La Escoba en Minifalda y Otros Relatos

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 La escoba en minifalda y otros relatos Victor Manuel Niño

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La mayoría de estos textos se escribieron en 2013, algunos hasta julio de 2014.
En mi experiencia como lector, no me había encontrado con un tema narrativo que trate de la amistad desinteresada entre un hombre y una mujer, así que me aventuré con un texto titulado la Escoba en Minifaldas y publicado por la revista Culturamas* 
*(http://www.culturamas.es/blog/2013/10/21/la-escoba-con-minifalda-victor-nino/ )
Encontré a Serena Barcos, una mujer de una novela breve de Eduardo Mallea que es abiertamente “misandria” o misándrica”. Revela inmediatamente su odio a los hombres pues casi todos están “deshabitados: son sexos… Una especie de muerte que vive por sus orgasmos”. Es un instinto de propiedad muy fuerte, como dice el narrador de Serana Barcos, que lo lleva a abandonar otro sentimiento que no sea el erótico y se vuelvan impacientes por reducirlas a sus instintos machistas.Así fue como el pretendiente de Serena y el de mi relato se decidieron a acosarlas… A enfrentarlas con su pasión, como dice el autor que le abrió a la narrativa del continente las puertas de la actualidad literaria, y que por su novela Los jóvenes hombres muertos, pudo existir La región más transparente de Carlos Fuentes.El resto de los relatos tienen un transfundo similar, así sus máscaras sean diversas.

Transcript of La Escoba en Minifalda y Otros Relatos

  • La escoba en minifalda y otros relatos

    !

    !!!Victor Manuel Nio

    !!!!!!!!!!!!

  • Introduccin

    La mayora de estos textos se escribieron en 2013, algunos hasta julio de 2014.En mi experiencia como lector, no me haba encontrado con un tema narrativo que trate de la amistad desinteresada entre un hombre y una mujer, as que me aventur con un texto titulado la Escoba en Minifaldas y publicado por la revista Culturamas* *(http://www.culturamas.es/blog/2013/10/21/la-escoba-con-minifalda-victor-nino/ )Encontr a Serena Barcos, una mujer de una novela breve de Eduardo Mallea que es abiertamente misandria o misndrica. Revela inmediatamente su odio a los hombres pues casi todos estn deshabitados: son sexos Una especie de muerte que vive por sus orgasmos. Es un instinto de propiedad muy fuerte, como dice el narrador de Serana Barcos, que lo lleva a abandonar otro sentimiento que no sea el ertico y se vuelvan impacientes por reducirlas a sus instintos machistas.

    As fue como el pretendiente de Serena y el de mi relato se decidieron a acosarlas A enfrentarlas con su pasin, como dice el autor que le abri a la narrativa del continente las puertas de la actualidad literaria, y que por su novela Los jvenes hombres muertos, pudo existir La regin ms transparente de Carlos Fuentes.

    El resto de los relatos tienen un transfundo similar, as sus mscaras sean diversas.

    !!!!!!!!!!!!

  • !!!!La jornadaLa adolescenteSilvestre Dangong, el ChivasDnaeFunes La escoba en minifaldaCuchillos verdesEl hombre que planchaba sus billetesAlunadosLas NinfasEspeja !!!!!!!!!!!!!!!!

  • La jornada

    El muchacho dijo espontneamente que aquel tipo -luego lo seal con su dedo ndice- era de medallo, que lo haba escuchado hablar el viernes mientras peda fiado el refrigerio de antes del almuerzo, lo que corresponda al mecato de media maana en el modismo local. Luego lo escuch decir la muletilla de la gente de medallo mientras le peda regalado un cigarrillo a su ayudante. Ese viejo es un desjuiciado, siempre se ve sin dinero sentenci el muchacho- dando el ltimo sorbo a su vaso de avena. Si lo dice por viejo, apenas tiene treinta aos -repuse- Yo estuve con l el viernes; hablaba, hablaba, hablaba fluidamente con ese acento tan envolvente que tienen los de all no has escuchado hablar de los culebreros? Se dice que culebrero que se respete es de Medallo (el culebrero es un vendedor ambulante que hace gala de una terrible elocuencia callejera). La seora que venda las papas rellenas y la avena siempre bostezaba a esta hora del lunes, gesto que me pareca fuera de lugar en este mes del ao en que el sol del trpico quemaba. Nos encaminamos hacia el piso doce de la obra no dando tregua al comentario: Mire chino! -Le dije- (el apelativo chino en el modismo local se reservaba para nios y gente del comn), el paisa, como le dicen a los de medallo, no dejaba de pedir cerveza, no dejaba de hablar: ah estuvo el maestro de obra, los mamposteros, los estucadores; el lugar se volvi una orga de cerveza, de msica ranchera, hasta que el costeo se enfureci; exigi que pusieran canciones vallenatos. Ah se form un problema; me quise ir, pude leer en la mente de Joaqun que no me dejara ir hasta que no gastara el ltimo centavo; el maestro de obra, dijo persuasiva, paternalmente , que dejaran ir al doctor ( as me haban apodado en la obra). El chino dijo con entusiasmo que conoca al hijo de Joaqun; el hijo de Joaqun dice que dentro de pocos aos estar jugando en un club de futbol en Europa, me lo dice a m que soy su amigo pero al menos est jugando ya en el equipo de futbol de la ciudad? -Le pregunt- No! Contest- pero es el mejor jugador del equipo del barrio, se da el lujo de ostentar su clase de jugador, incluso en su colegio. Muchos lo odian porque va por ah diciendo que se parece fsicamente a Michael Owen, incluso se dio el lujo de despreciar a Mirleya, que se atrevi a decirle que l le gustaba. Ella, resentida, le dijo que no tena la altura de Owen ( por supuesto el no llegara a medir un metro noventa en su edad adulta, con diez y seis aos, a los veinte llegara a medir por mucho uno sesenta y cinco, que es por decir menos la estatura promedio). Luego se fue calle abajo de la casa de Joaqun ( que es una casa como las que se construan en la colonia espaola, en un barrio en las que quedaban ya pocas) y se escuchaban sus insultos contra el que se le atravesara... Pero el hijo de Joaqun no va a los bailes de cumbias peruanas, donde van los llamados eros (los que se han vuelto ninis) entonces qu msica le gusta al hijo de Joaqun? Esa que sonaba a finales de diciembre del ao que acab de pasar ( el dos mil cuatro ). Un fuerte olor hizo que el chino se distrajera, cayndole en el ojo derecho la delgada sopa del estuco; la queja hizo que el

  • doctor se bajara del banco de madera que usaba para estucar las partes altas del muro. El ojo del chino le lloraba por el enrojecimiento, el doctor le lav el ojo con abundante agua, mientras deca que haba algo raro en la obras en construccin que haca que el intestino no funcionara decentemente. Luego le son el beeper, lo mir ( tambin al reloj) y salieron de la obra bajo las maldiciones del chino que deca que cuando alguien est de malas hasta del cielo llueve m Al maestro de obra le son su telfono celular ( que era una rara ostentacin ); el chino le alcanz a ver el celular y se burl de esa panela ( la panela es un endulzante popular del tamao de un ladrillo de barro cocido, que resulta de la miel desechada en las plantaciones de caa de azcar). Vea maestro- se refera al estucador- ya est navegando a toda mquina el Smartphone y ese pingo todava con Una panela! (pingo era el apelativo para gentes de esa ciudad que quera significar a alguien insensato, pero que se deca como muletilla Ahh.. qu pensars de mi beeper?... Huevn!-dijo el doctor-. Hicieron detener una buseta y la abordaron ( a la derecha de la buseta circulaba un motociclista que fue dar lentamente contra un andn). Radio Nacional transmita la noticia destacada de estos inicios de ao con la captura de un jefe guerrillero apodado Granda; que si fue detenido en el vecino pas, que si no fue en el vecino pas la captura; que la Potencia Mundial estuvo involucrada. La madre, chino dijo el doctor- apague ese puto radio o si no le lanzo de aqu un bollo de estuco. Primero se beba un caf servido en un vaso desechable del que venda Doa Teresa, la que cargaba los termos con el negro lquido en un carrito de beb Ya son las tres de la tarde y no podremos cumplir la tarea por estar hablando paja! Maestro es que los lunes siempre son del zapatero repuso el Chino-( con eso se refera a la costumbre de los obreros de zapatera de no trabajar los lunes) Tienes razn, acabemos este puto enero, entonces, hablando m! Cuntos aos tienes Damin Alexandre? Entr a diez y siete aos, Maestro Corto porqu la pregunta? Es que estaba pensando en el hijo de Joaqun. Ese Joaqun es un miserable cojo que se gasta todo el salario en cerveza. Es que la Mam de Joaqun es funcionaria de la Alcalda -contest el chino. Bueno, esa tarde, el paisa, cuando los obreros estaban prendidos (quiere decir que ya estaban alicorados) propuso que nos furamos todos a seguir bebiendo licor a un lupanar; yo, como dije, logr escaparme, despus supe que fueron pocos los que siguieron al paisa y duraron perdidos unos das, hasta el punto que la familia del paisa puso la demanda a la polica ( el maestro de obra es cuado del paisa), fue cuando usted lo escuch pedir fiada la merienda. Bueno don Corto, menos mal que yo me haba ido con Michael Owen a una sala de Internet.

