usados sinónimamente; sin embargo, hay que reconocer una diferencia obvia entre ellos.” (Antropología, Instituto Bíblico de Nuevo Brunswick, p. 2) Sus argumentos: (1) Aunque hay ocasiones cuando es posible usar las palabras “alma”

y “espíritu” intercambiablemente, hay otras cuando no es posible hacerlo. (Romanos 8:16; Lucas 1:46,47)

(2) Las Escrituras hablan claramente de la parte inmaterial del hombre

compuesta de dos partes distintas. (Hebreos 4:12) La Palabra de Dios tiene la capacidad de penetrar, hasta partir el alma y el espíritu.

(3) Las Escrituras declaran que el hombre está compuesto de tres

partes, en vez de sólo dos.

(a) Con el CUERPO, el hombre está consciente de los sentidos. Es con el cuerpo que el hombre experimenta los cinco sentidos. Esto toca la parte sensual del hombre.

(b) Con el ALMA, el hombre está consciente de sí mismo.

Es con el alma que el hombre llega a comprenderse y al mundo en que vive. Esto toca la parte intelectual del hombre.


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(c) Con el ESPÍRITU, el hombre está consciente de Dios. (Juan 4:24)

Es con el espíritu que el hombre llega a comprender y adorar a Dios. (Romanos 8:16) Esto toca la parte espiritual del hombre.

IV. LA CAÍDA DEL HOMBRE.

A. El Medio Ambiente en que fueron colocados Adán y Eva.

1. El Huerto de Edén. (Génesis 2:8)

El huerto de Edén era un lugar hermoso y fértil al extremo. En los árboles no había ramas secas ni hojas marchitas. Las flores despedían abundante fragancia y las rosas no tenían espinas. Nuestros ojos nunca han visto tanta hermosura.

2. Los Árboles del Huerto. (Génesis 2:9)

Tres diferentes clases de árboles son mencionados:

a. Los ornamentales, que deleitaban la vista del hombre. b. Los frutales, que satisfacían las necesidades físicas del hombre. c. Los especiales, el de la vida, y el de la ciencia del bien y del mal.

B. La Prueba del Hombre. (Génesis 2:16,17)

1. El Hecho de la Prueba. (Génesis 2:3-17)

Este período es “una prueba bajo una ley de deber (obligación), la cual sirve como prueba de obediencia. La prueba es ejecutada por una promesa de recompensa por escoger el bien o de castigo por escoger el mal.” (Antropología, Instituto Bíblico de Nuevo Brunswick, p. 6)

2. La Necesidad y el Propósito de la Prueba.

“La prueba del hombre era absolutamente esencial para la expresión y el ejercicio completo de su libertad intelectual y moral… Era necesario que él tuviese el derecho y la libertad de elegir lo correcto, y la libertad de elegir el mal como también el bien.” (Fundamentos de Teología Bíblica, Bancroft, pp. 287,288) El hombre no había llegado a la santidad perfecta, sino que era inocente, con disposición de voluntad hacia la santidad. Aunque era sin pecado,


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era susceptible a la tentación de afuera. Por lo tanto, UN TIEMPO DE PRUEBA ERA NECESARIO PARA PROBAR SU LEALTAD A DIOS. “Un carácter moral es producido por elegir libre y personalmente el bien en la presencia del mal, con la capacidad y opción de escoger el mal, sabiendo también las consecuencias de tal decisión.” (Antropología, Instituto Bíblico de Nuevo Brunswick, p. 6) Sin tener está opción, el hombre llega a ser nada más que un robot. Dios quiere que le amemos y que le sirvamos de buena voluntad y no por obligación. “Como Dios había creado al hombre con capacidad para la vida sobre un plano superior, y con la facultad de elegir, habiéndole dotado de una percepción moral de alto orden, era necesario colocarlo en un medio ambiente donde pudieran ser puestas a prueba estás facultades tan sublimes.” (La Doctrina Del Hombre, Instituto Bíblico Río Grande, p. 4)