  • !La adolescente

    !Meses atrs haba visto a una adolescente excesivamente maquillada, de cabello crespo; tena puesta una falda que dejaba ver sus delgadas piernas, una blusa tambin estrecha y unas zapatillas de puntas largas. Estaba sola y no llevaba nada en sus manos; parada en una esquina, al lado de una cervecera.

    Pas junto a Ella y vi sus ojos marrones; Llegu hasta la otra esquina donde se estacionaban los moto taxistas. Junto a mi pasaron varios auxiliares de polica que riendo alegremente hacan ronda. Mir mi reloj; haban pasado quince minutos y la adolescente slo se haba movido un poco del sitio donde estuvo parada.

    Lo recuerdo minuciosamente porque ahora veo otra adolescente que despleg una sonrisa tan natural ante el requerimiento de un tipo. Una adolescente de atmsfera primaveral arrastrando un carrito de beb por el mismo sector donde haba visto a la otra nia (tan primaveral que pens que sus quince aos la rodeaban en rosas). Un muchacho que est vendiendo objetos varios en una pequea caja por esta calle ya me ha estado observando. El calor me hace buscar la sombra bajo el toldillo de un negocio de sandalias y la muchacha sigue con su carrito de beb.

    La otra vez me impresion el tipo que lleg donde la adolescente que estuvo parada en la calle. Era un tipo corpulento y estaba sudado; pareca triplicarle su edad. Sus movimientos agitados le hacan mover los brazos ante cada palabra. Luego pareci callar y Ella empez a caminar. Al llegar a una esquina volte. El tipo caminaba siguindola a corta distancia.

    En la distancia alcanzaba a ver slo el carrito de beb; me acord de la adolescente sobrina de mi novia; sus progenitores ya le haban comprado su primer apartamento. Me puse a pensar si esta nia tambin se esforzaba por ganar siempre medallas al final del ao escolar y se encerraba das enteros cuando algo le fallaba. En ese momento cuando la vi pasar no se me ocurri detenerla y decirle que me vendiera un caf de los muchos termos que llevaba en el carrito de beb. Ms bien pareca que ya haba terminado su trabajo. No me haba dado cuenta pero al cruzar la esquina me vi caminando cabizbajo

  • !Un accidente puede suceder

    Mientras lavaba los cubiertos de la cena de la noche anterior, no s como un cuchillo se par justo de filo arriba en la rejilla del lavaplatos y falt poco para que su punta se clavara en mi pequea mano.

    Casi veo la sangre salir abundante. Pocos minutos despus record una leve llovizna de sangre; mientras trabajaba lavando las ollas de un gigantesco restaurante, lleg justo a tiempo un auxiliar de cocina africano para decirme que no metiera mi mano en el balde del jabn donde l tena en remojo sus cuchillos carniceros. Ms tarde cuando me toc la labor del reciclaje del cartn, cuando tir de un montn de cajas, un cuchillo sali volando y por un acto de reflejos lo esquiv.

    Esa noche le refer el suceso a un espaol que era el novio de nuestra amiga guatemalteca. No dijo nada, entonces pens en esos meses que su silencio quera decir ms o menos que los cuchillos no volaban.

    Cuantas peleas a cuchillo no sucedan en mi ciudad andina por los motivos ms insignificantes. Yo mismo hubiera sido, a no ser por cosas del destino, un cuchillero ya muerto.

    Sentir que un cuchillo me persegua era el colmo, incluso para m. Tendra que echarle la culpa al modesto Borges que mientras recorra La Recoleta urda sueos de cuchillos vivos. Pero no era as, la culpa estaba en mi infancia donde soaba con ser un cuchillero hbil, sueo que trunc mis habilidades para escalar los muros donde dejaban encerradas a mis primas.

    No puedo imaginar cmo se mataban a espada limpia en las antiguas guerras, me parece como si nunca hubiera sucedido. Hoy ms que nunca lo cuchillos pueden parecer insignificantes, pueden parecer, pues viendo el documental de una fbrica de cuchillos norteamericana para el sector militar, me doy cuenta que esa tecnologa usada, exagera con respecto al pobre estomago de cualquiera. En esto hay un consenso, o si no porqu los Ninjas han tejido la espada perfecta, hecha para atravesar la carne de un humano. Como dice Borges, duerme el cuchillo su sencillo sueo de tigre.

    Cuando termin de lavar los cubiertos, mi mujer lleg. No habamos desayunado, no s porqu me disgust, sent claramente algo de ira, quiz me molestaba percibir que tratara de leerme siempre, entonces no le refer lo del cuchillo. Ya haba hecho el propsito de calmarme, pens en todas las veces que mi mujer se haba cortado pelando papas. De pronto Ella me percibi elevado; estaba reviviendo el momento en que Concetta Bertoldi se volvi a cortar el dedo; esa vez fue algo para espantar, y muchas veces se

  • cortaba para librarse nuevamente de una jornada de trabajo. No estoy aqu nombrando a Concetta, la famosa espiritista que vive en New Jersey con su marido Jonh, la veterana que tiene una sonrisa espectacular cmo sera hacerle una consulta para contactarme a m, que hubiera muerto acuchillado hace tiempo? Estupidez de estupideces.

  • !!Silvestre Dangong, el Chivas

    A Chivas lo haban seguido sus siete primas que deseaban verlo cantar en la reunin dnde l serva licor. Deba esperar que el veterano Fabin Corrales se cansara de sus piques y canciones, y que Ivn Zuleta con su acalorado acorden le dijera :- Oye, Chivas Cntate una ah!- .Pero ese viernes encontraron a los parranderos ms eufricos de lo acostumbrado, y gritando a voz en cuello : - Viva el Jardn de la Guajira! Viva nuestra seleccin!

    Cuando entr el Chivas de inmediato le entregaron la botella de Ron que deba servirles

    - Chivas Estaaaamos Eeesssss Celeeebraaaando!- Le dijo el viejo Zuleta.

    Lo haban apodado El Chivas por la marca del reconocido licor; tambin haca juego con una chiva que en periodismo es noticia fresca. En Urumita ( su pueblo del alma, el jardn de la Guajira) tena el mismo sentido que en toda la regin: la Chiva era femenino de Chivo; una cabra que era el ingrediente de la gastronoma e idiosincrasia de indgenas Wayuu y blancos emigrados a las costas de la Sierra del Perij y la Sierra Nevada de Santa Martha (Llegar a la Guajira da la repentina sensacin de encontrar las playas de Senegal o Mauritania Haba dicho alguna vez el padre del Chivas- ). Los parranderos, de por s, no beban siempre ese licor; sobre todo el preferido en la costa atlntica era el Ron (a pesar del abundante contrabando del otro por las fronteras de Venezuela). El apodo Chivas obedeca a la irnica costumbre de los eufemismos, de las figuras retricas que nombraban una cosa por el todo; por ejemplo la marca del producto por todos los productos de esa clase. Costumbre que haba empezado en la publicidad televisa del pas y lo haba puesto de moda Fruko y sus tesos. Chivas le hizo una seal a sus primas que se fueran, lo que ellas hicieron entre risas y burlas. En esa semana haba cumplido aos y l haba cantado en el colegio entre lgrimas. Chivas haba nacido en plena celebracin del da de la madre. Su abuela materna lo adoraba, pero su madre no estaba con l; llor en su cumpleaos por su ausencia ( Ella trabajaba en el refrigerador, como le decan a la capital del pas por su frio intenso). Despus se haba montado en su destartalada bicicleta y haba corrido hacia el desierto, hacia las afueras del pueblo. All fue donde por primera vez se le apareci el fantasma de la pobreza que l tratara siempre de esquivar, menos hablar de l. Trat de pensar que lo haba originado en su vida; de pronto record el dolor de su madre aquella maana cuando transportaba la cantimplora de agua hacia la habitacin; se le haba roto la

  • fuente de su tercer embarazo, de ese ser que ya no estara en el mundo. Vio a su alrededor mientras su madre se quejaba, vio todas las pertenencias de la familia acumuladas en la habitacin, luego memoriz a su madre subiendo a un taxi mientras l se ocupaba de su hermano menor. No supo en qu momento el fantasma de la muerte se mimetizaba en el de la pobreza. Pero detrs de esos dos estaba su vida, los continuos asedios que le recriminaban su ansiedad de cantar y piquear.

  • Dnae

    La conductora de la buseta escolar que llevaba a las nias (ahora inclua nios) cada maana al colegio, mirando desorbitadamente el reloj, haba recogido a Dnae. El amanecer del viernes se haba cubierto de una neblina que ocultaba una bandada de loros. Dnae haba amanecido sintindose hinchada, un poco incmoda. El furgn arranc pasando el semforo que sealaba amarillo, luego sigui por una desviacin. Luego la joven pas al puesto de copiloto que siempre ocupaba, fingiendo alegra y adems para evitar las miradas insistentes de algunos chicos que se sentaban en el intermedio. La conductora no la miro siguiendo su marcha por las vas en caracol.Ayer, antes de acostarse permaneca sentada en un silln hasta que un grito a su madre la alej; ella haba intentado que le hablara ( su padre la observaba desde el fondo de la habitacin). Das atrs haba sentido la hinchazn de sus senos, entonces se dio cuenta que le haban crecido un poco ms.Siempre le haba gustado sentir el vrtigo de la velocidad mientras miraba como la conductora direccionaba el timn a cada curva de la va. Pero viernes precisamente viernes, esbozaba una lejana sonrisa; sus ojos ausentes , su respiracin en su silencio acostumbrado. La ciudad se alejaba a toda velocidad por entre las escarpas erosionadas que eran divididas por la estrecha carretera. Avanzaba el mes de mayo sin que las temporadas de lluvia iniciaran. De la radio se escuchaba una cancin de Justin Bebier, que haca sonrer a Dnae al recordar a mi pobre angelito. Trat de poner en prctica sus lecciones de ingls para traducir lo que deca la cancin. Pareca ser una oda a la madre del cual el ttulo no tena nada que ver con el contenido. De todas maneras pens en su padre, en la ira que desat en ella su madre cuando insinu que no le daba dinero; no le importaba que le diera slo un poco cada vez que le peda y que se quejara luego que le haba dejado los bolsillos limpios. Le celebraran en unos das su cumpleaos; de entrada se escuchara quinceaera de Thalia; la haba escuchado creyendo en un sentido oculto de la letra. Dudaba si hubiera querido que su padre le pusiera de entrada la cancin de de nia a mujer. Acaso esa cancin le pareca cursi, ms no as a su amiga de pupitre Reflexionaba en esa frase de la cancin: Ahora me enciende como un sol la primavera mis sueos se convierten en promesasQue ridculo -se deca- si siempre hemos vivido en el trpico y mi nica promesa es ser la primera de la escuelaOdio que celebren mis quince aos! Le deca a su amiga-Toda mi vida so Le respondi a Dnae- con un vestido blanco, un Chambeln; mis amigos y por su puesto el Vals... Me falta poco paraY mis

  • padres al menos me cortaran un pastelDnae, tu Chambeln ser Zen? Le dispar la pregunta a Dnae mientras estiraba su cabeza hacia el puesto de copiloto. Faltaban pocos minutos para la siete de la maana.(Dnae pensaba mucho en su padre y en su madre que no se haban dado cuenta o no haban querido saber que se acercaba O ella lo pensaba- su primera menstruacin. Su abuela materna que era la que se ocupaba de Ella pareca no interesarle).Me son indiferentes los hombres Le respondi- mientras su amiga miraba atrs buscando la sonrisa cmplice de Zen. Bailara toda la msica que se cruzara por sus pies, como su madre; al bailar con su padre tratara de adivinar en ciertos gestos de l un silencioso reproche. Ayer tambin haba tragado la pastilla que le dio Diana y se acost temiendo que una repentina llegada manchara el piso con la sangre que resbalara de sus pies; no saba cmo estar contenta si al llegar a la fertilidad quedara esperando un beb ( al otro da de haberse convertido en mujer deba verse con Zen); la llegada de su primera menstruacin la preara. Eso le haba pasado a Afroda. Diana se sentaba en el puesto de entrada al furgn; no le haba contado a Dnae que se haba hecho mujer antes de cumplir sus quince aos ( la sorpresa de Dnae hubiera sido mayscula). Cuando le empezaron unos fuertes dolores de estmago, se par frente al espejo en su cuarto y vigil un largo rato.El ver hincharse el estmago de Afroda no la haba asustado tanto pero Diana no le haba dicho que sus padres le celebraron su primera vez. La madre dio la noticia a los allegados, familiares, que la telefoneaban ; luego se encerr en su cuarto cuando sus primos la miraban con extraeza. Zen se sentaba al lado del que fue Chambeln de Afroda; algo le murmur Dnae a Diana, y Diana a su vez volvi nuevamente a mirar a Zen quien le respondi con una leve sonrisa mientras miraba a su amigo.

    As que maana sbado ensayars el Vals con Zen?Cuando Dnae vio a lo lejos una espesa neblina empez a tomar fotos con su Instagram; capt el momento en que un loro chocaba en el parabrisas del lado de la conductora Con voz temblorosa deca que dedicara el da a buscar el regalo en homenaje a la madre, mientras el furgn se perda a toda velocidad entre la neblina y una fuerte lluvia que se haba desatado.

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  • !!!FUNES !No hubiera podido estar en Roma nunca; de improviso por un toque de la fortuna se encontraba all.Su nerviosismo lo haca moverse; trat de calmarse. Despus de algunas horas expuesto al fro, record la virgen sosteniendo en sus brazos el blanco cuerpo de su hijo. Eso es, lo primero que hara sera contemplar la piedad hasta la saciedad. La verdad Miguel ngel le era ms o menos indiferente y ms si siempre se haba considerado ?. Pero pens rpidamente que cometera con ello una injusticia histrica, adems no era jacobino. La piedad es del patrimonio cultural humano, su tierra la ha heredado, entonces los abuelos no querran que eso cambie. Hay que tener piedad -se dijo-. Entonces contemplara la piedad antes de todo. ! Pero mircoles...! -Se dijo-. Es verdad que es casado y a su mujer le encantar esa idea.Al girar en una esquina para ir hacia el hotel qued como si los ojos de la mujer que tiene sus cabellos de serpientes lo hubieran mirado. l, que era liberal hobbesiano no haba recordado el Monte sacro, all, dice la fama, fue el primer grito democrtico de occidente y con ese imagen Bolvar lo haba visitado. Ni siquiera el asombro a l lo visit; en los catlogos tursticos no se mencionaba ni el lugar, ni menos el monumento al monte sacro se haba borrado de la mente de todos y ahora al parecer era un barrio de Roma? Tendra que investigar urgentemente, al mircoles todo, investigara el sitio exacto del monte sacro. Treinta, doce, dos mil diez La vspera de fin de ao Funes estuvo a punto de salir del hotel con su mujer ( Ya la haba convencido de ir a buscar el sitio exacto del monte sacro) pero una fuerte virosis de la temporada invernal los oblig a quedarse en cama. A pesar de eso su obsesin por ubicar el sitio exacto se traslad a los mapas satelitales y a viejos foros en internet. Su mujer en cambio anhelaba ir al Vaticano antes de que se consumieran los dos das de gracia.Ahora no poda entender porque las noticias sobre los hechos ocurridos en el Monte Sacro por lo menos cuatro siglos antes de Cristo eran tan casuales y escasas. Ni siquiera mencionaban si haba una cripta dedicada a Jpiter Terrible; menos haba noticias siquiera tursticas de la visita de Bolvar. Ya agotado no encontr seales en el ciberespacio de la inscripcin a Jpiter que haba dejado Licinio en el Aventino. Si ubic el viejo puente