3. La Prueba del Hombre.

El hombre tuvo una sola prohibición. Dios lo prohibió comer del árbol de la ciencia del bien y del mal. Un simple mandato era la mejor prueba de un espíritu de obediencia. Una caída en pecado no fue una consecuencia inevitable de la prueba. Dios no dio la prueba para hacerlo caer al hombre, sino para darle la oportunidad de obedecer. Dios no lo quiso tropezar, sino establecerlo en santidad. Dios no puede ser tentado, y no tienta a nadie. (Santiago 1:13)

C. La Tentación del Hombre. (Génesis 3:1-6)

1. El Hecho de la Tentación.

La primera pareja fue tentada a desobedecer el mandato de Dios. (2 Corintios 11:3; 1 Timoteo 2:14)

2. El Agente de la Tentación.

El agente natural era una serpiente, pero el agente sobrenatural era Satanás. (Génesis 3:1,4,5; Compare con 2 Corintios 11:3; Apocalipsis 12:9)

D. La Caída del Hombre. (Génesis 3:1-6)

1. El Relato Bíblico de la Caída del hombre.


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El capítulo 3 de Génesis nos da el relato más completo de esta tragedia terrible en la experiencia humana. Otros pasajes que hablan del mismo hecho son: Romanos 5:12-21; 1 Timoteo 2:14; Génesis 6:5,6; 8:21; Salmo 14; Romanos 3:10-23) “El propósito de la narrativa en Génesis no es dar razón de la manera en que el pecado entró al universo, sino de cómo entró en la raza humana.” (La Doctrina del Hombre, Instituto Bíblico Río Grande, p. 4)

2. Las Diferentes Interpretaciones de la Narrativa de la Caída de hombre.

a. Una Alegoría.

“Algunos lo miran como si fuera nada más que una alegoria. Dicen que ‘Adán es la parte racional del hombre; Eva, la parte sensual; y, la serpiente, las excitativas externas al mal.” (La Doctrina del Hombre, instituto Bíblico Río Grande, p. 5)

b. Un Mito.

“Lo conceptúan como verdad vestida de ropaje poético, o como algo sacado y compuesto de las tradiciones de los tiempos. Pero no es razonable dar carácter mítico a una parte de este capítulo cuando es evidente que los demás versículos se deben tomar en el sentido histórico.” (La Doctrina del Hombre, instituto Bíblico Río Grande, p. 5)

c. La Interpretación Histórica.

Está interpretación acepta literal e históricamente la narración tal como se encuentra en la Biblia. ¿Por qué aceptarlo así?

(1) No hay ninguna intimación para que se tome en un sentido contrario.

(2) Es parte de un libro histórico. (3) Los lugares geográficos mencionados en la narración

son históricos. (4) Las maldiciones sobre el hombre, la mujer y la tierra

son aceptadas en el sentido literal. (5) Es un hecho que la muerte está en el mundo como

consecuencia del pecado. (Romanos 5:12; Hebreos 9:27)


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(6) Cristo y los autores de la Biblia aceptaron este evento como histórico.

(7) Los autores del Nuevo Testamento compararon y contrastaron a Adán y a Cristo, indicando que eran personas igualmente históricas. (Romanos 5:12-19)

3. El Hecho de la Caída del hombre.

a. La caída resultó de un acto voluntario.

Adán y Eva cayeron de su primer estado de inocencia por pecar contra Dios al desobedecer su mandato de no comer del árbol de la ciencia del bien y del mal. (Génesis 3:6; Romanos 5:12,19; 1 Timoteo 2:14) Eva fue engañada por la serpiente, pero el pecado de Adán fue un acto deliberado de rebelión contra la voluntad divina.

b. La caída fue instigada por una fuerza fuera del hombre.

No hubo pecado en la naturaleza original de la primera pareja humana. La fuerza fuera del hombre responsable por la tentación era Satanás.

c. La esencia del primer pecado fue la negación de la voluntad divina.

El hombre se independizó de Dios, exaltando su propia voluntad sobre la voluntad de Dios.

d. Este pecado fue una trasgresión deliberada de un límite impuesto por Dios.

En otras palabras, Adán y Eva desobedecieron un mandato explicito de Dios.

V. LAS CONSECUENCIAS DE LA CAÍDA DEL HOMBRE.

A. Las Consecuencias para Adán y Eva.

1. La tierra fue maldecida, de la manera que ya no producía solamente lo bueno, sino también cosas desagradables. (Génesis 3:17,18)

2. Grandes dolores resultaron para la mujer al dar a luz a sus hijos.

(Génesis 3:16)

3. La mujer fue puesta en sujeción al hombre. (Génesis 3:16)


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4. El hombre enfrentaría un trabajo duro para ganarse la vida. (Génesis 3:19)

5. El miedo de Dios entró en el hombre, y se escondió de la presencia de Dios

por primera vez. (Génesis 3:8-11)

6. El hombre y la mujer fueron echados del huerto de Edén. (Génesis 3:22-24)

7. La muerte física, espiritual, y eterna entraron a la experiencia humana.

(Génesis 2:17; 3:2,3,19; 5:5; Romanos 5:12,14,17,21)

a. La Muerte Física. Adán y Eva no murieron físicamente al momento de cometer su pecado, pero el principio de muerte empezó a desarrollarse en sus cuerpos desde ese momento. Ellos empezaron un proceso de degeneración física que les llevaría en el futuro a la muerte física.

b. La Muerte Espiritual.

La muerte espiritual puede definirse en términos de separación. En el mismo día de su desobediencia, el pecado de Adán y Eva los separó de Dios espiritualmente. Ya no podían tener comunión con Dios como solían tener en Edén antes del pecado. Ellos estaban muertos en sus delitos y pecados. (Efesios 2:1)

c. La Muerte Eterna.

La muerte eterna es ser separado de Dios eternamente en el lago de fuego. (Apocalipsis 20:11-15) Desde el momento de su pecado, Adán y Eva iban rumbo al lago de fuego. Fue sólo por el sacrificio de un animal, y el derramamiento de la sangre de ese animal por Dios (una figura de Cristo, el Cordero de Dios, que se sacrificaría sobre la cruz por los pecados del mundo) que les salvó de la muerte eterna.

B. Las Consecuencias para la Raza Humana.

Las consecuencias del pecado de Adán y Eva para la raza humana han sido tremendas.

1. Tres teorías.


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a. La Teoría Pelagiana (enseñado por Pelagio, 409 d.C., continuada por los socinianos, y actualmente, en parte por los Modernistas.)

Esta teoría sostiene que:

(1) El pecado de Adán no afectó a persona ninguna, excepto a sí mismo.

(2) Todo ser humano que viene al mundo está tan libre del pecado como lo fue Adán.

(3) El único efecto que tuvo el primer pecado sobre la raza fue el de dar un mal ejemplo.

(4) La única razón por qué los hombres son pecadores es el mal ejemplo que ven en sus padres y otras personas desde aquel entonces para esta parte. Según está teoría, el hombre está sano moral y espiritualmente

Este concepto del caso es falso. La teoría nunca ha sido considerada como bíblica, y está muy en contra de las enseñanzas de la Biblia. Las Escrituras reconocen que todos los hombres son culpables, y que tienen una naturaleza pecaminosa. (Romanos 3:23; 7:18; 8:7) Todos los hombres dan evidencia de la verdad bíblica pues tan luego como llegan a la edad de responsabilidad, cometen actos pecaminosos y no hay excepciones a esta regla.

b. La Teoría Semi-Pelagiana.

Según está teoría:

(1) La culpa del pecado de Adán no es imputada al hombre.

(2) Éste, (el hombre) no obstante, está destituido de justicia y sin poder para lograrla, sin la ayuda divina.

(3) De otra parte, Dios imparte a cada individuo, al despertar de la conciencia, un don especial de un espíritu que es lo suficiente para habilitarlo a alcanzar la justicia, si permite que su voluntad coopere con el Espíritu de Dios.