  • Nomentano que haba quedado tras siglos de abandono, como nica seal clara que denotaba el sitio exacto. Haba acabado de leer el General en su laberinto y eso haba descargado un poco de su nimo la imagen que le estaban dando acuciosamente al independentista en estos ltimos aos. Se refrescaba con el Bolvar que haba poblado el libro de Gabo, el humano, el heterodoxo que aceptaba humildemente su destino. Treinta y uno, doce, dos mil diezEn el amanecer de fin de ao se levant de la cama; su mujer aun dorma y toc su frente caliente por la fiebre. Le dio de beber agua y despus entro al mapa satelital, crey ver en el Barrio Monte Sacro un monumento curioso, se detuvo en el nombre y ley: parque de la libertad Estara delirando por su escalofri y su tos? No deliraba, estaba ah, un monumento dedicado a bolvar Al menos tenan el contento de su llegad a Roma; hicieron un recorrido en bus, ubicados en el piso destechado; luego su mujer vio a Funes con sus ojos brotados y enrojecidos, mostrando con su dedo las ruinas del circo romano mientras el bus lo circundaba; luego un poco ms tarde casi sufre de vrtigo al mostrar al coloso Neptuno en su trajn con los hipocampos. Su mujer lo hizo bajar del bus y caminar un poco entre una multitud que iba no se saba a dnde Luego empez a alucinar miles de monedas que caan al agua y eran recogidas por Neptuno. Pero su mujer no la convenca del todo la aptitud de Funes, cuando entre dientes balbuceaba el texto que haba resaltado de Sthendal: "Haba llegado a ese punto de emocin en el que se encuentran las sensaciones celestes dadas por las Bellas Artes y los sentimientos apasionados. Saliendo de Santa Croce, me lata el corazn, la vida estaba agotada en m, andaba con miedo a caerme".Funes haba mentido, su mujer lo primero que hizo fue hacerlo ir al Vaticano; vio La piedad en la capilla Sixtina, detenidamente hasta el punto de sufrir un pellizc pues llevaba ms de una hora vindola, y hasta tenia nerviosos a los celosos vigilantes. La virosis que si fue un hecho cierto, les hizo perder muchas horas de su visita pero no su obsesin. Plante apenas baj la fiebre buscarlo en tiempo relmpago. Tena las pruebas Ella prefiri acompaarlo. Caminaron y preguntaban tal como lo haba visto en internet, el lugar del viejo puente Nomentano. Llegaron inspeccionando un poco el antiguo puente (tenan poco tiempo) no vio por ninguna parte el testimonio del juramento de Bolvar ( ni siquiera una pequea placa conmemorativa) y segn resulta, el monumento a Bolivar visto en internet (un obelisco multicolor) estara ubicado lejos de all. Segn coment un operario africano de vas, el nomentano no lo visitaba nadie ( a no ser algunos periodistas). El bello parque cercano estaba en un

  • descuido total y uno que otro anciano se acomodaba en sus perdidos escaos.

    ! No ubicaran el obelisco; su mujer se impona una vez ms con el argumento irrefutable de la prdida del vuelo. Ni siquiera un humilde turista haba visto Lorenzo pasearse por el Viejo Puente; slo un puado de operarios de un fbrica cercana observaban a la pareja inspeccionarlo. Luego lleg lo que pareca ser un fotgrafo profesional a encuadrar el Puente con su cmara. Dnde estara la inscripcin a Jpiter Terrible, que era el sitio exacto del Juramento? Pero que tiene ese puente, si es uno ms entre un viejo Puente de madera!Le haba dicho un paisano suyo que encontr entre los transentes a quienes haban preguntado El monte sacro es un barrio entre un barrio ms de Roma!-sentenci-.Salieron corriendo a esperar el autobs que los llevara al aeropuerto alertado por las reflexiones de su mujer y la noticia que los dos das de gracia haban sido descontados de su tarjeta de crdito bancario.

  • La escoba con minifaldaMe haba descubierto sin amigas; amigas en el trmino propio de la palabra. Creo que de ellas, de las que no se le pasara por la cabeza enamorarse. Porqu? Simplemente porque no resista tener una mujer frente a m, sin que pensara como pensaba Rafael Humberto, alma bendita, que de la sala a la cama hay pocos pasos! Me habr privado de sentimientos de ternura al no haber tenido una mujer como amiga ( ya culminado mi medio siglo de vida) as como se tiene un amigo para ir a hacerle barra a un equipo de futbol? Con ella se ira simplemente a un supermercado, a ver una pelcula, a charlar de nimiedades; no creo que a nadar en una pileta o a un bar lleno de borrachos.La reciente posibilidad que tuve de tener una amiga ( Me olvidaba de mi mujer!... hubiera permitido ella, que yo tuviera una santa amiga, por lo del afamado dicho de las amigovias?) se fue al traste pues tuve el atrevimiento de pedirlo:-Me dijo Veto- Veto, te ha dicho tres veces que no; no insistas, slo quiere una buena amistad T sabes que Lua es una casada fiel!Luego le dije a Veto - Yo insisto pues no se me da nada; se lo he dicho como se lo haba dicho a tres mujeres el mes pasado. No veo el porqu no debo decrselo una vez ms. Macario llor porque era la primera vez que lo peda y no resisti el rechazo Veto, ya le has dicho a ella, la que est all ehhh!? Haba sealado una escoba con su dedo meique!

    Pues a ella no la conozco personalmente, la saqu de internet, ahora me telefonea en llamada por cobrar, pero ella paga el tiempo que duramos charlando, hasta que se acuerda que tiene que preparar el almuerzo (slo atiende sus cosas personales en las maanas y tiene celular exclusivo para esa jornada... Es madre de una linda chica!Creo que no soy el primero a quin ella telefonea. Un hombre que la llamaba de otra ciudad, tena el atrevimiento de timbrarle en su Skype a horas pico cuando su esposo almorzaba en casa; parece ser que lo despach Otro, un psiclogo que la estuvo analizando a peticin de ella, dur un tiempo comunicndose y luego disque ni un mensaje, y borr todo rastro de l. Como si fuera poco, un tipo que frecuenta su casa y se queda a cenar A l no s si lo levant por internet, pero ella delante de su familia hace que telefonee a su esposa y le enfatice que est cenado en casa de unos amigos !Eso no me queda claro! A uno lo echa y otro la echa a ella.

    Por alguna razn pens que los otros hombres, incluyendo el psiclogo, se cansaron de que ella no saliera con nada. Yo mismo estoy cansado; yo me haca el desentendido ante sus negativas y ella haca como si yo fuera nicamente su amigo. Me fui cansando de que solamente me participara de