Así los que sostienen esta teoría afirman que el hombre tiene cierta habilidad para cooperar con Dios en su salvación; está medio enfermo o medio sano, y no ‘muerto en sus delitos y pecados’. Las Escrituras enseñan que el


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hombre está imposibilitado para hacer una sola cosa para salvarse a sí mismo. (Efesios 2:1)

c. La Teoría Agustiniana.

Creemos que ésta es la que concuerda con las enseñanzas bíblicas. Esta teoría enseña que:

(1) Por razón de la unidad orgánica de la humanidad, el pecado de Adán es imputado a su posteridad.

(2) La naturaleza que el hombre posee hora es semejante a la naturaleza corrupta de Adán.

(3) El hombre no puede hacer nada para salvarse a sí sismo.

(4) El hombre no está sano ni medio sano, sino totalmente enfermo y muerto. De otro modo, el hombre se salvaría en parte por la gracia y en parte por las obras, cosa muy contraria a las enseñanzas de la Biblia. Véanse Efesios 2:1; Juan 8:44; Romanos 3:10-12; 4:1-5; 11:6; Efesios 2:8,9)

(La Doctrina del Hombre, Instituto Bíblico Río Grande, pp. 7,8)

2. La Ley de la Herencia.

En la creación, Dios estableció diferentes géneros de vida, y ordenó que se produjera cada clase según su género. (Génesis 1:24-25) Toda forma de vida está sujeta a esta ley que obliga a todos reproducirse conforme a su especie. Aplicando esta ley a Adán y a Eva en su condición caída, sabemos que el veneno del pecado está en el germen humano, y tiene que manifestarse en el desarrollo de cada vida. Por lo tanto, cada ser humano entra a la vida con la misma clase de vida que Adán y Eva poseyeron después de la caída.

3. La Enseñanza Bíblica.

a. Todos los hombres, sin distinción de clase o condiciones, son pecadores delante de Dios. (Romanos 3:9,10,22,23; Salmo 14:1-3; Isaías 56:3) Puede haber una diferencia en cuando al grado de su pecado, pero no en cuanto al hecho de su existencia.


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b. Esta condición universal de pecado tiene una relación vital con el

pecado de Adán. (Romanos 5:12,16,19) Todos los hombres estuvieron EN Adán cuando él pecó; cayendo él, cayeron ellos también. (1 Corintios 15:22) “En Adán todos mueren…”

c. Todo el mundo yace bajo la condenación, la ira, y la maldición.

(Juan 3:18,19; Romanos 3:19; Gálatas 3:10; Efesios 2:3)

La santa voluntad de Dios demanda una obediencia perfecta, pero ningún ser humano puede rendir tal obediencia. La maldición de la ley está sobre todos los que la han quebrantado. La ira de Dios permanece sobre los que no están unidos vitalmente con Jesucristo por medio de la fe. (Juan 3:36)

d. Los hombres no regenerados son considerados hijos del diablo y no de Dios. (1 Juan 3:8-10; Juan 8:44)

e. Toda la raza de los hombres está en cautiverio al pecado, y a

Satanás. (Romanos 7:1-25; Juan 8:31-36; Efesios 2:3; 1 Juan 5:19)

f. La naturaleza entera del hombre (la mental, moral, espiritual y física) está gravemente afectada por el pecado. (Romanos 3:23) El hombre está totalmente depravado.

(1) El entendimiento (1 Corintios 2:14) (2) El corazón (Jeremías 17:9,10) (3) La conciencia (Tito 1:15) (4) El espíritu (2 Corintios 7:1)

BIBLIOGRAFÍA: LA BIBLIA LA DOCTRINA DEL HOMBRE, Instituto Bíblico Río Grande, Edinburg, Texas TEOLOGÍA BÁSICA, Carlos Ryrie ANTROPOLOGÍA, Notas del Instituto Bíblico de Nuevo Brunswick, Víctor, NB, Canadá FUNDAMENTOS DE TEOLOGÍA BÍBLICA, Emery H. Bancroft EL DICCIONARIO WORLD BOOK EL DICCIONARIO CALLEJA EL DICCIONARIO LAROUSSE

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