  • sus temores abstractos, que los haca pasar como un misterio en su personalidad. Apenas voy entendiendo alguna insinuacin Corto! -Me haba dicho enfticamente ella-Yo, apenas estoy comprendiendo; parece que se dio cuenta de mi debilidad y de mi pesar por no haber comprendido como es tener simplemente una amiga, y como leyndome alguna vez me dijo Lua-Comprendo, que en esa poca en la escuela a los nios y a las nias los apartaban-.Esa apreciacin suya me doli, nunca he necesitado comprender a mis amantes, a mi amigovia, que he estado visitando fsicamente hace mucho tiempo. Slo una vez me ha llamado viejo amigo; en ese caso, pienso que lo dijo por la frecuencia en que nos vemos.Llevbamos ya la mesa llena de botellas medianas y la msica vallenato se alternaba con la ranchera y la guasca carrilera. Vena a servirnos a la mesa una joven chica Hummmm Gesticulaba cuando Veto la miraba!!Siiiii Es bella Lua! -Murmuraba entre dientes, yo-Como te puedes dar cuenta, me he sobrepasado envindole fotografas mas en piscina; me ha regaado si Sepa, que quise cortar Hasta que me dijo que haba tenido en su adolescencia un amigo que le acompaaba a todas partes como un hermanito menor o mejor, como un confidente al que se le facilitaba decirle lo que haba hecho de malo ese daHaba llegado al matrimonio virgen; en mi ansiedad volv a embarrarla; le enfatic que un segundo hombre en su vida sera dar una nueva virginidad; se lo dije sin pensar en nada. Esperaba que al fin me contara lo que la mantena en expectativa y que haba estado participando esa preocupacin desde que nos contactamos por primera vez en internet Cada vez la presionaba interrogndola, pero fue intil, no quiso decirme lo que la ha mantenido en vilo. Cansado, intent superarla dicindole que podra ser que ya haba entrado a una edad en la que se divisa la cumbre y luego era fcil imaginar el descenso Para nada! Me dijo. Yo creo que eso empieza, cumpliendo cinco aos despus de haber celebrado los segundos veinte aos Que era el caso de ella, por supuesto. Quise colgar el telfono; no es posible que tan avanzado el siglo veintiuno uno insista tanto sin resultados! Bien hecho! Respondi Veto- Porque no me digas que no ha habido alguna mujer en toda tu vidaMejor dicho, t sabrs hasta qu punto son para ti las mujeres Luego con un tono de reconvencin, Veto acot - No has intentado conversar, caminar por un parque, comer un helado, regalar una rosa? No has intentado ver que necesitaba, conocer su familia, ayudar en algo?-Me lo deca mientras la chica segua llevando cerveza a la mesa y Veto tambin gesticulando un Uhhhhh Cuando volteaba y lo miraba

  • Pens que un pretexto para no haber hecho lo que me insinu Veto, la sospecha de los celos de su esposo.Tambin pens que no tena porqu aguantar los reproches disimulados de Veto. En honor a m, no tena ni idea el porqu hablaba de ella, si tena de tantas otras de quien ocuparme, y ahora pasaban das sin que me dignara a escribirle algo. A no ser por ver a su hija adolescente en su pgina, decid que ella siguiera en la pgina de mi red social.Veto ya cabeceaba y la cerveza lo tena embobado. Yo empec a hacerle confesionesApur un vaso entero de cerveza que pas a travs de mi garganta con furia, cuando me volvi a llamar con el apodo escoba Me dices as porque esa imagen te doy? Veto -Me dijo- Te digo as porque eres incapaz de sostener una amistad con una mujer sin que tenga que pasar nada No has tenido una mujer a la que mires como una hermana?Re, re mucho pues si Veto hubiera sabido que mi hermana Y la nica amiga que no adivin mi manera de seducir, me tild de. Entonces Lua estaba ah Flotando! ( A ese tipo de mujeres las llaman en la calle calienta huevos) Ni se me ocurri pensar en ella; tan normal, tan cotidiana, tan poco expresiva, tan avanzada en edad, que la pasaba coleccionando frases de cajn y publicndolas en su pgina social. Mujer es mujer, pues estn ah como al alcance, as no estn al alcance - pens-T no pudiste acostarte con ella reproch Veto-Eso me record lo que me dijo Lua alguna vez No hay mujeres difciles sino hombres incapaces Empujando un poquito ms el clavo.Bueno mi hermanito, brindemos y luego nos charlamos a quien nos prodiga licor en abundancia, y en ese momento llegaba ella con otra cerveza y pensando en el tipo que sentado frente a un gran espejo pareca hablar consigo mismo mientras la msica ensordeca la taberna y algunas mujeres, que sentadas en la barra, le dirigan una que otra mirada.

  • Cuchillos Verdes

    !Cuando sal de la escuela me esperaba en una esquina; no tena su maletn y su camisa estaba remangada. Vi sus morenos puos cerrados vigorosamente, sus dientes apretados, su mirada dirigida hacia m. Lo acompaaban el que le sostena el maletn.Qued paralizado; el otro que estaba conmigo me dijo: -Rpido, sbase al camin de la escuela-.

    Regresaba a casa desde la escuela; pasando por un parquecito recoga del arbusto frondoso de cuchillos, seis o siete dagas bien seleccionadas que guardaba en el bolsillo del uniforme. En casa, a medio da, siempre se sintonizaba el radio noticiero a todo volumen ( era un radio que tena forma de tiburn; varias veces le haban cambiado algunos enormes tubos catdicos). Esta vez la noticia llegaba desde Via del Mar declarando el triunfo de la cancin que hablaba de mascar floresPor eso salgo siempre a caminar En busca de una flor para mascarNoticia que despertaba una doble alegra, pues el cantor representaba a esta provincia que haba tumbado un barrio completo de casas antiguas para construir el edifico donde quedaran los juzgados y todo al ritmo de las campanadas de la catedral que haba quedado en pie, como tambin deca la cancin. Despus de inspeccionar que no tuviera huevecillos la sopa del almuerzo, segn la clase de higiene en la escuela, ese medioda me haba olvidado de lavarme las manos. Me levant apurado de la mesa, me dirig al patio de la casa para empezar a entrenar una pelea a cuchillo con las dagas del arbusto. Deba apurarme pues a las dos empezaba Ultra Man. Esta tarde el sper hombre de ojos extraterrestres tena que enfrentarse con una enorme planta carnvora que adquira su fuerza de la radiacin nuclear. Si mis cuchillos no adquiran una fuerza nuclear, deba confundir al otro, cambiar de mano el cuchillo escondindolos a la altura de las nalgas, lo ms rpido posible, luego de hacer un lance directo al pecho y matar a mi adversario de un solo golpe. El hroe de la nebulosa M-78 me hizo salir corriendo hacia la calle, gritar a toda voz su nombre, luego observar quien sala al encuentro de mis cuchillos, de mis rpidos pies descalzos, aunque no tuviera correa que me sostuviera los calzones. Por fin, a la vuelta de la esquina vi la cabeza de mi amigo Roll, grit su nombre, vino hacia m. Le grit Ultra Man, l desorbit sus realistas ojos, luego lanz una sonrisilla. Nos encaminamos hacia la tienda de alquiler de las destartaladas bicicletas; pasamos por el parquecito (no le mostr el rbol de cuchillos, pues era mi secreto); vi las coloradas flores de un gran Cayeno que decan Cmame!...Por eso salgo siempre a caminar

  • En busca de una flor para mascarEmpec a cantar !y recorro el camino! Roll me apabull, con sus caractersticas burlas de pela gato como nos decan las chicas del barrio vecino, cuyas fronteras debamos pasar con cuidado Tocayo! dijo de un momento a otro Roll- rmese, es una advertencia, pues vamos por unos amigos-No s dnde qued; el piso se hundi ante mis ojos cuando vimos las gradas que conducan a unas callejuelas en una hondonada. Toqu en mis bolsillos los cuchillos verdes que haba tirado del algarrobo, entonces pens claramente que eso no serva ni para pasteles. Troll sac su navaja que ms pareca un cuchillo de mesa con eso no cortas ni el pastel- Me alcanz el nimo para burlarme. Pero las piernas me temblaban cuando Troll empez a bajar las gradas. Haca unas horas habamos recorrido el parquecito en las bicicletas alquiladas. Troll se burlaba, se burlaba de verme pedalear como un borracho, hasta que se le desencaden su bicicleta y fue a rodar frente a un seor gordo que estaba viendo una enorme fotografa ( se la haban tomado desde una cmara de trpode, un fotgrafo que meta su cabeza en un paoln), luego lo mir con cara de ofendido. Troll, sabe qu, baje usted a esa hondonada ya que quiere conseguirse un pito A l creo- no se le hubiera ocurrido decirme por qu no baja usted. Esper unos cuantos minutos hasta que escuch un quejido que se perdi en los cerros que caan en la distancia de todos esos barrios que empezaban a encender sus nostlgicas bombillas. No me bastaba el cruce de manos que haca Ultra Man para cobrar la decisin de bajar las escaleras que llevaban a un callejn que se formaba de unas hileras de las casas que bordeaban el cerro. Empec a contar los pasos mientras bajaba los gradas, luego comenc a caminar por el callejn mientras tarareaba de la nada la cancin Por eso salgo siempre a caminar En busca de una flor para mascar El hombre que planchaba sus billetes

    No podra imaginarme a Georg planchando los billetes al salir de su casa cada maana, no me lo imaginara por la sencilla razn de que no le naciera, sino porque su trabajo de vendedor freelance (como llaman hoy por hoy) de bienes inmuebles no le permitira, si al menos lo creo yo, tener buenos billetes para planchar, por otros motivos como por los bajos precios de los inmuebles que le permita a cualquiera obtener su propiedad (quien lo creyera). Algunas veces lo observ contando grandes cantidades de dinero, producto de afortunadas comisiones, entonces su rostro se vea concentrado como si fuera la actividad que ms respeto le proporcionara en su vida. Pero para el da en que tena dinero al momento en que no tena, me pareca tan fugaz que no me imaginaba a Georg planchando sus billetes Qu razn habra

  • para plancharlos? si quiera l se hubiera imaginado que tendra que planchar sus billetes? Su amigo que frecuentaba un club de gente de sociedad, si planchaba sus billetes Me repito! Qu razn tendra para plancharlos as fuera con una plancha normal? Aunque tampoco es deseable tener dinero como dinero de alcohlico en un bolsillo sobrio. Se me ocurre que es una forma de amar el dinero o de no gastarlo como un compulsivo consumista (entre ms rica una persona, su consumo ser ms exclusivo) Le dije a Georg esa tarde.Pero los ojos de l brillaban y se frotaba las manos vindome a mi frotarlas ante la cercana de una comisin!Como dicen que no hay dinero Mira! me dijo sacando de sus bolsillos un fajo de billetes.Georg me sorprende porque a pesar de ser un hombre que no tiene casa propia, ni automvil, es un hombre que si tiene cien mil pesos, cien mil pesos se gasta; no gasta tampoco en mujeres. Georg me hablaba de su amigo con una ambigedad difcil de precisar Robert Me deca-, cuando se afeita le queda su piel por donde pas la cuchilla, azulita, como un pozo de agua cristalina. Podra suponer que lo deca pues l era imberbe, barbilampio. Su amigo era un magistrado (esto es un abogado que ha ascendido en las altas esferas de la justicia) que al parecer, segn lo que le haba concluido de lo que l me deca, no era tan ambicioso, tampoco era tan generoso. Al parecer viva solo, le gustaba beber uno que otro vaso de whisky en el Club, luego en una que otra ocasin haba invitado a Georg. Georg, nunca ms me volvi hablar de Robert. Quiero verte contando billetes-me deca- Yo me dejaba llevar bondadosamente por Georg, hasta que en una ocasin en que yo contaba abundante dinero, con una resaca producto de una borrachera la noche anterior, sentado frente a m, vi con asombro que llevaba su dedo ndice a travs de la manga de su pantaln corto hacia atrs De madrugada, yo haba llevado a un hospedaje a una morena que haba encontrado en un bar abierto; apenas despert, aun dormida, la bes... No s porqu pens en el momento en que Georg llev su dedo ndice Pensaba tambin en el ex de mi amante, que era el que planchaba los billetes. Mi amante me hablaba de su ex mientras se sumerga en mi, se sumerga en mi como si los das no pudieran pasar y las flores no se pudieran marchitar.

    AlunadosHaba dado entender claramente que su hermano mayor (le llevaba ms de veinte aos) se le haban cruzado algunos cables en su cerebro. No supe que decir, simplemente sent un cosquilleo en mi cara al aventurar palabra pues haba sido amigo mo por mucho tiempo, pero quera saber la posible

  • causa de esa Si es que se trataba de una enfermedad en un hombre que haba pasado el climaterio y que por nica familia tena a sus hermanos y sus padres.Quiz me movi el piso saber esa noticia y no pude entender como no sent amarga la saliva que pas entre mi garganta, como los hervidos de la hierba de la alcachofa que haba estado bebiendo. Por decir algo, con una frialdad de la que no era consciente, aventur una causa recogida rpidamente de nuestra experiencia en comn; una causa a la que achaqu un alto consumo de adrenalina vivido por su actividad poltica. Roco sonri, con esa sonrisa del que no quiere desairar por que no le conviene. No s que le pareci esa causa esbozada por m; entonces call, no dijo nada; era un peso tremendo hablar de lo que su padre y Carlos oro profesaban con ingenuidad y espontaneidad. Roco me haba dicho adems, que tena una empresa inactiva a falta de Miraba de vez en cuando mi bolsillo derecho; le habl que yo haba acabado de hacer un curso de electricidad de motocicletas Me habl profundamente de la mecnica de esas ( Roco era un tipo siempre joven que tena una creativa habilidad manual). Qued en que podra interesarme visitar su taller instalado en la sala de su casa. l, mucho ms joven , haba sido de alguna forma como yo mismo, perdido en un talento para los oficios manuales sin aterrizar en ninguno. Su hermano si haba sido fiel toda la vida a su labor de albail de barrio y a su feria de cerveza los fines de semana. Quiz por eso anduve con l por mucho tiempo; mejor dicho, comparta con l el tiempo que le quitaba a otros amigos.Por fin aventur unas palabras Roco Le dije- Que tipo de Tiene l! Se lo pregunt como l me lo haba dicho; con una insinuacin.Veto Me dijo con una sonrisa ( quiz, una profunda y reprimida conmiseracin)- Hummmm Se lo pasa por ah, rondando y soltando pequeas carcajadas entre pequeas murmuraciones-Record de inmediato su muletilla que repeta cada vez que algo lo impresionaba o le haca gracia : -granito de oro, deca- Entonces esbozaba una pequea y reprimida carcajada.Imagin inmediatamente a su madre; una seora que toda la vida le reprochaba sus amistades; lo traa de los negocios miscelneos donde beba, parado o sentado, a vista de los nios que entraban al negocio de barrio.Pens en la propuesta de Roco, pens en el ebrio ideal de Carlos Oro aun fresco en mi memoria, pens en la posibilidad de visitarlos algn da. Las

    !!

  • Las ninfas en bombachas de hilos de oro!Camilo haba decidido olvidar una posibilidad que tuvo de tener tres hermosas universitarias para l slo en una noche fresca en la que sali a recorrer las calles hasta el parque aledao, y se lanz a caminar por una reconocida zona roja, ocupndolo de inmediato la reflexin de la causa que le prohibi esa aventura ertica, mientras la muerte lo rondaba a cada paso.Detrs de Camilo caminaba una pareja siguindolo desde unas cuadras atrs por esa avenida ya solitaria avanzada la noche. El hombre llevaba el cuchillo como suelen llevarlo los asaltantes ( localmente los llamaban atracadores o atalayadores); el puo del cuchillo en la palma de la mano y el filo hacia arriba del brazo, quedando oculto. Era llamada Quebrada Seca, recordando lo que alguna vez fue una caada de abundante agua y vegetacin; avenida que recorra la salida de la ciudad hacia las altas montaas de Venezuela. Cuando la noche encenda las lmparas de los comercios circundantes, los destechados se levantaban y poblaban de vida el lugar. Tengo que hacerme una confesin urgente -se dijo Camilo- o si no, no podr olvidar como no he olvidado esto desde hace unos aos; tengo que confesarme que fui bobo ( o sea que no aprovech una oportunidad); que fui estpido ( es decir, me falt inteligencia); o que fui en todo caso un avaro ( condenado como pecado capital). Entonces ya dije que fui un cretino? ( o sea que tengo atrofiado el entendimiento). Pero dicindolo mejor, estpido es lo mismo que bobo, lo que suena a idiota. Pero en ltimas creo que fue por culpa del ilusin, el mismo que hizo que Tomas Carrasquilla perdiera una oportunidad similar (hacer el amor con tres lindas mujeres); no se sabe cuando aparece el ilusin y bloquea al individuo. Camilo segua fiel a su costumbre de no dejarse llevar por lo que se le ocurriera con respecto al discurso que tena en mente en ese momento; tendencia que tom cuando crey que en la vida se deba evaluar siempre las causas y no los efectos Qu quien soy yo? Soy un hombre torpe y annimo-ya lo dije- nacido en mi barrio cuyo pas es aqu, esta ciudad tambin annima. Sumido en sus meditaciones, le lleg un fuerte olor a marihuana proveniente del aire seco en un da caluroso; para l ese olor era familiar, no le dio importancia y desvi la vista en el momento en que un hombre orinaba apoyado en un poste de cableado elctrico y una mujer joven pareca espiarlo sin que se diera cuenta (cualquiera pone atencin ante un campanazo que le d la vida). A esa hora los taxistas iban y venan como guiados por la bsqueda de un premio. La pareja que vena siguiendo a Camilo se detuvo a compartir el grueso cigarrillo de marihuana sin perderlo de vista, el filo del cuchillo brill con la lmpara de un poste. De buenas a primeras, Camilo ya no observada a su

  • alrededor cuando caminaba - Lo que pasa es que a la gente no le gusta que la miren, se dijo-. Justificando su ensimismamiento. Esta auto confesin me dar duro -pens-. Esas bellas muchachas me abordaron, a m, acostumbrado a buscar jovencitas malas. Se me presentaron con vestidos largos y blancos como las nubes; vestidos ceidos al cuerpo y con una transparencia que dejaban ver sus bombachas de hilos amarillos. Sus cabellos largos bailaban con el viento y sus ojos brillaban al compas de sus violines (cuando me ofrecieron su concierto mientras me hacan el amor, su exigencia deba ser en la suite del Hotel Chica Mocha que mira hacia la niebla de las montaas orientales (aparece por internet).!En el Jacuzzi, completamente desnudo, estuve arrullado por los violines!La pareja que segua Camilo se separ y ahora caminaban a un lado y al otro de la vereda. En esa ocasin continu dicindose Camilo-, a decir verdad, mi billetera estuvo llena como para ponerle una sonrisa a las seoritas universitarias; y dicindolo, pens en el dinero que barajaba en su billetera. Ahora soy un amaricado que dej ir a las mujeres con las que un da so(Sac un fajo de billetes y golpe su cara con esos). Al parecer el ilusin es el duende que todo el mundo tiene adentro, y hay quienes lo tienen de amigo; esa tarde me hizo decir no, esta noche har que me lo; despus tuve que repetirme ese no una y mil veces, convirtindome ante m en el temible doctor no( el doctor no haba sido un personaje de la vida pblica). Se le ocurri en ese momento pensar en Safo y la imaginaba en una hermosa bata blanca de seda (sin nada debajo) y en su frente un diadema de mirto mientras interpretaba su Lira bajo una clara noche llena de estrellas y a la orilla de un claro arroyuelo Esto contraviene mi control de la imaginacin! se dijo-.En esas meditaciones el hombre adelant a Camilo antes de que entrara en una zona transitada y le pregunt la hora. Son la once, dijo l mientras miraba su reloj sin verlo. Ahora en su imaginacin se mova la imagen de la chica que haba visto espiando al tipo que orinaba apoyado en el poste de luz, mientras en su corazn sonaba la lira (pens en devolverse)La mirada de Camilo no se haba encontrado con los penetrantes ojos del tipo, rojos debido a la marihuana; de un momento a otro, en un movimiento empu el cuchillo y se lo puso en un costado del cuerpo de Camilo; la mujer lleg por su espalda y empuj su mano en su bolsillo, Camilo sinti la voz del ilusin que le dijo, muveteAs sinti en ese momento que la hoja afilada entraba en su piel; la ley de los atalayadores era matar ante cualquier signo de resistencia, y parece que Camilo lo saba.

  • !Espeja

    !Me gustaba hablar con Espeja pues me comparta sus reflexiones diarias cuando llegaba de sus caminatas por el popular centro de la ciudad; me deca: he observado que una mayora de gente le gusta imitar; si hablan contigo, a veces no te das cuenta que tu amigo ocasional se vuelve un eco tuyo. Lo mismo pasa con tus movimientos: me doy cuenta que muchos hacen conscientemente una mmica de movimientos de alguna persona con un fin sarcstico, otros con un fin de agradar, o de enviar mensajes subliminales; de acuerdo, entonces creo que no son muy conscientes de esto. Hasta tu mismo me contaste en un da de la Madre, mientras llova a aguacero tendido y escampbamos bajo el techo de una casa de un barrio poco fiable, que pas mucho tiempo antes de que descubrieras que la progenitora de tu esposa era un eco perfecto de las personas; entonces no solamente estaba de acuerdo con todo el mundo, sino que se crea que lo se haba dicho lo haba generado ella. Pero para el caso estas personas siempre tienden a hablar no muy bien de otra gentes con personas que pueden dominar (lo caracterstico de estas gentes es que son primarias). Luego que el progenitor de tu mujer no era un imitador, sino su personalidad se haba configurado en el sarcasmo. Se burlaba de todo el mundo, pero tambin tenda a hablar mal de otras personas Ser la idiosincrasia? Aqu las personas se ren de ti en tu cara, t ni cuenta te das. A veces piensan en voz alta para que adviertas que no estn hablando contigo. Me contabas adems que tu suegro se burlaba constantemente de las andanzas de su hijo mayor al que haba abandonado cuando tena ocho aos, aun con otras personas. Bueno Espeja te tengo que decir que eso ha generado un sndrome de tics, avalado por gentes supuestamente educadas en buenas universidades recuerdas a Leila, la que public un libro recomendando como una clave de buen comportamiento ser el eco perfecto de su interlocutor? sino son tic que son entonces? Aunque est el caso de las personas que a todo te llevan la contraria, en ellos todo es contradiccin, todo lo refutan. Mientras tanto la tarde del sbado se cerraba en una nubosidad indicando que la temporada de lluvias se acercaba. Ya haba ido al bao dos veces para evitar salir a vagabundear por la ciudad, me haba bebido tres pocillos grandes de caf, que para el caso no estaban tan cargados de cafena, como las pequeas porciones de caf europeas. No quera adems que me vieran los Porteros del Conjunto Residencial para dar una sensacin de ausencia. Espeja esa tarde vino a sacarme un poco del aburrimiento, que es una sensacin ms abrumadora al pasar el medio siglo de vida; a ver morir mis deseos ms rastreros, ms queridos, a sumar que se es una persona

  • nacida tambin en la generacin del rock pesado cuando se asociaba con los narcticos ( Led Zeppelin era sonido mayor ante el popular Jhon Travolta y su escalera al cielo era de marihuana para estos muchachos) luego antes de pasar a la tercera juventud, salir al encuentro de la naciente tecnologa; la que se est vislumbrando en este veloz, atrasado siglo XXI sudamericano. No fumamos nada pues Espeja haba dejado de fumar, no bebimos licor pues habamos dejado de beber a causa de un diagnstico de grasa heptica, e hicimos lo posible por no hablar mal de nadie, ni siquiera de los progenitores, de los familiares propios, como nos habamos acostumbrado, lo que me cost alguna vez el repudio del hermano de un cercano amigo de Espeja que me dej tirado despus de haber bebido licor en un calle cualquiera, completamente borracho; esa gran boca la haba abierto las reminiscencias que tena de las lecturas lejanas del Malestar de la Cultura, de un reconocido psicoanalista que aconsejaba romper el mito de la santa madre. Senta una leve culpa ( aunque ya estaba convencido, tras largos aos de estudios de los especialistas, de que no tena por qu tener culpa) despus de haber ido al bao ya tres veces; mi esposa haba salido temprano, me haba llenado de pereza aun para ir a visitar a la querida de De esos sentimientos de culpa saba exactamente su procedencia infantil: cuando la amenaza se centraba en que te cortaban la mano o te volaban de un plumazo el Se te haca claro que te haban descubierto ms de una vez Pero sobre todo observ que era la preocupacin por cmo se tornaba la apariencia del rostro: ojos hundidos, un cierto bizqueo, cogas un aire de ensimismamiento propio de estos, distrado ( a estas alturas de mi paseo, tampoco deba tener esa cara); ya tu prehistoria era esa, se te notaba, la gente saba que hacas, adems la mala alimentacin completaba el trabajo (nunca esper tener un hijo, al que le dijeran lo que haca su padre). Hubiera tenido los rasgos caractersticos del pueblo de pajonia: el sndrome de los ojos en blanco cuando estas prcticas van hacia un celo mstico, anemia o lo que llamaban antes neurastenia. Espeja telefone para decir que no esperara, entonces cerraba el sbado con un tremendo temblor dormido a cusa de Mi esposa no se dara cuenta, llegara cansada pues el domingo temprano tendra que ir a ver a su madre. No era la primera vez a este tiempo que culminara tres secciones porqu tan acucioso en esa tarea de stiro auto ertico? Porque no dispona de las fminas que debera disponer para estar tranquilo segn deseos! Pero tampoco responda al cultivo en solitario que llamaban los Taostas. No hubiera imaginado que alguien hubiera dicho que el practicado control de la eyaculacin produca cncer; seguramente sera una teora de algn eyaculador precoz. Pero con Espeja, comparta el candor del lector, que consista en ser crdulo por ignorancia. Pero lo que si saba, lo que le haba dicho Espeja: Tienes la psicosis de la vieja doncella!. Al saber esto, inmediatamente record al que le haba dicho que tena el perfil y la mirada de un stiro: las extremidades de un caballo y el tronco de un diablo, matizadas con la mirada de un erotmano o como llaman ahora, hipersexual

  • ( en esa ocasin se lo haban dicho amigablemente, con el veneno inyectado en dulce de mora); estas acusaciones (si es que eran acusaciones, no eran nuevas para l). No podan ver que tambin me gustaba la msica (como en el legendario stiro), tambin comer bien. Me encantaba la fruta, como el sonido de la flauta griega. Pens en lo de la vieja doncella; la verdad no haba deseado acostarme con alguna mujer de un mayor estrato o a alguna actriz famosa: habamos tenido el estmago de un cerdo dijo Espeja- Se acercaba ms a la literalidad de esas dos palabras. Si escuchaba, cuando mis odos tenan no ms de diez aos, que haba individuos que frecuentaban los barrios de estratos altos en busca de damas con las que intentaban mostrarse. El domingo en la tarde, despus de haber engaado como pude el paso de las horas esperando la llegada de Espeja, cuando lleg pas a narrar una situacin suya que ya era notoria para m; primero le advert que estbamos tomndonos en serio un conocimiento de nosotros mismos que ni siquiera el espejo nos dara A la m! Sigamos cmo se te origin el tic del ojo izquierdo que daba la impresin que estuvieras coqueteando con una persona? Ese guio del ojo te haba trado no pocos inconvenientes, se te acentuaba cuando el amigo ocasional te produca inquietud por no estar ni de acuerdo ni en contra de l. Record de hace veinte aos a Querubn. Me haba mudado a una casa de una calle en la que no conoca a nadie, en el barrio en el que haba vivido desde siempre. Era uno de los barrios ms antiguos de la ciudad, en una de sus casas de bareque habitaba un amigo de aquellos aos, que haba criado un beb de rata. Querubn le haba mencionado la posible homosexualidad de su amigo; al pap de la rata, que no imitaba ni se burlaba, le haba dicho claramente que le haban guiado el ojo. Espeja haba credo dar con la clave del asunto; te hacas amigo de personas que vulneraban tu autoestima cmo es tu relacin con las personas? Si tienes un tic nervioso en el ojo izquierdo o derecho es que aprecias poco a las personas No hables Espeja calla un poco! Nada ms el da de ayer recuerdas que no viniste? Vino a timbrar a mi puerta una dama de las Representantes de Dios (siempre llegan en pareja). Estaba por entrar a la ducha, slo me cubra una toalla de felpa (tu sabes que los paos de algodn no me gustan), me alegr que en este conjunto residencial vivieran esos personajes; a sabiendas de mi apariencia, le dije que pasaran, con el pequeo temor de ser rechazado ( su compaera era invidente), pero ellas se mostraron diligentes. Las hice sentar, ella empez inmediatamente con su predicacin (estaba en un mueble frente a m, no dejaba de mirarme), entonces al verle la biblia inactiva se me ocurri pedirle abruptamente que me leyera el pasaje bblico de Onn ( ya saba que los Representantes de Dios son una comunidad activa de chismosos), su compaera haba activado plenamente su sentido del olfato; diriga como si viera, su nariz hacia mi ( pude leer en la sonrisa de Espeja, cierta irona; estara pensando en la vieja doncella, teniendo en cuenta que en esta comunidad las mujeres maduras son legin). Al ver que espeja se impacientaba ( era su

  • naturaleza) aceler mi relato: primero hizo un gesto de enfado, luego busc dicho pasaje, su compaera le murmur algo que no pude escuchar. A medida que la vieja dama iba leyendo las astucias de Onn, palideca, entonces de un momento a otro hizo en la lectura un coitus interruptus. La joven invidente se vea confundida, su olfato haba perdido la orientacin. Luego termin mi ducha con mis caracterizados sentimientos de exaltacin Par Paraaa! Exclam Espeja con una expresin Argentina que me divirti cmo es eso? El domingo estaba dando al traste con mi aburrimiento Si, si El relato de Onn tiene el inconveniente de una falta de verosimilitud, pues si tenemos en cuenta que en esa poca no existan los condones Si existan! Solt Espeja con exaltacin: mil aos antes de Cristo usaban vejigas de cabra, en Grecia comenzaba el culto a Baco, a Dionisio, para la religin juda el placer tena que ser compartido, pues la soltera era condenada. Espeja, lo que quera de Onn, era un hijo para su difunto hermano (execrable?), pero en el relato hubiera sido posible que Onn embarazara a su cuada slo con un poco de lquido seminal (segn descubrimientos modernos). Pude or que espeja deca entre dientes que me estaba pasando lo de ciertos profesores que tomaban literalmente las fbulas para engaar. Mientras tanto puse a todo volumen una salsa al mejor estilo de Rubn Blades, cosa que acab de impacientar a Espeja que dio al traste con la puerta. Mi mujer me llam para decirme que si haba almorzado con el pescado que me dej listo para asar Me qued pensando en Onn fue egosta? fue personalista? De todas maneras, por esto Dios tena que quitarle la vida? Otra vez me lleg la imagen del stiro masturbndose con su enorme pene Al menos supe por Espeja, que el local trmino de pajuelo viene del Rey de Pajonia, que haba creado la Religin Onanista: Onan el Brbaro era el Rey de la Paja; poda masturbarse hasta trescientas veces al da e instaur el culto a la paja, que tambin le servira como pan y circo para su pueblo; la gente debera masturbarse hasta veinte veces al da, esto con el fin de atontarlos para que dejaran en paz masturbadora a Onan ( que no era el Onn bblico). El que no cumpliera lo obligaran a copular con un toro de enorme pene. De todas maneras estas personas no pueden dedicarse al espiritismo por su derroche de ectoplasma, lo que no les importaba. Pero si le importaba su fatiga mental, sus continuos sntomas de mala memoria; cerraba con un crculo invisible sus frecuentes tics en el ojo izquierdo, que Espeja incluy en un sndrome de Gilles de la Tourette. El juego de espeja a ser psicoanalista me cans. Lo que no recuerdo es la primera vez que apareci, lo que debi ser de nio. Recuerdo si los tic de cabeza de mi hermano menor, que luego desaparecieron, los tic de mi primera novia sin que ella lo supiera, en sus prpados. Espeja cree que los causaron un desplazamiento en mi autoerotismo adolescente La bella pintura El Narciso de Caravaggio no me deca nada de m mismo; se sabe que Narciso muri despus de que se conoci a s mismo. El relato es ms o menos este, y con esto cierro el domingo en este encierro, mientras llega mi mujer y me saca del

  • ensimismamiento : El Rio Cefiso dej embarazada a una bella ninfa de agua dulce despus de haberla violado. Ella quiso tener su hijo que naci muy hermoso, le llam entonces Narciso. Feliz por su belleza, consult con un adivino el tiempo de vida de Narciso, ya que no haba heredado la inmortalidad del dios, su padre. Tiresias le contest con un acertijo, que vivira siempre que no se conozca a s mismo. Narciso hizo la vida de un playboy; enamor sin esperanzas a mortales de gran fortuna, a dioses, de las cuales Eco haba cado en sus encantos, en su incapacidad de amar, de reconocimiento. Eco, que ya traa la condena de tener que repetir las palabra de su amigo casual, no pudo declarar su amor por Narciso.